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Evaluacion-del-control-glucemico-con-relacion-al-nivel-de-HbA1c-en-pacientes-con-diabetes-mellitus-tipo-2-de-la-UMF-No-47-Delegacion-San-Luis-Potosi-del-IMSS-en-el-ano-2005

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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE MÉXICO 
FACULTAD DE MEDICINA 
DIVISIÓN DE ESTUDIOS DE POSTGRADO E INVESTIGACIÓN 
DEPARTAMENTO DE MEDICINA FAMILIAR 
INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO SOCIAL 
UNIDAD DE MEDICINA FAMILIAR No. 47, SAN LUIS POTOSÍ, S.L.P. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
EVALUACIÓN DEL CONTROL GLUCEMICO CON RELACION AL NIVEL 
DE HbA1c EN PACIENTES CON DIABETES MELLITUS TIPO 2 DE LA 
U. M. F. No. 47 DELEGACIÓN SAN LUIS POTOSÍ DEL IMSS. EN EL 
AÑO 2005. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
TRABAJO QUE PARA OBTENER EL DIPLOMA DE ESPECIALISTA EN 
MEDICINA FAMILIAR 
 
 
 
 
PRESENTA: 
 
 FRANCISCO JAVIER VENEGAS LEDESMA 
 
 
SAN LUIS POTOSÍ, S. L. P. 2006 
 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
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DERECHOS RESERVADOS © 
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respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
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EVALUACIÓN DEL CONTROL GLUCEMICO CON RELACION AL NIVEL 
DE HbA1c EN PACIENTES CON DIABETES MELLITUS TIPO 2 DE LA 
U.M.F. No. 47 DELEGACION SAN LUIS POTOSÍ DEL I.M.S.S. EN EL AÑO 
2005. 
 
 
 
TRABAJO QUE PARA OBTENER EL DIPLOMA DE ESPECIALISTA EN 
MEDICINA FAMILIAR 
 
 
PRESENTA: 
 FRANCISCO JAVIER VENEGAS LEDESMA 
 
 
A U T O R I Z A C I O N E S: 
 
 
DR. HIPÓLITO JIMÉNEZ RUIZ 
PROFESOR TITULAR DEL CURSO DE ESPECIALIZACIÓN EN MEDICINA 
FAMILIAR PARA MÉDICOS GENERALES EN UNIDAD DE MEDICINA 
FAMILIAR No. 47 SAN LUIS POTOSÍ, I.M.S.S. 
 
 
DR. HECTOR DE JESÚS ANDRADE RODRÍGUEZ 
ASESOR METODOLOGICO 
MEDICO FAMILIAR U. M. F. 45, S. L. P. 
MAESTRIA EN INVESTIGACIÓN CLINICA POR U. A. S. L. P. 
 
 
 
DRA. MARTHA PATRICIA MUÑOZ GARCÍA 
ASESOR CLINICO 
MEDICO INTERNISTA HGZ No. 2 S. L. P. 
 
 
DRA. MARTHA ELENA VIDALES RANGEL 
COORDINADOR CLINICO DE EDUCACIÓN E INVESTIGACIÓN MEDICA 
U.M.F. No. 47, SAN LUIS POTOSÍ 
 
 
 
 
 
 
 
SAN LUIS POTOSÍ, S. L. P. 2006 
 3 
 
 
EVALUACIÓN DEL CONTROL GLUCEMICO CON RELACION AL NIVEL 
DE HbA1c EN PACIENTES CON DIABETES MELLITUS TIPO 2 DE LA U. 
M. F. No. 47 DELEGACION SAN LUIS POTOSÍ EN EL AÑO 2005. 
 
 
 
 
 
TRABAJO QUE PARA OBTENER EL DIPLOMA DE ESPECIALISTA EN 
MEDICINA FAMILIAR 
 
 
PRESENTA: 
FRANCISCO JAVIER VENEGAS LEDESMA 
 
 
 
 
 
AUTORIZACIONES: 
 
 
DR. MIGUEL ANGEL FERNÁNDEZ ORTEGA 
JEFE DEL DEPARTAMENTO DE MEDICINA FAMILIAR 
FACULTAD DE MEDICINA 
U. N. A. M. 
 
 
DR. ARNULFO IRIGOYEN CORIA 
COORDINADOR DE INVESTIGACIÓN 
DEL DEPARTAMENTO DE MEDICINA FAMILIAR 
FACULTAD DE MEDICINA 
U. N. A. M. 
 
 
DR. ISAIAS HERNANDEZ TORRES 
COORDINADOR DE DOCENCIA 
DEPARTAMENTO DE MEDICINA FAMILIAR 
FACULTAD DE MEDICINA 
U. N. A. M. 
 
 
 
 
 
 4 
 
I N D I C E 
 
MARCO TEORICO......................................................................................... 6 
 
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA.......................................................... 18 
 
JUSTIFICACION............................................................................................19 
 
OBJETIVOS...................................................................................................22 
 
- General .......................................................................................................22 
 
- Específicos .................................................................................................22 
 
MATERIAL Y METODOS ............................................................................ 23 
 
- Tipo de estudio ...........................................................................................23 
 
- Población, lugar y tiempo de estudio ..........................................................23 
 
-Características de la muestra ……………...................................................23 
 
- Criterios de inclusión, exclusión y eliminación............................................23 
 
- Información a recolectar.............................................................................24 
 
- Método de recolección de los datos ..........................................................24 
 
- Consideraciones éticas..............................................................................25 
 
- Variables del estudio….……………………………………………………….. 26 
 
- Plan General de Trabajo ……………………………………………………… 27 
 
- Gráfica de Gant ………………………………………………………………... 28 
 
RESULTADOS ............................................................................................ 29 
 
- Descripción de los resultados ....................................................................29 
 
-Tablas y gráficas .........................................................................................30 
 
DISCUSIÓN ................................................................................................. 33 
 
CONCLUSIONES .........................................................................................35 
 
 5 
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS............................................................. 36 
 
