Logo Studenta

Rocas Metamórficas en Cuba

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

4.1. Introducción.
Debido a las características de las rocas metamórficas, hasta el momento no se ha 
establecido una clasificación jerárquica de las mismas universalmente aceptada para su 
uso práctico, a diferencia del caso de las rocas ígneas y sedimentarias. Por eso se tomo 
la decisión de utilizar como base para este trabajo la clasificación y terminología 
empleadas en Fry (1995) y Castro Viejo (1998), aunque adecuados a las 
particularidades de las metamorfitas expuestas en Cuba.
Es bien conocido que en numerosos sectores del territorio cubano afloran rocas 
metamórficas generadas durante procesos de carácter regional cuyos protolitos, tanto de 
naturaleza oceánica así como siálica o continental, son diferentes formaciones o 
complejos de edad mesozoica, específicamente jurásicos y cretácicos, que pueden llegar 
a constituir grandes macizos rocosos. La única excepción son unos afloramientos pobres 
y aislados de mármoles y calcifiros de un basamento siálico del Proterozoico Superior 
localizados en la parte noroccidental de Cuba Central. 
El metamorfismo regional en Cuba tuvo lugar en diferentes épocas del periodo 
cretácico, hasta el campaniano inclusive. La génesis de las metamorfitas se relacionó 
esencialmente con procesos de subducción, suprasubducción y colisión de distintas 
microplacas o complejos oceánicos y continentales, donde las rocas casi siempre fueron 
además muy deformadas y multiplegadas. Excepcionalmente aparecen afloramientos de 
cierta significación de metamorfitas de contacto, vinculadas con la intrusión de 
granitoides de los arcos volcánicos cretácico y paleogeno, las cuales solo se tratan de 
forma muy general en 4.2.2.
Para cumplir con los objetivos de este trabajo fue necesario el desarrollo del epígrafe 
4.3, donde se describen de forma resumida los diferentes macizos o complejos 
generados durante los procesos cretácicos de metamorfismo regional. Sin otra 
pretensión que ayudar a la localización y descripción de estas metamorfitas, las mismas 
se separan aquí por regiones: Cuba Occidental, Cuba Central y extremo oriental. 
Además se caracterizan aparte las incluidas en el cinturón ofiolítico cubano, 
separándolas en metamorfitas de alta presión y metamorfitas de baja presión.
4.2. Glosario de términos.
4.2.1. Metamorfismo Regional.
Es un proceso de reelaboración mineralógica, estructural y textural de las rocas en 
estado sólido, que ocurre debido a la interacción de las placas tectónicas bajo muy 
diferentes condiciones corticales de temperatura, presión y actividad de fluidos. En las 
zonas de convergencia de placas tiene lugar un metamorfismo regional en ambientes 
geodinámicos de subducción, de suprasubducción y de colisión; mientras que en las 
regiones donde las placas divergen y se genera nueva corteza oceánica ocurre un 
metamorfismo regional de muy baja presión y elevada actividad hidrotermal, donde las 
rocas son mucho menos deformadas y reelaboradas, que se conoce como metamorfismo 
oceánico. Este último tipo de metamorfismo también puede suceder en un ambiente de 
suprasubducción siempre que haya formación de corteza oceánica. En los procesos de 
metamorfismo regional la reelaboración de las rocas es generalmente polifásica, 
destacándose las asociaciones minerales progresivas que quedan impresas en la roca 
cuando el grado metamórfico se eleva, y, posteriormente, las asociaciones regresivas 
que se imprimen en la roca cuando el grado metamórfico disminuye; tanto unas como 
otras pueden preservarse en mayor o menor grado. En las metamorfitas con frecuencia 
1
se conservan restos de minerales, texturas y estructuras de la roca primaria, lo cual está 
en dependencia del grado y tipo de metamorfismo.
A continuación pasaremos a una caracterización general de las metamorfitas de carácter 
regional. Los términos utilizados aquí fueron tomados de Fry (1995 y Castro Viejo 
(1998), pero con modificaciones introducidas por el autor adecuadas al territorio 
cubano.
Filita: roca de grano muy fino (menor de 0.5 mm), con foliación bien definida y aspecto 
lustroso debido a la abundancia de sericita, clorita, o sericita con clorita (filosilicatos). 
Su metamorfismo es de grado muy bajo.
Si predominan los filosilicatos en la roca, ésta se denomina simplemente filita.
Si la roca tiene predominio de cuarzo, ésta se denomina filita cuarcífera.
Si la roca tiene predominio de calcita, ésta se denomina filita calcárea.
La Faja Metamórfica Cangre, expuesta en el extremo meridional de Alturas de Pizarras 
del Sur, Subzona Los Organos de la Zona Guaniguanico, está compuesta básicamente 
por filitas cuarcíferas y filitas. En el complejo Purial, extremo oriental de Cuba, las 
metatobas de grano fino o metatufitas, así como las intercalaciones metaterrígenas y 
metacalcáreas, constituyen filitas, filitas cuarcíferas, filitas calcáreas y mármoles 
foliados.
Ejemplos:
 Filita clorita sericítica
 Filita sericito grafítica
 Filita sericito calcáreo grafítica 
 Filita cuarzo sericítica
Esquisto: roca metamórfica de grano fino a medio, caracterizada por una foliación o 
esquistosidad bien definida, cuyos minerales suelen reconocerse a simple vista. Si 
presenta además una estructura bandeada, la roca se denomina esquisto bandeado. Los 
esquistos pueden contener uno o más minerales formando porfiroblastos de mayor 
tamaño. Su grado metamórfico generalmente es de bajo a medio.
Ejemplos:
 Esquisto cuarzo moscovítico con granate
 Esquisto cuarzo bimicáceo (moscovita y biotita)
 Esquisto cianito moscovito grafítico
 Esquisto cianito moscovito granatífero bandeado
 Esquisto biotito granatífero sillimanítico 
 Esquisto cuarzo moscovito granato glaucofánico bandeado
 Esquisto calcito moscovito grafítico con clinozoisita
Esquisto verde: son esquistos derivados principalmente de magmatitas básicas efusivas 
y piroclásticas o también de areniscas de composición adecuada, generados en 
condiciones de un metamorfismo de bajo grado y presión baja a media. Se componen 
básicamente por clorita, albita, actinolita y epidota. 
Ejemplos:
 Esquisto albito clorito actinolito epidótico metatobáceo
 Esquisto clorito actinolítico clinozoisítico bandeado
 Esquisto albito clorito epidótico
2
Esquisto azul: son esquistos originados en condiciones de alta presión y grado bajo a 
medio, en cuya composición juega un rol fundamental la glaucofana. Cuando es de 
grano fino, la abundancia de este mineral imprime a la roca una coloración azulada o 
gris azulada. 
Ejemplos:
 Esquisto glaucofano albito moscovítico bandeado
 Esquisto albito glaucofano lawsonítico
 Esquisto glaucofano albito pumpelleítico metabasáltico
 Esquisto albito glaucofano granatífero bandeado
Gneiss: roca foliada de grano fino, medio o grueso, con frecuencia bandeada, que 
presenta mayor coherencia y una fisibilidad mucho más imperfecta y grosera con 
respecto a los esquistos y las filitas. Su metamorfismo es de grado medio a alto. 
Ejemplos:
 Gneiss cuarzo feldespato potásico biotítico con cianita
 Gneiss cuarzo feldespato bimicáceo granatífero metagranitoídico
 Gneiss cuarzo plagioclaso biotítico con sillimanita y granate
 Gneiss cuarzo plagioclaso hornblendo biotítico
Fels: roca granular carente de una esquistotosidad o bandeamiento manifiesto. Su grano 
puede ser medio a grueso y su grado metamórfico medio o alto.
Ejemplos:
 Fels calcito forsterito flogopito diopsídico
 Fels moscovito granato cuarzo glaucofánico
 Fels granato cuarzo moscovito clinopiroxéno zoisítico
 Fels clinopiroxénico
 Fels zoisítico
En los esquistos, gneisses y fels, la denominación de la roca incluye los minerales 
formadores dominantes, los cuales son nominados de forma decreciente con respecto a 
su cantidad, debiendo destacarse además la existencia de mineralesindicadores visibles, 
aunque sean escasos. Por ejemplo: esquisto cuarzo micáceo con granate, esquisto 
micáceo cuarcífero con cianita y estaurolita, gneiss cuarzo feldespato biotítico con 
cianita y granate, fels plagioclásico cuarcífero con clinopiroxeno y granate, etc.
Si un mineral determinado predomina ampliamente en la composición de la roca o se 
trata de una roca prácticamente monomineral, éste caracteriza su apelativo, por 
ejemplo: esquisto granatífero, fels granatífero o granatita, fels zoisítico o zoisitita, 
cuarcita, esquisto cuarcífero, esquisto antigorítico o antigoritita. 
Los esquistos de diferente tipo, composición y grado metamórfico predominan en la 
composición de los macizos metamórficos de Isla de la Juventud y Escambray. En el 
Escambray existen además típicos esquistos azules y esquistos verdes. Gneises 
metaterrígenos aparecen en el macizo Isla de la Juventud, en el sector donde se alcanzó 
un metamorfismo de alto grado. En los macizos Isla de la Juventud y Escambray 
también se destacan típicos fels. El caso más característico es el de la unidad rocosa 
conocida como esquistos cristalinos Algarrobo en el macizo Escambray, que se trata de 
un fels polimineral cuarzo albito granato micáceo y otros minerales asociados. 
El denominado complejo Socorro se trata del representante de un basamento siálico del 
Neoproterozoico pobremente expuesto en el extremo noroccidental de la prov. Villa 
Clara, en las localidades La Teja y Socorro (Somin y Millán, 1981; Renne et al. 1989). 
