Logo Studenta

Descripcion-retorica-de-tres-exempla-del-Barlaam-y-Josafat

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA
DE MEXICO
FACULTAD DE FILOSOFfA y LETRAS
DESCRIPCIQN RETORICA (DE TRES EXEMPLA
DEL BARLAAM Y UQ~~ ;'
~ó ,.¡ ~~
~eLetras v >
T E s I s
QUE PARA OBTENER EL · TiTULO DE
LICENCIADO EN LENGUA Y
LITERATURAS HISPANICAS
P R E S E N T A
EVERARDO ESPINOSA PAZ
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
Restricciones de uso 
 
DERECHOS RESERVADOS © 
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL 
 
Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal 
del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). 
El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea 
objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para 
fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo 
mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
' ,)$
-
F¡¡:f
1... 0-
E;e ..-", .-J~ - ¿:;r,¡O}«- ~ r"i.?_.'
~/ / 06' / 05
.... . -~..~ ...~
Agradezco a mi madre,
mi s hermanos y Sonia
su apoyo y paciencia
a lo largo de la carrera
y en la elaboración
de este trabajo.
A todos mis maestros
que me c on t a g iaron
su gusto por el estudio,
la i nvestigación y
la cultura.
INTRODUCCIÓN
hago una
permitemeque
J o s afat"Barlaam y
bibliográfica
El análi sis de c ualquier texto literario conlleva diversas
d i f i cul t a des , ya qu e la literatura penetra en l a subjetividad
del lec t or y é s te, por di stintos factore s, puede guiar su
interpretación por caminos desconocidos. Si aplicamos esto a
un a obra de la Edad Media como el Barlaam y Josafat, de la
cual estamos ale jados de su contexto, del manejo de su
lenguaje (español antiguo) y, además, de sus intenciones
comuni c a t i va s , nuestra interpretación como lectores del siglo
XXI es más complicada y tiene más posibilidades de acierto o
desviación , quedarnos con una lectura superficial o realizar
una sobreinterpretación debido a la cantidad de posibles
espacios indeterminados es el riesgo que se corre al estar
tan alejado el texto de nuestra época.
La dificultad para conseguir estudios actualizados sobre
el Barlaam, en los que se planteen nuevos rumbos para la
investigación y no ya los temas comunes de los críticos,
aunque importantes, como: el origen del Barlaam; sus
relaciones con la v ida de Suda; su historia como hagiografía;
el desarrollo de sus ediciones; la hipótesis sobre su posible
traductor al griego; etcétera, limita la bibliografía y no se
encuentran ensayos que penetren en la temática del Barlaam y
Josafat y de sus ejemplos, esto complica el arranque de e s t a
tesis, pero también la vuelve un interesante acertijo. A
c ont i nua c i ón señalo el contenido, la metodología y l o que
quiero probar .
El trabajo s e divide en tres capítulos que me
fa c i l i t a r á n llegar a la des cripción retórica de tres ejemplos
del Barlaam y Jo sa f a t.
En e l capítulo I : ft El
inves t i gación h i s t ó r i c a y
E. Espinosa 1II Introducción
ejemplos. En el pu nto I I I. 3. esquematizo y explico la
dispositio de los tres ej emplos. En e l punto II1.4 destaco
las figuras retóricas que se ut i l i za n en la elocutio. Por
últ imo, en el punto II I .s p l anteo una i n t e r p r eta c i ón de los
tres ejemplos de acuerdo a una preceptiva de memoria y
pronuntiatio. En este c apí t u lo s e desarrolla íntegramente la
descripción de tre s ejemplos de l Barlaam y Josafat, señalo
primeramente el contexto histórico de España en e l siglo XI I I
y lo compagino con la i n t e l l ec t io de los ejemplos;
posteriormente profund i zo en diversos niveles y sentidos de
interpretación de la inv enti o para desent rañar las causas que
confo r ma n cada e xemplum y observo el desarrollo de su
amplifica tia en la i n v e n t i o . Después identifico en cada texto
s u dispositio y e s quema t izo cada una de sus partes: el
e xord ium, la n arr atio , l a a rgumen tati o y l a con c l u s i o .
Posteriormente ejempli fi co la e l o c u t i o que se utiliza en cada
exemp l um y las pr i ncipales f iguras que ut iliza . Por último
real izo una breve descripción de las pautas que quizá
siguieron para la memoria y sobre todo la pronuntia tia de
estos ejemplos para alcanzar su objetivo persuasivo.
Con cada una de estas partes del capítulo III se
visualiza la descripción retórica de los tres ejemplos del
Barlaam y Josafat y pos iblemente ayude a una mejor
comprensión del mensaje de cada e xemplum, que conforma el
mensaje global del Barlaam y Josa fa t .
Después de la conclusión adiciono un anexo con las
definiciones de las figu r as r etó r i c as que uso en la elocutio
y que torné de la Rhetoi r i ca ad herennium, citadas por J.
Murphy, ya que cons i deré q ue estos modelos no son de t a n
fá c il acceso corno otros y sería má s prá cti co tener est a s
f i guras e n un a nexo para pode rl a s con s u l t a r ; finalmente
te rmino este t rabajo con la bibliografía.
E. Espinosa IV Introducción
Al determinar l a metodología a uti l izar para profundizar
en el estudio del Barlaam, comprendí l o que explica López
Eire!, c uando al enumera r las teorías li t e r a ri a s modernas
destaca que su base metodológica tiene como raíz la
precept iva retórica, ya que ést a , c ompue s t a por diferentes
elementos, brinda un armazón completo para elaborar
diferentes discursos y t ext os l iterarios, estos elementos
permiten identificar como f ue realizado el texto y qué fines
perseguía. A lo largo de l a carrera escuc he varias veces que
"todo texto es subversivo", ahora puedo agregar con la
defini ción de retórica que todo texto busca persuadir y, s i
profundiza en el uso de la razón llega al convencimiento.
Al introducirme en el estudio de la retórica y las
partes que la conforman, pude darme cuenta del desprestigio
i nme r ecido que tiene y del cual se t emía desde la época
c l ás i c a'", de manera popular se compara la retórica con la
palabrería, con e l discurso vacío, idea falsa, ya que la
preceptiva retórica penetra en diferentes niveles de la
construcción e interpretación de un texto literario . Al
conjuntar el Barlaam y Josafat, que me pareció muy
interesante desde la primera lectura, ya que conjuga la
historia de Buda y su adaptación al cristianismo en una
narración amena, extensa e i nt e n s a , con la preceptiva
retórica que estaba descubriendo, quise utilizar esta última
en un análisis del Barlaam, el cual no requiriera de otra
teoría literaria para poder profundizar en su interpretación,
s i no que fuera suficiente con l a s partes de la r e t ór i c a para
observar su entramado.
1 Cfr . López Eire , Retórica clásica y teor ía literaria moderna .
2 Aristóteles y Cicerón i ndican , en s us di vers o s tratados , q ue debe u sarse
c on mucho cuidado y par a causas hones t a s que pe r sigan la verdad .
E. Espinosa v Introducción
En diferentes ensayos y conferencias, aplicaban alguna
de las partes de la preceptiva retórica a un exemplum y al
tomar en cuenta que el Barlaam tiene diez apólogos, quise
intentar su descripción retórica global, es decir, rastrear
todo el entramado de la construcción de los ejemplos; como
esto era una labor muy ardua y requería más tiempo, delimité
mi propósito a sólo tres ejemplos: el "ruiseñor", el
"unicornio" y la "cabra salvaje". Esta selección la realice
con la búsqueda de algunos elementos claros, a simple vista,
de la preceptiva retórica, sin importar que entre los textos
no existiera un hilo temático que los enlazara, aunque sí un
elemento común: la presencia de animales, ya que son un
componente fundamental en la visión de la Edad Media y a
través de sus diferentes representaciones y simbolismos
podían encerrar un discurso retórico más elaborado.
El objetivo de esta tesis es llegar, con el apoyo de los
capítulos I y II, a la descripción retórica detres ejemplos
(capítulo III), es decir, esquematizar sus partes y saber si
cumplen con una preceptiva retórica, observar como están
integrados y como se entrecruzan cada una de sus partes:
intellectio, inventio, dispositio, elocutio, memoria y actio.
y atisbar como poseen unidad retórica los ejemplos y, por lo
mismo, pueden existir por separado de la novela marco que es
el Barlaam y Josafat.
Las fuentes básicas que tomo para la preceptiva retórica
son la Institutio oratoria de Quintiliano, la Retórica de
Tomás Albaladejo, el Manual de retórica li teraria de
Lausberg, entre otros que aparecen en la bibliografía. Debo
señalar que en las partes de preceptiva retórica agregue una
(la intellectio) que no se consigna en los manuales clásicos
y medievales de la retórica, pero que Albaladejo propone y
que me pareció interesante para la descripción que pretendo.
E. Espinosa VI Introducción
Del Ba rl aam y Josafat manejé dos ediciones una de John E.
Keller, que contiene las trans cripciones de los manuscristos
P, G Y S , Y la de Pedro Bádenas de la Peña que tiene el texto
actualizado, aunque e l anál is i s de los ej emplos está basado
e n el manuscrito P por s e r el más completo y estar en español
antiguo .
Capítulo l. El Barlaam y Josarat:.
1.1. Barlaam y Josarat:.: Oriqen
Esta historia tuvo una ruta bastante compleja desde Asia
hasta la Europa occidental, lo que ha dado, desde entonces,
mucho trabajo a los pocos investigadores que han seguido su
rastro, corno es el caso OIga Impey, John Keller, Pedro
Bádenas, Rafael Aguirre, Graciela Rossaroli, Alicia Ramadori
y Antonio Lingue, principalmente, quienes han estudiado el
origen y desarrollo del Barlaam y Josafat, pero no han
penetrado plenamente en su temática y su estructura.
En el Occidente europeo tuvo una gran circulación, se le
consideró· corno un relato hagiográfico y sus protagonistas se
conmemoran, todavía hoy, en la Iglesia ortodoxa. La unión de
los eslabones es un asunto compl icado, aunque Bádenas acepta
que antes de tornar una forma cristiana, el texto indio tuvo
una versión maniquea escrita en turco y fue traducido al
árabe en Bagdad. El momento primordial para la transformación
de la leyenda correspondió, entre los siglos VIII y IX, a las
versiones georgiana y griega, de las que pasaría al latín
(siglo XI), abriéndose, así, las puertas del Occidente
europeo. Después, la inserción en el siglo XIII en dos obras
de amplísima popularidad, el Speculum historiale de Vicente
de Beauvais y la Leyenda dorada de Jacobo de la Vorágine, le
aseguraron su difusión. La obra de Beauvais parece ser el
antecedente directo, al menos para uno de los manuscritos (el
S), de la traducción castellana l .
