Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
UUNNIIVVEERRSSIIDDAADD NNAACCIIOONNAALL AAUUTTÓÓNNOOMMAA DDEE MMÉÉXXIICCOO FACULTAD DE DERECHO SEMINARIO DE DERECHO CONSTITUCIONAL TT EE SS II SS QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE: L I C E N C I A D A E N D E R E C H O P R E S E N T A : LUZ MIRIAM GONZÁLEZ ALMANZA “LA PARTICIPACIÓN DE LOS PARTIDOS POLÍTICOS EN EL MUNICIPIO”. CIUDAD UNIVERSITARIA, MÉXICO, D.F. A 2007 ASESOR: LIC. JORGE CARLOS ADAME GARCÍA UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. Gracias a DIOS que me permitió vivir éste momento acompañada de mi familia. Dedicado este trabajo de manera muy especial a mis padres ENRIQUE y GUADALUPE quienes me han guiado con sabiduría a lo largo de mi vida, brindándome su confianza y amor incondicional. Gracias a mi gran héroe que con su ejemplo de honestidad y fortaleza me inspiró a tomar éste rumbo en mi vida y que con orgullo llamo PAPÁ. Gracias a la mujer más maravillosa del mundo que con su gran corazón ha estado siempre a mi lado; gracias MAMÁ por tus consejos, tu cariño y por ser quien eres. A mis hermanos JORGE y SAMANTHA que han sido, son y serán mi complemento. Gracias VALERIE por escucharme y acompañarme en los momentos de aprendizaje en la vida y por disfrutar de nuestra amistad como nos ha tocado hacerlo. A VÍCTOR, porque nuestros ideales se encuentran plasmados en éste trabajo pero sobre todo te agradezco la alegría, la luz y la tranquilidad que le has brindado a mi vida. IV Al Licenciado JORGE CARLOS ADAME GARCÍA por su apoyo, consejos y paciencia para la realización de este trabajo. Gracias a mis tíos, tías y mi prima Mari por su cariño y preocupación hacia mí. Gracias a mis amigos y amigas que me han acompañado en este trayecto y por los grandes momentos que hemos compartido. A mis maestros que marcaron mi rumbo con sus lecciones de vida. A la UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO por su enseñanza, por darme mi profesión, por su majestuosidad y por el orgullo de pertenecer a ella. V ÍNDICE INTRODUCCIÓN .................................................................................................. VIII CAPÍTULO I.- CONCEPTOS FUNDAMENTALES ................................................ 1 1.1. El Municipio .................................................................................................... 1 1.2. Partidos Políticos ............................................................................................ 7 1.3. Democracia .................................................................................................... 12 1.4. Cultura Política ............................................................................................... 16 1.5. Asociaciones Políticas .................................................................................... 19 1.6. Organizaciones Políticas ................................................................................ 20 CAPÍTULO II.- ANTECEDENTES HISTÓRICOS .................................................. 24 2.1. Legislación electoral en México ..................................................................... 24 2.1.1. La legislación electoral de 1812 a 1821 ...................................................... 25 2.1.2. La Constitución de Cádiz ............................................................................ 26 2.1.3. La Constitución de Apatzingán .................................................................... 27 2.1.4. La legislación electoral de 1823 a 1854 ...................................................... 29 2.1.5. La legislación electoral de la Reforma ........................................................ 34 2.1.6. La legislación electoral del Porfiriato ........................................................... 37 2.1.7. La legislación electoral de la Revolución .................................................... 37 2.2. El Municipio .................................................................................................... 43 2.2.1. Desarrollo Histórico del Municipio ............................................................... 43 2.2.2. El Municipio como Institución Jurídica en Roma ......................................... 45 2.2.3. El Municipio en España como origen directo en México ............................. 46 2.2.4. El Municipio en el virreinato de la Nueva España ....................................... 50 2.2.5. Estructura y funcionamiento del Municipio Colonial .................................... 51 2.2.6. El Municipio en México a partir de la Independencia .................................. 54 2.2.7. El Municipio en la Constitución de 1917...................................................... 56 2.3. Partidos Políticos ............................................................................................ 58 2.3.1. Origen y evolución de los Partidos Políticos en México .............................. 59 2.3.2. Bases constitucionales de los Partidos Políticos ........................................ 62 CAPÍTULO III.- EL MUNICIPIO ............................................................................. 65 3.1. El Municipio de acuerdo al artículo 115 Constitucional .................................. 65 3.2. Facultades y atribuciones del Municipio ......................................................... 74 3.3. Elementos integrales del Municipio ................................................................ 76 3.4. Autonomía del Municipio ................................................................................ 81 3.5. Estructura y funcionamiento del Ayuntamiento y de la Administración Pública Municipal .................................................................................................. 82 3.6. Atribuciones del Municipio en materia legislativa ........................................... 89 3.7. Derechos de la población municipal ............................................................... 89 CAPÍTULO IV.- PARTIDOS POLÍTICOS .............................................................. 93 4.1. Origen y evolución de los Partidos Políticos .................................................. 93 4.1.1. Asociaciones Políticas y Grupos de Presión ............................................... 94 4.1.2. Constitución de los Partidos Políticos ......................................................... 101 4.1.3. Estructura y funcionamiento de los Partidos Políticos ................................ 103 4.1.4. Democracia interna de los Partidos Políticos .............................................. 107 4.2. Derechos y obligaciones de los Partidos Políticos ......................................... 108 4.2.1. Responsabilidad de los Partidos Políticos .................................................. 111 4.2.2. Sanciones de los Partidos Políticos ............................................................ 115 4.3. Financiamiento de los Partidos Políticos ........................................................ 120 4.3.1. Efectos de financiamiento de losPartidos Políticos .................................... 125 4.3.2. Supervisión del financiamiento de los Partidos Políticos ............................ 126 4.3.3. Recursos propios ........................................................................................ 130 4.3.4. Recursos privados ....................................................................................... 131 4.3.5. Recursos públicos ....................................................................................... 133 4.3.6. Topes a los gastos de campaña ................................................................. 135 VI 4.4. Clasificación de los derechos políticos electorales ........................................ 136 4.4.1. Derecho al voto ........................................................................................... 137 4.4.2. Derecho a ser electo ................................................................................... 140 4.4.3. Derecho de petición .................................................................................... 141 4.4.4. Derecho de reunión y asociación política .................................................... 142 4.4.5. Libertad de expresión .................................................................................. 143 4.4.6. Participación ciudadana en los órganos electorales ................................... 144 4.5. Frentes, coaliciones y fusiones de los Partidos Políticos ............................... 145 4.5.1. Frentes ........................................................................................................ 145 4.5.2. Coaliciones .................................................................................................. 146 4.5.3. Fusiones ...................................................................................................... 148 CAPÍTULO V.- CONCLUSIONES ......................................................................... 150 CAPÍTULO VI.- PROPUESTAS ............................................................................ 158 BIBLIOGRAFÍA ..................................................................................................... 