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1 UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE MEXICO FACULTAD DE MEDICINA DIVISION DE ESTUDIOS DE POSGRADO E INVESTIGACION HOSPITAL GENERAL DE MEXICO DR EDUARDO LICEAGA TRATAMIENTO VIDEO ENDOSCÓPICO PARA FÍSTULAS ANALES COMPLEJAS. SEGUIMIENTO A LARGO PLAZO DE LA PRIMERA EXPERIENCIA EN MÉXICO. TESIS QUE PARA OBTENER EL GRADO DE ESPECIALISTA EN COLOPROCTOLOGIA Presenta: JUAN JOSÉ BARRERA CASTILLO. DIRECTOR DE TESIS Dr. Juan Antonio Villanueva Herrero PROFESOR TITULAR BILLY JIMENEZ BOBADILLA Ciudad Universitaria, Ciudad de México, 2017 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. 2 IDENTIFICACION DE LOS AUTORES TITULO DE PROYECTO: TRATAMIENTO VIDEO ENDOSCÓPICO PARA FÍSTULAS ANALES COMPLEJAS. SEGUIMIENTO A LARGO PLAZO DE LA PRIMERA EXPERIENCIA EN MÉXICO. TITULO CORTO: TRATAMIENTO VIDEO ENDOSCÓPICO PARA FÍSTULAS ANALES COMPLEJAS DIRECTOR DE TESIS: Dr. Juan Antonio Villanueva Herrero. Médico adscrito al servicio de Coloproctología, Hospital General de México Dr. Eduardo Liceaga. Calle Dr. Balmis s/n, Colonia Doctores, Ciudad de México. Correo electrónico: javillanueva@doctor.com Autor: Juan José Barrera Castillo. Residente de 2° año de Coloproctología. Hospital General de México Dr. Eduardo Liceaga. Calle Dr. Balmis s/n, Colonia Doctores, Ciudad de México. Correo electrónico: drjuanjosebarreracastillo@gmail.com Lugar del estudio: Hospital General de México Dr. Eduardo Liceaga. Calle Dr. Balmis s/n, Colonia Doctores, Ciudad de México. mailto:javillanueva@doctor.com mailto:drjuanjosebarreracastillo@gmail.com 3 AGRADECIMIENTOS Agradezco a mis compañeros, maestros y a todos los que formaron parte de este trayecto. En especial agradezco a mi familia, mi esposa y amigos por su apoyo incondicional. 4 INDICE CONTENIDO PAGINA Resumen 5 Abstract 6 Introducción Objetivo 10 7 Métodología 11 Resultados 12 Discusión y conclusión 13 Bibliografía 16 Anexo. Tablas 18 5 RESUMEN Título. “TRATAMIENTO VIDEO ENDOSCÓPICO PARA FÍSTULAS ANALES COMPLEJAS. SEGUIMIENTO A LARGO PLAZO DE LA PRIMERA EXPERIENCIA EN MÉXICO.” Introducción. La fistula anorrectal constituye un trayecto epitelizado que establece una comunicación entre el recto o el conducto anal y la región perianal. Las opciones para el tratamiento de las fístulas anales incluyen técnicas tradicionales y otras más novedosas. Dentro de las primeras se encuentran la fistulotomía, la fistulectomía y la colocación de setones de drenaje o de corte. Dichas técnicas presentan bajos índices de recurrencia sin embargo el daño al complejo esfintérico es importante, pudiendo condicionar cuadros de incontinencia anal posteriormente. Es por este motivo que surgieron nuevas técnicas cuyo objetivo además de resolver la fistula anal es proteger la continencia anal. Entre estas técnicas encontramos el plug anal, el procedimiento de LIFT, los pegamentos de fibrina y el VAAFT. El objetivo de este estudio es reportar la eficacia a largo plazo del tratamiento video asistido de la fistula anal (VAAFT por sus siglas en inglés). Objetivo. El objetivo de este estudio es reportar los resultados a largo plazo del tratamiento video asistido de las fístulas anales en el primer ensayo mexicano. Material y métodos. El estudio se realizó entre noviembre 2012 y noviembre 2014. Se utilizó equipo Karl- Storz. Los principales pasos fueron: 1) fistuloscopia con identificación del orificio interno, 2) electrofulguración con cauterio monopolar de los trayectos principal y secundarios, 3) cierre del orificio interno con vicryl 2-0 o engrapadora Echelon, 4) uso de cianoacrilato dentro del trayecto en 1 paciente. Las fístulas fueron consideradas como curadas si los pacientes se referían asintomáticos con un orificio externo cerrado y un canal anal con adecuado proceso de cicatrización a