Barlaam y Josafat pertenece a una tradición cuentística
oriental en la que se incluyen la Disciplina clericalis, el
Calila e Dimna y el Sendebar, con los cuales comparte un
I Cfr. María J esús Lacarra, Cuen t o s de la Edad Media, p. 2 4 .
E. Espinosa 2 Descripción retórica.. .
entramado cristiano encerrado en los c uentos orientales qu e
se popularizaron, adaptaron y renovaron en Europa2 .
En Barlaam y Josafat s e maneja una línea narrativa basada
en la vida del príncipe Siddhartha Gautama, Suda, historia
que remonta su leyenda hasta el siglo VI a. de J.C. Claro qu e
esta historia se a da p t a y cristianiza y, por supuesto,
difiere e n a lgunos aspec tos de l a f ue nt e original para
a punt a l a r la do c t rina c ris tiana que quiere mostrar. Lo s
nombres de los personajes se han modificado de los originales
orientales y ha quedado en lugar de Suddhodana, el rey
paterno Anemur o Abenne r o Avenir, y el Sodhisatva que antes
de llegar al cas t ellano como Josafat pasa por diferente s
variantes intermedia s 3 •
A continuación presento l a historia que resumen Impey y
Ke l l e r en s u introducción y que no s permiti r á aprecia r
algunas semejanzas y variantes de la historia:
Al nacer el príncipe el horóscopo predice, igual que en
la historia búdica, que iba a ser el más poderoso rey;
sin embargo, la leyenda cristiana introduce un detalle
significativo: uno de los astrólogos, penetrando el
sentido profundo del horóscopo, precisa que el reinado
en que gobernaría no es de este mundo sino del
porvenir, anunciado ya por los cristianos perseguidos
por el rey Avenir . Tal elemento, que probablemente no
existía en la versión original, ya que en la India la
persecución religi osa no era común, se introdujo en la
versión de los cristianos y de los maniqueos persas o
islámicos para lograr efectos dramáticos (para todos
estos la persecución religiosa era una realidad). La
leyenda cristiana también sigue el original índico en
cuanto a la vida retraída que el rey Avenir dispone
para su hijo: vive el príncipe en un palacio lleno de
hermosas jóvenes, bien vigilado por cr iados yayos para
qu e no ve a nada t r i s te n i c r i st i ano a lguno. Asimismo,
los encuentros tan temidos por el rey se trasmiten en
la vers ión cris tian i za da , pero se reducen de cua tro a
2 Ibid. pp. 10-2 5 .
3 Cf r . O. T. Impe y y J . E . Ke11er ed . , Barlaam e J osafat , ~ . XIII.
E. Espinosa 3 Descripciónretórica.. .
tres, se omiten algunos de los detalles y se altera el
orden de la historia de Buda. La mayor diferencia entre
el original y la versión cristiana la constituye la
introducción, en lugar del ayo que explica al príncipe
la significación de los cuatro encuentros, de un sabio
que le revela la persecución de los cristianos en el
reinado de su padre. De este modo Josafat se entera de
que su religión no es la única y que por eso hay
tristes perseguidos. El mismo sabio aclara el
significado del horóscopo hecho al nacer el príncipe y
le revela los dolores y pesadumbres que encierra el
mundo",
La adaptación cristiana posee gran dramatismo, incluso
superior a la historia original, la creación del personaje de
Barlaam es un acierto literario, ya que permite la
elaboración del discurso cristiano que se quiere exponer, él
"revela la fe de Jesucristo y provoca la conversión de
Josafat e, indirectamente, la de todo el pueblo"5. Barlaam es
el maestro guía, tiene "carácter firme, encarnado defensor de
la fe cristiana, Barlaam es prototipo de los ascetas y
anacoretas tan amados y seguidos en el Asia y Europa de la
Edad Media"6.
El modelo de monje que representa Barlaam, es muy
parecido al eremita del desierto palestinense o egipcio, ya
que conserva rasgos cercanos a los del monje budista, como
son los imperativos morales que le hacen abstenerse de
destruir la vida, de robar, de mentir, de tener trato sexual,
de toda comodidad, etc.? La práctica ascética de Barlaam está
muy alejada de lo que era la vida en los monacatos
medievales, pero sería interesante lanzar una línea de
investigación hacia las comunidades cátaras y rastrear si
• Idem .
Ibidem p. xv.
Idem.
Cfr . Pedro Bádenas de la Peña ed. y notas, Barlaam y Josafat, pp. XV-
XVI.
E. Espinosa 8 Descripción retórica ...
con Sabas, es decir, un esquema como: "libro, traido y
mandado copiar por Juan (Tornicio), para Juan (Varazvakhe) en
el monasterio donde Jua n era Abad,,12 lo cual constituye un
t e rreno p ropic io para la contamina c i ón y , obv iamente, para e l
rastreo de l verdadero t r a d u c t or . Este lapso de tres si g los
en que no se atestigua ningún ejemplar inclina a considerar
a certada la teoria de Peeters-Lang, la cual considera c omo
traductor d e la leyend a a San Eutimio13.
Alexander Kazhdan (1 988) ha vuelto a examinar la
cuestión de la autor ía de l Barlaam y Josafat griego y
considera muy improbable la asignación a Juan Damasceno, no
se inclina por una tesis favorable a San Eutimio, más bien
propone una cronología i n t e r me d i a entre estos dos.
Esta última proposición me parece más cómoda, menos
comprometida, pero al mismo tiempo más certera y realista ya
que al no tener elementos suficientes para asignar la autoría
de la traducción a Eutimio ni a Damasceno, kazhdan evalúa las
probabilidades de dichasautorias y reconoce que los tres
siglos de ausencia de estas traducciones son más fuertes para
borrar cualquiere ras tro, que para ratificarlo y propone una
linea de investigación más rigurosa, apoyada en las
diferentes versiones y rutas que siguió el Barlaam... para ver
si así se puede, algún dia, tener bases más sólidas para
definir al posible t raductor de la versión griega, base
fundamental del desarrollo del Barlaam . Concuerdo plenamente
con Kazhdan puesto que al estudiar una época tan alejada y
con tan pocos elementos de apoyo y compara ción se vuelve una
t a r e a muy dif íci l de r e a l i za r, pe r o e n el i n t e nto s e
descubren mucha s ot ras cosas que j ust if i c an l a invest igac i ón
I? Bádenas d e la Peñ a , op . c i t: , , p. XXX I II.
13 Cfr . Impe y y Kell er e d .• op . c i t . , p p . XVI -XXI.
E. Espinosa 5 Descripción retórica .. .
Ernesto Kuhn (1894) desarrollaron la peregrinación de la
leyenda india . Por otro lado, en Siria encontrarnos una fuerte
presencia monacal georgiana, estos centros, al parecer,
estaban en permanente contacto con comunidades árabes tanto
de musulmanes corno de cristianos, los georgianos, igual que
los armenios, contaban con alfabeto propio desde el siglo V,
lo que pudo facilitar una temprana labor de traducción y
copia al georgiano de Evangelios, Salmos y literatura
cristiana, principalmente del griego, pero también del
siríaco, armenio y árabe.
La importancia de las versiones árabes para la
transmisión de la leyenda es primordial, por que de ahí se
desprende el modelo base de la versión griega. Conviene
precisar, a este respecto y buscando el acercamiento
idiomático para sustentar la cercanía de las versiones
árabes, que el nombre de Budasaf (árabe) es una prueba del
auténtico modelo indio, ya que corresponde al término
Bodhisattva, de ahí pasa a 'Budasaf' y luego a 'Iudasaf', que
da lugar al griego 'Josafat'. En cuanto al nombre de
'Bilauhar' es la base de 'Balahvar' georgiano y del 'Barlaam'
griego.
Paul Peeters10 (1937) excluyó la intermediación siríaca y
modificó este esquema de peregrinación. También afirmó que la
versión bizantina deriva de una variante georgiana de la
leyenda y no al revés, por tanto la leyenda búdica
cristianizada se debería a un anónimo georgiano y no a Juan
de Saba, ni tampoco a San Juan Damasceno. Propone corno fecha
de redacción griega finales del siglo X o principios del XI,
y designa corno su autor a San Eutimio. D.M. Lang (1957) apoyó
los argumentos de Peeters en un prólogo detallado a la
10 Citado por I mp ey y Keller ed . , op . ci t. , p . XVII.
E. Espinosa 6 Descripción retórica...
traduc c i ón d e l ge orgiano, d i ce que e n una primera etapa las
vers iones índicas r e vi s t e n una forma maniquea (siglo 111), lo
que c ons i de r a Lang corno un eslabón entre la leyenda índica
original y l a á r a be , la t raducción árabe, fechada en el siglo
VIII, s e debe a los maniqueos de Bagdad que conocerían la
leyenda mediante s us correligionarios del nordeste. Del árabe
l a his tor i a s e vierte a l georgiano, probablemente, por un
árabe c onv e r tido a l cristianismo en el mi smo siglo VIII, éste
quizá s e a uno de los momentos más importantes para la
gestación cristiana del Barlaam y Josafat. Lang ve en la
versión georgiana el texto para la griega, efectuada en el
siglo XI p o r San Eutímio, considerado corno un fértil
traductor del griego al georgiano (su nombre corno traductor
de Barl aam y Josa fat lo atest igua San J o r g e el hagiorita y lo
des igna e n var i os manus c r i t os , e ntre los c ua l e s el que
cont iene el traslado del griego a l l a t ín del año 1048. La
traducción de San Eutimio, imperfecta, habría sido e stilizada
después por un monje griego.
La versión griega i nt e r po l a citas de la Sa gr ada
Escritura, de la Patrística y reminiscencias de las obras de
varios santos, sobre todo de San Juan Damasceno, por l o que
se supone que este santo fue el autor de la versión.
La teoría conjunta de Peeters-Lang, a pesar de su
coherencia, no goza de un apoyo unánime. Por s u parte, Hi r am
Peri 11 (1959) acepta solamente la etapa maniquea, aunque
admite también una versión siríaca de la cual derivarían las
traducciones georgiana y griega . Peri llega a la conclusión
de que una versión cris t i a na hecha por Jua n de Saba (siglo
" Ci t a d o por Impey y Keller ed . , op . cit . , p. xx .
