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Fertilización de quinua

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Introducción
Con la finalidad de plasmar en un documento técnico las expe-
riencias de la producción de quinua, realizados por CARE-PERÚ y 
la Universidad Nacional de san Cristóbal de Huamanga (UNSCH), 
en el corredor económico Ayacucho, se ha elaborado el presente 
manual, que incorpora el trabajo de investigación de Hiladio Hua-
mán Palomino, desarrollado en la localidad de Pucuchuillca, dis-
trito de Acocro, Provincia de Huamanga; complementado con 
resultados de trabajos desarrollados por docentes de la Facultad 
de Ciencias Agrarias de UNSCH.
Este Manual de Nutrición y Fertilización se basa en los resultados 
de ensayos sobre el uso de abonos tanto de origen orgánico (gua-
no de islas, gallinaza, estiércol de ovino) como sintético (fertili-
zantes comerciales), en el cultivo de quinua, en parcelas de agri-
cultores del distrito de Acocro, y en las localidades de Manallasaq 
(Chiara), y Canaán Bajo (Ayacucho)
El Manual dirigido a profesionales, técnicos de campo y provee-
dores de asistencia técnica (PATS), está organizado por capítulos, 
los que están referidos a aspectos fisiológicos generales del culti-
vo, a la nutrición de las plantas de quinua; al uso de enmiendas y 
abonos, a la eficiencia de uso de fertilizantes por el cultivo de qui-
nua, de los nutrientes, aportados por los abonos.
Por la importancia económica del cultivo de quinua en la región 
Ayacucho, consideramos que el presente documento será de 
mucha utilidad para organizaciones empresariales empeñadas 
en producir y manejar técnica y competitivamente este cultivo.
. Uno de los propósitos cen-
trales de este manual es proponer alternativas que permitan opti-
mizar el uso de abonos orgánicos en un contexto creciente y 
demandante de quinua orgánica para exportación y en la necesi-
dad de lograr productos altamente nutritivos e inocuos para la ali-
mentación humana. 
INTRODUCCIÓN 03
FISIOLOGÍA DE LA QUINUA 04
- Factores ambientales que controlan la producción de quinua 04
- Acumulación de materia seca en la quinua 05
- Equilibrio fisiológico del cultivo de quinua 06
NUTRICIÓN MINERAL DE LA QUINUA 07
- Función de los nutrientes en las plantas 07
- Síntomas de deficiencia de nutrientes en la quinua 08
- Ritmo de absorción de macronutrientes 10
- Contenido de nutrientes en diferentes partes de la planta 11
ACIDEZ Y ENCALADO DE SUELOS PARA LA QUINUA 12
- Naturaleza de la acidez del suelo 12
- Encalado de suelos para el cultivo de quinua 12
FERTILIZACIÓN DE LA QUINUA 14
- Análisis químico de la fertilidad de suelos 14
- Interpretación de los análisis de suelos 15
- Respuesta de la quinua a la aplicación de fertilizantes 15
- Requerimiento de nutrientes para máximo rendimiento de quinua 17
- Eficiencia de uso de fertilizantes sintéticos 18
- Uso de abonos orgánicos 20
ANEXOS 21
CAPITULO I 04
CAPITULO II 07
CAPITULO III 12
CAPITULO IV 14
Contenido
Introducción
Con la finalidad de plasmar en un documento técnico las expe-
riencias de la producción de quinua, realizados por CARE-PERÚ y 
la Universidad Nacional de san Cristóbal de Huamanga (UNSCH), 
en el corredor económico Ayacucho, se ha elaborado el presente 
manual, que incorpora el trabajo de investigación de Hiladio Hua-
mán Palomino, desarrollado en la localidad de Pucuchuillca, dis-
trito de Acocro, Provincia de Huamanga; complementado con 
resultados de trabajos desarrollados por docentes de la Facultad 
de Ciencias Agrarias de UNSCH.
Este Manual de Nutrición y Fertilización se basa en los resultados 
de ensayos sobre el uso de abonos tanto de origen orgánico (gua-
no de islas, gallinaza, estiércol de ovino) como sintético (fertili-
zantes comerciales), en el cultivo de quinua, en parcelas de agri-
cultores del distrito de Acocro, y en las localidades de Manallasaq 
(Chiara), y Canaán Bajo (Ayacucho)
El Manual dirigido a profesionales, técnicos de campo y provee-
dores de asistencia técnica (PATS), está organizado por capítulos, 
los que están referidos a aspectos fisiológicos generales del culti-
vo, a la nutrición de las plantas de quinua; al uso de enmiendas y 
abonos, a la eficiencia de uso de fertilizantes por el cultivo de qui-
nua, de los nutrientes, aportados por los abonos.
