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DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE DERECHO SEMINARIO DE DERECHO DEL TRABAJO Y SEGURIDAD SOCIAL Desafíos para la creación del Trabajo Decente en México TESIS QUE PARA OBTENER EL TITULO DE LICENCIADO EN DERECHO PRESENTA: MILENE MONTERO ALVAREZ ASESOR: Lic. Verónica F. Ramírez Rivas México, Ciudad Universitaria 2007 UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO FACULTAD DE DERECHO SEMINARIO DE DERECHO DEL TRABAJO Y SEGURIDAD SOCIAL Desafíos para la creación del Trabajo Decente en México TESIS QUE PARA OBTENER EL TITULO DE LICENCIADO EN DERECHO PRESENTA: MILENE MONTERO ALVAREZ ASESOR: Lic. Verónica F. Ramírez Rivas México, Ciudad Universitaria 2007 UNAM – Dirección General de Bibliotecas Tesis Digitales Restricciones de uso DERECHOS RESERVADOS © PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL Todo el material contenido en esta tesis esta protegido por la Ley Federal del Derecho de Autor (LFDA) de los Estados Unidos Mexicanos (México). El uso de imágenes, fragmentos de videos, y demás material que sea objeto de protección de los derechos de autor, será exclusivamente para fines educativos e informativos y deberá citar la fuente donde la obtuvo mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el respectivo titular de los Derechos de Autor. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO A Dios: Por haberme permitido tener una maravillosa vida y llenar mi camino de ángeles que permitieron y ayudaron a lograr este objetivo. A ella, que está con el y siempre me cuida. A mis padres: Por tanta comprensión, aguante y apoyo; por ser como son y estar a mi lado, sobretodo por creer en mi. Por ser lo que más amo en este mundo. A Gigio y Luz: Por estar a mi lado en los momentos difíciles, por su infinita capacidad de asombro y hacerme reír cuando mas lo necesitaba. A esta magnifica y honorable institución: Que me permitió ser parte de ella y saber el orgullo que se siente ser universitaria, a más, de dejarme pasar los mejores años de mi vida en ella, conociendo gente hermosa e inolvidable. A la Lic. Verónica Ramírez Díaz: Por su tiempo, agradeciendo sus consejos, su confianza, paciencia; y amistad. Reiterándole mi apoyo y solidaridad en cualquier momento de su vida. A todos y cada uno de los ángeles, que como mencione, Dios puso en mi camino en forma de amigos, familia, maestros, compañeros, jefes, amores; y en general a todos aquellos que sin importar su denominación, siempre tuvieron un momento, una sonrisa, un consejo o cualquier detalle para mí, haciendo este desafío más fácil y placentero. Esperando que este agradecimiento les llegue sin importar donde se encuentren ahora. JAHASEPT “GRACIAS POR HABER LOGRADO QUE CREYERA EN MI” DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO Desafíos para la creación del Trabajo Decente en México Índice Página Introducción I CAPÍTULO 1 NOCIONES PRELIMINARES 1.1 Concepto de trabajo ……………………………………………………… 1.2 ¿Qué es la decencia? …………………………………………………... 1.3 Distinción entre trabajo y empleo ……………………………………… 1.4 Definición de derecho del trabajo ……………………………………… 1.5 Principios rectores del derecho del trabajo …………………………… 1.6 Trabajo decente y sus objetivos estratégicos ………………………... 1.6.1 Derechos fundamentales en el trabajo …………………………. 1.6.2 Protección social ………………………………………………….. 1.6.3 Diálogo social ………………………………………………………. 1.6.4 Empleo de calidad …………………………………………………. CAPÍTULO 2 ANTECEDENTES 2.1 La Constitución de 1917 y el surgimiento del trabajo como garantía social, Artículo 123 …………………………………………………………… 2.2 La Ley Federal del Trabajo de 1931 …………………………………… 2.3 La Ley Federal del Trabajo de 1970 …………………………………… CAPÍTULO 3 MARCO LEGAL 3.1 Preceptos constitucionales ……………………………………..………. 3.2 Normatividad aplicable ………………………………………………….. 3.3 Convenios ante la Organización Internacional del Trabajo ratificados por México ………………………………………………… CAPÍTULO 4 DESAFÍOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO 4.1 Creación del trabajo decente …………………………………………... 4.2 La finalidad primordial del trabajo decente …………………………… 4.3 Estándares laborales ……………………………………………….…... 4.4 Desarrollo integral y el trabajo decente ……………………………….. 1 6 7 8 12 20 22 24 25 27 31 37 41 45 52 57 67 76 80 84 DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO 4.5 Productividad y el trabajo decente …………………………………….. 4.6 El mercado laboral en el México actual ……………………………….. 4.7 Desafíos para la creación del trabajo decente ……………………….. 4.7.1 Pobreza ……………………………………………………………... 4.7.2 Desigualdad y discriminación laboral ………………………….... 4.7.3 Desempleo juvenil …………………………………………………. 4.7.4 Bajo nivel educativo ……………………………………………….. 4.7.5 Trabajo infantil ……………………………………………………… 4.7.6 Trabajo informal ……………………………………………………. 4.8 Hechos y perspectivas del Trabajo Decente en México ……………… 4.8.1 Prevención y erradicación del trabajo infantil………………….... 4.8.2 Combate a la discriminación y promoción de la igualdad de oportunidades …………………………………………………….. 4.8.3 Protección social, seguridad y salud en el trabajo ……………… 4.8.4 Medidas para alcanzar el diálogo social ……………………….... 4.8.7 Empleo de calidad…….. …………………………………………... 4.9 Movilización de recursos ……………………………………………….... 4.10 Proyecto de una NOM sobre estándares de calidad laboral en las empresas………………………………………………………...………………… Conclusiones …………………………………………………………………..... Apéndice …………………………………………………………………………. Fuentes Consultadas…………………………………………………………… 90 96 100 108 111 116 121 123 129 131 132 135 137 140 142 145 145 153 157 158 DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO Introducción En la actualidad el sentido de lo que es el trabajo se ha ido perdiendo, generando que quien lo realiza tan solo pueda sobrevivir y no existir de manera general en todos los aspectos. Al hablar de trabajo debe hacerse especificando su contenido; permitiendo desglosarlo y definirlo de forma que se distinga de lo que es el empleo, para así partir de las que deben ser primordialmente sus características teniendo como base los principios rectores de la materia. A lo largo de la historia de nuestros ordenamientos observamos que se han alcanzado mejores características y condiciones para los trabajadores deseando que cada vez más el trabajador cuente con las armas suficientes para enfrentar la vida personal repercutiendo en una mejor vida laboral. Al introducir el término “trabajo decente” no se hace sino tratar de reevaluar tanto las aspiraciones de cada individuo, respecto a su vida laboral como el hecho de resultar más productiva y en este sentido de justicia para lograr mejores y mayores perspectivas de desarrollo a nivel personal y familiar. Los avances actuales a nivel mundial en este rol del “trabajo decente” implican que deben existir mejores medidas en nuestro país, movilizando a los principales actores del sistema laboral y de la economía en torno a este programa. Es urgente la necesidad de crear un entorno a escala nacional quepropicie el logro de un empleo pleno y productivo, obteniendo así el “trabajo decente” como sustento de un desarrollo sostenible. De manera específica en México como sociedad y país nos enfrentamos a una multiplicidad de desafíos de distintos caracteres, tanto sociales como económicos y administrativos que deben ser erradicados para poder lograr el objetivo particular de el “trabajo decente” como eje central del DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO sistema laboral y como una nueva forma de vida para todos los individuos del sector. Ante estos retos es trascendental encontrar una definición de la condición más cercana posible a cada uno de estos desafíos, buscando su origen ya que es esencial conocer estos a fondo y estructurarlos para que pueda presentarse una nueva organización para hacerles frente, pues el futuro común dependerá en gran medida de cómo se afronte a tal problema. Así encontramos importante el que se analicen de manera particular estos desafíos y sean planteados jurídicamente para poder crear un modelo de perspectivas y hechos que convenga ejecutarse para alcanzar esta figura de “trabajo decente” adquiriendo una mejor estructura de vida, una mejor sociedad y que igualmente sean elevados los niveles económicos en la población en grado general. En relación a esta problemática la Organización Internacional del Trabajo acopla cuatro objetivos estratégicos para unificar los criterios a nivel mundial, así como prioridades del “trabajo decente” mismos que también se explican por ser fundamentales en la pretensión de mejores condiciones incorporando con estos objetivos, las necesidades y visiones de los gobiernos, empresas y trabajadores. Finalmente hacemos un estudio y señalamos cuáles serían las consecuencias y repercusiones que deben tenerse; para adoptar en la administración de nuestro México, aspirando a una mejor manera de resolver y solventar estos retos, con la finalidad primordial de subsanarlos y conquistar la dignificación del trabajo y el sector laboral en este país en proximidades del “trabajo decente”. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO CAPITULO 1 Nociones Preliminares. En el presente capitulo se hace una explicación de los términos y cuestiones básicos en el desarrollo del tema planteado, pretendiendo aclarar el panorama y crear un contexto de contenido que permita comprender los argumentos presentados a lo largo del proyecto pudiendo así relacionar estos con las definiciones y conceptos que dan origen a la situación analizada. El objetivo de esta parte es logra una comprensión sistemática y ordenada de lo que es, lo que busca y los obstáculos que tiene el trabajo decente. 