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INSTITUTO TECNOLÓGICO Y DE ESTUDIOS
SUPERIORES DE MONTERREY
CAMPUS MONTERREY
DIVISIÓN DE INGENIERÍA Y ARQUITECTURA
PROGRAMA DE GRADUADOS EN INGENIERÍA
TEC
DE M O N T E R R E Y
USO DEL PAISAJE POR LA COTORRA SERRANA
ORIENTAL, (Rhynchopsitta temsi)
T E S I S
PRESENTADA COMO REQUISITO PARCIAL PARA
OBTENER EL GRADO ACADÉMICO DE
MAESTRA EN CIENCIAS
ESPECIALIDAD INGENIERÍA AMBIENTAL
SONIA GABRIELA ORTiZ MACIEL
MONTERREY, N. L. JULIO DEL 2000
INSTITUTO TECNOLÓGICO Y DE ESTUDIOS
SUPERIORES DE MONTERREY
CAMPUS MONTERREY
DIVISIÓN DE INGENIERÍA Y ARQUITECTURA
PROGRAMA DE GRADUADOS EN INGENIERÍA
DE MONTERREY
USO DEL PAISAJE POR LA COTORRA SERRANA
ORIENTAL (Rhynchopsitta terrísi)
TESIS
PRESENTADA COMO REQUISITO PARCIAL PARA
OBTENER EL GRADO ACADÉMICO DE
MAESTRO EN CIENCIAS
ESPECIALIDAD EN INGENIERÍA AMBIENTAL
SONIA GABRIELA ORTIZ MACIEL
MONTERREY, N. L. JULIO DE 2000
Dedicatoria
Mis padres quienes con sus enseñanzas y ejemplo
me ayudan ser mejor cada día y a no darme
por vencida durante las largas jornadas
Luis Carlos por enseñarme el valor del amor, perdón y
la perseverancia
Jorge por su alegría, cariño y ternura que me acompañan
por siempre
A la gente que todavía cree en la conservación en
México
A tí por estar siempre conmigo...
Agradecimientos
Dr. Ernesto Enkerlin por permitirme formar parte de su equipo, por su gran
apoyo durante mis estudios de maestría y por su ejemplo de excelencia,
constancia y dedicación
Mis sinodales Dr. Fabián Lozano, M. en C. Raúl A. Garza y M. en C. Claudia
Macías por las valiosas aportaciones que hicieron a este trabajo
Mis compañeros de campo: José Luis Manzano por su valioso apoyo, Romualdo
Martínez, Javier Cruz y Evelyn Sanford con quienes nos tocó recorrer grandes
distancias
Juan Vargas de Fundación Ara por subir tan alto para atrapar a las cotorras
The E. Alexander Bergstrom Memorial Research Award y American Bird
Conservancy's William Belton Grants Program y World Parrot Trust por el apoyo
financiero otorgado, mismos que además de ayudar al proyecto y darme la
oportunidad de continuar trabajando con las cotorras serranas, se convirtieron en
un aliciente para mis estudios
Dr. Eduardo íñigo por su valiosa colaboración y aportaciones a nuestro proyecto
Museo de las Aves de Saltillo por todo el apoyo logístico proporcionado
Fondo Mexicano para la Conservación de la Naturaleza, US Fish & Wildlife
Service, Semarnap, Wildlife Preservation Trust International y Sacramento Zoo
por el apoyo financiero brindado para realizar este trabajo
Familia Zambrano Yturria, especialmente Ing. Roberto y Lie. Adrián habernos
dado la oportunidad de realizar los sobrevuelos
CCA LabSIG y M. en C. Consuelo Hori por su invaluable ayuda con las imágenes y
mapas de la Sierra Madre Oriental
Mis compañeros de PMSE, por su gran apoyo, ayuda y optimismo durante todo
este tiempo
Dra. Irma A. Gómez, M. en C. Miguel Zavala e Ing. Romualdo Martínez por su
ayuda con las pruebas de estadística
Los grandes amigos que hice durante mis estudios de maestría, quienes me
brindaron su cariño, apoyo, consejo y amistad a lo largo de todo este tiempo:
Luis Benítez, Nelly Correa, Nora Cuevas, Héctor González, Rubén González,
Chelo Hori, Ada Ita, Claudia Lara, Claudia Macías, Julie Noriega, Nora Reyna,
Paty Vela y Miguel Zavala a todos ellos mis más profundo agradecimiento
Biól. Rubén González y su generosa familia por brindarme su apoyo y ayuda en
incontables ocasiones y por aliviar ese sentimiento de lejanía
Mi primo José Maciel A. por su incondicional ayuda y su gran cariño
Mi familia Maciel Villa, especialmente mis tíos Carlos, Alicia, Emma, Laura y María
Luisa por hacerme sentir como en casa a pesar de estar tan lejos de la mía
La gente de la Sierra que en innumerables ocasiones nos ayudaron y aliviaron
nuestro cansancio, esas personas sencillas que nos dieron tanto a cambio de
nada
Resumen
La cotorra serrana oriental (Rhynchopsitta terrisi) es una especie endémica a los
bosques de coniferas de la Sierra Madre Oriental de México y está catalogada
como en peligro de extinción. Se alimenta básicamente de las semillas de los
pinos y anida en las grietas de los riscos de la Sierra. Durante la temporada de
reproducción de 1999 la cotorra presentó un comportamiento atípico y no anidó,
esta conducta podría ser consecuencia del cambio en el paisaje de la Sierra como
resultado de los incendios ocurridos en años anteriores.
La meta de este trabajo fue conocer los movimientos de la cotorra serrana
oriental para determinar el uso que hace del paisaje en el rango de distribución
reproductivo. Marcamos a 4 cotorras de la colonia El Taray en los meses de julio
y agosto de 1999 con dos tipos de collares de telemetría fabricados por Holohil
Systems Ltd., los cuales representaron el 4.34% y 2.8% del peso corporal de las
aves. Buscamos las aves en el rango reproductivo durante los meses de agosto
a diciembre de 1999. Encontramos en el rango reproductivo a 3 de los 4 radios.
El alcance promedio de los radios fue de 3.56 km. El equipo que utilizamos para
seguir a las aves fueron receptores portátiles de TRX-2000 S de Wildlife Materials
Inc. y antenas yagi de 3 elementos. Comprobamos el mayor uso relativo de los
bosques de coniferas y de igual manera conocimos algunos sitios importantes
para la especie como La Sierra San Antonio, Sierra La Nieve y Sierra La Viga. El
promedio de los kilómetros diarios recorridos por dos de las cotorras fue de
23.62 y 23.71. El rango hogareño promedio obtenido mediante polígonos de
convergencia del 95% fue de 18,252 ha. El tipo de vegetación más utilizado fue
el bosque de pino-oyamel-ayarín, usándolo principalmente para dormir, comer y
descansar. Encontramos un dormidero para la especie que en una ocasión
registró una parvada de aproximadamente 550 individuos. Las cotorras
seleccionaron los bosques de coniferas, principalmente por los de pino-oyamel-
ayarín, de pino, pino piñonero y de pino-encino, todos se localizaban en las
laderas con exposición norteña. El sitio más visitado fue el dormidero con un
30.22%. Los picos de actividad para las cotorras fueron de 6 a 9 hrs y por la
tarde, de las 15 a 18 hrs. Realizamos dos sobrevuelos, en uno recorrimos la
Sierra, abarcando todo el rango de distribución de la especie, con el fin de buscar
a las cotorras marcadas. En el segundo sobrevuelo el objetivo era probar,
conocer y calcular la efectividad de los radiotransmisores. Encontramos el 4o
radio en el rango invernal en el mes de diciembre de 1999 y nuevamente en el
rango reproductivo en el mes de abril del 2000.
Este trabajo incluye también la elaboración de un modelo de simulación de la
probabilidad de extinción de la cotorra serrana oriental. Utilizamos el programa
VORTEX versión 8.32. Realizamos 2 escenarios considerando los datos de
productividad desde 1994 a 1999. Estimamos el porcentaje de los individuos
reproductivos para dos poblaciones, una de 1,500, 2,500 y 3,500 individuos y
otra de 2,000, 3,000 y 4,000. Determinamos tres rangos en las tasas de
mortalidad y simulamos la probabilidad de ocurrencia de una catástrofe.
Realizamos un total de 9 simulaciones a 200 años y con 1,000 repeticiones para
cada uno de los escenarios. El parámetro con mayor influencia en la probabilidad
de extinción de la población de la cotorra fue el número de parejas reproductivas,
mientras que las tasas de mortalidad y la probabilidad de ocurrencia de una
catástrofe influyeron de manera secundaria.
Abstract
The Maroon-fronted parrot (Rhynchopsitta terrisi) is an endemic endangered
species, which inhabits the Sierra Madre Oriental coniferous forests in the states
of Nuevo León, Coahuila and Tamaulipas. This parrot feeds mainly on pine seeds
and nests on cliff holes. During the 1999 breeding season the parrot showed a
non typical behavior and did not breed. This could be due landscape changes
because of the fires that took place in the previous two years. The goal of this
study was to understand the landscape use of the species along its breeding
range. On July and August1999, we captured and radio-collared 4 parrots at El
Taray colony. We used two different radio-collar models, manufactured by
Holohil Systems Ltd. The radios represented 4.34% and 2.8% of body mass.
We looked for the parrots on the breeding range from August to December 1999
and we found 3 of 4 radios. The effective range of the radios was 3.56 km. We
used a hand receiver TRX-2000 S by Wildlife Materials Inc. and 3 element yagi
antenna. We tested the greater relative use of coniferous forest, and we found
some important roosts in Sierra San Antonio, Sierra La Nieve and Sierra La Viga.
The average daily kilometers the parrots moved were 23.62 and 23.71 each. The
average home range estimated using the 95% mínimum convex polygon was
18,252 ha. The habitat most used was the Pinus-Abies-Pseudotsuga, which the
parrots also used to sleep. We found a communal sleeping roost, which once
harbored up to 550 parrots. The Maroon-fronted parrot showed a greater use of
conifer forests, mainly for the Pinus-Abies-Pseudotsuga, Pinus, Pinus cembroides
and Pine-Quercus all of them located on the northern hillsides. The place most
visited was the sleeping roost (30.22%). The parrot's main activity peaks were
from 6 to 9 hrs in the morning and from 15 to 18 hrs. We conducted two light
aircraft overflight along the Sierra Madre. One over the distribution range of the
species in order to find the radio-collared parrots. The second to test and
estímate the effectiveness of the radios. We found the 4th radio on the wintering
range on December 1999 and again on the breeding range on April 2000.
This thesis also includes a simulation model of the parrot's extinction probability.
We used the VORTEX 8.32 program. Considering the parrot's productivity since
1994-2000, we designed 2 scenarios, calculating the breeding percentage of a
population of 1,500, 2,500 and 3,500 organisms and a 2,000, 3,000 and 4,000
individuáis. 3 mortality ranges and a catastrophic probability were estimated. 9
simulations of 200 years and 1,000 repetitions each were made. The parameter
that influenced most the extinction probability was the proportion of breeding
pairs. The mortality ranges and the probability of occurrence of a catastrophic
event influenced the simulations secondarily.
