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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE
MÉXICO
FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS
COLEGIO DE PEDAGOGÍA
LA HIPERACTIVIDAD EN LOS NIÑOS DE
EDAD ESCOLAR ENTRE 7-12 AÑOS
TESINA
PARA OPTAR POR EL TÍTULO DE
LICENCIADA EN PEDAGOGÍA
PRESENTA
MARTÍNEZ ARELLANO MARÍA GUADALUPE
ASESORA
MÉXICO, D.F. 2011
DRA. CALDERÓN CURIEL ARLIN RAQUEL
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
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mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
i 
 
 
 
DEDICADO A: 
 
 Mis padres y hermanos. 
 
Quienes siempre han estado ahí en mis horas grises y mis momentos 
felices, apoyándome y siendo mi guía para seguir adelante, sin importar lo 
que pase. 
 
Esto es para ustedes. 
Porque mis ideales, esfuerzos y logros también son suyos. 
 
 Los amo 
 
Atte. 
Lupita 
 
 
 
 
 
 
 
ii 
 
AGRADECIMIENTOS 
 
A DIOS: Por darme la sabiduría y fuerza necesaria para salir adelante, sin 
importar los obstáculos que se presenten. Gracias por ser mi guía e iluminarme en 
el camino, pero sobre todo, por permitirme llegar hasta aquí y terminar una de 
tantas etapas en mi vida. 
 
A MIS PADRES: Macaria Arellano Pérez y Fernando Martínez Cuevas, sin 
ustedes no sería nadie, gracias por sus esfuerzos y sus desvelos, por su apoyo 
incondicional y sus consejos a lo largo de mi vida. Pero sobre todo, gracias por su 
amor, sus enseñanzas y la mejor herencia que pudiera recibir: Mis estudios. Hoy 
he llegado a realizar la más grandes de mis metas y estoy lista para enfrentarme a 
la vida. Los admiro y los quiero mucho, siempre serán un ejemplo a seguir. 
 
A MI HERMANA: Jessica Martínez Arellano, quien ha sido mi ejemplo a seguir y 
la persona que más admiro, ya que con su esfuerzo, dedicación y esmero me ha 
enseñado que por más largo y duro que sea el camino, todo se puede conseguir si 
se desea realmente, sin importar lo difícil que parezca. Gracias por tu cariño, tu 
apoyo y tus consejos, te quiero mucho. 
 
A MI ASESORA: Dra. Arlin Raquel Calderón Curiel, por asesorarme, apoyarme y 
ayudarme en la realización de mi tesina. 
 
iii 
 
A MIS MAESTROS: Que me guiaron durante toda la carrera enseñándome el 
camino correcto por medio de sus enseñanzas y experiencias compartidas. 
 
A todas aquellas personas, que de una u otra forma me apoyaron en la realización 
de este trabajo. 
 
Y finalmente a una personita muy especial en mi vida, que aunque ahora estemos 
separados, es muy importante para mí y fue el motor que me impulso a estudiar 
esta carrera, te quiero mucho y no pierdo las esperanzas de que un día volvamos 
a estar juntos. Gracias Fernando Mtz. A. 
 
 
Los quiero y admiro, con su sola presencia, comprensión, 
tolerancia y apoyo, hicieron posible esto. A todos ustedes: 
MIL GRACIAS… 
 
 
Atentamente 
María Guadalupe Martínez Arellano 
 
 
 
iv 
 
ÍNDICE 
DEDICATORIA……………………………………………………………………... i 
AGRADECIMIENTOS……………………………………………………………... ii 
INTRODUCCIÓN…………………………………………………………………… 1 
TEMA………………………………………………………………………………... 5 
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA…………………………………………... 5 
OBJETIVOS………………………………………………………………………… 8 
IMPORTANCIA PEDAGÓGICA………………………………………………….. 9 
MÉTODO……………………………………………………………………………. 11 
 
CAPITULO 1. HIPERACTIVIDAD. ¿Qué es el TDAH?.................................. 
1.1 Concepto de Hiperactividad…………………………………………... 
1.2 Clasificación del TDAH……………………………………………….. 
1.3 Diferencia entre Hiperactividad e Hiperquinesia……………………. 
 
12 
14 
16 
19 
 
CAPITULO 2. ¿QUÉ ES LA HIPERACTIVIDAD INFANTIL; ES 
 UN COMPORTAMIENTO FRECUENTE?................................ 
2.1 Niños sin TDAH………………………………………………………… 
2.2 Niños con TDAH……………………………………………………….. 
2.3 Características de la Hiperactividad Infantil………………………… 
2.4 Problemas del Niño Hiperactivo en la Familia y la Escuela……… 
2.5 Dificultades de Aprendizaje y Bajo Rendimiento 
 Escolar (Fracaso)………………………………………………………. 
2.6 Trastornos asociados al TDAH……………………………………….. 
2.7 Características y Problemas en el Adolescente con TDAH……….. 
 
 
22 
24 
25 
25 
28 
 
31 
33 
38 
 
CAPITULO 3. ORIGEN Y CAUSAS DE LA HIPERACTIVIDAD……………... 
 3.1 Orígenes Genéticos o Hereditarios………………………………….. 
 3.2 Orígenes Neurológicos………………………………………………... 
 
40 
42 
42 
 
CAPITULO 4. ANTECEDENTES DEL TDAH………………………………….. 
 4.1 Perspectiva en México………………………………………………… 
 
44 
47 
 
CAPITULO 5. LA RELACIÓN DE LOS PADRES ANTE EL TDAH…………. 
 
48 
 
CAPITULO 6. LA RELACIÓN DE LOS PROFESORES ANTE 
 LA HIPERACTIVIDAD…………………………………………… 
 
 
53 
 
CAPITULO 7. DIAGNÓSTICO DEL TDAH……………………………………... 
7.1 Fases del diagnóstico para el TDAH………………………………… 
7.2 Medición Pedagógica………………………………………………….. 
7.3 Medición Psicológica………………………………………………….. 
7.4 Medición Neurofisiológica…………………………………………….. 
 
57 
61 
62 
69 
75 
v 
 
CAPITULO 8. TRATAMIENTOS Y ALTERNATIVAS PARA 
 TRATAR EL TDAH………………………………………………. 
8.1 Tratamiento Psicopedagógico………………………………………... 
8.2 Tratamiento Psicológico………………………………………………. 
8.3 Tratamiento Farmacológico…………………………………………… 
 
 
77 
79 
92 
98 
 
CONCLUSIONES………………………………………………………………….. 106 
BIBLIOGRAFÍA............................................................................................... 110 
 
ANEXOS…………………………………………………………………………….. 
 Guía de ayuda psicopedagógica para la Hiperactividad Infantil. 
Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), en niños 
de 7-12 años Dirigida a especialistas en educación (pedagogos, 
docentes, psicólogos, etc.). 
 
 
 
114 
 
 
1 
 
INTRODUCCIÓN 
 
Todos los niños y niñas entre 7 y 12 años de edad generalmente son 
revoltosos, inquietos, movidos, traviesos y juguetones. Sin embargo, hay niños 
(as) que frecuentemente están demasiado prendidos, y son etiquetados como 
niños (as) incontrolables, de quienes padres de familia, educadores y sociedad en 
general creen que como toda etapa en el desarrollo humano, ese niño que es 
como un torbellino atraviesa por una fase pasajera y con ella terminaran sus 
múltiples problemas de atención y de mala conducta. 
 
Sin saber, que detrás de esos niños (as) que actúan con exceso de energía 
y no suelen quedarse quietos, puede esconderse un problema mucho más amplio 
y complejo, el cual no tiene nada que ver con un niño que es juguetón y revoltoso 
por naturaleza. Pero, cuando se enfrentan a los continuos accidentes en casa, el 
colegio, etc., así como, las constantes quejas o comentarios desagradables de los 
maestros, amigos y familiares, no saben qué hacer, ni qué medidas tomar. Esto 
ocasiona que empiecen a cuestionarse, si es normal que su hijo sea demasiado 
inquieto, que reaccione de una manera diferente a las exigencias que se le piden, 
si es un capricho para llamar la atención, o si este tipo de comportamiento es el 
famoso problema de Hiperactividad Infantil. 
 
Frente a esta problemática planteamos el siguiente trabajo. Este se refiere a 
una investigación pedagógica de tipo monográfica (documental), dedicada a tratar 
2 
 
el tema del Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH), mejor 
conocido como Hiperactividad Infantil. Este es un tema que ha ido tomando fuerza 
con el paso de los años, sin embargo, hoy en día sigue siendo poco conocido 
entre la sociedad y el ámbito educativo. 
 
Tras varias investigaciones alrededor del mundo,la OMS (Organización 
Mundial de la Salud) ha considerado al TDAH como un trastorno de conducta a 
nivel mundial. Entre un 3% y 7% de los niños en edad escolar padecen este 
trastorno, y tan solo en América Latina aproximadamente entre el 3% y 5% de los 
niños entre 7 y 12 años son hiperactivos y en nuestro país cerca del 6% de los 
niños sufren TDAH.1 Sin embargo, día a día, siguen diagnosticándose más niños 
con este padecimiento en las instituciones de educación básica; donde profesores 
y familiares en vez de ayudar al infante, solo lo perjudican por falta de información. 
 
Por tal motivo, el principal objetivo de esta investigación consiste en 
determinar de manera clara, concisa y general, el problema de la hiperactividad o 
en otras palabras del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) 
en los niños que cursan el nivel primaria. 
 
Dicho trabajo, consiste en ocho capítulos en los que se podrán revisar 
algunos aspectos como son: el origen y concepto de la hiperactividad, tipología, 
características en los niños de 7 a 12 años, dificultades de aprendizaje, así como 
 
1
 http://www.redalyc.uaemex.mx 
3 
 
los problemas y la relación que presenta en la escuela y el hogar, el diagnóstico y 
finalmente los diferentes tratamientos que existen (psicopedagógico, psicólogo y 
farmacológico). Todos estos puntos permiten ponerle nombre a eso que 
profesores, padres y personas en general no entienden o si lo identifican no saben 
cómo sobrellevar o actuar ante el problema que el niño tiene. 
 
