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Universidad Nacional Autónoma de México. Facultad de Filosofía y Letras. Colegio de Historia. Coraza y Saeta revolucionaria: Catalogación del Fondo Manuel González Ramírez del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México. Informe académico por Servicio Social que presenta: Christian Iván García Guillén Para obtener el grado de Licenciado en Historia. Asesor: Lic. Rafael Hernández Ángeles. Agosto 2009 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. Dedicado a: Mi madre, mi ejemplo de ser humano por antonomasia y generosa mecenas de mi vida; Mis hermanos, con quienes he compartido experiencias y he aprendido cosas; Mis amigos, por la sinceridad, de los momentos juntos, en nuestros heterogéneos caminos; Mis maestros, fieles y verdaderos ejemplos de profesionalismo y conocimiento; A todos ellos, por que en nuestra interacción se evidencia la felicidad de mí ser Agradecimientos. Los siguientes agradecimientos son para aquellos quienes contribuyeron a la realización de este trabajo. Primeramente a mi madre, quien financió mi carrera. Mi amiga Azeneth quien me recomendó hacer el servicio social y por ende este trabajo en el INEHRM. A la maestra Patricia Irigoyen por recibirme en el servicio social de la manera más cómoda; y la maestra Elsa Aguilar porque estando a su cargo mi proyecto, me dejó trabajar con su ayuda en medio de sus posibilidades y ocupaciones. Al doctor Pablo Serrano, por haberme entregado una copia de su trabajo sobre el INEHRM. Muy especialmente a mi asesor, Maestro Rafael Hernández Ángeles, que amablemente y sin conocernos, lo fuimos haciendo mutuamente en la realización de este trabajo, gracias por su profesionalismo en la dirección del mismo. Al café Libre de Estrés, porque ahí se plasmaron estas ideas. A mis sinodales, que dieron su tiempo para la revisión de este informe. A mi hermano Luís quien realizó los dibujos de este trabajo. Y por último, a mis lectores, que serán los que tendrán que advertir si les es útil o no este trabajo. Coraza y saeta revolucionaria: Catalogación del fondo Manuel González Ramírez del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México. Siglas utilizadas. AF-INEHRM Archivo Fotográfico del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México. AHC-AGN Archivo Histórico Central, Archivo General de la Nación. BNAH-EDH--MNAH Biblioteca Nacional de Antropología e Historia “Dr. Eusebio Dávalos Hurtado”, Museo Nacional de Antropología e Historia. BRM-INEHRM Biblioteca de las Revoluciones de México del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México. COLMEX El Colegio de México. EAGP Entrevista al licenciado Alejandro González Prieto. FMGR Fondo Manuel González Ramírez. GVII-AP-AGN Galería siete, Archivos particulares fotocopiados, Archivo General de la Nación. GIII-APFARC-AGN Galería tres, Administración Pública, Adolfo Ruíz Cortines, Archivo General de la Nación INEHRM Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México. UNAM Universidad Nacional Autónoma de México Contenido. Introducción….8. Primera parte. Las primeras prendas. 1. El Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México. A. Génesis de la Institución…16. B. Los primeros treinta años de la mano de Azuela…26. C. La consolidación institucional…37. D. La consolidación académica…44. E. La sede del Instituto…56. F. Una interrogante: ¿Clío al estilo de los Pinos?...58. 2. Catálogo Manuel González Ramírez. Proyecto: origen y desarrollo. A. La piedra en el zapato…69. B. El fondo Manuel González Ramírez….75. C. Catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM, proyecto y desarrollo…80. Parte dos: Coraza y saeta revolucionaria. 1. Un preparatoriano de siempre: Semblanza de Manuel González Ramírez….91. 2.- Coraza y saeta revolucionaria: La obra de Manuel González Ramírez. Aspectos generales…107. A. Fuentes para la Historia de la Revolución Mexicana: a. Planes políticos…113. b. La caricatura política…117. c. La Huelga de Cananea…124. d. Manifiestos políticos (1982-1913)…128. e. Ocho mil kilómetros en campaña…131. B. libros con temática múltiple: a. El codiciado istmo de Tehuantepec…136. b. Los Tratados Mc Lane Ocampo. Ignominia y realidad…140. c. Los llamados tratados de Bucarelí…144. d. El petróleo mexicano…146. C. La Revolución Social de México: a. Las ideas, la violencia…148. b. Las instituciones-el problema económico…150. c. La cuestión agraria…151. Parte tres. Un aspirante a titulo de historiador: O de la propuesta y problemática del trabajo. 1. Carretes y agujas…154. 2. Entre el Vestido de noche y el vestido de moda…164. 3. De costurero a sastre…171. Parte cuatro. El sastre que confecciona los vestidos de Clío o a manera de conclusión….181. Parte cinco. Apêndices: Apéndice uno: Catálogos realizados...189. Apéndice dos: Entrevista a don Alejandro González Prieto....422. Apéndice tres: Apuntes a manera de guía sobre el material trabajado: México 1906-1914… 432. Bibliografía General….509. Orden de los dibujos…517. 8 Introducción. os pasiones dominan mi vida, la historia y la música; el presente trabajo es la realización de una de esas dos pasiones. Cuando terminé los créditos de la carrera pensé en hacer un trabajo que reuniera las dos disciplinas que me gustan, mi proyecto original se llama: De “la Tequilera a la Interesada”: vida y obra de Lucha Reyes y Salvador “Chava” Flores. El proyecto es ambicioso y terminó siendo un plan de maestría o doctorado en algunos años mientras consigo más información. Creo que mi falta de acercamiento a algún maestro, la clásica “barbilla” u otro recurso, me imposibilitó para encontrar un asesor de tesis sobre este tema y aunque tampoco le busqué más, pensé en otras posibilidades. Éste proyecto será un trabajo enriquecedor por reunir música e historia por la investigación. Por otro lado, siendo pasante de historia tuve que hacer mi servicio social, y mientras laboraba en mi escritorio me pregunté ¿A dónde iría a parar mi trabajo?, además de superar mis deficiencias. Habiéndome imposibilitado de realizar mi proyecto de tesis original, decidí que mi trabajo no se quedara en los archivos del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM) y gracias al consejo de mi amiga Azeneth, y previa consulta con el coordinador en turno del Colegio de Historia, me pareció correcto hacer el Informe académico bajo la modalidad de servicio social sobre la catalogación del fondo Manuel González Ramírez (FMGR) del INEHRM. Otros motivos que me impulsaron a hacerlo son los siguientes. Primeramente, no tenía amplio conocimiento sobre la Revolución Mexicana; en mis cuatro años de carrera tuve cursos monográficos de grandes periodos y entre uno de ellos, la D 9 Revolución Mexicana se mencionaba. Lleguéa saber lo más esencial del proceso. Al catalogar los documentos del fondo MGR, tuve que recurrir a diferentes fuentes del proceso, saber con claridad el nombre de personajes que a veces no eran tan populares. El estudio de la Revolución Mexicana apareció como una necesidad de saber, aunque sea de manera general, este proceso definitorio de nuestra actual conformación política y jurídica como país. Pero también, por qué me pensé como docente de grado básico y media superior, y reflexioné acerca de cómo hablarles de la Revolución a los estudiantes si yo no la comprendía. El aprendizaje de esos seis meses fue enriquecedor. De la comprensión de esa etapa, ahora cercana a ser celebrada a nivel nacional, me pareció correcto conocerla para poder hablar de ella, en el momento que se me presente. Por otro lado, profesionalmente el historiador se forma como investigador y como docente, de lo primero significa que busca información del pasado sobre un determinado tema. El docente, por otro lado, se enriquece de la investigación constante para divulgarla ante el estudiante; y así, fuera de la clase monográfica, en el aula y entre la colectividad, desarrolla otras líneas de reflexión. Muchos estudiosos toman la especialidad en el mundo complejo del conocimiento y lo intensifican, sin embargo a veces se desentienden de otros procesos o áreas que en determinado tiempo les toca impartir como docentes, el resultado es fatal para estudiantes y clases especificas que llegan a dar estos maestros, ya que en dichas clases se llega a tratar a un personaje o tema solamente, y no conforme a un plan general de estudios o las necesidades de dicha clase. En este sentido, aunque me gusta la historia de la música y durante toda la carrera hice trabajos sobre ésta temática en ciertas clases, también realizaba otras consultas temáticas. El historiador como investigador está facultado para hacer investigación de toda índole en el ámbito de lo histórico, ya sea con ayuda de sus propias herramientas, conocimientos y actitudes, además de las ciencias auxiliares; solo a partir de la delimitación de su especialización puede llegarse a aislar del trabajo interdisciplinario que resulta ser necesario hoy día. Esto es lo que quise evitar, dejando mi trabajo de catalogación sin darle un término más concreto 10 que mi simple catálogo, y decidí que me sirviera para mi trabajo prueba, para optar por el grado de licenciado en historia. Por otro lado, no teniendo la certeza de la catalogación total del fondo, ni el tiempo que se tarde, me pareció importante que al menos la parte que yo hice, pueda ser consultada por un público amplio en la