ANEXOS ..................................................................................................... 45 
 
 CARTA DE CONSENTIMIENTO INFORMADO ..................................... 45 
 
 AGRADECIMIENTOS ................................................................................ 46 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 6 
MARCO TEORICO 
Actualmente se considera a la diabetes mellitus un síndrome que agrupa 
diferentes enfermedades metabólicas caracterizadas por hiperglucemia, 
producida por defectos en la secreción o en la acción de la insulina, o bien 
por una combinación de estas dos alteraciones, que origina trastornos en el 
metabolismo de los carbohidratos, de las grasas y de las proteínas. De 
acuerdo a la clasificación etiológica la diabetes mellitus se agrupa en cuatro 
tipos: diabetes mellitus tipo 1, diabetes mellitus tipo 2, otros tipos específicos 
en la que se incluyen por ejemplo los defectos genéticos de la función de las 
células beta, defectos genéticos de la acción de la insulina y la secundaria a 
endocrinopatías, entre otros, y la diabetes mellitus gestacional. La 
hiperglucemia crónica produce daño a largo plazo de diversos órganos, en 
especial ojos, riñones, nervios, corazón y vasos sanguíneos y también 
puede producir deterioro en el crecimiento y susceptibilidad a ciertas 
infecciones (1, 2). 
 Son factores de riesgo para el desarrollo de la diabetes mellitus tipo 2 la 
edad, la obesidad y la falta de actividad física; ocurre también con más 
frecuencia en personas con antecedentes familiares de diabetes, en mujeres 
con historia de diabetes mellitus gestacional y en individuos con 
hipertensión, hipercolesterolemia, hipertrigliceridemia, con antecedente de 
enfermedad vascular y mujeres con síndrome de ovarios poliquísticos. (3). 
La hiperglucemia produce acumulo de sustancias llamadas productos finales 
de glicación avanzada, las cuales juegan un papel importante en la 
patogénesis de las complicaciones diabéticas. Estos productos causan 
 7 
cambios disfuncionales en la matriz extracelular, altera los niveles de 
citocinas, hormonas y radicales libres, y la función de las proteínas 
intracelulares (4). 
Los criterios para el diagnóstico de la diabetes mellitus son: glucemia 
plasmática de ayuno igual o mayor de 126 mg/dl, entendiéndose por ayunola falta de ingestión calórica al menos por ocho horas; glucemia igual o 
mayor a 200 mg/dl después de dos horas, con una carga de 75 gr de 
glucosa anhidra disuelta en agua; y una glucemia plasmática casual igual o 
mayor de 200 mg/dl, más síntomas de diabetes mellitus (3, 5). 
Una determinación aislada de hemoglobina glucosilada puede cuantificar la 
glucemia promedio de las ultimas 8 a 12 semanas (6). La glucohemoglobina 
se forma con lentitud y de manera no enzimática a partir de glucosa y 
hemoglobina y su índice de formación es directamente proporcional a la 
concentración sanguínea de glucosa, ya que la membrana del eritrocito es 
permeable a este compuesto (5,6). La fracción de la hemoglobina, 
denominada hemoglobina rápida esta compuesta por tres subfracciones, la 
HbA1a, la Hb A1b y la HbA1c, esta última es la que se encuentra en mayor 
porcentaje, pues alcanza un valor de 60-80% y es también la más estable. 
Se ha establecido que el valor normal de hemoglobina glucosilada A1c es de 
3 a 6 % (7,8). Los niveles de glucosa sanguínea tienden a aumentar con la 
edad aún en los individuos no diabéticos, por lo que en pacientes en edad 
avanzada valores de hemoglobina glucosilada A1c de 8 a 9%, dependiendo 
del método, pueden relacionarse con un nivel aceptable de control. La 
utilidad clínica de la hemoglobina glucosilada es monitorear las condiciones 
 8 
metabólicas en las últimas 8 semanas, ya que se ha demostrado que su 
índice predice el riesgo de desarrollo de muchas de las complicaciones 
crónicas de la diabetes (6,7,8). 
Las metas en el control del paciente diabético son: lograr niveles de 
hemoglobina glucosilada A1c menor de 7 %, valores en sangre de glucosa 
preprandial entre 80 y 120 mg/dl, glucemia en sangre al acostarse entre 100 
y 140 mg/dl, mantener cifras de presión arterial menores de 130/85, valores 
de colesterol LDL menores de 100 mg/dl, colesterol HDL mayor de 45 mg/dl 
en los hombres y mayor de 55 mg/dl en las mujeres, y niveles de 
triglicéridos menores a 200 mg/dl (9); o bien, glucemia en ayunas <110 
mg/dl, glucemia postprandial de 2 horas <140 mg/dl, colesterol total <200 
mg/dl, triglicéridos en ayuno <150 mg/dl, colesterol HDL >40 mg/dl, cifras de 
presión arterial <120/80 mm de Hg, índice de masa corporal <25, y valores 
de hemoglobina glucosilada A1c <6.5% (5). 
Los médicos y otros profesionales de la salud han realizado grandes 
esfuerzos para persuadir a los pacientes para que se apeguen a los 
tratamientos, pero el manejo basado en el modelo médico tradicional es 
inadecuado para el cuidado diario de la diabetes, y el resultado más notorio 
es la falta de adherencia (9). Otro factor que hay que considerar en el 
paciente diabético es el estrés que le generan el diagnóstico, la restricción 
dietética y la presencia de complicaciones agudas y crónicas; de la forma en 
que aborde estos problemas dependerá su adaptación, y por tanto su 
adherencia al plan terapéutico (10). 
 9 
El índice de incumplimiento de un régimen terapéutico prescrito es bajo en 
cualquier tipo de enfermedad crónica, aunque es probable que el tipo de 
padecimiento influya en el grado de apego, pues en pacientes con 
tratamiento hormonal sustitutivo supresivo por cáncer tiroideo llega a ser de 
81.2% (11). 
El conocimiento por parte del paciente acerca de la diabetes y sus 
consecuencias amplia el interés en el tratamiento y disminuye el número e 
intensidad de las complicaciones (12), como el riesgo de muerte por 
enfermedad cardiovascular, que en el diabético tipo 2 es tan alto como en 
individuos no diabéticos con antecedente de infarto agudo del miocardio (13). 
Las modificaciones en el estilo de vida a través de la educación tienen como 
resultado disminución de peso corporal; mejor control de la glucosa, la 
presión arterial y los lípidos séricos y una disminución hasta de 13 % en los 
niveles de hemoglobina glucosilada A1c (14). 
En grupos de población, en donde el 100% de los pacientes tiene acceso al 
servicio médico y el 91.8 % acude una vez al mes no se observa un control 
metabólico adecuado, pues solo el 23 % presenta cifras de glucemia de 
ayuno iguales o menores de 140 mg/dl en promedio en los últimos tres 
