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Di r ecci ó n:Di r ecci ó n: Biblioteca Central Dr. Luis F. Leloir, Facultad de Ciencias Exactas y Naturales, Universidad de Buenos Aires. Intendente Güiraldes 2160 - C1428EGA - Tel. (++54 +11) 4789-9293 Co nta cto :Co nta cto : digital@bl.fcen.uba.ar Tesis Doctoral Análisis estructural yAnálisis estructural y tectosedimentario de la subcuencatectosedimentario de la subcuenca de rincón blanco, precordillerade rincón blanco, precordillera occidental, provincia de San Juanoccidental, provincia de San Juan Barredo, Silvia Patricia 2004 Tesis presentada para obtener el grado de Doctor de la Universidad de Buenos Aires en Ciencias Geológicas de la Universidad de Buenos Aires Este documento forma parte de la colección de tesis doctorales y de maestría de la Biblioteca Central Dr. Luis Federico Leloir, disponible en digital.bl.fcen.uba.ar. Su utilización debe ser acompañada por la cita bibliográfica con reconocimiento de la fuente. This document is part of the Master's and Doctoral Theses Collection of the Central Library Dr. Luis Federico Leloir, available in digital.bl.fcen.uba.ar. It should be used accompanied by the corresponding citation acknowledging the source. Cita tipo APA: Barredo, Silvia Patricia. (2004). Análisis estructural y tectosedimentario de la subcuenca de rincón blanco, precordillera occidental, provincia de San Juan. Facultad de Ciencias Exactas y Naturales. Universidad de Buenos Aires. http://hdl.handle.net/20.500.12110/tesis_n3857_Barredo Cita tipo Chicago: Barredo, Silvia Patricia. "Análisis estructural y tectosedimentario de la subcuenca de rincón blanco, precordillera occidental, provincia de San Juan". Tesis de Doctor. Facultad de Ciencias Exactas y Naturales. Universidad de Buenos Aires. 2004. http://hdl.handle.net/20.500.12110/tesis_n3857_Barredo http://digital.bl.fcen.uba.ar http://digital.bl.fcen.uba.ar http://hdl.handle.net/20.500.12110/tesis_n3857_Barredo http://hdl.handle.net/20.500.12110/tesis_n3857_Barredo mailto:digital@bl.fcen.uba.ar pum ..,_.vvm-vI mw..w.wmn..,. w H i. w” .V “MW WM“. v” z i.’ .‘ "2 '«w -. w ,P v fm“, F_ ' 'ï :-- . .. É .., . y y: ¿ Y _ , i .1 t. UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES Facultad de Ciencias Exactas y Naturales Departamento de Ciencias Geológicas Laboratorio de Tectónica Andina ANÁLISIS ESTRUCTURAL Y TECTOSEDIMENTARIO DE LA SUBCUENCA DE RINCON BLANCO, PRECORDILLERA OCCIDENTAL, PROVINCIA DE SAN JUAN Tesis Doctoral ¡”la. 1 3 G pi. Autor:SilviaPatriciaBarredod.“ Y 1,: '- 3-¿4i a . e; ‘ Director: Victor A. Ramos 2004 Barreda (2004) INDICE RESUMEN CAPITULO l INTRODUCCION: OBJETIVOS, METODOLOGÍA Y ANTECEDENTES Introducción Objetivos Ubicación y vías de acceso Caracterización Geográfica Metodología Antecedentes CAPITULO ll CUENCA CUYANA Introducción Estratígrafia Análisis lítoestratigrájico Formación Río Mendoza Formación Potrerillos Formación Cacheuta Formación Río Blanco Análisis secuencial Supersecuencía inferior Supersecuencía superior Edad CAPITULO lll EL HEMIGRABEN RINCÓN BLANCO Introducción Substrato de la cuenca Ordovícico Formación Don Polo Formación Alcaparrosa Sílúríco Formación Calingasta Formación La Tina Devónico Formación Codo Carbomfero Formación El Ratón Formación El Planchón Formación Ciénaga Larga del Tontal Pérmíco Formación El Salto Los depósitos triásicos de la subcuenca de Rincón Blanco Hilario, Sorocayensey Barreal Formación Barreal N-ooom-bu.—¡¡—n 15 16 18 19 19 20 21 21 21 22 23 24 26 27 27 28 28 28 30 30 31 31 31 32 32 32 33 33 34 34 35 36 Formación Cortaderita Formación Cepeda Formación Agua de los Pajaritos Formación El Alcázar Formación Hilario Formación Monína Edad Quebrada del Tigre Sección Inferior Sección Intermedia Sección Superior Cerro Puntudo Formación Cerro Puntudo Sección intermedia Formación El Relincho CAPITULO IV LA SUBCUENCA RINCÓN BLANCO: ESTRATIGRAFÍA Y PETROGRAFÍA Introducción Antecedentes Nomenclatura Estratigráfica Grupo Rincón Blanco Formación Ciénaga Redonda Distribución Litología Características microscópicas Formación Cerro Amarillo Distribución Litología Características microscópicas Formación Panul Distribución Litología Características microscópicas Formación Corral de Piedra Distribución Litología Características microscópicas Formación Carrizalito Distribución Litología 75 Características microscópicas Fenómenos kársticos asociados Formación Casa de Piedra Distribución Litología Características microscópicas Unidad Marachemill Areniscas y tobas var-¡color 36 37 38 39 40 40 41 42 42 45 45 45 46 48 48 50 51 51 52 56 56 56 57 59 63 63 64 66 68 68 68 69 70 70 70 73 74 74 78 80 82 82 82 86 86 88 Barreda (2004) Litología Características microscópicas Fanglomerados rojos Distribución Litología Características microscópicas Areniscas rojas Ubicación Litología Características microscópicas Conglomerados verdesy areniscas grises Ubicación Litología Caracteristicas microscópicas Arem'scas rojo ladrillo Areniscas grises Ubicación Litología Caracteres microscópicos Edad CAPITULO V ANÁLISIS DE FACIES Y SISTEMAS DEPOSITACIONALES Litofacies del Grupo Rincón Blanco Descripción Facies conglomerádicas Facies de conglomerados masivos Facies de conglomerados y brechas masivos Subfacies matriz arenosa Subfacies matriz fangolítica Facies de conglomerados finos a medios con estratificación entrecruzada planar Facies de conglomerados con estratificación entrecruzada en artesa Facíes arenosas Facies de areniscas masivas Facies areniscas gruesas masivas con trenes conglomerádicos Facies arenosas con estratificación entrecruzada en artesa Facies de arenas con intraclastos pelíticos y/o estructura de corte y relleno Facies de areniscas con estratificación entrecruzada planar Facies de areniscas con ondulitas Facies de areniscas con laminación horizontal Facies heterolíticas de arenas y sabulitas Facies de arenas medias de origen eólico Facíes pelíticas Pelitas masivas Pelitas con laminación entrecruzada por migración de ondulas Pelitas con laminación entrecruzada y ondulítica Pelitas arenosas Pelitas con laminación horizontal a ondulítica Pelitas laminadas a macizas Facies de arcilitas y limolitas carbonáticas 88 89 91 91 91 92 93 93 93 93 95 95 95 95 96 96 96 96 97 97 100 lOl lOl 102 102 106 106 108 lll lll 112 112 113 114 115 116 116 118 119 120 121 121 122 122 122 124 124 125 Pelitas laminadas Pelitas carbonosas y/o bituminosas Facies P (paleosuelos y protopaleosuelos) Facíes carbonáticas Facies de margas Faciespiroclásticas Facies de tobas masivas o laminadas Facies de tobas riolíticas Análisis de Paleocorrientes Resultados Sistemas depositacionales Sistemas depositacionales de la Unidad Marachemíll Areniscas varicolor Fanglomerados rojos Areniscas rojas Conglomerados verdes y areniscas grises Areniscas rojo ladrillo Sistemas depositacionales del Grupo Rincón Blanco Formación Ciénaga Redonda Formación Cerro Amarillo Formación Panul Formación Corral de Piedra Formación Carrizalito Formación Casa de Piedra CAPITULO VI CONTENIDO FOSIL Y PALEOCLIMA Introducción Contenido florístico y de invertebrados Unidad Marachemill Areniscas rojas Conglomerados y areniscas grises Grupo Rincón Blanco Formación Ciénaga Redonda Formación Cerro Amarillo Formación Panul Formación Corral de Piedra Formación Carrizalito Formación Casa de Piedra Huellas de tetrápodos Descripción de las huellas y rastrílladas Rastrilladas de bípedos Bípedos facultativos Bípedos Rastrilladas de cuadrúpedos Huellas aisladas Implicanciaspaleogeográjïcas y evolutivas Paleoclima CAPITULO Vll 126 127 127 129 129 129 129 130 130 l3l 134 134 134 l34 136 138 l40 l4l l4l 145 154 156 163 l73 178 l79 180 180 180 180 l8l 181 182 186 186 189 193 195 196 196 196 198 200 203 204 206 Barreda (2004) ANALISIS TECTOSEDIMENTARIO 209 Introducción 210 Historia del relleno y correlaciones 213 Margen Activo 213 Margen Activoy rampa del depocentro Rincón Blanco 226 CAPITULO VII ESTRUCTURA 248 La estructura de la región del río Los Patos 249 La estructura de la región deRincón Blanco 254 Interpretación estructural de la inversión 269 CAPITULO IX EVOLUCIÓN TECTÓNICA 271 Introducción 272 Rifts continentales: el hemigraben Rincón Blanco 273 Cinemática de la extensión 278 Evolución tectónica 291 Magmatismo 294 CONCLUSIONES 297 AGRADECIMIENTOS 304 BIBLIOGRAFÍA 305 Resumen En la región del río Los Patos, provincia de San Juan, aflora un serie triásica asociada al hemigraben mas septentrional de la cuenca Cuyana. Este ha sido identificado como Rincón Blanco y reúne los depósitos de Barreal, Hilario, Rincón Blanco, quebradas El Salto, El Tigre y Cerro Puntudo. El área de estudio forma parte de la faja corrida y plegada de la Precordillera en donde la deformación compresiva dio lugar al desarrollo de estructuras complejas y fenómenos de inversión tectónica que dificultan el análisis del rift, la historia de su relleno y consecuentemente la correlación a través de la subcuenca. Sin embargo, el mapeo detallado de las estructuras, el estudio cinemático de las fallas y el análisis de la evolución de los ambientes sedimentarios posibilitaron la elaboración de un modelo simplificado del período extensional de la subcuenca. La sedimentación fue continental, epiclástica y piroclástica y tuvo lugar en depocentros aislados que formaron un hemigraben asimétrico con polaridad este. El margen activo corresponde a la zona de Rincón Blanco mientras que la rampa corresponde a la zona de Barreal - Hilario. La evolución del relleno estuvo marcada por un fuerte control tectónico y climático que le imprimieron a las secuencias rasgos distintivos. Estas características permitieron aplicar los conceptos de la estratigrafia secuencial, así se identificaron tres secuencias depositacionales en términos de espacio de acomodación, que representan dos estadios de rifting (sinrift I y II) y sus correspondientes sags. Los resultados obtenidos correlacionan muy bien con lo observado en la