160 VII INTRODUCCIÓN “Cien millones de mexicanos equivaldrían a cien millones de votos”. Millones más o millones menos somos los mexicanos que actualmente vivimos en la República Mexicana. Exceptuando al Distrito Federal, el resto de los mexicanos habitan en los Municipios que conforman al territorio nacional. Esto va más allá que una simple frase, ya que conlleva a que se reconozca a cada uno de los Municipios sin hacer distinciones pues de lo que se trata es que el país crezca y se desarrolle por igual y no sólo por segmentos. Si bien es cierto que hay Municipios con un mayor desarrollo que otros, también es cierto que debemos llamar a la unidad del país, pues estamos hablando de una Nación y no de una competencia partidista o de entidades federativas. En la actualidad el país cruza por una crisis en diversos rubros y somos los mexicanos los que debemos unirnos para cambiar el rumbo de nuestro México, combatiendo este cáncer que se ha propagado desde hace más de setenta años. Hay que comenzar por hacer un examen de conciencia de lo que el país requiere y en el tema que nos ocupa es necesario y urgente combatir ya la ignorancia de la sociedad. La educación en los mexicanos se ha ido deteriorando con el transcurso del tiempo, lo cual significa que la cultura política es casi nula y podemos visualizarlo en el alto grado de abstencionismo que hay en nuestras elecciones. Es importante que no sólo los que tenemos el carácter de ciudadanos, sino que todos los gobernados conozcamos nuestros derechos políticos así como las obligaciones. Esto significa que en los habitantes desde la instrucción básica se vaya formando la cultura política que el país requiere, pues esto representaría que la VIII votación de los mexicanos para elegir a quien debiera gobernar fuera efectivamente de la mayoría de los ciudadanos lo cual reflejaría que estamos interesados en exigir un buen gobierno para todos y no sólo para la minoría, refiriéndonos con esto a que es un porcentaje muy pequeño de la población quien ejerce su derecho al voto y este porcentaje se reduce a un segmento muy pequeño de ciudadanos que son los que tomaron la decisión de que gobernara el candidato en cuestión. Por lo tanto, quedaron excluidas todas las personas que no acudieron a depositar su voto y que en consecuencia no tienen voz en el rumbo político que tome el país. Es obligación de los gobernados señalar el camino que debe tomar nuestro gobierno, si bien es cierto que no todos pertenecemos a un partido político, también es cierto que es nuestro derecho acudir a las urnas en las fechas señaladas, no podemos culpar el mal manejo del gobierno a las personas que se encargan de dirigirlo, si ni siquiera somos capaces de dar a conocer nuestra opinión al respecto mediante el voto. En la actualidad se da este fenómeno por la falta de interés que existe en la gente respecto a la participación política pero es de vital importancia hacer ver que instruirnos en este rubro es de gran trascendencia, pues sólo así podemos exigir buenos resultados a los mandatarios que como bien dice la palabra, son quienes obedecen a nuestras órdenes como sociedad y como tal, debemos evitar estar en manos de malos gobernantes que sólo velan por sus propios intereses, las de sus familiares y amigos. A la gente que se encuentra en el poder le conviene que los gobernados se hundan en la ignorancia, pues sólo de esa manera pueden manipular a quienes no saben la real problemática del país. Es decir, un pueblo instruido es difícil de engañar, un pueblo que sepa el verdadero significado de depositar el voto en las urnas, será un pueblo con crecimiento y grandes ambiciones, decidido a IX luchar no sólo por el bienestar de la sociedad sino por el desarrollo del país, erradicando la corrupción y los malos manejos en la política. Debemos darle el lugar que se merece al Municipio de acuerdo a las bases por las cuales se luchó en la Revolución Mexicana, pues por obvio que parezca mencionarlo es en los Municipios donde habitan los gobernados, en donde es depositado cada uno de los votos y en donde se toman las decisiones del país. México no es únicamente el Gobierno Federal o los Gobiernos Estatales, México es el conjunto de Municipios que lo conforman y cada uno de los Municipios son las personas que los habitan. Esto es muy simple, hay que quitarnos las etiquetas de cualquier tipo, debemos como mexicanos mirar hacia un mismo punto, debemos trabajar en conjunto para poder progresar, es la sociedad quien debe estar al tanto de lo que sucede en el gobierno y no quienes sólo contienden para satisfacer las necesidades de un grupo bastante minoritario del país. Ahora estamos obligados a cambiar nuestra forma de pensar, instruyéndonos de una manera adecuada para poder tomar las decisiones correctas y evitar que unos cuantos se aprovechen de la ignorancia de una gran mayoría. Si cada persona que habita en México tomara conciencia de que debemos cambiar nuestra mentalidad en todo lo que esto significa, seguramente el cambio comenzaría de una manera muy apresurada. Sin embargo eso es imposible, pero lo que sí está en nuestras manos es comenzar por nosotros mismos y motivar a la gente a que cambie la actitud frente a la problemática que esto representa, no hay que cegarnos y hacer como que “no pasa nada”, hay que abrir los ojos y hacer a un lado la apatía y el conformismo que existe en gran parte de la población de nuestro país. Debemos propugnar por una mayor “conciencia cívica” en la población, pues tal parece que en últimas fechas el significado de esto se ha venido desvaneciendo enel tiempo. X CAPÍTULO I CONCEPTOS FUNDAMENTALES 1.1. EL MUNICIPIO. Etimológicamente la palabra Municipio deriva del latín “munus, munare” que significa carga, gravamen o prestación. Esto es porque anteriormente en Roma, los pueblos sometidos por el Imperio Romano debían pagar un tributo llamado munus, a cambio del derecho a autogobernarse.1 Este derecho consistía en que los pueblos conquistados y que habían sido incorporados al Estado, sus habitantes se convertían automáticamente en ciudadanos de Roma pero conservaban cierta libertad interior, así como el derecho de elegir a sus magistrados y la administración de los negocios generales dentro de los límites jurídicos fijados por las leyes estatales.2 Es decir, los habitantes de dichos Municipios, que recibían el nombre de munícipes, para efecto de que se les concedieran sus derechos políticos, siempre y cuando respetaran los límites fijados por el Estado, debían pagar el tributo al que nos referimos anteriormente y así gozar de cierta libertad. El vocablo Municipio también tiene sus antecedentes en Francia, que equivale a la palabra comuna, que es una especie de división administrativa y territorial dotada de sus propias autoridades administrativas o ejecutivas, encabezadas por el alcalde –Maire- y por el “Consejo Municipal” que es el órgano deliberativo.3 1 ROBLES MARTÍNEZ, Reynaldo. “El Municipio”, Edit. Porrúa, México, 1993, pág. 138. 2 BURGOA ORIHUELA, Ignacio. “Derecho Constitucional Mexicano”, Edit. Porrúa, México 1997, Edición 11°, pág. 903. 3 Idem, pág. 903. Es importante hacer notar que el Municipio surgió como una evolución de la sociedad en general, conteniendo las mismas finalidades en diferentes lugares, principalmente la autonomía. 1 Ahora bien, es interesante señalar las diversas tesis o teorías que existen respecto al origen del Municipio. Para el Doctor Reynaldo Robles Martínez, existen tres tesis relativas al origen del Municipio: La Primera.- Es la llamada tesis sociológica, la cual sostiene que el Municipio es anterior al Estado. Esto es porque el hombre por naturaleza es un ser sociable y debido a ello empezó por formar primeramente la familia, que es el núcleo de la sociedad. Con el paso del tiempo, dio origen a un grupo mayor, es decir, un grupo de familias que formaban una mayor agrupación. De tal forma que para que existiera el Municipio, según esta tesis sociológica, el único requisito que se necesita es que exista un conglomerado humano y que con el paso del tiempo exista una organización entre ellos. Se considera un requisito esencial en esta teoría sobre el origen del Municipio. La Segunda.- Es la tesis jurídica, la cual señala que es la ley la que declara al Municipio como tal. Es decir, existirá un conglomerado humano que forme parte de la población estatal, pero si dicha agrupación no se organiza tanto jurídica como políticamente, la ley no le reconocerá su autonomía y autarquía, refiriéndonos a esta última como la independencia o autosuficiencia del Estado en el orden político o económico4 pues es la ley la que le da el carácter de Municipio. Es decir, el Derecho es el que crea el Municipio, para lo cual toma en cuenta los elementos a los que más adelante nos referiremos y con base en ellos señala sus requisitos y su forma de coexistir, por medio de las bases constitucionales, que en nuestro caso, es el artículo 115 Constitucional y posteriormente las leyes que de este artículo emanen. 4 DE PINA VARA, Rafael. “Diccionario de Derecho”, Editorial Porrúa, México, 1980, pág. 108. 2 Por lo tanto el Municipio es una entidad territorial, humana y jurídica, creada por la ley ya que antes de que la ley denomine “Municipio” a un conglomerado social, éste no existe como Municipio, es la ley la que le da tal carácter. 5 La Tercera.