exámenes (15). Se ha encontrado también, que en pacientes que acuden 
regularmente a la consulta de medicina familiar, solo el 30 % tienen cifras de 
hemoglobina glucosilada A1c <8% (16). Se sabe, que cuando no hay 
adherencia al tratamiento el control de un padecimiento llega a ser tan solo 
del 27.5 % (17). En los pacientes diabéticos existen factores asociados para 
un mejor apego, como son: que la atención sea otorgada por un especialista, 
 10 
mejor nivel socioeconómico, más años con el diagnóstico y mayor 
escolaridad (18). En un estudio realizado en la Ciudad de México entre 
febrero de 1990 y octubre de 1992 en 2282 pacientes entre 35 y 64 años de 
edad, se encontró que están descontrolados hasta en un 69 %, 
considerando valores de glicohemoglobina iguales o mayores a 8.7% (19). 
En el I.M.S.S. en un estudio realizado entre 1997 y 1998, en la unidad de 
medicina familiar No. 33 en Chihuahua, Chih., se encontró que el apego al 
tratamiento en pacientes con diabetes mellitus tipo 2 correspondió al 54 %, 
estableciendo que tenían un control adecuado los pacientes que obtuvieron 
hemoglobina glucosilada menor de 9.2, habiendo obtenido una media de 
7.1% en pacientes no diabéticos (20). Se puede mejorar la adherencia 
terapéutica en individuos que son sometidos a intervenciones educativas y 
psicológicas, manteniendo este apego durante el tiempo de la intervención 
en más del 90% de los pacientes en cuanto a la dieta y el ejercicio (21). 
En América el número de pacientes con diabetes mellitus se estimó en 35 
millones en el año 2000, y se espera que se incremente a 64 millones en el 
2025; El 52 % de estos enfermos viven en América Latina y en el Caribe y se 
incrementará a 62 %, que equivalen a 40 millones de personas, 
correspondiendo a la diabetes mellitus tipo 2 el 85 a 90 % de todos los casos 
(22). En sujetos entre los 35 y los 64 años de edad la prevalencia más alta se 
encontró en Jamaica con 15.6 %, y en segundo lugar México con 14.9 %. 
(22). 
 11 
En el año 2000 en México la prevalencia de diabetes mellitus en individuos 
mayores de 20 años fue del 7.5 %; en el grupo de 70 a 79 años subió hasta 
el 22.4 %. El número estimado de diabéticos fue de 3,600,000 (23). 
La prevalencia en el grupo de 20 a 39 años de edad es del 2.3 %, es decir 
afecta a individuos en edades cada vez más tempranas lo que los hace estar 
expuestos mayor tiempo a los efectos adversos de la hiperglucemia (23). En 
este grupo de pacientes mexicanos los requerimientos de insulina ocurren 
habitualmente en forma más temprana y es mayor la frecuencia de 
complicaciones tardías que se traducen en pérdida significativa de la 
capacidad productiva y un fuerte impacto en la dinámica familiar (24). 
Durante 1993 y 1994 en una muestra de población rural de 31028 personas 
mayores de 30 años de edad, se encontró una prevalencia de 3.2 % (24). 
Solamente el 9.2 % de los individuos estudiados eran obesos (25). 
La diabetes mellitus contribuye en forma importante a la mortalidad en 
nuestro país, fue la segunda causa de mortalidad en varones mexicanos en 
el año 2001 con 9.1% del total, y la primera en mujeres con un 14 % (26). 
El tratamiento para los pacientes con diabetes mellitus tipo 2 debe ser 
integral, por parte de un equipo multidisciplinario con experiencia e interés 
en diabetes, coordinado por el médico, que proporcione información sencilla 
sobre las características de la alimentación, el ejercicio y la prescripción 
apropiada de medicamentos (27). Debe incluir además la educación del 
paciente y su familia en donde se aborden los aspectos básicos relativos a la 
enfermedad y sus complicaciones, los factores de riesgo, lasmetas de 
 12 
tratamiento, el automonitoreo así como la prevención y vigilancia de las 
complicaciones (5). 
Un plan alimentario debe considerar, entre otras cosas, los siguientes 
aspectos: las necesidades energéticas en relación al índice de masa 
corporal, la edad, la actividad física y a la presencia de otras patologías 
como dislipidemias e hipertensión arterial, la necesidad de integrar las 
condiciones de alimentación a la vida cotidiana y familiar, reconocer la 
autonomía del paciente en cuanto a sus hábitos alimenticios y la 
capacitación para que el enfermo pueda realizar adaptaciones ante los 
cambios inevitables e inesperados de la alimentación durante sus 
actividades diarias. Los requerimientos energéticos por día para los 
pacientes con índice de masa corporal < 25 kg/mt² son de 30 kcal/kg en 
actividad física ligera, 35 kcal/kg en actividad física moderada y 40 kcal/kg 
cuando exista actividad física intensa; si el índice de masa corporal es > 25 
kg/mt² la recomendación será 20, 25 o 30 kcal/kg para la actividad física 
leve, moderada e intensa respectivamente (28). Se recomienda que el aporte 
calórico sea 60 a 70 % carbohidratos y grasa monoinsaturada, 15 a 20 % 
proteínas y 10 % grasas poliinsaturadas (29). 
La prescripción del ejercicio es necesaria, ya que en el paciente con 
diabetes mellitus tipo 2 mejora la sensibilidad a la insulina y ayuda a la 
disminución de los niveles elevados de glucosa. Una recomendación 
estándar es que la sesión de ejercicio debe incluir una fase inicial de 
calentamiento por 5 a 10 minutos con actividad aeróbica de baja intensidad 
(caminata, bicicleta, etc) para preparar al sistema musculoesquelético, 
 13 
cardiovascular y pulmonar para un incremento progresivo de la intensidad 
de ejercicio, seguidos de otros 5 a 10 minutos de estiramientos y después 
del ejercicio activo es necesario un periodo de relajación en forma similar al 
calentamiento. Antes de iniciar un programa de ejercicio el diabético deberá 
ser objeto de una evaluación detallada enfocada a los signos y síntomas de 
enfermedad que afecte el corazón, los vasos sanguíneos, los ojos, los 
riñones y el sistema nervioso, se debe tener especial cuidado si el paciente 
es mayor de 35 años y presenta algunas de las siguientes condiciones: 
diabetes de mas de 10 años de evolución, presencia de factores de riesgo 
para enfermedad arterial coronaria, presencia de enfermedad microvascular 
(retinopatía proliferativa o nefropatía incluyendo microalbuminuria), 
enfermedad vascular periférica o neuropatía autonómica. Se deben incluir 
recomendaciones para el cuidado de los pies como mantener los pies 
secos y el uso de calzado adecuado, cuidar el estado de hidratación ya que 
la deshidratación puede afectar los niveles de glucosa sanguínea y la 
función cardiaca . El plan de ejercicio debe tener como objetivo la actividad 
