La-Rosa-Blanca-Analisis-de-un-movimiento-universitario-en-oposicion-al-regimen-de-Hitler-en-Alemania

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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO 
 
FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS 
 
LA ROSA BLANCA. ANÁLISIS DE UN MOVIMIENTO 
UNIVERSITARIO EN OPOSICIÓN AL RÉGIMEN DE HITLER EN 
ALEMANIA 
 
TESIS QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE LICENCIADA EN 
HISTORIA PRESENTA: 
 
TANIA ELIZABETH CARDOSO GONZÁLEZ 
 
 
DIRECTORA DE TESIS: MARÍA ESTELA BAEZ VILLASEÑOR 
 
 
 
CIUDAD UNIVERSITARIA MARZO DEL 2006 
 
 
 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
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Había en Alemania una oposición que se vio cada vez más debilitada por sus 
propios sacrificios y por una política internacional estremecedora, pero que 
figura entre lo que hay de más noble y de más grande en la historia política de 
todos los pueblos. Aquellos hombres lucharon sin tener ayuda del interior o del 
exterior, únicamente movidos por la inquietud de su conciencia. Mientras 
vivieron, fueron para nosotros invisibles e irreconocibles porque tenían que 
camuflarse. Sus muertes revelan la Resistencia. Esas muertes no pueden 
justificar todo lo que pasó en Alemania. Pero los actos y sacrificios de aquellos 
hombres son, pese a todo, el cimiento de una renovación. Esperemos que 
llegue el día en que sea apreciado como se debe el heroico capítulo de la 
historia interior de Alemania. 
 
 
 
 Winston Churchill 
 (Fragmento del discurso que ofreció a 
 la Cámara de los Comunes en 1946) 
 
 
 
 
 
 
 
 
RECONOCIMIENTOS 
Son muchas las personas a las que podría dedicar este trabajo por lo que 
espero no descartar a nadie importante. 
A la Universidad Nacional Autónoma de México y a la Facultad de Filosofía y 
Letras debo la realización final de este importante paso en mi carrera. 
Agradezco especialmente a la doctora Estela Báez Villaseñor, quien representa 
una importante motivación en mi vida, además de un ejemplar modelo de 
sabiduría y grandeza personal. Por todo lo valioso que me has enseñado, 
gracias. 
A mis lectores y queridos profesores, Ricardo Gamboa, Enrique Placencia, 
Juan Manuel Romero y Vera Valdez, les agradezco el apoyo que me brindaron 
en el perfeccionamiento de este trabajo, así como sus grandes enseñanzas 
durante el tiempo en el que fui su afortunada alumna. 
Al resto de mis excelentes profesores de la carrera, Rosa Ascobereta, Marcela 
Corvera, Javier Rico Moreno, entre otros, agradezco Profundamente los 
conocimientos y herramientas que me brindaron para mi superación personal y 
profesional. 
También agradezco todo el apoyo recibido del equipo de la Biblioteca del 
Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM, comandado por la maestra 
Esther Arnaiz, durante el tiempo en el que realicé mi servicio social ahí. 
Por otro lado, dedico este trabajo a mi familia que me ha apoyado a lo largo de 
mi vida. Mis padres fueron incansables patrocinadores económicos y 
emocionales de mi vida escolar. A ellos les debo en gran parte la realización 
de este sueño, gracias infinitas por ser ustedes, los quiero. 
A mis hermanos, que de igual forma me han alentado a seguir adelante, 
superándome personal y profesionalmente, gracias. A mi gran amigo 
Abraham Sánchez agradezco la motivación y apoyo que desde siempre me ha 
brindado. 
Por último y no por eso menos importante, agradezco a Octavio Sánchez 
Ortega quien además de ser mi novio e incomparable amigo, siempre me dotó 
de un incondicional apoyo emocional para la realización de esta tesis. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
ÍNDICE GENERAL 
 
ÍNDICE GENERAL…………...…………………………………………. p. 1 
I. INTRODUCCIÓN……………………………………………………... p. 2 
II. ANTECENDENTES……………………………………………….... p. 7 
1. El tratado de Versalles (1919)……………………………………. p. 7 
2. El fracaso de la República de Weimar (1919-1933)…………... p. 9 
3. Ascenso del Nazismo…………………………………………….. p. 13 
4. Adoctrinamiento del Tercer Reich 
 (Recursos y herramientas)……………………………………… p. 20 
5. La Juventud Hitleriana…………………………………………… p. 25 
III. SEGUNDA GERRA MUNDIAL………………………………….. p. 31 
1. Alemania y el conflicto bélico………………………………….. p. 31 
2. La resistencia antinazi…………………………………………... p. 39 
3. La familia Scholl………………………………………………….. p. 48 
IV. LA ROSA BLANCA……………………………………………… p. 65 
1. Su formación e ideología. Alexander Schmorell, Chistoph 
 Probst, Willi Graf y Hurt Huber………………………………… p. 61 
2. Desarrollo y difusión del movimiento Los Panfletos de La 
 Rosa Blanca……………………………………………………….. p. 80 
3. El juicio y la ejecución. El fin de La Rosa Blanca…………. p. 118 
4. Fin de la Segunda Guerra Mundial. Alemania en la 
 Posguerra.……………………………………………………… p. 136 
V. CONCLUSIONES.…………………………………………………. p. 145 
VI. BIBLIOGRAFÍA…………………………………………………… p. 150 
APÉNDICE 
Los Panfletos de La Rosa Blanca…………………………………. p. 158 
Glosario de siglas.……………………………………………………. p. 180 
 
 2 
I. INTRODUCCIÓN 
La selección del tema La Rosa Blanca para elaborar mi tesis, es consecuencia 
del interés que siempre he tenido sobre la Alemania Nazi. Es muy común 
escuchar sobre campos de concentración, matanza de judíos e invasiones 
territoriales por parte de Adolf Hitler en Europa. Sin embargo, aunque son bien 
conocidos los opositores al régimen Nazi (comunistas y socialistas 
principalmente), hay que indagar en los sentimientos de la población alemana 
en general con respecto al Führer, pues si bien la mayoría de los alemanes 
confiaba en Hitler incondicionalmente y el Nacional Socialismo ya se había 
convertido en una sólida doctrina social, política y económica, hubo personas 
que se percataron de las consecuencias que traería sostener tal régimen. Éste 
fue el caso de Sophie y Hans Scholl, estudiantes de la Universidad de Munich, 
que a pesar de apoyar en un inicio el Nazismo, pronto se desilusionaron de él 
al vivir en carne propia la realidad de la doctrina hitleriana, mediante su 
participación en La Juventud Hitleriana. El resultado de esta disidencia fue el 
movimiento de La Rosa Blanca. 
No existe material bibliográfico disponible en español sobre el tema. Sólo en 
muy pocos libros especializados en Alemania Nazi, se menciona brevemente el 
trabajo de los Scholl y sus compañeros. Las fuentes especializadas en La 
Rosa Blanca están escritas en alemán y algunas otras en inglés, de las cuales 
al parecer, ninguna es posible adquirir en México. Fue a través de INTERNET, 
que logré rescatar amplia información acerca de la vida de Sophie y Hans 
Scholl junto con su desarrollo hasta desembocar en la fundación de La Rosa 
Blanca y su fatal desenlace. También obtuve datos sobre los demás 
involucrados en el movimiento como Alexander Schmorell, Chistoph Probst y 
 3 
Kurt Huber entre otros. Los únicos libros específicos que pude adquirir sobre el 
movimiento, mediante Amazon.com fueron The White Rose, escrito por Inge 
Scholl, hermana de Sophie y Hans, el cual fue de vital ayuda y otro escrito por 
Lillian Garret-Groag, que sólo es una obra de teatro que narra el proceso legal 
por el que fueron sometidos los miembros del movimiento. Afortunadamente,existe bibliografía abundante sobre el contexto de mi tema, es decir, Europa 
desde el fin de la Primera Guerra Mundial a la Segunda, la Alemania Nazi y la 
oposición política abierta. 
La investigación partió de algunas preguntas esenciales como: ¿Qué fue La 
Rosa Blanca?, ¿Quiénes integraron ese grupo?, ¿Cómo surgió y se 
desarrolló?, ¿Cuáles fueron sus objetivos?, ¿En qué contexto de desenvolvió? 
y ¿En qué momento cesaron sus actividades? Lo que esta investigación 
propone es que La Rosa Blanca fue un movimiento civil y específicamente 
estudiantil sin precedentes, pues se propuso sostener la resistencia pacífica 
dentro de un régimen totalitario y desquiciado, sirviéndose de bases 
intelectuales y no políticas. Así mismo, los miembros de La Rosa Blanca 
lograron marcar un hito en la historia de Alemania del siglo XX, pues hasta hoy, 
son reconocidos como mártires de la libertad. 
Para sustentar la propuesta anterior, mis principales objetivos consistieron en 
examinar el contexto histórico de la Alemania de entreguerras y desarrollar el 
ascenso del nazismo al poder y su consolidación como un régimen totalitario. 
Del mismo modo, traté de descubrir cómo algunos sectores de la población 
alemana se quitaron el velo del Nazismo para comenzar la resistencia, 
evidenciando con esto, una fractura en aquella sociedad supuestamente unida 
ante el esfuerzo bélico. Con ello, fue fundamental analizar el movimiento de 
 4 
resistencia llamado La Rosa Blanca, desde sus orígenes hasta su 
desaparición, descubriendo a sí, los efectos y consecuencias que conllevó. 
Como ya mencioné, las principales fuentes utilizadas consisten en bibliografía 
general y especializada en Alemania y la Segunda Guerra Mundial, un par de 
revistas de carácter histórico acerca de los mismos temas, el libro de Inge 
Scholl, The Whte Rose y la información obtenida en sitios web sobre La Rosa 
Blanca. 
En cuanto a la metodología utilizada, me enfoqué al rescate de los aspectos 
sociales del tema principal. Sé que Historia Social es un término bastante 
criticado en cuanto que no posee gran alcance y por lo tanto, veracidad. Este 
tipo de análisis nos da cuenta del comportamiento de los individuos dentro de 
una sociedad, de ahí que puede abarcar tanto aspectos económicos y 
políticos, como culturales. Sin embargo, dado que este trabajo rescata 
procesos ideológicos y el desenvolvimiento de un conjunto de personajes 
dentro de un marco social, económico, político y cultural determinado, la 
Historia Social me ofreció herramientas para el análisis de la actuación de 
dichos personajes. Además, es cierto que los historiadores trabajamos con 
datos de hechos específicos, pero con base en una totalidad que les da 
contexto. Así, La Rosa Blanca es un movimiento social, que aunque en sí no 
sea de trascendencia política ni económica tuvo el mérito de ser un proyecto de 
resistencia contra un gobierno que estaba afectando las libertades individuales 
naturales. Sin embargo, no tuve que enfocarme sólo en eso, sino necesité 
encontrar causas y desarrollo. Es por ello, que trabajé forzosamente en un 
contexto político, económico, social, cultural e incluso intelectual. De esta 
forma, la investigación se tornó diversa, pese que el tema principal fue social. 
 5 
Así mismo, las fuentes fueron analizadas de manera objetiva para lograr 
rescatar lo que era de importancia en la realización de los objetivos principales. 
Así, en el primer capítulo se retoman los antecedentes de la Alemania Nazi, es 
decir, las condiciones sociopolíticas y económicas de Europa y en especial de 
Alemania al terminar la Primera Guerra Mundial. Del mismo modo, se 
mencionan las reglas del Nacional Socialismo ya establecido en Alemania, su 
proyección y aceptación entre la población alemana, en especial entre la 
juventud. 
En el segundo capítulo se desarrolla el contexto bélico hasta 1943, lo que sirvió 
de terreno para el desarrollo e intensificación de la doctrina Nazi. Se habla de 
los principales movimientos de resistencia política e incluso religiosa dentro de 
Alemania y sus terribles consecuencias. Además, comienzo a ubicar 
históricamente a los protagonistas de esta investigación, es decir, los hermanos 
Scholl y los compañeros que llegarían a formar el movimiento de resistencia 
llamado La Rosa Blanca. Para ello, fue fundamental indagar sobre sus raíces 
familiares y experiencias escolares y emocionales para descubrir el momento 
en que surge en ellos el espíritu de rebelión. 
El último capítulo se enfoca completamente en la fundación del movimiento y 
sus razones, así como la participación activa de cada uno de los miembros. 
También, se analiza el trabajo de La Rosa Blanca, el cual consistió en una 
serie de panfletos de resistencia conciente y meticulosamente elaborados y 
difundidos en vasto territorio alemán. Finalmente, se redondea el tema con el 
desenlace del movimiento, la muerte de sus principales integrantes, el fin de la 
Segunda Guerra Mundial (1944-1945), las condiciones sociopolíticas y 
 6 
económicas de Alemania en la posguerra y el legado que La Rosa Blanca dejó 
no sólo en territorio alemán, sino en diversos países del mundo. 
 
