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Av. Hidalgo 935, Colonia Centro, C.P. 44100, Guadalajara, Jalisco, México bibliotecadigital@redudg.udg.mx - Tel. 31 34 22 77 ext. 11959 UNIVERSIDAD DE GUADALAJARA COORDINACIÓN GENERAL ACADÉMICA Coordinación de Bibliotecas Biblioteca Digital La presente tesis es publicada a texto completo en virtud de que el autor ha dado su autorización por escrito para la incorporación del documento a la Biblioteca Digital y al Repositorio Institucional de la Universidad de Guadalajara, esto sin sufrir menoscabo sobre sus derechos como autor de la obra y los usos que posteriormente quiera darle a la misma. Universidad de Guadalajara Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades División de Estudios de Estado y Sociedad Departamento de Estudios en Educación Maestría en Investigación Educativa El Programa de Formación Docente de Educación Media Superior (PROFORDEMS) en un plantel de bachillerato tecnológico. Un estudio de caso desde un enfoque de políticas públicas. Tesis para obtener el grado de Maestro en Investigación Educativa Presenta: Paul Alberto Félix Martínez “Becado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología” Bajo la dirección de Dr. Salvador Jiménez Lomelí Zapopan Jalisco: 11 de diciembre del 2014 2 3 4 AGRADECIMIENTOS Al Dr. Salvador Jiménez Lomelí, Dr. José Luis Dueñas, y Dra. Lorena Hernández Yáñez que me acompañaron durante todo mi proceso formativo en la Maestría en Investigación Educativa. Agradezco todo su apoyo, paciencia, orientación y tiempo que dedicaron a mi proyecto de investigación. Así mismo, al Dr. Armando Aguilar Avalos de quien tuve todo su apoyo, y fue fundamental para mi avance. A la atención que nos brindó la Dra. Verónica Ortiz Lefort por medio de la coordinación de la maestría y de manera personal de inicia a fin de todo el proceso formativo. De igual manera, gracias a mis profesores durante mi estancia en Jaén, a la Dra. Belén Blázquez Vilaplana y al Dr. Eufrasio Pérez Navío, quienes me ayudaron a aclarar muchas cosas con su apoyo y confianza. Doy las gracias a mis compañeros, por ser un grupo muy unido con el que siempre pude contar para cualquier cosa. En especial, a mis compañeros Ariana de la Cruz, Aidee Patrón, Marco Ocegueda, Paula Martínez, Lizzie Madrigal, Julián Serrano, José Alfredo Cruz, Norma Macias, Nora Chávez y Bertha Alicia Guzmán. A CONACYT, cuyo apoyo fue necesario y de gran utilidad para concluir mis estudios de posgrado. Ha sido un honor. De manera especial, agradezco a mi familia quien fue un pilar básico durante mi trayectoria en la maestría. No pude haberlo logrado sin ustedes. Muchas gracias. 5 ÍNDICE INTRODUCCIÓN ........................................................................................................................................................... 7 CAPÍTULO I. POLÍTICAS PÚBLICAS Y FORMACIÓN DOCENTE EN LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR ......... 11 1. REVISIÓN CONCEPTUAL DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS .............................................................................. 11 2. PROBLEMAS QUE DERIVAN EN UN CURSO DE ACCIÓN O POLÍTICA PÚBLICA ......................................... 18 3. LA IMPLEMENTACIÓN DE LAS POLÍTICAS QUE ATENDERÁN UN PROBLEMA PÚBLICO ........................... 22 4. EL ANÁLISIS DE LA IMPLEMENTACIÓN DE POLÍTICAS PÚBLICAS ............................................................... 24 CAPÍTULO II. LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR Y ALGUNAS RECOMENDACIONES SOBRE LA FORMULACIÓN DE POLÍTICAS PÚBLICAS PARA EL NIVEL................................................................................. 30 1. ANTECEDENTES DE LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR .............................................................................. 31 2. ESTRUCTURA E IMPORTANCIA DE LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR ...................................................... 33 3. LA EDUCACIÓN TECNOLÓGICA Y EL CENTRO DE BACHILLERATO TECNOLÓGICO INDUSTRIAL Y DE SERVICIOS (CBTIS). .......................................................................................................... 37 4. POLÍTICAS DE ORGANISMOS INTERNACIONALES PARA LA FORMACIÓN DOCENTE ............................... 39 5. LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR EN LOS PROGRAMAS SECTORIALES DE EDUCACIÓN DEL ESTADO MEXICANO ................................................................................................................................. 41 CAPÍTULO III. EL PROGRAMA DE FORMACIÓN DOCENTE Y CALIDAD EDUCATIVA EN EL MARCO DE LA REFORMA INTEGRAL DE LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR ............................................................................. 47 1. FORMACIÓN DOCENTE Y CALIDAD EDUCATIVA .......................................................................................... 48 2. FORMACIÓN DOCENTE EN EL NIVEL MEDIO SUPERIOR .............................................................................. 53 6 3. LA REFORMA INTEGRAL DE LA EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR ................................................................. 59 4. EL INGRESO AL SISTEMA NACIONAL DE BACHILLERATO ............................................................................ 66 5. EL PROGRAMA DE FORMACIÓN DOCENTE EN EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR (PROFORDEMS) .......... 68 CAPÍTULO IV. EL PROFORDEMS EN UN CENTRO DE BACHILLERATO TECNOLÓGICO INDUSTRIAL Y DE SERVICIOS (CBTIS): EL ESTUDIO DE CASO ......................................................................................................... 72 1. LA CONSTRUCCIÓN METODOLÓGICA ............................................................................................................ 72 2. RESULTADO DEL ANÁLISIS DE LA IMPLEMENTACIÓN DEL PROFORDEMS ............................................... 79 2.1 LA DIFUSIÓN, EL PRIMER MOMENTO DE LA IMPLEMENTACIÓN DE LA POLÍTICA. MEDIACIONES, RESPONSABLES Y EFECTOS. ......................................................................................................................... 81 2.2 EL INGRESO AL PROFORDEMS. NO SÓLO UNA EXIGENCIA INSTITUCIONAL ...................................... 83 2.3 LAS PRIORIDADES Y LO QUE SUBYACE EN LA IMPLEMENTACIÓN DEL PROFORDEMS .................... 87 2.4 LOS RECURSOS INSTITUCIONALES Y PERSONALES REQUERIDOS EN LA IMPLEMENTACIÓN DEL PROFORDEMS ............................................................................................................................................. 92 3. LA VISIÓN DE LOS ACTORES EN TORNO A LOS EFECTOS DEL PROFORDEMS COMO FACTOR PARA ELEVAR LA CALIDAD EN EL DESEMPEÑO DOCENTE ......................................................................................... 100 3.1 EL PROFORDEMS COMO ESPACIO FORMATIVO: LA VISIÓN DE LOS ACTORES ............................ 102 4. MEJORAR LA POLÍTICA DE FORMACIÓN DOCENTE .................................................................................... 108 CONCLUSIONES ...................................................................................................................................................... 111 BIBLIOGRAFÍA .......................................................................................................................................................... 114 7 INTRODUCCIÓN La Educación Media Superior (EMS) se fue perfilando en nuestro país desde 1823 cuando se crea el Reglamento General de Instrucción Pública, con el que se le encomendaba al Estado el cuidado de los colegios preparatorios. Desde entonces, este sistema ha pasado por diversas modificaciones en cuanto a sus estructuras, políticas que lo regulan, planes de estudio y organización. Esta serie de modificaciones de la EMS, ha venidogenerando una gran cantidad de problemáticas que se presentan en este nivel, por ejemplo, indicadores deficientes en índices de aprobación, deserción y eficiencia terminal; una dispersión entre las distintas modalidades y programas inconexos; falta de políticas específicas que permitan dar una identidad a este nivel; y una pobre formación de los docentes de este nivel. Respecto a estas dificultades, organismos internacionales como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y Banco Mundial han tratado de realizar recomendaciones de políticas públicas a nuestro país que permitan mejorar del nivel medio superior. También el Estado mexicano ha realizado esfuerzos, aunque en la mayoría de las veces las deficiencias y dificultades siguen persistiendo. A pesar del empeño que estos organismos internacionales y el Estado han puesto en mejorar la EMS, un aspecto que no ha favorecido su mejoramiento es que este nivel ha sido poco atendido, ya que se ha prestado mayor atención a la educación superior o básica. Es por ello que consideramos que este estudio será un aporte empírico que 8 contribuya a comprender mejor nuestro objeto de estudio: el Programa de Formación Docente de Educación Media Superior (PROFORDEMS). Hemos decidido enfocarnos en este programa, ya que es la política actual que se encarga de proporcional formación a los docentes del nivel medio superior. De manera concreta, el presente estudio tuvo como finalidad realizar un análisis de la implementación del PROFORDEMS en un plantel de bachillerato tecnológico. Nos basamos en los referentes sobre el análisis de políticas públicas para recuperar las experiencias que los profesores tuvieron en la implementación de este programa, donde la pregunta principal fue: ¿Cuál es el punto de vista de lo profesores sobre la implementación del PROFORDEMS en el Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios 10? Con base en la pregunta anterior, el objetivo general de nuestra investigación es analizar la implementación del PROFORDEMS como política pública en un centro de bachillerato tecnológico, mediante el punto de vista que los profesores tuvieron sobre su experiencia en este programa. Para ello, nos basamos en una perspectiva cualitativa ya que este es un problema poco estudiando y era el paradigma que a nuestro juicio mejor se adaptaba para dar respuesta a la pregunta de investigación, además, utilizamos la entrevista semiestructurada, la cual permitió que pudiéramos conocer de manera más precisa la experiencia de los profesores agregando preguntas al momento de hablar con ellos. Las preguntas en estas entrevistas estuvieron guiadas por el marco de referencia del análisis de las políticas públicas. 