Logo Studenta

Sobrecarga-en-el-cuidador-de-enfermos-cronicos-en-la-UMF-38

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE MEXICO 
FACULTAD DE MEDICINA 
 
DIVISION DE ESTUDIOS DE POSGRADO E 
INVESTIGACION 
 
DEPARTAMENTO DE MEDICINA FAMILIAR 
 
INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO SOCIAL 
UNIDAD MÉDICA FAMILIAR NO. 43 
VILLAHERMOSA TABASCO 
 
 
 
 
 
SOBRECARGA EN EL CUIDADOR DE ENFERMOS CRONICOS 
EN LA UMF 38 
 
 
TRABAJO PARA OBTENER EL DIPLOMA DE ESPECIALISTA DE 
MEDICINA FAMILIAR 
 
 
 
 
 
DRA. MARIA MAGDALENA ZENTENO RAMON 
 
 
 
DR. MARIO RENDON SALAS 
EPIDEMIOLOGO 
MAESTRO EN SALUD POBLACIONAL 
ASESOR DE TESIS 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
VILLAHERMOSA TABASCO 2007 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
Restricciones de uso 
 
DERECHOS RESERVADOS © 
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL 
 
Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal 
del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). 
El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea 
objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para 
fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo 
mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
SOBRECARGA EN EL CUIDADOR DE ENFERMOS CRONICOS 
EN LA UMF 38 
TRABAJO PARA OBTENER EL DIPLOMA DE ESPECIALISTA EN 
MEDICINA FAMILIAR 
PRESENTA: 
DRA. MARIA MAGDALENA ZENTENO RAMON 
AUTORlZACI O ES: 
DRA. SAHARA DE EON ALMEIDA 
PROFESOR TITULAR DEL CURSO ESPECIALlZACION EM MEDICINA 
FAMILIAR PARA MEDlCOS GENc:;'.u.LIES EM LA UNIDAD DE MEDICINA 
FAMILIAR NO. ERMOSA TABASCO 
DR. M DO SALAS 
ASESOR DE TESIS 
EPIDEMIOLOGO DE LA UNIDAD DE MEDICINA FAMILIAR NO. 39 
VILLAHER OSA TABASCO 
DR. FAEL 10 WIVAS PEREZ 
COORDI ADOR DELEG DE VESTIGACION MEDICA DE LA 
ACIO ABASCO 
VILLAHERMOSA TABASCO 2007 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
DEDICATORIAS 
 
 
 
 
 
 
A mis abuelos Carlos y Gloria que me inspiraron para la realización de este 
trabajo y valorar a las personas que cuidan. 
 
 
 
 
 
 
 
A mi madre una gran cuidadora que me enseño y me ha dirigido en mi vida. 
 
 
 
 
 
 
 
A mis hermanos, mis hijos y mi familia que siempre me apoyaron. 
 
 
 
 
 
 
 
 
Y en especial a mi padre Emilio al cual le debo todo lo que soy, gracias por tu 
apoyo en donde quieras que estés. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
INDICE GENERAL PAGS. 
TITULO 
RESUMEN 
1. - MARCO TEORICO 1 
2. - PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA. 10 
3. – JUSTIFICACION 14 
4. – OBJETIVOS. 
GENERAL Y ESPECIFICO 18 
5. - METODOLOGIA 19 
6. - RESULTADOS 23 
7. – DISCUSIÓN 33 
8. - CONCLUSIONES 37 
9. - REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS 40 
10.- ANEXOS 45 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
RESUMEN 
SOBRECARGA EN EL CUIDADOR DE ENFERMOS CRÓNICOS 
EN LA UMF 38 
 
María Magdalena Zenteno Ramón R3MF, Dr. Mario Rendón Salas Asesor de 
Tesis, Universidad Nacional Autónoma de México, Facultad de Medicina, 
Instituto Mexicano del Seguro Social, Delegación Tabasco. 
 
ANTECEDENTES: La presencia de una enfermedad tanto aguda como crónica 
representa un cambio en el funcionamiento de la familia, para adaptarse a la 
situación de enfermedad, la familia pone en marcha sus mecanismos de 
autorregulación que le permiten seguir funcionando de manera más o menos 
adecuada, a pesar de ello, cuando la enfermedad o la cronicidad sobrepasan los 
mecanismos de autorregulación se puede producir un impacto tanto positivo como 
negativo importante; y es ahí en donde el cuidador juega el papel más importante. 
OBJETIVO: Identificar si existe sobrecarga en los cuidadores de los enfermos 
crónicos atendidos en la unidad de medicina familiar no. 38 
MATERIAL Y MÉTODOS: Se realizó un estudio transversal, descriptivo con un 
muestreo en donde se incluyeron a todas las personas que tenían un papel de 
cuidador de un enfermo crónico con criterios de inclusión en un total de 50 de la 
Unidad Médica Familiar No. 38. Para evaluar esta sobrecarga se utilizó la escala de 
Zarit para detectar si existía. 
RESULTADOS: Con respecto a la sobrecarga se observó que no hay sobrecarga en 
el cuidador del enfermo crónico en la mayoría de los casos en un 60%, sobrecarga 
leve en un 36% y sobrecarga intensa en un 4%. 
CONCLUSIÓN: La frecuencia de sobrecarga en los cuidadores de enfermos crónicos 
no representa una sobrecarga, ya sea porque son familiares directos (hijos) lo que 
les permite afrontar el poder ayudar a un ser querido y significa una experiencia 
única. 
 
PALABRAS CLAVES: Enfermo crónico, cuidador, sobrecarga. 
 
 
 
 
ABSTRACT 
 
 
OVERLOAD IN CHRONIC SICK CAREGIVER 
AT UMF 38 
 
Ramón María Magdalena R3MF Zenteno, Dr. Mario Rendon Salas Thesis 
Advisor, National Autonomous University of Mexico, School of Medicine, 
Mexican Social Security Institute, Delegation Tabasco. 
 
 
BACKGROUND: The presence of both acute and chronic disease represents a 
change in the functioning of the family, to suit the situation of illness, the family 
launched its self-regulatory mechanisms that allow it to continue to operate more or 
less adequately, nevertheless, when chronic illness or exceed regulatory mechanisms 
can produce both positive and significant negative impact; and that's where the 
caregiver plays the most important role. To identify if there is overload in caregivers of 
chronically ill patients treated in family medicine unit no. 38 
 
MATERIAL AND METHODS: A cross-sectional, descriptive study was conducted 
where sampling included all persons who have a caring role for a chronically ill 
inclusion criterion for a total of 50 of the Family Medicine Unit No. 38. to evaluate this 
overhead Zarit scale was used to detect if there was. 
 
RESULTS: With respect to the overload was observed that there is overload in the 
chronically ill caregiver in most cases by 60%, slight burden by 36% and greater 
burden by 4%. 
 
CONCLUSION: The frequency overload caregivers for the chronically ill is not 
overloaded, either because they are immediate family members (children) allowing 
them to help cope with a loved one and means a unique experience. 
 
 
 
KEYWORDS: Chronic Sick, caregiver overload 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
1 
 
MARCO TEÓRICO.- 
Desde siempre se ha reconocido a la familia como agente cuidador natural de las 
personas que viven en situación crónica de enfermedad o limitación. Si bien es cierto 
que la familia se ha visto afectada por su tendencia a ser nuclear, por su restricción 
de espacio de vivienda y por el cambio de rol femenino que ha comenzado a ser una 
parte fuerte del mercado laboral, también lo es el hecho de que las familias continúan 
teniendo el rol de cuidadores como una de sus principales responsabilidades lo que 
incluso se ha visto por muchos teóricos como parte natural de las crisis familiares. (1) 
La presencia de una enfermedad tanto aguda como crónica representa un cambio en 
el funcionamiento de la familia, para adaptarse a la situación de enfermedad, la 
familia pone en marcha sus mecanismos de autorregulación que le permiten seguir 
funcionando de manera más o menos adecuada, a pesar de ello, cuando la 
enfermedad o la cronicidad sobrepasan los mecanismos de autorregulación se puede 
producir un impacto tanto positivo como negativo importante; el impacto que tiene la 
enfermedad está determinado por los factores relacionados con la misma 
enfermedad, con el entorno social y con la propia historia personal del enfermo, su 
personalidad, el tipo de relaciones familiares que tiene, las experiencias que ha 
tenido la familia en casos similares si es que los ha habido y cómo ha reaccionado 
ante ellos. Sin embargoel impacto de la enfermedad se controla, disminuye o evita 
según sea el caso, con el cuidado que le prodiga la familia al enfermo. (2) 
 
2 
 
Los mecanismos de defensa aplicados por la familia pueden ser la sublimación hacia 
los sentimientos positivos como el amor, o de adaptación al hacerse más flexibles y 
con poca resistencia al cambio, la negociación de roles; pero también esos 
mecanismos de defensa pueden estar orientados a los sentimientos negativos como 
la negación, ira, tristeza o depresión. Dado que la familia es un sistema, también se 
ve amenazada con cambios en otras áreas de la vida familiar de tipo instrumental y 
una de las que se afecta de manera importante es la económica. Otro cambio que se 
presenta en la familia, que también causa mucha tensión y que por lo general no se 
identifica de manera consciente, es la modificación de los espacios tanto físicos 
como vitales. La capacidad de resolución de los problemas que tenga la familia, se 
basa en dos fortalezas específicas: la capacidad que tiene cada uno de los miembros 
para permanecer no reactivo ante la intensidad de las emociones vivénciales en el 
grupo y la capacidad que tiene cada individuo para comunicar a los otros sus 
pensamientos y sentimientos. (3). 
 
