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Texto argumentativo sobre el aborto
Cuando me preguntaron si estaba favor o en contra del aborto, varios de mis estándares entraron en conflicto. En lo que a mí respecta, mis creencias religiosas y mi conciencia revolucionaria se cruzan, mis valores, la libertad y la vida son cuestionadas. Como cristiana católico, la vida es algo preciado, debido a que se cree que el único que debe otorgarla o quitarla es Dios y ella se simplifica en una existencia de servidumbre a los designios de Dios, transmitida por sacerdotes y otros líderes religiosos; mientras que el aspecto revolucionario es una sociedad que ve la realidad humana. La realidad de una sociedad, que solo busca libertad, a través de decidir por si misma, que pensar , que creer y adonde ir. Es ese lado que dice: La vida sin libertad es vida, como la muerte. Aquí, el equilibrio psicológico y el juicio de valor descenderán hacia la libertad, porque el aborto no es una cuestión de vida, sino de libertad de conciencia. Este es un gran paso hacia la madurez de la sociedad actual. Las mujeres deciden ser madres por sí mismas. Impulsadas por los prejuicios y acoso, ella misma elige cosas relacionadas con la vida, nosotros estamos pensando en la vida y creo que toda persona capaz puede tomar decisiones por sí misma y tener sus propios argumentos. Algunas personas tienen miedo de despertar su conciencia, porque significa que las personas son conscientes de su realidad y buscan la superación personal, buscan la igualdad entre las personas y las personas buscan la justicia social. El aborto no es cuestión de adolescentes que tienen sexo, mujeres violadas o esposas que no planifican o que son infieles; el aborto es cuestión de la falta de educación sexual, no saber cómo enfrentar el embarazo no planeado en forma individual y como pareja, a esto me refiero ir más allá de las tradicionales clases de anticonceptivos, cuales son las ITS; estudiar al sexo con naturalidad, como cualquier función del ser humano, explicar los efectos físicos y psicológicos de las relaciones sexuales, dar educación emocional a los jóvenes, formar en ellos los valores de libertad, igualdad y fraternidad que tanto necesita nuestra sociedad.
Sin embargo, la falta de educación no solo conduce al aborto, sino que en términos de cuestiones económicas y sociales, la mayoría de las empresas prefieren contratar hombres en lugar de mujeres porque es probable que queden embarazadas, como si fueran madres. Esta es una enfermedad por lo caro que es el bienestar durante el embarazo. Después de eso, estamos en una sociedad embarazada. En esta sociedad, el embarazo es sinónimo de problemas por la explotación de grupos laborales. Políticas e instituciones insuficientes para apoyar lo económico, apoyo moral y material de las madres jóvenes; el aborto no es solo el resultado del valor reducido declarado por los conservadores, sino también el resultado de las crisis económicas, sociales, educativas y culturales provocadas por estos grupos. Sus políticas han hecho a la gente pobre, un pobre hombre, sin confianza. El aborto es un asunto personal. Entre ellos, una persona debe tener la libertad de hacerlo o no. Si quiere hacerlo, debe contar con el apoyo necesario, ser atendido por expertos y realizarse de manera objetiva y humana; Se respetan las decisiones, porque no todo el mundo es católico, ni todo el mundo es liberal, es una cuestión de tolerancia y compasión por los demás. En conclusión, estoy a favor de la despenalización del aborto, que el aborto sea tratado formalmente en las clínicas de todo el país, puesto el aborto es una realidad y se practica de manera clandestina, es alejar de la oscuridad una práctica común en la sociedad, crear conciencia de la realidad, el aborto es una opción, debemos ver esta opción como un respiro para la mujer que lleva años de sumisión y la oportunidad de escoger que es lo mejor para ella, al tomar una decisión madura e informada, es mejor un gobierno con libertades, que un gobierno de opresión.