rampa y con lo propuesto por otros autores para el depocentro Uspallata. El interesante contenido fósil compuesto por flora, fauna invertebrada, en especial de trazas fósiles, y vertebrada dada por la presencia de icnitas de tetrápodos se utilizó para reconstruir la paleogeografia de la cuenca, al mismo tiempo que constituyó una herramienta de gran valor para ajustar la propuesta estratigráfica secuencial lograda a través de los conceptos tectosedimentarios. El estudio detallado de la asociación de tetrápodos de la Formación Corral de Piedra, asimismo señala que por sus características constituyen hasta el momento el registro más antiguo de este grupo de dinosaurios en el mundo. Finalmente el análisis estructural y tectosedimentario permitieron ver que la secuencia aflorante sobre la margen oriental de la cuenca no está directamente relacionada al Grupo Rincón Blanco y hasta tanto no se cuente con un dato preciso de edad, se la ha identificado como Unidad Marachemill. Barreda (2004) Abstract A series of Triassic rocks related to the infilling of the northemmost portion of the Cuyana basin outcrop in the surroundings of Los Patos river, in the San Juan province. The corresponding depocenter has been identified as Rincón Blanco subbasin and it is proposed here to involve the Barreal, Hilario, Rincón Blanco, El Salto, El Tigre creeks and the Cerro Puntudo sites. The studied area is part of the Precordillera fold and thrust belt where complex structures and diverse inversion tectonics phenomena have occurred as result of the cenozoic compressional deformation. Consequently the understanding of the rift evolution, the history of its infilling and the correlation throughout the basins require a deep analysis. A detailed mapping of the structures, the kinematic study of the faults and the examination of the sedimentary environments evolution made it possible to build a Simplified model for the extensional period of the basin. Continental, epiclastic and pyroclastic sedimentation took place in isolated depocenters which built an asymmetric halfgraben with its deepest portion to the east-northeast, in the Rincón Blanco region, and the ramp to the west in the Barreal - Hilario towns. The infilling was strongly controlled by tectoníc and climatic parameters which in term produced distinctive features along the whole sequence. These letter made it possible to applied the so extended sequence stratigraphy concepts and thus recognised three depositional sequences according to the accommodation space. They can be associated with two rifting stages (synrift I and ll) and their corresponding sag phases. This evolutive scheme most correlates with the ramp record and with several models proposed by other authors for the Uspallata subbasin. The wonhfull fossil record mainly composed of flora, invertebrates, specially trace fossils, and vertebrates consisting of tetrapod tracks were applied to make a paleogeographícal model for the basin. Furtherrnore, it was used as a tool to calibrate the sequence stratigraphic model achieved by using tectosedimentary elements. Comparative study of the tetrapod association of the Corral de Piedra Formation proved that it is the oldest one registered up to now around the world Finally and in spite of the lack of age data, the structural and tectosedimentary analysis held here pennitted to see that the sequence outcroppíng along the east margin of the basin is not related to the Rincón Blanco Group as previously proposed and hence it has been distinguished here as Unidad Marachemill. CAPITULO I OBJETIVOS, METODOLOGÍA YANTECEDENTES Barreda (2004) Introducción Durante muchos años se consideró a los afloramientos triásicos de las provincias de San Juan y Mendoza como cuencas independientes, por lo que la estratigrafia y la historia evolutiva de cada una de ellas fue tratada por separado. Los estudios más recientes, permitieron reinterpretar la historia de la sedimentación triásica y arribar a un modelo de cuenca única, más consistente con la información obtenida hasta el momento. En ese modelo se destaca que dichas secuencias correspondían a sistemas de depositación aislados y localmente controlados por altos intracuencales, que evolucionaron a ambientes regionalmente integrados. Este sistema morfoestructural fue denominado cuenca Cuyana y se extiende desde la porción centro sur de la provincia de San Juan hasta Mendoza entre los 31° 15' y los 36° de latitud sur con arrumbamiento principal noroeste-sudeste (Figura l-l ). En particular, el sector sanjuanino, denominado en este trabajo hemigraben Rincón Blanco, se caracteriza por una estructura compleja que toma dificil la correlación de las unidades triásicas en los distintos puntos de la cuenca y consecuentemente la interpretación genética de la misma y su relleno. La presente contribución abarca los depósitos del margen activo, cuyos afloramientos se encuentran al noreste de la localidad de Barreal, entre 69°15’ de longitud oeste y 31° 24’ — 31° 33’ de latitud sur, sobre el faldeo oeste de la Sierra del Tontal, extendiéndose desde el cerro Bola hasta la quebrada El Salto en las cercanías del río San Juan (Figura 1-2). Hacia el occidente se hallan separados de los depósitos de rampa por el cerro Hilario y el cordón Agua de Claudio. Ambos puntos del hemigraben fueron estudiados por diversos autores e intensamente explorado por Yacimientos Carboníferos Fiscales (YCF) por más de tres décadas, sin embargo en ningún caso se realizó un análisis sedimentológico y estructural integrado. En tal sentido el objetivo de esta investigación es caracterizar los ambientes sedimentarios del margen activo, establecer los controles tectónicos y/o climáticos que condicionaron su evolución y establecer su correlación con aquellos de la rampa, para interpretar la historia evolutiva del hemigraben. La compleja estructura actual, dominada por numerosos corrimientos ándicos, mantienen aislados los afloramientos y en algunos casos trunca parte de las secuencias. Es porello que esta correlación requirió además de un detallado mapeo regional con énfasis en la identificación de las estructuras y de la elaboración de secciones estructurales en puntos Universidad de Buenos Aires estratégicos. De esta manera fue posible establecer los contactos entre las distintas unidades del Grupo Rincón Blanco, estimar sus espesores, la geometría de sus depósitos y, fundamentalmente, reconstruir las paleocorrientes. me Figura 1-1: Mapa de ubicación de los depocentros correspondientes a la cuenca Cuyana, con indicación de la zona abarcadas por elpresente análisis. Objetivos Debido al potencial energético que presenta la cuenca Cuyana, se han realizado numerosos trabajos de investigación en el sector mendocino de la misma. Sin embargo, en la porción norte o sanjuanina donde 1a estructura es sumamente compleja, la producción es notablemente menor y orientada sobretodo a establecer la estratigrafía. Son pocas las contribuciones referentes a la evolución de esta porción de la cuenca, su paisaje y al tipo de deformación a la que fuera sometida durante el Terciario. Barreda (2004) Figura 1-2:Mapa de ubicación de la zona de estudio y detalle del camino de acceso a la ¿ona de Rincón Blanco donde puede verse además la ubicación de las minas y hornos defimdición. ' ' Universidad de Buenos Aires El objetivo de este trabajo es caracterizar el período extensional y analizar las características del relleno sedimentario del margen activo del hemigraben Rincón Blanco, establecer los controles tectónicos y/o climáticos que gobemaron la sedimentación triásica y reconstruir la compleja estructuración ándica que afectó dichos depósitos. Estos resultados conjuntamente con el estudio del contenido paleontológico fueron integrados a los datos obtenidos por otros autores y a observaciones propias para establecer la correlación con los depósitos de la rampa, analizar la estratigrafia y compararla con la ampliamente estudiada cuenca mendocina. De esta manera fue posible elaborar un modelo genético para el hemigraben septentrional consistente con los propuestos para el sector cuyano. La sintesis de los objetivos del presente trabajo es la siguiente: o Elaborar un modelo tentativo del origen extensional de la cuenca a través del estudio cinemático de las fallas presentes conjuntamente con los estudios sedimentológicos y ambientales. o Establecer la geometría y polaridad del rift y elaborar un modelo que pueda ser integrado con la dinámica del relleno local y con las de los restantes depocentros. o Llevar a cabo un estudio detallado de las unidades formacionales de la región para calibrar la estratigrafia local y establecer líneas de correlación con las restantes subcuencas del rift cuyano. o Aplicar los conceptos de la estratigrafia secuencial para correlacionar los depósitos del margen activo con los de la rampa e identificar las distintas secuencias depositacionales. o Establecer las variaciones en el espacio de acomodación en función de la variable tectónica y discriminar, cuando fuera posible, la influencia climática. o Realizar estudios petrográficos detallados sobre muestras representativas que aporten al conocimiento de la procedencia del material elástico. o Realizar el análisis de facies y la reconstrucción de los ambientes sedimentarios. o A partir del estudio detallado de la historia del relleno modelar las distintas configuraciones paleogeográficas y analizar los posibles controles tectónicos que condicionaron su evolución. Barreda (2004) o Hacer estudios paleontológicos que permitan una buena correlación con las asociaciones faunísticas de las subcuencas vecinas y, que contribuyan al refinamiento de las reconstrucciones paleogeográficas y de las correlaciones estratigráficas. o Sobre la base del reconocimiento de campo y de la interpretación realizada sobre fotos aéreas e imágenes satelitales, caracterizar la deformación compresiva que llevo