 8 
II. ANTECEDENTES 
1. El Tratado de Versalles (1919) 
En medio del caos y la tensión que trajo consigo el fin de la Primera Guerra 
Mundial, tuvieron lugar las conferencias de paz de 1919 en Paris y en Versalles 
fue donde se decidió qué hacer con el asunto de Alemania. George Lloyd 
Georges Clemenceau y Vittorio Emanuele Orlando, representantes de 
Inglaterra, Francia e Italia respectivamente, discutieron los 14 Puntos 
propuestos por Woodrow Wilson, presidente de los Estados Unidos, los cuales 
fueron incluidos en el tratado, sobre todo el que se refería a la creación de una 
Sociedad de Naciones que sería un órgano de discusión para resolver 
conflictos internacionales.1 
Francia, muy perjudicada por la guerra, pidió seguridad frente a Alemania y 
obtuvo el control por quince años de las minas de carbón del Sarre 
(administradas por la Sociedad de Naciones) para que en 1935 se hiciera un 
plebiscito. Así mismo, recuperó los territorios de Alsacia y Lorena y la región 
de Renania sería liberada de las tropas alemanas para que se instalaran unas 
aliadas. Por otro lado, para detener el contagio soviético a Occidente, se 
consolidó un nuevo Estado Polaco con nuevos territorios como Poznan y 
Prusia Occidental, mientras que Danzig, vieja ciudad alemana, se proclamó 
libre.2 
Alemania además perdió todas sus colonias en África y el Pacífico, las cuales 
fueron repartidas por la Sociedad de Naciones entre Francia, Inglaterra y 
Japón. El ejército alemán quedó reducido a 100,000 hombres y se prohibió el 
 
1
 Palmer R. y J. Colton, Historia Contemporánea…, p. 457-458 
2
 Ibid., p. 458 
 9 
reclutamiento anual de civiles, así como tener artillería pesada, aviación y 
submarinos. Se decidió que, como parte del pago de la guerra, Alemania debía 
entregar su marina mercante, hacer entregas de carbón y que abandonase las 
propiedades de ciudadanos particulares en el extranjero. Después se fijó una 
gran indemnización de 35 millones de marcos. Además se le obligó a firmar la 
cláusula Delito de guerra, en la que Alemania aceptaba la responsabilidad de 
los daños de la Primera Guerra Mundial.3 
Francia, por su parte, deseaba eliminar la competencia alemana, pero 
Inglaterra y Estados Unidos querían fortalecerla y hacerla aliada de Occidente 
como contraparte al comunismo triunfante de la URSS. De ahí la creación de 
un cordón sanitario desde Finlandia a Rumania. Como era de esperar, el 
Tratado de Versalles causó gran indignación en Alemania, sobre todo por exigir 
la extradición y juicio de supuestos responsables de la guerra, comenzando por 
Guillermo II. El canciller Philipp Scheidemann se rehusó a firmarlo,pero por 
voto de la Asamblea, por fin se firmó el 28 de junio de 1919.4 
Aunque el Tratado de Versalles consiguió la paz con Alemania, no logró 
estabilidad internacional pues además del gran descontento alemán, a Italia 
tampoco le correspondió gran botín territorial, lo que provocaría nuevos 
conflictos europeos. Además, Estados Unidos no firmó el tratado por su 
política aislacionista y a lo largo de la década siguiente se incubaron 
sentimientos nacionalistas radicales en Alemania, que desembocaron en la 
ascensión al poder de Adolf Hitler.5 
 
3
 Ibid., p. 458-460 
4
 Sánchez Jiménez, José, “La República de Weimar” en Siglo XX...,.p. 57-58 
5
 Hobswan, Historia del siglo XX..., p. 42 
 10 
2. El fracaso de la República de Weimar (1919-1933). 
Después del fracaso de la revolución comunista en Alemania ante la social 
democracia, con la muerte de los líderes Rosa Luxemburgo y Karl Liebknecht, 
se celebraron elecciones en enero de 1919 y se nombró a Friedrich Ebert como 
presidente del Reich que tendría sede en la ciudad de Weimar.6 En agosto se 
promulgó la Constitución que nombraba al Reich como una república 
compuesta por diez y siete Estados independientes y con un poder legislativo 
integrado en dos cámaras (Reichstag y Reichsrat).7 
El presidente no era el jefe de gobierno, sino que nombraba a un canciller 
encargado de gobernar con sus ministros, pero sí gozaba de poderes 
extraordinarios en casos de emergencia, para utilizar al Ejército e incluso para 
disolver el Parlamento (Reichstag). El periodo de gobierno de éste era de 
cuatro años y el de la presidencia de siete. La nueva república estaba 
constituida por una democracia parlamentaria y organizaba la vida política a 
través de partidos que expresaban y respondían a las necesidades 
socioeconómicas alemanas. Por un lado estaban los socialdemócratas, 
demócratas y el Zentrum Católico (Coalición de Weimar), que apoyaban la 
República. Por otro lado, estaba la oposición de izquierda (socialistas 
independientes y comunistas). Finalmente estaba la oposición de derecha 
deseosa de un imperio o un Reich autoritario (populistas, nacional-alemanes y 
nacionalsocialistas). La nueva Alemania seguía teniendo la antigua estructura 
 
6
 Sánchez Jiménez, op. cit., p. 51-70 
7
 El Reichsrat era una Cámara legislativa que funcionó como Consejo Federal compuesto por 66 
delegados de 
los Estados Alemanes, sometidos a las instrucciones de sus gobiernos respectivos. En materia de 
legislación, tenía derecho al veto y suspensión de las leyes. El Reichstag era una Cámara Parlamentaria 
que representaba principal y directamente al pueblo, realizaba proyectos de ley que aceptaba previamente 
el Reichsrat, para después ser votadas.. Entre sus funciones estaba fijar el presupuesto público, ratificar 
tratados e incluso decidir sobre la guerra o la paz. (Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo 
Americana, Tomo L,…p 339-344 
 11 
jerarquizada, es decir, clases altas con gran poder político, económico y social, 
un Ejército tradicional y conservador al igual que la burocracia, una burguesía 
media y clases trabajadoras con mejor nivel de vida, pero política y 
económicamente pasivas.8 
Sin embargo, desde sus inicios, la República de Weimar sufrió múltiples crisis: 
una económica por las perdidas territoriales, las reparaciones de guerra, la 
devaluación monetaria y la elevación de los precios, otra social por las 
tensiones expresadas en huelgas, manifestaciones y enfrentamientos; y una 
más política por las indemnizaciones y las relaciones con Francia y Rusia. Se 
lidiaba con la ocupación francesa en el Rühr para forzar el pago y los 
movimientos separatistas en Baviera. En 1920 se da el Golpe de Wolfgang 
Kapp, golpe de Estado de un alto funcionario prusiano, quien junto con el 
Ejército, Erich Ludendorff y Walther Luttwith, logró nombrarse canciller y 
pretendió restaurar el viejo orden mientras que el gobierno se refugió primero 
en Dresde y luego en Stuttgart.9 La población organizó la resistencia civil y 
deshizo el movimiento, pues el gobierno convocó a una huelga general antes 
de huir a Dresde, la cual fue organizada y dirigida por los sindicatos socialistas. 
Como había pleno empleo en esos momentos, la huelga tuvo efecto óptimo. 
Lo más sobresaliente fue que la resistencia se vio apoyada por 
socialdemócratas, católicos y, aunque descontentos con la república, 
comunistas Este movimiento atacó la coalición de Weimar y la derrotó en 
elecciones, formándose una nueva coalición burguesa de derecha.10 
 
