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MEDICINA II PANCREAS Dra Marcela Edith Pereira Recordatorio anatómico El páncreas es una glándula pequeña de color rosado, grisáceo, lobulada, adyacente al duodeno y estómago. Esta constituido por dos ramas que forman una V. La rama o lóbulo derecho se ubica cerca del flanco derecho o en contacto con el duodeno siguiendo su recorrido. El páncreas se aloja en ventral y adyacencias del riñón y uréter derecho, proceso caudado del hígado, íleon y ciego. La parte craneal se relaciona con el colon ascendente en dorsal y el yeyuno en ventral. El lóbulo izquierdo es más pequeño que el derecho y su superficie dorsal se vincula con el colon transverso en caudal y la pared estomacal dorsal en craneal. El conocimiento de estos puntos de referencia anatómicos permite comprender la sintomatología y los problemas secundarios que acompañan a la pancreatitis. Cuando la pancreatitis aguda afecta el lóbulo derecho, puede ser posible la localización de los signos en el cuadrante derecho dorsal del abdomen. Si la pancreatitis aguda afecta el lóbulo izquierdo adyacente al hígado, los signos clínicos y bioquímicos pueden destacar una afectación hepática. Como el páncreas es adyacente a sectores del intestino delgado e intestino grueso, el íleo a veces aparece como complicación de la pancreatitis aguda. La mayor parte de las secreciones pancreáticas exocrinas llegan al intestino mediante el conducto pancreático accesorio largo, el cual se abre en una papila menor a unos 28 mm de la entrada del conducto biliar. Este conducto accesorio es la principal vía de transporte del lóbulo derecho. Para el lóbulo izquierdo existe un conducto más pequeño, que ingresa al duodeno en cercanías de la abertura ductal biliar. El gato es diferente porque la papila duodenal mayor, a 3 cm en distal del píloro es el punto de entrada común para los conductos biliar y pancreático en el intestino. La mayoría de los gatos carecen de conducto pancreático accesorio. Como consecuencia el reflujo biliar dentro de los conductos pancreáticos es mucho menos probable en los perros que en los gatos. Las ramas pancreáticas de las arterias pancreáticoduodenales craneal y caudal se encargan de la irrigación principal del páncreas. La rama pancreática de la arteria esplénica irriga la extremidad izquierda del páncreas. La vena pancreáticoduodenal drena el páncreas vaciándose en la vena mesentérica craneal. Los conductos linfáticos drenan hacia los linfonódulos duodenal, hepático, esplénico y mesentérico. Ramas del nervio vago y esplácnicos portan las fibras eferentes parasimpáticas y simpáticas hasta el páncreas. Las fibras parasimpáticas primariamente inervan a las células acinares y regulan la secreción exocrina, mientras que las simpáticas inervan los vasos sanguíneos y controlan la circulación. Recordatorio histológico Histología del páncreas exócrino El páncreas es una glándula tubuloacinar compuesta qué recuerda a un racimo de uvas. Las unidades exocrinas son las llamadas células acinares. Se distribuyen de lado a lado en una hilera simple que forma un fondo de saco. Un racimo de células acinares forma unidades minúsculas llamadas acinos. Las bases de las células acinares piramidales son adyacentes a una lámina basal y sus bordes apicales se abren en el centro del fondo de saco. Este último es el comienzo del sistema ductal que transporta enzimas hasta el intestino; está re-vestido por células epiteliales aplanadas centroacinares. En la base de las células acinares y entre los acinos hay nervios, vasos sanguíneos y conductos linfáticos. Ultraestructura El páncreas es uno de los tejidos con mayor actividad metabólica en el cuerpo. Esta actividad se refleja por la estructura de la célula acinar, que contiene organelas diseñadas para la síntesis y el transporte de proteínas. Las células acinares sintetizan y secretan enzimas digestivas (tripsinógeno, quimoripsinógeno, proelastasa, procarboxipeptidasa A y B, procolipasa y fosfolipasa A). Hasta la liberación, estas enzimas se concentran en gránulos secretorios a nivel del ápice celular. Las enzimas son sintetizadas por el retículo endotelial en la parte más basal de la célula y empaquetadas en el complejo de Golgi en el centro celular. Otras enzimas digestivas se liberan intactas (lipasa y amilasa). Los núcleos no participan en forma directa en la síntesis enzimática y por ende se localizan en el extremo basal de la célula. Además de la síntesis y secreción enzimática, las células acinares pancreáticas secretan líquidos, electrólitos y otras sustancias (bicarbonato e inhibidores de la tripsina). El fondo de saco formado por los acinos sé con los conductos intra lobulares revestidos con células epiteliales cilíndricas bajas. Estos conductos se vacían en los conductos ínter lobulares revestidos con epitelio cilíndrico, unas pocas células caliciformes. Las células epiteliales secretan y absorben líquidos y electrolitos. Tienen un ribete en cepillo sobre su superficie apical y grandes cantidades de mitocondrias para satisfacer las necesidades energéticas del transporte. Los conductos ínter lobulares se vacían en los conductos pancreáticos principales. La gástrica y CCC son tróficas para las células acinares y promueven su regeneración después de la injuria. Histología del páncreas endocrino El páncreas es un importante sitio de producción y secreción de hormonas. Las células productoras se localizan en los islotes de Lanígeras; las células β elaboran insulina y las células α glucagón. Las células insulares también sintetizan otros pépticos hormonales, como la gastrina y somatostatina. Mecanismos defensivos naturales contra la autodigestión 1) Enzimas digestivas como precursores inactivos 2) Empaquetamiento de los cimógenos 3) Distancia entre cimógenos y enteroquinasa 4) Inhibidores enzimáticos dentro del páncreas 5) Inhibidores enzimáticos en la circulación 6) Esfínteres musculares en los conductos pancreáticos PANCREATITIS AGUDA EXÓCRINA Factores etiológicos Enfermedades infecciosas: Existe evidencia experimental de que ciertos virus pueden causar lesiones pancreáticas. Los picornavirus, reovirus, virus dela hepatitis murina, el citomegalovirus, el herpesvirus, entre otros demostraron ocasionar lesiones pancreáticas agudas en los animales de experimentación. El virus de la Peritonitis Infecciosa Felina es responsable de ocasionar pancreatitis en los felinos. Es posible que también algunos virus sean responsables de esta patología en caninos pero aún no se los ha aislados. Las bacterias pueden participar en la patogenia de la pancreatitis aguda llegando al páncreas desde un sistema biliar infectado mediante los linfoconductos o invadiendo desde el lumen intestinal cuando decaen las barreras defensivas. Los microorganismos pueden liberar enzimas qué dañan los fosfolípidos de la membrana celular, toxinas que lesionan las