Biblioteca de las Revoluciones de México y la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, y así, cumplir de manera parcial el objetivo que llevó a emprender el proyecto de la catalogación del fondo MGR. El presente Informe está divido en cinco partes, las cuales obedecen a los lineamientos establecidos por el Consejo Universitario vía la Coordinación de Historia de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM para este tipo de trabajos. En la primera parte denominada Las primeras prendas, se tocan temas específicos. El primero de ellos consiste en esclarecer el ¿cómo?, ¿por qué? , y ¿para qué?, del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM) a cincuenta y cinco años de existencia, pues se levanta como un centro dedicado a la difusión histórica; dedicado al estudio no solamente de la historia de la Revolución Mexicana, como hasta hace dos años; pues ahora abarca su área de estudio a las Revoluciones de México. Para este apartado, mis fuentes primordiales fueron las actas del Instituto creadas por el Patronato y luego Consejo Consultivo del INEHRM, y por otro lado, fuentes hemerográficas acerca del asunto. Se destaca su función de divulgador con libros, conferencias y programas en la radio, hay también, la mención de algunas de sus problemáticas. En el apartado, La piedra en el zapato, relaté las condiciones en las que realicé mi servicio social. Los materiales trabajados, la forma en la que lo hice, en ese escritorio donde leía cada mañana artículos mecano escritos de Manuel González Ramírez; donde tuve que aprender a poner en práctica mi redacción, síntesis y ortografía, para ofrecer un trabajo bien elaborado hasta dónde se pudo, el cual tuve que revisar varias veces. En este apartado hablé también sobre las facilidades que se me daban para trabajar y que me permitieron hacer mi mejor 11 esfuerzo, y la incertidumbre acerca de dónde iba a parar mi trabajo, dicha preocupación fue la génesis de este informe. Al explicar la conformación del fondo Manuel González Ramírez como parte del acervo de la biblioteca de las Revoluciones de México, tuve que hacer una labor de cotejo de lo que en listas preliminares estaba documentado acerca del número y estado del acervo; en la revisión logré especificar cómo está constituido dicho fondo, para poder entregarle a la encargada del proyecto, la información actualizada con el fin de que la catalogación de éste sea más precisa a futuro. Dicha catalogación del fondo MGR, presentó una serie de problemas, primero porqué quien empezó el proyecto, se marchó del Instituto y se lo dejó a otra colega quien en verdad no sabía en qué consistía dicho proyecto, convine con ella establecer un escrito a manera de proyecto de tal manera que éste fuera la base para su sucesiva realización. La presentación del proyecto y sus avances pretenden esclarecer el objetivo de mi trabajo y el de mis compañeros, el cual es hacer un catálogo para consultar la información de los materiales mecano escritos de Manuel González Ramírez que refieren diferentes temas sobre la Revolución Mexicana como son: el magonismo, el maderismo, la lucha en Morelos por Zapata, el movimiento obrero, el problema agrario; personajes como Lázaro Cárdenas, Álvaro Obregón y Diego Rivera. Esta información puede ayudar a comprender, junto a la confrontación con otras fuentes, la participación de los personajes en el desarrollo de los grandes procesos sociales vividos, y mostrar así, por la reflexión, la trascendencia de las acciones de ese pasado sobre las problemáticas de nuestro presente, tales procesos como: el fracaso del reparto agrario, porqué a pesar de momentos de repartición, no hubo apoyos ni fortaleza del campo mexicano. Las posibles fallas o meritos de dicho proyecto y mi trabajo de catalogación, es algo que solo el lector valorará, las críticas son bienvenidas. Coraza y saeta, es el nombre de la segunda parte de este trabajo y da nombre al Informe, conformado por dos apartados. El primero tiene que ver con la semblanza de Manuel González Ramírez, para la realización de este tema, una de mis fuentes fue la entrevista que en agosto de 2008 hice al hijo del historiador 12 queretano, al licenciado Alejandro González Prieto, quien accedió a dar datos de la vida de su padre que en otras fuentes no hallé, Con ello se pretendió explicar las condiciones de su desarrollo intelectual y su vida normal y vincularla con su producción historiográfica, a partir de un discurso que explique la producción de Manuel González Ramírez, como un ser producto de una sociedad cambiante y en transformación de una era premoderna al México moderno posrevolucionario. Otras fuentes para este apartado están en las notas de sus amigos, conocidos y estudiosos que comentaron su obra. En el segundo apartado: Coraza y saeta revolucionaria, comenté sobre la labor historiográfica de Manuel González Ramírez, primero haciendo señalamientos generales a dicha producción. Después clasificando ésta producción en tres tipos de escritos, se comentan de la siguiente manera: A. Fuentes para la Historia de la Revolución Mexicana; B. Libros de temática múltiple, y C. La Revolución Socialde México. Y con ello mostrar las ideas generales acerca de su pensamiento en más de medio siglo de experiencia profesional como abogado, educador e investigador que el historiador queretano desarrolló. Un aspirante a titulo de historiador es el nombre de la tercera parte de este trabajo, donde traté de despejar tres apartados. En Carretes y agujas expliqué de manera general, la catalogación como disciplina auxiliar de consulta del estudiante e investigador para encontrar fuentes de estudio. Brevemente presenté su desarrollo desde su aparición y sus antecedentes. Después presento la definición más apropiada para ésta disciplina; y por último algunas referencias para consultar la reglas de catalogación actuales, para quien se interese en la catalogación de libros y documentos, no las traté extensamente ya que en primera, el objetivo del trabajo no es ese; y por otro lado, dichas reglas han sido mejor trabajadas por otros autores a los que recomiendo. Aquí es preciso aclarar que mi trabajo de catalogación, fue realizado conforme a las necesidades y lineamientos del INEHRM y no conforme a las reglas universales de catalogación más utilizadas (Angloamericanas). Entre el vestido de noche y el diseño de moda, es un apartado que pretende esclarecer el sentido más usual de la palabra “catálogo”, y diferenciar con ello el 13 catálogo comercial del documental. Así mismo, explicar la eficiencia y posible utilización de éste material a un público amplio que no sea el estudiante e investigador de ciencias sociales. Además de valorar si este catálogo puede cumplir sus objetivos primordiales, a partir de todo un cuestionamiento acerca de la educación y estado actual del conocimiento a nivel social. De costurero a sastre es el título del tercer y último tema tratado en este Informe, allí reflexioné sobre las habilidades, conocimientos y ciertas observaciones acerca de interesado en hacer catalogación a partir de mi experiencia; con el fin de aclarar ciertas limitantes o defectos en la formación de los historiadores, y con ello, sugerir que se corrijan desde mi punto de vista, algunas deficiencias en el estudiante para la mejor realización de su trabajo (al menos en la carrera de historia y empezando por mí). El sastre que confecciona los vestidos de Clío, se hizo un resumen de las principales ideas del trabajo, y concluir de manera general éstas, para así, despedir este informe como una investigación sencilla y como un trabajo de consolidación de estudios de licenciatura, pero también como un trabajo en el largo camino de la producción de un historiador. Los apéndices de este trabajo constituye la parte cinco. El primer apéndice contiene los catálogos realizados en mi servicio social en el INEHRM de octubre de 2007 a Abril de 2008, siendo las fichas un total de 545. En segundo apéndice tiene la transcripción de la entrevista hecha al licenciado Alejandro González Prieto que ocupé para la semblanza como se recordará. El tercer apéndice contiene apuntes generales de la Revolución Mexicana, acerca del tiempo tratado en las fichas para el usuario que no tenga un conocimiento delimitado del tema, o bien, para el que lo tenga, lo confronte con su conocimiento, además dicho material corresponde a las fichas de trabajo realizadas por mi durante la catalogación que quisiera no se perdiera. De ninguna manera está historia es exhaustiva, y más bien pretende esclarecer las problemáticas generales que desembocaron la Revolución hasta la caída del gobierno del general Huerta. 14 El presente Informe termina con la presentación de la bibliografía general, que contiene: material de archivo, hemerografía, revistas especializadas, libros especializados, y páginas de Internet; que fueron útiles para sustentar todo este trabajo, y que usted apreciable lector está a punto de leer, apreciar y valorar. Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 15 PRIMERA PARTE. Las primeras prendas. Christián Iván García Guillén. 