- Es la llamada tesis ecléctica, misma que reconoce tanto el aspecto jurídico como el sociológico y de esta manera se llega a la conclusión de que a pesar de que algunas agrupaciones vecinales reúnan las características de lo que es el Municipio, éste no existirá hasta en tanto no sea reconocido por la ley como tal. Es en la ley en donde se plasma lo que es el Municipio, así como sus derechos y obligaciones, brindando con esto una especie de respaldo para dicho conglomerado humano ante el Estado. Por lo tanto, consideramos que la tesis ecléctica respecto al origen del Municipio es la correcta, pues para que exista el Municipio como tal, debe considerarse tanto la tesis sociológica como la jurídica y no solamente una de esas dos. Es decir, debe reconocérsele al Municipio sus atributos de origen social así como su organización política, como quiera que esta sea, pues a pesar de que exista ese “conglomerado humano” reunido para satisfacer sus necesidades y que incluso dentro de éste se de una autoridad entre ellos, esto no basta, si la ley no le da tal carácter.6 Incluso en las leyes de nuestro país se establece un procedimiento en el que cada entidad federativa tiene a su cargo la creación o incluso la supresión de 5 ROBLES MARTÍNEZ, Reynaldo. “El Municipio”, Edit. Porrúa, México, 1993, pág. 19. Cabe mencionar que efectivamente es el Derecho el que le impone el nombre de Municipio a dicho conglomerado humano y en consecuencia surtirá los efectos legales a que haya lugar, sin embargo, esto no quiere decir que sea el derecho el creador del Municipio, esto ha surgido por la evolución misma de la sociedad a través del tiempo, consecuentemente el Derecho es el que ha tenido que intervenir en el reconocimiento del mismo. 6 Esto es en cuanto al reconocimiento del Municipio frente al Estado, ya que es el derecho el que debe reconocerlo con todas las facultades que éste pueda tener. Sin embargo es muy importante que no se haga a un lado el elemento humano, pues es el factor principal para el desarrollo de una sociedad y en consecuencia de un gobierno. Para que exista este último, debemos hablar ya de la existencia de un conglomerado humano que es la sociedad, misma que está formada de seres humanos. 3 Municipios, por lo tanto, un centro de población que no tenga la categoría de Municipio, no tendrá vida jurídica.7 Ahora bien, ya adentrándonos a lo que es la definición del Municipio, es necesario señalar que éste es la base de la división territorial, política y administrativa de nuestro país. Para Daniel Hugo Martínez, quien es profesor uruguayo, el Municipio es: “Una Institución político-administrativa-territorial, basada en la vecindad, organizada jurídicamente dentro del Estado para satisfacer las necesidades de vida de la comunidad local, en coordinación con otros entes territoriales y servicios estatales.”8 De acuerdo a esta definición, se puede apreciar un factor importante, pues señala que el Municipio deberá coordinarse con otros entes territoriales y servicios estatales, es decir, el Municipio no puede actuar por sí solo, sino que deberá sujetarse a lo que la entidad federativa, en nuestro caso, señale.9 Para Moisés Ochoa Campos, “El Municipio es la asociación de vecindad constituida por vínculos locales fincados en el domicilio, asentado en un territorio jurídicamente delimitado, con derecho a un gobierno propio, representativo y popular, reconocida por el Estado como base de su organización política y administrativa.”10 7 LOPEZ SOSA, Eduardo. “Derecho Municipal Mexicano”. Edit. UNAM, México 1999, pág. 34. No debe perderse de vista que el elemento primordial para que sea regulado el Municipio son los habitantes de éste, siendo injusto que se les reconozca únicamente hasta que el Derecho le imponga el carácter de Municipio. 8 MARÍAHERNÁNDEZ, Antonio. “Derecho Municipal, Teoría General, Volumen I”. Edit. Depalma. Argentina 1997, Segunda Edición, pág. 246 9 Si bien es cierto que el Municipio no debe sobrepasar los límites que la Constitución establece, habrá que preguntarnos en dónde queda la autonomía del Municipio que nuestra propia Carta Magna reconoce. 10 LÓPEZ SOSA, Manuel. “Derecho Municipal Mexicano”. Editorial UNAM. México 1999, pág. 27. Este concepto, al igual que el anterior, toma en cuenta el elemento humano al referirse a la asociación de vecindad y que además tiene derecho a un gobierno PROPIO, aparte de que debe ser reconocido por el Estado. 4 Como lo asentamos con anterioridad, en Roma los munícipes pagaban un tributo (munus) a efecto de tener el derecho de autogobernarse, siempre y cuando se sujetaran a las reglas del Imperio. Consideramos primordial que no se deje a un lado la esencia del Municipio, descrita en la definición etimológica, es decir, que nunca se pierda ese derecho de tener un gobierno propio, siempre y cuando no se alteren o sobrepasen las leyes de las cuales emana el Municipio, principalmente la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Independientemente de lo dicho con anterioridad, las diferentes definiciones que dan diversos autores del tema que nos ocupa, algunos dan preponderancia a la población que es el elemento humano, otros se lo dan al territorio y otros más consideran varios aspectos en un mismo concepto. Por ejemplo, referente al elemento humano, tenemos lo siguiente: Cuesta nos dice que: “El Municipio es una sociedad de familias e individuos unidos por el vínculo de la contigüidad de domicilio o habitación permanente y por las relaciones y necesidades comunes que de la misma se deriva.”11 Adolfo Posada, define que “Lo característico del Municipio es la vecindad. Por eso podría decirse que el Municipio es el núcleo social de la vida humana total, determinado o definido naturalmente por las necesidades y relaciones de la vecindad; el Municipio, en efecto es esencialmente un núcleo de vecinos, o sea de personas que viven en un espacio contiguo, seguido, el cual se define según las condiciones reales de la vecindad.”12 11 CUESTA, citado por ROBLES MARTÍNEZ, Reynaldo, “El Municipio”, pág. 139. Esto nos parece importante pues hace mención a la familia, núcleo de la sociedad, sin importar el milenio en el que nos encontremos en la actualidad. 12 POSADAS ADOLFO, citado por ROBLES MARTÍNEZ, Reynaldo, op. cit. pág. 139 5 De acuerdo al elemento territorial, podemos señalar los siguientes conceptos: Reynaldo Pola dice que “El Municipio es una fracción territorial del Estado, distrito o territorio con sanción oficial, donde se hallan congregadas numerosas familias que obedecen las mismas leyes y están sujetas a la acción administrativa de un Ayuntamiento.”13 Para Mendieta y Núñez, “El Municipio es la circunscripción territorial más pequeña del país, y está bajo el Gobierno inmediato y directo del Ayuntamiento.”14 No obstante las anteriores definiciones, existen otras que consideran diversos aspectos del Municipio. Tal es el caso de José Gámez Torruco, quien dice que el Municipio es: “Una unidad política dentro del Estado, una comunidad geográficamente localizada y que reconoce una autoridad propia para la gestión de los intereses puramente locales, en este aspecto el Municipio dispone de una esfera particular de competencias. Pero el Municipio no está separado del Estado, sino por el contrario, integrado a su estructura.”15 O bien, el Doctor Reynaldo Robles Martínez, quien define al Municipio de la siguiente manera: “El Municipio mexicano es una persona jurídica integrada por una asociación de vecindad asentada en una circunscripción territorial que es la base de la división política, administrativa y territorial de una entidad; constituye 13 POLA, Reynaldo, citado por ROBLES MARTÍNEZ, Reynaldo, op. cit. pág. 140 14 MENDIETA Y NÚÑEZ, citado por ROBLES MARTÍNEZ, Reynaldo, op. cit. pág. 140. Si bien el Municipio está bajo el gobierno directo e inmediato del Ayuntamiento, porqué en materia legislativa aún tiene que depender de las decisiones que tome el gobierno estatal. 15 GAMEZ TORRUCO, citado por ROBLES MARTÍNEZ, Reynaldo, op. cit. pág. 142. Efectivamente el Municipio forma parte del Estado, refiriéndonos a la Entidad Federativa, sin embargo, la propia Constitución le reconoce sus atributos, por lo tanto, en cuanto a cuestiones que le son propias, debe considerársele independiente del Estado al cual pertenece. 6 un nivel de gobierno con capacidad jurídica, política y económica, para alcanzar sus fines y autogobernarse, con sujeción a un orden jurídico superior.”16 1.2. PARTIDOS POLÍTICOS. Desde la antigüedad han existido grupos de individuos que luchaban con todos los medios a su alcance y al mando de un jefe por la obtención del poder, por lo tanto el desarrollo de los partidos políticos está ligado con el anhelo de los grupos sociales por participar en el proceso de toma de decisiones políticas.17 De acuerdo con la concepción mexicana, los Partidos Políticos son entidades de interés público que no deben limitarse al proceso electoral, de ahí que interese su perfeccionamiento en cuanto a posición ideológica; consolidación de estructuras internas; en la realización de campañas políticas con mayor acercamiento a la población; la transparencia de sus finanzas y “mejores” procesos de selección de sus candidatos a ocupar cargos públicos. Es de vital importancia saber el papel que juegan los Partidos Políticos dentro de la forma del Estado democrático representativo, pues ellos constituyen el canal a través del cual los diversos grupos que conforman la sociedad organizada hacen valer sus principios y fundamentos ideológicos y tratan de lograr pacíficamente el control del poder político y económico.18 Es decir, representan corrientes de opinión pública sobre la problemática general de un pueblo y al mismo tiempo enfrentan la conducta de los titulares de los órganos del Estado. 