Por la importancia económica del cultivo de quinua en la región 
Ayacucho, consideramos que el presente documento será de 
mucha utilidad para organizaciones empresariales empeñadas 
en producir y manejar técnica y competitivamente este cultivo.
. Uno de los propósitos cen-
trales de este manual es proponer alternativas que permitan opti-
mizar el uso de abonos orgánicos en un contexto creciente y 
demandante de quinua orgánica para exportación y en la necesi-
dad de lograr productos altamente nutritivos e inocuos para la ali-
mentación humana. 
INTRODUCCIÓN 03
FISIOLOGÍA DE LA QUINUA 04
- Factores ambientales que controlan la producción de quinua 04
- Acumulación de materia seca en la quinua 05
- Equilibrio fisiológico del cultivo de quinua 06
NUTRICIÓN MINERAL DE LA QUINUA 07
- Función de los nutrientes en las plantas 07
- Síntomas de deficiencia de nutrientes en la quinua 08
- Ritmo de absorción de macronutrientes 10
- Contenido de nutrientes en diferentes partes de la planta 11
ACIDEZ Y ENCALADO DE SUELOS PARA LA QUINUA 12
- Naturaleza de la acidez del suelo 12
- Encalado de suelos para el cultivo de quinua 12
FERTILIZACIÓN DE LA QUINUA 14
- Análisis químico de la fertilidad de suelos 14
- Interpretación de los análisis de suelos 15
- Respuesta de la quinua a la aplicación de fertilizantes 15
- Requerimiento de nutrientes para máximo rendimiento de quinua 17
- Eficiencia de uso de fertilizantes sintéticos 18
- Uso de abonos orgánicos 20
ANEXOS 21
CAPITULO I 04
CAPITULO II 07
CAPITULO III 12
CAPITULO IV 14
Contenido
polen). Una temperatura media anual 
de 10-18 °C y oscilación térmica de 5 a 
7 °C son los mas adecuados para el cul-
tivo.
 Puede crecer en una amplia 
variedad de suelos cuyo pH varíe de 6 
Suelo.
El incremento de materia seca en las 
panojas es significativo a partir de los 
84 días, acentuándose más desde los 
105 días después de la siembra; repre-
Acumulación de materia seca en la quinua
a 8,5. Prefiere los franco-arenosos con 
buen drenaje, ricos en nutrientes espe-
cialmente nitrógeno. Es susceptible al 
exceso de humedad en sus primeros 
estadios. Se ha observado produccio-
nes aceptables en suelos arenosos con 
déficit de humedad (Mujica, 1993).
Figura 1. Distribución de materia seca en la planta de quinua. 
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
100%
42 56 70 84 98 112 126 140 154
Días después de la siembra
P
e
so
 s
e
co
 p
o
rc
e
n
ta
je
 (
%
)
PANOJAS
HOJAS
TALLOS
RAICES
5
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
sentando al final hasta el 40% de toda 
la planta. Por la caída de las hojas, en la 
cosecha, no queda nada de ellas (figu-
ra 1).
C
A
P
IT
U
L
O
 I
FISIOLOGÍA DE LA QUINUA
El crecimiento y desarrollo de la qui-
nua está determinado por la genética 
de la planta, por las condiciones 
ambientales a las que está expuesta, y 
por factores bióticos (plagas, enferme-
dades y plantas extrañas que compi-
ten con el cultivo). Tres de los factores 
ambientales más importantes son la 
radiación solar, la temperatura y la 
humedad del suelo.
Factores ambientales que influyen en la producción
de quinua
insensibilidad a las condiciones de luz 
para su desarrollo en Chile (Mujica, 
1993).
 Requiere de 300 a 1000 
mm de agua durante su periodo vege-
tativo. En general crece bien con una 
buena distribución de lluvias durante 
su crecimiento y desarrollo, y condi-
ciones de sequedad, especialmente 
durante la maduración y cosecha (Mu-
jica, 1993).
 Crece desde el nivel del mar en 
Perú hasta los 4000 m de altura en los 
andes de sur. Pero la mayor predomi-
nancia de los campos de cultivo está 
entre los 2500 y 4000 m de altura (Mu-
jica, 1993).
 Tolera una amplia varie-
dad de climas. La planta no se ve afec-
tada por climas fríos en cualquier eta-
pa dedesarrollo, excepto durante la 
floración. Las flores de la planta son 
sensibles al frío (esterilización del 
Precipitación.
Altitud.
Temperatura.
