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1 FACULTAD DE MEDICINA DIVISIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO HOSPITAL GENERAL DE MEXICO “DR. EDUARDO LICEAGA” ETIOLOGIA Y SENSIBILIDAD ANTIMICROBIANA DE LAS INFECCIONES NOSOCOMIALES DE VIAS URINARIAS DIAGNOSTICADAS POR UROCULTIVO EN PACIENTES MENORES DE 18 AÑOS DE ENERO A AGOSTO DE 2014 EN LA UNIDAD 505 DE PEDIATRIA HOSPITAL GENERAL DE MEXICO “DR. EDUARDO LICEAGA” T E S I S PARA OBTENER EL DIPLOMA DE ESPECIALIDAD EN: PEDIÁTRIA PRESENTA: DRA. VICTORIA EUGENIA MONTAÑO LUNA TUTOR: DRA. MARIA DEL CARMEN ESPINOSA SOTERO MEXICO DF 20 DE MARZO DEL 2015 UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. 2 DR. LUIS PAULINO ISLAS DOMINGUEZ JEFE DEL SERVICIO DE PEDIATRIA HOSPITAL GENERAL DE MEXICO DR EDUARDO LICEAGA O.D. DR. LUIS PAULINO ISLAS DOMINGUEZ TITULAR DEL CURSO DE PEDIATRIA HOSPITAL GENERAL DE MEXICO DR EDUARDO LICEAGA O.D. DRA. MARIA DEL CARMEN ESPINOSA SOTERO TUTOR DE TESIS, MEDICO ADSCRITO AL SERVICIO DE INFECTOLOGIA PEDIATRIA EN HOSPITAL GENERAL DE MEXICO DR EDUARDO LICEAGA O.D. DRA. MARIA TERESA CHAVARRIA JIMENEZ JEFE DE ENSEÑANZA DE LA UNIDAD DE PEDIATRÍA HOSPITAL GENERAL DE MEXICO DR EDUARDO LICEAGA O.D. 3 DEDICATORIA A mi madre, por su ejemplo de fortaleza, perseverancia y responsabilidad, por todo lo que soy, por estar siempre a mi lado. A mi padre, cuyo recuerdo me motiva a seguir adelante no importando lo difícil del camino. A los niños, mi inspiración para ser una mejor Pediatra y persona; quienes me enseñan día a día a nunca dejar de luchar. A mi novio, Rafael Bernal Méndez por su amor y apoyo incondicional. A mi tutora, la Dra Carmen Espinosa Sotero por su tiempo, confianza y enseñanzas; por su ejemplo de profesionalismo y excelencia. GRACIAS 4 INDICE INTRODUCCION…………………………………………………………………5-6 MARCO TEORICO……………………………………………………………… 6 Definición………………………………………………………………...7. Epidemiología……………………………………………………………8 Factores de riesgo……………………………………………………….8-9 Etiología…………………………………………………………………..9 …………………………………………………………………..10 Fisiopatología……………………………………………………………11 Cuadro clínico……………………………………………………………11-12 Diagnóstico………………………………………………………………12-13 Tratamiento………………………………………………………………14-15 Complicaciones………………………………………………………….15 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA…………………………………………..16 JUSTIFICACION…………………………………………………………………..16 HIPOTESIS…………………………………………………………………………17 VARIABLES…………………………………………………………………………17 MATERIALES Y METODOS………………………………………………………18-21 RESULTADOS Y ANALISIS……………………………………………………….21-34 DISCUSION…………………………………………………………………………..34 REFERENCIAS………………………………………………………………………35-38 5 INTRODUCCION En nuestro país, como en otros en vías de desarrollo, las enfermedades infecciosas constituyen uno de los principales problemas de salud pública, y en este sentido las infecciones del tracto urinario, se encuentran dentro de las causas más comunes, tanto en prevalencia como en incidencia, ya sea adquiridas en la comunidad o en instituciones hospitalarias.1 Las infecciones nosocomiales y, dentro de estas, las infecciones del tracto urinario constituyen un importante problemas hospitalario, especialmente en las unidades de cuidados intensivos pediátricos, y causan un aumento de morbilidad y mortalidad, prolongación de la estancia e incremento del gasto sanitario. Su vigilancia epidemiológica es una medida primordial para su conocimiento y para establecer programas de prevención y control. La infección del tracto urinario supone la primera causa de infección nosocomial en pacientes adultos hospitalizados y en los críticamente enfermos. Sin embargo, en la unidad de cuidados intensivos pediátricos, la epidemiología de las infecciones nosocomiales difiere, presentándose esta como la segunda o tercera causa más frecuente. Su incidencia oscila en el 5-15% de las infecciones nosocomiales. Su aparición está directamente relacionada con una serie de factores de riesgo cuya identificación y valoración permiten establecer programas de control más eficaces. Entre todos los estudiados, la sonda vesical es el factor más importante. Se estima que un 5-25% de los pacientes que precisan sonda vesical durante su hospitalización, adquieren una infección de orina nosocomial.2 Otros factores de riesgo en adultos son la duración del sondaje, sexo femenino, cuidado inadecuado del catéter vesical o falta de cobertura antibiótica. Las infecciones de vías urinarias asociadas a catéteres son el tipo más común de infecciones nosocomiales, causantes de más de un millón de casos anualmente o del 6 40% de todas las infecciones nosocomiales; además de constituir el 80% de todas las infecciones de vías urinarias intrahospitalarias. A pesar de su importancia, hay pocos estudios de infecciones del tracto urinario intrahospitalarias y la epidemiología de esta población no está bien definida. El objetivo principal de este estudio es determinar la incidencia de las infecciones de vías urinarias intrahospitalarias así como la etiología de las mismas y la sensibilidad antimicrobiana. 