los 3 meses o menos Resultados. Nueve pacientes fueron operados con un promedio de edad de 49.8 años. Los pacientes presentaban entre 3 y 8 cirugías previas por absceso anal o fístula. Se observó el cierre completo del orificio secundario entre los 7 y 120 días posteriores al VAAFT. El seguimiento se realizó en promedio entre 18 y 24 meses, con una recurrencia en 44% de los pacientes; estas aparecieron después de los 8 meses y no se observaron después de los 13 meses. Se detuvo la realización de VAAFT por avería del fistuloscopio. Conclusión. Los resultados han sido alentadores en los ensayos europeos. En este estudio la recurrencia puede asociarse a modificaciones de la técnica original. El uso de engrapadoras para el cierre del orificio interno y el uso de cianoacrilato puede ayudar a mejorar los resultados. El fallo en este procedimiento puede parecer decepcionante, sin embargo el VAAFT no compromete la posibilidad de un procedimiento quirúrgico subsecuente. 6 ABSTRACT Title. "ENDOSCOPIC VIDEO TREATMENT FOR COMPLEX ANAL FISTULAS. LONG-TERM FOLLOW-UP OF THE FIRST EXPERIENCE IN MEXICO. " Introduction. The anorectal fistula is an epithelial pathway that establishes a communication between the rectum or the anal canal and the perianal region. Options for treatment of anal fistulas include traditional and newer techniques. Among the former are fistulotomy, fistulectomy and the placement of drainage or cutting sets. These techniques have low recurrence rates, however, the damage to the sphincter complex is important, and may subsequently condition anal incontinence. It is for this reason that new techniques arose whose goal besides resolving the anal fistula is to protect anal continence. Among these techniques we find the anal plug, the LIFT procedure, the fibrin adhesives and the VAAFT. The aim of this study is to report the long-term efficacy of assisted anal fistula (VAAFT) treatment. Objective. The aim of this study is to report the long-term results of assisted video treatment of anal fistulas in the first Mexican trial. Material and methods. The study was conducted between November 2012 and November 2014. Karl-Storz equipment was used. The main steps were: 1) fistuloscopy with identification of the internal orifice, 2) electroblotting with monopolar cautery of the main and secondary paths, 3) closure of the internal orifice with vicryl 2-0 or Echelon stapler, 4) use of cyanoacrylate within the path In 1 patient. Fistulas were considered as cured if the patients referred asymptomatic with a closed external orifice and an anal canal with adequate healing process at 3 months or less Results. Nine patients were operated on with an average age of 49.8 years. Patients had between 3 and 8 previous surgeries due to anal abscess or fistula. Complete closure of the secondary orifice was observed between 7 and 120 days post-VAAFT. Follow-up was performed on average between 18 and 24 months, with a recurrence in 44% of the patients; These appeared after 8 months and were not observed after 13 months. The VAAFT wasstopped for failure of the fistuloscope. Conclusion. The results have been encouraging in European trials. In this study recurrence may be associated with modifications of the original technique. The use of staplers to close the internal orifice and the use of cyanoacrylate can help improve the results. The failure in this procedure may seem disappointing, however VAAFT does not compromise the possibility of a subsequent surgical procedure. 