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Universidad Nacional Autónoma de México 
 
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales 
 
 
 
 
 
El confinamiento de desechos radiactivos de bajo nivel en la 
frontera México-Estados Unidos: el caso Sierra Blanca 
 
 
 
 
TESINA 
 
QUE PARA OBTENER EL TÌTULO DE: 
 LICENCIADA EN RELACIONES INTERNACIONALES 
 
 
 
 
PRESENTA: 
MARCELA DOMÍNGUEZ FLORES 
 
 
 
 
 
 
Asesora: Mtra. Ana Cristina Castillo Petersen 
 
 
 
 
 
MEXICO D.F 2007 
 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
Restricciones de uso 
 
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mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
 
AGRADECIMIENTOS 
 
 
Quiero agradecer a mis padres Luis y Margarita quienes son los pilares de mi vida, 
por todo su cariño y apoyo que me han brindado. 
 
 
A mi asesora Mtra. Ana Cristina Castillo Petersen por su tiempo y ayuda en el 
desarrollo y culminación de esta tesina. 
 
 
A mis amigos Roberto, Cynthia y Raquel que me han alentado a continuar en el 
logro de mis metas. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Primero, fue necesario civilizar al hombre 
 en su relación con el hombre. 
 Ahora, es necesario civilizar al hombre 
 en su relación con la naturaleza 
 y los animales 
 
Víctor Hugo (1802-1885) 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
ÍNDICE 
 
 Pág. 
Introducción 1 
Capítulo 1. 
Los desechos radiactivos de bajo nivel 5 
 1.1. Origen, tipos y clasificación. 5 
 1.2. Vías de eliminación-los confinamientos. 12 
 1.3. Principales países productores. 16 
 
Capítulo 2. 
Proyecto Sierra Blanca. El almacenamiento de los residuos de bajo nivel en 
Estados Unidos. 22
 2.1. Antecedentes. 22 
 2.2. Localización y situación geográfica de la zona. 28 
 2.3. Desarrollo del proyecto y su cancelación. 33 
 2.4. Participación de la población civil y de las ONG 38 
 2.5. Posición de México. 41 
 
Capítulo 3. 
Perspectivas de los residuos radiactivos en la frontera México-Estados Unidos. 47 
 3.1. El negocio de los desechos radiactivos en Texas. 47 
 3.2. Contexto binacional México-Estados Unidos. 55 
 3.2.1. Convenio sobre Cooperación para la Protección y 
 Mejoramiento del Medio Ambiente en la Zona Fronteriza. 56 
 3.2.2. Acuerdo de Cooperación Ambiental de América del Norte 
 (ACAAN). 59 
 3.2.3. Frontera 2012: Programa Ambiental México-Estados Unidos. 62 
 
Conclusiones. 65 
 
 Pág. 
Bibliografía. 69 
Hemerografía. 70 
Fuentes electrónicas. 73 
Anexo. 74 
 
Mapas y Cuadros. 
Cuadro. 1. Materiales radiactivos. 11 
Cuadro. 2. Centrales nucleares. 17 
Gráfica. 1. Volumen de desechos radiactivos en los EE.UU. 18 
Mapa. 1. Confinamientos en operación en los EE.UU. 18 
Mapa. 2. Localización geográfica de Sierra Blanca. 28 
Mapa. 3. Localización del proyecto Sierra Blanca. 29 
Mapa. 4. La instalación para desechos radioactivos. 30 
Cuadro. 3. Contribuciones económicas por parte de la WCS. 50 
Mapa. 5. Localización geográfica del proyecto Andrews. 51 
Mapa. 6. Localización de la zona fronteriza México- EE.UU. 58 
 
 
 
 
 
INTRODUCCIÓN. 
 
Desde su descubrimiento la energía atómica y su uso han sido tema de 
controversia en los distintos foros internacionales, en especial a partir de la 
llamada Guerra Fría por su aplicación en la carrera armamentista que mantuvo al 
mundo en un clima de tensión por casi cincuenta años, que no dejaba de 
recordarnos las consecuencias catastróficas ocurridas en Hiroshima y Nagasaki y 
la posibilidad de una guerra nuclear. 
 
Hoy en día no ha cambiado mucho la situación, pero la utilización de esta fuente 
de energía, se extendió en diferentes ramas de la industria, de la investigación 
científica y tecnológica con fines pacíficos, que si bien han traído beneficios y 
ventajas considerables, que no hubieran sido posibles sin ella, también es cierto 
que ha implicado un riesgo permanente en el control de la energía nuclear en 
estas nuevas actividades. Esta situación se hizo presente con la explosión de la 
planta nuclear de Chernobyl, que provocó reacciones de alarma en toda la 
población mundial, cuestionando la seguridad en su manejo y control, puesto que 
la radioactividad liberada ocasionó daños terribles a los habitantes y al medio 
ambiente, no sólo de la ex Unión Soviética sino en gran parte de Europa, por su 
exposición a través del aire, agua y suelo. 
 
En este sentido, se hizo patente que la contaminación del ambiente y sus 
consecuencias al cuerpo humano no respetan fronteras, instando a los Estados a 
promover políticas que eviten su degradación, a escala bilateral, regional y 
mundial, según sea el caso a través de acuerdos y tratados inspirados bajo los 
principios de la Organización de las Naciones Unidas, el desarrollo sustentable y 
la justicia ambiental, como pilares de los acuerdos internacionales. 
 
De esta manera la participación de la población y de las organizaciones no 
gubernamentales comenzaron a ejercer presión sobre este tipo de problemas, con 
 1
el objetivo de conocer los impactos al medio ambiente y exigir medidas de 
seguridad que eviten su destrucción. 
 
Uno de los problemas ambientales que estudiaremos, es el relacionado con la 
eliminación de los residuos generados por el uso de material radioactivo, debido a 
que en últimas décadas su volumen ha aumentado de forma alarmante, en 
especial en Estados Unidos, colocándose como el primer país productor de estos 
desechos a nivel mundial y quien ha llevado a la práctica su almacenamiento por 
períodos indefinidos, como la solución más barata pero no más segura. 
 
Actualmente, este problema no ha tenido mucha difusión o se ha mantenido al 
margen de los problemas ambientales, y aunque se mencionan cuestiones como 
el movimiento transfronterizo de los desechos, no se habla sobre su control y 
almacenamiento seguro, que cuide al ambiente y a la población de los países 
vecinos. Cabe señalar que a nivel internacional existe un consenso entre los 
países miembros de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico 
(OCDE), quienes consideran los desechos radiactivos como no peligrosos, aun 
cuando son evidentes los riesgos y el daño que puede provocar la radiación que 
contienen. Ante esta premisa podemos considerar que los residuos radioactivos 
son excluidos de los acuerdos y tratados internacionales sobre el manejo, 
transportación y almacenamiento de desechos peligrosos. 
 
De ahí la importancia de su estudio, debido a que las instalaciones creadas para 
su confinamiento se convierten en una amenaza latente durante el ciclo de vida de 
los desechos, la cual puede variar de unos días a millones de años sin que exista 
hasta el momento un tratado internacional que prohíba el almacenamiento de 
dichos desechos en zonas fronterizas y no pongan en riesgo el territorio del país 
vecino. 
 
Los desechos radioactivos dejan de tener una dimensión local, puesla falta de 
espacio y su incremento ha provocado la transferencia de los desechos a países 
 2
que no tienen la infraestructura para su almacenamiento o como en el caso que 
abordaremos, se considera confinarlos en las fronteras con países, que no 
cuentan con los recursos para llevar a cabo investigaciones en el lugar y definir si 
les afecta o no. 
 
En Estados Unidos, el almacenamiento de los desechos pasó de ser un problema 
doméstico que derivó en un problema internacional con México en 1998, al 
proponerse un confinamiento exprofeso en el estado de Texas, en una localidad 
llamada Sierra Blanca a escasos 30Km. de Cd. Juárez, lo que provocó tensión en 
la relación bilateral sobre un tema poco conocido y estudiado por parte del 
gobierno mexicano, pues se consideraba convertir dicha instalación en la más 
grande de Estados Unidos para disposición de residuos radioactivos de baja 
intensidad, en una área considerada de alta sismicidad y con gran cantidad de 
afluentes que desembocan al Río Bravo y al Golfo de México; además de ser un 
lugar de pobreza extrema y con una población en su mayoría de origen mexicano. 
 
Para conocer los riesgos que el confinamiento implicaba, mencionaremos en el 
primer capítulo, los diferentes tipos de desperdicios que existen, su origen y 
clasificación, y posteriormente estudiaremos el caso de Francia, Rusia y Estados 
Unidos entre las principales naciones que enfrentan este problema y los métodos 
que han llevado a cabo para deshacerse de dichos residuos. De esta manera 
demostraremos que el confinamiento de desechos radioactivos es la práctica más 
común, debido al alto costo que representan los procesos químicos para disminuir 
la radiación de los desperdicios nucleares. 
 
En el segundo capítulo analizaremos el proyecto Sierra Blanca desde su inicio, 
desarrollo y cancelación, con el objetivo de conocer los riesgos que representaba 
la instalación para la población y para el medio ambiente de México. Probaremos 
que de acuerdo con las características de la zona, el racismo ambiental estuvo 
presente en la evolución del proyecto. Para ello se revisara la participación de las 
 3
organizaciones no gubernamentales y de la población civil en el desarrollo del 
caso. 
 
También se analizarán los acuerdos y tratados pactados entre México y Estados 
Unidos en materia de protección ambiental, en especial el Convenio de la Paz ya 
que Sierra Blanca representó una violación a este acuerdo, como se verá en el 
último capítulo. 
 
