Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
1 UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE MÉXICO FACULTAD DE FILOSOFIA Y LETRAS COLEGIO DE PEDAGOGIA TESINA LAS RELACIONES INTERPERSONALES DOCENTE- ALUMNO Y SU INFLUENCIA EN EL PROCESO ENSEÑANZA-APRENDIZAJE GARCÍA SOLÍS JESSICA ASESORA: MTRA. ALEJANDRA LOPEZ QUINTERO UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. 2 AGRADECIMIENTOS Algo que decir y mucho que agradecer: Por eso y más... en estas primeras líneas de una obra que representa, un esfuerzo, un aprendizaje, pero sobre todo, parte importante de un proyecto personal, no puedo dejar de mencionar, recordar y agradecer, a quienes han compartido esta inigualable experiencia. Crecer, ver de lo que somos capaces y atrevernos a volar no es algo fácil de lograr. Gracias a mis padres por guiar mi vida y apoyarme siempre, por creer en mí y por enseñarme a nunca dejarme vencer. A mi Mamá la mujer que más he admirado y admirare en mi vida porque con firmeza y amor ha guiado mi camino y ha hecho de mí la persona que soy. Aunque ya no estés conmigo, siempre te llevaré en mi corazón y en mis pensamientos. Tú me enseñaste a luchar por lo que se quiere, me enseñaste a levantarme cada vez que me caía, me enseñaste que lo mejor de la vida es estar con quienes amamos, comenzando con uno mismo; creo que no hay palabras para expresarte mi agradecimiento… ¡Gracias Mamá! A mi Papá que siempre me ha apoyado, que es un ejemplo de esfuerzo, de lucha y de perseverancia. Me ha enseñado que las cosas que realmente valen la pena merecen un sacrificio; no hay nada más difícil que ser un buen padre y para mí es el mejor. Usted que siempre me ha demostrado su cariño y el amor que tiene por mí; este logro es también suyo. Gracias papás por permitirme aprender y formarme bajo su tutela. Su presencia en mi vida, en mi formación académica y en momentos fundamentales han dejado una huella que será imborrable en mi corazón, ustedes me dieron la mejor herencia que podía recibir: el amor, la comprensión, el cariño, el bienestar y la seguridad. A mis hermanos, Andrés, Pablo y Amado, por compartir cada momento de mi vida, por estar siempre a mi lado, por ser un ejemplo de lucha y de perseverancia, pero principalmente por su apoyo y cariño. 3 A mis cuñadas Silvia y María por acompañarme en este proceso, por ser mi apoyo en momentos difíciles, por brindarme una palabra de aliento, pero principalmente por el cariño que me han brindado todo este tiempo. A mis sobrinos Pablo, Andrés, David, Adrián y Lisseth por ser una alegría en mi vida, por llenarme de dicha, por sus risas, sus ocurrencias, sus bromas, es decir, por hacer que mi vida esté llena de felicidad, por eso y más… gracias Muchos son los regalos de la vida, pero una amistad sincera es una de las mayores riquezas que el ser humano puede atesorar. Cómo olvidar todas las vivencias y experiencias compartidas con invaluables amigas como ustedes. Siempre dispuestas a apoyar, escuchar, impulsar y animar. Gracias Miriam, Alicia, Jocelyn, Lorena, Irene, Miriam Isabel, Mónica, Rocío, Marisol, Namibia, Nadia, Karla y Alejandra por su inigualable forma de vivir la amistad porque nunca me dejaron sola, porque me enseñaron a ver el resplandor de mi persona a través de las palabras de aliento que en cada momento difícil de mi vida ustedes me brindaron. Gracias por caminar junto a mí el camino de la vida, por esas llamadas de atención que me daban cuando mi vida parecía un acertijo pero, principalmente, gracias por existir y por siempre estar ahí. A Ale una gran amiga que ha recorrido conmigo no sólo esta etapa, sino que ha estado en otros momentos de mi vida, a quien quiero agradecer especialmente, porque gracias a ella los momentos difíciles no lo eran tanto, siempre me brindaste una sonrisa y una palabra de aliento cuando más lo necesité. Tu compañía, cariño y comprensión han sido un apoyo en mi vida. Gracias por los momentos felices y agradables que me has dado. A Rocío una gran y valiosa amiga, gracias por tu compañía, por tu amistad, por estar conmigo en cada momento, pero principalmente gracias por el apoyo, confianza y cariño que me has brindado. En los avatares de la vida necesitamos de anclas para sostenernos y seguir adelante. Gracias Braulio y Osvaldo por haberme brindado su amistad, por darme su mano cuando más la necesité, por la sonrisa que me brindaron, por darme alegría, por el abrazo 4 necesitado, por abrirme su corazón, por el consejo oportuno, por su cariño, por su comprensión, por su apoyo, por las palabras de aliento, por todo lo que me han podido dar, por decirme la verdad, por los momentos felices y agradables que me han dado y por ser quienes son. Su confianza y su amistad son de los pilares más importantes que me permitieron sostenerme y continuar. Gracias amigos por enseñarme a ver siempre el horizonte. Gracias a todos los maestros que encontré en mi paso por la facultad, por compartir sus conocimientos, por enseñarme que un mundo más humano es posible, por crear en mi el amor y el compromiso por la pedagogía. Agradezco profundamente el apoyo que mi asesora, la Mtra. Alejandra López Quintero, me brindó durante la construcción de este trabajo. Valoro la relación amistosa que se creó durante este proceso y los consejos que siempre me brindó… ¡Muchas gracias! Agradezco el apoyo y los comentarios de mis sinodales: Lic. Ana Beatriz Arias Camarena, Mtra. Laura Georgina Ortega Navarro, Lic. Ena Eréndira Niño Calixto, Lic. Thelma Lomelí Sánchez. Agradezco a esta Universidad la UNAM, por haberme cobijado durante todos estos años y a la Facultad de Filosofía y Letras por ser el lugar que me formó es esta carrera que tanto me gusta. 5 INDICE INTRODUCCIÓN.................................................................................................7 CAPITULO I: LAS RELACIONES INTERPERSONALES...............................10 1.1 Definición....................................................................................................10 1.2 Clasificación...............................................................................................14 CAPITULO II: EL HUMANISMO, EL CONSTRUCTIVISMO Y LA EDUCACIÓN.....................................................................................................20 2.1 El Humanismo............................................................................................20 2.1.1 Modelo Humanista de Abraham Maslow (1908-1970)...........................24 2.1.2 Modelo Humanista de Carl Rogers (1902-1987)...................................28 2.2 El Constructivismo....................................................................................33 2.2.1 Modelo Constructivista de Vigotsky (1896-1934).............................38 CAPITULO III: VINCULOS PEDAGOGICOS....................................................42 3.1 Docente-Alumno........................................................................................42 3.2 El papel del Docente.................................................................................44 3.3 El papel del alumno..................................................................................513.4 Determinantes de la relación...................................................................53 CAPITULO IV: LA MOTIVACIÓN EN LA RELACIÓN DOCENTE-ALUMNO PARA MEJORAR EL APRENDIZAJE..............................................................58 4.1 Interacción profesor-alumno....................................................................58 4.2 Manejo docente de la motivación escolar...............................................59 6 4.3 Sugerencias para el Docente en el manejo de la motivación en el aula................................................................................................................71 CONCLUSIONES..............................................................................................79 BIBLIOGRAFÍA.................................................................................................83 7 INTRODUCCIÓN La pedagogía se encarga de estudiar la educación y, por ende, el papel del docente y del alumno, así como la influencia de las relaciones interpersonales que se dan en el proceso pedagógico. Una de las afirmaciones recurrentes en nuestro actuar educativo ha sido el decir: ”La letra con sangre entra”, no ha habido afirmación más equivocada y cruel que ésta. La educación desde un principio se ha centrado en el alumno, en la adquisición de aprendizajes, pero ¿cómo adquirimos estos aprendizajes?, ¿cuál es el papel del docente en todo este proceso?,¿dónde queda el alumno?, ¿qué tipo de relaciones debe llevar el docente y el alumno para potencializar los aprendizajes, no sólo escolares o académicos sino también de vida?; son preguntas que nos hacemos a menudo, no obstante, la mayoría de las veces consideramos que la respuesta ya está dada en nuestro actuar educativo y olvidamos que la realidad es otra, con lo cual vamos dejando de lado aspectos tan importantes como las relaciones interpersonales. Las relaciones interpersonales docente-alumno desempeñan un importante papel en la formación integral de los sujetos; son un eje transversal que atraviesa no sólo la parte cognoscitiva sino toda la vida del sujeto, tal como lo dice Eva Adam: “La acción educativa debe contribuir a