a la subcuenca a su presente estructura actual y analizar si la inversión tectónica fue uno de los mecanismos de dicha deformación. Para llevar a cabo estos estudios se realizaron perfiles sedimentológicos de detalle, a escala 1:100 y 1:50 en distintos sectores de la subcuenca, de manera que pudieran identificarse las principales unidades litológicas, sus variaciones de espesor y los ambientes sedimentarios asociados. Se confeccionaron dos mapas geológicos, uno a escala l:lO0.000 de la región del Río Los Patos sobre la base de imágenes Landsat TM y de la información obtenida por otros autores para ver la distribución de los afloramientos tn'ásicos en el hemigraben sanjuanino. El otro corresponde a la región de Rincón Blanco, objetivo principal de este trabajo y fue realizado a escala 1:15.000. Se presenta la estructura, la estratigrafia y la distribución de los datos más importantes relevados en esta investigación, acompañados de secciones estructurales en tres cortes estratégicos de la subcuenca. Se tomaron muestras para los estudios petrográfïcos, palinológicos y de edad en todas las unidades del Grupo Rincón Blanco. Siempre que fue posible se midieron espesores utilizando cinta y brújula y se tomaron datos de paleocorrientes, ubicando los sitios con GPS. Asimismo, la presencia de icnitas de vertebrados determinó la implementaron de técnicas especificas de toma de datos, consistentes en una profusa producción fotográfica y en la generación de moldes de siliconas. Ubicación y vías de acceso La zona de estudio se encuentra a 45 km aproximadamente de la localidad de Barreal, provincia de San Juan (Figura 1-2). Se accede a Rincón Blanco por la quebrada del Arroyo Seco del Carrizal ubicada a 8 km al norte de Barreal y próxima a la localidad de Sorocayense por la ruta provincial 412. Se recorren 13 km en dirección este pasando por el puesto El Carrizal y el puesto Carrizal del Alto en la Ciénaga de los Puentes, para luego a la altura del 8 Universidad de Buenos Aires arroyo El Salto (Figura 1-2) tomar al norte por la quebrada de La Aguada. A 19 km está el puesto de Doña Juana de Villarroel y a medio kilómetro al norte se encuentran los restos de las construcciones de adobe y ladrillo refractario asociadas a la explotación minera de mediados del siglo XIX; a 8 km en la misma quebrada se hallan las minas conocidas como “Minas del Carmen Bajo”. El camino continúa hasta el portezuelo Alto Sur (Figura 1-2) donde se bifurca: la huella de la derecha llega hasta la cima de la sierra del Tontal donde se encuentra la antena retransmisora del pueblo de Barreal, mientras que la otra huella conduce a Rincón Blanco. Caracterización Geográfica Barreal es una villa agrícola localizada a orilla del río Los Patos (Figura 1-2) en el inmenso valle calingastino, rodeada por la Precordillera y la Cordillera Frontal. Se caracteriza por sus plantaciones de álamos dispuestos en forma de corredor que le confieren un paisaje muy particular. Entre sus cultivos más importantes se destacan la menta y la manzana pero también hay alfalfa, romero, estragón, lavanda y anís. Algunos de sus paisajes más conocidos se desarrollan en rocas triásicas como los Cerros Pintados de donde se extrajo bentonita para la clarificación de vino y agua potable, para alimento balanceado de aves y como piedra triturada para cobertura de techos. El Alcázar constituye un cerro de 1.650 m de altura con formas de erosión que semejan un castillo. Este es un sitio histórico dado que hacia el 1630, Huaziul-amta huarpe, y sus huestes, se rebelaron contra el dominio español y se refugiaron en el cerro. Las ruinas de Hilario son tal vez una de las atracciones históricas más importantes que se encuentran a l km al oeste de este cerro. Conservan los restos de un establecimiento de fundición de la Compañía Beneficiadora de Hilario, creada en 1865 durante la gobernación de Domingo Faustino Sarmiento sobre los cimientos de la actividad iniciada por los Jesuitas en el siglo XVII con el objeto de fundir oro, plata y cobreextraídos de la sierra del Tontal ubicada a 46 km al este del sitio. La palabra Tontal en huarpe, Tuunte/Tumta significa: sierras, mineral, lugar poblado (Díaz Costa y Díaz, 1939). Allí se asentó la actividad minera más importante que tuviera la provincia en el siglo pasado impulsada, entre otros, por Sarmiento el entonces gobernador de la provincia de San Juan. Sus objetivos no eran sólo económicos sino también estratégicos pues se pretendía poblar la región con inmigrantes e impulsar el desarrollo de nuevas actividades. Barreda (2004) Se proyectó entonces la fundación de un pueblo bautizado como San Francisco del Tontal y posteriormente como Villa Rickard, como se puede reconstruir a través de sendos decretos, como lo atestiguan documentos de aquella época. Sin embargo los restos de las construcciones localizadas en la zona que va desde el arroyo El Salto a la quebrada de la Aguada, faldeo occidental de la sierra (Figura 1-2), no pueden ser asociados a esta villa con precisión, dado que ésta no tuvo un lugar geográfico fijo. Existieron diferencias entre la voluntad del gobierno y las necesidades de los mineros que llevaron a cambiar sistemáticamente el lugar de asentamiento (Gnecco de Fernández, 1989). Lo que sí se puede afirmar es que las ruinas localizadas unos 5 km al sur de los afloramientos triásicos analizados en este estudio están directamente asociadas a la explotación minera emprendida entre los años 50 y 90 del siglo XIX. Conocidas como "hornos de pre-fundición" ó “Las Máquinas” (Figura 1-3b), fueron parte del establecimiento Carmen Alto Mining Co. instalado allí en 1891 (Gnecco de Fernández, 1989). Es en este lugar donde se cree que originalmente se propuso la fundación de la Villa Rickard y que frente a la negación de los pobladores mineros fue trasladada a la zona de la Mina del Carmen Alto (Figura 1-3a) sobre el arroyo Las Trancas. Esta última fue la mina principal y sus orígenes se remontan a la época de los jesuitas. Está situada a 3.000 m s.n.m. sobre el faldeo occidental del cerro Norte de la sierra del Tontal a 2 km al noreste del sitio anterior (Figura 1-2). Otra mina importante fue la Mina del Carmen Bajo localizada al oeste de la anterior, sobre la llamada antiguamente “quebrada Seca” y que hoy se la conoce como de la Aguada (Figura 1-2). Figura 1-3: A) Vistaal norte de la Mina del Carmen Alto. El camino que sale a Ia izquierda corresponde a la entrada a Ia quebrada Tres Amigos B) Vista de los "hornos de pre-fundición” que fueron parte del establecimiento Carmen Alto Mining Co. instalado allí en 1891 y localizado en las cercanías del camino de acceso a Rincón Blanco. Universidad de Buenos Aires En la “villa” se fundían plomo, oro y plata, y llegaron a habitar 3.000 pobladores. Si bien el pueblo tuvo aduana, iglesia, matadero, viviendas y oficinas, actualmente sólo se conservan restos de los numerosos socavones realizados por los pirquineros y de los hornos alimentados a madera de retama donde se fundía el material que luego era transportado a Sorocayense e Hilario para la refinación final. Metodología Inicialmente se realizó una recopilación bibliográfica orientada a la búsqueda de información del área de interés y de las zonas aledañas que permitió conocer el desarrollo regional de la cuenca Cuyana. Sobre una base de fotos aéreas a escala 1:50.000, se realizó una primera etapa de análisis estructural y litológico del sector comprendido entre el valle del río Los Patos por el oeste, y la sierra del Tontal por el este. Esto fue acompañado por el procesamiento básico de imágenes Landsat TM, por medio de los programas de computación Idrisi, IP de Luxe y Erdas. Se realizaron procesamientos digitales para establecer los contactos litológicos entre las unidades geológicas que integran la porción norte de la cuenca Cuyana y analizar las estructuras principales. Esa información fotointerpretada permitió elaborar el mapa geológico preliminar a escala 1:50.000, el que fuera modificado con la información obtenida en posteriores trabajos de campo. Así, se confeccionó un mapa geológico de detalle de la región a escala 1:15.000 en función de los datos de campo y los obtenidos de los distintos tratamientos y procesos hechos sobre la imagen satelital. Las tareas de campo se realizaron durante los años 1996, 1997, 1998 y 1999. En el mes de agosto del año 1995, se realizó una visita a las zonas de Calingasta y Barreal para analizar los afloramientos triásicos correlacionables con los de Rincón Blanco y establecer las posibles rutas de acceso a esta última zona. Las campañas de los dos años siguientes tuvieron por objeto el reconocimiento de las distintas unidades del Grupo Rincón Blanco conjuntamente con el levantamiento de la estructura actual. Esta información fue debidamente analizada y cotejada con la fotointerpretación previa. Paralelamente se realizaron perfiles sedimentarios de detalle que permitieron analizar los ambientes de sedimentación originales, se tomaron datos de paleocorrientes en diversos sectores de la subcuenca, lo mismo que del rumbo e inclinación de las estructuras y de los indicadores cinemáticos. Barreda (2004) Las campañas restantes tuvieron por objeto la elaboración de nuevos perfiles sedimentarios y de las secciones estructurales correspondientes a lo que se sumó un intenso muestreo paleontológico que consistió en la obtención de especímenes para estudios palinológicos y micropaelontológicos y, en la exploración y descripción de megafauna de vertebrados impulsada por el interesante hallazgo de huellas de tetrápodos no documentadas hasta el momento en la región. Antecedentes Los pioneros trabajos de Stappenbeck (1910) se refieren a estas sedimentitas como “Estratos del Paganzo” o “Paganzoschíchten”. Las primeras menciones específicas corresponden a Groeber (1948) quien identificó las areniscas localizadas en el cerro Bola como de edad triásica y las consideró como