8
 Burleigh, M., El Tercer Reich…, p.81 
9
 Idem. 
10
 Ibid., p.82-83 
 12 
En 1922, hubo otro gobierno de coalición de socialdemócratas y populistas al 
mando de Gustav Stresemann, quien ordenó la resistencia pasiva (con 
huelgas) ante las invasiones de Francia y Bélgica en el Ruhr y quien a su vez 
vivió la mayor crisis económica en la que la moneda se devaluó tanto, que un 
marco llegó a equivaler cuatro billones de dólares en 1923. Debido a la 
movilización, el gobierno aprobó en julio de 1922, una ley para la protección de 
la República y aplacar así la indignación popular. Con esta inflación, los 
obreros se empobrecieron más y la burguesía se proletarizó, pero las 
empresas lograron deshacerse de sus deudas. En 1924 se reconstruyen las 
finanzas junto con el sistema monetario alemán y se normalizaron las 
relaciones con los aliados gracias al acuerdo Stresemann-Briand-
Chamberlain.11 
La recuperación económica produjo la pacificación política interna, ya que 
cesaron un poco las demandas sociales, y mejoró las relaciones exteriores 
porque las deudas se estaban saldando. Así, en la conferencia de Locarno en 
1925, se logró la reconciliación franco-alemana e incluso Alemania entró a la 
Sociedad de Naciones. La prosperidad duró hasta 1928. Uno de los aspectos 
que llevaron a la caída de la República de Weimar fue la ley constitucional de 
un presidencialismo autoritario que, entre otras cosas, dio un papel primordial 
al Ejército en el gobierno, lo que Adolf Hitler llevaría a crueles extremos. 
Mientras tanto, la Crisis del ‘29 llegó a Alemania y para 1930, el campo, la 
industria y la Banca tenían serios problemas que se trataron de resolver con 
deflación monetaria, para sostener la moneda, pero ello provocó un gran 
 
11
 Bracher, K., La dictadura alemana, Vol. 1. p233 
 13 
desempleo, lo que derivó en tensiones sociales con una mirada hacia la 
izquierda comunista.12 
Asi mismo, Hitler y sus colaboradores nazis (nacionalsocialistas) fueron 
cobrando más presencia política, cuando este presidencialismo dejó de lado al 
Parlamento. Así, el Reichstag jugaba ahora, un papel pasivo. Este movimiento 
atacó la coalición de Weimar y la derrotó en elecciones, formándose una nueva 
coalición burguesa de derecha, mientras que el gobierno presidencial y 
autoritario se alejaba de la opinión pública y se dirigía hacia el radicalismo.13 
Entre 1919 y 1933 hubo veinte gobiernos en Alemania. El más duradero fue la 
“gran coalición” de Herman Müller (1928-1930) y esta gran inestabilidad política 
era lo que le restaba respeto al Reichstag, además de que el activismo se 
propagó en Baviera, Renania, Hesse, Pomerania, Schleswig-Holstein y 
Wattemberg, evidenciando ya una gran fractura en la sociedad alemana. A la 
muerte del presidente Ebert en 1925, le sucedió Paul Hindenburg, quien era 
más popular y recurría a retórica bélica, hablaba del deber, del sacrificio y de la 
raza, prometió restaurar la autoridad y el orden, lo que alentaba la movilización 
en masa de posturas radicales ansiosas de un caudillo dictador.14 
Al terminar el periodo presidencial de Hindenburg, secontempló la restauración 
de la monarquía, pero se decidió por la reelección del presidente y el nuevo 
canciller fue Heinrich Brüning, quien siguiendo con estas medidas dictatoriales, 
disolvió el Reichstag con mayoría demócrata-republicana. Fueron prohibidas 
las S.A. y las S.S. pero poco después se autorizaron de nuevo.15 Se eligió 
como canciller entonces, a Franz von Papen, quien en julio de 1932 firmó el 
 
12
 Idem. 
13
 Idem. 
14
 Burleigh, M, op. cit.., p. 91-115 
15
 De las cuales hablaré más adelante 
 14 
acuerdo de Lausana, poniendo fin a las indemnizaciones de guerra, aunque 
tuvo que lidiar con Hitler y los nazis que cometían atrocidades contra 
comunistas y judíos. Von Papen dejó la cancillería para que la tomara Kart Von 
Schleicher, quien se presentaba como “General Social” y buscaba el apoyo de 
los obreros, así como un acercamiento hacia los círculos sindicalistas.16 
Como dice Hobswan, la República de Weimar no fue más que el imperio 
derrotado del kaiser; es decir, se había logrado conservar el pacto entre 
Estado, patrones y trabajadores organizados, pero la Crisis del ‘29 
desestabilizó el sistema. Así, la industria y el gobierno consideraron que se 
debían realizar recortes económicos y sociales, provocando el desempleo 
generalizado y agudizando la crisis de Weimar. A mediados de 1932, los 
nacionalistas y los comunistas derrotaban considerablemente en votos a los 
partidos de la República.17 
3. Ascenso del Nazismo. 
Adolf Hitler nació en 1889 en Braunau, Austria. Se consideraba un germano 
puro y se hizo violentamente antisemita. Se convirtió en enemigo de la 
aristocracia, el capitalismo, el marxismo, el cosmopolitismo, el antinacionalismo 
y la hibridación.18 Es decir, A Hitler no le gustaba la existencia de diversas 
nacionalidades en una sola ciudad, ni la suntuosidad de la corte, ni el halago a 
los soberanos. Al mismo tiempo, condenaba a los sindicatos de obreros con 
ideas marxistas (comunistas) y las manifestaciones contra empresarios. Pero, 
lo que más repudiaba, era el éxito de los judíos en el ámbito profesional y 
 
16
 Klein, Claude, De los espartaquistas al nazismo..., p. 96-104 
17
 Hobswan, op. cit., p. 134, 142-143 
18
 Palmer, op. cit., p. 572 
 15 
económico, colocados muchos de ellos en el gobierno, pues Hitler los veía 
como extranjeros entrometidos en asuntos alemanes.19 
Hitler participó como soldado en la Primera Guerra Mundial y al terminar ésta 
entró al DAP (Partido Obrero Alemán), que era un pequeño grupo de 
populistas, nacionalistas, racistas y algunos obreros residentes en Baviera, 
donde abundaban las sociedades secretas lideradas por oficiales del Ejército 
descontentos o por individuos que se negaban a adaptarse al nuevo 
régimen.20 
El DAP posteriormente añadió el calificativo de National-Sozialistische, 
apareciendo con las siglas NSDAP, mejor conocido como Partido Nazi. Hitler 
así, hizo del grupo una estructura sólida y jerarquizada con miembros de 
absoluta confianza y con una organización paramilitar paralela o sección de 
asalto, las Sturm Abteilungen (S.A.).21 Para 1921, Hitler se convirtió en el líder 
del NSDAP y estableció el principio de que él sería el caudillo inapelable que 
ordenaría la doctrina y tomaría las decisiones. Alemania estaba prácticamente 
en bancarrota y era muy difícil seguir pagando los costos de la guerra. 
Además, con el paro de las industrias del Ruhr, la economía se hundía cada 
vez más dejando a la población en la miseria. Así, el fracaso del gobierno de 
Weimar en hacer frente a las deudas de guerra y la inflación, hicieron parecer 
sensata la propuesta de Hitler de un cambio político. Lo que Hitler tenía 
planeado, era constituir un estado dictatorial en donde las decisiones fueran 
tomadas por el mejor estratega político (es decir él) para llevar a Alemania por 
el camino del éxito social, político, económico y racial. 
 
19
 Arostegui, Julio, “El nazismo alemán” en Siglo XX…, p.39 
20
 Ibid., p.40 
21
 Ibid., p. 40-42 
 16 
En noviembre de 1923, Hitler, Hermann Göring y tropas de la S.A. comenzaron 
la Revolución Nacional con el propósito de crear un gobierno bávaro con Hitler 
como presidente y Ludendorff como jefe del Ejército. Este acontecimiento se 
conoció como la Marcha sobre Berlín, remedo de la Marcha sobre Roma de 
Benito Mussolini años atrás.22 
Los nazis no consiguieron tomar el poder y su manifestación fue recibida a tiros 
por el Reichwehr (Ejército). De ahí nació la estrategia de la “revolución legal”, 
con la que Hitler llegó al poder en 1933. El NSDAP fue disuelto a fines de 1923 
y Hitler fue encarcelado por un año, tiempo en el que escribió Mi Lucha. En 
esta obra, Hitler describió su vida y sus acciones anotando muchas de las 
bases que conformarían posteriormente su Tercer Reich. Así, habló entre otras 
cosas sobre el concepto de supremacía racial, es decir, la raza aria pura sería 
la dominadora de la humanidad, por ello no debía mezclarse, pues se 
degeneraría. Del mismo modo, estableció que el nacionalismo y el sacrificio 
por la patria eran indispensables para que ésta floreciera, incluso esto llegó a 
ser propaganda de guerra, lo que resultaba indispensable para alcanzar 
cualquier objetivo. También mencionó a los supuestos peligros de la patria, o 
sea el comunismo y los judíos, debido a su inferioridad ideológica y racial.23 
Uno de los aspectos más importantes de Mi Lucha, además de la doctrina 
racial, es que, dentro de este ámbito, sólo el más fuerte y apto sería el 
soberano adecuado. De ahí todo el entrenamiento físico y psicológico que se 
desarrolló con la Juventud Hitleriana. Además, mencionó aspectos que 
perfilaban un régimen dictatorial al anotar que junto a cada dirigente, hay 
 