7 INTRODUCCION La fistula anorrectal constituye un trayecto epitelizado que establece una comunicación entre el recto o el conducto anal y la región perianal. Es una de las patologías más comunes en la región anorrectal. Son más comunes en hombres que en mujeres y la frecuencia de presentación es mayor entre los 30 y 50 años de edad1 En más del 90% de los casos el origen es criptoglandular, en el que existe un antecedente de un absceso perianal previo. Dependiendo del sitio donde se origine el absceso el trayecto de la fístula anal varía; un absceso perianal se asocia a un trayecto interesfintérico, mientras que un absceso isquiorrectal se asocia a trayectos transesfintéricos2, siendo el manejo quirúrgico el único método eficaz para resolver el absceso. Los abscesos isquiorrectales tienen 7 veces más posibilidad de desarrollar fístulas y los interesfintéricos 3 veces más que los abscesos perianales3. Sólo el 10% restante puede asociarse a otras patologías como Crohn, trauma, tumores, radioterapia, VIH, entre otras2,4. La clasificación clínica actual de las fístulas anales fue propuesta por Sir Allan Parks en 1967 y presenta 4 tipos básicos: interesfintéricas, transesfintéricas, extraesfintéricas y supraesfintéricas, dentro de las cuales las fístulas interesfintéricas son las más comunes. Las fístulas a su vez pueden dividirse en simples y complejas. En la exploración física inicial pueden identificarse tanto los orificios primarios, secundarios y trayectos fistulosos. El orificio externo se caracteriza por encontrarse en la piel perianal, presentandose como una zona de granulación por la cual se observa salida de material purulento o serohemático a la digitopresión. El trayecto fistuloso puede en ocasiones identificarse como un cordón fibroso que se dirige del orificio eterno hacia el conducto anal. Finalmente el orificio primario puede identificarse al tacto rectal como una induración en el canal anal. Para orientar al explorador sobre la posible dirección del trayecto fistuloso se puede emplear la regla de Goodsall2. Existen 2 principales métodos para determinar las características de los trayectos fistulosos: la resonancia magnética y el ultrasonido endoanal, ambos con sensibilidades y especificidades similares, aunque con un costo mayor en la resonancia5. Dichos estudios se realizan preoperatoriamente para determinar extensión y localización del trayecto fistuloso principal y la presencia o ausencia de trayectos secundarios y cavidades asociadas a la fístula. El tratamiento quirúrgico de la fístula anal requiere del conocimiento detallado de la anatomía del piso pélvico y de la región anal. Para decidir el manejo quirúrgico adecuado la historia clínica debe identificar síntomas que sugieran una asociación con patología intestinal y eventos previos que puedan comprometer la función del esfínter, como cirugía anorrectal o trauma obstétrico, así como las posibles causas específicas para formación de abscesos y fístulas perianales2. 8 Durante el procedimiento quirúrgico existen métodos que permiten facilitar la localización del orificio primario en caso de no identificarlo facilmente al introducir el estilete. La aplicación de agua oxigenada es el método más comunmente utilizado. Durante la anoscopia se instila através del orificio secundario con ayuda de un catéter lo cual genera un burbujeo a nivel del orificio primario2. El objetivo del tratamiento es drenar el material infectado que pudiera encontrarse dentro de la fístula para que ésta pueda sanar y evitar su recurrencia, cuidando que la función del complejo esfintérico sea preservada. Si la fístula no cicatriza adecuadamente es posible que haya recurrencia de la misma y se requiera un nuevo procedimiento quirúrgico6 . Las opciones para el tratamiento de las fístulas anales incluyen técnicas tradicionales y otras más novedosas. Dentro del primer grupo encontramos la fistulotomía y fistulectomía, las cuales se emplean en fístulas bajas y simples, con índices de recurrencia de 6.5%6 aunque con mayor riesgo de afección al complejo esfintérico. Para las fístulas complejas se prefiere el uso de setón