9 A continuación mostramos estructura general de esta investigación en cada uno de sus capítulos, de manera que podamos tener una idea de lo que encontraremos a lo largo de este trabajo. En el capítulo I definimos qué son políticas públicas y cómo surgen, lo cual es necesario para comprender los elementos que se deben tomar en consideración al momento de realizar el análisis de la implementación de una política, esto se tomó como base para nuestro estudio de caso. En el capítulo II presentamos los antecedentes de la EMS, su estructura y cómo está organizada la educación tecnológica y el Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (CBTIS) con el fin de contextualizar nuestro objeto de estudio en una breve historia así como en el momento presente. Así mismo, con el objetivo de tener una idea de dónde surge la política actual de formación docente, es decir el PROFORDEMS, mencionamos algunas de las recomendaciones más relevantes para mejorar la EMS han hecho organismos internaciones como la OCDE, la UNESCO y el Banco Mundial. Por último, describimos las políticas de los programas sectoriales de educación en nuestro país que son los antecedentes directos y la base de la política que en este estudio analizamos. El capítulo III se enfoca en la Reforma Integral de la Educación Media superior (RIEMS), dentro de la cual se inserta el PROFORDEMS. De esta forma podemos definir y conocer la política del nivel medio superior y de formación docente que es la que estudiamos en esta investigación. Así mismo, definimos qué es la formación 10 docente y la calidad educativa que es uno de los objetivos de la Reforma de este nivel. También se abordará con más detalle las problemáticas de la EMS. En el capítulo IV alude a dos aspectos. Primero a describir nuestra unidad de análisis, el CBTIS 10 y también se da cuenta de la metodología empleada en este estudio. Destaca de manera especial la utilización del método cualitativo del estudio de caso, el instrumento de recogida de datos que corresponde a la entrevista semiestructurada y las características del objeto. Por otro lado, se entra de lleno en los resultados que se han encontrado en esta investigación, los cuales se presentan en este capítulo. Finalmente, cerramos esta investigación con un apartado sobre las conclusiones a las que hemos llegado con base en el análisis del PROFORDEMS en el CBTIS 10 desde la postura de los profesores. También hablaremos sobre algunas de las limitantes de este estudio y otras líneas de investigación que podrían seguirse. 11 CAPÍTULO I Políticas públicas y formación docente en la Educación Media Superior El presente estudio tiene como fundamento el enfoque de políticas públicas para analizar la implementación del Programa de Formación Docente en Educación Media Superior (PROFORDEMS). Se hablará de algunos referentes del análisis de las políticas públicas, para definir qué son y su utilidad como herramientas para atender una problemática de índole social o pública. También se intentará explicar cómo las políticas públicas se diseñan, implementan y evalúan; es decir, se verán sus diferentes etapas, además los tipos en los que algunos autores las han dividido. Se hará más énfasis en qué consiste la etapa de implantación de las políticas públicas y cómo es su análisis, ya que este estudio se centró en tratar de analizar la implantación del PROFORDEMS en un plantel de bachillerato tecnológico. 1. Revisión conceptual de las políticas públicas Parece haber consenso de que el estudio de las políticas públicas nace formalmente en los ámbitos académicos de los Estados Unidos de América en la segunda mitad del siglo XX y tiene como evidencia clara, la publicación en 1951 del llamado “artículo fundador” La orientación hacia las políticas, escrito por Harold D. Lasswell (Aguilar, 2003a, p. 77). Sin duda que uno de los intereses fundamentales del análisis de políticas fue conocer los impactos de la toma de decisiones muy diversas en escenarios como el económico, educativo, del transporte, de la planeación urbana o la 12 salud. La necesidad de obtener información sobre estas esferas de la sociedad fue el principal motivador para desarrollar nuevos métodos de investigación, orientados a analizar problemas y desarrollar alternativas para solucionarlos. Más tarde, en la década de 1960 a decir de Parsons (2007) se comienza a utilizar el término de “análisis de políticas públicas” en diversos documentos gubernamentales. Dicho concepto se definirá más adelante en este capítulo; no obstante, se comenzará por definir qué son y qué se entiende por políticas públicas. Para Parsons (2007) las políticas públicas son la manera en que los gobiernos deciden y actúan ante una problemática de carácter púbico, es decir, las decisiones ante asuntos que son de interés para los ciudadanos o para un grupo determinado de la población. Además, establece que las políticas públicas son un campo que se encarga de estudiarlos problemas públicos y los procesos de decisiones de las autoridades, ya sea para indagar por qué se toman determinadas decisiones, o para evaluarlas y saber qué implicaciones tiene en los sujetos a los que se dirigen. De igual manera, este autor apunta que es pertinente analizar las estrategias de acción que los gobiernos promueven ante la gran diversidad de problemas y situaciones que enfrentan. Por su parte Lahera (2002), menciona que las políticas públicas son cursos de acción que contienen flujos de información desarrollada por un cuerpo multidisciplinario de profesionales en relación a un objetivo público definido, el cual afecta al sector público, por lo que se orienta dicho curso de acción a solucionar un problema público1. 1 La definición de problemas públicos se verá de manera detallada en el apartado dos de este capítulo titulado “Problemas que derivan en un curso de acción o política pública”. 13 También las políticas públicas son vistas como un curso de acción desde la postura de Lasswell (1970), y denota esto con el término de policy. Añade también que las políticas públicas pueden ser asociadas con un discurso con ausencia de acción y toma de decisiones poco fundamentadas. Asimismo cuando habla del concepto politics se refiere a todo lo que tiene que ver con grupos de poder, partidos políticos y cargos de elección popular como diputaciones, senadurías, etc. Otras posturas consideran a las políticas públicas como los objetivos, decisiones o acciones que un gobierno implementa en un determinado momento para solucionar un problema de carácter público, donde es importante considerar a los decisores, operadores y analistas que toman un conjunto de decisiones para lograr un propósito, así como también, se debe considerar los sujetos a quienes va dirigido este curso de acción (Subirats, Knoepfel, Larrue y Varonne, 2008). Para otros autores que han reflexionado sobre políticas públicas, éstas no solo pueden ser interpretadas como cursos de acción, sino que pueden tomar diversas formas: leyes, órdenes locales, juicios de corte, órdenes ejecutivas, decisiones administrativas y hasta acuerdos no escritos (Lasswell, 1970). Pero en general, todas estas variantes de políticas tienen un proceso o etapas de desarrollo similar, que se detallaran un poco más adelante. De acuerdo con esta postura, el Programa de Formación Docente de Educación Media Superior (PROFORDEMS), la entenderemos aquí como una política pública en la que se tomaron, por ejemplo diversas decisiones de corte administrativo. 