22
 Shaw, Antony, Segunda Guerra Mundial..., p. 8-9 
23
 Hitler, Adolf, Mi Lucha…, p. 168 
 
 17 
consejeros que lo asesoran, pero la decisión definitiva, corresponde tomarla a 
uno sólo.24 
Para 1925, el NSDAP funcionaba de nuevo y se creó una nueva organización 
paramilitar de protección llamada Escalón de Protección, Schutz Staffel, las 
S.S. Mientras que la depresión económica del ‘29 benefició a los nazis, pues 
Hitler pudo culpar de la crisis financiera a los judíos antipatrióticos y a las 
conspiraciones comunistas. Ello se debió a que ya existía un odio histórico 
europeo hacia los judíos por su carácter reivindicativo, contestatario (por lo 
tanto antipatriótico) y su éxito económico. Aunado a su exacerbado racismo 
hacia la gente de Europa Oriental y su fantasioso deseo de constituir una raza 
pura y perfecta Hitler concibió la idea de eliminar a las vidas carentes de valor 
entre las cuales se encontraban los enemigos políticos, principalmente los 
comunistas.25 
En el ámbito político y social, los nazis ganaron terreno, derrotando al 
movimiento obrero, al Partido Social Demócrata (SPD), al Partido Comunista 
(KPD) y a los sindicatos que no lograron evitar que las masas se contagiaran 
del fascismo cada vez más en expansión. En 1932 Hitler asistió a las 
elecciones presidenciales donde Hindenburg fue reelecto y para enero de 
1933, el presidente nombró a Hitler canciller del Reich, quien lo convenció de 
disolver el Reichstag y en medio de la siguiente campaña electoral, el edificio 
del Reichstag fue incendiado (febrero de 1933) y los comunistas fueron 
culpados. Hitler no tardó en denunciar el Tratado de Versalles como 
humillación nacional, denunció la democracia de Weimar por producir la lucha 
de clases, la división y la debilidad del régimen. Para Hitler, la unidad nacional 
 
24
 Ibid., p. 198 
25
 Sobre lo que hablarémás adelante 
 18 
era de vital importancia para que un gobierno fuera exitoso, pues habiendo un 
líder respetable, enérgico y poderoso como gobernante, la gente se 
incorporaría a su ideología gustosa o no, como en efecto sucedió. 
De cualquier forma, tras las elecciones se acentuó el proceso de destrucción 
del parlamentarismo. La ley de autorización del 23 de marzo concedió poderes 
especiales al canciller, mientras que las leyes del 31 de marzo y 7 del abril, 
establecieron la unificación de los Estados del Reich, con lo que se acababa 
con la estructura federal. Los antiguos Lander, sólo serían simples distritos, lo 
que acabaría con los poderes locales. Como los nazis iban perdiendo escaños 
en el Reichstag antes de ser incendiado, Hitler convocó a los diputados, con 
excepción de los comunistas, para que le concedieran poderes dictatoriales, lo 
que le permitió posteriormente fundar su Tercer Reich.26 
El Tercer Reich o Tercer Imperio buscaba recuperar la grandeza de Alemania 
perdida con la República de Weimar. Se asumía que el Primer Reich fue el 
Sacro Imperio Romano Germánico de Otón I hasta la Paz de Westfalia (962-
1648). El Segundo Reich fue el de la dinastía Hohenzollern, quien unificó 
Alemania a partir de sus diversos reinos, bajo el proyecto de Otto von Bismarck 
(1871-1918).27 Poco después, murió Hindenburg y se implantó la figura del 
Führer, el guía, que reunía en sí todos los poderes del Estado. 
En diciembre de 1933, Alemania fue declarada Estado de Partido Único, al 
eliminar a los demás partidos y prohibir la creación de nuevos (Ley de unidad 
entre el Partido y el Estado). Así mismo, hubo conflictos entre la S.A. y el 
Ejército. Las primeras aspiraban a ser el Ejército del futuro, lo que era 
 
26
 Palmer, op. cit., p. 576 
27
 Diccionario Básico Espasa. Tomo 5, Madrid, Espasa-Calpe, 1980, p. 4104 
 19 
intolerable para los militares, Hitler apoyó al Ejército sobre las S.A. y en junio 
de 1934, se dio una matanza de miembros de la S.A. en Berlín y Munich, 
episodio conocido como La noche de los cuchillos largos (Blood Purge28). En 
agosto de 1934 se efectuó el Juramento de los soldados, donde se prometía 
fidelidad al Führer y en 1935, Hitler implantó el Servicio Militar para ampliar el 
Ejército e incluso se adhirieron los restos de la S.A. Mientras tanto, se dio una 
política económica de concentración de capital, disminuyendo el número de 
empresas por la creación de monopolios. 29 
También, se redujo la importación de alimentos y se protegió la agricultura, con 
lo que se logró superar la crisis económica y social. Además, la industria de 
guerra se activó y se desarrolló un nacionalismo intervencionista del Estado en 
la economía. Este control buscó la auto arquía, es decir, lograr que Alemania 
produjera lo que necesitara para no tener que participar en el comercio 
internacional y así no sacar el capital del país. Se fomentó el intercambio con 
Europa Oriental, pero sólo a través de trueques. 
Hitler disolvió los sindicatos obreros, las asociaciones profesionales, las 
asociaciones campesinas y religiosas y eliminó la autonomía de las 
universidades para someter a todo individuo e institución, a una ideología 
nacionalsocialista que crearía una elite para el Reich Milenario. Éste es un 
rasgo característico de los sistemas totalitarios. En este caso, el fascismo 
alemán, pues dado que se sugiere un cambio radical en el sistema político y 
social, éste debe perdurar por largo tiempo. Por lo que respecta a la justicia, el 
 
28
Wistrich, Robert, Whos´who in Nazi Germany…, p.285 
29
 Arostegui, op.cit., p. 43-44 
 20 
nazismo destruyó todo estado de derecho. Ahora la justicia la ejecutaban las 
S.S., que se convirtieron en un Estado Policiaco (Estado de la S.S.).30 
La lucha contra los judíos se relacionó con el poder económico y social que 
tenían. 
Para Hitler, los judíos eran detestables extranjeros en territorio alemán, por o 
que su riqueza económica era inaceptable ya que tal dinero, pensaba, era 
realmente de los alemanes y no de los judíos mismos. 
 La persecución antijudía se formalizó y se legalizó con las leyes de Nuremberg 
de 1935, las cuales dictaban la exclusión y marginación de los judíos de la 
sociedad y la política, su expropiación económica, su deportación y 
confinamiento en campos de concentración.31 El asesinato en 1938 del 
secretario del embajador alemán en París, Ernst von Rath, a manos de un 
joven judío (cuya familia había sido deportada), intensificó la propaganda 
antisemita. Esta retórica incendiaria desembocó en La Noche de los Cristales 
(Kristallnacht), ocurrida en noviembre del mismo año, cuando miles de 
negocios judíos fueron saqueados, se quemaron sinagogas y se destrozaron 
hogares. Cerca de 100 judíos murieron y 26 mil fueron llevados a campos de 
concentración en aplicación de la Ley de Custodia Protectora, poco antes de 
idear la Solución Final (Die Endlösung) en la que millones de judíos fueron 
exterminados.32 
4. Adoctrinamiento del Tercer Reich (Recursos y Herramientas). 
 
 
30
 Ibid., p.45-46 
31
 Ibid., p.47-58 
32
 Muchnik, Daniel, Negocios son Negocios…p. 202-203 
 21 
Considerando el hecho de que el Nazismo fue un régimen totalitario, los 
proyectos políticos y económicos tenían que marchar en empatía con los 
proyectos sociales. Es decir, la sociedad en su conjunto debía ser homogenea, 
debía poseer los mismos intereses y perseguir los mismos ideales. Es por eso 
que Adolf Hitler y sus brillantes asesores se dieron a la tarea de adoctrinar a la 
población con base en una idea común, la cual consistía en rescatar a 
Alemania de las injurias y recolocarla en su papel de potencia internacional. 
Por ello, la ideología nacionalsocialista halló una base concreta en una 
concepción racista que desembocó en el proceso de esclavización de los 
pueblos de Europa oriental. Supuestamente, los elementos racialmente 
valiosos eran los germanos rubios y de ojos azules.33 
Se emprendió una política eugenésica que iba desde tomar medidas para la 
esterilización hasta la procreación planificada, según criterios raciales así como 
se utilizó la eutanasia para liquidar a los parásitos.34 
De hecho, estas medidas se justificaron aún más porque se basaron en los 
principios evolucionistas de Herbert Spencer y Charles Darwin, sobre el 
desarrollo y selección natural de las razas. Así, muchos autores como Otto 
Ammon, Georges Vacher y Ludwig Glumplowics elaboraron proyectos para el 
exterminio de las razas inferiores, remarcando así, la supremacía de la raza 
aria.35 
En marzo de 1933 se inauguró un Ministerio de Propaganda del Reich en el 
que Joseph Goebbels desarrolló la propaganda totalitaria político-filosófica para 
ser difundida y en septiembre se creó la Cámara de Cultura del Reich 
 
33
 Bracher, op. cit. p. 337-344,vol. 1. 
34
 Ibid., p.339 
35
 Pastor P., op. cit., p. 230 
 22 
(Reichskulturkammer). La propaganda totalitaria es una forma de violencia, 
pues Goebbels decía es maravilloso ejercer poder sobre las armas, pero es 
aún más maravilloso ejercer poder sobre los corazones y las mentes de los 
hombres. 36 
Sin embargo, los nazis estaban convencidos de que estaban luchando por la 
libertad. Creían que estaban peleando por una auténtica revolución social 
benéfica. Por ello, adoptaron una postura anti-todo lo nacionalsocialista. 
Además, la organización del movimiento, sus símbolos, rituales y lenguaje, 
llegó a ser propaganda de guerra, para la guerra y por la guerra. Hablaban de 
pelear, luchar y morir, exaltando los sacrificios de sangre. Hitler hablaba en Mi 
Lucha, sobre que ser un líder significa saber cómo manejar a las masas.Él lo 
hizo, convirtiéndolas además, en fanáticas, juguetes de su política. Como él 
mismo dijo, ese fanatismo fue logrado gracias a que la propaganda estaba 
dirigida a las emociones de las personas y no a la razón.37 
De esta manera, de acuerdo con la doctrina hitleriana, los dos elementos más 
importantes para obtener el éxito de un movimiento, eran la propaganda y la 
organización, por ello, el lenguaje resulta muy importante como arma de 
propaganda. Así, en Mi Lucha, Hitler afirmaba que toda la propaganda debía 
ser popular y su nivel intelectual debía ser establecido de acuerdo con la 
capacidad y asimilación de las personas de mente más estrecha, a las cuales 
era dirigida. Mientras más modesto sea el aparato científico de propaganda y 
se preocupe exclusivamente por los sentimientos de las masas, más completo 
sería el éxito. Goebbels también habló de un total sacrificio por una idea, una 
 