Radiación solar. La quinua, muestra 
una amplia adaptación a diferentes 
fotoperiodos, desde días cortos para 
su florecimiento, que se da en zonas 
cercanas a la línea ecuatorial, hasta la 
4
polen). Una temperatura media anual 
de 10-18 °C y oscilación térmica de 5 a 
7 °C son los mas adecuados para el cul-
tivo.
 Puede crecer en una amplia 
variedad de suelos cuyo pH varíe de 6 
Suelo.
El incremento de materia seca en las 
panojas es significativo a partir de los 
84 días, acentuándose más desde los 
105 días después de la siembra; repre-
Acumulación de materia seca en la quinua
a 8,5. Prefiere los franco-arenosos con 
buen drenaje, ricos en nutrientes espe-
cialmente nitrógeno. Es susceptible al 
exceso de humedad en sus primeros 
estadios. Se ha observado produccio-
nes aceptables en suelos arenosos con 
déficit de humedad (Mujica, 1993).
Figura 1. Distribución de materia seca en la planta de quinua. 
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
100%
42 56 70 84 98 112 126 140 154
Días después de la siembra
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ta
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 (
%
)
PANOJAS
HOJAS
TALLOS
RAICES
5
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
sentando al final hasta el 40% de toda 
la planta. Por la caída de las hojas, en la 
cosecha, no queda nada de ellas (figu-
ra 1).
C
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 I
FISIOLOGÍA DE LA QUINUA
El crecimiento y desarrollo de la qui-
nua está determinado por la genética 
de la planta, por las condiciones 
ambientales a las que está expuesta, y 
por factores bióticos (plagas, enferme-
dades y plantas extrañas que compi-
ten con el cultivo). Tres de los factores 
ambientales más importantes son la 
radiación solar, la temperatura y la 
humedad del suelo.
Factores ambientales que influyen en la producción
de quinua
insensibilidad a las condiciones de luz 
para su desarrollo en Chile (Mujica, 
1993).
 Requiere de 300 a 1000 
mm de agua durante su periodo vege-
tativo. En general crece bien con una 
buena distribución de lluvias durante 
su crecimiento y desarrollo, y condi-
ciones de sequedad, especialmente 
durante la maduración y cosecha (Mu-
jica, 1993).
 Crece desde el nivel del mar en 
Perú hasta los 4000 m de altura en los 
andes de sur. Pero la mayor predomi-
nancia de los campos de cultivo está 
entre los 2500 y 4000 m de altura (Mu-
jica, 1993).
 Tolera una amplia varie-
dad de climas. La planta no se ve afec-
tada por climas fríos en cualquier eta-
pa de desarrollo, excepto durante la 
floración. Las flores de la planta son 
sensibles al frío (esterilización del 
Precipitación.
Altitud.
Temperatura.
Radiación solar. La quinua, muestra 
una amplia adaptación a diferentes 
fotoperiodos, desde días cortos para 
su florecimiento, que se da en zonas 
cercanas a la línea ecuatorial, hasta la 
4
7
C
A
P
IT
U
L
O
 I
I
NUTRICIÓN MINERAL DE LA QUINUA
Función de los nutrientes en las plantas
Dieciséis elementos son esenciales 
para el crecimiento de la mayoría de 
plantas y éstos provienen del aire y del 
suelo circundante. En el suelo, el 
medio de transporte es la solución del 
suelo. El carbono (C) como CO , es 2
tomado del aire; el hidrógeno (H) y oxí-
geno (O) del agua. Del suelo – la qui-
nua obtiene el nitrógeno (N), fósforo 
(P), potasio (K), calcio (Ca), magnesio 
(Mg), azufre (S), hierro (Fe), mangane-
so (Mn), zinc (Zn), cobre (Cu), boro (B), 
molibdeno (Mo) y cloro (Cl). La com-
posición de macronutrientes, en base 
seca, en la quinua (figura 3) es: 2.7% 
de N, 0.4% de P, 1.5% de K, 0.3% de S, 
2.0% de Ca y 0.2% de Mg (Mateu, 
2005); sus funciones más importantes 
son las siguientes:
P, 0.4 K, 1.5
S, 0.3
Ca, 2
Mg, 0.2
N, 2.7
 Figura 3. Contenido de nutrientes (base
 seca) en la planta de quinua.
El Nitrógeno (N).-
El Fósforo (P).-
 Es el motor del cre-
cimiento de la planta. Suple de 1 a 4 
por ciento del extracto seco de la plan-
ta; es absorbido del suelo bajo forma 
de nitrato (NO -) o de amonio (NH +). 3 4
En la planta se combina con compo-
nentes producidos por el metabolis-
mo de carbohidratos para formar ami-
noácidos y proteínas. Siendo el consti-
tuyente esencial de las proteínas, está 
involucrado en todos los procesos prin-
cipales de desarrollo de las plantas.