células parenquimatosas y productos químicos que estimulan la secreción de mediadores inflamatorios leucocitarios y de esta manera intervenir en la patogenia de algunos casos de pancreatitis y en otros casos pueden ser las únicas responsables de las infecciones y abscedación del páncreas- La endotoxemia también es un rasgo importante de la pancreatitis aguda. La acumulación local de endotoxinas tendría su máximo efecto disrumpiendo la microcirculación pancreática. Enfermedades parasitarias: Obstrucción ductal: La obstrucción ductal puede ser el resultado de neoplasias, presencia de parásitos, espasmo ductal y en casos excepcionales por cálculos. La obstrucción ductal experimental en caninos no produjo cambios patológicos inmediatos; aunque aumentaron la amilasemia y lipasemia. Si la ligadura del conducto pancreático se acompaña del estímulo para la secreción exócrina, el edema pancreático es la secuela más seria. La necrosis no surge a no ser que la ligadura arterialo linfática del páncreas deteriore la microcirculación. Reflujo duodenal: El reflujo del contenido duodenal podría llevar a una pancreatitis aguda. La ligadura experimental del duodeno en craneal y caudal de la desembocadura del conducto pancreático produciría reflujo del contenido duodenal que contiene enzimas activadas, bilis y bacterias. Pero para que se desencadene una pancreatitis aguda la presión de los líquidos en el duodeno debería superar la presión del conducto pancreático situación que solo ocurre en la etapa posprandial durante unos 20 a 50 minutos luego Es la activación enzimática dentro del páncreas lo que redunda en un importante daño tisular. de la ingesta y en donde el volumen que refluye es mínimo y no puede por si solo iniciar una pancreatitis o en casos de obstrucción intestinal, problema que rara ves se asocia a pancreatitis. La producción experimental de pancreatitis aguda en asas intestinales cerradas demostró que éstas deben contener enzimas pancreáticas y bacterial pero que además debe haber isquemia entero-pancreática para que se produzcan las lesiones. Por otro lado si el reflujo duodenal pudiera causar pancreatitis en los perros, es posible que los primeros problemas en surgir fueran la colecistitis y necrosis hepática ya que la presión es mayor en los conductos pancreáticos que en e! conducto biliar del perro. Cuando ambos tubos se anastomosan y son incapaces de vaciar sus secreciones hacia el intestino la muerte ocurre en 4 días por la hepatitis necrótica hemorrágica y la colecistitis gangrenosa. Estos problemas rara vez se comprueban en la pancreatitis de presentación natural. Reflujo biliar: El reflujo biliar es un factor importante en las personas porque la patología biliar se encuentra en la mitad de los pacientes con pancreatitis aguda. El reflujo de bilis infectada desde el colécodo hasta el conducto pancreático es posible en el hombre porque existe una comunicación directa entre los dos. Este mecanismo es improbable en el perro porque las secreciones del árbol biliar y del páncreas ingresan al duodeno por sitios separados y no hay comunicación directa entre los dos. Es posible que tal comparación sea válida en los felinos y humanos, porque el conducto biliar y pancreático entran al intestino mediante un orificio común en la papila duodenal mayor. La asociación de infección biliar (colecistitis) y pancreatitis es difícil en los animales pequeños y la incidencia de colecistitis es mínima en ambas especies. Factores nutricionales: La nutrición es uno de los factores más importantes en la patogenia de la pancreatitis canina. Los perros que reciben una dieta balanceada con la cantidad adecuada de calorías y hacen ejercicio con regularidad rara vez desarrollan una pancreatitis y si el problema ocurre es menos pronunciado. Los desequilibrios nutricionales promueven pancreatitis mediante la alteración de la síntesis, almacenamiento y secreción de las enzimas pancreáticas o causando disturbios en las membranas de las células acinares. Las dietas hipergrasas e hiperproteicas en el hombre y los perros causan mayor síntesis y depósitos de enzimas, un efecto que también es inducido por los corticoides y la hipercalcemia ocasionando pancreatitis aguda. La desnutrición en cambio redunda en deficiencia de enzimas pancreáticas, un motivo que explica por qué los animales desnutridos son menos susceptibles a la pancreatitis. Las dietas hipergrasas también reducen la estabilidad de la membrana de la célula acinar posiblemente alterando la composición de sus lípidos. La menor estabilidad de las membranas de los gránulos secretorios hace que éstos sean más susceptibles a la lisis mediada por bilis y tripsina. Las dietas deficientes en los nutrientes requeridos para la síntesis de las membranas también pueden, originar pancreatitis. La síntesis de fosfolípidos presentes en las membranas se inhibe con dietas deficientes en sus precursores, como la colina y la metionina, o incorporando etionina, un análogo de la colina que se comporta como un simulador. La etionina en la dieta puede originar pancreatitis aguda a menos que se añada metionina. En resumen la nutrición cumple una función en la patogenia de la pancreatitis porque determina la cantidad de enzimas sintetizadas, almacenadas y secretadas y la estabilidad de las membranas que también determínala la función de los procesos secretorios. Hiperlipemia: La hipertrigliceridemia e hiperlipemia indujeron pancreatitis aguda experimental en perros en algunos estudios, pero no en otros. La realidad es que no se sabe si la lipidemia precede y/o sea responsable de pancreatitis espontánea a nivel clínico. En todos los casos la hipertrigliceridemia iniciaría ataques agudos por mecanismos desconocidos. Una teoría propone que la hiperactividad de la lipasa presente en los capilares pancreáticos hidrolizaría los altos niveles circulantes de triglicéridos lo cual liberaría grandes cantidades de ácidos grasos libres que serían los responsables de iniciar la inflamación del páncreas. Otras hipótesis sugieren que la hiperlipidemia causa éstasis de la microcirculación pancreática y que la isquemia desencadena el ataque agudo. También resulta interesante el echo de que la hiperlipidemia en los perros puede causar signos de malestar abdominal, sin otros indicios de pancreatitis aguda. Hipercalcemia: La hipercalcemia produce pancreatitis por un mecanismo desconocido. Una teoría sugiere la formación de cálculos de CO2Ca que obstruirían los conductos pancreáticos pero si bien la concentración de calcio en las secreciones pancreáticas aumenta en la hipercalcemia, no lo hace en proporción a la elevación en el plasma. Una segunda teoría postula que los aumentos del calcio en las secreciones pancreáticas de origen hipercalcémico activarían el tripsinógeno induciendo pancreatitis. Una tercera hipótesis señala que la pancreatitis aguda proviene de una vasculitis