índice
Capítulo 1 1
Introducción, antecedentes y descripción del área de estudio 1
1.1. Introducción 1
1.2. Antecedentes 2
1.2.1. La cotorra serrana oriental 2
1.3. Descripción del área 6
1.3.1. La Sierra Madre Oriental 6
Capítulo 2 10
Uso del paisaje por la cotorra oriental 10
2.1. Introducción 10
2.2. Ecología del paisaje 11
2.3. Estudios de telemetría con psitácidos 13
2.4. Uso de los Sistemas de Información Geográfica para estudios biológicos 13
2.5. Meta y objetivos 14
2.6. Método 15
2.6.1. Captura 15
2.6.2. Seguimiento 15
2.6.3. Análisis 16
2.7. Resultados 16
2.7.1. Captura 16
2.7.2. Seguimiento 17
2.7.3. Rango hogareño 23
2.7.4. Uso de habitat 23
2.7.5. Selección de habitat 25
2.7.6. Fidelidad de sitio 26
2.7.7. Características de los sitios encontrados 34
2.7.8. Horas de actividad 34
2.7.9. Sobrevuelos 37
2.8. Discusión 38
2.9. Conclusiones 44
Capítulo 3 46
Análisis demográfico exploratorio y probabilidad de extinción de la cotorra
serrana oriental 46
3.1. Introducción 46
3.2. Antecedentes 46
3.3. Meta y objetivos 47
3.4. Método 47
3.5 Resultados 50
3.6. Discusión 51
3.7. Conclusiones 52
Recomendaciones 54
Literatura citada 55
Anexos
índice de tablas
Tabla 1. Medidas morfométricas y muestras tomadas a R. terrisi en julio y
agosto de 1999 en el Taray, Coahuila 18
Tabla 2. Promedio de detectabilidad de los radios de R. terrisi en la temporada
1999 20
Tabla 3. Movimientos diarios del organismo marcado con el radio 148.020 20
Tabla 4. Movimientos diarios del organismo marcado con el radio 148.813 22
Tabla 5. Sitios visitados por lo organismos marcados durante los meses de
agosto a diciembre de 1999 24
Tabla 6. Área y número de puntos considerados para la construcción de los
polígonos de convergencia del 95% 25
Tabla 7. Permanencia de tiempo de cada ave marcada en los diferentes tipos de
vegetación 25
Tabla 8. Frecuencia de visitas de las aves marcadas en cada tipo de vegetación.
27
Tabla 9. Superficie de los tipos de vegetación encontrados en cada uno de los
polígonos de convergencia del 95% 28
Tabla 10. Superficie de los tipos de vegetación agrupados por clase, encontradas
en de los polígonos de convergencia del 95% 33
Tabla 11. Superficie de los tipos de vegetación donde se escuchó a las cotorras
serranas marcadas, basado en los polígonos de convergencia del 95%. .. 33
Tabla 12. Pruebas de independencia de X2 con base en los polígonos de
convergencia del 95% 33
Tabla 13. Tipo de vegetación, altitud y exposición de los sitios donde se
encontraron las cotorras serranas en el rango reproductivo 35
Tabla 14. Datos utilizados para elaborar los modelos de simulación de la
población de la cotorra serrana oriental 48
Tabla 15. Parámetros ingresados al programa para calcular los modelos de
simulación de la población de la cotorra serrana oriental 49
Tabla 16. Promedio de la probabilidad de extinción para los dos escenarios de
simulación 51
índice de figuras
Figura 1. Rango de distribución de la cotorra serrana oriental 3
Figura 2. Localización de la reserva El Taray 5
Figura 3. Radio de lazo y de látigo 15
Figura 4. Polígono de convergencia del 95% y sitios de localización de la cotorra
con el radio 148.020 29
Figura 5. Polígono de convergencia del 95% y sitios de localización de la cotorra
con el radio 148.813 30
Figura 6. Polígono de convergencia del 95% y sitios de localización de la cotorra
con el radio 148.902 31
Figura 7. Polígonos de convergencia del 95% de los radios 148.020, 148.813 y
148.902 32
Figura 8. Horas de actividad de las cotorras con los radios 148.020 y 148.902
34
Figura 9. Ruta de vuelo en la Sierra Madre Oriental del día 7 de enero del 2000.
37
Figura 10. Probabilidad de extinción en 200 años con una población de 1,500,
2,500 y 3,500 individuos de la cotorra serrana oriental 50
Figura 11. Probabilidad de extinción en 200 años con una población de 2,000,
3,000 y 4,000 individuos de la cotorra serrana oriental 50
Capítulo 1
Capítulo 1.
Introducción, antecedentes y descripción del
área de estudio
1.1. Introducción
La familia Psittacidae, constituye un grupo grande representado por organismos
de muchas formas y tamaños, existen algunos que miden menos de 9 cm como
los loros pigmeos de Nueva Guinea hasta organismos que llegan a medir 1 m
como las guacamayas sudamericanas (Forshaw 1978). Sin embargo esta familia
es considerada como homogénea por las similitudes morfológicas y de origen
meridional debido a que sus principales centros de radiación han sido Sudamérica
y Australia. En la actualidad están distribuidos en Sudamérica, Australia, África y
el sur de Asia. A pesar de que es una familia conspicua con gran importancia,
existen pocos estudios de campo detallados (Smith 1978). La mayoría de las
poblaciones de los psitácidos neotropicales se encuentran en bosques con dosel
muy cerrado y han permanecido durante mucho tiempo poco estudiadas debido a
la dificultad para observarlas, marcarlas y seguirlas. Los psitácidos vuelan sobre
áreas grandes en un sólo día. Esta característica les da la oportunidad de
seleccionar en mediana escala, diferentes tipos de habitat. Por lo general las
primeras horas de la mañana les proporcionan un buen clima y adecuada
oportunidad de forrajear debido a sus hábitos diurnos (Gilardi y Munn 1998).
En México existen 22 especies de psitácidos, dentro de las cuales se encuentran
dos especies endémicas del género Rhynchopsitta: la cotorra serrana occidental
(Rhynchopsitta pachyrhyncha) y la cotorra serrana oriental (R. terrisi). Las dos
están catalogadas como en peligro de extinción de acuerdo a la NOM-ECOL-059-
94 y BirdLife International (Collar et al. 1992).
Desde hace más de veinte años, estas dos especies se encuentran en las listas de
especies amenazadas. Existen estudiosgenerales de la década de los setenta
(Lanning y Shiflett 1981; Lawson y Lanning 1981). Mientras que las
investigaciones recientes y sistemáticas con estas especies comenzaron a partir
de 1994 por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey bajo
la dirección de Enkerlin-Hoeflich (Enkerlin-Hoeflich et al. 1996). Ambas especies
resultan prioritarias para la conservación, debido a sus características ecológicas
de especies endémicas y especialistas con distribución restringida. Estos
organismos por lo general tienden a enfrentar mayores riesgos que las especies
con rangos de distribución amplios (Stotz et al. 1995).
El presente trabajo constituye el primer estudio acerca de los movimientos
diarios de la cotorra serrana oriental en la Sierra Madre Oriental con el fin de
conocer su rango hogareño y uso del habitat. Además de incluir un análisis
exploratorio utilizando un modelo de simulación (VORTEX), de la probabilidad de
extinción de la cotorra serrana oriental con el fin de conocer los aspectos más
relevantes a considerar para su conservación. Ambos aspectos tienen la finalidad
de ampliar los conocimientos acerca de sus parámetros de uso del paisaje e
inferir posibles efectos sobre su comportamiento y distribución de cambios en el
propio paisaje. Ello permitirá identificar áreas importantes para su conservación
y establecer técnicas adecuadas para su manejo.
Capítulo 1
1.2. Antecedentes
1.2.1. La cotorra serrana oriental
La cotorra serrana oriental (en lo sucesivo en este manuscrito simplemente
cotorra) es una especie endémica de los bosques templados de la Sierra Madre
Oriental de México (SMO). Al igual que la mayoría de los psitácidos su coloración
es muy vistosa, tiene el cuerpo color verde obscuro, con frente y superciliar color
marrón, ojos color ámbar, anillo ocular amarillo y pico negro. Presenta
coloración roja en la parte superior del margen de las plumas coberturas y
"calcetas" de color rojo obscuro. Mide aproximadamente de 40.5 a 45.5 cm y su
peso promedio es de 460 gr (Howell y Webb 1995). Debido al gran parecido con
su especie hermana R. pachyrhyncha fue considerada durante mucho tiempo
como una subespecie de ésta, hasta que Moore en 1947 consideró a R. terrísi
como una especie diferente (Hardy y Dickerman 1955). La población estimada
para la especie va de 2,000 a 4,000 individuos (Lawson y Lanning 1981;
Enkerlin-Hoeflich et al. 1996).
El rango de distribución de la cotorra es muy pequeño, debido a la reducción de
los bosques de coniferas en el Holoceno, razón por la que se le ha considerado
como una especie relictual (Rea 1997). El rango comprende una pequeña
porción de la Sierra Madre Oriental, que mide aproximadamente 300 km de largo
y 60 km de ancho. Se extiende desde el sureste de Coahuila, el oeste central y
sureste de Nuevo León, hasta el suroeste de Tamaulipas a una altitud que va
desde los 1,500 a los 2,500 msnm (Figura 1) (Macías-Caballero 1998). Este sitio
está considerado de acuerdo con BirdLife como la EBA 010 (Endemic Bird Áreas
of the world) y con una prioridad de conservación alta (Sttatersfield et al. 1998).
El rango reproductivo de la especie se localiza en los estados de Coahuila y
Nuevo León. Comprende una porción del parque nacional Cumbres de
Monterrey. Mientras que el rango invernal está localizado en la región sureste de
Nuevo León y suroeste de Tamaulipas. Aunque existen registros de
avistamientos entre los límites de Tamaulipas y San Luis Potosí (Vargas ¡n litt.) y
en la Sierra Gorda de Querétaro (Pedraza in litt.).
La época reproductiva de la cotorra comienza en el mes de junio y termina a
mediados de noviembre (Macías-Caballero 1998), debido a la dependencia de la
especie por las semillas de pino para su alimentación. Aparentemente, las
especies de pino que más utiliza son: Pinus ayacahuite, P. strobiformis, P.
montezumae, P. greggii, P. cembroides y P. culminicola, además de
inflorescencia de Agave gentryi (Macías-Caballero et al. 1996; Snyder et al.
1999). Debido a que la producción de semillas de pinos y encinos tiende a ser
errática regionalmente, las aves se desplazan grandes distancias en busca de
alimento, esto ha traído como consecuencia que exista una variabilidad
considerable en sus patrones de movimiento anuales (Enkerlin-Hoeflich et al.
1999). La gente de la región cosecha y comercializa las semillas de los pinos
piñoneros (P. cembroides) igualmente de forma oportunista y con productividad
errática (Farjon et al. 1997). Esta situación podría llegar a ocasionar un tipo de
competencia por el recurso entre la gente de la región y las cotorras.
