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Frecuencia-de-factores-de-riesgo-en-pacientes-con-cancer-cervicouterino-del-Hospital-de-Gineco-Pediatra-3A-del-IMSS

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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO 
 FACULTAD DE MEDICINA 
DIVISIÓN DE ESTUDIOS DE POSGRADO 
 INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO SOCIAL 
HOSPITAL DE GINECO-PEDIATRÍA No. 3-A 
UNIDAD DE MEDICINA FAMILIAR No. 20 VALLEJO 
 
 
 
 
“FRECUENCIA DE FACTORES DE RIESGO EN PACIENTES CON 
CÁNCER CERVICOUTERINO DEL HOSPITAL DE GINECO-
PEDIATRÍA 3A DEL IMSS” 
 
 
 
TESIS 
 
 
 
QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE 
ESPECIALISTA EN MEDICINA FAMILIAR 
PRESENTA 
 
 
MARIA ACELA BECERRIL GUEVARA 
 
 
 
TUTORA 
DRA. SANTA VEGA MENDOZA 
 
 
ASESORA METODOLÓGICA 
 DRA. SILVIA ANGELICA GORDILLO RODRIGUEZ 
 
 CIUDAD DE MÉXICO, 2017 GENERACIÓN 2015-2018 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
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DERECHOS RESERVADOS © 
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“FRECUENCIA DE FACTORES DE RIESGO EN PACIENTES CON CÁNCER 
CERVICOUTERINO DEL HOSPITAL DE GINECO-PEDIATRÍA 3A DEL IMSS” 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
TUTORA 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
_______________________________________________________________ 
DRA. SANTA VEGA MENDOZA 
Médico Especialista en Medicina Familiar, Maestra en ciencias de la Educación, 
Profesora adjunta del curso de Especialización en Medicina Familiar 
UMF 20, IMSS. 
 
 
 
 
 
 
 “FRECUENCIA DE FACTORES DE RIESGO EN PACIENTES CON CÁNCER 
CERVICOUTERINO DEL HOSPITAL DE GINECO-PEDIATRÍA 3A DEL IMSS” 
 
 
 
 
 
 
 
ASESORA METODOLÓGICA 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
__________________________________________________________________ 
DRA. SILVIA ANGELICA GORDILLO RODRIGUEZ 
Médico Especialista en Gineco-obstetricia, Clínica de displasias 
HGP 3-A, IMSS 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 “FRECUENCIA DE FACTORES DE RIESGO EN PACIENTES CON CÁNCER 
CERVICOUTERINO DEL HOSPITAL DE GINECO-PEDIATRÍA 3A DEL IMSS” 
 
 
 
 
 
 
 
 
Vo. Bo. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
DRA. MARÍA DEL CARMEN AGUIRRE GARCIA 
Médico Especialista Medicina Familiar, Profesora titular del curso en 
especialización en Medicina Familiar 
UMF 20, IMSS. 
 
 
 
 
“FRECUENCIA DE FACTORES DE RIESGO EN PACIENTES CON CÁNCER 
CERVICOUTERINO DEL HOSPITAL DE GINECO-PEDIATRÍA 3A DEL IMSS” 
 
 
 
 
 
 
 
Vo. Bo. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
_______________________________________________________________ 
DR. GILBERTO CRUZ ARTEAGA 
Médico Especialista en Medicina Familiar, Coordinador clínico de Educación e 
Investigación en Salud 
UMF 20, IMSS 
 
 
 
DEDICATORIA 
 
 
A mi madre: 
 
Por ser tan propositiva conmigo, 
por nunca dudar de mí 
y darme tu apoyo incondicional. 
Se que, sin ti, todo mi esfuerzo hubiese sido en vano. 
Gracias por soportar mis peores ratos, 
pero también por compartir mis más grandes alegrías, 
 animándome siempre a seguir adelante. 
TQM 
 
AGRADECIMIENTOS 
 
A Dios 
por todas las bendiciones recibidas, por darme la serenidad y fortaleza en los momentos 
difíciles, mejorando mi aptitud para tomar decisiones, avanzar y mejorar cada día. 
A mi madre 
por toda su paciencia y por estar siempre a mi lado apoyándome incondicionalmente. 
Gracias Coco por darme tanto. 
A mis seres queridos 
que ya no están conmigo físicamente, pero que, espero estén orgullosos de mí, pues 
fueron parte fundamental en mis logros. 
A Tania Sofía y Roberto 
por ser tan importantes en mi vida, haciéndola más feliz al verlos crecer y sonreír a diario. 
A mis hermanos Lucy, Claudia y Pablo 
por todo su cariño y porque a pesar de la distancia siempre estaremos el uno para el otro. 
A mis profesores 
por transmitir su invaluable conocimiento, permitiéndome crecer profesionalmente. 
A la Dra. Silvia A. Gordillo 
sin cuyo respaldo, este proyecto no se hubiese realizado. 
A las Dra. Santa y Dra. Carmen 
por tan valiosas enseñanzas poniendo todo su esfuerzo en logar el objetivo de formar los 
mejores Médicos Familiares, permitiéndome culminar y a la vez iniciar una etapa más de 
mi vida, particularmente, gracias Dra. Santa por darme ánimo, cuando pensaba que las 
cosas iban mal. 
A mis compañeros de residencia 
por vivir a mi lado esta experiencia, por toda la ayuda prestada en el desarrollo del 
posgrado, pero en especial a los sindiasmicos por hacerla mucho más divertida y valiosa 
al convertirse en extraordinarios amigos y hermanos de vida. 
 
INDICE 
 
 
Resumen…………………………………………………………………………………... 
Introducción……………………………………………………………………………… 1 
Marco teórico…………………………………………………………………………….. 3 
Planteamiento del problema …………………………………………………………...19 
Objetivos………………………………………………………………………………… 20 
Material y 
métodos………………………………………………………………………………...…21 
Resultados……………………………………………………………………………… 34 
Discusión…………………………………………………………………………………41 
Conclusiones……………………………………………………………………….……44 
Recomendaciones………………………………………………………………………45 
Bibliografía……………………………………………………………………………… 46 
Anexos……………………………………………………………………………….…. 51 
 
 
RESUMEN 
“FRECUENCIA DE FACTORES DE RIESGO EN PACIENTES CON CÁNCER 
CERVICOUTERINO DEL HOSPITAL DE GINECO-PEDIATRÍA 3A DEL IMSS” 
 
Becerril-Guevara María Acela*, Vega-Mendoza Santa**, Gordillo-Rodríguez 
Silvia Angélica ***, 
*Médica Residente de Medicina Familiar UMF20 IMSS 
** Médica Familiar, Maestra en Ciencias de la Educación, UMF20 IMSS 
*** Médica Especialista en Gineco-obstetricia, HGP 3-A IMSS 
 
El cáncer cervicouterino (CaCu) es en México el segundo de los tumores malignos 
siendo su causa multifactorial. Objetivo: Determinar la frecuencia de los factores 
de riesgo presentes en pacientes con Cáncer Cervicouterino en el 2016, del 
Hospital de Gineco-Pediatría No.3-A del IMSS. Material y métodos: Estudio 
descriptivo, previo consentimiento de autoridades se revisó 62 expedientes con 
diagnóstico de CaCu por biopsia del 2016, registrando factores de riesgo 
personales no patológicos y ginecoobstetricos. Se utilizó estadística descriptiva. 
Resultados: Edad 47.1±12.7, grupo de edad 46-50 19.4%(12), secundaria 
37.1%(23), trabajadoras 53.2%(33); tabaquismo 22.6%(14), activo en 
12.9%(8),100% sin vacuna VPH. Inicio de vida sexual 15-24 años 87.1%(54), 2-3 
parejas sexuales 54.8%(34), 3-4 embarazos 46.8%(29), atención de partos 
70%(149), uso método de planificación familiar 71%(44), definitivo 
41.9%(26);infección vaginal 51.6%(32), tipo bacteriano 40.3%(25), VPH 
43.5%(27),con electrocirugía 37.1%(23); primer papanicolaou ≥51 años 
27.4%(17), primera vez 53.2%(33), intervalo de papanicolaou ˃3 años 21%(13), 
intervalo entre papanicolaou y diagnóstico de CaCu ≥91 días 38.7%(24);carcinoma 
epidermoide in situ con extensión glandular 51.6%(32). Conclusiones: Factores 
predominantes: multiparidad, vida sexual temprana, más parejas sexuales, 
infecciones vaginales, edad tardía en toma de Papanicolaou. Se debe reforzar 
acciones preventivas fomentando tamizaje oportuno. 
Palabras clave: Cáncer cervicouterino, factores de riesgo. 
SUMMARY 
"FREQUENCY OF RISK FACTORS IN PATIENTS WITH CERVICAL CANCER 
OF THE HOSPITAL DE GINECO-PEDIATRÍA 3A DEL IMSS" 
Becerril-Guevara María Acela*, Vega-Mendoza Santa **, Gordillo-Rodríguez 
Silvia Angélica *** 
* Resident Physician of Family Medicine UMF 20 Vallejo IMSS 
** Family Physician, Teacher in Educational Sciences, UMF20 Vallejo IMSS 
*** Physician Specialist in Gynecology-obstetrics, HGP 3-A IMSS 
 
Cervical cancer (CaCu) is the second of the malignant tumors in Mexico being its 
multifactorialcause. Objective: To determine the frequency of risk factors present 
in patients with Cervical Cancer in 2016, of the Hospital of Gineco-Pediatría No.3-A 
of the IMSS. Material and methods:Descriptive study, with the prior consent of the 
authorities, 62 files with a diagnosis of CaCu by biopsy of 2016 were reviewed, 
recording personal non-pathological and gynecological obstetric risk factors. 
Descriptive statistics were Results:Age 47.1±12.7, age group 46-50 19.4%(12), 
high school 37.1%(23), workers 53.2%(33);smoking 22.6%(14), active 12.9%(8), 
100% without HPV vaccine. Beginning of sexual life 15-24 years 87.1%(54), 2-3 
sexual partners 54.8%(34), 3-4 pregnancies 46.8%(29), deliveries 70%(149), use 
of family planning method 71%(44), definitive 41.9%(26);vaginal infection 
51.6%(32), bacterial type 40.3%(25), HPV 43.5%(27), with electrosurgery 
37.1%(23);first papanicolaou ≥51 años 27.4%(17), first time 53.2%(33), range of 
papanicolaou ˃3 years 21%(13), interval between papanicolaou and diagnosis of 
CaCu ≥91 days 38.7%(24);squamous cell carcinoma in situ with glandular 
extensión 51.6%(32). Conclusions:Predominant factors: multiparity, early sexual 
life, more sexual partners, vaginal infections, late age in Papanicolaou. Preventive 
actions should be reinforced by encouraging timely screening. 
Key words: Cervical cancer, risk factors. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
“FRECUENCIA DE FACTORES DE RIESGO EN PACIENTES CON CÁNCER 
CERVICOUTERINO DEL HOSPITAL DE GINECO-PEDIATRÍA 3A DEL IMSS” 
 