Finalmente en el tercer capítulo se busca demostrar que el proyecto de 
confinamiento continúa vigente en Estados Unidos y no se le ha dado la 
importancia debida en México. Ahora la amenaza de un basurero nuclear se 
localizará también en Texas, pero en el Condado de Andrews, para lo cual se 
llevaron a cabo modificaciones en la legislación estadounidense, que dieron como 
resultado la descentralización de su manejo de las instancias federales, a las 
locales y de ahí a la iniciativa privada, dando una perspectiva más clara de los 
intereses económicos y políticos que existen en torno al manejo y disposición de 
los residuos radiactivos en aquel país. 
 
No se pretende hacer un estudio exhaustivo de la legislación estadounidense, sólo 
se abordarán los cambios más significativos que han dado pie a que empresas 
privadas puedan ser dueñas de las instalaciones para desechos radiactivos de 
bajo nivel, lo que implica también la aplicación selectiva de los acuerdos 
bilaterales entre México y los Estados Unidos, para proyectos privados y de 
competencia estatal., para ello se hará una revisión de los acuerdos ambientales 
más recientes entre estos dos países, donde se podrá apreciar que durante casi 
10 años, después de Sierra Blanca, no hay un avance significativo sobre este 
tema, al contrario los intereses políticos y económicos estadounidenses están por 
encima de la buena vecindad con México. 
 
 
. 
 4
CAPÍTULO 1 
 
1. Los desechos radiactivos de bajo nivel. 
 
En este capítulo abordaremos el origen, tipo y clasificación de los desechos 
radiactivos, con el fin de conocer de forma clara y precisa las características que 
los hacen altamente peligrosos de acuerdo con el período de vida radiactiva que 
poseen. Así mismo se estudiarán las diferentes formas de eliminación que se 
llevan a cabo a nivel internacional, en especial para los residuos de bajo nivel, los 
cuales han aumentado de forma desproporcionada en últimas décadas por la 
variedad de usos que se le ha dado a la energía nuclear. 
 
Por último mencionaremos las experiencias de tres de los principales países 
generadores de este tipo de residuos, Estados Unidos, Francia y Rusia, aún 
cuando no se cuentan con datos actualizados sobre las cantidades que producen 
anualmente, nos da un panorama de cómo han enfrentado este problema. 
 
 
1.1. Origen, tipos y clasificación. 
 
Durante la Guerra Fría el uso de materiales radiactivos para fines bélicos aumentó 
de forma desproporcionada, si bien esta situación captó la atención de la 
comunidad internacional comenzó a surgir un problema que en ese momento por 
sus volúmenes era casi imperceptible, es decir los desechos o residuos 
producidos en la generación de la energía nuclear. 
 
Durante décadas esta situación se mantuvo al margen de ser un problema, pues 
los desechos se enterraban en las mismas instalaciones donde se producían o se 
enviaban al fondo del mar sin restricciones. Al diversificarse su uso aumentó 
significativamente su cantidad y se vio la necesidad de regularlos a nivel 
internacional y de crear más instalaciones para su almacenamiento, como se verá 
en los próximos capítulos. 
 
 5
Para comprender la importancia y los riesgos que presentan los desechos, es 
necesario conocer cuáles son las características que los hacen diferentes y de 
mayor peligro, es decir su “radiactividad”. Esta propiedad que poseen y no 
desaparece del todo la podemos entender como la cualidad que tienen los 
átomos, por naturaleza inestables, “cuya disposición no respeta las reglas físicas 
que aseguran la máxima estabilidad, sino que se halla en proceso de 
transformación para lograrla… de crear cambios en su núcleo, formando un 
elemento estable,….el desprendimiento de esa energía de forma espontánea, se 
llama radiación, que se libera a través de partículas o rayos”.1
 
Estas partículas radiactivas las encontramos de forma natural en el medio 
ambiente, en los rayos del sol, el agua y hasta en nuestro organismo. La diferencia 
está en las dosis de radiación que absorbemos, de forma natural son cantidades 
mínimas pero si nos exponemos a proporciones elevadas constituyen ya un riesgo 
a la vida misma. 
 
Se tiene considerado, por ejemplo que “cada año una persona recibe alrededor de 
360 millirems2, de acuerdo con el Consejo Nacional sobre Protección de 
Radiaciones y Medición…, de los cuales 295 millirems vienen de los recursos 
naturales que nos rodean…la otra fuente la conforman principalmente los 
exámenes médicos.”3Este porcentaje se puede considerar normal, ya que no 
causa efectos nocivos al cuerpo humano y seres vivos en general.4
 
El problema surge, cuando la radiación emitida rebasa los limites tolerados por el 
ser humano, y pueden ocasionar enfermedades muy delicadas o incluso la 
muerte; en casos extremos, como fue la radiación recibida por la población de 
“Hiroshima y Nagasaki, que fue aproximadamente de 100,000 millirems o más.”5 
 
1 Cavedon, Jean-Marc, ¿Es realmente peligrosa la radiactividad? Akal, Madrid, 2005. pp.11-13. 
2 Un REM, es la unidad de medida utilizada para calcular la cantidad de radiación a la que es expuesta una persona, y un 
millirem es una milésima de un REM y equivale a 0.001. 
3 USCEA. US. Council for Energy Awareness. What do you know about Low-Level Radiactive Waste?, 1994. p.12. 
4 Todas las traducciones presentadasen este trabajo fueron realizadas por la autora de esta investigación, conservando al 
máximo los derechos de autor de las fuentes consultadas. 
5 US. Council for Energy Awareness. What do you know about Low-Level…,op. cit, p.13 
 6
Si por accidente se llega a tener contacto directo, se ingiere o se inhala, dicha 
radiación se llama contaminación interna. De ahí que su eliminación tenga un 
cuidado especial, para evitar cualquier accidente que dañe a la ecología y por 
ende a la población. 
 
Los desechos radiactivos son, de acuerdo con la norma oficial Mexicana NOM-
004-NUCL-1994, que clasifica a los desechos radiactivos como: “cualquier 
material del que no se tenga previo uso alguno, y que contenga o este 
contaminado con radionúclidos a concentraciones o niveles de radiactividad, 
mayores a los señalados por la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y 
Salvaguardias (CONASENUSA)”.6
 
De acuerdo con la Agencia de Protección Ambiental, en Estados Unidos 
(Environmental Protection Agency, EPA por sus iniciales en inglés), “estos 
residuos se generan en cualquier actividad que produzca o use materiales 
radiactivos”7. De estas dos definiciones podemos entender como desecho o 
residuo radiactivo, cualquier objeto que haya estado en contacto o contenga 
elementos radiactivos, incluyendo los de origen natural, como el uranio y no 
tengan un uso posterior. 
 
Básicamente, a nivel mundial son reconocidos dos clases de desechos 
radiactivos, los de alto y bajo nivel radioactivo, pero en el caso de Estados Unidos 
(a quienes tomamos de referencia, debido a que a que el Proyecto Sierra Blanca 
está dentro de la jurisdicción de este país) se distinguen 6 categorías, de acuerdo 
con su origen: 
1) “Los generados por el combustible nuclear gastado en los 
reactores nucleares. 
2) Los desechos de alto nivel, resultado del reprocesamiento del 
combustible nuclear gastado. 
 
6 Secretaría de Energía, NOM-004-NUCL-1994, http://www.energia.gob.mx., 29/05/2006. 
7 U.S Environmental Protection Agency, http://www.epa.gov/radiation/docs/radwaste, 29/052006 
 7
3) Los desechos transuránicos, derivados de la elaboración de las 
armas nucleares. 
4) Los originados en la explotación minera del uranio. 
5) Los desechos de bajo nivel, generalmente producidos en la 
industria (bienes y servicios) y en la investigación científico-
académica. 
6) El material naturalmente radiactivo.”8 
 
Ahora bien, la unidad de medida utilizada para determinar los niveles de 
radiactividad recibida por el hombre se denominan rems; en los objetos y 
materiales, se usan los curies, “los cuales se expresan en vidas medias, es decir, 
el tiempo que toma un material para perder la mitad de radiactividad, en una 
década natural”9, de ahí que la vida media de los residuos de alto nivel, por 
ejemplo, es de millones de años y los de bajo nivel pueden ser de unos días 
hasta de 500 años de vida media. 
 
Cabe señalar que del grupo antes descrito de desechos, los de bajo nivel son los 
que se abordarán con mayor precisión, ya que constituyen los elementos que se 
destinarían al confinamiento de Sierra Blanca, en Estados Unidos. (Véase 
capítulo 2). 
 
De acuerdo con la información que proporciona la Agencia de Protección 
Ambiental en Estados Unidos10, el origen de los desechos radiactivos se 
concentran en 4 grupos: las plantas nucleares, las instalaciones médicas y 
universitarias, la industria y las instancias gubernamentales. La mayor parte de 
los desechos se generan en las núcleo eléctricas, ocupado una tercera parte de 
volumen y casi el 90% su radiactividad, entre los que están la ropa para la 
protección de los trabajadores, en las herramientas y equipos contaminados, 
filtros y papel. 
 
8 Ibidem. 
9 USCEA. US. Council for Energy Awareness, What do you know about Low-Level…, op.cit, p.9. 
10 U.S Environmental Protection Agency, http://www.epa.gov/radiation/docs/radwaste. 29/05/ 2006. 
 8
En las instituciones médicas y universitarias se derivan, entre otros, de los 
tratamientos contra el cáncer y diagnóstico de enfermedades, radiografías, etc. 
En las universidades, se generan en la investigación y estudio de plantas, 
animales y alimentos. 
 
En la industria farmacéutica, automovilística, papelera; en el control de calidad 
para la construcción de carreteras, puentes, edificios; en la conservación de 
alimentos, fertilizantes, esterilización de productos cosméticos, en la producción 
de material y equipo fotográfico, por citar algunos. 
 