E. Espinosa 7 Descripción retórica...
II) habría caído en manos de San Juan Damasceno (siglo VIII)
quien habría emprendido su reelaboración estilística y la
interpolación de pasajes nuevos, entre los cuales se
encuentra la "Apología de Arístides", a su vez, esta variante
griega de San Juan Damasceno se habría vertido al georgiano y
ésta habría servido a San Eutimio para su traducción al
griego. El defecto de la teoría de Peri es que se basa en
demasiadas versiones perdidas que no dejaron huella, en
hipótesis que no tienen la posibilidad de ser verificadas.
Relacionar a San Juan Damasceno con la traducción al
griego de la historia de Barlaam y Josafat es poco probable,
ya que, debido a la fama de la que gozaba ¿por qué habría
tardado la Iglesia Griega en canonizar a los dos hombres
santos? Su prestigio era bastante reconocido y murió hasta el
749 d. de J.C., tiempo suficiente para que se le reconociera
la traducción del Barlaam y Josafat. Por otra parte todos los
manuscritos que se conservan del Barlaam y Josafat datan del
siglo XI, precisamente el siglo en el que vivió San Eutimio
(955). Al respecto Lang observa que existen tres juanes
relacionados con San Eutimio: su propio padre, Juan
Varazvakhe, que se autodenominaba "el último de los monjes";
su tío Juan Tornicio, el general bizantino, que envió al Atos
muchos manuscritos georgianos para formar la primera
biblioteca del monasterio de Iviron y que profesó, también,
como monje con el nombre de Juan; ambos Juanes aparecen en
los colofones de estos manuscritos junto con el nombre de
Sabas, sinónimo del monasterio de Oshki (Georgia). Lang
plantea la posibilidad de que en algún lote de libros pudo
haberse encontrado una versión georgiana de La sabiduría de
Barlaam y que apareciera en su colofón esta misma referencia,
es decir, la firma de algún Juan de San Sabas. Tendríamos así
una conjunción de tres Juanes (padre, tío y abad) en relación
E. Espinosa 8 Descripción retórica. . .
con Sabas, es decir, u n esquema corno: "libro, traido y
mandado copiar por Juan (To r n i c i o ) , para Juan (Varazvakhe) en
el monasterio donde Juan era Abad,,12 lo cual constituye un
terreno propicio para la contaminación y, obviamente, para el
rastreo del verdadero traductor. Este lapso de tres siglos
en que no se atestigua ningún ejemplar inclina a considerar
a certada la teoria de Peeters-Lang, la cual considera corno
traductor de la leyenda a San Eutimio13.
Alexander Kazhdan (1988) ha vuelto a examinar la
cuestión de la autoria del Barlaam y Josafat griego y
considera muy improbable la asignación a Juan Damasceno, no
se inclina por una tesis favorable a San Eutimio, más bien
propone una cronologia intermedia entre estos dos .
Esta última proposición me parece más cómoda, menos
comprometida, pero al mismo tiempo más certera y realista ya
que al no tener elementos suficientes para asignar la autoria
de la traducción a Eutimio ni a Damasceno, kazhdan evalúa las
probabilidades de dichas autorias y reconoce que los tres
siglos de ausencia de estas traducciones son más fuertes para
borrar cualquiere rastro, que para ratificarlo y propone una
linea de investigación más rí.qurosa , apoyada en las
diferentes versiones y rutas que siguió el Barlaam... para ver
si asi se puede, algún dia, tener bases más sólidas para
definir al posible traductor de la versión griega, base
fundamental del desarrollo del Barlaam. Concuerdo plenamente
con Kazhdan puesto que al estudiar una época tan alejada y
con tan pocos elementos de apoyo y comparación se vuelveuna
tarea muy dificil de realizar, pero en el intento se
descubren muchas otras cosas que justifican la investigación
12 Bádena s d e l a Peña , op . cit . , p . XXX II I.
13 Cfr . I mpe y y Ke ller e d . , op . c i t . , pp . XVI - XXI.
E. Espinosa 9 Descripción retórica.. .
y refuerzan la importancia histórica y literaria del Barlaam
y Josafat .
E. Espinosa 10 Descripción retórica...
I.2. Manuscritos del Bar~aam Y Josafat
La prosa castellana se desarrollará en cantidad y calidad a
part i r de la segunda mi tad del siglo XIII, es to debido a un
debilitamiento en l a act ivi da d poética, que quizá nos habla
de una relación caus a l entre ambos fenómenos, ya que hombres
de talento y ambici ón que estuvieron al servicio de l a s
órdenes monásticas componiendo poemas, fueron atraídos a la
corte de Alfonso X, El Sabio. Resultaba seductora la
recompensa, el prestigio, el estímulo intelectual y el alto
nivel de cultura con que la corte castellana sugestionaba a
los hombres de letras y poetas de otros países europeos l •
Al final del r einado de Fernando 111 o en los inicios
del de Alfonso X, se encuentran los primeros ejemplos
vernáculos de dos d e los géneros principales de la prosa
castellana hispánica: colecciones de e xempla (cuentos
ejemplares, a menudo engarzados dentro de un marco narrativo
general) y muestras de literatura sapiencial (coleciones de
sententiae o aforismos sábios, procedentes de los filósofos
c lásicos o de otras fuentes).
El sucesor de Al fonso X, su hijo Sancho IV, no compartía
por completo los intereses culturales de su padre y el grupo
alfonsino de sabios, tra duc t or e s , escribas, etc., se dispersó
rápidamente. Pero la época de Sancho IV no fue un desierto
cultural, durante s u reinado y el periodo siguiente, guiado
por su esposa, aparecieron nuevas obras de literatura
ejemplar y sapiencial como: Barlaam y Josafat, el Lucidario,
Castigos y documentos del rey don Sancho, los Bocados de oro
y la Historia de la donzella Teodor, entre otras.
1 Cfr . A. Deyerrnond , Hi s t oria y c r i t i c a de la literatura e sp añol a r , Edad
Media. pp . 1 4 4- 1 67 .
E. Espinosa 1I Descripción retórica . .. 
El reinado de Sancho IV ha sido estudiado por Kinkade 
(1972) como un periodo literario con rasgos propios, en un 
intento, afortunado, de ofrecer el perfil cultural de su 
reinado. 
En la Biblioteca Nacional de Nápoles se conserva el 
único manuscrito (VIII B 10) del siglo XV, copiado de una 
primera versión del Barlaam y Josafat traducida del griego al 
latín en el año 1048, aproximadamente. Parece ser que este 
manuscrito fue hecho por encargo de un cierto León, el 
traductor anónimo precisa en el prólogo como en el epílogo 
que la versión griega se debe a "san Eufimio". 
Se le atribuye a G. Trapezuntius (1396-1485), secretario 
del papa Eugenio IV, una segunda versión al latín contenida 
en la Vulgata y conservada en varios manuscritos, pero esta 
hipótesis se rechazó, ya que se probó l a existencia de 
versiones abreviadas de la leyenda basadas en la Vulgata, 
anteriores al siglo Xv2 • 
Circularon compendios como la Leyenda dorada de Jacobus 
de la Vorágine, cap. 175 (ca. 1260) , o en Speculum 
Historiale, cap. 15 de Vicentius Bellovacensis (Vicent 
Beauvais siglo XIII). 
Fueron conocidas en España las versiones latinas y se 
aprovecharon en breve tiempo. Menéndez y Pelayo3 menciona la 
presencia de un manuscrito latino de Barlaam y Josafat del 
siglo XII en la Biblioteca Nacional. J. Sonet describe un 
epítome del siglo XIII contenido en el códice 9783 [antiguo F 
152], folios 127-139 de la Biblioteca Nacional de Madrid. 
Este epítome, cuyo 
2Impey y Ke ller ed., Barlaam e Josafat, p. XXIII. 
3 M. Menéndez y Pelayo, Orígenes de la novela española, p. 53 . 
E. Espinosa 12 Descripción retórica .. . 
incipit proporciona J. Sonet (Vita Beatorum Barlaam et 
confessorum et sanctorum monachorum agones et Josaphat 
martyria sub Aveniro, rege Inde passorum per Joannem 
Damascenum scripta, nuper e greco in latinum versa, f. 128.) 
se halla mencionado también en la Historia crí tica de la 
literatura española, de J. Amador de los Ríos (Madrid, 1863, 
tomo 111, p. 285, nota) quien lo considera procedente del 
siglo XII. 
G. Olmedo, citan Impey y Keller, hace referencia a otra 
redacción latina presente en el Escorial. A su vez, R. Beer 
habla de un manuscrito del siglo XIV en la Biblioteca de 
Palacio, copia de una enorme compilación hagiográfica de 1200 
títulos, hecha por Bernardo de Brihuega, Clericus et alumnus 
para su maestro el rey Alfonso X. Las vidas de los "santos" 
Barlaam y Josafat están incluidas en los folios 140-168 y 
podrían ser una copia de la versión latina de Vicent de 
Beauvais. 
También circularon en la península las versiones árabes 
y de ahí surgió la versión hebrea El hijo del rey y el 
derviche (principios del siglo XIII) obra del. judío 
bercelonés Samuel Halevi ibn Chisday. 
De los manuscritos que circularon en los siglos XII-XV 
sólo se han conservado tres. El primero es El libro de Berlan 
e del rrey Josapha de India, conservado actualmente en la 
Biblioteca Universitaria de Salamanca (antiguamente el 
manuscrito 2 G 5 de la Biblioteca de Palacio) forma parte de 
un códice rotulado Leyes de Palencia. El códice de 309 
folios, contiene ocho tratados. El apellido del copista y el 
año en que se trasladó el códice se da en el colofón del 
folio 300: Escriptus fuit anno Domini MOCCCCoLXX Petrus 
Ortiz. El códice fue encontrado en el siglo XVIII en el 
Colegio Mayor de San Bartolomé en Salamanca con el título de 
E. Espinosa 13 Descripción retórica ... 
"Libro de la vida de Berlam y del infante Josafa", sitúan 
esta traducción a fines del siglo XIII. A este manuscrito se 
le designa actualmente con la sigla P. 