y tromboarteritis originada por la hipercalcemía. Drogas: La patogenia de la pancreatitis aguda medicamentosa es desconocida. Sin embargo una serie de fármacos como la azatioprima, corticoides, clorotiazida, clorpromazina, estrógenos, furosemida, ácido etacrínico, sulfametazol y tetraciclinas se relacionaron con la misma. Los corticoides pueden inducir pancreatitis experimental pero las lesiones resultantes difieren de las apreciadas en los casos clínicos y podría deberse a cambios en las propiedades físicas de las secreciones exocrinas, a una vasculopatía oclusiva pancreática, o podría ser su actividad inmunosupresora la que permita la aparición de una bacteriosis o virosis. Lo cierto es que también se utilizan los corticoides en el tratamiento de los pacientes con pancreatitis aguda lo cual reduce la mortalidad producida por esta patología. La azatioprina también sería responsable de producir pancreatitis por estimular el volumen secretor pancreático e inhibir la salida de la. tripsina en los perros de experimentación. Isquemia: La isquemia del páncreas puede ser el acontecimiento primario que conduce a la pancreatitis aguda. Luego de un trauma o una cirugía considerable puede producirse pancreatitis como consecuencia de la estimulación intensa del sistema nervioso simpático y la isquemia prolongada del páncreas. El estado circulatorio en el páncreas es un determinante sustancial del aspecto y alcance de la lesión en la pancreatitis experimental. En muchos modelos experimentales las lesiones inflamatorias agudas marcadas no surgen a menos que haya éstasis de la microcirculación. La ligadura experimental de los conductos pancreáticos no provoca cambios patológicos inmediatos, y si la glándula es estimulada a secretar aparece la edematización de la glándula pero si por algún motivo se altera la perfusión arterial pancreática se produce la necrosis de la glándula. La inyección intraductal de bilis produce cambios patológicos importantes después de 24 horas y losmismos son el resultado de la isquemia más que de la acción directa de la bilis. La infusión de tripsina dentro de la glándula produce pancreatitis edematosa leve que se convierte en pancreatitis necrotizante grave cuando la ligadura de una vena pancreática ocasiona estasis en la microcirculación. Por otro lado la mejora del flujo sanguíneo pancreático reduce la magnitud de las lesiones pancreáticas. Patogenia de la pancreatitis Las teorías sobre la patogenia de la pancreatitis aguda deben explicar el mecanismo creador de la lesión inicial (lisis de la membrana celular), un cambio que debe preceder la liberación y activación de las enzimas destructivas. La lesión inicial debe producirse por una reacción capaz de dañar membranas celulares enteras y viables. Un factor conocido con este poder es el sistema del complemento sérico, el cual puede intervenir en la generación de la lesión inicial. En la mayoría de las reacciones, el complemento fijado por los anticuerpos dirigidos contra antígenos sobre la superficie de una célula causa una lesión citotóxica. El complemento no precisa anticuerpos para ser activado, porque la activación puede ser mediada por el C3 del complemento, plasmina y tripsina, y endotoxinas bacterianas. El complemento activado genera la lesión inicial y el cambio morfológico más temprano en estos modelos es la tumefacción de la célula acinar debido al movimiento del líquido extracelular hacia la célula. La necrosis no surge hasta que la hinchazón progresa y motiva la disolución de los gránulos cimógenos y liberación de las enzimas pancreáticas. En este punto, la tripsina capaz de activar el complemento, perpetúa el proceso. El complemento puede ser activado en diversas maneras para iniciar la pancreatitis espontánea. Estas abarcan: 1) altos niveles locales de plasmina en partes isquémicas del páncreas; 2) endotoxinas bacterianas absorbidas desde el duodeno y apenas removidas por el deterioro circulatorio; 3) movimiento de toxinas o enzimas activadas desde el conducto pancreático hacia el espacio intersticial alrededor de las células acinares y 4) agentes infecciosos que alcanzan el páncreas mediante la circulación o extensión directa desde el intestino. Las membranas celulares normales también pueden ser dañadas por radicales libres derivados del O2. Estos metabolitos tóxicos se generan como resultado e procesos isquémicos e hipoxia tisular. La formación de los radicales libres es un paso esencial temprano en la patogenia de la pancreatitis. Fisiopatología de la pancreatitis aguda Peritonitis localizada química: La peritonitis local o generalizada es común en la pancreatitis aguda como consecuencia de la trasudación de cantidades variables (aunque en general escasas) de líquido en la cavidad peritoneal. El líquido a menudo asemeja al exudado. Sin no hay perforación del tracto gastrointestinal o abscedación pancreática, el líquido es estéril. La formación del líquido en parte es el resultado de la hiperpermeabilidad vascular dada por la presencia de sustancias tales como cininas, leucotrienos y radicales libres del O2. La hiperactividad de la lipasa, elastasa y tripsina detectada en el líquido abdominal también puede aumentar la permeabilidad capilar. Alteración de la motilidad gastrointestinal: El páncreas guarda relación anatómica con segmentos del intestino delgado e intestino grueso. La pancreatitis aguda suele cursar con una peritonitis química local que afecta la función de las asas intestinales adyacentes. Al comienzo de la pancreatitis la inflamación promueve espasmos del músculo liso y más tarde puede desarrollar íleo. Esta pérdida de la motilidad intestinal ocasiona una retención sustancial de gas y la aparición de timpanitis o distensión abdominal. Este íleo regional que se aprecia en el duodeno y partes del colon ascendente y transverso por una peritonitis química debida a la pancreatitis puede con posterioridad afectar todo el FISIOPATOLOGIA Factores etiológicos Tripsinógeno Otras proteasas Tripsina Daño tisular directo recorrido intestinal. La estimulación simpática por el choque y la peritonitis y la depleción del potasio corporal también contribuyen a la aparición del íleo. La depleción de potasio es el factor más importante en la aparición del íleo en caninos con pancreatitis. La pérdida de la función motora normal tal vez sea la razón más importante para la diarrea en esta patología. Deshidratación y shock: La complicación más común de la pancreatitis es el desequilibrio hidroelectrolítico. La deshidratación e hipovolemia se presentan por diversas razones. Los líquidos se pierden desde el espacio extracelular mediante emesis y su acumulación en las asas intestinales con íleo. El volumen de sangre circulante también puede disminuir por encharcamiento en los lechos vasculares. El shock puede ser una secuela de la deshidratación e hipovolemia; también puede ser causado