N
Simbologia
Sierra Madre Oriental
Rango invernal
reproductivo
w
ITESM, CCA
PMSE, UbSIG F.~ M O \ T E R K E Y
Figura 1. Rango de distribución de la cotorra serrana oriental
Capítulo 1
La cotorra anida en colonias, este comportamiento pudiera servirle entre otras
cosas, para protegerse de los depredadores. Hace sus nidos en las grietas y
hoyos de los riscos de roca caliza de la Sierra Madre Oriental, la altura a la que
se localizan los nidos del suelo, varía desde los 7 hasta los 500 m (Enkerlin-
Hoeflich et al. 1996; Macías-Caballero et al. 1996). Los principales
depredadores de las cotorras, se presume, son las rapaces como el halcón
peregrino (Falco peregrínus), el aguililla colirrufa (Buteo jamaicensis), el gavilán
azor (Accipiter gentilis) además de algunos mamíferos como el coatí (Nasua
nasua) (Enkerlin-Hoeflich et al. 1996), pero el impacto relativo de estas sobre la
sobrevivencia no ha sido estudiado. Las colonias reproductivas pueden ser
localizadas hasta a 2 o 3 km de distancia debido a las ruidosas vocalizaciones de
las cotorras (Macías-Caballero 1998).
Los problemas más significativos a los que se enfrenta R. terrisi son la
destrucción de su habitat causado por los incendios forestales, la fragmentación
del bosque, la explotación forestal y el cambio del uso del suelo, ya que la
cobertura forestal es frecuentemente reemplazada por huertas de manzana
(Lawson y Lanning 1981, Enkerlin-Hoeflich et al. 1997; Macías-Caballero 1998).
Estudios realizados sobre la cotorra serrana oriental (Rhynchopsitta
terrisi)
Los primeros estudios realizados con R. terrisi datan de la década de los setenta,
en donde Lawson y Lanning (1981) reportaron información general de la especie.
Mencionaron la manera cómo localizaron a las cotorras, los conteos que hicieron
de 800, 1400 y 1600 aves, las observaciones con respecto a la anidación colonial
en los riscos, la migración, la descripción de los pollos, vocalización y
depredadores principalmente.
Posteriormente en 1991 Snyder y Lanning (in litt.) documentaron varias colonias
de anidación, al igual que Eglantina Canales de PROFAUNA y sus estudiantes de
la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (Enkerlin-Hoeflich et al. 1996).
En 1994 comenzó el proyecto de investigación "Estatus, distribución, ecología y
conservación de las cotorras serranas (Rhynchopsitta pachyrhyncha y R. terrisi)
en el Norte de México" realizado por el Centro de Calidad Ambiental del Instituto
Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) (Enkerlin-Hoeflich et
al. 1996). Durante ese año y como parte de los objetivos del proyecto, se
realizaron numerosos recorridos en la Sierra Madre con el fin de localizar los
riscos más importantes para la anidación de la cotorra (Macías-Caballero et al.
1996; Macías-Caballero 1998). El grupo localizó 3 riscos de anidación adicionales
y se llevó a cabo la mayor observación simultánea desde 1978, contabilizándose
1400 individuos (Enkerlin-Hoeflich et al. 1996).
En 1995 el equipo logró corroborar 20 colonias de anidación para la cotorra
serrana, 6 de las cuales fueron nuevos registros (Macías-Caballero et al. 1996).
Además como resultado de la colaboración nacional e internacional fue posible
comprar para la Comisión Nacional de Biodiversidad (CONABIO), en el estado de
Coahuila, un terreno de 355 ha para proteger a R. terrisi, lugar conocido como El
Taray (Snyder et al. 1996). En este sitio anidan aproximadamentehasta el 44%
de las parejas reproductivas. Esta reserva se ha destinado para programas de
educación ambiental y ecoturismo, además de realizar investigación y protección
(Figura 2) (Macías-Caballero 1998).
Escala 1:650,000
Scale
20
Kilometers
ITESM, CCA
PMSE, LabSIG
TEC
MONTERREY
Figura 2. Localización de la reserva El Taray
Capítulo 1
En la temporada de 1996 el grupo de trabajo del ITESM comenzó a realizar
recorridos sistemáticos en la SMO durante la época reproductiva. Logrando con
esto monitorear las áreas de alimentación, aperchaderos y bebederos más
importantes para la especie. Gracias a estos recorridos descubrieron una nueva
colonia de anidación y se comprobó el fenómeno de la geofagia (Enkerlin-Hoeflich
etal. 1996; Snyder etal. 1996).
En 1997 continuaron los recorridos por la SMO, obteniéndose hasta la fecha 21
colonias de anidación y 5 sitios potenciales. En esa temporada de campo Macías-
Caballero (1998) realizó una investigación que consistió en monitorear el
comportamiento de anidación en la reserva El Taray. Mediante este trabajo
intensivo logró estimar el número de nidos exitosos en 30 y la productividad de
la colonia en 60 pollos, de igual modo estimó una tasa de reclutamiento para la
población de 150 individuos anuales. La productividad en pollos por nido exitoso
fue
de 2.0 (Macías-Caballero 1998).
Debido al rango de distribución relativamente pequeño de la especie, el adecuado
acceso a las áreas de anidación dentro del rango, la buena detectabilidad de las
colonias a distancia, y la relativamente larga duración de la temporada
reproductiva (de 3 a 4 meses); la localización de todas las colonias activas de la
especie fue una meta razonable que se alcanzó durante estos años de estudio.
Lo cual constituyó un objetivo poco común para cualquier especie de psitácido
(Enkerlin-Hoeflich et al. 1999). Hasta ahora el mayor esfuerzo se ha
concentrado en el rango reproductivo de la especie. A la fecha se tienen
documentadas 21 colonias de anidación y 8 de ellas no se habían reportado antes
de 1994 (Enkerlin-Hoeflich etal. 1999).
Durante la temporada de 1998 se registraron en El Taray un total de 21 nidos
exitosos, con una productividad total para la colonia de 32 pollos. En promedio,
el número de pollos por nido fue de 1.5. Por lo que si se compara entre años, en
1998 hubo una disminución de 30% de nidos exitosos con relación al número de
nidos del año anterior y de 25% en el éxito reproductivo por pareja (Enkerlin-
Hoeflich et al. 1999).
Durante la temporada de 1999 el grupo de trabajo registró una caída abrupta de
la productividad en las colonias de anidación. No se registraron parejas
anidantes en ninguno de los riscos y a pesar de que existieron algunas parejas
que intentaron anidar en El Taray, la productividad fue nula para toda la
población (Macías-Caballero ¡n litt.).
1.3. Descripción del área
1.3.1. La Sierra Madre Oriental
Regionalmente, la Sierra Madre Oriental constituye un paisaje de gran
importancia Pues además brinda múltiples servicios ecológicos a las áreas
metropolitanas cercanas como la de Monterrey y de Saltillo y también alberga
una gran riqueza de especies y endemismos (CCA-ITESM 1994).
La SMO comprende aproximadamente unos 600 km de largo con un promedio de
amplitud de 80 km. Limita al este con la subprovincia de la cuenca de Tampico,
Capítulo 1
Misantla y la Plataforma Burro Picachos, al sur por el Eje Neovolcánico
Transversal y al oeste por el Altiplano Mexicano. El plegamiento de la Sierra
tiene una dirección de NNO a SSE principalmente, con una flexión hacia el
suroeste de Monterrey. Los plegamientos fueron fuertes, con lo cual se
generaron anticlinales estrechos y elevados, además de pliegues de 2 o más
anticlinales, pliegues secundarios en forma de zig-zag o múltiples en un sólo
anticlinal. Las alturas que podemos encontrar van desde los 2,000 a los 2,500
msnm (Inegi 1986).
Geología
La mayoría de las rocas superficiales son de origen sedimentario. Los
sedimentos de los mares primitivos se convirtieron en rocas calizas, lutitas y
areniscas. Las enormes fuerzas geológicas elevaron el fondo marino por encima
del nivel superficial del agua. Existen afloramientos del período Triásico y
Jurásico Superior de la era Mesozoica que testimonian el avance del mar. En el
Cretácico Inferior se favoreció la compactación de sedimentos calcáreos que
dieron origen a calizas de gran espesor, ricas en fósiles. Mientras que en el
Cretácico Superior el mar se hizo más profundo y se depositaron arcillas; lo cual
trajo como consecuencia la formación de lutitas suaves, quebradizas, frágiles y
erosionables. Hacia fines del Cretácico y Terciario Inferior tuvieron lugar los
movimientos que corrugaron las capas de roca que en la actualidad configuran la
SMO (Alanís-Flores et al. 1996).
Suelos
Los tipos de suelo son semiáridos. La mayor parte de los suelos son delgados y
de texturas gruesas o bien con subsuelos poco permeables, con una morfología
de perfiles variable, entre los cuales figuran: Litosoles, Regosol calcáneo,
Rendzinas, Yermosol háplico, Fluvisoles, Xerosoles, Vertisoles, Chernozem,
Luvisoles, Feozem, Castañozem y Cambisol principalmente. La Sierra contiene
además depósitos significativos de cobre, plomo y zinc (Inegi 1986).
Hidrología
Todas las corrientes superficiales nacen en la SMO y siguen muy variadas
direcciones, pero descargan finalmente en el Golfo de México, ya sea como
afluentes del Río Bravo o de los Ríos San Fernando y Soto la Marina, todos en
Tamaulipas (Alanís-Flores et al. 1996).
Las regiones hidrológicas más importantes que podemos encontrar son la
formada por el Río Bravo, dentro de la cual se encuentran los Ríos Santa
Catarina, San Juan, Pesquería, Ramos y Pilón en la región norte de la Sierra y en
la sureña encontramos al Río Panuco, formado por la conjunción del Río
Moctezuma en Querétaro y Tamuín en San Luis Potosí. Además de tener
innumerables lagos, túneles y canales subterráneos (Hori-Ochoa 1998; EBO
2000).
Clima
La SMO presenta una gran diversidad de climas. Los climas que podemos
encontrar van desde los secos extremosos, semisecos, templados y semicálidos,
aunque en los picos más altos es posible encontrar climas de tipo alpino. Lo
anterior se debe a la marcada diferencia de altitudes en la Sierra (Inegi 1986).
Capítulo 1
La zona de la SMO es árida con escasez de lluvias. La precipitación media anual
varía de 400 mm a 900 mm. Casi toda el área tiene mayor influencia de las
lluvias estacionales de verano. El comportamiento de las precipitaciones está
dado por la influencia de la circulación general de la atmósfera durante el año.
Las precipitaciones registradas en los meses de enero a marzo se deben a los
"nortes" que entran al territorio nacional, mismos que producen lluvias ligeras o
moderadas en estos meses. Durante el mes de junio se producen lluvias en
forma torrencial y chubascos. Sin embargo hay una disminución de las
precipitaciones hacia los meses de julio y agosto. En el mes de septiembre se
activa la circulación ciclónica y se vuelve a sentir la influencia de masas de aire
húmedo que tienen gran importancia en los cultivos de temporal de la región.