Es importante mencionar que la “clasificación es de acuerdo con su origen y no 
necesariamente por su nivel de radiactividad. Por ejemplo algunos de los 
desechos radiactivos de bajo nivel, tienen la misma radiactividad que los de alto 
nivel”.11
 
Asimismo, este tipo de desechos se han clasificado a su vez para definir el 
manejo y la forma de almacenamiento que tendrán. Los de la clase A, están 
compuestos de casi todos los residuos derivados del área medica y científica, se 
podría decir, que son los menos peligrosos, puesto que “sus niveles de 
radiactividad se pierden en un lapso de horas a unas cuantas semanas”.12 Los 
de clase B, pueden llevar de “unas semanas a algunas décadas en perder su 
radiactividad y llegar a ser estables en 300 años, …por último los de la clase C, 
se pueden tardar hasta 500 años en estabilizarse”13o más. 
 
De esta manera se puede apreciar que la energía nuclear es usada en infinidad 
de actividades y el volumen de los residuos que se producen es elevado por su 
misma diversidad, aun cuando las cantidades de radiactividad contenida puedan 
variar. Lo que estudiaremos en este trabajo no es el uso mismo de la energía 
nuclear, sino los residuos derivados de su uso y el destino que tienen. 
 
11 U.S Environmental Protection Agency ;http://www.epa.gov/radiation/docs/radwaste op.cit. 
12 USCEA. US. Council for Energy Awareness. What do you know about Low-Level…, op.cit, p.9. 
13 Idem. 
 9
Las diferentes vías de eliminación, que se han llevado a cabo por los países 
generadores de los residuos, se abordarán en el capítulo siguiente, tomando en 
cuenta que la responsabilidad que tienen dichos países de evitar cualquier 
alteración al ambiente dentro como afuera de sus fronteras es determinante, de 
ahí que surjan diferentes acuerdos de cooperación para evitar desastres 
naturales y humanos. 
 
A continuación, anexamos un cuadro en donde se mencionan algunos de los 
materiales radiactivos que generan desechos de baja intensidad, se puede 
apreciar la diversidad de los campos de aplicación los cuales son definitivamente 
benéficos, pero cabe destacar también la gran diferencia en la vida media 
promedio que pueden tener algunos de ellos, por ejemplo: el “Hierro 55 es de 2.6 
años de vida media, el Cobalto 60 es de 5.3 años, el tritio es de 12.3 años, el 
Níquel 63 es de 100 años, el tecnecio 99 es de 213,000 años y por último el 
Yodo 129 es de 16,000,000 años”.14 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
14 Comisión de Texas para la disposición de desperdicios de bajo nivel radioactivo, Radiación emitida por el desperdicio 
de bajo nivel radioactivo, Folleto, junio,1993, p. 1. 
 10
Cuadro 1 
 
Material 
Radioactivo 
Utilización 
Cesio 157 Se utiliza en el tratamiento de cánceres; en la medición y control de los 
fluidos en los gaseoductos y en el llenado correcto de los paquetes de 
alimentos, medicinas y otros productos. 
Cromo 51 Se usa para el estudio de células sanas. 
Cobalto 60 Se emplea en la esterilización de instrumentos quirúrgicos y para 
preservar a las aves de corral, frutas y especies. 
Cobre 67 Se inyecta con anticuerpos a los pacientes con cáncer y ayuda a detener 
a los anticuerpos y destruir el tumor. 
Curio 244 Se utiliza en laminería, para examinar los materiales excavados. 
Yodo 123 Sirve para diagnosticar problemas de tiroides. 
Yodo 129 Se emplea para checar el conteo radiactivo, en pruebas in vitro de 
laboratorios. 
Iridio 192 Se emplea en las pruebas de seguridad en las soldaduras de 
gaseoductos, calderas y en pastes de aeronaves. 
Kriptón 85 Se usa en indicadores de luz, en aparatos como lavadoras, secadoras; 
estéreos, cafeteras, para medir los niveles de contaminación, entre otros.
Níquel 63 Se utiliza en la detención de explosivos y en los reguladores de 
corriente para proteger los aparatos electrónicos de descargas. 
Fósforo 32 Se emplea en la biología molecular y en las investigaciones genéticas. 
Plutonio 238 Ha dado potencia de manera segura a por lo menos 20 naves 
espaciales. 
Polonio 210 Reduce la carga estática en la producción de filmes y grabaciones 
fotográficas. 
Prometio 147 Se usa en la cubierta de los termostatos eléctricos y para medir el grosor 
del plástico delgado, y las hojas de metal, goma, textiles y papel. 
Radio 226 Hace el alumbrado de las calles más efectivo. 
Sodio 24 Es usado para localizar las fugas en gaseoductos industriales y en los 
estudios de los pozos petroleros. 
Estroncio 85 Se utiliza en el estudio en la formación de huesos y el metabolismo. 
Tecnecio 99m Este isótopo, es utilizado para los estudios y diagnósticos en la medicina 
nuclear. 
Tungsteno Es usado en las soldaduras eléctricas, en la construcción de naves 
espaciales y en el procesamiento de petroquímicos y alimentos 
Uranio 234 Es usado en la instalación de coronas dentales y para darle color y 
brillantez natural a los dientes. 
Uranio 235 Es el combustible para las plantas nucleares y los sistemas de 
propulsión navales; también se utiliza en la cristalería fluorescente y en 
gran variedad de colores de barnices. 
Xenón 133 Se utiliza en la medicina nuclear para ventilar los pulmones y en los 
estudios de la circulación de la sangre. 
U.S Council for Energy Awareness, Why do we need Radioactive Materials? February 1994. 
 
 
 
 11
1.2. Vías de eliminación-los confinamientos. 
 
La preocupación de la comunidad internacional por garantizar el manejo seguro y 
confiable tanto del uso de la energía nuclear como de los desechos que se 
producen, se ha convertido en una de las principales inquietudes de los países 
generadores. De ahí que se busquen alternativas que no provoquen daños 
ambientales. 
 
Se presentarán las formas más comunes de eliminación que se han llevado a 
cabo, y determinaremos qué tan seguras han resultado en su control. 
 
Anteriormente, los residuos eran vertidos en grandes bloques en los océanos, lo 
cual fue quedando en desuso, debido a que una vez en el mar, era casi imposible 
su control; aunado al poco conocimiento que se tenía con “respecto a las 
corrientes oceánicas y para poder predecir el destino de los desechos”.15Se 
estableció de esta manera, la Convención de Naciones Unidas sobre la 
prevención de la contaminación del mar por vertimiento de desechos y otras 
materias, en 1972. Dicha Convención fue ratificada por Estados Unidos hasta 
1993. 
 
Otra opción que se ha llevado a cabo y sigue siendo la mas común, es la de 
construir instalaciones para su almacenamiento o enterrarlos en los sitios donde 
fueron producidos. Como sucede en las centrales nucleares (con los desechos 
radiactivos de alto nivel) o en su defecto, en sitios fuera de donde se originaron 
(como, en el caso de los desechos de bajo nivel). 
 
Sin embargo, “la demanda de espacio para el almacenamiento, crece 
continuamente y existe el riesgo constante de que se produzcan escapes”16, lo 
que está dando lugar también al movimiento transfronterizo de los desechos, a 
 
15 Glasstone, Samuel y Alexander Sesonske, Ingeniería de reactores nucleares, editorial Reverte, Barcelona, 1968, p. 
557. 
16 Ibidem. 
 12
países que no cuentan con la infraestructura adecuada para su manejo. Aun así, 
es la práctica más socorrida y económica que existe hasta el momento. Cabe 
mencionar que también se utiliza la incineración de ciertos desechos, ya que gran 
parte de ellos “son combustibles derivados de la energía nuclear, lo que permite 
que tales desechos puedan ser incinerados y así alcanzar una reducción 
considerable del volumen original, facilitando su disposición final”.17
 
Ahora bien, los confinamientos deben ser construidos en zonas geológicamente 
estables, cuyas características sean una protección natural para evitar filtraciones 
al medio ambiente; además debe considerarse los impactos socioeconómicos del 
lugar y la normatividad que cada país tiene con respecto al almacenamiento de los 
residuos. 
 
Para la adecuada selección de un sitio es necesario tomar en cuenta los 
siguientes factores: 
• “La características físico-naturales-estructura y estabilidad geológica, 
sismicidad, permeabilidad de los suelos, hidrología superficial y 
subterránea, régimen climático, flora y fauna local, etcétera. 
• La proximidad de zonas urbanas y los sistemas de enlace. 
• La compatibilidad de la actividad con los usos del suelo de la zona. 
• La aplicación de tecnologías de diseño, procedimientos operativos y 
medidas adicionales de seguridad, que garanticen actividades 
ambientalmente seguras”.18 
 
Una vez hechos los estudio de la zona y se autorice su construcción, es 
indispensable demostrar que el “riesgo e impacto ambiental, … satisfagan la 
compatibilidad del sitio con el proyecto”19, de esta manera reducir la oposición de 
la sociedad en este tipo de instalaciones, confiando en su seguridad . 
 
17 Secretaria de Energía, NOM-020-NUCL-1995, http://www.energia.gob.mx, 05/05/2006. 
18Rogelio González García, Infraestructura y alternativas tecnológicas de manejo, en INE. 
http://www.ine.gob.mx/ueajei/publicaciones/libros/35/infraestructura.html, 17/06/2006. 
19 Ibidem. 
 13
Para ello es necesario mantener un control y monitoreo de los confinamientos, 
durante largos periodos, pues representan un peligro constante, debido a la larga 
vida de los residuos depositados, “ya que no existe aun la vía de recuperación o 
destrucción total de los materiales y siempre habrá un remanente que requiere 
tratamiento, o bien, será necesaria la disposición conveniente para nulificar su 
potencial de afectación al ambiente”.20
 
En el caso del confinamiento de desechos radiactivos de bajo nivel, en Sierra 
Blanca los factores anteriormente mencionados, fueron determinantes para su 
cancelación, como se verá en el desarrollo del mismo en el capítulo 2. 
 
Es importante mencionar que dichos desechos deben estar en estado sólido para 
su confinamiento, de otra forma se correría el riesgo de que los gases o líquidos 
contenidos se filtren con mayor facilidad al ambiente. 
 