 
 
1 
 
INTRODUCCIÓN 
 
El cáncer cervicouterino es uno de los padecimientos más frecuentes 
calculándose que cada año se diagnostican 466,000 nuevos casos y que mueren 
231,000 mujeres por esta causa (1). En el 2014, se registraron 3,063 casos 
nuevos de tumores malignos del cuello registrándose en mujeres de 25 años y 
más, 4,056 defunciones con una tasa cruda de 11.9 defunciones por 100,000 
mujeres (2). De acuerdo con el INEGI, en relación con las causas de defunción 
general en el año 2015, en el caso de las mujeres, se reportaron un total de 
291,637 casos de mortalidad general encontrando en tercer lugar los tumores 
malignos y de ellos, el de cuello uterino en tercer lugar, con un total de 4,009 (3). 
Para el 2030 se prevé que más de 1.6 millones de personas morirán por cáncer, 
debido a los cambios demográficos y a una mayor exposición a los factores de 
riesgo (4). Y si bien ha habido cambios favorables en el caso del Cáncer 
Cervicouterino, éstos no han sido suficientes para una patología considerada 
altamente prevenible, simplemente al notar que más del 50% de las mujeres no se 
han realizado la detección oportuna de cáncer cervicouterino (DOC), siendo en 
México la citología cervicovaginal (CV) con tinción de Papanicolaou, el método 
tradicional para ello por más de 40 años (5). 
Recordemos que siempre será menor el gasto que pueda representar la inversión 
al implementar de manera adecuada medidas preventivas, pues tan sólo en 
México se proporciona atención médica aproximadamente a 9,000 mujeres con 
CaCu invasor y se registran 4,000 muertes anualmente (6), que aquél que conlleva 
el tratamiento y rehabilitación, como es el caso de las enfermedades oncológicas 
que representan pérdidas millonarias para los diversos institutos y sistemas de 
salud que brindan atención médica, debido a que en el país no existe una 
verdadera cultura de prevención (1). 
Siendo una patología de origen multifactorial, con múltiples repercusiones no sólo 
a nivel de salud pública, genera un alto costo, también en el entorno familiar, 
mermando la calidad de vida de la paciente y su familia, desde el momento mismo 
en que se detectan factores tales como la asociación con infección por VPH, factor 
de riesgo más estudiado, pudiendo causar alteraciones importantes dentro de la 
dinámica familiar, o bien, teniendo un desenlace fatal al no detectar 
oportunamente la enfermedad viendo sesgadas la vida de miles de mujeres y 
quedando sus familias fraccionadas, con los hijos de estas mujeres sin la 
posibilidad de contar el apoyo y el afecto materno en el curso de sus vidas. 
2 
 
Conociendo la frecuencia de estos factores en nuestra población, tal es el caso de 
las pacientes con diagnóstico de cáncer Cervicouterino del Hospital de Gineco-
Pediatría No. 3-A del IMSS, mediante el registro de sus características 
sociodemográficas, de comportamiento sexual y reproductivo, se pretende reforzar 
o implementar acciones de mayor impacto sobre la población, fortaleciendo o 
generando nuevas estrategias para influir de manera positiva, en la disminución de 
la morbimortalidad del Cáncer cervicouterino y displasias, considerando que 
dentro del rol del médico familiar está el poder integrar y sumar esfuerzos con todo 
el equipo multidisciplinario para la realización de manera correcta y oportuna el 
tamizaje para su detección en fases tempranas, referencia oportuna y 
seguimiento, obteniendo entonces un notable descenso de las repercusiones 
físicas, familiares, emocionales, sociales y financieras, incluyendo los gastos a 
nivel institucional, son de gran magnitud, pues si bien en el ámbito familiar no 
podemos ver cifras, si podemos inferir que la orfandad y la desintegración familiar 
forman parte del lastre de estas patologías, con grandes repercusiones 
psicológicas y sociales (7). 
 
 
3 
 
MARCO TEÓRICO 
 
El término de Cáncer es aplicado a un grupo de enfermedades que se produce por 
el incremento cuantitativo, mayor de lo normal, de células diferenciadas, atípicas 
en su biología y morfología, en un tejido con capacidad potencial de reproducción 
(8). 
El carcinoma de cuello uterino es una neoplasia maligna que se caracteriza por la 
pérdida de la estratificación del epitelio, así como una marcada atipia celular, con 
alteraciones de la relación núcleo-citoplasma, (8) que surge generalmente en la 
zona de unión escamo-columnar del epitelio cervical y mundialmente tiene un 
impacto negativo en la población femenina, siendo más marcado en los países en 
vías de desarrollo. Así, a pesar de la existencia de programas de pesquisaje, las 
mujeres sufren y mueren por cáncer cervicouterino (9). 
Se manifiesta inicialmente a través de lesiones precursoras de lenta y progresiva 
evolución, que se pueden desarrollar en etapas intraepiteliales preinvasoras, 
evolucionando hasta cáncer invasor. Las lesiones se desarrollan en diferentes 
etapas: displasia leve, moderada, severa, cáncer in situ (10). Estas lesiones 
consideradas como preinvasoras, son denominadas como neoplasia intraepitelial 
cervical (NIC) o lesiones escamosas intraepiteliales (LEI) de acuerdo con el 
sistema Bethesda (11). 
Desde el punto de vista histológico la clasificación de LEI depende del grado de 
lesión celular dentro del epitelio y esta clasificación está diseñada para 
estandarizar el sistema de reporte para la prueba de Papanicolaou. Se basa en la 
descripción morfológica de las lesiones, lo cual permite identificar datos que 
sugieren infección por VPH y las alteraciones celulares relacionadas con el 
desarrollo del CACU, las cuales fueron identificadas como atipia de células 
escamosas de significado indeterminado (ASCUS) y LEI de bajo y alto grado (11). 
Algunos autores afirman que transcurren alrededor de diez años en promedio a 
partir de detectarse alteraciones de bajo grado para que se llegue a presentar un 
cáncer invasor in situ, (11) reconociendo de acuerdo a la Organización Mundial de 
la Salud (WHO), dos tipos histológicos principales de cáncer invasivo: carcinoma 
de células escamosas, que constituye cerca del 75% de todos los casos y el 
adenocarcinoma que constituye cerca del 15-25% de todos los casos (12). 
Según la edad, el pico de incidencia para NIC3 se ha reportado de 27 hasta 35 
años de edad promedio, mientras que para el cáncer invasor se presenta al menos 
4 
 
diez años más tarde (con una media de 48 años), lo que hace evidente la 
progresión de la enfermedad con la edad (11).Los antecedentes de las descripciones de cáncer cervicouterino se remontan 
hasta los años 460 a. C. con Hipócrates, quien hace una amplia descripción del 
cáncer, en su “corpus Hipocraticum”, sobre todo del cáncer de seno, útero y piel, y 
a él se atribuye la paternidad del término cáncer para designar esta enfermedad 
(12). Galeno, en el año 135 d.C. dedica una monografía completa al estudio del 
cáncer. Hans Hiselman, en 1925, en Alemania, inventa el colposcopio y Schiller, 
en 1993, introdujo la prueba de lugol en el examen del cérvix uterino (12). El gran 
mérito de George Papanicolaou y su escuela fue haber sistematizado una técnica 
de diagnóstico con métodos de toma de muestra, fijación en freso, tinción y 
nomenclatura de los diferentes tipos de alteración citológica relacionadas con el 
Ca Cu, publicando en 1954 su Altlas de Citología Exfoliativa (12). 
El Cáncer cervicouterino antes de manifestarse como tal, pasa por varias etapas 
que empieza con una lesión precancerosa llamada displasia, la cual puede ser de 
bajo grado (NICI y/o infección por VPH) o alto grado (NIC II, NIC III o Ca in situ) y 
de ahí evolucionar a cáncer invasor, el cual tiene alta mortalidad (13). Se considera 
que las lesiones escamosas intraepiteliales anteceden a la presencia del cáncer 
en un promedio de entre 4 y 10 años (14). 
Es uno de los cánceres con más alta mortalidad en el mundo. Más del 85% de la 
carga global ocurre en países en desarrollo, donde representan 13% de los 
cánceres femeninos (5). 
 
La Organización Mundial de la Salud (OMS), en su informe Anual de Salud del año 
2008 (basado en datos del 2002), declara que en ese año murieron 7, 108,769 
personas por cáncer y estimó que la tasa bruta de mortalidad por este problema 
de salud a nivel mundial fue de 114,4x100,000 habitantes (4). A nivel mundial se 
presenta una estimación de 530,232 casos nuevos, de los cuales 
aproximadamente el 86% (453,531 casos) se presenta en los países en desarrollo. 
De acuerdo con las estimaciones de la OMSS en 2008, la tasa estandarizada a 
nivel mundial es de 15.2 x 100,000 mujeres, solo por debajo del cáncer de mama 
(38.9x 100,000 mujeres) (11). Los países más desarrollados muestran tendencias 
importantes hacia la disminución en la incidencia de casos. Por ejemplo, 
Dinamarca, que tenía una tasa de 22.5 x 100 mil en 1975, disminuyó 20 puntos 
para una tasa reportada de 2.5 x 100,000 mujeres en 2008 (11). 
Las zonas de alto riesgo incluyen Sudamérica, Este y Sur de África y la India (12). 
Las tasas con mayor incidencia por CaCu se presentan en las regiones de África, 
sureste de Asia y las Américas, con intervalo de 30.7, 24.4 y 15.3x 100 mil 
5 
 
mujeres, respectivamente, que comparativamente con otras áreas geográficas de 
baja frecuencia llegan a ser mayores de 1.7 a 3.4 veces (11). 
Una revisión sistemática de la prevalencia de lesiones escamosas intraepiteliales 
de bajo y alto grado y neoplasia intraepitelial cervical (NIC) I, II y III de 103 
estudios realizados en Europa, Medio Oriente, Norte América, Asia, América 
Central y del sur y África reportó tendencias por edad de lesiones escamosas 
intraepiteliales de alto grado con un pico de 30 años para América del Norte y de 
25 a 40 años en Europa, Medio Oriente, África, Asia, América Central y del Sur. 
Las lesiones escamosas intraepiteliales de bajo grado se registraron 
predominantemente en mujeres más jóvenes (20-30 años) (5). 
 