Este se compone esencialmente de mármoles y calcifiros o fels calcáreos de grano 
3
grueso. Aquí es característico el fels calcito flogopito forsterítico a veces también con 
diopsido.
Cuarcita : roca metamórfica prácticamente monomineral o con cuarzo muy 
predominante. Pueden formarse en condiciones de cualquier grado de metamofismo 
regional, ya sea de presión alta, media o baja, así como también en el metamorfismo de 
contacto. Sus protolitos son generalmente pedernales o silicitas (chert) o areniscas 
cuarcíferas. Si la cuarcita presenta una estructura orientada bien manifiesta sería una 
cuarcita esquistosa y si tiene bandeamiento visible, cuarcita bandeada. Si presenta 
además otro mineral visible, éste será destacado en la denominación de la roca: cuarcita 
bandeada con granate, cuarcita granatífera si tiene una cantidad apreciable de granate, 
cuarcita con mica blanca y glaucofana, etc. Cuarcitas de diferentes orígenes, grados y 
tipos de metamorfismo son frecuentes en los macizos Escambray e Isla de la Juventud, 
en la Faja Metamórfica Cangre y como inclusiones en las serpentinitas del cinturón 
ofiolítico. Se puede destacar también el origen de la cuarcita en su propia 
denominación, por ejemplo: cuarcita metaterrígena, cuarcita metapedernálica o 
metasilicítica.
Ejemplos:
 Cuarcita moscovito granatífera bandeada metapedernálica
 Cuarcita moscovítica metaterrígena esquistosa
 Cuarcita glaucofano moscovítica
 Cuarcita zoisito granatífera bandeada
Mármol : roca metamórfica compuesta predominantemente por calcita o dolomita. Los 
mármoles se pueden formar en condiciones de cualquier grado de metamorfismo 
regional, ya sea de presión baja, media o alta, así como en el metamorfismo de contacto. 
Sus protolitos son principalmente calizas, calizas dolomíticas o dolomitas. Si tiene 
esquistosidad es un mármol esquistoso, con bandeamiento un mármol bandeado. Si 
presenta otro mineral visible, éste será destacado en la denominación de la roca: mármol 
bandeado con diopsido, mármol tremolítico, mármol flogopítico, etc. Mármoles de 
diferentes tipos y grados metamórficos afloran en los macizos Isla de la Juventud y 
Escambray, en la Faja Metamórfica Cangre y en los complejos Purial y Asunción del 
extremo oriental de Cuba.
Ejemplos:
 Mármol tremolítico
 Mármol flogopítico
 Mármol diopsídico
 Mármol grafítico esquistoso 
 Mármol masivo
Migmatita : roca compuesta por una mezcla de material metamórfico e inyecciones 
cuarzo feldespáticas de composición granítica. Son formadas por la granitización de las 
metamorfitas en las regiones con alto grado metamórfico y elevada actividad de fluidos. 
Son rocas bandeadas o groseramente bandeadas y grano medio a grueso. Verdaderas 
migmatitas solo se conocen en el macizo Isla de la Juventud, en el sector donde el 
metamorfismo regional alcanzó su mayor grado.
Anfibolita : roca metamórfica compuesta esencialmente por hornblenda y plagioclasa, 
producida por el metamorfismo de rocas magmáticas básicas y ocasionalmente margas 
magnesianas. Puede ser masiva, esquistosa o bandeada. Las anfibolitas se generan en 
4
condiciones de diferentes grados y tipos de metamorfismo, incluso en condiciones de un 
metamorfismo de contacto, lo cual se refleja en el tipo de hornblenda, tipo de 
plagioclasa y los otros minerales asociados. En Cuba existen complejos o formaciones 
compuestas esencialmente por anfibolitas, tales como: el complejo Mabujina en el sur 
de Cuba Central, la formación Yayabo en el macizo Escambray, las anfibolitas Perea en 
el norte Cuba Central y vinculada con el cinturón ofiolítico y la Fm. Güira de Jauco en 
el extremo oriental cubano. También se destacan bloques de anfibolitas de alta y baja 
presión incluidos en las serpentinitas del cinturón ofiolítico.
Ejemplos:
 Anfibolita esquistosa
 Anfibolita masiva
 Anfibolita bandeada
 Anfibolita epidótica
 Anfibolita biotítica
 Anfibolita moscovito granatífera bandeada
 Anfibolita metagabroídica
Eclogita : son metamorfitas de origen principalmente magmático y carácter básico 
(gabros, diabasas y basaltos), formadas en condiciones de un metamorfismo de alta 
presión y grado medio a alto. Están constituidas esencialmente por clinopiroxeno 
onfacítico y granate. Generalmente son granulares o groseramente bandeadas y pueden 
contener otros minerales asociados. En Cuba se conocen formando cuerpos intercalados 
en secuencias de protolito terrígeno y carbonático de edad jurásica en el macizo 
Escambray, así como en bloques incluidos en las tectonitas ultramáficas serpentinizadas 
del cinturón ofiolítico cubano.
Ejemplos:
 Eclogita bandeada
 Eclogita zoisítica
 Eclogita glaucofano moscovítica bandeada
Los prefijos meta, orto y para suelen utilizarse en las denominaciones de las 
metamorfitas. El uso de los mismos lo veremos a continuación:
Meta : el prefijo meta se usa, en casos necesarios, acompañado del nombre de la roca 
primaria para indicar que esta última se encuentra metamorfizada. Por ejemplo: 
metagabro, metabasalto, metaarenisca, etc. Este prefijo, acompañado de la 
denominación de la roca primaria, también suele utilizarse a continuación del nombre 
de una metamorfita nominada. Por ejemplo: anfibolita metagabroídica, gneiss 
feldespato micáceo granatífero metagranitoidico, eclogita metagabroídica, esquisto 
cuarzo moscovítico metaterrígeno o metaarenoso, etc. 
Orto : el prefijo orto se usa, en casos necesarios, acompañado del nombre de la roca 
metamórfica para indicar que esta última tiene un origen igneo o magmático. Por 
ejemplo: ortoanfibolita, ortogneiss plagioclaso micáceo granatífero, ortoesquisto albito 
clorito actinolítico, ortoesquisto verde, etc.
Para : el prefijo para se usa, en casos necesarios, acompañado por el nombre de la 
metamorfita para indicar que esta última tiene un origen sedimentario. Por ejemplo: 
paraanfibolita, paragneiss cuarzo plagioclaso micáceo con cianita y granate, 
paraesquisto verde actinolito clorito albítico, etc.
5
4.2.2. Metamorfismo de Contacto.
Este tipo de metamorfismo ocurre formando una aureola alrededor de los cuerpos 
intrusivos de rocas ígneas a distintas profundidades.
Corneana u Hornfelsa: la corneana u hornfelsa es el tipo de roca que caracteriza este 
tipo de metamorfismo. En general son rocas con textura granoblástica de grano muy 
fino a medio, fractura concoidal y con frecuencia una estructura moteada, formada por 
un mosaico de granos minerales generalmente equidimensionales, donde a veces se 
observan también porfiroblastos de mayor tamaño. Raras veces presentan una verdadera 
foliación o esquistosidad. Son metamorfitas de baja presión y grado metamórfico bajo, 
medio o alto, lo cual está en dependencia del tipo y dimensiones del intrusivo, su 
profundidad, así como de su cercanía o lejanía del contacto con la intrusión. El 
metamorfismo de contacto vinculado con intrusivos, suele destacarse también en las 
regiones donde los complejos rocosos han sido afectados por el metamorfismo regional; 
ambos tipos de metamorfismo pueden incluso ocurrir durante un mismo proceso 
geodinámico.
En Cuba se conoce el denominado cinturón Sierra de Rompe (Victoria de las Tunas), 
donde las vulcanitas cretácicas de la Fm. Güaimaro fueron instruidas por un plutón de 
granitoides del Cretácico Superior, formando una aureola de contacto de varios 
centenares de metros de potencia en la parte sur de la intrusión. Estas fueron 
convertidas en hornfelsas que a menudo se tratan de verdaderas anfibolitas 
granoblásticas que suelen tener una estructura moteada y a veces una foliación 
metamórfica.
Ejemplos:
 Hornfelsa hornblendo plagioclásica
 Hornfelsa granato piroxénica
 Hornfelsa epidoto hornbléndica
Skarn : el skarn es una roca granular que se forma cuando un cuerpo de granitoides 
intruye un horizonte o formación calcárea, constituyendo una aureola de contacto 
enriquecida en diferentes minerales calcosilicatados característicos para este tipo de 
metamorfismo de baja presión. En Cuba este tipo de roca aparece en varios lugares, 
destacándose particularmente en una localidad cercana al extremo noroccidental del 
macizo Escambray en Cuba Central, donde los granitoides del Cretácico Superior 
intruyen un horizonte calcáreo de la secuencia del arco volcánico cretácico. Aquí 
aparece, entre otros minerales calcosilicatados, la wollastonita, mineral típico para el 
metamorfismo de contacto o regional de muy baja presión.
Ejemplos:
 Skarn granatífero
 Skarn wollastonítico
4.2.3. Metamorfismo Dinámico
Este tipo de metamorfismo es el que ocurre en las fallas o zonas de fallas. Es bien 
conocido que a lo largo de las fallas de cierta envergadura generalmente se localizan 
zonas estrechas de stress o esfuerzos muy elevados donde la actividad de fluidos suele 
ser intensa, lo cual está en dependencia también de las diferencias en la temperatura 
debido a la profundidad de los cortes rocosos. Esto da lugar a que las rocas puedan ser 
metamorfizadas y foliadas, aunque generalmente conservan restos primarios muy 
6
deformados. Este tipo de metamorfismo es de carácter local y aunque en Cuba no se 
conocen ejemplos significativos, creemos necesario una breve caracterización de los 
tipos de rocas relacionados con el mismo, siguiendo a Castro Viejo () y Fry (1995).