Hasta el momento los países generadores no han encontrado alguna otra forma 
de eliminación menos costosa, en la que se agote la radiactividad contenida, o en 
su defecto se reutilicen hasta dejar una mínima cantidad de sus propiedades 
peligrosas. 
 
En este sentido, podemos mencionar algunos países como Francia, que han 
contribuido en la búsqueda de alternativas de eliminación, en cooperación con la 
empresa estatal antes llamada “Compañía General de Materiales Nucleares”, 
COGEMA ahora AREVA, quienes han realizado “estudios e investigaciones 
especificas en materia de protección del medio ambiente, en particular en lo que 
se refiere a los procedimientos de retratamiento del combustible y la reducción de 
la radiactividad a largo plazo de los residuos almacenados”21, en lo que respecta 
al menos a los desechos de alto nivel, se podría esperar que se extienda a los de 
bajo nivel. 
 
20 Rogelio González García, Infraestructura en…http://www.ine.gob.mx/ueajei/publicaciones/libros/35/infraestructura.html, 
17/06/200621 “Desarrollo sustentable y medio ambiente”, Francia. Tecnología de avanzada y “savoir-faire”, Ministerio de Industria, 
Correos y Telecomunicaciones y el Ministerio de Medio Ambiente de Francia, p. 26. 
 14
Finalmente se busca, en todo caso que los desechos sean almacenados en los 
países que los producen y no afecte a los Estados vecinos, y conforme a lo 
establecido en la Agenda 2122 en su capítulo 22, se busca la armonización de 
políticas conjuntas entre los países para su manejo adecuado, basándose en la 
cooperación internacional. En el caso de la Unión Europea, ha dado como 
resultado un Plan de Acción, sobre le manejo de los desechos radiactivos, en el 
que “se ha trabajado en temas relacionados al manejo de desechos mixtos 
radiactivos y tóxicos, minimización de los desechos, en el reuso y reciclaje del 
material radiactivo en el sector nuclear y métodos de financiamiento para el 
manejo y disposición de los desechos”.23
 
A continuación, mencionaremos, los principales países productores de desechos y 
cómo han enfrentado la problemática de eliminación de los desechos y los 
resultados hasta el momento. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
22 El Programa Agenda 21, fue uno de los acuerdos aprobados en la Conferencia sobre Medio Ambiente y Desarrollo de 
las Naciones Unidas, celebrada en de Río de Janeiro en 1992, dando como resultado un Plan de Acción en diversos 
temas ambientales, incluyendo a los desechos radiactivos. 
23 European Commission. Agenda 21: The first five years-European Community progress on the implementation of 
agenda 21-1992-97, Luxemburg,1997, p.108 
 15
1.3. Principales países productores. 
 
El uso de la energía nuclear, como hemos visto anteriormente es muy variado y 
cualquier país que la utilice para un fin determinado, produce desechos, sin 
embargo, su principal fuente son las centrales nucleares, ya que alrededor de un 
80% provienen de ahí, tanto los de alto y bajo nivel radiactivo, lo que nos sirve de 
parámetro para determinar quiénes son los principales productores. 
 
Entre los países que encabezan la lista son: Estados Unidos con 104 núcleo 
eléctricas, Francia con 59, Japón con 57 y Rusia con 31 instalaciones (ver 
cuadro.2) en la primer columna se menciona el país, en la segunda columna la 
cantidad de centrales nucleares y en la tercera la potencia eléctrica neta). 
 
Cabe mencionar que estos desechos industriales, son clasificados por miembros 
de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) como 
parte de los desechos industriales, no peligrosos, clasificación de por si engañosa 
pero no tenemos una base por la cual considerarlos de esa forma. Lo que si es un 
hecho es que no se incluyen en ningún acuerdo internacional sobre el manejo y 
almacenamiento de desechos peligrosos. 
 
Para ejemplificar, de forma general el estado en que se encuentra el problema que 
estamos abordando y las acciones que han llevado cabo los países que producen 
el mayor volumen de los desechos, citaremos a grandes rasgos, el caso de los 
Estados Unidos, Francia y Rusia. 
 
En Estados Unidos se generaron en 1998, alrededor de 1,419 pies cúbicos de 
desechos radiactivos de bajo nivel, (ver Gráfica 1) lo que significó un repunte 
considerable frente años anteriores. En 1985, se generaron 2,681 pies cúbicos de 
residuos y llegó a su nivel mínimo en 1997 con 319 pies cúbicos. Sin embargo, 
tuvo un repunte de más de mil pies cúbicos al año siguiente. Estas cifras son 
oficiales y sólo hay datos hasta 1998. 
 16
Cuadro 2 
 
Centrales Nucleares
EN EL MUNDO 
Centrales Nucleares en el mundo en el 2005 
PAÍS UNID MW (net) 
1. Estados Unidos 104 99.210 
2. Francia 59 63.363 
3. Japón 57 47.839 
4. Rusia 31 21.743 
5. Alemania 17 20.339 
6. R. Corea 20 16.810 
Fuente: Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA)-dic 2005, 
 http://www.mityc.es/Nuclear/Seccion/Centrales/Mundo/, 06/17/2006. 
 
 
Lo anterior ha provocado mayor demanda de instalaciones de almacenamiento, 
actualmente están trabajando 3 confinamientos (ver Mapa 1), el de Barnwell, 
ubicado en el Sur de Carolina, Handford, en Washington y Envirocare, ubicado en 
Utah, y han cerrado cinco de ellos, debido a escapes y filtraciones de 
radiactividad, dentro del mismo confinamiento, en unos casos, y en otros por 
saturación de los espacios. Para ello la Unión Americana está seleccionando 
posibles sitios para la construcción de nuevos depósitos. 
La tendencia, para los próximos años es la construcción de más confinamientos, 
que alberguen los residuos de varios Estados de la Unión Americana, llamados 
regionales, con un monitoreo no mayor a los 100 años, aun cuando el período que 
 17
Gráfica 1 
 
Fuente: DOE 1998 State by State Assessment of Low Level Radiactive Waste Received at Commecial Disposal Sote 
(DOE/LLW 252, pàg. A2 http://www.ncr.gov/waste/llw-disposal/compacts.html, 04/06/2006. 
 
 
Mapa 1 
 
Fuente: http:www.ncr.gov/waste/llw-disposal/locatrions.html, 04/06/2006. 
 
 18
requieren los desechos radiactivos para recuperar sus niveles de estabilidad tome 
os últimos datos que se tiene sobre el volumen de los desechos radioactivos de 
stas enormes cantidades de residuos producidos provienen principalmente de las 
rancia por su parte, es uno de los principales proveedores de uranio enriquecido 
unque no se tienen disponibles registros sobre el volumen que producen de 
 
más tiempo. 
 
L
bajo nivel no provienen de la Secretaría de Energía de los Estados Unidos 
(Department of Energy, DOE, por sus siglas en inglés) sino de la oficina 
Gubernamental sobre Responsabilidades debido a “que la base de datos del 
gobierno no está actualizada y tiene otras deficiencias (que no permiten el acceso 
a la información) a través de esta oficina se menciona, que el volumen de los 
desechos radioactivos ha aumentado del período comprendido de 1999 al 2003 en 
12 millones de pies cúbicos, que equivale a un 200 por ciento”.24
 
E
plantas nucleares y de las instalaciones, que ha descontaminado la DOE, en 
comparación con México que cuenta con una planta nuclear. De acuerdo con el 
artículo 27 constitucional, nuestro país sólo puede utilizar la energía nuclear con 
fines pacíficos, lo cual nos muestra la enorme diferencia que existe entre uno y 
otro país en cuanto al manejo, control y eliminación de los desechos, y se ve 
implícitamente reflejado en el desarrollo del proyecto Sierra Blanca. 
 
F
a nivel mundial; en conjunto con la empresa estatal francesa AREVA, “suministra a 
las plantas nucleares a nivel mundial de casi la mitad de uranio que utilizan, desde 
sus minas ubicadas en Canadá, Estados Unidos, Níger, Senegal, Gabón, Australia 
y Francia”.25 
 
A
desechos radiactivos, las innovaciones que han llevado a cabo para reducir la 
 
24 Robin. M. Nazzaro, “Low Level Radioactive Wastes. Future Wastes Volumes and Disposal Options are Uncertain”, 
GAO`s, June 2004, Report, p. 20. 
25 OECD, Nuclear Legislation in OCDE Countries. Regulatory and Institutional Framework for Nuclear Activities. 
France, OCDE, France, 2003. p. 5. 
 19
cantidad de radiactividad a través de su reutilización es importante, pues puede 
llegar a ser hasta de un 50 por ciento. 
 
Francia también ha recurrido a la construcción de confinamientos para almacenar 
dichos residuos, y los divide de la siguiente manera: Instalaciones Nucleares 
Principales, Instalaciones Nucleares Principales Secretas y las Instalaciones 
Nucleares Clasificadas para la Protección del Medio Ambiente. Además se puso 
en operación en “agosto del 2003, el primer confinamiento a nivel mundial de 
desechos radiactivos de muy bajo nivel”.26
 
Por otro lado, en Rusia se tiene registrado, de acuerdo con un estudio realizado 
por la OCDE, de la cual no forma parte este país, una cantidad aproximada de 
residuosgenerados “de mil millones de toneladas de desechos radiactivos de alto 
y bajo nivel, de las cuales 1,000 toneladas del combustible consumido, es 
almacenado en confinamientos,… los cuales se reportan están casi llenos, o en 
algunos casos excede su capacidad”.27
 
La mayor parte de estos residuos pertenecen a los de bajo nivel, ocupando 
“aproximadamente 60,000 hectáreas para las operaciones de almacenamiento. Se 
estiman que unos 66 confinamientos están en operación, de los cuales 16 son 
especializados y se localizan en áreas urbanas y populares”.28
 
Existen dos sitios de reprocesamiento subterráneos militares (Omsk y 
Cheliabinsk), los cuales son altamente contaminantes, y han ocasionado 2 
accidentes industriales además de que han incurrido en prácticas indebidas, sin 
olvidar el caso de Chernobyl, que contaminó gran parte de Rusia. 
 