Las corrientes superficiales que nacen de la SMO corren hacia el este y descargan
sus aguas en el Golfo de México (CCA-ITESM 1994).
Vegetación
La vegetación varía dependiendo del clima, la fisiografía y la altitud. En esta
zona existen bosques de coniferas, matorral submontano, chaparral, matorral
desértico rosetófilo, pastizal, matorral desértico micrófilo y áreas sin vegetación
aparente (Inegi 1986).
Durante 1998 y 1999 ocurrieron una serie de incendios muy severos en el país y
la SMO no fue la excepción. SEMARNAP (2000) reportó 14,302 incendios para el
país, durante los meses de enero a agosto de 1998. Con un total de 583,664 ha
de superficie afectada, lo que equivale al 0.4% de la superficie forestal total del
país. El 73% correspondió a incendios rastreros o de superficie. Se quemaron
pastos naturales, arbustos y matorrales en un área de 425,850 hectáreas. El
27%afectó áreas arboladas en diversos grados, que significaron 157,007 ha, las
cuales representaron el 0.3% de la superficie arbolada total del territorio
nacional. El promedio de hectáreas por incendio fue de 40.81. Para 1999 la
SEMARNAP cuenta con datos acumulados del I o de enero al 15 de julio de 1999.
El número de incendios reportados fue de 7,880, con una superficie afectada de
243,643.23 ha y un promedio de superficie por incendio de 29.78 ha (SEMARNAP
2000).
Durante el mes de abril de 1998, ocurrieron 58 incendios en el Estado de Nuevo
León, con una afectación de 13,350 ha. Aun cuando estos incendios arrasaron
principalmente con matorrales y vegetación arbustiva, también destruyeron
porciones considerables de algunos de los bosques más importantes en todo el
rango de distribución de la cotorra. En el Cerro El Potosí se incendiaron 2,049
ha, de las cuales 1,984.74 eran de bosque. En San Isidro y parte de Laguna de
Sánchez (a menos de 5 km de El Condominio, la segunda colonia de anidación
más importante para la cotorra), se incendió un área de 5,467.9 ha de las cuales
58.1 ha eran de bosque (FCF/UANL-CCA/ITESM 1998).
Los incendios de 1998 afectaron una buena parte de los bosques de pino del
estado de Nuevo León. Las comunidades de Pinus ayacahuite, P. hartwegii y P.
cembroides, se vieron afectadas, así como el matorral de coniferas compuesto
por pinos enanos P. culminicola (FCF/UANL-CCA/ITESM 1998). Durante 1999 se
reportaron para la Sierra California y en el estado de Nuevo León un total de
4,955 ha afectadas durante los meses de abril y mayo. De las cuales 3,042.44
ha eran de bosque (CCA/ITESM/LabSIG 1999).
Capítulo 1
Fauna
La fauna de la zona es una mezcla de elementos neárticos y neotropicales como
consecuencia de las condiciones fisiográficas de la SMO. Existen algunas
especies catalogadas como en peligro de extinción de acuerdo con la NOM-059-
ECOL-94 como el oso negro (Ursus americanus eremicus), organismo carismático
e importante, el halcón peregrino (Falco peregrinus) y el tecolote moteado (Strix
occidentalis). La Sierra constituye también un área importante de refugio y
descanso durante la migración de la mariposa monarca (Danaus plexippus) (CCA-
ITESM 1997).
Capítulo 2
Capítulo 2.
Uso del paisaje por la cotorra serrana
oriental
2.1. Introducción
Al intentar entender los movimientos de una especie, es posible obtener
condiciones específicas de manejo si se describen variaciones individuales en
lugar de poblacionales. Esto es más recomendable para lograr una adecuada
conservación de la misma. A pesar de que existen ciertos tipos de habitat
preferidos, la escala a la cual los individuos muestran la selección de mismo varía
y depende de los atributos del paisaje y posiblemente de la experiencia
individual, lo cual es común en residentes de vida larga y que anualmente
mantienen sus territorios, tales como las cotorras, ya que influyen la experiencia
y el aprendizaje(Marzluff et al. 1997).
Los psitácidos son voladores fuertes que tienden a hacer vuelos largos, llegando
inclusive a atravesar islas. Las actividades que realizan diariamente se deben a
su dependencia por el alimento de la estación, lo cual incluye vuelos de forrajeo
desde una percha central cada mañana y regreso por la tarde. En muchas
especies estos movimientos aumentan durante la migración estacional, lo cual
ocasiona que algunas regiones sean ocupadas sólo durante ciertas épocas del
año. Los vuelos diarios pueden ser de una veintena de kilómetros y los
estacionales aún más largos (Snyder et al. 1987). La mayoría de los psitácidos
vuelan sobre grandes áreas en un sólo día, lo que les da la oportunidad de
seleccionar su habitat en el paisaje o bien escoger entre diferentes tipos de
vegetación (Gilardi y Munn 1998).
De acuerdo con varios estudios realizados, los picos de actividad de los psitácidos
ocurren por la mañana, durante las primeras horas desde el amanecer, debido
principalmente a sus hábitos diurnos y antes del atardecer, aunque
ocasionalmente puede ocurrir a cualquier hora del día (Snyder et al. 1987;
Enkerlin-Hoeflich 1995; Pizo et al. 1997; Gilardi y Munn 1998). Este
comportamiento obedece principalmente al tipo de forrajeo que realizan, el cual,
por lo general consiste en movimientos directos hacia las áreas de alimentación
siguiendo rutas tradicionales entre los aperchaderos y las zonas de forrajeo,
además de que pueden hacer vuelos de muchos kilómetros en busca de comida.
Los psitácidos suelen forrajear en grupo posiblemente para reducir el riesgo de
ser detectados por los depredadores. La actividad de vuelo les provee
información acerca del estatus de las semillas de su dieta, lo cual les da la
ventaja de poder aprovechar mejor los recursos alimenticios. Los movimientos
estacionales que presentan la mayoría de las especies, mismos que se ven
reflejados en la variación del uso de ciertas partes del bosque, se deben al tipo
de dieta, ya que por lo general está basada en frutas estacionales (Snyder et al.
1987).
10
Capítulo 2
2.2. Ecología del paisaje
La ecología del paisaje investiga los patrones espaciales de los tipos de habitats
en una escala regional y su influencia en la distribución de las especies y en los
procesos del ecosistema. Es también importante en la protección de la
diversidad biológica debido a que muchas especies no están confinadas a un sólo
tipo de habitat, sino que se mueven en diversos tipos de habitats o bien entre los
límites de dos o más. Al fragmentar un habitat, el potencial de colonización y
dispersión se reduce, así como la capacidad de forrajeo de los organismos,
quienes en muchas ocasiones tienen la necesidad de moverse a través del
paisaje para alimentarse de ciertos recursos específicos (Primack 1993).
Una manera de conocer cómo los organismos utilizan el paisaje es por medio de
las técnicas de telemetría. Ésta ha sido utilizada como una herramienta para
investigación de fauna silvestre y consiste básicamente en la obtención de datos
biológicos de organismos a cierta distancia en donde las ondas de radio son las
más frecuentemente utilizadas (Cochran 1980). Ésta técnica es ampliamente
usada para conocer los movimientos poblacionales, ya que provee información
acerca de cómo los organismos utilizan el paisaje, los patrones de actividad,
dispersión y migración. La mayoría de los investigadores que han trabajado con
telemetría dan por hecho que los animales marcados se comportan de manera
similar que aquellos que no lo están y a la vez los consideran como muestra
aleatoria y representativa de la población entera (White y Garrot 1990).
Con la implementación y desarrollo de las técnicas de radiotelemetría para
estudiar a la fauna silvestre se ha logrado conocer aspectos relacionados con la
historia natural y ecología de las especies. El número y diversidad de las
especies estudiadas con éstas técnicas se ha ampliado y continúa creciendo. Las
razones principales por las que se ha utilizado ésta técnica para el estudio de la
fauna silvestre son la accesibilidad a la especie, la posibilidad de colectar datos
de manera continua y conocer las características físicas del habitat y de la
capacidad de buscar y observar una especie (Hegdal y Colvin 1986).
La información que puede obtenerse mediante la utilización de las técnicas de
telemetría es muy variada, estando entre las más importantes el rango
hogareño, uso de habitat y fidelidad de sitio.
Rango hogareño
Se define como rango o ámbito hogareño al área que está disponible para el
animal durante sus actividades cotidianas, en este lugar el animal debe encontrar
todos sus requerimientos de habitat. Los movimientos anormales como la huida
de algún depredador no se consideran bajo esta categoría (Bailey 1984). Según
Marzluff (1997) la selección del habitat puede realizarse en 3 escalas diferentes:
1.-Selección o evasión de ciertos tipos de habitat para el ámbito hogareño.
2.-Selección o evasión de ciertos habitats dentro del ámbito hogareño.
3.-Selección de las zonas de forrajeo dentro de áreas altamente utilizadas.Los animales migratorios pueden tener varios rangos hogareños que son usados
de acuerdo a la época del año, sin embargo, por definición los movimientos que
se presentan durante la migración no son considerados como parte del mismo,
ya que no constituyen movimientos diarios. La migración es un movimiento que
se realiza en dos direcciones, por lo general entre dos rangos hogareños y dos
estaciones del año y pueden ser latitudinales y altitudinales.
í i
Capítulo 2
Por lo general podría esperarse que los rangos hogareños en hábitats bien
conservados sean menores que aquellos que se presentan en hábitats
perturbados. Esto se debe a que los animales recorren distancias más cortas
para satisfacer sus necesidades. Del mismo modo, los animales que tienen una
densidad de población alta tienden a tener rangos hogareños pequeños debido a
que ocupan hábitats bien conservados y porque sus interacciones sociales
pueden llegara limitar sus movimientos (Bailey 1984).
Las áreas críticas también conocidas como áreas clave, son parte del rango
hogareño donde se localizan los recursos limitados, como por ejemplo los
cuerpos de agua en las zonas desérticas, las áreas de anidación, etc. Para
mantener una población saludable es necesario localizar y conservar las áreas
críticas (Bailey 1984). En esta categoría puede incluirse el "homing", que se
define como el regreso de las especies a su rango hogareño cuando se han
desplazado de él durante la migración (Bailey 1984).
Disponibilidad de habitat
La disponibilidad de habitat se determina por lo general con base en ciertas áreas
específicas en un mapa. La disponibilidad consiste en la cantidad de área de
cada habitat que está disponible para la población. Por razones obvias en
algunas ocasiones lo que los científicos determinan como habitat disponible
necesariamente no es lo mismo que la fauna silvestre percibe como tal. Para
calcular el tamaño de cada habitat en un mapa puede utilizarse la tecnología de
los sistemas de información geográfica (White y Garrot 1990).