Milonita : en sentido general, el término milonita ha sido usado para describir a las 
metamorfitas foliadas y bandeadas generadas en las zonas de falla. Sin embargo, este 
nombre, sin prefijo alguno, se usa en los casos de que la roca conserve numerosos restos 
primarios en forma de porfiroclastos deformados y elongados, con una matriz de grano 
muy fino parcialmente recristalizada.
Protomilonita : este término se utiliza cuando la milonita tiene muy escasa matriz, 
predominando los restos primarios deformados.
Ultramilonita : este apelativo se usa cuando la milonita no contiene restos primarios 
visibles y la matriz de grano muy fino se encuentra casi o totalmente recristalizada y 
generalmente bien bandeada.
Blastomilonita: este nombre se utiliza cuando la milonita tiene la matriz casi o 
totalmente recristalizada, pero conserva restos deformados visibles de la roca primaria. 
Esquisto milonítico o gneiss milonítico: estos apelativos se utilizan, según el caso, 
cuando debido a la recristalización la milonita pierde sus características propias, 
formándose un agregado de minerales metamórficos visibles a simple vista. En estos 
casos la denominación de la roca se rige de la misma forma que en los esquistos y 
gneisses, aunque se especifica su carácter milonítico. Por ejemplo: esquisto milonítico 
cuarzo moscovito granatífero.
Cataclasita: es una roca fragmentada con estructura masiva, sin recristalización ni 
deformaciones apreciables de los fragmentos. A diferencia de las milonitas, no se trata 
de una metamorfita propiamente.
Brecha tectónica. es una roca fragmentada y masiva, con los fragmentos de un tamaño 
superior a medio centímetro, sin recristalización ni deformaciones apreciables. No se 
trata de una metamorfita propiamente.
4.3. PARTICULARIDADES DEL METAMORFISMO REGIONAL EN CUBA
4.3.1. Región Occidental
4.3.1.1. Macizo Isla de la Juventud
Los protolitos del macizo metamórfico Isla de la Juventud se tratan de secuencias 
jurásico cretácicas, terrígenas y carbonáticas, depositadas en condiciones de sinrift y de 
un margen continental, las cuales fueron metamorfizadas y multiplegadas durante su 
colisión con el arco volcánico en el Cretácico Superior, destacándose claramente 
minerales o asociaciones minerales progresivas de grado medio a alto, así como 
regresivas (Millán 1997 a).
De acuerdo con las investigaciones petrológicas detalladas realizadas recientemente por 
García-Casco et al. (2001) en los gneisses de alto grado expuestos en el extremo 
noroccidental del macizo, el metamorfismo regional progresivo se caracteriza por ser 
7
de alta presión, pues el único aluminosilicato estable que aparece es la cianita. Estos 
fueron sometidos a una temperatura de 750 grados centígrados y una presión de 11-12 
kilobars durante el pico del metamorfismo progresivo. A continuación, durante la etapa 
regresiva del metamorfismo regional, ocurrió una descompresión brusca debido a la 
rápida exhumación de las metamorfitas desde las profundidades en condiciones 
corticales distensivas, reelaborándose parcialmente los gneisses de alto grado. De esta 
forma se formó sillimanita sustituyendo parcialmente a la cianita, y posteriormente, en 
una etapa más avanzada de la diaftoresis, tuvo lugar la aparición de andalucita como 
único aluminosilicato estable. Este último mineral se formó a unos 600 grados 
centígrados y una presión de solo 3 kilobars. Al inicio de la descompresión regresiva 
tuvo lugar además la segregación de fundidos parciales de composición trondhjemítica. 
De acuerdo con una datación Ar-Ar el final del metamorfismo regresivo pudo haber 
ocurrido hace unos 68 millones de años. No obstante, existen algunas dataciones K-Ar 
que fluctuan entre 72 y 78 millones de años (Somin y Millán 1981; Iturralde-Vinent et 
al. 1996), la más significativa de las cuales son los 78 millones de años de unas láminas 
de moscovita de un greisen originado durante una etapa tardía del metamorfismo 
regional 
Sin embargo, el macizo Isla de la Juventud fue sometido a un importante proceso de 
reactivación tectono-magmática, en condiciones distensivas, al finalizar el 
metamorfismo regional, el cual dio lugar a la génesis de una metalogenia endógena muy 
particular que lo caracteriza (Pardo 1990). De acuerdo con la datación Ar-Ar de un 
dique de riodacita formado durante esta reactivación, ésta tuvo lugar hace unos 60 a 68 
millones de años (Buguelsky et al. 1985), la cual está en correspondencia con la de 64 
millones de años (inédita) que arrojó la mineralización aurífera de Mina Delita.
Desde el punto de vistapráctico y sin llegar a precisiones, podemos destacar los 
siguientes tipos de rocas metamórficas.
 Esquistos cuarzo moscovíticos
 Esquistos cuarzo bimicáceos (moscovita y biotita)
 Esquistos cuarzo bimicáceos con granate
 Esquistos cuarzo moscovito con cianita
 Esquistos moscovito grafíticos o grafito moscovíticos
 Esquistos micáceo cianito estaurolíticos
 Esquistos micáceo cianito estaurolito granatíferos
 Esquistos micáceo cianito granatíferos
 Esquistos cianíticos con grafito
 Esquistos micáceo andalucito cianíticos 
 Gneisses biotito granato sillimaníticos
 Gneisses biotito granato cianito sillimaníticos
 Gneisses biotito granato cianito sillimaníticos con feldespato potásico
 Migmatitas con granate
 Migmatitas con sillimanita y granate
 Mármoles.
 Mármoles dolomíticos
 Mármoles dolomíticos diopsídicos con grafito
 Mármoles escapolíticos
 Mármoles dolomíticos tremolíticos
 Esquistos o gneisses calcosilicatados poliminerales
 Anfibolitas biotíticas
 Anfibolitas biotito granatíferas
8
4.3.1.2. Faja Cangre
Es una faja metamórfica destacada en el extremo meridional de la Sierra de los 
Organos, donde los equivalentes de la Fm. San Cayetano y de las calizas del Jurásico 
Superior aparecen más intensamente deformados y además metamorfizados en 
condiciones de alta presión y bajo grado (Somin y Millán 1981).
Sus principales componentes son: filitas sericito cuarzo grafíticas o cuarzo sericito 
grafíticas, filitas cuarzo sericíticas, metaareniscas cuarcíferas esquistosas con sericita y 
albita, filitas calcito grafíticas y mármoles esquistosos.
También se destacan cuerpos de metagabros y metadiabasas con numerosos restos 
primarios, en los cuales aparecen las asociaciones metamórficas de alta presión y bajo 
grado: albita, clorita, epidota, actinolita, glaucofana; albita, clorita, epidota, actinolita, 
glaucofana, pumpelleita. Sin embargo, estas rocas básicas fueron anfibolitizadas 
previamente al metamorfismo de bajo grado que caracteriza a la faja Cangre, proceso de 
un mayor grado de temperatura que dio lugar a que el clinopiroxeno magmático se 
convirtiese parcialmente en hornblenda. Esta anfibolitización fue localmente intensa, 
dando lugar a la generación de una anfibolita esquistosa con escasos restos magmáticos 
(Millán 1987).
De acuerdo con estudios petrológicos recientes ejecutados por Cruz-Gámez et al. 
(2003), la anfibolita esquistosa fue formada en las condiciones de una temperatura de 
550 a 660 grados centígrados y una presión inferior a los 5 kilobars, durante una etapa 
anterior al metamorfismo de alta presión y bajo grado. Estos autores destacaron en las 
metapelitas (filitas) las siguientes asociaciones: cuarzo-albita-moscovita-clorita-fengita, 
cuarzo-albita-fengita-clorita y cuarzo-fengita-clorita-actinolita, señalando además que 
este metamorfismo de bajo grado que caracteriza a las filitas y mármoles de la faja 
Cangre ocurrió aproximadamente a unos 450 grados centígrados y 6 kilobars.
4.3.2. Región Central
4.3.2.1.Macizo Escambray
El macizo metamórfico Escambray se expone en la parte sur de Cuba Central, 
destacándose en la estructura regional como dos grandes antiformas que afloran 
formando una ventana tectónica entre las secuencias del arco volcánico cretácico y las 
anfibolitas del complejo Mabujina, las cuales yacen en la base de este último y rodean 
este macizo (Somin y Millán 1981). Los elementos rocosos que componen al mismo, al 
igual que los del macizo Isla de la Juventud, fueron despegados de su basamento, 
metamorfizados, escamados y multiplegados, durante el transcurso de un lapso de 
tiempo que probablemente abarcó una parte del Cretácico, en las condiciones de alta 
presión típicas de una zona de subducción, finalizando en la parte alta del Cretácico 
Superior durante la colisión con el arco volcánico donde primaron las condiciones de la 
facies de los esquistos verdes, Sin lugar a dudas se trató de un proceso de metamorfismo 
regional polifásico, lo que está también en correspondencia con las dataciones de edad 
absoluta (Millán 1997). Recientes dataciones Ar-Ar indican que el metamorfismo 
regional de este macizo probablemente finalizó hace unos 70 millones de años 
(Schneider et al. en prensa), al igual que en el caso del de la Isla de la Juventud. Los 
protolitos del Escambray son también de edad jurásica y cretácica. Sin embargo, 
además de las secuencias propias del sinrift y de un margen continental, también se 
destacan elementos que parecen ser propios de una corteza oceánica y de un arco 
volcánico.