que el individuo descubra el estado en que se encuentra y relacionarlo con la calidad de vida personal. Ser consciente del placer de una situación positiva incrementa el goce de vivir y prepara para nuevos conocimientos”1. Por ello, es necesario que los especialistas en la materia, los pedagogos, cobren conciencia de la dinámica de las relaciones que se producen en el aula, a fin de fomentar el conocimiento de las situaciones concretas y la participación de los individuos para que puedan ser miembros activos y responsables de su desarrollo personal y colectivo. Estas relaciones afectivas, marcan la diferencia en los resultados de los procesos de aprendizaje porque repercuten en todas 1 ADAM, Eva, et al. Emociones y educación: qué son y cómo intervenir desde la escuela, p. 13 8 las esferas de la vida de los alumnos. Dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje hay dos factores: la motivación y la afectividad, elementos que, como expertos en educación, debemos tomar en cuenta para nuestra práctica profesional y en beneficio de los alumnos, cuyo desarrollo cognitivo y psicosocial encabeza la lista de metas del docente, quien ve en la educación un proceso caracterizado por la relación interpersonal docente-alumno y encaminado a la adquisición de conocimientos. El objetivo del proyecto es analizar desde un aspecto pedagógico las relaciones interpersonales docente-alumno y la importancia que tienen en el proceso enseñanza aprendizaje como motivadoras del mismo. Todo lo anterior ha llamado mi atención, a tal grado que lo he elegido como tema de titulación (“las relaciones interpersonales entre docente-alumno y su influencia en el proceso enseñanza-aprendizaje”, es decir, la importancia de la interacción docente-alumno dentro del proceso de enseñanza- aprendizaje) debido a que cuando inicié el nivel superior, ya con una actitud crítica y reflexiva, empecé a interesarme en la docencia, sobre todo, en la forma en que cada profesor se relaciona con sus alumnos, en su comportamiento, en el papel que juega dentro del salón de clase, en la actitud que toma para que el aprendizaje sea por deseo de cada uno de sus alumnos y no por obligación y en el hecho de que no basta dominar un contenido o una asignatura para considerar que un individuo es apto para la enseñanza. Aunado a eso y al término de mi etapa como estudiante, decidí incursionar en el campo laboral: me desempeñé como docente en el Centro de Atención Infantil Torres de Potrero, donde pude constatar, por un lado, que son muchos los elementos que se ponen en juego durante la clase y, por otro, que existen tantos criterios pedagógicos como granos de arena en el mar, pues cada ser humano tiene una visión distinta de cómo “deben ser” el docente y el alumno, qué actitudes “deben mostrar” y el comportamiento que estos “deben tener” dentro del salón de clases, pero se olvida de un factor determinante: las relaciones interpersonales, o sea, las emociones, las conductas, las actitudes, 9 los pensamientos, los sentimientos que se viven en el proceso de aprendizaje, los cuales intervienen de manera significativa en la adquisición de conocimientos, no sólo académicos sino también conocimientos para la vida. Este proyecto aporta a los docentes y alumnos una recapitulación bibliográfica y una visión acerca del modo en que las relaciones interpersonales entre docente-alumno afectan la adquisición de aprendizajes y cómo estos vínculos se convierten en un motivador en el proceso de enseñanza- aprendizaje; asimismo, destaca la importancia que tienen en nuestro actuar social y académico las relaciones interpersonales. El trabajo está organizado de la siguiente manera: Capítulo I, “Las relaciones interpersonales”: se define a las relaciones interpersonales y se presenta una clasificación basada en las emociones, ya positivas, ya negativas. Capítulo II, “El Humanismo, el Constructivismo y la educación”: se habla del concepto de aprendizaje, el concepto de enseñanza y la manera en que se da este proceso; aquí se determinan los factores que intervienen, se analiza la intervención docente y la participación por parte del alumno, para lo cual tomo en cuenta, por un lado, el enfoque humanista, en el que se presentan las relaciones interpersonales como una de las potencias para crear los aprendizajes y, por otro, el enfoque, constructivista desde la teoría de Vigotsky, donde se ve el proceso de enseñanza-aprendizaje, el papel del docente así como el papel del alumno. Capítulo III, “Vínculos pedagógicos”: en este capítulo se mencionan los vínculos que se llevan a cabo dentro del proceso de enseñanza- aprendizaje; además, se apunta el papel del docente, el papel del alumno, las relaciones interpersonales que sostienen ambos y los determinantes de su relación. Capítulo IV, “La motivación en la relación docente-alumno para mejorar el aprendizaje”: se habla de la interacción entre profesor- alumno y del manejo docente de la motivación escolar; asimismo se dan algunas sugerencias para el docente. 10 CAPÍTULO I LAS RELACIONES INTERPERSONALES “Todo lo que se mantiene cerrado se oscurece, se deteriora y se enferma. El gesto de abrir, implica firmeza y valentía porque abrir siempre supone un exponerse, un entregarse, un arriesgarse. Abrirse siempre conlleva un riesgo porque cuando me abro, me muestro en lo que soy y entonces puedo volverme vulnerable. Pero sólo entonces puedo ser accesible...Sin apertura no se establece vínculo alguno que sea consistente y perdurable.” José María Toro 1.1DefiniciónDurante nuestra vida convivimos y compartimos experiencias con otros seres humanos, cuyos conocimientos nos van formando como personas con plena conciencia de que no somos imperfectibles sino, todo lo contrario, perfectibles y sometidos a un proceso de formación. El primer referente de crecimiento social es la familia donde nacemos; aquí comenzamos a compartir emociones, sentimientos, nos comunicamos con otros seres humanos, es decir, comenzamos nuestras relaciones sociales e interpersonales. Después, viene la escuela, espacio donde interactuamos con nuestros iguales, con adultos y con una gama de personas que tienen distintas formas de pensar, de interactuar, de convivir. En esta institución educativa encontramos reglas, compromisos y responsabilidades que nos hacen pensar en el concepto de relaciones interpersonales, o sea en, “los contactos profundos o superficiales que existen entre las personas durante la realización de cualquier actividad, en la habilidad que tienen los seres humanos de interactuar entre sí” (escrita, por Mercedes Rodríguez Velásquez)2. Gracias a estos vínculos familiares y escolares, cada ser humano desarrolla la capacidad de convivir e interactuar con otros de formas distintas con lo cual se logra un crecimiento en todos los ámbitos. 2 Cit Pos. POSTIC, Marcel. La relación educativa, p.16 11 Educación y relaciones interpersonales En Las inteligencias múltiples, Howard Gardner propone que los humanos tenemos inteligencias múltiples que pueden clasificarse en siete categorías3: Inteligencia lógico-matemática: la concibe como la capacidad de emplear el razonamiento. Las personas que poseen esta clase de destreza son muy hábiles en el análisis, la investigación, la estadística y la resolución de problemas. Inteligencia lingüística: la considera como la destreza en el entendimiento y uso de las palabras. Las personas que poseen esta habilidad disfrutan jugando con las palabras, escribiendo, realizando debates, haciendo crucigramas, etc. Los oficios en los que se depende de esta destreza son la política, el periodismo, la enseñanza, las ventas, la abogacía, la escritura, etc. Inteligencia visual-espacial: la define como la capacidad de reconocimiento y reproducción de formas geométricas y de orientación en el espacio. Las personas que poseen esta habilidad se orientan bien en el espacio y perciben fácil y rápidamente los volúmenes o las formas de los objetos. En este caso, los oficios indicados son la arquitectura, el dibujo o las actividades de guía. Inteligencia interpersonal: la entiende como la habilidad para reconocer, comprender y modelar los estados de ánimo de las personas que nos rodean. Los oficios en los que destacan las personas con estas características son la enseñanza, las relaciones públicas, la psicología, las ventas o el trabajo social. Inteligencia intrapersonal: la ve como la habilidad para conocer y entender los sentimientos y emociones propios, con el fin de utilizarlos 3 GARDNER, Howard, Las inteligencias múltiples. p. 240 12 como guía de nuestro comportamiento. Los oficios en los que destacan estas personas son la psicoterapia, el arte, la filosofía, etc. Inteligencia físico-kinestésica: la comprende como la habilidad para realizar movimientos físicos con gracia y precisión. Las personas que destacan en este tipo de habilidades son buenos deportistas, bailarines o actores. Inteligencia musical: la considera como la habilidad para reconocer, reproducir y componer melodías musicales. Las personas que poseen esta clase de destreza tocan con facilidad algún instrumento musical y pueden orientar su ocupación profesional hacia alguna actividad relacionada con la música. Dentro de estas inteligencias, las que interesan por el tema de la presente investigación son la interpersonal e intrapersonal. La