por el factor depresor del miocardio, un péptido tóxico generado por las enzimas que libera el páncreas isquémico. Las toxinas elaboradas por bacterias en el intestino pueden ser absorbidas y contribuir al choque. El íleo incrementa la síntesis de toxinas. Las alteraciones en la circulación entérica y el daño por las enzimas liberadas desde el páncreas adyacente reducen las barreras limitantes para la absorción de toxinas. El shock hipovolémico se produce por la reducción de la volemia circulante efectiva en un 30 a 40%. Los cambios circulatorios se caracterizan por hipoperfusión venosa portal e hipertensión portal y aumento del flujo arterial hepático asociado con hipotensión arterial. Los desequilibrios electrolíticos incluyen la depleción de potasio como resultado de la depleción de volumen durante el vómito. La reducción del potasio contribuye al íleo. Las anormalidades ácido/base en general aparecen si una cantidad importante de líquido se pierde con la emesis. La pérdida de ácido clorhídrico mediante el vómito produce una ganancia neta de bicarbonato en el líquido extracelular. Desórdenes hemostáticos: En el páncreas inflamado se produce una coagulación intravascular local. Las proteasas liberadas por el páncreas pueden activar las enzimas que intervienen en la coagulación; también son capaces de desdoblar y destruir los factores coagulantes. La alteración hemostática se debe a una combinación de un exceso de sustancias promotoras de la coagulación, déficit e hiperdegradación de factores coagulantes. La menor circulación a través de un páncreas inflamado se debe en parte a la trombosis local. La fibrinolisina y heparina, agentes antitrombóticos, corrigen la circulación e inflamación pancreática. Los estudios experimentales demostraron que la pancreatitis aguda reduce el número de plaquetas y aumenta el TP y APTT. Además, disminuyen la AT III y el complemento y aumentan los PDF. Todas estas anormalidades son compatibles con una coagulación intravascular diseminada. Complicaciones respiratorias: El edema pulmonar acompaña a la pancreatitis aguda. El líquido edematoso posee una elevada concentración de proteínas plasmáticas que derivan de la disrupción de las membranas alveocapilares, lo cual posibilita el escape del plasma rico en proteínas hacia el espacio intersticial. Una causa sugerida para el daño es el nivel de las enzimas pancreáticas circulantes que inicia una cascada de acciones destructivas. Este tipo de edema pulmonar se produce en forma experimental en los perros mediante la infusión de fosfolipasa A para destruir los componentes fosfolipoides de las membranas pulmonares, incluidos los surfactantes. Por ello, los altos niveles plasmáticos de fosfolipasa A liberados por el páncreas inflamado pueden generar la lesión. Esta enzima también es liberada por los neutrófilos atraídos hasta la zona. También participaría la lipasa pancreática circulante. La infusión de ácidos grasos libres en dosis altas en animales normalesdaña las membranas alveolocapilares y ocasiona edema pulmonar. Los pacientes con hiperlipidemia tienen mayor probabilidad de experimentar edema pulmonar que los pacientes con lípidos séricos normales. La hiperlipidemia aporta el sustrato para la actividad lipasa sérica produciendo grandes cantidades de ácidos grasos libres. Los neutrófilos incrementan la permeabilidad vascular y el complemento activado en la pancreatitis atrae neutrófilos hasta los focos pulmonares donde se suceden las lesiones. Los neutrófilos generan oxirradicales libres que pueden dañar el endotelio vascular. El edema pulmonar también se asocia con fibrina y microtrombos plaquetarios, lo que puede desencadenar una coagulación intravascular diseminada. Complicaciones hepáticas: Los cambios hepáticos comprenden necrosis, infiltración grasa, congestión y pérdida de la arquitectura celular normal. La patología hepática es la lesión diagnosticada con mayor frecuencia en pacientes con pancreatitis. Complicaciones renales: La hipovolemia persistente en la pancreatitis puede ocasionar azotemia prerrenal. La pancreatitis cursa con disminución del volumen de filtrado glomerular y del flujo sanguíneo renal y con aumento en la resistencia vascular del riñón. La corrección de la deficiencia hídrica suele mejorar la función renal. Las excepciones son los pacientes con reducción marcada y prolongada del flujo sanguíneo renal con el resultado de una necrosis tubular, y enfermos con insuficiencia renal compensada donde la lesión de pocos nefrones redunda en pérdida de la capacidad de compensación. Complicaciones cardíacas: La pancreatitis aguda puede causar cardiomiopatía en caninos. Producen arritmias que incluyen: contracciones prematuras ventriculares, disociación auriculoventricular, taquicardia supraventricular paroxística o persistente, bloqueo cardíaco y fibrilación o aleteo auricular o ventricular. La patogenia de la cardiomiopatía no se comprende muy bien. Una causa sería la producción de péptidos tóxicos como el factor depresor del miocardio, el cual es liberado por el páncreas isquémico y tiene un efecto nocivo sobre el páncreas. Las enzimas pancreáticas también pueden lesionar en forma directa al miocardio y produciendo trombos en los vasos cardíacos llevando a una miocarditis por isquemia. Sintomatología Pancreatitis leve, edematosa o intersticial: Anorexia y depresión: Estas manifestaciones son comunes en la pancreatitis. Nausea y vómitos: Se produce como consecuencia del dolor agudo, distensión o irritación del peritoneo o intestino y la inflamación estomacal o duodenal. Diarrea: La inflamación del páncreas puede extenderse al intestino y producir diarrea. La liberación de hormonas polipeptídicas pueden alterar la motilidad o estimular la secreción intestinal produciendo diarrea. Los mediadores de la inflamación tendrían un efecto similar. Cuando además surge el íleo, este por si mismo es motivo de diarrea. Comportamiento anormal: El dolor o malestar se deben en parte a la distensión intestinal con gas y líquido como secuela del disturbio motor. La contracción intestinal alrededor del gas líquido atrapados provoca signos aflictivos que incluyen: inquietud, temblores, jadeo, ocultamiento, postura de rezo y búsqueda de áreas frías. SIGNOS Y SINTOMAS • Anorexia • Depresión • Nauseas - Vómitos • Diarrea • Comportamiento anormal Dolor abdominal localizado: Se observa dolor abdominal de leve a intenso, a veces localizado en el abdomen derecho dorsal craneal, que por lo general se considera como signo invariable de la pancreatitis. Algunos pacientes con pancreatitis no muestran signos de dolor abdominal. También pueden verse molestos, aunque no necesariamente doloridos. Hipertermia: La hipertermia se desarrolla como resultado de la infección, la liberación de pirógenos desde el tejido dañado y el proceso inflamatorio. Por otro lado la hipertermia no necesariamente implica