para minimizar el riesgo de incontinencia. Otros procedimientos tradicionales para las fístulas complejas implican una mayor complejidad, como es el caso de los avances de colgajo, los cuales presentan tasas de éxito moderadas 7,8,11. Las fistulas anales presentan mayores tasas de recurrencia cuando son fístulas complejas, cuando ya tienen el antecedente de haber presentado una recurrencia, si existe extensión en herradura, una falla para identificar ramas secundarias o el orificio interno y finalmente el nivel de experiencia del cirujano. El alto riesgo de recurrencia e incontinencia asociado con los procedimientos tradicionales han llevado al desarrollo de otros procedimientos para disminuir la morbilidad y aumentar la satisfacción de los pacientes 7,8. Las opciones más recientes incluyen el uso de pegamento de fibrina con índices de éxito de 14-69%, plugs bioprostéticos con 34-77%, ligadura interesfintérica del trayecto fistuloso (LIFT) con índices de éxito en diferentes estudios que van de 57-94.5%, cierre de la fistula anal con láser (FiLaC) con índice de éxito de 81.8%, y el uso de células madre derivadas de tejido adiposo junto con plug de fibrina, con índice de éxito de 71%. También se han realizado procedimientos donde se mezclan alguna de las técnicas ya descritas junto con avances de colgajo 7,8,9,10. La ventaja de estos procedimientos es que al no seccionar esfínteres no hay compromiso en la continencia anal. VAAFT (Karl-StorzMR) es un procedimiento descrito por Meinero en 2006 para el tratamiento de fístulas anales complejas7,8,9,11,12. Es un equipo quirúrgico cuyo aspecto innovador el uso de una videocámara que permite al cirujano ver dentro del trayecto fistuloso, así como el uso de una luz de endoscopio que ayuda a la localización del orificio interno13. El procedimiento está dividido en 2 fases: la primera es la fistuloscopia y la segunda es la electrofulguración de los trayectos y cavidades, el cierre del orificio primario (con sutura mecánica 9 o manual) y el reforzamiento con cianoacrilato8,9,11. Los puntos clave para alcanzar el éxito en el manejo de estas fistulas son la identificación y destrucción de los trayectos principal y secundarios así como de los senos anales7,8,8. El VAAFT ha presentado buenos resultados: corta estancia intrahospitalaria, corto tiempo quirúrgico, bajos índices de dolor, cicatrización rápida de la herida quirúrgica con curación a corto plazo del 73.5%, buenos resultados cosméticos, bajos índices de recurrencia, daño mínimo del complejo esfintérico y adecuada preservación de la continencia fecal7,11,13. Incluso en fístulas asociadas a enfermedad de Crohn se han encontrado resultados satisfactorios12. La principal ventaja del VAAFT es la visión directa de todo el procedimiento, garantizando el manejo de todos los trayectos y senos, además evita dejar heridas abiertas en la región perianal7. El procedimiento está planeado como de corta estancia, con un costo promedio por procedimiento de 1400 USD lo cual lo hace relativamente accesible para la población. Se estima que el VAAFT puede tener también un impacto en cuanto a reducción de costos preoperatorios y posoperatorios. Los primeros al potencialmente no requerir estudios de imagen para la identificación de los trayectosfistulosos y los segundos al no requerir cuidados de la herida quirúrgica ya que no se deja herida abierta13. Según NICE no existe alguna otra tecnología CE que cumpla con funciones similares al VAAFT13. 