El siguiente manuscrito que se conserva perteneció al 
arabista Gayangos y por eso se le designa con la sigla G, su 
título es El libro del bien aventurado Barlaan e del infante 
Josa fa , fijo del rrey Avenir, se conserva actualmente en la 
Biblioteca Nacional de Madrid, bajo el número 18017. La 
versión que este manuscrito incluye, ocupa 87 folios, 
escritos de una sola mano, José Simón Díaz sitúa esta copia 
en el siglo xv. G. Moldenhauer considera que los dos 
manuscritos (P y G) proceden de la segunda mitad del siglo xv 
y que el.manuscrito G es posterior a p 4 • 
También sobrevivió un tercer manuscrito, guardado en la 
Biblioteca Universitaria de Strasbourgo con el número 1829, 
descrito por Friederich Lauchert. Cuenta con 185 folios, 
letra de fines del siglo XIV o principios del XV y mayúsculas 
escritas en rojo, se titula Estoria de los quatro doctores de 
la Iglesia y contiene dos libros. El primero trata de San 
Jerónimo, San Ambrosio, San Agustín y San Gregario papa; el 
segundo, folios 132-185, es La estoria del rrey Anemur e del 
Josaphat e de Barlaam, 
del libro XV del 
es, citan a Lauchert, una traducción 
Vicentius Speculum 
Bellovacensis (Vicent Beauvais) , 
manuscrito con la sigla S. 
historiale, de 
Se le designa a este 
Los tres manuscritos españoles son traducciones directas 
o indirectas de versiones latinas de la Historia de Barlaam y 
Josafat, y los tres aunque copiados al parecer en el siglo 
XV, ofrecen rasgos lingüísticos anteriores. La versión más 
amplia está contenida en el manuscrito P, el manuscrito G 
4 Impey y Keller ed., op. cit., p. xxv. 
E. Espinosa 14 Desaipción retórica ... 
parece un intento de reelaboración y el manuscrito S es la 
más reducida. 
E. Espinosa 15 Descripción retórica ... 
I.3. Difusión del Bar~aam y JosaEat 
Las circunstancias históricas de la España medieval, la 
presencia a lo largo de ocho siglos de población islámica, 
además de las comunidades judía y cristiana, favorecieron el 
intercambio cultural. Textos de variada procedencia oriental 
circularon oralmente entre los cristianos. Hoy no se trata de 
buscar la cuna de los cuentos medievales,sino de reconocer 
el fenómeno de la poligénesis, es decir, la aparición en 
lugares distintos de relatos similares, sin conexión directa 
entre Sil. 
La historia del Barlaam y Josafat guarda estrechos 
paralelismos en sus inicios con el Sendebar, al que también 
se acerca por el modelo de inserción elegido. En ambos casos 
se trata de un marco narrativo, pero ahora los cuentos y 
parábolas surgen del sermón de Barlaam como auténticos 
exempla para ilustrar el dogma ante Josafat. El maestro 
religioso no trata de modificar o detener la marcha de la 
acción principal; no existe tampoco ningún plazo inexorable 
del que dependa la vida del príncipe. Es la voz del 
predicador que necesita recurrir al lenguaj e alegórico para 
enseñar una doctrina. Frente a la rapidez con la que los 
narradores extraían la lección moral en el Calila y en el 
Sendebar, el sabio Barlaam se detiene en explicar la 
adecuación entre la historia y el discurso religioso; los 
elementos de la anécdota son sometidos a un proceso 
exegético, mostrando sus correspondencias alegóricas. Sólo el 
cuento de "El joven que prefería a los diablos" narrado por 
el astrólogo del rey, carece de esta segunda interpretación 
para quedarse en un primer nivel de lectura2 • 
1 Cfr. M. J. Lacarra, op. cit., p. 11. 
2 Ibidem., pp. 23-25. 
E. Espinosa 16 Descripción retórica ... 
Las modificaciones sufridas en la literatura del siglo 
XIII reflejan la influencia de los textos evangélicos y 
patrísticos a la vez que explican la popularidad de la obra 
entre los predicadores. Con el Barlaam e Josafat estamos ante 
la más temprana adaptación de la narrativa oriental al 
Occidente cristiano y el primer caso en que España es 
meramente receptora de una transmisión latina y no "eslabón 
entre la cristiandad y el islam". El sur de las penínsulas 
itálica e ibérica, sobre todo, fueron las únicas zonas de 
Europa colonizadas por pueblos de habla árabe, y sus 
condiciones fueron óptimas para la transmisión de la cultura 
arábiga3 • 
Esta leyenda fue una de las que gozó de más popularidad 
durante la Edad Media, principalmente a mediados del siglo 
XI, tanto en el Oriente como en el Occidente cristiano. 
La historia inicia su expansión a través del pehlevi, el 
georgiano, el árabe y el griego. La versión bizantina será la 
base para difundir la leyenda a otras literaturas como la 
eslava, el antiguo búlgaro, ruso, bielorruso y serbio. La 
traducción latina llegará hasta el mundo germánico, los 
países escandinavos y a toda la familia románica. 
Los exempla de origen oriental se mezclaron con otros 
elementos provenientes de la tradición patrística y medieval 
europea, y el libro posee, además, algunos rasgos de la 
literatura gnómica. 
El movimiento de las órdenes mendicantes dejó de buscar 
la soledad para predicar la ascética en las ciudades y 
moralizar las costumbres del pueblo, de la corte y de los 
mismos eclesiásticos. La orden que más habría de distinguirse 
en Occidente en esta tarea fue la de los dominicos, fundada 
por Santo Domingo de Guzmán (1215), que pronto derivaría más 
l Cfr:. A. Devermond. Historia d,,= La J it"=ratur,, "=.<:r,,"I07-'l. n. Hn. 
E. Espinosa 17 Des.:ripción retórica ... 
en la persecución de la herej ía que en la perfección moral 
individual. fue un dominico, Vicent Beauvais, el primer 
refundidor latino de la Historia edificante, y otro 
predicador, Jacobo de Vorágine, el que se encargo de adaptar 
dicha leyenda a las necesidades más directas y didácticas de 
la predicación. 
El compendiar la doctrina cristiana, realizar un tratado 
moral para uso de los gobernantes y, además, mostrar un 
relato ameno y exótico permitieron el éxito del Barlaam. Éste 
constituyó una poderosa arma contra Lutero y la Reforma, 
porque los apólogos de la historia exaltaban el monacato y 
defendían de manera elocuente la ortodoxia, "invitaba a las 
almas relajadas a recuperar el fervor que la Reforma 
reprochaba que se hubiera perdido u4 • 
La difusión y adaptación romance de la leyenda alimentó 
las primeras colecciones de apólogos e, incluso, la novela de 
caballerías hispánica, diferentes exempla y extractos del 
Barlaam y Josafat aparecen en otras colecciones como son la 
Disciplina clericalis (mediados del siglo XI), el Calila e 
Dimna; 
época 
los Castigos 
de Sancho IV; 
e documentos para 
el Libro de los 
el bien vivir 
enxemplos del 
de la 
Conde 
Lucanor del infante Juan Manuel (1282-1348) y, sobre todo, en 
el Libro de los Estados del mismo autor, quien fue uno de los 
principales responsables de la difusión de la leyenda y la 
llevó incluso hasta tierras portuguesas: Cabe señalar la 
cercanía y formación de don Juan Manuel con los dominicos, 
situación que permite suponer que conoció y leyó una versión 
árabe del Barlaam y Josafat, la cual pudo tomar como base. 
4 Vid. P. Bádenas de la Peña ed., Barlaam e Josafat, p. XXXIII. 
E. Espinosa 18 Descripción retórica ... 
También encontramos ecos del Barlaam en el Libro de los 
enxiemplos por a.b. c ., del arcediano Clemente Sánc hez de 
Vercial; El libro de los Gatos del siglo XIV; el Blanquerna 
de Ramón Llull; El espejo de los legos; la Confisión del 
amante, traducción castellana de Juan de Cuenca del original 
Confessio amantis de John Gower; La segunda Celestina de 
Feliciano de Silva; Alivio de caminantes de Timoneda; 
Historia del Caballero de Dios que había por nombre Cifar. En 
el ambiente de la Contrareforma hay un interés por la 
recuperación del tema, Lope de Vega compuso un drama titulado 
Barlán y Josafá (1611); de éste drama procede el núcleo del 
primer acto de La vida es sueño de Calderón (1635) ; también 
aparecen ecos de nuestra historia en El mercader de Venecia 
de Shakespeare; los jesuitas llevan el Barlaam hasta el siglo 
XVIII en piezas de menor valor literario como los dramas 
titulados Barlaam y Josafat, Tansidor, Los luceros de Oriente 
y El prodigio de la India y una adaptación anónima de una 
traducción francesa de la Flos santorum (París 1775) de Jean 
de Billy. 
E. Espinosa 
I . ". Los exempla 
El uso de los 
19 
venía 
Descripción retórica .. 
desde la 
, pues, al dentro del discurso oratorio, 
a ser incluidos en las retóricas. 