16 op. cit. pág. 143. Nos agregamos al comentario, aceptando que el Municipio está sujeto a un orden jurídico, pues estamos hablando de la Constitución, que es la que lo reconoce y le otorga sus atributos. 17 Éstas decisiones políticas deben ser con la mera responsabilidad de que repercutirán en la sociedad, en los gobernados que son quienes les otorgarán su voto de confianza. 18 GARITA ALONSO, Miguel Ángel, "Sistemas Políticos Contemporáneos", Editado por la Cámara de Diputados, Primera Edición, México, 2003, pág. 213. 7 Por ende, el Partido Político es como un laboratorio en donde se formulan las directrices de un gobierno cuyos funcionarios las desarrollan si habiendo sido postulados por él, obtienen la mayoría de sufragios. Sin los Partidos Políticos la vida democrática estaría desorganizada y sujeta a la improvisación en la elección de los referidos titulares.19 Existen cuatro criterios interpretativos respecto a los Partidos Políticos, de acuerdo con Miguel Ángel Garita Alonso:20 1) La interpretación sociológica, misma que asevera que los Partidos Políticos son producto de las fuerzas sociales y de la lucha de clases que son el resultado de la integración social de los grupos agregados, que se orientan hacia el poder teniendo como objetivo su control; 2) La interpretación psicológica, según la cual los partidos son producto de los impulsos y tendencias existentes entre los hombres, de su instinto de lucha y su tendencia a ser dominadas; 3) La interpretación política los considera agrupaciones destinadas a proporcionar la clase o estamento gobernante y obtener el control del gobierno para realizarsus fines, ideales y materiales, postulando candidatos y formulando doctrinas y programas políticos; y 4) La interpretación jurídica, que ve en los Partidos Políticos organizaciones de derecho público, necesarias para el desenvolvimiento de la democracia representativa, instrumentos de gobierno cuya institucionalización genera vínculos y efectos jurídicos entre los miembros de un partido, entre estos y el partido y el partido en su relación con el cuerpo electoral y con la estructura del Estado de la que los partidos son parte integrante.21 19 BURGOA ORIHUELA, Ignacio, "Derecho Constitucional Mexicano", Editorial Porrúa, Onceava Edición, México 1997, pág. 533. 20 GARITA ALONSO, Miguel Ángel, "Sistemas Políticos Contemporáneos", Editado por la Cámara de Diputados, Primera Edición, México, 2003, pp. 218 y 219. 8 De acuerdo a estas interpretaciones, debemos destacar que es la interpretación jurídica la que abarca diversas finalidades de los Partidos Políticos; sin embargo consideramos que faltaría recalcar que aparte de esas funciones, el Partido Político es un intermediario entre la sociedad y el gobierno, pues con base en las necesidades de la población, estas se plasman en un proyecto para que el partido que llegue a gobernar tome en cuenta las peticiones que la sociedad requiere. La función de un Partido Político no es únicamente encaminarse al poder, consideramos que tiene un fin social que atender para que surta sus efectos frente a la sociedad, los proyectos que estos presenten deben ser de acuerdo a los intereses de los habitantes y no de acuerdo a los intereses personales de sus dirigentes. Luis Mendieta define al Partido Político como “una agrupación temporal o permanente de ciudadanos guiados por un líder y unidos por intereses comunes que tratan de satisfacer de acuerdo con un programa de principios y mediante la pretensión o la conquista directa del poder estatal o ejerciendo influencia en las orientaciones del mismo”.22 Para Max Weber, los Partidos Políticos son formas de socialización, que descansando en un reclutamiento formalmente libre, tienen por fin proporcionar a sus dirigentes dentro de su asociación y otorgar por este medio a sus miembros activos determinadas probabilidades, ideales o materiales (la realización de fines objetivos o el logro de ventajas materiales o ambas cosas).23 De acuerdo a esta definición, se puede decir que el Partido Político es una asociación voluntaria cuya pertenencia no es consecuencia de un vínculo adscriptivo, resaltando que esta asociación está dirigida a fines determinados 22 Citado por GARITA ALONSO, Miguel Ángel, "Sistemas Políticos Contemporáneos", Editado por la Cámara de Diputados, Primera Edición, México, 2003, pág. 214.. 23 WEBER, Max, “Economía y Sociedad”, Fondo de Cultura Económica, Segunda Edición, vol. I, México. pág. 228. 9 cuya satisfacción exige el poder, siendo los beneficiarios primarios de dicha actividad partidaria sus miembros activos, especialmente sus dirigentes.24 Una de las funciones que debe cumplir el Partido Político, son las sociales.25 De acuerdo a Giovanni Sartori, un partido político es cualquier grupo político que se presenta a elecciones y que puede colocar mediante elecciones a sus candidatos en cargos públicos.26 Ahora bien, de acuerdo a Eduardo Castellanos Hernández, el Partido Político es un grupo organizado para alcanzar y ejercer el poder en un sistema político. De acuerdo a esta definición podemos percatarnos que es la búsqueda permanente y el ejercicio del poder (uno de los principales objetivos de un Partido Político en un Estado – Nación) y sobre todo mantenerse en el,27 pues no abarca todas las circunstancias y los elementos de un Partido Político pero nos confronta a la triste realidad, siendo ésta únicamente estar en el poder. Los Partidos Políticos tienen una serie de funciones fácilmente identificables, por una parte permiten la participación colectiva en los procesos políticos y asimismo encauzan las demandas políticas de la sociedad que se organiza en torno a ellos y que seguramente transmite las expectativas de grupos sociales más amplios.28 Es decir, no nada más deben enfocarse en la estancia del poder, la función que ellos también deben asumir es la de recolectar las demandas que la sociedad reclama y entonces los Partidos Políticos deberán 24 MARTÍNEZ SOSPEDRA, Manuel, "Introducción a los Partidos Políticos", Edit. Ariel, España 1996, pág. 19. Efectivamente es el poder la satisfacción total de un Partido Político, resultando favorecidos primeramente los miembros activos, lo cual está completamente fuera de lugar, pues los beneficiarios deben ser los gobernados. 25 SARTORI, Giovanni. Partidos y Sistemas de Partidos. Marco para un análisis. Madrid, Alianza, 1980, vol I, pág. 92. Sin embargo, como funciones sociales también están las de promover la participación ciudadana en las elecciones, dar a conocer sus proyectos a través de diversas actividades y sobre todo allegarse de las demandas de los gobernados, fungiendo así como intermediarios entre la sociedad y el gobierno. 26 MARTÍNEZ SOSPEDRA, Manuel, "Introducción a los Partidos Políticos", Edit. Ariel, España 1996, p. 20 27 CASTELLANOS HERNÁNDEZ, Eduardo, "Derecho Electoral en México, Introducción General", Edit. Trillas, 1° Edición, México 1999, pág. 57 28 Idem, pág.58 10 organizarse para efecto de satisfacer en la medida de lo posible los encargos que los gobernados exigen. Ahora bien, de acuerdo al tema que nos referimos en el presente trabajo, es importante señalar los aspectos que los Partidos Políticos deben tener en la vida municipal. En primer lugar, lo relacionado con las funciones de ellos, que se clasifican en: a) formulación de políticas, b) designación de candidatos para los cargos públicos electivos, c) conducción y crítica del gobierno, d) educación política del pueblo, e) servir de intermediario entre los gobernados y el gobierno, f) mantenimiento de la unidad en el gobierno; g) desarrollo y mantenimiento de la unidad nacional Las funciones antes mencionadas pueden ser sintetizadas en el objetivo más alto que deben perseguir los Partidos Políticos locales: el de vigorizar el ESPÍRITU MUNICIPAL CÍVICO 29. La participación de los Partidos Políticos en los Municipios es tan importante como la que se da a nivel nacional, ya que en primer lugar el Municipio, como bien se ha precisado con anterioridad, es la base de nuestra organización (en todos los aspectos: política, administrativa, jurídica) y en segundo lugar porque goza de derechos que la propia Constitución le concede, siendo de las más importantes su autonomía y por lo tanto no debe estar sujeto a lo que la Entidad Federativa al cual pertenezca le conceda, siempre y cuando no transgreda las 29 MARÍA HERNÁNDEZ, Antonio, "Derecho Municipal, Teoría General, Volumen I", Editorial Depalma, Segunda Edición, Argentina, 1997, pág. 475. Es decir, que a los habitantes del Municipio se les instruya de tal manera que fortalezcan la manera de conducirse en el ámbito político dentro del Municipio. 11 disposiciones consagradas en nuestra Carta Magna. Por lo tanto, es importante que el Municipio reclame la autonomía que la misma Constitución le señale para efecto de que los Partidos Políticos puedan tener su propio origen y desarrollo dentro del mismo. 1.3.