 Por otra parte, cabe mencionar que, la aportación pedagógica de esta 
investigación consistió en una revisión documental, además de informar a los 
padres, profesores, especialistas en educación y público en general sobre que es 
el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y todo lo que esté 
involucra. 
 
Así mismo, al final de dicho trabajo, se podrá encontrar una guía de ayuda 
para el pedagogo, el docente o especialista en el área, así como un folleto para 
padres, donde además de información sobre el trastorno, también hallarán 
algunos tips y técnicas que resulten fáciles de aplicar para ayudar al niño con 
TDAH en su proceso de aprendizaje. Estas técnicas son motivacionales y 
estimulantes para que el aprendizaje resulte más atractivo para el niño, y de esta 
forma comience a tener mayor participación y un mejor desenvolvimiento 
intelectual, social, moral, etc., donde la relación con sus padres, maestros y 
compañeros, se verá beneficiada. 
 
4 
 
Ahora bien, para comenzar a adentrarnos en el tema, es importante señalar 
que durante varios años, mucho se ha hablado sobre la hiperactividad infantil, 
pues se ha dicho que es un déficit de atención, una disfunción cerebral mínima de 
aprendizaje, un síndrome o sencillamente una conducta infantil. 
 
A ciencia cierta no se sabe el por qué de estas definiciones, así como cual 
es el principal origen de la hiperactividad, los factores y causas que influyen en el 
desarrollo de la misma (genético, neurológico o psicológico), etc. Sin embargo, 
tras varias investigaciones la hiperactividad ha sido denominada como motora (ya 
que se deriva de la palabra movimiento). Por lo regular, es intensa, excesiva y no 
trae consigo ninguna finalidad, dado que el trastorno principal de los niños es el 
déficit de atención (falta de atención) y no el exceso de actividad motora 
(constante movimiento), Ávila de Enció (2002:15). 
 
De igual manera, es importante conocer que el TDAH va a desarrollar un 
papel importante dentro y fuera de la educación debido a que afecta la capacidad 
de atención del individuo, pues, como ya veremos a lo largo del trabajo, los niños 
con hiperactividad se encuentran con diferentes obstáculos que les dificultan o en 
dado caso facilitan su desenvolvimiento en el ámbito escolar, familiar y social, 
durante una etapa o toda su vida. 
 
 
 
5 
 
TEMA 
 
 La Hiperactividad Infantil en la Edad Escolar 
 
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 
 
¿Cuál es el grado de dificultad que presenta un niño hiperactivo en su aprendizaje 
dentro del ámbito escolar? 
 
A través de los años mucho se ha hablado o rumorado sobre el tema de la 
hiperactividad, dado que aun no se conoce a ciencia cierta cual es el principal 
origen de este problema, así como los factores y causas que influyen en el 
desarrollo de la misma ya sea genética, neurológica o psicológicamente, 
provocando que se presente durante la infancia o adolescencia. 
 
Por ejemplo, hay personas que piensan o tienen la idea de que un niño 
hiperactivo es aquel que no busca la socialización, sino que se encuentra inmerso 
en un mundo de egoísmo y narcismo, o completamente aislado de la sociedad, 
que por lo regular su forma de expresión es agresiva, explosiva, temperamental, 
irritable, etc.; que sus conductas no son pensadas sino simplemente actuadas, por 
lo tanto, para los demás su conducta resulta desagradable e incorrecta y gracias a 
esto los niños son objeto de muchas críticas. 
 
6 
 
Ante tantos comentarios y cuestionamientos, es obvio que muchos padres 
se pregunten, si es normal que su hijo sea demasiado inquieto y que reaccione de 
una manera diferente a la de sus exigencias; si solo es un capricho de los niños 
para sentirse amados y atraer la atención de los adultos o si es que su hijo en 
verdad es hiperactivo y siendo así, como se puede saber si el niño presenta o no 
dicho trastorno. 
 
Sobre esto la doctora Carmen Ávila de Enció, señala en su libro “Niños 
Hiperactivos” que los estudios sobre la hiperactividad infantil han ascendido, 
llegando a conocerse mejor los orígenes de este trastorno, así como su evolución 
y algunos tratamientos para la cura de dicho trastorno. 
 
Del mismo modo, la misma autora, también nos pone de manifiesto que el 
trastorno principal de los niños es el déficit de atención (esto es, que se distraen 
con mucha facilidad y que no logran entender lo que se les está comunicando en 
el momento) y no el exceso de actividad motora (cuando un niño no logra 
permanecer mucho tiempo en su lugar y con una actitud pasiva, sino que siempre 
está en constante movimiento, lo cual distrae las actividades de las otras personas 
que se encuentran a su alrededor, buscando ser el centro de atención), Ávila de 
Enció (2002:15). 
 
En el aspecto escolar y de relación social, los profesores se han percatado 
que el niño que presenta hiperactividad entre los 7 y 12 años, se muestra inquieto, 
7 
 
impulsivo, con falta de atención, agresivo, desobediente y con frecuencia esta 
distraído. No parece escuchar cuando se le habla, no sabe jugar solo y al mismo 
tiempo su modo de juego es característico, ya que casi siempre tiende a apartarse 
con los juguetes que son más novedosos para él (los manipula hasta que se 
cansa, se aburre y los deja destrozados), no admite perder, ni es capaz de 
obedecer las reglas del juego. Las relaciones con sus compañeros se caracterizan 
por peleas, discusiones y en ocasiones rechazos, mientras que a los profesores 
les resulta molesto tener que trabajar con este tipo de niños, pues los hacen 
perder la paciencia con facilidad, debido a su mal comportamiento 
 
Por lo que, en lo que concierne al aspecto familiar, los padres deben estar 
siempre al pendiente de sus hijos y percatarse si presentan alguna de esas 
características, puesto que así será más fácil detectar cuando un niño presente un 
caso de TDAH, y si se tienen sospechas, lo recomendable será pedir ayuda al 
profesor o bien acudir con algún especialista en el área (psicopedagogo, 
psicólogo, pediatra, etc.), y solicitar información de los tratamientos existentes 
para la mejora y bienestar emocional e intelectual de su hijo y de sí mismos. 
 
 
 
 
 
 
8 
 
 
OBJETIVOS 
 
 Identificar cuál es el grado de dificultad que presenta un niño hiperactivoen 
su aprendizaje dentro del ámbito escolar. 
 
 Construir una guía de ayuda psicopedagógica para la hiperactividad infantil, 
dirigida a pedagogos, profesores y especialistas en educación. 
 
 Elaborar un folleto informativo para padres de niños con trastorno por déficit 
de atención e hiperactividad 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
9 
 
IMPORTANCIA PEDAGÓGICA 
 
La hiperactividad infantil, es un tema que ha ido tomando fuerza con el paso 
de los años. Sin embargo, hoy en día sigue siendo poco conocido entre la 
sociedad y el ámbito educativo, aunque cada día se diagnostican más niños con 
problemas de conducta o mejor dicho con trastorno por déficit de atención con 
hiperactividad (TDAH) en las instituciones de educación básica, llegando a ser un 
problema de salud pública. 
 
Razón por la que, la importancia pedagógica de esta investigación es 
informar a los padres, los profesores, los especialistas en educación y el público 
en general sobre que es el trastorno por déficit de atención con hiperactividad 
(TDAH) y todo lo que involucra, por el simple hecho de que algunos de nuestros 
hijos o alumnos la pueden padecer o la padecen, y ni siquiera lo sabemos, o lo 
que es peor, no conocemos las causas, características, consecuencias o las 
diversas formas en que podemos ayudarlos para que alcancen un desarrollo 
óptimo; tratar de comprenderlos mejor, para no castigarlos o reprimirlos como 
apunta Ávila de Enció (2002:contraportada). 
 
Y es que, según los expertos en el tema, tan solo en Latinoamérica 
alrededor de 36 millones de personas (niños, adolescentes y adultos), tienen 
TDAH y en nuestro país existen 1.5 millones de niños que sufren este problema, 
Cadena Arenas (2009: 6). 
10 
 
Otra razón, por la cual es importante realizar este proyecto, sería para 
ayudar al profesor y padre de familia en la búsqueda de técnicas que le resulten 
fáciles de aplicar para ayudar al niño con TDAH en su proceso de aprendizaje. 
 
Estas técnicas deben ser motivacionales y estimulantes para que el 
aprendizaje resulte más atractivo para el niño, y de esta forma comience a tener 
mayor participación y alcance el éxito deseado por él y pensado en él, en el 
ámbito intelectual, social y moral, logrando una buena relación con sus padres, 
maestros y compañeros. Pero, para que esto sea posible, es necesaria la ayuda 
de padres, profesores y especialistas, ya que el ambiente se verá más favorecido 
y el niño podrá sobresalir en todos los ámbitos de su desarrollo, entendiendo que 
se relaciona con el rendimiento escolar, así como con la convivencia diaria del 
mundo que lo rodea. 
 
Así, desde un punto de vista pedagógico, psicológico y social es importante 
realizar este trabajo con el propósito de encontrar alternativas y explicar los 
factores que intervienen en la hiperactividad, (a través de fuentes sustentables 
validas y eficientes), para que de acuerdo a esto, padres, profesores y 
especialistas busquen el mejor tratamiento para el niño con hiperactividad. 
 
 
 
 
11 
 
 
MÉTODO 
 
En este trabajo se efectuó una investigación de tipo monográfica, con el 
propósito de describir, y analizar el Trastorno por Déficit de Atención con 
Hiperactividad (TDAH), comúnmente llamado Hiperactividad Infantil. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
12 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPITULO 1 
HIPERACTIVIDAD, ¿QUÉ ES EL TDAH? 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
13 
 
Disfunción cerebral mínima de aprendizaje, síndrome, déficit de atención, 
trastorno, o simplemente una conducta infantil actuada, son solo algunos de los de 
los nombres que ha recibido la hiperactividad infantil desde que se dio a conocer 
por primera vez en 1845. 
 