9
En este macizo se exponen unidades metamorfizadas en condiciones progresivas de alta 
presión y alto grado, diaftoritizadas en varias etapas; unidades metamorfizados en 
condiciones de alta presión y bajo grado, diaftoritizadas parcialmente en las condiciones 
de la facies de los esquistos verdes; y unidades no diaftoritizadas metamorfizadas en la 
facies de los esquistos verdes. Las últimas son las más internas y constituyen el nivel 
estructural inferior (Millán 1997).
Las unidades de alta presión y alto grado se caracterizan por tener un protolito jurásico, 
pues rocas primarias de presunta edad cretácica aún no se han reconocido aquí. Estas se 
caracterizan por la generación de eclogitas durante el metamorfismo progresivo, 
formadas a partir de basaltos y gabroides, las cuales yacen frecuentemente formando 
budinas en secuencias metaterrígenas y metacalcáreas, y también bloques en zonas de 
melange. 
Las eclogitas del Escambray se caracterizan por una asociación de onfacita, granate y 
rutilo, muchas veces además con zoisita. Sin embargo, ellas casi siempre aparecen 
parcialmente reelaboradas, en mayor o menor grado, en condiciones de un 
metamorfismo regional regresivo (Millán 1997). Primeramente en condiciones de alta 
presión y un menor grado de temperatura, se transformaron parcialmente en unas 
anfibolitas esquistosas con mica blanca, clinozoisita, granate y plagioclasa ácida. A 
menor temperatura, pero en condiciones de alta presión, las eclogitas pueden 
reelaborarse parcialmente, en diferente grado, en esquistos azules glaucofano granato 
albito fengito lawsoníticos (o clinozoisíticos). En las condiciones de la facies de los 
esquistos verdes, éstas pueden reelaborarse casi totalmente en un fels albito clorito 
actinolítico. Por eso las eclogitas del Escambray son generalmente rocas poliminerales, 
en las cuales aparecen minerales o asociaciones que fueron formadas en diferentes fases 
del metamorfismo regional, destacándose una compleja sustitución parcial de unos 
minerales por otros.
En las unidades estructurales caracterizadas por el metamorfismo de alta presión y alto 
grado los esquistos metaterrígenos son básicamente cuarzo fengito albíticos, pero con 
frecuencia contienen además granate, granate y glaucofana, o granate, glaucofana y 
clinopiroxeno; en los últimos la glaucofana puede sustituir parcialmente al 
clinopiroxeno. También aparecen esquistos cuarzo albito fengito zoisíticos y esquistos 
fengito grafíticos. De rareza aparecen esquistos cloritoide cuarzo fengito grafíticos y 
cloritoide cuarzo cianito fengito grafíticos, los que ocasionalmente pueden contener 
también porfiroblastos de granate.
Los esquistos carbonáticos son calcito fengito grafíticos, calcito grafíticos, y dolomito 
grafíticos con textura sacaroidal. También se destacan esquistos calcito fengito albito 
grafíticos, calcito fengito cuarzo zoisíticos, calcito cloritoide grafíticos, calcito zoisito 
graníticos y calcito fengito clinozoisíticos.
En las condiciones del mayor grado metamórfico de alta presión aparecen con 
frecuencia horizontes compuestos por un fels polimineral cuarzo granate fengito 
glaucofano clinopiroxénico.Las cuarcitas metapedernálicas tienen generalmente una estructura bandeada y 
sacaroidal. Estas pueden ser granatíferas, glaucofánicas (o riebeckíticas), 
clinopiroxénicas o zoisíticas. De rareza se encontraron unas cuarcitas metapedernálicas 
con dierrita, mineral indicador de una presión entre 16 y 25 kilobars y una temperatura 
entre 530 y 630 grados centígrados, condiciones bajo las cuales se formaron también las 
eclogitas (Grafe et al. 2001). 
También se destacan fels zoisíticos, fels clinopiroxénicos, fels zoisito clinopiroxénicos, 
antigorititas y esquistos antigoríticos.
10
Existe una unidad litológica compuesta básicamente por anfibolitas (Fm. Yayabo), 
cuyas asociaciones minerales son similares a las que sustituyen parcialmente a las 
eclogitas durante la primera etapa del metamorfismo regresivo. Se tratan de unas 
anfibolitas de alta presión compuestas por barroisita, plagiclasa ácida, fengita, 
clinozoisita y granate, que se considera se formaron bajo condiciones de 13 - 14.5 
kilobars y 580 – 675 grados centígrados (Grafe et al. 2001).
En las unidades donde el metamorfismo progresivo ocurrió en condiciones de alta 
presión y bajo grado, los horizontes de vulcanitas básicas fueron convertidos en unos 
esquistos verdes que contienen lawsonita, la cual siempre aparece parcial o totalmente 
reelaborada por clinozoisita o clinozoisita – epidota. Estos esquistos son albito 
actinolito clorito lawsoníticos (la lawsonita generalmente se conserva en los núcleos de 
los cristales de clinozoisita). De rareza pueden contener también clinopiroxeno 
jadeítico. Siempre presentan esfena accesoria.
Los esquistos metaterrígenos están aquí compuestos por cuarzo mica blanca y albita, 
raramente pueden contener también glaucofana. 
Las cuarcitas metapedernálicas generalmente son bandeadas y granatíferas, casi siempre 
con la asociación de cuarzo, granate y mica blanca. Pocas veces contienen glaucofana 
además del granate.
Los esquistos calcáreos son calcito albita cuarzo mica blanca grafíticos, en ocasiones 
con lawsonita o clinozoisita. Siempre predomina la calcita.
Los cuerpos de rocas básicas intrusivas suelen convertirse en un fels albito anfibol 
(actinolita o glaucofana) clinozoisito (o lawsonita) granatífero, fels albito actinolito 
clorito lawsonítico y fels albito glaucofana granate fengito lawsonítico. Estos siempre 
contienen esfena accesoria, a veces con restos de rutilo en sus núcleos. en ocasiones 
aparece un fels enriquecido en clinopiroxeno jadeítico con abundantes restos 
magmáticos. Los cuerpos de gabro metamorfizado pueden convertirse en un fels 
hornblendo albito clinozoisítico o zoisítico.
Finalmente tenemos a las unidades que fueron solamente metamorfizadas en las 
condiciones de la facies de los esquistos verdes, las cuales nunca fueron afectadas 
previamente por un metamorfismo de alta presión.
Los esquistos metaterrígenos equivalentes a la Fm. San Cayetano están formados por 
cuarzo y mica blanca, a veces también con escasa albita y grafito accesorio. En las 
condiciones de menor grado son unas metaareniscas esquistosas compuestas por granos 
de cuarzo detrítico deformados y una matriz de mica blanca de grano generalmente fino. 
Los esquistos verdes metavolcánicos se componen por la asociación de albita, clorita, 
actinolita y clinozoisita (o clinozoisita-epidota), con esfena accsesoria. Las 
metagrauvacas vulcanomícticas contienen los mismos minerales, pero con abundante 
cuarzo y con grafito accesorio. Los metaintrusivos siempre presentan numerosos restos 
primarios y aparecen parcialmente transformados en un fels albito actinolito clorito 
clinzoisítico, con esfena accesoria. Los mármoles de protolito Jurásico Superior son 
calcíticos, esquistosos y bastante puros, pues solo contienen aislados granos de cuarzo, 
albita o mica blanca.
4.3.2.2. Complejo Mabujina
El complejo Mabujina aflora en la parte sur de Cuba Central, formando un cinturón 
anfibolítico de anchura variable que rodea y cubre tectónicamente al macizo 
metamórfico Escambray, infrayaciendo estructuralmente a las unidades del arco 
volcánico cretácico (Somin y Mill1án 1981, Millán 1996 a). Se compone básicamente 
por ortoanfibolitas de presión baja a media, generalmente muy plegadas y deformadas, 
11
que con frecuencia contienen restos de minerales y estructuras primarias magmáticas. 
Aunque su génesis no está aún bien definida, los protolitos de una parte de sus unidades 
o litotipos se relacionaron con un arco volcánico y las anfibolitas fueron derivadas de 
basaltos porfiríticos, aglomerados volcánicos y tobas estratificadas, lo cual está en 
correspondencia con recientes datos geoquímicos (Blein et al. 2003). Sin embargo, otra 
parte de sus protolitos parece tratarse de rocas con un carácter más oceánico, en cuya 
composición aparecen gabros, diabasas, ultrabasitas y gabros bandeados (Millán 1996 
a). Estas anfibolitas fueron cortadas, durante una etapa tardía y regresiva del proceso 
metamórfico, por cuerpos y venas de granitoides y pegmatitas deformados y 
metamorfizados que frecuentemente contienen granate y algunas veces presentan una 
marcada esquistosidad. Sus cortes fueron también atravesados por diques de lamprofiro 
y de andesitas porfiríticas algunas veces con esquistosidad y un metamorfismo de bajo 
grado.
De acuerdo con los datos geológicos y de edad absoluta el metamorfismo del complejo 
Mabujina finalizó en la parte alta del Cretácico Superior, antes del Maastrichtiano, 
aunque debe haberse iniciado mucho antes, quizás hace aproximadamente 100 millones 
de años. Existen dataciones recientes de 86-88 y de 80-82 millones de años, utilizando 
el método Rb-Sr, de las láminas de moscovita de dos diferentes venas de pegmatitas 
sinmetamórficas tardías que cortan a las anfibolitas; mientras que la datación Ar-Ar de 
la moscovita de unos plagiogranitos bimicáceos granatíferos esquistosos, que también 
las atraviesan, arrojó una edad de 72-74 millones de años, y la biotita 73 millones de 
años utilizando el método Rb-Sr (Grafe et al. 2001). Por otra parte, la datación K-Ar 
más antigua de las anfibolitas fue de 95 millones de años (Somin y Millán 1981; 
Iturralde-Vinent et al. 1986), mientras que dos dataciones U-Pb de circón 
(probablemente de origen magmático) de unos gneises micáceo granatíferos que forman 
parte de este complejo dieron una edad de 108 y 118 millones de años (Bibikova et al. 
