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CUADERNOS DE ECONOMÍA VOLUMEN XXXVI NÚMERO 72 NÚMERO ESPECIAL 2017 ISSN 0121-4772 2017 Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 2.5 Colombia. Usted es libre de: Compartir - copiar, distribuir, ejecutar y comunicar públicamente la obra Bajo las condiciones siguientes: • Atribución — Debe reconocer los créditos de la obra de la manera especificada por el autor o el licenciante. Si utiliza parte o la totalidad de esta investigación tiene que especificar la fuente. • No Comercial — No puede utilizar esta obra para fines comerciales. • Sin Obras Derivadas — No se puede alterar, transformar o generar una obra derivada a partir de esta obra. Los derechos derivados de usos legítimos u otras limitaciones reconocidas por la ley no se ven afectados por lo anterior. El contenido de los artículos y reseñas publicadas es responsabilidad de los autores y no refleja el punto de vista u opinión de la Escuela de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas o de la Universidad Nacional de Colombia. The content of all published articles and reviews does not reflect the official opinion of the Faculty of Economic Sciences at the School of Economics, or those of the Universidad Nacional de Colombia. Responsibility for the information and views expressed in the articles and reviews lies entirely with the author(s). iii CONTENIDO EDITORIAL Introducción al número especial “desigualdad” Francesco Bogliacino y Máximo Rossi xi ARTÍCULOS Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina, 1950-2014 Germán Alarco Tosoni 1 Nuevas estimaciones de distribución del ingreso en Colombia entre 1938 y 1988. Metodología de estimación y principales resultados Javier E. Rodríguez Weber 43 Labour income inequality and the informal sector in Colombian cities John Ariza y Gabriel Montes-Rojas 77 La carga tributaria sobre los ingresos laborales y de capital en Colombia: el caso del impuesto sobre la renta y el IVA Jorge Armando Rodríguez y Javier Ávila Mahecha 99 Desigualdad del ingreso en Colombia: un estudio por departamentos Roberto Mauricio Sánchez-Torres 139 Propuesta alternativa para las líneas de indigencia y de pobreza existentes en Colombia Julián Augusto Casas Herrera y Manuel Muñoz Conde 179 iv Desigualdad persistente. Un ejercicio con datos de Argentina (1993-2015) Jorge A. Paz 207 A tale of two decades: Income inequality and public policy in Argentina (1996-2014) Darío Judzik, Lucía Trujillo y Soledad Villafañe 233 The labor supply of paid-housework in Peru: 2007-2014 Cecilia Garavito 265 Income redistribution and inequality in the Mexican tax-benefit system Linda Llamas, Abdelkrim Araar y Luis Huesca 301 The rise of the middle class in Ecuador during the oil boom Iván Gachet, Diego F. Grijalva, Paúl Ponce y Damián Rodríguez 327 v CONTENTS EDITORIAL Introduction to the special issue “inequality” Francesco Bogliacino and Máximo Rossi xi PAPERS Distributive cycles and economic growth in Latin America, 1950-2014 Germán Alarco Tosoni 1 Income inequality in Colombia (1938-1988): A new data set Javier E. Rodríguez Weber 43 Labour income inequality and the informal sector in Colombian cities John Ariza and Gabriel Montes-Rojas 77 The tax burden on labor and capital income in Colombia: The case of the income tax and the VAT Jorge Armando Rodríguez and Javier Ávila Mahecha 99 Income inequality in Colombia: A regional approach Roberto Mauricio Sánchez-Torres 139 An alternative proposal for the existing indigence and poverty lines in Colombia Julián Augusto Casas Herrera and Manuel Muñoz Conde 179 Persistent inequality: An exercise using data from Argentina (1993-2015) Jorge A. Paz 207 vi A tale of two decades: Income inequality and public policy in Argentina (1996-2014) Darío Judzik, Lucía Trujillo and Soledad Villafañe 233 Oferta de trabajo del hogar remunerado en el Perú: 2007-2014 Cecilia Garavito 265 Income redistribution and inequality in the Mexican tax-benefit system Linda Llamas, Abdelkrim Araar and Luis Huesca 301 The rise of the middle class in Ecuador during the oil boom Iván Gachet, Diego F. Grijalva, Paúl Ponce and Damián Rodríguez 327 vii SOMMAIRE ÉDITORIAL Introduction à la question spéciale « inégalité » Francesco Bogliacino et Máximo Rossi xi ARTICLES Cycles de distribution et croissance économique en Amérique latine, 1950-2014 Germán Alarco Tosoni 1 Nouvelles estimations de distribution du revenu en Colombie entre 1938 et 1988. Méthodologie d’évaluation et principaux résultats Javier E. Rodríguez Weber 43 Inégalité des revenus du travail et le secteur informel dans les villes colombiennes John Ariza et Gabriel Montes-Rojas 77 La charge fiscale sur les revenus professionnels et du capital en Colombie : le cas de l’impôt sur le revenu et l’IVA Jorge Armando Rodríguez et Javier Ávila Mahecha 99 Inégalité du revenu en Colombie : une étude par départements Roberto Mauricio Sánchez-Torres 139 Proposition alternative pour les seuils d’indigence et de pauvreté existant en Colombie Julián Augusto Casas Herrera et Manuel Muñoz Conde 179 viii Inégalité persistante. Un exercice avec des données d’Argentine (1993-2015). Jorge A. Paz 207 L’histoire de deux décennies : inégalité du revenu et politiques publiques en Argentine (1996-2014) Darío Judzik, Lucía Trujillo et Soledad Villafañe 233 Offre de travail rémunéré d’employée de maison au Pérou : 2007-2014 Cecilia Garavito 265 Redistribution du revenu et inégalité dans le système fiscal mexicain Linda Llamas, Abdelkrim Araar et Luis Huesca 301 La croissance de la classe moyenne en Équateur pendant le boom pétrolier Iván Gachet, Diego F. Grijalva, Paúl Ponce et Damián Rodríguez 327 ix CONTEÚDO EDITORIAL Introdução ao tema “desigualdade” especial Francesco Bogliacino y Máximo Rossi xi ARTIGOS Ciclos distributivos e crescimento econômico na América Latina, 1950-2014 Germán Alarco Tosoni 1 Novas avaliações sobre a distribuição de receita na Colômbia no período 1938-1988. Metodologia de avaliação e principais resultados Javier E. Rodríguez Weber 43 Desigualdade na receita dos trabalhadores e no setor informal nas cidades colombianas John Ariza y Gabriel Montes-Rojas 77 A carga tributária sobre a receita de trabalho e de capital na Colômbia: o caso do imposto de renda e IVA Jorge Armando Rodríguez y Javier Ávila Mahecha 99 Desigualdade da receita na Colômbia: um estudo por departamentos Roberto Mauricio Sánchez-Torres 139 Proposta alternativa para as linhas de indigência e de pobreza existentes na Colômbia Julián Augusto Casas Herrera y Manuel Muñoz Conde 179 x Desigualdade persistente. Um exercício com dados da Argentina (1993-2015) Jorge A. Paz 207 A história de duas décadas: desigualdade na receita e políticas públicas na Argentina (1996-2014) Darío Judzik, Lucía Trujillo y Soledad Villafañe 233 Oferta de trabalho remunerado no lar peruano: 2007-2014 Cecilia Garavito 265 Redistribuição da receita e a redução da desigualdade no sistema fiscal mexicano Linda Llamas, Abdelkrim Araar y Luis Huesca 301 O crescimento da classe média no Equador durante o boom petroleiro Iván Gachet, Diego F. Grijalva, Paúl Ponce y Damián Rodríguez 327 xi INTRODUCCIÓN AL NÚMERO ESPECIAL “DESIGUALDAD” Francesco Bogliacino Máximo Rossi EL RETORNO DE UN TEMA La desigualdad ha vuelto a ser objeto central del análisis económico. La afir- mación de Lucas (2004), según la cual la atención a las cuestiones distributivas sería venenosa para la profesión, ya no refleja el sentimiento dominante. El éxito de Stiglitz (2012), Atkinson (2015), Milanovic (2016) y, por supuesto, Piketty (2014), supone dos consideraciones importantes. En primer lugar, el estudio de la desigualdad no solo se ha vuelto una preocupación académica, sino que refleja un sentimiento común: la mala distribución conlleva consecuencias negativas sobre la sociedad (Salverda et al., 2014; Wilkinson y Pikett, 2009). En segundolugar, un determinante clave del retorno de interés se debe al esfuerzo de recopilación de datos, sobre el cual Piketty es obviamente un modelo, pero no el único. A escala mundial, buena parte del interés se ha concentrado en los cambios distri- butivos generados por la globalización, es decir, por el conjunto de reformas insti- tucionales a escala nacional e internacional que caracterizó a las cuatro últimas décadas. Desde 1980, la desigualdad ha crecido en casi todos los países. F. Bogliacino Universidad Nacional de Colombia. M. Rossi Universidad de la República, Uruguay. NOTA EDITORIAL xii Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 Los hechos estilizados se podrían resumir de la siguiente manera (Bogliacino y Maestri, 2014; Bogliacino y Rojas-Lozano, 2017): • En los países anglosajones el crecimiento ha sido más o menos constante. • En los países mediterráneos el panorama es más complejo: la transición hacia la democracia de Grecia, España y Portugal conlleva una mejora del Gini de ingreso, pero la trayectoria siguiente, sobre todo como consecuen- cia de las crisis financieras (la última de la eurozona, pero también la de 1992 en Italia), ha vuelto a afectar de manera negativa la distribución. El impacto negativo de las crisis se ve también en Corea, cuyo Gini empieza a crecer después de 1997. • La transición desde los regímenes comunistas al mercado ha afectado nega- tivamente la distribución en todos los países del antiguo bloque soviético y en China. • Si bien los países nórdicos son todavía muy igualitarios, el incremento de la desigualdad ha sido posterior (se da alrededor de la década de los noventa), pero ha sido