Uso de habitat
El uso de habitat se calcula con el porcentaje de tiempo que el animal pasa en un
cierto tipo de habitat en particular y con la actividad que realiza durante ese
período de tiempo, así como los patrones de movimiento y actividad diarios y
durante cierta hora del día; como son comer, beber agua, descansar, etc. Por
medio de este análisis es posible inferir la "selección" o "rechazo" (avoidance) y
necesidad por ciertos tipos de habitat (White y Garrot 1990).
Selección de habitat
Debe considerarse la selección de habitat de una población hacia un tipo de
habitat en particular. La pregunta más importante en la selección de habitat es
si la población utiliza ciertos hábitats en lugar de otros y por lo tanto pasa más
tiempo en estos lugares considerando la disponibilidad de cada tipo de habitat
(Marzluff 1997).
Fidelidad de sitio
La fidelidad de sitio es la tendencia de un organismo a regresar a un área que
ocupó previamente o bien a permanecer en la misma área por un período de
tiempo. Este concepto provee información acerca de la dinámica de sus
movimientos y sistemas sociales, lo cual puede aterrizarse en planes adecuados
de manejo y conservación. Los estudios de fidelidad de sitio son útiles para
detectar los impactos causados por las actividades humanas, como son la
explotación de pozos petroleros, la extracción de madera y emisiones de
contaminantes, por mencionar algunas (White y Garrot 1990).
12
Capítulo 2
2.3. Estudios de telemetría con psitácidos
Debido al creciente aumento de especies de psitácidos amenazadas de extinción,
diversos investigadores comenzaron a idear distintas maneras de estudiarlos con
el fin de conocer su comportamiento en vida silvestre. Las técnicas de telemetría
proporcionaban esta posibilidad, por lo que rápidamente surgió la necesidad de
marcar con radiotransmisores algunos organismos. Los primeros estudios se
realizaron con loros isleños. Uno de los objetivos más importantes para realizar
estudios de telemetría era conocer la tasa de supervivencia de los organismos
criados en cautiverio y liberados, con el fin de realizar posteriores liberaciones de
psitácidos con poblaciones severamente diezmadas en condiciones silvestres.
Las liberaciones de psitácidos datan desde 1982 y comenzaron con un grupo de
loros Amazona ventralis para posteriormente liberar loros de Puerto Rico (A
vittata) (Snydereta/. 1987; McFarland 1991).
A partir de entonces, la telemetría se ha empleado en más especies de
psitácidos, y se ha convertido en una herramienta útil para conocer el
comportamiento y aspectos relacionados con la biología de éstas. Por ejemplo,
se han estimado los picos de actividad de las aves con relación a las estaciones
del año, los movimientos diarios y estacionales, las migraciones altitudinales y
latitudinales, los movimientos de los juveniles a la salida del nido, el rango
hogareño, la fidelidad de sitio, los patrones alimenticios, las tasas de mortalidad
de algunas especies como son: el loro de puerto Rico (Amazona vittata), el loro
australiano Pezoropus wallicus. En México estos estudios han sido llevados a
cabo con algunas especies como el loro corona lila A. finschi, el loro tamaulipeco
A. virídigenalis, el loro cabeza amarilla A. oratríx y las cotorras serranas tanto
oriental como occidental (Snyder et al. 1987; 1994; Lindsey 1991; McFarland
1991; Enkerlin-Hoeflich 1995; Enkerlin-Hoeflich et al. 1997, 1999; Cruz-Nieto
1998; Salinas y Renton 1999).
Los radios se han ido probando y mejorando continuamente. El modelo y la
duración de la batería dependen de las condiciones del estudio. Existen algunos
que tienen una batería con duración de días, semanas o hasta de años, mientras
que los modelos varían desde radiocollares con antena, sin antena, con collar de
metal, con cubierta de acrílico, hasta radios que se caen con la muda del
plumaje. Los pesos por lo general han representado menos del 4% del peso
corporal de las especies a estudiar (Enkerlin-Hoeflich 1995; Snyder et al. 1987,
1994; Enkerlin-Hoeflich et al. 1997, McFarland 1991; Meyers 1996).
2.4. Uso de los Sistemas de Información Geográfica
para estudios biológicos
Un Sistema de Información Geográfica (SIG) es un conjunto de programas y
equipos de computación que permite el acopio, manipulación y transformación de
datos espaciales (mapas, imágenes de satélite) y no espaciales (atributos)
provenientes de varias fuentes, temporal y espacialmente diferentes. El
elemento distintivo de un SIG es su capacidad de análisis y modelación, lo cual lo
distingue de los sistemas de cartografía automatizada y de los bancos digitales
de datos. El poder analítico de los SIG es lo que los convierte en una
herramienta muy útil. Los SIG sirven en el manejo de información de diversas
fuentes, en diferentes escalas y con diferentes contenidos. Facilitan la
integración de información para comprender y resolver problemas
13
Capítulo 2
multidisciplinarios y representan el mecanismo más adecuado para utilizar la
información generada por medio de sistemas de percepción remota. El análisis
visual y digital de imágenes de satélite basado en la reflectancia o respuesta
espectral de los objetos presentes en la superficie terrestre requiere de un
sistema adecuado de manejo e integración de datos que permita su
manipulación, procesamiento y transformación en información útil (Aronoff 1989;
Boceo et al. 1991).
El desarrollo de los sistemas de información geográfica ha sido una gran ayuda al
valorar la compatibilidad del uso múltiple de los recursos naturales. Por ejemplo
en la silvicultura, se han usado para calcular la cantidad de madera que puede
cortarse en un área determinada, la dispersión de los incendios forestales, para
desarrollar y evaluar planes alternativos de manejo, o bien para realizar una
clasificación más precisa de las comunidades vegetales (Weih 1989; García-
Aranda 1996, Hori-Ochoa 1998).
Los SIG pueden usarse en el manejo de la fauna silvestre, para predecir los
efectos de las actividades humanas y loseventos naturales en la abundancia de
las poblaciones de fauna silvestre, conocer los patrones de distribución de
especies raras y endémicas, también se han utilizado para conocer cuáles son las
áreas críticas para ciertas especies, así como para modelar escenarios y
encontrar hábitats adecuados para algunas de ellas (Miller 1989; Velázquez y
Boceo 1994; Lammertink 1996). Uno de los usos más innovadores de los SIG y
la tecnología de percepción remota ha sido el rastrear la fauna silvestre por
medio de telemetría por satélite. Este procedimiento ha permitido dar
seguimiento a grandes distancias, con mayor precisión y eficiencia de lo que se
había hecho con anterioridad (Aronoff 1989).
2.5. Meta y objetivos
Meta
Conocer los movimientos de la cotorra serrana oriental (/?. terrisi) con el fin de
determinar el uso del paisaje en su rango de distribución reproductivo.
Objetivos
1. Determinar los movimientos diarios de R. terrisi a lo largo de su rango
reproductivo.
2. Estimar el rango hogareño y el grado de fidelidad de sitio de R. terrisi en
el rango reproductivo.
3. Conocer el uso relativo de habitat de la cotorra serrana oriental durante
los meses de reproducción.
14
Capítulo 2
2.6. Método
2.61. Captura
Por ser un estudio descriptivo de los patrones de conducta de la cotorra, fue
necesario utilizar collares de radiotelemetría durante la temporada de 1999 para
monitorear la población. Debido a limitaciones logísticas, la mayor parte del
tiempo contamos con un sólo equipo formado por dos personas para buscar a las
aves, aunque en algunas ocasiones tuvimos la oportunidad de contar con un
segundo equipo también formado de dos personas. Colocamos un total de 4
collares de telemetría en El Taray. Tres eran de lazo y uno de antena de látigo,
fabricados por Holohil Sytems Ltd. (Figura 3). Los primeros tenían un peso
aproximado de 20 gr, y el último de 13 gr, todos con una duración promedio de
24 meses. El peso de los radios de lazo representaba el 4.34% del peso corporal
de las aves, mientras que el de látigo 2.8%. Este tipo de radios han sido
probados con anterioridad y se ha comprobado que son efectivos para el estudio
de psitácidos ya que tienen buena detectabilidad (8-10 km) de acuerdo con los
fabricantes y a la vez son inofensivos para el organismo (Meyers 1996; Enkerlin-
Hoeflich 1995).
Seleccionamos El Taray para colocar los radios debido a la accesibilidad a la
reserva y a que es considerada como la colonia que alberga más del 40% de las
parejas anidantes, lo cual incrementaba la posibilidad de éxito en las capturas.
Logramos capturar 12 cotorras en este lugar. Todas fueron medidas y pesadas.
De esta muestra, seleccionamos las que consideramos más fuertes para soportar
el peso extra que significaban los radios y posteriormente las liberamos. Una vez
colocados los radios, procedimos a dar seguimiento diario a los organismos
mediante el uso de antenas yagi de 3 elementos y de receptores portátiles TRX-
2000 S de Wildlife Materials Inc.
Figura 3. Radio de lazo y de látigo.
2.6.2. Seguimiento
Rastreamos los movimientos a lo largo del rango reproductivo de la especie
durante los meses de agosto a diciembre de 1999. Mediante el seguimiento de
los organismos nos fue posible determinar los sitios más importantes que
visitaban para realizar sus actividades diarias. De acuerdo con lo mencionado
536256
15
Capítulo 2
por McFarland (1991) con una brújula marcamos la orientación de los puntos
donde se escuchó la señal con mayor intensidad y los georreferenciamos con un
sistema de posicionamiento global (GPS) Garmin 45, para posteriormente
ubicarlos en cartas a escala 1:50,000 de Inegi de la Sierra Madre Oriental. En
ocasiones las señales emitidas rebotaban debido a la proximidad de las montañas
los organismos se perdían, por lo que realizamos algunas triangulaciones para
conocer con mayor precisión el sitio donde se localizaban. Anotamos los datos en
las formas que se muestran en el anexo 1. Mediante este procedimiento
consideramos la posibilidad de armar y establecer las rutas y localidades precisas
donde las aves comían y perchaban. Intentamos seguir a cada organismo
marcado durante 2 días consecutivos, desde el amanecer hasta el anochecer,
repitiendo el ciclo hasta regresar al primer radio. En los casos en que nos fue
posible, tomamos nota acerca del tipo de actividad realizada, duración de la
misma y del número de individuos que formaban las parvadas.
2.6.3. Análisis
Rango hogareño
El rango hogareño por lo general se calcula con el polígono de convergencia del
95%. La utilización del polígono de convergencia tiene las ventajas de que es
simple de usar, fácil de calcular y de forma flexible. Además de que está en
función del número de localidades utilizadas para generarlo. Una manera muy
común de utilizarlo es eliminando los "outliers" antes de calcular el polígono. Sin
embargo, los datos distribuidos de manera uniforme, significan que cada sección
del rango hogareño es usada frecuentemente, lo cual implica que no existe un
centro de actividad (White y Garrot 1990).
Selección de habitat
La selección de habitat se puede calcular con una prueba de X2, comparando la
proporción de los diferentes tipos de habitat en el polígono de convergencia del
95% en la zona de estudio contra el número de veces que se detectó cada
organismo marcado en los diferentes tipos de habitats (White y Garrot 1990).