- DEMOCRACIA. La democracia es un régimen político en el que la soberanía reside en el pueblo y es ejercida por éste de manera directa o indirecta. Deriva del griego demos que significa pueblo y kratos que quiere decir fuerza, poder, autoridad, gobierno. Más concretamente, la democraciaes una forma de gobierno en la cual, el poder para cambiar las estructuras de gobierno y las leyes, así como el poder de tomar todas las decisiones de gobierno, debe residir en los ciudadanos. En un sistema así, las decisiones son tomadas por los propios ciudadanos (democracia directa) o por representantes que son escogidos mediante elecciones libres, y que deben actuar representando los intereses de los ciudadanos, siendo así la democracia representativa. Una acepción moderna y de manera muy general, considera a la democracia como el sistema en que el pueblo en su conjunto ejerce la soberanía y en nombre de la misma elige a sus gobernantes. El régimen democrático de tipo occidental es aquél que realmente asegura a la persona sus garantías individuales, le proporciona un mínimo de seguridad económica y no concentra el poder en una sola persona o en un grupo sino que consagra el principio de elección popular, de la separación de las funciones legislativas, ejecutiva y judicial.30 La democracia aparece por primera vez en Grecia en el 500 a.C. Las pequeñas dimensiones y la escasa población de las polis (o ciudades griegas) explican la 30 INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS, "Diccionario Jurídico Mexicano", Editorial Porrúa y UNAM, Sexta Edición, México 1993, pág.892. 12 posibilidad de que apareciera una asamblea del pueblo de la que formaban parte todos los ciudadanos hombres libres. Esta asamblea fue el símbolo del gobierno popular, sin embargo solo participaba el 25% de la población, apenas 40.000 ciudadanos, ya que estaban excluidas las mujeres libres, los esclavos y los extranjeros residentes. En la democracia griega no existía la representación, los cargos de gobierno eran ocupados alternativamente por todos los ciudadanos y la soberanía de la asamblea era absoluta. Todas estas restricciones y la reducida población de Atenas (unos 300.000 habitantes) permitieron minimizar las obvias dificultades logísticas de esta forma de gobierno. En Roma, la caída de la monarquía etrusca condujo al pueblo al poder, conformándose así la República Romana. En ella, el poder legislativo correspondía al Senado y el poder ejecutivo lo conformaban las magistraturas, cuestores, pretores y cónsules entre otros cargos, que eran elegidos por los ciudadanos con derechos; los patricios inicialmente y posteriormente también la plebe, en verdaderas campañas electorales en las que se renovaban, por elección directa, multitud de cargos públicos. Con el tiempo el sistema fue degenerando. Los senadores no eran electos, mas tenían un poder grandísimo. Con la expansión territorial, la República se convirtió en difícilmente gobernable y degeneró en los Triunviratos para convertirse, finalmente, en Imperio de Julio César y, sobre todo de Augusto. Para Eduardo Castellanos Hernández la democracia es “el proceso de organización social caracterizado por los principios de libertad, igualdad y justicia, en el acceso y elección de los satisfactores que requieren los miembros de ese grupo social”.31 La democracia puede tener dos aspectos, un aspecto formal y un aspecto sustantivo. En el primero se trata de un conjunto de reglas de procedimiento para la toma de decisiones, una de las cuales y sin duda la 31 CASTELLANOS HERNÁNDEZ, Eduardo, “Formas de Gobierno y sistemas electorales en México, tomo I, 1812-1940”, Editorial Centro de Investigación Científica Ing. Jorge L. Tamayo, México, 1996, pág. 427. 13 más importante es la integración de la clase gobernante, es decir, un Gobierno elegido por la ciudadanía. Por otro lado, en la democracia de aspecto sustantivo puede ser considerada como un Gobierno elegido para el pueblo, precisamente en el sentido propuesto en la fórmula del artículo 3° Constitucional.32 “Artículo 3 CPEUM.- Todo individuo tiene derecho a recibir educación. El Estado -Federación, Estados, Distrito Federal y Municipios-, impartirá educación preescolar, primaria y secundaria. La educación preescolar, primaria y la secundaria conforman la educación básica obligatoria. La educación que imparta el Estado tenderá a desarrollar armónicamente todas las facultades del ser humano y fomentará en él, a la vez, el amor a la Patria y la conciencia de la solidaridad internacional, en la independencia y en la justicia. I.- Garantizada por el artículo 24 la libertad de creencias, dicha educación será laica y, por tanto, se mantendrá por completo ajena a cualquier doctrina religiosa; II.- El criterio que orientará a esa educación se basará en los resultados del progreso científico, luchará contra la ignorancia y sus efectos, las servidumbres, los fanatismos y los prejuicios. Además: a) Será democrático, considerando a la democracia no solamente como una estructura jurídica y un régimen político, sino como un sistema de vida fundado en el constante mejoramiento económico, social y cultural del pueblo; …”33 Para Aristóteles, el poder de mando o de gobierno puede residir en un solo individuo, en una minoría o en una mayoría; en cada uno de estos fundamentos del gobierno, distinguía una forma pura y una impura. Es decir, cuando el gobierno reside en un solo individuo se está hablando de la forma pura de la “monarquía” (si es que ese individuo emplea el poder de que dispone en beneficio de todos); siendo la impura la “tiranía”, en la que ese sólo individuo utiliza el poder en beneficio exclusivo de sí mismo o de sus allegados. Ahora bien, cuando el gobierno reside en una minoría, existe la forma pura de la “aristocracia”, si es que se usa el poder en beneficio de todos; y en contraposición a ésta se encuentra la “oligarquía”, que es la forma impura, 32 CASTELLANOS HERNÁNDEZ, Eduardo, "Derecho Electoral en México, Introducción General", Edit. Trillas, 1° Edición, México 1999, pág. 48. 33 CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS, Editorial SISTA, México, pág. 3. 14 cuando el poder sólo beneficia a la minoría que lo detenta. Por último y de acuerdo al tema que nos ocupa, la forma pura de la “democracia” resulta cuando el poder lo usufructúa la mayoría de la colectividad, es decir, ese poder favorece a todos por igual; siendo la forma impura la “demagogia”34, entendiéndose por ésta como una degeneración de la democracia que conduce a la sustitución de la verdadera voluntad del pueblo por la de grupos irresponsables que pretenden representarla, sin que esta representación les haya sido conferida en forma legítima.35 Para Norberto Bobbio la democracia es caracterizada por un conjunto de reglas que establecen quién está autorizado para tomar las decisiones colectivas y bajo qué procedimientos. Todo grupo social tiene necesidad de tomar decisiones obligatorias para todos los miembros del grupo con el objeto de mirar por la propia sobrevivencia, tanto en el interior como en el exterior. Pero incluso las decisiones grupales son tomadas por individuos (el grupo como tal no decide). Así pues, con el objeto de que esta decisión tomada por individuos pueda ser aceptada como una decisión colectiva, es necesario que sea tomada con base en reglas que establecen quiénes son los individuos autorizados a tomar las decisiones obligatorias para todos los miembros del grupo y con qué procedimientos. Por lo que respecta a los individuos llamados a tomar decisiones colectivas, o bien a colaborar en ellas, un régimen democrático se caracteriza por la atribución de este poder a un número muy elevado de miembros del grupo. Sin embargo no se puede decir “todos” porque aún en el más perfecto de los regímenes democráticos, no votan los individuos que no han alcanzado cierta edad. La regla fundamental de la democracia es la “mayoría”, o sea, la regla con base en la cual se considerandecisiones 34 TENA RAMÍREZ, Felipe, “Derecho Constitucional Mexicano”, Editorial Porrúa, Vigésimo Sexta Edición, México, 1992, pág. 93. Si bien es cierto que en México se ejerce la democracia, habrá que ser muy cuidadosos pues el porcentaje de los votantes que acuden a las urnas a depositar su voto es muy bajo, por lo tanto, no se trata de la mayoría de los ciudadanos quienes aprovechan ésta forma de gobierno y en consecuencia no es toda la colectividad la que resulta beneficiada. 35 DE PINA VARA, Rafael, "Diccionario de Derecho", Editorial Porrúa, Novena Edición, México 1980, pág. 207. 15 colectivas y por tanto obligatorias para todo el grupo, son las decisiones aprobadas al menos por la mayoría de quienes deben tomar la decisión. Si es válida una decisión tomada por la mayoría, con mayor razón es válida una decisión tomada por unanimidad.36 Al respecto, el artículo 217-A, fracción III de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre del año 1948, señala lo siguiente: “Todo el mundo tiene derecho a formar parte del gobierno de su país, directamente o a través de representantes libremente elegidos. La voluntad del pueblo debe ser la base de la autoridad del gobierno; la cual debe expresarse a través de elecciones periódicas y legítimas basadas en el sufragio universal mediante voto secreto y libre”.37 1.4. CULTURA POLÍTICA. La Cultura Política en un sentido amplio puede ser entendida como formación social, abarca la dimensión subjetiva de la política, extendida a valores, creencias y comportamientos. La Cultura Política de una nación es la distribución particular de patrones de orientación psicológica hacia un conjunto específico de objetivos sociales entre los miembros de dicha nación. Es el sistema político internalizado en creencias, concepciones, sentimientos y evaluaciones por una población o por la mayoría de ella.38 36 BOBBIO, Norberto, "El Futuro de la Democracia", Edit. Fondo de Cultura Económica, Cuarta Edición, México, 2000, págs. 24 y 25. 