36
 Pachter, H. M., National-socialist and fascist..,,p. 710 
37
 Fried, John, H. E., “Fascist militarisation and education...” en The Third Reich, p. 743 
 23 
misión que arde como un fuego sagrado. Con esto, los nazis estaban 
dispuestos a sacrificar al último hombre por una idea común.38 
Aludieron a los sentimientos de la gente y utilizaron mucho la palabra espíritu, 
como el espíritu de Alemania, el espíritu del proletariado, el espíritu del 
trabajador alemán, etc.39 Esto fue debido a la concepción religiosa que adoptó 
el nazismo, la cual se basaba en un misticismo en torno a un líder y una 
doctrina política, junto con la aversión a los enemigos ideológicos y a los judíos. 
Este acontecimiento se conoció como El movimiento de la fe, cuyos creyentes 
formaban la Iglesia Neopagana del Tercer Reich. La base era el amor a Hitler, 
el odio al cristianismo y a las razas inferiores.40 
Al igual que el cristianismo luterano, impulsaron la Campaña de Separación de 
la Iglesia, pretendiendo que los feligreses renunciaran a la autoridad papal. Así 
mismo, se prohibieron los rituales en torno al nacimiento, matrimonio, 
defunción, navidad y se promovieron ritos y costumbres del nuevo régimen.41 
En realidad todo este interés por la propaganda era porque Hitler estaba 
convencido de que los ejércitos por sí mismos, no eran suficientes para apoyar 
su régimen, sino que necesitaba a la opinión pública. Fue entonces que se 
procedió a centralizar la maquinaria ideológica, o sea, a los medios de 
comunicación, como la prensa, radio y cine que se manejarían con la 
instrucción del ya citado Ministerio de Propaganda, que a su vez, estuvo 
dividido en departamentos dedicados a la radiodifusión, la prensa, la 
cinematografía, el teatro y otras actividades culturales. El Ministerio de 
Propaganda en colaboración con el Ministerio de Asuntos Exteriores (al mando 
 
38
 Ibid., p.744-745 
39
 Betz, W., “The national-socialist..” .en The Third Reich...p. 785-996 
40
 Pastor Petit, La guerra psicológica en las dictaduras…, p. 216 
41
 Ibid., p. 216-217 
 24 
de Joachim von Ribbentrop) se dedicaron a la organización en otros países, de 
conciertos, representaciones teatrales, conferencias y otros actos culturales.42 
Así mismo, desde 1938, la Agencia Alemana de Noticias (Deutsche Nachricht 
Bureau, DNB) era propiedad del Estado y estaba bajo control del Ministerio de 
Propaganda, donde se determinaba la forma y el momento de publicar las 
noticias oficiales. La cinematografía era, tras la radiodifusión, el medio 
preferido de Goebbels para adoctrinar. Lo mismo que la prensa y la radio, el 
cine poseía en el Tercer Reich, el carácter de un medio educativo nacionalista 
y debía estar sometido a la dirección estatal para que cada película estuviera 
influida por ideas políticas y su proyección lograra influir a las masas.43 
De este modo, se realizaron películas que reflejaban el odio hacia los judíos 
como Jud Süss y hacia los británicos, Ohm Krüger. Hubo además, 
documentales como Triumph des Pilles (1935) y Olympia (en conmemoración 
de las Olimpiadas de Alemania 1936), producidas por Leni Riefenstahl, quién 
fue la cineasta oficial del Partido Nazi. Produjo también la película 
Reichsparteitag (1935), la cual fue una apología sobre Hitler y el Parido.44 
También se realizaron películas que exaltaban las hazañas de personajes 
históricos como Friedericus (1936) y filmes que evocaban los movimientos 
nacionalistas semejantes a los del Tercer Reich, como Wilhelm Tell (1934).45 
Hacia 1936, se crearon en el Ministerio de Propaganda, Compañías para la 
propaganda en caso de guerra y en 1938 y 1939, éstas se incorporaron al 
ejército. Cumplían tres objetivos principales: propaganda en el frente, 
propaganda en la patria y la propaganda dirigida al enemigo. Finalmente, la 
 
42
 Martínez de las Herras, “La propaganda nazi” en Siglo XX…, p. 104 
43
 Ibid., p.105 
44
 Wistrich, Robert, op. cit., p. ? 
45
 Barbachano Ponce, Miguel, El cine en tiempo de guerra…, p. 14-20 
 25 
mejor propaganda alemana fue el Ejército, por las esperanzas y seguridades 
que trajo consigo el éxito del inicio de la Segunda Guerra Mundial, con la fácil y 
rápida victoria sobre Polonia. Por otro lado, el NSDAP organizaba desfiles 
callejeros, distribuía panfletos y pegaba carteles, igual que los comunistas.46 
En 1932, los S.A. desfilaban gritando ¡Alemania, despierta! De hecho su 
himno de guerra decía: Die strasse freiden braunen bataillonen (Dejar pasar a 
los batallones pardos).47 Poco después, la censura comenzó a invadir todos 
los aspectos, pues cualquier manifestación que no siguiera la ideología nazi o 
que la pusiera en duda, fue totalmente descartada de lo permitido. Así, miles 
de libros fueron prohibidos y quemados y se cerraron muchos periódicos. 
Goebbels introdujo el saludo Heil Hitler y acuñó la frase Führer ordena, 
nosotros obedecemos repetido en los desfiles de personas que portaban 
estandartes, calaveras y cruces gamadas, para las cuales el nazismo ya era un 
dogma de fe, con Hitler como Dios. De hecho, Mi Lucha se erigió como la 
“Biblia” del nuevo Estado. La gente llegó a encender veladoras junto al retrato 
del Führer, como si fuera un santo e incluso era un símbolo entre las mujeres 
jóvenes, quienes se abalanzaban a tocarlo en los actos públicos, llorando y 
emocionadas por el solo hecho de verlo.48 
Todas las organizaciones, incluyendo la Juventud Hitleriana gritaban “¡Adolf 
Hitler es Alemania y Alemania es Adolf Hitler!”, o sea, se convirtió en un ídolo 
que alentaba a su pueblo diciendo Sois una raza de superhombres. 49 
 
46
 Ibid., p. 106-110 
47
 Dagerman, Stig, Otoño alemán (Tysk Höst), trad. De José María Caba, México, Editorial Sexto Piso, 
2003, p. 63 
48
 Pastor P., op. cit., p. 208 
49
 Ibid., p. 219 
 26 
Obedeciendo a tal principio, los nazis se dieron a la tarea de eliminar a todas 
las personas “carentes de valor” como los inválidos, deformes, enanos, locos, 
desahuciados, ancianos, gitanos, enemigos políticos, homosexuales y tullidos, 
quienes fueron exterminados en los Campos. Así mismo, eran condenadas a 
muerte, las personas escépticas al triunfo del nazismo, quienes escuchaban 
radiodifusoras enemigas, quienes contaran chistes antihitlerianos, quienes 
recriminaran al ejército, así como cualquier tipo de disidencia, incluyendo 
sacerdotes que pronunciaran sermones contra los nazis.50 En realidad, la 
propaganda nazi no se conformó con ser sólo tal, sino era todo un sistema de 
educación. 
5. La Juventud Hitleriana. 
En la educación de la juventud alemana, fue primordial el programa 
nacionalsocialista y se crearon diversas organizaciones estudiantiles y juveniles 
que eran la esperanza para un cambio en Alemania, luegode Weimar. De esta 
forma se inculcaron diferentes valores políticos y raciales. 51 
La adoctrinamiento de la juventud se realizó de manera rápida y eficiente. Para 
1933, además de las Juventud Hitlerina, se crearon los Burgos de la Orden, 
centros de enseñanza del NSDAP y los Centros de Educación Político-Nacional 
(Napola), que eran internados para adolescentes, quienes recibían educación 
militar y eran dirigidos por un S.S., pero dependían del Ministerio de Educación 
del Reich.52 
En 1937 se crearon las Escuelas Adolf Hitler (Adolf Hitler Schulen, AHS), para 
capacitar a los jóvenes con el objetivo de llegar a ser miembros del NSDAP 
 
50
 Ibid., p. 230-231 
51
 Bracher, op. cit., p. 347-350 
52
 Ibid., p.351-355 
 27 
posteriormente y eran educados según disposiciones de Hitler, quien 
financiaba estos estudios (Donativo Adolf Hitler). En 1941 apareció la Escuela 
Superior Rosenberg y aunque la guerra impidió su desarrollo, intentó dar una 
reorientación a la ciencia alemana, así como pretendió unificar todas las 
universidades. 53 
Conforme esto, se destituyeron a los profesores disidentes, para depurar todo 
el aparato magisterial, incluyendo a decanos, rectores y profesores, quienes si 
no testimoniaban lealtad a Hitler, eran detenidos. Se trataba de la política 
educativa de creación de un nuevo tipo de estudiante, creación de un nuevo 
tipo de catedrático y elaboración de una nueva concepción de la ciencia.54 
Después se requirió un Servicio Social previo, de medio año de duración, para 
entrar a la universidad (cuatro meses de Servicio Social y dos de Servicio en 
campos de la S.A.). Eso era necesario, ya que la meta era dar una educación 
para la guerra. Por eso, las ciencias se convirtieron en ciencias de la guerra y 
se introdujeron así en los programas educativos, la química bélica, geografía 
bélica, física bélica, historia bélica, matemática bélica, etc.55 
Así mismo, en 1941 se creó la Universidad del Reich, donde se estudiaba 
política racial, historia judía, historia del pensamiento nacionalsocialista, entre 
otros temas. Adolf Hitler sabía que la universidad era el lugar estratégico para 
cultivar sus ideas, ya que los jóvenes intelectuales defenderían lo que 
efectivamente llegarán a sentir fuertemente, comportándose a su vez, como un 
 
53
 Ibid., p. 356-358 
54
 Ibid., p.358-360 
55
 Ibid., p. 362 
 28 
grupo importante y adquiriendo el concepto del valor de la vida y de la filosofía 
de la vida, como centro del pensamiento juvenil.56 
De este modo, las tendencias antisemitas encontraron apoyo en la juventud, 
combinándose con el ya de por si sentimiento patriótico que invadía a los 
alemanes desde la ascensión de Hitler al poder.57 
En cuanto a las asociaciones juveniles, ya desde principios del siglo XX se 
había formado, entre otras, la Juventud Libre Alemana, que era una 
organización que fomentaba el libre albedrío, la responsabilidad y la libertad, 
preceptos que también retomó en algún momento la Juventud Hitleriana.58 
La Juventud Hitleriana (Hitler Jugend, HJ) fue creada en 1926 por el estudiante 
Kurt Gruber, quien organizaba grupos juveniles en Sajonia, los cuales se 
multiplicaron en todo el territorio alemán. Cuando en 1931 Gruber dejó el 
mando, el Führer asignó a Baldur von Shirach como jefe nacional de las 
Juventudes del Partido Obrero Alemán Nacional Socialista, del mismo modo, 
von Shirach se convirtió en el director de la Liga de Estudiantes de Bachillerato, 
que a su vez fueron uniformados y asignados en campamentos de 
entrenamiento.59 
Algo muy importante fue que la mayoría de la juventud de los grandes centros 
industriales de Alemania estaba incorporada a las HJ, por lo que la influencia 
del marxismo fue quebrantada, y con ello cesó su derecho de proclamarse 
representante de la clase obrera. 
 