10 OBJETIVO El objetivo de este estudio es reportar los resultados a largo plazo del tratamiento video asistido de las fístulas anales en el primer ensayo mexicano. Dentro de los resultados a reportar se encuentran - Datos demográficos de los pacientes - Número de cirugías previas asociadas a la fístula anal - Características de las fístulas - Tiempo promedio entre el procedimiento previo y la realización del VAAFT - Tiempo quirúrgico promedio - Complicaciones intraoperatorias - Recurrencia - Incontinencia pre y post manejo quirúrgico 11 METODOLOGIA El estudio se realizó con un diseño prospectivo entre noviembre 2012 y noviembre 2014 en el Hospital General de México, servicio de Coloproctología. Se reclutaron 9 pacientes en total para realización del VAAFT. Dicho procedimiento se realizó por personal adscrito con amplia experiencia en el manejo de fístulas anales complejas. Los pacientes incluidos contaban con diagnóstico de fístula anal compleja previo a la realización de la cirugía. Ninguno presentaba datos de incontinencia fecal al interrogatorio. Se excluyeron pacientes con diagnósticos de fístulas anales simples. Se utilizó el equipo Karl-Storz para la realización del VAAFT. Los principales pasos fueron: 1) fistuloscopia con identificación del orificio interno, 2) electrofulguración con cauterio monopolar de los trayectos principal y secundarios, 3) cierre del orificio interno con vicryl 2-0 o engrapadora Echelon, 4) uso de cianoacrilato dentro del trayecto en 1 paciente. Las fístulas fueron consideradas como curadas si los pacientes se referían asintomáticos con un orificio externo cerrado y un canal anal con adecuado proceso de cicatrización a los 3 meses o menos. 12 RESULTADOS Nueve pacientes fueron operados (8 hombres y 1 mujer) con un promedio de edad de 49.8 años. Los pacientes presentaban entre 3 y 8 cirugías previas por absceso anal o fístula. Siete pacientes tuvieron un setón de drenaje antes del VAAFT. Ocho fístulas eran transesfintéricas altas, de las cuales una presentaba trayecto secundario en hemi herradura; un paciente tenía una fístula supraesfintérica. El tiempo promedio entre la cirugía de VAAFT y el procedimiento previo fue de 3.8 meses. El tiempo quirúrgico promedio fue de menos de 60 minutos. No se reportaron complicaciones intraoperatorias, solo 1 paciente desarrolló retención urinaria después el procedimiento. Se observó el cierre completo del orificio secundario entre los 7 y 120 días posteriores al VAAFT. El seguimiento se realizó en promedio entre 18 y 24 meses, con una recurrencia en 44% de los pacientes. Estas aparecieron después de los 8 meses y no se observaron después de los 13 meses. Dos de los pacientes se manejaron nuevamente con setón de drenaje. Los 2 pacientes con grapeo no presentaron recurrencia en el seguimiento. Ninguno de los pacientes refirió datos de incontinencia fecal antes o después del procedimiento. El cianoacrilato no se utilizó en todos los pacientes por que no estaba disponible en nuestro medio. Se detuvo la realización de VAAFT por avería del fistuloscopio. 13 DISCUSION Múltiples nuevas técnicas quirúrgicas se han propuesto tratando de evitar la incontinencia fecal, reducir el tamaño de las heridas perineales y disminuir la morbilidad posoperatoria4. Dentro de estos nuevos procedimientos el VAAFT se posiciona como una opción más que permite buenos resultados tanto en la resolución de la fistula como en la preservación de la continencia anal. Este procedimiento presenta ventajas incluso desde la preparación preoperatoria ya que, como lo describe Khanna, no es forzosamente necesaria la realización de una resonancia magnética o un ultrasonido endoanal para realizar este procedimiento. Esto se refleja en el transoperatorio ya que el uso del fistuloscopio permite una identificación casi del 100% del trayecto fistuloso14. Para el paciente esto puede verse reflejado en el hecho de que a pesar de que el costo del VAAFT es mayor que el de los procedimientos convencionales los costos se reducen al no requerir estudios preoperatorios. En este estudio se presentan los resultados de un pequeño grupo de pacientes manejados con VAAFT en el