pertenecientes a los “Estratos del Paganzo”. Pozzo (1948) realizó estudios en algunos sectores de la cuenca siendo su aporte más importante la diferenciación entre éstos y los de la zona occidental correspondiente a Hilario Agua de los Pajaritos. Sin embargo, recién con los estudios exploratorios de Yacimientos Carboníferos Fiscales (YCF) se tuvo una idea más acabada de las características litológicas y del número de unidades que componían la secuencia triásica. Se realizaron numerosos informes, como los de Xicoy (1958), Gareca (1958), Luengas (1966), Suizer Rubio (1966, 1968), quienes presentaron relevamientos de detalle del área de Rincón Blanco, pero la primera publicación ad hoc corresponde al trabajo de Borrello y Cuerda (1965) donde se presentó la estratigrafia de la cuenca (Cuadro l- l ). Cuadro l-l: Síntesisestratígráfica propuesta por Borrelloy Cuerda ([965) Grupo Areniscas Casa de Piedra Rincón Blanco Lutita Carrizalito (Triásico) Formación Portezuelo Formación Panul Universidad de Buenos A¡res Rolleri y Criado Roque (1968) aceptaron este ordenamiento, aunque concluyeron que la sucesión de Rincón Blanco correspondía al estratotipo característico de la sección basal de todas las series sedimentarias del Triásico occidental del sur de San Juan, conocidos como estratos pre-Potrerillos. El estudio palinológico de las sucesiones triásicas del noroeste argentino de Yrigoyen y Stover (1969) indicó que por el contenido paleontológico y por las correlaciones litológicas, las Formaciones Casa de Piedra y Carrizalito correspondían a las unidades mendocinas Río Blanco y Cacheuta, mientras que las Formaciones Fanglomerado Panul y Portezuelo en conjunto a la Formación Potrerillos. Otro aporte de este trabajo es el reconocimiento de nuevas unidades triásicas por debajo del Fanglomerado Panul, que identificaron como Formación Las Cabras y Río Mendoza al correlacionarlas con las entidades el norte de Mendoza. Así, descartaron la nomenclatura propuesta previamente por Borrello y Cuerda (1965) y sugirieron utilizarla ya establecida para el Grupo Mendoza. Stipanicic (1972, 1979) analizó detalladamente las columnas propuestas por los distintos autores y basado en sus observaciones de campo concluyó que, si bien Yrigoyen y Stover (1969) estaban en lo cierto al considerar que el Grupo Rincón Blanco comprendía más unidades que las observadas por Borrello y Cuerda (1965) y que, la Formación Fanglomerado Panul correspondía a la Formación Portezuelo, no encontró evidencias que permitieran correlacionarlas con las unidades mendocinas, por lo que consideró conveniente mantener la nomenclatura propuesta por estos últimos autores aunque con nuevas modificaciones (Cuadro 1-2). Otros estudios fueron de índole regional, como los de Strelkov y Alvarez (1984), orientados al análisis de los distintos asomos triásicos de la región de Cuyo considerados por algunos autores como cuencas independientes. El aporte más importante de estas contribuciones fue la comprobación de que dichos afloramientos correspondían a una cuenca única, como lo observaran Rolleri y Criado Roque (1968), Yrigoyen y Stover (1969) y Stipanicic (1979), a la que se le dio el nombre de cuenca Cuyana. Los trabajos posteriores de levantamiento de hojas geológicas por el Servicio Geológico Nacional estuvieron a cargo de Furque y Caballé (1986) en la hoja 20b Calingasta, Cuerda et al. (1982) en la hoja 21 C San Juan y por Miguel Palma, hoja 21 B Barreal del Leoncito, aún inédita. Con respecto a la estructura en el trabajo de Quartino et al. (1971) se detalla la deformación compresiva de la región comprendida entre el río Los Patos y la sierra del Tontal; mientras que López Gamundí (1994) y López Gamundí et al., (1997) presentaron un 13 Barreda (2004) análisis de la historia extensional de los diversos depocentros del segmento norte de la cuenca Cuyana, aunque no caracterizaron la deformación posterior. Cuadro 1-2: Nomenclatura propuesta por Stipanicic (1979) Formación Casa de Piedra Formación CarrizalitoGrupo Rincón B|anco Formación Portezuelo (Triásico) (Fanglomerado Panul miembro inferior) Formación Cerro Amarillo Formación Ciénaga Redonda Finalmente, Baldoni y Durango de Cabrera (1977) y Haushke (1991) realizaron muestreos paleontológicos que dieron lugar a nuevos hallazgos florísticos y faunísticos en las unidades medio y superiores del grupo, pero no introdujeron modificaciones a la estratigrafia propuesta previamente por Stipanicic (1972 y 1979). CAPITULO II CUENCA CUYANA Barreda (2004) Introducción A fin de integrar los depósitos de la subcuenca de Rincón Blanco a un marco regional se presenta en este capítulo un análisis de la constitución de la cuenca Cuyana. Las cuencas triásicas argentinas, dominantemente continentales, presentan una orientación noroeste con respecto a la estructura principal de los Andes. Esta orientación preferencial se debe al control ejercido por antiguos límites de debilidad de la corteza (Charrier, 1979) correspondientes a terrenos previamente amalgamados (Ramos y Kay, 1993; Ramos, 1992). La cuenca Cuyana se ubica en las provincias de San Juan y Mendoza entre los 31° 15' y los 36° de latitud sur con un arrumbamiento principal noroeste (Figura 2-1). El basamento de la cuenca, en el sector oriental del segmento sanjuanino, está compuesto por metamorfitas precámbricas de la provincia geológica de Sierras Pampeanas mientras que en el occidental dominan lutitas y areniscas finas grises y gris verdosas de la Formación Villavicencio, sedimentitas calcáreas cambro-ordovícicas y volcanitas y piroclastitas del Grupo Choiyoi. El relleno es fundamentalmente de edad triásica media a superior y consiste en sedimentos clásticos y piroclásticos de origen continental. Como constituyen afloramientos desconectados entre sí, fueron inicialmente considerados cuencas aisladas y definidas como cuencas de Barreal, de Hilario y de Rincón Blanco. Estudios regionales posteriores permitieron ver que tanto estos depocentros como los de la Precordillera mendocina correspondientes a las localidades de Santa Clara, Potrerillos y Cacheuta conformaban en conjunto un único y complejo sistema depositacional, el que fue denominado cuenca Cuyana (Rolleri y Criado Roque, 1968; Yrigoyen y Stover, 1969; y Stipanícic, 1979). Posteriormente, Strelkov y Alvarez (1984) propusieron la denominación de cuenca triásica mendocina-sanjuanina a la totalidad de los registros triásicos del oeste argentino ubicados entre Calingasta en San Juan y General Alvear en Mendoza (Figura 2-2). Por otro lado y sobre la base del análisis secuencial, Kokogian y Mancilla (1989) reafirmaron el concepto de cuenca única para todas las unidades triásicas del centro-oeste argentino pero mantuvieron la denominación de cuenca Cuyana. De estos estudios se desprende que, inicialmente la cuenca Cuyana estaba conformada por depocentros o subcuencas separadas y condicionadas por altos relativos que conformaron barreras topográficas, al mismo tiempo que le imprimieron rasgos distintivos a la Universidad de Buenos Aires sedimentación de cada depocentro. Estos son conocidos como subcuencas de General Alvear (Criado Roque, 1979), Cacheuta (Rolleri y Fernandez Garrasino, 1979), Norte de Mendoza (Rolleri y Criado Roque 1968), Barreal (Stipanicic, 1972), y Rincón Blanco (Stipanicic, 1972). La fuerte compresión andina durante el Cenozoico dio lugar a un intenso estructuramiento con inversión parcial y en algunos casos hasta casi total de estas unidades. Figura 2-1: Mapa de ubicación de la cuenca Cuyana y su relación con los terrenos de basamento (modificado de Ramos, 1992). Barreda (2004) ' YN. Y v\ ' . ‘ ' ' v ' Cuenca Triásica _ Mendocina - Sanjuanína 31' l ‘ ' ‘ .c vl l lvi” .\ i ' n Juan Mmmm ," 30M!a suenen ¡(I Run provincia! : 1- . - \ . Martiniano: ‘ »2m.“ AA\ "¡kien '_ v _ gi Ríos 3:»: Figura 2-2: Mapa de ubicación de los distintos afloramientos triásícos correspondientes a Ia cuenca Cuyana según Strelkov y Alvarez (1984). Estratigrafía Diversos trabajos han analizado las características de la cuenca Cuyana, tanto en superficie como en subsuelo, así se pueden mencionar los de Frenguelli (1948), Harrington (1953), Borrello y Cuerda (1965), Rolleri y Criado Roque (1968), Yrigoyen y Stover (1969), Stipanicic (1972, 1979), Bettini (1980); Baldis et al. (1982, 1990), Strelkov y Alvarez (1984), Kay et al. (1984); Sessarego (1986), Kokogian y Mancilla (1989), Ramos (1992), Kozlowsky 18 Universidad de Buenos Aires et al. (1993), Kokogian et al. (1993), López Gamundí (1994), López Gamundí et al. (1997), Jones et al. (1999), Kokogian et al. (1999, 2001), Bellosi et al. (2001), entre otros. Estos autores elaboraron distintos cuadros estratigráflcos en función de los conceptos litoestratigráflcos y secuenciales respectivos. El trabajo de Strelkov y Alvarez (1984) sintetizó la estratigrafla propuesta hasta ese momento y aporta datos nuevos sobre la historia depositacional y tectónica de la cuenca, que ayudaron a una mejor comprensión de su evolución. Sobre la base del análisis litoestratigráfico adoptaron una nomenclatura común para todos los afloramientos triásicos de las provincias de Mendoza y San Juan a los que reúnen en el Grupo Uspallata. Asimismo, basándose en la evolución tectónica de la misma conjuntamente con la historia de su relleno sedimentario, propusieron la existencia de dos ciclos de sedimentación a los que denominaron I y II respectivamente (Cuadro 2-1). Kokogian y Mancilla (1989) también, hicieron una interpretación de la historia evolutiva de la cuenca pero en función de los conceptos de la estratigráfica secuencial. Esta nueva propuesta estratigráfica no necesariamente contrasta con la estratigrafla tradicional pero no son directamente comparables. Establecieron una división en dos supersecuencias: una inferior y otra superior, compuesta cada una por diferentes secuencias deposicitacionales, muchas veces coincidentes con las unidades