Sin embargo, tras varios estudios el Manual de Diagnostico y Estadística de 
los Trastornos Mentales (DSM-IV), solo ha considerado al Trastorno por Déficit de 
Atención con Hiperactividad (TDAH), como el nombre oficial, para reconocer a la 
hiperactividad infantil. Y aunque, aún no se conoce a ciencia cierta, cuál es el 
principal origen de este trastorno, así como los factores y causas que influyen en 
su desarrollo, lo que es cierto es que hoy en día, la hiperactividad infantil, mejor 
dicho, el TDAH es un problema que ha sido considerado de salud pública, por la 
relevancia y el sin fin de casos que han ido surgiendo a través de los años en 
niños, adolescentes y adultos. 
 
Dado que los niños con este tipo de conducta son objeto de muchas críticas 
y burlas, ya que todavía existen personas (entre ellas, padres, maestros, médicos, 
y sociedad en general), que sostienen la creencia de que un niño o niña con 
hiperactividad es aquel que no busca la socialización y se encuentra inmerso en 
un mundo de egoísmo, completamente aislado de la sociedad, donde todo lo que 
hace o dice es actuado y una simple manera de llamar la atención de los adultos, 
lo que ocasiona que sean poco tolerables para los demás, sin conocer realmente 
14 
 
cual es la dimensión del problema, pues la hiperactividad no es una conducta 
actuada, sino un problema real y autentico como veremos a continuación. 
 
1.1 Concepto de Hiperactividad 
 
A lo largo del tiempo, el concepto de hiperactividad ha variado. Sin 
embargo, en el presente trabajo se define como: Trastorno por el Déficit de 
Atención e Hiperactividad (TDAH), el cual engloba un conjunto de fenómenos 
neuropsicológicos, es decir, problemas para mantener la atención, controlar los 
impulsos y el nivel de actividad como escribe Barkley Russell (2002:19). 
 
Lo cual se verá reflejado en la personalidad, el aprendizaje habitual y 
escolar del niño, en la capacidad del niño para controlar su conducta y poder 
establecer las metas a las que quiere llegar, así como consecuencias futuras. 
Pero, sobre todo debe tenerse claro que la desatención no es un estado temporal 
que se cura con el tiempo. 
 
El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), es real, 
auténtico y un verdadero problema, que a menudo, representa un obstáculo. Se 
dice que los niños con TDAH son como cualquier otro niño, solo que les es difícil 
terminar lo que en ese momento están realizando. 
 
15 
 
Con el tiempo al ir ignorando todo comentario impulsivo, toda oposición 
hacia las reglas y el fracaso al responder a las tareas, solo se considera que es 
una conducta intencionada, llegando a la conclusión de que todo es consecuencia 
de la educación que está recibiendo, lo cual resulta falso; ya que si nos damos a la 
tarea de investigar más sobre el tema, la hiperactividad si se presenta dentro de la 
escuela, pero también fuera de ella, es decir, en la casa, la calle, en todas partes 
donde se encuentre el niño, pues la hiperactividad se desarrolla en la conducta del 
infante y donde el ambiente influye en la conducta del niño, Barkley Russell 
(2002:36). 
 
Los padres siempre intentan hacer algo con respecto a este problema; y 
cuando son informados del diagnóstico del TDAH reaccionan con extrañeza, 
incluso creen que el comportamiento del niño es una etapa que se dejara atrás, 
Barkley Russell (2002:36). Pero no es así, la vida de un niño a quien no se le ha 
diagnosticado, ni tratado el TDAH es probable que este llena de fracasos y un bajo 
rendimiento académico. Se puede decir, que hay casos en los que simplemente 
no terminan una etapa escolar, tienen problemas con sus relaciones sociales o un 
comportamiento rebelde con malos entendidos, donde generalmente se abusa de 
los castigos, llegando a ocasionar resentimiento hacia las personas allegadas a 
ellos, lo que los puede inducir, al robo y el consumo de las drogas. 
 
La realidad del TDHA es que como éste, muchos de los trastornos 
conocidos, existen sin ninguna evidencia de enfermedades definidas a un daño 
16 
 
cerebral, Barkley Russell (2002:36). Con el TDAH estamos tratando con trastornos 
en alteraciones del desarrollo cerebral, pero tambiéncon un origen en daños 
directos o enfermedades cerebrales. 
 
1.2 Clasificación del TDAH 
 
Este trastorno se puede manifestar en tres formas diferentes; según 
predomine una u otra dificultad. De acuerdo a los criterios del Manual de 
Diagnostico y Estadística de los Trastornos Mentales de la Asociación de 
Psiquiatría Americana (1994)2, los tipos de TDAH son: 
 
Déficit de Atención Predominante o Inatento: Predomina la inatención y por ello 
tiende a considerarse como un niño distraído. Los niños suelen tener más 
problemas académicos que de conducta y en este caso hay que hacer un buen 
diagnóstico diferencial con otras condiciones. 
 
Algunos de los síntomas que se pueden presentar son: 
 Dificultad para mantener la atención en las tareas o actividades de juego. 
 Parece no atender cuando se le habla directamente. 
 No sigue por completo las órdenes y tiene dificultad para organizar tareas 
y actividades, lo que lo orilla a dejarlas inconclusas u olvidarlas. 
 
2
https://www.solohijos.com/html/articulo.php?idart=111&PHPSESSID=53d86196e06d5faaa148ecb
458f5479d 
17 
 
 Esta renuente a involucrarse en actividades de introspección que 
requieran un esfuerzo mental sostenido. 
 Se distrae fácilmente por un estimulo externo. 
 Extravía objetos como útiles escolares, juguetes, suéteres, etcétera. 
 
Impulsivo-Hiperactivo: Se distingue por la ausencia constante de control sobre 
los impulsos, vinculados con la inquietud motora, la hiperactividad y la 
impulsividad. Son los niños que presentan dificultades de autocontrol, intolerancia 
al aburrimiento y la frustración, es decir, se les denomina como muy inquietos, 
suelen tener problemas de conducta en la escuela y en la casa. 
 
La impulsividad es la limitada actividad que tiene una persona para frenar 
ciertos comportamientos que puedan alterar o provocar desorden, mientras que la 
hiperactividad es la conducta que se manifiesta como excesiva, es decir, 
movimiento exagerado de manera continua. 
 
Los síntomas que pueden caracterizar a un niño con este subtipo son: 
 Juguetea con las manos, los pies, o se retuerce en el asiento. 
 Deja el asiento en la clase o en otras situaciones en las cuales se espera 
que permanezca sentado. 
 Corretea o trepa en forma excesiva en situaciones en las cuales es 
inapropiado (en adolescentes o adultos puede estar limitado a sentimientos 
subjetivos o inquietud). 
18 
 
 Tiene dificultad para involucrarse calladamente en actividades de placer. 
 Frecuentemente esta “prendido” o actúa con exceso de energía y habla 
demasiado 
 Contesta las preguntas antes de ser completadas. 
 Tiene problemas para aguardar su turno (interrumpe). 
 
Combinado o Mixto: Es el subtipo donde la hiperactividad y el problema de 
atención están presentes, y ambas son significativas. Hay síntomas de inatención, 
impulsividad e hiperactividad. 
 
 Cabe señalar, como lo hace Gabriela Cadena Arenas en su libro “Guía para 
padres y maestros, Niños con problemas de Hiperactividad, TDAH”, que no todos 
los síntomas del TDAH se presentan con la misma intensidad, ni con la misma 
frecuencia. 
 
Sin embargo, es importante resaltar que para que se puedan considerar 
como efectivos los signos del TDAH ante la más mínima sospecha, se deberá 
tener en cuenta lo siguiente: 
 
 El inicio de la sintomatología debe ser antes de los siete años, dado que en 
edades tempranas a esta, es más complicado realizar un diagnostico que 
detecte el problema a ciencia cierta, pues las exigencias que se hacen a los 
niños son menores. 
19 
 
 El niño (a) deberá presentar por lo menos seis de los síntomas que se 
mencionaron anteriormente, así como haber permanecido más de seis 
meses con la conducta poco usual. 
 Los indicios deben estar presentes en dos o más ambientes (casa, escuela, 
lugares de recreo, etc.) 
 La conducta no debe generarse después de eventos conflictivos para el 
niño (divorcio de los padres, accidentes, etc.) 
 
1.3 Diferencia entre Hiperactividad e Hiperquinesia 
 
Hiperactividad: Históricamente este trastorno ha recibido distintas 
caracterizaciones e innumerables denominaciones, lo que dificulta las consultas 
de la literatura especializada; agregando que el acrónimo ingles AD-HD (Attention-
Deficit Hiperactivity-Disorder; que en español significa: déficit de atención/ 
desorden e hiperactividad), Ávila de Enció (2002:20), es ampliamente utilizado 
para referirse a este síndrome. El trastorno con déficit de atención con 
hiperactividad (TDAH), es un síndrome conductual de origen orgánico 
(Neurobiológico), que se manifiesta con frecuencia en niños y que también se 
puede diagnosticar en adolescentes y adultos. Está caracterizado por distracción 
moderada a severa, períodos de atención breve, inestabilidad emocional e 
impulsividad. El origen puede deberse a un desequilibrio químico en el cerebro. 
 
20 
 
Hiperquinesia: Cinestecia o Kinestesia que etimológicamente significa sensación 
o percepción del movimiento, en medicina y en psicología, esta palabra alude a la 
sensación que un individuo tiene en su cuerpo y en especial, de los movimientos 
que éste realiza, Uriarte Víctor (1989:19-20). La hiperquinesia es la enfermedad 
mental más frecuente en los niños. Ha recibido varios nombres: disfunción 
cerebral mínima, hiperactividad, trastorno con déficit de atención con o sin 
hiperactividad (el cual es el más completo, ya que así está clasificada como 
enfermedad), entre otros. Sin embargo, por ser más corto, nos referimos a esta 
enfermedad como hiperquinesia. 
 