56
 Litt, Theodor, “The national-socialist use of moral…” en The Third Reich…., p. 439-440 
57
 Ibid., p. 452-453 
58
 Santoro, Cesare, La Alemania de Hitler...p. 314-315 
59
 Ibid., p. 452-453 
 29 
Cuando llegó al poder el NSDAP, la HJ se fusionó con todas las asociaciones 
juveniles existentes marxistas, religiosas, etc. y en 1936, el gobierno del Reich 
promulgó la Ley sobre la Juventud Hitleriana, donde se establecía que toda la 
juventud alemana quedaba comprendida en esta institución.60 
Así, los jóvenes, además de recibir educación en sus casas y en la escuela, 
eran educados en la HJ física, intelectual, moral y militarmente conforme a los 
preceptos del espíritu nacionalsocialista, para servir mejor al pueblo y a la 
comunidad nacional. La HJ agrupaba a los jóvenes de 14 a 18 años y el 
movimiento se dividió territorialmente en cinco regiones: este, norte, sur, centro 
y oeste; cada región se subdividió a su vez, en cuatro o cinco comarcas que se 
dividían en dos o cinco banderas superiores, que se componían por sub-
banderas y éstas, a su vez en secciones. Las secciones se dividían en bandas 
y escuadras, que representaban la unidad más pequeña de la Juventud 
Hitleriana y que se encontraban a cargo de un jefe, quien variaba debido a la 
incorporación obligatoria al Servicio Militar o al Servicio del Trabajo anual, que 
debían cumplir. El Domicilio Social (Heim) era el punto de congregación de las 
unidades interiores de la organización nacional-socialista.61 
Debido a lo anterior, los jóvenes se alejaron de las tabernas y con ello, del 
peligro de adquirir vicios. Del mismo modo, todos los miércoles por la noche, 
se realizaban veladas instructivas en el respectivo Heim regional. Se 
conectaban altavoces para que todos los jóvenes escucharan la emisión de La 
Hora de la Nación Joven que pasaba a las 8:15 en todas las estaciones de 
radio alemanas Los jóvenes permanecían, además, en campamentos cuatro o 
seis semanas, en los que practicaban juegos y deportes diversos y también se 
 
60
 Ibid., p. 453 
61
 Ibid., p. 322 
 30 
organizaban excursiones para que conocieran otros lugares (Asociación 
Nacional de Albergues para la Juventud).62 
Así mismo, eran recibidos extranjeros en albergues alemanes para contagiar 
de ideas nacionalsocialistas, no sólo a los alemanes, sino a los jóvenes de 
otras partes del mundo. Hitler así, veía en la juventud el porvenir de la nación y 
la continuación de su obra. El himno de la Juventud Hitleriana decía ¡Al 
avanzar nuestra bandera ondea y símbolo ella es de nuestra era! 63 
Hay que destacar que la educación militar de los jóvenes era para un fin bélico. 
64 De ahí la insistencia en fomentar habilidades deportivas estratégicas, de 
liderazgo y sobre todo de sacrificio, como lo muestran los siguientes 
fragmentos de canciones entonadas por la HJ y por la S.A.: 65 
Ondean las banderas empapadas con sangre 
...Estamos listos para morir 
Y si alguna vez los días de venganza se acercan 
Y el Führer nos llama a la guerra, 
Entonces nosotros llevaremos de la pena y la vergüenza, 
La swástica a la victoria. 
Entonces marcharemos al amanecer 
Por la bandera de Hitler hasta la muerte...66 
 
 
Marchando sobre la calle 
 
…Quizá la mañana siguiente 
Muera en mi propia sangre 
Los jóvenes saben lo que significa amar, 
No lo que morir puede significar…67 
 
 
¿Has visto el amanecer en el Este? 
 
62
 Ibid., p. 323-326 
63
 Ibid., p.327 
64
 Fried, op. cit., p. 744 
65
 Las fuentes las datan de 1931, pero no se conoce la fecha exacta. 
66
 Ibid., p. 745 
67
 Idem. 
 31 
 
…El joven y el viejo, todos unidos 
Sostienen fuertemente la bandera swastica… 
Por Hitler, por la libertad, por el trabajo y por el pan. 
Alemanes despierten, muerte para los judíos.68 
 
 
Aquellos se estremecenen sus huesos débiles 
 
…La Nación a las armas... 
Hoy nuestra madre Alemania, 
Y mañana el mundo entero... 
...Y si el mundo entero se nos opone 
Aún así, nosotros resultaremos victoriosos.69 
 
 
Este tipo de adoctrinamiento no era raro en el Tercer Reich, donde todo se 
dirigía a un fin bélico. Como decía Konstantin Hierl, líder del Servicio del 
Trabajo de Hitler: Un Ejército es la mejor escuela de entrenamiento para los 
líderes nacionalsocialistas. Al mismo tiempo, es la base indispensable del 
poder para un gobernante que no controla la opinión de las masas.70 
 
 
68
 Idem. 
69
 Ibid., p.746 
70
 Ibid, p. 748 
 31 
III. SEGUNDA GUERRA MUNDIAL. 
1. Alemania y el conflicto bélico. 
Es indudable que la Alemania hitleriana propició la Segunda Guerra Mundial, 
porque ésta fue una dictadura con características expansionistas violentas y 
genocidas, las cuales estuvieron apoyadas por la mayoría de la población 
alemana. Además, las actividades de política exterior de Hitler fueron 
aprobadas, durante los años 30, por la Sociedad de Naciones, como 
compensación al castigo que resultó ser el Tratado de Versalles.1 
Poco a poco, Hitler fue delimitando dos objetivos para asegurar la prosperidad 
de alemana: resolver el problema judío y asegurar el espacio vital 
(Lebensraum). Es decir, la supervivencia humana sólo tendría lugar entre las 
razas y naciones competidoras. Por ello, la lucha armada haría posible la 
creación de un territorio europeo dominado por una Alemania autosuficiente en 
la guerra y capaz de mantener una lucha con cualquier nación rival.2 
Así, la tendencia de Hitler hacia la agresión armada, aunada a su lucha entre 
las naciones por la raza, desembocaría necesariamente en una guerra. En 
1938, el gobierno británico, presidido por su Primer Ministro Neville 
Chamberlain, adoptó una política de interferencia en los asuntos de Europa 
Central y del Este, para aceptar concesiones políticas a Alemania.3 
Así, Hitler anexó Renania (ubicada en el Rin entre Francia y Alemania), Austria 
y amenazó con estallar una guerra si no se cumplían otras de sus peticiones, 
como el territorio checoslovaco habitado por alemanes (Los Sudetes), lo que se 
 
1
 Parker, R.A.C., Historia de la Segunda Guerra Mundial, p. 9-10 
2
 Arostegui, Julio, op. cit., p.72-74 
3
 Ibid., p.10 
 32 
consiguió con el Pacto de Munich. Sin embargo, en agosto de 1939, las tropas 
alemanas ocuparon toda Checoslovaquia y tuvieron en mira a Polonia, ante lo 
que Inglaterra tendría que intervenir.4 
Ya durante el invierno de 1938-1939, tuvieron lugar las conversaciones entre 
Josef Beck, ministro polaco de Asuntos Exteriores, Ribbentrop, su homólogo 
alemán y el propio Hitler, para que Danzig regresara a manos alemanas. Así 
mismo, se había creado un corredor polaco que separó a Prusia Oriental del 
resto de Alemania, la cual ahora, tendría derechos extraterritoriales ahí, El 
gobierno polaco rechazó las propuestas de Hitler y el 23 de agosto de 1939 se 
firmó el pacto nazi-soviético para dividirse Polonia, mientras que Inglaterra 
firmó la alianza formal con Polonia y Francia se vio obligada a defenderla 
también en caso de un ataque alemán.5 
Del mismo modo, Italia exigió territorios franceses como reivindicación también 
por el Tratado de Versalles, peticiones que Alemania apoyó debido al Pacto de 
Acero italo-alemán, firmado en abril de 1939. El 1 de septiembre del mismo 
año, Polonia fue invadida y el 5 de septiembre Inglaterra y Francia declararon 
la guerra. Alemania recurrió a la Blitzkieg (Guerra Relámpago), ya que no 
podría soportar un gran desgaste, pues el ejército no estaba bien preparado en 
cuanto a equipo bélico.6 
El avance alemán fue rápido y aunado al ataque ruso, el 17 de septiembre el 
gobierno polaco se refugió en Rumania y el último foco de resistencia cesó el 5 
de octubre de 1939. Con esto, Alemania se anexó Danzig, Posnania y Alta 
Silesia, mientras que Rusia se apoderó de territorios poblados por bielorusos y 
 
