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USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA PROBLEMÁTICA AMBIENTAL Y ECONOMICA DEL USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA ENVIRONMENTAL AND ECONOMIC PROBLEMS OF THE USE AND DISPOSAL OF FEMALE HYGIENE PRODUCTS Mary Sanmiguel Vargas Ingeniera ambiental Estudiante de posgrado Bogotá Colombia. Est.mary.sanmiguel@unimilitar.edu.co Artículo de Investigación DIRECTOR Ph.D. Ximena Lucía Pedraza Nájar Doctora en Administración – Universidad de Celaya (México) Magíster en Calidad y Gestión Integral – Universidad Santo Tomás e Icontec Especialista en gestión de la producción, la calidad y la tecnología - Universidad Politécnica de Madrid (España) Especialista en gerencia de procesos, calidad e innovación – Universidad EAN (Bogotá D.C.) Microbióloga Industrial – Pontifica Universidad Javeriana Auditor de certificación: sistemas de gestión y de producto Gestora Especialización en Gerencia de la Calidad - Universidad Militar Nueva Granada ximena.pedraza@unimilitar.edu.co; gerencia.calidad@unimilitar.edu.co ESPECIALIZACIÓN EN GESTIÓN INTEGRAL AMBIENTAL UNIVERSIDAD MILITAR NUEVA GRANADA FACULTAD DE INGENIERÍA NOVIEMBRE DE 2021 USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA PROBLEMÁTICA AMBIENTAL Y ECONOMICA DEL USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA ENVIRONMENTAL AND ECONOMIC PROBLEMS OF THE USE AND DISPOSAL OF FEMALE HYGIENE PRODUCTS Mary Sanmiguel Vargas Ingeniera ambiental Estudiante de posgrado Bogotá Colombia. Est.mary.sanmiguel@unimilitar.edu.co RESUMEN La disposición de residuos es un problema que enfrenta cada uno de los habitantes de Colombia; aunque se cree que en su mayoría, los residuos son tratados, separados y enviados a un lugar con las condiciones y características indicadas para ser intervenidos correctamente, no es lo que ocurre. Uno de los principales residuos que puede llegar a tener un impacto en el medio donde se disponen son los residuos higiénicos, ya que ni en los hogares colombianos o en los lugares de disposición son identificados o separados. Estos llegan al mismo lugar con materiales aprovechables o con diferentes características. Adicionalmente, los residuos de higiene incluyen deshechos médicos o anatomopatológicos, debido a que contienen fluidos corporales. Esto los clasifica como residuos peligrosos y, principalmente, con un periodo extenso de degradación. Un claro ejemplo de este tipo de residuos son los productos de higiene femenina que usualmente son desechados en promedio 4 veces al día cuando las mujeres se encuentran en su periodo menstrual. En Colombia, más de la mitad de habitantes son mujeres lo cual hace que los productos de higiene femenina tengan una alta demanda en el mercado y, a su vez, sean desechados sin algún control o condición. Como consecuencia, se hace evidente la necesidad de conocer y analizar los impactos ambientales que generan los métodos no convencionales y alternativos de higiene femenina que ofrecen las mismas funciones, pero con uso sostenible. Palabras clave: higiene femenina, copa menstrual, disposición de residuos, toalla higiénica, tampones, impacto. ABSTRACT Waste disposal is a problem faced by each of the inhabitants of Colombia; although it is believed that most of the waste is treated, separated, and sent to a place with the conditions and characteristics indicated to be properly intervened, this is not what happens. One of the main wastes that can have an impact on the environment where they are disposed of is hygienic waste, USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA since neither in Colombian homes nor in the places of disposal, they are identified or separated. These arrive at the same place with usable materials or with different characteristics. Additionally, hygiene waste includes medical or pathological waste, because it contains bodily fluids. This classifies them as hazardous waste and, mainly, with an extended period of degradation. A clear example of this type of waste are feminine hygiene products that are usually discarded on average 4 times a day when women are on their menstrual period. In