primera nos concierne porque nos pone empáticamente en el lugar de otros. La segunda nos toca porque nos permite conocernos a nosotros mismos. En Inteligencia emocional, Goleman afirma “que el éxito personal ya no depende tanto del nivel de la inteligencia concreta como tal, sino que depende de las habilidades que el individuo tenga para manejar contextos interpersonales”4. Por esta razón la educación, y en particular la educación emocional, buscará potenciar el bienestar social y personal a través de un proceso educativo continuo y permanente que una el crecimiento emocional y el cognitivo, ambos necesarios para el desarrollo de la personalidad integral. Con base en esto, podemos inferir que la preparación de las futuras generaciones deberá enfocarse en el desarrollo de habilidades como la empatía, la resolución de conflictos interpersonales, el manejo de sus sentimientos y emociones, el control de la ansiedad, la toma de perspectiva y el uso de las estrategias comunicativas, cuya finalidad será llevar al individuo por 4 GOLEMAN, D. Inteligencia emocional, pp.65-66 13 el camino del éxito, entendido éste como calidad de vida. Según estos autores, la inteligencia de cada ser humano irá progresando mediante las acciones del sujeto con su entorno, lo cual sería imposible si el trabajo educativo se diera de manera aislada, sin la interacción de individuos en un medio social que favoreciera el crecimiento de nuestros alumnos, tal como lo apunta Fernando Bacaicoa: “La inteligencia se desarrolla a través de la formación de esas estructuras cualitativamente distintas. No es necesario decir que en esa formación colaboran la maduración, la experiencia, la transmisión social y el equilibrio, que logra que tanto los factores externos (experiencia y transmisión social); como los internos (maduración) interactúen de forma dialéctica y de esta manera se construyan los conocimientos”5. Cuando Fernando Bacaicoa menciona las relaciones interpersonales dentro del ámbito educativo hace que nos dirijamos específicamente a la relación docente-alumno porque se encuentra dentro de los parámetros del afecto, ya que las emociones desempeñan un importante papel en la formación de los sujetos debido a que permea su parte cognoscitiva y, en general, toda su vida. De esta forma, los docentes que logran mejores resultados con sus alumnos son aquellos que les brindan comprensión, cariño, convivencia, confianza, diálogo con su manera de actuar y de pensar, apuntalan directamente la autoestima y les ayudan a crecer, a confiar en sí mismos y a proyectarse en el plano social. Mejorar el ambiente áulico no exige trámites burocráticos ni inversión económica, no se requieren técnicos ni expertos en nada, sólo es necesario tener la disposición de escuchar, observar, orientar y preparar a los estudiantes en un espacio educativo de carácter social donde reine la interacción personal. Se puede afirmar que el principio que preside las relaciones interpersonales es la representación que uno se forma del otro mediante una filtración de 5 BACAICOA, Fernando. Conflicto cognitivo y aprendizaje, p. 23-24. 14 información que conduce a interpretar y valorar lo que se hace; dicha operación puede modificar el comportamiento en la dirección de las expectativas asociadas con la representación, que no se reduce a una selección y categorización de los rasgos sobresalientes del otro, sino que en ella participan los conocimientos culturales y las experiencias sociales de los protagonistas. 1.2 Clasificación Dentro del marco de las relaciones interpersonales se pueden encontrar categorías positivas y negativas. Las categorías positivas de las relaciones interpersonales son aquellas que favorecen el crecimientode la identidad de la persona de una forma integral, es decir, hay emociones que se encuentran inmersas en un proceso de convivencia social, las cuales tienen un importante peso dentro de la adquisición de aprendizajes tanto cognitivos, como de vida. Entre las emociones positivas más habituales que se dan dentro de cualquier relación se encuentran las siguientes6: Emociones positivas Definición Comprensión empática Capacidad para comprender desde adentro las reacciones del alumno. Se trata de una conducta en la que uno se mete en el pellejo del otro y mira al mundo con los ojos del alumno. Aprecio Estimación, valoración y consideración. Aceptación Aceptar, recibir, aprobar, dar por bueno. Respeto Sentimiento positivo que surge cuando 6 Diccionario de los sentimientos, p. 66-68 15 nos damos cuenta de los valores del otro, lo cual nos hace sentir veneración hacia él y una cierta sumisión no forzada. Amistad Sentimiento que surge cuando descubrimos las cualidades de una persona, lo cual nos lleva a desear su compañía, comunicación y bienestar. Satisfacción Sosiego que experimenta al cumplirse un deseo. Esperanza Sentimiento agradable provocado por la anticipación de algo que deseamos y que se presenta como posible. Entusiasmo Alegría que impulsa a la acción; fogosidad de ánimo o excitación por algo que lo cautiva. Optimismo Buen ánimo para sobreponerse a las dificultades vencibles. Felicidad Sentimiento de plenitud positivo, intenso y duradero que se experimenta cuando no se echa en falta ninguna cosa. Admiración Percepción de algo o de alguien extraordinario; provoca un sentimiento profundo y duradero que se acompaña por el aprecio. 16 Cariño Las cualidades de una persona, (belleza, gracia o simpatía) provocan sentimientos de afecto y deseo de manifestárselo. Es estable, duradero y, no es una atracción violenta o pasajera. Interés Actitud motivada por la estimulación valorativa que se tiene de un objeto, misma que inspira la necesidad de atenderlo. Confianza Seguridad que le permite reconocerse como alguien distinto y separado del propio ego. Constituye la base del sentido de la realidad, de la habilidad para relacionarse con los demás y de los sentimientos de valoración y estima propias. Empatía Proceso que se refiere a ciertos mecanismos psíquicos que amplían la identidad del individuo, haciéndolo capaz de identificarse con nuevos aspectos de su medio hasta llegar a una comprensión profunda de los demás. Capacidad que poseen ciertos sujetos para experimentar los pensamientos, emociones y conducta de otros. La capacidad de un individuo para ponerse en el lugar de otro, captar sus sentimientos, comprender sus reacciones y contemplar el mundo desde las perspectivas de otras personas. 17 Alegría Sentimiento que se experimenta a raíz del cumplimiento de nuestras expectativas, deseos y proyectos; en ocasiones puede estar acompañado por un sentimiento de ligereza y de ensanchamiento del ánimo. En contraposición, se encuentra la categoría de las emociones negativas; éstas pueden llegar a causar un daño, en ocasiones irreversible, en la conducta y, por tanto, en el deseo de adquirir nuevas experiencias tanto cognitivas como de vida. Entre las emociones negativas más frecuentes encontramos las siguientes: Emociones negativas Definición Tristeza Deseo de aislamiento y pasividad; está provocado por una pérdida, desgracia o contrariedad. Temor Sentimiento semejante al miedo pero menos intenso. Disgusto Contienda, disputa, diferencia y enfado. Ira Sentimiento de indignación que lleva al deseo de apartar o destruir al causante. Está causado por la percepción de un obstáculo, de una amenaza o de una ofensa. 18 Vergüenza Sentimiento que provoca un fuerte deseo de esconderse; se da ante la posibilidad o hecho de que los demás vean alguna falta, carencia, mala acción o algo que debería permanecer oculto. Miedo Sentimiento caracterizado por el deseo de huida. Lo encontramos cuando se percibe un peligro o un mal posible. Melancolía Sentimiento levemente negativo que se caracteriza por pasividad, deseo de aislamiento, languidez y ensoñaciones; suele tener una causa desconocida. Nostalgia Sentimiento negativo que se experimenta ante la lejanía de los seres y lugares queridos; está acompañado por el deseo de regresar junto a ellos. Desilusión Pérdida de la ilusión al ver que lo bueno, que esperábamos ya cercano, se desvanece. Decepción Sentimiento que se experimenta al constatar que algo que teníamos derecho a esperar no va a cumplirse. 19 Pánico Terror súbito y sin fundamento. Inferioridad Impotencia que se da cuando se percibe desfavorablemente la propia imagen y se compara con otros o con el ideal. Nerviosismo Intranquilidad difusa y prolongada que repercute en el sistema nervioso. Indiferencia Estado de ánimo en que no se siente inclinación ni repugnancia a un objeto, negocio o persona determinada. Es conveniente tomar conciencia de las repercusiones que tienen estas emociones en las relaciones que se brindan dentro y fuera del aula, ya que, cuando éstas rebasan los niveles de “normalidad”, se pierde el control y se adueñan del aula provocando un desequilibrio físico, químico, psíquico y social que va afectar el proceso de socialización, de aprendizaje y de convivencia en el ámbito educativo. 