física moderada (55 al 69 % de la frecuencia cardiaca máxima), debe ser de 
tipo aeróbico, con una duración de 30 a 60 minutos por sesión y una 
frecuencia de 3 a 4 veces por semana (30). 
El manejo farmacológico esta indicado cuando las recomendaciones 
dietarias y la prescripción del ejercicio fallan para llevar al paciente a control 
glucémico. En el paciente obeso las biguanidas son los fármacos de primera 
línea, de ellas la metformina es la de mayor uso. Disminuye la producción 
hepática de glucosa y aumenta la acción de la insulina en el músculo 
 14 
estriado. Su dosis es de 500 mg a 3000 mg al día. Esta contraindicada en 
pacientes con insuficiencia renal, insuficiencia hepática, alcoholismo crónico, 
infecciones graves, cirugía mayor, infarto al miocardio, politraumatismo y en 
coma diabético. Se puede asociar a sulfonilureas para mejores resultados. Si 
es necesario se puede añadir inhibidores de alfa glucosidasa como acarbosa 
a dosis de 50 a 100 mg masticada con el primer bocado de cada comida, su 
dosis máxima diaria son 300 mg; o tiazolidinedionas como la rosiglitazona 4 
a 8 mg por día. Este último fármaco está contraindicado en pacientes con 
hepatopatía. 
Para el paciente no obeso las sulfonilureas son los fármacos de primera 
elección. Su mecanismo de acción es estimular la secreción de insulina. 
Entre otros compuestos se encuentran la tolbutamida, su dosis es de 500 mg 
a 3000 mg por día, la glibenclamida, 2.5 mg a 20 mg por día, y la glimepirida 
1 a 8 mg por día. Están contraindicadas en diabetes mellitus tipo 1, 
embarazo, lactancia, y complicaciones agudas como la cetoacidosis o el 
coma hiperosmolar. Pueden provocar hipoglucemias graves, dermatosis, 
discrasias sanguíneas y colestasis. Cuando hay falla a sulfonilureas puede 
asociarse con biguanidas. 
En pacientes mayores de 60 años con diabetes mellitus de reciente inicio y 
glucemia menor de 130 mg/dl se recomiendan los inhibidores de 
alfaglucosidasa y sulfonilureas de corta acción para no producir 
hipoglucemia. 
La insulina está indicada en las siguientes situaciones: diabetes mellitus tipo 
1, hiperglucemia en ayunas en una dosis nocturna asociada a 
 15 
hipoglucemiantes orales durante el día, falla a hipoglucemiantes orales a 
dosis máxima, pacientes delgados sintomáticos con diagnóstico incierto en 
cuanto el tipo de diabetes, embarazo con diabetes previa, y en la diabetes 
gestacional. La dosis de insulina se particulariza en cada paciente, 
inicialmente no debe ser mayor de 0.5 UI/kg/día; cuando se requiera más de 
25 a 30 unidades se fraccionará la dosis, indicándose dos tercios de la dosis 
por la mañana y un tercio por la noche. Para el tratamiento combinado con 
hipoglucemiantes orales la dosis de insulina intermedia es de 0.1 a 0.2 
UI/Kg/día, aplicándose preferentemente a la hora de acostarse (5, 31). 
Corresponde al médico familiar efectuar prevención primaria de la 
enfermedad e intervenir sobre factores de riesgo cardiovascular, hacer una 
detección precoz de la diabetes tipo 2, ofertar métodos o técnicas de 
planificación familiar a la mujer diabética en edad fértil, efectuar el control de 
la enfermedad a través de medidas farmacológicas y no farmacológicas, 
hacer un seguimiento de este trastorno, la educación para la salud dirigida al 
paciente y a la familia, prevenir las complicaciones agudas de la diabetes, 
detectar oportunamente las complicaciones crónicas y consultar con otros 
niveles especializados cuando sea preciso. Además debe apoyar la 
adaptación del paciente en su medio social y la rehabilitación cuando sea 
necesario (32, 33). Cuando el médico familiar trata a una persona con un 
padecimiento crónico debe atender también sus necesidades psicosociales 
y ayudar a la familia para asimilar el impacto, siempre respetando el tiempo 
y características de enfrentamiento propias. Durante el proceso de 
intervención el médico familiar tiene la oportunidad de ser efectivo 
 16 
principalmente en dos áreas: la educación sobre la enfermedad y su manejo 
y facilitar los cambios en la estructura del grupo familiar abordando su 
aspecto racional, estimulando el desarrollo de su capacidad y alentando los 
proyectos personales (34). Para conseguir un adecuado apoyo familiar se 
requiere tomar en cuenta las necesidades del paciente y la familiar y buscar 
un equilibrio entre ambas, el médico debe explorar sus emociones, escuchar 
y dar apoyo emocional, conocer las expectativas de la familia y ayudarla a 
dar un apoyo eficiente. Se puede tener éxito al hablar francamente acerca de 
los papeles de los miembros de la familia con una postura negociadora 
facilitada por el clínico (35). 
Una de las funciones esenciales de la familia es prestar apoyo a los 
miembros que la integran, en el caso de la diabetes esta función adquiere 
singular importancia, tanto desde el punto de vista físico como emocional. 
Con la aparición del padecimiento es necesaria una readaptación de la 
homeostasis familiar que exige modificaciones en los hábitosy el estilo de 
vida de la familia, la cual por necesidad moviliza sus mecanismos de 
adaptación hasta recuperar el equilibrio amenazado. La familia procesará 
todo esto según su propio conjunto de creencias acerca de la enfermedad y 
la experiencia que posea en el cuidado de un paciente diabético. Son 
importantes recursos como la cohesión, capacidad de adaptación, apoyo y 
capacidad organizativa, buscando, de ser necesario, recursos extrafamiliares 
que aseguren un funcionamiento adecuado del sistema (36,37). En el proceso 
de adaptación no siempre el resultado es bueno o inmediato pueden surgir 
situaciones de conflicto cuando el cuidador asume en exceso la 
 17 
responsabilidad de la atención del enfermo, limitando su autonomía o 
independencia, o descuidando otras funciones básicas (38). Se han 
identificado dos formas de respuesta familiar a la enfermedad: desarrollando 
una extrema cohesión interna en torno del enfermo, quien absorbe la 
energía y monopoliza la atención de la familia restando posibilidades de 
desarrollo y crecimiento de cada uno de los miembros; y una tendencia 
centrípeta que se caracteriza por conductas evasivas en torno de la situación 
de enfermedad (39). La mayoría de las veces la respuesta de la familia es 
satisfactoria, y en este caso hasta el 80 % de los pacientes pueden mostrar 
parámetros dentro de los límites de control, y por el contrario, solo el 56 % 
de los sujetos tienen estas características cuando pertenecen a familias 
disfuncionales (40). 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 18 
 
