Nahui Sanabria de Salvidea - La narrativa de Cervantes

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Letras Portuguesas
Nahui Sanabria
La narrativa de Cervantes
Por su innovación e importancia, El Quijote se ha convertido en una de las obras literarias
más importantes y su papel en las novelas modernas se ha convertido en parte de la cultura de
nuestro tiempo. Sin embargo, ¿cuáles fueron las innovaciones de Cervantes en la literatura?
A continuación, algunos de los rasgos distintivos de las novelas modernas y su existencia en
El Quijote.
Uno de los mayores deseos de las novelas modernas es buscar la unidad y una forma o
composición narrativa coherente. Una obra única o cerrada es una obra configurada como un
sistema o estructura completo, autónomo y autosuficiente, donde cada elemento del sistema
es significativo en relación con otros elementos. El sistema tiene sus propias leyes y gobierna
la relación entre elementos y funciones, esto es parte de lo que se hace llamar novela. En las
novelas de Cervantes, esta cualidad es desigual. La primera parte de El Quijote se atribuye a
la adición o estructura narrativa abierta de libros de caballeros (típicas novelas de aventuras).
De hecho, esta parte se organiza con base en una serie de episodios o aventuras vividas por el
protagonista, los cuales, se pueden ampliar indefinidamente o cambiar de orden sin alterar el
conjunto.Por otro lado, la segunda parte de El Quijote tiene una estructura relativamente
cerrada debido a algunas razones: primero, hay un resultado final que resuelve el problema
principal que provocó la conspiración (pérdida del juicio-restauración de la cordura y
muerte); luego, hay un riesgo menos , el rol más obvio en el desarrollo del personaje;
después, reducir y más participación en la trama principal de la historia anidada. A su vez, la
dominación del diálogo y desarrollo del personaje y, por último, existe una referencia a la
metaficción de la primera parte, etc. En este sentido, la segunda parte de El Quijote
representa un paso importante en el desarrollo de la novela moderna. Respecto al realismo y
sexualidad, las novelas modernas se ajustan absolutamente al realismo del siglo XIX. Por
tanto, las novelas realistas son las características de las novelas modernas. Sin embargo,
conviene aclarar algunos términos. Primero, ayuda a distinguir entre historia y ficción. La
literatura, incluso la más realista, incluso la basada en hechos o personajes históricos, es
ficticia, una invención y la cristalización de la imaginación del creador. El escritor no es un
historiador. Partiendo del hecho de que el novelista es el creador del mundo de ficción,
podemos clasificarlo según las leyes inherentes de la historia y el desempeño de la realidad.
El Quijote no solo abrió el mundo de la ficción realista, sino también la ficción intertextual,
porque contenía referencias a otros géneros e incluso los fusiona. Como se sabe, la obra más
distintiva de Cervantes es la imitación de libros de caballeros, mundo de novelas fantásticas.
Sin embargo, este no es el único género a imitar: El Quijote menciona casi todos los géneros
narrativos conocidos como la sentimental, pastoril, etc. Es importante superponer novelas
maravillosas como novelas caballerescas, novelas sentimentales o novelas pastorales al
universo real de la novela. El universo de ficción real es el punto de referencia y el resto del
maravilloso mundo de ficción se integra sobre este. Aunque El Quijote se presentó a los
lectores en el siglo XVII como un antihéroe, Cervantes logró crear una novela en la que este
personaje que no es un héroe en principio es definitivamente el protagonista. Hay un
contraste entre la referencia estructural de la ficción caballeresca; un ejemplo de un
maravilloso mundo de ficción, como se mencionó anteriormente y el marco de la realidad con
antihéroes. Cervantes logró construir una novela en la que este personaje, no el héroe
original, es definitivamente el protagonista. Hay un contraste entre la referencia estructural de
la ficción caballeresca (un ejemplo de un maravilloso mundo de ficción, como se mencionó
anteriormente) y el marco de la realidad con antihéroes. Cervantes imita la novela de
caballeros, pero utiliza su estructura y género básicos: secuencia de aventuras y errores de
caballero. Además, la obra de Cervantes no es sólo ejercicios humorísticos o superficiales
sino en la "Actualidad moderna" de Cervantes, las características del tipo original finalmente
lo superaron. El resultado es una novela compleja y completa que combina diferentes
géneros. Cervantes prevé algunas de las claves de la novela moderna utilizando la carne y la
sangre del protagonista como protagonista. Don Quijano es en realidad un pobre Alonso
Quijano de cincuenta años, delgado, sin rapidez ni fuerza física. Está lejos de los jóvenes y
poderosos caballeros como Amadís o Tirant. Sin embargo, además de una excelente
imaginación, El Quijote también tiene coraje y un profundo sentido de la justicia. Está lejos
de los jóvenes y poderosos caballeros como Amadís o Tirant. Sin embargo, además de una
excelente imaginación, El Quijote también tiene coraje y un profundo sentido de la justicia.