1988).
El complejo Mabujina presenta una clara zonación metamórfica, destacándose desde 
anfibolitas de bajo grado cuya plagioclasa es ácida, hasta anfibolitas de alto grado. Estas 
últimas son de grano grueso, a veces bandeadas y la hornblenda coexiste con una 
plagioclasa de tipo labrador, a menudo también contienen clinopiroxeno asociado. En 
ocasiones aparecen segregaciones metamórficas de un fels clinopiroxénico. 
Sin embargo, la mayoría del complejo está compuesto por anfibolitas de grado medio, 
donde la plagioclasa es de tipo oligoclasa andesina hasta andesina, con esfena accesoria. 
Muchas veces son esquistosas y algunas veces bandeadas, aunque pueden ser también 
aparentemente masivas o granoblasticas formando un fels horbléndico. 
Por otra parte, las anfibolitas de bajo grado están compuestas básicamente por anfibol 
(hornblenda a actinolita) y plagioclasa ácida (albita oligoclasa), a veces también con 
epidota asociada. También contienen esfena accesoria. Pueden ser esquistosas a 
masivas.
Además tenemos los siguientes litotipos vinculados con las anfibolitas de grado medio 
compuestas por hornblenda y plagioclasa:
anfibolitas biotíticas, anfibolitas granatíferas, fels hornbléndico u hornblendita, cuarcitas 
metapedernálicas a veces bandeadas, microgneiss biotito hornblendo plagioclásico a 
vecescon granate o con cuarzo, microgneiss cuarzo feldespato potásico oligoclaso 
hornbléndico, gneiss cuarzo bimicáceo plagioclaso granatífero, gneiss plagioclaso 
hornblendo biotítico, gneiss plagioclaso hornbléndico.
En el extremo noroccidental de los afloramientos del complejo Mabujina se expone un 
estrecho cinturón compuesto por metavulcanitas básicas y ácidas que se conoce como 
Fm. Porvenir (Dublan et al. 1986, Millán y Somin 1985). Esta formación aparece 
12
metamorfizada en las condiciones de la facies de los esquistos verdes, destacándose 
entre otros: esquistos cuarzo moscovito albíticos a veces con clorita y epidota, cuarcitas 
metapedernálicas bandeadas con granate y moscovita, cuarcitas metapedernálicas con 
moscovita, esquistos actinolito albito epidóticos.
4.3.3. Extremo Oriental
4.3.3.1. Complejo Purial
Este complejo se trata, en una gran parte, de secuencias de la sección axial del arco 
volcánico cretácico las cuales fueron metamorfizadas y deformadas conjuntamente con 
el complejo Asunción en condiciones de alta presión y bajo grado de temperatura 
(Boiteau et al. 1972; Somin y Millán 1981; Millán y Somin 1985), conservando 
generalmente numerosos relictos de estructuras y minerales primarios, preservándose 
además restos de microfauna del Albiano-Turoniano y del Campaniano en 
intercalaciones de mármoles o calizas cristalinas (Nuñez et al. 1981; Millán y Somin 
1985; Gyarmati et al. 1990). En ocasiones el metamorfismo regional solo es incipiente, 
donde las rocas primarias apenas aparecen reelaboradas. Las metavulcanitas son 
principalmente tufogénicas y de carácter básico, en menor grado se tratan de lavas y 
aglomerados volcánicos. De manera subordinada se destacan también metavulcanitas 
ácidas. En la composición de este complejo aparecen con frecuencia unas 
metagrauvacas o metaareniscas polimícticas y metaareniscas cuarcíferas o cuarzo 
albíticas con grafito y a veces lawsonita (Millán y Somin 1985).
De acuerdo con los trabajos de Boiteau et al (1972), Hernández (1979), Somin y Millán, 
1981 y Millán y Somin (1985), en el complejo Purial se destacan entre otros los 
siguientes litotipos:
 Filita clorito epidoto albito, a veces con lawsonita (metatufita)
 Filita cuarzo sericito grafítica
 Filita cuarzo actinolito epidótica.
 Filita calcítica con clorita y sericita
 Filita clorito albito epidoto sericítica
 Filita clorito sericito albito prehnítica
 Filita actinolito sericito clorito epidoto albítica
 Filita albito sericito epidoto actinolítica
 Filita albito clorito sericito epidoto glaucofánica
 Filita actinolito albito clorítica con cuarzo y grafito
 Metatoba con albita, clorita, epidota, prehnita y pumpelleita 
 Metatoba cristaloclástica con albita, clorita, epidota, prehnita, pumpelleita y 
actinolita 
 Metaarenisca polimíctica esquistosa con clorita, epidota, albita, actinolita y 
stilpnomelano
 Metaarenisca cuarcífera esquistosa con sericita, clorita, epidota, lawsonita y 
grafito
 metaarenisca con actinolita, clorita, epidota y lawsonita
 esquisto albito clorito epidoto stilpnomelánico
 esquisto cuarzo albito moscovito clorito lawsonito (metarenisca)
 esquisto cuarzo moscovito lawsonito grafítico (metaarenisca)
 esquisto albito epidoto glaucofánico
 esquisto glaucofano epidoto clorito albito cuarcífero
13
4.3.3.2. Complejo Asunción
Este complejo se destaca en el extremo más oriental de Cuba, ocupando la porción más 
oriental de las montañas de la Sierra del Purial y aparece compuesto por las formaciones 
Chafarina y Sierra Verde cuyos límites son tectónicos. Este se separa del complejo 
Purial por la faja anfibolítica de la Fm. Guira de Jauco y por ofiolitas del extremo 
suroriental del macizo de Moa – Baracoa. Se encuentra metamorfizado y deformado 
conjuntamente con el complejo Purial en las condiciones de alta presión y bajo grado 
(Millán y Somin. 1985).
La Fm. Sierra Verde se compone principalmente por esquistos moscovito cuarzo 
grafíticos y cuarzo moscovito grafíticos, a menudo con lawsonita. Contiene 
intercalaciones de mármoles esquistosos de grano fino que a veces conservan restos de 
microfauna del Tithoniano – Cretácico Inferior, de cuarcitas sericíticas 
metapedernálicas (a veces con restos de radiolarios) y de metabasaltos.o metabasitas 
con restos magmáticos. Estas últimas se tratan de unos esquistos de composición: albito 
clorito epidoto glaucofánico, albito clorito epidoto actinolito glaucofánico, albito clorito 
glaucofánico con hidrogranate, albito clorito glaucofana pumpelleítico.
Unos esquistos metapelíticos grafíticos y cuarzo grafíticos, generalmente con lawsonita, 
similares a los que caracterizan a la Fm. Sierra Verde, afloran en un enclave en el 
extremo occidental de la Sierra del Purial, en su límite con la Cuenca de Guantánamo, y 
además en diferentes localidades donde se exponen las secuencias metavolcánicas del 
complejo Purial.
La Fm. Chafarina se compone por mármoles calcíticos esquistosos a veces con grafito, 
mármoles grises bandeados, mármoles dolomíticos bandeados sacaroidales y esquistos 
calcito moscovito grafíticos. En una localidad se preservaron en los mármoles restos de 
microfauna del Jurásico Superior (Millán y Somin 1985).
4.3.3.3. Formación Güira de Jauco
Se destaca como una faja de anfibolitas muy plegadas y deformadas, expuesta en el 
extremo oriental de Cuba, emplazada tectónicamente entre los complejos Purial y 
Asunción (ambos metamorfizados en condiciones de alta presión y baja temperatura). 
Además aparecen muy relacionadas espacialmente con afloramientos de ultrabasitas, 
gabros y diabasas que corresponden con el extremo suroriental del macizo ofiolítico de 
Moa-Baracoa. (Millán y Somin 1985).
Se tratan de anfibolitas esquistosas, a veces bandeadas, de composición hornblendo 
andesítica, en ocasiones también con cuarzo y granate, que presentan intercalaciones 
aisladas de cuarcitas granatíferas metapedernálicas y de gneisses granato hornblendo 
andesino cuarcíferos, a veces con biotita, generalmente de grano fino.
Además se destacan cuerpos de anfibolitas metagábricas con estructura ojosa o 
pseudobandeada, la que contiene restos muy deformados y reelaborados de estructuras y 
minerales magmáticos (plagioclasa y clinopiroxeno). Estas presentan la asociación 
metamórfica de hornblenda, andesina y zoisita.
Entre las anfibolitas aparecen lentes o escamas de una ultrabasita serpentinizada, que 
contiene bloques o capas de anfibolitas. Se ven también pequeños cuerpos de 
pegmatitas, dioritas y cuarzodioritas no metamorfizadas.
De acuerdo con García-Casco et al. (2003), los protolitos de las anfibolitas Guira de 
Jauco se tratan de basaltos y picritas, probablemente generados en condiciones de 
plateau oceánicos de acuerdo con su afinidad geoquímica. Las anfibolitas son cálcicas y 
de composición compleja, destacándose la presencia ocasional de clinopiroxeno 
14
asociado. A veces presentan bandas intercaladas centimétricas de serpentinita paralelas 
a la foliación metamórfica. Se considera que estas anfibolitas fueron generadas en 
condiciones de colisión durante el Cretácico Superior, bajo una temperatura de 600 a 
700 grados centígrados y una presión de 6 a 7 kilobars, o sea, presión media, 
estimándose además que esta unidad fue metamorfizada durante la etapa inicial del 
emplazamiento de las ofiolitas de Moa-Baracoa, infrayaciendo estructuralmente a las 
últimas.