dos medios de El emplo 
de carácter y el entimema, básicamente deductivo, 
que extraer de lo una enseñanza . El 
es considerado una lección del pasado con valor 
perenne, pero al estar inserto dentro de los instrumentos de 
resulta indigno, como sucederá también con 
retóricas muy posteriores, de como género narrativo 
Los tratados latinos volveran a considerarlo como 
válida y eficaz. la Rhetorica ad Herennium "el 
es la expresión de hecho o dicho antiguo con el nombre 
de un determinado autor". Ciceron en De inventione afirma que 
es lo que confirma o afirma una cosa por la autoridad o el 
caso de algún hombre o asunto"; finalmente en 
Institutiones oratoriae lo definirá como "el recuerdo de un 
suceso o de un hecho útil para demostrar lo que 
Estas citas extraídas de las retóricas clásicas nos 
a concretar un poco la función al en la 
crii~rl~rl. Las referencias reiteradas a dichos o hechos del 
protagonizados por algún 
del uso medieval. La credibilidad y la 
reside en la atribución a 
e concreto lo 
misma del 
a un héroe 
cuya conducta se ofrece como paradigma. De ahí 
también la conexión estrecha que mantiene con la educación de 
los jóvenes, quienes van así memorizando de un 
1 Cfr. Aristóteles, Retórica, p. 270. 
E. Espinosa 20 Descripción retórica ... 
pasado más glorioso; a su vez ello contribuye a mantener la 
conciencia cívica en el imperi02 • 
El exemplum no sólo es un género en sí, además de un 
conjunto limitado de historias y motivos, sino que fue para 
la sociedad medieval una manera particular de pensar el 
pasado y de utilizarlo de diversas formas, para afectar su 
propio presente: 
La alegorización y moralización de cuanto se ve en el 
mundo constituyeel procedimiento para penetrar en el 
saber de éste, porque todo saber es, fundamentalmente, un 
saber de símbolos. Todo el arte medieval se convierte por 
ello, en expresión alegórica de una realidad moral que, en 
cualquier caso, afecta al hombre. Las representaciones en 
tímpanos, capiteles, vidrieras, etc. tienen ese valor y 
ese sentido adoctrinante 3 • 
La palabra exemplum fue usada en la Edad Media para 
referirse a un relato, una historia, una fábula, una 
parábola, una moralidad o una descripción que pudiera servir 
de prueba para apoyar una exposición doctrinal, religiosa o 
moral. Los exempla podían ser historias o leyendas de origen 
sagrado o profano, occidental u oriental, anécdotas, fábulas 
o cuentos extraídos de la antigüedad clásica o de la Edad 
Media misma, de los bestiarios, de los tratados de historia 
natural, de la tradición popular o de la experiencia del 
compilador o predicador 4 • 
La mente medieval concibe la historia humana como una 
cadena inmutable y finita de sucesos que se reiteran una y 
otra vez. Es por eso que las colecciones de exempla podían 
ser presentadas como depositarias de un código hasta cierto 
punto exhaustivo de conducta, que para cada hecho y cada 
2 Cfr. M. J. Lacarra, Cuentos de la Edad Media, pp. 25-28. 
l J. A. Maravall, "La concepción del saber en una sociedad tradicional" en 
Estudios del pensamiento español, p. 239. 
• Cfr. Welter apud E. Palafox, op. cit., p. 11. 
E. Espinosa 21 Descripción retórica ... 
vital ofrecía una norma y un 
Además, a causa de la brevedad de la existencia humana, se 
creer, fácilmente, que cada persona se enfrentaría 
únicamente, durante su vida, a un número limitado de 
alternativas y, en consecuencia, una buena colección le 
bastaba y sobraba para resolver sus individuales. 
En las características del son las 
brevedad, veracidad o autenticidad, 
relativa con respecto a un discurso globalizante, relación 
con la homilética, finalidad persuasiva, el hecho de que su 
auditorio está compuesto por fieles o discípulos, calidad 
didáctica y en una preocupación por el bienestar 
La histórica del exemplum se remonta a la 
diferencias 
aunque se ha señalado que existen 
entre el exemplum griego y el romano, y lo que 
será para la sociedad cristiana. Los decretos del 
cuarto Concilio de Letrán de 1215, fueron clave en la 
historia del f-"''''"lJ 1 uro, en estos decretos se aba 
orar la educación de los religiosos, la instrucción de las 
masas y la de las órdenes de dominicos y 
franciscanos destinadas a la predicación. En este se 
desarrolló y difundió la forma popular del sermón medieval, 
destinada a influir en un más numeroso y menos 
letrado, que hizo del 
de ahí surgen las 
um uno sus recursos, 
colecciones que auxiliarán a los 
en sus labores de adoctrinamiento. 
Otra definición del exemplum sostiene que es una 
"narración breve de un acontecimiento, presentado como 
5 Cfr. Battaglia, apud E. Palafox, op. cit., p. 12. 
6 Características enumeradas por Brémond, LeGoff y Schmítt, apud E. 
Palafox, op. ci ., p 13 
E. Espinosa 22 Descripción retórica ... 
verdadero y sucedido una sola vez a personajes humanos", del 
que se extrae una enseñanza cuya finalidad última es la 
salvación eterna y que puede tener distintos orígenes, tanto 
cultos como populares? 
Un concepto más de exemplum dice que es: una estrategia 
discursiva que consiste en la utilización analógica de cierta 
información para defender una idea o un conjunto de ideasB. 
El exemplum medieval tuvo una relación muy cercana con la 
retórica, disciplina heredada de los clásicos que sirvió para 
dar forma a los discursos por medio de los cuales se ejerció, 
y se ejerce, el poder en la civilización occidentaL Estos 
discursos generalmente se transmitían de viva voz y 
contribuyeron a la consolidación de las instituciones 
medievales, que eran principalmente de carácter letrado. 
Los copistas, en prosa o en verso, de los relatos y las 
descripciones, escritos o contados por otros, apreciaban su 
valor pedagógico y su capacidad para servir de prueba o de 
soporte a una determinada "verdad" de origen religioso o 
moral, pero no les interesaba su calidad como testimonios 
antropológicos. Por eso aunque tuvieran un origen folclórico 
o letrado, una vez en manos de los autores, compiladores y 
predicadores, estos relatos pasaban siempre por un proceso de 
apropiación y de reescritura que se encaminaba a convertirlos 
en instrumentos útiles para la transmisión de determinados 
modelos ideológicos: el exemplum es en sí un instrumento de 
persuasión 9 • 
La estrategia discursiva que es el exempl um, sólo puede 
existir como tal en la medida en que da forma a ese todo que 
7 Definición del exemplum dada por J. M. Lacarra, apud E. Palafox, op. 
cit., p. 17. 
8 ctr. E. Palafox, op. cit., p. 18. 
9 Ibid., p. 22. 
E. Espinosa 23 Descripción retórica .. . 
es el discurs o ejemplar al cual pertenece. Por esto la 
importanc ia de estudiar el conjunto completo: prólogos , 
"marcos" narrativos o enunciativos, relatos, descripciones, 
disquisiciones, sentencias, ilustraciones, etc., pues de esa 
manera se puede entender, en su verdadera dimensión, el papel 
estratégico que desempeñan los exempla cuando son utilizados 
en un cierto texto, y lo que éste tiene de específico, en 
tanto que discurso ejemplar. Esta especificidad 
(ejemplarida d) es el resultado del conjunto de objetivos 
pedagógicos y de modelos retóricos, literarios e ideológicos 
que, por medio del texto ej emplar, se busca inculcar en la 
mente del receptor, y depende de la época y de las 
tradiciones ·textuales en que se inscribe cada obra en 
concreto, pero también, en gran medida, de los intereses y 
objetivos de quien fue su autor, predicador o compilador1o . 
El exemplum se difundió ampliamente por que permitía 
explicar, por medio de analogías fáciles de asimilar, 
conceptos abstractos que, de otra manera, resultarían mucho 
más difíciles de entender, especialmente para los receptores 
que no estaban entrenados en 
filosóficas, que eran la mayoria ll . 
cuestiones teológicas y 
El dirigir al hombre hacia el camino de la redención, que 
es lo que busca el discurso ejemplar, justifica su existencia 
como recurso didáctico y explica la utilización de imágenes 
relacionadas con la tradición oral y la escritura que 
contribuyen a acrecentar su halo de autoridad. 
Lo predominante de este tipo de literatura es su poder de 
convicción y su aptitud para transmitir una enseñanza, su 
efectividad radicaba en la fuerza persuasiva de sus cuentos; 
10 Ibid., p. 25. 
" Idem. 
E. Espinosa 24 Descripción retórica ... 
en la capacidad que pudiera tener cada uno de ellos para 
instituirse en verdadero exemplum12 • 
Las colecciones de exempla están organizadas, 
en dos partes: un marco narrativo y un generalmente, 
repertorio de exempla, no exento de preámbulos, 
disertaciones, máximas y otros acompañamientos. 
El marco narrativo es el que encierra el mensaje unívoco, 
el que orienta la correcta interpretación de los exempla 13 • 
Una narración-marco puede definirse corno un conjunto 
narrativo compuesto de dos partes distintas pero unidas entre 
sí. La historia principal se ve interrumpida en su desarrollo 
por la inserción de relatos contados por los personajes de la 
narración inicial 14 • 
Corno preámbulo al exemplum puede aparecer conversaciones 
didácticas, basadas en preguntas estimulantes y en doctas 
respuestas, lo que era una ingeniosa combinación mediante la 
cual un padre aleccionaba a su hijo, un privado a su rey o un 
sabio a su discípulo, corno sucede en el Barlaam y Josafat, 
que se presenta corno una secuencia narrativa que va mostrando 
paso a paso el proceso de adoctrinamiento y conversión del 
príncipe. 
Graciela Cándano define el exemplum como "un texto que 
ilustra o revela algo que, si es saludable o edificante, 
tiende a convencer o a ser imitado, y si es malo, tiendea 
ser repudiado,,15. 
12 Cfr. G. Cándana tierra, Estructura, desarrollo y función de las 
colecciones de exempla en la España del siglo XIII, p. 8. 
13 Ibid., p. 12. 
14 M. J. Lacarra, "La narración-marco en el Calila e Dimna" en Historia y 
crítica de la literatura española 1/1. Edad Media. Primer suplemento. p. 
156. 
" G. Cándano tierra, op. cit. p. 23. Citado par Impey y Kel1er ed., 
Barlaam e Josafat, pp. XXIII-XXIV. 
E. Espinosa 25 Descripción retórica ... 
Lida de Malkiel afirma que las ricas en 
exempla "figuraban entre los libros que el 
fraile mendicante sobre sus 
Los exempla eran un testimonio que fundamentaba 
exposiciones éticas, de las que se normas de 
conducta coherentes con la moral cristiana. Se diseminó, por 
parte del poder y secular, una literatura didáctica 
que hizo las veces de de de 
escarmiento mediante la exhibición de los sufridos 
por los 
Las 
son las 
otro 
de estos tipos de narraciones. 
del exemplum que destaca Graciela Cándano 
-la brevedad; la fuerza didáctica y 
la unidad conceptual y/o narrativa entre uno y 
el carácter de prueba o apoyo; la 
"carismática", y la univocidad interpretativa,,17. 
que considerar que los exempla eran en 
voz por lo que resultaba necesario que el lector u 
tuviera habilidad para ejercer la ya 
fuera en el templo, la plaza o las cortes; debía tener un 
carácter inminentemente persuasivo y de esta manera se 
contribuia a la y difusión de los exempla en forma 
creciente; por tal razón el sermoneador utilizaba determinada 
dicci6n y cierto léxico, además de gestos, ademanes, mimicas, 
entonaciones y contextos ad hoc. 
Los oradores utilizaban diferentes métpdos didácticos con 
el fin de captar la atención de los oyentes y eliminar su 
desinterés o aburrimiento, seduciéndolos hasta el 
término del sermón. Estas habilidades y requerimientos se 
e intensificaron cuando los religiosos 
16 Ma. Rosa Lida de Malldel, "Tres notas sobre don Juan Manuel" en 
Estudios de literatura comparada, pp 92-93. 