Colombia, more than half of the inhabitants are women, which means that feminine hygiene products have a high demand in the market and, in turn, are disposed of without any control or condition. As a consequence, the need to know and analyze the environmental impacts generated by unconventional and alternative feminine hygiene methods, which offer the same functions, but with sustainable use, becomes evident. Keywords: feminine hygiene, menstrual cup, waste disposal, hygienic towel, tampons, impact. INTRODUCCIÓN En 1992, en la cumbre de Río se reunieron ciudadanos y entes gubernamentales con el fin de ocuparse de las amenazas ecológicas más graves de nuestro tiempo: el cambio climático, la erosión de la biodiversidad, la disminución y contaminación de los recursos acuíferos y la acumulación de residuos tóxicos, no siendo la última la menos importante. (Shiva, 2001). Desde entonces el enfoque en cuanto a la basura que producimos y desechamos de buena o mala manera ha comenzado a tomar fuerza. Un claro ejemplo se denota cuando Shiva (2001) menciona que los países desarrollados producen el 90 por ciento anual de los residuos peligrosos del mundo. Estados Unidos genera más de 275 millones de toneladas de residuos tóxicos cada año; convirtiéndose así en el mayor exportador de residuos en el mundo. El mismo autor menciona que el acto colateral a lo mencionado, es el aumento de leyes restrictivas y costes de tratamiento o recuperación de tal magnitud de residuos producidos, razón por la cual, los países desarrollados optaron por ofrecer precios lucrativos a países en desarrollo que se encarguen de USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA realizar el proceso adecuado a sus residuos, dato que también describe el autor del texto cuando enfoca que gran parte de los países industrializados está usando a India como vertedero, ya que para ellos es más rentable económicamente arrojar cada uno de los desperdicios recolectados a los países en desarrollo pues en estos estados aún no existe una ley que prohíba verter, quemar o enterrar los residuos (Shiva, 2001. p.1). En Colombia, a partir de los años setenta del siglo pasado, se concibió y se comenzó a mencionar en la normativa lo que es la protección del medio ambiente, cuando se expidieron las primeras normas que mencionaron el tema ambiental para su gozo y consecuente protección bajo la responsabilidad de los ciudadanos. Es así como se expresa en el artículo 79 de la Constitución política de 1991, en el que se define el derecho a gozar de un ambiente sano, y este queda pactado como un derecho colectivo que a su vez vino acompañado de deberes que cada uno de los ciudadanos debe cumplir, de lo contrario las acciones negativas pueden llegar a infringir esta norma y convertirse en una acción de tutela, dependiendo de la magnitud. (Cortés, 2018. p.14- 15). Ahora bien, para poder gozar de este entorno y medio ambiente sano se deben reforzar los esfuerzos en una de las problemáticas ambientales que se viven a diario en nuestras vidas y que quizás se infringen debido a las costumbres que son adquieridas a través de la familia: la disposición de residuos en el hogar. Si se dimensiona la cantidad de residuos que se producen en nuestros hogares encontramos que la mayor parte de estos son residuos de higiene, pues son de consumo diario y así mismo, son los que se desechan sin ningún tipo de tratamiento y/o separación. Es allí donde comienza este análisis. Según Gómez (2000), en Colombia se producen a diario cerca de 19.000 toneladas de residuos sólidos, cada uno de estos residuos atraviesa por un proceso de selección, los residuos que nopueden ser reciclados y no tienen un uso adicional USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA deben tener una disposición controlada, esto último mencionado es el componente con menos desarrollo en cuanto a temas de disposición final adecuada dado que un bajo porcentaje de municipios del país cuentan con rellenos sanitarios diseñados estratégicamente para dar un buen manejo a los residuos recibidos. (Gómez, 2000. P.42) Contrario a lo que se cree, los rellenos sanitarios es la técnica que menos