20 CAPÍTULO II: EL HUMANISMO, EL CONSTRUCTIVISMO Y LA EDUCACIÓN La instrucción consiste en enseñar. La educación hace que al niño le guste sumar, le guste la escuela, sienta alegría por lo que aprende, se enamore del estudio, del trabajo, de la ciencia, de la vida. Dr. Alfredo Ramos 2.1 El Humanismo Al final de la Edad Media, el Humanismo renacentista intentó alcanzar una mayor comprensión de Dios, del universo y, en general, del hombre mismo. El humanismo propuso que debía ser el hombre y no las Escrituras la piedra de toque para satisfacer las ansias humanas de desarrollo individual. De tal forma que el crecimiento de la persona estuviese regido desde su interior, no cediendo a los mandatos de cualquier impulso causal, sino observando los principios que el individuo debía formularse como guía de su conducta. Los humanistas consideraron a la enseñanza como “un proceso de inflexible autodisciplina que consistía en el desarrollo armónico de todas las inherentes potencias personales para que ninguna facultad creciera exageradamente a expensas de las demás”7. Veían a la enseñanza como la actividad en la que todas las capacidades personales estaban presentes en función de un aprendizaje significativo, autoiniciado, activo y autoevaluado, en el cual se intenta equilibrar la necesidad de aprendizaje intelectual con la necesidad de aprendizaje emocional. Para los humanistas, el método socrático fue un procedimiento didáctico muy popular en el que la función del maestro consistía en ayudar a los estudiantes a que se dieran cuenta de lo que ya existía en sus mentes. En éste, el profesor no proporciona ninguna información; en lugar de eso, busca obtener la información de sus alumnos por medio de preguntas certeramente planteadas. Este método está fundado en el principio de que el conocimiento es innato, pero que no se puede evocar sin la ayuda de un experto. 7 BIGGI, M. Y Hunt M. Bases psicológicas de la Educación, p. 338 21 Algunas características de la educación de corte humanista son las siguientes: La educaciónestá centrada en el alumno. Los estudiantes tienen la oportunidad de explorar y entrar en contacto con sus sentidos, autoconceptos y valores. La educación involucra los sentidos, las emociones, las motivaciones, los gestos y los disgustos de los estudiantes. El desarrollo de los contenidos va de acuerdo con los intereses y necesidades del estudiante. Se fomenta la efectividad personal. A la postura humanista, se le conoce también bajo el nombre “la tercera fuerza” de la psicología. Surgió en la década de los cuarenta como reacción a las dos fuerzas dominantes en la época: el conductismo y el psicoanálisis freudiano. El punto de vista humanista, con su énfasis en la persona total, se aplicó a la psicoterapia y fue aceptado entre los educadores en los años sesenta como una reacción a la estructura rígida de las escuelas. Esta visión humanista en el proceso de enseñanza-aprendizaje exigió un reordenamiento de las prioridades educativas, así como una redefinición del papel del maestro. Stephen Yelon marca una diferencia entre el modelo humanista y el modelo tradicional de la educación: “el modelo tradicional se ocupa primordialmente del contenido, ha definido al maestro como el instructor; mientras que la educación humanista se ocupa del desarrollo general del estudiante, desarrollo en las áreas cognoscitivas y afectivas y en esté modelo se define al maestro como el facilitador”8. Es así que el humanismo se basa en la hipótesis de que la gente es libre para tomar decisiones personales y asumir la responsabilidad de formar sus propias vidas; la implicación educativa de todo esto radica en que interviene y da forma al proceso de aprendizaje. Abraham Maslow y Carl Rogers son los defensores de la psicología humanista; 8 YELON, Stephen L. La psicología en el aula. p. 149 22 ellos pensaban que ni la psicología conductual, ni la freudiana daban una explicación adecuada del proceder de la gente. Maslow sostenía que la motivación acentúa las fuentes intrínsecas como las necesidades de “autorrealización”, mientras Rogers propugnaba por la tendencia innata a la realización. Estas teorías tienen en común “la idea de que la gente se ve motivada de continuo por la necesidad innata de desarrollar su potencial”9; de ahí que motivar a los estudiantes signifique cultivar sus recursos internos, su sentido de competencia, autoestima, autonomía y autorrealización. Los psicólogos seguidores de la teoría de Carl R. Rogers están menos preocupados por la mecánica del proceso del aprendizaje, porque consideran al “aprendizaje como una función de la totalidad de la persona pues afirman que el aprendizaje verdadero no puede ocurrir sin involucrar tanto al intelecto como a las emociones del estudiante, esto es, la motivación para el aprendizaje debe venir desde dentro, puesto que los humanos determinan su propia conducta y no están del todo sujetos a controles ambientales”10. El aprendizaje se vuelve participativo y mucho más efectivo porque los alumnos aprenden más debido a que la enseñanza está dirigida por ellos mismos, y como en ella se involucra a toda la persona (sentimientos e intelecto), por ello es más duradera y total. Desde el enfoque del aprendizaje de la psicología humanista, son de suma importancia las relaciones interpersonales, pues se concibe a los alumnos como seres humanos, funcionales, pensantes y con sentimientos; en tanto que al maestro se le mira como un ser que fomenta la participación activa en el proceso de aprendizaje y mantiene al mínimo las amenazas externas con el fin de aprovechar la curiosidad natural de aprender. Asimismo, un docente ofrece recursos materiales y actúa como un facilitador que ayuda a los alumnos a determinar sus metas de aprendizaje. El docente debe aceptar los pensamientos de los alumnos y debe expresarse abierta y honestamente, 9 WOOLFOLK, E. Anita. Psicología Educativa. p. 375 10 YELON, Stephen L. Op.cit., p. 147 23 aceptando sus propios sentimientos. De acuerdo con los humanistas, los seres humanos tienen un deseo natural por aprender, deseo que se estimula al proporcionar a los alumnos un ambiente de apoyo libre de amenazas donde “el docente es un facilitador más que un comandante”11. Todos los alumnos florecen y funcionan mejor cuando se reconocen sus logros. Si los maestros hacen un esfuerzo verdadero por reconocer la buena conducta e ignorar la indeseable así como por responder al logro y dar a los alumnos muchas oportunidades para que obtengan éxito, el aprendizaje progresará. Metas educacionales de los humanistas: Según Mary Jensen, algunas de las metas de la educación humanista son las siguientes12: Dar a los estudiantes la oportunidad de explorar y entrar en contacto con su sentido de identidad, sus autoconceptos y valores. Involucrar los sentimientos, las emociones, las motivaciones, los gustos y los disgustos de los estudiantes en el proceso de enseñanza- aprendizaje. Fomentar el aprendizaje personalmente significativo e integrado. Adaptar el contenido relevante a los propios intereses y necesidades del alumno; los estudiantes deben tener más libertad y responsabilidad en cuanto a qué, cuándo y cómo aprenden. Fomentar un sentido de efectividad personal. Posibilitar el control sobre la dirección de aprendizaje y vida; aceptar y 11 Ibidem, p. 160 12 Ibidem, p. 150-151. 24 cumplir en forma efectiva con la responsabilidad, y escoger lo que hacen y cómo lo hacen. Dar pie a un aprendizaje que crece y cambia tan rápidamente que los estudiantes necesitan más conocimientos, a causa de lo cual la educación humanista trata de implicar y adaptar a los estudiantes al cambio, ayudándolos a aprender cómo aprender, cómo resolver problemas y cómo efectuar modificaciones en sus propias vidas. Con el fin de lograr estas metas, los educadores humanistas rediseñan el salón de clases de modo que el docente no sea la persona más importante sino que “el docente sea más bien una persona-recurso, un facilitador del aprendizaje y no una figura central de mando”13. De esta manera, cuando los maestros dan un paso atrás respecto al raciocinio, los alumnos toman un papel más activo en el proceso del aprendizaje; cabe señalar que dar un paso atrás no implica no hacer nada, por el contrario, cuando el docente hace eso juega un papel muy activo. 2.1.1 Modelo Humanista de Abraham Maslow (1908-1970) Las teorías humanistas de Abraham Maslow y de Carl Rogers postulan no sólo esas ideas acerca de la educación. La contribución más conocida del primero es la “Teoría jerárquica de la motivación” donde se expone que la fuente de la motivación humana reside en necesidades que son comunes a toda la especie. Maslow supuso cinco niveles de necesidades humanas, ordenadas de las más fuertes a las más débiles: cuanto más baja esté una necesidad en la jerarquía, más fuerte será su influencia en la conducta; en contraste, cuanto más alta, más distintivamente humana será. Este teórico concibió a la persona como un todo integrado que funciona con base en motivos o necesidades que debe satisfacer para llegar a la “autorrealización”14 (fin máximo). Consideró al conductismo ortodoxo y al 13 Ibidem. p. 151 14 MASLOW, Abraham. , p.36 25 psicoanálisis demasiado rígidos teóricamente, así es que se dio a la tarea de desarrollar una teoría de la motivación que describiera el proceso por el que el individuo pasa de las necesidades básicas, como alimentarse y mantener relaciones sexuales, a las necesidades superiores. Él llamó necesidades de deficiencia a las que ocupan los cuatro nivelesinferiores (supervivencia, seguridad, pertenencia y autoestima), las cuales una vez que se satisfacen, disminuye la motivación para cumplirlas, de tal suerte que “una necesidad satisfecha ya no es necesidad, el organismo está dominado y su conducta está organizada sólo por las necesidades insatisfechas”15. A las tres que ocupan los niveles superiores (logro intelectual, apreciación estética y autorrealización), las denominó necesidades del ser; cuando éstas quedan satisfechas, no disminuye la motivación del individuo, sino que aumenta para buscar una mayor satisfacción. A diferencia de las necesidades de deficiencia, las del ser nunca se satisfacen por completo, por lo que la motivación para cumplirlas se renueva incesantemente. A continuación presento la pirámide de necesidades de Maslow: Jerarquización de Maslow Necesidades básicas Fisiológicas Hambre, sed, sueño, sexo, supresión del dolor. Son las menos importantes para una persona autoactualizada; su privación impide la aparición de las otras. Cuando esta frustración es prolongada puede llevar a enfermedades irreparables. 