G. CAndano, op t., P 32 
E. Espinosa 
mendicantes 
explanadas-
-que predicaban 
entablaron una 
eclesiásticos seculares. 
Descripción retórica ... 
en mercados, 
abierta pugna 
caminos 
con 
y 
los 
El uso de las leyendas de ilustración se remonta a las 
parábolas del Nuevo Testamento y a las figuras de la retórica 
clásica. Las sententiae, o dichos de hombres famosos, fueron 
utilizadas a menudo en los sermones, y tienen su origen en la 
retórica y en el periodo cristiano primitivo; por otra parte, 
el empleo de los refranes a finales de la Edad Media 
constituye una evolución dentro de la misma tradición. Estos 
dos instrumentos permitían a los predicadores entretener a su 
auditorio mientras que lo edificaban; de igual manera se 
escudaban de la crítica mediante la apelación a la autoridad 
del pasado. La recolección de exempla y sententiae se inició 
en el periodo clásico latino y esta práctica se vio 
poderosamente incrementada durante la Edad Media. Cualquier 
cosa podía utilizarse como exemplum: fábulas esópicas, 
sucesos o personajes históricos y bíblicos, figuras 
mi tológicas y sucesos que el predicador había presenciado o 
experimentado, o así lo pretendía al menos 1B • 
Ningún sacerdote o fraile podía reunir un adecuado 
repertorio de exempla de su propia lectura o experiencia 
personal, y proliferaron, por esta razón, las colecciones de 
exempla primero en latín y luego en romance. 
Era factible obtener bastantes deducciones morales de 
cualesquiera de los exempla que incluían estas colecciones, 
esto animaba a los predicadores a introducir variaciones de 
su propia mano sobre estos textos, lo que llevó, con el 
tiempo, a una utilización literaria marcadamente individual 
de los exempla. 
18 Cfr. A. Deyermond, op. e lt., p. 176 . 
E. Espinosa 27 Descripción retórica .. . 
Entre los procedimientos recomendados por las retóricas 
para iniciar un discurso estaban ,el exemplum o sen ten tia. El 
pensamiento primitivo estaba más habituado a razonar por 
método analógicos e inductivos que por caminos deductivos. 
El carácter didáctico del exempla es lo que le otorga su 
importancia, a través de diversos resortes trasmiten una 
enseñanza, unas pautas de comportamiento, corno lo hace, en 
mayor o menor medida, toda la literatura de su tiempo. 
Al presentarse los exempla por escrito para su empleo con 
fines didácticos experimentan un proceso de selección y de 
adaptación. Posiblemente han perdurado los más fáciles de 
asimilar y difundir por presentar un modelo de conducta, y al 
ser fijados a través de la escritura, han perdido algunos de 
sus rasgos más especificamente orales19 • 
En resumen se puede decir que el exempla es un texto breve 
que muestra o recuerda algún suceso y si es admirable 
persigue su imitación, por el contrario, si es malo, busca su 
rechazo. Por otro lado los manuscritos que se conservan del 
Barlaam y Josafat en lengua romance son el ms. P de 
Salamanca, el ms. G de ' Madrid y el manuscrito S de 
Estrasburgo. Finalmente el origen del Barlaam se remonta al 
siglo IV a. de C., basado en la historia de Buda y su largo 
recorrido por toda Europa hasta llegar a la peninsula 
ibérica. 
19 Cfr. M. J. Lacarra, op. cit., pp. 9-10 . 
Capitulo II. Preceptiva Retórica 
II.1. Generalidades de la retórica 
El sistema medieval de enseñanza remonta sus rasgos 
fundamentales a la Antigüedad griega. 
Las artes liberales no tienden al lucro; se llaman 
liberales por pertenecer al hombre libre, y no incluyen, por 
eso, ni la pintura, ni la escultura, ni otras artes manuales 
(artes mechanicae); la música, en cambio, ocupa, corno rama de 
las matemáticas, un lugar fijo entre las artes liberales. 
En la Antigüedad tardía l comenzó a caducar la idea de 
que las artes son propedéutica de la filosofía; ésta dejó de 
ser disciplina científica y perdió su función educadora. En 
el ocaso de la Antigüedad el patrimonio del saber quedó así 
limitado a las artes 
fijado su número 
liberales. 
(siete) y 
Entre tanto 
establecido 
había quedado 
su orden de 
progresión; uno y otro se conservarían a lo largo de la Edad 
Media: gramática, retórica, dialéctica; aritmética, 
geometría, música, astronomía. 
Las cuatro últimas artes (las artes matemáticas) 
recibieron de Boecio el nombre común de quadruvium ('cuatro 
vías'); las tres primeras se llamaron trivium ('tres vías'). 
El concepto de ars se diferencia del de "arte" en la 
aceptación moderna, ya que se le daba el sentido de 
"doctrina, teoría", que 
como "arte poética". 
relacionaban la palabra 
todavía hoy conserva en expresiones 
Antiguamente los etimologistas 
con artus 'estrecho': las artes 
encierran todo en reglas estrechas. 
Se reconoce como el más antiguo manual de retórica 
escrito en lengua latina a la Rhetorica ad Herennium de autor 
1 Cfr. Ernst Curtius, La literatura europea y Edad Media latina, p. 64. 
E. Espinosa 29 Descrípcíoo retónca ... 
desconocido (hacia 85 a.C.), atribuida en otro t a 
Cicerón, o también a cierto Cornificio. Esta obra y el libro 
juvenil de Ciceron, De inventione, no añadían nada nuevo al 
contenido didáctico de los manuales del IV, 
pero tuvieron enorme 
la enseñanza griega. 
ya que transmitían a Roma 
La retórica surge por todas partes en el 
del A finales de ese aparece la obra más 
extensa sobre retórica y la que mayor influencia tendrá: la 
Institutio oratoria de Quintiliano (95 d. de C.l. 
La obra de Quintiliano es diferente de los manuales que 
desde hacía siglos se venían escribiendo en Grecia y en Roma, 
"es un ameno tratado sobre la formación del Para 
QUintiliano, el hombre ideal es el orador, porque únicamente 
a él se le ha conferido el habla. La oratoria está por encima 
de la astronomía, de las matemáticas y de otras ciencias. 
Pero el hombre debe ser de forma un hombre 
bueno. Más aún, el orador debe ser hombre sabio. Con 
Quintiliano, la retórica busca satisfacer, por sísola, todas 
las necesidades que antes eran ocupación de la filosofía y de 
la cultura La oratoria nace directamente de la 
fuente de sabiduría. Quintiliano se ocupa del futuro orador, 
por decir así, desde la cuna, y lo acompaña 
infancia, en la escuela y en los estudios 
durante su 
Los escritores dividían la enseñanza del 
discurso en tres áreas principales: teoría, imitación y 
La Rhetorica ad Herennium, define la teoría como 
"un unto de (praeceptio) que provee de un método y 
istemas definidos para La tradición 
? Ibid., P 103. 
3 James J. Murphy, La retórica en la Edad Media, p. 9. 
E. Espinosa 30 Descripc ión retórica .. . 
implicaba un concepto fundamental de la civilización 
occidental: el orden y el plan en el discurso. 
La retórica es el arte más preceptivo, establece normas 
específicas, la tradición menciona a Corax de Siracusa (hacia 
el 476 a. C.) como el inventor del arte de la retórica. A su 
discípulo Tisias se le atribuyó el desarrollo y difusión de 
este arte. Asimismo, la tradición afirma que Gorgias el 
sofista la introdujo en Grecia alrededor del 428 a. C. 
Aristóteles define a la retórica, como la facultad de 
descubrir todos los posibles medios de persuasión; divide los 
medios de persuasión o prueba en: medios artísticos, los que 
proporciona el orador, y no artísticos, los que provee la 
prueba externa. Menciona tres tipos de persuasión: ethos, que 
surge de las cualidades personales del orador; pathos, que se 
deriva de las emociones del público oyente, y prueba lógica, 
supeditada a los argumentos. Los discursos mismos pueden ser 
forenses (judiciales) , deliberativos (políticos) o 
encomiásticos (de ocasión), según sean sus metas, tiempos y 
temas. Dado que la retórica es contrapartida de la 
dialéctica, el orador puede hacer uso de los topoi, tópicos, 
o "lugares comunes", tales como "dolor, placer", para buscar 
argumentos. 
Todos consideran la eficacia -esto es, la obtención de 
resultados- como el principal criterio del buen discurso. 
De inventione pretende ser la primera sección de un 
libro de cuatro partes que cubre toda la materia retórica. 
Cicerón define ésta como una parte de la ciencia política que 
trata de la elocuencia basada en las reglas del arte. Dado 
que la oratoria es una rama de la ciencia política, el orador 
debe estudiar filosofía y tener un conocimiento general de 
las acciones humanas. 
E. Espinosa 31 Descripción retórica ... 
La Rhetorica ad Herennium es un tratamiento completo de 
las partes convencionales de la retórica. Salvo algunas 
diferencias en las áreas de la inventío, el libro encaja 
perfectamente en la teoría romana que representa Cicerón. No 
cabe, por tanto, sorprenderse de que los lectores posteriores 
llegaran a la conclusión de que se trataba de una obra 
auténtica de Cicerón. 
La homogeneidad de la teoría romana queda demostrada 
además por otra obra más importante que emplea la retórica 
ciceroniana, la Institutio oratoria de Quintiliano, escrita 
alrededor del 92 de nuestra era, que propone un sistema 
completo para la educación del orador ideal, basada en una 
formación tanto gramatical como retórica. 
En el periodo clásico, sus preceptos proporcionaron el 
modelo para las escuelas provincianas romanas, a las que 
posteriormente asistirían algunos de los primeros Padres de 
la Iglesia cristiana, y en el denominado "Renacimiento del 
siglo XII" sus ideas educativas promovieron un interés 
pasajero para los estudios literarios. 
Cuando la retórica fue materia del plan de estudios de 
las universidades medievales, es probable que se tratara de 
la de Cicerón. Hay muchas pruebas del periodo 
preuni versi tario que indican el difundido empleo de estas 
obras, los eruditos modernos suelen citar a Juan de Salisbury 
como prototipo del conjunto de actitudes medievales frente al 
discurso. 