se practica en Colombia, de los 1.902 municipios existentes en el país, 350 disponen los residuos en rellenos sanitarios, en su mayoría sin ninguna clasificación o separación, en el caso de los municipios faltantes cuentan con sistemas de enterramiento (rellenos no tecnificados), vertederos-botaderos y quemas a cielo abierto, 32 municipios realizan la disposición en cuerpos de agua y 5 optan por sistemas de incineración, de la cantidad inicial presentada de municipios solo 44 aprovechan algunos residuos utilizando compostaje o plantas integrales. Debido a que el manejo de la disposición de residuos en Colombia es deficiente y no se presenta separación en la fuente el Gobierno creó la ley 142 de 1994 donde se estipula la responsabilidad que tienen los municipios y distritos de verificar que el servicio público de aseo se presente eficientemente sin afectar el medio donde se desarrolle. Es responsabilidad de cada una de las corporaciones autónomas regionales, autorizar la ubicación del sitio de disposición, el modo en que se realizará, la duración y forma de disposición a las compañías que prestarán el servicio de aseo (EPM, 2020). Según la Unidad Administrativa de Servicio Públicos (UAESP), la mayoría y para ser exactos el 78 % de los hogares colombianos no separa los residuos ni recicla, enviando cada uno de ellos ya sean de diferentes características e incluso peligrosos al botadero o al sitio de disposición con el que cuente el municipio en cuestión. Es importante aclarar que aparte de la problemática presentada por la cantidad de residuos también debemos identificar estos qué producen y para no ir más lejos, se identifica que el 8 % de las emisiones de gases efecto USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA invernadero son provocados por rellenos sanitarios, debido a los continuos procesos de descomposición que en ellos se presentan y/o a la degradación de los residuos orgánicos dispuestos allí. (Kienyke, 2021) En la actualidad en Colombia se producen 11,6 millones de toneladas de residuos al año, si este consumo se mantiene, esta generación se incrementará 20 % en la próxima década. Los residuos producidos en su mayoría son artículos de único uso como plásticos que, siguiendo los principios representados en la economía circular y además si realizáramos una disposición y separación adecuada en la fuente, se podrían reutilizar o tratar de una mejor manera ya que su proceso de descomposición tarda más de 100 años. Esto mismo se podría realizar con otro tipo de residuos, los orgánicos, los cuales, como se mencionaba anteriormente, se podrían tratar y clasificar para realizar compostaje e incorporarlos de nuevo al medio positivamente. (Editorial La República S.A.S. 2019). En un estudio realizado en Medellín, Higuita (2019) estipula que un 20 % de residuos sólidos que van al botadero son residuos peligrosos (productos higiénicos), considerados residuos anatomopatológicos, ya que se encuentran contaminados por fluidos corporales y pueden generar infecciones. Este porcentaje de desechos higiénicos que van al botadero se producen por la sobrepoblación que se está viviendo y el uso de estos productos para la higiene diaria de los ciudadanos. (Higuita, 2019. p.18). Teniendo en cuenta lo anterior, se dará paso al tema principal y en el cual se enfocará este artículo, los desechos higiénicos, siendo más específicos, los residuos de higiene femenina, debido a la necesidad mundial del uso que representan estos desechos y la cantidad de pros y contras que se evidencian en medios tales como económicos, ambientales, sociales y de salud. USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA MATERIALES Y MÉTODOS Con el desarrollo del presente artículo se pretende dilucidar, a través de un marco referencial, el impacto producido por los residuos generados al usar los diversos métodos de higiene femenina. Ello se realizó a través de la recolección de datos sobre el uso y la disposición de los métodos de higiene femenina. La recopilación de toda la información se obtuvo mediante la revisión de artículos, textos y publicaciones realizadas desde el año 2000 hasta la actualidad, usando