1.1 Concepto de Trabajo. Para poder entender las relaciones laborales y esencialmente el contexto que a estas debe darse en las sociedades contemporáneas, es fundamental entender el concepto de trabajo; ya que el mismo como relación social ocupa un lugar absolutamente primordial en nuestra sociedad, lo que nos lleva a considerarlo algo propio de la naturaleza humana. El concepto de trabajo como actividad social es algo histórico y culturalmente específico. En la antigua Atenas, por ejemplo, no hubiera tenido sentido nominar las actividades de un esclavo, de un escritor y de un político con el mismo nombre. Otras culturas carecen de un término parecido. El término «trabajo» se refería, fundamentalmente, a siervos y jornaleros productores de bienes y servicios no perdurables, que exigían ser recomenzados cada día sin producir resultados finales. Los artesanos, en cambio, creaban objetos duraderos que podían ser acumulados y, una vez adquiridos, legados a la posterioridad. Éstos no laboraban: producían obras y eran pagados por su obra, no por su trabajo. Sólo los jornaleros y trabajadores no cualificados, recibían salarios. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO El término general de “trabajo” surge no antes del siglo XVIII en Occidente como algo que abarca actividades manuales y mentales, creativas y repetitivas, simples y evaluadas, cooperativas e individuales, etcétera. Ya para la Ilustración y la Revolución Industrial se implanto el concepto moderno del trabajo como algo positivo, primeramente como una misión divina, posteriormente como fuente de la riqueza, fuerza civilizadora y base de la virtud. CONCEPTOS DE TRABAJO ConceptoConceptoConceptoConcepto CaracterísticasCaracterísticasCaracterísticasCaracterísticas Concepto heleno Actividad degradante, reservada a los esclavos y las mujeres. Concepto romano Actividad degradante, reservada a los esclavos y las mujeres. Concepto judeocristiano Ambivalencia entre castigo y virtud. Concepto medieval Actividad sucia, reservada a las clases bajas (tripalium = tortura). El calvinismo Autorrealización del hombre, actividad moral de purificación y servicio a Dios, vocación. La Ilustración Actividad de dignificación, única legitimación de la riqueza. La Revolución Industrial Factor de producción, distinción entre trabajo y empleo. En la actualidad, deberíamos entender el trabajo no sólo como factor esencial de la economía, sino como elemento de integración y cohesión social como un momento formativo en las sociedades; puesto que la actitud hacia el trabajo es un aspecto esencial de la estructura y el funcionamiento de una sociedad. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO Partiendo de connotaciones muy generales, podríamos presentar algunas definiciones del concepto de trabajo en la historia humana, de forma muy esencial. A manera de significado tenemos que: “El trabajo es toda actividad destinada a producir bienes y servicios para satisfacer las necesidades humanas.”1 POLARIDADES SEMÁNTICAS DEL LENGUAJE LABORALPOLARIDADES SEMÁNTICAS DEL LENGUAJE LABORALPOLARIDADES SEMÁNTICAS DEL LENGUAJE LABORALPOLARIDADES SEMÁNTICAS DEL LENGUAJE LABORAL LenguaLenguaLenguaLengua TérminosTérminosTérminosTérminos SignificadosSignificadosSignificadosSignificados Griego clásico Ponos (–) Banausia (–) Ergón (+) Sjolé . • Penalidad, fatiga, maldición, dolor físico o moral. • Tarea mecánica, humanamente degradante. • Energía, fuerza, acción, realización Inglés Labour (–) Work (+) • Acción esforzada desarrollada bajo el signo de la necesidad y de los imperativos de la subsistencia material inmediata. • Actividad productiva, de carácter estratégico, que contribuye a la construcción o al mantenimiento de la infraestructura de la vida material. Alemán Arbeit (–) Werk (+) • Faena, tarea dura y esforzada. • Acción útil y eficaz individual y socialmente. Si lo definimos de manera sociológica: El trabajo es una acción realizada por seres humanos que supone un determinado gasto de energía, encaminado hacia algún fin material o inmaterial, conscientemente deseado y que tiene su origen y/o motivación en la insatisfacción, en la existencia de una privación o de una necesidad por parte de quien lo realiza. 1Diccionario Enciclopédico Universal, Tomo 4, Plaza & Janés Editores, España 1995, s.p. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO El trabajo como actividad humana, implica siempre la doble dimensión de la transformación o apropiación de la naturaleza y de la construcción de la propia realidad social, sintetizando los siguientes elementos: • La finalidad de la acción social; • La realización misma de la actividad; • El resultado/producto de la actividad; • Las interrelaciones de los trabajadores. En el proyecto utilizado como base del artículo 123, se hace referencia a un trabajo de carácter económico; para este proyectode Pastor Rouaix, este denominación dada al trabajo fue el resultado de la naturaleza y los fines del derecho del trabajo, esta referencia de ser económico únicamente atiende a los fines específicos que pretenda la persona que solicite el servicio y la que lo preste. Es en la Ley de 1931 que se concibe que todo el trabajo, de forma física o mental éra comprendido en sus disposiciones, es decir se dividió en trabajo material e intelectual. Legalmente, en la actualidad, el concepto utilizado es el del artículo 8 de nuestra Ley Federal del Trabajo de 1970 donde se define al Trabajo como: “Toda actividad humana, intelectual o material, independientemente del grado de preparación técnica requerido por cada profesión u oficio.” No podemos hacer distinción alguna en cuanto al tipo de trabajo, esto por los fines propios y la naturaleza de la ley misma; pues si se hiciere no se estaría respetando el espíritu de la ley, rompiendo así el principio de igualdad; ya que si bien en cuanto al salario puede haber diferencias, no se argumentaría un régimen distinto en relación al predominio de determinado tipo de energía intelectual o física. Cabe mencionar que, “se detuvo algún tiempo la Comisión en el análisis de los términos intelectual o material y de la frase independientemente DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO del grado de preparación técnica requerido por cada profesión u oficio, y se dio una lucha larga y difícil que la doctrina tuvo que librar antes de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación aceptara que el predominio de la actividad intelectual sobre la material no era una razón que justificara la exclusión de la relación de trabajo”.2 De esta forma podemos asegurar que nuestro ordenamiento extiende su protección sobre todo el trabajo humano que se de en relación de subordinación. A manera de resumen confinamos que “el hombre trabaja, esto es, actúa inteligentemente bien sobre su medio natural o físico, manejando materia, bien sobre su medio cultural o social, manejando signos o símbolos lo esencial es la presencia del hombre en el punto inicial de la acción sobre el mundo exterior, aunque existan diferencias profundas de esfuerzo control y ritmo”.3 Este término tutelado por el derecho del trabajo es un trabajo productivo, asumiendo una rentabilidad o productividad social, que tiene como finalidad proveerse de los bienes materiales o económicos precisos para subsistir. En opinión personal, debe ser un medio para alcanzar los bienes necesarios, no solo para subsistir sino para poder existir tanto de manera personal como familiar; satisfaciendo necesidades biológicas, que permita acceder a un determinado nivel cultural y tecnológico; trabajar para vivir a través del trabajo humano, productivo además de libre; ejercido dentro de una realidad social que descanse sobre el derecho del trabajo. Finalmente, lejos de lo que el trabajo represente como concepto debe entenderse que como objeto de una rama del derecho, debe consistir en un actuar libre, apoyado en conductas causadas por la sociedad y para ella 2 DE LA CUEVA, Mario, El nuevo derecho mexicano del trabajo, T. I, Sexta edición., Porrúa, México 1980, p. 162-163. 3 ALONSO OLEA Manuel Derecho del Trabajo, Décimo octava edición, Civitas, España 2000, p. 40 DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO misma, con relaciones equilibradas hechas cumplir en su seno y que permitan a los individuos dignificarse a través del mismo y no menospreciarse. 