 
 
 
 
 
 
 
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 
 
A pesar de los esfuerzos del equipo de salud para controlar a la totalidad de 
los pacientes diabéticos, solo se logra en un 20 % a 30 % (15, 17, 19, 20, 42). La 
particular idiosincrasia influye en el fracaso terapéutico, pues aún existe 
confianza en rituales mágicos o religiosos, o en medicinas alternativas (20, 49 ). 
La falta de apego al tratamiento puede estar influida por las características 
personales del paciente, la familia, y por el modelo médico tradicional 
utilizado en la atención del paciente (17, 21). 
Se desconoce el grado de control glucémico de los pacientes diabéticos en 
la unidad de medicina familiar 47, como es sabido el descontrol crónico 
favorece las complicaciones tardías de la enfermedad, generalmente 
irreversibles, que impactan en el sistema de salud, en la familia y en la 
calidad de vida del enfermo, por lo que es necesario investigar en nuestra 
unidad el porcentaje de pacientes que está controlado a través del nivel de 
HbA1c. ¿Cuál es el control glucémico en los pacientes con diabetes mellitus 
tipo 2 en la Unidad de Medicina Familiar No. 47 del IMSS? 
 
 
 
 
 
 
 
 19 
 
 
 
 
 
 
 
 
JUSTIFICACIÓN 
 
El paciente diabético genera una gran demanda de atención médica, pues 
constituye la tercera causa de morbilidad en hospitales del sector público 
(41). La prevalencia de diabetes mellitus en individuos derechohabientes del 
Instituto Mexicano del Seguro Social mayores de 20 años, de acuerdo a la 
Encuesta Nacional de Salud 2000, fue de 8.9 % (23), la mayoría con 
descontrol glucémico, pues se observó que de aquellos pacientes que 
recibían algún tipo de tratamiento para controlar la diabetes, el 55.9 % 
presentaron niveles de glucemia casual mayores de 200 mg/dl o, en ayuno, 
mayores de 140 mg/dl al momento de la evaluación (23). 
El descontrol metabólico se presenta tanto en poblaciones urbanas como en 
poblaciones rurales, encontrándose que 83 % de la población diabética tiene 
cifras de glucemia de ayuno igual o mayor de 140 mg/dl (42). 
En población derechohabiente diabética del Estado de México con un 
promedio de 9 años con el diagnóstico, se encontraron como complicaciones 
primarias neuropatía diabética en el 17.1 %, oftalmopatía en 10.9 %, 
nefropatía en 9.1 %, cardiopatía isquémica en 4.2 % y enfermedad vascular 
cerebral en 1.7% (43). 
En el estudio clínico sobre el Control y las Complicaciones de la Diabetes 
(DCCT) se encontró que a lo largo del mismo los pacientes con tratamiento 
 20 
intensivo, tuvieron una reducción de aproximadamente 60 % en el riesgo de 
retinopatía, nefropatía y neuropatía diabéticas, y que los beneficios se 
obtienen sin importar edad, sexo o duración de la diabetes (44). 
De acuerdo a los resultados del estudio prospectivo sobre Diabetes en el 
Reino Unido (UKPDS) que se realizó entre 1977 y 1991 y que incluyó 5102 
pacientes con diabetes mellitus tipo 2, se ha comprobado que un control 
metabólico adecuado disminuye el índice total de complicaciones 
microvasculares en un 25 %, y que es posible también disminuir en un 25 % 
la mortalidad relacionada con la diabetes por cada punto de disminución del 
porcentaje de hemoglobina glucosilada (2). 
De 67,413,834 consultas en las unidades de medicina familiar durante el año 
2002 el 9 % fueron por diabetes mellitus, 6,067,244 consultas fueron 
otorgadas a pacientes diabéticos en el primer nivel de atención (45). 
La diabetes es una causa importante de hospitalización, pues ocupa el 33.8 
% de las causas de egreso hospitalario, excluyéndose los sujetos en 
programa de diálisis intermitente (46); es la segunda causa de dictamen de 
invalidez por el servicio de Salud en el Trabajo (47); y se encontró en las 
primeras tres causas de mortalidad general en población derechohabiente 
del IMSS en el 2001 (48). 
De acuerdo a un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública, los casos 
esperados de diabetes para 2003, en el Instituto Mexicano del Seguro 
Social, fueron 399,402, de los cuales requerirían atención hospitalaria 
55,916 y manejo ambulatorio 343,486, y los requerimientos financieros para 
satisfacer esta demanda de servicio sería 79,086,723 dólares (49). 
 21 
Ha sido posible la ejecución de este proyecto por contar con expedientes 
clínicos, pacientes diabéticos, apoyo de laboratorio clínico de la unidad para 
la toma de muestras y colaboración del laboratorio de lípidos y carbohidratos 
de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí 
para el procesamiento de las muestras, ya que la cuantificación de HbA1c no 
es una prueba que se realice en el primero. Los reactivos fueron comprados 
por el investigador. 
Si conocemos mejor el grado de control de la diabetes podremos establecer 
estrategias e incidir sobre la evolución natural de la enfermedad, retrasar o 
prevenir las complicaciones y proporcionar una mejor calidad de vida al 
paciente diabético y a su familia, facilitar su desempeño laboral, disminuir el 
costo de la atención y reorientar los recursos para actividades de promoción 
y prevención de las enfermedades crónico-degenerativas, especialmente la 
diabetes mellitus. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 22 
 
 
 
 
OBETIVOS 
 
General: 
 
Evaluar el control glucémico en el paciente diabético tipo 2 en la Unidad de 
Medicina Familiar No. 47. 
 