En la hiperquinesia hay dos clases de comportamiento anormal: la 
hiperactividad/ impulsividad y la falta de atención. La falta de atención se presenta 
en la desorganización, la fácil distracción y la falta de concentración: el niño 
parece no escuchar o pierde todas sus cosas, etc. Algunos niños hiperquinéticos, 
tienden ser etiquetados como flojos al estar mal diagnosticados. 
 
Los hiperquinéticos, suelen provenir de hogares problemáticos. Sin 
embargo, no es claro si esta situación es causa o consecuencia. Podría ser que un 
niño hiperquinético se vuelva peor en un ambiente de ese tipo, y por eso sea 
diagnosticado como hiperquinético. O quizás un hogar se convierta en un caos 
cuando un niño hiperquinético vive en él. Ambas aseveraciones son parcialmente 
ciertas. 
 
21 
 
La hiperquinesia es distinta al mal comportamiento o la simple inquietud. En 
la hiperquinesia el niño no puede controlar su comportamiento y más importante, 
no puede terminar lo que empieza. No es capaz de jugar solo o en grupo; baja 
todos los juguetes y los deja tirados porque ya no sabe qué hacer con ellos. Esto 
provoca rechazo en adultos, amigos, etc., por lo que algunos hiperquinéticos son 
niños en conflicto y poco felices. 
 
Dado que la hiperquinesia puede ser un diagnóstico grave, el tratamiento 
requiere de la combinación de un medicamento y terapia. Es inútil iniciar una 
terapia psicológica si el niño no puede estarse quieto. En el otro extremo, el uso 
del fármaco sin terapia solo controla la hiperquinesia pero no enseña al niño a 
vigilar su conducta. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
22 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPITULO 2 
 ¿QUÉ ES LA HIPERACTIVIDAD INFANTIL; ES 
UN COMPORTAMIENTO FRECUENTE? 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
23 
 
Como se menciono en el capitulo anterior, el Trastorno por Déficit de 
Atención con Hiperactividad (TDAH), mejor conocido como hiperactividad infantil, 
es un trastorno de conducta de origen neurobiológico que no siempre evoluciona 
favorablemente. Su incidencia es alta en la población infantil. Diversas 
investigaciones estiman que los niños menores de 10 años son hiperactivos, lo 
que supone que aproximadamente cerca de 300, 000 mil niños (as) presentan una 
conducta hiperactiva. 
 
La hiperactividad infantil es bastante frecuente, afecta a niños,adolescentes 
y adultos, aunque es más común en niños que en niñas (hay 4 niños por cada 
niña), Uriarte Víctor (1989:108). 
 
Por lo que, es importante saber que los niños entre 7 y 12 años de edad 
(en los cuales se ha centrado esta investigación), se encuentran inmersos en una 
etapa de desarrollo conocida como edad intermedia, es decir, un periodo de 
latencia (lapso) entre la etapa preescolar y la pre adolescencia, o bien desde un 
punto de vista psicológico en la etapa de operaciones concretas de Jean Piaget, 
donde los niños comienzan a interactuar en un contexto social y son capaces de 
razonar de manera lógica, definiendo así su carácter, gustos y aptitudes. 
 
La edad intermedia se divide en dos etapas. La primer etapa, es de los 6 a 
los 9 años, aquí los niños están dejando de ser pequeñitos, no saben resolver las 
situaciones y piden ayuda a sus padres para asuntos de la escuela, por lo que se 
24 
 
les empieza a enseñar cómo resolver sus problemas. La segunda etapa, es de los 
9 a los 12 años y se les llama preadolescentes, debido a que son más 
independientes y tienen intereses en los temas adultos. Sin embargo, la familia, 
escuela, lenguaje y el desarrollo moral y social son factores de gran relevancia en 
esta etapa, ya que los niños necesitan comprensión, demostración de cariño, 
atención a sus actividades y sobre todo apoyo constante en el aspecto social y 
moral. 
 
2.1 Niños sin TDAH 
 
Durante los 7 y 12 años de edad, la rápida o lenta adquisición de 
habilidades, destrezas, aptitudes y capacidades del niño dependerá en gran parte 
de la herencia genética, la estimulación y el medio ambiente en el que se 
desenvuelva. Durante este periodo, el crecimiento tiene un ritmo lento, pero 
constante y se caracterizan por ser niños activos e inquietos, tener suficiente 
confianza en sí mismos y lo que hacen, ser selectivos al examinar y manipular 
algún objeto, así como al observar algo que despierta su curiosidad o lo que 
sucede a su alrededor. 3 
 
A medida que va creciendo, el niño es capaz de entretenerse en una sola 
cosa por más tiempo, pone mayor atención a aquello que despierta su interés, es 
reflexivo, pero también suele molestarse rápidamente; tiene sentido de 
 
3
 http://members.tripod.com/psico1_deshumano/intermedia.html 
25 
 
pertenencia a un grupo y puede establecer relaciones de amistad, le gusta pensar 
en sí mismo, organizar y revivir sus experiencias, es responsable, asume roles y 
obligaciones dentro de la familia y escuela. 
 
2.2 Niños con TDAH 
 
Antes de mencionar las principales características de un niño con 
hiperactividad debemos recordar que a diferencia de los niños que no tienen este 
padecimiento, el niño con TDAH es impredecible en su comportamiento, pues este 
depende del grado de inatención, impulsividad e hiperactividad que presente, así 
como del ambiente en el que se desarrolle. En otras palabras, un pequeño con 
este trastorno mantiene conductas conflictivas en frecuencia con intensidad e 
inoportunidad del momento en el que ocurren. Sin embargo, no todos los niños 
con hiperactividad mantienen las mismas características, aunque las dificultades 
de atención, impulsividad e hiperactividad son rasgos comunes que presentan 
todos los infantes con TDAH. 
 
2.3 Características de la Hiperactividad Infantil 
 
Las características más importantes y sobresalientes en la hiperactividad, 
con las que padres, maestros y especialistas, podrán identificar a un niño con 
TDAH son: 
26 
 
 Atención: Lo que más caracteriza al niño con hiperactividad es su falta de 
atención cercana a detalles. La distracción más vulnerable es dentro del 
contexto ambiental en que se encuentra inmerso. En casa, parece no 
escuchar cuando se le habla y tiene dificultades para organizarse y seguir 
las órdenes que se le indican. Mientras que en la escuela, comete errores 
por no fijarse en los trabajos o en las diferentes actividades. Con frecuencia 
salta de una tarea a otra sin terminarlas, ya que suele evitar situaciones que 
impliquen un nivel constante de esfuerzo mental. 
 Impulsividad: Con frecuencia actúa de forma inmediata sin pensar en las 
consecuencias. Esta inquieto con las manos o los pies y no puede sentarse 
o estar quieto un solo momento. Esta activo en situaciones inapropiadas; 
habla de forma excesiva, responde antes de que la otra persona termine, 
tiene dificultad para esperar su turno y frecuentemente interrumpe. 
 Comportamiento: Su comportamiento es imprevisible, inmaduro e 
inapropiado para su edad. Es travieso, se muestra violento y agresivo de 
forma verbal y física con los que lo rodean, con frecuencia miente y llega a 
cometer robos. 
 Desobediencia: Como se menciono anteriormente, el niño con 
hiperactividad tiene problemas para seguir las ordenes que se le indican en 
casa, pues suele hacer lo contrario de lo que se le dice o se le pide. Los 
padres tienen especial dificultad para educarle en adquirir patrones de 
conducta (hábitos de higiene, cortesía, etc.). Solo hacen lo que ellos 
desean. 
27 
 
 Inestabilidad Emocional: Presenta bruscos cambios de humor, tiene un 
concepto pobre de sí mismo y no acepta perder, por lo que no asume sus 
propios fracasos. 
 
Otras características que suele mostrar el niño con TDAH son: 
 Efusividad en las muestras de cariño hacia las personas. 
 Suele hablar desenfrenadamente y ser repetitivo en sus preguntas. 
 Hace ruidos brutales con frecuencia, se mueve sin motivo alguno y se irrita 
con facilidad. 
 Al tiempo que no presta atención para realizar alguna actividad, suele 
mostrar interés excesivo en algo que le parece atractivo e interesante o 
representa un reto para él (ella). 
 Tiende a presentar trastornos del sueño. 
 No asimila correctamente las indicaciones, por lo que puede tardar varias 
horas en hacer lo que se les dice. 
 Muestra dificultades para relacionarse con las personas, por lo cual se 
vuelve complicado la interacción con los demás. 
 Suele tener constantes accidentes (caídas, cortaduras, golpes, fracturas, 
etc.), actuar de manera vertiginosa y sin freno. Especialmente los niños con 
TDAH impulsivo-hiperactivo 
 En la escuela, suele olvidarse de presentar sus trabajos y tareas, aunque 
los haya hecho. 
 
28 
 
Las dificultades que experimentan los infantes con TDAH se deben, más 
que a una falta de atención a las indicaciones y a sus detalles, a los obstáculos 
que presenta el cerebro para efectuar el procesamiento de la información, Cadena 
Arenas (2009:51). Esto no significa que los niños con trastorno por déficit de 
atención, con o sin hiperactividad sean menos inteligentes, por lo contrario, 
poseen un grado de inteligencia igual, o superior al resto de las personas. 
 
Por lo que, ante la presencia de varias características es conveniente actuar 
y acudir con algún especialista (siempre es mejor cuando el trastorno se detecta a 
tiempo), y no tratar de minimizar el problema como algo normal que desaparecerá 
con el paso del tiempo, pues de lo contrario el problema podría empeorar y 
perjudicar al niño en los ambientes en los que se desenvuelve (escuela, familia, 
etc.), provocando que sean etiquetados por las personas y en consecuencia 
tengan un mal autoconcepto de sí mismos. 
 
2.4 Problemas del Niño Hiperactivo en la Familia y la Escuela 
 
Un niño con TDAH, además de mostrar características como inatención, 
impulsividad, desobediencia, inquietud, temperamento explosivo, inestabilidad 
emocional, etc., también plantea una serie de problemas y conductas dentro del 
contexto donde se desenvuelve, siendo los más relevantes la familia y la escuela, 
Ávila de Enció (2002:23). 
 