En la India, el país más poblado del mundo en 2008, se registraron 77,100 
muertes, lo cual representó el 27% del total de CaCu a nivel mundial. (6) En los 
Estados Unidos existen más de 100,000 nuevos casos al año con más de 3,700 
muertes por año atribuidas a esta enfermedad (12). 
La población femenina originaria de Latinoamérica es considerada como de alto 
riesgo para desarrollar CaCu, teniendo dos veces más probabilidad de morir por 
CaCu en comparación con mujeres no hispanas (5). Es considerado uno de los 
problemas sanitarios más grandes en América Latina y el Caribe y, a pesar de 
disponer de una tecnología eficaz en la prevención primaria y secundaria de salud, 
más de 30,000 mujeres latinoamericanas mueren por esta causa cada año y se 
detectan casi 68,000 nuevos casos (8). Los países de América Latina con tasas de 
incidencia mayores de 230 x 100 mil mujeres son Guyana (44.7), Nicaragua 
(39.9), Honduras (37.8), El Salvador (37.2), Bolivia (36.4), Paraguay (35), Perú 
(34.5), Venezuela (31.4) y Guatemala (30.5) (11). En 2008 se reportaron 68,220 
casos nuevos, fue la segunda causa de incidencia y mortalidad por cáncer ese 
año; la tasa de incidencia y de mortalidad por cada 100,000 mujeres fue de 23.5 y 
de 10.8 respectivamente (6). Solo Chile y Puerto Rico presentan tasas menores de 
15x 100 mil mujeres (14.4 y 7.5, respectivamente) (11). 
Para Colombia en el año 2002 se diagnosticaron 6,800 nuevos casos de cáncer 
de cuello uterino y se registraron 2,045 muertes por esta causa, siendo la primera 
causa de muerte por cáncer y la principal causa de muerte relacionada con la 
salud sexual y reproductiva (15). Las tasas de mortalidad más elevadas por arriba 
de 20 x 100 mil mujeres se observaron en Jamaica, Guyana y Nicaragua, mientras 
que las más bajas, menores a 7 defunciones x 100 mil mujeres se reportaron en 
Uruguay, Chile y Puerto Rico (6.8, 6.6 y 2.8 respectivamente) (11). En el Perú, 
sigue siendo la principal causa de muerte por cáncer y se estima que cada año se 
presentan alrededor de 5000 nuevos casos que equivale a una incidencia 
acumulada de 40.4 x 100,000 mujeres, lo que representa 44,924 años de vida 
6 
 
perdidos ajustados por discapacidad (16). En Ecuador, las mujeres tienen un 2% de 
probabilidades de padecer cáncer hasta los 39 años, un 9% a la edad de 59 años 
y hasta un 23% al llegar a los 79 años. La incidencia calculada para el 2008 según 
el registro nacional de Tumores de SOLCA reporta una tasa cruda de 36.5% con 
una mortalidad del 6% anual (17). 
En México, de acuerdo con la OMS (2008), la frecuencia de casos nuevos de 
CaCu fue de 10,186 lo cual representa una tasa estandarizada a nivel mundial de 
19.2 x 100 mil mujeres, esto implica un riesgo acumulado de 1.94 x 100 mil 
mujeres (11). En la última década se han informado en México más de 4950 
defunciones por año, con una tasa de 19.9 por 100 mil mujeres, lo que muestra un 
marcado incremento. Esta neoplasia constituye 21.4% del total de las neoplasias 
malignas y 85% de las ginecológicas, particularmente en el grupo de 25 a 64 años 
de edad (18). En 2011, el Ca Cu fue el segundo tumor maligno por el cual 
fallecieron mujeres en México (10.4%). Al analizarlo por grupos de edad, pasó de 
10 muertes por cada 100,000 mujeres de 40 a 49 años, a 30 de cada 100,000 con 
65 a 74 años, hasta llegar a 55 en las mujeres mayores de 80 años (5). 
Durante el periodo de 1976 al 2006, en México, se presentaron 102,544 muertes 
por CaCu (5), siendo los estados del sur (Veracruz, Colima, Querétaro, Guerrero, 
Campeche, Puebla, Oaxaca, Chiapas, Tabasco, Yucatán y Quintana Roo), en los 
que se presentan un mayor número de caso de cáncer cervicouterino (10). Del 
periodo del 2000-2008, los estados que en general presentaron las tasas de 
mortalidad más altas fueron Chiapas, Colima y Yucatán. El estado con la tasa de 
mortalidad más baja fue Nuevo León; los estados que presentaron la mayor 
disminución de la tasa estandarizada de mortalidad por CaCu por 100,000 en el 
periodo 2000-2008 fueron Tabasco, Yucatán y Morelos. Los que presentaron 
menor disminución en la tasa estandarizada fueron Nuevo León, Sonora y la 
Cuidad de México (6). 
En México se proporciona atención médica aproximadamente a 9,000 mujeres con 
CaCu invasor y se registran 4,000 muertes anualmente. En 2008 se reportó una 
tasa de incidencia de 19.2 y de mortalidad de 9.7/100,000 mujeres. Del año 2000-
2008 murieron en México 38,262 mujeres por CaCu; durante este lapso de tiempo 
las tasas de mortalidad por 100,000 estandarizadas con la población disminuyeronde 13.3 a 8.6 (6). 
En el año 2014, se registraron 3,063 casos nuevos de tumores malignos del cuello 
uterino con una tasa de incidencia de 6.08 por 100,000 habitantes mayores de 10 
años. En mujeres de 25 años y más, se registraron 4,056 defunciones con una 
tasa cruda de 11.9 defunciones por 100,000 mujeres y un promedio de edad a la 
defunción de 59.15 años (2). 
7 
 
De acuerdo con las estadísticas publicadas por INEGI, en relación con las causas 
de defunción general en el año 2015, en el caso de las mujeres, se reportaron un 
total de 291,637 casos, siendo el primer lugar las enfermedades del corazón, en 
segundo lugar, la Diabetes mellitus y en tercer lugar los tumores malignos, con un 
total de 40,612, encontrándose en el primer rubro el de mama, en segundo, de 
cuello uterino con un total de 4,009, y por último los de hígado y vías biliares 
intrahepáticas (3). 
 
En cuanto a la displasia cervical es del 5.46% entre la población femenina de 25 a 
59 años de edad, de acuerdo a algunas publicaciones, esta cifra es inferior a la 
reportada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que es del 7.8% (13). 
En un estudio de investigación para elaboración de tesis del año 2011, realizado 
por el Dr. Nicolás Cruz López, se determinó la incidencia de displasias de cuello 
uterino en la UMF 20 Vallejo, encontrando en el 2010 un total de 61 nuevos casos, 
encontrando el 80% entre las edades de 20 a 49 años, llamando la atención que 
alrededor del 59% de las pacientes no tenían citología previa realizada, 
correspondiendo el 73.8% a displasia leve (NIC 1), encontrando en 65.6% imagen 
del virus del papiloma humano, de acuerdo con reporte de citología cervical (19). 
 
En relación con la población derechohabiente del Instituto Mexicano del Seguro 
Social (IMSS), institución de salud que atiende a cerca de la mitad de la población 
en México, se reporta que la tendencia de la mortalidad continúa disminuyendo, 
con una tasa de 13.3 defunciones por 100 mil mujeres en el año 2000 y de 5.3 x 
100 mil en el año 2011. De acuerdo con esta información, para el año 2011 los 
tres estados que presentaron tasas iguales o mayores a 9.0 x 100 mil mujeres 
derechohabientes fueron Morelos, Tamaulipas y Quintana Roo; la media nacional 
fue de 5.4 x 100 mil mujeres, y entre los estados con valores mínimos de 
referencia mundial (<2.0 x 100 mil) estaban Baja California Sur y Durango) (11). En 
el trabajo realizado por Juan Jesús Sánchez-Barriga, para determinar la tendencia 
de mortalidad por cáncer cervicouterino a nivel nacional por entidad federativa y 
región socioeconómica en el periodo 2000-2008, mediante la información 
generada por el INEGI, se observó que la región 1 presentó la mayor fuerza de 
asociación con la mortalidad por CaCu, estando integrada ésta región por los 
estados de Guerrero, Chiapas y Oaxaca, que son entidades con el nivel 
socioeconómico más bajo del país (6). 
La disminución gradual de la tasa de mortalidad en México, que inició a principios 
de los años noventa, ha sido más rápida en los últimos seis años, como resultado 
de la confluencia de diversos factores, tales como el incremento en cobertura, 
creación de servicios de colposcopía y centros oncológicos, la mejoría de la 
8 
 
infraestructura, equipamiento y formación de recursos humanos. Otros aspectos 
fundamentales son la mejoría en la calidad de vida de la población, mayor 
conciencia de la mujer sobre la importancia de la prevención, y el apoyo político y 
financiero que ha permitido incrementar la cobertura de detección y el tratamiento 
oportuno de las lesiones precursoras y del CaCu. No obstante, aunque se ha 
habido avances en el programa, no son suficientes para una patología 
considerada altamente prevenible (5). 
 
Las neoplasias preinvasivas y la invasión temprana pueden ser asintomáticas, por 
ello es necesario el tamizaje con evaluación citológica de endocérvix y exocérvix. 
Algunos síntomas que se pueden presentar son la molestia postcoital, sangrado 
intermenstrual o postmenopáusico, descarga vaginal con mal olor, dispareunia, 
dolor pélvico que puede ser ocasionado por contracciones uterinas causadas por 
la acumulación de sangre menstrual en pacientes con oclusión del canal 
endocervical. EL sangrado crónico leve puede ocasionar anemia en algunas 
pacientes. Un sangrado mayor es raro, pero se puede presentar en estadios 
avanzados. Se puede presentar dolor pélvico y edema de extremidades inferiores 
por oclusión de linfáticos o trombosis venosa de la vena iliaca externa, en casos 
avanzados, así como problemas con la micción y defecación. Se pueden presentar 
síntomas relacionados con metástasis a distancia y constitucionales en 
enfermedad muy avanzada (12). 
El diagnóstico presuntivo de cáncer cervicouterino se puede establecer por 
examen clínico, citología del cérvix o colposcopia. El diagnóstico definitivo se 
establece únicamente con el examen histopatológico por medio de biopsia dirigida 
o pieza quirúrgica (12). 
 
Las pruebas biomoleculares como captura de híbridos, y RPC (reacción de la 
polimerasa en cadena), pueden ser utilizadas como complemento de la citología 
(12). 
 
Estudios recientes sobre la precisión del examen preventivo de cáncer de cuello 
de útero en los países en desarrollo estiman que su sensibilidad varíe de 44% a 
78% y su especificidad, de 91% a 99% (20). 
 