1.2 ¿Qué es la decencia? Es de forma por demás aventurada tener una definición objetiva de lo que es la decencia, en particular tomando el significado de la palabra hallamos que para el diccionario de la real academia de la lengua española, la decencia es entendida como: “respeto a las buenas costumbres o a las conveniencias sociales. Recato, honestidad, modestia. Dignidad en los actos y en las palabras, conforme al estado o calidad de las personas.”4 Es un valor que nos recuerda la importancia de vivir y comportarse dignamente en todo momento y lugar, nos hace conscientes de la propia dignidad humana; decente es aquel individuo que le gusta que le traten con respeto, porque se trata con respeto a sí mismo y a los demás. Así, la decencia no es una convicción individual, sino una convención y convicción social que debe ser institucionalizada sin distinción de clases, no se trata de prohibiciones ni censuras sino de una regulación genérica de respeto entre los integrantes de una determinada sociedad con miras a una justicia social. Al actuar con decencia en los detalles más mínimos, paralelamente se despierta confianza en los demás por la integridad de la conducta; las relaciones son estables porque se basan en el respeto y el interés auténtico que se tiene por colaborar con los demás, y en este sentido genera un mejor ambiente y relaciones entre los sujetos de la relación laboral. Una vez revisado este concepto y al tenor de lo que es la decencia como significado, se puntualiza que, un actuar decente no es más que conducirse de manera decorosa, simplemente con respeto a los valores y 4 Diccionario de la Lengua española, Real academia de la Lengua española, Vigésima tercera edición, http://buscon.rae.es/draeI/ 5/03/2007 23: 07 hrs. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO derechos humanos que tiene cada persona, en condiciones honestas que permitan una mejor relación entre individuos logrando mayor equilibrio y funcionamiento en la vida social de los sectores laborales. 1.3. Distinción entre trabajo y empleo. Generalmente lo términos “empleo “y “trabajo” son utilizados como sinónimos, sin embargo, éste alude a una categoría de actividad humana más amplia que aquel. Como pudimos analizar anteriormente en el punto 1.1, el trabajo es “toda actividad humana, intelectual o material, independientemente del grado de preparación técnica requerido por cada profesión u oficio” tal como se muestra en la ley de la materia, algo distinto al campo que contiene el empleo. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) define al trabajo como el conjunto de actividades humanas, remuneradas o no, que producen bienes o servicios en una economía, o que satisfacen las necesidades de una comunidad o proveen los medios de sustento necesarios para los individuos, mientras que, el empleo es definido como "trabajo efectuado a cambio de pago (salario, sueldo, comisiones, propinas, pagos a destajo o pagos en especie)" sin importar la relación de dependencia. Nos encontramos así ante dos conceptos diferentes, uno amplio y genérico denominado “trabajo”, y otro limitado y preciso, el “empleo”, relacionado con el mercado de trabajo. Este último se ha convertido en una norma social en la época del capitalismo, un término que alcanza tal nivel cuando al mismo tiempo indica en un hecho, su deber ser. Como norma social consolidada en el siglo XX, el empleo no es cualquier actividad remunerada, sino que implica un contrato, un salario familiar, una regulación legislativa, etcétera; es decir, una relación laboral regulada. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO La definición del empleo y su evolución es el resultado de la interacción conflictiva de múltiples actores e instituciones sociales, en especial, de las empresas, de las organizaciones colectivas de trabajadores asalariados, y del estado que tiende a adquirir rasgos formales. Hay que distinguir que el empleo es una meta, y no el simple hecho de realizar un trabajo, es decir, permitirnos alcanzar un concepto más amplio que consienta contar con mayor estabilidad y mejorescondiciones por su misma naturaleza; que, como definiremos más adelante, se convierta en un empleo digno orillándonos a tomar el camino en vías a la creación de un trabajo decente. Lo anterior a pesar de lo escrito en nuestros ordenamientos jurídicos, y lo que de forma textual señalan; ya que si bien es plasmado el termino trabajo, el contenido y espíritu de dichos ordenamientos nos dejan tomar en cuenta que se pueden extender sus pretensiones a un concepto más amplio y decoroso para los sujetos protegidos de la relación de trabajo. En este sentido el empleo es al que hay que hacer referencia. Se tiene que entender también que, el trabajo decente se diferencia del empleo ya que el primero implica diferentes políticas o; una diferente articulación de las políticas públicas en materia laboral con una mayor integración entre estas y la política económica en sus diferentes niveles; es específicamente un contexto más amplio que el empleo, siendo este último un elemento más en el concepto de trabajo decente. 1.4. Definición de Derecho del Trabajo. Una vez analizado el concepto de trabajo, continuaremos con la definición del derecho del trabajo; iniciando por expresar que a juicio de Cabanellas, para poder dar una definición de este derecho, se deben tomar en cuenta los fines, la naturaleza jurídica, la autonomía, los sujetos y el objeto; ya que al analizar estos elementos se llega a una definición que será acorde al contenido de nuestra disciplina; sin embargo al analizar la definición aportada DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO por distintos autores verificamos que éstas varían en función a diversos criterios. Atendiendo a los fines del Derecho del Trabajo tenemos las siguientes: • Trueba Urbina concibe el derecho del Trabajo como “el conjunto de principios, normas e instituciones que protegen, dignifican y tienden a reivindicar a todos los que viven de sus esfuerzos materiales o intelectuales, para la realización de su destino histórico: socializar la vida humana”5 La filosofía mostrada por Trueba Urbina, demuestra que son los trabajadores a los que tutela el derecho del trabajo pues los patrones tienen los medios y la capacidad de defenderse por sí mismos, pero aún siendo esto verdad no puede ser afirmativo del todo pues nuestra legislación laboral también contiene derechos para los patrones. • De la Cueva menciona que “el nuevo derecho es la norma que se propone realizar justicia social en el equilibrio de las relaciones entre el trabajo y el capital”6, esta definición si bien abarca de manera completa la situación básica del derecho del trabajo en la relación trabajo - capital, lo hace de manera muy general. Las definiciones por los sujetos de la relación son: • Alfred Hueck y Nipperdey consideran que el “derecho del trabajo es el derecho especial de los trabajadores dependientes”7, algo que podemos definir bastante reducido y sin explicación del objeto no nos daría un panorama real de lo que es el Derecho del Trabajo. 5 TRUEBA URBINA Alberto, Nuevo Derecho del Trabajo, Porrúa, México 1981, p.135. 6 DE LA CUEVA, Mario, El nuevo derecho mexicano del trabajo, T. I, Sexta. edición., Porrúa, México 1980, p. 85. 7 HUECK, Alfred y Nipperdey, Compendio de Derecho del Trabajo, Revista de Derecho Privado, España 1963, p.19. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO • Balella lo define como “el complejo de normas jurídicas que se refieren a las clases trabajadoras”8, también se nota un contenido bastante disperso, pues el derecho del trabajo se refiere a las clases trabajadoras, pero no es como fin único, además de implicar un contenido más amplio. • Folch nos dice que “son las normas jurídicas dirigidas a regular las relaciones de trabajo entre patrones y obreros”9, al igual que las anteriores resulta una definición por demás incompleta, pues si no conocemos los fines y el objeto no sabremos lo que es el derecho del trabajo, a pesar de conocer a quienes aplica, no así en que situaciones ni con que finalidad. Teniendo como base la relación de trabajo: • Rafael Caldera lo precisa como “el conjunto de normas jurídicas que se aplican al hecho social trabajo, tanto por lo que toca a las relaciones entre quienes intervienen en él y con la actividad en general, como el mejoramiento de los trabajadores en su condición de tales”10, encontramos al derecho únicamente como sistema regulador, una ves más sin atender a los fines. De una manera más clara y relacionada con nuestra sociedad, algunos autores mexicanos han contribuido con su definición como se ve en lo sucesivo: • Para De la Cueva “el derecho del trabajo en su acepción más amplia, se entiende como una congenie de normas que, a cambio del trabajo humano intentan realizar el derecho del hombre a una existencia que sea digna de la persona humana”11 8 BALELLA, Giovanni, Como definir el derecho del trabajo, CEDAM, Argentina 1952, p.8. 9 FOLCH, Gallart, Derecho Español del Trabajo, s.e., España 1936, p. 9. 10 CALDERA, Rafael, Derecho del Trabajo, El Ateneo, Argentina 1969, p77. 11 DE LA CUEVA Mario, El nuevo derecho mexicano del trabajo, T I, Op. Cit, p.263. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO • Alfredo Sánchez Alvarado señala que “derecho del trabajo es el conjunto de principios y normas que regulan, en sus aspectos individual y colectivo, las relaciones entre trabajadores y patrones; entre trabajadores entre sí y entre patrones entre sí, mediante la intervención del Estado, con el objeto de proteger y tutelar a todo aquel que preste un servicio subordinado, y permite vivir en condiciones dignas, que como ser humano le corresponden para que pueda alcanzar su destino”12 • Por su parte Nestor de Buen dice que “derecho del trabajo es el conjunto de normas relativas a las relaciones que directa o indirectamente derivan de la prestación libre, subordinada y remunerada, de servicios personales, y cuya función es producir el equilibrio de los factores en juego mediante la realización de la justicia social”13 • Finalmente José Dávalos concibe que “el derecho del trabajo es el conjunto de normas jurídicas que tienen por objeto conseguir el equilibrio y la justicia social en las relaciones de trabajo.”14 Ante estas definiciones podemos concretar que, el derecho del trabajo en sí mismo tiene una esencia puramente proteccionista, tendiente a equilibrar las relaciones de trabajo entre los patrones y trabajadores con miras a una mejor productividad; asumiendo como base el respeto a los derechos de cada individuo, en donde la función misma del derecho mediante sus contenido (normas, principios y usos) es la de regular estas situaciones especificas. Lo anterior, sin dejar de lado que tiene una estructura ajustable a ciertos lineamientos que son origen de la esencia misma del derecho; estos son los principios generales del derecho, en especial pertenecientes al derecho del trabajo; los cuales se presentan a continuación. 12 SÁNCHEZ ALVARADO, Alfredo, Instituciones de derecho mexicano del trabajo,Oficina de asesores del trabajo, México, 1967 p.36 13 DE BUEN LOZANO, Néstor, Derecho del trabajo, T.I, Novena. edición, Porrúa, México, 1994, p. 131 14 DAVALOS, José, Derecho del Trabajo I , Quinta edición, Porrúa, México 1994, p.44. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO 1.5 Principios rectores del Derecho del Trabajo. De inicio hay que definir lo que son los principios de manera general, comenzando por su concepción etimológica, la palabra principio deriva del latín principium, de princeps-ipis`príncipe'. En tiempos históricos significó "comienzo” y “origen” y, en la época clásica se usó el plural principiaorum, para designar una norma o principios".15También significa "fundamento, origen, razón fundamental sobre el cual se procede". 16 Puede de otra forma, entenderse como lo que es primero en todo orden de relación es decir: en los órdenes del conocer lógicos), del ser (ontológicos) y del obrar (morales, imperativos, reguladores de la conducta). El principio es el primer instante del ser, la causa que contiene la razón y explica la verdad, admitida como "fundamento inmediato de sus disposiciones".17 Denota el origen y desarrollo de criterios fundamentales, expresados en reglas o aforismos, los cuales tienen virtualidad y eficacia propia, “su más pura esencia responde a una general aspiración que se traduce en la realización de su contenido".18 Mas allá de la norma legal positiva, los principios generales del derecho constituyen umbrales superiores de justicia que se encuentran fuera del derecho positivo y a los cuales se les da vida en un acontecimiento histórico determinado. Tienen cierta independencia respecto de las normas concretas positivas pero informan al ordenamiento sin necesidad de quedar incluidos en él, ya que el derecho responde a una necesidad del hombre y es inseparable 15 COUTURE, Eduardo J.,Vocabulario jurídico, Depalma, Argentina 1976, p. 476. 16 ALONSO, Martín, Enciclopedia del Idioma, Tercera. edición., Aguilar, México, 1991, p. 3397. 17 CABANELLAS, Guillermo, Diccionario de Derecho Usual, T. II, Novena. edición., Heliasta, Argentina, 1976, p. 381. 18 Diccionario Jurídico Espasa, Espasa-Calpe, España 1991, p. 793. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO de la vida humana. Son ideas fundamentales sobre la ordenación jurídica de una sociedad que surge de la razón social. Los principios generales del derecho resultan enunciados normativos de valor genérico que fijan y orientan la comprensión del ordenamiento jurídico, ya sea para su aplicación o integración, así como para la elaboración de nuevas normas. El derecho del trabajo ha nacido al mundo para hacerlo más aceptable, garantizando niveles de vida que se aproximen a la dignidad que exige la condición humana de los trabajadores, que lo releve como factor de producción. Por lo anterior, los principios generales del derecho cuentan con funciones que generalmente se encuentran estructurando al derecho del trabajo: a) Como fuente supletoria en caso de ausencia de Ley, función que se encauza cuando así lo prevé expresamente el respectivo ordenamiento jurídico. Regularmente la legislación jurídica descansa sobre los principios generales del derecho, ya que pueden ser considerados como los pilares de la estructura jurídica. b) Informar y nutrir al ordenamiento, otorgándole mayor eficacia operativa en la materia y con los alcances regulados por las normas. c) Interpretativa; cuando debe efectuarse la operación lógica – valorativa del alcance de las normas aplicables, las situaciones no previstas y la virtualidad de las previstas se resolverán aplicando el respectivo principio. Es decir, ayudan al interprete a orientarse en la interpretación correcta, con una debida adecuación a los valores fundamentales De igual manera hace referencia nuestra Ley Federal del Trabajo, en su artículo 17, al incluir como fuente a los "principios generales que deriven de DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO la Constitución, la Ley, tratados internacionales y reglamentos. Así como los principios generales del derecho y los de justicia social que deriven del artículo 123 de la Constitución". Por tal motivo, a la luz de los principios es como deben interpretarse y aplicarse los modelos jurídicos a la relación social sobre cuya juridicidad debe tomarse la decisión. La identidad del derecho del trabajo como rama diferenciada resulta esencialmente de la existencia de principios propios. En tanto ellos informen el ordenamiento jurídico-laboral está asegurada la subsistencia de aquél; operan con una finalidad crítica y orientadora, abarcando no solo valores personales sino también sociales. La incorporación de los derechos sociales en el texto de la Constitución mexicana de 1917, fueron mérito indiscutible de la asamblea Constituyente de Querétaro. En tales circunstancias, correspondió a la Constitución de 1917, el "ser precursora en materia social"19 y establecer "los cimientos de una legislación de trabajo inspirada en principios de elemental justicia y en razones de humanidad"20 con la intención de "lograr un cambio radical".21 Dentro de nuestra legislación actual, estos criterios fundamentales previstos en la ley, derivan de expresar valores elementales que respondan a una general aspiración, traducida en la realización de su contenido, en la cual radica su importancia y utilidad. En la Ley del Trabajo, el artículo 2o. expresa: "las normas del trabajo tienden a conseguir el equilibrio y la justicia social en las relaciones entre trabajadores y patrones". El espíritu de tal precepto -según de la Cueva-, permite declarar la necesidad de "el equilibrio entre el trabajo y el capital que 19 GARCÍA RAMÍREZ, Sergio,”Lo social en los sistemas jurídicos, constitucional e internacional contemporáneo”, Boletín Mexicano de Derecho Comparado, nueva serie, año I, núm. 1, enero- abril, UNAM, México, 1968, p. 131. 20 LANZ DURET, Miguel, Derecho constitucional mexicano, Quinta edición., Nories editores, México 1971, p. 377. 21 NORIEGA, Alfonso, Los derechos sociales, creación de la Revolución de 1910, UNAM, México1988, p. 91 DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO surge de la justicia social".22 Es la justicia social fuente inspiradora de las reivindicaciones sociales, en favor de los hombres que trabajan. En cuanto a la enumeración de estos principios: a) Principios de libertad, dignidad y salud. El trabajo es un derecho y un deber social, no es artículo de comercio, exige respeto para las libertades y dignidad de quien lo presta y debe efectuarse en condiciones que aseguren la vida, la salud y un nivel económico decoroso para el trabajador y su familia. b) La imperatividad en el derecho del trabajo. El derecho del trabajo, desde sus orígenes, procuró una pretensión de "imperatividad absoluta",23 ésta quedó consignada en el artículo 123 constitucional, fracción XXVII, el cual determinó "la nulidad de todas las estipulaciones que impliquen la renuncia de algún derecho consignado a favor de los trabajadores" La irrenunciabilidad debe entenderse como "la no posibilidad de privar voluntariamente los derechos concedidos por la legislación laboral".24 El principio de irrenunciabilidad pretende evitar, el detrimento de los trabajadores, algunas de sus ya precarias condiciones materiales. La renuncia se entiende "absoluta y opera en todo momento, antes o después de la celebración del contrato de trabajo".25 Es una prescripción imperativa plasmada en los artículos 5o, 33, 56 y 85 de la Ley Federal del Trabajo, por lo cual, cualquier disposición verbal o escrita que contenga la renuncia de los derechos fundamentales carecerá de validez y, por lo mismo, no producirá efectos jurídicos. 22 DE LA CUEVA, Mario, El nuevo derecho mexicano del trabajo, Op. Cit., p. 83 23 Íbidem, p. 97. 24 HERNAINZ MÁRQUEZ, Miguel, Tratado elemental de derecho del trabajo, décimo primera edición, Instituto de Estudios Políticos, España 1972, p. 93. 