transcurso de 2 años. Estudios como el de Yunis con un 13% de recurrencia9, el de Meinero con 26.5% de recurrencia11, el de Kochhar con 15.8%6 o el de Mendes con 12.5%4 presentan mejores resultados que nuestra serie de casos, sin embargo, los seguimientos en estos estudios son variables, con rangos de 6 a 24 meses. En el estudio de Seow-En I et al15 se reporta una recurrencia de 29.3% con un seguimiento de 34 meses, resultado un poco más próximo al nuestro. Esta importante diferencia entre los índices de recurrencia reportados en otros estudios comparado con el nuestro puede deberse a múltiples factores. Entre las posibles causas se encuentra el pequeño número de pacientes intervenidos. Al tener una población de solo 9 pacientes nuestro estudio no logra cubrir la curva de aprendizaje necesaria para la realización de este procedimiento la cual es de 15 pacientes. Además, debido a limitantes en nuestro medio para conseguir el material de grapeo y el cianoacrilato, modificaciones a la técnica descrita por Meinero tuvieron que ser realizadas, lo cual también puede haber afectado nuestro índice de recurrencia. En cuanto al tiempo quirúrgico, nuestros resultados se encuentran dentro del rango de tiempo reportado por otros estudios, con resultados que van desde los 30 minutos hasta 1 hora y media. La similitud en estos tiempos quirúrgicos es muy satisfactoria ya que a pesar de que no se cubrió la curva de aprendizaje la velocidad con la que se completaron las cirugías fue más que adecuada. Al igual que en el resto de los estudios, no se reportaron complicaciones intraoperatorias, salvo el caso con retención urinaria, la cual está asociada al uso de anestesia regional más que al procedimiento quirúrgico per se; tampoco se reportaron en el posoperatorio datos de incontinencia fecal. El estudio de Kochhar evaluó manométricamente la continencia fecal de los pacientes estudiados, sin encontrar diferencias significativas en las presiones anales en reposo y a la contracción en el pre y el posoperatorio, es decir sin afección a la continencia anal asociada al procedimiento. 14 El hecho de que debido a la avería del fistuloscopio solo se pudieron realizar 9 procedimientos es un factor importante en los resultados obtenidos. Es posible que si la población incluida en el estudio hubiera sido mayor se hubiera podido mejorar el índice de recurrencia obtenido. El VAAFT presenta resultados prometedores para el manejo de fistulas anales incluso en pacientes pediátricos. En un reporte de caso realizado por Liaqat et al16 en una paciente con una fístula anal posterior a toma de biopsias rectales por sospecha de enfermedad de Hirschprung se logró una adecuada resolución de la fístula con VAAFT. Además, Prato et al17 han reportado resultados preliminares en los que el VAAFT es factible y seguro en la población pediátrica, con los mejores resultados encoentrados en niños mayores y adolescentes. El uso del llamado fistuloscopio de Meinero puede tener un amplio rango de aplicaciones, que van desde las fístulas anales complejas como ya hemos descrito hasta el manejo de senos pilonidales y fístulas intestinales y biliares14. Actualmente existen estudios con los cuales se busca identificar las ventajas del VAAFT comparado con otros procedimientos. Uno de ellos es el estudio en proceso del Dr. Samiullah, (NCT02313597en ClinicalTrials.gov) en el que busca comparar los resultados posoperatorios entre VAAFT y el setón de corte en fístulas perianales altas, el cual se espera se concluya en diciembre de 2017. De igual forma hay una revisión sistemática de los resultados del tratamiento por VAAFT que se encuentra en proceso de revisión para su publicación realizada por Emile et al18, cuyos resultados nos permitirán tener una mejor idea de la efectividad de este procedimiento. 