3 7 MARCO TEORICO DEFINICION Se considera nosocomial, toda infección que no está presente en el momento del ingreso y aparece a partir de las 48 horas de haber sido ingresado el paciente. La infección de vías urinarias se define como la colonización, invasión y multiplicación en la vía urinaria de microorganismos patógenos. Las infecciones suelen definirse según criterios microbiológicos: cultivo cuantitativo de orina con resultados positivos (≥ 105 microorganismos/ml, con aislamiento de 2 especies microbianas, como máximo).4 EPIDEMIOLOGIA Las infecciones de vías urinarias en pacientes pediátricos constituyen la segunda o tercera causa de infecciones intrahospitalarias, causando menor morbilidad que otro tipo de infecciones nosocomiales, sin embargo pueden causar bacteremia e incluso la muerte. Las bacteremias, infecciones de vías urinarias intrahospitalarias y las neumonías son las infecciones intrahospitalarias más comunes; las cuáles se asocian con un aumento en la estancia hospitalaria, morbi y mortalidad. La incidencia mundial de infecciones nosocomiales en la población pediátrica es de 2.5%, con un rango que va del 1% en unidades hospitalarias pediátricas al 23.6% específicamente en unidades de cuidados intensivos pediátricos. Las infecciones de vías urinarias nosocomiales son responsables del 35 – 45% de las infecciones adquiridas en hospitales generales en Latinoamerica; sin embargo esta constituye un grupo mucho menor en la población pediátrica hospitalizada, aproximadamente el 10% en los estudios hechos por Lohr y Davies en población pediátrica. Esta diferencia puede explicarse, en parte, por la frecuencia en la cateterización del tracto urinario en estas poblaciones. La prevalencia de infección nosocomial del tracto urinario varia según el servicio pediátrico, siendo mayor en las unidades de quemados (hasta 28 veces más en comparación con las salas generales), 8 seguidas por lasunidades de cuidados intensivos neonatales y pediátricos, salas de cirugía neonatal, neurología, urología, hematooncología y menor en niños admitidos en salas generales. Esto se relaciona con la proporción de pacientes con catéter vesical en las diferentes salas, como constató Davies al encontrar que el 52% de los pacientes admitidos en la unidad pediátrica de cuidados intensivos, fueron cateterizados, en comparación con sólo el 13% de los admitidos en el servicio de medicina interna. La mayoría de los hospitales en México, no cuenta con un programa de vigilancia y control de infecciones nosocomiales (IN) y la información epidemiológica existente en México proviene, casi exclusivamente, de instituciones de tercer nivel, cuyas características son muy diferentes a las de la mayoría de los hospitales mexicanos, tanto en el tipo de pacientes demandantes de atención médica como en la disponibilidad de recursos. En consecuencia, en hospitales generales esta información sólo se conoce parcialmente, a través de informes aislados de programas de vigilancia de algunas instituciones, o bien de brotes epidémicos de algunos microrganismos La mortalidad global atribuida a las infecciones de vías urinarias nosocomiales en pediatría se estima en un 11%.5 FACTORES DE RIESGO Existen factores de riesgo para el desarrollo de infecciones de vías urinarias intrahospitalarias; entre los cuales están los factores del huésped y factores extrínsecos. Factores del huésped: Género: La incidencia de la bacteriuria se incrementa dos veces por cada década de edad para la mujer. El hombre presenta con mayor frecuencia bacteremia secundaria. Edad: Prematurez Enfermedad subyacente. Hay una mayor incidencia en pacientes diabéticos, renales crónicos, con malformaciones en las vías urinarias, con vejigas neurogénicas, con enfermedades hematológicas, pues todas estas patologías son predisponentes. 9 Colonización del meato: Una alta colonización uretral parece ser indicativa de una susceptibilidad aumentada al desarrollo de bacteriuria, generalmente por gram negativos y enterococos. Otras: Traumatismo múltiple, transplantes, etc. Anormalidades extrínsecas como los catéteres urinarios; son importantes factores de riesgo para el desarrollo de infecciones de vías urinarias intrahospitalarias siendo en un 75-90% la causa de éstas, mientras que el 10% es secundario a manipulación quirúrgica o instrumental de la vía urinaria inferior. El resto representan bacteriurias secundarias a bacteremias producidas por microorganismos nosocomiales y se presentan con mayor frecuencia en menores de 3 meses. La incidencia de bacteriuria depende del tipo y duración de la cateterización. Después de una cateterización de corto tiempo (72 horas) es de 1 – 2%, y de 3 – 10% en pacientes con catéteres permanentes (mayor de 4 días). El catéter vesical es de gran ayuda diagnóstica y monitorización; es esencial para aliviar la obstrucción al flujo urinario y evitar la lesión renal, por lo cual, su uso va en aumento, estimándose que más del 10% de todos los pacientes pediátricos ingresados en una unidad hospitalaria son cateterizados en algún momento de su evolución y la tercera parte son por más de 24 horas. El catéter urinario más frecuentemente utilizado es la sonda Foley la cual consiste en un sistema estéril cerrado compuesto por un tubo insertado a través de la uretra y sostenido por un globo inflamable la cual permite el drenaje de la vejiga. A pesar de que estos dispositivos fueron diseñados para una estancia corta en el paciente, actualmente se utilizan por largos períodos de tiempo. Debido al uso frecuente y a veces innecesario de estos catéteres durante hospitalización (21-50% de los pacientes), muchos pacientes son puestos en riesgo de complicaciones con el uso de estos dispositivos. Un estudio de 1540 pacientes determinó que la duración de hospitalización y duración de la terapia antimicrobiana fueron tres veces mayores en pacientes cateterizados que en pacientes no cateterizados.7 La remoción temprana del catéter vesical, el uso de antibióticos sistémicos en pacientes cateterizados, la disminución de la hospitalización y el mejoramiento de las medidas de 10 control de infecciones, producen un descenso en la frecuencia de bacteriuria asociada a catéteres del 20 al 25%, al 10%. Las complicaciones de la bacteriuria asociada a catéteres se presentan en el 1,3 % de los pacientes. Estas incluyen cistitis, pielonefritis, bacteremia, urosepsis, reflujo vesicoureteral, urolitiasis, abscesos periureterales, divertículos, fístulas. La complicación más notable asociada a este tipo de catéteres es el desarrollo de infecciones de vías urinarias nosocomiales conocida como infecciones de vías urinarias asociadas a catéteres. 