29 
 
Familia: Los problemas más comunes a los que suelen enfrentarse los padres 
son: 
 La culpa que sienten, cuando uno de sus hijos tiene algún problema 
psicológico, de conducta social,etc., pues piensan que están educando de 
manera incorrecta a su hijo. 
 La critica que reciben los padres del niño con hiperactividad, por parte de 
los profesores, amigos, compañeros de trabajo o hasta de la propia familia, 
debido al comportamiento del niño. 
 Los padres consideran la conducta del niño como un rechazo a su forma de 
actuar, ya que el niño suele evidenciarlos en público. 
 Cuando el niño hiperactivo no es el único hijo de la familia, existen 
continuos enfrentamientos (verbal y físico) entre él y los hermanos. 
 Si hay hermanos, y estos son más chicos que el niño con TDAH, estos 
pueden crear un autoconcepto pobre de sí mismos y estado emocional 
depresivo. Pero si son mas grandes pueden desarrollar estrés y ansiedad. 
 En principio y como regla general, son niños cuyas madres siempre suelen 
estar al borde de un ataque de nervios. 
 No duerme bien y llora sin motivo alguno. 
 Generalmente, son niños que desde que nacen están dando problemas 
conductuales. 
 
 
30 
 
Escuela: Los principales problemas que presenta un niño con TDAH dentro de la 
escuela son: 
 Los maestros se percatan de que no presta la más mínima atención, pues 
no permanece sentado en su lugar, no realiza las actividades, etc., y 
presenta dificultades de aprendizaje. 
 Muestra muchos conflictos en clase tanto individual, como a la hora de 
trabajar en equipo con sus compañeros. 
 
Entre los 7 y 12 años de edad, se encuentran inmersos en la primara. La 
entrada al primer grado le impone al niño con hiperactividad una serie de 
exigencias atencionales y conductuales que encuentra especialmente difíciles de 
cumplir. Algunas veces se plantea una permanencia en el preescolar debido a su 
gran inmadurez (presenta mucha actividad motora, lo cual es muy notable en 
clase), dado que en la primaria, es necesario que el niño controle esa actividad 
motora y que se mantenga sentado realizando su trabajo como el resto del grupo. 
A esta edad, el niño hiperactivo pasa a ocupar el primer plano de la clase, debido 
a su problema de hiperactividad, no consigue mantener la disciplina en el aula y 
sus dificultades de aprendizaje son mayores, que las de sus compañeros. 
 
En ocasiones, los profesores, piensan que todos estos inconvenientes se 
deben a un problema de inmadurez, llegando a aconsejar a los padres, que el niño 
repita el ciclo escolar. La relación con sus compañeros no es buena, lo rechazan, 
por las diferentes actitudes que manifiestan ante el grupo (agresividad, 
31 
 
impulsividad, etc.), o bien, lo pueden considerar el líder del grupo. Todo esto, junto 
con las cosas que vive dentro de su casa genera sentimientos, estados y 
sensaciones de inseguridad y un autoconcepto negativo, lleno de insatisfacción en 
el infante. 
 
A los 7 años de edad, no es fácil percibir una autoestima y autoconcepto 
bajo en un niño con TDAH, debido a que frecuentemente mienten para ganarse la 
aprobación de todos los que lo rodean (profesores, padres, compañeros, etc.). Sin 
embargo, conforme va creciendo, la conducta brusca e intensa del niño hiperactivo 
se va complicando, especialmente a partir de los 12 años, ya que sus intereses 
cambian y todo se vuelve más complejo. 
 
Y si no se le ayuda, tanto el niño como el adolescente con hiperactividad, 
estos pueden presentar síntomas de depresión, en consecuencia de su fracaso 
para adaptarse a las demandas de su entorno. 
 
2.5 Dificultades de Aprendizaje y Bajo Rendimiento Escolar (Fracaso) 
 
La mayoría de los niños con hiperactividad presentan dificultades en el 
aprendizaje, debido a la poca capacidad que tienen para estructurar la información 
que reciben a través de los distintos sentidos. Por lo que muchos de estos chicos 
tienen un bajo rendimiento escolar. 
 
32 
 
Las dificultades de aprendizaje en los niños con TDAH se manifiestan 
primordialmente en la adquisición y el manejo de la lectura, escritura y el cálculo. 
Son torpes para dibujar o escribir, tienen mala letra y cometen grandes errores de 
ortografía. En el cálculo, se olvidan de las operaciones básicas. En la lectura, 
omiten palabras, símbolos e incluso renglones, no comprenden lo que leen, 
pueden identificar las letras pero no pueden pronunciarlas correctamente. Tienen 
dificultad para memorizar y generalizar la información adquirida, debido a su falta 
de atención y el exceso de actividad, aunque su capacidad intelectual sea normal, 
superior e inferior, lo que puede provocar problemas en el aprendizaje o fracaso 
escolar. 
 
El fracaso escolar es un acontecimiento que se manifiesta en una 
desproporción entre los conocimientos adquiridos y el volumen de información 
recibida que, actuando desde diferentes niveles y contextos, producen una 
reducción significativa de los resultados académicos esperados, implicando varias 
consecuencias en el plano personal, familiar y social. Sin embargo, la forma de 
educar a un niño con hiperactividad, puede contribuir, a moderar la intensidad de 
la manifestación de los síntomas hasta que, con la madurez se suavicen como 
para poder considerar que se trata más bien de un rasgo de personalidad, Armas 
Castro (2007: 153). 
 
Las principales dificultades de aprendizaje (inatención) y bajo rendimiento 
académico en un niño con TDAH son: 
33 
 
 Variabilidad: Son niños que tienen amplias variaciones en sus respuestas, 
son los típicos niños de los que se dice que pueden hacerlo todo. 
 Retraso Psicomotor: Varia desde la simple torpeza motriz hasta dispraxias 
importantes, es decir, problemas en las nociones de su esquema corporal, 
del tiempo y el espacio. Dificultades que se agudizan cuando tiene que 
realizar algo con ritmo. 
 Trastorno del lenguaje de tipo expresivo: Con vocabulario limitado, 
presentan dificultades a la hora de expresarse. Problemas en el área de 
lectura mejor conocido como dislexia. 
 Dificultades en la grafía: En la escritura; disgrafía y disortografía, debido a 
que existe una deficiente coordinación entre lo que ve y el movimiento 
manual, es decir, suelen presentar incoordinación viso motriz, su escritura 
es torpe, desordenada y con tachones, además de una ortografía con 
múltiples faltas y confusiones. 
 Discalculía: Problemas al realizar cálculos con las diferentes operaciones, 
por lo que suelen reprobar con mayor facilidad la materia de matemáticas. 
 
2.6 Trastornos Asociados al TDAH 
 
El TDAH es un padecimiento que no desaparece por sí solo y puede traer 
consigo otras complicaciones o trastornos si no se atiende a tiempo o de manera 
correcta. Según las estadísticas mundiales, aproximadamente, el 40% de los niños 
34 
 
con este trastorno tienen dificultades en el aprendizaje, lo que motiva al abandono 
de los estudios en la adolescencia. 
 
Y casi el 50% de estos chicos tienen asociada alguna alteración 
psiquiátrica, sobretodo problemas de ansiedad o depresión. En un 25% de los 
casos, existe el trastorno de oposición y de conducta, lo que quiere decir que, más 
de la mitad de los infantes y adolescentes con TDAH presentan trastornos 
paralelos asociados al padecimiento y aunque la sintomatología mejora 
notablemente con la edad, los síntomas pueden persistir en la edad adulta, hasta 
en un 40 a 60% de los casos.4 
 
Los trastornos paralelos, sobresalen en todos los subtipos del TDA 
(predominante inatento, impulsivo-hiperactivo y combinado o mixto), siendo el 
subtipo combinado el que tiene una mayor variedad de trastornos paralelos o 
asociados, los cuales se entienden como la presencia de dos o más 
enfermedades independientes en una persona, Cadena Arenas (2009:104-105). 
 
Los trastornos asociados al TDAH de mayor relevancia son: 
 
Trastorno de Aprendizaje: El aprendizaje es el proceso por el cual se adquiere 
una nueva conducta, como resultado de la práctica. Así que, como ya se 
 
4
 http://www.psicologoinfantil.com/articulohiperactivo.htm35 
 
menciono anteriormente, algunos niños con TDAH suelen presentar alteraciones 
en el aprendizaje como: 
 
 Dislexia: Es el trastorno en la lectura debido a problemas motrices (poco 
conocimiento del cuerpo, no hay lateralidad y madurez), y receptivos (no se 
ubica lo que es arriba, abajo, izquierda y derecha), debido a la deficiencia 
del lenguaje. Entre los 7 y 12 años se caracteriza por pobreza de 
vocabulario, confusión en las letras, fallas en el reconocimiento de las 
palabras, omisiones, repeticiones o sustituciones, términos imprecisos, 
tiempos verbales mal empleados y mala comprensión de lectura, así como 
mala escritura y ortografía. 
 Disgrafía: Es el trastorno que afecta la expresión escrita, por dificultades 
madurativas, entre las cuales están la laterización, deficiencia psicomotora 
(perturbaciones en el equilibrio y motricidad débil), problemas del esquema 
corporal y de las funciones perceptivo-motrices (organización, 
estructuración y orientación espacial). Se basa en la carencia de la 
habilidad para redactar, en la que se engloban varios errores como la 
deformación en la hechura y tamaño de las letras, equivocaciones 
gramaticales y de puntuación, mala organización en los párrafos y 
confusión u omisión de letras. 
 Discalculía: Es la dificultad para manejar números y conceptos 
matemáticos, independientemente del nivel mental y las perturbaciones 
afectivas. Se caracteriza por la dificultad para aprender a contar, hacer 
36 
 
cálculos simples, definir grupos de objetos, mala escritura de los números, 
pobre seriación, clasificación numérica o en las operaciones y pensamiento 
espacial (derecha-izquierda), poco razonamiento ante los problemas 
aritméticos simples y dificultad de integración de los símbolos numéricos. 
 