16 1. El Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México. A. Génesis de la institución. Hacia la segunda mitad del siglo XX, México vivió un momento de consolidación del modelo económico, político y social. Por un lado, el llamado “Milagro Mexicano” daba sus frutos e impulso al país, éste proceso no era otra cosa que la forma de denominar al eventual crecimiento económico de la nación que vivió desde los años de 1940 hasta 19681 El modelo de sustitución de importaciones dio beneficios para que se constituyeran y fortalecieran las empresas nacionales, y a que las importaciones recibieran un alza en los aranceles dejando a los primeros una ganancia considerable , aunque con sus ventajas y desventajas; las primeras aprovechadas para los que defendieron y co-actuaron en la fortaleza del sistema mexicano. 2 Sin lugar a dudas el comienzo del pacto entre la burguesía nacional y el Estado, y ello sería lo que posibilitaría la continuidad de una línea económica que implicaría de hecho el crecimiento económico sin desarrollo proporcional, mismo que se agravaría drástica y críticamente con la explosión demográfica. El desarrollismo capitalista dependiente exigía evidentemente una coalición política muy determinada entre el estado, la burguesía nacional y los intereses norteamericanos y extranjeros en general. . Ya desde Ávila Camacho se tenía el propósito de fortalecer a la economía y hacerla crecer, no fue sino con Miguel Alemán y en adelante que se diera: 3 1 Hansen, Roger D., La política del desarrollo mexicano, México, Siglo Veintiuno Editores, 2004, p. 7. 2 Aguilar Camín, Héctor y Lorenzo Meyer, A la sombra de la Revolución Mexicana, México, Cal y Arena, 2002, p. 192. el capitulo V de este libro analiza, dicho proceso de la página 189-235; Carmona, Fernando (et al.) El Milagro Mexicano, México, Editorial Nuestro Tiempo, 1984, pp. 52-70. Me parece propio comentar aquí dicho estudio, como lo sugiere el titulo es un examen muy detallado de lo que significó “El Milagro Mexicano”, sus antecedentes, su desarrollo y más aun sus derroteros evidentes a finales de los años sesenta y principios de los setenta; por ello la línea del libro es desmitificar ese desarrollo de México y establecer, desde el ambiente social en crisis en que fue escrito, las fallas del modelo económico y sus consecuencias sociales. Es muy rico en estadísticas y en claridad de muchos conceptos, pues establece como hay que analizar y entender las estadísticas para así desmitificar este proceso; y Pellicer de Brody, Olga (et al.) Historia de la Revolución Mexicana, Volumen 23, México, El Colegio de México, 1988, p.162-164. Aquí la autora habla sobre el proteccionismo que ejerció el Estado mexicano, benéfico para las empresas nacionales, más adelante aclara la convivencia con el sector extranjero que también se benefició en estos años. 3 Medin Tzvi, El sexenio alemanista, ideología y praxis política de Miguel Alemán, México, Ediciones Era, Colección problemas de México, 1990, p. 122. Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 17 Por otro lado en México, el gobierno se hacía empresario y dejaba a un lado su papel de moderador entre el capital y el trabajo; ahora como inversionista en la iniciativa pública, con empresas fuertes y de gran capacidad de obtención de ingresos y su presencia en amplios sectores de la producción poseía: Las industrias petroleras, de energía eléctrica, de ferrocarriles, plantas de acero y fertilizantes, fábricas de equipo ferroviario, y varios bancos, […] presencia en petroquímica, la aviación, la cinematografía, el papel de periódicoy la explotación minera.4 El presidencialismo es un sistema político que contiene varias características que se contraponen por lo general al sistema parlamentario en los regímenes contemporáneos; se caracteriza por lo siguiente: a) El presidente es titular del poder ejecutivo y es unitario, al mismo tiempo es jefe de estado y de gobierno; b) El presidente es elegido por el pueblo y no por el legislativo, tampoco es parte de éste, así como tampoco sus ministros; c) El presidente puede ser del partido de mayoría o minoría en la cámara legislativa, y d) El presidente no puede disolver el Congreso y este último no puede vetar al primero Con una presencia tal, el estado surgido de la Revolución Mexicana daba un cambio a la situación pasada y preparaba la expansión económica del país. El crecimiento posibilitó al gobierno invertir en proyectos que ayudan a su pleno establecimiento, desarrollo y propaganda. Aunado a esto y como producto de la estabilidad política del país, favorecían a la nación dos grandes procesos políticos y sociales que hicieron posible el nuevo desarrollo: el presidencialismo y el corporativismo. Del primero se rescata la utilidad de haber reunido en la persona del presidente de la Republica, la facultad de tener la última palabra en las decisiones de política, economía y hasta la cultura y ciencia. El eje central por el cual los diferentes estratos sociales encontrarían la convivencia, como árbitro entre todos los sectores. 5 El paso del caudillismo al presidencialismo debía corresponder a la eliminación o transformación del carisma del caudillo fundado en el poder de hecho, para que el poder se institucionalizara como presidencialismo En el caso mexicano el presidencialismo sustituyó al caudillismo, pues: 4 Hansen, op. cit., p. 61. 5Carpizo Jorge, El presidencialismo mexicano, México, Siglo veintiuno Editores, 1979, p 14. Christián Iván García Guillén. 18 constitucional [….] El poder presidencial devenía, de la manera más lógica y natural, un poder que derivaba directamente del cargo. Equilibrio y control de los poderes de hecho llegaban a coincidir con la función que el puesto de presidente estaba llamado a desempeñar en los términos de la constitución, esto equivale a decir que el poder presidencial se despersonalizaba con una vertiginosa rapidez, que el presidente, con tal independencia de su poder personal, sería siempre y ante cualquiera circunstancias un presidente fuerte.6 La solución corporativista en pos de la cual se canalizó el proceso de organización de las masas trabajadoras, denota de manera especifica que cobró en México la dominación política y económica de las propias masas y es un fenómeno sobre el cual descansa todo el armazón institucional del país. Por otro lado estaba el corporativismo, como la estructura en la que los diferentes sectores de la sociedad se integraban para manifestar al presidente sus necesidades, su significado se halló en que: 7 Anteriormente en el siglo XIX y en los primeros años del XX, la figura del presidente pasaba a un segundo término cuando resaltaba la figura del caudillo que tomaba la presidencia, pues resaltaba más su carisma personal o sus logros militares que el cargo constitucional y sólo era sustituido por la fuerza de las armas o su muerte 8 El partido resurgía [refiriéndose a su fundación de 1929] como un administrador de corporaciones, más que como un administrador de masas. Y sus funciones como tal consistían en cuidar que cada organización mantuviera su autonomía e aislamiento, en atender las disputas o las dificultades que se dieran entre ellas, en coordinar sus movimientos, sobre todo en época de elecciones, y mantenerlas unidas, en su aislamiento, bajo la égida del estado . En el nuevo sistema, era la figura del presidente la que importaba, pues la persona no era la misma y cambiaba cada seis años, eso sí, con el beneplácito del presidente saliente con el entrante, por medio de un mecanismo muy importante, “el partido oficial”, que ayudaba al titular del ejecutivo pues: 9 6Córdova Arnaldo, La formación del poder político en México, México, Ediciones Era, 1993, pp. 52- 55; y Carpizo. op. cit; pp. 200-203, el autor arroja semejantes reflexiones, sobre todo en la idea del presidente fuerte. 7Córdova Arnaldo, La Política de masas del Cardenismo, México, Ediciones Era, 1993, pp. 162-163. 8Córdova. La formación..., pp. 45-61, el autor hace una explicación clara sobre el fenómeno del caudillismo contrapuesto al presidencialismo que termina por institucionalizarse, capitulo cinco; Carpizo. El presidencialismo..., En el apartado “El principio de la no reelección” da ejemplo de como resaltaba la figura del presidente no por el cargo sino por la persona o sea el caudillo, poniendo de ejemplos a Santa Ana, Juárez, Lerdo de Tejada y Porfirio Díaz. 9 Córdova, La Política de masas…, .pp. 164-165; y Carpizo, El presidencialismo…, 190-197. . Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 19 A pesar de sus inicios raquíticos, había llegado a la década de los cincuenta del siglo pasado, con una fuerza para sustentar la figura del presidente, para ayudarle con las masas organizadas, pues con: Las organizaciones básicas hegemónicas de cada sector social, un espíritu corporativo que informaba toda la política mexicana y cierto lustre popular del partido, había de garantizar la definitiva institucionalización del régimen de la revolución10 Esto no quiere decir tampoco, que todo fue miel sobre hojuelas, que todo mexicano resultó beneficiado; sin lugar a dudas a pesar de la fortaleza del sistema, crecieron los grandes problemas que lo modificaron y que cruzan nuestra historia independiente en distintos matices, a saber: el clientelismo, el caciquismo, la corrupción y la dependencia económica. . Con todo ello, el presidencialismo mexicano trajo la estabilidad política que el país necesitaba para construir una industrialización que se alcanzó hasta cierto punto. Por otro lado, el corporativismo hizo posible que la mayor parte de los sectores de la sociedad se integraran a las instituciones para solucionar las demandas, evitando así los grandes problemas sociales; aunque esto no quiere decir que hayan desparecido las inconformidades y la oposición. 