8 ETIOLOGIA Las bacterias causantes provienen de la flora intestinal (Enterobacterias), ya sea normal (Escherichia coli) o contraída en el hospital (Klebsiella multirresistente).4 En general E. coli es el uropatógeno más común, responsable de aproximadamente el 80% de las infecciones de vías urinarias.9 Diferentes especies de Proteus, Klebsiella Pneumoniae, Pseudomonas aeruginosa, Citrobacter, Serratia marcenses, Enterobacter y con menor frecuencia otras enterobacterias constituyen los gram negativos causales más frecuentes de infecciones nosocomiales del tracto urinario. Gran parte de estas infecciones en niños son causadas por Gram positivos principalmente Entercoccus sp. Y Staphylococcus sp. Asociándose con el sondeo S. epidermidis. Algunos uropatógenos diferentes a E.coli ocurren con gran frecuencia en pacientes con infecciones de vías urinarias, sin embargo se conoce muy poco acerca de asociaciones entre uropatógenos y características del huésped.10 Infecciones de vías urinarias causadas por uropatógenos diferentes a E.coli es considerablemente más común en pacientes con infecciones complicadas. Mientras la epidemiología y mecanismos de patogenicidad de E.coli han sido extensamente estudiados, poco se conoce acerca de asociaciones entres otros uropatógenos y los factores de riesgo para su adquisición. 11 Los distintos uropatógenos difieren en términos de factores de virulencia y mecanismos de patogenicidad que les permiten colonizar e infectar el tracto urinario. Por ejemplo, Proteus mirabilis el cuál libera amonio el cuál aumenta el PH urinario, lo cual favorece la precipitación de sales urinarias en forma de litos renales y en vejiga lo cuál frecuentemente funciona como nido para infección por este germen. Otro mecanismo relevante de colonización del tracto urinario es la formación de biofilm en el caso de Pseudomonas aeruginosa 11 En las infecciones de vías urinarias nosocomiales se encuentran frecuentemente implicados microorganismos seleccionados por sus mecanismos de resistencia antibiótica como enterococos resistentes a Vancomicina y Klebsiella pneumoniae productor de beta lactamasa de espectro extendido. El surgimiento de resistencia antibiótica en el hospital ha sido frecuentemente asociada con infecciones de vías urinarias. Sin embargo comparativamente se conoce muy poco sobre las asociaciones entre especies de uropatógenos específicos y las poblaciones de pacientes con factores de riesgo para desarrollar infecciones del tracto urinario. En el estudio citado se encontró que Pseudomonas aeruginosa se encuentra fuertemente asociada con características particulares del huésped como género masculino, terapia antibióticas reciente, procedimientos previos del tracto urinario y vejiga neurogénica.12 FISIOPATOLOGIA Normalmente se poseen mecanismos de defensa efectivos para prevenir la colonización e infección urinaria, dentro de los cuales están la flora periuretral normal, mecanismos de defensa de la vejiga y factores urinarios como la acidez, osmolaridad, inmunoglobulinas y el flujo urinario;sin embargo muchos de estos mecanismos de defensa son eliminados en presencia de un catéter urinario. El catéter urinario y la presencia de factores de riesgo predisponen a la colonización urogenital con flora entérica, bacterias patógenas en el área periuretral, o microorganismos procedentes del ambiente del hospital. Apesar de los mecanismos innatos del huésped contra infecciones de vías urinarias, existen microorganismos específicos capaces de colonizar y persistir en este ambiente. 12 Similar a otros patógenos en mucosas, los uropatógenos emplean estrategias específicas para infectar el tracto urinario, incluyendo colonización de un catéter urinario o células epiteliales, evaden defensas del huésped replicándose y dañando estas mismas células. La inserción de un cuerpo extraño como lo son los catéteres urinarios permanentes aumenta la susceptibilidad de un paciente a infecciones de vías urinarias, ya que estos sirven como sitio de inicio de infección introduciendo microorganismos oportunistas en el tracto urinario. La mayoría de estos uropatógenos son contaminantes fecales o residentes de la piel de la microflora nativa o transitoria del pacientes que coloniza el área periuretral. Una vez en el área periuretral, las bacterias llegan a la vejiga urinaria por medio de dos mecanismos: 1. Directamente desde la uretra en el momento de colocar el catéter. Por el espacio entre la pared, la uretra y la superficie externa del catéter (vía más frecuente en mujeres) 2. Por migración de las bacterias a través de la luz del catéter después de que éste ha sido contaminado. Dentro de la patogénesis de la infección urinaria se reconoce a la adherencia como un paso previo al establecimiento de la infección, sirviendo el catéter, en su luz y en sus paredes externas como soporte físico que facilita la proliferación bacteriana. Se describen factores de virulencia en las diferentes bacterias, por ejemplo, en E. Coli; estos sugieren que ciertas cepas denominadas uropatógenas están en capacidad de invadir y ascender por el tracto urinario. El antígeno capsular más