palabras claves como residuos, higiene femenina, toallas higiénicas, tampones, copa menstrual, impactos y disposición de residuos, con el fin de amalgamar esta información encontrada y poder plasmar la respuesta a nuestra pregunta problema. En la actualidad existen diversos métodos de higiene femenina pero esta investigación se enfoca en tres: tampones, toallas femeninas y la copa menstrual, en el que se dejará registrada su función, composición y costo para plantear una comparativa de sus beneficios y desventajas en el ámbito económico y ambiental. Tampones: Son un método para absorber el flujo producido por la menstruación, compuestos por algodón, rayón, recubiertos por una capa de polietileno (plástico). El motivo de su creación fue darle a la mujer más comodidad y libertad para poder realizar actividades recreativas. Este producto se estipula para único uso y luego ser desechado. Se registra que durante sus inicio varias de las usuarias indicaron que este método provocaba el síndrome de shock tóxico, este consiste en una infección grave que en algunos caso, raramente, terminaba en la muerte, hoy en día se sigue mencionando el riesgo de poder presentar la mencionada USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA enfermedad, pero no hay estudios que demuestren una relación entre el producto y la condición médica. (Acuña, 2017). Toallas higiénicas: Apósitos o almohadillas de algodón, elaborados con varias capas de diferentes materiales (algodón, gel y plástico) que al igual que los tampones son desechables al primer uso. En algunos casos pueden presentar afecciones tales como infecciones, quemaduras e irritaciones en la zona donde se ubican debido a su material y tiempo de uso. (Organización de Consumidores y Usuarios de Chile, 2013) Copa menstrual: Pequeñas copas de diferente tamaño elaboradas con silicona medica, látex y elastómero termoplástico medicinal (TPE), son reutilizables y tienen un ciclo de vida aproximado de entre 10 a 15 años. Salieron al mercado desde 1930 pero no son tan reconocidas debido a que las grandes industrias de higiene femenina no han incluido en sus productos este método. (Copa Menstrual MCup, 2018) La población en la cual nos basaremos son las mujeres colombianas en edad fértil, las cuales, según el último censo presentado por el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (2018), en Colombia existen 48’258.494 habitantes de los que 24’611.831 son mujeres; y de estas un 63 % se encuentran entre los 15 a 40 años (edad fértil) (DANE, 2018). Las mujeres menstrúan aproximadamente 5 días al mes, esto en un año son 60 días, por lo tanto si menstrúan durante aproximadamente 40 años, daría un total de 2400 días menstruantes. Adicional a este cálculo se presenta que en un día de menstruación normal las mujeres usan entre 4 a 5 toallas menstruales y/o tampones diarios, produciendo en cada ciclo una cantidad de residuos de 25 toallas o tampones, dándole un total anual de 300 productos de higiene por mujer en etapa fértil en Colombia. Ahora bien, volvemos a la cantidad de mujeres que producen estos residuos en el país, 13’505.453, según el Censo presentado en el 2018. (DANE, 2018) USO Y DISPOSICIÓN DEPRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA Estos protectores, toallas y tampones que desechan las colombianas, la mayoría, si no es en su totalidad, se disponen en botaderos como basura plástica, eso bien si se realiza la adecuada separación de residuos. (Borunda, 2019). Estos productos de higiene femenina (toallas o tampones) además de no presentar un posible tratamiento para mitigar su impacto o cantidad extensa de generación, están compuestos de diferentes tipos de materiales o químicos altamente tóxicos, estas sustancias en el interior del organismo de la mujer pueden llegar a diferentes órganos delicados causando afectaciones en el cuerpo de la persona que utiliza este producto. (Lima, M., Almeida, R., Fonseca, F., & Gonçalves, C, 2020) Al realizar la compra de toallas higiénicas y tampones encontramos que el empaque es una bolsa de plástico o, en algunos casos, cajas de cartón. Dentro de este empaque se encuentra el plástico que