15 Ibidem. p. 317. 26 Seguridad Conservar el status quo, el orden, el equilibrio, la estabilidad, la protección y la dependencia. Si el niño no crece en un ambiente estable, estructurado, donde las reglas esté claras o donde no esté protegido, va a estar tratando constantemente de satisfacer estas necesidades; después, como adultos, se centra sólo en eso. La mayoría de las personas se encuentran en este nivel. Necesidades Sociales Amor y pertenencia Estima Pertenecer a grupos y sentirse aceptado. Amor propio y respeto de los demás hacia uno mismo. Los primeros ocho meses de vida son muy importantes en el nivel afectivo, esto es, en la demostración de cariño. En el desarrollo mientras más pronto ocurra la privación y más perdure, más permanentes y dañinos serán los efectos. La privación temprana puede llevar a un bloqueo permanente de esta necesidad. Se busca lograr retos y ser valorado. Si el sujeto es privado de ella, se va a sentir inseguro, minusválido. No le importa ya lo que diga la gente, especialmente si lo que se dice es positivo, no da crédito. Necesidades de desarrollo Autoactualización Satisfacer la naturaleza individual en todos sus Son únicas y varían en cada uno. Esto les va a permitir ser personas libres, lo que 27 Trascendencia aspectos. La necesidad de contribuir a la comunidad, entregando lo que se ha logrado. no implica ir contra la cultura pero, el sujeto reaccionará si ésta interfiere seriamente con la autoactualización. Son únicas y varían en cada uno. Sentido de obligación hacia los otros, de entregar lo que se ha logrado. En el primer grupo de necesidades, es decir, en el de necesidades básicas, se encuentran los requerimientos fisiológicos y de seguridad. Según Maslow, las necesidades fisiológicas (hambre y sed) son las primeras que deben ser satisfechas a fin de que haya motivación para realizar cualquier actividad, incluso de corte intelectual: “No es posible que un niño hambriento pueda estar suficientemente motivado para aprender”16. Junto a éstas se encuentran las necesidades de seguridad, mismas que deben cubrirse para que el niño encuentre el ambiente predecible, libre de amenazas y, con ello, apto para el aprendizaje. En el segundo grupo se ubica a las necesidades sociales, esto es, al amor, el sentido de pertenencia y la estima. Estas tres exigencias deben satisfacerse si se desea que el estudiante esté lo suficientemente motivado para aprender; por ejemplo, un individuo cuya autoestima se cuida manifestará confianza en sí mismo, valía, fuerza, capacidad, suficiencia y sentido de pertenencia, o sea, sentirá que es útil y necesario en el mundo. En el tercer y último grupo se encuentran las necesidades de desarrollo (autoactualización y trascendencia). Éstas se localizan al final de la jerarquía porque “Sólo después de satisfacer las otras necesidades, el ser humano 16 Ibidem. p. 317 28 queda libre para satisfacer el impulso de autorrealización incluye una necesidad de saber y comprender la gratificación de satisfacer las necesidades cognoscitivas básicas”17. La teoría de Maslow es una forma de contemplar de manera integral a la persona, cuyas necesidades físicas, emocionales e intelectuales están interrelacionadas a grado tal que si una esfera no se vigila y satisface se produce un desequilibrio notable; por ejemplo, si un estudiante no ve cubiertas estas necesidades, seguramente sufrirá sentimiento de inferioridad, debilidad y desamparo dentro e, incluso, fuera del aula. Debido a esta visión del individuo, la pedagogía de corte humanista ve en esta teoría un pilar sin el cual no se podría construir el conocimiento. 2.1.2 Modelo humanista de Carl Rogers (1902-1987) Carl Rogers fue creador y promotor de la terapia centrada en la persona; él partió del hecho de que las personas “nacen con tendencias constructivistas que necesitan ser expresadas”, pero que se deben dar las condiciones para ello. La tendencia hacia la actualización es considerada como una motivación positiva que impele al organismo a progresar y que va de lo simple a lo complejo; se inicia en la concepción y continúa en la madurez. El modelo humanista de Rogers tiene cuatro características básicas: Es organísmica (natural, biológica, una predisposición innata). Es activa (constante, los organismos siempre están haciendo algo, siempre están ocupados en su crecimiento). Direccional o propositiva (intencional, no es aleatoria, ni meramente activa). Es selectiva (no todas las potencialidades se realizan). Según esta tendencia todo ser humano tiene derecho a la aceptación 17 Ibidem. p. 317 29 incondicional, por ende el docente debe manifestarla hacia los alumnos, quienes, si no se sienten aceptados, van a generar conductas para serlo. Postulados de la teoría Rogeriana18: “Todo individuo vive en un mundo continuamente cambiante de experiencias de las cuales él es el centro. El individuo percibe sus experiencias como una realidad, y reacciona a sus percepciones. Su experiencia es su realidad.” Dicho de otro modo, la persona tiene más conciencia de su propia realidad que cualquier otro, nadie mejor puede conocer su marco interno de referencia. “El individuo posee la tendencia inherente a actualizar y desarrollar su organismo en la experiencia (proceso motivacional)”. Rogers acepta una única fuente de motivación en la conducta humana: “la necesidad innata de autoactualización (ser, ser lo que podemos llegar a ser, ser nosotros mismos, convertir la potencia en acto)”19. El hombre sólo está motivado por su tendencia a ser, que en cada persona se manifestará de forma distinta, es decir, el ser humano desarrolla todas sus capacidades de modo que le sirvan para mantenerse y expandirse. Rogers concibe tres formas de conocimiento que determinan la realidad: Conocimiento subjetivo: la calidad del conocimiento subjetivo se mejora cuando se establece contacto más estrecho con los procesos emocionales. Conocimiento objetivo: representa una forma de plantear hipótesis, especulaciones y conjeturas con respecto a marcos de referencias externos. Conocimiento interpersonal (fenomenológico): es la práctica del 18 ROGERS, Carl. Libertad y creatividad en la educación. p.206 19 Ibidem, p. 56 30 conocimiento empático, o sea, penetrar en el mundo privado, singular y subjetivo del otro para verificar la forma en que entiende sus conceptos. Carl Rogers considera al aprendizaje como una función de la totalidad de las personas. Afirma que el proceso de aprendizaje genuino no puede ocurrir sin: Intelecto del estudiante. Emociones del estudiante. Motivación para el estudiante. De esta teoría, surge la idea del aprendizaje significativo, pues implica experiencia directa, pensamientos y sentimientos. Este tipo de aprendizaje es autoiniciado, involucra a toda la persona e impacta en la conducta y actitudes de los participantes, quienes pueden llegar a cambiar su personalidad como resultado de este proceso educativo. Rogers define dos clases de aprendizaje20: 1. Aprendizaje sin sentido: no tiene significado personal para el individuo porque involucra sólo a la mente y carece de relevancia para la totalidad de la persona. 2. Aprendizaje significativo: implica experiencia directa, pensamiento y sentimientos; es autoiniciado, penetrante autoevaluado, es decir, evaluado por el alumno, quien determina si está satisfaciendo necesidades reales; involucra a toda la persona, marca una diferencia real en la conducta, las actitudes y, a veces, hasta en la personalidad del alumno. Rogers enuncia los siguientes principios del aprendizaje: Los seres humanos tienen un deseo natural de aprender, una curiosidad natural por conocer el mundo y una ansiedad de explorar y asimilar 20 Ibidem, p.70 31 nuevas experiencias. El aprendizaje es significativo y más rápido cuando el tema es relevante para el aprendiz. El aprendizaje se mejora con una reducción de amenazas externas (la humillación, el ridículo, la devaluación, el desprecio y el desdén). Estos actos bloquean a la persona misma, a la percepción que ésta tiene de sí y, por ende, interfieren en el aprendizaje. Cuando se minimiza la amenaza a la persona, ésta hace uso de las oportunidades para aprender. Este teórico marca ciertos aspectos que el docente-facilitador toma en cuenta en su trabajo educativo21: El facilitador ayuda a establecer el clima de la clase, es decir, determina la actitud hacia el aprendizaje. El facilitador ayuda a los demás alumnos a interpretar sus objetivos y les otorga cierta libertad para elegir lo que quieren hacer. El facilitador ayuda a cada estudiante a utilizar sus propios impulsos y objetivos como fuerzas motrices en el aprendizaje. El facilitador ofrece un amplio abanico de recursos para el aprendizaje: materiales, audiovisuales, libros, todo recurso imaginable, inclusive la propia experiencia y comprensión del facilitador. El facilitador acepta las opiniones y el sentir de los alumnos, acepta a la gente como es. Idealmente el facilitador se comparte así mismo con el grupo. Este autor manifiesta firmemente que con dicho enfoque del aprendizaje la gente cuenta con las relaciones interpersonales necesarias para liberar el potencial humano y aprender. Además afirma que si no se presta más “atención importante y positiva al aspecto humano e interpersonal del dilema educativo, la civilización se dirige a un callejón sin salida”22. Con 21 Ibidem. p. 151 22 Ibidem. p. 152. 