El cáncer es una enfermedad multideterminada, derivada de la concurrencia de 
factores de carácter biológico, psicológico y sociocultural, los cuales se comportan 
de manera específica en cada individuo resultando en algún tipo particular de 
cáncer. Esos elementos auspiciadores de la enfermedad, se reconocen como 
factores de riesgo y pueden definirse como condiciones que aumentan la 
probabilidad de estados mórbidos (4). 
9 
 
 
Varios autores han estudiado los factores que pueden ser responsables del 
carcinoma cervical considerando que están en gran parte relacionados con: 
 
1. Edad 
 
La edad promedio de las mujeres que por primera vez reciben un diagnóstico de 
cáncer cervicouterino es entre 50 y 55 años. El riesgo de desarrollar este cáncer 
es muy bajo entre las mujeres menores de quince años y aumenta entre la 
adolescencia hasta mediados de los treinta. Al contrario de muchos otros tipos de 
cáncer que afectan con poca frecuencia a los adultos jóvenes, el cáncer cervical 
puede afectar a las mujeres jóvenes de entre veinte y treinta años (4). 
Se ha observado que las mujeres menores de 35 años son más susceptibles de 
adquirir infecciones genitales con virus oncogénicos, mismas que desaparecen en 
la mayoría de los casos; al contrario, en las mujeres mayores de 35 años 
comúnmente la lesión persiste, con cambios clínicos y morfológicos, además de 
presentar un mayor riesgo de progresión (5). 
 
Muchos estudios han reportado que la mayor prevalencia de VPH se observa en 
mujeres menores de 25 años, disminuyendo progresiva y linealmente hasta 
alcanzar 5% o menos después de los 55 años; esto pudiera explicarse por 
cambios en las prácticas sexuales con la edad, determinando una menor 
exposición de las mujeres al virus, o también por inmunidad adquirida en el tiempo 
a la infección por VPH (15). 
En otros estudios se describe un segundo pico en la prevalencia del VPH a partir 
de los 55 años de edad, explicando que cambios hormonales ocurridos después 
de la menopausia (principalmente la reducción significativa de la producción de la 
hormona esteroide), el debilitamiento del sistema inmune y los cambios 
fisiológicos del cérvix (atrofias del epitelio) pudieran incrementar la susceptibilidad 
a la infección por el virus o activar infecciones latentes (21). 
 
2. La actividad sexual. 
 
El plasma seminal desempeña un importante papel fisiológico inmunosupresor que 
es determinante para la fertilización. El tracto cervicouterino normalmente produce 
leucocitosis en respuesta a los espermatozoides, pero el plasma seminal los 
protege de la destrucción poscoital por parte delas células del sistema 
inmunológico. Sin embargo, con la presencia de carcinógenos este efecto puede 
constituir un cofactor que acelera o contribuye al desarrollo de neoplasias. Es por 
ello que se considera importante en la génesis del cáncer de cuello (22). 
 
10 
 
El riesgo en el inicio temprano de las relaciones sexuales (considerada antes de 
los 20 años de edad), se debe a que en la adolescente se produce una metaplasia 
activa, o lo que es igual, una transformación celular del epitelio columnar en 
metaplásico y de este en escamoide, incrementándose el potencial de interacción 
entre el carcinógeno (semen y traumas del coito) y el cuello uterino (4). Esto resulta 
muy importante ya que de acuerdo con la ENSANUT 2012 se encontró una mayor 
proporción de adolescentes de 12 a 19 años de edad que han iniciado vida sexual, 
dado que la cifra actual alcanza 23%, cuando en 2006 se reportó 15% (23). 
Se considera que mientras más temprano se inicie la actividad sexual, mayores 
son las posibilidades de padecer el cáncer cervicouterino debido a la mayor 
incidencia de cervicitis, de enfermedades ginecológicas inflamatorias asociadas y 
a la infección por virus del papiloma humano (4). El inicio de vida sexual antes de 
los 18 años se asoció con un exceso de riesgo que es entre 1.5 y 5 veces mayor y 
no mostró una relación lineal (11). 
 
3. Las infecciones de transmisión sexual. 
 
El cambio frecuente de compañero con la actividad sexual desprotegida de alguno 
de los miembros de la pareja; las cuales parecen jugar un papel importante en la 
transformación neoplásica; la cervicitis, que igualmente tiene que ver con el patrón 
de actividad sexual, con frecuente lesión de la mucosa cervical (22). 
 
En este punto resalta Chlamydia trachomatis (tipos I, D y G), debido a la 
inflamación crónica y la producción de mutágenos que ocasiona, incluso se le ha 
llegado a considerar como factor independiente del VPH en la carcinogénesis 
cervical. La evidencia de asociación causal de otros agentes virales como herpes 
simple tipo 2, citomegalovirus y Epstein-barr con el cáncer cervical ha sido débil, y 
se ha reportado la necesidad de realización de más estudios al respecto. Un grupo 
de investigadores en Costa Rica encontró que infecciones con Neisseria 
gonorrhoeae estaban asociadas a un mayor riesgo de cáncer cervical; esta 
bacteria generalmente se aloja en el epitelio columnar de la uretra y endocérvix 
causando cervicitis y enfermedad inflamatoria pélvica aguda (21). 
 
4. El papilomavirus humano (PVH). 
 
La infección por el virus del papiloma humano es reconocida por la OMS en el año 
1992 como la causa más importante del cáncer cervicouterino. Los factores que 
influyen en la persistencia de este virus son cofactores virales, genéticos y 
relacionados con la conducta de la mujer o medioambientales (4). 
11 
 
 
Actualmente se conocen más de 70 tipos de virus del papiloma humano (9) y 
aproximadamente 15 se sabe que son oncogénicos (24). Ocho tipos de virus del 
papiloma humano son responsables del 90% de los cánceres cervicales: 16, 18, 
45, 31, 33, 52, 58 y 35. Los tipos de virus del papiloma humano 16 y 18 son más 
comunes (4). 
 
Se estima que 70% de las personas con actividad sexual normal, la contraen a lo 
largo de la vida; en el caso de la mujer, si tiene relaciones fortuitas o inestables, 
mayor será el riesgo de contagiarse. Afortunadamente, la mayoría de estas 
infecciones son asintomáticas y sanan solas, solo una pequeña proporción se 
manifiesta clínica o microscópicamente como las lesiones de bajo grado, que 
usualmente se curan por sí solas, o las precancerosas de alto grado, que tienen 
mayor riesgo de progresar hacia el cáncer (8). Se acepta como el riesgo principal 
para el desarrollo de la enfermedad y factor iniciador de la acción carcinogénica. A 
pesar de su gran importancia, su presencia por sí solo no es suficiente para inducir 
la transformación maligna si no están presentes algunos de los factores 
involucrados en este proceso, pues la gran mayoría de las mujeres infectadas por 
algún tipo de HPV oncogénico nunca presenta CaCu debido a que una respuesta 
adecuada es capaz de controlar la infección por HPV y evitar la progresión a 
lesión precancerosa (5). 
 
Cabe destacar que más de la mitad de las mujeres muestran infecciones 
cervicales por HPV poco después de su debut sexual, y alrededor del 90% de 
estas infecciones se aclaran en un plazo de 3 años. La inmunidad contra el VPH 
podría ser importante para la eliminación del virus. Las respuestas inmunes 
innatas que implican macrófagos, células asesinas naturales y células T asesinas 
naturales pueden jugar un papel en la primera línea de defensa contra la infección 
por VPH. En la segunda línea de defensa, la inmunidad adaptativa a través de 
linfocitos T citotóxicos (CTL) dirigidos a las proteínas HPV16 E 0010 y E 0030 
parece eliminar las células infectadas con HPV16. Sin embargo, el VPH puede 
evadir las respuestas inmunes del huésped. En primer lugar, el VPH no mata las 
células huésped durante la replicación viral y, por tanto, no presenta antígeno viral 
ni induce inflamación. Las proteínas HPV16 E 0030 y E 0035 proteínas regulan la 
expresión de interferones tipo 1 (IFN) en las células huésped. La falta de señales 
coestimuladoras por citocinas inflamatorias incluyendo IFNs durante el 
reconocimiento de antígeno puede inducir tolerancia inmune en lugar de las 
respuestas apropiadas. Por otra parte, las proteínas HPV16 E 0025 proteína 
regulan la expresión de HLA-clase 1, y facilita la evasión de ataque de CTL. Estos 
mecanismos de evasión inmune pueden eventualmente apoyar el establecimiento 
12 
 
de la infección persistente por VPH, lo que conduce a la inducción del cáncer de 
cuello uterino (25). 
 
Esto sugiere que otros factores adicionales que actúan conjuntamente con el HPV 
influyen en el riesgo de aparición de la enfermedad (5). 
 
5. Los anticonceptivos orales. 
 
La asociación del cáncer cervicouterino con el uso prolongado de anticonceptivos 
orales sigue siendo motivo de discusión (25) (26). Ciertas pruebas estadísticas 
demuestran que el uso de anticonceptivos hormonales orales por períodos 
prolongados, puede aumentar ligeramente el riesgo de cáncer cervicouterino. En 
algunas investigaciones se ha indicado una relación entre el consumo de las 
píldoras durante 5 años o más y un aumento en el riesgo de esta neoplasia, lo 
cual se asocia a la disminución de los fosfatos en las células cervicales (8). 
Diversos estudios epidemiológicos y biomédicos, que se iniciaron hace más de 15 
años, apoyan la hipótesis de las hormonas esteroides como facilitadoras de la 
replicación y persistencia del virus del papiloma humano de alto riesgo (10). 
 
Estos estudios sostienen que para evaluar la asociación epidemiológica del uso de 
anticonceptivos orales con el cáncer cervicouterino es necesario considerar la 
proporción de mujeres usuarias, el tipo de hormona y el tiempo de uso (10). 
 
Algunos estudios descritos por Castro y colaboradores, relacionados con el uso 
prolongado de anticonceptivos combinados muestran que el tiempo sí es un factor 
promotor que incrementa el riesgo de displasia y cáncer cervicouterino. Mx 
Farlane-Anderson y colaboradores reportaron que el uso de anticonceptivos orales 
tiene una razón de monios de 1.92 (IC 95%:1.1-3-3) para displasia cervical. 
Vessey y colaboradores reportaron un riesgo relativo de 6.01 (IC 95% 2.5-17.9) 
para el uso de anticonceptivos orales por más de 96 meses. Se describen 
resultados muy similares en otros estudios con una asociación positiva entre el 
uso de anticonceptivos orales de larga duración (medroxiprogesterona de 
depósito) por más de 5 o 10 años, con incremento del riesgo de cáncer 
cervicouterino (riesgo relativo:2.2, IC 95%: 1.9-2.4) Este riesgo aumenta de forma 
significativa en las mujeres infectadas con el virus del papiloma humano (RR 2.5 
IC 95%: 1.6-3.9) (26). 
 
Por su parte, Castro Romero ycolaboradores, a través de un estudio retrospectivo 
efectuado con base en la revisión de artículos de diferentes bases de datos, se 
13 
 
obtuvo que los estudios epidemiológicos no muestran resultados convincentes 
acerca del uso de anticonceptivos como un factor de riesgo para cáncer 
cervicouterino, del que el agente causal en 99.7% de los casos es el virus del 
papiloma humano. Si bien existen evidencias biológicas en modelos in vitro y 
animales, estas no concuerdan con la evidencia epidemiológica, positiva o 
negativa, de la asociación entre el uso prolongado de anticonceptivos orales e 
infección por virus del papiloma humano, displasia y cáncer cervicouterino (26). 
 