14 En este estudio se entiende como política pública la respuesta y decisión que puede ser interpretada como un curso de acción por parte del Estado o del gobierno ante un problema que surge de las necesidades de la sociedad. En el capítulo III se observará cómo el gobierno federal de nuestro país, con el fin de atender algunas de las deficiencias de la Educación Media Superior (EMS), puso en marcha el curso de acción conocido como Reforma Integral de la Educación Media Superior (RIEMS); entre sus objetivos se encontraba mejorar las añejas deficiencias del nivel y junto a esta Reforma el PROFORDEMS, se encaminó a mejorar el desempeño docente del profesorado. Precisamente este programa se erige como la política pública concreta objeto de interés de este estudio. En resumen, las políticas públicas definen cursos de acción y esquematizan soluciones para resolver problemas, las cuales se aplican generalmente bajo el liderazgo gubernamental y suelen ser puestas en marcha con la ayuda de las propias instituciones del estado. Todo esto, mediante un conjunto de estrategias y decisiones tomadas por el gobierno en algunos casos con consultas previas a la sociedad, el sector privado, las organizaciones no gubernamentales, los organismos internacionales y las organizaciones sociales (Aguilar, 2003a). Por otra parte, cabe destacar que existen diferentes tipos de políticas públicas. Algunos autores hablan de tres clasificaciones. La primera de ellas corresponde a las políticas distributivas que se caracterizan por ser implementadas a corto plazo y se basan en decisiones individuales de ciertos grupos de poder, los cuales usualmente no toman en cuenta las limitantes que puede implicar los recursos disponibles, por lo que se puede no considerar todas las necesidades de los beneficiarios o de las partes que 15 son afectadas por la política. Es decir, “las políticas distributivas podrían no ser políticas, pues son decisiones individualizadas” (Lowi, 1964, p. 179). La segunda clasificación corresponde a las políticas regulatorias, las cuales hacen un análisis más integral al tomar en cuenta quién se verá afectado y beneficiado durante la implementación. Por último, se encuentran las políticas redistributivas, que influyen de manera más general al afectar o beneficiar por igual a los destinatarios. Siguiendo a Lowi (1964), la implementación del PROFORDEMS desde nuestra perspectiva, se acerca a la postura regulatoria, atendiendo a la definición oficial de los acuerdos secretariales de que esta fue una política cuya decisión y formulación, se realizó por un consenso en el que se tomó en consideración el punto de vista de distintos actores y cómo este curso de acción afectaría a la formación docente (Diario Oficial de la Federación, 2008a). Sin embargo, otros puntos de vista como los de Bracho (2009) y Del Toro (2009), desde nuestra lectura señalan que el PROFORDEMS se sitúa en una política de tipo distributiva ya que algunos docentes refieren que en el proceso de toma de decisión no se tomó en consideración la participación de todos los actores ni cómo sería el manejo de los recursos durante la implementación. Como se puede observar, existen divergencias sobre este programa. No obstante, se hablará más a detalle sobre esto en el capítulo IV, donde se presenta el estudio de caso y se reconstruye y analiza la experiencia de los profesores del Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios 10 (CBTIS 10) sobre el proceso de implementación del PROFORDEMS. 16 Otra perspectiva de la clasificación sobre las políticas públicas, corresponde a la propuesta por Allison (1969), quien menciona el modelo de la política racional, el cual se centra en dar respuesta a un problema público donde se toma en consideración las recomendaciones de estrategias internacionales para atender objetivos nacionales. En segundo lugar, está el modelo del proceso organizacional, donde se definen las políticas con base en la información de instancias u organizaciones gubernamentales. Por ejemplo, para el caso de la definición tanto de la RIEMS como del mismo PROFORDEMS se tomó en cuenta información de organismos como la Subsecretaría de Educación Media Superior (SEMS) y del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE). Por último, en el tercer modelo que es el de la política burocrática, “las decisiones y acciones gubernamentales emergen como un collage” (Allison, 1969, p. 710), en el cual influyen los planes nacionales, las organizaciones e incluso las metas personales de los políticos. En consecuencia, se considera a este modelo no como un conjunto coherente de objetivos, sino como un “estira y afloja” de la política. También en el capítulo IV se verá cómo es que los docentes tienden a aludir que el PROFORDEMS fue implementado sobre esta perspectiva de la política burocrática. Como se puede observar, de acuerdo con las distintas definiciones sobre qué es una política y los tipos de ella que existen, tal y como se mencionó líneas arriba, el estudio de las políticas públicas es un asunto complejo por la variedad de posturas que existen. En consecuencia, es pertinente tener en claro a qué se refieren los cursos de acción para un propósito muy específico:el análisis de la política de formación docente en el nivel medio superior, es decir el PROFORDEMS. No obstante, es importante 17 también dejar en claro que el estudio de políticas públicas no solo abarca definiciones y tipos, sino que también estas tienen una serie de etapas o fases por medio de las cuales se van desarrollando. Diversos autores han hablado sobre qué etapas involucran al proceso de las políticas, y aunque algunos mencionan u omiten algunas etapas, en términos generales suelen referirse a un proceso similar. Por ejemplo, De Leon (1983; citando en Aguilar, 2003c) propone un modelo de seis etapas para el proceso de las políticas públicas: 1) iniciación, que consiste en el planteamiento del problema, definir los objetivos y diseñar opciones de acción; 2) Estimación, donde se hace un examen científico de los impactos para cada opción, bosquejo del programa y examen de las consecuencias; 3) selección, donde se toma la decisión de atender una de las opciones de acción; 4) implementación, en la cual se desarrollan normas, procedimientos y lineamientos para la puesta en práctica de decisiones incluyendo el calendario de la planeación; 5) evaluación, en la cual se comparan los niveles esperados de rendimiento de la política; y 6) terminación, donde se hacen mejoras en la política si es necesario. Otro modelo del proceso de las políticas públicas es el que plantea Pérez (2005), que consta de cuatro etapas: 1) definición del problema y entrada en la agenda; 2) elaboración y diseño de la política; 3) implementación y ejecución; 4) evaluación. Cabe destacar que esta serie de etapas de las políticas públicas no es lineal ya que el proceso es dinámico y se puede analizar cada una de las fases y tomar decisiones en ellas. 18 Como se puede observar, las dos posturas presentadas anteriormente sobre el proceso que siguen las políticas públicas son de manera similar, aunque algunas presentan diferente número de etapas. En este orden de ideas acerca de las fases de una política, este estudio se centró en analizar cómo fue la fase de implementación del programa de formación docente en el nivel medio superior. Hasta este momento, se ha definido qué son las políticas públicas, cómo se clasifican y cuáles es son sus etapas. Pero también es importante dejar en claro de dónde surgen las políticas, lo cual se verá a continuación. 2. Problemas que derivan en un curso de acción o política pública Las políticas públicas son un asunto complejo, y se definen con base en cómo se construyen las problemáticas públicas. Respecto a los problemas públicos, éstos se refieren a la existencia de alguna situación colectiva que requiere la regulación o intervención gubernamental mediante la adopción de medidas comunes para todos los involucrados en determinada situación (Parsons, 2007). En cuanto a los problemas públicos, qué son y cómo se definen depende de la forma en que los diseñadores de las políticas públicas buscan aproximarse a un tema o evento. En el gráfico 1 se muestra el proceso general de una política pública. 19 Grafico 1 Etapas generales para llegar a una política pública Fuente: Parsons (2007). De acuerdo con el esquema anterior, puede haber un tema de interés en la sociedad el cual se trasformará en un problema público una vez que este represente consecuencias y con ello venga la necesidad de tomar medidas que deberán ser atendidas por la parte gubernamental, es así a grandes rasgos la manera en la que surge una política pública. Este proceso no es algo lineal, sino que involucra la participación y percepción de distintos actores entre ellos los llamados Policy Makers (diseñadores), burócratas, la población, organismos internacionales, incluso los mismos beneficiarios de la política sobre si un tema implica un problema público y cómo debe ser abordado. Es por ello que debido a una gran cantidad de posturas, algunas veces la definición de los problemas públicos pueden no ser muy precisos, pero se debe tomar en consideración cada una de estas opiniones (Parsons, 2007). Otro asunto importante a considerar es el contexto de una situación que define también la política pública, así como las acciones, estrategias y reacciones por parte de los implicados. Para el caso de este estudio, la formación docente en el nivel medio superior implica un problema público, ya que por una parte involucra a una colectividad formada por los profesores de este nivel, y por otro lado es asunto del Estado porque TEMA DE INTERES PROBLEMA RELATIVO AL TEMA POLÍTICA PÚBLICA 20 es el que tiene a su cargo la educación. En el capítulo II se reflexiona sobre las causas que desencadenaron la política de formación docente para la EMS. Además de definir qué son los problemas públicos y su influencia en la formulación de políticas Bossar (1941; citado en Parsons, 2007, p. 130), propone las siguientes etapas del ciclo de vida de los problemas: reconocimiento del problema; discusión sobre la gravedad del problema; intentos de reforma con escasa asesoría; sugerencias sobre las necesidades de hacer un estudio más detallado; se enfatizan factores elementales; se llega al programa de manera deductiva; se proponen formas de implementación; se pulen los conceptos y procesos de implementación; y es puesta en marcha la política entendida como curso de acción. Blumer (1971, citado en Parsons, 2007) considera que los problemas existen cuando un grupo de la población considera ciertas situaciones indeseables. Desde esta postura, los problemas son producto de la definición colectiva, pero también son subjetivos. Se amplió esta idea de percepciones subjetivas argumentando que estos son movimientos sociales fuertemente influenciados por el comportamiento de las personas, grupos de interés y grupos de presión. No obstante, el hecho de que existan ciertas situaciones no significa que constituyan problemas que requieren políticas públicas. Un problema debe implicar consecuencias y necesidad de solución, como sería el caso de las problemáticas de la EMS, dado que es un subnivel que durante décadas no había merecido la atención debida del gobierno federal. Basta recordar que la Subsecretaría de Educación Media Superior fue creada recientemente en el año 2005 (Diario Oficial de la Federación, 2012). 