32 todo esto se quiere decir que únicamente los docentes que actúen como personas en sus relaciones con los alumnos, podrán comenzar a producir resultados efectivos. De acuerdo con Carl Rogers, el aprendizaje significativo no puede realizarse con un curriculum rígido, asignaturas uniformes, pruebas, lecturas y calificaciones; por el contrario, “el verdadero aprendizaje es impulsado por la curiosidad, curiosidad intensa sobre un tema en particular, que motiva al alumno a aprender todo lo posible sobre este tema”23. Partiendo de esta idea, Rogers hace varias sugerencias para crear un ambiente en el cual se pueda producir el aprendizaje dentro del salón de clases: Investigue qué les interesa a sus alumnos y elabore su programa, de acuerdo con sus intereses. Aproveche su tiempo para adquirir recursos, tanto humanos como materiales, que pondrá en disposición de sus alumnos. Proporcione y dé a elegir toda clase de recursos incluyendo instrucción programada. Pida a los alumnos que preparen contratos de aprendizaje en los cuales manifiesten la meta que desean alcanzar, cómo piensan conseguirla y cómo la van a evaluar. Utilice métodos de descubrimiento. Represente problemas y formule preguntas centrales que proporcionen ideas para solucionar los problemas. Enfatice la autoevaluación. Permita que los estudiantes se responsabilicen por alcanzar las metas. Rogers apunta que gracias al humanismo se crea una relación entre el alumno y el docente que facilita el aprendizaje, una relación en la que el aprendiz se siente libre para desarrollar su propio potencial, para aprender qué es más importante para él. 23 Ibidem, p.153 33 2.2 El Constructivismo Otra de las corrientes que son importantes en la educación es el constructivismo, tendencia que sigue algunos postulados del humanismo, sobre todo los que giran en torno a las figuras inmersas en el proceso de enseñanza- aprendizaje, su relación entre ellas y la relación con su contexto social y cultural. En sus orígenes el constructivismo surge como una corriente epistemológica preocupada por discernir los problemas de la formación del conocimiento en el ser humano. Este enfoque abarca teorías y autores diversos que se remontan al primer tercio del siglo XX y se enlaza con las más actuales teorías sobre el procesamiento de información. El constructivismo también bebe de Vico, Kant, Marx o Darwin, quienes tenían la firme convicción de que los seres humanos son productos de su capacidad para adquirir conocimientos y para reflexionar sobre sí mismos, lo que les permite anticipar, explicar y controlar propositivamente la naturaleza así como construir la cultura. Mario Carretero define al constructivismo como la tendencia pedagógica que ve al “individuo tanto en los aspectos cognitivos y sociales del comportamiento como en los afectivos; no es un mero producto del ambiente ni un simple resultado de sus disposiciones internas, sino una construcción propia que se va produciendo día a día como resultado de la interacción entre esos dos factores.”24 De esta forma, el conocimiento no es una copia fiel de la realidad, sino una construcción del ser humano. Este proceso depende de los aspectos que a continuación se enuncian: 1) los conocimientos previos o representación que se tengan de la nueva información, la actividad o tarea a resolver. 2) la actividad externa o interna que el aprendiz realice al respecto. 3) la revalorización del papel del docente, no sólo en sus funciones de transmisor del conocimiento, guía o facilitador del aprendizaje sino como mediador del mismo, enfatizando el papel de la ayuda pedagógica 24 CARRETERO, Mario. Procesos de enseñanza y aprendizaje, p.146 34 que presta reguladamente el alumno. Se tiene claro que el aprendizaje constructivista supone una construcción que se realiza a través de un proceso mental que finaliza con la adquisición de un conocimiento nuevo, cuya base son los conocimientos previos que el alumno o alumna posean. A partir de este entendido, el constructivismo se concibe como un modelo que propugna por la persona total, es decir, el hombre cognitiva, social y afectivamente hablando. Para los constructivistas, el hombre no es un mero producto del ambiente ni un simple resultado de sus disposiciones internas, sinouna construcción propia que se va produciendo día a día gracias a la relación con el medio que lo rodea, misma que le permitirá adquirir una nueva competencia, generalizar y aplicar lo que ya conoce a una situación nueva. Según Tama, el profesor en su rol de mediador debe apoyar al alumno para: “Enseñarle a pensar”25, o sea, desarrollar en el alumno un conjunto de habilidades cognitivas que les permitan optimizar sus procesos de razonamiento. “Enseñar sobre el pensar”26, en otras palabras, animar a los alumnos a tomar conciencia de sus propios procesos y estrategias mentales (metacognición) para poder controlarlos y modificarlos (autonomía), mejorando el rendimiento y la eficacia en el aprendizaje. “Enseñarle sobre la base del pensar”27, esto quiere decir, incorporar objetivos de aprendizaje relativos a las habilidades cognitivas dentro del currículo escolar. La concepción constructivista del aprendizaje escolar se sustenta en la idea de que la finalidad de la educación que se imparte en las instituciones educativas es promover los procesos de crecimiento personal del alumno en el marco de 25 Cit. Pos. DIAZ, Barriga Frida. Estrategias docentes para un aprendizaje significativo. p. 37 26 Loc. Cit. p. 37 27 Loc. Cit. p. 37 35 la cultura del grupo al que pertenece; el aprendizaje es siempre una reconstrucción interior y subjetiva. Estos aprendizajes no se producirán de manera satisfactoria a no ser que se suministre una ayuda específica mediante la participación del alumno en actividades intencionadas, planificadas y sistemáticas que logren propiciar en éste una actividad mental constructivista. Así, la construcción del conocimiento puede analizarse desde dos vertientes: Los procesos psicológicos implicados en el aprendizaje. Los mecanismos de influencia educativa susceptibles de promover, guiar y orientar dicho aprendizaje. El Constructivismo expone que el ambiente de aprendizaje óptimo es aquel donde existe una interacción dinámica entre los instructores, los alumnos y las actividades. Los primeros y las terceras deben facilitar la creación de verdades propias mediante el anclaje de la cultura y el contexto actual, operación que permitirá el entendimiento de lo que está sucediendo en la sociedad y la construcción de nuevos conocimientos claramente apropiados por el sujeto cognoscente. Ellis Jeanne en Aprendizaje Humano, menciona que “es mediante la realización de aprendizajes significativos que el alumno construye significados que enriquecen su conocimiento del mundo físico y social, potenciando así su crecimiento personal.28 De esta manera, los tres aspectos clave que favorecen el proceso instruccional son el logro del aprendizaje significativo, la memorización comprensiva de los contenidos escolares y la funcionalidad de lo aprendido. La postura constructivista rechaza la concepción del alumno como un mero receptor o reproductor de los saberes culturales: “el alumno es el responsable último de su propio proceso de aprendizaje es él quien construye el conocimiento y nadie puede sustituirle en esta tarea.”29 De 28 Cit. Pos. Carretero, Mario, Procesos de enseñanza y aprendizaje, p. 30 29 BARBERA, ELENA, et al. El constructivismo en la práctica, p. 20 36 ahí que la institución educativa deba promover el doble proceso de socialización y de individualización que permita a los educandos construir una identidad personal en el marco de un contexto social y cultural determinados. Las tomas de postura sobre la naturaleza esencialmente social de la educación y las relaciones entre el desarrollo personal y el proceso de integración social constituyen el encuadre en el que hay que situar el proceso de construcción del conocimiento de la escuela. De acuerdo con la aproximación psicogenética, el maestro es un promotor del desarrollo y de la autonomía de los estudiantes. A raíz de esto, la docencia enfrenta diversos retos y demandas. Una de esas demandas es que la tarea docente no se debe restringir a una mera transmisión de información, o sea, para ser un profesor no es suficiente dominar