formacionales antes mencionadas (Cuadro2-1). Análisis litoestratigráfico Se presenta aquí el modelo de Strelkov y Alvarez (1984), dado que constituye el esquema estratigráfico sobre el que se basa el análisis de la cuenca Cuyana. Estos autores, reconocieron dos ciclos sedimentaríos granodecrecientes, uno que abarca las Formaciones Río Mendoza, Potrerillos y Cacheuta, y otro que incluye a la Formación Río Blanco. Formación Río Mendoza Su contacto inferior es discordante, mientras que pasa transicionalmente a la formación suprayacente. Está constituida por facies aluviales gruesas producto de ambientes de alta energía desarrollados en un relieve marcado, de modo que inicialmente constituyeron el relleno de un substrato fuertemente irregular. Se trata de depósitos de abanicos aluviales compuestos por flujos de detritos (debris flows), flujos laminares (sheet flows) y facies de 19 Barreda (2004) relleno de canal representados por conglomerados cuyos fragmentos corresponden a metasedimentitas y clásticos paleozoicos. La existencia de tetrápodos en la Formación Río Mendoza fue interpretada como indicadora de ríos con caudal abundante generados por lluvias estacionales (Stipanicic, 1979), aunque es probable que algunos de los sistemas que drenaban la cuenca fueran de naturaleza alóctona. La comparación con los distintos afloramientos de las provincias de San Juan y Mendoza, permitió ver diferencias tanto en las características internas de las formaciones como en la composición de los clastos y los espesores medidos. Esto fue interpretado por Strelkov y Alvarez (1984) como producto de la existencia de altos intracuencales de composición litológica variable. Cuadro 2-l: Estratigrafia e interpreración de la historia del relleno de la cuenca Cuyana propuesta por Strelkov y Alvarez (I 984) y Kokogitm et al. (I 993) m" yMm (1904) Kolto otol.(1903) 0r.u:pallata Clolo Olalla.)th Atrium Socumcla Estadio EDAD EPOCA Jurásico Honanglano R‘o Rlo Rollono Río I Blanco Bm“ No"ano Blanco “emm Cachoutn cgcmug. Locuslro Potrorlllos Dollolco Cachoull Comlono ¡EI-IW. Potroflllos FW” Sinrifl I Polronttos Locuslro somoro Lodlnlono FIN“ LasPollas menoroflmoro _ Cono doTnásico ¡a cum, Locusln Fluvial ofinoro . Anlslano 3"“ ' Emol LasPollos lacustro Irl'orlor oflmoro Rlo Scltnlono Mendoza Rlo Mendoza Abonlco:oluvlolos Formación Potrerillos Esta unidad es de características más uniformes presenta evidencias de variaciones de energía en función a su posición dentro de la cuenca. Está compuesta por facies arenosas producto de sistemas fluviales anastomosados con buen desarrollo de facies de planicies de inundación y facies lagunares poco profundas. Es importante destacar la presencia de niveles 20 Universidad de Buenos Aires fosilíferos con restos de plantas, tobas y bentonitas sobre todo en el sector occidental. El contacto basal y de techo es transicional salvo en aquellos sectores donde apoya sobre el substrato de la cuenca. Según Strelkov y Alvarez (1984) la secuencia arenosa con niveles piroclástícos que domina por encima de las facies conglomerádicas corresponder-¡an casi en su totalidad a la Formación Potrerillos, y descartan la existencia de la Formación Cerro de Las Cabras. Sin embargo la totalidad de los trabajos realizados en esta cuenca hasta el momento e incluso las observaciones realizadas por la autora en la región de Uspallata, confirman que por sus características faciales la espesa secuencia silicoclástica y piroclástica corresponde a una unidad bien diferenciable de las Formaciones Río Mendoza y Potrerillos. Formación Cacheuta Está compuesta por facies lacustres y fluvio-lacustres. Son pelítas gris oscuras de ambiente reductor con participación de cuerpos arenosos intercalados cuyo origen se corresponde a deltas lacustres y paleocauces fluviales según su posición dentro de la cuenca. El contacto basal es transicional. Formación Río Blanco Comienza siendo granocreciente, sin embargo cambia rápidamente a secuencias estrato y granodecrecientes. Se reinstala un ambiente de alta energía compuesto por sistemas aluviales arenosos que conforman el segundo ciclo, de características también granodecrecientes. El marcado cambio de energía del medio sería producto de la reactivación de la subsidencia, ya sea por un descenso del nivel de base regional o por efectos de reactivación tectónica. Análisis secuencial En función del análisis secuencial, Kokogian y Mancilla (1989) y Kokogian et al. (1993), propusieron la división en dos supersecuencias: la supersecuencia inferior que corresponde a la fase de sinrift y la superior que corresponde a la fase de hundimiento térmico (mg) 21 Barreda (2004) Supersecuencia inferior Esta supersecuencia apoya díscordantemente sobre el basamento y es sobrepuesta por la supersecuencia superior mediante discordancia, que coincide con la que Stipanicic (1979) adjudica a la fase diastrófrca Río Tunuyán. Representa el relleno de la cuenca durante la etapa de extensión y es equivalente a las unidades litoestratígráfrcas Río Mendoza, Las Cabras, Poterillos y Cacheuta (Cuadro 2-1). Aquí es importante aclarar que si bien las Formaciones Potrerillos y Cacheuta fueron inicialmente incluidas como parte de la supersecuencia superior o sag por Kokogian y Mancilla (1989), posteriormente fueron reinterpretadas como parte de la supersecuencia inferior. Así, sobre la base de interpretaciones posteriores y en función de información sísmica, Kokogian et al. (1993) propusieron que el sistema de fallamiento inicial y responsable del origen de la cuenca, se mantuvo activo hasta el momento de la depositación de dichas unidades. Consecuentemente, agregaron un estadío de sinrift más al definido para la supersecuencia inferior, el que fuera denominado por estos autores como sinrift II y que involucra a estas dos formaciones. Sin embargo, Dellapé et al. (1993) mantuvieron el modelo original y establecieron que tanto las Formaciones Río Mendoza y Cerro de Las Cabras corresponden a la supersecuencia inferior, como depósitos controlados por subsidencia asociada al fallamiento de la etapa de rift y luego por la transición hacia la fase de hundimiento térmico. Mientras que las Formaciones Potrerillos, Cacheuta y Río Blanco pertenecen a la supersecuencia superior que representa el período póstumo de transición hacia la fase de hundimiento térmico. La fase de sag propiamente dicha estaría representada por los niveles superiores de la Formación Río Blanco. La información más recientemente publicada mantiene la división original aunque no descarta la posibilidad de la existencia de un segundo estadío de sinrift (Bellosi et aL, 2001 y Torres, 1999, entre otros). Debido a que la investigación que se presenta en este trabajo encuentra evidencias para sostener un nuevo evento extensional que justifica incluir otro estadío de sinrift, se adoptó la propuesta de Kokogian et al. (1993) y sobre la misma se basaron las correlaciones realizadas en este trabajo. La distribución de los depósitos de la fase de sinrifi I es muy irregular debido a la configuración inicial de la cuenca, caracterizada por depocentros total o parcialmente aislados. Los altos intracuencales que los dividieron funcionaron como áreas de aporte localizadas, en un ambiente dominado por facies aluviales gruesas que componen la Formación Río Mendoza y parte de la Formación Cerro de Las Cabras. Son facies marginales, representadas por abanicos aluviales dominados por flujos de barro y de detritos. Estas facies 22 Universidad de Buenos Aires se interdígitan con depósitos de flujo de agua canalizados, predominantes en la parte media de los abanicos, que pendiente abajo pasan a sistemas eflmeros (Kokogián et a1., 1993), con picos de inundaciones y de no caudal. Mientras que las porciones más distales están representadas por facies de barreal o playa (playa lake) y sedimentos de origen lacustre (Stipanícic, 1972; Kokogián et aL, 1993, 2001). La fase de sinrift II se caracteriza por ambientesfluviales de ríos entrelazados conglomerádicos que hacia los sectores más distales gradaban a ríos de baja sinuosidad con llanura de inundación bien desarrollada y fenómenos de desbordamiento (crevasse splay); se observaron además, limoarcilitas calcáreas, niveles estromatolíticos y grainstones oolítitcos con alta participación píroclástica de la llamada Brecha Verde, que corresponderían a las facies más deprimidas del sistema. Es equivalente a la Formación Potrerillos. En estos sectores se formaron cuerpos deltaicos - lacustres y lagunares que cubrieron casi totalmente la cuenca para los tiempos tardíos de la fase, dando lugar a una secuencia rica en carbón y vegetales y de coloración oscura, que es representativa de la Formación Cacheuta. La supersecuencia inferior registra una importante participación píroclástica al final de la fase de sinrift I y durante la fase ll. Fue denominada tobas con cristales y caracteriza las Formaciones Las Cabras y Potrerillos. También presenta volcanitas en forma de mantos lávicos que tradicionalmente fueron identificadas como intercalación porfirítica y que se corresponden con la Formación Las Cabras. El origen de estas secuencias estaría vinculado a la actividad del fallamiento original y directamente relacionado a los niveles superiores del Grupo Choiyoí. Supersecuencia superior La supersecuencia superior involucra a la Formación Río Blanco en probable coincidencia con el ciclo II de Strelkov y Alvarez (1984) (Cuadro 2-1). La distribución de esta unidad es más uniforme como consecuencia del relleno y colmatación de las irregularidades iniciales por los depósitos producidos en la supersecuencia inferior. Se inicia con una sedimentación restringida a los márgenes de la cuenca, caracterizada por ambientes lacustres y fluvio-deltaicos, que pasa a ser dominantemente fluvial hasta aluvial en algunos sectores, con notable traslape sobre los niveles infrayacentes de la supersecuencia inferior, lo que señala