Un aspecto de la cultura latina que tuvo una profunda 
influencia en la literatura en español, así como en otras 
lenguas europeas, es la retórica. El saber eclesiástico 
repercutió en las letras romances, debido a la importancia 
que le otorgó al sermón popular. 
La retórica: 
E. Espinosa 32 Descripción retórica ... 
es una mujer muy hermosa, alta y de majestuosa 
presencia, que viste una túnica adornada de todas las 
figuras de dicción, y lleva armas que le sirven para 
herir a sus adversarios, etc. 4 
Retórica quiere decir ciencia del habla; originalmente, 
pues, enseña a construir de manera artística el discurso. En 
otras palabras la retórica: "es el análisis sistemático del 
discurso humano con el propósito de aducir preceptos útiles 
para el discurso futuro· 5 , y tiene un doble carácter: 
inductivo y proyectivo. Se ocupa, como disciplina, del 
discurso de los textos que ya existen, para extraer de ellos 
inductivamente, mediante el análisis, los elementos 
constantes y regulares que definen su constitución en 
distintos niveles, y por otro lado se interesa 
proyectivamente por los discursos futuros, por los textos 
retóricos que no se han realizado, los cuales serán 
construidos en concordancia con las reglas obtenidas en el 
análisis mencionado. 
El siglo XX ha visto resurgir una conciencia retórica no 
muy alejada de la que llevó a los griegos a este invento. La 
conciencia retórica del siglo xx, afianzada por la 
Lingüística, por la Filosofía, por la Ciencia Jurídica y por 
la Teoría de la Literatura, ha llevado el planteamiento de 
recuperación de la retórica en todas sus partes, con el 
enriquecimiento del sistema retórico heredado con 
matizaciones e interpretaciones. Esta nueva conciencia 
retórica tiene en gran medida una condición histórica: para 
la explicación del objeto de estudio que es el discurso, el 
teórico sabe que puede contar con el sistema retórico 
históricamente establecido6 • 
• E. R. Curtius, op. cit., p. 66. 
5 Tomás Albaladejo Mayordomo, Retórica, p. 17. 
6 Ibid., p. 38. 
E. Espinosa 33 Descripción retórica ... 
II.2. El sistema de la antigua retórica 
La retórica medieval ha realizado una de las mayores 
aportaciones al concepto de estructura textual, ya que trata 
de las partes que componen el texto. En la teoría retórica 
medieval se presta atención a la organización del discurso en 
el nivel de dispositio, que mantiene su dimensión semántica, 
vinculada al nivel de inventio. 
Las artes de la predicación distinguen en el sermón 
religioso unas partes con importantes modificaciones. En el 
sermón medieval tiene gran relevancia el exordio, que 
adquiere un gran desarrollo; resulta, en cambio, muy reducida 
la exposición que corresponde a la narración. Como parte 
autónoma, la divisio tiene un papel decisivo en la 
organización del sermón, en la cual es fundamental la 
argumentación. La perora tia es la última de las partes del 
sermón. La parte inicial del discurso, el exordio, contiene 
el prothema o antethema, que consiste en la introducción del 
asunto del sermón, el thema, que es el asunto propiamente, la 
oratio o súplica y la thematis introductio, que es una 
recapitulación de lo dicho en el exordio. Tomas de Salisbury, 
en su SumIDa de arte praedicandi, ofrece una justificación de 
estos nuevos términos, que para James Murphy son una prueba 
de la consolidación del sermón como género oratorio. La 
necesidad de la divisio en el sermón se explica en función de 
la comprensión por parte del receptor de lo que viene a 
continuación. Las partes siguientes son la declaratio 
rationalis, exposición de las ideas y de su armazón, y la 
confirmatio scripturalis, 
Sagradas Escr i turas. El 
prueba basada 
autor del 
artísticamente las correspondencias entre 
estas partes del discurso, que resultan 
en textos de las 
sermón establece 
las secciones de 
así entretejidas 
E. Espinosa 34 Descripción relórica ... 
textualmente. La peroración del sermón comprende la uni tia, 
que es la reunión o resumen de los principales puntos 
tratados, y la clausio, quees propiamente la clausura del 
discurso. Las artes praedicandi han producido una sólida 
teoría de las partes del sermón y de sus relaciones, la cual 
es modelo de una perfecta construcción textual l . 
En cuanto doctrina (ars) la retórica se compone de cinco 
partes2 : inventio (ciencia del hallazgo) , dispositio 
(ordenación) , elocutio (expresión) , memoria y actio 
(declamación) 3. La materia de la retórica (materia artis) 
comprende tres tipos de elocuencia: el discurso forense 
(genus iudiciale) , 
deliberatiuum) 
demonstratiuum) . 
y 
el 
el 
discurso 
discurso 
deliberativo 
panegirico 
(genus 
(genus 
A estas hay que añadir una operación retórica previa a 
la serie compuesta por inventio, disposi tio y elocutio, se 
trata de la intellectio, la cual consiste en el examen de 
todos los elementos y factores del hecho retórico por el 
orador antes de comenzar la producción del texto ret6ric04 • 
Las tres operaciones constitutivas de discurso se 
entrecruzan en su funcionamiento, se da entre ellas una 
relación de simultaneidad total o parcial por lo que la 
dispositio puede comenzar antes de que finalice la inventio e 
incluso puede realizarse la elocutio mientras se desarrollan 
aquellas dos operaciones. De la misma forma la intellectio 
también puede ser realizada mientras se están produciendo las 
otras operaciones del discurso. 
Cfr. Tomás Albaladejo, Retórica, p. 105. 
2 Cfr. E. R. Curtius, Literatura europea y Edad Medía latina, p. 106. 
3 En el actío se incorpora la pronuntiatio, según T. Albaladejo, op. cit., 
p. 57. 
4 También de acuerdo con el criterio de T. Albaladejo, op. cit., p. 58. 
E. 35 
A continuación hablaré, brevemente, de los tres de 
elocuencia. El discurso forense o judicial perdió casi 
toda su importancia al desvanecerse la libertad griega y la 
romana; pero no ó de existir ese arte de la técnica 
judicial; no se condenar a la El 
discurso forense "fue en la teoría, el más 
sólo él contaba con adecuadas y 
gracias a esto, el discurso forense 
en pleitos y se propagó en 
forma esquemática. Pero la retórica forense sólo podía tener 
sentido en los países en que existía el derecho romano, y aún 
en ellos sólo a del renacimiento de los estudios 
~u~~v~, es decir, en Italia y a de fines del siglo 
XI. 
al referirse al discurso judicial menciona que 
es el que, puesto en juicio, tiene en sí la acusación y la 
defensa, o la petición y la recusación. 
Por su parte dice que el 
consta de acusación y defensa. Sus partes admitidas 
por todos los autores se reducen a cinco: exordio, narración, 
confirmación, refutación y 
añadieron la división, 
• y señala que algunos 
y digresión, de las cuales 
las dos se en la formación. La 
o esta fuera de la causa y entonces no debe 
ella, o esta dentro de ella, y en este caso es una 
a 
y 
adorno de la parte a que toca. Como vemos esto tiene 
semejanza o or dicho es el antecedente de la división que 
más adelante realizaría Curtius. 
5 Cfr. E. R. Curtius, op. cit., pp. 106-107 
• Kroll apud en E. R. Curtius, op. cit., pp. 106-107. 
Cfr. Marco Tulio Cicerón, De la invención retórica, p. 6. 
a Cfr. Quintiliano, Institutio oratoria, p. 170. 
E. Espinosa 36 Descripción retórica ... 
Otro de los tipos de elocuencia es la deliberativa, 
que era en un principio el discurso político que se 
pronunciaba en los plebiscitos o en el Senado. La cual se 
convirtió también, durante el Imperio, en ejercicio escolar, 
y recibe el nombre de suasoria o deliberativa. 
Cicerón9 nos dice que el discurso deliberativo es el que 
puesto en debate civil tiene en sí la dicción de una 
sentencia. 
Este género se reduce a persuadir o a disuadir alguna 
cosa. No necesita de exordio corno el judicial, pues quien 
persuade, supuestamente, tiene ganada la voluntad de aquel a 
quien aconsej a: aunque la oración debe comenzar de manera 
similar al exordio, no es recomendable hacerlo 
repentinamente, ni por donde sea el gusto del orador, ya que 
hay cosas que anteceden a otras. Se podría decir, en términos 
generales, que el fin del género deliberativo es lo honesto, 
útil y necesario10 • 
Al que delibera no lo debernos mover con la naturaleza de 
lo bueno, que el no tiene corno tal, sino con la alabanza, con 
las opiniones del vulgo; y cuando no baste esta razón vana, 
con el bien intrínseco de la propia cosa, o lo que es mejor, 
con el temor del mal que de no hacerla resulta, a la mayor 
parte de los hombres les mueve más el miedo del mal, que la 
esperanza del bien. 
En este discurso contribuye mucho la calidad de quien 
persuade; porque la vida pasada, si ha sido buena, el linaje, 
la edad, y el estado hace esperar cosas grandes. Pero cuídese 
que las palabras no desdigan de la persona. Lo contrario pide 
un tono y estilo más hurnilde ll . 
9 Cfr. M. T. Cicerón, op. cit., p. 6. 
10 Cfr. Quintiliano, op. cit., p. 16l. 
Il Ibid., p. 166. 
E. Espinosa 37 Descripción retórica ... 
El discurso panegírico consiste en la alabanza, 
principalmente en la alabanza de los dioses y de los hombres. 
Durante el Imperio12 el discurso panegírico alcanzó 
significación política. Otros géneros eran: la oración 
fúnebre, el epitalamio, el discurso de aniversario, 
consolación, la salutación, la congratulación, etc. 
la 
El 
panegírico tuvo enorme influencia en la literatura medieval, 
fue el que más influyó en la poesía medieval, su tema 
predominante es la alabanza. La nueva sofistica había 
adaptado para la enseñanza escolar la parte correspondiente a 
la retórica. Esta época tardía encomiaba a dioses, hombres, 
países, ciudades, animales, plantas (laurel, olivo, rosa), 
estaciones, virtudes, artes, profesiones. Enumeración que nos 
permite adivinar hasta que punto pudieron rozarse la poesía y 
la retórica panegírica. El cruce de elementos panegiricos con 
elementos eclesiásticos suele encontrarse en las vidas 
métricas de santos, que tienen una tópica muy especial13 • 
QuintilianoH señala, con respecto a las alabanzas, que 
los bienes del alma siempre son saludables, aunque esta 
alabanza no se forma de un mismo modo. A veces es mejor 
seguir las edades del hombre y el orden de sus hechos, de 
forma primeramente alabemos la buena índole, después la 
enseñanza y la educación, y por último la serie de acciones y 
palabras. Otras dividir el panegirico en varias virtudes: 
fortaleza, justicia, templanza, y las demás, comprobándolas 
con hechos particulares. 