6. El embarazo precoz. 
 
Por la inmadurez de las células del cuello. Las mujeres que tuvieron su primer 
embarazo completo a la edad de 17 años o menos son casi dos veces más 
propensas a llegar a tener cáncer de cuello uterino posteriormente en la vida que 
las que tuvieron su primer embarazo a los 25 años o más. 
 
7. La multiparidad. 
 
Aunque el embarazo y el parto constituyen un hecho fisiológico en la vida 
reproductiva de la mujer, algunos autores señalan que el cáncer cervicouterino es 
más frecuente en las mujeres con hijos que en las nulíparas, lo cual está asociado 
a que las féminas con un alto número de embarazos suelen comenzar pronto la 
vida sexual y su primer contacto (8). 
 
Se sabe que la mujer embarazada tiene cierto grado de inmunosupresión además 
del influjo hormonal necesario para el desarrollo del feto (que contiene antígenos 
extraños a la madre) hasta su nacimiento y esto puede ser un elemento 
favorecedor del desarrollo del cáncer en general, incluso en mujeres que 
presentan uno o más abortos, ya que la función inmunológica de vigilancia sobre 
las células que presentan transformación neoplásica se haya igualmente 
deprimida durante la consecuencia del embarazo y puede ocurrir pérdida del 
control sobre el crecimiento de ellas (22). 
 
Las heridas e infecciones del cuello uterino, que ocurren durante el parto, alteran 
los límites normales entre los 2 epitelios, y el número de embarazos llegados a 
término, debido a cierto grado de inmunodepresión que tiene la gestante, puede 
ser un elemento favorecedor del cáncer en general, si bien es un factor 
largamente estudiado, aunque no estrechamente relacionado (8). 
 
Se ha demostrado que la neoplasia cervical aparece con mayor frecuencia en el 
labio anterior del cérvix, zona donde el traumatismo obstétrico es más intenso, por 
lo que es posible considerar el parto vaginal como un factor de riesgo del cáncer 
14 
 
cervicouterino, este aspecto debe relacionarse con el número elevado de abortos 
donde el útero está sometido a instrumentaciones y traumatismos (4). El riesgo 
aumenta si el parto ocurre de forma distócica en el primer año después del inicio 
de la vida sexual (22). 
 
8. El tabaquismo. 
 
De acuerdo con la ENSANUT 2012 en nuestro país la edad promedio de la mujer 
al fumar por primera vez es de los 19.5 años, si bien ha existido una reducción del 
consumo de tabaco en los adultos, de un 22.3% a 19.4% (23). 
 
Es probable que los efectos del tabaquismo en las enfermedades cervicales se 
atribuyan a los potentes carcinogénos del tabaco presentes en altas 
concentraciones en el moco cervical de mujeres fumadoras (27). Se ha observado 
que la fracción del DNA en fase-S (como una medida de proliferación) estuvo 
correlacionada con la cantidad de cigarrillos fumados y el nivel sérico de 
progesterona. 
 
En otro estudio realizado en mujeres mexicanas se observó una asociación entre 
un polimorfismo del CYP1A1 con el CaCu, lo cual potenció el efecto tres veces 
más en mujeres fumadoras cuando se encontraba presente el genotipo C/C, en 
comparación con mujeres no fumadoras y sin este genotipo (11) (4). 
Varios estudios han mostrado que la calidad e la respuesta inmune es un paso 
crítico en la defensa contra la infección de VPH y la respuesta mediada por 
células, que involucra los linfocitos T, los cuales son activados cuando se detecta 
un antígeno viral. Las células de Langerhans son las responsables del 
reconocimiento del VPH, captura, internalización y procesamiento dentro del 
epitelio cervical. Con esta información expresa en los receptores de superficie, las 
células de Langerhans migran a los nodos linfáticos activándose los linfocitos T, lo 
cual no ocurre en ausencia o supresión de las células de Langerhans. 
Los componentes del tabaco como la nicotina fueron encontrados en mayores 
concentraciones en el cérvix uterino que en la sangre de fumadoras, substancias 
que pueden provocar alteraciones locales que facilitan o inician el proceso de 
carcinogénesis e infección por VPH. Anormalidades en la población de células de 
Langerhans presentes en NIC y otras lesiones epiteliales por VPH en fumadoras 
han sido relacionadas (28). 
Fumar genera un estado subsecuente de estrés oxidativo, debido a la formación 
de productos de la peroxidación de lípidos en la circulación sanguínea, tales como 
hidroperóxidos de lípidos, así como aniones radicales de superóxido (27). 
15 
 
9. El bajo nivel socioeconómico. 
 
Se admite que el carcinoma del cuello uterino es más frecuente en mujeres de 
baja condición económica. Lo que condicionaría a una deficiente higiene personal, 
inicio del coito a temprana edad, relaciones sexuales más frecuentes, múltiples 
parejas, matrimonios inestables, mayor promiscuidad, multiparidad, con ingestión 
deficiente de nutrientes o micronutrientes que llevarían a la disminución del 
sistema inmunológico sistémico o local del moco cervical (29). 
 
Una baja condición socioeconómica representa bajos ingresos, limitaciones para 
acceder a los servicios de atención de salud y escasa conciencia acerca de los 
temas de salud y de una conducta preventiva (4). 
 
10. Falta de realización de detección oportuna 
 
No haberse practicado el estudio citológico es otro de los factores de riesgo, dado 
a que su realización sistemática es esencial para el diagnóstico precoz del cáncer 
cervicouterino, más de la mitad de los casos se detectan en mujeres que no 
participan en revisiones regulares (4), pues no todas las mujeres en riesgo acuden 
a pesquisaje. En EUA la mitad de los nuevos casos de cáncer cervicouterino 
nunca ha tenido una prueba citológica, siendo también aplicable a nuestro país. 
 
La literatura demuestra que factores como la edad avanzada, el bajo nivel 
socioeconómico, pertenecer a la raza negra o parda y ser soltera, identifican a 
grupos que se asocian a la no realización del examen preventivo de cáncer de 
cuello uterino (20). 
 
En México se observan todavía múltiples barreras para solicitar servicios de 
detección, entre los que se encuentran, la escases de información acerca de la 
prevención del cáncer cervicouterino o de la prueba de Papanicolaou, mala 
relación con los proveedores de salud, oposición de parte de la pareja para 
permitir la realización del estudio citológico y la preocupación de someterse a un 
examen de pelvis (18). 
 
De acuerdo con un estudio descriptivo y transversal de 50 mujeres con algún tipo 
de alteración en una unidad médica de Cuba, durante el primer trimestre del 2008, 
a fin de determinar los factores de riesgo ginecoobstétricos en el desarrollo del 
cáncer cervicouterino, se encontró un 16% con 3 o más partos, un 40% con 
periodo intergenésico de 1-2 años, 52% habían utilizado anticonceptivos orales, 
38% iniciaron sus primeras relaciones sexuales en las edades entre 15 y 17 años, 
16 
 
en relación con los antecedentes de alguna infección, solo 8% de las pacientes 
presentó infección por VPH y 12%, por otras ITS (8). 
 
En Cuba, se realizó por el Dr. Cordero un estudio explicativo, analítico y 
retrospectivo, de casos y controles en el hospital General Docente “Leopoldito 
Martínez”, desde enero del 2011 a diciembre de 2012, encontrando el grupo de 
mujeres con citologías alteradas comprenden las edades entre los 30 y 49años 
para un 67.2% , 80.4% comienza sus relaciones sexuales durante la adolescencia, 
mostrando la asociación altamente significativa entre la edad de inicio de las 
relaciones sexuales y pertenecer al grupo de casos (p< o = 0.05) demostrándose 
la dependencia entre dichas variables. Al explorar la promiscuidad de las mujeres 
del estudio realizado, se puco constatar cómo un 52.2% de los casos del grupo de 
estudio son promiscuas (30). 
 
En México, también encontramos estudios al respecto. En un estudio de casos y 
controles anidado en una cohorte, donde se incluyeron a 1933 pacientes, 88 
diagnosticadas con alguna lesión histopatológica del cérvix, que acudieron en 
forma espontánea al programa de detección oportuna de Ca Cu en una unidad 
médica en Netzahualcóyotl, Estado de México, entre agosto de 2007 a julio de 
2008, de los factores de riesgo analizados solo demostraron diferencia estadística 
en el número de gesta mayor a dos (RR=2.33) y el inicio de vida sexual menor a 
19 años (RR=1.14), para padecer algún problema histológico del aparato genital 
(18). 
 
Así tenemos un estudio de casos y controles para determinar los factores de 
riesgo de desarrollar Ca Cu en pacientes atendidos por el Centro Estatal de 
Cancerología en la ciudad de Xalapa, Veracruz, durante el periodo 2008-2009. En 
este estudio, del total de individuos estudiados (90), 30 fueron pacientes con Ca 
Cu (Casos) y 60 sin Ca Cu (controles). La media de la edad en ambos grupos fue 
de 41.08 años; la clasificación histológica del tipo de cáncer fue de cáncer invasor 
77%, 13% adenocarcinoma endometrial, cáncer in situ 7% y el 3% cáncer 
microinvasor. Así se identificaron como factores de riesgo el inicio de vida sexual 
activa antes de los 16 años, con un OR de 3,76, el número de parejas sexuales 
iguales o mayores de dos, con un OR de 19.6 y la falta de uso de métodos 
anticonceptivos con un OR de 9.67 (10). 
 
Quintero García y colaboradores a través de un estudio observacional, descriptivo 
y retrospectivo en pacientes menores de 35 años de edad, de una unidad de 
especialidades médicas (UNEME) Oncológico, en Sinaloa, de enero 2005 a 
septiembre 2010, en el que se estudiaron a 64 pacientes con diagnóstico de Ca 
Cu, se obtuvo una media de edad de 30.7 +/- 3.8, un inicio de vida sexual activa 
17 
 
mínima de 14 y máxima de 31, con una media y desviación estándar de 16.8 +/- 
2.7 años; un 71.9% iniciaron su vida sexual activa antes de los 18 años, 67.2% 
tuvieron más de una pareja sexual, y un 37.5% presentaron infección por virus de 
papiloma humano, además de que un 10.9% son pacientes que presentan 
adicción al tabaco. Por otra parte, llama la atención que, de acuerdo con sus 
resultados, solo el 32.8% se realiza papanicolaou (24). 
 