El paciente con su enfermedad adquiere centralidad en la familia, la cual le da mayor 
facilidad para hacer alianzas o coaliciones en pro o en contra de uno o varios 
miembros de la familia, engrandecer los sentimientos de culpa, los resentimientos y 
los temores, lo que puede generar mayor estrés y disfunción familiar. Los 
sentimientos que afloran en estas situaciones son de diversa índole y están 
influenciados por la cultura de la familia, el conocimiento de la enfermedad y el 
pensamiento mágico que tengan, como la percepción que la enfermedad es el 
3 
 
producto de malas acciones del pasado; esto puede provocar mayor estrés en la 
familia. (4) 
La calidad y la naturaleza de las relaciones familiares son relevantes en el tipo de 
soporte que tienen las personas. Lo que se ve en momentos de crisis es muchas 
veces un reflejo de relaciones pasadas en donde el sentimiento de afecto parece en 
muchos casos fortalecer aspectos de bienestar de enfermos y cuidadores. 
Smith (1994), refuerza este planteamiento en su investigación en la cual establece 
que el cuidado eficiente esta asociado al contexto, al tiempo, al nivel de estrés y a la 
capacidad de afrontamiento del cuidador y que siempre existe una reciprocidad 
evidente entre el cuidador y la persona cuidada. (5) 
Sin embargo, Morton y Lawrence (1995), cuestionan los planteamientos anteriores 
señalando el impacto de la enfermedad crónica en la salud y bienestar de miembros 
de las familias. Para lo cual incluyeron a 97 esposos y a 186 familiares de pacientes 
diagnosticados con algún tipo de demencia, buscando asociación entre la severidad 
de la enfermedad y la salud y bienestar de la familia. Ellos encontraron que el curso 
de la enfermedad se asociaba independientemente de la calidad de cuidado 
disponible manteniendo un efecto de cascada a través de la familia. Por el contrario, 
el uso de servicios disponibles no se asoció directamente a la salud y bienestar de 
los familiares pero sí a la severidad de la enfermedad. (6) 
Vidaver (1999), expone en su estudio de conceptos sobre enfermedad crónica y 
cuidado en casa el impacto que en la familia tiene la vivencia de estas situaciones. 
4 
 
La autora señala como particularmente relevantes los aspectos de cambio de rol y 
finanzas. Según ella, "el gasto de la cronicidad es grande, no únicamente en forma 
personal y emocional sino también financiera; hay usualmente necesidad de 
múltiples medicamentos, equipos, suministros y con frecuencia existe la necesidad 
de atención médica y de ayuda de otros profesionales..." (7) 
Los problemas de comportamiento que surgen de la enfermedad generan un 
particular impacto en los cuidadores. La habilidad funcional de paciente y cuidador y 
la habilidad misma del cuidador para dar cuidado de manera tal que satisfaga los 
requerimientos del paciente resultan ser definitivas. Por último, el tipo, la cantidad y 
el tiempo esperado de cuidado necesario, contribuyen también al estrés del cuidador. 
La percepción de que es una situación muy demandante o de largo plazo puede ser 
física y psicológicamente devastadora. En ese sentido, varios autores señalan que es 
importante tener una tregua de la situación de cuidado cuando este es muy 
demandante y que buscar que se den estos espacios es una forma importante de 
apoyar a familias que viven el cuidado de uno de sus miembros en situaciones de 
enfermedad crónica. Esas treguas pueden constituir vacaciones, espacios diarios, 
espacios semanales o eventuales en donde se busca que la persona que tiene la 
mayor carga de cuidado pueda descansar física y psicológicamente. (8) 
En los casos de crisis relacionadas con el cuidado de un familiar en situación de 
enfermedad crónica se han identificado unos apoyos particularmente importantes 
que son requeridos por la mayoría de los cuidadores. Entre estos están la atención 
médica, el apoyo psicoemocional, el apoyo económico o financiero y la compañía. (9) 
5 
 
Generalmente los cuidadores principales y quienes los apoyan de manera 
importante el cuidado, tienen con frecuencia un sentimiento de carga generado por la 
responsabilidad de cuidar a otra persona, dependiente en muchos aspectos de la 
vida diaria y por el estrés de tomar constantemente decisiones que afectan la propia 
vida y la del ser querido lo que resulta muchas veces agobiante. La carga del 
cuidado es pues, un estado resultante de las demandas de cuidado de una persona 
enferma que amenazan el bienestar físico o mental del cuidador. Se ha definido 
también como un a dificultad persistente al dar cuidado o como problemas 
experimentados de carácter físico, sociológico financiero o social por aquellos que 
dan el cuidado. Por otra parte, se ha confirmado que los recursos psicológicos 
tienen un gran impacto en la percepción de carga con el cuidado y que dentro de 
ellos la autoestima elevada y el control contribuyen a disminuir la percepción de 
carga. (10) 
Algunos modelos teóricos sobre el manejo de la carga del cuidado se han ampliado 
para incluir las respuestas individualizadas de la persona ha las incapacidades del 
sujeto dependiente. Se distingue en ellos el componente subjetivo del objetivo en el 
concepto de carga siendo el objetivo un conjunto de eventos concretos, situaciones, 
actividades y sucesos mientras que el componente subjetivo se define como 
sentimientos actitudes y respuesta emocional a la tarea de cuidar. Con la inclusión 
del componente subjetivo se ubica a la estructura familiar en un lugar importante 
para abordar esta temática. (11) 
6 
 
Estudios más recientes se han enfocado en la comprensión del concepto de 
sobrecarga relacionando la interpretación subjetiva del cuidado a los problemas 
específicos de la persona impedida. Los hallazgos muestran que la asesoría 
individual y los grupos de soporte son métodos relativamente exitosos de apoyar a 
los cuidadores en la reestructuración de su interpretación individual de la experiencia 
del cuidado para disminuir la experiencia de carga. Por otra parte dejan claro que los 
comportamientos y actitudes del cuidador hacia los problemas del cuidado son 
susceptibles de cambio. Las intervenciones que consideran a la familia como un todo 
no ha sido suficientemente exploradas por lo tanto para aliviar algunas de las cargas 
comunes encontradas en dar cuidado los sistemas familiares totales deben 
considerarse cuando se desarrollan intervenciones clínicas. (12) 
El Patrón epidemiológico de América Latina señala que en muchos países las 
enfermedades crónicas comparten los primeros lugares de morbi- mortalidad con las 
enfermedades agudas y que éstas tienen tendencia a incrementar.Este hecho 
epidemiológico junto con las nuevas disposiciones de las instituciones de salud en 
las que se hace evidente el cuidado informal y formal para personas en situación de 
enfermedad crónica, ha puesto de manifiesto el problema del cuidado a largo término 
en donde la oferta de servicios sociales y de salud no responde a las necesidades de 
los usuarios y a las de sus cuidadores quienes en muchos casos se encuentran 
vulnerables y con sentimientos de frustración a pesar de lo cual deben asumir tareas 
para las que no tienen preparación adecuada. La enfermedad crónica adquiere 
entonces un costo innecesario comprometiendo en gran medida la vida de las 
personas involucradas en esta experiencia. 
7 
 
Dada su complejidad, la dificultad de su control y de las complicaciones que se 
producen cuando el control de este tipo de enfermedades crónicas se dan y no 
logramos controlarlas y terminan para nuestro paciente en una mala calidad de vida 
dependiendo de alguien del núcleo familiar para realizar los cuidados ya sea un 
esquezifrenico, una demencia senil, pacientes con lesión neurológica etc., tenemos 
como Médicos Familiares que saber distinguir la sobrecarga en estos cuidadadores 
para poder abordar los problemas por los que este pasa ya que la mayoría de los 
trabajos y publicaciones realizadas es del personal de enfermería y trabajo social 
quienes tienen dentro de su perfil tratar o trabajar con el cuidados y realizar el 
abordaje y le ha permitido valorar la sobrecarga de los cuidadores. (13) 
Para concluir, es primordial señalar las múltiples funciones y riesgos que tienen los 
cuidadores familiares de personas en situación crónica de enfermedad. Vale la pena 
resaltar la importancia del Medico Familiar en este campo y la urgente necesidad de 
profundizar en este conocimiento. Si bien se ha adelantado la investigación sobre el 
cuidado a los cuidadores en la última década, la mayoría de los estudios son de 
carácter descriptivo y su aplicabilidad es restringida por lo que poco apoyan la 
solución real de estas situaciones. Por otra parte, llama la atención la poca 
información sobre los aspectos positivos de la experiencia humana de cuidar. 
Quienes hemos estado cerca de los cuidadores sabemos que cuidar a alguien a 
quien queremos día y noche es difícil y muchas veces parece demasiado pero 
también sabemos que más allá de la carga y la rutina el alma humana se engrandece 
a través de esta experiencia incomparable. 
8 
 