21 Una vez identificado un problema público, éste será tomado o asumido por el gobierno, en donde los diseñadores de políticas, con ayuda de un equipo multidisciplinar de diversas ciencias relacionadas con el estudio de las políticas, analizarán la situación problemática con el fin de diseñar estrategias y objetivos. Luego, establecerán metas, considerarán recursos así como recomendaciones de organismos internacionales, el contexto, y experiencias previas para la movilización y diseño de un plan oficial, es decir, para el curso de acción que se llevará a cabo para atender el problema identificado y declarado como público (Aguilar, 2003a). En este apartado se ha analizado cómo de los problemas colectivos o públicos surge la necesidad de crear políticas para solucionarlos, y cómo la creación de estas políticas puede estar influenciada por factores tales como la percepción de los actores involucrados en la situación; el contexto en el que se desarrolla la política; los grupos de interés que pueden influir en el establecimiento de si algo es un problema o no, o en el mismo establecimiento de objetivos; experiencias previas de otras políticas similares que se han establecido para atender problemas parecidos e incluso, los recursos con los que se cuenta. La siguiente sección trata acerca de la fase del ciclo de las políticas públicas que es de interés para este estudio, es decir, la implementación, para después pasar a especificar cómo es el análisis de esta fase y qué elementos se deben tomar en consideración.22 3. La implementación de las políticas que atenderán un problema público La implementación de las políticas públicas puede definirse como la interacción entre las metas y acciones emprendidas para solucionar el problema que desencadenó la política, donde se involucran los implementadores, formuladores de las políticas y los analistas de la misma que deben de tener en consideración algunos aspectos: las metas y objetivos claramente definidos, una adecuada coordinación y comunicación, las normas para su puesta en práctica, el tiempo adecuado para lograr los objetivos, y la teoría que de sustentó al curso de acción (Parsons, 2007). No obstante, al margen del modo como debe ser la implementación de políticas, es decir, como una fase que trata de cumplir las metas con el trabajo en conjunto de los actores involucrados, puede haber desacuerdos. Por ejemplo, acerca de las metas y objetivos de las políticas, vaguedad y ambigüedad, incertidumbre acerca de su operatividad en la práctica, complejidad de procedimientos, inconsistencia entre los recursos disponibles así como poca claridad de los problemas que atiende (Aguilar, 2003b). La implementación, debido a estas dificultades y desacuerdos, va más allá de una fórmula o una serie de pasos, siendo más bien un proceso que requiere acuerdos entre los individuos involucrados además de tomar en cuenta que no todos perciben la realidad de la misma forma, por lo que es necesario comprender las diversas posturas del conocimiento, creencias, significados y los valores de los sujetos involucrados (Parsons, 2007). 23 Cabe añadir que en la implementación se debe tener en consideración cuestiones operacionales así como de recursos. Para las que son de carácter operacional, es importante preguntarse quién recibirá el servicio, de qué tipo de servicios se trata, cuáles son los posibles puntos de vista de los actores y hasta qué punto se puede controlar la política. En cuanto a los aspectos de recursos, se debe considerar cómo se financia la política, la cantidad de recursos disponibles, los recursos humanos con los que se cuenta y el equipo técnico e infraestructura (Parsons, 2007). En este sentido, en el capítulo del análisis de datos se verá cómo se dieron algunos aspectos tanto de carácter operacional así como de recursos en la implementación del PROFORDEMS en el plantel seleccionado. La implementación es una etapa de la política pública en la que pueden surgir problemáticas que no fueron previstas, debido a causas tales como cuestiones de manejo de recursos, de diferentes puntos de vista de los actores, de que las acciones no atienden de manera adecuada el problema que se pretende solucionar o de que las metas no están claramente definidas o bien comprendidas por todos los actores involucrados. Desde este punto de vista, se pretende conocer si los profesores conocieron los objetivos de la política, si los recursos para ellos fueron los adecuados y las ventajas y limitaciones que presentó en general este curso de acción para formarlos y especializarlos como docentes en EMS. Como se pudo ver en esta sección, la implementación de las políticas públicas implica la interacción de metas y objetivos claros con acciones para poner en práctica el curso de acción, es decir, para implementarla con base en los recursos disponibles, el tiempo, las cuestiones problemáticas no previstas e instancias gubernamentales de 24 apoyo. Enseguida se especifica un asunto nodal en este estudio, el análisis de la implementación de las políticas públicas. Cabe destacar que un análisis en políticas se puede realizar en cada una de las fases, es decir, análisis del diseño, de la entrada en la agenta o en cualquier etapa, pero este estudio se centró en la fase de la implementación. 4. El análisis de la implementación de políticas públicas El análisis de la implementación de las políticas públicas consiste en indicar cuáles son los objetivos de una política, las opciones de acción que tiene para lograrlos, los medios que incorpora y el cálculo de sus consecuencias o efectos (Aguilar, 2003b). El análisis de la implementación incluye todas aquellas actividades dirigidas a conocer sus resultados o desarrollar conocimiento que sea relevante para la formación de nuevas políticas (Torgerson, 1986). También tiene como propósito detectar las dificultades que se dan en la implementación para generar información que permita corregir y revisar la política, aunque no es necesario evaluar toda la política en su totalidad al haber unas muy extensas, sino puede ser una parte de ella (Majone, 1978). Los analistas de políticas púbicas buscan por lo general saber con claridad los resultados, el grado con que se alcanzan objetivos y cómo las políticas públicas afectan a ciertos individuos o grupos. Consideran que una política funciona cuando sus resultados son acordes a los objetivos y logran solucionar los problemas públicos de la mejor manera posible. Para llevar a cabo un análisis de políticas públicas, los analistas requieren tener conocimientos teóricos de política, sobre el problema que atienden y 25 cómo surgió, el contexto de éste, los actores implicados, e incluso en algunos casos la teoría en la que se basa la política (Behn, 1986; citado en Aguilar, 2003a). Pueden ocuparse también de estudiar procesos de decisión de las autoridades mediante las estrategias de acción que fueron acatadas en un determinado tiempo por algún gobierno. Otro aspecto importante para los analistas de políticas es tomar en consideración sus componentes. Aguilar (2003b) alude a cuatro de ellos: a) la autoridad que la elabora; b) las decisiones que se toman; c) las acciones llevadas a cabo; y d) el efecto que tienen. Estas prácticas de análisis de políticas públicas forman parte de una corriente conocida como policy sciences, que mediante un conjunto de ciencias sociales como la psicología, historia, sociología o derecho se encargan de estudiar los procesos de las políticas así como los efectos que causan. En sus inicios, el análisis estaba fuertemente influenciado por corrientes conductistas y se interesaba en las instituciones, estructura del gobierno, en los procesos de comportamientos políticos y la justificación filosófica del gobierno (Aguilar, 2003b). En la actualidad, el análisis de políticas está orientado a construir las mejores opciones de política y a evaluar sus resultados. Se utiliza también para denotar cualquier estudio relativo a las causas, efectos, procesos, contenidos, restricciones o modalidades de las políticas (Aguilar, 2003b). 26 El análisis incluye investigaciones de las causas y consecuencias de las políticas o programas de gobierno. En los estudios que se enfocan en conocer las causas de las políticas se analizan factores como las fuerzas sociales, económicas, tecnológicas o políticas que influyen en los cursos de acción. En los estudios de las consecuencias de políticas públicas se estudian los efectos que tienen estos cursos de acción; comúnmente estas investigaciones pueden ser llamadas de impactos de las políticas (Aguilar, 2003a). Los métodos usados para el análisis de políticas se basan en la argumentación cuantitativa y/o cualitativa para poder producir información relevante que ayude a mejorar la definición de los problemas que se puedan presentar en los cursos de acción tomados. Se analizan estudios de caso debido a la gran diversidad de problemas y políticas para cada uno de ellos, y en este proceso se incluyen resultados de investigaciones similares con el fin de tener elecciones alternativas, así como para determinar las necesidades futuras de información importante para las políticas (Aguilar, 2003a). Desde esta perspectiva el análisis de políticas busca ayudar al decisor a escoger el mejor curso de acción posible mediante la investigación integraldel problema, de sus objetivos y opciones de decisión, así como el uso de un marco de referencia para aplicarlo al problema. En esta visión del análisis de las políticas se hacen valoraciones de equidad pública, viabilidad política, factibilidad administrativa, eficiencia operativa, asignación de recursos, planeación y persuasión o elección de estrategias (Quade, 1975). 