Para vituperar se observará el mismo orden pero por la 
parte contraria. Porque el bajo linaje ha servido a muchos 
para infamar los ; a otros su claro nacimiento los hizo más 
12 Cfr. E. R. Curtius, op. cit., p. 107. 
13 Ibidem. I pp~ 127-128. 
14 Cfr. Quintiliano, op. cit .• pp. 156-157. 
E. Espinosa 38 Descripción retórica ... 
visibles por sus vicios y más odiosos. Los defectos 
corporales y la fealdad a algunos les trajeron desprecio. Los 
vicios del ánimo se igualan en cantidad a las dotes, y se 
alaban o vituperan así como los del cuerpol5. 
1; Idem. 
E. Espinosa 39 Descripción retórica ... 
II.3. Presencia medieval de la retórica 
Durante casi un siglo -desde 1175 hasta poco antes de 1280-, 
los maestros europeos de gramática produjeron seis obras 
latinas acerca de la versificación, a las que sólo cabe 
considerar como preceptivas. Son ellas, el Ars versificatoria 
(1175), de Mateo de Vendome; la Poetria nova (1208-1213) y el 
Documentum de modo et arte dictandi et versificandi (después 
de 1213), de Godofredo de Vinsauf; el Ars versificaria 
(1215), de Gervasio del Melkley; el De arte prosayca, metrica 
et rithmica (después de 1229), de Juan de Garland, y el 
Laborintus (después de 1213 y antes de 1280), de Eberhard el 
Alemán. Cada una de estas obras procura aconsejar al escritor 
que desee componer versos en el futuro; por cuanto cada una 
presenta los preceptos nacidos de la experiencia y la 
observación, y los transmite como exhortaciones a descubrir, 
ordenar,planear y redactar, cada una de las seis participa 
de la esencia del espíritu preceptivo que siempre ha 
caracterizado a la retórica1 . 
El significado del término "gramática", tal como hoyes 
conocido, ha sido drásticamente recortado en comparación con 
el sentido más amplio que poseía. Para nosotros, señala 
únicamente los cánones de "corrección'" en el uso, o a lo 
sumo, la sintaxis, esto es, el estudio de la estructura de 
las frases. Cuando hablamos de la épica, de las narraciones 
de ficción o de la poesía lírica, o de formas escritas tales 
como el cuento o la novela, las definirnos con el término 
"literatura H , y no el de "gramática-o 
1 Cfr. James J. Murphy, La retórica en la Edad Media, p. 145. 
E. Espinosa 
Los primeros 
distinción. 
40 
gramáticos medievales 
Descripción retórica . .. 
no hacian tal 
El ars grammatica no era sólo corrección en el hablar o 
el escribir (ars recte loquendi) , sino también el estudio de 
lo que hoy llamariamos literatura (enarratio poetarum, o 
análisis e interpretación de las obras literarias 
existentes) . 
Los gramáticos se enfrentaron con la presencia de la 
antigua retórica ciceroniana, además de dos movimientos 
nuevos destinados a marcar hitos en la evolución medieval de 
la retórica: el ars dictaminis y el ars praedicandi. Ambos 
estaban comprometidos con la diversidad, adaptaban las 
teorías básicas a las necesidades especificas de los 
escritores o los oradores. De esta manera Cicerón se 
convirtió en la influencia dominante sobre el discurso 
medieval, y ejerció un profundo efecto en la teoria europea, 
que perduró prácticamente hasta nuestro tiempo. 
El ars dictaminis es un invento auténticamente medieval 
que constituye una ruptura radical con la práctica retórica 
antigua. 
Se insistía mucho en que el lenguaj e era esencialmente 
verbal. Por ejemplo, Platón afirma en su Fedro que la 
escritura distorsiona el lenguaje oral. La aseveración básica 
de Aristóteles es que "las palabras habladas son símbolos de 
experiencias mentales, mientras que las palabras escritas son 
símbolos de las palabras habladas,,2. Retóricos romanos corno 
Cicerón y Quintiliano siguen la linea de Isócrates al 
declarar que el discurso es la base de todo orden social. Por 
Apud J. J. Murphy, e n op . c i t. , p. 202. 
E. Espinosa 41 Descripción retórica . . . 
lo tanto, no es sorprendente que el mundo antiguo no 
produjera ninguna doctrina retórica independiente sobre la 
escritura. Las cartas elocuentes, como los discursos, fueron 
fruto de una vasta educación retórica, al trascender los 
dictados de cartas a los amanuenses y encargarse de su 
escritura, de manera particular, tuvo que aparecer el ars 
dictaminis. 
El ars dictaminis es importante en la historia de las 
artes del discurso como un raro ejemplo de retórica aplicada. 
Sus tratados merecen estudios ulteriores y el constante 
examen de este campo podría aclararnos las complej as 
relaciones que en el Medievo existieron entre los conceptos 
del lenguaje y sus usos sociales3 • 
La predicación no es un invento medieval, ni siquiera 
cristiano, lo oral 
liturgia judía, 
estaba 
que los 
tan compenetrado 
ritos hebreos 
con la antigua 
habi tuales ya 
suministraban a Jesucristo 
tradicionalmente aceptado, para 
recordar que, si bien el mensaje 
un esquema corriente, 
sus discursos. Debemos 
religioso de Cristo era 
revolucionario, sus métodos de comunicación no lo eran. Su 
predicación tuvo lugar en una cultura habituada a este 
procedimiento retórico en particular. 
El culto ortodoxo de la sinagoga en aquella época 
constaba de tres elementos básicos: oración, lectura bíblica 
y exégesis de las Escrituras. Los tres eran orales. La 
oración, o invocación directa a Dios, podía decirla en voz 
alta un delegado (sacerdote, rabí) de la congregación, o toda 
la grey, en coro. También los pasajes de Las Escrituras, si 
3 Cfr. J. Murphy, op . cit . , p. 274. 
E. Espinosa 42 Descripción retórica ... 
se leían en voz alta, tenían valor de plegaria. El estudio 
formal de los textos bíblicos era el segundo elemento 
importante de la liturgia. Consistía en leer de viva voz un 
texto, y en comentarlo oralmente para exponer su significado 
o aplicar su mensaj e. Ampliando la discusión, se acogían 
diversas opiniones para que participasen los hombres adultos 
de la congregación. 
Para la mentalidad medieval, aún la predicación de 
Cristo seguía una pauta tan vieja como la creación, 
establecida ya por Dios Padre. La predicación era el segundo 
acto de Dios después del de la creación del hombre y durante 
muchas edades constituyó el medio primordial de comunicación 
entre Dios y el hombre. 
Jesucristo introdujo un elemento nunca antes puesto en 
acción en la historia humana anterior: una orden directa a 
sus seguidores de que difundieran sus ideas a través del 
lenguaje4 • Así, la predicación se convierte en 
responsabilidad fundamental de los seguidores de Cristo, en 
todo lugar y tiempo hasta la consumación de los siglos. Ni 
los griegos ni los romanos antiguos fueron nunca tan lejos. 
Incluso, a los judíos se les había pedido salvaguardar la 
Palabra, pero no difundirla a toda la humanidad. Todo el 
aparato hermenéutico de la erudición hebrea estaba fundado en 
el supuesto de que las Escrituras eran un cuerpo finito, si 
bien misterioso, de escritos confiados sólo a Israel. 
Por el contrario, la orden de Cristo apuntaba a una meta 
infini ta que exigía un esfuerzo oratorio enorme y continuo, 
de alcances mundiales. No debía haber distinción entre los 
oyentes ni perpetuarse la dicotomía de creyente y foráneo, y 
ello cargaba a los apóstoles y sus sucesores con una 
• Ibid., p. 281. 
E. Espinosa 43 Descripción retórica ... 
responsabilidad aterradora, agudamente sentida a lo largo de 
la vida de la iglesia cristiana. 
Roberto de Basevorn declara lisa y llanamente: "La 
predicación y la enseñanza son necesarias para la Iglesia." 
Santo Tomás de Aquino llama a los predicadores "la boca de 
Jesucristo", y añade: "Predicar es la más noble de todas las 
funciones eclesiásticas"s. 
La segunda fase de la teoría de la predicación la 
constituye el De "doctrina Christiana de san Agustín, 
terminado en 426. Desde esta fecha hasta el siglo XIII, sólo 
hay aportes ocasionales y bastante generales, en libros tales 
corno Cura pastoralis (591) de san Gregario Magno, De 
institutione clericorum (819) de Rabano Mauro, Liber quo 
ordine sermo fieri deveat (1084) de Guiberto de Nogent, y De 
arte praedicatoria (1199) de Alano de Lila. 
La tercera fase comienza en la primera mitad del siglo 
XIII con la aparición relativamente súbita de una teoría 
plenamente desarrollada sobre predicación "temática". De esta 
fase, que se extiende hasta la Reforma, han llegado a 
nosotros más de 300 tratados, entre ellos de escritores corno 
Tomás de Salisbury, Ricardo de Thetford y Alejandro de Ashby, 
ellos establecieron un modus o forma de predicación basada en 
divisiones y amplificaciones. La Forma praedicandi (1322) de 
Roberto de Basevorn es un manual típico que encarna casi 
perfectamente todo el movimiento. 
La palabra griega que equivale a predicar se deriva de 
un término que significa proclamar, esto es, anunciar corno un 
heraldo alguna noticia; así pues, la palabra latina 
evangelium significa "portador de buenas noticias,,6. 
5 Idem. 
6 Ibid., p. 283. 
E. Espinosa 44 Descripción retórica . . . 
Existía una distinción de niveles en la capacidad del 
auditorio, es decir, dividía a la humanidad en cultos e 
incultos, creando un método homilético especial para cada 
categoría, pero su efecto principal era el de recordar a cada 
predicador la cautela debida a las diferencias de auditorio. 
Un rasgo importante en la predicación de Jesucristo es 
el que trata de su insistencia en que el universo visible 
sirve de paradigma de la realidad divina, es decir, que los 
seres humanos pueden

Continuar navegando