comúnmente asociado a infecciones de vías urinarias es el K1, ya que su presencia reduce la opsonización y la fagocitosis. Hay una estrecha relación entre la expresión de antígenos O de los serotipos y el desarrollo de infección de vías urinarias en niños. Las fimbrias o pili son adhesinas responsables de la adherencia; las tipo uno le permiten adherirse a catéteres y a células uroepiteliales y uretrales, ya que son reconocidos por receptores de manosa de las mismas y las P fimbrias se consideran responsables de la invasión. Una vez adheridas, su capacidad de infectar el tracto urinario se incrementa por otros factores de virulencia como la presencia de hemolisinas, aerobactin, ureasa y lipopolisacárido A el cuál desencadena respuesta inflamatoria sistémica además de inhibir el peristaltismo ureteral normal.13 13 El mecanismo más común de entrada a vejiga en infecciones de vías urinarias asociadas a catéter es extraluminal en un 66%, en donde microorganismos ascienden desde el meato uretral por a través del catéter uretral. La presencia de catéteres urinarios permanentes en el tracto urinario interfiere con los mecanismos de defensa del huésped dando como resultado sobre distensión de la vejiga urinaria y un vaciamiento incompleto dejando orina residual para el crecimiento microbiano. 14 CUADRO CLINICO Se sospecha una infección de vías urinarias intrahospitalaria en pacientes hospitalizados con los siguientes signos y síntomas: Fiebre mayor de 38º C más taquicardia o taquipnea más cultivo de orina positivo 48 horas posterior a hospitalización. Es difícil de establecer, los criterios clínicos están sujetos a varias interpretaciones y los síntomas son mínimos, puesto que muchas veces se presenta en pacientes inmunodeprimidos, con ausencia de fiebre, sin dolor suprapúbico o en flancos, además, el catéter vesical hace que la disuria y la urgencia miccional pasen desapercibidas además de que la piuria en pacientes cateterizados, no es específica, y por sí sola no confirma el diagnóstico de infección del tracto urinario, No existe ninguna manifestación clínica específica de sepsis urinaria y la gravedad y sintomatología son muy variables siendo algunas veces un cuadro clínico inespecífico, otras veces el paciente desarrolla choque y la sintomatología urinaria pasa inadvertida, en el caso más característico el paciente con catéter urinario, o tras una manipulación urológica desarrolla súbitamente un cuadro de fiebre, escalofríos, náuseas vómito, hipotensión y estupor. Por esto el diagnóstico requiere una alta sospecha y correlación entre clínica y laboratorio, relacionando signos y síntomas del paciente con urocultivo, siempre descartando otros focos potenciales de infección.15 14 DIAGNOSTICO Las infecciones de vías urinarias continúan siendo una causa serie de infecciones bacterianas en niños y pueden producir enfermedad renal crónica. Por eso, el diagnóstico temprano e inicio de tratamiento es de suma importancia.16 Cuando existe sospecha de infección nosocomial urinaria, se debe realizar: examen general de orina, tinción de Gram de orina, urocultivo con recuento de colonias y exámenes auxiliares como biometría hemática, que podría mostrar leucocitosis, neutrofilia y/o bandemia. La orina es generalmente estéril, sin embargo cualquier bacteria presente puede ser considerada una infección. Frecuentemente el cultivo desarrollará bacterias que se consideran contaminación ya sea provenientes de la piel o del área genital. Sin embargo la mayoría de investigadores definen una infección de vías urinarias con la presencia de microorganismos en orina combinado con signos y síntomas de infección de vías urinarias. El cultivo de orina continúa siendo el estándar de oro para el diagnóstico de infección de vías urinarias y la prueba concluyente. A diferencia de una infección de vías urinarias adquirida en la comunidad en donde según los criterios de Kass en donde se define un urocultivo positivo como el hallazgo de por lo menor 100,000 UC/ml de un mismo patógeno, cuando una infección de vías urinarias se establece como hospitalaria, un recuento superior a 100,000 UFC debe ser considerado y correlacionado con el microorganismo aislado, el estado clínico del paciente, el método de recolección de la muestra y otros datos como leucocitosis y bandemia. La piuria está presenta en casi todos los casos de infección de vías urinarias sintomática. Se define como piuria la presencia de 10 o más leucocitos por campo en orina centrifugada. Este hallazgo se asocia con recuentos de por lo menos 100,000 UFC/ml en 30-50% de los casos. Con respecto a la bacteriuria los frotis de orina no centrifugada han demostrado ser de mayor precisión con respecto a la predicción de urocultivos positivos. La valoración de nitritos urinarios es una forma rápida y eficaz para detectar la presencia de bacterias en el tracto urinario. Un recuento mayor o igual a 100,000 UFC se relaciona en un 44% con la presencia de nitritos positivos. 