15 CONCLUSIONES. Los resultados han sido alentadores en múltiples ensayos, concluyendo que el VAAFT es una muy segura técnica de mínima invasión. Los resultados de nuestra serie son adecuados a pesar de presentar diferencias con otras series reportadas. En este estudio la recurrencia puede asociarse a modificaciones de la técnica original. El uso de engrapadoras para el cierre del orificio interno y el uso de cianoacrilato puede ayudar a mejorar los resultados. El fallo en este procedimiento puede parecer decepcionante, sin embargo, el VAAFT no compromete la posibilidad de un procedimiento quirúrgico subsecuente, ya sea un nuevo VAAFT o algún otro método. Además, el fistuloscopio se posiciona como un instrumento versátil, con el cual incluso se puede intentar dar manejo a otras patologías. 16 BIBLIOGRAFIA 1. Ommer A, Herold A, Berg E, Furst A, Sailer M, Schiedeck T. German S3 guideline: anal abscess. Int J Colorectal Dis 2012; 27 (6):831-7 2. Williams JG, Farrands PA, Williams AB, Taylor BA, Lunnis PJ, Sagar PM, et al. The Treatment of anal fistula: ACPGBI Position Statement. Colorectal Dis 2007; 9 (suppl 4): 18-50 3. Sözener U, Gedik E, Aslar AK, Ergun H, Elhan AH, Memikoglu O, el al. Does adjuvant antibiotic treatment after drainage of anorrectal abscess prevent development of anal fistulas? A randomized placebo-controlled, double blind, multicenter study. Dis Colon Rectum 2011; 54: 923-9 4. Mendes, CRS, Ferreira LSM et al. Video-assisted anal fistula treatmente: technical considerations and preliminary results of the first brazilian experience. ABCD Arq Bras Cir Dig 2014;27(1):77-81 5. Muhammed RS, Siddiqui MRCS,Ashrafian H, Tozer P,Daulatzai N, Bruling D, el al. A diagnostic accuracy meta-analysis of endoanal ultrasound and MRI for perianal fistula assessment.Dis Colon Rectum 2012; 55; 576-85 6. Haig Dudukgian, Herand Abcarian. Why do we have so much trouble treating anal fistula? World J Gastroenterol. 2011 Jul 28; 17(28): 3292–3296. 7. Kochhar G, Saha S, Andley M, Kumar A, Saurab G, Pusuluri R, et al. Video-assisted anal fistula treatment. JSLS 2014;18:15 8. Chowbey PK, Khullar R, Sharma A, Soni V, Najma K, Baijal M. Minimally Invasive Anal Fistula Treatment (MAFT)— An Appraisal of Early Results in 416 Patients. Indian J Surg 2013 9. Masoud Younis A. Outcome of endoscopic assisted recurrent fistula in ano treatment. Life SciJ 2013;10:1717-1720 10. Queralto M, Portier G et al. 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APSP J Case Rep. 2016 Jan-Apr. 7 (1):3 17. Pini Prato A, Zanaboni C, Mosconi M, Mazzola C, Muller L, Meinero PC, et al. Preliminary results of video-assisted anal fistula treatment (VAAFT) in children. Tech Coloproctol. 2016 May. 20 (5):279-85. 18. Sameh Emile, Hossam Elfeki, Mostafa Shalabi, Ahmad Sakr. Systematic review of the outcomes of video-assisted anal fistula treatment (VAAFT). PROSPERO 2017:CRD42017064605 18 ANEXO Tablas Tabla 1. Datos demográficos y resultados del procedimiento Número de pacientes 8 hombres, 1 mujer Promedio de edad 49.6 (45-60 años) Promedio de cirugías previas 3-8 procedimientos Tiempo de evolución de la fístula 18 (3-60) meses Uso de setón previo al VAAFT 7 pacientes Promedio de tiempo de cirugía 60 (35-80) minutos Engrapadora 2 casos Cianoacrilato 1 paciente Complicaciones posoperatorias 1 (retención urinaria) Tiempo para cicatrización del orificio externo 7-120 días Satisfacción 100% Índice de recurrencia 44% Tiempo de aparición de la recurrencia 4.5 (3-9) meses Soiling 2 pacientes Setón de drenaje posterior a falla de VAAFT 2 pacientes Tabla 2. Tipos de fístulas y número de casos Tipo de fístula Número de casos Transesfintérica posterior baja 1 Transesfintérica anterior alta 2 Transesfintérica posterior alta 5 Ectraesfintérica posterior 1 Portada Índice Resumen Texto Conclusiones Bibliografía