4.3.4. Metamorfítas vinculadas con el Cinturón Ofiolítico
4.3.4.1. Metamorfítas de Alta Presión
En la composición de los melange serpentiníticos que aparecen incluidos en peridotitas 
tectoníticas serpentinizadas del cinturón ofiolítico cubano, suelen destacarse, en 
diferentes lugares del territorio cubano, bloques de metamorfitas de alta presión cuyosprotolitos son principalmente elementos constituyentes de una corteza oceánica 
(ofiolíticos) metamorfizados en una zona de subducción, constituyendo lo que se 
conoce en la literatura como un complejo de subducción (Somin y Millán 1981; 
Kubovics et al. 1989; Millán 1996 b, 1997c). De acuerdo con numerosas dataciones de 
edad absoluta de muestras de estos bloques tomadas en distintos sitios, este complejo 
pudo haberse generado en una subducción norteña buzante al sur, suturada antes del 
inicio del arco volcánico calcoalcalino a partir del Aptiano-Albiano (Millán 1996 b, 
1997 c, Millán et al. 1998). Cabe señalar, que de 33 dataciones K-Ar realizadas en estas 
metamorfitas, 20 arrojaron edades entre 100 y 128 millones de años (Iturralde-Vinent 
et al. 1996). Por otra parte, dos dataciones Ar-Ar, de muestras de eclogitas tomadas en 
diferentes localidades, una publicada (García-Casco et al. 2002) y otra inédita, arrojaron 
igualmente una edad de 118 millones de años para la época en que debió ocurrir la 
exhumación de estos bloques desde las profundidades en melange serpentiníticos. En 
Kerr et al. (1999) se señaló que durante la ocurrencia de esta subducción norteña tuvo 
lugar la generación de un arco volcánico de tipo boninítico de corta duración.
Las principales localizaciones de estos bloques de metamorfitas de alta presión son, de 
oeste a este: olistostromas en el Mb.Vieja de la Fm. Manacas del Eoceno Inferior en 
Guaniguanico; melange tectónico de Rancho Veloz; ultrabasitas tectoníticas 
serpentinizadas en la regiones de Santa Clara, Holguín, Alto de Corea en la Sierra de 
Cristal y en la Sierra del Convento del extremo occidental de la Sierra del Purial.
Las eclogitas típicas, parcialmente diaftoritizadas, se componen por la asociación básica 
de onfacita y granate, pudiendo contener además zoisita y rutilo. Sin embargo, debido al 
metamorfismo regresivo en condiciones de alta presión o en la facies de los esquistos 
verdes, suelen contener también diferentes tipos de anfíbol, mica blanca, clinozoisita o 
epidota, plagioclasa, clorita, esfena, etc. Estas pueden encontrarse en distintas 
localidades, particularmente en las regiones de Santa Clara y de Holguín.
Investigaciones petrológicas realizadas recientemente con microsonda electrónica en 
dos muestras de rocas eclogíticas, una tomada al norte de la ciudad de Santa Clara y otra 
en la región de Holguín, incluidas ambas dentro de un mismo tipo de melange 
serpentinítico (García-Casco et al. 2002), demostraron que éstas se tratan de eclogitas 
anfibólicas con rutilo accesorio, en las cuales el granate y la onfacita se asocian 
paragenéticamente con abundante anfíbol sódico-cálcico; destacándose además una 
asociación regresiva, débilmente impresa, compuesta por anfíbol cálcico, albita, epidota 
y esfena. La inexistencia de efectos difusionales marcados en los halos de los cristales 
de granate, sugiere que la diaftoresis ocurrió justo a continuación del pico del 
15
metamorfismo progresivo, ocurriendo un enfriamiento relativamente rápido de las 
eclogitas durante su exhumación en melange serpentiníticos. Estas investigaciones 
precisaron que el pico del metamorfismo progresivo de las eclogitas de ambas 
localidades ocurrió entre 450 y 650 grados centígrados bajo una presión superior a los 
15 kilobars, mientras que el metamorfismo retrogrado tuvo lugar a una temperatura 
inferior a los 500 grados centígrados y una presión por debajo de los 10 kilobars.
Son frecuentes las anfibolitas de alta presión, que se componen por anfíbol de tipo 
hornblenda asociada con plagioclasa ácida, granate, mica blanca, clinozoisita y rutilo, o 
sea, anfibolitas micáceo granatíferas. En ocasiones pueden encontrarse restos de una 
eclogita más antigua. Los bloques de estas anfibolitas, aunque sin restos eclogíticos, son 
profusos en el Alto de Corea, formando parte de una secuencia estratificada donde 
además aparecen intercalaciones de cuarcitas metapedernálicas con mica blanca y 
granate. Los bloques de cuarcitas de este tipo, a veces además con glaucofana, pueden 
destacarse en otras localidades.
Los esquistos glaucofánicos de grado medio son frecuentes en diferentes localizaciones, 
donde la glaucofana se asocia con mica blanca, granate, plagioclasa ácida, clinozoisita- 
epidota o lawsonita y rutilo; se tratan de esquistos glaucofano granato micáceos. Por 
otra parte, en la región de Santa Clara (Sierra Alta de Agabama) son frecuentes unos 
esquistos glaucofánicos de bajo grado y grano fino (metaturbiditas), donde la 
glaucofana se asocia con albita, clorita, lawsonita y pumpelleita, con grafito accesorio; 
se tratan de esquistos glaucofano lawsonito pumpelleíticos. En la misma región 
encontramos un esquisto muy particular de composición cuarzo mica blanca 
stilpnomelánico.
En la Sierra del Convento son usuales unos esquistos bandeados zoisíticos o zoisito 
clinopiroxénicos, a veces además cuarcíferos, de grano fino a medio. Además puede 
encontrarse un fels zoisítico. También aparecen esquistos jadeito glaucofano micáceos 
(mica blanca) y esquistos enriquecidos en clinopiroxeno jadeítico. Son usuales aquí 
unas anfibolitas con clnozoisita, plagioclasa ácida y a veces también granate, las cuales 
aparecen intruidas por unos metagranitoides trondjemíticos esquistosos con mica blanca 
y zoisita.
Los bloques de antigorititas o de esquistos antigoríticos de grano muy fino son 
frecuentes en diferentes localidades, al igual que los esquistos actinolíticos o 
actinolititas no esquistosas y los esquistos talcosos.
4.3.4.2. Metamorfítas de Baja Presión
Vinculadas con el cinturón ofiolítico cubano se destacan metabasitas de baja presión , 
las cuales parecen derivarse, al menos en parte, de gabros y diabasas de la propia 
asociación ofiolítica, formando bloques incluidos tectónicamente dentro del horizonte 
del complejo de las peridotitas tectoníticas. Principalmente se tratan de unas anfibolitas 
poco plegadas y deformadas que como regla conservan muchos restos de minerales y 
estructuras magmáticas. Pueden ser anfibolitas masivas, con esquistosidad imperfecta, 
o esquistosas y con menor cantidad de restos magmáticos. Estas se componen por la 
asociación de hornblenda y plagioclasa (oligoclasa hasta labrador). En menor grado 
también aparecen esquistos o rocas verdes de menor grado metamórfico, cuyos 
protolitos pueden ser basaltos, diabasas y gabros. Se consideraba que la reelaboración 
de estas basitas fue debido a un metamorfismo regional de muy baja presión de tipo 
oceánico, probablemente relacionado con la génesis de las ofiolitas, ya sea en 
condiciones de MORB o de suprasubducción, por lo que se suponía su edad como 
Jurásico Superior a Cretácico Inferior (Somin y Millán 1981).
16
Sin embargo, de acuerdo con datos recientes, la cuestión relacionada con estas 
metabasitas de baja presión vinculada con el cinturón ofiolítico es más complicada, pues 
las mismas parecen tener diferentes tipos de protolitos (García-Casco et al. 2003).
En Cuba Central, al este de Santa Clara, las anfibolitas metadiabásicas y 
metagabroídicas de baja presión constituyen una faja coherente conocida en la literatura 
como metamorfitas Perea, las cuales además aparecen formando inclusiones en las 
peridotitas serpentinizadas del complejo tectonítico. Esta faja se compone por 
anfibolitas metagabroídicas y metadiabásicas desde esquistosas a masivas, que 
generalmente contienen restos de minerales y estructuras magmáticas. Las asocaciones 
metamórficas están compuestas por hornblenda y plagioclasa (Somin y Millán 1981; 
Millán 1996 b).
De acuerdo con datos petrológicos recientes destacados en García-Casco et al. (2003), 
una muestra de anfibolita metadiabásicacon restos magmáticos, tomada en el cinturón 
de Perea, presentó una asociación metamórfica de magnesiohornblenda con andesina 
cuyos parámetros de presión y temperatura fueron de 650 a 800 grados centígrados y 
menos de 3 kilobars; mientras que una muestra de metagabroide tomada en una 
localidad cercana de la misma faja arrojó unos parámetros de temperatura-presión de 
900 a 1100 grados centígrados y 3 kilobars, en una asociación metamórfica de andesina, 
anfibol (pargasita-kaesuitita) y clinopiroxeno, sin restos primarios, que parece 
corresponder con la facies granulítica de baja presión. Por sus características 
geoquímicas ambas muestras tienen una afinidad calcoalcalina típica de un magmatismo 
de arco volcánico, pero no de tipo ofiolítico. Además, una datación Ar-Ar indicó una 
edad del metamorfismo de aproximadamente 90 millones de años, por lo que éste 
pudiera estar relacionado con la propia colisión del Cretácico Superior y no con un 
proceso de tipo oceánico vinculado propiamente con las ofiolitas, a pesar de que las 
metabasitas de Perea aparecen actualmente asociadas espacial y estructuralmente con el 
cinturón ofiolítico e incluso sus bloques aparecen incluidos dentro de las peridotitas 
tectoníticas serpentinizadas de la base de una asociación ofiolítica original.