27 Majone (1978) menciona también que es fundamental la argumentación para explicar y analizar una política. Refiere que el análisis de políticas se torna como un proceso artesanal en el que se utilizan datos, recolección de información y teorías con el fin de producir evidencias y argumentos persuasivos de la calidad y pertinencia de una política, así como el conocimiento de sus efectos. Este trabajo artesanal se realiza mediante la argumentación, que es la manera en que se conectan los datos y la información de apreciaciones subjetivas de los actores implicados con los resultados del análisis de la política. Para su éxito, la argumentación requiere evidencia relevante, no simplemente de hechos y datos, sino de información de estos actores involucrados. En esta propuesta cada actor es exhortado a expresar sus puntos de vista, de forma que el análisis de la política puede producir resultados que van más allá de la capacidad de los métodos cuantitativos tradicionales (Majone, 1978). Con la participación de los actores a través de sus puntos de vista, se logra un esclarecimiento de las cuestiones controversiales de la política y las razones que la sustentan. El proceso de análisis de los puntos de vista de los implicados se puede centrar en solo unos pocos actores relacionados de forma directa con el curso de acción (Aguilar, 2003b). De acuerdo con Gordon (1997: citado en Parsons, 2007) existen tres variedades en el análisis de políticas públicas: la primera es el análisis de determinación, que se centra en describir el cómo, por qué, cuándo y para quién se formuló la política; la segunda corresponde al análisis del contenido, que se encarga de realizar una descripción crítica; y por último, el seguimiento y evaluación, que consiste en examinar el desempeño práctico de la política para compararlo con sus objetivos. Desde esta 28 postura, nuestro estudio tiene que ver con estas etapas que aluden al análisis de la implementación de la política del PROFORDEMS que realizamos en un plantel de bachillerato tecnológico, desde la voz de los destinatarios. Hay ciertos aspectos que es importante considerar en el estudio de una política; como se mencionó en secciones anteriores Majone (1978) señalan que no todos los actores implicados entenderán de la misma manera las políticas públicas, en tanto el servidor público puede tener cierta percepción de ellas, el analista otra y los actores a los que van dirigidas otra muy distinta. Así pues, fue de interés conocer lo que pensaron algunos profesores destinatarios de la política de formación docente conocida como PROFORDEMS. Cabe destacar que algunos investigadores (Narro, 2009; Lozano, 2012; y Villa, 2012) que han trabajado sobre el tema han ido más lejos y tratan de analizar la política más allá de lo dicho por la parte gubernamental y se han centrado en las consecuencias o efectos del programa. Esto requirió de mucha apertura para recabar información, porque el evaluador debe descubrir las consecuencias de las políticas no solo limitándose a los puntos de vista de funcionarios, sino que debe tomar en consideración datos de diversas fuentes y la opinión de los actores involucrados. 29 En este capítulo se ha intentado construir un marco general que recupera lo más relevante del análisis de políticas, señalando cómo se formula un problema público y cómo para solucionarlo se establecen cursos de acción encaminados a resolver determinadas problemáticas. Se revisó también cómo será entendido en este estudio el concepto de política pública así como sus fases, en especial la de implementación que es la de interés para cumplir con el objetivo de la investigación. En el siguiente capítulo se verá algunos antecedentes de la educación media superior en México y cómo surge este nivel. Así mismo, analizamos la estructura de este nivel educativo. 30 CAPÍTULO II La Educación Media Superior y algunas recomendaciones sobre la formulación de políticas públicas para el nivel En el capítulo anterior presentamos el marco de referencia que nos ha servido de plataforma para este trabajo, el cual tiene que ver con el estudio de las políticas públicas. De manera específica se puntualizó que la mirada está puesta en la fase de la implementación para hacer un análisis de la misma. Mencionamos que uno de los aspectos necesarios para poder llevar a cabo el análisis, es tener en claro el contexto en el que surge una política pública. Es por ello, que el objetivo del presente capítulo es abordar los antecedentes y estructura de la Educación Media Superior (EMS), ya que es aquí donde se inserta nuestra unidad de análisis, es decir el Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios 10 (CBTIS 10). También veremos algunas recomendaciones de organismos internacionales y las políticas recientes de los programas federales de educación sobre la formación docente. Todo lo anterior tiene que ver con la Reforma Integral de la Educación Media Superior (RIEMS) en la cual se inscribe la política que nos interesa analizar; es decir, el Programa de Formación Docente de Educación Media Superior (PROFORDEMS). 31 1. Antecedentes de la Educación Media Superior Arnaut y Giorguli (2010) plantean que el principal antecedente de la educación media superior en nuestro país data del año 1823, cuando en el México independiente se promovió el Reglamento General de Instrucción Pública, el cual indicaba que el Estado era el encargado de los colegios preparatorios. En ese momento, algunos de los estudios que se podían realizar en este nivel eran teología, jurisprudencia canónica, medicina, así como farmacia y ciencias naturales. La escuela estaba dirigida por la Iglesia, pero con su separación del Estado impulsada por Juárez, se formula la llamada Ley de Instrucción Pública en 1857. Esta política dividió la educación en dos niveles: la educación primaria y la educación secundaria que estaba fusionada con el nivel medio superior. Fue en el mismo año de 1857 que el país se encontraba en una situación de hacer frente a diversos retos educativos. Pero había disposición de recursos humanos y políticos que se utilizaron para brindar educación que ayudaría a resolver un tema prioritario: crear un novedoso tipo de formación para un nuevo tipo de ciudadano que requería el país en su momento. La acción gubernamental para lograr esto fue la creación en 1867 de la Escuela Nacional Preparatoria (ENP), la cual era cursada posterior a la educación primaria. La propuesta se basó en un currículo enfocado en ciencias, gramática, literatura, lenguas extranjeras y dibujo, todo en un ambiente laico (Martínez, Zorilla, Bracho y Miranda, 2012). 32 Gabino Barreda fue el creador y director de la ENP hasta 1878. Su visión era la de formar alumnos con una amplia visión de las ciencias, que le permitiría al estudiante adquirir bagaje cultural indispensable para desempeñarse como persona y ciudadano. Esta modalidad de educación fue concebida no solo como un puente para formar profesionales sino también para preparar hombres más aptos en la lucha de la vida (Arnaut y Giorguli, 2010). Después de esto, el bachillerato entró en una etapa de cambios y de cierta inestabilidad porque seguía en formación. Por ejemplo, para 1924 la ENP se separó en dos ciclos; la secundaria con una duración de tres años y enfocada en educar para la vida, y la preparatoria cuya duración era de dos años conla meta de preparar a los alumnos para carreras universitarias. Para 1932 aumentó el ciclo de preparatoria a cuatro años, ya que se había convertido en preparatoria técnica. Aunado a esto, una problemática de inestabilidad se había presentado hasta este periodo, ya que la ENP tuvo 35 directores y había dispersión en los programas de estudios de las distintas zonas del país, por lo que en el año 1938 con la finalidad de unificar los planes de estudio, se creó el Instituto Politécnico Nacional (IPN) que ofrecía estudios de bachillerato técnico. En 1939, se impulsó el Congreso de Escuelas Preparatorias por Gustavo Baz, al que asistieron 20 planteles de 18 estados del país, esto también con el fin de fortalecer los planes de estudio. En 1973 se crea el Colegio de Bachilleres que ofrecía certificados de educación media superior y una orientación técnica a los alumnos. Así mismo, nacen instituciones como los Centros de Estudios Tecnológicos (CET), el Centro de Estudios Científicos y 33 Tecnológicos (CECYT), los Centros de Estudios Agropecuarios (CBTA) y los Centros de Estudios en Ciencias y Tecnologías del Mar (CETMAR). Como se puede observar, hasta este punto en la historia había diversas instituciones de educación media superior, pero carecían de identidad debido a su diversidad. Además, desde entonces había críticas a este nivel ya que no había pruebas de que la educación brindada por estas instituciones respondiera a las necesidades de la sociedad y tampoco se tenía una idea clara de diferencias significativas entre quienes cursaban bachillerato técnico y general (Arnaut y Giorguli, 2010). Se ha analizado hasta este momento parte de lo que Parsons (2007) considera importante para el análisis de las políticas públicas, es decir los antecedentes, en ese caso de la EMS que es donde se inserta el programa analizado en este estudio. En el siguiente apartado se aborda otro aspecto básico para poder cumplir con el objetivo de este estudio que es el análisis del PROFORDEMS, es decir, la estructura del nivel medio superior. 