una infección, lo cual explica su persistencia a pesar de emplear antibióticos eficaces. Deshidratación: La deshidratación determinada por la turgencia cutánea es evidente con la pérdida masiva de líquidos mediante el vómito y la diarrea. La depleción marcada de volumen a veces produce pocas manifestaciones clínicas de deshidratación; este estado se puede reconocer por el pulso rápido y débil por la reducción del volumen minuto. Pancreatitis grave, hemorrágica, necrotizante o supurativa: Los signos en la pancreatitis grave son mucho más marcados que en una pancreatitis leve. Los vómitos y diarreas pueden llegar a ser hemorrágicos cuando hay compromiso de la hemostasia. La respiración es superficial y rápida y la depresión puede llegar a un estado de shock y muerte. El compromiso en los casos graves de pancreatitis es multiorgánico y por lo tanto en la exploración física se observa que el dolor abdominal puede pasar de ser localizado a ser generalizado con efusión abdominal. Puede haber hipotermia y la deshidratación EXPLORACION FÍSICA • Dolor abdominal localizado • Hipertermia • Deshidratación SIGNOS Y SÍNTOMAS • Anorexia • Nauseas - Vómitos hemorrágicos • Diarrea hemorrágica • Comportamiento anormal • Dificultad respiratoria • Depresión - Estado de shock EXPLORACION FÍSICA • Dolor abdominal localizado o generalizado • Hipertermia - Hipotermia • Deshidratación • Mucosas hiperémicas y/o ictéricas • Taquicardia – Arritmias • Taquipnea • Efusión abdominal • Petequias - Equimosis - Hemorragias es mucho más marcada. Por la afección hepática las mucosas pueden estar ictéricas. El compromiso cardíaco y pulmonar se traducen en taquicardia, arritmias y taquipnea. Los trastornos en la coagulación se manifiestan por la presencia de petequias y equimosis. Los vómitos y diarreas pueden ser hemorrágicos por el mismo motivo. Diagnóstico Estudios de laboratorio Hemograma: En los casos leves la deshidratación produce hemoconcentración y proteinemia elevada con hematocrito altos, pero en los casos graves donde hay compromiso de la hemostasia el hematocrito estará bajo como consecuencia de las hemorragias. Es común que los pacientes presenten leucocitosis con neutrofilia, desvió a la izquierda regenerativo o degenerativo según el curso que tome la enfermedad. La neutropenia es indicativa de mal pronóstico por indicar agotamiento medular. Con respecto al coagulograma el recuento plaquetario podrá estar normal o disminuido, el TP y APTT normales o alargados en relación a la gravedad del cuadro. Bioquímica sanguínea: Perfil renal La azotemia prerenal se encuentra en más del 50% de los casos de pancreatitis agudas y es atribuible a la contracción del volumen por vómitos, ausencia de líquidos ingeridos y extravasación de líquido al tercer espacio (cavidad abdominal, espacio intersticial) por injuria vascular. La azotemia renal y la falla renal aguda son complicaciones de las pancreatitis graves que puede relacionarse con la vasoconstricción inducida por aminas vasoactivas o por la hipovolemia prolongada. Perfil hepático La extensión del proceso inflamatorio pancreático al hígado sucede en forma directa a causa de la proximidad de los dos órganos y de un modo indirecto cuando las enzimas digestivas activadas viajan hasta el hígado a través de linfoconductos comunes. Se observa en estos pacientes hiperactividad de ALT, AST, FAS y GGT tanto mayor cuanto más grave sea el cuadro. Hay hiperbilirrubinemia por interrupción del flujo biliar a través del colécodo por la pancreatitis adyacente. La hipoalbuminemia deriva del derrame vascular y peritoneal. Enzimograma pancreático La pancreatitis promueve un aumento simultáneo de la amilasemia y lipasemia, pero el pico de la amilasa se da después de las 24 horas y retorna a la normalidad en 2 a 6 días. El pico de la lipasa se produce más tardíamentey se mantiene elevada por más tiempo antes de retornar a la normalidad. Además cabe recordar que su incremento no se correlaciona con el grado de inflamación pancreática y que los vadores normales de enzimas no descartan la patología pancreática. Glucemia NO SI Tiene valor pronóstico Alta (páncreas, mucosa intestinal) Moderada (páncreas, mucosa intestinal, glándula salival, hígado) Especificidad LIPASA AMILASA ENZIMAS PANCREATICAS La liberación de glucagón en exceso junto a una menor capacidad de sintetizar y liberar insulina lleva a estados de hiperglucemia. Sin embargo estos mismos desbalances hormonales pueden producir hipoglucemia. Calcemia La hipocalcemia (después de corregir por la concentración de albúmina) se considera secundaria a un desvío del calcio hacia los tejidos blandos como el músculo, debido al deterioro en la integridad de las membranas Colesterolemia y trigliceridemia La hipercolesterolemia y la hipertrigliceridemia se asocian a distintos grados de colestasis intrahepática con afección ductal biliar o a procesos obstructivos extrahepáticos que deterioran la excreción del colesterol hacia la bilis y llevan a su regurgitación hacia la sangre. Medio interno: Es común la hiponatremia, hipocaliemia y la hipocloremia debido a los vómitos prolongados y a la depleción electrolítica o acidosis metabólica por la hipotensión Tripsina inmunorreactiva sérica: El páncreas es la única fuente de tripsina y una pancreatitis debería ocasionar su liberación a la sangre. En el plasma no hay tripsina activa, porque tal actividad sería incompatible con la vida. La tripsina formada es ligada e inactivada por la α1- antitripsina y α2-macroglobulina. En la valoración de la tripsina se emplea RÍA para su antígeno en el tripsinógeno y la tripsina unida al inhibidor. Ambas formas de tripsina, están aumentadas en la pancreatitis. Valores superiores a 35 µg/l sugieren pancreatitis aguda. Urianálisis: La muestra debe obtenerse antes de iniciar la fluidoterapia para una mejor valoración de los parámetros. El urianálisis es útil para evaluar el curso de la enfermedad y comparar los datos de glucosuria y bilirrubinuria con los datos de glucemia y bilurrubinemia. Estudios por imágenes: Radiología No hay signos radiográficos patognomónicos de pancreatitis, solo patrones compatibles con una peritonitis localizada. Estos incluyen la apariencia de vidrio esmerilado en el cuadrante craneal derecho del abdomen, bolsas gaseosas atrapadas en el duodeno y un efecto de masa de mayor opacidad en el área del páncreas que desplaza al duodeno hacia la derecha, ensancha el ángulo píloroduodenal y puede demorar la evacuación estomacal- Ecografía Es la técnica que aporta información más específica sobre tamaño, forma y homogeneidad del páncreas. Los cambios más constantes son la aparición de un efecto de masa no homogéneo e hipoecogeneidad en el sector pancreático atribuible a edema, hemorragia y exudado inflamatorio. Tratamiento Disminuir la secreción pancreática exócrina Fluidoterapia -Ayuno total líquido y sólido por 48-72 horas -Apoyo farmacológico: Cimetidina o Ranitidina -Dieta alta en hidratos de carbono sin grasas ni proteínas -Mantenimiento con dietas con bajo contenido de grasa - Mantener el equilibrio hidroelectrolítico durante el ayuno Tratamiento sintomático Disminuir la inflamación Tratar el estado de shock Cirugía PERITONEO Recordatorio anatómico, embriológico e histopatológico La importancia que adquiere el peritoneo y el gran epiplón en los procesos abdominales justifica el recuerdo anatómico de estas estructuras. El peritoneo se extiende en una superficie aproximadamente de 1,5 a 2 metros cuadrados. El peritoneo deriva del tejido mesodérmico. Esta serosa recubre las vísceras y paredes abdominales sin solución de continuidad en el macho. En la hembra en cambio presenta dos orificios para las Trompas de Falopio. A medida que el peritoneo envuelve las vísceras en el curso del desarrollo embrionario se van formando numerosos compartimientos. Se divide en peritoneo visceral, que reviste los órganos y mesenterios y peritoneo parietal, que reviste las paredes laterales, posterior, diafragma y pelvis. Histológicamente está formada por dos capas de células: una superficial de mesotelio (capa simple de células, escamosas) y otra profunda de tejido conectivo laxo que contiene fibras elásticas, colágenas, reticulares, macrófagos, eosinófilos, cebadas, etc., en donde hay una rica red de capilares sanguíneos y de conductos linfáticos. La superficie del peritoneo es normalmente lisa y brillante y está lubricada por un líquido peritoneal normal que contiene entre 2000 a 2500 células por milímetro cúbico. La inervación del peritoneo es muy importante, especialmente la del peritoneo parietal, provisto de nervios aferentes somáticos de los últimos intercostales, que son muy sensibles a toda clase de estímulos. Da un dolor agudo y localizado, rigidez involuntaria, hipersensibilidad y rebote. Sin este tipo de inervación no podríamos hacer el diagnóstico de abdomen agudo. El peritoneo visceral es relativamente insensible, sólo registra estímulos si son muy intensos o prolongados, como el aumento de presión intraabdominal y aumento de presión en los tejidos. Este dolor es vago y sordo, se localiza generalmente en la parte media del abdomen, mediado por inervación esplácnica. Recordatorio fisiológico El peritoneo es en esencia una membrana dializadora y constantemente secreta y absorbe líquido seroso. Es una membrana muy permeable por la que atraviesan agua, electrolitos, sustancias tóxicas endógenas y exógenas. El peritoneo mediante la exudación acompañada o no de trasudación, la absorción, la fagocitosis y el bloqueo establecido por la formación de adherencias se defiende de la agresión y utiliza sobre todo sus funciones. La exudación se establece gracias a la riquísima circulación sanguínea, se produce vasodilatación acompañada de aumento de permeabilidad con extravasación de -Antibióticos parenterales de amplio espectro -Analgésicos para el dolor abdominal -Antieméticos de acción central -Heparina en el caso de CID -Corticoides -Neo, absceso, quiste plasma, elementos corpusculares de la sangre y coloides. Ciertas circunstancias modifican la absorción. El aumento de la presión intraabdominal la favorece, lo mismo que el calor y la hiperemia, mientras que el frío y la vasoconstricción la dificultan. El peristaltismo y el movimiento la aumentan, de ahí el peligro de alimentación, los purgantes, los enemas y la deambulación, cuando la reabsorción supone el paso de productos nocivos o bacterias tóxicas. PERITONITIS Clasificación de la peritonitis: Por su extensión: -Localizadas o Focalizadas: como su nombre lo indica son aquellas que se localizan en un determinado espacio a consecuencia de inflamación de una víscera abdominal, por ejemplo: al inicio de una pancreatitis -Generalizadas, Difusas o Propagantes: localizadas en toda la cavidad peritoneal provienen de una localización específica inicialmente circunscrita. Por su agente causal: -Sépticas: se deben a infecciones víricas o bacterianas aunque estas últimas son las más comunes. En felinos la Peritonitis Infecciosa Felina es un ejemplo de peritonitis primaria de tipo séptica. En caninos la Hepatitis Infecciosa es de origen viral y se asocia a peritonitis localizada séptica y el Parvovirus se asocia a peritonitis intestinal también localizada y de tipo séptico. La peritonitis bacteriana ocurre por contaminación de la cavidad abdominal con contenido del tracto gastrointestinal o urogenital. Las bacterias intestinales pueden ingresar al abdomen por rupturaintestinal secundaria a una neoplásia intestinal o por penetración de un cuerpo extraño. La desvitalización intestinal por isquemia relacionada con vólvulos intestinales, invaginaciones y la trombosis venosa pueden producir pasaje de bacterias desde el lumen intestinal al peritoneo. La ruptura del útero asociada con una piómetra o la contaminación Se define peritonitis como el proceso inflamatorio general o localizado de la membrana peritoneal secundaria a una irritación química, invasión bacteriana, necrosis local o contusión directa. • Localizada o Focalizada • Generalizada o Difusa Por su extensión Por su agente causal • Sépticas • Asépticas Por su origen • Primarias • Secundarias • Agudas • Crónicas Por su evolución abdominal durante la ovariohisterectomía por piómetra pueden llevar a una peritonitis séptica. -Asépticas: se deben a irritación del peritoneo por causa no bacteriana. Puede ser provocada por ejemplo por el escape hacia la cavidad peritoneal de sangre, bilis, quilo, jugo gástrico o jugo pancreático pero que en tales casos, si bien el exudado peritoneal al principio no está infectado, tarde o temprano ocurre invasión bacteriana y la peritonitis, luego se torna infecciosa. -Quilo abdomen: el derrame de quilo es raro en pequeños. En felinos el hemangiosarcoma sobre todo el que afecta la raíz del mesenterio es la alteración más frecuente asociada con quiloabdomen y en general el derrame es tanto sanguíneo como de quilo. En caninos el quiloabdomen es de etiología variada, por ejemplo por ruptura de vasos linfáticos mesentéricos, por obstrucción linfática, por quilotórax, por traumatismos, etc. -Hemoabdomen: el derrame sanguíneo puede debersr a traumatismos, ruptura de tumores sobre todo de origen esplénico, diátesis hemorrágica, etc. -Derrame abdominal neoplásico: puede producirse por un mesotelioma que es el tumor peritoneal primario, por metástasis intraabdominales o peritoneales, etc. -Peritonitis químicas: la pancreatitis, ruptura de la vesícula biliar o del colécodo y la entrada de orina en la cavidad abdominal llevan a una peritonitis química. Cabe recordar que dependiendo de la naturaleza de la sustancia habrá mayor o menor reacción peritoneal, así de mayor a menor reacción tendremos líquido pancreático, líquido intestinal, sangre, bilis y orina. -Cirugía: el traumatismo