15 Los nitritos son producidos por la acción de la enzima bacteriana nitrato reductasa sobre los nitratos provenientes de la dita, pudiéndose producir falsos negativos cuando el germen implicado carece de enzima sobretodo Staphylococcus ssp., Entercoccus ssp., Pseudomonas ssp. El uroanálisis si bien no es el estándar de oro para el diagnóstico de infección de vías urinarias, constituye una herramienta útil, práctica y rápida que correlacionado con el estado clínico del paciente permite establecer un tratamiento antibiótico empírico con diagnóstico de sospecha en espera del resultado de urocultivo el cual puede demorar de 24 a 72 horas. La Academia Americana de Pediatría estable que si se sospecha infección de vías urinarias en un paciente serecomienda iniciar tratamiento empírico y obtener un cultivo de orina por punción suprapúbica (estándar de oro) o mediante cateterización urinaria. TRATAMIENTO Cuando la infección de vías urinarias está relacionada con el uso de sondas, con en todas las infecciones asociadas a un dispositivo; el tratamiento definitivo consiste en el retiro del dispositivo en este caso la sonda urinaria. El tratamiento antibiótico debe estar dirigido de acuerdo a la susceptibilidad del microorganismo aislado. Pacientes con sonda vesical y bacteriuria asintomática peristente: El tratamiento antimicrobiano no está recomendado para pacientes con catéter vesical permanente y bacteriuria asintomática pues este solo suprimiría de forma transitoria la bacteriuria y no tiene efectos a largo plazo para erradicar la colonización bacteriana e induce la selección de cepas multirresistentes a antibióticos. Pacientes con sonda vesical y bacteriuria asintomática persistente: En la mayoría de pacientes esta se resuelve espontáneamente sin ninguna complicación clínica al retirar el catéter vesical; sin embargo aquellos pacientes que persisten con bacteriuria después de retirado la sonda vesical tienen un mayor riesgo de presentar infección urinaria en los próximos 30 días por lo tanto se recomiendan tratar estas bacteriurias persistentes en 16 pacientes recientemente cateterizados con cursos cortos (3 a 5 días) de antimicrobianos a los que sea sensible el microorganismo aislado. Pacientes con sonda vesical con bacteriuria sintomática: Son los pacientes que presentan fiebre y datos clínicos de bacteriemia; en ellos se debe descartar otro sitio de infección con toma de hemocultivos. Se instaurará antibioticoterapia por vía parenteral hasta alcanzar estabilidad clínica. En caso de contar con un microorganismo aislado el tratamiento será dirigido, en caso de necesidad de tratamiento empírico si la función renal lo permite se podrían usar aminoglucósidos se continuará o cambiará el esquema según el antibiograma. En pacientes con larga estancia hospitalaria, daño en la función renal, inmunocomprometidos o sometidos a esquemas antibióticos anteriores se podrá optar por una cefalosporina de tercera generación hasta contar con un aislamiento y sensibilidad, y así dirigir el tratamiento antibiótico. En pacientes con cateterización permanente y/o tratamientos repetidos de antibiótico pueden cursar con infecciones por Candida sp. Por lo que habrá que realizar búsqueda intencionada de blastoconidias y pseudohifas o pseudomicelios, y en su caso instaurar tratamiento empírico con Fluconazol. COMPLICACIONES La interacción entre el huésped, uropatógenos y el ambiente no es bien entendida no solo en el desarrollo de infecciones del tracto urinario sino también en la progresión de las mismas. Como resultado es difícil determinar si un episodio de infección de vías urinarias puede resolverse sin ningún incidente o producir daño renal. La falta de diagnóstico temprano puede condicionar daño renal permanente. En un estudio reciente, Marra y colaboradores, mientras analizaban el registro de insuficiencia renal crónica encontraron que el total de pacientes 77.5% correspondió a varones, la gravedad del reflujo vesicoureteral era grado IV-V. Otro factor que puede afectar el pronóstico de una infección de vías urinarias está relacionado con un catéter urinario y la presenta de bacteriuria, bacteriemia y una infección sistémica relacionada al catéter, lo que eleva la morbilidad y mortalidad. 17 Como complicación puede producirse nefropatía por reflujo vesicuoreteral la cual es generalmente asintomática principalmente en etapas temprana, sin embargo puede causar complicaciones a largo plazo como hipertensión, proteinuria, daño renal progresivo y un riesgo aumentado de complicaciones asociadas al embarazo como hipertensión y preeclampsia.17 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA Conocer la etiología y la susceptibilidad antimicrobiana de los microorganismos aislados por urocultivo en pacientes con infecciones nosocomiales en Pediatría de Enero de 2014 a Agosto de 2014 en la unidad de Pediatría 505, Hospital General de México “Dr. Eduardo Liceaga”. JUSTIFICACION Diversos estudios epidemiológicos han demostrado que la Infecciones nosocomiales (IN) es causa de morbilidad y mortalidad en las unidades de terapia intensiva y hospitalización, representando un problema de salud pública en general. Entre un 5 a 10% de los pacientes que ingresan a un hospital en un país desarrollado va a adquirir una o más infecciones solo por el hecho de ingresar, el riesgo en un país en vías de desarrollado es 20 veces mayor. Las infecciones nosocomiales prolongan la estancia media hospitalaria y son costosas tanto para el paciente como para el sistema sanitarios, siendo estas en muchas ocasiones prevenibles. Los esfuerzos para prevenirlas deben comenzar con un mejor conocimiento de los factores principales favorecedores de dichas infecciones y de cómo intervenir para prevenir o reducir el riesgo de que ocurra la infección. Muchas de las actividades de prevención no son costosas y, en muchas ocasiones, menos costosas de lo que supone el cuidado de un paciente con infección. Un aspecto que precisa de una atención urgente es el incremento de las infecciones asociadas a la asistencia sanitaria producidas por gérmenes multirresistentes. El conocimiento de los microorganismos que se aíslan en las unidades hospitalarias es de importancia vital, ya que nos permite establecer