En otro estudio retrospectivo realizado en el Centro Estatal de Oncología de 
Culiacán, el cual incluyó pacientes con diagnóstico de CACU invasor y con 
resultado de Papanicolaou con diagnóstico positivo de cáncer, López y 
colaboradores encontraron como los factores de riesgo más relevantes la 
multiparidad, el inicio de vida sexual activa entre los 14 y 18 años de edad, así 
como la falta de realización del Papanicolaou, debido quizá al grado de 
escolaridad y nivel socioeconómico bajo. Así se encontró vida sexual activa en el 
81%, con un rango de edad de 14 a 18 años, la edad del primer embarazo entre 
los 14 y 20 años en el 84% (31). 
 
Actualmente, la evidencia propone que el tamizaje debe iniciarse a los 21 años de 
edad. Sin embargo, contrastan dos hechos notables, en las pacientes 
adolescentes sexualmente activas o adultas jóvenes la tasa de infección por HPV 
es alta (más de 80%) con grados variables de displasia, pero el carcinoma es muy 
raro, se presenta en 0.1% antes de los 21 años (32). 
 
Respecto a la edad existen estudios enfocados a paciente menores de 30 años 
como uno realizado en Cuba publicado en 2010, el cual se realizó a través de un 
estudio retrospectivo y descriptivo de 342 expedientes clínicos, correspondiente a 
mujeres jóvenes de 30 años diagnosticadas con cáncer cervicouterino durante un 
periodo de 11 años, en donde se encontró que 4/5 del total de pacientes fueron 
diagnosticadas entre los 25 y 30 años, mientras que 1/5 de pacientes fue menor 
de 25 años. En este estudio se encontró que el carcinoma epidermoide fue el 
tumor más frecuente en un 80%, encontrando como factores de riesgo de mayor 
asociación la precocidad sexual y la presencia de HPV en el 27.5%. El 47% de las 
pacientes incluidas en este análisis se detectaron con tumores localmente 
avanzadas (IIa, IIb y IIIb) (33). 
 
El objetivo no es detectar cáncer, sino lesiones precursoras. En nuestro país, se 
desconocen datos estadísticos confiables y actuales de la prevalencia de infección 
por HPV en mujeres menores de 21 años, así como del porcentaje de las que 
progresan a cáncer (32). 
 
18 
 
El trabajo educativo sobre la susceptibilidad a desarrollar un cáncer cervicouterino 
es crucial. Para ello es necesario que se converse con la mujer sobre los factores 
de riesgo, y por ende desmitificar la idea de que es necesario tener antecedentes 
familiares de cáncer cervicouterino para poder desarrollarlo. El aumento en la 
percepción de riesgo, permitirá que los beneficios sean percibidos con mayor 
fuerza, y que las señales de acción, como la indicación médica de hacerse el 
examen, sean más efectivas (34). 
 
El objetivo no es detectar cáncer, sino lesiones precursoras. En nuestro país, se 
desconocen datos estadísticos confiables y actuales de la prevalencia de infección 
por HPV en mujeres menores de 21 años, así como del porcentaje de las que 
progresan a cáncer (32). 
 
El trabajo educativo sobre la susceptibilidad a desarrollar un cáncer cervicouterino 
es crucial. Para ello es necesario que se converse con la mujer sobre los factores 
de riesgo, y por ende desmitificar la idea de que es necesario tener antecedentes 
familiares de cáncer cervicouterino para poder desarrollarlo. El aumento en la 
percepción de riesgo, permitirá que los beneficios sean percibidos con mayor 
fuerza, y que las señales de acción, como la indicación médica de hacerse el 
examen, sean más efectivas (34). 
 
19 
 
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 
 
Más del 80% de los cánceres están relacionados con los estilos de vida y hábitos 
personales siendo muchos de esos factores, fáciles de prevenir y corregir. 
Dentro de los factores de riesgo para la aparición de CaCu está bien demostrado 
que el VPH es el agente etiológico necesario, pero no suficiente, citándose otros 
factores como: edad de la primera relación sexual, multiparidad, promiscuidad 
sexual, tabaquismo, las agresiones y lesiones múltiples al cérvix, edad temprana 
al primer embarazo (menor de 15 años), cervicitis crónica y antecedente de 
manipulación cervical. Por su parte, resulta muy importante la realización de la 
citología vaginal mediante la técnica de Papanicolaou para poder realizar el 
diagnóstico donde las lesiones son todavía intraepiteliales y así evitar su 
progresión al cáncer clínicamente invasor, logrando esto si prestamos más 
atención al riesgo de nuestra población femenina de padecer tal enfermedad (35). 
Desafortunadamente como médicos de primer contacto desconocemos la 
frecuencia de pacientes con cáncer cervicouterino en nuestra unidad y cuáles son 
sus principales factores de riesgo presentes. Es de gran importancia conocer el 
perfil epidemiológico de nuestra población y dentro de ello, aquellos factores de 
riesgo presentes para poder incidir en ellos de manera que se puede ver reflejadas 
nuestras acciones en la disminución de la morbi-mortalidad, en este caso, del 
Cáncer cervicouterino, sin embargo y aunque la literatura nos habla de todos estos 
factores relacionados en el desarrollo de este padecimiento, en nuestro medio no 
existe una base estadística sobre los factores de riesgo más frecuentes de tal 
forma que realicemos una búsqueda intencionada de los mismos. 
Es por ello que nos hacemosla siguiente pregunta de Investigación: 
 
PREGUNTA DE INVESTIGACIÓN 
 
¿Cuál es la frecuencia de los factores de riesgo en pacientes con diagnóstico de 
Cáncer Cervicouterino del Hospital de Gineco-Pediatría 3A del IMSS? 
20 
 
OBJETIVOS 
GENERAL: 
Determinar la frecuencia de los factores de riesgo en pacientes con diagnóstico de 
Cáncer Cervicouterino del Hospital de Gineco-Pediatría 3A del IMSS. 
 
 
ESPECÍFICOS: 
 
- Describir las variables demográficas de las pacientes en estudio (edad, 
lugar de nacimiento, lugar de residencia, escolaridad, ocupación, estado 
civil). 
 
- Interpretar la frecuencia de los factores personales no patológicos de las 
pacientes en estudio (tabaquismo anterior o actual, tiempo y patrón de 
consumo, antecedente de vacuna anti-VPH) 
 
- Interpretar la frecuencia de factores gineco-obstétricos de las pacientes de 
estudio (edad de IVSA, número de parejas sexuales, numero de embarazo, 
resolución del embarazo por parto, cesárea o aborto, edad del primer 
embarazo, uso de método de planificación familiar y tiempo, antecedentes 
de infecciones vaginales, antecedente de VPH y si se realizó tratamiento, 
edad de toma de primer Papanicolaou, periodicidad en la toma de 
Papanicolaou, tiempo transcurrido entre el último Papanicolaou y 
diagnóstico). 
 
- Clasificar el tipo de cáncer cervicouterino de las pacientes en estudio de 
acuerdo con lo reportado por histopatología. 
 
 
 
21 
 
MATERIAL Y MÉTODOS 
 
 
LUGAR 
Se llevó a cabo en el Hospital de Gineco-Pediatría No. 3-A del Instituto Mexicano 
del Seguro Social, ubicado en Avenida Instituto Politécnico Nacional s/n esq. con 
Av. Fortuna, Col. Magdalena de las Salinas, Del. Gustavo A Madero Ciudad de 
México. 
 
GRUPO DE ESTUDIO 
 
Expedientes de pacientes con diagnóstico de Cáncer cervicouterino, realizado por 
estudio anatomopatológico en el año 2016 del Hospital de Gineco-Pediatría No. 3-
A 
 
 
DISEÑO DEL ESTUDIO 
 
Se llevó a cabo a través de un estudio no experimental. 
 
- Según la intervención: Observacional 
- Según la secuencia temporal: Retrospectivo 
- De acuerdo con el tipo de fuente de recolección de 
datos: Retrolectivo 
- Según el tiempo de estudio: Transversal 
- Búsqueda causalidad: Descriptivo 
 
 
 
CRITERIOS DE SELECCIÓN 
 
Criterios de inclusión: 
a. Expedientes de mujeres a quienes se les realizó el diagnóstico de 
Cáncer cervicouterino mediante estudio anatomopatológico durante 
el año 2016. 
b. Expedientes completos en cuanto a datos requeridos para el estudio. 
 
22 
 
Criterios de exclusión: 
a. Expedientes del 2016 de pacientes con sospecha de Cáncer cervicouterino, 
aún en protocolo de estudio, en espera de reporte de estudio 
anatomopatológico confirmatorio del mismo. 
 
Criterios de eliminación: 
a. Expedientes que, al momento de acudir a su revisión, no se encuentren 
físicamente disponibles para la toma de los datos requeridos. 
b. Expedientes que, al momento de recolectar la información, se obtengan 
datos contradictorios en cuanto a los datos requeridos. 
 
TAMAÑO DE LA MUESTRA Y MUESTREO 
Todos los expedientes de pacientes con diagnóstico de Cáncer cervicouterino 
durante el periodo del 2016 que se registraron en la base de datos de Vigilancia 
epidemiológica proporcionada por el servicio de Epidemiología, del Hospital de 
Gineco-Pediatría 3-A, complementando la información a través del memorándum 
enviado a servicio de Displasias por parte del servicio de Patología para 
seguimiento de casos, que cumplieron con los criterios de inclusión, cuya revisión 
se realizó previo consentimiento de las autoridades correspondientes. 
 
VARIABLES DE ESTUDIO 
Se tomaron en cuenta tanto el Cáncer Cervicouterino como aquellos factores de 
riesgo descritos en la literatura, entendiendo como factor de riesgo, aquellas 
características o circunstancias detectables en individuos o grupos, asociadas con 
una probabilidad mayor de experimentar una enfermedad o accidente. Pueden ser 
biológicos, ambientales, socioculturales, económicos o estar relacionados con el 
estilo de vida o con los servicios de salud (36). 
 
Tipo de Cáncer cervicouterino 
a. Definición conceptual: Neoplasia maligna que se caracteriza por la pérdida 
de la estratificación del epitelio, así como una marcada atipia celular, con 
23 
 
alteraciones de la relación núcleo-citoplasma (8), que surge generalmente 
en la zona de unión escamo-columnar del epitelio cervical. 
b. Definición operacional: El diagnóstico definitivo se establece únicamente 
por examen histopatológico, tomándose el resultado del reporte de 
anatomía patológica consignado en el expediente clínico. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal politómica 
e. Unidad de medición: De acuerdo a hallazgos anatomopatológicos como 
cáncer situ, (11) o cáncer invasivo: carcinoma de células escamosas o 
adenocarcinoma (12) (37) (38). 
 