2. Estructura e importancia de la Educación Media Superior Actualmente el bachillerato en México se divide en tres grandes grupos: general, tecnológico y profesional técnico, aunque esta clasificación no suele ser tan tajante en la práctica, ya que muchas instituciones han modificado sus planes de estudios para brindar una educación bivalente, ofreciendo tanto bachillerato general como preparación tecnológica. 34 En cada una de las tres formas en que se suele dividirse la EMS se encuentran una gran diversidad de instituciones con sus propias estructuras organizativas y sus tipos de control administrativo como se muestra en la siguiente tabla: Tabla 1 Porcentaje de escuelas y matrícula de educación media superior según el tipo de control administrativo (2009-2010). Control administrativo Escuelas (%) Matrícula (%) Centralizadas del gobierno federal 7.3 20.3 Descentralizadas del gobierno federal 0.8 3.8 Descentralizadas de las entidades federativas 19.9 27.5 Centralizadas de las entidades federativas 23.8 14.8 Autónomas 5.4 12.2 Subsidiados (financiamiento mixto) 3.4 2.5 Privadas 35.3 17.2 No especificado 4.1 1.7 Fuente: INEE (2011). 35 Aunque parece haber similitudes entre todas las formas de administración de la EMS mostradas en la tabla anterior, cada tipo de bachillerato tiene su propio marco normativo y su propio plan de estudios, por lo que suele no haber vínculos entre instituciones. La falta de compatibilidad dentro de este sistema es una característica de este nivel educativo (INEE, 2011). Este asunto de desvinculación así como de la importancia de este nivel, ya se ponía en énfasis antes de la RIEMS pero no se implementaban acciones para solucionar las problemáticas existentes. Por ejemplo, se reconocía que la EMS es una etapa de formación en diferentes áreas del saber que abarcan conocimientos generales para la vida, para proseguir en el nivel superior, así como estudios de índole técnica. También se considera que este nivel es parte del motor del desarrollo económico y social de los países (Castañón, Seco y Fortes, 2000). En el caso del bachillerato tecnológico que es la modalidad en la que se ubica la institución seleccionada para esta investigación, Weiss, Ávalos, Grijalva y Guerrero (2012), consideran que el subsistema es importante en primer término porque los conocimientos adquiridos serán utilizados por los alumnos al ingresar al mundo laboral, y lo especifican de la siguiente manera: En general [los egresados de EMS] valoran positivamente ciertos aprendizajes y saberes adquiridos para el trabajo y para la vida, a diferencia de lo que la mayoría logró en el empleo informal y precario desarrollado a lo largo de su trayectoria. Valoran, especialmente, el conjunto de conocimientos, habilidades, capacidades, y competencias adquiridas en el servicio social o las prácticas profesionales, 36 entendidos como espacios curriculares para el aprendizaje del trabajo profesional, realizado en espacios y tiempos extraescolares (Weiss et al, 2012, p. 278). Tomando en cuenta que los estudiantes del nivel medio superior valoran los aprendizajes que van a adquirir y la utilidad que posiblemente tendrán, es importante que estos les sean transmitidos de manera adecuada, para lo cual se requiere profesores preparados. Más adelante se verá cómo la RIEMS toma en cuenta la formación docente, y para ello la implementación del PROFORDEMS. En segundo término, la importancia de este nivel es que los egresados, además de poder optar por ingresar al mundo laboral, puedan ingresar a la educación superior, donde deberán tomar una decisión basada en aspectos como la institución o carrera, elementos económicos o laborales, así como apreciaciones subjetivas y personales enfocadas a mejorar su calidad de vida (Weiss et al, 2012). Queda claro que la EMS apoya el desarrollo socioeconómico, ya que los egresados pueden ocupar puestos laborales en los que se requiera realizar una labor técnica relacionada con lo que aprendieron en este nivel (Castañón et al, 2000). Por otra parte, durante esta etapa los estudiantes pasan por una disyuntiva en la que se ven afectadas sus decisiones, que radican en ingresar al mundo laboral o proseguir con los estudios, y optar por una u otra área de especialización dentro de la EMS. Esta decisión en la que influyen factores económicos, familiares o socioculturales es importantes porque los conocimientos adquiridos serán útiles en lo laboral o en lo académico en un futuro. No obstante, la opción que el alumno elija será pertinente que la educación en el nivel medio superior haya sido adecuada para que pueda 37 desempeñarse de manera óptima. Es decir, será necesario para esto que reciba una educación de calidad. 3. La Educación Tecnológica y el Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (CBTIS). La educación tecnológica se refiere a los programas educativos que se incluyen en el bachillerato, y que tienen como finalidad preparar a los estudiantes para el mundo del trabajo de manera independiente al camino que sigan después de la EMS. (Mena, 2001, p. 92). En nuestro país, la educación tecnológica en el nivel medio superior es compleja y está conformada por ocho instituciones entre las cuales se encuentran: los Centros de Estudios Tecnológicos Industrial y de Servicios (CETIS); el Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (CBTIS); el Centro De Bachillerato Tecnológico Agropecuario (CBTA); el Centro Tecnológico del Mar (CETMAR); el Centro De Enseñanza Técnica Industrial (CETI); el Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos de los Estados (CECyTE); y el Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (CONALEP). Estas instituciones tienen diferentes dimensiones, estructuras yformas de organización. Es decir, pueden ser unidades descentralizadas de la EMS en la Secretaría de Educación Pública (SEP), unidades descentralizadas con participación del gobierno federal o unidades descentralizadas de la federación (OCDE, 2009). 38 Otra diferencia, se encuentra en la instancia gubernamental a la que deben rendir cuentas, las cuales son: la Dirección General de Educación Tecnológica Industrial (DGETI); la Dirección General de Educación Tecnológica Agropecuaria (DGETA); y la Dirección General de Educación en Ciencia y Tecnología del Mar (DGECyTM). Sin embargo, tanto el gobierno federal como los estatales son responsables de la educación tecnológica, pero no hay una clara distinción de sus responsabilidades (Kis, Hoeckel y Santiago, 2009). Respecto a la DGETI, es una dependencia adscrita a la Subsecretaría de Educación Media Superior (SEMS), dependiente de la SEP que ofrece el servicio educativo del nivel medio superior tecnológico. Actualmente la DGETI es la dirección de educación media superior tecnológica más grande del país, con una infraestructura física de 1366 planteles educativos a nivel nacional, de los cuales 168 son CETIS y 288 CBTIS. La DGETI ha promovido además la creación de al menos, 288 CECyTEs, mismos que operan de forma descentralizada (DGETI, 2014). El CBTIS forma parte del subsistema de bachillerato y depende de la DGETI. En el capítulo IV referente al análisis del PROFORDEMS, se hablará más detalladamente sobre las características del CBTIS ya que es ahí donde se describe nuestra unidad de análisis Una vez analizado los antecedentes de la EMS, además de su estructura actual e importancia y el bachillerato tecnológico dentro del cual se insertan los CBTIS. A continuación veremos otro aspecto importante para este estudio, es decir, el contexto 39 de las políticas actuales que ayudan a regular este nivel que surgen de las recomendaciones de organismos internacionales. 4. Políticas de organismos internacionales para la formación docente Las recomendaciones que han hecho tres de los principales organismos internacionales a la educación media superior en México no son directamente para la formación docente. Las recomendaciones de políticas que hacen, son para la calidad educativa, y dentro de ella se inserta la formación docente como uno de sus componentes, aunado a otros que también son relevantes de lo cual se habla enseguida. En el caso de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), conceptualiza la calidad desde una perspectiva multidimensional, es decir, propone que debe comprender funciones y actividades como la enseñanza, los programas académicos, la investigación, las becas, la dotación de personal, los alumnos, la infraestructura y el entorno académico (UNESCO, 1998). Además plantea recomendaciones para lograr la calidad educativa, en las que el educando y los docentes son los actores principales. Dichas políticas deben reconocer características, circunstancias y necesidades de aprendizaje y formularse tomando en cuenta el proceso de enseñanza-aprendizaje; un entorno que facilite este proceso, la infraestructura; la gestión de las escuelas; los recursos humanos y materiales y la formación docente (UNESCO, 2005). 