parámetros y elaborar guías para un 18 adecuado manejo antimicrobiano. Según lo reportado en la literatura, los microorganismos más frecuentes de infecciones de vías urinarias Latinoamérica y en otros países son: Escherichia coli, Klebsiella Pneumoniae, Pseudomonas aeruginosa y especies de Candida. El aumento del número de las resistencias de los microorganismos a los antimicrobianos es una preocupación creciente y generalizada, que exige una monitorización de los patrones de resistencia mediante sistemas que faciliten la información, como las redes de vigilancia microbiológica, por lo que es importante conocer los microorganismos más frecuentes y sus sensibilidad para así instaurar un tratamiento empírico oportuno y adecuado para evitar resistencias y complicaciones de las mismas infecciones de vías urinarias. HIPOTESIS Si conocemos los microorganismos más frecuentemente aislados por urocultivo en los pacientes pediátricos hospitalizados con infección de vías urinarias además de su sensibilidad antimicrobiana; entonces se podrán conocer los agentes causales más comunes y así establecer un tratamiento oportuno y específico. OBJETIVOS OBJETIVO GENERAL Determinar la etiología y susceptibilidad antimicrobiana de los microorganismos aislados por Urocultivo en pacientes con infección nosocomial del tracto urinario de la unidad 505 Pediatría del Hospital General de México “Dr. Eduardo Liceaga”; en un periodo de tiempo determinado entre los meses de Enero de 2014 a Agosto 2014. OBJETIVOS PRIMARIOS Definir cuáles son los microorganismo aislados por urocultivo que originan más frecuentemente las infecciones nosocomiales en la población pediátrica de la unidad 505 del Hospital General de México “Dr. Eduardo Liceaga”. 19 Determinar la susceptibilidad antimicrobiana de los agentes etiológicos que originan las infecciones intrahospitalarias en la población pediátrica de la unidad 505 del Hospital General de México “Dr. Eduardo Liceaga”. OBJETIVOS SECUNDARIOS Evaluar mediante el análisis de la susceptibilidad antimicrobiana, cuales son los antimicrobianos con mejor espectro para los microorganismos más frecuentemente aislados en nuestra población en estudio. VARIABLES Como variables cuantitativas se tomarán: Cantidad de urocultivos positivos Numero de gérmenesgram positivos Número de gérmenes gram negativos Número de gérmenes del tipo hongos Las variables cualitativas están representadas por: El tipo de gérmenes aislados La susceptibilidad antimicrobiana La resistencia antimicrobiana de los mismo MATERIALES Y METODOS TIPO DE ESTUDIO Se realizó un estudio descriptivo, transversal y retrospectivo en el periodo comprendido entre los meses de Enero a Agosto del 2014 en el Hospital General de México “Dr. Eduardo Liceaga”. 20 UNIVERSO DE TRABAJO Está constituido por todos aquellos urocultivos positivos procedentes de pacientes pediátricos de la unidad de Pediatría del Hospital General de México, durante el período de estudio. POBLACION ESTUDIADA Pacientes pediátricos a los que se les realizó urocultivo, y que este resultado fue positivo, durante el período de tiempo estudiado. TAMAÑO DE LA MUESTRA 78 Urocultivos positivos durante el período de Enero a Agosto del 2014. CRITERIOS DE INCLUSION Todos los urocultivos positivos procedentes de pacientes de la unidad de Pediatría del Hospital General de México “ Dr. Eduardo Liceaga “. CRITERIOS DE EXCLUSION Todos los urocultivos que hayan resultado sin desarrollo bacteriano es decir negativos. Todos los urocultivos positivos de pacientes con infecciones de vías urinarias adquiridas en la comunidad. Otro tipo de cultivos (hemocultivos, cultivos de líquido cefalorraquídeo, de secreciones, heridas, etcétera) obtenidos de pacientes pediátricos de la unidad de Pediatría del Hospital Gneral de México “Dr. Eduardo Liceaga”. CRITERIOS DE ELIMINACION Urocultivos procedentes de otras unidades del Hospital General de México. Cultivos de los que se desconozca procedencia. RECURSOS Los recursos humanos necesarios para la elaboración de este trabajo, son representados por: 21 Infectologa pediatra Médicos residentes de pediatría Microbiólogos y laboratoristas Los recursos materiales necesarios contemplan: Frascos estériles de Urocultivo Material estéril ( batas, guantes, cubrebocas, gorros) Material de farmacia Material de papelería Fotocopias de los reportes de urocultivos positivos Programas Excel, Power point y Word de Microsoft Office para recopilar los datos del análisis correspondiente 22 RESULTADOS Y ANALISIS Durante el período de enero a agosto del 2014 resultaron positivos 78 urocultivos en pacientes pediátricos de la unidad de Pediatría del Hospital General de México hospitalizados en diferentes servicios incluyendo servicios de: Especialidades, Hematoncología, Cirugía, Terapia intensiva pediátrica con diferentes patologías de base. Al clasificarlos según el germen causal fueron 67 bacterias y 11 hongos; al clasificarlos por tinción de gram se encontró que corresponden con 71.8% de microorganismos gram negativos, 14.1% gram positivos. (Tabla 1 y gráfica 1) Tabla 1:Número y porcentaje de microorganismos aislados por urocultivo Tipo de organismo Número Porcentaje Gram positivos 11 14.1 Gram negativos 56 71.8 Hongos 11 14.1 Urocultivos totales 78 100 23 1Gráfica 1: Clasificación de agentes etiológicos De los 78 urocultivos realizados; el microorganismo que se aisló con mayor frecuencia fue E.coli con un total de 39 urocultivos positivos correspondientes al 50%, en segundo lugar Klebsiella pneumoniae con un total de 8 urocultivos que correspondieron al 10.3% del total; en tercer lugar con el