11 El mantenimiento de las formas institucionales es igualmente necesario, son las formas que dan presencia y legitimidad, en última instancia, a las relaciones políticas autoritarias. Las instituciones políticas y jurídicas, entre las que se encuentran aquellas que consagran las reformas sociales, muy a menudo aparecen como resultado del mismo proceso autoritario. En realidad están en la base de este último, que sin ellas no se sostendría ni un solo día. Sin embargo, el México posrevolucionario era un México de instituciones donde la convivencia social sería posible, ya que en este sentido: 12 Así entendiendo el México de la segunda mitad, no era imposible que ante la creación de nuevas instituciones y mayores alcances en obras de Solo así, es posible entender la estabilidad del sistema político, que hasta nuestros días podemos ver, con su ampliación en varios sentidos. 10 Córdova. op. cit, p. 160. 11 Carmona. op. cit, pp. 15-53: Como había apuntado antes, este es el eje central de aquel estudio, a partir de los errores de el sistema se puede definir el milagro, los apartados uno y dos, titulados “El milagro mexicano sus caracteres aparentes” y “La realidad sin mitos y sin magias”, demuestran con pruebas fehacientes documentales estas problemáticas, por lo cual puedo afirmar estas ideas, que yo someramente puse para los fines de este informe. 12 Córdova, La formación…,p. 61. Christián Iván García Guillén. 20 beneficio social, el impulso de las decisiones alcanzaran a la cultura, ya que también se sabe que: La participación del gobierno en las inversiones pueden adoptar muchas formas: formación de capital fijo (inclusive gastos en infraestructura), programas de investigación y tecnología, sistemas de educación más amplios, y así sucesivamente; todo ello amplía la base productiva de una sociedad. Todos esos elementos se han ampliado en México a partir de 1940 y ayudan a diferenciar a esta etapa de fases anteriores, de la historia mexicana caracterizada por algún crecimiento económico, pero con escaso desarrollo económico13 Al respecto, Javier Rico Moreno explica la creación y fortalecimiento de instituciones y centros, sus líneas de estudio en el quehacer historiográfico, de manera concisa; desde la Independencia hasta el año de 1965. Sin embargo, las que terminan por resolverse en el siglo XX, desde el años de 1910 a 1965, son trece, entre Institutos, sociedades y departamentos que se determinan como creadores o divulgadores de la investigación histórica. . Así la creación de centros dónde el saber se podía cultivar nacieron y también los existentes se fortalecieron. 14 13 Hansen, op. cit, p. 60. 14 Rico Moreno Javier, Pasado y futuro en la historiografía de la Revolución Mexicana, México, CONACULTA, INAH, UAM-A, 2000, pp. 143-146. En el capitulo dos, hace un análisis sobre las escuelas e Institutos dedicadas a la historia desde el siglo XIX y el XX, sus áreas de estudio e importancia; intercalada aparece una tabla con todas ellas y el año de su fundación. Así mismo, como lo asienta también este autor, en este periodo se crea el INEHRM, con la particularidad de ser un Instituto consultivo del Estado. Junto a este panorama de las instituciones educativas dedicadas a la producción historiográfica, en todas se fueron definiendo los diferentes periodos de investigación hasta abarcar toda la historia mexicana, donde el tema de Revolución quedó en el área de lo contemporáneo, o sea, la Revolución estaba presente, o por lo menos eso se podía creer a mitad del siglo. Por ello, la pregunta obligada es: ¿De qué forma seguía viva la Revolución? Para responder a esta cuestión habríamos de hablar sobre la Revolución, pero no de manera general sino en solo un aspecto, trataré lo referente a la visión ideológico-política de la Revolución manifestada por el gobierno, para poder sustentar la creación del Instituto. Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 21 Si todo el armazón en el que descansaba el sistema político mexicano era las masas populares, el presidencialismo hacía lo propio y para este tiempo la figura del presidente ya estaba consolidada. La visión de la Revolución desde el gobierno tendría que ser creída y enunciada desde el titular del ejecutivo hasta el más pequeño de los afiliados al partido, como efectivamente sucedió. Don Adolfo Ruiz Cortines, tomó posesión como presidente en diciembre de 1952, había sido promovido por el presidente saliente, licenciado don Miguel Alemán, ganando las elecciones por el Partido Revolucionario Institucional. La presidencia de: Ruiz Cortines trazaba su proyecto de gobierno. No se trataba de corregir el rumbo impuesto por su antecesor sino consolidarlo en un marco de honestidad, decencia y moralidad. 15 La colectividad en general debe coadyuvar lealmente para que los funcionarios y los empleados públicos procedan a la más absoluta honradez, y así lograr la moral administrativa y pública de México. De hecho desde el principio firmó su compromiso entre el pueblo y su mandato presidencial, afirmaba que: 16 Había ganado la partida: mudo a veces, parlanchín otras, mañoso siempre, había desorientado a sus colaboradores para proteger su propio juego, ahorcar el de los contrarios sin piedad y cerrar la partida sacando la ficha clave en el momento adecuado. […] Su sexenio cerró mal, pero el austero don Adolfo, sabía que su honesta, y eficaz administración no había pasado en falso por la historia de México contemporáneo Un balance en su sexenio parece enunciarse bajo ciertos criterios, éste fue un gobierno cuyo presidente: 17 Nacido en Veracruz, el 30 de diciembre de 1890, hombre administrador por experiencia y trabajo y no por carrera profesional en alguna escuela, ya que tuvo que abandonar los estudios siendo muy pequeño. Se trasladó a la Ciudad de México a trabajar, donde entabló relación con gente importantísima. A pesar de no tener carrera profesional, tomaba cursos sobre materias que le gustaban, por ello, fue aplicado alumno de Cosió Villegas, aprendió a dar estadística de todo, aprendió el oficio de administrar y lo hizo bien por seis años. Antes de su llegada a la silla presidencial había sido: . 15 Krauze Enrique, La presidencia Imperial, ascenso y caída del sistema político mexicano, México, Fabula- Tusquets, 2004, p. 195. 16 Los presidentes de México. Discursos políticos. (1910-1985), Tomo tres, México, Dirección General de Comunicación Social y El Colegio de México, 1988, p. 339. 17 op. cit; p. 236. Christián Iván García Guillén. 22 Oficial Mayor del Departamento del Distrito Federal, Tesorero en la campaña política del presidente Manuel Ávila Camacho y Secretario de Gobernación de Miguel Alemán18 Proyectos de infraestructura, obras de irrigación y producción de alimentos básicos; así como crecimiento de salarios reales para obreros, financiamiento de obras petroleras, creación del Instituto de la vivienda, tenía una preocupación especial por el abasto popular y tocó zonas de corrupción que no dejo de hostigar [….] participaba, ejercía y promovía la llamada religión de la patria, además de su austeridad personal. . En los años de su gobierno dio cabida a: 19 Un gobierno marcado por el desarrollo de las políticas de consolidación del modelo mexicano capitalista y estatista o de constante protección de la pequeña burguesía mexicana y del gobierno empresario, que permitió mantener una política e ideología definidas. Así mismo se reconoce en él, una capacidad de negociador a favor de la clase obrera y más aún, un árbitro entre el capital y el trabajo, además de su preocupación por elevar el nivel cultural del pueblo. 20 El presidente Ruiz Cortines políticamente formaba parte de la Revolución institucional, y en consecuencia no pensaba en la Revolución como un ciclo cerrado o en crisis, menos aún como un programa agotado o muerto. Todo lo contrario: a su juicio, la Revolución estaba tan viva y vigente como en 1910, pero necesitaba, en efecto, una vasta depuración de hombres. Nada había en el plan sexenal que significara una rectificación, hacía las políticas sociales de los años veinte y treinta, o contradijera a los fines propuestos por Alemán. Solo los hombres y las formas habían fallado. En el ejercicio del poder, Ruiz Cortines representaba la ideología de un gobierno que triunfaba y no disipaba la decadencia ni el mal rumbo, por ello, la Revolución era cosa presente, en lo personal se sentía vinculado a ella, como señala Enrique Krauze: 21 La lucha incesante y tenaz por la libertad ha sido nuestra historia nacional. Identificado por entero con las aspiraciones de mi pueblo, considero que la Al asumir el poder ejecutivo de la unión, ante la cámara de diputados argumentó este rasgo diciendo: 18 Lernes Sheinbaum Bertha y Susana Ralsky, El poder de los presidentes. Alcances y perspectivas (1910-1973), Tomo III, México, Instituto Mexicano de Estudios Políticos A.C., 1976, p. 260; Pineda Salvador, El presidente Ruiz Cortines. Itinerario de una conducta, México, EditorialGuaranía, 1952, pp. 19-21. 19Krauze. La presidencia…, pp. 202-208; Los presidentes de México…, pp. 262-267. En el plan económico llevó a cabo una reestructuración económica para controlar la inflación. 20 Lernes, op. cit, p. 275; Los presidentes de México…, pp. 337. 