La carga es un concepto clave en el análisis de las repercusiones del cuidado de las 
personas mayores en la familia. Desde su aparición ha sido profusamente utilizada 
en la investigación gerontológica sobre el proceso de cuidar y sus efectos. Así, el 
sentimiento de carga del cuidador se ha revelado como un importante factor, tanto en 
la utilización de servicios de larga estancia como en la calidad de vida de los 
cuidadores. (14) 
Zarit y su grupo de colaboradores consideraron la carga de los cuidadores como la 
clave del mantenimiento de las personas con Demencia en la comunidad y 
elaboraron un procedimiento para su evaluación, la Entrevista sobre la Carga del 
Cuidador es, probablemente, el instrumento más utilizado para la evaluación de la 
carga familiar. 
Un estilo importante, claramente establecido en la literatura sobre el concepto de 
carga, se refiere a las dimensiones de carga subjetiva versus carga objetiva. 
Mientras que la carga subjetiva puede definirse como las actitudes y reacciones 
emocionales ante la experiencia de cuidar; la carga objetiva puede definirse como el 
grado de perturbaciones o cambios en diversos aspectos del ámbito doméstico y de 
la vida de los cuidadores. (15) Además de la diferenciación entre carga objetiva y 
subjetiva, la totalidad de los estudiosos del tema han considerado que bajo el 
término de carga existen diferentes dimensiones o aspectos relativos a la misma 
(costes económicos del cuidado, carga física asociada con el cuidado, limitación del 
tiempo del cuidador, impacto sobre las relaciones interpersonales, etcétera. (16) 
 
9 
 
Las respuestas a los elementos se sumaban para obtener un índice único de la 
carga. En una revisión posterior se redujo el número de elementos a 21. Distintos 
trabajos que han utilizado este instrumento informan de unas buenas propiedades 
psicométricas. Las puntuaciones de carga se correlacionan significativamente con 
síntomas psicopatológicos en el cuidador, con el estado de ánimo y la salud física de 
éste, así como la calidad de la relación entre el cuidador y el paciente. (17) 
El entrevistado debe señalar la frecuencia con la que se siente identificado. Cada 
respuesta se clasifica como nunca = 0, rara vez = 1, algunas veces = 2, muchas 
veces = 3 y casi siempre = 4. 
Esto nos permite identificar con qué frecuencia se siente afectado el cuidador por 
cada ítem en particular, mientras que el ítem 21 nos ofrece una valoración global de 
la sobrecarga que percibe el cuidador y la califica en nada = 0, poco = 1, moderada 
= 2, mucha = 3 y extremada = 4. 
Se deben sumar todos los puntos para el resultado. No existen normas o puntos de 
corte establecidos. 
22-46: No sobrecarga. 
47-55: Sobrecarga leve. 
56-110: Sobrecarga intensa 
 
10 
 
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 
La satisfacción vital es desde hace tiempo definida (Gutiérrez Robledo 1998) como la 
percepción global del bienestar que tiene el individuo y es también un reflejo de la 
salud global. En nuestro país la esperanza de vida y los cambios demográficos han 
registrado en los últimos años un incremento progresivo de las enfermedades crónico 
degenerativas las cuales desde la encuesta Nacional de Salud de l987 las reportaba 
como las causas más frecuentes de morbilidad crónica en donde hasta el día de hoy 
se contemplan: la Hipertensión arterial, Diabetes Mellitus seguidas de las 
enfermedades isquemicas del corazón, además del cáncer, accidentes vasculares 
cerebrales, seguidas de los accidentes traumatismos y envenenamientos. 
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Enfermedades Crónicas en México de l993, la 
frecuencia de factores de riesgo para los padecimientos antes mencionados es muy 
alta ya que el 66% de los hombres consume alcohol entre el 21% presenta obesidad 
y el 55% no realiza actividad física de manera habitual. 
A estas patologías prevalentes también es de suma importancia aunque no se ha 
tomado en cuenta como las anteriores las enfermedades demenciales que cada día 
aumentan su frecuencia en nuestro país y que en nuestros días carecemos de 
información epidemiológica completa referente a esto. De igual importancia y 
sumado a esto son los padecimientos que causan incapacidad en el déficit funcional 
resultante de la acción de enfermedad de un órgano, aparto o sistema, así como la 
invalidez resultado de la interacción de las incapacidades del individuo con el medio 
que le circunda, siendo la incapacidad motora la más común y donde se deben de 
11 
 
contemplar estos pacientes como son los esquizofrénicos, los de lesión neurológica, 
enfermedad de Alzheimer, demencia senil etc. (14) 
Todo este creciente auge de enfermedades aumenta la carga que debe soportar el 
entorno y propicia una baja del umbral de tolerancia familiar sobre todo para aquel 
individuo que se hace cargo de algún paciente de estos conduciendo sino es 
visualizado por los servicios de salud en particular por el Medico Familiar al deterioro 
de los lazos de apoyo y solidaridad familiar. 
El estrés del cuidador es considerado como una consecuencia de un proceso que 
engloba una serie de variables interrelacionadas, que incluyen el nivel 
socioeconómico y los recursos del cuidador, así como los estresores primarios y 
secundarios a los que están expuestos. 
Los estresores primarios son los relacionados directamente con el hecho de cuidar a 
un sujeto enfermo, tales como su función cognitiva y elnivel de actividades de la vida 
diaria que llega a realizar. Los estresores secundarios son de dos tipos: la carga 
experimentada en los papeles y actividades fuera del hecho de asistir a un enfermo, 
y en segundo lugar, la carga intrapsíquica que supone la disminución de autoestima 
Una reestructuración profunda de las relaciones establecidas marido-esposa o 
padre-hijo sucede en aquellas situaciones donde el paciente conduce a una 
dependencia en aumento hacia el cuidador para la satisfacción de las necesidades 
básicas. De este modo, la ayuda, afecto y asistencia pueden llegar a ser 
unidireccionales: del cuidador hacia el sujeto enfermo, gravemente discapacitado. 
(17) 
12 
 
 
La escala de Zarit fue desarrollada con la finalidad de medir el grado en que el 
cuidador percibía que su trabajo de asistencia al enfermo crónico alteraban su 
propia salud física y emocional así como su situación económica. 
Las actividades tendientes a enseñar a la familia sobre los principios básicos de 
cuidados de los enfermos y el consejo o instrucción a los cuidadores para 
solucionar problemas específicos mejoran y estabilizan la función familiar, 
colaborando eficazmente a la tarea de conseguir un mejor ajuste del paciente a la 
situación, observaron que el ajuste desde la perspectiva del cuidador depende de la 
ansiedad de éste y de la propia habilidad del paciente para cuidarse a sí mismo. 
Existen diferencias considerables interindividuales en la percepción de sobrecarga, y 
la experiencia como tal está mediada por múltiples factores como el apoyo social, los 
recursos financieros, la capacidad personal para enfrentarse a la adversidad o la 
presencia de sentimientos de autoestima en quien ejerce el papel de cuidador. Su 
correcto diagnóstico es importante porque puede comportarse como un predictor de 
institucionalización del paciente. Una detección precoz de la sobrecarga en los 
cuidadores es fundamental ya que nos va a permitir establecer intervenciones 
terapéuticas sobre el paciente y el cuidador, realizar diversas terapias familiares, 
establecer grupos de apoyo mediante sociedades de enfermos y fomentar la 
educación del paciente y del cuidador (15). 
 
13 
 
El concepto de Carga Familiar, aún con sus limitaciones actuales, está lo 
suficientemente desarrollado como para considerarlo útil en la evaluación de la 
calidad de los programas de tratamiento de los pacientes y de la situación real en la 
práctica clínica rutinaria. 
Los programas de tratamiento que se desarrollen en un futuro han de contemplar 
recursos para disminuir la dependencia de las familias y para prevenir y solucionar 
los efectos adversos que conlleva el ejercer como cuidadores. 
La presente investigación tiene como propósito debido a que existen múltiples 
pacientes con patologías diversas que necesitan de un cuidador y que ha este se le 
somete a diferentes responsabilidades sin valorar si en verdad es el cuidador que 
cumple con el perfil adecuado y además que ya estando en el papel valorar si se 
encuentra con una sobrecarga importante que no ha sido detectada por el personal 
medico y paramédico que constantemente lo tiene en control muchas veces y que es 
necesario que tenga esta visualización para poder ejecutar su función como debe de 
ser y no someter al paciente también a situaciones que puedan perjudicar la salud de 
ambos. 
Bajo este contexto considero el siguiente planteamiento 
¿Existe una sobrecarga afectiva o subjetiva en el cuidador de los enfermos crónicos 
de la UMF 38? 
 