Específicos: 
 
Determinar los niveles de HbA1c. 
 
Conocer el grado de control mediante el nivel de HbA1c. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 23 
 
 
 
 
 
 
 
MATERIAL Y METODOS 
 
Tipo y diseño de estudio 
 
Se trató de un estudio prospectivo observacional de diseño transversal. 
 
 
Población, lugar y tiempo de estudio 
 
Se efectuó en población derechohabiente de la Unidad de Medicina Familiar 
No. 47 del Instituto Mexicano del Seguro Social de San Luis Potosí, S. L. P., 
de marzo del 2004 a octubre 2005. 
 
Características de la muestra 
 
En base a la prevalencia nacional de diabetes tipo 2 en derechohabientes 
del Instituto Mexicano del Seguro Social mayores de 20 años (23), el cálculo 
del tamaño de la muestra se estimó en 28 pacientes. El reclutamiento se 
realizó por aleatorización simple, con un intervalo de confianza de 95 %. Fue 
incluido el primer paciente diabético citado en 20 consultorios del turno 
matutino y 20 del turno vespertino.Criterios de inclusión, exclusión y eliminación 
 
Los criterios de inclusión fueron: 
- Pacientes con diabetes mellitus tipos 2. 
- Sexo masculino o femenino. 
- Derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social. 
 24 
- Adscritos a médico familiar en la Unidad de Medicina Familiar No. 
47. 
- Que tengan al menos 8 consultas de control al año. 
- De 20 a 70 años de edad. 
- Que acepten participar en el estudio. 
Los criterios de exclusión fueron: 
- Que simultáneamente tengan atención médica para la diabetes en 
forma extrainstitucional. 
Los criterios de eliminación fueron: 
- Cambio de adscripción de la Unidad de Medicina Familiar No. 47. 
- Que decidan no continuar en el estudio. 
- Extravío del expediente clínico. 
 
Información a recolectar 
 
Valores de hemoglobina glucosilada A1c. 
 
 
Método de recolección de los datos 
 
Después de informar y solicitar permiso a la dirección de la unidad, dar a 
conocer el proyecto y el plan de trabajo a asistentes médicas, médicos, 
trabajadoras sociales y personal del laboratorio se procedió al reclutamiento 
de los enfermos, se explico a cada paciente las características y el objeto 
del estudio. Quienes aceptaron firmaron una carta de consentimiento 
informado. Se citó a los pacientes seleccionados, en ayunas, para la toma 
de muestras, las cuales fueron rotuladas y colocadas en termos para 
conservarlas a baja temperatura, posteriormente se trasladaron en forma 
 25 
inmediata al laboratorio de lípidos y carbohidratos de la Facultad de 
Medicina local. 
El procesamiento de muestras se llevó a cabo a través de electroforesis de 
intercambio catiónico en un aparato Zimatzu 1601. Se realizó 
estandarización con biorad teniendo los rangos de normalidad entre 6.02 a 
7.09 % de HbA1c. El procedimiento se efectuó en un cuarto frío con control 
de temperatura a 2 °C. Todas las muestras fueron procesadas en un solo 
tiempo por un solo investigador. 
 
Consideraciones éticas 
 
El procedimiento se ajustó a lo señalado en el artículo 3º fracción 3 de la Ley 
General de Salud. Se obtuvo además, previa información del proyecto, un 
consentimiento por escrito de los pacientes que participaron en este estudio 
(anexo 1). 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 26 
 
 
 
 
 
VARIABLES DEL ESTUDIO 
 
Nombre 
de la 
variable 
Tipo de 
variable 
Definición 
conceptual 
Definición 
operacional 
Escala 
de 
medición 
Unidad de 
medida 
Fuente 
 
HbA1c 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Control 
 
 
 
 
 
grado 
de 
control 
 
dependiente 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Independiente 
 
 
 
 
 
dependiente 
 
Prueba que 
utiliza la 
subfracción 
1c de la 
HbA para 
determinar 
el valor 
promedio de la 
glucemia 
en las 4 a 8 
semanas 
previas. 
 
Estado de 
normoglucemia 
Obtenido con 
tratamiento 
médico. 
 
Magnitud del 
estado 
glucémico de 
un paciente en 
un momento 
dado. 
 
Proporción 
de 
hemoglobina 
A1c que ha 
sido 
glucosilada. 
 
 
 
 
 
 
 
Nivel de 
HbA1c 
Menor a 
6.5 % 
 
 
Calificación 
del control 
glucémico 
de acuerdo 
al 
porcentaje 
de HbA1c 
encontrada. 
 
Razón 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Razón 
 
 
 
 
 
Razón 
 
Porcentaje 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Porcentaje 
 
 
 
 
 
Porcentaje 
 
Resultados 
obtenidos 
por el 
laboratorio. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Resultados 
obtenidos 
por el 
laboratorio. 
 
 
Resultados 
obtenidos 
por el 
laboratorio 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 27 
 
 
 
 
PLAN GENERAL DE TRABAJO 
 
 
 Orden Fecha Lugar Quien A quienes Que 
 
1º.. 
 
 
 
 
2º. 
 
 
 
 
3º. 
 
 
 
4º. 
 
 
 
5º. 
 
 2-05-
2005 
 
 
 
 
11-05-
2005 
 
 
 
 
12-05-
2005 
 
 
 
31-05-
2005 
 
 
 
1-06 al 
30-06-
2005 
 
 U.M.F. 47 
 
 
 
 
U.M.F. 47 
Delegación 
25 IMSS 
 
 
Facultad de 
Medicina 
U.A.S.L.P. 
 
Facultad de 
Medicina 
U.A.S.L.P. 
 