21Krauze. La presidencia…, p. 196. Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 23 libertad, la democracia y la revolución, son los ejes de nuestro desenvolvimiento […] Debemos siempre insistir en la invariable trayectoria de mantener incolúmenes los postulados revolucionarios que nuestra constitución y nuestras leyes garantizan: libertad de pensamiento, de prensa, trabajo, opinión pública de creencias, de critica al gobierno y libertad espiritual y económica.22 Un salto ideológico crucial y que tiene su propia historia, la conversión del hecho revolucionario continuo y un futuro siempre promisorio; que a partir de Carranza una convicción fue siendo asumida por los diversos regímenes revolucionarios hasta volver al estado mexicano no solo en heredero y el guardián, sino la vanguardia sucesiva y patriótica de esa historia en acción Así en el ejercicio del poder presidencial, Ruiz Cortines promovía una ideología claramente posrevolucionaria que marcaría definitivamente el desarrollo de los años posteriores, y nos sirve para entender como desde lo más alto de la estructura política nacional, una ideología de la Revolución estaba viva y unía la gesta revolucionaria pasada de 1910-1920, con un ideal de revolución en marcha: 23 Instituciones que ahora son lugares de producción académica en historia, consideradas incluso internacionalmente como la UNAM, con su Facultad de Filosofía y Letras y su Instituto de Investigaciones Históricas. La Escuela Nacional de Antropología e Historia y El Colegio de México, dedicados estudiar el pasado prehispánico, la colonia y la vida independiente del país en siglo XIX respectivamente. La Revolución tan cercana fundadora de un nuevo México, debía ser analizada por los especialistas en la materia. Por esto, no es extraño que el primer antecedente más directo del Instituto sea proyecto . Las instituciones políticas y jurídicas que se crearon después de la Revolución se consolidaban y rendían sus frutos, aunque había ya cierta limitación política para hacer posible ésta consolidación, en detrimento, curiosamente de los postulados antes enunciados. No era casualidad que entre este ambiente de consolidación del sistema político y de una estabilidad económica nunca vista, y más aun el balance entre estos dos ejes: la política y la economía, aunado a la ideología gubernamental, se abriera la posibilidad de la creación de una institución de carácter oficial para el sustento de la ideología revolucionaria, este centro fue el INEHRM. 22 Los presidentes de México…, p. 340. 23 Camín, A la sombra…, p. 189. Christián Iván García Guillén. 24 del archivo de la Revolución Mexicana del Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM, pues de la intelectualidad de este Instituto salió la propuesta por don José María Luján, miembro del Instituto y Rafael García Granados miembro y director del mismo, para integrar el archivo al Instituto y resguardar los documentos para que no se usen con intereses tendenciosos por adversos a la Revolución para fines externos a la verdad histórica.24 Fue el secretario de la presidencia Enrique Rodríguez Cano, el encargado de analizar la propuesta y ayudar a la creación del archivo con el auxilio de un promotor cultural muy distinguido, Salvador Azuela. Salvador Azuela era Un personaje importante, su carrera política lo había definido en transitar a varias actividades de oposición, desde dirigir la huelga en la Escuela Nacional Preparatoria, hasta ser promotor de la candidatura de José Vasconcelos a la 24 GIII-APFARC-AGN, Expediente 111/163, Memorandúm del Instituto de historia, Universidad Nacional Autónoma de México, 23 de enero de 1953, pp. 1-2; Serrano Álvarez Pablo. El INEHRM: Historia e historiografía de la Revolución Mexicana, En prensa, México, 2008, p. 1. y Actas originales del patronato del INEHRM del año de 1953, México, INEHRM, 1953, se citarán así para referirse al Patronato y después Consejo Consultivo del Instituto (APRYCINEHRM) Primera acta del 8 septiembre 1953, p. 1. Don Salvador Azuela. Promotor cultural. Detalle. Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 25 presidencia.25 Abogado de profesión por la Universidad Nacional de México (aunque la mayoría de sus materias las cursó en el Colegio de San Nicolás de Hidalgo), trabajó en el gobierno, en la misma universidad, en cargos administrativos considerables, sin embargo, los de mayor prestigio no los obtuvo, no por falta de meritos o aptitudes, sino por sus antecedente oposicionistas. Fue docente de las Facultades de Derecho y Filosofía y Letras de la UNAM de forma destacada, además de director de ésta última en dos ocasiones (1930, 1954-1958), así como colaborador columnista en los diarios Novedades y El Universal, y significativamente director del Fondo de Cultura Económica, además de ser miembro del Seminario de Cultura Mexicana y su presidente en tres ocasiones.26 Azuela no deseaba puestos burocráticos o políticos. En cambio, se mostró dispuesto a colaborar en instituciones con objetivos de promoción cultural, lo había hecho en los veintes y treinta, como estudiante preparatoriano y como joven funcionario universitario, respectivamente. A partir de los cincuentas esto pasó a ser actividad principal. Con una carrera sólida, habiendo sido consultado, aceptó asesorar al secretario de presidencia, su labor comenzó en el año de 1953 para integrar el proyecto con la colaboración de intelectuales, políticos y veteranos revolucionarios, pues 27 Una institución que se abocara al fomento cultural, la formación cívica y el acopio de las fuentes e investigaciones sobre la Revolución Mexicana en particular, lo que en última instancia serviría como sustento y cimiento al gobierno revolucionario. Por ello, del plan para un archivo en el Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM, la vocación y trabajo de Azuela lo hicieron formular la idea de. 28 25 Krauze Enrique, Caudillos culturales de la Revolución Mexicana, México, Siglo Veintiuno, SEP, Colección Cien de México, 1985. pp. 198,324-326,368. 26 Garciadiego Dantán Javier, Prólogo a: Salvador Azuela. La Revolución Mexicana. Estudios históricos, México, INEHRM, 1988, pp. xi-xxvii; Torre Villar Ernesto de la, Salvador Azuela. El hombre, el político, el escritor., México, Seminario de Cultura Mexicana, 1985, pp. 21-25. El pequeño ensayo de 70 paginas es muy interesante y refleja estas y muchas ideas más acerca del escritor; y Musacchio Humberto, Milenios de México, México, Hoja Casa Editorial, 1999, Tomo I, p. 267. Menciona también el autor algunos reconocimientos y otros trabajos; por ejemplo, ser miembro de la Academia Mexicana de la Lengua en 1964. Doctor Honoris Causa por la Universidad de Michoacán en 1952 y miembro del Seminario de Cultura Mexicana desde 1952 y su presidente en tres ocasiones. 27Garciadiego, Salvador Azuela…, p. xxvi. 28 Serrano, op. cit, p. 2. Christián Iván García Guillén. 26 Aquí como se puede ver, ya la idea primaria adquiere otro sentido, mucho más formal y más ambiciosa, y será la verdadera génesis de la institución, que no tardaría en formalizarse. De esta manera, no fue difícil que Azuela, presentando la propuesta al presidente, éste hallara beneplácito en aceptar, ya que como dije, el titular del ejecutivo de eseentonces, así como la ideología gubernamental, pensaba en la Revolución como algo vivo y más aún institucionalizado, por ello fue: El presidente Ruiz Cortines, quien encargó personalmente a Azuela la formación del Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana en el seno de la Secretaría de Gobernación. Otorgado para su puesta todo el apoyo del ejecutivo. La tarea fue emprendida de inmediato por Azuela, quien para agosto de 1953 tuvo listo el texto que serviría como decreto de creación, así como el proyecto concreto del nuevo Instituto.29 La propuesta fue hecha realidad, sin embargo debe decirse que esta insistencia no fue solamente de una vertiente. Cabe mencionar que otra propuesta, la tercera, también acerca de un Instituto de investigación sobre la Revolución Mexicana, fue realizada por el Coronel Octaviano Magaña Cerda, desde mayo de 1953, acerca de la creación de un centro cuyo nombre sería “Instituto de Investigaciones Sociológicas e históricas de la Revolución Mexicana”, que entre otros puntos importantes, planteó la autonomía de dicha institución 30 Pablo Serrano Álvarez ha sugerido tres fases del Instituto, mismos que pueden ser tomados para comprender su desarrollo y sentido, aunque su . Sin embargo, la propuesta de este antiguo militar revolucionario, no encontró la atención del presidente como sugieren los documentos sobre este asunto, ya que el proyecto de Azuela, es la que aceptó la presidencia en turno. Cumplidos los tramites y concluidas las gestiones, fue creado un Instituto y no sólo un archivo. Lo que sigue es la construcción y crecimiento de un Instituto que ha divulgado la historia de la Revolución Mexicana, con ciertas pautas y objetivos a aclarar. B. Los primeros treinta años de la mano de Azuela. 29 ibídem. 30 GIII-APFARC-AGN, Expediente 111/163, Propuesta al presidente de la Republica para la creación del Instituto de Investigaciones Sociológicas e Históricas de la Revolución Mexicana, por el coronel Octaviano Magaña Cerda., 22 de mayo de 1953, pp. 1-3. Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 27 trabajo llega hasta el año dos mil seis; en los dos años que siguen, el Instituto tuvo otras actividades importantes a resaltar. El trabajo de Serrano Álvarez es el más completo en cuanto a fuentes documentales, así mismo pretende buscar las diferentes fases por las cuales pasó el Instituto, sus características, para convertirse como lo conocemos hoy, ciertamente en un espacio para la divulgación histórica académica. El primer periodo abarca desde el año de 1953, de su creación hasta 1983, pues en este tiempo se señala el crecimiento de los primeros treinta años en los cuales estuvo bajo la dirección de su fundador, Salvador Azuela. El decreto de su fundación fue promulgado en el Diario Oficial de la Federación el 29 de agosto de 1953, cuyo texto dice: Considerando: 1.- Que la Revolución Mexicana representa un capítulo importante de nuestra historia. 2.- Que como la documentación que se refieren a la propia Revolución se encuentra dispersa y es indispensable una obra de investigación histórica que abarque todos sus aspectos, conviene crear un organismo, que se encargue de concentrar esa documentación, y de los trabajos de investigación y divulgación correspondientes. 3.-Que dicho órgano deberá estar investido de las facultades necesarias para el desempeño de su misión y dotado de los elementos económicos que se requieren para que se realice los altos fines que le competen. Decreto: Artículo 1.-Se constituye el Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, que funcionará como órgano de la Secretaría de Gobernación, para adquirir, concentrándolos en el Archivo General de la Nación, los documentos que se refieran a dicha Revolución, y planear y publicar, trabajos de investigación histórica sistemática, promoviendo las medidas adecuadas, para el mejor conocimiento de esta época. Articulo 2.-El Instituto se administrara, por un patronato integrado por vocales designados por el Ejecutivo Federal, de los cuales uno será Vocal Ejecutivo y otro fungirá como Secretario. Artículo 3.-El Patronato del Instituto formulará el reglamento interior del mismo y lo someterá al Secretario de Gobernación. El Instituto será órgano de consulta para la ejecución de cualquier trabajo o publicación histórica de carácter oficial, relacionada con la historia de la Revolución. El Vocal Ejecutivo del patronato tendrá la representación del Instituto y sus funciones en el orden administrativo, comprende la facultad de nombrar el personal necesario para el desempeño de las labores de dicho Instituto con la aprobación de Secretario de Gobernación. Christián Iván García Guillén. 28 Artículo 4.-El Instituto someterá a la aprobación de la Secretaría de Gobernación su presupuesto anual de egresos, que se considerará dentro del presupuesto de la propia Secretaría. 31 Para este momento lo “oficial” era nada menos que:”la historia oficial del encumbramiento del Estado posrevolucionario, visto por él mismo” hilando los procesos (por ejemplo la Independencia, la Reforma y la Revolución Mexicana) “en un arquetipo de homogeneidad de la nación” Como es evidente en el texto de fundación, resaltan algunas funciones particulares de este Instituto, además de sus funciones historiográficas. Primeramente se presenta como una institución dependiente de la Secretaría de Gobernación, y por otro, es un Instituto consultivo al servicio de los planes oficiales del gobierno. Lo oficial y la dependencia parecen ser algo distintivo por un momento, estas dos características le permiten distanciarse de otras instituciones de producción historiográfica; ya se puede dilucidar desde aquí, la tentativa de decir de cierta forma la historia, con términos específicos. No resulta extraño que ante la primera mirada de una investigación histórica del análisis crítico de los procesos a estudiar, en este caso la Revolución Mexicana, una característica del quehacer científico se vea truncada o por lo menos sancionada al especificar un tipo de historia: la oficial. 32 De 1920 a 1970 esta visión oficial de la historia posrevolucionaria se impuso […] sin que nadie osara desafiarla. […] Fue una ideología que con el pretexto de cimentar la unidad política, negó la diversidad territorial, la heterogeneidad social y la pluralidad cultural y política de la nación. “, 33 Se traza una línea tenue entre la libertad y la limitación de esta característica que es en términos de Marx: “la critica despiadada de todo lo existente, despiadada tanto en el sentido de no temer las consecuencias de la misma y de no temerle al conflicto con aquellos que detentan el poder”. 34 31 Diario Oficial de la Federación. 29 de agosto de 1953. pp. 1-2. 32 Florescano Mayet Enrique, “El Estado-Nación y las identidades regionales, locales y globales”, en Retos de la historia y cambios políticos, Javier Garciadiego (et al.), México, INEHRM, Colección biblioteca INEHRM, 2004, p. 18. 33 Ibídem. 34 Marx, Karl, “Carta a Arnold Ruge”, Kreuznach, septiembre de 1843, Marxists Internet Archive, en www.marxists.org/español/m-e/cartas/mo9-43.htm. 26 de Abril de 2008, traducción al castellano por Virginia Monti. http://www.marxists.org/español/m-e/cartas/mo9-43.htm� Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 29 Este tipo de características de la historia oficial fueron evidentes en el INEHRM, claro que con sus particularidades, las cuales se irán asentando en las páginas siguientes. Primeramente como institución muy cercana al gobierno en estos años, no presentará diferentes puntos de vista o tampoco sustentóel análisis histórico en teorías ajenas o no acordes con la ideología del gobierno, como lo fue el materialismo histórico en su momento; al respecto el Instituto marcó definidamente ésta problemática para llevar a cabo sus trabajos historiográficos. La censura, no fue obligatoria, más bien opcional de sus investigadores, y en el mejor de los casos, éstos estaban en total concordancia con la ideología gubernamental; todo ello de acuerdo a las formas y tecnicismos, ya que sus primeros creadores y difusores afirmaron que: Respeto, libertad y seriedad fueron las premisas de las labores de investigación, docencia y difusión, realizadas por el INEHRM. De hecho desde los primeros meses quedó establecida una línea de acción: “que el Instituto postule como norma de sus investigaciones y publicaciones el principio de la libertad, pero que no ayude o patrocine trabajos en contra de la revolución”.35 Ese centro ya tiene una historia larga, así que, como todas las instituciones y personas, ha cambiado. En la primera época fue estrictamente oficialista, muy en la línea de la versión oficial, de la historia de la Revolución Mexicana. Estoy hablando de los años todavía duros de la ideología del partido Resultará sencillo especificar donde entra la limitación y la libertad en un análisis histórico, cuando está de por medio la dirección política-ideológica de un Estado dogmático. Está línea de lo oficial y de lo censurable permite entender porque fue dependiente de la Secretaría de Gobernación y no de la Secretaría de Educación Pública, en un propósito de ayudar en la difusión de la historia oficial del gobierno, sustento ideológico de legitimación; aunado a la acción política, social y económica que el mismo gobierno revolucionario había realizado. Una mirada cincuenta años después permite que se dé una idea clara de lo que significó el Instituto en el momento de su creación, por ejemplo Jean Meyer opinó al respecto que: 35 Serrano. op. cit; p. 5; APRYCINEHRM, 27 noviembre de 1953, acuerdo ocho, p. 3. Christián Iván García Guillén. 30 institucional, 1950 y 1960. En ese momento era un poco de corte soviético: totalmente al servicio del Estado.36 Licenciado Luís Cabrera, doctor Pedro de Alba, Licenciado Antonio Díaz Soto y Gama, General Francisco L. Urquizo, Diego Arenas Guzmán y profesor Jesús Romero Flores. Quienes en su primera sesión acordaron pedir a los gobernadores, presidentes municipales y autoridades del país, para formar el archivo de la Revolución Mexicana, con toda la documentación dispersa y que era urgente recoger. No era difícil de pensarlo, dadas las condiciones en las que surgió el Instituto y en concordancia con el régimen, así de esta manera comenzó a realizar sus propósitos. El patronato del Instituto quedó conformado por siete conocedores de la Revolución; así Salvador Azuela fue Vocal Ejecutivo, y seis vocales que fueron: 37 Las sesiones del Patronato fueron cada quincena. En ella, los vocales, presentaban sus opiniones acerca de temas, proyectos de libros o alguna cuestión que tuvieran para la realización de los objetivos del Instituto. Discutidas las resoluciones eran escritas en actas, las cuáles también indicaban el día, la hora y el número de vocales reunidos; así como la ausencia de éstos en ocasiones, y también la justificación correspondiente a dicha falta. 38 Las sesiones del patronato comenzaron a trabajar en lo que se refiere a la divulgación del conocimiento de la Revolución; pero tenían su mirada en la obtención de archivos y documentos que estaban en peligro de ser comprados por Estados Unidos, como fue el caso del acervo de Genaro García; la obtención de los archivos de Gabriel Saldivar, Alfredo Gómez Rodríguez y José María Maytorena. Así como el archivo del coronel Octaviano Magaña Cerda, quien estaba dispuesto, de no ser adquirido por el 36 Sierra Sonia, “Centro de estudios, no de propaganda”, El Universal, 30 de agosto de 2003. En www.eluniversal.com.mx/hemeroteca/ 37 GIII-APFARC-AGN., Expediente 534 /88. Comunicado, Secretaria de presidencia, integración del Patronato del INEHRM y primer acuerdo del mismo. 