14 
 
JUSTIFICACION.- 
Las condiciones de bienestar en nuestro país han mostrado avances considerables 
en los últimos años, prueba de ello son los logros alcanzados en el aumento en la 
esperanza de vida y la disminución de algunas causas de mortalidad. Pero con 
respecto a las a las enfermedades crónicas en nuestro país y en nuestra institución 
siguen siendo un reto para poder realizar una disminución importante y contribuir 
para que la población disminuya los factores de riesgo para este tipo de 
padecimientos. 
Es por ello que podemos mencionar dentro de la situación epidemiológica del 
instituto mexicano del seguro social lo siguiente: 
En el caso del hombre entre los 20 a 59 años de edad los dos primeros motivos de 
consulta de medicina familiar son la diabetes mellitus y la hipertensión arterial. De 
acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud 2000 el 8.2% de los hombres padece de 
diabetes y durante el 2004 en el IMSS 23 hombres fallecieron diariamente por 
complicaciones diabéticas. La cardiopatía isquemia y la enfermedad vascular 
cerebral son de las dos complicaciones frecuentes de la hipertensión arterial que se 
ubican entre las 10 primera causas de defunción en este sexo. Las fracturas son la 
principal causa de egreso hospitalario junto con los traumatismos y envenenamientos 
representan el 23% de total de internamiento en hombres de esta edad, la primera 
causa de muerte en 1999 y la cuartas causa en el 2001 en esta edad fue la cirrosis y 
fibrosis del hígado, el SIDA es 6 veces mas frecuente en el hombre que en la mujer y 
ocupa el primer lugar de mortalidad en hombres de 25 a 34 años. (18) 
15 
 
 Con respecto a la situación de la mujer de 20 a 59 años su prevalecía de 
sobrepeso y obesidad en la mujer mexicana es de la mas altas en el mundo, siete 
de cada diez mujeres presentan esta condición, el cáncer Cervico uterino y mamario 
constituyen las dos primeras causas de mortalidad por tumores malignos en la mujer 
con un promedio de siete defunciones diarias en la población derechohabiente, así 
mismo según la encuesta nacional de Salud del 2000 10.9% de las mujeres padecen 
diabetes mellitus, y durante 1004 fallecieron por complicaciones de diabetes un 
promedio de 28 mujeres derechohabientes diarias y en el grupo de 20 a 59 años 
fallecieron siete mujeres por la misma causa y por ultimo la cardiopatía isquemica y 
la enfermedad vascular cerebral que son dos complicaciones de la hipertensión 
arterial se ubican entre las 10 Principales causas de defunción en la mujer. (19) 
En el rubro del adulto mayor (60 años y más) la situación se ha traducido en una 
demanda paulatina creciente de servicios sociales y de salud los cuales tienen 
necesidades especiales que deben de satisfacerse donde se plantea situaciones 
especiales como la reducción de sus potenciales físicas, la acentuación de las 
efectos de las enfermedades preexistentes y los problemas psicológicos y sociales 
asociados a dependencia familiar y económica y dentro de nuestra institución la 
situación de salud de este grupo es de que los cinco principales motivos de consulta 
son la hipertensión arterial, diabetes mellitus, las artropatías, el enfisema, 
enfermedades obstructivas crónicas y las de isquemia del corazón. La principal 
causa de egreso hospitalario es la diabetes mellitus y la principal complicación la 
insuficiencia renal, otros daños son la hiperplasia prostática, bronquitis, enfisema, 
así como la fractura de fémur. Siendo las principales causas de mortalidad la 
16 
 
diabetes mellitus seguida del infarto agudo del miocardio y la enfermedad pulmonar 
obstructiva crónica. Las tasas más altas de morbilidad y mortalidad por cáncer 
Cerviño-uterino y de mama se encuentran en las mujeres mayores de 60 años. (20) 
En la Delegación Tabasco la situación es similar dado que los principales motivos 
de consulta de medicina familiar son por enfermedades crónicas degenerativas 
como son: hipertensión arterial, diabetes mellitus, enfermedad cardiaca 
hipertensiva y la hipertensión secundaria, epilepsia. 
Así como las consultas de especialidades los tumores malignos, las enfermedades 
del corazón, la diabetes mellitus, la insuficiencia renal y la epilepsia se encuentran 
dentro de los 20 primeros lugares de atención en este nivel y dentro de los egresos 
hospitalarios la enfermedades del corazón ocupan enel 4to lugar, tumores malignos 
el 5to, la insuficiencia renal en 7mo. Seguida de la diabetes mellitus y en el lugar 16 
las enfermedades cerebro vasculares. En el servicio de urgencias la diabetes mellitus 
con sus complicaciones ocupa el octavo lugar y la insuficiencia renal el 
decimonoveno y mencionando a la mortalidad la diabetes mellitus, los tumores 
malignos, las enfermedades del corazón, las enfermedades cerebrovasculares, la 
insuficiencia renal y el SIDA se encuentran dentro de los 20 principales motivos 
mortalidad en el estado. (21-22) 
 
 
17 
 
Es por ello que la presente investigación se llevara a cabo en la unidad de medicina 
familiar no. 38 debido a que su comportamiento estadístico es parecido y por que 
durante el desempeño como medico en esta unidad e podido observar que existen 
diversos derechohabientes que por las patologías antes mencionadas requieren de 
un cuidador el cual es el que normalmente lo asiste en su domicilio y lo acompaña a 
la consulta de control. 
Y es desconocido para el personal que esta involucrado en la atención de este 
paciente que esta pasando con la persona que funge como cuidador de el, y además 
saber si esta sometido a una sobrecarga según su padecimiento y apoyos recibidos, 
lo que nos permitirá actuar de una manera preventiva en el cuidador y poder 
participar con el núcleo familiar ya que todos estos padecimientos antes 
mencionados requerirán de algunas vez en su etapa evolutiva de que alguien los 
cuide. 
Los efectos de la sobrecarga sobre la familia se presentan de diversas formas. Hay 
consecuencias en cierto modo tangibles, objetivas o apreciables desde fuera 
(aislamiento, irritabilidad), y otras subjetivas (sentimiento de vergüenza, culpabilidad, 
miedo), provocadas muchas veces por el impacto de la enfermedad. 
 
 
 
18 
 
OBJETIVOS. 
GENERAL. 
 Identificar si existe sobrecarga en los cuidadores de los enfermos crónicos 
atendidos en la unidad de medicina familiar no. 38 
ESPECIFICOS.- 
 Identificar los derechohabientes con enfermedad crónica asistidos por un 
cuidador. 
 Aplicar, previo consentimiento informado la escala de Zarit para la evaluación de la 
sobrecarga y el cuestionario de las características sociodemográficas del cuidador. 
 Determinar si existe en el cuidador del enfermo crónico una sobrecarga. 
 
 
 
 
 
 
 
19 
 
METODOLOGIA.- 
TIPO DE ESTUDIO.- Transversal, descriptivo, observacional y prospectivo 
POBLACION: La población de la Unidad de Medicina Familiar es de 2,850 
derechohabientes. 
LUGAR: Unidad de Medicina Familiar no. 38 
TIEMPO DE ESTUDIO: Enero a diciembre de 2006. 
TIPO Y TAMAÑO DE LA MUESTRA: Es un muestro no probabilístico en el cual se 
incluirán a todas las personas que tengan el papel de cuidadores de un enfermo 
crónico. 
CRITERIOS DE INCLUSION: 
 Todas las personas que tengan el papel de cuidador de un paciente crónico. 
Que sean adscritos a la unidad de medicina familiar. 
Que deseen participar en el estudio 
Que acepten firmar el consentimiento informado 
CRITERIOS DE EXCLUSION: 
Que no sean cuidadores de un enfermo crónico. 
20 
 
Que sean adscritos a otra unidad. 
Que no deseen participar en el estudio 
Que no acepten firmar el consentimiento informado 
CRITERIOS DE ELIMINACION: 
Que no respondan adecuadamente la encuesta 
VARIABLES 
Variable Descripción Tipo de variable 
Escala de 
medición 
Enfermo 
crónico 
Todo aquel paciente el cual este 
diagnosticado como tal Dependiente Expediente 
Cuidador Todo aquel que desempeñe este papel con un enfermo crónico Dependiente Observacional 
Sobrecarga Es un estado resultante del cuidado de una persona Independiente Escala de zarit 
 
EVALUACION DE LA CARGA FAMILIAR: 
Escala de Zarit: es un instrumento que cuantifica el grado de sobrecarga que 
padecen los cuidadores de las personas dependientes, que consta de 21 ítems 
Zarit y su grupo de colaboradores consideraron la carga de los cuidadores como la 
clave del mantenimiento de las personas con Demencia en la comunidad y 
elaboraron un procedimiento para su evaluación, la Entrevista sobre la Carga del 
21 
 