25SANTOS AZUELA, Héctor, Derecho del trabajo, McGraw-Hill, México1998, p. 114. DESAFIOS PARA LACREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO Puede este principio, receptar como derechos adquiridos a las concretas situaciones configuradas en el tiempo a través de la relación de trabajo, que comporten beneficios posteriores al inicio de aquella, y se adquieren con alcance permanente e ituita persona. c) Principio de la norma más favorable, Según el cual los casos dudosos deben resolverse a favor del trabajador, consiste en otorgar protección a la parte más débil en el contrato de trabajo. Para Mario de la Cueva, este principio es "el mandamiento de una aplicación de la tesis de que la interpretación debe tender a la justicia social... puesto que existe una duda que equivale a una igualdad de posibilidades o de circunstancias, otorgar una preferencia al capital, sería injustificable".26 Néstor de Buen menciona que el artículo 18 de la Ley Federal del Trabajo, en México, que hace referencia a este principio, "impone al intérprete un camino forzado a seguir"27 en la última parte del precepto: "En caso de duda prevalecerá la interpretación más favorable al trabajador" En cuanto a esta máxima de la norma más favorable, ello no implica la aplicación de la norma conforme a un orden escalonado que pudiere provocar una especie de fractura lógica en cuanto a la jerarquía de las fuentes, sino que por el contrario, en materia del trabajo, el vértice de la pirámide de la jerarquía de las normas laborales será ocupada por la norma más favorable al trabajador. Por lo que se refiere al principio de la condición más beneficiosa, el artículo 6o. de la misma ley del trabajo establece: "Las leyes respectivas y los tratados celebrados en los términos del artículo 133 de la Constitución, serán aplicables a la relación de trabajo en todo lo que beneficien al trabajador". 26 DE LA CUEVA, Mario, El nuevo derecho mexicano del trabajo, T I, Op. Cit., p. 142. 27 DE BUEN LOZANO, Néstor de, Derecho del trabajo,T.I, Novena. edición, Porrúa, México, 1994, p. 475. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO d) Principio de equidad y buena fe, la equidad es un principio correctivo de la ley injusta, exige en el juez acomodarse a la naturaleza conforme a la cual han sido hechas, dirigidas y formuladas todas las leyes. El juzgador debe atender, cuando se encuentre en presencia de un caso determinado, al llamado de la voz de la equidad para que lo induzca hacia "la justicia del caso concreto".28 La equidad toma en cuenta el sentido humano que debe tener el derecho, prevaleciendo frente a las consideraciones normales y regulares la circunstancia del caso concreto. En el sentir de Néstor de Buen, ésta constituye un instrumento de quien debe aplicar la ley. En cierto modo es "un facultamiento para crear normas especiales".29 La Ley Federal del Trabajo muestra la equidad, en el artículo 17, con el carácter de fuente supletoria, y en el 31 como principio inspirador de justicia, establece que "los contratos y las relaciones de trabajo obliga a lo expresamente pactado y a las consecuencias que sean conformes a las normas del trabajo, a la buena fe y la equidad". Como consecuencia de la interpretación racional de la voluntad de las partes, en relación a cual es el negocio jurídico laboral que concretaron; se encuentra el principio de la buena fe, que en materia de trabajo se traduce en el cumplimiento "honesto y escrupuloso de las obligaciones contractuales".30 El contrato de trabajo, no sólo crea derechos y obligaciones de orden exclusivamente patrimonial, sino también personal; crea una relación estable y continuada en la cual se exige la confianza recíproca. 28 LEGAZ Y Lacambra, Luis, Filosofía del derecho, Cuarta edición., Bosch, España, 1975, p.364 29 DE BUEN LOZANO, Néstor, Derecho del trabajo, Op. Cit., p. 461 30 PLÁ RODRÍGUEZ, Américo, Los principios del derecho del trabajo, Segunda edición, Depalma, Argentina 1978, p. 307. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO Este principio incluye tanto al trabajador como al patrón, el deber de rectitud, honradez, honestidad y probidad en el actuar de ambos, es un "estilo de conducta, una forma de proceder".31 e) Principios de Justicia Social que derivan del artículo 123 Constitucional y se plasman en el 17 de la Ley Federal Del Trabajo, la Justicia Social es el campo del derecho del trabajo; consiste en la armonía de las relaciones obrero-patronales así como en la proporcional distribución de los bienes producidos por esas relaciones, armonía y proporcionalidad que son alcanzadas mediante una serie de axiomas derivados del mismo. f) Principio de estabilidad y continuidad en el trabajo; el vocablo estabilidad deriva del latín stabilitás, que denota la idea de estabilidad, solidez, firmeza, consistencia; "es la base de la vida económica del trabajador y su familia",32 cuya finalidad radica en "el vivir hoy y en el mañana... es la certeza del presente y del futuro".33 El derecho a la estabilidad laboral consiste en asegurar y proteger jurídicamente la permanencia y continuidad del vínculo laboral. g) Principio de garantías mínimas para los trabajadores, la doctrina laboral en México ha establecido que el artículo 123 constitucional y su ley reglamentaria contienen los derechos mínimos fundamentales para los trabajadores, por lo tanto, son inaceptables condiciones de trabajo inferiores a las preceptuadas en dichos textos que el artículo 123 menciona el vocablo “por lo menos”, también expresa, en la fracción VI, la idea de salarios mínimos. Fue así como el legislador decidió garantizar a favor de los trabajadores un mínimo de derechos. 31 RABASA, Emilio O., El pensamiento político y social del constituyente de 1916-1917, UNAM, México, 1996, p. 108 32 MILANTA, José Atilio, De la estabilidad del empleo en general, Universidad Nacional de La Plata-Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales, Argentina 1972, p. 11. 33 DE LA CUEVA, Mario, El nuevo derecho mexicano del trabajo, T I, Op. Cit., p. 219. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO Mario de la Cueva considera a este principio como "la parte nuclear de la Ley del Trabajo".34. El poder judicial de la federación ha expresado: "las normas laborales sólo consagran los derechos mínimos que deben disfrutar los trabajadores".35 También ha sostenido que los principios del artículo 123 son: "únicamente el mínimo de beneficios que el Estado ha considerado indispensable otorgar a los trabajadores".36 g) Principio de igual salario para igual trabajo, La idea de igualdad denota correspondencia y proporción que resulta de muchas partes que, uniformemente, componen un todo, también es la expresión de la "equivalencia de dos cantidades. Principio que reconoce a todos los ciudadanos capacidad para los mismos derechos".37 Resumiendo, el hombre se aproxima a los valores por medio de la influencia mística que los individuos ejercen en determinados grupos sociales, los cuales pueden ser la familia, las profesiones u otras organizaciones. En estas circunstancias, los valores son aprendidos y respetados por ser cualidades ante las cuales no podemos ser indiferentes si pretendemos llevar una vida que merezca la calificación de humana. Los valores son fundamentales, sobre todo en el derecho constitucional, cuando los enuncia como base de sus declaraciones y en tal caso como origen del derecho laboral. Los principios generales del derecho, son criterios inalterables en lo substancial y su función radica en interpretar e integrar la ley, para resolver casos no previstos por los textos legales y para dirigir la actividad legislativa y judicial, éstos"constituyen la estructura fundamental del derecho y por ello se encuentran en íntima vinculación".38 34 Ibidem p. 98. 35 Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Segunda Sala, t. IV, tesis 2a. /J. 40/96, agosto de 1996, p. 177. 36 Semanario Judicial de la Federación, Primera Sala, t. 169-174 segunda parte, 11 de junio de 1974, p. 62. 37 Diccionario de la lengua española, Espasa-Calpe, España 1970, p. 729. 38 AZÚA REYES, Sergio T., Los principios generales del derecho, Porrúa, México1986, p. 177. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO 1.6. Trabajo decente y sus objetivos estratégicos. El adjetivo “decente” que se aplica al noción de “trabajo”, no hace sino ampliar tal concepto, es un término que busca generar una mejor situación laboral en el mundo; relaciones con mayor calidad y una estabilidad netamente real. El trabajo decente es el punto de convergencia de sus cuatro objetivos estratégicos: la promoción de los derechos fundamentales en el trabajo; empleo de calidad; protección social y dialogo social. Trabajo decente es un concepto que expresa lo que debe ser, en el mundo globalizado, un buen trabajo o un empleo digno. El trabajo que dignifica y permite el desarrollo de las propias capacidades no es cualquier trabajo; así mismo no es decente el trabajo que se realiza sin respeto a los principios y derechos laborales fundamentales, ni el que no permite un ingreso justo y proporcional al esfuerzo realizado, sin discriminación de género o de cualquier otro tipo, ni el que se lleva a cabo sin protección social, ni aquel que excluye el diálogo social y el tripartismo; encontrar la vía para estos puntos es el objetivo de un trabajo decente. “El trabajo decente resume las aspiraciones de los individuos en lo que concierne a sus vidas laborales, e implica oportunidades de obtener un trabajo productivo con una remuneración justa, seguridad en el lugar de trabajo y protección social para las familias, mejores perspectivas para el desarrollo personal y la integración social, libertad para que los individuos manifiesten sus preocupaciones, se organicen y participen en la toma de aquellas decisiones que afectan a sus vidas, así como la igualdad de oportunidades y de trato tanto para hombres como mujeres.”39 39 SOMAVIA Juan, El objetivo primordial de la OIT : promover oportunidades para que las mujeres y los hombres consigan un trabajo decente y productivo en condiciones de libertad, igualdad, seguridad y dignidad humana, OIT, Suiza 2007, p.5. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO Todos deseamos acceder a un empleo o una ocupación productiva que nos genere ingresos. Sin embargo, aspiramos a algo más que eso; queremos tener un buen trabajo; es decir, un trabajo basado en un empleo de calidad que nos permita un ingreso de acuerdo a nuestras necesidades y proyectos, un sustento de estabilidad; en general un trabajo decente para todos. “Se podría indicar que la idea matriz de trabajo decente es una propuesta integradora de diferentes aspectos que hacen a la calidad y cantidad de los empleos”, pero también, y de manera fundamental, a las “relaciones sociales y en última instancia al tipo de sociedad y de desarrollo al que se aspira”. Como concepto requiere de un desarrollo teórico y de un sustento científico que lo pueda transformar en un paradigma explicativo de la realidad laboral, tomando como eje al empleo”40. La novedad del concepto es su carácter multidimensional; no se trata sólo de un empleo en el que el trabajo que realizamos esté bien remunerado y que lo realicemos con aceptables condiciones materiales. Se trata, además, de un trabajo en el que las reglas sean claras, justas y adecuadamente reguladas, que nos otorgue protección, no sólo en caso de despido o de enfermedad sino incluso para las cuestiones de inactividad, sobretodo, ejerciendo nuestros derechos sin riesgo alguno a quedar desocupados. Es decir, el concepto añade a la dimensión económica representada en el marco tradicional de un buen empleo o de un empleo de calidad. nuevas dimensiones de carácter normativo, de seguridad y de participación. Sin embargo, su sola enunciación y su carácter dinámico revelan una voluntad política y una capacidad de crítica que toma posición frente a los graves problemas que vive el mundo laboral, y puede servir como un instrumento que ordena diferentes ejes a nivel micro (en las empresas) y a nivel macro (la economía y la sociedad). 40 ESPINOZA Malva, Trabajo Decente y Protección Social, OIT, Chile 2003, p.11. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO El trabajo decente debe constituir la esencia de las estrategias globales, nacionales y locales para lograr el progreso económico y social. Es indispensable para los esfuerzos destinados a reducir la pobreza, y como medio para alcanzar un desarrollo equitativo, global y sostenible. Mediante sus actividades en los cuatro objetivos estratégicos: los principios y derechos fundamentales en el trabajo, el empleo, la protección social y el diálogo social, fomentando así un trabajo decente y equilibrado, en pos de una mayor productividad CONTENIDOS ASIGNADOS AL CONCEPTO DE “TRABAJO DECENTE” 1. Empleos de calidad y en cantidad suficiente. 2. Ingresos adecuados. 3. Seguridad en el empleo. 4. Con formación profesional continua y pertinente a la contratación. 5. Con respeto a los derechos de los trabajadores. 6. Con diálogo social y tripartismo. 7. Con protección social en el empleo y en la sociedad. 8. En condiciones de libertad. 9. Con equidad para todos los miembros de la sociedad. 10. Con dignidad. 1.6.1. Derechos fundamentales en el trabajo. Como primer objetivo, encontramos los principios y derechos fundamentales en el trabajo que, no es más que respetar los derechos que como individuo debe tener cada trabajador y que especificados o no, se otorguen de manera general a todos y cada uno de los trabajadores; se propugna en este sentido que se vivifique el interés por las normas de la OIT y que se piense en la posibilidad de recurrir a instrumentos y medios complementarios para alcanzar tal finalidad. Una correcta aplicación de la declaración de los derechos fundamentales (emitida por la misma OIT como se verá adelante), puede DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO contribuir decisivamente a que el ejercicio de los derechos fundamentales llegue a ser una realidad verdaderamente mundial. Respetar estos derechos es fundamental, y no se necesita otra justificación que el respeto mismo, a su vez que éste facilitará el desarrollo. En este sentido, la garantía de los derechos en el trabajo permite a los trabajadores reivindicar una parte justa de la riqueza que ha contribuido a crear, y les faculta para buscar un trabajo más abundante y mejor. Como resultado, la garantía de esos derechos también hará que el crecimiento económico se plasme siempre en empleos y justicia social, en todas las fases del desarrollo. Estas medidas orientadas a garantizar el respeto de los derechos fundamentales en el trabajo deben acompañarse de otras destinadas a fomentar su ejercicio en la práctica económica y social. En junio de 1998, la Conferencia Internacional del Trabajo reafirmó su adhesión a los ideales fundacionales de la OIT al adoptar la declaración de la OIT relativa a los principios y derechos fundamentales en el trabajo y su seguimiento. La declaración entraña el compromiso de todos los Miembros de respetar, promover y hacer realidad de buena fe, los principios y derechos relativos a: • la libertad deasociación y la libertad sindical y el reconocimiento efectivo del derecho de negociación colectiva; • la eliminación de todas las formas de trabajo forzoso u obligatorio; • la abolición efectiva del trabajo infantil; y la eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación. La declaración fue adoptada como un instrumento de carácter promocional, y debe aplicarse como tal, pero para que sea eficaz y universal, conservando su legitimidad, no puede suponer alguna condición. A sabiendas de DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO esto, la declaración debe convertirse en un objetivo común del sistema multilateral en su conjunto; es decir un medio internacional y generalizado en términos comerciales y laborales. Ahora bien, para que sea creíble, es necesario, además, contar con un sistema de seguimiento eficaz y rápido que pueda darle cumplimiento; como se verá en los consiguientes capitulos. 1.6.2. Protección Social. En segundo término se aborda el tema de la protección social, donde pasa a ser más importante todavía el dominante de la seguridad, entendemos que la protección social es el conjunto de políticas públicas orientadas a disminuir la vulnerabilidad y a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, especialmente de los más desprotegidos, para obtener como mínimo el derecho a la salud, la pensión y al trabajo seguro, con motivo de la relación de trabajo. Los mecanismos de protección social tienen una importancia crítica para garantizar que las personas tengan capacidad de trabajar y de hacerlo productivamente, que los bienes obtenidos mediante la remuneración de su trabajo estén protegidos frente a los diversos riesgos a que se enfrenta la población trabajadora, y que las personas que no están trabajando tengan medios para conservar u obtener esos bienes. Los sistemas existentes están sometidos a grandes presiones y sigue preocupando el grado de cobertura de la protección social, pues de éste derivan diferentes situaciones de protección y mejora en la calidad laboral. La necesidad de protección social es uno de los fundamentos de la idea del “trabajo decente”. En este sentido podría decirse que dicha representación surge justamente ante el deterioro de los estados sociales y ante la creciente precarización, no sólo del empleo sino, en general, de las brechas de pobreza y exclusión en los países en desarrollo que nunca alcanzaron a consolidar sistemas viables y eficientes de protección social. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO 1.6.3. Dialogo Social. La definición de diálogo social con que trabaja la OIT, incluye dentro del mismo, todo tipo de negociación, consulta o simple intercambio de informaciones entre representantes de gobiernos, empleadores y trabajadores sobre cuestiones de interés común relacionadas con la política económica y social. Puede cobrar la forma de un proceso tripartito donde el gobierno es parte oficial en dicho diálogo o consistir en relaciones de carácter bipartito entre trabajadores y empleadores, o bien, entre organizaciones de trabajadores y de empleadores, con o sin intervención indirecta del gobierno. La concertación puede ser oficiosa u oficial, siendo con frecuencia una combinación de ambos tipos. Puede tener lugar en los planos nacional, regional o de empresa. También puede ser interprofesional, intersectorial o una combinación de tales formas. El principal objetivo del diálogo social propiamente dicho, es el de promover el logro de un consenso y la participación democrática de los principales interlocutores presentes en el mundo del trabajo. Las estructuras del diálogo social, así como los procesos que se han desarrollado con éxito han sido capaces de resolver importantes cuestiones de índole económica y social, han alentado el buen gobierno, el progreso y la paz sociales, la estabilidad e impulsando el desarrollo económico. Su eficacia depende, sin embargo, de la medida en que todos los segmentos