Trastorno de Ansiedad: Este trastorno es una reacción de supervivencia ante un 
miedo, peligro o amenaza. En los niños el miedo a no recibir atención y no sentirse 
protegidos, hace que creen mecanismos de defensa que les otorguen satisfacción 
y seguridad, pero cuando estos mecanismos se ven amenazados se presenta la 
ansiedad. La cual puede ser reflejada a través de: insomnio, pesadillas dolor de 
cabeza, alteraciones en la alimentación, nerviosismo, miedo, baja autoestima, 
desarrollo de paranoias, hiperactividad, falta de atención, entre otros. Cabe 
señalar, que a este trastorno también suele asociársele la depresión, debido a que 
también interviene el estado de ánimo del individuo. 
 
Trastorno de Conducta: Son expresiones del individuo que sobrepasan los 
límites y van más allá de las reglas y rasgos de conducta aceptados y establecidos 
por la sociedad. Los problemas de conducta pueden irse transformando conforme 
avanza la edad, ya que son determinados por el impacto que producen en el 
individuo y el ambiente en el que esté se desarrolla (escuela, casa, amigos, etc.), 
generando una personalidad destructiva, agresiva y de comportamiento antisocial. 
Se identifica por golpear o amenazar a las personas sin motivo aparente, ser 
37 
 
brusco en las muestras de afecto, además de, utilizar la rudeza con la gente, los 
animales y los objetos, sin ningún pretexto. 
 
Este tipo de trastorno suele dividirse en varios sub tipos, como son: 
 Trastorno de Negativismo desafiante: También llamado opositora-
desafiante, aqueja aproximadamente a 50% de quienes tienen problemas 
de TDAH. Esta conducta consiste en adoptar posturas contrarias y de 
oposición hostil a las órdenes o las figuras de autoridad. El negativista-
desafiante reta, no cumple órdenes, desafía las normas establecidas en 
casa, escuela y sociedad en general. Se caracteriza por tener actuaciones 
de nula cooperación, ser provocativo, negativo, mostrar rencor a todas 
horas y culpar a los demás de sus propios errores; tender a irritarse o 
pelear fácilmente con los demás, especialmente con las personas que le 
simbolicen algún tipo de autoridad, Cadena Arenas (2009:108). 
 Trastorno de Socialización: Los niños con TDAH difícilmente logran hacer 
amigos, ya que no gozan de buena fama o son poco populares en la 
escuela y con quien los rodea, debido a la falta de atención, impulsividad e 
hiperactividad que poseen; provocando sentimientos de ansiedad, 
agresividad, temor y baja autoestima, al interactuar o socializar con las 
personas. 
Trastorno del Desarrollo de Coordinación Motora (TDCM): También llamado 
trastorno de las habilidades motoras, es un padecimiento frecuente en niños con 
hiperactividad. Es un problema significativo en las habilidades motoras gruesas y/o 
38 
 
finas, que se evidencia en dificultades de agilidad, desplazamiento, equilibrio o 
destreza manual, para desempeñar las actividades de la vida diaria y el ámbito 
académico. Los niños que padecen este trastorno suelen tener problemas al 
atarse las agujetas, abotonarse la camisa, descuido con la manipulación de los 
objetos, mala caligrafía, caminar de manera pausada e insegura, cansarse 
rápidamente y adoptar posiciones encorvadas con facilidad, etc. Con el tiempo las 
actividades que requieren mayor destreza como el juego de pelota, se vuelven 
más complicadas al igual que la escritura.5 
Trastorno del Sueño: Los niños con TDAH tienden a presentar este trastorno 
debido a la inatención, impulsividad y demás problemas que poseen, 
manifestándose en problemas para conciliar el sueño, movimientos constantes 
mientras duermen, pesadillas o descansos por periodos cortos para 
reincorporarse, así como llegar a tener problemas con el control de esfínteres. 
 
2.7 Características y Problemas en el Adolescente con TDAH 
 
A partir de los 12 años de edad, el adolescente hiperactivo se vuelve 
discutidor, desafiante e intolerante por sus caprichos. El rendimiento académico 
empeora, la sensación de fracaso se generaliza y la autoestima se hace cada vez 
más negativa. En consecuencia, el riesgo a tener depresiones aumenta durante 
esta etapa. 
 
5
 sites.google.com/a/neuropedhrrio.org/.../trastorno-coordinación-motora 
39 
 
De manera que, lo puntos conflictivos del TDAH en la adolescencia son: El 
abuso del alcohol, el consumo de drogas y las experiencias sexuales tempranas; 
así como, los trastornos antisociales de conducta, los accidentes de tráfico, robo e 
intentos de suicidio (relacionados con rasgos depresivos, causados por el fracaso 
escolar, problemas familiares, etc., que se desencadenan por la impulsividad que 
les lleva a actuar sin pensar), Ávila de Enció (2002:115). 
 
El abuso del alcohol y las drogas son debido a que algunas de estas 
sustancias tienen un efecto sedante para el adolescente con hiperactividad, ya 
que al ingerir drogas o alcohol, los niveles de los neurotransmisores cerebrales se 
alteran y el adolescente se siente menos confundido, está más seguro de sí 
mismo y puede organizarse mejor. Pero este efecto agradable, unido a la falta de 
dominio que se tiene sobre si mismo, le convierte en presa fácil de las adicciones. 
 
 
 
 
 
 
 
 
40 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPITULO 3 
ORIGEN Y CAUSAS DE LA HIPERACTIVIDAD 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
41 
 
Desde hace muchos años, los científicos han estado tratando de encontrar 
más y más evidencia para comprobar que el Trastorno por Déficit de Atención e 
Hiperactividad (TDAH), no surge del ambiente familiar, sino a raíz de las causas 
biológicas. No obstante, en las últimas décadas se han hecho grandes avances en 
la búsqueda de las posibles causas del TDAH, y hasta el momento la evidencia 
apunta hacia factores genéticos y neurológicos como los más importantes para 
explicar el alcance de la hiperactividad entre la población infantil. A pesar de ello, 
todavía tenemos mucho que aprender sobre el TDHA y sus posibles orígenes. 
 
Científicamente, se sabe que los factores biológicos son los que están más 
relacionados con el TDHA, y que puede que sea una de las causaspor las que se 
origina este trastorno. Hoy en día, los estudios indican que existe una contribución 
genética muy fuerte en el TDAH, contribución que es mayor que la de los factores 
ambientales (escuela, casa y los distintos lugares en los que se desenvuelve el 
niño). 
 
Por lo que, se puede pensar que los niños con hiperactividad, tienen menor 
actividad cerebral, considerándola, como la parte que está implicada en la 
inhibición conductual, la persistencia en la respuesta, la resistencia a la distracción 
y el control de actividad. Con la certeza de que esta baja actividad, pudiera ser de 
menor tamaño en algunas regiones cerebrales, en las que abría un menor nivel de 
actividad química de estas regiones. Sin embargo, es posible que algún día se 
demuestre que estas alteraciones son el resultado de la combinación de un 
42 
 
conjunto de genes que probablemente, contribuyen a la aparición de este 
trastorno. Siendo erróneo pensar que las habilidades educativas por parte de los 
padres y profesores, al controlar y moldear a los niños con TDAH, sean la causa 
del aumento de la severidad y persistencia del trastorno. 
 
3.1 Orígenes Genéticos o Hereditarios 
 
Se involucran por lo menos 50 genes donde además de TDAH se pueden 
encontrar otras irregularidades en la conducta. Se ha planteado que el trastorno 
tiene un principio genético y que su causa puede ser un gen trasmitido de los 
padres hacia el hijo o bien puede venir de generaciones atrás, lo que podría 
ocasionar que uno o todos los hijos padezcan TDAH aunque los padres no lo 
tengan, Cadena Arenas (2009: 80). 
 
3.2 Orígenes Neurológicos: 
 
Dado que el cerebro es uno de los órganos más importantes que posee el 
ser humano, es importante mencionar que esté, está constituido por diferentes 
tipos de células, de las cuales el elemento funcional es la neurona. Cada neurona 
obtiene información de otras y la procesa dentro su cuerpo, lo cual estimula la 
irrigación de sustancias químicas llamadas neurotrasmisores, los cuales tienen 
como finalidad ejecutar una función determinada, controlando de manera directa la 
conducta, las emociones y el conocimiento, Cadena Arenas (2009:82). 
43 
 
Por lo que, los neurotrasmisores más involucrados en la aparición del 
TDAH, debido a la insuficiente o excesiva producción de sustancias químicas 
cerebrales son: 
 Dopamina: Se encarga de regular el comportamiento, la actividad 
motora, la cognición, la motivación y la recompensa, el sueño, el humor, 
la atención, y el aprendizaje. 
 Noradrenalina o norepinefrina: Controla el estado de ánimo, ya que se 
encuentra asociada estrechamente con el sistema nervioso, y tiene un 
papel importante en el impulso y la motivación, además de ser el 
moderador del sueño. 
 Serotonina: Modula la conducta (modera la agresividad y los 
sentimientos de ansiedad), regula el apetito, mide el sueño, controla el 
estrés, mantiene el estado de vigilia y contempla las funciones del 
aprendizaje, la concentración, la memoria y el humor. 
 
Se ha comprobado que en la aparición del TDAH también pueden afectar 
otros factores (psicosociales) internos y externos, tales como amenaza de aborto 
de la madre, estrés o anemia durante el embarazo, sufrimiento fetal en el parto, 
nacimiento prematuro, bajo peso al nacer, pequeña malformación cerebral, 
meningitis, traumatismos, problemas con el tabaco y alcohol durante el embarazo, 
o bien, conflictos en el ambiente familiar, entre otras, De Lima Hilda (2001: 96). 
 