Para el manejo de este tipo de desechos se adoptaron en Rusia los siguientes 
objetivos: 1)“reducción de los impactos ambientales y la exposición a niveles 
 
26 OECD, Nuclear Legislation in OCDE Countries. Regulatory and Institutional,… op.cit, p. 5. 
27 OECD, Environmental Performance Reviews Russian Federation, OECD, París, 1999, p. 92. 
28 Ibidem, p.93. 
 20
asociados con materiales nucleares y desechos radiactivos, 2) aumentar la 
seguridad, 3) reducir los riesgos en emergencias y 4) responder a las 
preocupaciones sociales. La política está basada en el Programa Federal sobre el 
manejo de los desechos radiactivos y el uso de materiales Nucleares, adoptada en 
el período 1996-2005”.29
 
Como se puede apreciar, las unidades de medición utilizadas en el caso de Rusia 
son en toneladas, que es el peso físico de los residuos acumulados y en el caso 
de los Estados Unidos, se presentan en metros cúbicos, es decir el volumen, por 
lo que no podríamos hacer una comparación entre ambos países. Sin embargo 
esto depende de las fuentes de información que se consultaron, ya que no hay 
una medición homogénea. Otra de las cuestiones que caben resaltar es que no se 
tiene acceso a registros exactos, sino sólo a cifras aproximadas no actualizadas. 
 
Ante esta situación aparece el proyecto Sierra Blanca, que analizaremos con más 
detalle en el siguiente capítulo y da a conocer de manera palpable la situación que 
enfrenta el principal productor de residuos radiactivos a nivel mundial, y el 
contexto político y social en el que se lleva a cabo. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
29 OECD, Environmental Performance Reviews Russian…, op.cit, p. 95 
 21
CAPÍTULO 2 
 
2. Proyecto Sierra Blanca. El almacenamiento de los residuos de bajo nivel 
en Estados Unidos. 
 
En este apartado se estudiará el proyecto de confinamiento localizado en Sierra 
Blanca, Estados Unidos, el cual surge como una respuesta a las reformas 
realizadas a la legislación estadounidense que descentraliza el manejo y 
eliminación de los desechos radiactivos de bajo nivel a cada Estado, con la opción 
de crear acuerdos o pactos entre ellos para el almacenamiento de los desechos. 
 
Antes esta situación el estado de Texas comenzó con la búsqueda de un lugar 
que cumpliera con los requisitos para la construcción del confinamiento, y después 
de varios intentos fallidos se selecciona el un lugar al sur de dicha entidad en 1992 
llamada Sierra Blanca, a partir de ese momento, se generan una serie de 
complicaciones que rebasan las fronteras de Estados Unidos, debido a que el 
proyecto estaría dentro de la zona fronteriza de los 100km con México y estaría 
recibiendo posteriormente los residuos de todo el país, generando un ambiente de 
inestabilidad política entre ambos países, que finalmente dió paso a la cancelación 
del proyecto como se verá a continuación. 
 
 
2.1. Antecedentes. 
 
La necesidad de almacenar los desechos radiactivos en los Estados Unidos, se 
intensifica a finales de la década de los años setenta y principios de los años 
ochenta, cuando los niveles de residuos generados comenzaron a tener 
volúmenes importantes (de alrededor de dos mil pies cúbicos por año, como se vio 
en el capítulo anterior); de esta manera se adoptó un marco jurídico que fue 
tomando forma en los años siguientes, con el fin de regular el manejo y 
disposición final de los desechos radiactivos. 
 22
La primera iniciativa en materia nuclear en los Estados Unidos, data del año de 
1954 al promulgarse el Acta de Energía Atómica, de la cual se creó la Comisión de 
Energía Atómica, que fue una agencia independiente “con el objetivo de 
supervisar el manejo de la energía nuclear con fines pacíficos; posteriormente fue 
abolida y en su lugar se creó la Comisión Nuclear Reguladora (Nuclear Regulatory 
Commission, NCR por sus siglas en inglés) en 1974. En 1970 se crea la Agencia 
para la Protección del Medio Ambiente (Environmental Protection Agency, EPA 
por sus siglas en inglés) y finalmente en 1977, se establece el Departamento de 
Energía (Department of Energy, DOE por sus siglas en ingles)”.30
 
La responsabilidad en esta materia era exclusiva del gobierno federal, pero como 
veremos más adelante se fue reformando, en especial en el rubro de los desechos 
de bajo nivel el cual se fue descentralizando del poder federal al estatal. Sin 
embargo, es importante mencionar a grandes rasgos las principales funciones de 
las instancias federales creadas con este fin. 
La NCR es la autoridad encargada de otorgar las licencias para la construcción y 
operación de las plantas nucleares, así como de supervisar “la disposición de 
material nuclear en el mar o en los océanos; de la transferencia, almacenamiento 
o disposición de los desechos radiactivos”31, tanto de alto como de bajo nivel. 
 
De hecho después de su creación, en 1979, hubo un accidente en la planta 
nuclear de la Isla de Tres Millas, la cual de acuerdo con la información oficial “no 
reveló una exposición grave de radiación, pero si reveló que se necesitaba un plan 
de emergencia más efectiva”32, por parte de esta instancia. 
 
En cuanto a la supervisión de las instalaciones de almacenamiento de residuos de 
bajo nivel, la Comisión Nuclear Reguladora divide su control en dos etapas: “la 
 
30OECD, Nuclear Legislation in OCDE Countries. Regulatory and Institutional Framework for Nuclear Activities. 
United States. OCDE, France, 1999, p. 7. 
 
31 OECD, Nuclear Legislation in OCDE Countries. Regulatory and Institutional Framework for Nuclear Activities. 
United States, OCDE, France, 1999, p. 10. 
32 Ibidem, p. 15. 
 23
operacional y la post-operacional (pre-clausura o post-clausura del sitio); con el 
objetivo de proteger a los individuos contra la exposición inadvertida de radiación; 
además de proteger al público en general de los escapes al medio ambiente y 
mantener la estabilidad del sitio donde se encuentra el confinamiento”.33 
 
Por su parte la Agencia de Protección Ambiental (EPA), es la encargada de crear 
los estándares y definir los límites de radiación que puede percibir el cuerpo 
humano, a través de programas de protección, con el fin de minimizar los riesgos 
e informando a la población en general sobre este tema. 
 
El Departamento de Energía, a grandes rasgos, tiene la responsabilidad de dirigir 
los avances tecnológicos y programas para el manejo, tratamiento, 
almacenamiento y confinamiento del combustible nuclear gastado, los desechos 
de alto nivel y todos los desechos generados en el área militar. 
 
De esta manera, se delegan responsabilidades en cuanto al manejo y control de la 
energía nuclear en las diferentes entidades gubernamentales, que van desde la 
supervisión, autorizaciones y permisos para cualquier actividad que utilice energía 
nuclear. 
 
En consecuencia se adoptó la siguiente legislación: 
 
 Ley sobre el Control de Sustancias Tóxicas (Aprobada en 1975)Ley Conjunta sobre Intervenciones, Indemnización y 
Responsabilidad Ambiental (Comprehensive Environmental 
Response, Compesation, and Liability Act, CERCLA por sus siglas 
en inglés,). (Aprobada en 1980) 
 Acta sobre Residuos de Bajo Nivel. (Aprobada en 1980) 
 Ley sobre el Cumplimiento de las Instalaciones Federales. 
(Aprobada en 1992) 
 
33 Ibidem, p. 22. 
 24
En el periodo comprendido de 1981 a 1985 el acta de desechos radiactivos de 
bajo nivel, es reformada substancialmente, delegándose en primer lugar las 
responsabilidades del manejo, control y almacenamiento de los desechos a cada 
uno de los Estados de la Unión Americana, con aprobación del Gobierno Federal y 
se considera convertir los confinamientos de locales a regionales. 
 
De esta manera se establece, que “cada Estado es responsable de la disposición 
de los desechos radiactivos de bajo nivel generados dentro de sus fronteras, con 
excepción de los generados por el Departamento de Energía, por la Marina de los 
Estados Unidos y el gobierno federal… invita a los Estados en un futuro a crear 
acuerdos entre ellos... para el establecimiento y operación de instalaciones 
regionales”.34 Esta idea que se comenzó a materializar con la construcción de tres 
confinamientos regionales en: Barnwell, Carolina del Sur, Richland, Washington y 
Betty en Nevada. 
 
Con el fin de reducir riesgos y costos que ocasiona el crear instalaciones de 
tratamiento y disposición de los desechos, el Congreso estadounidense, a finales 
de los años ochenta estudió la posibilidad de llevar a cabo otros 10 proyectos de 
confinamientos que comprenderían a 44 Estados de la Unión Americana, entre 
ellos… se proponía un sitio en el Estado de Texas llamado “Sierra Blanca”, a unos 
escasos 30 km de Cd. Juárez, México; y que en un principio albergaría solo los 
residuos de los Estados de Texas, Maine y Vermont, y posteriormente de toda la 
Unión Americana; éste último fue seleccionado oficialmente para su construcción 
en 1998. 
 
Ahora bien, como respuesta a la reforma hecha al acta de residuos de bajo nivel, 
se crea en el Estado de Texas, en 1981 la Autoridad para el Manejo de Desechos 
Radiactivos de Bajo Nivel de Texas (Texas Low Level Radioactive Wastes 
Disposal Authorithy, TLLRWDA, por sus siglas en inglés) encargada de 
seleccionar los sitios viables para el confinamiento de los residuos en la entidad. 
 