Facultad de 
Medicina 
U:A:S:L:P: 
 
Investigador 
 
 
 
 
Investigador 
 
 
 
 
Investigador 
 
 
 
Investigador 
 
 
 
Investigador 
 
Médicos 
familiares y 
asistentes 
médicas. 
 
Pacientes 
 
 
 
 
Pacientes 
 
 
 
Pacientes 
 
 
 
Pacientes 
 
Dar a conocer 
el plan de 
trabajo. 
 
 
Reclutamiento 
Por 
aleatorización 
simple. 
 
Toma y 
procesamiento 
de muestras. 
 
Resultados de 
muestras. 
 
 
Captura y 
Análisis de 
datos. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 28 
 
 
 
GRAFICA DE GANT 
 
 
 2004-2005 
 
 MES 
 
 
 
ACTIVIDAD 
M 
A 
R 
Z 
O 
A 
B 
R 
I 
L 
 
M 
A 
Y 
O 
 
J 
U 
N 
I 
O 
J 
U 
L 
I 
O 
 
A 
G 
O 
S 
T 
O 
S 
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P 
T 
 
O 
C 
T 
 
N 
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D 
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B 
 
M 
A 
R 
Z 
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B 
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L 
 
M 
A 
Y 
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J 
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J 
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L 
I 
O 
A 
G 
O 
S 
T 
O 
S 
E 
P 
T 
O 
C 
T 
ELABORACIÓN 
PROTOCOLO 
 
REGISTRO 
PROTOCOLO 
 
PRUEBA 
PILOTO 
 
COLECCIÓN 
INFORMACIÓN 
 
CAPTURA DE 
DATOS 
 
ANÁLISIS DE 
DATOS 
 
INTERPRET. 
RESULTADOS 
 
FORMULACIÓN 
DEL REPORTE 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 29 
 
PLAN DE ANÁLISIS 
 
Se realizó un análisis con medidas de tendencia central, y de dispersión y 
proporción. 
 
 
RESULTADOS 
 
Se estudiaron 37 pacientes diabéticos tipo 2 de la unidad de medicina 
familiar No. 47. La edad fluctuó entre un mínimo de 39 años y un máximo de 
70 años, con promedio de 56.5 años; 27 mujeres, que correspondieron al 
72.98 %, y 10 hombres que conformaron el 27.02 % ( gráfica 1). 
Se encontró una media de hemoglobina glucosilada A1c de 8.4%, una 
desviación estándar de ±1.131, ±1.00 para los hombres y ±1.17 para las 
mujeres. Una máxima de 13.3 % y una mínima de 5.5 % (cuadro 1); la 
proporción de pacientes controlados en relación a los criterios de la NOM 
para la Prevención, Tratamiento y Control de la Diabetes y de la ADA fue de 
8.10 %, y la de pacientes descontrolados 91.9 % (grafica 2 ). La proporción 
es de 9 a 1 (9 descontrolados por 1 controlado). Se observó además que el 
control fue regular en el 51.35 %, y malo también en el 40.54 % de los 
pacientes de acuerdo a la norma oficial mexicana arriba mencionada (cuadro 
2). 
 
 
 
 
 
 
 
 
 30 
 
 
 
 
 
 
 
GRÁFICA 1 
D IST R IB U C ION POR SEX O
74%
26%
M UJERES HOM BRES
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 31 
 
 
 
GRÁFICA 2 
 
C ON T R OL GLU C EM IC O
N IV EL D E HEM OGLOB IN A GLU C OSILA D A A 1c
8%
92%
CONTROLADOS HbA1c = o < 6.5%
DESCONTROLADOS HbA1c > 6.5%
* MODIFICACION NOM 015-SSA2-1994 PARA LA PREVENCION TRATAMIENTO Y CONTROL DE LA DIABETES
 
 
 
Cuadro 1 Niveles de Hemoglobina glucosilada A1c 
 
 NIVEL DE HbA1c 
SEXO SUMA 
MEDIA 
MEDIANA MODA MAXIMA MINIMA DIFERENCIA 
MASC 85.3 8.53 8.35 - 12.5 5.5 7 
FEM 225.2 8.34 7.8 7.7 13.3 5.5 7.8 
 
 
 
 
 
 32 
Cuadro 2 Grado de control del paciente diabético. 
 
 
GRADO DE 
CONTROL* 
 BUENO REGULAR MALO 
 HbA1c* < 6.5 % 6.5 a 8 % >8 % 
Porcentaje 8.1 % 51.35 % 40.54 % 
*Apéndice normativo E NOM 015SSA2-1994 para la prevención, tratamiento 
y control de la diabetes 
 
 
 
 
GR A D O D E C ON TR OL GLU C EM IC O
BUENO REGULAR MALO
8.1 %
51.35 %
40.54 %
 
 
 
 
 
 33 
 
DISCUSIÓN 
 
Lograr un control satisfactorio de las enfermedades crónicas debe ser el 
objetivo del equipo de salud para garantizar una mejor calidad de vida al 
paciente, mejorar el bienestar de la familia y disminuir el impacto en el 
sistema de salud. 
Es recomendable cuantificar los niveles de hemoglobina glucosilada A1c ya 
que nos permite conocer el valor promedio de la glucemia en las ultimas 
ocho a doce semanas; se ha demostrado además, que su índice predice el 
riesgo de desarrollo de muchas de las complicaciones crónicas dela 
diabetes (6). Debería ser una prueba rutinaria en todas nuestras unidades de 
salud para conocer el control real en nuestros enfermos y adecuar en forma 
correcta la terapéutica a seguir, ya que son menos útiles las glucemias de 
ayuno como base de su control (16, 50). Los médicos familiares en las 
unidades de primer nivel solo contamos con la determinación de la glucemia 
de ayuno y en ocasiones la glucemia de dos horas postprandial como 
parámetros de control. La glucosa sanguínea presenta muy poca 
sensibilidad para el diagnóstico de buen control glucémico sostenido del 
paciente (50, 51). En este estudio el 75.67 % de los pacientes tuvieron una 
glucemia de ayuno mayor de 110 Mg/dl. 
En otros estudios se ha encontrado que solo un 30 % de los pacientes 
diabéticos tienen valores de hemoglobina glucosilada A1c < 8 % (16), y el 
31% con valores de glucohemoglobina iguales o menores a 8.7% (19). 
Igual que en el presente estudio, en trabajos anteriores se refiere que la 
 34 
proporción en relación al genero es mayor en el sexo femenino que en el 
masculino (16,19,20,21). 
Los resultados de este estudio señalan un porcentaje de 91.9 % de 
pacientes descontrolados y un 8.10 % de pacientes controlados en relación 
a los criterios de la Norma Oficial Mexicana para la Prevención, Tratamiento 
y Control de la Diabetes (5). 
Contrastan los resultados de este estudio con los señalados anteriormente 
ya que el punto de corte que se utilizó es menor, 6.5%. Si tomáramos un 
valor de 8 % de Hb A1c se estarían incluyendo aquellos que tienen un 
control regular de acuerdo a lo Norma Oficial Mexicana vigente, y el 
porcentaje se elevaría a 59.45 % (5). 
A pesar de las estrategias establecidas por la Institución por llevarlos a un 
estado de control de acuerdo a la NOM vigente (5). 
Los valores promedio de hemoglobina glucosilada A1c encontrados en este 
trabajo son similares a los valores de otro estudio (40). 
En este trabajo se registraron escolaridad y peso a cada uno de los 
participantes, el 48.64 % estuvo en el nivel primaria, y el 62.16 % fueron 
pacientes obesos de acuerdo a la determinación de índice de masa corporal, 
según lo especifica la norma respectiva (5), estas condiciones pueden influir 
sobre el control del paciente diabético. 
 