Cuidador es, probablemente, el instrumento más utilizado para la evaluación de la 
carga familiar. 
Un estilo importante, claramente establecido en la literatura sobre el concepto de 
carga, se refiere a las dimensiones de carga subjetiva versus carga objetiva. 
Mientras que la carga subjetiva puede definirse como las actitudes y reacciones 
emocionales ante la experiencia de cuidar; la carga objetiva puede definirse como el 
grado de perturbaciones o cambios en diversos aspectos del ámbito doméstico y de 
la vida de los cuidadores. Además de la diferenciación entre carga objetiva y 
subjetiva, la totalidad de los estudiosos del tema han considerado que bajo el término 
de carga existen diferentes dimensiones o aspectos relativos a la misma (costes 
económicos del cuidado, carga física asociada con el cuidado, limitación del tiempo 
del cuidador, impacto sobre las relaciones interpersonales, etcétera. 
Las respuestas a los elementos se sumaban para obtener un índice único de la 
carga. En una revisión posterior se redujo el número de elementos a 21. Distintos 
trabajos que han utilizado este instrumento informan de unas buenas propiedades 
psicométricas. Las puntuaciones de carga se correlacionan significativamente con 
síntomas psicopatológicos en el cuidador, con el estado de ánimo y la salud física de 
éste, así como la calidad de la relación entre el cuidador y el paciente. (15) 
El entrevistado debe señalar la frecuencia con la que se siente identificado. Cada 
respuesta se clasifica como nunca = 0, rara vez = 1, algunas veces = 2, muchas 
veces = 3 y casi siempre = 4. 
22 
 
Esto nos permite identificar con qué frecuencia se siente afectado el cuidador por 
cada ítem en particular, mientras que el ítem 21 nos ofrece una valoración global de 
la sobrecarga que percibe el cuidador y la califica en nada = 0, poco = 1, moderada = 
2, mucha = 3 y extremada = 4. 
Se deben sumar todos los puntos para el resultado. No existen normas o puntos de 
corte establecidos. 
22-46: No sobrecarga. 
47-55: Sobrecarga leve. 
56-110: Sobrecarga intensa 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
23 
 
 RESULTADOS 
Del total de la población encuestada los cuales fueron 50 personas cuidadoras de 
enfermos crónicos el 84 % (42) fue del sexo femenino y el 16% (8) masculinos. 
Predominando el grupo de edad de 45 y más con un 70 %. 
TABLA 1. - DISTRIBUCION POR EDAD Y SEXO DEL CUIDADOR DEL ENFERMO 
CRÓNICO DE LA UMF 38. 
Edad 
Sexo Total Femenino Masculino 
n % n % n % 
30-34 1 2.0 0 0.0 1 2.0 
35-39 1 2.0 3 6.0 4 8.0 
40-44 5 10.0 5 10.0 10 20.0 
45 y mas 35 70.0 0 0.0 35 70.0 
Total 42 84.0 8 16.0 50 100.0 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
GRAFICA 1. - DISTRIBUCION POR EDAD Y SEXO DEL CUIDADOR DEL 
ENFERMO CRÓNICO DE LA UMF 38 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
24 
 
TABLA 2. - PARESTESCO DEL CUIDADOR CON EL ENFERMO CRÓNICO 
En este cuadro podemos observar que el grupo de cuidadores que más participan en 
esta actividad fueron las hijas en un 34%, seguidas por la esposa del enfermo 
crónico en un 30%. 
Parentesco del 
Cuidador n % 
Hija 17 34.0 
Esposa 15 30.0 
Hijo 6 12.0 
Madre 6 12.0 
Nuera 4 8.0 
Esposo 2 4.0 
Total 50 100.0 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
GRAFICA 2. - PARENTESCO DEL CUIDADOR CON EL ENFERMO CRÓNICO 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
 
25 
 
TABLA 3. - ESCOLARIDAD DEL CUIDADOR DEL ENFERMO CRÓNICO DE LA 
UMF 38. 
Del total de los 50 cuidadores encuestados podemos observar que el 76 % solo 
estudio primaria y un 24 % la secundaria. 
Escolaridad n % 
Primaria 38 76.0 
Secundaria 12 24.0 
Total 50 100.0 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICASDEL 
CUIDADOR 
 
GRAFICA 3. - ESCOLARIDAD DEL CUIDADOR 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR. 
 
 
 
 
 
26 
 
TABLA.4.- PADECIMIENTOS DE LOS PACIENTES BAJO LA RESPOSABILIDAD 
DEL CUIDADOR DE LA UMF 38. 
Como podemos observar al igual que las estadísticas en morbilidad y mortalidad la 
primera complicación de la hipertensión arterial que son los accidentes vasculares 
cerebrales fueron los más frecuentes en un 26%, seguidos con otro perfil 
ampliamente estudio como es la demencia senil con un 22% y con un 14% la 
Diabetes Mellitus y la Hipertensión Arterial. 
Padecimiento encontrado n % 
AC. Vascular cerebral 13 26.0 
Demencia Senil 11 22.0 
Hipertensión Arterial 7 14.0 
Diabetes Mellitus 7 14.0 
Insf. Renal Crónica 4 8.0 
Mal del Parkinson 4 8.0 
Esquizofrenia 2 4.0 
Enf. Neuro. Vegetativa 2 4.0 
Total 50 100.0 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
GRAFICA 4. PADECIMIENTOS DE LOS PACIENTES BAJO LA RESPOSABILIDAD 
DEL CUIDADOR DE LA UMF 38. 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
27 
 
TABLA.5 AÑOS A CARGO DEL CUIDADOR EL ENFERMO CRÓNICO 
Es importante señalar en este punto que el porcentaje mas alto es de mas de 6 años 
cuidándolo con un porcentaje de 52 % por lo que el tiempo es ya considerable y 
quizá se deba al control que los pacientes tienen constantemente en su unidad de 
adscripción lo que mejora su calidad de vida y la prolonga 
Años de cuidado n % 
De 1 a 3 años 3 6.0 
De 4 a 5 años 21 42.0 
De 6 y mas años 26 52.0 
Total 50 100.0 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
GRAFICA 5 AÑOS A CARGO DEL CUIDADOR EL ENFERMO CRÓNICO 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
 
 
 
28 
 
 
TABLA 6. - OCUPACIÓN DEL CUIDADOR DEL ENFERMO CRÓNICO DE LA UMF 
38. 
Es de nuevo señalar la importancia del rol de la mujer en el cuidado de estos 
pacientes ya que como aquí se puede observar el 74% son amas de casa. 
Ocupación n % 
Ama de casa 37 74.0 
Empleado 11 22.0 
Jubilado 2 4.0 
Total 50 100.0 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
GRAFICA.6.- OCUPACIÓN DEL CUIDADOR DEL ENFERMO CRÓNICO DE LA 
UMF 38 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
 
29 
 
TABLA 7. - APOYOS EN EL CUIDADO DEL ENFERMO CRÓNICO DE LA UMF 38 
Es relevante que este rubro es importante observar que un 60% cuida solo a su 
enfermo crónico lo que es de esperar que sufra una sobrecarga. 
Apoyo n % 
Solo el cuidador 30 60.0 
Con otro familiar 11 22.0 
Cuidador y una 
persona 
contratada 
6 12.0 
Persona 
contratada 3 6.0 
Total 50 100.0 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
GRAFICA 7. -APOYOS EN EL CUIDADO DEL ENFERMO CRÓNICO DE LA UMF 38 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
 
30 
 
TABLA.8.- PADECIMIENTO AGREGADO DEL CUIDADOR 
Es importante ver que no presentan enfermedad el 70 % de ellos ya que esto seria 
más difícil para cumplir con el rol de cuidador. 
Padecimiento n % 
Si 15 30.0 
No 35 70.0 
Total 50 100.0 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
GRAFICA 8. - PADECIMIENTO AGREGADO DEL CUIDADOR 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR 
 
 
 
 
 
31 
 
TABLA 9. - DISTRIBUCION POR EDAD Y SEXO DEL ENFERMO CRÓNICO DE LA 
UMF 38. 
Del total de pacientes que fueron 50 el 36 % predomino en las edades de 50 a 59 
años seguidos por el de 60 y más con un 36%. Quedando por sexo en un 50% para 
ambos. 
Edad 
Sexo Total Femenino Masculino 
n % n % n % 
30-39 1 2.0 1 2.0 2 4.0 
40-49 6 12.0 6 12.0 12 24.0 
50-59 11 22.0 7 14.0 18 36.0 
60 y mas 7 14.0 11 22.0 18 36.0 
Total 25 50.0 25 50.0 50 100.0 
FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR. 
 