24 septiembre de 1953. No 40655; p 1. En las actas de patronato cada vez que comienzan, se mencionan a los vocales asientes, y se comienza ratificando la acta anterior por los vocales reunidos. Por ello se dice que el 24 hubo una sesión de patronato, la primera, pero en realidad la primera fue el 8 de septiembre, el comunicado se refiere más bien al acta de ratificación que es la de segunda sesión. 38 Para comprobar esto, sólo basta ver cualquier acta del Instituto que se hallan en la biblioteca de las Revoluciones de México del INEHRM. http://www.el/� Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 31 gobierno mexicano, venderlo a alguna universidad o biblioteca de Estados Unidos39 En un año de fundación y bajo la dirección de Salvador Azuela, el Instituto logró impulsar trabajos con relación a la Revolución, por medio de investigadores entre los que se destacan a Leopoldo Zea, José Iturriaga y Genaro Fernández Mac Gregor, además de la ayuda de becarios para el apoyo administrativo y de investigación. . 40 El museo, la biblioteca, y la iconografía de la Revolución Mexicana, la grabación de entrevistas realizadas por integrantes del patronato a destacados revolucionarios. Entre ellas se recogieron las de: Luís Cabrera, Esteban Baca Calderón, José Quevedo, José María Leyva, Adolfo de la Huerta, Enrique Flores Magón, Roque González Garza, Roque Estrada, entre otros Los propósitos y proyectos de Azuela fueron amplios, debido a la necesidad de hablar del proceso revolucionario y divulgarlo, además del estudio en las diferentes ramas de investigación del proceso revolucionario Azuela quería crear: 41 Salvador Azuela logró la cooperación de destacadas personalidades intelectuales para ampliar y difundir los propósitos del INEHRM, entre ellos José C. Valadés, Arturo Arnáiz y Freg, Luís Chávez Orozco, Wigberto Jiménez Moreno, Agustín Cué Cánovas e Isidro Fabela, entre otros. . 42 Todos ellos distinguidos por tener trabajos con temas historiográficos específicos y muy variados; con cada autor se tuvo puntos de encuentro entre la línea ideológica del gobierno, ya sea que alguna vez colaboraron con él o bien querían destacar alguna serie de ideas en que autor e ideología oficial querían destacar y difundir. 43 39 APRYCINEHRM, 8 de septiembre de 1953; p. 3; GIII-APFARC-AGN, Expediente 111/163. 40 Serrano…op. cit. p. 6. 41 APRYCINEHRM, 25 de junio, 9 de julio, 27 agosto, 24 septiembre, 1 de diciembre de 1954. 42 Serrano.…op. cit. p. 7. Colaboraron con trabajos acerca de la Revolución Mexicana incrementaron las publicaciones del Instituto. 43 Así José C. Valadés fue investigador prolífico que habló sobre la Revolución en una obra extensa además de ejercer el periodismo. Luis Chávez Orozco, por su parte, fue historiador distinguido que ayudó en el estudio de la Revolución con su colaboración en la colección para la Historia Económica de México (1933-1936) además de funcionario, diplomático ante Honduras, y colaborador en varios volúmenes de catálogo de archivo histórico y diplomático de la Secretaria de Relaciones Exteriores. Wilberto Jiménez contaba con haber sido etnólogo, lingüista e historiador. Funcionario en el ámbito cultural y educativo, fue director del Museo Nacional de Historia, presidente del Seminario de Cultura Mexicana, además de investigador, entre sus estudios están: Los imperios de México antiguo de 1966. Por su parte Agustín Cué Cánovas fue abogado e historiador, profesor de historia en la Escuela Nacional de Maestros y de laNormal Superior, así como del Politécnico y de la UNAM, entre sus obras se cuentan: Christián Iván García Guillén. 32 En el año de su fundación, el INEHRM no pudo publicar ningún trabajo, pues el costo era muy alto; sin embargo, la demanda hecha por Azuela fue amplia44. En 1954 se creó el departamento editorial, dónde con ayuda de los investigadores, se hacía todo el trabajo editorial, revisión de contenido histórico, estilo y pruebas de imprenta, todo con el propósito de presentar, publicaciones pulcras, que como resultado de los objetivos de la institución, no resultaran en polémicas estériles.45 Por otro lado, el Instituto por medio de Azuela, impartió cursos sobre la Revolución Mexicana. Mismos que desde la creación del Instituto se habían pensado y que fueron vistos con beneplácito por el rector de la UNAM con quien Azuela se entrevistó. Fue así que Azuela quedó asignado para impartir los cursos en la Facultad de Filosofía y Letras; así mismo hubo cursos para la Escuela Normal Superior, pues la idea era dar los cursos era en las escuelas donde se preparaba a los maestros de historia. 46 Se llegaron a dar diecinueve cursos sobre Revolución Mexicana47 Así mismo se dio a la tarea de adquirir archivos y colecciones como: el archivo de Alfredo Robles Domínguez, parte del archivo de Salvador Toscano, la biblioteca de Vito Alessio Robles, la casa-biblioteca de Luís Cabrera en San Ángel, el archivo José María Maytorena, la biblioteca Juan Sánchez Azcona y los archivos de Francisco I. Madero. 48 Entre 1955 y 1957, se publicaron volúmenes de la serie del INEHRM, entre los cuales fueron: Historia de la Revolución Mexicana, la época precursora, Estas adquisiciones constituyen una valiosa tarea en cuestión de acopio de fuentes para la investigación histórica sobre la Revolución. Con lo que la labor de recuperar la documentación enunciada en el decreto de fundación quedó cumplida. México ante la intervención de 1861-1864 e Historia Política de México. Por su lado Isidro Fabela, un revolucionario, abogado, formó parte del Ateneo de la Juventud y fue diputado en la legislatura de 1913 que disolvió Huerta, fue diplomático al adherirse al constitucionalismo y fungió como representante diplomático de Carranza ante varios países; fue miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, entre su obras publicadas está: La Historia diplomática de la Revolución Mexicana en dos tomos de 1958-1959. Musacchio. op cit. pp. 577, 746, 934, 1489. 44 APRYCINEHRM, 23 octubre de 1953, p. 2. 45 Serrano, op. cit, p. 8. 46 APRYCINEHRM, 11 de diciembre de 1953, p. 2. 47 Serrano, op. cit, p. 5-7. 48 APRYCINEHRM, 1955-1960. Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 33 escrito por Florencio Barrera Flores, en noviembre de 1955; El teatro de género chico en la Revolución Mexicana, por Armando de María y Campos, en abril de 1957; Historia del congreso constituyente de 1916-1917, por Gabriel Ferrer, en agosto de 1957; y La política internacional de la Revolución constitucionalista, por Eduardo Luquín, en octubre de ese año. Algunos de esos ejemplares fueron obsequios a la Secretaria de presidencia como cortesía49 Otro de los proyectos de Azuela era la idea de que se pudiera entender la diversidad y heterogeneidad regional y local de la Revolución Mexicana, es decir contemplar los antecedentes, desarrollo y consecuencias hasta la constitución de 1917; así determinado los orígenes, los personajes, las batallas y los hechos de cada estado o provincia contrastarlo con la historia nacional y oficial de la Revolución Mexicana; con ayuda de diferentes investigadores de la república logró conformar las: “Breves Historias Locales de la Revolución Mexicana”, que le llevó cerca de veintisiete años, eso si con una producción considerable. . En la previsión de no caer en polémica, evidentemente hay una línea de concordancia entre el discurso institucional y la historia oficial, esto es porque la polémica, muchas veces deriva en el cuestionamiento de mitos y héroes; aquellos bien elaborados, en tanto polémicos, pueden ser analíticos y en camino de convertirse en fuente obligada de consulta sobre algún tema; para el INEHRM había mayor preocupación más por la recopilación que por la edición de investigaciones. Por ello, el Patronato tenía como objetivo publicar libros documentales, o sea, recopilaciones de documentos importantes para la interpretación de la Revolución Mexicana, o dicho de otra forma, fuentes primarias. 50 Por espacio de diez años se mantuvo el Instituto creando nuevos planes y editando libros sobre las problemáticas de la Revolución; sin embargo, aunque el proyecto era original, también adolecía del rigor profesional que ya caracterizaba a la historia escrita en el campo académico, en obras sobre 49 GIII- APFARC-AGN, Expediente 704/499, Comunicados de Secretaria de Presidencia números: 000725 (1955), 000331, 000729, 001313 (1957). 50 Serrano, op cit, p. 9-10. Christián Iván García Guillén. 