Por otra parte, en una estrecha faja de melange serpentinítico que constituye la 
prolongación oriental del macizo ofiolítico de Cajálbana, en Cuba Occidental, se 
destacan numerosos bloques de anfibolitas metadiabásicas y metagabroídicas incluidos 
en peridotitas tectoníticas muy serpentinizadas y cizalladas. Estas son unas anfibolitas 
normales compuestas por hornblenda y oligoclasa andesina a andesina, que 
generalmente conservan restos de estructuras y minerales magmáticos, aunque con 
frecuencia presentan una marcada foliación metamórfica (Somin y Millán 1981; Millán 
1996 b).
Una muestra analizada de un cuerpo incluido de anfibolita metadiabásica (García-Casco 
et al. 2003), indicó que su protolito tiene una afinidad propia de las toleitas de 
suprasubducción, mientras que su metamorfismo ocurrió en la facies anfibolítica de 
muy baja presión, dentro de un rango de temperatura de 550 a 750 grados centígrados y 
una presión inferior a los 3 kilobars, probablemente en condiciones oceánicas. Este 
metamorfismo tuvo lugar, de acuerdo con una datación Ar-Ar, hace aproximadamente 
130 millones de años. De acuerdo con esto, las ofiolitas de Cajálbana pudieran tratarse 
de ofiolitas de suprasubducción y fueron afectadas por un proceso de metamorfismo de 
tipo oceánico durante el Neocomiano.
17
ISLA DE LA JUVENTUD
18
104 (P-1032-4) 2.5x
86 (B-38-2)5X N// 94 (P-1016-a) 5x N//91 (P-41) 2.5x N//
97 (CU-7119) 2.5X 112 (13-352) 5X N//
117 (13-352) 5x 119 (1610-1965) 2.5x 124 (P-1038-4) 2.5x
129 (P-1016-11) 2.5x 131(P-1016-11) 2.5x 136 (MH-11-80) 5x
137 (CU-719-e) 2.5x
19
PIE FOTOS ISLA DE LA JUVENTUD
86 (B-38-2): Esquisto cuarzo biotito plagioclaso cianito estaurolítico, donde se destaca 
la asociación paragenética de cianita y estaurolita de color amarillo.
91 (P-41): Esquisto moscovítico cuarzo albítico. La albita forma granos deformados 
lensoidicos, en los cuales aparece una esquistosidad interna (más antigua) dispuesta 
diagonalmente con respecto a la esquistosidad de la roca, dada por haces orientados de 
moscovita.
94 (P-1016-a): Gneiss cuarzo plagioclaso biotito sillimanítico, donde se destaca la 
asociación paragenética de sillimanita con biotita. 
97 (CU-7119): Mármol donde aparecen cristales de diopsido sustituidos parcialmente 
por un agregado de tremolita y calcita.
104 (P-1032-4): Esquisto cuarzo albito micáceo. Los cristales de albita se ven 
deformados y con una esquistosidad interna rotada (más antigua), marcada por 
inclusiones de grafito, dispuesta perpendicularmente a la esquistosidad de la roca, 
indicada por haces orientados de moscovita y biotita. (Zona limítrofe entre la facies de 
los esquistos verdes y la facies anfibolítica).
112, 117 (13-352): Esquisto biotito plagioclásico cuarcífero con porfiroblastos de 
estaurolita y cianita. En la foto 112 aparece un porfiroblasto maclado de estaurolita. En 
la foto 117 se aprecia una asociación intima de cianita con estaurolita de color amarillo, 
manifestándose una esquistosidad interna flexurada marcada por bandas de grafito. 
(Facies anfibolítica).
119 (1610-1965): Porfiroblasto de granate con inclusiones de otros minerales y una 
esquistosidad interna dada por bandas de grafito de grano fino. En el extremo lateral 
aparece biotita asociada con sillimanita de grano fino sustituyendo parcialmente al 
granate. (Zona de alto grado metamórfico de la facies anfibolítica).
124 (P-1038-4): Esquisto granato biotito cuarzo plagioclásico. Se aprecia un 
porfiroblasto de granate deformado que incluye numerosos granos de cuarzo. (Facies 
anfibolítica).
129,131(P-1016-11): Esquisto biotito sillimanitico plagioclaso cuarcífero, donde se 
destaca la asociación paragenética de biotita con sillimanita. La sillimanita forma haces 
fibrosos orientados según la esquistosidad o dispuestos de forma radial.
136 (MH-11-80): Fels escapolito diopsido plagioclásico cuarcífero. En el centro aparece 
un cristal de diopsido alterado en su periferia por un agregado fino compuesto por 
calcita y anfíbol.
137 (CU-719-e): Mármol tremolítico. Nótese los cristales de tremolita de forma 
rómbica.
20
ESCAMBRAY
54 (Herr. El Guineo) 2.5x 59 (GM-97-A) 2.5x 60 (E-99-7) 2.5x
167 (E-54-5) 2.5x N// 39 (E-94-1) 5x 40 (Loc. Pico Blanco) (2.5x)
44 (77-33) 2.5x 45 (M-562) 2.5x 48 (GM-RN) 2.5x
21
63 (LT-70-2) 2.5x 64 (F-54- A) 2.5x 66 (F-6-1) 5x
68 (GME-167-B1) 2.5x 70 (F-50- 4) 2.5x
22
PIE FOTOS ESCAMBRAY
167 (E-54-5): Esquisto cuarzo albítico micáceo granatífero. Los cristales de granate aparecen 
zonados debido a que se formaron en condiciones de stress, rotando durante su crecimiento y 
contorneando la esquistosidad manifiesta en la roca. (Esta muestra corresponde a la zona de 
mayor grado metamórfico de alta presión).
39 (E-94-1): Cristal de lawsonita bien conformado en un esquisto albito anfibólico clorito 
lawsonítico. (Esta muestra corresponde a la zona de menor grado metamórfico de alta 
presión).
40 (Loc. Pico Blanco): Extremo de un porfiroblasto de granate en un esquisto donde la 
glaucofana azul forma parte de la matriz junto con epidota, mica blanca y cuarzo. (Esta 
muestra corresponde a la zona de mayor grado metamórfico de alta presión).
44 (77-33): Cristal de zoisita más antiguo, alterado, deformado y rotado, en medio de una 
matriz esquistosa fina superpuesta de composición actinolito clorito albito clinozoisítica. 
(Esta muestra corresponde a la zona de la facies de los esquistos verdes).
45, 46 (M-562): Cuarcita con cristales de riebeckita zonados, en prismas orientados según la 
esquistosidad. El cuarzo constituye un agregado poligonal en mosaico. (Esta muestra 
corresponde a la zona de mayor grado metamórfico de alta presión).
48 (GM-RN): Mármol grafítico con restos de radiolarios, que contiene cristales de turmalina y 
lawsonita. (Esta muestra corresponde a la zona de menor grado metamórfico de alta presión).
54, 55 (Herr. El Guineo): Cristal de glaucofana en un esquisto de composición cuarzo mica 
granate glacofánico. (Esta muestra corresponde a la zona de menor grado metamórfico de alta 
presión).
59 (GM-97-A): Metaarenisca cuarcífera. Los granos de cuarzo detrítico, deformados y 
parcialmente recristalizados, aparecen envueltos en camisas de una sericita muy fina. (Esta 
muestra corresponde a la zona de menor grado metamórfico dentro de la facies de los 
esquistos verdes).
60 (E-99-7): Esquisto cuarzo clinopiroxénico, con los cristalesde clinopiroxeno orientados 
según la esquistosidad de la roca. (Esta muestra corresponde a la zona de mayor grado 
metamórfico de alta presión).
63 (LT-70-2): Esquisto cuarcífero con mica y granate, donde se evidencian dos sistemas de 
esquistosidad cortantes. (Esta muestra corresponde a la zona de la facies de los esquistos 
verdes).
64 (F-54-A): Esquisto compuesto por mica blanca, granate, glaucofana y cuarzo. Los cristales 
de granate contornean la esquistosidad. (Esta muestra corresponde a la zona de mayor grado 
metamórfico de alta presión).
66 (F-6-1): Esquisto lawsonítico clorítico donde aparecen profusos cristales bien conformados 
de lawsonita. (Esta muestra corresponde a la zona de menor grado metamórfico de alta 
presión).
23
68 (GME-167-B1): Esquisto albito clorito actinolítico. La albita constituye cristales 
poiquilíticos en los cuales se manifiesta una esquistosidad interna a veces plegada, dada por 
numerosas agujas de actinolita orientadas. (Esta muestra corresponde a la zona de la facies de 
los esquistos verdes).
70 (F-50-4-A): Esquisto compuesto por clinopiroxeno, granate, glaucofana y mica blanca. 
Nótese la coloración azul de un cristal de glaucofana en el extremo superior izquierdo de la 
foto. (Esta muestra corresponde a la zona de mayor grado metamórfico de alta presión).
24
FORMACION MABUJINA
139(C-44) 2.5 N// 141(E-68-6) 2.5x N// 144(PG-1) 2.5X N//
155(E-37-1) 2.5x N// 157 (E-66-4) 2.5x N// 165 (PMC-8) 2.5 N//
25
PIE FOTOS FORMACION MABUJINA
139(C-44): Anfibolita metaporfirítica. Los fenocristales de clinopiroxeno magmático 
aparecen seudomorfizados por hornblenda. 
141(E-68-6): Esquisto plagioclaso hornblendo epidoto biotítico. Se manifiesta un cristal 
de plagioclasa magmática deformada, rotada y alterada que contornea la esquistosidad.
144(PG-1): Anfibolita. Se destaca un fenocristal relíctico de clinopiroxeno magmático 
(núcleo) parcialmente seudomorfizado por hornblenda metamórfica (periferia).