GRAFICA 9. - DISTRIBUCION POR EDAD Y SEXO DEL ENFERMO CRÓNICO DE 
LA UMF 38. 
 FUENTE: CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR. 
 
 
32 
 
TABLA 10. - ENCUESTAS APLICADAS DE LA ESCALA DE ZARIT AL CUIDADOR 
DE UN ENFERMO CRÓNICO DE LA UMF 38 
Es relevante mencionar que de los resultados encontrados el 60% de los cuidadores 
refiere no presentar sobrecarga con un 36 % que tiene una sobrecarga leve. 
Escala de Zarit n % 
22-46 No 
sobrecarga 30 60.0 
45-55 Sobrecarga 
leve 18 36.0 
56-110 
Sobrecarga 
intensa 
2 4.0 
Total 50 100.0 
FUENTE: ENCUESTAS APLICADAS DE LA ESCALA DE ZARIT A 50 
CUIDADORES DE ENFERMOS CRÓNICOS DE LA UMF 38 
 
GRAFICA 10. - ENCUESTAS APLICADAS DE LA ESCALA DE ZARIT AL 
CUIDADOR DE UN ENFERMO CRÓNICO DE LA UMF 38 
FUENTE: ENCUESTAS APLICADAS DE LA ESCALA DE ZARIT A 50 
CUIDADORES DE ENFERMOS CRÓNICOS DE LA UMF 38 
 
33 
 
DISCUSIÓN.- 
Normalmente las tareas y los roles en una familia se definen, pero cuando un 
miembro de esta se ve imposibilitado para cumplirlas, otro tiene que asumirlas 
además de llevar el rol de cuidador, supervisor y control de ese enfermo crónico. 
En el cuidado de personas en situación de enfermedad crónica donde las crisis son 
innumerables, continuas e incalculables, el soporte y la resistencia del cuidador a las 
diferentes cargas que esto con lleva adquiere una dimensión especial. 
En el presente estudio realizado observamos que las personas que asumen este rol 
de cuidador son las personas más cercanas a ellas y de los resultados encontrados 
la edad mas frecuente del cuidador fue de 45 años y mas, predominando en un 70 
%. Resultados similares a los encontrados en el estudio realizado por Georgina Jocik 
y Bárbara Rivero sobre cuidadores de pacientes con demencia en Bayamo, Cuba 
presentándose en este estudio el 75% en esta edad en el 2003. Este fenómeno 
requiere de atención ya que en algunas ocasiones los cuidadores portan 
enfermedades crónicas y sus condiciones físicas no son óptimas para efectuar el 
cuidado del enfermo debido a su edad. (26) 
En relación al género predomino el sexo femenino entre los cuidadores con el 84% 
siendo la mayoría las hijas de los pacientes, valores similares a lo reportado en el 
estudio efectuado por Carolina Vázquez y Francisco Javier donde se valoraban a los 
cuidadores de sujetos discapacitados por lesión neurológica así como el de José 
Mauricio Ocampo y Julián Herrera estudiando a los cuidadores de ancianos 
dependientes donde también se encuentra el 85 y el 80 % en Brasil y Colombia de 
34 
 
cuidadoras mujeres. Es importante mencionar que el rol femenino de cuidador se 
remonta a una tradición histórica debido a que guarda también relación con ciertas 
costumbres que existen en nuestra sociedad en donde la mujer es etiquetada como 
la cuidadora oficial en el hogar. (14)(30) 
Y relacionado con lo anterior otro de los parámetros medidos en este estudio fue el 
del parentesco del cuidador con el enfermo, donde se pudo encontrar que el 34 % 
eran hijas y el 30 % eran esposas. Encontrando similitudes con estudios realizados 
en España por Alberto Biurrum y colaboradores en el 2004 los cuales estudiaron la 
sobrecarga del cuidador informal del paciente con demencia y sus resultados fueron 
de un 71 % eran hijas y un 29% cónyuges. Es de mencionar que en múltiples 
estudios revisados como el anterior encontramos otras similitudes dentro de las 
características sociodemográficas como es la escolaridad en donde nuestros 
resultados fueron que el 76 % habían solo estudiado la primaria, en la anterior 
bibliografía mencionada obtuvieron un resultado del 69%.(8) 
En relación a la frecuencia de padecimientos crónicos en los enfermos que fueron 
objeto de cuidados la mayor proporción correspondía a pacientes con diagnósticos 
de Accidentes Vasculares Cerebrales ocupaban el 26 %, la Demencia Senil con un 
22% y la Hipertensión Arterial y Diabetes Mellitus en un 14% ambas, siendo superior 
loencontrado en el perfil y sobrecarga del cuidador principal informal del Adulto 
Mayor descrito por Liliana Sánchez Guevara y Celma Gómez en donde la 
Hipertensión Arterial y Diabetes Mellitus se encontraban en el 60% de los enfermos 
cuidados en el 2006. (27) 
35 
 
Referente al tiempo dedicado al cuidado del enfermo crónico, más de la mitad de los 
cuidadores llevaban más de 6 años en un 52% desempeñando este rol y que no 
desarrollaban alguna actividad remunerativa dado que eran amas de casa, como lo 
referido en el estudio realizado por Antonio Bañobre, Josefa Vázquez los cuales 
estudiaron a los cuidadores de pacientes dependientes de diálisis y donde al 
parecer entre más años es menor la carga y el cuidador busca planificar y utiliza 
estrategias para que la tarea sea más llevadera y donde también influyen las 
relaciones familiares previas a que el paciente presentara la enfermedad crónica. 
(28). Y como es mencionado en el estudio de Maria Pilar Seira y Ana Aller donde 
estudiaban a cuidadores de pacientes inmovilizados y en donde se encontró que el 
88% era ama de casa. (29) 
Durante este estudio pudimos observar también que el cuidado lo realizaban solos 
en un 60%, como lo encontrado en la investigación de José Mauricio Ocampo y 
Julián Herrera sobre el cuidado de ancianos dependientes que esta actividad la 
realizaban generalmente solos con demencia en un 66%. (30) 
El 70 % de los cuidadores se reportaron a pesar de su edad sin ningún padecimiento 
agregado solo el 30 % padecía alguna enfermedad. Lo mismo ocurrió en el estudio 
realizado por Georgina Jocik y Bárbara Rivero en el 2003 donde estudiaron a 
cuidadores de pacientes con demencia y encontraron que el 75% de ellos no se 
reportaba enfermo. (26) 
36 
 
Y en toda la revisión bibliografía realizada se midió el parámetro de edad y sexo del 
enfermo, encontrando nosotros que la edad mas común fue la de mayor de 50 años 
y más con un 72% y coincidían con los estudios antes revisados. 
Al principio de los años 60 surge el concepto de sobrecarga, que se refiere al 
conjunto de problemas de orden físico, psíquico, emocional, social o económico que 
puede experimentar los cuidadores de enfermos clónicos y es en la década de los 80 
cuando comienza su estudio en la gerontología, elaborándose por Zarit y 
colaboradores un procedimiento para su evaluación, conocida como test de 
sobrecarga o escala de Zarit. Es por ello que en el presente estudio se aplica esta 
encuesta como el instrumento principal para saber acerca de todos estos parámetros 
y los resultado encontrados fueron lo siguientes: se encontró en los 50 cuidadores 
estudiados que el 60 % no presentaba carga, el 36 % sobrecarga leve, y el 4 % en 
una sobrecarga intensa, estudios realizados como es el de Ricardo García y Juan 
Carlos Moure donde los resultados fueron parecidos. Otro estudio como el realizado 
por Georgina Jocik y Bárbara Rivero sus resultados eran iguales y en donde es 
evidente que asumir el cuidado de un enfermo crónico podía o no generar crisis en el 
cuidador pero que de alguna manera existen factores protectores de él que le 
permiten cumplir con esta tarea. No así como el realizado por Biurrun, Goñi y Artaso 
el cual estudiaron la sobrecarga en cuidadores familiares de pacientes con demencia 
donde sus resultados fueron todo lo contrario encontrando un 79% de las 80 
cuidadoras estudiadas tenían una sobrecarga intensa y lo relacionaban que esta 
estaba determinada por la mayor presencia de alteraciones neuropsiquiatritas, y el 
37 
 
menor apoyo social y donde se utilizan estrategias de afrontamiento de tipo evitativo. 
(31,26, 8) 
CONCLUSIONES 
Es innegable que cada uno de nosotros puede evocar una experiencia como 
cuidador en alguna etapa de la vida. Algunos quizás, hemos tenido el privilegio de 
poder ayudar a un ser querido en situación de enfermedad crónica y suspiramos 
pensando lo que esa experiencia significo. Ser cuidador de alguien que nos requiere 
día y noche es difícil y muchas veces parece demasiado. 
Aunque con seguridad todas las familias tratamos de organizarnos y sobreponernos 
para afrontar de la mejor forma estas demandas de cuidado, con alguna frecuencia 
nos sentimos terriblemente impotentes. 
El cuidado de un enfermo crónico es siempre una tarea difícil donde esta demanda 
de cuidado que muchas veces supera las potencialidades que el cuidador considera 
que tiene y donde se ve afectado por parte de este todas sus esferas. 
Por lo tanto es de manera razonable concluir que es importante pensar que las 
nuevas generaciones ya no tienen tan arraigado la influencia cultural o de familia y 
que buscaran otras estrategias para poder asumir con el rol de cuidador en donde es 
de esperarse que debido a su preparación, ellos buscaran el apoyo social o la 
manera para que otra persona a lo mejor remunerada pueda cumplir con su papel. 
Además es también de destacar con los avances de programas en salud la atención 
de estos enfermos será diferente pero que deberá de necesitar de un cuidador 
38 
 