34 Revolución Mexicana muy polémicas durante estos años hechas por historiadores Académicos51 Un medio del gobierno federal para estrechar la comunicación con la sociedad y fortalecer la integración nacional a través del idioma, la cultura, las tradiciones y la creación artística. […] el objetivo se ha ampliando a ámbitos como la orientación de los servicios públicos y las campañas de interés social y cultural, entre otros , y no solo por gente vinculada con la gesta revolucionaria u otros críticos. Fue entre 1970 y 1973 que el Instituto colaboró en diversos programas como La Hora Nacional, pues este programa radiofónico, cuyo objetivo era desde su origen: 52 El primero fue el trabajo de Armando Fuentes Ramírez, Madero, caudillo civil de la Revolución Mexicana, está obra recibió muchas críticas del patronato por su primera bibliografía, la cual era muy corta; con el fin que el autor hiciera la inclusión de nueva bibliografía, misma que Fuentes hizo para que su trabajo viera la luz en 1973 con auspicio de la Secretaría de Hacienda. . Con esta colaboración, importante para cumplir la divulgación del conocimiento sobre la Revolución, el INEHRM comenzó la divulgación por otros medios además de los impresos, y así lo fue haciendo conforme a la masificación de las nuevas tecnologías. En este momento el patronato trabajaba en obras que dejaran constancia del trabajo y la reflexión sobre la revolución, ahondaron los aniversarios de natalicios, entre ellos el de Francisco I. Madero, y el de Emiliano Zapata entre los cuales se quisieron presentar tres obras, dos sobre el coahuilense y una sobre el caudillo suriano. 53 51 Álvaro Matute Aguirre. Aproximaciones a la historiografía de la Revolución Mexicana. México. UNAM-IIH. 2003; p. 33. Pero el libro no contiene datos nuevos, su objetivo es arremeter contra la leyenda negra de Madero como “enajenado e indeciso” y dedicado a difundir una imagen mejor comprendida de un Madero dedicado a luchar contra dictadura. Cronológicamente llega hasta la firma de los Acuerdos de Ciudad Juárez y no 52 www.rtc.gob.mx/horanacional/brevhist.php. Visitada el 16 de julio de 2008, a las 13.30 horas; Serrano, op cit, p. 14. 53 APRYCINEHRM 5 de mayo, 10 mayo y 21 de junio de 1973. http://www.rtc.gob.mx/horanacional/brevhist.php� Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 35 entra en la explicación después de esta fecha, ni las problemáticas que a partir de esta fecha tuvo y que provocaron su caída y asesinato.54 Fue dentro del año setenta y tres queel libro del profesor Jesús Sotelo Inclán, se comenzó por un contrato, cuyo título y tema sería: La historia de la Revolución Mexicana en Morelos, 55 Otras colaboraciones fueron en cinematografía, telesistema mexicano, así como películas dirigidas por Jesús Chano Urueta para el banco cinematográfico. Por esta colaboración, otros logros y la administración de Azuela, se designaron recursos adicionales para apoyar las publicaciones y para intensificar las labores del Instituto. pero que no sería publicado, ya que dicha investigación se extendió hasta la época colonial y termino siendo parte del libro conocido de este autor: Raíz y razón de Zapata, libro que había de ser importantísimo en la historiografía de la Revolución Mexicana bajo el sello editorial del la Comisión Federal de Electricidad en ese año. 56 Así mismo la colaboración del INEHRM y el Seminario de Cultura Mexicana en tareas de divulgación y fomento cívico-cultural. Ya que el segundo tenía como fin estimular la producción científica, filosófica y artística; difundir la cultura en todas sus manifestaciones nacionales y universales, mantener intercambio intelectual con los Estados y con Institutos e individuos del extranjero interesados en la cultura mexicana. Organizar trabajos de investigación y análisis en forma de seminario ya sea en colaboración unánime de los miembros o por núcleos afines a los mismos. Por último sirvió de órgano de consulta de la Secretaría de Educación Pública, y colaborar con otras dependencias gubernamentales en actividades culturales.57 Otros libros que muestran la dirección que tenían las publicaciones en contenidos son los siguientes. La dignidad humana y las causas morales de la Revolución Mexicana de Ángeles Mendieta, fue una obra que trataba de explicar aquellos aspectos amorales que negaron derechos de una sociedad e hicieron posible la revolución como fueron: la bestialidad, la esclavitud y la 54 Fuentes Aguirre Armando, Madero, caudillo civil de la Revolución Mexicana, México, INEHRM, 1973, Colección biblioteca INEHRM núm. 62, p. 15-16. 55 APRYCINEHRM, 21 junio de 1973. 56 Serrano, op. cit; p. 14. 57 Musacchio, op. cit., p. 2796; APRYCINEHRM, 1971-1973. Christián Iván García Guillén. 36 miseria moral, y no solamente una serie de condiciones sociales ya existentes desde antaño, estas causas morales fueron las que despertaron en los oprimidos la decisión de luchar, nos refiere la autora.58 Dentro de la línea oficial, Diego Arenas Guzmán presentó: El régimen del general Huerta en proyección histórica; después de una serie de opiniones dedicadas al descredito de dicho régimen, finaliza con un objetivo político más que histórico, ya que afirma que la proyección histórica del régimen de Huerta debe de ser aprovechada para no reincidir en errores y debilidades que provocaron su nacimiento; aún más, niega su aparición y desarrollo como parte de la multiplicidad social de la nación y de la estratificación de los grupos de esta última, descalificándolo como un accidente y no factor causal, en la idea de un desarrollo social que presenta la historia oficial como ya se ha mencionado, cuya prueba era la Constitución de 1917 59 Otros textos, dedicados a personajes como Zapata no eran investigaciones muy elaboradas y acabadas en fuentes de archivo, eran en síntesis, antologías de otras obras, como es el caso de las obras: Historia de la revolución zapatista bajo el régimen de Huerta y Zapata (selección de textos), del primero, se hacía hincapié en la lucha zapatista contra Huerta por ser éste último, anticonstitucional y contrarrevolucionario, el pasaje de la lucha zapatista contra Huerta no rompe con la idea de la historia oficial pues refuerza la idea de la defensa de la constitucionalidad y la revolución, pero no ahonda en las razones fundamentales del zapatismo. El segundo es, en tanto recopilación, una serie de textos que destacan la vida del caudillo, donde se destaca su heroicidad y se concilia así con la idea de revolución oficial del gobierno priista. . 60 Otros textos fueron obras con temática variada, desde los corridos hasta la presencia del constitucionalismo, que planeaban mostrar algún aspecto de la Revolución que encajara en la revolución oficial del gobierno. A la par de 58 Mendieta Alatorre Ángeles, la dignidad humana y las causas morales de la Revolución Mexicana, México, INEHRM, 1974, p.15-17. 59 Arenas Guzmán Diego, El régimen del general Huerta en proyección histórica, México, INEHRM, 1970, p. 208-209. 60 Sánchez Lamego Miguel Ángel, Historia de la revolución zapatista bajo el régimen de Huerta, México, INEHRM, 1979, p. 12-15; Aguilar José Ángel, Zapata. (selección de textos) México, INEHRM, 1980. Coraza y saeta revolucionaria: catalogación del fondo Manuel González Ramírez del INEHRM. 37 estas publicaciones, en la historia de la historiografía de la Revolución Mexicana ya existían obras mucho más elaboradas que trataban de forma más exhaustiva otros aspectos de la revolución; del tal manera que en las publicaciones del Instituto no estaban del todo los aciertos del INEHRM, eso más bien le correspondía a su labor de rescate de fondos documentales y el crecimiento de su biblioteca. Con ello a treinta años de la fundación y con un trabajo considerable de su vocal ejecutivo y sus colaboradores, un balance de los primeros treinta años parece enunciarse de la siguiente manera: En el medio historiográfico mexicano, el INEHRM era considerado como un brazo ideológico en la esfera cívica, al tiempo que se reconocían, sus aportaciones en el rescate de documentos y de la visión histórica de los protagonistas revolucionarios de todo el país. Está bien ganada posición se debía en buena medida a la incansable labor de su vocal ejecutivo. 61 Humanista ante todo, intelectual claro y honesto, promotor cultural por convicción y acción, gestor y administrador ordenado y serio, periodista puntual y difusor, profesor con trayectoria y trascendencia, historiador inquieto y curioso, lector y escritor insaciable y sencillo, formador y emisor del conocimiento histórico contemporáneo. Misma que lamentablemente llego a su fin, cuando el siete de septiembre de 1983 a los ochenta y un años falleció Salvador Azuela, su desaparición causó tristeza. La labor profesional y humana sólida de Azuela fue valorada por Pablo Serrano como: 62 Bien sabida es la situación de los años 80, pues el “Milagro Mexicano” pasó a la historia, la crisis y los diferentes problemas en varios ámbitos del acontecer social no fueron pocos. De esta época a la fecha corrió como un nuevo fantasma desde el país del norte y de Inglaterra, el sistema económico denominado Neoliberalismo. Con ello la perspectiva en política y economía cambiaba radicalmente a los regímenes a donde llegaba y consolidaba a las potencias del mundo. Caía la Unión Soviética y el socialismo al final de la década y con ella Estados Unidos se levantó como fuerza hegemónica, la C. La consolidación institucional, 1983-1998. 61 Serrano…op. cit; p. 15. 62 Ibíd.; p. 16. Christián Iván García Guillén. 38 guerra fría llegó a su fin y la nueva hegemonía del mundo se tornaba a ese nuevo modelo, pues: El neoliberalismo no es, como pretenden sus ideólogos, una forma de organización económica, que privilegia el libre mercado y lo impone como supremo organizador social, sino una especifica redistribución, del poder político tanto en el ámbito nacional como internacional. Frente a la condensación de fuerzas que se dio en el estado social, (en muchos de los países industrializados), los grandes grupos económicos, actuaron para reducir el sistema de controles al capital y regulaciones
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