34 OECD. Nuclear Legislation in OCDE Countries. Regulatory and Institutional Framework for Nuclear Activities. 
United States…, op. Cit, p. 21. 
 25
A partir de ese momento comienza la búsqueda por parte del Estado de Texas, de 
localizar los lugares idóneos para la construcción de confinamientos, que 
cubrieran las características favorables, los cuales se encontraban en la región sur 
de dicha entidad. 
 
En 1985 el Condado de Mc Mullen propuso la construcción de un confinamiento a 
aproximadamente 70 millas de San Antonio, el cual no se llevó a cabo, debido a 
que en esos momentos la legislatura de Texas reformó los estatutos de la 
Comisión para establecer que los terrenos propuestos fueran propiedad del 
Estado. De esta manera se evaluaron dos sitios más en el Condado de Huspeth. 
 
“En 1987 la Comisión designó un sitio localizado a 11 millas al noreste de una 
zona llamada Fort Hancock”35en el Condado de Huspeth, comenzando los 
estudios relativos a la instalación del proyecto, sin embargo, éste se detuvo, 
debido a la presión ejercida por los representantes de comunidades vecinas y el 
Condado de El Paso, quienes “consiguieron un amparo provisional ante la Corte 
de Distrito del El Paso, el cual fue revocado por la Corte Superior y la Comisión 
continuó su trabajo a finales de 1987”.36
 
El financiamiento corrió por parte del estado de Texas y fue de “1.8 millones de 
dólares, invertidos en investigaciones que analizaban con detalle la hidrología, 
geología, metereología, topografía, y arqueología de la zona y áreas 
circunvecinas”37, que debían aprovechar hasta 1989, año en que se tenía 
programado finalizar su construcción. 
 
Posteriormente después de varios intentos por parte de la Comisión para llevar a 
cabo el proyecto, los oficiales del Condado de El Paso llevaron contra la Comisión 
 
35 Comisión de Texas para la Disposición de Desperdicios de Bajo Nivel Radiactivo. Breve Historia de la Comisión. 
Estado de Texas. p. 5/94 
36 Comisión de Texas para la Disposición de Desperdicios de Bajo Nivel Radiactivo. Breve Historia de la Comisión. 
Estado de Texas. P. 5/94 
37 Ibidem. 
 26
un proceso legal, que finalmente falló a favor de las autoridades del El Paso 
cancelándose el proyecto en enero de 1991. 
 
De ahí (de acuerdo con la Comisión de Texas para la Disposición de Desperdicios 
de Bajo Nivel Radiactivo) se comenzó la búsqueda de otro sitio, a partir de la 
resolución emitida el 2 de abril de 1991, por parte del Consejo de Administración 
de la Comisión, sin embargo, esto implicaba más gastos económicos por parte del 
Estado, ocasionando que la Comisión no pudiera cumplir con los plazos fijados por 
los estatutos federales, para la elección de un sitio y el funcionamiento que 
requeriría la instalación. 
 
Para ello la Legislatura de Texas reformó nuevamente el 26 de mayo de 1991 la 
ley local para: “(1) designar una área a unas 30 millas del sudeste de Fort 
Hancock en los alrededores de Sierra Blanca para el sitio propuesto y (2) permitir 
que el Estado de Texas estableciera un pacto con otros estados para recibir sus 
desperdicios de bajo nivel radiactivo y colocarlos en dicho sitio. El lugar propuesto 
fue en el Condado de Huspeth, en una zona conocida localmente como “Faskin 
Ranch” (Rancho Faskin), el cual sin embargo, era una propiedad privada que 
adquiere el gobierno de Texas a través de la TLLRWDA y en marzo de 1992, la 
TLLRWDA inicia el proceso de solicitud de licencia ante la Comisión de 
Conservación de Recursos Naturales de Texas (Texas Natural Resource 
Conservation Commission, TNRCC por sus siglas en inglés).”.38
 
A partir de ese momento las reacciones de la población no tardaron en hacerse 
escuchar y rechazaron nuevamente esta propuesta; aunado a esto se 
desarrollaron un serie de factores que dificultaron la instalación del confinamiento, 
que si bien respondía a la urgencia del Gobierno de Texas por determinar un sitio, 
se complicó cada vez más cuando la movilización de la sociedad civil se extendió 
hasta nuestras fronteras para impedir que la instalación afectara a las 
comunidades y el territorio de México, como se verá en los siguientes capítulos. 
 
38 Ibidem. 
 27
2.2. Localización y situación geográfica de la zona. 
 
El proyecto de confinamiento de desechos radiactivos de bajo nivel, se localiza en 
el Rancho Faskin, ubicado en el Condado de Hudspeth, en la localidad de Sierra 
Blanca, Texas; a unos 145 km, al este de la ciudad del El Paso y a unos 30 km al 
noreste de la frontera internacional con México. 39 (ver Mapa 2) 
Mapa 2 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Fuente: http://www.microsoft/streets, Copyright 2004 by TeleAtlas North America. Inc., 05/11/2006. 
Austin Texas. TLLRWDA 
 
El confinamiento estaba destinado para almacenar “en un foso de 227 metros de 
largo por 175 de ancho y 30 de profundidad cinco millones 300 mil metros cúbicos 
 
39 Comisión Nacional del Agua, Dictamen técnico relativo al proyecto de confinamiento de residuos radiactivos de 
bajo nivel en la localidad de Sierra Blanca, en Texas, Estados Unidos, Resumen Ejecutiv, Anexo 1, p. 8. 
 28
de desechos radiactivos”40 (ver Mapa 3 y 4 ) ubicado en una localidad considerada 
con importante actividad sísmica que podría aumentar los riesgos de alguna 
fracturaen la instalación y contaminar el ambiente de la zona, que afectaría a su 
paso los afluentes que existe debajo del sitio y llegar en el peor de los casos al Río 
Bravo. 
Mapa 3 
 
Fuente: The Texas Low Level Radioactive Waste Disposal Authority. TLLRWDA, Austin, Texas. TLLRWDA 
 
La región de Sierra Blanca de acuerdo con la información del Programa 
Frontera XXI de 1996, forma parte del desierto de Chihuahua, el cual tiene un 
ecosistema árido y semiárido, formado principalmente por arbustos o pastos 
pequeños, que sirven para alimentar el ganado local, cuenta con algunas 
montañas aisladas (Chisos y Guadalupe en Estados Unidos, y Sierra Rica en 
México). Los principales ríos de la zona son el Bravo, Pecos y Conchos. Así 
mismo existe una diversidad de afluentes subterráneas. 
 
 
40 Reuters,”Sierra blanca: no al basurero… por ahora. Época, 26 de octubre, 1998, p.4. 
 29
Mapa 4 
 
 
Fuente: The Texas Low –Level Radiactive Waste Disposal Authority, Austin, Texas. TLLRWDA. 
 
 
 
 30
Cabe mencionar, que existía ya la preocupación en las comunidades texanas por 
“la contaminación potencial derivada de un nuevo oleoducto en Lakeside y por un 
sitio de confinamiento de material de bajo niveles radiactivos, en el Condado de 
Huspeth”.41
 
El Condado, en 1998 tenía una población aproximada, “de 600 habitantes, de los 
cuales el 66 por ciento es de origen mexicano, y tiene una área superior a 120 mil 
metros cuadrados”42, son zonas que están aisladas y con poca población y están 
siendo seleccionadas para la construcción de confinamientos, pues se 
consideraría que no representan oposición alguna. 
 
Al contrario, posiblemente por las condiciones de marginación en las que se 
encontraban las comunidades en la zona fronteriza en ese momento, hubieran 
visto con agrado la instalación del confinamiento. Entre los beneficios económicos 
que hubieran obtenido, serían los diversos servicios públicos como la instalación 
de “un sistema de desagüe de aguas negras un equipo antiincendios, clínicas de 
salud, bibliotecas, áreas de recreación”43, que no son sólo necesarias sino 
indispensables y no se tenía acceso a ellas. 
 
Aun así el confinamiento se considera más como un peligro que como un 
beneficio, ya que es un riesgo potencial en caso de algún accidente, y los costos 
por perdidas humanas y contaminación del ambiente serían muy elevados. 
 
De acuerdo con el Programa Frontera XXI, la situación de la población en la zona, 
se describe de la siguiente manera: “muchos asentamientos irregulares están 
localizados en antiguas tierras agrícolas, bajo la jurisdicción de la Oficina de 
Reclamaciones (Buerau of Reclamation), particularmente en el Valle Bajo de El 
Paso… a estos asentamientos se le han vendido tierras sin infraestructura urbana 
 
41 SEMARNAP, Programa Frontera XXI, México, 1996, p. VI.3. 
42 Carlos Benavides, “Al olvido, el acuerdo ambiental de 1983” El Financiero, Secc. Internacional, 7 de septiembre, 1998, 
p.48. 
43 TLLRWDA. Public Information Notice. Programe Update, september, 1994. 
 31
apropiada, como servicios sanitarios y de agua potable, de la que se proveen 
profundidad,…las aguas residuales son depositadas en pozos o fosas sépticas o 
en el mismo campo. Con el tiempo las fosas sépticas han contaminado el agua 
subterránea que se utiliza como fuente de abastecimiento”.44
 
También la contaminación del aire en Texas y Nuevo México no cumple con los 
estándares de calidad del aire de los Estados Unidos, mientras que en México, no 
existe una guía que determine la falta de cumplimiento de las normas de calidad 
del aire en Cd. Juárez, pero se puede deducir que tiene una situación similar o 
peor. 
 
En estas condiciones sería alarmante si llegará a ocurrir alguna filtración de 
radiactividad al agua, suelo o al aire, el contacto con la población seria fatal y 
posiblemente por esta misma desorganización, marginación y pobreza de los 
asentamientos humanos no se detectaría a tiempo cualquier filtración al ambiente. 
 
En este contexto, se elige a Sierra Blanca para la instalación del confinamiento. A 
continuación analizaremos su desarrollo. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
44 Programa Frontera XXI, SEMARNAP, México 1996, p. VI.5. 
 32
2.3. Desarrollo del proyecto y su cancelación. 
 