 
44 
 
 
 
 
 
 
 
CAPITULO 4 
ANTECEDENTES DEL TDAH 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
45 
 
Los antecedentes del Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad 
(TDAH), aparecieron por primera vez en el año de 1845 cuando el psiquiatra y 
escritor alemán Heinrich Hoffmann escribió un libro acerca de niños alemanes con 
diversos tipos de trastornos conductuales relacionados con el TDAH. Sin embargo, 
no es hasta principios de los años noventa, cuando surgen los primeros estudios 
científicos sobre la hiperactividad y el pediatra británico Still la califica como un 
defecto del control moral, es decir, un trastorno de la conducta en los niños. Los 
niños desarrollan una intensa actividad motora, se mueven continuamente sin que 
toda esta actividad tenga un propósito. 6 
 
Tras varios estudios e investigaciones entre 1940-1947 Bender, Werner y 
Stratus identifican manifestaciones clínicas secundarias a daño cerebral, como 
hiperactividad, alteraciones del sueño, distractibilidad, falta de concentración, etc., 
sin embargo, durante esa época, el problema no fue considerado como grave y 
era diagnosticado como Disfunción Cerebral Mínima, aun cuando no se 
descartaba que hubiese algún inconveniente en las funciones del cerebro. No de 
acuerdo con ello, varios investigadores deciden seguir buscando una mejor 
definición para las complicaciones de la conducta infantil, denominándolo así 
como Síndrome de Hiperactividad del Niño, ya que la mayoría de los síntomas 
apuntaba a una conducta hiperactiva. 
 
 
6
 http://www.guiainfantil.com/salud/cuidadosespeciales/la_hiperactividad.htm 
46 
 
Pero no fue hasta 1962 cuando Clements y Meter, mencionaron por primera 
vez el trastorno por déficit de atención con hiperactividad, al definir el concepto de 
Daño Cerebral Mínimo; dicha mención basto para que estudios e investigaciones 
posteriores tomaran en cuenta el déficit de atención, además de los problemas de 
conducta. En 1968 se replanteo el terminó de daño cerebral mínimo a Alteraciones 
Especificas del Aprendizaje, con base a las complicaciones que fueron 
apareciendo en el área educativa. Sin embargo Reacción Hipercinética de la Niñez 
es la definición que se introduce en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los 
Trastornos Mentales DSM-ll. 
 
 En 1970 Douglas y Cols describieron el déficit cognitivo asociado a la 
hiperactividad, donde la principal carencia estaba en la atención. Para 1980 la 
Asociación Psiquiatrita Americana anuncio en Estados Unidos una nueva 
adaptación del DSM-ll al DSM-lll, en el cual se expone por primera vez al trastorno 
con el nombre de Trastorno por Déficit de Atención presentando una serie de 
síntomas donde la hiperactividad podía o no estar presente y al mismo tiempo, 
separándolo de las alteraciones especificas de aprendizaje. Posteriormente entre 
1994-1995, el DSM-IV consolida al Trastorno por Déficit de Atención con 
Hiperactividad (TDAH) como la nueva definición oficial (dejando a tras a los otros 
conceptos), clasificándolo en predominante inatento, hiperactivo o combinado. 
 
 
 
47 
 
4.1 Perspectiva en México 
 
En cuanto al panorama, que se ha ido manejando en México con respecto a 
dicho trastorno, la Organización Mundial de la Salud (OMS), señala que los 
individuos que padecen TDAH representan un 5% de la población a nivel mundial. 
Tomando en cuenta que la población infantil en México comprende alrededor de 
los 5-16 años de edad, aproximadamente existen 28 millones de infantes en el 
país, de los cuales según datos obtenidos en el censo 2005 del INEGI y la 
Secretaria de Salud (SSA) un 6% padece TDAH. Es decir, que aproximadamente 
más de un millón y medio de niños presentan este trastorno, y sin embargo el 50% 
de estos chicos no son diagnosticados o tratados adecuadamente, lo que provoca 
que reprueban por lo menos un año escolar. Cadena Arenas (2009:100). 
 
No obstante, cabe mencionar que todo esto ha ido cambiando con el paso 
de los años, pues hoy en día, podemos encontrarnos con más de un caso de 
TDAH en cualquier parte. 
 
 
 
 
 
 
 
48 
 
 
 
 
 
 
CAPITULO 5 
LA RELACIÓN DE LOS PADRES ANTE EL 
TDAH 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
49 
 
El ámbito familiar y escolar no solamente se asocian para realizar el 
diagnostico, sino también, en otros aspectos extremadamente relevantes como 
son: elproceso de aprendizaje y el proceso terapéutico; ya que el encuentro entre 
las institución escolar y la familiar está programado y sujeto a ciertas reglas de 
manera tal, que normalmente se genera un contexto de integración, cooperación y 
comprensión reciproca. Siendo importante que ambas partes (escuela y familia), 
partan de la base de que cada una tiene un trabajo difícil que llevar a cabo y para 
el cual, no siempre se está preparado. 
 
Por tal motivo, los siguientes dos capítulos estarán dirigidos a revisar cual 
es la relación de los padres y los profesores ante los niños con hiperactividad, ya 
que los padres no siempre están enterados de cómo afrontar este tipo de 
problemas y, aunque parezca mentira, los docentes tampoco, debido a que sus 
propios planes de formación no han incluido dichas cuestiones. 
 
Ahora bien, en cualquier lugar, plano o situación, la familia y el papel que 
está desarrolla, es una de las cosas más importantes en la vida de un individuo; 
en especial, cuando la salud de alguno de sus integrantes se encuentra de por 
medio, como es el caso de los niños con TDAH. 
 
En la familia se forman las virtudes y valores de cada persona (seguridad, 
amor, apoyo, confianza, autoestima, respeto, etc.), de tal manera que, el ambiente 
familiar de un niño con hiperactividad, es una pieza fundamental para el control y 
50 
 
recuperación del TDAH, ya que los problemas de conducta pueden tornarse más 
evidentes o disminuir según el medio donde se desarrolle el niño. Porque, no es lo 
mismo vivir en un ambiente caótico y desestructurado, que en un ambiente 
organizado y predecible donde hay una mejor respuesta por parte de los 
miembros de la familia. 
 
Es primordial, que la familia del niño con TDAH cuente con la disposición 
necesaria para buscar información, resolver dudas, solucionar diferencias entre los 
integrantes, y acudir con un especialista en el tema, para que todos juntos puedan 
apoyar y servir de guía al infante con este trastorno, pues de este modo el proceso 
de recuperación será mejor, Cadena Arenas (2009:164). 
 
Pero, ¿Cuál es la ayuda que pueden brindar los padres a un hijo con 
TDAH? Es cierto que ser padres no es una tarea fácil, y mucho menos si el 
pequeño tiene algún padecimiento como el Trastorno por Déficit de Atención con 
Hiperactividad. 
 
A menudo, los padres llegan a sentirse culpables de que su hijo sea 
hiperactivo, debido a que desconocen la profundidad del problema por falta de 
información. Lo que provoca que educar a un niño que está lleno de actividades 
descontroladas, que realiza desordenes, hace berrinches y no escucha o sigue 
instrucciones, sea agotador y preocupante; pues, los métodos usuales de 
disciplina, tales como el razonamiento y los retos, no funcionan en su totalidad con 
51 
 
el niño, porque en realidad él no elige actuar de esta manera. Es solo que su 
autodominio va y viene; y a raíz de la frustración, los padres reaccionan dándoles 
palizas, ridiculizándolos o gritándoles a pesar de saber que los golpes y los gritos 
no llevan a nada bueno, sino al contrario, solo deja a todos más alterados. 
 
Es entonces, cuando los padres del niño con TDAH, se culpan a sí mismos 
por no ser mejores padres, sintiéndose impotentes, frustrados y sin recursos, al 
no saber cómo sobrellevar la conducta descontrolada y la personalidad 
impredecible del niño, llegando a sentirse sobrecargados por los esfuerzos que 
deben hacer. Sin embargo, no se debe olvidar que una vez que se diagnostica al 
niño con hiperactividad, y este recibe el tratamiento indicado, parte de la 
perturbación emocional dentro de la familia comienza a desvanecerse. 
 
Así que, para crear un mejor ambiente familiar es importante que los padres 
del niño con TDAH, tomen en cuenta lo siguiente: 
 Se deberá crear un ambiente familiar estable y organizado con normas 
claras y firmes que no cambien de un día para otro explícita (las reglas 
deben ser conocidas y comprendidas por las dos partes), y 
predeciblemente. 
 Empezar a actuar de acuerdo al diagnostico, dejando a un lado los 
sentimientos de culpa, frustración, impotencia y sobreprotección. 
 No caer en el juego, ni las manipulaciones del niño. 
52 
 
 No exigirle más cosas de las que no puede realizar debido a su capacidad 
de atención. 
 Reforzar la autoestima del niño, reconociendo sus logros y el buen 
comportamiento. 
 Estimular el desarrollo social del niño en vez de aislarlo de las personas. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
53 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPITULO 6 
LA RELACIÓN DE LOS PROFESORES ANTE 
LA HIPERACTIVIDAD 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
54 
 
Como se menciono en el capitulo anterior, dado que el ámbito escolar y el 
familiar no solo se relacionan en la elaboración del diagnóstico, sino también en el 
proceso de aprendizaje y proceso terapéutico. Es importante que al igual que los 
padres, los docentes también busquen información sobre el TDAH (síntomas, 
alcances, limitaciones, estrategias, etc.), así como, el tipo de ayuda que pueden 
brindarle al alumno hiperactivo. De tal modo, que logren adquirir un criterio más 
amplio sobre los niños con hiperactividad y dejen de aislarlos o tacharlos como 
burros y holgazanes al no querer o poder hacer algo por ellos, debido a la falta de 
información, pues aunque no es fácil educar al niño con TDAH, tampoco es 
imposible. 
 
La escuela, es el lugar donde un docente suele enfrentarse a numerosos 
retos y desafíos dentro del aula, dado que las necesidades de cada uno de los 
alumnos son diferentes y muchas veces unos necesitan un poco más de atención 
que los demás, como es el caso de los niños con TDAH. 
 