envuelve cada producto, debido a que estos vienen separados por unidad y cada uno tiene su empaque individual. Además, en el caso de las toallas también en el momento del uso se encuentra el plástico que se despega en la parte que presenta adhesivo, en conclusión desde lo exterior a lo interior de cada método convencional de higiene femenina que se compra y posteriormente se desecha es en su mayoría plástico (Urbano, 2019). Estos productos son compuestos en su mayoría por polietileno de baja densidad y polipropileno, para la fabricación de estos se insume petróleo, gas natural y agua, mucha agua, entre unos 30 litros por paquete producido. Adicional a los insumos anteriormente mencionados encontramos químicos altamente tóxicos como lo son los polímeros súper absorbentes como lo es el rayón utilizado para el blanqueamiento de estos productos, entre otros compuestos también está el algodón, el cual se trata con glifosfato y celulosa (Urbano, 2019), produciendo así un riesgo a la exposición de pesticidas en la zona donde se da uso del producto, lo cual podría USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA generar infecciones o alteraciones en la mujer o niña que dé uso a estos productos. (Rutina sustentable, 2020). En la mayoría de los casos se cree que el problema o impacto finaliza con la disposición pero quizás es solo el inicio del problema ambiental que se viene presentando con el paso del tiempo, estos residuos tienen un periodo de degradación cuando se disponen en botaderos como se hace en Colombia, cada una de las toallas higiénicas o tampones que se desechan tiene un tiempo de degradación de 500 años. Teniendo en cuenta que el número de mujeres en edad fértil sobrepasa los 10 millones, están sometiendo al medio ambiente a un procedimiento en crecimiento del cuál no se tiene regulación y va sumando al tiempo de colapso de cada botadero. Para el caso de la copa menstrual, a diferencia de los métodos mencionados anteriormente no contiene plástico y es altamente inerte, lo que indica que no desprende tóxicos y si se dispone en algún lugar específico al cabo de unas décadas se encontraría descompuesta en partículas que son inocuas para el medio ambiente (Sin plástico, 2019). Con base en lo anterior, calculando con valores y usos actuales, se reconocerán qué efectos positivos o negativos tiene la disposición y uso de los métodos de higiene femenina. RESULTADOS Y DISCUSIÓN Según los datos mencionados por el DANE y los cálculos realizados, se obtuvo que en Colombia si cada una de las mujeres utiliza toalla o tampón se estarían registrando 4.051’635.900 residuos anuales de este tipo de métodos por cada mujer en etapa fértil, estos USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA residuos acompañados de fluidos corporales se disponen en cada uno de los botaderos estipulados en las unidades territoriales. Si el uso de la copa menstrual fuese en la totalidad del país los cálculos serían diferentes puesto que la copa tiene un ciclo de vida de 10 años. Para cubrir la etapa fértil de cada mujer (40 años) se hace uso de 4 productos, dejando así un total de 54’021.812 copas desechadas en toda la etapa menstrual de las mujeres colombianas actualmente, estos datos se ven reflejados en la Figura 1. Figura 1. Cantidad de productos de higiene femenina desechados en 40 años. Fuente: Elaboración propia, 2021. Esto no solo refleja la desigualdad entre uno de los métodos no convencionales y menos usados en Colombia frente a los residuos que producen los métodos más comunes como lo son las toallas y los tampones, aportando más de 150 mil millones de desechos a los botaderos y disminuyendo su capacidad debido a los altos periodos de degradación que presentan estos productos. Adicional a esto está el peso de cada producto, según Alzate (2018) una mujer que USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA use tan solo 11 productos (toallas o tampones) en su ciclo menstrual estará generando 832 gramos de residuos sólidos al año y 8320 gramos de residuos en 10 años (vida útil de la copa menstrual). Por el contrario, al usar la copa menstrual su vida útil llega a los 10 años por lo