Localización del Cáncer cervicouterino 
a. Definición conceptual: Alteración celular que se origina en el epitelio del 
cérvix llamado cáncer in situ si se encuentra confinado a la superficie 
epitelial o cáncer invasor en donde las células con transformación maligna 
traspasan la membrana basal (37). 
b. Definición operacional: El diagnóstico definitivo se establece únicamente 
por examen histopatológico, registrándose el grado de invasión, asociado a 
las manifestaciones clínicas de la paciente, tomándose el resultado del 
reporte de anatomía patológica consignado en el expediente clínico. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal dicotómica 
e. Unidad de medición: Se registrará como 
1. In situ 
2. Invasor 
 
PERFIL SOCIODEMOGRÁFICO 
 
Edad 
a. Definición conceptual: Tiempo transcurrido desde el nacimiento estimado 
en años 
b. Definición operacional: Se obtuvo la edad de lo registrado en el expediente 
clínico revisado. 
c. Tipo de variable: Cuantitativa 
d. Escala de medición: de intervalo 
24 
 
e. Unidad de medición: Se midió en años cumplidos, clasificándolos por 
grupos etarios, de quinquenios de acuerdo con los datos obtenidos, siendo 
de 
1. 21 a 25 años 
2. 26 a 30 años 
3. 31 a 35 años 
4. 36 a 40 años 
5. 41 a 45 años 
6. 46 a 50 años 
7. 51 a 55 años 
8. 56 a 60 años 
9. 61 a 65 años 
10. 66 o más años 
 
Lugar de origen 
a. Definición conceptual: Lugar de nacimiento 
b. Definición operacional: Se obtuvo el lugar de origen de lo anotado en el 
expediente clínico revisado. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal 
e. Unidad de medición: Se registró como: 
1. Ciudad de México y Área Metropolitana 
2. Otro estado de la República Mexicana 
 
Lugar de residencia 
a. Definición conceptual: Lugar en el cual vive actualmente 
b. Definición operacional: Se obtuvo el lugar de residencia de lo registrado en 
el expediente clínico revisado. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de Medición: Nominal 
e. Unidad de Medición: Se registró como: 
1. Zona Rural 
2. Zona Urbana 
 
 
25 
 
Escolaridad 
a. Definición conceptual: Nivel de estudios máximos concluidos 
b. Definición operacional: Se obtuvo la escolaridad de lo anotado en el 
expediente clínico revisado. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de Medición: Ordinal 
e. Unidad de medición: Se clasificó en 
1. Primaria 
2. Secundaria 
3. Preparatoria 
4. Carrera técnica 
5. Licenciatura 
6. Posgrado o Doctorado 
7. Ninguna 
 
Ocupación 
a. Definición conceptual: Condición de un individuo que presta un servicio, 
actividad o función; dentro de una empresa o institución, para recibir a 
cambio un pago monetario 
b. Definición operacional: Se obtuvo la ocupación de lo registrado en el 
expediente clínico 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal politómica 
e. Unidad de medición: se clasificó en: 
1. Estudiante 
2. Ama de casa 
3. Empleada 
4. Jubilada o pensionada 
5. Otro 
 
Estado civil 
a. Definición conceptual: Condición de cada persona en relación con losderechos y obligaciones civiles y a la cual está sujeta la vida de cada uno 
b. Definición operacional: Se obtuvo el estado civil de lo anotado en el 
expediente clínico revisado. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
26 
 
d. Escala de medición: Nominal politómica 
e. Unidad de medición: Se clasificó en: 
1. Soltera 
2. Casada 
3. Unión libre 
4. Divorciada/separada 
5. Viuda 
 
 
ANTECEDENTES PERSONALES NO PATOLÓGICOS 
 
Tabaquismo 
a. Definición conceptual: Antecedente de consumo de cigarro de tabaco en 
alguna ocasión en su vida 
b. Definición operacional: Se obtuvo el antecedente de consumo de tabaco de 
lo anotado en el expediente clínico revisado. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal dicotómica 
e. Unidad de medición: se registró como: 
1. Si 
2. No 
 
Tiempo de consumo de tabaco 
a. Definición conceptual: Número de años de consumo de tabaco 
b. Definición operacional: el número de años de consumo de tabaco se obtuvo 
de la información registrada en el expediente clínico revisado. 
c. Tipo de variable: Cuantitativa 
d. Escala de medición: Discreta 
e. Unidad de medición: se anotó en la hoja de recolección de datos en número 
años, pudiendo ir de 1 a más. 
 
 
 
27 
 
Número de cigarrillos al día 
a. Definición conceptual: cantidad de cigarrillos que consume en promedio al 
día 
b. Definición operacional: se anotó el número de cigarrillos al día que 
consume, de lo registrado en el expediente clínico 
c. Tipo de variable: Cuantitativa 
d. Escala de medición: Discreta 
f. Unidad de medición: se anotó en la hoja de recolección de datos, con 
números que podían ir del 1 a más 
 
Tabaquismo activo 
a. Definición conceptual: El hecho de que aún consuma cigarrillos en la 
actualidad 
b. Definición operacional: se anotó si continúa fumando hasta la actualidad de 
acuerdo con lo registrado en el expediente clínico 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal dicotómica 
e. Unidad de medición: se registró como: 
1. Si 
2. No 
 
Inmunización contra VPH 
a. Definición conceptual: Antecedente de aplicación de esquema contra Virus 
de Papiloma Humano 
b. Definición operacional: se anotó si cuenta con la vacuna contra VPH de lo 
registrado en el expediente clínico 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal dicotómica 
e. Unidad de medición: se registró como: 
1. Si 
2. No. 
 
 
 
28 
 
ANTECEDENTES GINECO-OBSTÉTRICOS 
 
Antecedentes gineco-obstétricos: Conocimiento de las circunstancias gineco-
obstétricas de las mujeres en estudio. 
 
Edad de inicio de vida sexual activa 
a. Definición conceptual: Edad en que la paciente tuvo su primera relación 
sexual 
b. Definición operacional: Se obtuvo la edad de inicio de vida sexual activa de 
lo registrado en el expediente clínico de la paciente. 
c. Tipo de variable: Cuantitativa 
d. Escala de medición: de intervalo 
e. Unidad de medición: Se registró de acuerdo a los siguientes parámetros: 
1. Antes de los 15 años 
2. De 15 a 24años 
3. De 25 a más años 
 
 
Número de parejas sexuales 
 
a. Definición conceptual: número total de parejas con las que ha tenido 
relaciones sexuales 
b. Definición operacional: se obtuvo el número de parejas sexuales, de lo 
anotado en el expediente clínico de la paciente. 
c. Tipo de variable: Cuantitativa 
d. Escala de medición: De intervalo 
e. Unidad de medición: se registró como sigue: 
1. Una 
2. De 2 a 3 
3. 4 o más 
 
 
Número de embarazos 
 
a. Definición conceptual: número total de embarazos que ha tenido hasta la 
actualidad 
b. Definición operacional: se tomó el número de embarazos de lo registrado 
en el expediente clínico de la paciente. 
c. Tipo de variable: Cuantitativa 
29 
 
d. Escala de medición: De intervalo 
e. Unidad de medición: se registró de acuerdo con los siguientes parámetros: 
1. Ninguna 
2. De 1 a 2 veces 
3. De 3 a 4 veces 
4. De 5 a más 
 
 
Método de conclusión del embarazo 
 
a. Definición conceptual: Forma en que se concluyó en embarazo 
b. Definición operacional: Se tomó el antecedente de la forma de conclusión 
del embarazo de lo registrado en el expediente clínico de la paciente. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal 
e. Unidad de medición: se anotó de acuerdo a si fue: 
1. Parto 
2. Cesárea 
3. Aborto 
 
 
Edad en el primer embarazo 
 
a. Definición conceptual: Edad que tenía la paciente cuando se embarazó la 
primera ocasión 
b. Definición operacional: Se tomó la edad de la paciente en su primer 
embarazo de lo registrado en el expediente clínico revisado. 
c. Tipo de variable: Cuantitativa 
d. Escala de medición: de intervalo 
e. Unidad de medición: se registró de acuerdo a los siguientes parámetros 
1. Antes de los 15 años 
2. De 15 a 24 años 
3. De 25 a 34 años 
4. De 35 a más años 
 
 
Uso de método de planificación familiar 
 
a. Definición conceptual: Utilización de diferentes métodos para controlar el 
número y la cronología de los embarazos. 
b. Definición operacional: Se tomó el antecedente de uso de método de 
planificación familiar de lo anotado en el expediente clínico de la paciente. 
30 
 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal dicotómica 
e. Unidad de medición: Se registró de acuerdo a si ha utilizado alguno o no 
1. Si 
2. No 
 
 
Tipo de métodos de planificación familiar 
 
a. Definición conceptual: Tipo de anticonceptivo que haya utilizado la paciente 
hasta la actualidad. 
b. Definición operacional: Se tomó el tipo de método de planificación familiar 
usado por la paciente, de lo registrado en su expediente clínico. 
c. Tipo de variable: Cualitativo 
d. Escala de medición: Nominal politómica 
e. Unidad de medición: se tomaron en cuenta los siguientes 
1. Hormonal oral 
2. Hormonal inyectable 
3. Dispositivo intrauterino 
4. Condón 
5. Implante subdérmico 
6. Parche 
7. Definitivo 
 
 
Infección cervicovaginal 
 
a. Definición conceptual: Presencia de patología que clínicamente es el 
resultado de la alteración de la ecología microbiológica vaginal que 
habitualmente presenta uno o más de los siguientes síntomas y signos 
como leucorrea, mal olor, ardor, prurito o dolor. 
b. Definición operacional: Se obtuvo el antecedente de infección 
cervicovaginal de lo anotado en el expediente clínico de la paciente. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal dicotómica 
e. Unidad de medición: Si ha presentado o no en alguna ocasión, hasta el 
momento actual, un cuadro de Cervicovaginitis 
1. Si 
2. No 
 
 
 
31 
 
Tipo de infección vaginal 
 
a. Definición conceptual: Infección vaginal de acuerdo a su etiología causal. 
b. Definición operacional: en caso de existir el antecedente de infección 
vaginal, se tomó el tipo de infección de lo anotado en el expediente clínico. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal politomica 
e. Unidad de medición: De acuerdo a si se diagnosticó como causa de origen: 
1. Hongo (cándida) 
2. Bacteria 
3. Trichomona 
4. Otro tipo 
 
 
Infección por VPH 
 
a. Definición conceptual: Diagnóstico de VPH a nivel cervical confirmado 
b. Definición operacional: Se obtuvo el antecedente de infección por VPH de 
lo registrado en el expediente clínico de la paciente. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal dicotómica 
e. Unidad de medición: de acuerdo a si ha presentado o no en alguna ocasión 
hasta la actualidad infección cervical por VPH 
1. Si 
2. No 
 
 
Tipo de tratamiento en caso de VPH 
 
a. Definición conceptual: Realización de algún tipo de terapia para manejo de 
VPH. 
b. Definición operacional: Se obtuvo el tipo de tratamiento llevado a cabo en 
caso de tener, o haber tenido VPH, de acuerdo con lo anotado en el 
expediente clínico de la paciente. 
c. Tipo de variable: Cualitativa 
d. Escala de medición: Nominal 
e. Unidad de medición: se anotó en la hoja de recolección de datos el tipo de 
tratamiento realizado en la paciente,de acuerdo con lo registrado en el 
expediente clínico. 
 