notable. En Alemania, los incrementos coinciden con la entrada en el euro y las reformas en el mercado del trabajo. • En los países latinoamericanos, la desigualdad crece en los años de las reformas y de las crisis, y baja en la década del auge de las materias primas. El actual estancamiento de las fuentes de dicha reducción sugieren que esta tendencia no va a perdurar. En general, un punto clave es cómo diferentes medidas pueden arrojar distintos resultados. Una vez representada la población como un desfile de ingresos (Cowell, 2000), es diferente si se centra la atención en la cola derecha (el top 1%), la cola izquierda (los pobres), o la clase media (grosso modo lo que mide el Gini). Otro elemento importante del análisis más reciente es que las reflexiones sobre ingreso y riqueza (flujo y acervo), en conjunto, son cada vez más comunes. En palabras sencillas, la distribución personal depende de la cuota del ingreso que va al capital (siendo este más concentrado), lo cual implica que es necesario saber qué determina la tasa de retorno del capital, y cuál es la razón capital-producto, ya que la cuota del capital es precisamente el producto entre estas dos (Boushey, DeLong y Steinbaum, 2017; Piketty, 2014; Stiglitz, 2015). CUESTIONES ABIERTAS ¿Existe una causa de la desigualdad? En la literatura reciente esta pregunta puede parecer un poco absurda, sin embargo, no hay que olvidar cómo la famosa curva de Kuznetz postulaba precisamente una tendencia determinística. Hoy, el consenso teórico que se establece de manera progresiva, determina que la desigualdad depende de un conjunto de políticas. Esta podríamos denominarla Nota editorial Francesco Bogliacino y Máximo Rossi xiii la tesis de Atkinson (2015), la cual, finalmente, aceptan también autores tales como Piketty (2014) —quien, sin embargo, coquetea con las leyes del capitalismo—, y Stiglitz (2015). No obstante, es curioso que el trabajo teórico se enfoque aún en modelos estructurales en los que la política no tiene papel alguno (Naidu, 2017). ¿Es posible que la política sea endógena? Existen, por lo menos, dos puntos a favor de esta tesis. Por una parte, la coordinación a nivel de instituciones y de policy en la era de la globalización —cuyos cambios, como muestra Atkinson (2015), son determinantes efectivos del crecimiento de la desigualdad—, sugiere que hay ciertos estímulos endógenos que conllevan a la adopción de ciertas medidas. Por otra, a menos de sugerir que las crisis financieras sean eventos exógenos (algo que por fin la macroeconomía ortodoxa empieza a rechazar), la evidencia sobre el impacto regresivo de la austeridad, así como de la devaluación interna y su carácter de respuestas “obligadas” de los países en crisis en presencia del cuadro macroeconómico “globalizado” (libre circulación de capitales, banco central inde- pendiente, etc.), sugiere que las políticas no sean variables independientes. Así, entonces, queda una pregunta clave: ¿Cuál es el modelo relevante capaz de incorporar la política a su interior? Otra pregunta importante tiene que ver con la región: ¿Qué pasará con el excepcio- nalismo suramericano que se observa en la primera década de este siglo? Muchos de los análisis recientes sugieren que la reducción se logró con políticas distribu- tivas, sin afectar necesariamente las fuerzas subyacentes, si bien no hay consenso sobre las “causas” de este cambio (Bogliacino y Rojas-Lozano, 2017; Cornia, 2010; Gasparini y Lustig, 2011). ¿Es posible entonces mantener la tendencia a una reducción de la desigualdad? ¿Qué cambios es necesario realizar a fin de volver permanente esta tendencia? LA CONTRIBUCIÓN DE ESTE NÚMERO ESPECIAL El primer artículo de este número especial es “Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina, 1950-2014”, de G. Alarco Tosoni. La investigación expone la evolución de la distribución funcional del ingreso en la segunda mitad del siglo pasado y el comienzo del actual, y muestra cómo la cuota del trabajo se mueve de manera similar a lo largo de 18 economías del continente, si bien con peculiaridades nacionales. A esta primera contribución siguen cinco artículos sobre Colombia. J. Rodríguez Weber presenta los resultados de una estimación anual de la desigualdad de ingreso entre 1938 y 1988. Por su parte, J. Ariza y G. Montes-Rojas los resultados del impacto de la informa- lidad sobre la desigualdad del ingreso. La estrategia de identificación se basa en xiv Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 variables instrumentales y, de acuerdo con los resultados de sus estimaciones, un crecimiento del 1% del sector informal determina un aumento del Gini de 0,07. J. A. Rodríguez y J. Ávila Mahecha cruzan la información de contabilidad nacional con la de la Dirección de Impuestos y Aduanas, con el propósito de determinar cuánto gravan el IVA y la renta sobre las cuotas de trabajo y capital, al neto de los costos de reemplazo de ambos factores productivos. La tarifa efectiva resultó ser más alta para el trabajo, si bien la brecha ha tendido a cerrarse. R. M. Sánchez-Torres investiga los datos de las encuestas de hogares con el fin de identificar un elemento de la desigualdad colombiana que, a veces, se olvida al focalizarse sobre los datos de las grandes ciudades: la heterogeneidad espacial y cómo esta contribuye de manera significativa a la desigualdad general. J. A. Casas Herrera y M. Muñoz Conde discuten la nueva metodología para la medición de la pobreza en Colombia, la cual se ha criticado por ser, supuesta- mente, una de las razones para la baja del número de pobres en este nuevo siglo. Efectivamente, los resultados que ellos arrojan sugieren que Colombia estaría subestimando la tasa de pobreza, y ocultar un número que podría llegar hasta los siete millones de pobres. Los cinco artículos que siguen miran a otros países de la región. J. Paz muestra de qué manera la reducción de la desigualdad agregada en el nuevo siglo coexiste en Argentina con una persistente desigualdad entre los sueldos de la población masculina. En el artículo se investigan las causas por medio de un ejercicio de descomposición. D. Judzik, L. Trujillo y S. Villafañe descomponen el Gini por fuente de ingreso en Argentina, y muestran que el ingresopor trabajo y sus determinantes (los factores institucionales y el contexto macroeconómico), resultan ser los princi- pales factores explicativos de la dinámica de la desigualdad. C. Garavito analiza el trabajo del hogar remunerado bajo las modalidades “cama adentro” y “cama afuera” en Perú, para el periodo 2007-2014. Entre los resultados, se subraya la inelasticidad de la oferta de trabajo. L. Llamas, A. Araar y L. Huesca analizan y cuantifican la capacidad redistributiva del sistema fiscal mexicano, con base en datos del 2014. Los autores exponen el papel, tanto de la tributación, como de los subsidios y otros rubros del gasto social. I. Gachet, D. Grijalva, P. Ponce y D. Rodríguez discuten el papel del crecimiento económico y de la reducción de la desigualdad como factores claves detrás del boom de la clase media en Ecuador, en el periodo de auge del petróleo. Así, al identificar el estancamiento de estos motores también señalan importantes retos para la política pública. Nota editorial Francesco Bogliacino y Máximo Rossi xv REFERENCIAS 1. Atkinson, A. B. (2015). Inequality. What can be done? Cambridge: Har- vard University Press. 2. Bogliacino, F., & Maestri, V. (2014). Increasing economic inequalities? En W. Salverda, B. Nolan, D. Checchi, I. Marx, A. McKnight,…, H. van de Werfhorst (eds.), Changing inequalities in rich countries: Analytical and comparative perspectives (pp. 15-48). Oxford: Oxford University Press. 3. Bogliacino, F., & Rojas-Lozano, D. (2017). The evolution of inequality in Latin America in the 21st century: What are the patterns, drivers and cau- ses? (Discussion Paper). GLO. 4. Boushey, H., DeLong, J. B., & Steinbaum, M. (2017). After Piketty. Cam- bridge, MA: Harvard University Press. 5. Cornia, G. A. (2010). Income distribution under Latin America’s new left regimes. Journal of Human Development and Capabilities, 11(1), 85-114. 6. Cowell, F. (2000). The measurement of inequality. En A. B. Atkinson & F. Bourguignon (eds.), The Handbook of Income Distribution (pp. 87-166). Ámsterdam: North Holland, Elsevier. 7. Gasparini, L., & Lustig, N. (2011). The rise and fall of income inequa- lity in Latin America. En J. A. Ocampo & J. Ros (eds.), The Oxford Han- dbook of Latin American Economics (pp. 691-714). Nueva York: Oxford University Press. 8. Lucas, R. E. (2004). The industrial revolution: Past and future. The Region (2003 Annual Report of the Federal Reserve Bank of Minneapolis) (pp. 5-20). Minneapolis: https://minneapolisfed.org/publications/the-region/ the-industrial-revolution-past-and-future. 9. Milanovic, B. (2016). Global inequality. Cambridge, MA: Harvard Uni- versity Press. 10. Naidu, S. (2017). A political economy take on W/Y. En H. Boushey, J. B. DeLong & M. Steinbaum, (eds.), After Piketty. Cambridge, MA: Harvard University Press. 11. Salverda, W., Nolan, B., Checchi, D., Marx, I., McKnight, A., …, van de Werfhorst, H. (eds.), (2014). Changing inequalities in rich countries: Analytical and comparative perspectives. Croydon, Londres: Oxford Uni- versity Press. 12. Stiglitz, J. E. (2012). The price of inequality. Nueva York, Londres: WW Norton & C. 13. Stiglitz, J. E. (2015). New theoretical perspectives on the distribution of income and wealth among individuals: Part II: Equilibrium wealth distri- butions (Working Paper 21190). NBER. 14. Wilkinson, R. G., & Pickett, K. (2009). The spirit level: Why more equal societies almost always do better. Londres: Allen Lane. 1 ARTÍCULO CICLOS DISTRIBUTIVOS Y CRECIMIENTO ECONÓMICO EN AMÉRICA LATINA, 1950-2014 Germán Alarco Tosoni Alarco Tosoni, G. (2017). Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina. Cuadernos de Economía, 36(72), 1-42. Este artículo presenta y analiza la evolución de la participación de los salarios y del excedente bruto de explotación respecto del PIB en 18 economías latinoamericanas y el conjunto regional. En ambos casos se trata de curvas sinusoidales que compar- ten una historia regional común, pero en las que las particularidades de cada eco- nomía son importantes. Asimismo, se determina cómo la participación regional de los salarios contribuye de manera directa y positiva al crecimiento económico en el periodo 1950-1979, mientras que su contribución es negativa entre 1980-2014. El mayor nivel que se presenta se da en la década de los sesenta. La trayectoria con- junta de la participación salarial y el crecimiento económico es superior en el primer periodo respecto del segundo. Palabras clave: participación salarial, distribución factorial del ingreso, ciclos económicos, crecimiento económico, América Latina. JEL: C33, D33, E25, E32, O54. G. Alarco Tosoni Profesor investigador de la Escuela de Postgrado de la Universidad del Pacífico, Lima, Perú. g.alarcotosoni@up.edu.pe. Se agradece el apoyo de César Castillo García como asistente de inves- tigación, y a Patricia del Hierro Carrillo por sus aportaciones. Asimismo, se reconocen los comenta- rios de los evaluadores anónimos, aunque el resultado final es de nuestra exclusiva responsabilidad. Sugerencia de citación: Alarco Tosoni, G. (2017). Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina. Cuadernos de Economía, 36(72), 1-42. doi: 10.15446/cuad.econ.v36n72.65819. Este artículo fue recibido el 9 de septiembre de 2016, ajustado el 8 de febrero de 2017, y su publi- cación aprobada el 9 de febrero de 2017. 2 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 Alarco Tosoni, G. (2017). Distributive cycles and economic growth in Latin America. Cuadernos de Economía, 36(72), 1-42. This article presents and analyzes the evolution of the wage share and gross oper- ating surplus to GDP in 18 Latin American economies as well as in the region as a whole. Some sinusoidal curves have a common regional history for all cases, but the particularities of each economy still remain important. This paper determines that the regional participation of wage share directly and positively contributed to economic growth in the period 1950-1979; however, between 1980-2014, its con- tribution is negative, the highest level of contribution being in the sixties. The joint trajectory of the wage share and economic growth is in a better situation in the first period than the second. Keywords: Wage share, factorial distribution, economic cycles, economic growth, Latin America. JEL: C33, D33, E25, E32, O54. Alarco Tosoni, G. (2017). Cycles de distribution et croissance économique en Amérique latine. Cuadernos de Economía, 36(72), 1-42. Cet article présente et analyse l’évolution de la participation des salaires et de l’ex- cédent brut d’exploitation par rapport au PIB dans 18 économies latinoaméricaines et le contexte régional. Dans les deux cas, il s’agit de courbes sinusoïdales qui par- tagent une histoire régionale commune, mais dans lesquelles les particularités de chacune des économies sont importantes. De même, on détermine la manière dont la participation régionale des salaires contribue directement et positivement à la croissance économique pour la période 1950-1979, alors que sa contribution est négative entre 1980 et 2014. Le plus fort niveau rencontré correspond aux années soixante. La trajectoire conjointe de la participation salariale et de la croissance économique est supérieure dans la première période par rapport à la seconde. Mots-clés : participation salariale, distribution factorielle du revenu, cycles éco- nomiques, croissance économique, Amérique latine. JEL: C33, D33, E25, E32, O54. Alarco Tosoni, G. (2017). Ciclos distributivos e crescimento econômico na América Latina. Cuadernos de Economía, 36(72), 1-42. Esse artigo apresenta e analisa a evolução da participação dos salários e do supe- rávit bruto de exploração quanto ao PIB em 18 economias latino-americanas e o conjunto regional. Em ambos os casos se trata de curvas sinusoides que com- partem una história regional comum, onde as particularidades de cada economia são importantes.Igualmente, determina-se como a participação regional dos salá- rios contribui de maneira direta e positiva ao crescimento econômico no período Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina Germán Alarco Tosoni 3 1950-1979. Mesmo assim, sua contribuição é negativa entre 1980-2014. O maior nível surgiu na década de sessenta. A trajetória conjunta da participação salarial e do crescimento econômico é superior no primeiro período em relação com o segundo. Palavras chave: participação salarial, distribuição fatorial do ingresso, ciclos eco- nômicos, crescimento econômico, América Latina. JEL: C33, D33, E25, E32, O54. 4 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 INTRODUCCIÓN América Latina ha transitado de un modelo de crecimiento económico más orien- tado hacia el mercado interno y de industrialización dirigida desde el Estado, hacia otro vinculado hacia al exterior liderado por el mercado. Los procesos de inicio, orientación específica, magnitud, consolidación y periodos críticos fueron particu- lares para cada economía, aunque hay numerosos elementos e hitos comunes. Ahora bien, el peso de los diferentes factores internos y externos que desenca- denaron estos procesos no fue homogéneo; hubo también algunas economías que estuvieron más alejadas de esta caracterización. Por otra parte, la nueva modalidad de crecimiento económico ha transcurrido por diferentes etapas, con mayores o menores avances en las diferentes variables económicas e indicadores sociales. En este proceso de orientación hacia afuera se encuentran economías que han intensi- ficado la exportación de productos agropecuarios y pesqueros, así como de manu- facturas; otras lo han hecho hacia los productos extractivos del sector minero y los hidrocarburos; y algunas en condición mixta, con mayor o menor contenido tec- nológico y valor agregado. Desde los economistas clásicos, en particular A. Smith y D. Ricardo, se hizo evidente que es imposible estudiar el crecimiento económico sin analizar lo que ocurre con el comportamiento de los principales agentes económicos de la sociedad (asalariados, propietarios de los medios de producción y rentistas), y con la consiguiente distri- bución factorial del ingreso. Con los economistas neoclásicos estas vinculaciones desaparecieron. Posteriormente, esta tesis fue rehabilitada explícitamente y profun- dizada por M. Kalecki y los economistas neoricardianos y postkeynesianos. Kalecki (1956) va a explicitar la vinculación de la distribución del ingreso —en particu- lar de la masa salarial con respecto al ingreso—, a partir del proceso de fijación de los precios asociados luego a la determinación del nivel de demanda y el pro- ducto. Para este autor una mayor participación de los sueldos y salarios en el producto generaría un mayor crecimiento económico por medio de un mayor mul- tiplicador del gasto1. Más recientemente, estudios desde el mainstream plantean —con diferentes meto- dologías e información— que una mayor desigualdad se asocia con un crecimiento más bajo y menos sostenible en el largo plazo (Ostry, Berg y Tsangarides, 2014). En la misma dirección, Jaumotte y Osorio (2015), así como Bakker y Felman (2015), desarrollan los argumentos que permiten explicar los mayores niveles de desigualdad a nivel global a partir de los menores niveles de sindicalización, y la caída del salario mínimo con respecto a la mediana entre 1980 y el 2010, lo cual ha traído aparejada una mayor participación de los grupos de mayores ingresos en las economías avanzadas. A estos factores se suma la desregulación financiera y la 1 A partir de Bhaduri y Marglin (1990) se desarrolla toda la literatura postkeynesiana sobre regíme- nes de crecimiento, en los cuales el resultado final de un aumento de la participación salarial sobre la demanda y el producto dependerá de los efectos de la modificación de esta sobre el consumo privado, la inversión y las exportaciones netas (Alarco, 2016). Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina Germán Alarco Tosoni 5 reducción de las tasas marginales del impuesto a la renta. El efecto de esta última variable sobre la mayor desigualdad lo abordó explícitamente el Fondo Monetario Internacional (2014). El objetivo de este trabajo es presentar la evolución de los principales componen- tes de la distribución factorial del ingreso; esto es, de los sueldos y salarios, y del excedente bruto de explotación para las principales economías latinoamericanas y el conjunto de la región entre 1950 y el 2014, asociados a la evolución del PIB. Asi- mismo, se trata de analizar cómo la participación salarial ha cambiado la naturaleza y la magnitud de su aportación de un modelo o estilo de crecimiento económico a otro. La hipótesis es que en la primera parte del periodo, entre 1950 y 1979, la vinculación de esta variable fue directa y positiva con el crecimiento económico. En cambio, durante el periodo 1980-2014, esta relación perdió importancia en el tiempo y hasta puede tornarse en una relación inversa2. Lo anterior, a pesar de que Argentina, Brasil, Bolivia, Ecuador, Uruguay y Venezuela cambiaron la dirección de sus políticas a partir del segundo quinquenio del siglo xxi. Asimismo, se evalúa la contribución de esta variable a fin de explicar el crecimiento económico regional en los periodos bajo análisis. Este artículo tiene seis secciones incluidos la introducción, las conclusiones y los anexos. En la primera sección se presentan los resultados de algunos estudios pre- vios sobre la distribución funcional del ingreso a nivel regional. La segunda parte describe la metodología que permite integrar la información por países y la región para todo el periodo de análisis. En la tercera sección se exponen los resultados relativos a la evolución de cada uno de los componentes de la distribución factorial del ingreso. La cuarta parte evalúa el comportamiento de los dos componentes de la distribución funcional con los ciclos de crecimiento económico. Por último, en la quinta sección se exploran diversas hipótesis con el fin de explicar el creci- miento a partir de la aportación de la masa salarial en el PIB, y de otras variables macroeconómicas. En el trabajo no se realiza una revisión de la literatura sobre los modelos de desa- rrollo históricos de América Latina que pueden ser analizados en Thorp (1998), Bulmer-Thomas (2010), o Bértola y Ocampo (2013). Tampoco se consideran las particularidades de las políticas económicas implantadas, ni la dinámica socio- política y de los mercados laborales de cada una de las economías consideradas, lo cual explicaría sus tendencias y ciclos. Es relevante señalar que si bien este docu- mento es continuación de otro previo (Alarco, 2014), se amplía, tanto el número de economías analizadas como el periodo de análisis (de 2010 a 2014), y se apli- can otras modalidades de análisis. No se profundiza en las teorías económicas que revisan la relación entre la distribución del ingreso y el crecimiento económico. Asimismo, es importante aclarar que no se analiza la problemática de los ingresos 2 Esta fecha de corte es estándar de la historia económica latinoamericana, aunque debe reconocer- se que son diferentes en cada economía como resultado de las políticas económicas implantadas y de su correlación social-política. 6 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 mixtos o de los ingresos de los trabajadores independientes urbanos y rurales, los cuales se mantienen dentro del excedente de explotación y cuya estimación reba- saría los alcances de este artículo3. No se aborda tampoco la problemática de la distribución personal del ingreso, entre otros elementos. ALGUNOS ESTUDIOS PREVIOS Lindenboim (2008) integra series parciales sobre la participación de los salarios en el producto para un grupo de países desarrollados desde la década de los cin- cuenta, y para otros de la región desde 1980. La conclusión es clara en las prime- ras economías,en las cuales se observa el ascenso de esta razón hasta mediados de la década de los setenta, para mostrar su estancamiento y luego caída asociada a la crisis del fordismo4, a excepción de Dinamarca. En el caso de las diversas economías de la región latinoamericana, se observa una tendencia descendente con oscilaciones particulares. Solo Chile y Colombia muestran crecimientos hasta momentos particulares de tiempo. Neira (2010), por su parte, reconstruye la información de la participación de la masa salarial en el PIB a costo de factores para 14 países, y la agregada ponderada de América Latina con el producto en paridad del poder adquisitivo en dólares cons- tantes de 1970 entre 1950 y el 2000, así como las corregidas a partir de información censal incluyendo a los trabajadores autónomos o independientes5. Se concluye en el caso del conjunto —con la información sin procesamiento alguno—, una fase ascendente hasta mediados de la década de los sesenta, para alcanzar su cima hacia 1983, y un segundo punto máximo a mediados de los noventa con un des- censo posterior. Sin embargo, a juicio del autor, hay fuertes variaciones entre los diferentes países. Abeles, Amarante y Vega (2014) presentan la información y analizan el periodo 1990-2010, considerando, tanto la participación de la masa salarial en el PIB, como diversas estimaciones de los ingresos laborales de los trabajadores indepen- dientes para quince economías y el total regional. Concluyen estos autores que en ambas mediciones la tendencia es descendente, aunque con algunas excepciones 3 Al respecto, está información existía en algunas economías hasta la década de los setenta, pero luego fue abandonada, para luego volver a retomarse pocos años después. 4 Régimen de acumulación y crecimiento económico implantado desde la finalización de la se- gunda guerra mundial hasta la década de los setenta. Se basa en la expansión de los mercados y buscaba un equilibrio distributivo entre los salarios y las ganancias. Los sueldos y salarios se in- crementaban a la par de la productividad, procurando el pleno empleo, promoviendo la inversión privada y generando un círculo virtuoso de crecimiento económico. Otros autores lo denominan como “la era dorada del capitalismo del pleno empleo”. En Palley (2016) se discute este modelo con respecto al neoliberal, instaurado a partir de la década de los ochenta del siglo xx. 5 Los mismos que están incluidos en el excedente de explotación, y para lo cual supone la misma retribución media que a los trabajadores asalariados, excluyendo a los trabajadores familiares no remunerados y otros no remunerados. Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina Germán Alarco Tosoni 7 —tales como Argentina, Brasil, Chile y Costa Rica—, para la participación de la masa salarial. Hay otros trabajos históricos que abordan periodos más largos, como, por ejemplo, el de Frankema (2009) que evalúa las economías de Argentina, Brasil y México entre 1870 y el 2000. Todas las series de la participación de los salarios en el producto son cíclicas con tendencias decrecientes a partir de la década de los sesenta y setenta del siglo xx. Por otra parte, Bértola, Castelnovo, Rodríguez y Willebald (2008), al analizar los países del Cono Sur determinan una tendencia ascendente en la desigualdad entre 1870 y 1920. También hay esfuerzos para periodos más cortos de tiempo por parte de la OIT (2012), y CEPAL y OIT (2012), los cuales reflejan, tanto las disparidades de las economías latinoamericanas, como la eleva- ción de la cuota salarial en la Argentina y el Brasil de los últimos años. Por otra parte, Fitzgerald (2009) desarrolla una metodología simplificada que le permite analizar el periodo 1900-2000, a partir de cuatro categorías de ingresos para cinco economías de la región. Astorga (2015) aplica una metodología cercana a la de Fitzgerald con el fin de construir las tendencias a largo plazo entre 1900 y el 2010 de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Venezuela, lo cual repre- senta el 90% del ingreso regional. Se concluyó que el Gini regional tiene la forma de una “S acostada”, con un punto de inflexión en la década de los cuarenta, menores valores en la de los cincuentas, y valores más altos entre las de los ochentas y noventas, aunque la dinámica de los países del Cono Sur es diferente. Por último, existen diversas publicaciones que combinan estudios teóricos y series estadísticas de corto y mediano alcance para diversas economías latinoamericanas, como, por ejemplo, la de Accinelli y Salas (2010). ESTADÍSTICA BÁSICA Las dos variables básicas del estudio son la participación de los sueldos y salarios, así como del excedente de explotación en el PIB de las diferentes economías de América Latina. Aquí se consideran 16 economías latinoamericanas hasta el 2014: Argentina (1950-2014); Bolivia (1960-2014); Brasil (1950-2014); Chile (1950- 2014); Colombia (1950-2014); Costa Rica (1953-2014); Ecuador (1953-2014); El Salvador (1960-2014); Honduras (1950-2014); México (1950-2014); Nicaragua (1960-2014); Panamá (1950-2014); Paraguay (1962-2014); Perú (1950-2014); Uruguay (1955-2014); y la República Bolivariana de Venezuela o Venezuela (1957-2014). En el Anexo 1 se detalla la metodología que se utilizó para deter- minar estas dos participaciones, mientras que en los Anexos 2 y 3 se exponen sus series estadísticas. La información sobre el PIB, sus cuentas por tipo de gasto (consumo privado, con- sumo público, formación bruta de capital, exportaciones e importaciones de bie- nes y servicios), así como otras variables, se obtuvieron de la base de datos de cuentas nacionales del Banco de Datos Mundiales (World Data Bank), del Banco Mundial y de las Estadísticas Financieras Internacionales del FMI. En cuanto a las 8 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 cuentas nacionales, el periodo corresponde a 1960-2014, y los datos están expre- sados en millones de dólares americanos del 2005. Para completar las series del PIB y las cuentas de gasto correspondientes al periodo 1950-1960, se recurrió a los datos de cuentas nacionales de la CEPAL. RESULTADOS POR ECONOMÍA Y REGIÓN En las Tablas 1 y 2 se muestran las características principales de la participación salarial y del excedente bruto de explotación respecto del PIB para las diferentes economías analizadas de la región en su conjunto, aplicando un ponderador móvil con base en el PIB real de todas las economías consideradas. En ambos cuadros se presenta la información relativa a la participación promedio para todo el periodo bajo