cual se utiliza en promedio una (1) copa en este mismo periodo de tiempo, generando así menos de 100 gramos de residuos sólidos durante una década por persona. Teniendo en cuenta lo anterior tratando de enfocarnos en el ámbito económico, se obtuvieron costos por unidad para cada uno de los métodos, los dos primeros fueron consultados en tiendas de barrio estrato 3 en la ciudad de Bogotá. El valor de la copa menstrual se obtuvo de la marca Uruize, la cual distribuye a nivel nacional por medio de redes sociales (ver tabla 1). Tabla 1. Costos de cada método de higiene femenina por persona en 40 años Fuente: Elaboración propia, 2021. La relación costo beneficio presentada en la tabla anterior da a conocer la ventaja que tiene la copa menstrual frente a los otros métodos expuestos, esto se presenta debido a que el periodo de vida útil de una copa es prolongado por 10 años, solo teniendo la necesidad de realizar la compra de este producto 4 veces en el transcurso de la vida de cada mujer. Adicional al valor que pagan cada una de las personas que consumen estos productos también se presentan afectaciones en el ámbito empresarial, pues las principales empresas sanitarias que existen en Colombia son Grupo Familia, Kimberly Clark y Jhonson & Jhonson, los cuales son los proveedores de toallas Producto Costo por unidad Cantidad usadada en 10 años (vida ùtil copa menstrual) Total gastos en 40 años Toalla higienica 350 3000 $ 42.000.000 Tampòn 650 3000 $ 78.000.000 Copa menstrual 45.000 1 $ 180.000 USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA higiénicas y tampones de las marcas, reconocidas en el mercado, Kotex, Nosotras y Stayfree, es curioso que ninguna de estas empresas comercializa un producto sanitario como lo es la copa menstrual, por lo cual es muy difícil y casi imposible que los colombianos puedan encontrar dicho producto en almacenes de cadena o droguerías, si desea adquirirlo debe realizar la búsqueda por medio de páginas web o redes sociales donde las más de 199 marcas existentes de copas menstruales ofrecen su articulo. Esto demuestra que la accesibilidad a estos productos es limitada teniendo en cuenta que no todos los colombianos cuentan con acceso a internet y que probablemente al no conocer los beneficios y características de la copa evitarán comprobar su funcionalidad, adicionándole el poco avistamiento en medios audiovisuales y a su vez la desinformación sobre su uso. Lo anterior puede provocar que el uso de la copa no sea tan fácil para algunas personas, por ejemplo, un estudio realizado en Kenia demostró que la mayoría de adolescentes entre 14 y 16 años tenía problemas con el uso, retiro e higiene de la copa. Claramente la falta de información e instrucción sobre estosnuevos métodos hace que experimentarlos sea un poco complejo, pero como solución las empresas de copas menstruales optaron por traer al mercado este producto con tamaños específicos para que cada mujer pueda elegir ya sea por su edad, su flujo menstrual o si ha tenido partos naturales. (Jiménez, 2021). Otro aspecto identificado por entrevistas realizadas por la BBC a mujeres que usan este producto, demostró que entre otras desventajas de la copa está el tabú o desagrado que tienen a la sangre, con la cual deben tener contacto al retirarla y en este procedimiento también pueden tener accidentes si no se realiza de la forma adecuada y a su vez si no se presenta una correcta higiene de la copa, o no se cuenta con una fuente de agua potable para realizar el procedimiento, pueden llegar a producir infecciones, lo cual algunas de estas personas soluciona con pañitos húmedos desinfectantes cuando están en USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA lugares públicos o al tener la copa un tiempo prolongado de uso sin accidentes, optan por esperar y llegar a casa para realizar el cambio de manera adecuada. (BBC News Mundo, 2017) .Una de las razones por las cuales este producto, copa menstrual, no está incluido en las grandes compañías es la economía, según Barbosa (2020), el reporte de ventas netas en un año de las empresas sanitarias en Colombia es el siguiente: ● Grupo Familia (2017)= 2 billones 