y la cirugía abdominal no complicada pueden inducir una peritonitis leve no séptica. También el talco de los guantes quirúrgicos puede actuar como irritante. Las gasas estériles usadas durante los procedimientos quirúrgicos pueden llevar a pancreatitis granulomatosa por cuerpo extraño localizado . Por su origen: -Primarias: (causa no intraabdominal, monobacteriana). Son peritonitis de causa no aparente y cuando no existe una lesión iniciadora dentro de la cavidad abdominal. En este tipo de peritonitis los organismos infectantes, que habitualmente son estreptococos o neumococos, llegan de algún foco distante por sangre, por vasos linfáticos o a por vía genital en las hembras. Es rara en pequeños animales y se observa por ejemplo en la Peritonitis Infecciosa Felina causada por un coronavirus. -Secundarias: (causa abdominal, polimicrobiana). Son complicaciones de cualquier patología abdominal ya sea traumática, infecciosa, ulcerosa, obstructiva o neoplásica y generalmente son polimicrobianas. También puede ser el resultado de la contaminación de la cavidad abdominal con contenido del tracto gastrointestinal o urogenital. Por su evolución: -Agudas: son la mayoría de las peritonitis secundarias a procesos infecciosos, perforación de vísceras huecas, estrangulación o infarto intestinal, que se producen en un tiempo corto y con una evolución rápida. -Crónicas: son patologías peritoneales que inflaman al peritoneo pero cuyo cuadro clínico demora en su forma de presentación, ejemplo típico de ello es la peritonitis crónica tuberculosa, granulomatosa por cuerpos extraños, etc. Agentes etiológicos Fisiopatología Respuesta primaria -Inflamación de la membrana: Normalmente la cavidad peritoneal es lisa y brillante con muy poca cantidad de líquido que actúa como lubricante. El estímulo mecánico, químico o bacteriano genera una reacción inflamatoria. El peritoneo se torna hiperémico, hay dilatación de vasos y exudación de líquido, aumenta la diapédesis y paso de electrolitos, proteínas, depósitos de albúmina. Llegan los neutrófilos. El líquido se enturbia con la aparición de leucocitos. Hay edema de las células mesoteliales y el peritoneo se transforma en una superficie granulosa y opaca. (aumento de volumen y de grosor que se aprecia radiográficamente). Se produce exudado que contiene fibrina que aísla el proceso en forma primaria y produce adherencias para localizar el proceso. Cuando se resuelve el Pasaje de gérmenes a la cavidad abdominal Presencia de cuerpos extraños Pasaje de sustancias irritantes Pasaje de sustancias raras • Vía directa o local Ruptura de vísceras huecas – contenido intestinal Ruptura de procesos sépticos Invasión de la serosa • Vía sanguínea • Vía linfática • Sangre, bilis, orina • Contenido pancreático Agresión sobre la superficie peritoneal Respuesta inflamatoria Vasodilatación y aumento de la permeabilidad Infiltrado celular Producción de fibrina Formación de adherencias entre las superficies peritoneales Invasión de fibroblastos Neutrofilia inicial Adherencias para localizar el proceso No hay localización del proceso Se superan las barreras defensivas Neutropenia Localización y resolución del proceso Generalización del proceso Hipovolemia Desequilibrio hidroelectrolítico SHOCK HIPOVOLEMICO Y/O SEPTICO proceso éstas se hacen fibrosas y firmes. -Respuesta intestinal: Ante la injuria se produce parálisis intestinal con dilatación tanto de gas como de líquido (Íleo adinámico). -Hipovolemia: Por trasudado y secuestro se produce hipovolemia y entonces comienza a secretarse hormona Antidiurética y Aldosterona (reteniendo sodio y eliminando potasio). Cuando los procesos no se tratan o los eventos anotados son incapaces de localizarlo, la infección invade el resto de la cavidad y compromete todo el peritoneo dando origen así a las Peritonitis Generalizadas o Difusas. Con ella se producen cambios en el medio interno consistentes en hipovolemia, desbalance hidroelectrolítico y shock hipovolémico y/o séptico que pueden llevar a la muerte. Respuesta secundaria Fallas a diferentes niveles del organismo por manejo tardío. -Respuesta cardiaca: Disminuye el retorno venoso y la presión venosa central por el secuestro de líquidos y disminuye el gasto cardiaco, entonces disminuyen los nutrientes en general. Disminuye el oxígeno y hay toxemia y puede existir daño en el miocardio y alteración en la contracción cardiaca. -Respuesta respiratoria: Hiperventilación con disminución de la oxigenación. Hay hipoxemia (atelectasias y menor movilización del diafragma). -Respuesta renal: Disminuye la filtración glomerular por disminución del gasto cardíaco por secuestro y se produce mayor acidosis por falta de eliminación de catabolitos. -Respuesta metabólica: Se altera el metabolismo de los hidratos de carbono, grasas y proteínas. El metabolismo aeróbico cambia a anaerobio y hay aumento de ácido láctico. Si el paciente sobrevive, el exudado se transforma en pus y éste forma abscesos en todos los fondos de saco. La fibrina forma una pared continente de estos abscesos. Los sacos de pus así formados producen síntomas de abscesoshasta que el sistema inmunológico logra esterilizar las cavidades o el paciente fallece. La resolución de la peritonitis, ya sea por intervención quirúrgica o por evolución espontánea deja como resultado una gran cantidad de adherencias laxas y firmes. A través de un mecanismo desconocido, estas adherencias posteriormente desaparecen quedando sólo unas pocas, las más firmes unidas a las bridas que también se forman y que son, con las anteriores, las causantes de obstrucciones intestinales a posteriori. Sintomatología Anorexia y depresión: Estas manifestaciones son comunes en la peritonitis. Nausea y vómitos: Se produce como consecuencia del dolor agudo, distensión o irritación del peritoneo o intestino y la inflamación estomacal o duodenal. SIGNOS Y SINTOMAS • Anorexia • Depresión - Estupor • Nauseas – Vómitos • Diarrea • Comportamiento anormal Diarrea: La peritonitis puede ser por ejemplo por inflamación del páncreas y puede extenderse al intestino y producir diarrea. La liberación de hormonas polipeptídicas pueden alterar la motilidad o estimular la secreción intestinal produciendo diarrea. Los mediadores de la inflamación tendrían un efecto similar. Cuando además surge el íleo, este por si mismo es motivo de diarrea. Comportamiento anormal: El dolor o malestar se deben en parte a la distensión intestinal con gas y líquido como secuela del disturbio motor. La contracción intestinal alrededor del gas líquido atrapados provoca signos aflictivos que incluyen: inquietud, temblores, jadeo, ocultamiento, postura de rezo y búsqueda de áreas frías. La sintomatología estará en relación a la gravedad del cuadro y al tipo de peritonitis. Dolor abdominal localizado: Se observa dolor abdominal de leve a intenso, a veces localizado como en el caso de una pancreatitis