155(E-37-1): Microgneiss cuarzo plagioclaso biotito granatífero. 
157 (E-66-4): Anfibolita clinopiroxénica. Se destacan abundantes cristales de 
clinopiroxeno metamórfico (incoloro) asociados con hornblenda.
165, (PMC-8) « Fm. Porvenir»: Metatufita esquistosa donde se destaca la estratificación 
primaria de la roca. Aparecen cristales de plagioclasa magmática deformados y elongados 
en medio de una trama de grano fino (Facies de los esquistos verdes).
26
PURIAL
19 (P-764-A) 2.5x
9 (GT-15) 5x
24 (SM-781) 2.5x N//
10 (GT-15) 2.5x06 (GT-35-a) 10x N//
18 (P-764-A) 2.5x
29 (55035) 2.5x
27
PIE FOTOS PURIAL
06 (GT-35-a): Complejo Purial. Esquisto glaucofano epidoto albito cuarcífero. Nótese los 
cristales tabulares azul violáceos de glaucofana y los granos de epidota de color verde 
olivo y mayor relieve.
9 (GT-15): Complejo Purial. Metavulcanita con relictos de plagioclasa magmática 
deformados y recristalizados, envueltos por un agregado esquistoso fino. Nótese un 
cúmulo lensoidico de láminas desorientadas de stilpnomelano de color pardo amarillento. 
10 (GT-15): Complejo Purial. Metatoba cristaloclástica. Véase en la parte izquierda 
varios cristales de clinopiroxeno magmático deformados y parcialmente alterados, 
envueltos por un agregado esquistoso fino. En el otro extremo se observa un fragmento 
elongado convertido en un agregado fino.
18 (P-764-A): Complejo Purial. Filita actinolítica. Compuesta principalmente por haces 
orientados de una actinolita fina y que además contiene bandas de un agregado de cuarzo.
19 (P-764-A): Complejo Purial. Filita bandeada (metatufita) con numerosos restos 
destruidos de clinopiroxeno magmático.
24 (SM-781): Fm. Sierra Verde. Filita cuarzo sericítica compuesta principalmente por 
restos de radiolarios deformados y recristalizados.
29 (55035): Complejo Purial. Metalava ácida donde se destaca un fenocristal hexagonal 
de cuarzo magmático. Aparecen restos difusos de plagioclasa magmática convertida en 
un agregado enriquecido en lawsonita (color amarillo naranja en nicoles cruzados).
28
SIERRA ALTA AGABAMA
PIE FOTOS INCLUSIONES DE METAMORFITAS DE ALTA PRESION EN EL 
MACIZO SERPENTINITICO DE SIERRA ALTA DE AGABAMA
79, 80 (GM-111-73): Fels albito lawsonítico glaucofánico. Nótese la abundancia de 
cristales tabulares desorientados de lawsonita. En la parte superior izquierda se destacan 
dos cristales de glaucofana de color azul violeta.
80 (GM-111-73) 2.5x79 (GM-111-73) 2.5x N//
29
 REFERENCIAS
Bibikova, E.V., et al. 1988. Primeros resultados de dataciones U-Pb de rocas 
metamórficas en el arco de las Antillas Mayores: edad del complejo Mabujina de Cuba.
(en ruso). Doklady AN SSSR, ser. geol., vol. 302, n.4, p. 924-928.
Blein, O. et al. 2003. Geochemistry of the Mabujina complex, Central Cuba: implications 
on the cuban cretaceous arc rocks. Journ. Geology 111, p. 89-101.
Boiteau, A., A. Michard, P. Saliot. 1972 Metamorphisme de haute pression dans le 
complexe ophiolitique du Purial (Oriente, Cuba). CNRS. vol. 274, p. 2137-2140. Paris.
Buguelsky, Y., et al. (1985). Yacimientos Minerales Metálicos de Cuba (en ruso).
Edit. Nauka, Moscú, 246 pp.
Castroviejo, R. 1998. Fundamentos de Petrografía, E. T. S. ING. MINAS, Universidad 
Politécnica de Madrid, 116p.
Cruz-Gámez, E.M., et al. 2003: La faja Cangre y sus rasgos metamórficos. V Congreso 
Cubano de Geología y Minería. Resúmenes. p. 16-17.
Dublan, L., et al. 1985: Informe final del levantamiento geológico y evaluación de los 
minerales útiles a escala 1:50,000 del polígono CAME, Zona Centro. Archivo ONRM, C. 
Habana.
Hernández, M. (1979): Datos preliminares sobre las características petrográficas de las 
rocas del macizo Sierra del Purial. La Minería en Cuba. Vol. 5, N.2., p.2-7.
Fry, N. 1995: The field description of metamorphic rocks. Geol. Soc. London Handbook. 
John Wiley and Sons. 
García-Casco, A., R. Torres-Roldán, G. Millán, P. Monié, F. Haissen. 2001: High-grade 
metamorphism and hydrous melting of metapelites in the Pinos terrane (W Cuba): 
Evidence for crustal thickening and extension in the northern Caribbean collisional belt. 
Journ. Metamorphic Geol., vol. 19, n.6, p.699-715.
García-Casco, A., R. Torres-Roldán, G. Millán, P. Monié, J. Schneider. 2002: Oscillatory 
zoning in eclogite garnet and amphibole, northern serpentinite melange, Cuba: record of 
tectonic instability during subduction. Journ. Metamorphic Geol. Vol. 20, p. 1-18.
García-Casco, A., et al. 2003: Metabasites from the northern serpentinite belt (Cuba) and 
a metamorphic perspective of the plate tectonic models for the Caribbean region. V 
Congreso Cubano de Geología y Minería. Resúmenes. p. 302-303.
30
Grafe, F., et al. 2001: Rb-Sr and Ar-Ar mineral ages of granitoid intrusives in the 
Mabujina unit, Central Cuba: Thermal exhumation history of the Escambray 
massif.Journ. Geology 109, p. 615-631.
Gyarmati, P., et al. 1990: Informe final sobre los trabajos de levantamiento geológico en 
escala 1:50,000 y búsquedas acompañantes en el polígono V. Guantánamo (inédito). 
ONRM. C. Habana.
Iturralde-Vinent, et al. 1996: Geological interpretation of the cuban K-Ar data base.
En: Ofiolitas y Arcos Volcánicos de Cuba. Contrib.1, Proj. 364, Miami, IUGS-UNESCO, 
p. 48-69.
Kerr, A.C., et al. 1999: A new plate tectonic model of the Caribbean: implications from a 
geochemical reconnaissance of Cuban Mesozoic volcanic rocks. Geol. Soc. Amer. Bull. 
111, p. 1581-1599.
Kubovics, I., J. Andó, Gy. Szakmány, 1989: Comparative petrology and geochemistry
of high pressure metamorphic rocks from eastern Cuba and western Alps.
Acta Mineralogica-Petrographica, Szeged, 30, p.35-54.
Millán G., Somin, M.L. 1985: Contribución al conocimiento geológico de las 
metamorfitas del Escambray y del Purial. Reporte de Investigación 2, 74 pp, ACC, IGP.
Millán, G. 1987: Laasociación glaucofana-pumpelleita en metagabroides de la faja 
metamórfica Cangre.
Millán, G. 1996 a: Geología del complejo Mabujina. En: Ofiolitas y Arcos Volcánicos de 
Cuba. Contrib.1, Proj.364, Miami, IUGS-UNESCO., P.147-153.
Millán,G., 1996 b: Metamorfitas de la asociación ofiolítica de Cuba . En: Ofiolitas y 
Arcos volcánicos de Cuba. Contrib.1, Proj. 364, Miami, IUGS-UNESCO, p. 131-146. 
Millán, G. 1997 a: Geología del macizo metamórfico Isla de la Juventud. En: Estudios 
sobre Geología de Cuba., p. 259 – 270 IGP. CNIG.
Millán, G. 1997 b: Geología del macizo metamórfico Escambray. En: Estudios sobre 
Geología de Cuba., p. 271-288. IGP-CNIG.
Millán, G. 1997 c: Posición estratigráfica de las metamorfitas cubanas. En: Estudios 
sobre Geología de Cuba., p. 251-258, IGP-CNIG.
Millán, G., C. Pérez, D. García, 1998: El cinturón orogénico en Cuba Central.
GEOMIN 98, Memorias I, p. 423-425. CNIG, IGP.
31
Nuñez, A., et al. 1981: Informe geológico sobre los trabajos de levantamiento y búsqueda 
a escala 1: 100,000 y los resultados de los trabajos de búsqueda a escala 1: 50,000 y 1: 
25,000 ejecutados en la parte este de la prov. Guantánamo. (inédito). ONRM. C. Habana.
Pardo, M. 1990: La constitución geológica del macizo Isla de la Juventud y metalogenia 
endógena vinculada al magmatismo ácido. Trans. 12 Carib. Geol. Conference, St-Croix, 
U.S. Virgin Islands, p. 68-81. Miami Geol. Soc. 
Renne, P. R., et al. 1989: 40Ar / 39Ar and U– Pb evidence for Late Proterozoic 
(Grenville-age) continental crust in North-Central Cuba and regional tectonic 
implications. Precambrian Res. 42, p. 325-341.
Schneider, J., et al. 2004: Origin and evolution of the Escambray Massif (Central Cuba):
an example of HP / LT rocks exhumed during intraoceanic subduction. Journ. 
Metamorphic Geol. 22, p. 227 – 247.
Somin, M. L., Millán, G. 1981: Geología de los complejos metamórficos de Cuba (en 
ruso). 219 
32
	Filita clorita sericítica
	Blastomilonita: este nombre se utiliza cuando la milonita tiene la matriz casi o totalmente recristalizada, pero conserva restos deformados visibles de la roca primaria.

Otros materiales