318 mil 583 millones ● Kimberly Clark (2017)= 37 mil 766 millones ● Jhonson & Jhonson (2017)= 4 billones 39 mil 697 millones Teniendo en cuenta el valor que se paga por cada uno de los métodos convencionales de higiene femenina, la cantidad que se consume y a su vez las ganancias que representan para las empresas sanitarias, se entiende la razón por la cual los productos sostenibles no son negocio para ellos, la pérdida económica de las empresas sería aproximadamente de 11 billones de pesos, lo cual representaría una crisis al sistema económico de dichas entidades (Barbosa, 2020). CONCLUSIONES La disposición desmedida de productos convencionales de higiene femenina aporta negativamente al país debido a su composición (plástico) y su extenso periodo de degradación, lo cual afecta al suelo donde se dispone no solo por el momento sino que sus alteraciones llegan a mantenerse en esta ubicación durante medio siglo, adicional a este periodo extenso están los componentes químicos-tóxicos que se aportan al suelo, cambiando sus características físico químicas y dejando este suelo contaminado. USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA La generación excesiva de basura higiénica correspondiente a los productos de higiene femenina, aporta significativamente al problema de basuras presente en Colombia. Ya que los residuos no son separados ni clasificados y se unen a la cantidad de residuos que normalmente se disponen en botaderos que en su mayoría no cuentan con alguna certificación y simplemente funcionan hasta que lleguen a su punto limite y deban ubicar otro en un lugar diferente, dejando así zonas con alta contaminación y cambiando el uso del suelo en las zonas que son tomadas para esta actividad. El uso de productos convencionales de higiene femenina devenga un gasto para cada una de las personas que necesita de ellos; en la totalidad de su etapa fértil cada mujer colombiana puede llegar a generar gastos de más de 40’000.000 de pesos por persona dependiendo el método, ya sea tampones o toallas higiénicas, sin embargo, el gasto generado en toda la etapa fértil con un método no convencional, en este caso la copa menstrual, no sería mayor a 180.000 pesos colombianos por persona, lo cual reduciría significativamente los gastos en cada uno de los hogares colombianos. Como contraparte reduciría las ganancias de cada empresa que se encarga de la producción de las toallas higiénicas y tampones distribuidos en tiendas y almacenes de cadena, afectando así la condición económica de cada una de estas entidades, pero posiblemente obligándolas a actualizar sus métodos y presentar propuestas sostenibles al mercado y asequibles al publico, como lo es la copa menstrual. Se identificó que si todas las mujeres colombianas hacen uso de toalla higiénica o tampón, estarían desechando en 40 años 162.065’436.000 productos, los cuales irían a cada uno de los puntos establecidos para su disposición, que dependiendo del municipio y sus políticas de USO Y DISPOSICIÓN DE PRODUCTOS DE HIGIENE FEMENINA basuras podrían terminar en botaderos o en el peor de los casos, en cuerpos hídricos. Por otro lado, si las mujeres colombianas hicieran uso de la copa menstrual estarían desechando en toda su etapa fértil 54’021.812 productos, los cuales tendrían el mismo rumbo mencionado anteriormente pero con la diferencia que los materiales de la copa se degradan en un tiempo menor y que a su vez la cantidad que se desecharía, aunque es relevante, no es ni la mitad de la que se produce al usar los métodos de higiene femenina convencionales. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Acuña, C. (2017). La historia del tampón: un recorrido lleno de prejuicios. LA NACION. Recuperado de: https://www.lanacion.com.ar/sociedad/la-historia-del-tampon-un- recorrido-lleno-de-prejuicios-nid2080085/ Alzate, E (2018). Evaluación de impactos ambientales generados durante las etapas de uso y disposición de los residuos de las toallas higiénicas y copas menstruales. Recuperado de: https://es.scribd.com/document/427845277/Alzate-Erika-2018-Impacto-Amb-Menstr Barbosa, K. (2020). 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