 Y dado que la institución educativa, exige una conducta determinada 
dentro del aula, los síntomas del TDAH tienden a reflejarse de manera 
significativa, al presentar: 
 Dificultad para permanecer sentado, cuando se le requiere. 
 Inquietud frecuente en el asiento o movimientos excesivos. 
 Constantes cambios de actividad sin terminar la anterior. 
 Habla a destiempo y suele interrumpir durante las explicaciones. 
55 
 
 Frecuencia de respuestas precipitadas ante preguntas que no se han 
terminado de formular. 
 Parece no escuchar cuando se le habla. 
 Se le dificulta esperar su turno en las actividades y juegos en grupo. 
 Es socialmente inmaduro y tiene problemas en el rendimiento escolar. 
 No es organizado, de modo que pierde o pone en lugares equivocados sus 
pertenencias. 
 Manifiesta poca motivación escolar. 
 
Pero, ¿Cuál es la asistencia que puede brindar el profesor a un alumno con 
TDAH? Como profesor la labor de guiar, instruir, aconsejar y velar por la formación 
integral de los alumnos (as) es de gran importancia, porque con su esfuerzo y el 
asesoramiento de un especialista (psicólogo y pedagogo), los padres pueden 
lograr que sus hijos alcancen un desarrollo intelectual y emocional completo. 
 
Dentro del aula, es donde el docente puede ser un gran amigo o el peor 
enemigo de un niño con TDAH y sus padres. Habrá maestros que al darse cuenta 
del problema que puede presentar uno o varios de sus alumnos, no sepan que 
hacer, ya que desconocen el trastorno o lo dejan pasar. O bien, habrá profesores 
enfocados y dedicados a su profesión que al darse cuenta y sospechar del 
problema, decidan consultarlo con los padres para orientarlos, al mismo tiempo, 
que realizan adecuaciones en sus estrategias y el programa de estudios, para 
ayudar al niño en su aprendizaje. Ya que, si se estimula correctamente a un 
56 
 
alumno hiperactivo, se le dan órdenes breves y simples, se le obliga a mantener el 
orden en su mesa y sus materiales, se le sienta junto a estudiantes más 
tranquilos, y se alterna el trabajo de pupitre con otras actividades que le permitan 
levantarse y moverse un poco, esté puede realizar las labores escolares a un buen 
ritmo. Solo es cuestión de serpacientes, tolerantes y darles ánimo 
constantemente, evitando humillarles, Joselevich Estrella (2000:162). 
 
Así como, es importante un niño que no tiene ningún problema en sus 
capacidades y habilidades, también lo es, un alumno con hiperactividad, ya que 
tiene las mismas ganas de aprender que los demás. Solo que su ansiedad, 
problemas de conducta y falta de atención no le permite concentrarse como 
debería, ocasionando que presente problemas de aprendizaje (Dislexia, disgrafía y 
discalculia), y dificultades en sus relaciones sociales, situación que puede cambiar 
con el tratamiento adecuado y la constante comunicación entre los padres, 
maestros, psicólogos y pedagogos (especialistas en materia educativa encargados 
de asesorar en problemas de aprendizaje y TDAH), pues en conjunto podrán 
apoyar al niño con hiperactividad en los obstáculos que se le vayan presentando. 
 
 
 
 
 
 
57 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPITULO 7 
DIAGNÓSTICO DEL TDAH 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
58 
 
El diagnóstico es la etapa más importante y de mayor dificultad, en el 
pronóstico de un niño con Trastorno por déficit de atención e hiperactividad 
(TDAH), ya que obliga a los especialistas en el área a realizar una valoración 
rigurosa de los distintos contextos (familiar, escolar y social), en los que se 
desenvuelve el infante, dado que el niño hiperactivo es capaz de ajustar su 
conducta ante una situación nueva o un trato individualizado, lo que podría 
ocasionar que el trastorno pase desapercibido. Un diagnóstico permite dar una 
explicación de la problemática que se vive en torno al padecimiento, conocer el 
origen del problema, evaluar de manera objetiva los síntomas, excluir otros 
trastornos que pudieran ser parte del TDAH o paralelos a éste, sobrellevar las 
actuaciones del niño con hiperactividad y diseñar el camino más apropiado para 
manejar el trastorno y que el niño, junto con su familia lleven una mejor calidad de 
vida, Cadena Arenas (2009:139-140). 
 
Como seres humanos, niños, adolescente o adultos, conocer el diagnóstico 
de cualquier tipo de enfermedad, ya sea propio, de un hijo, familiar, amigo o de 
algún conocido, es un hecho para el que no estamos preparados habitualmente y 
solemos reaccionar (creando un mecanismo de defensa), no dándole importancia, 
negándolo o rechazándolo en primera instancia. Sin darnos cuenta de que si no 
tomamos las medidas necesarias a tiempo, el problema puede irse agravando 
cada vez más, pues si bien es cierto que resulta difícil conocer el diagnóstico de 
un padecimiento y vivir el proceso de duelo y aceptación del mismo, también lo es, 
el hecho de que éste puede tener un papel positivo al momento de afrontar el 
59 
 
problema para mejorar la calidad de vida del individuo, puesto que además de 
cambiar el estilo de vida de la persona y su familia, también modifica su manera 
de pensar y percibir las cosas, al mismo tiempo que le permite darse cuenta de 
que es, que lo origino y cuál es el tratamiento a seguir. 
 
En el caso de los niños con TDAH, el diagnóstico auxilia a los padres al 
permitirles conocer el trastorno (que es, causas, características y tratamientos), lo 
cual mejora la visión negativa que se tiene respecto al comportamiento del niño, 
así como a darse cuenta de que, con paciencia, comprensión y tolerancia, el 
pequeño puede dar más de lo que se espera de él, ya que solo necesita un poco 
más de tiempo que el resto de los niños para realizar sus actividades. 
 
Para llevar a cabo un diagnóstico certero, y que este mejore la calidad de 
vida del niño con hiperactividad, así como, de la gente que lo rodea, es necesaria 
la participación multidisciplinaria de diversos especialistas. De modo que, ante la 
más mínima sospecha de que un niño tenga TDAH, habrá que acudir 
primeramente con: 
 Un médico especialista: paidopsiquiatra, psiquiatra y neuropsicólogo 
(expertos en enfermedades mentales y su rehabilitación). 
 Un pedagogo, psicólogo clínico o educativo (expertos en solucionar los 
problemas de enseñanza-aprendizaje y capacitados para interpretar 
pruebas psicológicas y educacionales que pueden diagnosticar si el niño o 
adolescente padece TDAH. 
60 
 
 Un neuropediatra (especialista en anomalías, dificultades y enfermedades 
del sistema nervioso central, en especial cuando se trata de problemas de 
aprendizaje). 
 
Al médico le compete establecer el diagnóstico y, cuanto sea oportuno el 
tratamiento farmacológico, así como la orientación sobre que pautas 
psicoterapéuticas y de conducta deben seguirse. El psicopedagogo, por su parte, 
aplicara las pruebas pertinentes a fin de valorar el desarrollo intelectual, afectivo y 
social del niño y establecerá que tipo de intervención educativa es la más 
adecuada para superar los déficits que presenta en su propio contexto (familiar, 
escolar y social), Ávila de Enció (2002:46) 
 
De acuerdo con los especialistas, la mejor edad para llevar a cabo un 
diagnóstico y valorar si un niño tiene o no TDAH, es alrededor de los 5 o 6 años, 
ya que a esta edad inician una de las etapas escolares más importantes (donde se 
le pide un comportamiento más riguroso que el que se tiene en casa), y comienza 
a aprender a leer y a escribir. Realizar un diagnóstico antes de los cinco o seis 
años, daría resultados poco precisos y no permitiría detectar de manera clara si el 
niño es hiperactivo o simplemente travieso. 
 
 
 
 
61 
 
7.1 Fases del diagnóstico 
 
Las fases para el diagnóstico del TDAH que pueden pronosticar la 
presencia o no de la hiperactividad según la doctora Carmen Ávila de Enció, son 
las siguientes: 
 
Entrevista Clínica o Psicopedagógica: La entrevista clínica es el núcleo de la 
evaluación, con ella se pretende obtener información acerca del individuo, por lo 
que durante la primer consulta, el especialista tratara de recabar suficiente 
información a través de los padres, acerca del desarrollo y conducta del niño 
donde es preciso evaluar los siguientes aspectos: embarazo (particularidades de 
su desarrollo), parto, desarrollo psicomotriz de las funciones neuromotrices 
(actividad motora) y de lenguaje, enfermedades padecidas, la esfera afectivo-
comportamental, escolaridad, la historia familiar, medica y social del niño 
(autonomía, hábitos de aseo y alimentación, control de esfínteres, alteraciones del 
sueño), entre otros puntos; para abrir un expediente clínico del niño. 
 
Observación de la conducta del Niño: La segunda fase del diagnóstico consiste 
en que el especialista observe la conducta del niño en su contexto natural (casa, 
escuela) o la propia consulta. 
 
Evaluación Individualizada del Niño Hiperactivo: El último paso del diagnóstico, 
es aplicar algunas pruebas especificas (test psicológicos y escalas), al niño para 
62 
 
obtener información detallada sobre el desarrollo intelectual, estilos cognitivos, 
presencia o ausencia de síntomas neurológicos menores, impulsividad, desarrollo 
perceptivo, coordinación motora, capacidad de atención, nivel de actividad motora, 
etc., y con todo ello poder verificar la presencia del TDAH. 
 
Cabe mencionar, que aunque el área psicológica, neurológica y 
pedagógica, han ido desarrollando instrumentos que contribuyan a la detección del 
TDAH. Hoy en día, todavía no existe ninguna prueba o técnica psicológica y de 
laboratorio que por sí sola, pueda precisar y confirmar la presencia del TDAH en 
un individuo. 
 
7.2 Medición Pedagógica 
 
Los niños con TDAH en nivel básico (primaria), suelen presentar ciertos 
problemas en la escuela al tener que enfrentarse a una serie de requerimientos ya 
establecidos, que al no poder cumplirlos afectan su rendimiento escolar debido a 
las dificultades que tienen en el aprendizaje, la atención y la concentración, o bien, 
por su conducta hiperactiva, todo ello producto del trastorno que padecen y no 
porque no cuenten con un coeficiente

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