El proceso que se llevó a cabo, por parte de las instancias gubernamentales del 
estado de Texas para la autorización del confinamiento, empezó a materializarse 
cuando la Comisión de Texas para la Disposición de Desperdicios de Bajo Nivel 
Radiactivo, finaliza la compra de 400 millas cuadradas (600 hectáreas 
aproximadas) de terreno en la localidad del Rancho Faskin, Sierra Blanca en mayo 
de 1992. En ese momento el proyecto empieza a ser del dominio público. 
 
De esta manera la TNRCC, quien es la autoridad encargada de otorgar la licencia 
para la construcción del confinamiento, considera que la solicitud hecha por la 
TLLRWDA está completa y en 1995 da luz verde para comenzar con los estudios 
para la instalación del confinamiento. 
 
Considerando que Texas no tiene un confinamiento propio, ya que mandaba sus 
desechos radiactivos al confinamiento de Barnwell, CA, las autoridades texanas se 
vieron presionadas, debido a que esta instalación a partir del “30 de junio de 1994, 
cerró su puertas a estados fuera de su pacto, así también , desde el 1º de enero 
de 1993, las otras dos instalaciones localizadas en Beatty, Nevada y Richland, 
Washington, dejaron de aceptar desperdicios de bajo nivel radiactivo, de estados 
con los que no tenía un acuerdo previo”.45
 
Ante esta situación, se ve la necesidad de agilizar su autorización a nivel federal y 
conseguir la licencia para su construcción, en un ambiente en que la población 
comenzó a organizarse nuevamente para protestar, “entre el 6 y 7 de agosto de 
1996, se da inicio a un proceso de audiencias públicas (public hearings), mediante 
las cuales se hacían llegar las protestas, y tanto opositores como proponentes 
fundamentaban su posición antes Jueces de la Ley Administrativa, pertenecientes 
 
45 Comisión de Texas para la Disposición de Desperdicios de Bajo Nivel Radiactivo, ¿Qué es el desperdicio de bajo nivel 
radiactivo?, Estado de Texas, p. 4/95. 
 
 
 33
a la Oficina de Audiencias Administrativas del Estado”.46
 
Comenzaron así una serie de protestas en los Estados Unidos, que se fueron 
extendiendo hasta nuestro país, ya que el gobierno estadounidense informó del 
proyecto al gobierno mexicano de forma general en 1992, en una reunión bilateral 
en Cd. Juárez, Chih. Posteriormente México pide a los Estados Unidos 
información sobre los basureros tóxicos en la frontera como son: Sierra Blanca, 
Spofford y Dryden (éstos dos últimos destinados para desechos tóxicos), a través 
del mecanismo de intercambio para el establecimiento de nuevos sitios y de ya 
existentes, información que proporciona la EPA, directamente. 
 
Aun así los datos proporcionados fueron escasos, pues no se mandaron los 
resultados que obtuvieron las entidades locales de Texas para la evaluación del 
lugar establecido, mientras la población civil junto con las organizaciones no 
gubernamentales, en favor de ambiente como Greenpeace y Sierra Club, se 
organizaron en ambos lados de la frontera. 
 
A su vez el gobierno de México integra un Grupo Interinstitucional sobre 
Confinamientos de Residuos Peligrosos en la Frontera Norte del País, creado en 
1995, con el fin de “establecer una postura común y documentada sobre la 
instalación de los confinamientos en la frontera”.47
 
Para 1997 la propuesta de Ley llamada S-270, llega a la Cámara de 
Representantes de la Unión Americana y se aprueba el convenio que autoriza a 
los Estados de Maine y Vermont mandarsus desechos a Texas. Dicha propuesta 
se pasa al Senado, de la cual se hacen dos enmiendas que fueron propuestas por 
el senador Wellstone en el sentido de: “a) prohibir que el confinamiento acepte 
residuos de otros estados que no sean los tres promoventes; y b) permitir que la 
población de Sierra Blanca, pueda demandar al sitio de confinamiento si 
 
46 Memoranda de información de la SRE, “Proyecto de confinamiento de residuos radiactivos de bajo nivel en Sierra 
Blanca, Huspeth, Texas, Cronología de Hechos, ” Dir. Gral. de Medio Ambiente y Recursos Naturales,. 20 de octubre de 
1998, p. 2. 
47 Ibidem. 
 34
comprueban que elementos de discriminación fueron tomados en cuenta en la 
elección del mismo”,48
 
Sin embargo, el Senado aprobó la Ley S-270 el 2 de septiembre de 1998, sin que 
se anexaran las dos reformas hechas por el Senador Wellstone. Por lo tanto los 
Estados de Maine y Vermont quedan autorizados para enviar sus desechos, así 
como todos los demás estados que lleguen a un acuerdo con el gobierno de 
Texas, pasando de esta manera a la aprobación, en ese entonces del presidente 
William Clinton, quién firma su autorización el 20 de octubre de ese mismo año. 
 
Esta situación provocó que se calificara al proyecto de injusticia y racismo 
ambiental de acuerdo con el senador Wellston, quien “aseguró que hay una 
tendencia en Estados Unidos a construir basureros tóxicos en comunidades 
habitadas por minorías, de bajos recursos económicos y carentes de poder 
político, en este caso ciudadanos de origen mexicano, aunque hay quienes creen 
que el confinamiento traerá empleos y reactivara la economía del Condado de 
Huspeth.”49 Pues se contemplaba que “el gobierno de Texas, recibiría 50 millones 
de dólares anuales que se entregarían a dicho Condado”.50
 
A nivel federal, el proyecto fue aprobado y sólo se necesitaba la autorización de la 
TNRCC para otorgar la licencia y comenzar con la construcción del confinamiento, 
de ahí que las organizaciones no gubernamentales a favor del ambiente, así como 
la población de ambos países, pedían en aquel entonces al gobernador de Texas, 
George. W. Bush, negara el permiso de construcción del confinamiento o en su 
defecto como el gobierno de México solicitaba, se reubicara, más allá de los 100 
Km. de la zona fronteriza, que había sido considerada desde el Tratado de la 
Paz,51 artículo 4, como un área en la que se evitaría cualquier actividad 
 
48 Memoranda de información de la SRE, “Proyecto de confinamiento de residuos radiactivos, op. cit, p. 3. 
49 Gabriel Moyssen, “Aprueba el senado de EU envío de residuos nucleares a Sierra Blanca,” .El Financiero, 3 de 
septiembre de 1998, p. 30. 
50 Carta Enviada a la Lic. Rosario Green SER, “No al basurero radiactivo en Sierra Blanca,” Centro de Estudios 
Fronterizos y de promoción de los derechos humanos, AC. 1998 
51 El Convenio sobre Cooperación para la Protección y el Mejoramiento del Medio Ambiente en la Zona Fronteriza fue 
suscrito entre Estados Unidos y México, en 14 de agosto de 1983 en La Paz, BC. 
 35
contaminante, en el marco de la buena vecindad. 
 
Cabe resaltar que durante las audiencias públicas que se llevaron a cabo en el 
Estado de Texas, se dejaron fuera varios participantes que debían de ser 
considerados, de acuerdo con los tratados y mecanismos que existen entre 
México y Estados Unidos, para el intercambio de información y solución de 
controversias ambientales, se excluyó a “los Congresos estatales de Coahuila y 
Chihuahua, a la Comisión de Asuntos Fronterizos del Senado Mexicano, y a Cd. 
Acuña, además de que ninguno de los documentos de la solicitud en los procesos 
legales había sido traducido al español”.52
 
De acuerdo con la presentación del Dr. Marvin Resnikoff, gerente general de la 
Radioactive Waste Management Associates53, llega a la conclusión de que el sitio 
no es apto para establecer confinamiento, porque: 
1) Se encuentra ubicado en una región de mucha actividad sísmica (64 
movimientos telúricos de magnitudes superiores a 3.0 de 1923 a 1993; refiere a 
dos terremotos- uno en 1931 en Valentin Tx, y otro en 1995 en Alpine Tx, que 
abrieron fisuras cerca del sitio Sierra Blanca. 
2) Existen fallas sísmicas debajo del sitio. 
3) El suelo reviste fajas de sedimentos arenosos y de grava. 
4) En ocasiones se presentan inundaciones en el lago Grayton (cerca del sitio 
propuesto) que fluyen hacia el Río Bravo.54
 
Además una de las situaciones más discutidas y de mayor preocupación fue la 
relacionada con la clase de desechos que se almacenarían en el lugar; así como 
la manipulación de la información que se estuvo manejado con respecto, a qué tan 
peligrosos son y los riesgos que supondría su almacenamiento y efectivamente se 
mencionó que se mandarían, “materiales con plutonio, que hasta dentro de 500 mil 
 
52 Memoranda de información. SRE. “Puntos importantes del confinamiento nuclear de Sierra Blanca”. Dirección de 
Recursos Naturales y Medio Ambiente,23 de febrero de 1998. 
53 El Dr Marvin Reskinoff, realizó un estudio independiente sobre la zona y fue el representante de la población civil y 
los organismos no gubernamentales para determinar los peligros que representaría el confinamiento. 
54 Memoranda de información superior de la Sria. Rosario Green ante el Senado de la República, 11 de diciembre de 1998. 
 36
años dejaría de ser radiactivos, provenientes de cualquier entidad de los Estados 
Unidos”.55
 
El proyecto finalmente es cancelado por la TNRCC, el 22 de octubre de 1998, 
debido “a la falta de evidencia científica para determinar la plena seguridad del 
confinamiento”56, dicho argumento lo utilizó el gobierno de Texas para promover 
una imagen positiva al entonces gobernador George W. Bush y conseguir su 
reelección, que estaba a un mes de llevarse a cabo. 
 