Fidelidad de sitio
La fidelidad de sitio se puede calcular mediante la obtención de una serie de
sitios para cada individuo marcado durante un cierto periodo de tiempo. En
algunos casos se calcula mediante el porcentaje de animales marcados que
regresan a un área en particular, durante ciertas épocas del año (White y Garrot
1990).
2.7. Resultados
2.7.1. Captura
Debido a la baja densidad de cotorras en El Taray durante la temporada de
anidación, nos resultó difícil capturar las aves para marcarlas. Realizamos 3
salidas al campo para atraparlas, durante los meses de julio y agosto, con un
total de 21 días. En la primer salida contamos con la ayuda de un escalador
profesional: Juan Vargas, quien colocó una trampa en un nido que años
16
Capítulo 2
anteriores había sido documentado como exitoso y al cual llegaban con
frecuencia algunas parejas de aves. Durante las otras dos salidas sólo colocamos
dos redes de niebla a una altura aproximada de 2.5 m. Las aves por lo general
visitaban el sitio entre las 9:00 y 12:00 hrs, lo que limitaba considerablemente el
periodo de captura a prácticamente una pequeña parte de la mañana. Durante la
primer salida logramos colocar el radiotransmisor de látigo 148.020 a un ave que
cayó en la trampa que estaba colocada en el risco. En la segunda salida
colocamos el radio 148.813. Mientras que para la tercer salida pusimos los
transmisores 148.902 y 148.743, éstos tres últimos de lazo. Cada una de las
aves capturadas fue pesada y medida, además para algunas nos fue posible
obtener muestras de sangre y parásitos. Los resultados se muestran en la tabla
1.
2.7.2. Seguimiento
Originalmente intentamos dar seguimiento durante dos días consecutivos a cada
uno de los organismos marcados. Sin embargo no nos fue posible debido a su
gran movilidad, los plegamientos de la Sierra, la falta de caminos y la
detectabilidad de los radios. A pesar de lo anterior logramos encontrar los 4
radios y seguir a 3 en el rango reproductivo que comprende los estados de
Coahuila y Nuevo León. Mientras que escuchamos el cuarto radio en Tamaulipas
en diciembre de 1999 y nuevamente en el rango reproductivo en abril del 2000.
Rango reproductivo
Realizamos la búsqueda de las aves en el rango reproductivo durante los meses
de agosto a diciembre de 1999. El número de días que pasamos en esa zona
tratando de dar seguimiento a las aves fue de 53. Intentamos seguir a un sólo
individuo durante un día completo, desde el amanecer hasta el anochecer. Sin
embargo, los radios en ocasiones variaban en detectabilidad. Dependiendo de
las condiciones climáticas se escuchaban con mayor o menor intensidad, aun a la
mismadistancia. El promedio de la distancia a la que escuchamos los radios
desde tierra se muestra en la tabla 2. Mediante el seguimiento de los
organismos marcados nos fue posible conocer lugares importantes para la
especie. En estos sitios encontramos 3 de los cuatro radios. Los sitios están
localizados en la Sierra San Antonio, Sierra La Nieve y Sierra La Viga.
En 15 ocasiones nos fue posible dar seguimiento continuo durante un día
completo de actividad a 2 de los organismos marcados con radios. En 10
ocasiones al radiotransmisor 148.020 y en 5 al 148.813. No nos fue posible
seguir durante un día completo al ave marcada con el radiotransmisor 148.902,
aunque logramos ubicar varios sitios donde se encontró el ave.
Radio 148.020
Los movimientos detallados del radio 148.020 se muestran en la tabla 3.
Escuchamos este radio por primera vez el 17 de agosto y el 19 de octubre fue el
último día que lo detectamos. La distancia promedio que recorrió este organismo
fue de 23.62 km, con una desviación estándar de 5.67 km.
17
Capítulo 2
Tabla 1. Medidas morfometricas y muestras tomadas a R. terrisi en julio y agosto de 1999 en el Taray, Coahuila.
Fecha 17/VH/99
Hora de captura 10:25
No. de organismo i
No. de transmisor
No. de frecuencia xxx
Peso (gr) 435
Cuerda del ala 272
(mm)
Envergadura del ala 820
(mm)
Culmen (mm) 41
Largo mandíbula
inferior (mm) 30.3
Ancho del pico
(mm) Mandíbula 22-3
superior
Mandíbula inferior 22.5
Longitud cola(mm) 170
Tarso (mm) 30.5
Diámetro del tarso 8.1
(mm)
Dedo medio s/uña 33.7
(mm)
Largo total (mm) 390
Diámetro del 280
cuerpo (mm)
Parche de No
incubación
Muda NO
17/VII/99
10:35
2
XXX
464
280
810
40.7
29.7
21.2
22.8
180
29.9
6.9
29.1
410
280
No
No
17/VII/99
11:30
3
XXX
504
285
840
42.6
32
20.5
21.9
190
32.2
7.8
29.9
445
295
No
No
17/VII/99
11:30
4
XXX
XXX
XXX
280
830
40.2
XXX
21.5
23.1
190
30.1
6.5
29.5
440
280
XXX
XXX
17/VII/99
11:30
5
XXX
020 látigo
428
280
810
42
XXX
XXX
XXX
190
29
8
29
430
270
No
No
2/VIII/99
11:50
6
XXX
XXX
484
300
824
39.5
29.6
21
22.9
195
28.6
7.3
32
410
300
Proba-
ble
No
2/VIII/99
11:50
7
HSL 39084
813 lazo
460.2
298
800
39.4
29.9
21.6
21.7
180
31
8.8
31
394
300
No
No
10/VIII/99
18:20
8
XXX
XXX
453
305
780
41.5
29.9
22.9
24.3
195
30
7.5
31
415
320
No
No
12/VIII/99
11:25
9
XXX
XXX
448
290
720
40
30
21
20
165
30
6.5
34.3
373
280
No
Plumas
nuevas en
el pecho
12/VIII/99
11:25
10
HSL 39085
902 lazo
466.9
297
714
41
29.4
24
24.2
209
31
6.3
31.1
413
290
No
No
13/VIII/99
11:30
11
XXX
XXX
454
295
804
41.4
30.5
21.5
22.3
207
29.4
7.4
32
400
270
No
No
13/VIII/99
11:30
12
HSL 39082
743 lazo
465.5
286
724
40.3
30
21.7
20
XXX
30
7.5
32.5
420
290
No
No
18
Capítulo 2
Tabla 1. Medidas morfométricas y muestras tomadas a R. terrísi en julio y agosto de 1999 en el Taray, Coahuila
(continuación).
Desgaste
plumaje cola
Desgaste
plumaje alas
del
del
Muestra de sangre
Frotis
Hisopo cloacal
Hisopo traqueal
Parásitos
Plumas quebradas
Contenido
alimento en
buche
Otros
No. de anillo
de
el
Muy
desgasta-
das
Completo,
poco
desgaste
SI
SI
#1-C
#1-T
No
4a . izq
cola
No
XXX
Muy
desgasta-
das
Viejo
Si
Si
#2-C
#2-T
No
No
No
Probable
del nido
506. Se le
quitó el
radio por
ser posible
pareja del
#5
XXX
Muy
desgasta-
das
Viejas
No
Si
#3-C
#3-T
No
6a. izq
cola
No
Fosa nasal
derecha
deformada
XXX
XXX
XXX
Si
Si
#4-C
#4-T
No
7a. ala
4a.
cola
XXX
XXX
Muy des-
gastadas
Desgaste
medio
No
Si
#5-C
#5-T
No/1
chinche
der No
der
No
5a. Pluma
derecha en
sangre.
Nido 506
XXX
Desgasta-
das
Buen
estado
XXX
XXX
XXX
XXX
No
No
Muy poco
Probable
hembra.
muy dócil,
se ve como
posible
huevo
cerca de la
cloaca
XXX
Desgasta-
das
Poco
desgaste
XXX
XXX
XXX
XXX
No
No
No
Pareja
probable
del no. 6
XXX
Desgasta-
das
Desgasta-
das
XXX
XXX
#8 H-C
#8 H-T
Sí
No
No
Cotorra
muy
maltratada
parece
vieja.
Tiene el
vientre y
las alas
llenas de
resina.
XXX
Desgasta-
das
Desgasta-
das
XXX
XXX
#9 H-C
#9 H-C
No
Cola 4a.
Lado
izquierdo
No
Plumas 3a.
Primarias
nuevas en
las dos
alas
48
Desgasta-
das
Desgasta-
das ala
izquierda
falta un
pedazo del
raquis
XXX
XXX
#10 H-C
#10 H-C
No
la . Cola
lado
izquierdo
No
Pareja
probable
del número
9
XXX
Muy des-
gastado
Leve
XXX
XXX
#11 H-C
#11 H-C
No
No
Muy poco
49
Muy des-
gastado
Leve
XXX
XXX
#12 H-C
#12 H-C
No
No
Poco
Pluma
nueva en
cola: 3a.
Lado
derecho.
Posible
pareja del
11.
XXX
19
Capítulo 2
Tabla 2. Promedio de detectabilidad de los radios de los organismos
marcados en la temporada 1999.
Radio
148.020
148.813
148.902
X
Media
(km)
3.53
3.53
3.62
3.56
Numero de
muestras
96
56
33
Desviación
estándar
1.34
1.11
1.43
Tabla 3. Movimientos diarios del organismo marcado con el radio
148.020.
Fecha
20/ago/99
Total
24/ago/99
Total
3/sep/99
Total
6/sep/99
Total
Hora
10:15
12:10
12:50
17:00
18:30
19:30
6:52
12:10
14:55
16:43
16:48
6:45
8:45
9:05
16:10
16:50
6:50
7:40
7:45
8:25
16:55
17:30
Coordenadas (UTM)
342700
350833
341880
343300
342700
345150
345150
341050
350833
340620
341880
345150
331250
331250
339100
345150
345150
343500
350833
353990
343500
345150
2801600
2802992
2801750
2805650
2801600
2806250
2806250
2806500
2802992
2805000
2801750
2806250
2812250
2812950
2807620
2806250
2806250
2806100
2802992
2803520
2806100
2806250
Sitio
Sierra San Antonio 7
El Taray/Sierra La Viga
Sierra San Antonio
San Rafael/Sierra La Viga
Sierra San Antonio 7
Dormidero Sierra La Viga
Dormidero/Sierra La Viga
Valle Florido/Sierra La Viga
El Taray/ Sierra La Viga
Sierra La Viga 1
Sierra San Antonio 1
Dormidero/Sierra La Viga
Sierra La Nieve
Cañada Santa Rosa/ Sierra
La Nieve
San Pedro/Sierra La Viga
Dormidero/Sierra La Viga
Dormidero/Sierra La Viga
La Maroma/Sierra La Viga
El Taray/Sierra La Viga
El Chupadero/Sierra La Viga
La Maroma/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
Distancia
recorrida (km)
8.25
9.04
4.17
4.11
5.28
2=30.85
7.35
10.4
10.4
3.5
2=31.65
15.1
0.7
9.50
6.20
£=31.5
1.66
7.97
3.20
10.8
1.66
2=25.29
20
Capítulo 2
Tabla 3. Movimientos diarios del organismo marcado con el radio
148.020 (continuación).