4
 Ibid., p. 22-23 
5
 Ibid., p. 25-29 
6
 Ibid., p. 30-32 
 33 
ucranianos que antiguamente habían formado parte del Imperio Zarista. 
Además, como la guerra tenía carácter racista, se instalaron guettos en 
ciudades como Cracovia, Czestochowa y Lublin, para confinar a los judíos.7 
Del mismo modo, los Países Bálticos (Lituania, Letonia y Estonia), pasaron a la 
zona de influencia rusa. Rusia y Alemania firmaron un acuerdo comercial en 
febrero de 1940, en el que la primera recibió el crucero Lützow, los planes del 
buque Bismarck, cañones, aviones modernos, maquinaria, herramienta y 
prototipos de armamento. A cambio, Alemania obtuvo cereales, petróleo, 
fosfatos, algodón y el tránsito a través de Manchuria, para obtener soja.8 
En Finlandia, los rusos pidieron la entrega de instalaciones militares y territorios 
clave (para atacar Inglaterra), pero les fueron negados y se lanzó un ejército el 
30 de noviembre de 1939. Con esto, la URSS fue expulsada de la Sociedad de 
Naciones el 4 de diciembre. Noruega era un país neutral abastecedor de hierro 
a Inglaterra y Alemania, por lo que Hitler no tardó en querer tomarlo y el 9 de 
abril de 1940, las tropas nazis desembarcaron en Narvik, Trondheim, Bergen 
Kristiansand, Oslo y Egersund. Simultáneamente ocuparon Dinamarca casi sin 
resistencia, a pesar de la defensa aliada.9 
Francia, por su parte, creía que la Línea Maginot (larga fortificación que iba 
desde la frontera con Suiza hasta la de Luxemburgo) era inexpugnable. 
También consideraba que la zona de Las Ardenas al norte de la Línea Maginot, 
no permitiría el paso de un ejército por su geografía. Por ello, se pensó que los 
 
7
 Cardona, Gabriel, “La Guerra Relámpago” en Siglo XX…, p. 8-12 
8
 Ibid., p.12-14 
9
 Ibid., p. 14-16 
 34 
alemanes entrarían por la llanura belga hacia la Línea Maginot. Las Ardenas 
quedaron así, casi sin vigilancia.10 
A finales de octubre de 1939, el general alemán Erich von Manstein, propuso 
invadir Francia por Las Ardenas, tomar por sorpresa a sus tropas y derrumbar 
ese frente. De esta forma, se atacó Holanda, Bélgica, Luxemburgo y las tropas 
alemanas entraron a París el 14 de junio de 1940. El presidente Albert Lebrun 
nombró como Primer Ministro francés a Philippe Pétain, quien propuso a Hitler 
un armisticio. Hitler entonces, concedió una zona no ocupada, para evitar la 
instalación de un gobierno francés en Argelia. Era una especie de país libre y a 
su frente quedaron quienes habían tenido la obligación de defender con las 
armas la soberanía nacional. Pétain no aceptó entrar a la guerra junto a Hitler, 
pero sí quedó como su colaborador. La Francia no ocupada o Francia de 
Vichy (porque ahí estableció su capital), se topó con un rebelde, el general 
Charles De Gaulle, quien rompió con sus superiores y se marchó al exilio. El 
18 de junio de 1940, De Gaulle apareció con 200 personas para anunciar su 
propósito de luchar hasta la liberación de Francia.11 
El 7 de agosto, el gobierno ingles reconoció la autoridad de De Gaulle y firmó 
un tratado con él para equipar y dar crédito para el sostenimiento de los 7000 
franceses que componían esta Francia Libre. Por su parte, Alemania declaró el 
bloqueo total a Inglaterra en agosto de 1940 y en septiembre se hundieron 
buques de todas las marinas beligerantes en el Mar del Norte, mediante 
submarinos, flota de superficie y bombardeo con aviones.12 
 
10
 Ibid., p.16-18 
11
 Ibid., p. 18-26 
12
 Ibid., p. 26-30 
 35 
En su lucha contra Inglaterra, Alemania quiso acabar primero su aviación, 
luego sus puertos y al final, su fuente de aprovisionamiento. Pero el Ejército 
británico yacontaba con sistemas de alarma y control con radares, que 
permitían detectar cualquier incursión alemana Sin embargo, el 13 de agosto 
de 1940, Alemania bombardeó algunas estaciones de radar y aeródromos, 
descontrolando la seguridad inglesa. La batalla se prolongó y el 24 de ese 
mes, un grupo de aviones alemanes (supuestamente por error) bombardearon 
en centro de Londres, por lo que al día siguiente, los británicos bombardearon 
Berlín.13 
Así, comenzó la acción de represalias aéreas sobre la población civil. Winston 
Churchill, Primer Minsitro inglés, llegó al poder en mayo de 1940, mientras que 
los alemanes invadían los Países Bajos, por lo que llegó a un acuerdo con 
Franklin D. Roosevelt (presidente de E.U.), para el suministro de armas. Por su 
lado, Hitler pidió ayuda a Francisco Franco contra los ingleses, pero España 
había quedado devastada por la Guerra Civil (1936-1939) y no pudo colaborar. 
Mussolini si aceptó combatir contra Inglaterra por el control del Mediterráneo y 
el Norte de África.14 
En septiembre de 1940, las tropas inglesas derrotaron a las italianas en 
Egipto. Ante esto, Hitler envió al general Edwin Rommel al norte de África con 
dos pequeñas divisiones, las cuales lograron desestabilizar a los ingleses y 
lograr su retirada. Debido al fracaso en el norte de África, las tropas italianas 
invadieron Grecia, mientras que los gobiernos profascistas de los Balcanes 
 
13
 Ibid., p. 34 
14
 Ibid., p. 35-38 
 36 
firmaron su adhesión al pacto Tripartito entre Alemania, Italia y Japón de 
1940.15 
Hungría, Rumania y Eslovaquia lo firmaron en noviembre y Bulgaria en febrero 
de 1941. Yugoslavia lo firmó en marzo, pero luego estalló un motín antinazi, 
por lo que Hitler ordenó la Operación Castigo, donde Belgrado fue 
bombardeado y los alemanes invadieron el país en abril. El 17 se rindió el 
Ejército yugoslavo y su Estado desapareció, siendo repartido entre Italia, 
Hungría y Bulgaria. Con esto se creó Croacia, cuyo gobierno era aliado nazi.16 
Para 1941, Inglaterra se encontró en quiebra, por los gastos bélicos y recurrió a 
la Ley de Préstamos y Arriendos norteamericana. Del mismo modo, el 14 de 
agosto Roosevelt y Churchill firmaron en Bahía de Argentina un acuerdo sobre 
fines bélicos (Carta del Atlántico).17 Meses después, el 7 de diciembre, Japón 
atacó a la base norteamericana de Pearl Harbor, en Hawai, destruyendo una 
parte de su flota del Pacífico y en el extremo oriente, los japoneses hundieron 
el Príncipe de Gales y el Rechazo, que eran la base de la flota inglesa. 
Además, Japón invadió Hong-Kong, Guam, Luzón y Borneo, amenazando las 
guarniciones americanas en Filipinas y a las británicas de Malaca y Australia. 
Por su parte, Alemania envió submarinos a las costas de América, que se 
encontraban desprotegidas, mientras que Inglaterra estableció su principal 
base de aviones y submarinos en Malta.18 
 
15
 Ibid., p. 39-41 
16
 Ibid., p. 42 
17
 Snyder, Louis, La guerra 1939-1945…, Apéndice D. 
18
 Cardona, Gabriel, op. cit., p. 45-51 
 37 
Ante esto el 22 de diciembre de 1941, en una conferencia en Washington, el 
Consejo de Guerra Angloamericano da prioridad a la guerra en el Atlántico y 26 
naciones firman la Declaración de las Naciones Unidas.19 
Así mismo, Inglaterra bombardeó los puertos italo-alemanes de Marsa Matruch, 
Bardía y Tobruk, lo que puso en apuros a Rommel en África. Roosevelt 
decidió, entonces, llevar a cabo un desembarco en África del Norte (Operación 
Antorcha) el 30 de octubre de 1942 que estuvo comandada por el general 
Dwight Eisenhower.20 
Desconociendo su alianza con Stalin, Hitler decidió invadir la URSS (Operación 
Barba Roja) y el 21 de junio entraron tres Ejércitos alemanes por el norte, 
centro y sur, hacia Leningrado, Moscú y Stalingrado respectivamente. Joseph 
Stalin ante esto, logró impulsar la resistencia popular mediante retórica 
nacionalista y utilizó la táctica de Tierra Calcinada. En ella, la población, el 
ganado y las fábricas se replegaron hacia el Este, ya que se ordenó quemar y 
destruir esa zona para que Alemania no obtuviera ningún botín.21 
Por las condiciones climáticas y la falta de vías de comunicación, los alemanes 
no pudieron tomar Leningrado y fueron arrollados por los rusos. En Moscú 
pasó algo similar, pues el helado invierno hizo detener las tropas alemanas, 
pero como Hitler ordenó que siguieran, su Ejército fue aniquilado.22 
Ante las dimisiones de varios generales alemanes por las fallidas órdenes del 
Führer, éste se autonombró comandante supremo del Ejército, lo que resultó 
ser la ruina de Alemania en la Segunda Guerra Mundial. 
 