De esta forma el caso de Sierra Blanca se convirtió en un problema político, que 
en lugar de atender a la preocupación social y las cuestiones de seguridad del 
sitio, sirvió como pretexto para que Bush ganara nuevamente las elecciones, sin 
embargo, se planteaba la posibilidad de apelar el caso y reabrirlo en el año 2001. 
 
Hasta el momento el proyecto ha quedado inactivo, pero al haber sido aprobado 
por el gobierno federal, sólo se estaría a la expectativa de que el Estado de Texas 
decida reabrirlo a través de la TLLRWD y pida nuevamente la licencia de 
construcción del confinamiento, como se verá en el capítulo 3, esta vez ya no en 
Sierra Blanca, sino en el condado de Andrews por parte de la iniciativa privada y 
ya no por el gobierno local. Ahora bien es importante mencionar que la TNRCC, 
autoridad que negó la licencia de construcción del confinamiento cambió de 
nombre el 1 de septiembre del año 2002 al de la Comisión sobre la Calidad 
Ambiental en Texas (Texas Commission on Environmental Quality, TCEQ por sus 
siglas en inglés), que sería la nueva instancia que podría otorgar la autorización. 
 
En el próximo subcapítulo abordaremos la situación que se vivió en la pequeña 
comunidad de la región de Sierra Blanca, la forma en que se percibía la 
construcción del confinamiento, así como su participación y la de los grupos 
ambientalistas. 
 
55 Marcela Turati, “Basurero radiactivo en Sierra Blanca. Reportan confinamientos en ambos lados de Río Bravo,” Reforma. 
Sección Nacional, p. 16 A.. 
56 Austin, TX.(NTX), “Cancelan basurero nuclear. Niega comisión ambiental de Texas licencia para el confinamiento 
de Sierra Blanca”, Reforma , Sección Nacional, 23 de octubre de 1998, p. 4A. 
 37
2.4. Participación de la población civil y de las ONG. 
 
La principal oposición a la construcción del confinamiento en Sierra Blanca se 
concentró en la población de la localidad, constituida por mexicanosque se 
asentaron en la zona, en su mayoría como ilegales, en una región desértica sin 
recursos económicos que poco a poco se fueron adaptando a las condiciones de 
pobreza y marginación de la región. 
 
Una oposición justificada, teniendo en cuenta que a un lado del pueblo de Sierra 
Blanca ya eran depositados los desechos de las fosas sépticas de Nueva York y a 
unos cuantos kilómetros se encuentra una zona de prácticas militares, aunado al 
plan de construir un confinamiento de desechos radiactivos en los alrededores 
provocó un clima de miedo y preocupación entre los lugareños. 
 
Para obtener la aceptación de los sierrablanquenses sobre el confinamiento, el 
gobierno de Texas en colaboración con la TLLRWDA y las compañías dueñas de 
las plantas nucleares desplegaron una gran campaña a favor del basurero o 
“dempe”, como era llamado coloquialmente en el lugar, a quienes les vendieron la 
idea de que su instalación se reflejaría el desarrollo de la región y la creación de 
empleos, como se mencionó en el subcapítulo 2.2. 
 
En este sentido, una de las pobladoras de lugar, Laura Barajas, mencionó al 
respecto, “tratan de comprarnos con dinero, ya nos construyeron una high school y 
nos pusieron un parque pequeño…y a los niños se los llevan a viajes donde 
también invitan a los papás y ahí nos piden no nos opongamos y aceptemos el 
basurero… desafortunadamente gran parte de la población no sabe escribir ni 
leer…como podríamos ocupar los empleos que dicen nos van a dar, si ahí 
necesitan especialistas”.57 
 
 
57 Leticia Robles de la Rosa, “Demanda por racismo ambiental contra el gobierno de Texas,”. Unomásuno,15 de 
septiembre de 1998, p .6. 
 38
Ante esta situación los grupos ambientalistas tales como Greenpeace, Sierra Club, 
el fondo legal para la defensa de Sierra Blanca, la Alianza Ecologista del Bravo 
apoyados por los trabajos realizados de Dr. Marvin Reskinov (veáse subcapítulo 
anterior) llevaron a cabo reuniones con los pobladores informando sobre los daños 
y riesgos que implicaría la instalación, uno de los principales participantes fue Bill 
Addington, representante del grupo Save Sierra Blanca de origen mexicano, quién 
no sólo llevó a cabo estas reuniones en Sierra Blanca, sino que logró reunirse con 
legisladores mexicanos para hacerles llegar los estudios realizados en la zona, 
pidiendo de alguna forma el apoyo del gobierno mexicano para que se detuviera la 
construcción del confinamiento. 
 
En una de las visitas que realizó Bill Addington a México, explicó que su “misión 
consistió en demostrar que eran erróneos los estudios en los que se basó el 
gobierno mexicano para afirmar que el confinamiento nuclear no representaba 
peligro para los mexicanos, que resistiría a sismos mayores de 21 grados Richter 
y que no existía peligro de contaminación del Río Bravo”58, ya que esa información 
la dió a conocer la misma empresa promotora del confinamiento. 
 
La sensación de inseguridad que había entre los pobladores de Sierra Blanca era 
palpable y sólo esperaban que el gobierno de México se pronunciara en contra del 
proyecto, como lo declara uno de los lugareños: “aquí todos nos tratan mal…nos 
ponen este veneno y si nos morimos no les importa, pero dicen que desde México, 
el Presidente nos va a ayudar a lo mejor ya no ponen eso (el basurero) aquí”.59
 
Los grupos de presión no sólo lo constituyeron los grupos ambientalistas y la 
población, sino también los mismos legisladores locales de ambas partes de la 
frontera. De hecho se estaban preparando los representantes locales de Texas 
para llevar a cabo una serie de demandas en contra del Estado por discriminación 
 
58 Marcela Turati, “Prevén peligro por basurero en la frontera”. Reforma, 13 de septiembre de 1998, p.10-A. 
59 Leticia Robles de la Rosa, “Demanda por racismo ambiental contra el gobierno de Texas,” Unomásuno,15 de septiembre 
de 1998, p. 6. 
 
 39
ambiental y por daños y perjuicios a los habitantes de Sierra Blanca. Una de las 
cuestiones que se planteaban como defensa, fue la cuestión de la justicia 
ambiental, concepto relativamente nuevo, que fue integrado en las políticas 
ambientales de los Estados Unidos de manera formal en el 2001 (veáse capítulo 
3) el cual, a grandes rasgos, se refiere a que ninguna actividad contaminante 
puede llevar riesgos a la población, independientemente de la raza, origen 
nacional, cultura, educación, aspectos que evidentemente no se tomaron en 
cuenta al elegir el lugar de Sierra Blanca. 
 
Este concepto fue tomado como bandera de lucha y estuvo presente en todas las 
protestas y marchas realizadas contra el basurero nuclear, las cuales se 
acentuaron después de que el Senado estadounidense aprobará la Ley S-270 (ver 
subcapítulo 2.3). Entre las más destacadas está la realizada por parte de la 
población de Cd. Juárez, Chihuahua el 5 de octubre de 1998 en el puente 
internacional, la salida de diversas caravanas desde Austin a Sierra Blanca, y la 
realizada el 22 de octubre día en que se iba a decidir la suerte del confinamiento, 
realizándose un mitin frente a la residencia del gobernador George W. Bush y en 
los alrededores del capitolio estatal. 
 
Con este movimiento social en ambos lados de la frontera, en la que se incluyeron 
huelgas de hambre por parte de legisladores mexicanos y texanos, misas 
aludiendo a la cancelación del proyecto, fueron decisivas para que la TNNRCC en 
la última evaluación técnica del confinamiento tomara la decisión de cancelar el 
proyecto. 
 
En el próximo subcapítulo mencionaremos la posición que tomó México con 
respecto al proyecto, bajo este clima de tensión en la que la población mexicana 
en ambos lados de la frontera, pedía el pronunciamiento del gobierno mexicano en 
contra del confinamiento y por otro lado éste mismo no quería entrar en conflicto 
con su par estadounidense. 
 
 40
2.5. Posición de México. 
 
La posición de México ante el confinamiento de Sierra Blanca fue en un inicio de 
rechazo, pero como veremos más adelante resulta imposible hablar de una 
postura coordinada y homogénea entre las diferentes instancias federales, 
encargadas de defender el interés nacional, el cual se identificaba en ese 
momento como la cancelación del confinamiento o de su reubicación, para 
proteger a la población mexicana y a las comunidades de origen mexicano en los 
Estados Unidos y por ende los recursos naturales que se comparten con el país 
vecino del norte. 
 
Al contrario, se percibe la discrepancia entre los representantes de la Secretaría 
de Relaciones Exteriores, de la Secretaría de Energía y de la Secretaría de Medio 
Ambiente y Recursos Naturales, antes SEMARNAP, que fueron debilitando las 
acciones llevadas a cabo por el gobierno de México, a través de la Secretaría de 
Relaciones Exteriores con los Estados Unidos. 
 
Una vez que en Texas se llevaron a cabo las reformas locales para determinar la 
construcción del confinamiento en la localidad de Sierra Blanca, nuestro país tiene 
conocimiento del proyecto por primera ocasión en una reunión binacional en Cd. 
Juárez en 1992, de esta manera el gobierno mexicano pide a los Estados Unidos 
mayor información sobre el tema; como respuesta se llevó a cabo una Reunión de 
alto nivel, el 22 de abril de 1992, en Washington. 
 
Aunque no se tiene registrado qué se abordó en dicha reunión, para finales de ese 
mismo año, a través del mecanismo de intercambio de información para el 
establecimiento de nuevos sitios y de ya existentes60, la agencia de protección 
ambiental de Estados Unidos, se encarga de proporcionar a México información 
sobre los confinamientos propuestos en la franja fronteriza. 
 
60 Este mecanismo se acordó en junio de 1992 entre México y Estados Unidos, donde “los dos países continuarán 
notificándose el

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