expansión de los límites cuencales y reducción del espacio de acomodación. Barreda (2004) Edad La edad estimada para los términos inferiores de las sedimentítas triásicas indica coetaneidad con parte del complejo volcánico del Grupo Choiyoi (Figura 2-3). En cordillera Frontal se fecharon edades para este grupo comprendidas entre los 230-235 Ma (Stipanicic, 2002, pag. 8), mientras que en Precordillera se obtuvieron valores entre 240-255 Ma (Stipanicic, 2002, pag. 8). Más puntualmente, la Formación Horcajo, unidad cuspidal del grupo, arrojó una edad eotriásica tardía - mesotriásica temprana (Perez y Ramos, 1996), de manera que muy probablemente el relleno triásico comience en el Anísiano alto - Ladiniano. Sin embargo, las dataciones radimétrícas realizadas por Massabie (1986) y Ramos y Kay (1991) para los basaltos de Paramillos de Uspallata, arrojaron una edad de aproximadamente 240 - 235 i 5 Ma. La base del Grupo Uspallata fue entonces establecida en el Eotriásico alto para algunos autores como Kokogian y Mancilla (1989), Kokogian et al. (1993); Spalletti (1999) y Bellosi et al. (2001). Dataciones basadas en elementos paleontológicos permitieron asignar el inicio de la sedimentación triásíca de este hemigraben en el Ladiniano (Stipanicic y Bonaparte, 1979; Stipanicic, 2002, pag. 14). En función de la fauna de tetrápodos, la Formación Río Mendoza fue inicialmente ubicada en el Escitiano alto por Bonaparte (1978) y posteriormente en el Anísiano alto por Anderson y Anderson (1993) y en el Ladiniano por Báez et aL, (1993). Stipanicic (2002, pag. 70) basándose en que esta asociación tiene carácter endémico, propuso utilizar las relaciones estratigráficas de la unidad para estimar una edad. Así, dado que yace discordantemente sobre términos del Choiyoi que alcanzan el Mesotriásico inferior e incluso el Eotriásico, esta unidad puede ser asignada al Anísiano alto y la Formación Cerro de las Cabras debería ubicarse en el Ladiniano medio. Según este mismo autor, la formación contiene microflora con afinidades con aquellas de las Formaciones Potrerillos y Cacheuta, lo que refuerza su propuesta de edad. Por otro lado, Morel y Artabe (1993) utilizando las escasas megafloras presentes sugieren una edad mesotriásica baja a alta. Las secuencias depositacionales correspondientes a las Formaciones Potrerillos y Cacheuta corresponderían al Mesotriásico superior- Neotriásico, y la Formación Río Blanco al Neotriásico (Noriano) hasta el Jurásico inferior (Hettangiano). Stipanicic (2002, pag. 292) consideró que las Formaciones Potrerillos y Cacheuta se ubicaron en el Neotriásíco y que la Formación Río Blanco llega a la parte media del Retiano. 24 Universidad de Buenos Aires Cuenca Cuyana Referencias E Piroclastitas Sedimentitas Grupo USPaHata ¡\ Intrusivo/\ ; T' Í .1/\ ' A 1/ Formacuon “1 J " _, 4 7 3'"m“ Volcanitas G u Choi oi/\ A J 7 7 ’"° y7 Figura 2-3:.Esquema representativo donde puede observarse parte del relleno tríásíco y las unidades del Grupo Choiyoi. Las edades corresponden al intrusívo de Paramíllos de Uspallata (Ramos y Kay, 1991) y a la Formación Horcajo (Perez y Ramos, 1996) 25 CAPITULO III EL HEMIGRABEN RINCÓN BLANCO Universidad de Buenos Aires Introducción Los depósitos triásicos que afloran en el sector precordillerano de la provincia de San Juan fueron incluidos en la porción septentrional de la cuenca Cuyana por Stipanicic (1979) y Strelkov y Alvarez (1984) quienes consideraron los Grupos Sorocayense, Santa Clara y Rincón Blanco como producto del relleno de depocentros aislados correspondientes a una única cuenca. En particular, el depocentro de Rincón Blanco se localiza en el extremo nor-oriental de la fosa triásica. Se trata de un sistema de hemigrábenes angostos cuyo eje mayor está orientado al NNO alcanzando una extensión de 30 km, mientras que no supera actualmente los 5 km de ancho. En sección es asimétrico, con un flanco tendido o rampa hacia el oeste y el margen activo hacia el este. La estratigrafía tradicional ha estudiado por separado los depósitos de ambos sectores de la cuenca sin relacionarlos genéticamente entre sí. Esto, de alguna manera, limitó el conocimiento de la historia del relleno y de los parámetros que condicionaron su evolución, y asimismo introdujo imprecisiones en la correlación estratigráfica. Dentro de los objetivos de este trabajo estuvieron el análisis tectosedimentario y secuencial del relleno del margen activo cuyos resultados se correlacionaron con la columna propuesta por Spalletti (2001) para el margen pasivo. De esta manera los resultados integrados posibilitaron un mejor entendimiento de la evolución de la subcuenca, al mismo tiempo que fue posible incorporarla al modelo genético propuesto por Kokogián et al. (1993, 1999) para la subcuenca Uspallata. Si bien será tratado en detalle en el capitulo VI, se presenta aquí una síntesis de la estratigrafia propuesta hasta el momento por los distintos autores que estudiaron la región comprendida entre la Sierra del Tontal y el río Los Patos. Substrato de la cuenca Las sucesiones continentales triásicas se desarrollaron sobre un basamento compuesto por sedimentos marinos ordovícicos que constituyen las Formaciones Don Polo y Alcaparrosa; sedimentos silúricos de las Formaciones Calingasta y Grauvacas La Tina; sedimentos marinos de la Formación Codo, de edad devónica y, finalmente los sedimentos del Paleozoico superior que están representados por las unidades de edad carbonífera a pénnica de las Formaciones El Ratón, El Planchón, Salto, Rinconada y Casa de Piedra (Figura 3-1). 27 Barreda (2004) Con respecto a esta última unidad, Barredo y Ottone (2003) destacaron que no es correcta la denominación de Casa de Piedra dada por Banchig et a1. (1997), ya que el nombre propuesto coincide con el de la unidad superior del Grupo Rincón Blanco definida por Borrello y Cuerda (1965), y propusieron denominarla Ciénaga Larga del Tontal. Las unidades paleozoicas mapeadas en la zona de estudiose describirán brevemente a continuación (Figura 3-1). Ordovícico Está representado por un sistema clástico de aguas profundas que evolucionó a un ambiente de talud con desarrollo de turbiditas y abanicos submarinos asociados a un margen activo (Astini, 1990, 1992). Formación Don Polo (Quartino et aL, 1971) Aflora desde la latitud de La Isla hasta la quebrada del Carrizalito y Mina del Carmen Alto al sur (Figura 3-1) aunque su base no esta expuesta. Está compuesta por esquistos leptometamórficos lustrosos, verdes y grises y grauvacas masivas gris azulado oscuro y castaño verdoso que alternan con pelitas. Esta última sucesión esta bien estratificada en bancos tabulares que alcanzan el metro de espesor. La estructuración por deformación es muy marcada y puede observarse microdiaclasamiento en las arenas y clivaje en las pelitas de orientación preferencial noreste (Beresi, 1990). Con respecto a la edad Quartino et al. (l97l) la ubicaron en el Ordovícico según su relación estratigráfica con la suprayacente Formación Alcaparrosa, dato que podría ser consistente con el hallazgo realizado por Turco Greco y Zardini (1984) correspondiente de un equinodermo en la quebrada de Carrizalito que permite descartar una edad precámbn'ca. Formación Alcaparrosa (Harrington y Leanza, 1957) Aflora en la quebrada homónima hasta la quebrada Colorada a lo largo de la margen este del río Los Patos. Más al este sus afloramientos constituyen una delgada franja que va desde el río San Juan a la altura del km ll4 hasta un poco al sur del cerro Bola, inmediatamente al norte de la zona de Rincón Blanco y también en la sierra del Tontal (Figura 3-1). Se caracteriza por una serie de grauvacas gris verdosas oscuras a negras, tabulares que alternan con pelitas de igual coloración y también conglomerados. 28 Universidad de Buenos Aires Mapa Geológico de la Región del Río Los Patos mm: cm“: Rotonqu mmm I comun:m: antemano Rm k I Depósiosaluvieiasmiwos luv-m-anu-¡m I ¡Mansmn. J Tmm, emo Bcnd °°"""""° I ] TlüsicoI emomm Hem Fal-una. . I Formado"8do Pm“ I Form-doncm Lay:duMi \ ‘t .\' 3€ 3*" [emm A» AM“ ‘-_.. "llulllp' l FortunchElPlenchon I Form-dende!RIMI'IN I Fam-donElCodo Devon“ I FormaciónPum- Negra l Form-cmthgafll ' I Macu LaTIM Silúrioo Escala:1:250000 l F do"wm l'hb .1 un" I “V”“mm” l Formado"Mm ordovuw I FormaciónDonPolo A a smummm Referencias Mm d. b. Mb. RincónBhnm Pnhrlbu - Dm doug - Deposito-de¡mn - ligamentoorúwrcleo BW noalterenchdo Figura 3-1: Mapa geológico de la región del río Los Patos y disposición de los depocentros de la subcuenca Rincón Blanco, sin detalle de la deformación cenozoica. 