37 Asamblea General de las Naciones Unidas (1948), Declaración Universal de los Derechos del Hombre, Artículo 217 A (III). 38 PERCHARD, Jacqueline, “La Cultura Política Democrática”, Cuadernos de divulgación de la cultura política democrática, Segunda Edición, Instituto Federal Electoral, México 1995, pág. 10. 16 Para dar una definición de cultura política es necesario ver el reflejo de la política en la sociedad, se tiene que analizar la etapa de instrucción y formación educativa de ésta. Deben conocerse las costumbres y la evolución política de una nación. Almond y Powell la definen como “el patrón de orientaciones y actitudes individuales hacia la política y los miembros de un sistema político”39 La Cultura Política debe ser principio de formación en el educando ya que es indispensable que conozcan sus derechos, incluyendo en estos, los derechos políticos. Así pues, el grado de instrucción educativa es parte fundamental de una cultura política, ya que la escuela constituye el medio idóneo para que el ser humano se interese por la vida política de su país, ya sea conociendo su historia o a través de lecturas. Para Eduardo Andrade Sánchez, existen tres tipos de cultura política: 40 1) Localista.- Consiste en que a los ciudadanos sólo les interesa los asuntos de su localidad y hacen a un lado los temas de política nacional. 2) Súbdito.- Los individuos acatan todas las normas y aceptan toda clase de medidas del gobierno, además que no le interesa influir en el sistema 3) Participativa.- Los ciudadanos manifiestan gran interés por las cuestiones políticas y participan en la toma de decisiones. John Stuart Mill, en su libro “Consideraciones sobre la Democracia Representativa” distingue a los ciudadanos en activos y pasivos y especifica que en general los gobernantes prefieren a los pasivos porque es más fácil tener controlados a súbditos dóciles e indiferentes; pero la democracia necesita 39 Citado por OROZCO GOMEZ, Javier, "Estudios Electorales", Edit. Porrúa, 1° Edición, México, 1999, pág. 25. 40 Citado por OROZCO GOMEZ, Javier, "Estudios Electorales", Edit. Porrúa, 1° Edición, México, 1999, pág. 25. 17 de los ciudadanos activos. Este autor concluye que si debiesen prevalecer los ciudadanos pasivos, con mucho gusto los gobernantes convertirían a sus súbditos en un rebaño de ovejas, dedicadas únicamente a comer el pasto una al lado de la otra. Esto lo llevaba a proponer la ampliación del sufragio a las clases populares con base en el argumento de que uno de los remedios contra la tiranía de la mayoría está precisamente en el hacer partícipes en las elecciones a las clases populares, además de a las clases pudientes que siempre constituyen una minoría de la población y tienden por naturaleza a mirar por sus propios intereses. Él decía que la participación en el voto tiene un gran valor educativo, mediante la discusión política, el obrero, cuyo trabajo es repetitivo en el estrecho horizonte de la fábrica, logra comprender la relación entre los acontecimientos lejanos y su interés personal, establecer vínculos con ciudadanos diferentes de aquellos con los que se trata cotidianamente y volverse un miembro consciente de una comunidad.41 La apatía política involucra a una gran parte de los ciudadanos que tienen derecho al voto, y esto es porque simplemente les es indiferente lo que sucede, no les interesa. Mientras existan sociedades indiferentes o apáticas frente a los asuntos públicos, los abusos de poder y las arbitrariedades no faltarán en las comunidades; por el contrario, un pueblo enterado de su vida política da como resultado un equilibrio de poderes y el ejercicio pleno de la democracia.42 Realmente la cultura política en una sociedad es de suma trascendencia para el buen desarrollo de la nación, pues es muy cierto que a los gobernantes no les conviene que sus gobernados sean personas instruidas, ya que así les facilitaría el camino para satisfacer sus intereses personales; sin embargo esto 41 BOBBIO, Norberto, "El Futuro de la Democracia", Edit. Fondo de Cultura Económica, Cuarta Edición, México, 2000, pág. 39. 42 OROZCO GOMEZ, Javier, "Estudios Electorales", Edit. Porrúa, 1° Edición, México, 1999, pág. 28. 18 no es lo correcto, si bien es cierto que exigimos un cambio en nuestro gobierno, sería bueno comenzar por nosotros mismos e interesarnos por los temas políticos de nuestro país, así como hacer uso de nuestros derechos políticos, de los cuales hablaremos más adelante. 1.5. ASOCIACIONES POLÍTICAS. La palabra asociación deriva del latín associatio, associare, que quiere decir unión más o menos permanente de hombres que buscan un fin común y política que viene de la leyenda griega y significa lo perteneciente o relativo a la polis, que era la ciudad en la que vivieron los griegos.43 Cuando se habla de una asociación, puede que tenga un carácter lucrativo o no lucrativo, en su caso sería una asociación mercantil o civil respectivamente. Para Guillermo Cabanellas desde el punto de vista jurídico, asociación es “la relación que une a los hombres en grupos y entidades organizadas, donde al simple contacto, conocimiento o coincidencia, se agrega un propósito más o menos duradero, de proceder unidos para uno o más objetivos.44 En el caso que nos ocupa, una asociación política puede llegar a ser la semilla de un Partido Político. Como se dijo anteriormente, existen diversos tipos de asociación pero en todos destaca la unión de los hombres para defender intereses comunes, ya que atendiendo al pensamiento aristotélico, el hombre no puede vivir solo, sino que tiene que hacerloen comunidad y precisamente, las asociaciones no importando el carácter que tengan muestran dos cosas, en primer lugar la sociabilidad del ser humano y en segundo, que la asociación es una libertad que debe ser jurídicamente protegida.45 43 INSTITUTO DE INVESTIGACIONES JURÍDICAS, "Diccionario Jurídico Mexicano", Editorial Porrúa y UNAM, Sexta Edición, México 1993, pág. 252 44 CABANELLAS DE TORRES, Guillermo, “Diccionario Jurídico Elemental”, Undécima Edición. Editorial Heliasta SRL, Argentina 1993, pág. 40. 45 OROZCO GOMEZ, Javier, "Estudios Electorales", Edit. Porrúa, 1° Edición, México, 1999, pág. 50. 19 El objeto de integrar este tipo de asociaciones es que se forme un grupo de individuos que compartan ideas análogas para efecto de participar en la vida política y de alguna manera expresar su opinión sobre temas nacionales ya sea a través de foros que ellos mismos realicen o a través de los medios informativos. El artículo 33 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales establece que las agrupaciones políticas nacionales son formas de asociación ciudadana que coadyuvan al desarrollo de la vida democrática y de la cultura política, así como la creación de una opinión pública mejor informada.46. Es decir, una asociación política podría llamarse como un auxiliar de la vida democrática, ya que si bien es cierto que no tienen permitido participar en las elecciones, su actividad está encaminada a participar en la vida política del país, o bien, en el lugar en donde se encuentren y coadyuvar con la ciudadanía. 1.6. ORGANIZACIONES POLÍTICAS. Otra de las formas de asociación y participación política que prevé la legislación electoral, está constituida por las agrupaciones u organizaciones políticas, las cuales son definidas por el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales en su artículo 33 como las formas de asociación ciudadana que coadyuvan al desarrollo de la vida democrática y de la cultura política, así como a la creación de una opinión pública mejor informada y sin que puedan calificarse como “partido” o “partido político”, o bien usar alguna de estas denominaciones bajo ninguna circunstancia. Para obtener el registro como agrupación u organización política, de igual manera que los Partidos Políticos deberán presentar su solicitud de registro en 46 “Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales”, Editorial Instituto Federal Electoral, Segunda Edición, México 1999, artículo 33, pág. 28. 20 el mes de enero del año anterior al de la elección, acompañándose de la documentación básica requerida. Dicha solicitud deberá presentarse ante el Consejo General del Instituto Federal Electoral y éste resolverá en un plazo máximo de 60 días si procede o no la solicitud y una vez que se haya resuelto la solicitud que se comenta, el Consejo General deberá publicar la resolución en el Diario Oficial de la Federación. Ahora bien, la única forma en que dichas organizaciones pueden participar en los procesos electorales, es mediante un acuerdo de participación junto con un partido político; este acuerdo deberá ser presentado de igual forma ante el Consejo General del Instituto Federal Electoral, mismo que deberá emitir su resolución respectiva. Por otro lado, estas organizaciones tendrán las mismas obligaciones que les corresponden a los Partidos Políticos y gozarán de financiamiento público para efecto de apoyar sus actividades editoriales, así como las dirigidas a la educación y capacitación política y las actividades de investigación socio- económica y política. Este financiamiento deberá sujetarse a las siguientes reglas: a) Para proveer este financiamiento, deberá constituirse un fondo consistente en una cantidad equivalente al 2% del monto que anualmente reciben los partidos políticos para sostener sus actividades ordinarias. b) Ninguna de las organizaciones políticas registradas podrá recibir más del 20% del total del fondo constituido para este financiamiento. c) Deberán presentar a la Comisión de Fiscalización de los Recursos de los Partidos Políticos y Agrupaciones Políticas un informe del ejercicio anterior sobre el origen y destino de los recursos que le fueron concedidos. d) Estarán sujetos al mismo régimen fiscal que los Partidos Políticos. 