40 Por su parte, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) plantea que para lograr una educación de calidad es necesario contar con procedimientos de acreditación de las instituciones y de los planes de estudios, evaluación, programas de mejora y aseguramiento de la calidad. Además, contar con exámenes estandarizados que permitan una evaluación más precisa (Brinner, Santiago, García y Velho, 2006). También hace énfasis en que es necesario fortalecer la formación docente creando periodos de inducción y prueba de sus capacidades, aumentar el liderazgo institucional, la autonomía escolar y mejorar la participación social de los estudiantes (OCDE, 2010). En cuanto al Banco Mundial, las recomendaciones de políticas para la educación de calidad son: incrementar la diversificación institucional, planes de crédito y becas, asignación de recursos públicos transparentes, evaluación y difusión de resultados, establecimiento de sistemas de acreditación, mejorar la formación docente, fortalecer la capacidad de gestión institucional y mejorar la capacidad de las tecnologías de información (Aguilar, 2007). Es importante destacar que en las políticas para impulsar la calidad educativa promovidas por estos organismos internacionales, un asunto nodal es la formación docente, lo cual es retomado por el Estado mexicano en los programas sectoriales. A continuación se comentan algunos de los programas sectoriales que han enfatizado las recomendaciones de los organismos internacionales, entre otras cosas la formación docente, particularmente desde el sexenio 1988-1994. Al respecto, quisiéramos señalar que generalmente cuando algún organismo internacional como el 41 Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional (FMI) autorizan un crédito para un determinado programa en algún país que lo solicite, el organismo otorgante suele hacer observaciones y recomendaciones que permitan una aplicación clara y transparente de los recursos autorizados. 5. La Educación Media Superior en los Programas Sectoriales de Educación del Estado mexicano El Programa para la Modernización Educativa (PME) en 1989 planteó algunas políticas encaminadas a mejorar la calidad en este nivel educativo, tales como: diseñar un subsistema descentralizado de educación tecnológica escolarizado que ofreciera el bachillerato tecnológico o la opción terminal; formular esquemas de vinculación de la EMS con el sector productivo; la creación de un programa de formación, actualización y titulación de personal docente y directivo; implantar un nuevo sistema de acreditación de conocimientos; enriquecer más acervos bibliotecarios en las escuelas; y actualizar los planes y programas de estudio de acuerdo con las necesidades del sector productivo y las de los educandos del nivel (Poder Ejecutivo Federal, 1989). En específico, para la formación docente en educación media superior el PME (1989) solo planteaba contar con un programa de formación, actualización y titulación de personal docente y directivo. Por otro lado, durante este sexenio se creó en 1990 la Comisión Nacional para la Planeación y Programación de la Educación Media Superior (CONPPEMS) y después, en 1992, la Comisión Nacional de Educación Media Superior 42 (CONAEMS), ambos para la atención de la demanda, la formulación de planes y programas de estudio y la evaluación. En cada uno de los estados de la República también se formó una Comisión Estatal de Planeación y Programación de la Educación Media Superior (CEPPEMS) con el objeto de analizar la problemática respectiva regional y de aportar puntos de vista y soluciones en el ámbito nacional. No obstante, a pesar de que estas comisiones se constituyeron, sus resultados fueron poco significativos. Mientras que en algunas regiones la demanda era superior a la oferta de servicios educativos, en otras sucedió lo contrario (Poder Ejecutivo Federal, 1989). Un segundo programa, es el Programa de Desarrollo Educativo (PDE) formulado en 1995. Las políticas para la mejora de la calidad en el nivel medio superior de este Programa tuvieron los siguientes propósitos: mejorar indicadores educativos como cobertura, absorción y eficiencia terminal; fortalecer los materiales de apoyo, financiamiento, investigación y evaluación educativa de las instituciones; capacitar al personal académico, mejorando el servicio y apoyo a su profesionalización, organización y coordinación de planes de estudios de todas las escuelas de EMS; concretar un sistema de créditos y equivalencias para este nivel (Poder EjecutivoFederal, 1995). En cuanto a las políticas de formación docente este programa se planteó establecer en cada uno de los subsistemas un programa de formación de profesores mediante el Sistema Nacional de Formación de Personal Académico de las Instituciones de Educación Media Superior. También estableció impulsar la 43 profesionalización de los maestros de la educación media superior tomando en cuenta el modelo académico de cada institución (Poder Ejecutivo Federal, 1995). Cabe destacar que a pesar de estas políticas la EMS siguió desarticulada y con problemas de calidad y de formación docente que se atendieron en programas sectoriales educativos posteriores. En tercer lugar, está el Programa Nacional de Educación (PNE), que en 2001 mencionó como prioritarias las siguientes políticas: mejorar los indicadores de equidad, cobertura y permanencia; reforma curricular común; mejorar la formación y desarrollo de profesores; integración, coordinación y gestión del sistema de educación del nivel medio superior; así como crear órganos de coordinación y gestión para la EMS. Se plantearon también tres objetivos estratégicos: ampliación de la cobertura con equidad, educación media superior de buena calidad y la integración, coordinación y gestión del sistema de educación media superior (Poder Ejecutivo Federal, 2001). Para el caso de las políticas de formación docente, en este programa se plantearon diversas líneas de acción. La primera consistió en establecer un programa de formación y actualización de profesores de la educación media superior que incorporaba en sus contenidos humanidades, la ciencia y tecnología, innovaciones pedagógicas y didácticas de la enseñanza fundamentada en el aprendizaje, así como formación basada en competencias laborales. La segunda era referente a la creación de redes de intercambio y cooperación académica entre los planteles de educación media superior. El tercer curso de acción se orientaba a fortalecer los programas de estímulos al desempeño académico de los profesores (Poder Ejecutivo Federal, 2001). 44 Cabe destacar que este programa tenía como metas diseñar y poner en operación en 2002 un Programa Nacional de Formación y Actualización de Profesores de Educación Media Superior, así como lograr que en 2006 al menos 50% de los profesores hubieran participado en él. Hay que tener en cuenta que los programas sectoriales mencionados muestran algunas intenciones del gobierno federal por solucionar las problemáticas de la EMS que se había venido gestando. Tales acciones son el mejoramiento de las instituciones, hacer planes de estudio acordes a las necesidades del país y de las instituciones, acabar con la crisis de identidad del bachillerato, así como promover políticas para la formación de los docentes de los bachilleratos. Sin embargo, es en el programa descrito a continuación que se encuentran las bases de la RIEMS y del PROFORDEMS, como acciones más concretas para mejorar la calidad de este nivel educativo. En el Programa Sectorial de Educación (PSE), planteó como objetivos principales: alcanzar los acuerdos necesarios entre los distintos subsistemas con la finalidad de integrar un sistema nacional de bachillerato; establecer un sistema integrado de becas con un padrón único de beneficiarios; y capacitar al profesorado en el acceso y uso de las tecnologías de la información (Poder Ejecutivo Federal, 2007). En las políticas para la formación docente de este programa se trazaron las siguientes metas: definir un perfil deseable del docente, establecer un programa nacional de formación y actualización docente que constaría de programas de titulación y de diplomados para la actualización y especialización, así como establecer herramientas que proporcionaran información sobre el desempeño del personal 45 docente en las distintas modalidades y que les permitieran identificar sus áreas de oportunidad (Poder Ejecutivo Federal, 2007). Por otra parte, planteó establecer convenios de colaboración con las instituciones de educación superior que impartieran programas de formación docente, para que los profesionales aspirantes a ejercer la docencia adquirieran las competencias didácticas, así como el conocimiento acerca de las características sociales, físicas y emocionales de la población que atienden. Por último, otro rasgo de la política de formación docente de este programa consistía en instaurar mecanismos con base en la certificación de competencias docentes que contribuyeran a conformar una planta académica de calidad. Para esto se planteó establecer un esquema de certificación de competencias docentes y evaluar sistemáticamente el desempeño de los profesores que permitiera que tuvieran competencias, así como los conocimientos necesarios para realizar en forma apropiada su trabajo, todo esto con ayuda de las instituciones de educación superior (Poder Ejecutivo Federal, 2007). A pesar de poner énfasis en la calidad educativa y la formación docente desde el sexenio 1988 - 1994, fue hasta este último programa sectorial de 2007 - 2012 donde se diseñó una política más clara y mejor configurada para atender las problemáticas de la educación media superior. Esto dio lugar a la RIEMS, y si bien parece estar planteada de forma adecuada, no parece haber funcionado de la mejor manera para impulsar la calidad de la educación, así como la formación docente (Lozano, 2012; Villa 2012). 