elementalmente. No obstante todo cuidador requerirá de preparación para el 
desempeño de su labor y atención por que un enfermo crónico es a veces “un gran 
ausente y un gran presente” y convivir con él implica perdidas constantes antes las 
cuales el cuidador no siempre tienen los mecanismos y recursos adecuados para 
afrontar. 
Es por ello que la responsabilidad y tareas de cuidado requieren el desarrollo de 
habilidad de parte de quien las asume y el reconocimiento de la misma. Es sin 
embargo importante comprender que no todas las personas están en la capacidad de 
desarrollar o demostrar su potencial de cuidado con una persona en situación de 
enfermedad o bien por que no tienen el interés en hacerlo o por que tienen desarrollo 
de habilidades diferentes en que se encuentra riqueza personal. Por ello el rol de 
cuidador no depende de capacidades sino de factores de motivación internos o 
externos para el desarrollo de esta actividad ya que es él el que previene, supervisa 
y da cuidado al paciente. 
Por lo que creo y sugiero en este estudio, tomando en cuenta los resultados en 
donde se hace evidente, una vez más, la necesidad de que como personal de salud 
se tome en cuenta a este personaje tan importante en la vida del enfermo crónico, 
cuidándolos, examinándolos periódicamente, orientándolos, educándolos y 
programando visitas en sus hogares especialmente el Medico Familiar para que 
sientan que son parte de un todo, ya que pude observar durante mi revisión 
bibliografía que son las enfermeras, trabajadoras sociales o psicólogos los que se 
percatan o investigan de la sobrecarga que el cuidador presenta. En donde una 
39 
 
detección precoz de la misma es fundamental ya que nos va a permitir establecer 
intervenciones terapéuticas sobre el paciente y el cuidador y realizar diversas 
terapias familiares estableciendo grupos de apoyo. 
Y algo que hay que tener muy presente en los cuidadores que la sobrecarga va en 
función con el tipo de padecimiento o enfermedad crónica. 
Además considero que como algo muy especial de tomar en cuenta por todo el 
equipo de salud al igual que lo anterior es que hasta ahora las familias y 
especialmente las mujeres han sido las primeras actrices en el ejercicio de las 
“tareas de bienestar” consistentes en cuidar el hogar, atender a los hijos, enfermos, 
apoyar a los jóvenes etc., es por ello que considero que en estos días debemos de 
preguntarnos por el futuro de ellas y de sus cuidados en donde se requiere que 
analicemos y estudiemos tres cambios estructurales que se presentan en torno a la 
mujer como es: la incorporación de ella al mercado laboral, la transformación de la 
estructura familiar y muy probablemente la extinción de la “mujer cuidadora” debido 
esto a que en donde sea se carecen de los recursos suficientes como para pagar 
este trabajode 24 horas sin vacaciones, sin días de fiesta y que hasta ahora han 
hecho gratis las mujeres. 
 
 
 
40 
 
REFERENCIAS 
1.- Hizar Guerrero D, Galindo Nava F, Serrano Arias M, Entendiendo la impotencia 
de los miembros de familia cuidadores de enfermos crónicos. Geriiatric Nursing 2001; 
13 (2): 66-69. 
2.- Sánchez Allende E, Terrazas León M, Sosa Enriques A, Figueroa Rubio L, La 
mujer como proveedora principal de apoyo a los ancianos. Rev. Género, mujer y 
salud de Enfermería 1999; 541 (6): 79-82. 
3.- Frideman robledo C, Castillo Rueda E, López Velueta J, Cárdenas Ordóñez P, 
Soporte social y redes sociales de la familia. Rev. Clínica de Enfermería 2000; 57 
(12): 47-49. 
4.- Sánchez Corinto B, Pereira Marín L, Medrano Arias S, La experiencia de ser 
cuidador Rev. de la Facultad de Enfermería Universidad de Santa fe de Bogota 
Colombia 2000; 57 (11): 15-22. 
5.- Smith kaplan C, Jacobson Wilson B, Healey Common F, Un modelo de cuidado 
eficiente para adultos dependientes de tecnología residentes en el hogar. Revista 
Española de Gerontología 2000; 17 (2): 27-35. 
6.- Morton Caos W, Lieberman Stark G, Fisher Lovardino J, El impacto de la 
enfermedad crónica en la salud y bienestar de miembros de la familia. Rev. De 
Gerontología 2002; 35 (1): 94-102. 
7.- Vivader Sánchez V, Gonzáles Cámara P, Canto Ochoa V. Conceptos sobre 
enfermedad crónica y cuidado en casa. Rev Salud Publica y enfermería 2001; 28 (8): 
123-128. 
41 
 
8.- Biurum Solares A, Goñi A, Artaso B, Demencia y familia estudio de sobrecarga 
Rev Sistema Sanitario de Navarra Pamplona 2005; 28 (2): 11-22. 
9.- Campos Lenis D, Muñiz García J, Campos Rebolledo J. Relación entre la 
funcionalidad individual, familiar, ambiental y la capacidad de socialización del 
individuo anciano. Rev. De la Faculta de Enfermería UNAL. 2002; 96 (4): 22-28. 
10.- England Margaret B, Castro Bieras A, Escudero Pereira J, Moraga León Dominio 
de contenidos para la planeación del cuidado identificado por cuidadores adultos. 
Rev. De Gerontología Española 2000; 28 (1): 17-22. 
11.- Sánchez Lugo B, Carrasco Dorland E, Morales Leshner P, El arte y la ciencia 
del cuidado. Rev. Genero, mujer y salud de Enfermería 2002; 801 (5): 91-96. 
12.- Gutiérrez Robledo L, Olan Escamilla S, Herrera Solís M, La salud del anciano 
en México y la nueva Epidemiología del envejecimiento Rev. Situación Demográfica 
de México 2004; 23 (12): 58-65. 
13.- Millán Peña A, García Marín M, Cuidadores familiares de personas con 
enfermedad neurovegetativa: Rev. de Atención Primaria Brasil 2000; 26 (3): 34-41. 
14.- Vázquez Cabrera C, Carod Artal Francisco, Sobrecarga y estado anímico en 
cuidadores de sujetos discapacitados por lesión neurológica. Rev. De 
Neuropsychiatry Nursing Brasil 2003; 8 (2): 78-81. 
15.- Seidman Orton Susana, Pano. O. Carlos, Vera Bail Dorina, Pupko Acrich Luisa, 
Sentimiento de sobrecarga y apoyo social en cuidadores familiares de enfermos 
cronicos. 
16.-. Dueñas Félix E, Martínez Aggeline M. Morales Druso B, síndrome del cuidador 
de adultos mayores discapacitados y sus complicaciones psicosociales. 
42 
 
17.-Martínez Jesús A, Ramón Quen E, Villaseñor Arias P, Sobrecarga de los 
familiares en el tratamiento de los pacientes con trastornos esquizofrénicos. Rev. 
Psiquiatria del Hospital Virgen del Camino Pamplona 2004; 6 (19): 204-208. 
18.- Aguilar Camacho H, Aguilar Rodríguez M, Camacho Rodríguez M, Cisneros 
Salazar M, Echeverría Martínez J, Martínez Mendoza F, et al. Programas Integrados 
de Salud Guía Técnica del Hombre, Publicación del IMSS 2002; 4: 4-5. 
19.- Aguilar Camacho H, Aguilar Rodríguez M, Camacho Rodríguez M, Cisneros 
Salazar M, Echeverría Martínez J, Martínez Mendoza F, et al. Programas Integrados 
de Salud Guía Técnica de la Mujer, Publicación del IMSS 2002; 3: 4-5. 
20.- Aguilar Camacho H, Aguilar Rodríguez M, Camacho Rodríguez M, Cisneros 
Salazar M, Echeverría Martínez J, Martínez Mendoza F, et al. Programas Integrados 
de Salud Guía Técnica del Adulto Mayor, Publicación del IMSS 2002; 5: 4-5. 
21.- Instituto Mexicano del Seguro Social, Principales Causas de Mortalidad (Bases 
de datos de Internet) México: Información de Estadística en Salud del IMSS; 2004 – 
2005, (actualizada en abril del 2005; acceso 23 de Noviembre de 2005) Disponible 
en: http://www.imss.gob.mx. 
22.- Instituto Mexicano del Seguro Social, Principales Motivos de Consulta en 
Medicina Familiar (Bases de datos de Internet) México: Información de Estadística en 
Salud del IMSS; 2004 – 2005, (actualizada en abril del 2005; acceso 23 de 
Noviembre de 2005) Disponible en: http://www.imss.gob.mx. 
23.- Instituto Mexicano del Seguro Social, Principales motivos de Consultas de 
Especialidades Primera Vez y Subsecuente, (Bases de datos de Internet) México: 
43 
 