21 Es decir, no por el hecho de que no estén constituidos como partidos políticos, no significa que dejarán de tener ciertas restricciones en cuanto a lo económico se refiere, pues es de vital importancia que al recibir el financiamiento por parte del Estado, se ocupen de rendir los informes necesarios en los que describan en forma detallada el destino de los recursos que le son conferidos. Actualmente los Partidos Políticos han dejado de ser los intermediarios únicos o centrales entre la sociedad y el Estado. Esto no quiere decir que se estén debilitando, simplemente existen otras formas de participación. Si bien, tal y como lo mencionamos anteriormente las organizaciones políticas deberán estar registradas ante el Instituto Federal Electoral, también existen organizaciones que fácilmente pueden ser tomadas como grupos de presión, que si bien es cierto que su finalidad principal no es la de intervenir directamente en el poder, es muy sabido que su pretensión es la de influir sobre las decisiones que el gobierno tome de acuerdo a sus intereses. Un claro ejemplo de lo anterior podríamos verlo con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, que es considerado como una organización política debido a la ideología que persigue, sin embargo, no cumple con los requisitos que anteriormente señalamos referente al registro ante el Consejo General del Instituto Federal Electoral, ya que se trata de una organización que lucha contra la política en nuestro país, considerándola por eso como una organización política y no precisamente por estar constituida de acuerdo a lo que marca la ley, ya que ha tomado un tinte político debido a los fines que ésta persigue y que de alguna manera llega a influir en la vida política de nuestro país. 22 Una consecuencia puede ser la pérdida de votos por Partidos Políticos establecidos legalmente, en virtud de que varios ciudadanos prefieren emitir su voto a favor del Ejército Zapatista de Liberación Nacional de lo cual deriva la anulación de ese voto, que bien podría haber incrementado las cifras de algún o algunos Partidos Políticos. 23 CAPÍTULO II ANTECEDENTES HISTÓRICOS 2.1. LEGISLACIÓN ELECTORAL EN MÉXICO. Si bien es cierto que la legislación electoral en México como tal, se dio a partir de la Constitución de Cádiz, como más adelante lo apuntaremos, también es cierto que desde antes ya existían procedimientos mediante los cuales se elegían a quienes debían esta al mando del gobierno. Comenzando la mención con los aztecas, una vez que se establecieron y fundaron la ciudad de Tenochtitlán, su primer gobierno estuvo depositado en los nobles y sacerdotes. Este régimen aristocrático-teocrático fue substituido por la forma monárquica electiva, a imitación de los sistemas gubernativos en que estaban organizados los pueblos vecinos. El monarca era designado por cuatro electores que representaban la voluntad popular y que debían ser “señores de la primera nobleza, comúnmente de sangre real y de tanta prudencia y probidad, cuanta se necesitaba para un cargo importante”. El cargo de elector no era perpetuo, pues terminaba al realizarse la elección del monarca, pudiendo los nobles volver a designar en él a la persona que lo hubiese ocupado. Bajo el gobierno de Itzcóatl el cuerpo electoral fue aumentando a seis miembros con el ingreso de los señores de Acolhuacán. La facultad para elegir rey no era irrestricta,sino condicionada a la costumbre de que el designado debería pertenecer a la casa real, pues “para no dejar demasiada amplitud a los electores y para evitar en cuanto fue posible los inconvenientes de los partidos y de las fracciones, fijaron la corona en la casa de Acamapichtzin y después establecieron por ley que al rey muerto debía suceder uno de sus hermanos, y faltando estos, uno de sus sobrinos o uno de sus primos, quedando al arbitrio de los electores el nombramiento del que más digno les pareciese”. Fácilmente se comprende que el régimen monárquico en que estaba organizado gubernativamente el pueblo azteca era electivo y dinástico, habiendo sido 24 aristócrata la fuente de poder, pues solo los nobles podían fungir como electores, sin que ninguna otra clase social haya tenido injerencia en el nombramiento del monarca. 47 De lo anterior, se destaca que desde los aztecas ya existían normas consuetudinarias, por decirlo de alguna manera, pues aunque no había leyes escritas para designar a quienes gobernarían, sí se basaban en la costumbre que finalmente bien puede ser un antecedente de la legislación electoral en México.48 2.1.1. LA LEGISLACIÓN ELECTORAL DE 1812 A 1821. A través del tiempo, las elecciones siempre han sido un instrumento legitimador del ejercicio del poder, han estado presentes en cada una de las etapas históricas del país. Han sido indispensables los documentos formales para la organización, distribución y ejercicio del poder en una sociedad organizada políticamente, refiriéndonos con esto a las diferentes Constituciones que han sido ley primordial del Estado Mexicano. Las elecciones que se celebraron en la Nueva España en 1811, muy probablemente fueron las primeras respaldadas ya por una legislación, pues fueron para elegir representantes de las Cortes en nuestro país. El 14 de febrero del año antes citado, a sugerencia del Concejo de la Regencia de España e Indias, se convocó a elecciones de diputados en las colonias, a fin de que las Cortes Constituyentes estuvieran integradas por representantes de todo el Imperio.49 47 BURGOA ORIHUELA, Ignacio, "Derecho Constitucional Mexicano", Editorial Porrúa, Onceava Edición, México 1997, pág. 46. 48 Y no únicamente en cuanto a la legislación electoral nos referimos. Como bien sabemos, la costumbre es el origen directo del Derecho, pues en eso se basan muchas actividades para posteriormente legislarlas. 49 BERLIN VALENZUELA, Francisco, Derecho electoral: Instrumento normativo de la democracia, Editorial Porrúa, México, 1980, pág. 220. 25 Cabe destacar que en este periodo, de 1812 a 1821, en materia electoral se promulgaron diversas leyes o convocatorias para efecto de reglamentar las actuaciones electorales en nuestro país. Tal y como lo veremos en los puntos posteriores, la Constitución de Cádiz y la Constitución de Apatzingán establecieron procesos electorales bien definidos, sin embargo, no es la única legislación electoral que se promulgó en este periodo. Existe también la Convocatoria a Cortes en la cual la Junta Provisional Gubernativa convocó a elecciones para diputados al Congreso el día 17 de noviembre de 1821, estableciendo el siguiente procedimiento: los Ayuntamientos elegirían a los electores de partido, los cuales se reunirían en la cabecera de su respectivo partido y nombrarían un elector de provincia. A su vez, los electores de provincia se reunirían en su capital para elegir a los diputados del Congreso. El número de diputados de las provincias era variable “según el cupo que señalaba a cada una el plan adjunto, pero de ellas debían ser tres, un eclesiástico del clero secular, otro militar natural o extranjero y otro magistrado, juez de letra o abogado”.50 2.1.2. LA CONSTITUCIÓN DE CÁDIZ. Esta Constitución fue promulgada el 18 de Marzo de 1812 por las Cortes del Imperio Español en las que estuvieron representadas las colonias y la cual estableció una monarquía parlamentaria, que tuvo una vigencia interrumpida. Como consecuencia de esto, la Constitución de Cádiz fue jurada en la Nueva España el 30 de septiembre de 1812, después fue suspendida por el virrey Venegas y más tarde restablecida parcialmente por el virrey Calleja en lo relacionado a elecciones de Ayuntamiento, de diputados a las Cortes del reino y de miembros de las diputaciones provinciales, así como en lo que toca a los 50 BERLIN VALENZUELA, Francisco, Derecho electoral: Instrumento normativo de la democracia, Editorial Porrúa, México, 1980, pág. 222. 26 tribunales que sustituyeron a las audiencias.51 Cabe señalar que las Cortes son la reunión de todos los diputados que representan a la Nación y son nombrados por los ciudadanos en aquélla época. El procedimiento para la elección era el siguiente: por cada doscientos vecinos se nombraba un elector parroquial; si excediera de trescientos sin llegar a cuatrocientos, se nombraban dos, si fuera superior a quinientos pero sin llegar a seiscientos se nombrarían tres y así progresivamente. Estos electores constituían las Juntas de Partido. Los electores de Partido nombraban a los electores de Provincia, quienes a su vez elegían a los diputados a Cortes, siendo por lo tanto la elección indirecta en tercer grado. Los diputados a Cortes eran electos cada dos años y correspondía uno por cada setenta mil habitantes o por fracción mayor de treinta y cinco mil. En caso de que el número de habitantes de una provincia fuera menor, se unirían a la provincia vecina. Para poder ser electo diputado, era necesario ser nativo de la provincia o residir en ella con siete años de anterioridad y tener una renta anual proporcionada, procedente de bienes propios.52 2.1.3. LA CONSTITUCIÓN DE APATZINGÁN. A pesar de que la Constitución de Apatzingán no alcanzó a tener vigencia en todo el país por la derrota de sus autores, sí fue un documento revolucionario, fundador de la República y se considera la primera de nuestras leyes constitucionales como país independiente. El Congreso de Anáhuac reunido en Chilpancingo en el año de 1813, a iniciativa de José María Morelos y Pavón, expide el Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana en donde se consignan algunos avances en 51 CASTELLANOS HERNÁNDEZ, Eduardo, "Derecho Electoral en México, Introducción General", Edit. Trillas, 1° Edición, México 1999, pág. 78 52 BERLIN VALENZUELA, Francisco, Derecho electoral: Instrumento normativo de la democracia, Editorial Porrúa, México, 1980, pág. 221. 