Está lejos de los jóvenes y poderosos caballeros como Amadís o Tirant. Sin embargo, además
de una excelente imaginación, El Quijote también tiene coraje y un profundo sentido de la
justicia. Por otro lado, hay muchas locuras sobre El Quijote: es un loco pero uno sano. El
Quijote espera convertir su vida en una obra de arte, o incluso en una novela caballeresca.
Pero Cervantes no quería construir un mundo hermoso, sino contar una historia de ficción
(Castilla a principios del siglo XVII) en un entorno real, estrecho y reconocible. En este caso,
presenta un personaje que parece loco o un poco raro a los ojos de los demás. Pero al final, la
locura de El Quijote es solo vivir una vida plena y mejorar el mundo que rodea al personaje.
La locura de El Quijote finalmente infectó a otros. Se ha hablado mucho de la quijotización
de Sancho. El Quijote, el anciano que confundió la realidad con la novela, es el personaje
más auténtico. El Quijote es un héroe problemático en un mundo problemático: (anti)
héroe-viejo, con herrumbre y armas viejas, y un caballo débil La fantasía de El Quijote es el
motor que lo impulsa a continuar sus aventuras y peregrinaciones. Mientras tenga suficiente
gasolina, el motor funcionará, lo que lo llevará a una aventura implacable y la búsqueda
fundamental de la autenticidad en una determinada parte del mundo. Siempre que use su
imaginación, puede usar esta poderosa arma en un entorno real simple, gris y aburrido.
Mientras permanezca "loco", puede limitar la locura. Durante el viaje, quieres enfrentarte al
mundo para sobrevivir. Si se le acababa la imaginación, si volvía a estar sano, si se detenía y
era derrotado, volvería a su casa para siempre y Don Quijote fallece. Se ha conquistado la
realidad, la racionalidad y la "normalidad". Pero el viaje El Quijote no fue en vano. Su locura
y su imaginación desean vivir, crear un mundo mejor y deshacerse de los infectados
"normales". Don Quijote fue derrotado por este mundo vulgar, pero en su camino cambió la
vida y los ideales de quienes lo conocieron.
Otra característica moderna de Don Quijote es la complejidad de los personajes. En
las novelas tradicionales, los personajes son planos, generalmente solo prototipos. Al
principio de la novela, parece que las construye el creador. La aventura cambió la vida del
protagonista, pero no cambió su mundo interior. En las novelas modernas, los personajes son
redondos, es decir, complejos y cambiantes. Estos personajes no eran hechos desde el
principio, sino que fueron creados en novelas. La actividad cambia tu personalidad. En el
curso de la acción, enriquecen, modifican, cualifican y desarrollan. En El Quijote, se observa
la existencia de personajes redondos y personajes complejos. Un gran ejemplo es Sancho: El
carácter de Sancho creció con el desarrollo de la novela: se hizo más rico y sabio. Pero su
personalidad y visión del mundo ha cambiado. De hecho, cuando Don Quijote regresa al
pueblo ,recupera la cordura; en cambio, Sancho está ansioso por seguir arriesgándose:
incluso habla de vida pastoral. Pues parece que ahora el loco es Sancho, y el sabio es Don
Quijote. La fantasía de Don Quijote es la voluntad cansada de la vida, enfrentarse al mundo y
convertirlo en una obra de arte. Por el contrario, Sancho llenó su importante motor con
fantástica gasolina, y estaba dispuesto a vivir la vida que rezuma su dueño. Se han
intercambiado roles.
Por último, otra función moderna es la llamada épica de la vida cotidiana o la
saturación del mundo, es decir, la atención a la "realización", el comportamiento o la
situación diaria, que a menudo se ignora en las narrativas épicas. Por otro lado, sobre todo en
la segunda parte, la relevancia parece haber pasado de la aventura misma al intervalo entre
aventuras, es decir, la hermandad entre Don Quijote y Sancho sobre los temas más extensos y
banales.
En conclusión, a pesar de todas sus innovaciones y modernidades, lo elemental de la
obra es la comedia y eso es lo más moderno. Cervantes quiso principalmente hacer un
producto de imitación, que era básicamente una obra de comedia, así lo entendían sus
contemporáneos. Sin embargo, el trabajo autocrítico es más complejo y creíble que los
cómics simples: es más moderno. Don Quijote es muy gracioso. Nunca es pegajoso ni
demasiado destructivo: blanco, amable y divertido. El sentido del humor hace misterioso y
relajante.