mismo número de urocultivos positivos Candida albicans y E. faecium con un total de 6 urocultivos positivos cada uno que correspondieron al 7.6% del total de urocultivos respectivamente, en cuarto lugar con el mismo número de urocultivos positivos Pseudomonas aeruginosa y Candida tropicalis con un total de 4 urocultivos positivos cada uno correspondientes al 5.1% del total; en quinto lugar con un total de 2 urocultivos positivos cada uno E.faecalis y S. epidermidis correspondientes al 2.6% del total de urocultivos; los demás microorganismos aislados incluyeron Proteus mirabilis, Citrobacter freundii, Stenotrophomonas maltophila, Serratia marcescens, Morganella morganii, Enterococcos casseliflavus, y Candida parapsilosis representando cada uno el 1.3% del total de urocultivos. (Tabla 2 y gráficas 2 y 3) 0 10 20 30 40 50 60 70 80 Gram positivos Gram negativos Hongos Clasificación de agentes etiológicos Gram positivos Gram negativos Hongos 24 Aislamiento Número Porcentaje E. coli 39 50 K.pneumoniae 8 10.3 E.faecium 6 7.6 C.albicans 6 7.6 P.aeruginosa 4 5.1 C.tropicalis 4 5.1 E.faecalis 2 2.6 S.epidermidis 2 2.6 Morganella morganii 1 1.3 E. casseliflavus 1 1.3 Total 78 100 Tabla 1 Frecuencia de microorganismos aislados en urocultivos 2Gráfica 2.Microorganimos más frecuentemente aislados en urocultivos de pacientes pediátricos 0 5 10 15 20 25 30 35 40 Número de microorganismos aislados en urocultivos E. coli K.pneumoniae E.faecium C.albicans P.aeruginosa C.tropicalis E.faecalis S.epidermidis Morganella morganii 25 Gráfica 3 Porcentaje de microorganismos. En cuanto a la susceptibilidad antimicrobiana de los microorganismos más frecuentemente aislados en urocultivos en pacientes de la unidad de Pediatría en el Hospital General de México se obtuvieron los siguientes resultados: Para E.coli, el microorganismo más frecuentemente aislado, se encontró con una sensibilidad del 100% para Tigeciclina seguida del 89% para Ertapenem, Gentamicina e Imipenem; reportándose la menor sensibilidad para Ampicilina; con sensibilidad intermedia para Ampicilina/Sulbactam y Piperacilina/Tazobactam. Asimismo se reportó resistente con un porcentaje alto de 78% para Ampicilina y 67% para Nitrofurantoína y Trimetoprim/ Sulfametoxazol que son los antibióticos más frecuentemente utilizados de forma empírica. También se reportó el 33% positivo para betalactamasas de espectro extendido y un 67% negativo. (Tabla 3, Gráfica 4) 0 10 20 30 40 50 Porcentaje de microorganismos aislados en Urocultivo E. coli K.pneumoniae E.faecium C.albicans P.aeruginosa C.tropicalis E.faecalis S.epidermidis Morganella morganii E. casseliflavus 26 Fármaco I (%) R(%) S(%) Ampicilina 0 78 22 Ampicilina/sulbactam 22 44 33 Cefepima 0 44 56 Ceftazidima 0 44 56 Ceftriaxona 0 44 56 Ciprofloxacino 0 33 67 Ertapenem 0 11 89 Gentamicina 0 11 89 Imipinem 0 11 89 Meropenem 0 33 67 Moxifloxacino 0 33 67 Nitrofurantoína 0 67 33 Piperacilina/tazobactam 33 33 33 Tigeciclina 0 0 100 Tobramicina 0 22 78 Trimetoprima/sulfametoxazol 0 67 33 Tabla 3: Sensibilidad y resistencia de E.Coli Gráfica 4:Sensibilidad y resist.E.coli 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 I (%) R(%) S(%) 27 Tabla 4 Porcentaje de BLEE 1Gráfica 5: Porcentaje de BLEE En el caso de Klebsiella Pneumoniae se encontró sensible 100% a todas las cefalosporinas reportadas incluyendo Cefepima, Ceftazidima, Ceftriaxona además de Ertapenem, Meropenem y Piperacilina/Tazobactam; encontrándose resistente para Ampicilina, Gentamicina, Moxifloxacino, Nitrofurantoína, Tigeciclina y Trimetoprim/Sulfametoxazol. (Tabla 5, Gráfica 6) 0 10 20 30 40 50 60 70 Neg (%) Pos (%) BLEE BLEE Neg (%) Pos (%) Total(%) BLEE 67 33 100 Fármaco I (%) R(%) S(%) Ampicilina 0 100 0 Ampicilina/sulbactam 0 100 0 Cefepima 0 0 100 Ceftazidima 0 0 100 Ceftriaxona 0 0 100 Ciprofloxacino 100 0 0 Ertapenem 0 0 100 Gentamicina 0 100 0 Meropenem 0 0 100 Moxifloxacino 0 100 0 Nitofurantoína 0 100 0 Piperacilina/tazobactam 0 0 100 Tigeciclina 0 100 0 28 2Gráfica 6: Sensibilidad y resist.K.pneumoniae Para Enterococos faecium se reportó una sensibilidad del 100% para Linezolid y del 94% para Ciprofloxacino, Gentamicina y Levofloxacino, sin embargoreportándose sensible en un 19% para Vancomicina y en un 6% para Ampicilina y Bencilpenicilina. Asimismo se reportó resistente en un 94% a Ampicilina y Bencilpenicilina, con sensibilidad intermedia para Eritromicina. (Tabla 6, Gráfica 7) Fármaco I (%) R(%) S(%) Ampicilina 0 94 6 Becilpenicilina 0 94 6 Ciprofloxacino 0 6 94 Clindamicina 0 100 0 Eritromicina 88 12 0 Estreptomicina nivel alto 0 12 88 Gentamicina nivel alto 0 6 94 Levofloxacino 0 6 94 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 I (%) R(%) S(%) Tobramicina 100 0 0 Trimetoprima/sulfametoxazol 0 100 0 3Tabla 5: Sensib y resist K.pneumoniae 29 Linezolid 0 0 100 Moxifloxacino 0 6 94 Nitrofurantoína 19 0 81 Quinupristina/Dalfropristina 0 0 100 Tetraciclina 0 12 88 Tigeciclina 0 13 88 Vancomicina 0 81 19 Tabla 6: Sensibilidad y resistencia para E.faecium 3Gráfica 7: % Sensib y resist E.faecium Es importante mencionar Para Candida albicans se encontró que el 100% es sensible a todos los antifúngicos reportados incluyendo Anfotericina B, Fluconazol, Caspofungina, Flucitosina, Micafungina y Voriconazol sin reportar alguna resistencia.