una materia o disciplina, lo cual obliga a analizar el papel que desempeña el profesor en el proceso de enseñanza-aprendizaje: el docente se convierte en un artista porque su labor es una práctica cuyo objetivo es desarrollar habilidades, actitudes y destrezas, así como dotar al sujeto de ,múltiples saberes que le servirán no sólo en lo estrictamente académico sino también en el desarrollo de la vida. El proceso de aprendizaje se lleva a cabo en situaciones sociales y de convivencia donde cada actor interactúa de manera activa y significativa en el desarrollo de este proceso. Postic en Relación educativa menciona que “los alumnos son actores en el proceso aprender-enseñar, que actúan por sus actitudes, por sus actos, que manifiestan comportamientos operantes, es decir, de decisión, que afectan a su aprendizaje y al de los otros con quienes ellos están en comunicación”30. Dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje, la interacción educativa que se da es de suma importancia para que se adquieran conocimientos y habilidades que sirvan para el desarrollo integral del educando; por esta razón, debe verse al estudiante dentro de un medio que está caracterizado socialmente y en cual se tejen relaciones simbólicas, afectivas, comunicativas, sociales, de valores, 30 POSTIC, Marcel. La relación educativa,.p.13 37 etcétera, tal como lo señala Marcel Postic: “el proceso enseñanza- aprendizaje se efectúa en un medio caracterizado sociológicamente, que sobrepasa el marco de la clase y de la escuela”31. Díaz Barriga dice que el método de enseñanza que debe seguir el docente, no es único, es decir, no hay vía única para promover el aprendizaje, es necesario que el docente, mediante un proceso de reflexión sobre el contexto y características de su clase, decida qué conviene hacer en cada caso considerando lo siguiente32: Las características, carencias y conocimientos previos de sus alumnos. La tarea de aprendizaje a realizar. Los contenidos y materiales de estudio. Las intencionalidades u objetivos perseguidos. La infraestructura y facilidades existentes. El sentido de la actividad educativa y su valor real en la formación del alumno. Estos son algunos de los aspectos que se deben retomar para que la práctica docente sea de calidad, ya que en la interacción educativa no sólo es el trabajo del docente el que se muestra dentro del aula, sino que alumno y profesor gestionan de manera conjunta la enseñanza y el aprendizaje en un proceso de participación guiada. Schon destaca la “enseñanza a través de la reflexión en la acción”33 y manifiesta que el diálogo entre el docente y el alumno es condición básica para un aprendizaje práctico y reflexivo. Con dicha dialéctica, el maestro transmite mensajes a sus aprendices tanto en forma verbal como en la forma de ejecutar las sesiones. En general, la concepción constructivista del aprendizaje y de la enseñanza 31 Ibidem, p.13 32 DIAZ, Barriga Frida. Estrategias docentes para un aprendizaje significativo. p3 33 SHON, Donald. El profesor reflexivo. p.65 38 parte del hecho obvio de que la escuela hace accesibles a sus alumnos aspectos de la cultura que son fundamentales para el desarrollo cognitivo y personal. La educación se vuelve motor para el desarrollo global, lo que supone el trabajo de las capacidades motrices, de equilibrio personal, de inserción social y de relación interpersonal; además, dota de la capacidad para elaborar una representación personal sobre un objeto de larealidad o contenido. Cesar Coll afirma que la postura educativa constructivista se alimenta de las aportaciones de diversas corrientes psicológicas: “el enfoque psicogenético piagetiano, la teoría de los esquemas cognitivos, la teoría ausubeliana de la asimilación y el aprendizaje significativo y la psicología sociocultural vigotskiana”34; por ello es necesario que tomemos en cuenta este último modelo, cuya coincidencia con los otros radica en que se valoran las relaciones interpersonales entre el docente y el alumno, las implicaciones sociales y culturales que tiene el acto de compartir, el papel del trabajo docente y del alumno, así como la relación entre ellos en un núcleo social. 2.2.1 Modelo constructivista de Vigotsky (1896-1934) El psicólogo ruso Lev Vigotsky dirigió numerosos estudios sobre el pensamiento infantil. Él estaba convencido: “de que son los adultos quienes promueven el aprendizaje y el desarrollo de los niños de una manera intencional y sistemática”35 ya que implican constantemente a los niños en actividades significativas e interesantes y ayudan a dominar esas actividades. Debido a que Vigostky destacó la importancia de la sociedad y la cultura para la promoción del desarrollo cognitivo, su teoría suele denominarse perspectiva sociocultural. Sus postulados son los siguientes: Los procesos mentales complejos tienen su origen en actividades sociales: a medida que los niños se desarrollan, van interiorizando 34 COLL, Cesar. Psicología y curriculum. p.23 35 ELLIS JEANNE. Aprendizaje humano, p. 193 39 progresivamente tales procesos hasta que pueden utilizarlos sin depender de las personas que les rodean. Él propuso que muchos procesos de pensamiento tienen raíces en las interacciones sociales (conversaciones, argumentos, etc.) que se establecen entre los niños y otras personas ya sean adultos o con sus iguales. Durante los primeros años de vida, el pensamiento y el lenguaje se van haciendo cada vez más interdependientes. Vigotsky propuso que, en contraste con lo que ocurre con los adultos, el pensamiento y el lenguaje suponen funciones completamente independientes de los niños. Durante los primeros años de vida, el pensamiento se produce de manera independiente del lenguaje, y cuando éste aparece, suele utilizarse como un medio de comunicación y no tanto como un mecanismo del pensamiento. Tanto a través de las conversaciones informales como de la escolaridad formal, los adultos transmiten a los niños las diversas maneras en las que su cultura interpreta y responde al mundo. Con esto quiere decir que gracias a la interacción con los niños, los adultos comparten el significado que ellos mismos atribuyen a los objetos, a los acontecimientos y, de manera general, a la experiencia humana. En este proceso se transforman o median las situaciones que van encontrando los niños. Los niños pueden realizar tareas más difíciles cuando reciben la ayuda de personas cognitivamente más competentes que ellos. Vigotsky distinguió dos tipos de capacidad que los niños pueden poner de manifiesto en un momento concreto de su desarrollo: el nivel actual de desarrollo de un niño y el nivel de potencial de desarrollo. El primero es el límite máximo de una tarea que es capaz de realizar de manera independiente. El segundo es el límite superior de tarea que pueden realizar con la ayuda de una persona más competente. Las tareas difíciles promueven un desarrollo cognitivo máximo. Al 40 conjunto de tareas que los niños todavía no pueden hacer por sí mismos, pero si con la ayuda de otras personas más competentes se le llama: zona de desarrollo próximo (ZDP). Esta zona incluye las capacidades de aprendizaje y de resolución de problemas que están a punto de empezar a desarrollarse en el niño. La principal contribución de Vigostky consistió en brindar una concepción social del aprendizaje, lo cual representó un gran avance ya que dejó de considerarse a la educación como una actividad individual y se transformó en una labor de carácter social. Esta concepción del aprendizaje permite que el estudiante aprenda de forma cooperativa y grupal, situación que se asimila de mejor manera, aprende más, se siente más motivado, aumenta su autoestima y aprende habilidades sociales más efectivas. Al tomar en cuenta estas dos corrientes teóricas de la educación, el humanismo y el constructivismo, se descubre la importancia que tienen las relaciones interpersonales, las emociones, la motivación y el papel del docente, a quien se le ve como un facilitador o un acompañante en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Así tanto el Humanismo como el Constructivismo presentan un modelo de enseñanza en el que el papel del educando es activo y la relación social que se da entre el educando y el docente es de vital importancia para el mejoramiento del aprendizaje y la adquisición de conocimientos; no sólo es la relación entre estos dos actores de la educación sino también entre sus iguales y su medio o contexto social específico. El Humanismo aparece como un fundamento filosófico por su relevancia en la justificación de la educación, ya que promueve el desarrollo armónico y multifacético de los estudiantes, debido a que se considera a cada ser humano como un individuo capaz de establecer encuentros enriquecedores y trascendentales entre ellos y su entorno. El Constructivismo ve al proceso de enseñanza-aprendizaje como la construcción holística y gradual del ser humano, la cual involucra factores cognitivos, sociales y afectivos que se tejen al relacionarse con otros hombres, 41 cuyas experiencias enriquecen y facilitan la adquisición de aprendizajes. En estas dos posturas de la educación se marca la importancia que tienen las relaciones sociales y, se realza la importancia que tienen las emociones, la motivación, el papel del docente, el papel del alumno, la interacción del estudiante con sus iguales y, en general, con la sociedad. 