Información de Estadística en Salud del IMSS; 2004 – 2005, (actualizada en abril del 
2005; acceso 23 de Noviembre de 2005) Disponible en: http://www.imss.gob.mx. 
24.- Instituto Mexicano del Seguro Social, Principales Motivos de Egresos 
Hospitalarios (Bases de datos de Internet) México: Información de Estadística en 
Salud del IMSS; 2004 – 2005, (actualizada en abril del 2005; acceso 23 de 
Noviembre de 2005) Disponible en: http://www.imss.gob.mx. 
25.- Instituto Mexicano del Seguro Social, Principales Motivos de Consultas en el 
Servicio de Urgencias (Bases de datos de Internet) México: Información de 
Estadística en Salud del IMSS; 2004 – 2005, (actualizada en abril del 2005; acceso 
23 de Noviembre de 2005) Disponible en: http://www.imss.gob.mx. 
26.- Jocik Hung G, Rivero Sánchez B, Ramírez Bello A, Percepción de sobrecarga 
en cuidadores de pacientes con demencia, Rev. Red Latinoamericana de 
Gerontología 2003; 12 (10): 5-11. 
27.- Sánchez Guevara L, Gómez Gómez C, Gutiérrez Herrera F, Riquelme Heras H, 
Perfil y Sobrecarga del Cuidador Principal Informal del Adulto Mayor, Rev. Salud 
Pública y Nutrición 2006; 4 (2): 12-16. 
 28.- Bañobre González A, Vázquez Rivera J, Outeriño Novoa S, Rodríguez 
González M, Efectividad de la intervención educativa en cuidadores de pacientes 
dependientes de diálisis y valoración de la carga, Rev. De la Sociedad Española de 
Enfermería Nefrologíca 2005; 8 (2): 39-45. 
29.- Seira Llenos M, Alaler Blanco A, Calvo Gascon A, Morbilidad sentida y 
diagnosticada en cuidadores de pacientes inmovilizados de una zona de salud rural, 
Rev. Española de Salud Pública 2002; 76 (6): 72-79. 
44 
 
30.- Ocampo José M, Herrera A, J, Torres P, Sobrecarga asociada con el cuidado de 
ancianos dependientes Rev. Colombia Médica 2005; 4 (9) 53-57. 
31.- García A. Ricardo, Moures Juan Carlos, Percepción de la sobrecarga en 
cuidadores de enfermos de Alzheimer. Rev. de Gerontología Enfermería 
Comunitaria 2005; 33 (4): 23-34. 
 
 
 
 
 
 
 
45 
 
11.- ANEXOS 
CARTA DE CONSENTIMIENTO INFORMADO 
PROYECTO DE INVESTIGACION 
Por medio de la presente acepto conciente y por voluntad propia participar en el proyecto de 
investigación titulado: SOBRECARGA EN EL CUIDADOR DE ENFERMOS CRONICOS EN LA UMF 
38 
El objetivo del estudio es Identificar si existe una sobrecarga en los cuidadores de los enfermos 
crónicos atendidos en la unidad de medicina familiar no. 38 
Acepto que se me ha informado a mi plena satisfacción que me participación consistirá en contestar 
una encuesta de 22 preguntas denominado Escala de Zarit. 
Y declaro además que se me ha informado sobre los beneficios e inconvenientes morales derivados 
de mi participación en el estudio: 
1.- que pueda traerme problemas familiares. 
2.- que algún miembro de mi familia no este de acuerdo en mi participación 
3.- que el medico familiar se entere de la sobrecarga del cuidador de sus pacientes. 
4.- que la información obtenida como resultado del estudio de mi familiar será para uso exclusivo con 
fines de investigación. 
El investigador responsable del estudio se comprometea proporciaonar5me información amplia, 
oportuna y veraz sobre el uso de las respuestas de la escala de Zarit instrumento de evaluación de la 
sobrecarga de un cuidador de un enfermo crónico. 
En el entendido que me reservo el derecho de retirarme del estudio si se afectaran mis valores 
normales sin que esto afecte mi relación ni la atención medica que recibo del Instituto Mexicano del 
Seguro Social por conducto de mi Medico Familiar. 
Además se me ha informado que no se me identificara en las presentaciones o publicaciones 
derivadas del estudio y que los datos relacionados con mi privacidad serán manejados en forma 
confidencial. 
Se me ha informado además que el resultado del estudio realizado podrá ser utilizado por mí medico 
familiar para ofrecernos orientación preventiva en los eventos que tienen probabilidad de existir u 
ocurrir en la sobrecarga encontrada. Además de reservarme el derecho de aceptar o no las medidas 
preventivas que se me ofrezcan. 
 UMF 38 VILLAHERMOSA TAB, 
A_____________DE___________________DEL___________. 
Nombre y firma del paciente Nombre y firma del investigador 
____________________________ __________________________________ 
Nombre y forma de un testigo Nombre y firma de un testigo 
______________________________ ___________________________________ 
46 
 
CUESTIONARIO DE CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS DEL 
CUIDADOR. 
 
Conteste por favor las siguientes preguntas: 
1. - ¿Que edad tiene usted? ____________________________________________ 
2. - ¿De que sexo es? Masculino ______ Femenino_____ 
3.- ¿Qué parentesco tiene con la persona que cuida?________________________ 
4.- ¿Qué escolaridad tiene usted?________________________________________ 
5.- ¿Qué enfermedad tiene la persona que cuida?____________________________ 
6.- ¿Cuántos años lleva cuidándolo?______________________________________ 
7.- ¿A que se dedica usted? ____________________________________________ 
8.- ¿Usted cuida solo a su pacienten o lo apoya 
alguien?_____________________________________________________________ 
9.-¿Esta usted enfermo o sano?__________________________________________ 
10.- ¿Qué edad tiene el paciente que cuida?________________________________ 
11.- ¿De que sexo es?_________________________________________________ 
 
 
Por su colaboración en esta encuesta gracias. 
 
 
 
 
47 
 
 Escala de Zarit 
 
Escala de sobrecarga del cuidador de Zarit (Caregiver Burden Interview) 
Ítem Pregunta a realizar Puntuación 
1 ¿Siente que su familiar solicita más ayuda de la que realmente necesita? 
2 ¿Siente que debido al tiempo que dedica a su familiar ya no dispone de tiempo suficiente para usted? 
3 ¿Se siente tenso cuando tiene que cuidar a su familiar y atender además otras responsabilidades? 
4 ¿Se siente avergonzado por la conducta de su familiar? 
5 ¿Cree que la situación actual afecta de manera negativa a su relación con amigos y otros miembros de su familia? 
6 ¿Siente temor por el futuro que le espera a su familia? 
7 ¿Siente que su familiar depende de usted? 
8 ¿Se siente agotado cuando tiene que estar junto a su familiar? 
9 ¿Siente que su salud se ha resentido por cuidar a su familiar? 
10 ¿Siente que no tiene la vida privada que desearía debido a su familiar? 
11 ¿Cree que sus relaciones sociales se han visto afectadas por tener que cuidar de su familiar? 
12 ¿Se siente incómodo para invitar amigos a casa, a causa de su familiar? 
13 ¿Cree que su familiar espera que usted le cuide, como si fuera la única persona con la que puede contar? 
14 ¿Cree que no dispone de dinero suficiente para cuidar a su familiar además de sus otros gastos? 
15 ¿Siente que será incapaz de cuidar a su familiar por mucho más tiempo? 
16 ¿Siente que ha perdido el control sobre su vida desde que la enfermedad de su familiar se manifestó? 
17 ¿Desearía poder encargar el cuidado de su familiar a otras personas? 
48 
 
18 ¿Se siente inseguro acerca de lo que debe hacer con su familiar? 
19 ¿Siente que debería hacer más de lo que hace por su familiar? 
20 ¿Cree que podría cuidar de su familiar mejor de lo que lo hace? 
21 En general: ¿Se siente muy sobrecargado por tener que cuidar de su familiar? 
 
Puntuación de cada item (sumar todos para el resultado): 
Frecuencia Puntuación 
Nunca 0 
Casi nunca 1 
A veces 2 
Bastantes veces 3 
Casi siempre 4 
 
	Portada
	Índice General
	Resumen
	Marco Teórico 
	Planteamiento del Problema 
	Justificación
	Objetivos
	Metodología 
	Resultados
	Discusión
	Conclusiones
	Referencias 
	Anexos

Continuar navegando

Otros materiales