 
32 
 
Inicio de toma de Papanicolaou 
a. Definición conceptual: Edad en que se realizó por primera vez el tamizaje 
para Ca CU para así determinar el tiempo transcurrido entre el inicio de vida 
sexual activa y la primera toma de Papanicolaou. 
b. Definición operacional: Se tomó la edad a la primera toma del 
Papanicolaou, de lo registrado en el expediente clínico. 
c. Tipo de variable: Cuantitativa 
d. Escala de medición: Discreta 
g. Unidad de Medición: se anotó en la hoja de recolección de datos con 
números que podían ir de menos de 21 a 65 años. 
 
Periodicidad en la toma de Papanicolaou 
a. Definición conceptual: Tiempo en que acude comúnmente a la toma de 
Papanicolaou 
b. Definición operacional: Se obtuvo la periodicidad en la toma de 
Papanicolaou de los datos registrados en el expediente clínico, incluido el 
formato de citología cervical, registrado en el expediente. 
c. Tipo de variable: Cuantitativa 
d. Escala de medición: de intervalo 
e. Unidad de medición: Se clasificó en: 
1. Cada 6 meses 
2. Cada año 
3. De 2 a 3 años 
4. Más de 3 años 
 
Intervalo de tiempo entre el último Papanicolaou y su diagnóstico definitivo 
a. Definición conceptual: Tiempo transcurrido entre la última toma de 
Papanicolaou y el diagnóstico final de paciente. 
b. Definición operacional: Se tomó de lo registrado en el expediente clínico, 
incluido el formato de citología cervical, el tiempo en días desde la toma de 
Papanicolaou sospechoso de Cáncer Cervicouterino y el diagnóstico 
anatomopatológico del mismo. 
c. Tipo de variable: Cuantitativa 
d. Escala de medición: Discreta 
e. Unidad de medición: Tiempo expresado en números que indiquen días 
anotándolo en la hoja de recolección de datos. 
33 
 
DESCRIPCIÓN GENERAL DEL ESTUDIO 
 
Se llevó a cabo el protocolo de estudio titulado “FRECUENCIA DE FACTORES 
DE RIESGO EN PACIENTES CON CÁNCER CERVICOUTERINO DEL 
HOSPITAL DE GINECO-PEDIATRÍA 3A DEL IMSS” previo registro en 
SIRELCIES, y previa autorización a las autoridades correspondientes del Hospital 
de Gineco-Pediatría No. 3-A del Instituto Mexicano del Seguro Social para revisión 
de expedientes clínicos, de pacientes con diagnóstico de Cáncer Cervicouterino 
realizado por estudio anatomopatológico en el año de 2016, realizándose la 
búsqueda de los mismos a partir de la base de datos de Vigilancia epidemiológica 
proporcionada por el servicio de Epidemiología del Hospital de Gineco-Pediatría 3-
A, y de la información a través del memorándum enviado a servicio de Displasias 
por parte del servicio de Patología para seguimiento de casos, de donde se obtuvo 
el número de seguridad social de las pacientes así como el diagnóstico confirmado 
por medio anatomopatológico de cáncer cervicouterino, y el tipo del mismo. 
 
Se procedió a la revisión de un total de 62 expedientes identificando los factores 
de riesgo que se requirieron para el presente estudio para su posterior análisis, 
registrando variables demográficas, antecedentes personales no patológicos y 
gineco-obstétricos anotando los datos obtenidos en nuestro instrumento de 
recolección de datos. 
 
Al término de la recolección de la información se agradeció personalmente a las 
autoridades correspondientes. 
 
 
ANÁLISIS ESTADÍSTICO 
Para la captura y validación de la información se utilizó una hoja de Microsotf 
Excel para la recolección de la información, creando una base de datos en 
Microsoft Acces para el análisis de los resultados, los cuales se expresaron en 
frecuencias absolutas y porcentajes, utilizando estadística descriptiva. Se utilizó el 
paquete estadístico SPSS versión 22 para el análisis de datos y tablas de salida. 
 
34 
 
RESULTADOS 
Se revisaron 62 expedientes de pacientes con diagnóstico de cáncer 
cervicouterino durante el 2016, obteniendo un promedio de edad de 47.15±12.77 
años, con una mínima de 21 y máxima de 81, grupo de edad de 46-50 años con 
19.4%(12) y el de 36-40 años con 17.7% (11); escolaridad secundaria con un 
37.1% (23), primaria con un 22.6% (14); ocupación empleada con 53.2% (33), 
ama de casa con 45.2% (28); estado civil casada con un 38.7% (24) y soltera con 
un 24.2% (15); originarias en el 88.7% (55) de la Ciudad de México y Zona 
Metropolitana; residentes en el 100% de medio urbano. 
 
TABLA 1. DATOS GENERALES DE LAS PACIENTES CON CACU 
DATOS GENERALES N=62 % 
EDAD 
21-25 años 
26-30 años 
31-35 años 
36-40 años 
41-45 años 
46-50 años 
51-55 años 
56-60 años 
61-65 años 
66 a más años 
 
1 
3 
6 
11 
7 
12 
7 
5 
6 
4 
 
1.6 
4.8 
9.7 
17.7 
11.3 
19.4 
11.3 
8.1 
9.7 
6.5 
ESCOLARIDAD 
Primaria 
Secundaria 
Preparatoria 
Carrera Técnica 
Licenciatura 
Ninguna 
 
14 
23 
11 
3 
3 
8 
 
22.6 
37.1 
17.7 
4.8 
4.8 
12.9 
OCUPACION 
Ama de casa 
Empleada 
Jubilada o pensionada 
 
28 
33 
1 
 
45.2 
53.2 
1.6 
ESTADO CIVIL 
Soltera 
Casada 
Unión libre 
Divorciada o separada 
Viuda 
 
15 
24 
12 
3 
8 
 
24.2 
38.7 
19.4 
4.8 
12.9 
LUGAR DE NACIMIENTO 
Cd. De México y Área 
Metropolitana 
Interior de la República 
 
55 
 
7 
 
88.7 
 
11.3 
LUGAR DE RESIDENCIA 
Cd. De México y Área 
Metropolitana (urbano) 
 
62 
 
100 
35 
 
El antecedente del tabaquismo estuvo presente en un 22.6% (14), con un 
promedio en años de 4.18 ±9.755, con un máximo de 38 años; consumo de 
cigarrillos al día promedio de 1.13 ±3.086, máximo de 15 cigarrillos al día; el 
12.9% (8), con tabaquismo activo actual; en el 100% no se especificó el 
antecedente de vacuna contra VPH, aunque en todos los casos se reportaba 
inmunizaciones completas. 
 
TABLA 2. ANTECEDENTES PERSONALES NO PATOLÓGICOS 
APP N=62 % 
TABAQUISMO 
Si 
No 
 
14 
48 
 
22.6 
77.4 
TIEMPO DE CONSUMO 
0 
1 
2 
6 
10 
18 
21 
25 
28 
33 
38 
 
48 
2 
1 
1 
1 
2 
1 
2 
1 
2 
1 
 
77.4 
3.2 
1.6 
1.6 
1.6 
3.2 
1.6 
3.2 
1.6 
3.2 
1.6 
No. CIGARRILLOS AL DÍA 
0 
1 
2 
3 
4 
5 
6 
10 
15 
 
 
48 
3 
3 
2 
1 
1 
1 
1 
2 
 
77.4 
4.8 
4.8 
3.2 
1.6 
1.6 
1.6 
1.6 
3.2 
TABAQUISMO ACTIVO 
ACTUAL 
Si 
No 
 
 
8 
54 
 
 
12.9 
87.1 
INMUNIZACIÓN CONTRA 
VPH 
No especificado 
 
41 
 
100 
 
 
 
36 
 
Del inicio de vida sexual activa el promedio fue de 18.02 ± 3.221, con una mediana 
y moda de 17, mínimo de 13 y máximo de 29 años, con un 87.1% (54) de 15 a 24 
años de edad; número de parejas sexuales de 2 a 3 en 54.8% (34) y de 4 a más 
14.5% (9), la edad en el primer embarazo con mediana y promedio de 19 
años±5.56, moda de 17 años con un máximo de 38 años, con 80.6% (50) en el 
grupo de 15 a 24 años de edad; del número de embarazos, una mediana y media 
de 3±2.5, con un máximo de 15 gestas, entre 3 a 4 gestas con 46.8% (29); de un 
total de 214 embarazos, el 70% (149) fueron partos vía vaginal; el 71% (44) usó 
algún método de planificación familiar, siendo el definitivo en un 41.9% (26), 
hormonales 11.3 % (7); tiempo de uso de algún método de planificación familiar se 
obtuvo promedio de 3.7 ±7.1, con un máximo de 30 años, siendo no especificado 
en el 35.5% (22). 
 
TABLA 3A. ANTECEDENTES GINECO-OBSTÉTRICOS 
AGO N=62 % 
INICIO DE VIDA SEXUAL 
ACTIVA 
Antes de los 15 años 
De 15 a 24 años 
De 25 a más años 
 
 
5 
54 
3 
 
 
8.1 
87.1 
4.8 
No. PAREJAS SEXUALES 
Una 
De 2 a 3 
De 4 a más 
 
19 
34 
9 
 
30.6 
54.8 
14.5 
EDAD EN EL 1ER 
EMBARAZO 
Nuligesta 
Antes de los 15 años 
De 15 a 24 años 
De 25 a 34 años 
De 35 a más años 
 
 
2 
1 
50 
8 
1 
 
 
3.2 
1.6 
80.6 
12.9 
1.6 
No. EMBARAZOS 
Ninguno 
De 1 a 2 veces 
De 3 a 4 veces 
De 5 a más veces 
 
2 
21 
29 
10 
 
3.2 
33.9 
46.8 
16.1 
PARTOS 
0 
1 
2 
3 
4 
5 
10 
12 
 
12 
12 
14 
11 
8 
2 
1 
2 
 
19.4 
19.4 
22.6 
17.7 
12.9 
3.2 
1.6 
3.2 
 
37 
 
 
TABLA 3B. ANTECEDENTES GINECO-OBSTÉTRICOS 
AGO N=62 % 
CESÁREAS 
 
0 
1 
2 
3 
 
 
 
37 
13 
10 
2 
 
 
59.7 
21.0 
16.1 
3.2 
ABORTOS 
 
0 
1 
2 
3 
 
 
 
44 
13 
3 
2 
 
 
71.0 
21.0 
4.8 
3.2 
MÉTODO DE 
PLANIFICACIÓN FAMILIAR 
 
Si 
No 
 
 
 
 
44 
18

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