análisis. Luego, los valores promedio que corresponden al periodo 1950-1979, y al de 1980-2014, los cuales pretenden capturar lo ocurrido tanto en el periodo fordista como en el neoliberal. Sin embargo, hemos anotado que Argentina, Bra- sil, Bolivia, Ecuador, Uruguay y Venezuela cambiaron la dirección de sus políticas económicas a partir del segundo quinquenio del siglo xxi. Inmediatamente después, se presenta la información del coeficiente de variabilidad para medir la dispersión de los datos con respecto a la media entre los periodos 1950-2014, 1950-1979 y 1980-2014. Se muestra también el valor máximo y el mínimo de la participación con sus respectivos años entre paréntesis. Las dos últimas columnas corresponden a un indicador de tendencia que evalúa lo ocurrido entre el promedio de las 10 últi- mas observaciones, y el promedio de las 10 primeras, a fin de determinar si existe una tendencia creciente en la serie (cuando el resultado es mayor que 1), decre- ciente (cuando es menor que 1), y constante (alrededor de 1)6. La última incorpora el número de ciclos completos observados entre 1950 y el 2014. En la Tabla 1 se presenta la información relativa a la participación salarial en el producto. En primera instancia, se destaca que los países de mayor participa- ción salarial para todo el periodo son Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, Brasil y Uruguay.En el otro extremo, con las participaciones más reducidas se encuentran Ecuador y El Salvador. A nivel intermedio se ubican Argentina, Boli- via, Chile, Colombia, México, Paraguay, Perú y Venezuela. Un segundo elemento a destacar es el valor promedio para la región, el cual es superior en el periodo 1950-1979 con respecto a lo ocurrido en el periodo 1980-2014, como probable resultado del cambio en el modelo o régimen de crecimiento económico. Estos valores promedio son en todos los casos inferiores a los que se observan en las economías de más altos niveles de ingreso (Lindenboim, 2008). Si se analiza lo ocurrido por países y los dos periodos bajo análisis, es evidente que las mayores caídas en los promedio se producen en Panamá, Nicaragua y Venezuela, 6 La fórmula corresponde a ∅ Σ Σ −= n n i i x x 9 1 10 Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina Germán Alarco Tosoni 9 seguidos del Perú, Uruguay, Bolivia, Ecuador y México7. A nivel intermedio redu- cen la participación de los salarios en el PIB Argentina, Brasil, Chile y Paraguay. En cambio, Honduras y El Salvador elevan significativamente esta participación, mientras que es menor en los casos de Costa Rica y Colombia, en los que este aumento es solo marginal. De la revisión de los coeficientes de variabilidad se obtienen diversas anotaciones relevantes. La variabilidad de toda la región es mayor en el periodo 1980-2014 con respecto al periodo 1950-1979, en el cual esta es menor. En todo el periodo 1950-2014 las economías más inestables de la región fueron Ecuador, Nicaragua, Panamá y El Salvador. Las más estables, Costa Rica y Brasil. A nivel intermedio se ubican las demás economías de la región. El valor máximo observado para América Latina se da en 1967, en la denomi- nada “edad de oro del capitalismo”, mientras que el valor mínimo en el 2005. Hay muchas diferencias por economías. En los casos de Brasil y Perú los máximos se observan en 1957 y 1958, respectivamente. En la década de los sesenta se ubican Panamá, Uruguay y Venezuela. En la década de los setenta se encuentran Argentina (durante el gobierno de E. Martínez de Perón), Chile (durante el gobierno de S. Allende), y México (durante el gobierno de L. Echeverría). Bolivia muestra su cifra récord en 1984; El Salvador en 1981; Honduras en 1986; y Nicaragua en 1985. Por otra parte, Colombia muestra su mayor valor en 1993, Ecuador en el 2004, Paraguay en el 2000 y Costa Rica en el 2013. En el caso de los valores mínimos, en la mayoría de los casos estos corresponden a momentos específicos del periodo 1980-2014, a excep- ción de Honduras y El Salvador en 1953 y 1960, respectivamente, dado su bajo nivel de asalarización y de predominancia de la economía rural con respecto a la urbana. El indicador de tendencia es útil para determinar si durante el periodo analizado la participación de los salarios en el producto se eleva, permanece constante o se reduce. Al respecto, la tendencia de toda la región latinoamericana es descendente. Se observa una tendencia al alza en Costa Rica, Ecuador y Honduras. La tendencia es descendente en Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, El Salvador, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela. En el caso de Chile es solo ligeramente ascendente. Por último, en la última columna se anota el número de ciclos completos que se tendrían luego de filtrar la información original por Hodrick-Prescott. Este indicador es más discutible, ya que se construye por obser- vación directa. 7 En el caso del Perú esta caída sería más significativa si se tiene en cuenta la base 1993, en lugar del 2007, en la que los trabajadores asalariados eran menos importantes en el PIB. Con esta base anterior el promedio se reduciría de 37,55% para 1950-1979, a 25,6% entre 1980-2014. En el caso de México, aunque en mucho menor medida, también se produciría una mayor caída si se utiliza la serie original de Hernández Laos para el periodo 1950-1969 (2000). En la tabla se considera solo la tendencia de esta al eslabonarla con la información posterior de la CEPAL. 10 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 Ta bl a 1. Pr in ci pa le s ca ra ct er ís tic as d e la p ar tic ip ac ió n sa la ri al e n el P IB d e A m ér ic a L at in a Pa ís C ob er tu ra Pr om ed io 19 50 -2 01 4 Pr om ed io 19 50 -1 97 9 Pr om ed io 19 80 -2 01 4 C oe fic ie nt e de va ri ab ili da d (1 95 0- 20 14 ) C oe fic ie nt e de va ri ab ili da d (1 95 0- 19 79 ) C oe fic ie nt e de va ri ab ili da d (1 98 0- 20 14 ) Va lo r m áx im o Va lo r m ín im o In di ca do r de te nd en ci a C ic lo s co m pl et os A rg en tin a 19 50 -2 01 4 35 ,3 90 8 36 ,8 63 7 34 ,1 28 3 0, 14 03 0, 13 01 0, 14 12 43 ,4 03 2 19 74 24 ,9 63 3 19 89 0, 89 76 3 B ol iv ia 19 60 -2 01 4 33 ,5 11 0 36 ,3 73 2 31 ,8 75 5 0, 12 69 0, 04 45 0, 13 91 43 ,1 15 3 19 84 24 ,1 26 2 19 86 0, 73 27 1 B ra si l 19 50 -2 01 4 43 ,1 70 5 43 ,8 81 2 42 ,5 61 3 0, 05 64 0, 06 32 0, 04 56 48 ,2 74 2 19 57 39 ,3 11 8 20 04 0, 95 79 2 C hi le 19 50 -2 01 4 38 ,1 98 4 39 ,3 01 1 37 ,2 53 2 0, 09 61 0, 10 74 0, 07 68 52 ,1 94 8 19 72 30 ,8 76 0 19 88 1, 00 05 2 C ol om bi a 19 50 -2 01 4 36 ,5 47 9 36 ,5 12 2 36 ,5 78 4 0, 09 37 0, 06 04 0, 11 58 44 ,0 71 9 19 93 31 ,3 60 5 20 11 0, 93 01 1 C os ta R ic a 19 53 -2 01 4 47 ,2 25 0 46 ,8 91 5 47 ,4 82 4 0, 04 58 0, 02 33 0, 05 70 51 ,4 84 5 20 13 39 ,0 98 0 19 82 1, 05 30 2 E cu ad or 19 53 -2 01 4 26 ,6 01 6 29 ,8 03 7 24 ,0 39 9 0, 27 46 0, 05 19 0, 37 25 37 ,2 75 9 20 04 11 ,5 06 4 19 99 1, 12 31 1 E l S al va do r 19 60 -2 01 4 30 ,6 61 2 26 ,5 65 8 33 ,0 01 4 0, 21 60 0, 29 36 0, 13 60 41 ,9 14 6 19 81 15 ,8 04 3 19 60 0, 42 89 1 H on du ra s 19 50 -2 01 4 43 ,4 95 0 40 ,6 82 2 45 ,9 05 9 0, 08 13 0, 05 28 0, 05 62 50 ,3 61 0 19 86 35 ,0 36 5 19 53 1, 16 83 2 M éx ic o 19 50 -2 01 4 32 ,2 38 6 34 ,6 10 9 30 ,2 05 2 0, 11 64 0, 09 55 0, 09 34 40 ,2 63 5 19 76 26 ,8 36 5 19 87 0, 90 75 2 N ic ar ag ua 19 60 -2 01 4 43 ,7 03 5 53 ,6 80 6 38 ,0 02 2 0, 23 16 0, 05 20 0, 21 43 57 ,2 43 5 19 85 19 ,2 39 6 19 88 0, 68 21 2 Pa na m á 19 50 -2 01 4 49 ,5 12 1 59 ,7 85 4 40 ,7 06 4 0, 25 33 0, 10 45 0, 23 28 67 ,4 10 6 19 69 26 ,3 36 2 20 13 0, 46 94 2 Pa ra gu ay 19 62 -2 01 4 33 ,2 80 6 35 ,3 12 2 32 ,2 35 7 0, 09 39 0, 03 41 0, 10 24 38 ,7 28 2 20 00 24 ,3 37 0 19 90 0, 87 89 2 Pe rú 19 50 -2 01 4 34 ,1 28 7 37 ,6 92 2 31 ,0 74 2 0, 13 69 0, 07 50 0, 11 81 41 ,6 85 3 19 58 24 ,9 93 5 19 93 0, 82 77 2 U ru gu ay 19 55 -2 01 4 39 ,7 82 0 43 ,2 55 1 37 ,3 01 2 0, 13 60 0, 12 16 0, 10 75 50 ,4 34 8 19 63 27 ,7 53 6 19 84 0, 84 28 2 V en ez ue la 19 57 -2 01 4 37 ,0 70 5 41 ,8 77 4 33 ,9 11 7 0, 14 61 0, 08 16 0, 11 70 46 ,9 01 2 19 60 25 ,5 22 7 19 96 0, 73 71 3 A m ér ic a L at in a 19 50 -2 01 4 37 ,3 52 2 38 ,9 20 0 36 ,0 08 4 0, 05 16 0, 02 72 0, 03 94 40 ,6 64 4 19 67 33 ,5 31 2 20 05 0, 92 65 2 Fu en te : e la bo ra ci ón p ro pi a co n ba se e n B an co M un di al , C E PA L , O IT y d iv er sa s fu en te s lo ca le s. Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina Germán Alarco Tosoni 11 En la Tabla 2 se presenta la participación del excedente bruto de explotación res- pecto del PIB de las economías analizadas y de toda la región8. Esta información no es exactamente la recíproca de la participación de los salarios en el producto, ya que incluye otros componentes del PIB por tipo de ingreso, especialmente los impuestos indirectos.En este caso, la participación del excedente bruto de explo- tación promedio regional crece dos puntos porcentuales del PIB entre los periodos 1950-1979 y 1980-2014. Los mayores aumentos se observan en Panamá y Nica- ragua, seguidos por Bolivia, Brasil, Ecuador, México, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela. En Costa Rica, por su parte, solo es ligeramente creciente. En el caso de las economías cuyos promedios decrecen, se encuentran la de Argentina, Chile, Colombia, El Salvador y Honduras. Con respecto a los coeficientes de variabilidad se destaca que estos son ligera- mente más reducidos que los relativos a la participación de los salarios en el PIB: el excedente bruto de explotación es más estable. Asimismo, fue más estable en el periodo 1950-1979 con respecto a lo ocurrido entre 1980 y el 2014. Los valores máximos para la participación del excedente bruto de explotación se produjeron en mayor medida en el segundo subperiodo 1980-2014, aunque hay economías como las de Chile, Colombia, El Salvador, Honduras, Uruguay y Venezuela, en las cuales fue más alto en el periodo 1950-1979. El índice de tendencia refleja que para todo el periodo de análisis esta es ascendente en los casos de Bolivia, Brasil, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú y Venezuela, así como para toda la región. Por el contrario, se observa una tendencia decreciente en Argentina, Chile, Colombia, El Salvador, Honduras y Uruguay. Es relativamente constante en los casos de Costa Rica y el Ecuador. En la Gráfica 1 se muestra la participación salarial respecto del PIB de todas las economías analizadas a partir de la información original corregida por el filtro Hodrick-Prescott, útil para determinar la tendencia no lineal de esas series estadís- ticas. En esta se presentan los resultados por grupos de países: economías de mayor tamaño, de tamaño intermedio, de menor tamaño y las centroamericanas. Al res- pecto, una primera observación que salta a la vista es que los niveles y fluctuaciones son diferentes entre los diferentes países, lo cual refleja la complejidad de los facto- res explicativos asociados a temas estructurales, económicos, sociopolíticos y de los mercados laborales específicos que determinan las participaciones en el producto. En el caso de las economías de mayor tamaño, se observa con mayor claridad la naturaleza cíclica de las series (en forma de sinusoide) de Argentina y Brasil, en las que el tramo más alto se encuentra más adelantado en el segundo país que en el pri- mero, aunque coinciden en una fase ascendente desde el segundo quinquenio de este siglo, en correspondencia con el régimen político de ambos países. En el caso de México, los periodos 1950-1979 y 1980-2014 se diferencian claramente, de manera que en el segundo la tendencia de la participación de los salarios en el producto es claramente decreciente. 8 Incluye los ingresos de los independientes o mixtos que solo podrían diferenciarse en las últimas décadas, no en las iniciales. También incluye el consumo de capital fijo. 12 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 Ta bl a 2. Pr in ci pa le s ca ra ct er ís tic as d el e xc ed en te b ru to d e ex pl ot ac ió n en e l P IB d e A m ér ic a L at in a Pa ís C ob er tu ra Pr om ed io 19 50 -2 01 4 Pr om ed io 19 50 -1 97 9 Pr om ed io 19 80 -2 01 4 C oe fic ie nt e de va ri ab ili da d (1 95 0- 20 14 ) C oe fic ie nt e de va ri ab ili da d (1 95 0- 19 79 ) C oe fic ie nt e de va ri ab ili da d (1 98 0- 20 14 ) Va lo r m áx im o Va lo r m ín im o In di ca do r de te nd en ci a C ic lo s co m pl et os A rg en tin a 19 50 -2 01 4 53 ,8 07 3 54 ,3 07 9 53 ,6 45 1 0, 09 43 0, 08 60 0, 10 12 66 ,2 37 7 19 82 40 ,3 91 1 20 13 0, 93 17 2 B ol iv ia 19 60 -2 01 4 52 ,7 77 2 49 ,9 23 1 54 ,5 35 7 0, 07 27 0, 05 75 0, 06 15 65 ,5 56 5 19 86 46 ,6 89 0 19 79 1, 01 91 2 B ra si l 19 50 -2 01 4 42 ,3 13 9 40 ,4 41 8 44 ,0 94 3 0, 10 70 0, 12 90 0, 07 04 49 ,9 70 4 19 80 33 ,8 75 6 19 62 1, 11 19 2 C hi le 19 50 -2 01 4 42 ,6 64 1 44 ,3 35 8 40 ,9 80 7 0, 17 35 0, 18 44 0, 15 73 58 ,1 08 8 19 56 30 ,9 18 0 19 72 0, 90 80 2 C ol om bi a 19 50 -2 01 4 54 ,4 84 6 54 ,9 10 2 54 ,0 48 7 0, 07 54 0, 08 66 0, 06 45 61 ,2 66 9 19 53 45 ,8 39 9 19 69 0, 96 25 2 C os ta R ic a 19 53 -2 01 4 38 ,7 81 7 38 ,2 63 1 38 ,9 85 0 0, 09 51 0, 08 93 0, 09 98 46 ,6 18 8 19 99 32 ,8 90 8 19 79 0, 99 81 2 E cu ad or 19 50 -2 01 4 58 ,0 49 3 56 ,7 88 6 59 ,1 02 8 0, 10 13 0, 06 39 0, 11 99 76 ,0 84 2 19 99 48 ,3 32 0 19 71 1, 00 94 1 E l S al va do r 19 60 -2 01 4 62 ,9 57 6 73 ,4 34 2 56 ,8 77 9 0, 18 38 0, 10 62 0, 15 45 84 ,1 95 7 19 60 34 ,4 82 2 19 89 0, 77 86 1 H on du ra s 19 50 -2 01 4 41 ,6 03 0 45 ,2 36 6 38 ,3 27 0 0, 12 73 0, 07 29 0, 12 21 52 ,3 72 3 19 53 31 ,7 76 0 19 87 0, 94 14 2 M éx ic o 19 50 -2 01 4 60 ,4 71 0 58 ,5 31 8 61 ,9 92 8 0, 09 41 0, 09 52 0, 08 59 69 ,2 13 4 20 12 46 ,4 68 0 19 81 1, 04 56 2 N ic ar ag ua 19 60 -2 01 4 45 ,6 85 5 33 ,5 26 5 52 ,7 49 2 0, 25 35 0, 11 04 0, 15 71 71 ,8 88 0 19 88 31 ,3 03 7 19 78 1, 59 93 2 Pa na m á 19 50 -2 01 4 36 ,2 67 8 25 ,4 29 1 45 ,0 07 6 0, 40 00 0, 28 80 0, 27 93 67 ,2 15 9 20 12 15 ,9 19 2 19 69 2, 77 36 2 Pa ra gu ay 19 62 -2 01 4 57 ,2 67 1 52 ,2 66 0 59 ,8 76 8 0, 11 02 0, 05 13 0, 10 20 71 ,7 14 3 19 91 47 ,1 20 2 19 79 1, 14 50 2 Pe rú 19 50 -2 01 4 57 ,3 67 4 54 ,7 64 4 59 ,6 14 6 0, 06 85 0, 05 64 0, 05 27 64 ,6 63 2 19 93 50 ,9 46 1 19 87 1, 06 71 2 U ru gu ay 19 55 -2 01 4 44 ,8 21 3 44 ,1 29 3 45 ,2 85 0 0, 11 01 0, 14 24 0, 08 19 55 ,0 00 0 19 55 34 ,9 03 0 19 71 0, 98 54 2 V en ez ue la 19 57 -2 01 4 56 ,8 06 7 54 ,3 89 9 58 ,5 99 4 0, 06 87 0, 07 55 0, 04 85 65 ,5 40 1 19 74 46 ,2 18 9 19 59 1, 13 35 2 A m ér ic a L at in a 19 50 -2 01 4 51 ,9 99 1 50 ,9 52 7 52 ,9 36 2 0, 03 43 0, 02 61 0, 03 10 55 ,6 34 0 20 06 48 ,6 44 2 19 61 1, 02 89 2 Fu en te : e la bo ra ci ón p ro pi a co n ba se e n B an co M un di al , C E PA L , O IT y d iv er sa s fu en te s lo ca le s. Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina Germán Alarco Tosoni 13 Chile, en el caso de las economías de tamaño intermedio, muestra un ciclo más claro. En los casos de Perú, Venezuela y Colombia, se observa más claramente que el periodo 1950-1979 tiene las participaciones de los salarios en el producto más elevadas en el tiempo, para de ahí ir decreciendo. De los tres países, el Perú tiene el ciclo expansivo más adelantado en la década de los cincuenta, mientras que Vene- zuela está más desfasado en la de los sesenta. En Colombia, la caída de la parti- cipación de los salarios recién se inicia a partir de la década de los ochenta, pero de manera más importante en los noventa. En todos los casos de este subgrupo hay una ligera tendencia creciente en los últimos años. Para el caso de las eco- nomías de menores ingresos, Bolivia y Paraguay tienen ciclos menos pronuncia- dos que Ecuador y Uruguay. Asimismo, mientras que la tendencia en los últimos años de Ecuador y Uruguay es creciente, es decreciente en Bolivia y Paraguay. Del grupo de las economías centroamericanas, Panamá y Nicaragua se aproximan a la tendencia no lineal de México o el Perú. Honduras y El Salvador son parecidos con tendencia ascendente, mientras que Costa Rica muestra una ligera tendencia ascendente con ciclos casi inexistentes. En la Gráfica 2 se muestra la evolución de la serie original de la participación salarial, del excedente bruto de explotación en el PIB de toda AméricaLatina y el resultado de la tendencia no lineal de acuerdo con el filtro de Hodrick-Prescott. Al respecto, en el caso de la participación de los salarios en la tendencia no lineal, se observa un valor máximo (cima) en 1965, con una caída relevante en la década de los ochenta (crisis de la deuda); una posterior elevación a mediados de los noventa, y un nivel más bajo (sima) en el 2005, para después elevarse a partir de esa fecha. Queda claro que el mayor nivel de participación se logró bajo el modelo fordista. En el caso de la información original, el pico se produce en 1967, la primera sima en 1985, mientras que la segunda se da en el 2005. En el caso de la participación del excedente bruto de explotación, el mayor nivel se produce en el 2006, seguido de 1986. Por el con- trario, los niveles más reducidos se producen a finales de la década de los sesenta e inicios de la de los setenta, en particular en 1971. ¿Historia común? Es indudable que existe una tendencia general en la evolución de la participación salarial y del excedente bruto de explotación sobre el PIB para toda la región en el periodo bajo análisis, pero también se encuentran particularidades en cada econo- mía. Al respecto, se han obtenido los coeficientes de correlación de la masa salarial y del excedente bruto de explotación entre el PIB de cada país para todos los años con respecto a la misma información de las otras economías analizadas, obtenién- dose dos matrices de correlaciones que consideran las vinculaciones con relación a los otros países (128 valores de las 16 economías para cada matriz). Las correlacio- nes de una economía respecto de las otras pueden tener valores entre -1, si existe una correlación negativa o inversa; 0, cuando no existe vinculación alguna; y 1, cuando existe correlación o una vinculación directa con respecto a la información de los otros países. Si se obtiene un promedio simple de estas correlaciones para cada país, se tiene un indicador de cercanía con respecto al resto de las economías analizadas. 14 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 G rá fic a 1. Pa rt ic ip ac ió n sa la ri al r es pe ct o de l P IB c or re gi da m ed ia nt e fil tr o de H od ri ck -P re sc ot t, 19 50 -2 01 4 (% d el P IB ) E co no m ía s de m ay or ta m añ o E co no m ía s de m en or ta m añ o E co no m ía s de ta m añ o in te rm ed io E co no m ía s ce nt ro am er ic an as 253035404550 1950 1954 1958 1962 1966 1970 1974 1978 1982 1986 1990 1994 1998 2002 2006 2010 2014 A rg en tin a B ra si l M éx ic o 27293133353739414345 1950 1954 1958 1962 1966 1970 1974 1978 1982 1986 1990 1994 1998 2002 2006 2010 2014 C hi le C ol om bi a Pe rú V en ez ue la 1419242934394449 1950 1954 1958 1962 1966 1970 1974 1978 1982 1986 1990 1994 1998 2002 2006 2010 2014 B ol iv ia E cu ad or Pa ra gu ay U ru gu ay 12223242526272 1950 1954 1958 1962 1966 1970 1974 1978 1982 1986 1990 1994 1998 2002 2006 2010 2014 Pa na m á C os ta R ic a E l S al va do r H on du ra s N ic ar ag ua Porcentaje Porcentaje PorcentajePorcentaje Fu en te : e la bo ra ci ón p ro pi a co n ba se e n B an co M un di al , C E PA L , O IT y d iv er sa s fu en te s lo ca le s. Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina Germán Alarco Tosoni 15 Gráfica 2. Participación salarial y del excedente bruto de explotación en América Latina 1950-2014 (% del PIB) 30 35 40 45 50 55 60 19 50 19 52 19 54 19 56 19 58 19 60 19 62 19 64 19 66 19 68 19 70 19 72 19 74 19 76 19 78 19 80 19 82 19 84 19 86 19 88 19 90 19 92 19 94 19 96 19 98 20 00 20 02 20 04 20 06 20 08 20 10 20 12 20 14 Participación salarial Tendencia H-P participación salarial Participación EBE Tendencia H-P participación EBE Po rc en ta je Fuente: elaboración propia con base en Banco Mundial, CEPAL, OIT y diversas fuentes locales. La integración de la información de estas matrices de correlaciones se presenta en la Gráfica 3 para el caso de la participación salarial entre el PIB, y en la Gráfica 4 para el excedente bruto de explotación entre el PIB. En el eje vertical se presenta el valor promedio de cada una las variables para todos los años analizados, mien- tras que en el eje horizontal se observa el promedio simple de las correlaciones de una economía respecto de las otras, tanto en la variable salarial, como del exce- dente bruto de explotación, ambas entre el PIB. La distancia entre una economía y otra se mide por la diferencia entre sus valores promedio y la diferencia entre sus correlaciones. Una primera anotación es que las particularidades locales tienen importancia, ya que el promedio de las correlaciones, tanto de los salarios, como del excedente bruto de explotación, no son tan cercanas al valor 1. En el caso de la participación salarial, se destacan dos grupos; en un caso, los que tienen una dinámica más parecida y man- tienen una correlación negativa respecto del otro grupo. En este grupo se encuen- tran Costa Rica, Honduras y El Salvador, aunque con niveles promedio diferentes. Del otro lado se encuentra el resto de países, aunque es posible distinguir que Bolivia, Ecuador, Panamá, Perú, México, Nicaragua y Venezuela están más alejados del otro subgrupo, integrado por Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Uruguay y Paraguay. 16 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 En el caso del excedente bruto de explotación (EBE), se distinguen también dos grupos; el primero, integrado por El Salvador, Argentina, Brasil y Honduras con correlaciones negativas respecto al resto de las economías latinoamericanas. El segundo grupo está conformado por el resto de las economías, mostrando correla- ciones positivas entre ellas. Gráfica 3. Dispersión de la media de la participación salarial y del promedio de correlaciones entre economías latinoamericanas, 1950-2014 Bolivia Brasil Chile Colombia Costa Rica Ecuador El Salvador Honduras México Nicaragua Panamá Paraguay Perú Uruguay Venezuela 20 25 30 35 40 45 50 55 -0,3 -0,2 -0,1 0,0 0,1 0,2 0,3 0,4 wi PIBi N i N / /( ) = ∑ 1 Corri N i N ( ) = ∑ / 1 Fuente: elaboración propia con base en Banco Mundial, CEPAL, OIT y diversas fuentes locales. VINCULACIONES DE LA DISTRIBUCIÓN FACTORIAL CON LOS CICLOS DE CRECIMIENTO ECONÓMICO A continuación, se evalúa qué ocurre con el crecimiento económico cuando se eleva la participación salarial, y qué sucede con el crecimiento económico una vez aumenta la participación del excedente bruto de explotación. De partida, en el caso de la participación salarial, si la vinculación entre ambas variables es directa, Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina Germán Alarco Tosoni 17 Gráfica 4. Dispersión de la media del excedente bruto de explotación (EBE) y del promedio de correlaciones entre economías latinoamericanas, 1950-2014 Argentina Bolivia Brasil Chile Colombia Costa Rica Ecuador El Salvador Honduras México Nicaragua Panamá Paraguay Perú Venezuela 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 -0,3 -0,2 -0,2 -0,1 -0,1 0,0 0,1 0,1 0,2 0,2 0,3 EBEi PIBi N i N / /( ) = ∑ 1 Corri N i N ( ) = ∑ / 1 Fuente: elaboración propia con base en Banco Mundial, CEPAL, OIT y diversas fuentes locales. el resultado es positivo; asimismo, en la medida que nos alejamos del origen de ambos ejes, la situación habría que calificarla como más conveniente para la socie- dad. Si la relación es inversa o nos acercamos al origen, hay un trade-off, en el cual una mayor participación de los salarios se corresponde negativamente con el creci- miento económico, o el mayor crecimiento económico se produce con una menor participación salarial.En la Gráfica 5 se muestra la información del promedio sala- rial y del crecimiento económico (promedio geométrico) por quinquenios. En primer lugar, se destaca que el periodo 1950-1979 es superior al correspon- diente a 1980-2014, ya que las observaciones se encuentran más alejadas del ori- gen. Hay mayor participación salarial, a la par que el crecimiento económico es más alto; esto mismo parece ocurrir a nivel internacional. También se pueden dis- tinguir subperiodos en los que esta vinculación fue positiva: primer quinquenio de 18 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 la década de los sesenta, primer quinquenio de la de los noventa, y el de 2005-2014. Son periodos negativos en los que hay un trade-off entre ambas variables la década de los cincuenta, el segundo quinquenio de los sesenta, las décadas de los setenta y ochenta, el segundo quinquenio de los noventas y el primero del siglo xx. Gráfica 5. Trayectoria de la participación salarial y el crecimiento económico en América Latina por quinquenios, 1950-2014 1950-1954 1955-1959 1960-1964 1965-1969 1970 -1974 1975-1979 1980-1984 1985-1989 1990-1994 1995-1999 2000 -2004 2005-2014 34 35 36 37 38 39 40 41 0 1 2 3 4 5 6 7 8 Participación salarial promedio (%) Crecimiento % Fuente: elaboración propia con base en Banco Mundial, CEPAL, OIT y diversas fuentes locales. La relación del excedente bruto de explotación y el crecimiento económico se pre- senta en la Gráfica 6. Este no puede interpretarse de la misma forma como con lo que ocurre con la participación salarial respecto al PIB. Aquí, el ideal sería obte- ner la mayor tasa de crecimiento posible, con la menor participación del exce- dente bruto de explotación. Al respecto, de igual forma que en la gráfica anterior, el periodo 1950-1979 es superior al de 1980-2014, ya que las tasas de crecimiento económico son superiores. Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina Germán Alarco Tosoni 19 Gráfica 6. Trayectoria del excedente bruto de explotación y el crecimiento económico en América Latina por quinquenios, 1950-2014 1950 -1954 1955-1959 1960 -1964 1965 - 1969 1970 -1974 1975 -1979 1980 -1984 1985 -1989 1990 -1994 1995 -1999 2000- 2004 2005-2014 50 51 52 53 54 55 56 57 58 59 60 0 1 2 3 4 5 6 7 8 Participación EBE promedio (%) Crecimiento % Fuente: elaboración propia con base en Banco Mundial, CEPAL, OIT y diversas fuentes locales. La evolución de la participación de los salarios en el PIB con relación al creci- miento económico regional se presenta en la Gráfica 7. Para ambas variables se considera la tendencia no lineal, aplicando el filtro Hodrick-Prescott. Al respecto, en esta se presentan tres etapas en la vinculación de ambas variables. Una pri- mera entre 1950-1979 —antes de la crisis de la deuda de los ochenta—, en la cual la correspondencia es directa y estrecha. Luego, una segunda en la década de los ochenta y noventa, en la que esta vinculación se mantiene pero es de menor impor- tancia. En la tercera etapa, a partir del segundo quinquenio de la primera década del siglo xxi, la relación es inversa. En esta última se eleva la participación salarial, pero el crecimiento económico es menor. En el Anexo 4 se muestran los resultados para cada una de las economías analizadas. La correspondencia positiva entre ambas variables para todo el periodo es evidente en los casos de Argentina, Ecuador y México. En el resto de economías se observa principalmente una correspondencia directa en parte de o todo el subperiodo 1950- 1979, mientras que hacia el final del subperiodo 1980-2014 se muestra una relación inversa. Estos son los casos de Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Panamá, 20 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 Perú y Venezuela. El análisis de cada economía en particular excede los alcances de este documento. Gráfica 7. Participación salarial y crecimiento económico en América Latina, 1950-2014 (datos filtrados por Hodrick-Prescott) 2 2,5 3 3,5 4 4,5 5 5,5 6 6,5 7 32 33 34 35 36 37 38 39 40 19 50 19 52 19 54 19 56 19 58 19 60 19 62 19 64 19 66 19 68 19 70 19 72 19 74 19 76 19 78 19 80 19 82 19 84 19 86 19 88 19 90 19 92 19 94 19 96 19 98 20 00 20 02 20 04 20 06 20 08 20 10 20 12 20 14 Participación salarial Crecimiento del PIB Po rc en ta je Porcentaje Fuente: elaboración propia con base en Banco Mundial, CEPAL, OIT y diversas fuentes locales. CONTRIBUCIÓN DE LA MASA SALARIAL AL CRECIMIENTO ECONÓMICO En las secciones previas de este documento se ha determinado empíricamente la relación directa entre la participación salarial en el PIB y el crecimiento eco- nómico, siendo clara en el periodo 1950-1979, a diferencia de lo que ocurrió entre 1980 y el 2014. Por otra parte, en un estudio previo (con periodo más corto), se determinó a través de las pruebas de causalidad de Granger que no se puede recha- zar el hecho de que la masa salarial causa el crecimiento económico, siendo la relación dominante para la mayoría de las economías latinoamericanas y para toda la región en conjunto. Asimismo, aunque con menor significancia y recurrencia, el crecimiento económico también causa la participación salarial (Alarco, 2014). Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina Germán Alarco Tosoni 21 Para tal efecto, en esta sección se realiza un análisis mediante panel aprovechando toda la información disponible, dividida en los dos periodos antes comentados. Se postula que el crecimiento económico regional depende de la participación salarial y de las otras variables macroeconómicas por el lado de la demanda. Se utilizaron dos tipos de modelos de panel. Los de efectos aleatorios que utiliza el método de estimación de máxima verosimilitud, y un panel dinámico que utiliza el método de Arellano Bond. En el caso del primer modelo se planteó la ecuación: y u w X ei t i i t i t i, , ,= +α + β+ (1) Donde: u iid oi u∼ σ,( ) (2) Las variables son: y i,t : crecimiento del país "i" en el año "t" (3) w i,t : participación salarial del país "i" en el año "t" (4) X i,t : variables explicativas del país "i" en el años "t" (5) u i : efecto aleatorio del país "i" (6) Por otra parte, en el panel dinámico el modelo de regresión: y u y w X ei t i i t i t i t i, , , ,= +γ +θ + δ+−11 (7) Donde: y i,t : crecimiento del país "i" en el año "t" (8) w i,t : participación salarial del país "i" en el año "t" X i,t : variables explicativas del país "i" en el año "t" y u i : efecto aleatorio del país "i". En la Tabla 3 se muestran los resultados en los que en el caso del periodo 1950-1979 la participación salarial, tanto en el mismo periodo de tiempo, como desfasada, contribuyen de manera directa y positiva al crecimiento económico. A esta variable se agregan tanto la formación bruta de capital/PIB, como el con- sumo público/PIB. En el caso del periodo 1980-2014, la relación entre la partici- pación salarial y el crecimiento económico es negativa. Asimismo, contribuyen al crecimiento, tanto las exportaciones/PIB, como la formación bruta de capital/PIB. Todos los parámetros son significativamente diferentes de cero al 95% de con- fianza. Asimismo, de acuerdo con la prueba de Wald, todos los estimadores de las cuatro ecuaciones seleccionadas son, de manera conjunta, significativamente dife- rentes de cero. No se rechazan las hipótesis planteadas. 22 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 Tabla 3. Principales funciones explicativas del crecimiento económico (var. %) y la parti- cipación de los salarios en el PIB 1950-1979 y 1980-2014 Variables Efectos aleatorios Efectos aleatorios Efectos aleatorios Panel dinámico Crecimiento-1 0,2214285 (5,26)* Participación salarial (%) 0,0381979 (2,14)* -0,055123 (-2,93)* -0,0794596 (-2,28)* Participación salarial -1 (%) 0,0779017(4,18)* FBKF/PIB (%) 0,1828725 (4,92)* 0,2046761 (7,21)* 0,1162635 (2,95)* G/PIB-1 (%) 0,1147409 (2,07)* X/PIB (%) 0,0387058 (3,51)* 0,0519439 (2,34)* Observaciones 405 405 560 528 No. grupos 16 16 16 16 Wald-Chi2 166,03 141,11 245,03 69,88 Prob>Chi2 0 0 0 0 Rho 0,1227849 0,1104092 0,0202129 - Periodo 1950-1979 1950-1979 1980-2014 1980-2014 * Estimado significativo con un margen de error del 5%, utilizando una prueba de distribu- ción normal estándar. Fuente: elaboración propia con base en Banco Mundial, CEPAL, OIT y diversas fuentes locales. CONCLUSIONES La distribución factorial del ingreso de las diferentes economías y de la región latinoamericana, en su conjunto, ha mostrado cambios significativos a través del tiempo. No es una variable que se puede suponer como constante. Entre el nivel máximo y mínimo de la participación salarial en el producto de toda la región hay una diferencia de siete puntos porcentuales del PIB. Asimismo, hay economías centroamericanas en las que estas diferencias han superado los 25 puntos porcen- tuales. Las trayectorias son disímiles y, si bien predominan las cíclicas sobre las tendencias, se encuentran algunas que tienen ambos componentes. En el primer grupo se ubican la mayoría de las economías de la región. En el segundo se ubicaría Ciclos distributivos y crecimiento económico en América Latina Germán Alarco Tosoni 23 Venezuela, con una tendencia decreciente; y en el tercero con una tendencia ascen- dente Costa Rica y Honduras, mientras que es descendente en México, Nicaragua, Panamá y Perú. Las diversas economías comparten una historia común pero también muestran particularidades importantes. Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Ecuador, México, Perú, Uruguay y Venezuela al parecer internalizaron el fenómeno del fordismo, ya que presentan los mayores niveles de participación de los salarios en el PIB en la década de los cincuenta, sesenta e inicios de la de los setenta. Colombia y Hon- duras presentan sus mayores niveles de participación de los salarios en el PIB en la década de los ochenta. A partir de la década de los ochenta, con la crisis de la deuda, los ajustes macroeconómicos y el inicio de los programas de ajuste estruc- tural, un grupo importante de economías presenta una caída de la participación de los salarios en el producto. Sin embargo, hay otras como Brasil, Colombia y Honduras en la que esta contracción se produce recién a partir de la década de los noventa. Desde el segundo quinquenio del siglo xxi, Argentina, Brasil y Uruguay presen- tan aumentos en la participación de los salarios en el producto, como resultado de las nuevas políticas aplicadas. En el caso de Ecuador, esto ocurre desde finales de la década de los noventa, y en Bolivia esta cae por el mayor peso del excedente de explotación. En esto es probable que la redistribución del ingreso se haya reali- zado a través de la política fiscal, así como por la mayor propiedad estatal en la explotación de los recursos naturales. El promedio regional de la participación de los salarios en el PIB cayó en el periodo 1980-2014 con respecto al periodo 1950-1979, con su contrapartida en la elevación de la participación del excedente bruto de explotación. Asimismo, durante el pri- mer periodo, la variabilidad de cada uno de los componentes del PIB fue menor. Es relevante mencionar que la trayectoria de la participación salarial y del excedente bruto de explotación tiene cimas, valles, puntos de inflexión y simas diferentes por economía. La mayor parte de los países tienen sus cimas en la década de los sesenta del siglo xx, aunque hay quienes los tuvieron a finales de las décadas de los cincuenta, de los setenta y de los ochenta, o recién están logrando sus niveles máximos en estos últimos años (Costa Rica y Ecuador). La participación salarial y del excedente bruto de explotación respecto del PIB de la región en su conjunto tiene formas sinusoidales. Hay que reconocer que este promedio está influido por las economías de mayor tamaño. La mayor partici- pación salarial en el producto para el conjunto de economías se produjo entre la década de los sesenta, un segundo pico en los años recientes y luego otro a media- dos de la década de los noventa. Por otra parte, el punto más bajo se observa a mediados de la primera década del siglo xxi, seguido por lo ocurrido a mediados de la década de los ochenta. En el caso de la participación del excedente bruto de explotación, los mayores niveles se encuentran a mediados de la primera década del siglo xxi y a la mitad de la década de los ochenta. El análisis detallado de los 24 Cuadernos de Economía, 36(72), número especial 2017 factores explicativos de estos resultados rebasa los alcances de este artículo. La evolución de los precios internacionales de los productos exportados, de las tasas de interés, de la política salarial, la magnitud de la apertura externa (importacio- nes y exportaciones), la política fiscal, la correlación social-política y el régimen de crecimiento económico, son algunos de los elementos que habría que conside- rar para evaluar cada economía en particular. El periodo 1950-1979 es superior al relativo a 1980-2014, ya que se observa, tanto una mayor participación salarial en el PIB, como un mayor crecimiento eco- nómico, aunque esto no es continuo en todo el periodo. Esto sería un elemento útil para la evaluación de ambos periodos en el tiempo. Asimismo, cuando se rea- liza el análisis mediante panel con efectos aleatorios y el panel dinámico, es claro que la mayor participación de los salarios en el PIB contribuyó al crecimiento eco- nómico en el primer periodo. En cambio, la relación entre la participación salarial y el crecimiento económico entre 1980-2014 es negativa. En el segundo periodo 1980-2014 las exportaciones son una variable explicativa relevante, al igual que la mayor aportación de la formación bruta de capital al crecimiento económico. La información para analizar la vinculación entre las variables distributivas y el cre- cimiento económico está disponible, pero parece variar de acuerdo con el patrón general antes mencionado y con las particularidades de cada economía. REFERENCIAS 1. Abeles, M., Amarante, V., & Vega, D. (2014). Participación del ingreso laboral en el ingreso total en América Latina, 1990-2010. Revista CEPAL, 114, 31-52. 2. Accinelli, E., & Salas, O. (2010). Crecimiento y distribución del ingreso en América Latina. México D.F.: Facultad de Economía de la UNAM. 3. Alarco, G. (2014). Participación salarial y crecimiento económico en América Latina 1950-2011. Revista CEPAL, 113, 43-60. 4. Alarco, G. (2016). 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