42 CAPÍTULO III: VÍNCULOS PEDAGÓGICOS “El docente tiene por tarea esencial desarrollar el respeto y el amor a la verdad, la reflexión personal, los hábitos de libre examen, al mismo tiempo que el espíritu de tolerancia, el sentimiento del derecho de la persona humana y de la dignidad, la conciencia de la responsabilidad individual al mismo tiempo de la justicia y de la solidaridad sociales.” Gregorio Torres Quintero. Vocación viene de la raíz latina vocare que significa llamar; encuentra su expresión en el cauce de la obligación pública y la realización personal, sobre todo, en el trabajo de valor social. El trabajo, visto a través del cristal de la vocación, es percibido como la realización del individuo, ya que ayuda a construir un sentido propio y una identidad personal; además es observado como un trabajo que implica un servicio para los demás y una satisfacción a raíz del cumplimiento del mismo, tal como ocurre en el proceso de enseñanza- aprendizaje. La enseñanza vista como vocación, significa conducir a otros a saber lo que no sabían antes, guiar a otros para que puedan realizar lo que no sabían en su tiempo, es decir, guiar a los demás a tomar actitudes u orientaciones que no adoptaban antes. Bajo esta óptica, en las relaciones entre docente-alumno se pueden presentar o suscitar sentimientos duraderos y formativos, esperanzas y comprensiones en los estudiantes y los profesores. 3.1 Docente-Alumno Los vínculos pedagógicos que se llevan a cabo en el aula tienen un gran peso dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje y, por ello, es necesario tomar en cuenta el papel del docente, el papel del alumno, la relación interpersonal entre los dos actores y, a su vez, los determinantes de su relación. El acto de educar implica interaccionesmuy complejas, las cuales involucran cuestiones simbólicas, afectivas, comunicativas, sociales y de valores. De manera que un profesional de la docencia debe ser capaz de ayudar 43 propositivamente a otro a aprender, pensar, sentir, actuar y desarrollarse como persona. Al trabajar con seres humanos es forzosa la presencia de las relaciones sociales, mismas que marcan ciertas conductas de comportamiento, como lo menciona Noemí Allidiéri: “los seres humanos nos constituimos como tales en virtud de nuestras relaciones con los otros”36. En la infancia se da la primera relación significativa: primero la madre con la que, sí las cosas se desarrollan predominantemente bien, se creará un vínculo con características de díada simbiótica narcisista. Aquí también aparece el vínculo con el padre, hermanos, abuelos, tíos, primos y otros personajes importantes de la trama familiar. Posteriormente se constituirán lazos afectivos con otros significativos que, en este caso, son extrafamiliares, por ejemplo los docentes y amigos. En esta etapa del desarrollo humano, el docente tiene un papel fundamental en la evolución educativa del ser humano, pues aquí el docente inicia la relación educativa, o sea, el conjunto de vínculos sociales que se establecen entre el educador y los individuos que él educa para llegar a objetivos proyectados en una estructura institucional dada. Cabe señalar que estas relaciones poseen características cognitivas y afectivas identificables. Este tipo de lazos requiere que el profesor exprese atención moral; dicho de otro modo, estar alerta a las respuestas de los alumnos en relación con las oportunidades de crecimiento personal: “La atención moral nace, del hecho de ser consciente de que cada alumno es un ser humano único e irrepetible que encara una serie de predisposiciones, capacidades, conocimientos y perspectivas particulares y en desarrollo.”37 Desde este punto de vista, los vínculos básicos entre el profesor y el alumno no son ideológicos, sino que en realidad son intelectuales y morales, relativos a su conocimiento, comprensión y crecimiento emergente como personas. La atención moral e intelectual de un profesor hacia los alumnos no es un 36 ALLIDIERE, Noemi. El vinculo profesor alumno, p. 15 37 HANSEN, David. Explorando el corazón moral de la enseñanza, p. 27 44 medio para lograr un fin, sino un acto inherente al docente, tal como lo menciona Hansen: “los profesores no atienden a sus estudiantes para favorecer el aprendizaje, les prestan atención porque eso es lo que significa ser profesor. La docencia conlleva una relación moral, no sólo académica, no sólo entre el profesor y el alumno; esa relación se manifiesta en el modo en que los docentes tratan la asignatura y a los alumnos”. 38 Esto revela que todo trato con un alumno conlleva una percepción y juicio moral. La relación que existe entre docente y alumno genera experiencias significativas en las que lo importante no es cumplir con el programa o emplear medios didácticos sofisticados, sino que sean coherentes y auténticos. Estas cualidades se observan en las relaciones educativas que propugnan por el desarrollo emocional y el dominio de un tema determinado, así como por la interacción docente-alumno, en la cual “el alumno reflexiona acerca de lo que oye decir o ve hacer al docente tanto en forma verbal como en la forma de ejecutar”39. 3.2 El papel del docente Uno de los actores fundamentales en la enseñanza es el docente porque de él dependen la comprensión y los conocimientos; no obstante, es difícil llegar a un consenso acerca de cuáles deben ser los conocimientos y habilidades que un “buen profesor” debe poseer, pues ello depende de la opción teórica y pedagógica que se tome, de la visión filosófica, de los valores y fines de la educación. En torno a esta cuestión, hay preguntas cuyas respuestas son difíciles o, incluso, inciertas: ¿quién debería ejercer el papel de profesor?, ¿qué tipo de persona debería ser?, ¿qué tendría que hacer en la clase?, ¿qué conocimientos debería tener?, ¿de cuánta autonomía o libertad de acción podría disponer?, entre otras. Marcar un perfil idóneo sobre el buen profesor se 38 Ibidem. p. 27 39 DIAZ, Barriga Frida. Estrategias docentes para un aprendizaje significativo. p18 45 vuelve algo complicado, ya que existe infinidad de criterios que oscilan entre la tradición y la modernidad educativa. De lo que sí estamos seguros es que el profesor es una persona, “alguien que entiende mucho de una asignatura y la puede enseñar con eficacia a los alumnos”40. Con base en esta certeza, los profesores han de comprender lo que enseñan y han de tener las habilidades necesarias para transmitir esos conocimientos a la clase. Hoy más que nunca la profesión de la docencia enfrenta diversos retos y demandas. Es un clamor social que la tarea docente no se restrinja a una mera transmisión de información y que, por tanto, el papel del profesor no consista solamente en dominar una materia o disciplina. El acto de educar implica interacciones muy complejas porque involucra cuestiones simbólicas, afectivas, comunicativas, sociales y de valores, ya que un profesional de la docencia debe ser capaz de ayudar propositivamente a otros a aprender, pensar, sentir, actuar y desarrollarse como personas. En Explorando el corazón moral de la enseñanza41, Hansen menciona ciertas características del rol docente: La docencia implica acciones poco habituales Los profesores deben desarrollar métodos formales de juzgar las ideas y las acciones de los demás. Los profesores no pueden actuar de un modo informal. Los profesores no pueden depender sólo del sentido común. El profesor debe ser una persona. El profesor tiene la facultad de actuar, puede forjar sus intenciones, obrar según ellas, pensar sobre lo que hace, sentir, usar su imaginación y recordar cosas relevantes para el trabajo. El profesor, en tanto que persona, es un ser social, un ser que conoce el tipo de interacciones personales que se producen en las escuelas y en las aulas. La paciencia es esencial en el proceso de enseñanza-aprendizaje; 40 Ibidem, p. 40 41 HANSEN, David. op. cit. p. 41 46 cualquier profesor que carezca de esta cualidad o, al menos, del esfuerzo por desarrollarla, forzosamente tendrá dificultades, aun cuando sea la persona más sabia del mundo. Cada uno de estos puntos marca algunas de las cualidades que el profesional de la educación debe tener en su actuar educativo. Como docente, la persona pretende estimular el aprendizaje entre los alumnos. Esa intención se materializa en la elaboración de un buen currículo, el diseño y planificación coherente de las clases y el préstamo de atención a os alumnos, vistos no sólo como colectivo sino como individuos. El docente cumple con ciertos roles dentro del aula42: Orientador: recomienda modos de acción al estudiante. Asesor: ayuda al estudiante a descubrirse. Mantenedor de la disciplina: se adhiere a reglas y administra sanciones. Informador: dirige el aprendizaje y la disertación. Motivador: se sirve de recompensas para fomentar la actividad anticonformista. Mediador: obtiene ayuda de agencias externas. Hay también roles de enseñanza que el docente ejecuta: Motivador Persona de recurso Evaluador Adaptador Aunado a estos roles, se da una relación de aceptación entre docente-alumno: El docente valora al alumno. El docente confía en el alumno. El docente establece empatía con el alumno. 42 POSTIC, Marcel. La relación educativa, p. 136. 47 El docente
Compartir