46 Es también con el PSE (2007) que surgen las políticas para la capacitación de directores y docentes con ayuda del Programa de Formación de Directores (PROFORDIR), la Certificación de Competencias Docentes para la Educación Media Superior (CERTIDEMS) y el PROFORDEMS. Así mismo, de la evaluación de las instituciones de EMS por medio del Consejo para la evaluación de la educación del tipo medio superior A.C (COPEEMS) para su posterior ingreso al Sistema Nacional de Bachillerato (SNB). Dentro de este conjunto de políticas y programas, es la formación docente por medio del PROFORDEMS la que se analiza en este estudio, con el objetivo de analizar esta política pública desde el punto de vista de algunos docentes de un CBTIS. En este capítulo hemos visto algunos de los antecedentes más importantes de la EMS, así como su estructura e importancia. También se revisó la educación media superior tecnológica a la que pertenece el CBTIS. Por otra parte, se especificaron las recomendaciones de políticas públicas que organismos internacionales han hecho al Estado mexicano para mejorar la calidad del nivel medio superior, y con ello la formación docente. Esfuerzos en este sentido se hicieron en los programas nacionales de educación de los quinquenios 1989-1994, 1995-2000 y 2001-2006 que fue cuando se implementó la RIEMS y el PROFORDEMS. Con el objetivo de tener una mayor compresión de nuestro objeto de estudio, en el siguiente capítulo presentaremos nuestro marco de referencia sobre la formación docente y la calidad educativa, que son aspectos clave tanto de la Reforma actual del nivel medio superior, como del PROFORDEMS, de los cuales también hablaremos. 47 CAPÍTULO III El programa de formación docente y calidad educativa en el marco de la Reforma Integral de la Educación Media Superior En el capítulo II hablamos del surgimiento de la Educación Media Superior (EMS), su estructura actual y el marco de la educación media superior tecnológica, donde se incluyen los Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (CBTIS). Asimismo, mencionamos cuáles son las recomendaciones que los organismos internacionales como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y Banco Mundial han hecho para elevar la calidad de la formación docente en este nivel. También dijimosque el gobierno federal incorporó algunas recomendaciones en los programas sectoriales de educación, en los cuales se fundamentan la Reforma Integral de la Educación Media Superior (RIEMS) y el Programa de Formación Docente de Educación Media Superior (PROFORDEMS), que serán mencionados en este capítulo. Antes, comenzaremos por definir qué es la formación docente como componente de la calidad educativa, asuntos que trata de atender tanto la Reforma de este nivel como es caso del programa que intentamos analizar. 48 1. Formación docente y calidad educativa Para Achilli (1996) la formación docente es un proceso en el que se articulan prácticas de enseñanza y de aprendizaje orientadas a instruir docentes. Así mismo, esta autora considera que la formación docente sirve para iniciarse, perfeccionarse o actualizarse en la práctica de enseñar. Así, la formación docente debe ayudar a que un profesor aborde un problema, lo plantee, conciba y elabore una solución y asegure su aplicación para una mejor enseñanza. Para que los docentes puedan solucionar las diversas problemáticas que se les presentan en el aula, las políticas públicas de educación exigen cumplir con un perfil docente. Las exigencias que demandan el perfil docente se ven influenciadas por el contexto, el aumento en la heterogeneidad del alumnado, las dificultades de aprendizaje o la inclusión de las tecnologías de la información. Para atender estos requerimientos, desde el ámbito político y burocrático se diseñó un nuevo modelo de formación docente basado en competencias (Pavié, 2011). La formación docente es un asunto complejo y los problemas que surgen en este proceso son resultantes de los modos específicos de producción, distribución y consumo de los conocimientos (Gorodokin, 2013). Para el caso de la EMS las autoridades educativas han adoptado un enfoque basado en competencias que más adelante se detallará. 49 Por otra parte, otro referente importante para este estudio es la calidad educativa, la cual es un tema muy controvertido y que ha sido definido desde diferentes posturas, tanto por autores como por organismos internacionales. Algunos de estos autores hay señalado los aspectos que abarca la calidad educativa y otros han dado pistas de cómo se puede medir o cuándo una educación es de calidad. A continuación se hará alusión a algunas posturas que tratan de definir la calidad y qué aspectos involucra. En primer término, para Ramírez (2009) el termino calidad educativa surge en los discursos de la OCDE a partir del año 1962, cuando este organismo publicó un estudio económico que enfatiza la importancia de la educación. Desde entonces, de acuerdo con Ramírez (2009) la calidad educativa ha ido centrando la mirada en diversos aspectos, lo cual se puede expresar en tres generaciones por las que ha evolucionado el concepto, y ha centrado su mirada en diversos asuntos: Primera generación (1970 – 1985): concebía a la escuela como una caja negra, y la calidad incluía el liderazgo de los directivos y docentes, clima escolar, objetivos académicos y la gestión escolar. Segunda generación (1985 – 1995): Se caracteriza por analizar el interior de las escuelas. Los criterios de calidad educativa eran liderazgo del director, implicación de los maestros, capacitación del docente, indicadores y clima escolar. Tercera generación (1995 – a la fecha): se han centrado en las variables del medio sociocultural, y cómo influyen éstas en el rendimiento de los alumnos. 50 Desde la postura anterior, la calidad educativa ha comenzado a tomar en cuenta la formación docente desde la segunda generación (1985 – 1995), que es el asunto que interesa a esta investigación. Sin embargo, existen otras posturas sobre la calidad educativa, como de la OCDE (1991), que más que hacer referencia en qué se ha ido centrando el concepto de calidad educativa al paso de los años, alude a dimensiones. Estas dimensiones en las que se centra la calidad educativa corresponden a tres perspectivas de cómo puede ser entendida la calidad. La primera dimensión, se refiere a que la educación será de calidad en la medida que aproxime a los propósitos y objetivos establecidos por un sistema escolar. La segunda postura tiene que ver con la calidad de los resultados que se obtienen, sin dejar de lado cómo o con qué se obtienen esos resultados, es decir, no solo es la calidad de la educación, sino que se debe prestar atención también a la calidad de los profesores, de los programas académicos, del aula de clases, de los materiales, etcétera. Por último, la tercera dimensión tiene relación con las acciones llevadas a cabo por los docentes para que los resultados de los alumnos resulten en un logro deficiente o eficiente. Cabe destacar, que estas dimensiones o medidas para lograr la calidad educativa, puede variar ya que lo que en un país o región es calidad, puede no serlo en otro debido a las diversas necesidades que se tienen (OCDE, 1991). Retomando a Ramírez (2009), la postura anteriormente mencionada, corresponde a la segunda generación por los años que esta abarca, aunque de manera más actual, surgen otros conceptos de calidad educativa. Uno de estos conceptos corresponde al usado de manera oficial por la Secretaria de Educación Pública (SEP) en 2002, de manera textual refiere que “la educación será de calidad si es relevante, si tiene 51 eficacia interna y externa, si tiene un impacto positivo en el largo plazo, si es eficiente en el uso de los recursos y si busca equidad” (p. 54). Además, la Secretaría de Educación Pública (SEP) añade que la calidad educativa es relativa ya que lo que se entienda por calidad dependerá de factores como el desarrollo del país, y que es un concepto dinámico porque nunca se alcanza la calidad en su totalidad, sino que es un proceso de mejora continua, es decir, un sistema educativo que mejora siempre con respecto a si mismo. Otros autores han definido la calidad educativa de manera similar a la postura de la SEP. Gago (2002, p. 59) menciona la calidad educativa como el “conjunto de rasgos, atributos, cualidades, defectos, insuficiencias o características que posee [la educación]. Tales elementos o componentes de la calidad de la educación pueden ser positivos o negativos”. Así mismo, este autor señala que los componentes de la calidad educativa son la pertinencia, eficacia, equidad, relevancia y eficiencia, y que la educación podrá juzgarse como de buena calidad en la medida que estos indicadores sean satisfechos. Para el caso de la eficacia, ésta consiste que los alumnos accedan a la escuela, permanezcan en ella, alcancen los objetivos establecidos en los planes y programas curriculares en los tiempos previstos y pueda egresar o finalizar el ciclo escolar. En cuanto a la pertinencia, radica en que el currículo educativo esté adecuado a las necesidades de los alumnos de forma que pueda desarrollarse en las esferas afectiva, moral, física y de autonomía. La relevancia también hace referencia al currículo, pero adecuado a las necesidades de la sociedad, es decir, deberá tener contenidos 52 adecuados para que el individuo se desarrolle en los ámbitos social, político y económico (Seijas, 2002). Para el caso de la eficiencia, se refiere al uso de recursos y costos en la educación, tales como el adecuado financiamiento, contar con materiales suficientes, y contar con los adecuados recursos humanos, como podría ser el caso de los docentes. El último componente de la calidad educativa, la equidad, también se centra en los recursos para la educación, pero tomando en consideración necesidades muy particulares de alumnos y escuelas con la finalidad de ofrecer apoyo especial a quien así lo requiera para que estos alcancen los máximos niveles de desarrollo y aprendizaje (Blanco, 2008 y Bracho, 2009). Como se mencionó
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