(Gráfica 8) 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 I (%) R(%) S(%) 30 4Gráfica 8 % Sensibilidad para C.albicans Para Candida parapsilosis y Candida Tropicalis se reportó el 100% de sensibilidad a todos los antifúngicos; incluyendo Anfotericina B, Flucitosina, FLuconazol y Voriconazol.)Tabla 8) Fármaco I (%) R(%) S(%) Anfotericina B 0 0 100 Caspofungina 0 0 100 Flucitosina 0 0 100 Fluconazol 0 0 100 Micafungina 0 0 100 Voriconazol 0 0 100 Tabla 8: % Sensibilidad para Candida parapsilosis y C. tropicalis 0 20 40 60 80 100 120 I (%) R(%) S(%) 31 Para Pseudomonas aeruginosa se encontró una sensibilidad del 100% para Colistina seguido de un 60% para Ceftazidima, Ciprofloxacino, Gentamicina y Piperacilina- Tazobactam, en un 25% para Cefepima en un 20% para Imipenem y en un 13% para Meropenem. Se reportó resistente en un 100% a 15 antibióticos entre los cuáles se incluyen Ampicilina, Ampicilina/ Tazobactam, Cefuroxima, Nitrofurantoína Y Tetraciclina. (Tabla 9, Gráfica 9) Fármaco I (%) R(%) S(%) Ampicilina 0 100 0 Ampicilina/sulbactam 0 100 0 Cefepima 50 25 25 Cefixima 0 100 0 Ceftazidima 0 40 60 Ceftriaxona 0 100 0 Cefuroxima 0 100 0 Cefuroxima axetil 0 100 0 Ciprofloxacino 0 40 60 Cloranfenicol 0 100 0 Colistina 0 0 100 Ertapenem 0 100 0 Gentamicina 40 0 60 Imipenem 0 80 20 Levofloxacino 0 67 33 Meropenem 0 88 13 Minociclina 0 100 0 Moxifloxacino 0 50 50 Nitofurantoína 0 100 0 Piperacilina 0 100 0 Piperacilina/tazobactam 0 40 60 tetraciclina 0 100 0 Ticarcilina/Ácido clavulánico 0 100 0 Tigeciclina 0 100 0 Tobramicina 0 40 60 Trimetoprima/sulfametoxazol 0 100 0 Tabla 9: % Sensiblidad para P.aeruginosa 32 5Gráfica 9:% Sensibilidad y resistencia para P.aeruginosa Para Proteus Mirabilis se reportó sensibilidad del 100% a todos los antibióticos reportados incluyendo Amikacina, Ampicilina, Aztreonam, Cefepime, Cefriaxona, Ciprofloxacino y Ertapenem; siendo únicamente resistente a Cefazolina(Tabla 10, Gráfica 10) Fármaco I (%) R(%) S(%) Amikacina 0 0 100 Ampicilina 0 0 100 Ampicilina/sulbactam 0 0 100 Aztreonam 0 0 100 Cefazolina 0 100 0 Cefepima 0 0 100 Ceftriaxona 0 0 100 Ciprofloxacino 0 0 100 Ertapenem 0 0 100 Tabla 10: %Sensibilidad para P. mirabilis 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 I (%) R(%) S(%) 33 6Gráfica 10: % Sensibilidad para P.mirabilis Para Morganella Morganii se reportó sensibilidad del 100% para 6 antibióticos incluyendo Cefepima, Ceftazidina, Ceftriaxona, Ertapenem, Meropenem y Piperacilina/Tazobactam, siendo resistente a Gentamicina, Moxifloxacino, Nitrofurantoína, Tigeciclina y Trimetoprim/Sulfametoxazol. (Tabla 11, Gráfica 11) Fármaco I (%) R(%) S(%) Ampicilina 0 100 0 Ampicilina/sulbactam 0 100 0 Cefepima 0 0 100 Ceftazidima 0 0 100 Ceftriaxona 0 0 100 Ciprofloxacino 100 0 0 Ertapenem 0 0 100 Gentamicina 0 100 0 Meropenem 0 0 100 Moxifloxacino 0 100 0 Nitofurantoína 0 100 0 Piperacilina/tazobactam 0 0 100 Tigeciclina 0 100 0 Tobramicina 100 0 0 Trimetoprima/sulfametoxazol 0 100 0 Tabla 11: %Sensibilidad para M. morganii 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 I (%) R(%) S(%) 34 7Gráfica 11:%Sensibilidad para M. morganii Para E. faecalis se reportó una sensibilidad del 100% para un gram número de antibióticos incluyendo Ampicilina, Ciprofloxacino, Levofloxacino, Linezolid, Moxifloxacino y Penicilina G siendo resistente en un 100% a Eritromicina, Quinopristina y Tetracilinas.(Tabla 12, Gráfica 12) Fármaco I (%) R(%) S(%) Ampicilina 0 0 100 Ciprofloxacino 0 0 100 Levofloxacino 0 0 100 Linezolid 0 0 100 Moxifloxacino 0 0 100 Tetracilcinas 0 100 0 Tigeciclina 0 0 100 Vancomicina 0 0 100 Tabla 13 Sensibilidad y resistencia para E. faecalis 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 I (%) R(%) S(%) 35 8Gráfica 13 Sensibilidad y resistencia para E.faecalis 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 I (%) R(%) S(%) 36 DISCUSION Las infecciones de vías urinarias asociadas al uso de catéteres son significativas no solo debido a su alta incidencia y sus costos en consecuencia, sino por las severas secuelas que pueden causar. Las infecciones de vías urinarias asociadas a catéteres son el tipo más común de infecciones de vías urinarias nosocomiales, causantes de más de un millón de casos anualmente o del 40% de todas las infecciones nosocomiales; además de constituir el 80% de todas las infecciones de vías urinarias intrahospitalarias. Debido a que el uropatógeno aislado tarda hasta 72 horas en crecer, se recomienda iniciar un tratamiento empírico cuando se cuente con un examen general de orina sugestivo y/o una tinción de Gram de infección urinaria con base en los agentes etiológicos más frecuentes en la región donde se encuentra el paciente. Como sabemos, E.coli es la bacteria más común en infecciones urinarias; encontrándose en este estudio en un 50% de los cultivos positivos, dato que concuerda con la mayoría de las investigaciones. En este estudio encontramos que E.coli es 100% sensible a Tigeciclina, sin embargo al no contar con este medicamento en el hospital se tendría que elegir algún Carbapenémico ya sea Ertapenem o Imipenem cuya sensibilidad reportada fue de un 89% y un 67% para Meropenem. Asimismo debemos considerar K. pneumoniae como segundo germen causal en frecuencia, de acuerdo a este estudio, aunque en otros estudios se reportan grampositivos como segunda causa. En esta investigación, se reporta K. pneumoniae como sensible tanto a Cefalosporinas como a Carbapenémicos. El patrón de sensibilidad determinará la elección de la terapéutica y se deberá instaurar tratamiento empírico oportuno tomando en cuenta los resultados de este estudio, aunado a las características del paciente para evitar resistencias bacterianas y complicaciones tanto a corto como a largo plazo. 37 BIBLIOGRAFIA REFERENCIAS 1.- J L. Arredondo G, et al. Etiología y tratamiento de infecciones de vías urinarias en niños. 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