de la sociedad pueden hacer oír su voz. El reducido número de mujeres que desempeñan cargos directivos en los órganos representativos, constituye un freno para el progreso respecto de la igualdad de oportunidades y de trato entre hombres y mujeres en el mundo del trabajo. Porque el tema, el tópico o la materia del diálogo social puede cambiar y cambia según los tiempos y circunstancias, pero la convicción de que él tiene que ver, indisolublemente, con la democratización del sistema político y de las relaciones laborales, es algo que compromete demasiado, más considerando el DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO origen o modo del surgimiento de la legislación laboral -y de las relaciones laborales- en América Latina, signado por un marcado intervencionismo de la administración y por una no menor injerencia. La noción del diálogo social ha tenido, en veces, menos suerte; la voz concertación la ha tenido más. “En efecto, un plausible espíritu concertacionista ha llevado a pensar, no poco, que el diálogo “a secas” no tiene sentido y que él sirve sólo en tanto y cuanto se encara o cristaliza, por fin, una concertación.”41 Esto porque, pudiendo hablar del diálogo social desde muchas directrices, intentemos una visión del derecho del trabajo, sobretodo partiendo de sus requisitos esenciales, con una perspectiva más jurídica que política para el diálogo social. “Los requisitos esenciales para que el diálogo social pueda tener viabilidad son fundamentalmente tres: la libertad sindical, la autonomía colectiva y la auto-tutela de los intereses colectivos, lo que no sería contrario a decir que el requisito esencial o sine qua non del diálogo social es la libertad sindical, en tanto y cuanto se admita que la autonomía colectiva y la auto-tutela de intereses colectivos no son más que contenidos esenciales de aquélla, sin los cuales la libertad sindical no sería reconocida como un derecho perteneciente a tal tipo.”42 En términos de derecho del trabajo y relaciones laborales, esos presupuestos se identifican con los derechos fundamentales de libertad sindical, autonomía colectiva y auto tutela. Sólo allí donde haya un efectivo respeto de la libertad sindical y protección eficaz de la actividad sindical, así como respeto y promoción de la autonomía colectiva y del auto tutela, se darán las condiciones que habiliten el desarrollo de un diálogo social verdadero, sustantivo y fluido. 41 VILLASMIL PRIETO, Humberto, La Estrategia Del Diálogo Social: de la concentración al reparto del poder decisorio en las relaciones laborales., OIT, Costa Rica 2002, p.3. 42 Ibidem, p.7. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO El Dialogo Social incluye todo tipo de negociación, consulta o simple intercambio de informaciones entre representantes del gobierno, patrones y trabajadores sobre cuestiones de interés común relacionadas con la política laboral económica y social. 1.6.4. Empleo de Calidad. El cuarto objetivo se refiere a la creación de mayores oportunidades en materia de empleo y de ingresos para las mujeres y los hombres, en términos generales empleo de calidad; esto en razón de que existen sobradas razones de carácter económico, social y ético para privilegiar el tema, estas razones indican que deben hacerse esfuerzos para mejorar la productividad y las condiciones laborales de los puestos de trabajo, en especial de los sectores más rezagados. La nueva economía mundial, ha puesto de manifiesto que hay enormes posibilidades de creación de puestos de trabajo en las debidas condiciones, pese a los muchos peligros que rondan. Será necesario explorar nuevas opciones para promover una orientación proclive al empleo en lasestrategias macroeconómicas, en la transformación de los sistemas de producción y como modo de reducir la pobreza y las desigualdades. A pesar de que a nivel internacional existe un Convenio sobre la política del empleo, no todo el mundo está de acuerdo en lo que se refiere a las medidas políticas que ofrecen más probabilidades de crear puestos de trabajo. A juicio de algunos, lo esencial es el crecimiento; para otros es la flexibilidad del mercado de trabajo. Hay quienes piensan que la solución radica en la competencia y las calificaciones de las personas, y los hay también que abogan por un reparto del trabajo disponible. El empleo, es el corazón mismo de la misión que deben tener las autoridades laborales; ya que sin un empleo productivo resulta vano pretender alcanzar los objetivos de un nivel de vida digno, del desarrollo social, económico y del pleno desarrollo personal. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO Los problemas de empleo no pueden resumirse fácilmente con algunas cifras someras. Según las estimaciones de la OIT, hay en el mundo 150 millones de desempleados absolutos, pero la realidad es mucho más sombría, ya que otros muchos tienen que ganarse la vida con un trabajo ocasional, o por cuenta propia muy poco productivo, o al amparo de otras formas de subempleo. Allí donde el desempleo es bajo, un análisis más detenido pone de manifiesto que lo sustituye un trabajo de poca calidad y mal remunerado, o que un gran número de trabajadores — normalmente, de sexo femenino — quedan excluidos de las estadísticas. Pese a años de esfuerzo, la situación no da muestras de mejorar, antes por el contrario, muchos países que hubiesen podido alardear de su éxito al frente del empleo hace unos años, se enfrentan hoy con nuevos problemas. La concepción de trabajo decente asocia la calidad del empleo a dos factores fundamentales: la seguridad en el empleo, es decir, la estabilidad; y la protección social que deviene del trabajo en lo que refiere a la cotización para salud y previsión.43 Las condiciones que debe tener un verdadero empleo corresponde ser un trabajo que permita una gestión de tiempo precisa, dividida y reglamentada; tener un acceso a nuevas y mejores formas de consumo, de vida, de transporte y de hogar a través del salario; atender eficazmente a los trabajadores y sus familias en casos de accidente, enfermedad o inactividad; y una fuerte normatividad de empleo mediante la intervención estatal. “El concepto de calidad del empleo entonces, abarca dimensiones múltiples; además la división crecientemente aceptada entre sectores formal e informal se examinan con atención los diferentes determinantes de las condiciones laborales y cómo éstos afectaron la productividad. Entre otros cabe 43 Cfr. ESPINOZA Malva, Trabajo Decente y Protección Social, OIT, Chile 2003, p.13. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO mencionar el tipo de relaciones de trabajo, las condiciones ambientales, de salud y seguridad en el trabajo, la protección social de los trabajadores y el ejercicio de los derechos laborales fundamentales, los que varían entre ocupaciones y en los diferentes lugares de trabajo.”44 Más allá de las reformas económicas, políticas y sociales que pudieran ser puestas en marcha, la creciente exposición de las economías nacionales ante la competencia internacional, ha derivado en mayores exigencias para quienes diseñan y quienes ejecutan las políticas de formación profesional. Las características de la actividad económica y las nuevas necesidades sociales, ponen a la formación en un sitial de primer orden en cuanto a su capacidad como motor de inclusión, movilizador de conocimientos, generador de mejores condiciones para la empleabilidad y facilitador de opciones de diálogo social para lograr mejores condiciones y más calidad. Igualmente por la extensa complejidad del entorno actual, se requiere que las instituciones de formación impliquen mayores esfuerzos para mantenerse actualizadas y prestar servicios acordes a las demandas. La entrada progresiva de nuevos actores en el mercado laboral, la disposición de una mezcla de fuentes financieras y la necesaria pertinencia reclamada a los programas formativos son entre otros, factores que han incidido en la génesis de los procesos de modernización y transformación de las instituciones, los usuarios de la formación requieren conocer las mejores ofertas, las que más garantías de eficiencia les brindan. Tanto empresarios como trabajadores buscan señales de eficiencia y mayor calidad para mejorar la productividad. Esta tendencia, viene siendo expresada mediante la adopción de acciones de dirección y participación en las cuales se adoptan herramientas y 44 INFANTE Ricardo, La calidad del empleo: la experiencia de los países latinoamericanos y de los Estados Unidos, OIT, Chile 1999, p. 264. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO se ejecutan acciones institucionales encaminadas a desarrollar una cultura de calidad. Tales acciones, usualmente inmersas en la filosofía del mejoramiento continuo o en procesos de modernización institucional, implican actividades de capacitación a los funcionarios, búsqueda de factores críticos, aclaración de la misión y objetivos que conllevan, por si mismas, mejoras cualitativas institucionales. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO CAPITULO 2 Antecedentes. Para este capitulo se hace una síntesis histórica de los ordenamientos jurídicos dedicados al ámbito laboral, que son las columnas del sistema del trabajo en nuestro país. Este resumen intenta apreciar como cambia y se pone en movimiento la vida social de México desde que se originaron las garantías sociales hasta como ha sido necesario ir adaptando los preceptos a las situaciones de cada momento histórico, con la finalidad de comprender como es que puede el trabajo decente presentarse en nuestra sociedad; es decir, acceder a la memoria histórica para planear el futuro. 