27 materia electoral con respecto a la Constitución de Cádiz. Este Congreso proclamó el 22 de octubre de 1814 el mencionado “Decreto Constitucional”, en el pueblo de Apatzingán, el cual aún con carácter provisional, constituyó el principio de la organización constitucional de un Estado independiente y soberano,53 también estableció esta Constitución que la soberanía reside originariamente en el pueblo y su ejercicio en la representación nacional compuesta de diputados elegidos por los ciudadanos. En su artículo séptimo, estableció el derecho al sufragio para la elección de diputados sin distinción de clases, incluyendo a todos los ciudadanos en quienes concurrieran los requisitos que marcaba la ley. El proceso establecido por la Constitución de Apatzingán es muy parecido al de la Constitución de Cádiz, sin embargo existían diferencias importantes, entre ellas las siguientes: se elegía un diputado por provincia, sin importar el número de habitantes; si una Parroquia era extensa, se podía dividir para celebrar las elecciones por grupos más reducidos; se eliminó el principio de que los electores de partido y los diputados se eligieran por mayoría absoluta, bastando sólo la mayoríarelativa, se designaría un elector por Parroquia y no por cada 200 habitantes. Este decreto fue expedido para hacer más sencillo y ágil el procedimiento electoral, por lo que otorgaba a la Cámara de Diputados facultades para reconocer y calificar los documentos que presentaran los diputados elegidos por las provincias y recibirles el juramento que debían presentar para su incorporación. Los diputados eran elegidos por un periodo de dos años, sin que existiera la reelección inmediata, sino mediando el tiempo de una diputación. 53BERLIN VALENZUELA, Francisco, Derecho electoral: Instrumento normativo de la democracia, Editorial Porrúa, México, 1980, pág. 221 28 Los miembros del Supremo Gobierno eran elegidos por el Supremo Congreso. El gobierno estuvo formado por tres miembros iguales en autoridad quienes se alternarían por cuatrimestres en la presidencia, la que sortearían en la primera sesión para fijar el orden en que habrían de turnarse. Cada año saldría por suerte uno de los tres y no podría ser reelecto, a menos que hubiese pasado un trienio de su administración. La elección se hacía de la siguiente manera: el Supremo Congreso elegía en sesión secreta, después de examinar la elegibilidad de los candidatos y por mayoría absoluta de votos. Enseguida, en sesión pública se procedía a la votación por cédula para elegir por mayoría absoluta de votos a los tres miembros del Supremo Gobierno. Si ninguno alcanzaba dicha mayoría, se realizaba una segunda votación por cédula con quienes hubieran sacado el mayor número. En caso de empate decidía la suerte.54 2.1.4. LA LEGISLACIÓN ELECTORAL DE 1823 A 1854. El 17 de junio de 1823 se expidió la Ley para nombrar Diputados Constituyentes, lo cual dio origen al primer Congreso Constituyente de la Nación Mexicana. De acuerdo a esta ley, se elegía un diputado por cada 500 habitantes y para la elección se debían celebrar juntas primarias, secundarias y de provincia. Las juntas primarias eran integradas por los ciudadanos en ejercicio de sus derechos, vecinos del Municipio respectivo. Se designaba un elector por cada 500 habitantes; cuando un Municipio era muy poblado, se dividía en departamentos. Las juntas secundarias, o de partido, se celebraban bajo la presidencia del jefe político o alcalde de la cabecera del partido. Se nombraban entre los electores primarios un secretario y dos escrutadores quienes 54 CASTELLANOS HERNÁNDEZ, Eduardo, "Derecho Electoral en México, Introducción General", Edit. Trillas, 1° Edición, México 1999, pág. 81 29 verificaban y calificaban los nombramientos de los demás electores primarios; para la designación de electores secundarios, el voto era secreto y se requería mayoría absoluta, realizándose una segunda vuelta en caso de no obtenerse y en caso de empate, decidía la suerte. Las Juntas Electorales de Provincia estaban constituidas por los electores secundarios que se reunían en la cabecera de la provincia y eran presididas por el jefe político o quien tuviera sus funciones; se nombraba un secretario y dos escrutadores quienes certificaban las actas que presentaba cada elector. Cada elector secundario manifestaba oralmente al secretario por quién votaba. La elección era por mayoría absoluta y en su caso, se realizaba una segunda vuelta entre los tres que obtuvieran el mayor número de votos y en caso de empate, decidía la suerte de nueva cuenta. En lo que se refiere a la Constitución de 1824, se establecía un gobierno semejante al de los Estados Unidos de América, pues el Poder Legislativo era depositado en dos cámaras: la de diputados y la de senadores. Los primeros eran designados por los electores y en cuanto a los senadores, se designarían dos por cada Estado. El Presidente y el Vicepresidente eran elegidos por las legislaturas de los Estados. En lo que respecta a la legislación secundaria en materia electoral, ésta quedaba bajo la responsabilidad de los Estados, pues el artículo noveno de esta Constitución señalaba que las cualidades de los electores se prescribían por las legislaturas de los Estados, los que también deberían reglamentar las elecciones conforme a los principios que establecía la misma Constitución.55 Respecto al procedimiento para la elección tanto del Presidente como del Vicepresidente, se señalaba lo siguiente: el día primero de septiembre del año inmediato anterior a aquél en que debiera el nuevo Presidente entrar en funciones, la legislatura de cada Estado debería elegir por mayoría de votos a dos personas, de las cuales una por lo menos debería ser vecino del Estado correspondiente. El seis de enero siguiente, en reunión de las 55 BERLIN VALENZUELA, Francisco, Derecho electoral: Instrumento normativo de la democracia, Editorial Porrúa, México, 1980, págs. 223 y 224. 30 dos cámaras, la de diputados y la de senadores, se abrirían los testimonios del acta de la elección, siempre que se hubieran recibido los testimonios de las tres cuartas partes de las legislaturas de los Estados. La Cámara de Diputados tenía a su cargo la calificación de las elecciones y la enumeración de los votos. El candidato que hubiese obtenido la mayoría absoluta de votos de las legislaturas era declarado Presidente, si había dos candidatos con dicha mayoría, era Presidente el que tuviese más votos, quedando el otro de Vicepresidente. Si ninguno de los candidatos hubiese reunido la mayoría absoluta de votos de las legislaturas, la Cámara de Diputados elegiría al Presidente y Vicepresidente, escogiendo en cada elección uno de los dos que tuvieran mayor número de sufragios. En las votaciones de la Cámara de Diputados, cuando tres o más candidatos tuviesen igual número de votos, las votaciones tenían como objeto reducir los competidores de tres a dos o uno, para que en la elección compitiera con el que hubiese obtenido mayoría sobre los demás que quedaran empatados. Además las votaciones sobre calificación de las elecciones hechas por las legislaturas y las que hiciese la Cámara de Diputados para elegir Presidente o Vicepresidente, se hacían por Estados, teniendo la representación de cada uno un solo voto y para que hubiese decisión de la Cámara, se requería mayoría absoluta de votos. El quórum legal se formaba con más de la mitad de los miembros de cada cámara, debiendo estar presentes diputados de las tres cuartas partes de los Estados. No había reelección en el cargo de Presidente o Vicepresidente.56 Posteriormente, y también en materia electoral, se expidió el Decreto sobre el Gobierno Político del Distrito, sus Rentas y Nombramientos de Diputados del 11 de abril de 1826, en el que se estableció que a partir de la siguiente legislatura el Distrito Federal tendría representantes en la Cámara de Diputados.57 56 CASTELLANOS HERNÁNDEZ, Eduardo, "Derecho Electoral en México, Introducción General", Edit. Trillas, 1° Edición, México 1999, págs. 111 y 112. 57 BERLIN VALENZUELA, Francisco, Derecho Electoral: Instrumento normativo de la democracia, Editorial Porrúa, México, 1980, pág. 225. 31 El 12 de Julio de 1830 se emitieron las Reglas para las Elecciones de Diputados y de Ayuntamiento del Distrito Federal y Territorios de la República, en las que se establecía que se nombraría un elector por cada junta electoral, y ésta se formaba por cada manzana o sección y si la población estaba dispersa, el Ayuntamiento la dividiría en secciones que no fueran mayores de 800 habitantes ni menores de 400. Para realizar la votación, el Ayuntamiento nombraba antes de las elecciones, un comisionado por manzana o sección. Un mes antes de la elección, se empadronarían a los vecinos de cada manzana o sección que
Compartir