29 Barreda (2004) cuarcíticos claros. Las areniscas presentan estructuras de deformación como deslizamientos (slumps) e intercalaciones de calizas finas. Mantos de doleritas y basaltos con lavas almohadilladas, intercalados en la secuencia fueron descriptos por Quanino et al. (1971) sobre todo para los tramos superiores. Constituyen cuerpos extensos y ampliamente distribuidos como puede observarse en el cerro Negro de la Alumbrera, al noroeste de la quebrada Ciénaga Larga (Figura 3-1). Estos cuerpos han sido interpretados como acumulados en un talud continental y en la llanura abisal (Quartino et aL, 1971, Ramos, et aL, 1984, Kay et aL, 1984; Haller y Ramos, 1984; Kay 1993). La base de la formación se apoya mediante falla sobre la Formación Don Polo, de manera que es dificil establecer las relaciones estratigráficas entre ambas, sin embargo las características faciales indican ambientes de llanura abisal para ambas. El contenido fosilífero consiste en braquiópodos y los graptolites Retiograptus sp., Climacograptus sp. y Dicranograptus sp., que indican una edad llandeiliana tardía - caradociana inferior (Turner, 1960; Stipanicic, 1947; Pozzo, 1948 y Schauber et aL, 1987). Silúrico Esta representado por la porción superior del Grupo Ciénaga del Medio (Amos y Rolleri, 1965) compuesto por las Formaciones La Tina (Quartino et aL, 1971), Calingasta (Harrington y Leanza, 1957) y Hilario (Mésigos, 1953). Formación Calingasta (Harrington y Leanza, 1957) Aflora al este de la localidad de Calingasta desde el río San Juan hasta la pampa de Yalguaraz en la provincia de Mendoza en asomos discontinuos localizados en las cercanías de la villa La Isla, en la quebrada del Carrizalito, al none de la Ciénaga del Medio. Con arreglo estrato y granocreciente, esta unidad está compuesta por pelitas basales verde-moradas que gradualmente pasan a facies más arenosas con intercalaciones de bancos areniscosos de color gris verdosos de origen turbidítico, donde se reconocen los niveles tc, td y te del ciclo de Bouma y una estructura del tipo laminación interna ondulosa y base plana. En la base de los bancos hay marcas de con-¡entes y escasas trazas fósiles, mientras que las bioturbaciones se localizan en el tope de las facies arenosas y fundamentalmente en las pelitas (Peralta, 1990). El ambiente de sedimentación es marino y corresponde a las facies distales del Silúrico de la Precordillera Central (Peralta, 1990). Un rasgo interesante es que algunas de estas rocas 30 Universidad de Buenos Aires presentan un metamorfismo de bajo grado. En el sector de Calingasta presenta contacto tectónico con la Formación Alcaparrosa. Formación La Tina (Quartino et aL, 1971) Se desarrolla en el cerro homónimo y en las quebradas de Cepeda y Carrizalito (Figura 3-1). Comprende tres litofacies principales: areniscas grauváquicas medianas a gruesas verdes, amalgamadas con espesores cercanos a los 2 m y estructuras de base como los turboglifos y calcos de surco que indican direcciones de paleocorriente desde el WNW y NNW; areniscas medianas a finas con intercalaciones de pelitas que en conjunto fueron interpretadas como producidas por flujos gravitatorios encauzados o corn'entes de turbidez de alta densidad (Sessarego, 1988); y limolitas y arcilitas verde moradas, finamente laminadas y con estratificación ondulítica interpretadas como producto de sedimentación hemipelágica por decantación interrumpida por corrientes de turbidez que originaron los términos anteriores (Sessarego, 1988). Este último autor propone a este ambiente como correspondientes a abanicos submarinos dominados por procesos agradacionales. La edad silúrica fue propuesta por Quartino et al. (1971) en base a consideraciones exclusivamente estratigráficas y litológicas. Devónico Está conformado por la Formación Codo. Se correlaciona con facies distales de la Formación Punta Negra de la Precordillera Central de edad devónica media a superior. Formación Codo (Sessarego, 1988) Corresponde a areniscas y pelitas distribuidas rítmicamente y con arreglo granodecreciente y con típicas características turbidíticas (Gonzalez Bonorino y Middleton, 1976). Son grauvacas feldespáticas con escasos líticos con aporte del basamento consistente en cuarzo policristalino y metamorfitas de bajo grado (Baldis, 1970). Esta asociación mineralógica es idéntica a la hallada en la Formación Punta Negra, de los que se dedujo un área de aporte común para ambas ubicada en Sierras Pampeanas (Sessarego, 1988). La edad de esta unidad sería devónica media a superior, en función del contenido de palinomorfos (Sessarego, 1988) y por posición estratígráfica, debajo de la discordancia angular que la separa de la Formación El Ratón de edad carbonífera temprana. 31 Barreda (2004) Carbonífero Comprende las Formaciones El Ratón, El Planchón y Casa de Piedra. La segunda fue definida como una unidad devónica por Quartino et al. (1971) y dividida en dos miembros por Sessarego (1988), uno inferior o miembro conglomerado verde —morado y otro superior o miembro pelitas grisáceas. Sin embargo, los estudios posteriores no han podido hallar fósiles indicadores de dicha edad, excepto en rodados conteniendo fósiles devónicos lo que estaría indicando una edad más joven. Esto último se ve reforzado por las relaciones de campo dado que estaunidad descansa concordantemente sobre la Formación El Ratón de edad carbonífera y es sobrepuesta por la Formación El Salto de edad pérmica (Figura 3-1). Con respecto a la Formación Ciénaga Larga del Tontal, es importante aclarar que la primer mención respecto de la presencia de rocas carboníferas en el faldeo occidental del Tontal corresponde a Banchig et al. (1997) quienes se refirieron a ellas como Formación Casa de Piedra. Posteriormente, Barredo y Ottone (2003) propusieron una nueva denominación para la unidad, realizaron un nuevo muestreo palinológico y presentan un mapa de detalle con los limites estratigráficos y tectónicos de dicha formación. Formación El Ratón Se desarrolla en la ladera occidental de las sierras del Tontal y Tigre entre los kilómetros 113 y l 17 de la ruta nacional 20 que una la ciudad de San Juan con la localidad de Calingasta (Figura 3-1). Se trata de secuencias de conglomerados que pasan a areniscas y pelitas alcanzando una potencia máxima de 900 m (Amos y Rolleri, 1965). Corresponden a facies de abanico aluvial y ríos entrelazados con restos de plantas y palinomorfos (Sessarego, 1988). Le siguen facies dominantemente fluviales de moderada sinuosidad con extensas planicies de inundación y paleosuelos donde se registraron plantas fósiles como Frenguellia Paulophyton, de edad carbonífera inferior (Sessarego, 1988). El contenido fosilífero en general consiste en abundante megaflora como: Archaeosígíllaría conferta y Sphenopteridium sp. (Manceñido, 1973). Formación El Planchón Aflora al oeste de la sierra del Tontal en curso superior del río San Juan a lo largo de las quebradas El Salto y del Tigre y probablemente en el cerro Homito y la sierra de Cepeda (Quartino et aL, 1971). Se inicia con facies conglomerádicas verde-moradas compuestas por clastos de volcanitas básicas, areniscas y pelitas, asociadas a turbiditas (Peralta y Baldis, 32 Universidad de Buenos Aires 1990). Las areniscas presentan marcas subestratales de con-¡entes y corresponderían a facies turbidíticas con secuencias de Bouma incompletas (Peralta y Baldis, 1990). La base esta bien expuesta en la quebrada del Alumbre al sur del río San Juan; el techo se observa en la confluencia de las quebradas El Salto y del Alumbre (Figura 3-1). Formación Ciénaga Larga del Tontal (Banchig et al., 1997, enmendada por Barredo y Ottone, 2003) Aflora en el faldeo occidental de la sierra del Tontal en las proximidades del Mogote de los Potreritos, a 3.500 m sobre el nivel del mar, extendiéndose a lo largo de una franja de 9 km (véase mapa anexo) que constituye el limite oriental de los depósitos triásicos (Figura 3 1). Presenta una potencia relativa no superior a los 560 m (Barredo y Ottone 2003), ya que está limitada en el techo y la base por fallas inversas. Según Banchig et al. (1997) esta unidad se apoyaría en discordancia erosiva y angular sobre la Formación Portezuelo del Tontal (Ordovícico). Está compuesta por diamictitas de origen glacimarino, que pasan transicionalmente a facies turbídíticas dominadas por areniscas y lutitas con braquiópodos y gastrópodos marinos. La mitad inferior esta caracterizada por conglomerados clasto soportados, masivos o con entrecruzamientos en artesa en gran escala depositados como resultado de procesos de regresión marina. La sección superior presenta lentes de arena con base erosiva y niveles de coquinas y braquiópodos que pasan a arena media con ondulitas de oscilación y corriente. Este conjunto alterna con pelitas masivas y verdosas con fragmentos de braquiópodos (Lech et aL, 1998). La secuencia descripta fue interpretada como de plataforma marina somera y de pendiente suave. La secuencia culmina con calizas de grano fino con estromatolitos asociadas a arenas y pelitas y, niveles de areniscas cuarzosas y lutitas dominantes, que representan ciclos somerizantes dentro de un ambiente de plataforma (Banchig et aL, 1997). Pérmico Al norte del área de estudio y en la quebrada homónima aflora la Formación El Salto con lo que remata la secuencia paleozoica de la región. Inicialmente a toda la secuencia aflorante de este sector se le asignó una edad pérmica (Manceñido, 1973), sin embargo se pudo comprobar que gran parte de la misma es de edad más joven, probablemente triásica (Barredo et aL, 2002) 33 Barreda (2004) Formación El Salto (Quartino et aL, 1971) Esta denominación ha sido posteriormente modificada por Barredo et a1. (2002) como Formación El Salto. Aflora a la altura del km ll4 de la ruta 20, en la quebrada El Salto y también al norte del río San Juan alcanzando (Figura 3-1) 1.258 m de espesor (Barredo et aL, 2002). Se apoya en suave discordancia angular sobre sedimentitas de la Formación El Planchón (Devónico?), el techo está truncado por el corrimiento Tontal Oeste. La secuencia comprende cinco miembros que de abajo a arriba serían: miembro de areniscas y pelitas multicolores, miembro de areniscas y sabulitas amarillentas, miembro del conglomerado morado, miembro de areniscas pardo verdosas y miembro conglomerádico pardo rojizo (Manceñido, 1973). Los tres miembros inferiores representan un ambiente marino y litoral con espiriféridos, gasterópodos, bivalvos y braquiópodos inarticulados (Manceñido, 1973). La edad de este tramo de la columna ha sido estimada por este autor como pérmica temprana en función del hallazgo de Cancrínella aff. farleyensís, aunque Lech (1995) sugiere que los términos basales de esta unidad podrían ser de edad carbonífera tardía tardía. Cabe mencionar que en su descripción original, Manceñido (1973) consideró como base del conjunto a una diamictita que posteriormente Sessarego (1984) incluyo dentro de la Formación El Planchón de edad carbonífera. El resto de la columna alcanza 645 m y corresponde a un ambiente continental compuesto, de bajo hacia arriba, por 40 m de conglomerados rojos, clastosostenido, masivos y mal seleccionados, compuestos por individuos subangulosos de metacuarcitas verdes, rocas básicas, calizas, cuarzo y