2.1 La Constitución de 1917 y el surgimiento del Trabajo como Garantía social. Artículo 123. Nuestro artículo 123 constituye el conjunto de derechos laborales para los trabajadores en general, su surgimiento no es más que la representación de los deseos de la sociedad que participó en la Revolución, una revolución que da como resultado este artículo que refleja la lucha de clases, y que sobretodo genera una serie de condiciones benéficas y dignas bajo las cuales deben presentarse las relaciones de trabajo. “El derecho social encaminado a proteger a los trabajadores, sirvió para conmover al Estado gendarme, propiciando intervenciones a favor de los débiles, pero con un sentido distinto del nuevo derecho social que nació identificado con las normas de trabajo y previsión social en el artículo 123 de la Constitución mexicana de 1917, cuyo alcance no nos cansaremos de repetir frente a la incomprensión de su profundo contenido revolucionario, en el sentido de que no sólo es proteccionista, igualitario, nivelador, sino reivindicador de la clase trabajadora.”1 1 TRUEBA URBINA, Alberto, Nuevo Derecho del Trabajo, Porrúa, México 1981 p.196. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO Entre los años de 1911 y 1913, hubo bastantes cambios en el gobierno de nuestro país, y una vez más el pueblo mexicano se levantó en defensa de la legitimidad de su gobierno y el sistema federal. “El plan de Guadalupe condensó los propósitos de la lucha por el restablecimiento de la vigencia de la Constitución violada; en él, el ejército del pueblose llamó constitucionalista, nombre que se aplicó después al movimiento revolucionario. De él nacieron: la nueva Constitución de 1917, la primera declaración de derechos sociales de la historia y el derecho mexicano del trabajo.”2 Esta declaración de derechos sociales, es la consecuencia de los individuos que en el campo y en los diferentes lugares de trabajo exclamaban por la justicia, mediante la cual tendrían que desempeñar sus actividades y dejar de sufrir la existencia propia y de su familia. Hasta antes de esta revolución, no se contaba con más derecho que el civil, es decir, no existían leyes que permitieran dar igualdad a la clase trabajadora, solo constaba el predominio absolutista de la empresa. Así, al declarar los derechos sociales, nace el derecho del trabajo como un derecho nuevo, creando nuevos ideales, derechos y valores; provisto de una nueva connotación de justicia, la social. “En el derecho del trabajo, la justicia se convirtió en la manifestación de las necesidades y de los anhelos del hombre que entrega su energía de trabajo al reino de la economía.”3 Se origino un mundo en el que el trabajador comenzó a tener la categoría de persona, para vivir y existir en la vida social, estas reglas no solo serían de convivencia, sino de vida, garantizando la satisfacción de las necesidades materiales suficientes para la dignidad humana. 2 DE LA CUEVA, Mario, El nuevo derecho mexicano del trabajo, T I, Op. Cit., p. 44. 3 Íbidem p.45. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO Como antecedentes de la constitucionalización del derecho del trabajo, el 8 de agosto de 1914, en Aguascalientes se decretó la reducción de la jornada de trabajo, se impuso el descanso semanal y se prohibió la reducción de salarios. En septiembre 15 de ese año, se fijaron los salarios en San Luis Potosí y en 19, en Tabasco. Así, de igual forma fueron presentándose en otros estados manifestaciones de una concepción del derecho del trabajo; como lo fue en Veracruz en donde surge la Ley del Trabajo del estado en octubre del mismo 1914, que contenía una serie de cuestiones nuevas y de gran relevancia e importancia para el ámbito laboral como, salarios mínimos, reglamentación del trabajo a destajo, el riesgo profesional etc. Ya para 1915, el general Salvador Alvarado expidió cinco leyes, entre las cuales se encontraría “La Ley del Trabajo, la que declaró algunos principios básicos que más tarde integrarían el Artículo 123 de la constitución: el derecho del trabajo esta destinado a dar satisfacción a los derechos de una clase social; el trabajo no puede ser considerado como una mercancía; las normas contenidas en la ley sirven para facilitar la acción de los trabajadores organizados en su lucha con los empresarios; las normas legales contienen únicamente los beneficios mínimos de que deben disfrutar los trabajadores y se desarrollarán y completarán en los contratos colectivos y en los laudos del tribunal de arbitraje”.4 Desde 1913, Carranza expreso que era necesario reestablecer la justicia, buscar igualdad y equilibrio económico; es así que el 14 de septiembre de 1916, convoca a la elección del pueblo de los constituyentes que darían origen al contenido ulterior de la constitución. Dicho proyecto, solo causo una enorme decepción pues no contenía ni aseguraba reformas sociales, solo autorizaba al poder legislativo para regular la materia del trabajo. 4 Ibidem. p.46. DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO El 26 de diciembre, en la vigésimo tercera sesión ordinaria, se inició la discusión del artículo 5° del Proyecto, la comisión encargada de dictaminar sobre el proyecto incluyó la jornada máxima de ocho horas, consignó el descanso semanal, y la prohibición del trabajo nocturno industrial a niños y mujeres. Una vez iniciado el debate, fueron catorce los diputados inscritos para atacar dicho proyecto, en general no era que se estuviese en contra, sino que la pretensión resultaba ser el deseo de hacer más extensos los beneficios de la clase trabajadora; dentro de estas declaraciones, el diputado obrero Héctor Victoria pronunció que la Constitución debía señalar las bases fundamentales para que las legislaturas locales expidieran las leyes de trabajo, el derecho necesita de un ajuste a las realidades sociales y a las necesidades de los trabajadores. Para Froylán C. Manjarrez, no solo era necesario dictar un solo artículo sino un título completo de la Carta Magna, que hiciera más explicita la situación de los trabajadores; así que propuso por escrito que la situación de los trabajadores fuera separada del artículo 5° y se integrara un título especial. Es así que al ser establecido el contenido por Victoria y la forma sugerida por Manjarrez, se concibió el artículo 123. Carranza adelantado al suceso, pidió al lic. José Natividad Macías para que apoyara la idea de un título especial sobre el trabajo y de inmediato se integró una comisión redactora dirigida por Pastor Rouaix, comisión que redactaría el proyecto de nuevo título sobre el trabajo, se formulo un anteproyecto el 13 de Enero de 1917 al cual se le hicieron algunos cambios pero en general se conservó la mayor parte del texto original, la modificación sustancial, fue la tendencia del proyecto de limitar la protección sólo al trabajo económico, y se amplían los beneficios a todas las actividades de trabajo, sin cambiar sus finalidades. Finalmente el 23 de Enero de 1917, se presentaron a discusión los textos de ambos artículos, el 5° y el 123, después de una breve discusión se DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO tomo la votación nominal y por 163 votos a favor, se aprobó; es entonces que “había nacido así el primer precepto que a nivel constitucional otorgó derechos a los trabajadores. México pasaba a la historia como el primer país que incorporaba las garantías sociales a una constitución.” 5 En cuanto al contenido del artículo, constituye el conjunto de derechos laborales para los trabajadores en general, especifica y rige el contenido de todo contrato de trabajo. Contaba con treinta y un fracciones en su aparatado “A”, dichas fracciones contienen lo referente a distintos rubros labores y amparan diversas prestaciones: I. Establece la jornada máxima de 8 horas. II. La jornada máxima nocturna de 7 horas. III. Trabajo de los menores. IV. Descanso semanal. V. Trabajo de las mujeres y el parto. VI. El salario mínimo remunerador y participación de utilidades. VII. Igualdad en el trabajo en cuanto al salario. VIII. Excepción de embargo al salario mínimo. IX. La fijación del salario mínimo y de las utilidades. X. Salario mínimo debe ser pagado en moneda. XI. Pago de tiempo extra. XII. Habitaciones para los trabajadores. XIII. Terrenos para la construcción de mercados, edificios y servicios municipales y centros recreativos en donde este la habitación de los trabajadores. XIV. Accidentes de Trabajo y enfermedades profesionales. XV. Higiene y Salubridad. XVI. Derecho de coalición. XVII. Derecho de huelga y paro. 5 DE BUEN LOZANO, Néstor , Derecho del trabajo , Op. Cit. p.347 DESAFIOS PARA LA CREACIÓN DEL TRABAJO DECENTE EN MÉXICO XVIII. Licitud de la huelgas. XIX. Licitud de los paros. XX. La resolución de los conflictos se harán en Junta de Conciliación y Arbitraje. XXI. Insumisión al arbitraje e indemnización. XXII. Reinstalación o indemnización en caso del despido injustificado. XXIII. Preferencia de los créditos a favor de los trabajadores. XXIV. Deudas Contraídas por los
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