que en el comienzo da una peritonitis localizada que cursa con dolor localizado en el abdomen derecho dorsal craneal. La presencia de íleo intestinal lleva a la deformación abdominal progresiva. Hipertermia: La hipertermia se desarrolla como resultado de la infección, la liberación de pirógenos desde el tejido dañado y el proceso inflamatorio. Por otro lado la hipertermia no necesariamente implica una infección, lo cual explica su persistencia a pesar de emplear antibióticos eficaces. Deshidratación: La deshidratación determinada por la turgencia cutánea es evidente con la pérdida masiva de líquidos mediante el vómito y la diarrea. La depleción marcada de volumen a veces produce pocas manifestaciones clínicas de deshidratación; este estado se puede reconocer por el pulso rápido y débil por la reducción del volumen minuto. El compromiso cardíaco y pulmonar se traducen en taquicardia, arritmias y taquipnea. Los trastornos en la coagulación se manifiestan por la presencia de petequias y equimosis. Los vómitos y diarreas pueden ser hemorrágicos por el mismo motivo. Las alteraciones del medio interno consistentes en hipovolemia, desbalance hidroelectrolítico y shock hipovolémico y/o séptico llevan a la muerte. Diagnóstico Estudios de laboratorio Hemograma: En los casos leves la deshidratación produce hemoconcentración y proteinemia elevada con hematocrito altos, pero en los casos graves donde hay compromiso de la hemostasia el hematocrito estará bajo como consecuencia de las hemorragias. Es EXPLORACION FÍSICA Dolor abdominal local o generalizado Deformación abdominal progresiva Taquicardia - Arritmias Taquipnea Hipertermia Deshidratación Mucosas hiperémicas Petequias - Hematomas - CID Shock hipovolémico y/o séptico común que los pacientes presenten leucocitosis con neutrofilia, desvío a la izquierda regenerativo o degenerativo según el curso que tome la enfermedad. La neutropenia es indicativa de mal pronóstico por indicar agotamiento medular. Con respecto al coagulograma el recuento plaquetario podrá estar normal o disminuido, el TP y APTT normales o alargados en relación a la gravedad del cuadro. Bioquímica sanguínea: Perfil renal La azotemia prerenal es atribuible a la contracción del volumen por vómitos, ausencia de líquidos ingeridos y extravasación de líquido al tercer espacio (cavidad abdominal, espacio intersticial) por injuria vascular. La azotemia renal y la falla renal aguda pueden ser la consecuencia de la vasoconstricción inducida por aminas vasoactivas o por la hipovolemia prolongada. Perfil hepático Los pacientes con peritonitis derivadas de patologías que tienen su asiento en el hígado presentan hiperactividad de ALT, AST, FAS y GGT tanto mayor cuanto más grave sea el cuadro, distintos grados de hipoalbuminemia por falta de síntesis por parte de un hígado alterado, hiperbilirrubinemia por focos obstructivos intrahepáticos. También en casos de peritonitis secundaria a pancreatitis la extensión del proceso inflamatorio pancreático al hígado sucede en forma directa a causa de la proximidad de los dos órganos y de un modo indirecto cuando las enzimas digestivas activadas viajan hasta el hígado a través de linfoconductos comunes. Hay hiperactividad de ALT, AST, FAS y GGT, hiperbilirrubinemia por interrupción del flujo biliar a través del colécodo por la pancreatitis adyacente. La hipoalbuminemia deriva del derrame vascular y peritoneal. Enzimograma pancreático Puede estar alterado si el origen de la peritonitis es una pancreatitis, pero la peritonitis producida por otras causas también puede afectar al páncreas en forma secundaria agravando el cuadro. Glucemia La hipoglucemia indica infección activa en cavidad peritoneal debido a que las bacterias son consumidoras de glucosa. Medio interno: Es común la hiponatremia, hipocaliemia y la hipocloremia debido a los vómitos prolongados y a la depleción electrolítica o acidosis metabólica por la hipotensión- Urianálisis: Permite comparar valores obtenidos en orina con los obtenidos en suero y también es útil para evaluar el curso de la enfermedad. Estudios por imágenes: Radiología No hay signos radiográficos patognomónicos, solo patrones compatibles con una peritonitis que incluyen la apariencia de vidrio esmerilado en el cuadrante craneal derecho del abdomen, si se tratara de una peritonitis localizada por pancreatitis; íleo intestinal en donde se observan asas intestinales dilatadas con gas; presencia de gas libre indicando por perforación de vísceras. Ecografía Es la técnica que aporta información más específica sobre tamaño, forma y homogeneidad e integridad de los órganos abdominales. Parasentesis abdominal y lavado peritoneal diagnóstico: En caninos y felinos se aconseja punzar los cuatro cuadrantes: craneal, caudal y a ambos lados del ombligo, a una distancia de 2 a 4 cm del mismo. Se introducen 20ml/Kg de una solución salina estéril, se mueve al paciente y luego se procede a la recuperación del líquido para su evaluación. Se debe valorar la densidad, proteínas, células, bacterias y presencia de alimentos. La presencia de neutrófilos tóxicos y bacterias fagocitadas es indicativo de peritonitis séptica. También se deberán hacer cultivos del líquido para bacterias aeróbicas. El líquido proveniente del lavado es inapropiado para cultivo de bacterias anaeróbicas estrictas. De ser necesario la muestra debe tomarse durante la cirugía. Laparotomía exploratoria: Ayuda a buscar las causas desencadenantes, al mismo tiempo que se realiza el lavado peritoneal, se toman muestras para bacteriología y se coloca un catéter de lavado. Tratamiento Tratar el estado de shock Fluidoterapia Antibióticos parenterales de amplio espectro Antiinflamatorios Analgésicos y sedantes para el dolor abdominal Peritoneoclisis Tratar la causa específica Bibliografía MORGAN RV, BRIGHT RM, SWARTOUT, MS: Clínica de pequeños animales, 4ta. edición. Saunders, 38:442-445, 2004. BONAGURA: Kirk: Terapéutica Veterinaria de pequeñosanimales. XIII. Ed. Mc Graw- Hill, 2001. COUTO, C.G.; NELSON, R.W.: Pilares de Medicina Interna en Animales Pequeños, 3º ed. Ed. Intermédica, 2005. ETTINGER, S.J.; FELDMAN,E.C.: Tratado de Medicina Interna Veterinaria. Enfermedades de perros y gatos. Ed. Intermédica, 2002. STROMBECK- GUILLFORD: Gastroenterología en pequeños animales. Ed. Intermédica, 1996 Material Específico del tema: BRÜLD-DAY: Abdomen agudo: Proceeding Congreso Latinoamericano de Emergencias y Cuidados intensivos, 2 al 5 setiembre 2009, Méjico. BRÜLD-DAY: Dilatación vólvulo gástrica: Proceeding Congreso Latinoamericano de Emergencias y Cuidados intensivos, 2 al 5 setiembre 2009, Méjico. - Corregir el equilibrio hidroelectrolítico y ácido base -Corticoides -AINES -200-300ml/kg de solución salina estéril templada (permite la eliminación mecánica de desechos y la dilución de bacterias y endotoxinas)
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