19
 Snyder, Louis, op. cit., Apéndice D 
20
 Cardona, Gabriel, op.cit., p. 49-51 
21
 Ibid., p. 52-55 
22
 Ibid., p. 55-58 
 38 
En el pacífico, E.U. obtuvo su primera victoria aeronaval en Midway en junio de 
1942 y recuperó Guadalcanal en febrero de 1943. Del mismo modo, las tropas 
norteamericanas en el norte de África, derrotaron a las alemanas y a las 
italianas en mayo de 1943. La gran derrota alemana fue en febrero de ese 
año, cuando no pudieron tomar Stalingrado.23 
2. La Resistencia Antinazi. 
Es un hecho que la oposición antinazi en Alemania no fue un movimiento de 
masas propiamente. Sin embargo, cobró vida en todas las capas de la 
sociedad. Esto debido a que cualquiera que mostrara cualquier signo de 
oposición al Nacional Socialismo, se encontraba en serios problemas bajo las 
leyes del Tercer Reich. De esta forma, más de 5000 personas fueron 
ejecutadas por cualquier comentario trivial que resultaba ofensivo, por arrojar 
chistes sobre Hitler o por escuchar emisiones de radiodifusoras inglesas.24 
Las personas que se ocuparon de sostener la resistencia el Tercer Reich eran 
nombradas Gleichgesinnte. Así, miembros de la clase obrera, burgueses, 
intelectuales, Iglesia, funcionarios públicos y militares, llegaron a compartir una 
idea común, es decir, combatir el mal. Este mal, por supuesto era el que 
encarnaba Adolf Hitler y su política nacionalsocialista que llegó a ser vista 
como desmoralizadora, inhumana y malvada. La gente comenzó a ver en el 
nazismo el síntoma de una crisis espiritual y cultural que se tornaba peligrosa.25 
Debido al estricto control que mantenía la S.S. y la Gestapo (Policía Secreta 
del Estado, Geheime Staats Polizei), fue casi imposible una organización 
óptima de los núcleos de resistencia alemanes, aunque sí llegaron a establecer 
 
23
 Ibid., p.58-61 
24
 http://www.holocaust-history.org/short-essays/white-rose.shtml, p. 1 de 3 
25
 La resistencia alemana contra Hitler…, p. 11-13 
 39 
contacto entre si. Aunque la Gestapo era independiente del aparato del 
Estado, cualquier apelación contra sus decisiones ante los tribunales estaba 
prohibida. De esta forma, la represión era inapelable y brutal, además de que 
la delación constituía un deber cívico.26 
Como a principios de los treinta Hitler disolvió los sindicatos obreros 
apoderándose de sus fondos y encarcelando a sus jefes, gran número de 
adversarios emigraron entre 1933 y 1937, mientras que otros tantos fueron a 
parar a campos de concentración.27 
No obstante, a principios del los años 30 surgieron grupos de oposición política 
por parte de las Juventudes Socialistas Obreras y de las organizaciones de 
estudiantes, como lo fue el Rote Stosstrupp (Fuerza Roja de Choque), en 
Berlín y el Sozialistische Front (Frente Socialista), en Hannover Por su parte, el 
Partido Comunista distribuyó cautelosamente propaganda antinazi y en octubre 
de 1935, una Conferencia ilegal del KPD, en Bruselas, anunció la creación del 
Frente Popular Antifascista en el que colaboraron Socialdemócratas, 
demócratas, el Partido del Centroy otras organizaciones populares.28 
A raíz de la disolución de los sindicatos, el socialista crsitiano Jacob Kaiser se 
alió con los socialdemócratas Wilhem Leuschner, Julios Leber y con el general 
Hummerstein-Equord con el objetivo de derrocar a Hitler. Sin embargo, el 
Führer ya había formado el Frente Alemán del Trabajo (Deutsche Arbeitsfront, 
DAF) por lo que toda organización obrera fuera de esta institución era 
considerada como alta traición y cualquier acción en conjunto era saboteada 
desde su inicio. Además, debido a que durante este periodo, los salarios eran 
 
26
 Bernard, Henri, Historia de la Resistencia Europea, trad. Manuel Cuesta, Barcelona, ediciones Orbis 
S.A., 2ª ed., 1986, p. 45 
27
 Ibid., p. 46 
28
 Bracher, op. cit., Vol. 2,, p. 121 
 40 
razonables y las políticas de legislación social, viviendas, descansos y deportes 
eran exitosas, la clase obrera permaneció un tanto pasiva. Aunque si se 
llegaron a suscitar huelgas, pese a todas aquellas ventajas, ésta eran 
reprimidas sangrientamente.29 
El 2 de febrero de 1936 se reunieron en París los representantes políticos e 
intelectuales de la emigración alemana. Ellos establecieron un manifiesto que 
denunciaba al régimen nazi por su violencia, terror y por ser la causa de la 
crisis política y económica. Además, se pedía el restablecimiento de los 
derechos fundamentales del pueblo alemán y la solidaridad entre los grupos de 
oposición para planear las bases de una Alemania nueva libre y pacífica.30 
El principal núcleo antinazi anterior al estallido de la Segunda Guerra Mundial 
fue el grupo Schulze-Boysen-Harnack, encabezado por Harro Schulze-Boysen, 
oficial de aviación y Arvid Harnack, funcionario del Ministerio de Economía. A 
este grupo, se unieron intelectuales, funcionarios de la Administración y 
núcleos obreros, quienes establecieron contacto y distribuyeron propaganda en 
diversas regiones alemanas. Su actividad se caracterizó por su solidaridad con 
los perseguidos políticos y raciales y su apoyo a los otros movimientos de 
resistencia, en los territorios ocupados por los nazis.31 
Otro grupo importante fue el liderado por el obrero berlinés Robert Uhring, 
quien en 1938 comenzó un movimiento de trabajadores, en su mayoría 
antiguos militantes de los partidos obreros. Fueron aprehendidos por la 
Gestapo en 1942.32 
 
29
 Bernard, op. cit., p. 47 
30
 Colloti, Enzo, La Alemania Nazi…., p. 271 
31
 Ibid., p.272 
32
 Ibid., p. 284 
 41 
Hubo un grupo compuesto por jóvenes judíos y trabajadores de las fábricas 
SIEMENS, dirigido por Herbert Baum. Realizaron actividades terroristas y de 
sabotaje en los arsenales nazis, hasta que en julio de 1942 las S.S. hicieron su 
trabajo y ejecutaron a 250 judíos.33 
Otra rama de la resistencia fue la Orquesta Roja, así denominada por la 
Gestapo que se dedicó a labores de espionaje militar dentro y fuera de 
Alemania, pero con poco éxito. Por ello terminaron enfocándose sólo en la 
propaganda a través de panfletos para denunciar las atrocidades que los nazis 
cometían en la Europa ocupada por ellos.34 
En junio de 1934, Franz von Papen leyó un discurso en la Universidad de 
Marburgo, escrito por Edgar J. Jung, quien condenaba al Partido Nazi como 
totalitario y pedía su organización en estamentos. La petición fue ignorada y 
Jung fue fusilado en La Noche de los cuchillos largos.35 
Hubo pequeños grupos de burgueses resistentes en las grandes ciudades, los 
cuales se revinieron en torno a Kart Friedrich Goerdeler. Entre ellos figuraban 
el embajador Ulrico von Hasell, quien llegó a sentir repugnancia y vergüenza 
por la persecución nazi a los judíos, por las atrocidades en Polonia y por la 
matanza de discapacitados y enfermos mentales. Se les unió también el ex 
ministro de Prusia Johannes Popita y el diputado Paul Lejeune Jung. En 1937 
el círculo conservador de Goerdeler entra en contacto con los grupos de 
obreros resistentes. En 1938 se alía al círculo de resistencia militar, cuyo jefe 
era Ludwig Beck y lego se une con el mundo de la socialdemocracia con Leber 
 
33
 Ibid., p. 285 
34
 Burleigh, op.cit., p.711 
35
 Ibid., p. 717 
 42 
y Leuschner.36 Los colaboradores de Goerdeler eran ideólogos que pensaban 
en un régimen de democracia conservadora para Alemania. Creían necesario 
restaurar la soberanía de la ley y las libertades fundamentales del individuo, 
aspectos que no eran compatibles con un régimen autoritario. Además de 
establecer contactos con la resistencia militar, lo hizo con el alto clero, en 
especial con el obispo católico de Berlín Honrad Granf von Presyng y el obispo 
luterano de Württemberg, Theophil Wurm. Todos ellos discutieron sobre la 
posibilidad de asesinar a Hitler, pero reparaban en que sería un acto tan ilegal 
como el que el Führer ejecutaba y que ellos asu vez, querían combatir.37 
Por su parte, otro grupo políticamente resistente fue el Círculo de Kreisau, cuyo 
animador era el conde de Helmuth, James von Moltke, quien poseía un ideal 
cristiano y social. Este grupo tenía como objeto restaurar a Alemania con base 
en un espíritu de cristianismo y justicia social. El Círculo de Kreisau estaba en 
contacto con un grupo de oposición nacido del Ministerio de Asuntos 
Exteriores y compuesto por Hans Bernd von Haeftlen y Adam von Trott zu Solz, 
que a su vez contactaron a un consejero superior gubernamental, conde Meter 
Yorck von Wartenburg y a los miembros del círculo de Goerdeler.38 
En el ámbito religioso, prelados, sacerdotes y pastores se levantaron contra el 
neopaganismo hitleriano, contra su errónea interpretación del cristianismo en 
un sentido racista y sobre todo, contra su doctrina de adoración a un mortal, al 
desprecia del carácter agrado de la vida y la violación de los derechos 
elementales. Los obispos alemanes aseguraban en sus cartas pastorales que 
más que defenderlos derechos de la religión y de la iglesia, ellos defendían los 
 
36
 Bernard, op. cit., p. 49 
37
 Burleigh, op. cit., p. 740-741 
38
 Huber, H. El Tercer Reich. Su historia en textos, Vol. 2……., p. 701 
 43 
derechos de los seres humanos.39 Así, en septiembre de 1933 el protestante 
Martin Niemöller, inspirado en estos principios, funda el Pfarrer-Notbund, grupo 
que agrupaba a 600 pastores. El Domingo de Ramos, 21 de marzo de 1937, 
los curas alemanes leyeron en los púlpitos la encíclica del Papa Pío XI Mit 
brennender Sorge redactada en alemán e introducida clandestinamente en el 
Reich, la cual era un discurso enérgico e implacable contra el Nacional 
Socialismo. Desde entonces se desató una serie de calumnias y acosos 
violentos contra el clero alemán. Miles de sacerdotes fueron detenidos desde 
1937 y enviados a campos de concentración.40 
El Arzobispo Cardenal de Münster, Clemens August Graf von Galen, a pesar 
de las represalias, fue uno de los principales oponentes a Hitler. Al principio de 
la guerra, exhortó a su congregación para defender a Alemania, pero denunció 
igualmente las atrocidades nazis que iban en contra de las enseñanzas 
cristianas. Así, en 1941, pronunció una serie de sermones que cuestionaron la 
política estatal sobre la eutanasia que eliminaba las vidas sin valor. Como 
Hitler quería evitar una confrontación con la Iglesia Católica, sólo confinó a von 
Galen en Münster, pero luego fue llevado a un campo de concentración en 
Sachsehausen, al cual sobrevivió.41 
Monseñor Preysing, obispo de Berlín y monseñor Grober, obispo de Friburgo, 
al igual que Von Galen, denunciaron los actos del régimen, invitaron a orar por 
los judíos y por los detenidos en los campos de concentración. Por su parte un 
obispo protestante declaró en un discurso que los bombardeos aliados eran el 
castigo