Fecha
7/sep/99
Total
13/oct/99
Total
14/oct/99
Total
15/oct/99
Total
16/oct/99
Total
19/oct/99
Total
X=23.62
Hora
7:00
12:05
18:30
19:00
6:55
8:07
8:19
8:50
10:30
15:45
7:12
10:00
10:20
17:30
7:10
8:50
8:55
15:30
7:15
8:25
11:25
15:00
16:10
7:20
7:58
12:40
16:10
Coordenadas (UTM)
345150
341050
342700
345150
345150
350150
353990
350150
351453
345150
345150
350150
353990
345150
345150
350150
353990
345150
345150
353990
350833
345555
345150
345150
350833
353990
345150
2806250
2806500
2801600
2806250
2806250
2804175
2803520
2804175
2803754
2806250
2806250
2804175
2803520
2806250
2806250
2804175
2803520
2806250
2806250
2803520
2802992
2805650
2806250
2806250
2802992
2803520
2806250
Sitio
Dormidero/ Sierra La Viga
Valle Florido/Sierra La Viga
Sierra San Antonio 7
Dormidero / Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
La Pinalosa/Sierra La Viga
El Chupadero/ Sierra La Viga
La Pinalosa/Sierra La Viga
La Guardarraya/ Sierra La
Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
La Pinalosa/Sierra La Viga
El Chupadero/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
Dormidero / Sierra La Viga
La Pinalosa/Sierra La Viga
El Chupadero/ Sierra La Viga
Dormidero / Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
El Chupadero/ Sierra La Viga
El Taray/ Sierra La Viga
La Concordia/Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
El Taray/ Sierra La Viga
El Chupadero/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
Distancia
recorrida (km)
7.35
7.79
5.28
£=20.42
5.41
3.89
3.89
1.37
6.78
£=21.34
5.41
3.89
9:25
£=18.55
5.41
3.89
9.25
1=18.55
9.25
3.20
5.91
0.73
£=19.09
6.56
3.20
9.25
2=19.01
21
Capítulo 2
Radio 148.813
Detectamos este radio por primeravez desde el 17 de agosto hasta el 24 de
septiembre. Sin embargo volvimos a escucharlo el 16 de noviembre y
permaneció en el sitio hasta el 30 de noviembre, día en que lo detectamos por
última vez. El promedio de kilómetros que recorrió este individuo fue de 23.71,
con una desviación estándar de 4.29 km. El detalle de los movimientos de este
organismo se muestra en la tabla 4.
Tabla 4. Movimientos diarios del organismo marcado con el radio
148.813.
Fecha
22/ago/99
Total
6/sep/99
Total
24/sep/99
Total
17/nov/99
Total
18/nov/99
Total
X=23.71
Hora
7:30
10:25
12:40
15:40
18:45
6:50
8:25
11:05
17:15
6:55
8:10
9:52
17:40
19:30
6:50*
8:05
14:10
15:55
7:40*
11:05
11:40
13:25
Coordenadas (UTM)
345150
340620
350833
341880
345150
345150
350150
353990
345150
345150
353990
345125
342161
345150
345150
337953
348614
345150
345150
355750
353990
345150
2806250
2805000
2802992
2801750
2806250
2806250
2804175
2803520
2806250
2806250
2803520
2800754
2802330
2806250
2806250
2807754
2806714
2806250
2806250
2802725
2803520
2806250
Sitio
Dormidero/ Sierra La Viga
Sierra La Viga 1
El Taray/ Sierra La Viga
Sierra San Antonio 1
Dormidero/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
La Pinalosa/Sierra La Viga
El Chupadero/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
El Chupadero/ Sierra La Viga
Sierra San Antonio 3
Sierra San Antonio 2
Dormidero/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
Valle Florido/Sierra La Viga
San Lorenzo/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
San Antonio/Sierra La Viga
El Chupadero/ Sierra La Viga
Dormidero/ Sierra La Viga
Distancia
recorrida (km)
4.7
10.4
9.04
5.58
1= 29.27
5.41
3.89
9.25
S= 18.55
9.25
9.29
3.36
4.94
S= 26.84
7.35
10.7
3.49
1= 21.54
11.2
1.93
9.25
£=22.38
*Horario de invierno
22
Capítulo 2
Radio 148.902
Logramos detectar este radio desde el 21 de agosto hasta el 29 de septiembre de
1999. Aunque lo volvimos a escuchar el 16 y 17 de noviembre por última vez. A
pesar de que se encontraba en el rango reproductivo, no nos fue posible seguirlo
durante un día completo de actividad. Sin embargo en la tabla 5 se muestran los
sitios en los que localizamos a este individuo.
Radio 148.743
Escuchamos este radio el 4 de diciembre en el estado de Tamaulipas a casi 190
km de donde le colocamos el transmisor y el I o de abril del 2000 volvimos a
escucharlo en el rango reproductivo.
Rango invernal
Llevamos a cabo las salidas al rango invernal, en los estados de Tamaulipas y sur
de Nuevo León, durante los meses de noviembre y diciembre con un total de 29
días. Durante este tiempo realizamos varios recorridos por la Sierra. En el
estado de Tamaulipas visitamos Ávila y Urbina, en el municipio de Jaumave, La
Peña, Valle Hermoso, La Marcela, municipio de Miquihuana, Estanque los Eguía,
Gabino Vásquez, Bustamante, Joya de Herrera, El Carrizo, municipio de Jiménez,
el Ejido de Santa Ana en el municipio de Victoria, La Siberia, San Antonio Peña
Nevada, La Encantada, La Escondida, Dulces Nombres, Los Caballos, Los San
Pedro, municipio de Güemez, El Gavilán, La Yerbabuena, Rancho Nuevo, Revilla,
Puerto Purificación y Los Mimbres principalmente. Mientras que en el estado de
Nuevo León los sitios visitados fueron el Cerro El Potosí en Galeana, La Ascención
(La Chona), Cerros el Grande y el Hijo y Cerro del Viejo en el municipio de
Zaragoza (Figura 1).
2.7.3. Rango hogareño
Para estimar el rango hogareño de los individuos fue necesario considerar los
sitios en donde los detectamos durante los meses de agosto a noviembre de
1999 en el rango reproductivo. Los sitios visitados por cada uno de los
organismos se muestran en la tabla 5. Con estos datos construimos dos
polígonos, uno con el área total y otro con el 95% de los datos obtenidos, lo cual
representó el polígono de convergencia del 95% para cada una de las aves. Los
polígonos se muestran en las figuras 4, 5 y 6, mientras que el área y el número
de puntos con que se construyó cada uno se observan en la tabla 6. La figura 7
muestra sobrepuestos los polígonos de convergencia del 95% obtenidos para las
3 cotorras.
2.7.4. Uso de habitat
Los tipos de vegetación en los que encontramos las aves marcadas fueron 5:
bosque de pino-oyamel-ayarín, bosque de pino, bosque de pino piñonero, bosque
de pino-encino y chaparral. Calculamos el porcentaje de tiempo que los
organismos pasaron en cada uno, comenzamos a contar a partir de la hora en
que escuchamos la primer señal detectada hasta la última vez que lo escuchamos
en ese sitio. Descartamos aquellos lugares en donde sólo escuchamos una vez la
señal o bien donde no existía un registro continuo de tiempo. La permanencia de
tiempo calculado para los diferentes tipos de vegetación se muestra en la tabla 7.
23
Capítulo 2
Tabla 5. Sitios visitados por los organismos marcados durante los meses
de agosto a diciembre de 1999.
Sitio
Dormidero/Sierra La Viga
El Chupadero/ Sierra La Viga
Sierra San Antonio 1
El Taray/Sierra La Viga
Sierra San Antonio 7
La Pinalosa/Sierra La Viga
San Pedro/Sierra La Viga
Sierra San Antonio 6
Sierra San Antonio 3
San Antonio/Sierra La Viga
Valle Florido/Sierra La Viga
La Maroma/Sierra La Viga
Cañón Chiquillo/Sierra La Nieve
Sierra San Antonio 4
Santa Amalia/Sierra La Nieve
San Juan/Sierra Rancho Nuevo
Cañada El Árbol/Sierra La Nieve
Sierra La Viga 2
La Concordia/Sierra La Viga
Sierra La Viga 1
Sierra La Nieve
Sierra San Antonio 5
Cañada la Pila/Sierra La Nieve
San Rafael/Sierra La Viga
Los Timones/Sierra Rancho Nuevo
La Copetona/Sierra La Nieve
Cañada Santa Rosa/Sierra La Nieve
La Guardarraya/ Sierra La Viga
San José/Sierra La Nieve
Sierra La Viga 3
La Yerbabuena/Sierra El Álamo
El Baratillo/Sierra El Álamo
Sierra Rancho Nuevo
Sierra La Viga 4
Sierra La Viga/Los Lirios
Sierra San Antonio 2
San Lorenzo/Sierra La Viga
El Ranchito/Sierra San Antonio
Cañada El Prieto/Sierra La Nieve
Sierra San Antonio 8
Total
Radio
148.02
0
24
9
4
4
6
6
3
5
2
2
3
2
2
1
1
1
0
2
2
1
1
1
1
1
1
0
1
1
1
1
1
1
1
1
0
0
0
0
0
0
93
Frecuencia de
Radio
148.81
3
21
3
4
2
1
1
3
1
1
2
1
2
1
1
0
1
0
0
1
1
1
0
0
1
2
0
0
0
0
0
0
0
0
1
1
1
1
0
1
56
Radio
148.90
2
10
2
2
1
1
1
2
1
2
1
0
0
1
1
1
2
2
0
0
0
0
0
1
1
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
0
1
0
33
visitas
Total
55
14
10
9
8
8
8
7
5
5
4
4
3
3
3
3
3
2
2
2
2
2
2
2
2
2
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
1
182
Porcen-
taje
30.22
7.69
5.50
4.40
4.40
4.40
3.85
3.85
2.75
2.75
2.20
2.20
1.65
1.65
1.65
1.65
1.65
1.10
1.10
1.10
1.10
1.10
1.10
1.10
1.10
1.10
0.55
0.55
0.55
0.55
0.55
0.55
0.55
0.55
0.55
0.55
0.55
0.55
0.55
0.55
100
24
_ = = = _ = = = = _ = = = _ _ _ _ _ ^ _ _ Capítulo 2
Tabla 6. Área y número de puntos considerados para la construcción de
los polígonos de convergencia del 95%.
Radios Número de Área total Número de puntos Área
puntos (ha) del polígono de (ha)
totales convergencia del
9 5 %
148.020 32 27,245 30 22,249
148.813 25 18,423 24 17,206
148.902 18 21,960 17 15,300
Tabla 7. Permanencia de tiempo de cada ave marcada en los diferentes
tipos de vegetación.