esquistos. Siguen en contacto neto areniscas verdes con delgados niveles de conglomerados y finalmente 550 m de conglomerados, areniscas y tobas con pelitas subordinadas de coloración general rojiza. La base del conglomerado morado se ha interpretado como una discordancia que marca el inicio de los depósitos de sinrift del Triásico (Barredo et aL, 2002). Los depósitos triásicos de la subcuenca de Rincón Blanco En la región conocida como valle del Río Los Patos, entre el faldeo oriental de la Cordillera Frontal y el faldeo occidental de la sierra del Tonta] y al norte del río San Juan se encuentran los afloramientos de rocas triásicas que constituyen la porción norte de la cuenca Cuyana (Kokogián et aL, 1993; López Gamundí, 1994; Barredo y Ramos, 1997). Constituyen un único hemigraben, denominado en este trabajo hemigraben Rincón Blanco, de 34 Universidad de Buenos Aires configuración compleja y asimétrica, con su rampa ubicada hacia el oeste y el margen activo y sector más profundo hacia el este (López Gamundí, 1994; Barredo y Ramos, 1997). Presenta la misma polaridad que el depocentro Santa Clara ubicado al sur, mientras que se dispone diametralmente opuesto al hemigraben mendocino (subcuenca Uspallata). Las exposiciones más importantes se encuentran el este de las localidades de Barreal y Calingasta, en las quebradas mayores que drenan hacia el valle del río Los Patos, y al norte del río San Juan en la quebrada del Tigre y en el cerro Puntudo (Figura 3-1). Hilario, Sorocayensey Barreal En estas localidades las sucesiones triásicas, reunidas en el Grupo Sorocayense por Stipanicic (1979) representan facies proximales de la cuenca desarrolladas en la rampa del sistema de hemigraben (Figura 3-2). Los afloramientos del Grupo Rincón Blanco, ubicados al este de los anteriores, corresponden a la parte principal de la cuenca, mucho más completa y con una potencia mayor, cuya evolución estaría controlada por la falla maestra (masterfault) del sistema. Los asomos localizados al norte del río San Juan, definidos como Grupo Uspallata por Sessarego (1986), señalan ambientes marginales de la cuenca que pueden ser interpretados como el cierre norte de la misma. Los trabajos más importantes de la región de estudio comprenden los estudios de Bodenbender (1902), Stappenbeck (1910), Keidel, (1925), Du Toit (1927), Keidel (1938), Heim (1945), Cuerda (en Frenguelli, 1948), Pozzo (1948), Stipanicic (1947, 1972 y 1979), Groeber y Stipanicic (1953), Bonetti (1963), Borrello y Cuerda (1965), Stipanicic y Bonetti (1969), Quartino et al. (1971), Strelkov y Alvarez (1984), Furque y Caballé (1986), Baldis et al. (1989) López Gamundí (1994) y Spalletti (1999, 2001), entre otros. Las secciones más representativas se encuentran en las quebradas de la Cortaderita, de la Tinta, Agua de los Pajaritos, Alcázar y Cepeda y fueron reunidas en el Grupo Sorocayense por Mésigos (1953). En la quebrada de la Cortaderita la sucesión está compuesta según lo propuesto por Stipanicic y Bonetti (1953) y Stipanicic (1972, 1979) por las siguientes unidades: Grupo Formación Cepeda Sorocayense Formación Cortaderita Formación Barreal Barreda (2004) Formación Barreal (Stipanicic y Bonetti en Groeber y Stipanicic, 1953) Comienza con una sucesión areno —conglomerádica que pasa a términos pelíticos hacia el tope. Los conglomerados son delgados y están compuestos por rodados de andesitas y riolitas mientras que las pelitas están compuestas por limolitas tobáceas y arcilitas bentoníticas entre las que se intercalan bancos delgados de tobas. El espesor medido está entre los 180 y los 216 m. La Formación Barreal forma parte de la secuencia depositacional I de Spalletti (2001) y representa según este autor, el relleno de la etapa de sinrift de la cuenca. Correspondería a sistemas entrelazados y lacustres intercalados que marcan momentos de bajo y alto nivel de base (Figura 3-3). Figura 3-2: Vistaal oeste de los afloramientos triásícos y su estructura compleja, en la quebrada Agua de los Pajaritos, al fondo la Cordillera Frontal. Formación Cortaderita (Stipanicic y Bonetti en Groeber y Stipanicic, 1953) Es fimdamentalmente arenosa y tobífera. En la base son comunes las arcillas bentoníticas oscuras, mientras que las limolitas, las tobas y las arenas son claras, generalmente rosadas. Hacia el tope aumenta la granulometría con participación de areniscas de grano más grueso, muchas veces tobáceas, y conglomerados de coloración más oscura. El contacto basal es discordante y su espesor varía de 197 a 216 m (Stipanicic, 1983). Sólo la sección inferior, compuesta por pelitas negras lacustres, fue considerada como parte de la secuencia depositacional I por Spalletti (2001) (Figura 3-3). Esta secuencia correspondería a un momento de alto nivel de base genéticamente relacionado a la infrayacente Formación Barreal. Los bancos arenosos y tobáceos de ambientes fluviales representan un momento de caída del nivel de base cuencal, que el autor incluyó a la secuencia depositacional II (sag). Basándose en datos florísticos, Artabe et al. (1995) señalaron la presencia de una discordancia entre ambos paquetes que marcaría un hiatus de 9 Ma. Universidad de Buenos Aires En el capitulo VII, se realiza un análisis mas detallado de la presencia de esta discordancia dado que ha sido cuestionada por otros autores como Stipanicic (2002, pag.106). Fm Sentencia Deposltadond Cepeda l" Reactivación = Tectórica Fm _ Secuencia 00mm Deposttadond Fm superior II Hlaflo Dlscordmda regional] —_ Reactivación Tectonlca Fm Fm Cortaderíta E Alcáza' infedor superior Semencia Fm Depos'tadonal IEl Alcázar Fm Inferior Barre“ Fm AgJa de Los Pq'an'tos _ Si! seed. Figura 3-3: Esquema de correlación estraligrájica secuencial propuesto por Spalletti (200!) para las secciones de Hilario y Barreal, provincia de San Juan. Formación Cepeda (Stipanicic y Bonetti en Groeber y Stipanicic, 1953) Comienza con un conglomerado compuesto por rodados andesíticos de color rojo oscuro que hacia el tope es reemplazado por areniscas rojas y limoarcillas tobíferas celeste verdosas. El contacto con la infrayacente Formación Cortaderíta es netamente erosivo. El espesor total supera los 240 m. Esta unidad fue incluida en la secuencia depositacional III por Spalletti (2001) quien considera que la discordancia basal es de origen tectónico (Figura 3-3). Así, propuso que una Barreda (2004) vez alcanzado el estadío de sag se produjo una reactivación oblicua o transcurrente de los sistemas de fallas pasando a un estadío transtensional, al mismo tiempo que se registra un marcado cambio climático regional responsable de la generación de los bancos rojos (Spalletti, 1999). En la zona de la quebrada Agua de los Pajaritos y El Alcázar la sucesión está compuesta por: Grupo Formación Hilario Sorocayense Formación El Alcázar Formación Agua de los Pajaritos Formación Agua de los Pajaritos (Stipanicic y Bonetti en Groeber y Stipanicic, 1953) Predominan los términos psamíticos gruesos y psefiticos con clastos riolíticos y de tobas ácidas. Se inicia con algunos niveles de conglomerados verdes y gris verdosos compuestos por clastos subangulosos, muchas veces imbricados. Los clastos proceden de rocas del basamento correspondientes a esquistos, grauvacas, cuarcitas y diabasas; se estima que el aporte era del este. Siguen sabulitas y areniscas gruesas, de colores gris amarillento o verdoso, areniscas generalmente de color marrón, con arreglo granocreciente, y finalmente lutitas y tobas blancas. Estas últimas pasan lateralmente a areniscas y conglomerados y verticalmente a tobas silíceas (Treo et aL, 1985). Las tobas contienen restos vegetales y limos tobíferos de colores claros. Se estima un espesor aproximado de 250 m. En los niveles inferiores se ha descripto la presencia de un manto de basalto de hasta 3 m de espesor y de disposición concordante con la estratificación (Treo et aL, 1985). El contacto basal es erosivo con las Formaciones Alcaparrosa, Calingasta y Don Polo. Sin embargo, también existen sectores con marcado control estructural, como en la quebrada de El Alcázar y Agua de los Pajaritos, donde las Formaciones Don Polo y Calingasta están en contacto con esta formación a través de un sobrecorrimiento de bajo ángulo. Según el esquema estratigráfico secuencial de Spalletti (2001) esta unidad correspondería a la Secuencia Depositacional I y correspondería al relleno de sinrift de la cuenca (Figura 3-3). 38 Formación El Alcázar (Stipanicic, 1979) Está compuesta por tobas limosas y arenosas claras que alternan con lutitas tobíferas de colores más oscuros y abigarrados, tufitas arenosas y conglomerádicas y tobas de caída. En el techo dominan las areniscas y tobas de colores rosados. Los bancos bentoníticos son abundantes sobre todo en los tramos medio y superior de la columna. El registro florístico de esta unidad es uno de los más importantes de toda la secuencia y se caracteriza por la presencia de flora de Dicroidium, equisetales y corytospermales (Zamuner et aL, 1995). Apoya concordantemente sobre la Formación Agua de los Pajaritos (Groeber y Stipanicic, 1953). Se estima un espesor total para la Formación el Alcázar de 400 m. Coladas de basaltos alcalinos concordantes con la sedimentación de esta unidad fueron descriptas por Mendoza y Moreiras (1997) y Rossa y Mendoza (1999) en la quebrada Colón. Se trata de cuerpos porfiricos de color gris oscuro con fenocristales félsicos de feldespatos. Estos autores describieron estructuras de almohadillas en la base de los cuerpos, mientras que las porciones superiores presentan estructuras vesiculares. Se reconocen cuatro miembros en orden ascendente: Miembro chonítico: Son piroclastitas muy finas de color blanco tiza, presenta laminación en capas que no superan el orden del milímetro de espesor, friables y poco compactas, con niveles bituminosos en las porciones superiores donde también se observa
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