 
 
 
 
 
 
 35 
CONCLUSIONES 
 
En nuestro estudio, con relación a los niveles de hemoglobina glucosilada 
A1c que mostraron las pacientes, podemos determinar que el grado de 
control es malo. 
Es necesario considerar otros puntos inherentes al paciente como: el grado 
de comprensión de las indicaciones, que curse o no con alteraciones del 
estado de animo y del tipo de apoyo familiar entre otras cosas. Además 
consideramos que es necesario que el personal de salud, incluidos los 
médicos, nos capacitemos adecuadamente y seamos más concientes de la 
trascendencia de un buen control del paciente. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 36 
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 diabetes tipo 2, habitantes de comunidades urbanas y rurales. Rev. Med. 
 IMSS 1998; 36(3): 191-197. 
43.-Rodríguez J., López J., Rodríguez Pérez J., Jiménez J. Características 
 epidemiológicas de los pacientes con diabetes en el Estado de México. 
 Rev. Med. IMSS 41; 2003:383-392. 
44-American Diabetes Association. Implicaciones del estudio clínico sobre el 
 control y complicaciones de la diabetes. Diabetes Care, 23 (Suppl. 1) 
 2000: S24-S26. 
45.-División Técnica de Información Estadística en Salud. Motivos de 
consulta en medicina familiar en el IMSS, 1991-2002. Rev. Med. IMSS 
41; 2003: 441-448. 
46.-Rodríguez J., Munguía C., López J., Hernández J., Casas E. Egresos de 
 pacientes diabéticos en un hospital general regional. Análisis de 7 años. 
 Rev. Med. IMSS 39; 2001:121-126. 
47.-División Técnica de Información Estadística en Salud. El IMSS en cifras: 
 indicadores de salud en el trabajo. Rev. Med. IMSS 39; 2001: 121-126. 
48.-División Técnica de Información Estadística en Salud. La mortalidad en 
 la población derechohabiente del IMSS, 2001. Rev. Med. IMSS 2003; 
 41(4): 345-354. 
49.-Arredondo A. Requerimientos financieros para la demanda de servicios 
 de salud por diabetes e hipertensión en México: 2001-2003. Rev. Invest. 
 Clin. 2001; 53(5): 422-429. 
 
 42 
50.-Bustos-Saldaña R. et al. Control de la glucemia en diabéticos tipo 2. 
 Utilidad de mediciones en ayunas y posprandiales. Rev. Med. IMSS 
 2005; 43 (5): 393-399. 
51.-García R. Comparación de la glucemia en ayuno y dos horas 
 postprandial en el control de pacientes con diabetes tipo 2. Rev. Invest. 
 Clínica 2003; 55 (1): 26-30. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 43 
ANEXO I 
 
 
CARTA DE CONSENTIMIENTO INFORMADO 
 
Por medio de la presente, en forma conciente, libre y voluntaria, acepto 
participar en el proyecto de investigación titulado Evaluación del apego al 
tratamiento en pacientes con diabetes mellitus tipo 2 de la U:M.F. No. 47 
Delegación 25 del I.M.S.S en el año 2005, registrado ante el Comité Local de 
Investigación con el número 2005-2402-005. 
 
El objetivo de este estudio es conocer el apego al tratamiento de los 
pacientes diabéticos en esta clínica, y de acuerdo a los resultados, planear y 
ejecutar acciones de tratamiento que nos permitan tener un mejor control de 
la enfermedad 
 
Entiendo que puedo negarme a participar sin que esto pueda afectar la 
atención médica que recibo del Instituto Mexicano del Seguro Social. 
 
El investigador me ha asegurado que no me identificará en las 
presentaciones y que se mantendrá la confidencialidad de la información 
relacionada con mi privacidad. 
 
Se me ha informado también que mi participación consiste en acceder a que 
se me tome una muestra de sangre para cuantificar hemoglobina 
glucosilada. 
 
 
San Luis Potosí, S.L.P., a ____ de _____________________ del año 2005 
 
 
 
___________________________ ___________________________ 
 Nombre y firma del paciente Nombre, matrícula y firma del 
 Investigador 
 
___________________________ ___________________________ 
 Nombre y firma de testigo Nombre y firma de testigo 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 44 
 
 
AGRADECIMIENTOS 
 
Reconozco el apoyo del personal de laboratorio de la Unidad de 
Medicina Familiar No. 47, en especial de la QFB Aurora Silva Ruiz, Jefa 
del mismo, para la toma de muestras. 
Mi gratitud para el QFB Enrique Tenorio Govea por su ayuda para el 
procesamiento de muestras. 
Mi agradecimiento también al Dr. J. Jesús Lugo Cortés, médico familiar 
y a la Enf. Hilda Almendárez Robledo, compañeros de la unidad, por 
su ayuda desinteresada. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
	Portada
	Índice
	Marco Teórico
	Planteamiento del Problema
	Justificación
	Objetivos
	Material y Métodos
	Plan de Análisis
	Discusión
	Conclusiones
	Bibliografía
	Anexo

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