Tipo de vegetación
Número de horas
Radio Porcen- Radio Porcen- Radio Porcen-
148.020 taje 148.813 taje 148.902 taje
Bosque de
Bosque de
Bosque de
Bosque de
Chaparral
Total
pino-oyamel-ayann 118.20
pino
pino piñonero
pino-encino
13.4
8
1.16
7.35
148.11
79.81
9.05
5.40
0.78
4.96
100
128.15
4.583
8.833
0
0.416
141.982
90.26
3.23
6.22
0.00
0.29
100
4.62
3.67
2.17
1.00
2.25
13.70
33.70
26.68
15.81
7.30
16.43
99.9
Con el fin de conocer si las cotorras hacían un uso igual o diferente del tipo de
vegetación disponible en el área donde se encontraban, realizamos una prueba
de independencia de X2 (Daniel 1993; Weiner 1996), con los porcentajes
calculados de la tabla 7. Las hipótesis planteadas fueron las siguientes:
Ho: Las aves marcadas hacen un uso igual de cada tipo de vegetación.
Ha: Las aves marcadas hacen un uso diferente de cada tipo de vegetación.
Los valores obtenidos (X2=40.2610, gl=8, p<0.001) mostraron evidencia
significativa para considerar que las aves hacían un uso diferente paracada tipo
de vegetación. Los porcentajes muestran además que las tres aves pasaron la
mayor parte del tiempo en los bosques de pino-oyamel-ayarín.
2.7.5. Selección de habitat
Calculamos la selección o uso relativo de habitat para cada individuo con una
prueba de independencia de X2 (Daniel 1993; Weiner 1996). Para estimar la
selección contabilizamos el número de visitas que hizo cada ave en los diferentes
tipos de vegetación y la proporción de hectáreas de cada uno en el polígono de
convergencia del 95% construido para cada una de ellas. La tabla 8 muestra el
25
Capítulo 2
número de veces que detectamos las aves marcadas por cada tipo de vegetación
y el porcentaje para cada uno de los organismos. Mientras que en la tabla 9 se
observa el número de hectáreas que comprende cada tipo de vegetación en los
polígonos de convergencia del 95%.
Realizamos una prueba de independencia de X2 considerando los tipos de
vegetación para los polígonos de convergencia del 95%, agrupamos la vegetación
de la siguiente manera: los bosques de pino-oyamel-ayarín, de pino, de pino
piñonero y de pino-encino en la categoría de bosques de pino. En la categoría
del bosque de encino englobamos al bosque de encino y de encino-pino; el
matorral incluía el matorral submontano, el matorral desértico micrófilo y
rosetófilo, el pastizal incluía las zonas agrícolas y los suelos desnudos; mientras
que la categoría de chaparral quedó únicamente con este tipo de vegetación. La
tabla 10 muestra esta agrupación.
Debido a que sólo detectamos las aves en los bosques de pino-oyamel-ayarín, de
pino, de pino piñonero y de pino-encino y en el chaparral; resultó necesaria la
construcción de otras tablas de contingencia que contuvieran únicamente los
tipos de vegetación en los que detectamos a las cotorras. De tal modo que no
consideramos los tipos de vegetación restantes para la construcción de las
segundas tablas de contingencia de X2. Estas tablas fueron construidas con la
información de la tabla 11. Las hipótesis formuladas para cada radio fueron las
siguientes:
Ho: la selección de habitat de la cotorra con el radio 148.020, 148.813 ó 148.902
es igual para los 5 tipos vegetación.
Ha: la selección de habitat de la cotorra con el radio 148.020, 148.813 ó 148.902
es diferente para los 5 tipos de vegetación.
Los resultados obtenidos en las dos pruebas para las tres aves fueron altamente
significativos y mostraron que las aves seleccionan los bosques, marcadamente
los de pino-oyamel-ayarín. La tabla 12 muestra los resultados obtenidos para
cada uno de los polígonos de convergencia del 95%, considerando todos los tipos
de vegetación existentes y considerando únicamente los tipos de vegetación
donde las escuchamos.
2.7.6. Fidelidad de sitio
Calculamos la fidelidad de sitio para los individuos marcados, con base en lo
mencionado por White y Garrot (1990). Contabilizamos el número de visitas a
los diversos lugares donde los encontramos y calculamos el porcentaje de visitas
para cada lugar. La tabla 5 muestra el número de visitas por lugar y por
organismos así como el porcentaje de visita. El sitio más visitado fue el
dormidero, con un porcentaje de visitas del 30.22%. Los sitios restantes
tuvieron un porcentaje de visitas considerablemente menor con respecto al
dormidero. En segundo lugar encontramos el Chupadero, ubicado en la Sierra de
la Viga, con un 7.692%, mientras que el sitio de la Sierra San Antonio 1 obtuvo
un 5.495% de las visitas. Los siguientes lugares fueron poco visitados en
general ya que los porcentajes encontrados fueron menores al 5%. Estos
porcentajes indican que las aves mostraron un grado de fidelidad mayor hacia
algunos sitios.
26
Capítulo 2
Tabla 8. Frecuencia de visitas de las aves marcadas en cada tipo de vegetación.
Tipo de vegetación
Bosque de pino-oyamel-
ayarín
Bosque de pino
Bosque de pino piñonero
Bosque de pino-encino
Chaparral
Bosque de encino-pino
Bosque de encino
Matorral submontano
Matorral desértico micrófilo
Matorral desértico rosetofilo
Pastizal
Zonas agrícolas
Suelos desnudos
Total
Radio
148.020
62
12
10
1
8
0
0
0
0
0
0
0
0
93
Porcen-
taje
66.67
12.90
10.75
1.08
8.60
0
0
0
0
0
0
0
0
100
Número de visitas
Radio
148.813
36
10
7
1
2
0
0
0
0
0
0
0
0
56
Porcen-
taje
64.29
17.86
12.50
1.79
3.57
0
0
0
0
0
0
0
0
100
Radio
148.902
20
5
3
1
4
0
0
0
0
0
0
0
0
33
Porcen-
taje
60.61
15.15
9.09
3.03
12.12
0
0
0
0
0
0
0
0
100
Total
118
27
20
3
16
0
0
0
0
0
0
0
0
182
27
Capítulo 2
Tabla 9. Superficie de los tipos de vegetación encontrados en cada uno de los polígonos de convergencia del 95%.
Tipo de vegetación
Bosque de pino-oyamel-ayarín
Bosque de pino
Bosque de pino piñonero
Bosque de pino-encino
Chaparral
Bosque de encino-pino
Bosque de encino
Matorral submontano
Matorral desértico micrófilo
Matorral desértico rosetofilo
Pastizal
Zonas agrícolas
Suelos desnudos
Total
Radio
148.020
1817
8533
1018
294
4162
120
334
246
6
83
1290
3710
637
22,249
Porcen-
taje
8.17
38.35
4.57
1.32
18.71
0.54
1.5
1.11
0.03
0.37
5.8
16.67
2.86
100
Número de
Radio
148.813
1406
6608
817
225
2802
79
246
193
5
64
1028
3240
494
17,206
hectáreas
Porcen-
taje
8.17
38.4
4.75
1.31
16.29
0.46
1.43
1.12
0.03
0.37
5.98
18.83
2.87
100
Radio
148.902
1516
6039
736
225
2702
75
275
173
4
56
920
2184
397
15,300
Porcen-
Taje
9.91
39.47
4.81
1.47
17.66
0.49
1.8
1.13
0.03
0.37
6.01
14.27
2.59
100
28
Simbología
Polígono total
Scale
O
Kilometers
Polígono mínimo de
convergencia del 95%
Sitios de localización
de la cotorra
1 Dormidero/Sierra La Viga
2 El Chupadaro/Sierra La Viga
3 Sierra San Antonio 7
4 La Pinalosa/Sierra La Viga
5 El Taray/Sierra La Viga
6 Sierra San Antonio 6
7 Sierra San Antonio 1
8 San Pedro/Sierra La Viga
9 Valle Florido/Sierra La Viga
10 La Maroma/Sierra La Viga
11 Sierra San Antonio 3
12 Sierra La Viga 2
13 Cañón Chiquillo/Sierra La Nieve
14 La Concordia/Sierra La Viga
15 San Antonio/Sierra La Viga
16 Sierra La Viga 1
17 Cañada Santa Rosa/Sierra La Nieve
18 La Guardarraya/Sierra La Viga
19 Sierra La Nieve
20 Sierra San Antonio 4
21 Sierra San Antonio 5
22 San José/Sierra La Nieve
23 Sierra La Viga 3
24 Santa Amalia/Sierra La Nieve
25 Cañada La Pila/Sierra La Nieve
26 La Yerbabuena/Sierra El Álamo
27 El Baratillo/Sierra El Álamo
28 San Juan/Sierra Rancho Nuevo
29 Sierra Rancho Nuevo
30 Sierra La Viga 4
31 San Rafael/Sierra La Viga
32 Los Timones/Sierra Rancho Nuevo
ITESM, CCA
PMSE, LabSIG
TEC
DE M O N T ti K K H
Figura 4. Polígono de convergencia del 95% y sitios de
localización de la cotorra con el radio 148.020
Scale
O
Kilometers
Simbología
Polígono total
Polígono mínimo de
convergencia del 95%
Sitios de localización
de la cotorra
1 Dormidero/Sierra La Viga
2 Sierra San Antonio 1
3 El Taray/Sierra La Viga
4 El Chupadero/Sierra La Viga
5 San Pedro/Sierra La Viga
6 La Maroma/Sierra La Viga
7 La Copetona/Sierra La Nieve
8 San Antonio/Sierra La Viga
9 Sierra La Viga 1
10 Sierra La Viga/Los Lirios
11 Sierra San Antonio 3
12 Sierra San Antonio 2
13 Valle Florido/Sierra La Viga
14 San Lorenzo/Sierra La Viga
15 Sierra La Nieve
16 El Ranchito/Sierra San Antonio
17 Sierra San Antonio 4
18 Sierra San Antonio 5
19 Sierra San Antonio 6
20 Sierra San Antonio 7
21 Santa Amalia/Sierra La Nieve
22 La Pinalosa/Sierra La Viga
23 Cañada El Árbol/Sierra La Nieve
24 Los Timones/Sierra Rancho Nuevo
25 Sierra San Antonio 8
ITESM, CCA
PMSE, LabSIG
TEC
n K M o .v r K ti R R Y
Figura 5. Polígono de convergencia del 95% y sitios de
localización de la cotorra con el radio 148.813
Scale
Kilometers
Simbología
Polígono total
Polígono mínimo de
convergencia del 95%
Sitios de localización
de la cotorra
1 Dormidero/Sierra La Viga
2 Sierra San Antonio 1
3 El Chupadero/Sierra La Viga
4 San Pedro/Sierra La Viga
5 Sierra San Antonio 3
6 San Juan/Sierra Rancho Nuevo
7 Cañada El Árbol/Sierra La Nieve
8 El Taray/Sierra La Viga
9 Sierra San Antonio 4
10 Sierra San Antonio 6
11 Sierra San Antonio 7
12 Santa Amalia/Sierra La Nieve
13 Cañón Chiquillo/Sierra La Nieve