 Suple de 0,1 a 0,4 por 
ciento del extracto seco de la planta; 
es absorbido del suelo como iones 
H PO - y HPO =. Juega un papel impor-2 4 4
tante en la transferencia de energía. 
Por eso es esencial para la fotosíntesis 
y para otros procesos químico-
fisiológicos. Es indispensable para la 
diferenciación celular y para el desa-
rrollo de los tejidos, que forman los 
puntos de crecimiento de la planta. El 
fósforo es deficiente en la mayoría de 
los suelos.
6
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Las comparaciones entre los estados nutricionales de las plantas sometidas a con-
diciones de fertilidad del suelo diferentes, se hacen en base a dos valores: la ali-
mentación global que es la suma de los tenores porcentuales de N, P O y K O; las 2 5 2
relaciones fisiológicas, que son la fracción del total de N-P O -K O, llevada a por-2 5 2
centaje. El equilibrio fisiológico es el promedio de las relaciones fisiológicas, 
correspondiente a muestreos en diferentes condiciones.
Equilibrio fisiológico del cultivo de quinua
Mateu (2005), para condiciones de 
Canaán (2750 msnm), determinó un 
equilibrio fisiológico de 50-16-34 (N-
P O -K O) para la quinua Blanca de 2 5 2
Junín (figura 2); en condiciones de Aco-
cro (3500 msnm), Mejía (2010), repor-
ta un equilibrio fisiológico en el rango 
de 43-44 de N, 12-13% de P O y 44% 2 5
de K O, respectivamente, para la mis-2
ma variedad, considerando sólo el aná-
lisis del grano.
100 0
100
0
0
100
FÓSFORO
N
ITRÓ
G
EN
OP
O
TA
SI
O
34
50
16
Figura 2. Equilibrio fisiológico para el 
 cultivo de quinua.
7
C
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 I
I
NUTRICIÓN MINERAL DE LA QUINUA
Función de los nutrientes en las plantas
Dieciséis elementos son esenciales 
para el crecimiento de la mayoría de 
plantas y éstos provienen del aire y del 
suelo circundante. En el suelo, el 
medio de transporte es la solución del 
suelo. El carbono (C) como CO , es 2
tomado del aire; el hidrógeno (H) y oxí-
geno (O) del agua. Del suelo – la qui-
nua obtiene el nitrógeno (N), fósforo 
(P), potasio (K), calcio (Ca), magnesio 
(Mg), azufre (S), hierro (Fe), mangane-
so (Mn), zinc (Zn), cobre (Cu), boro (B), 
molibdeno (Mo) y cloro (Cl). La com-
posición de macronutrientes, en base 
seca, en la quinua (figura 3) es: 2.7% 
de N, 0.4% de P, 1.5% de K, 0.3% de S, 
2.0% de Ca y 0.2% de Mg (Mateu, 
2005); sus funciones más importantes 
son las siguientes:
P, 0.4 K, 1.5
S, 0.3
Ca, 2
Mg, 0.2
N, 2.7
 Figura 3. Contenido de nutrientes (base
 seca) en la planta de quinua.
El Nitrógeno (N).-
El Fósforo (P).-
 Es el motor del cre-
cimiento de la planta. Suple de 1 a 4 
por ciento del extracto seco de la plan-
ta; es absorbido del suelo bajo forma 
de nitrato (NO -) o de amonio (NH +). 3 4
En la planta se combina con compo-
nentes producidos por el metabolis-
mo de carbohidratos para formar ami-
noácidos y proteínas. Siendo el consti-
tuyente esencial de las proteínas, está 
involucrado en todos los procesos prin-
cipales de desarrollo de las plantas.
 Suple de 0,1 a 0,4 por 
ciento del extracto seco de la planta; 
es absorbido del suelo como iones 
H PO - y HPO =. Juega un papel impor-2 4 4
tante en la transferencia de energía. 
Por eso es esencial para la fotosíntesis 
y para otros procesos químico-
fisiológicos. Es indispensable para la 
diferenciación celular y para el desa-
rrollo de los tejidos, que forman los 
puntos de crecimiento de la planta. El 
fósforo es deficiente en la mayoría de 
los suelos.
6
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Las comparaciones entre los estados nutricionales de lasplantas sometidas a con-
diciones de fertilidad del suelo diferentes, se hacen en base a dos valores: la ali-
mentación global que es la suma de los tenores porcentuales de N, P O y K O; las 2 5 2
relaciones fisiológicas, que son la fracción del total de N-P O -K O, llevada a por-2 5 2
centaje. El equilibrio fisiológico es el promedio de las relaciones fisiológicas, 
correspondiente a muestreos en diferentes condiciones.
Equilibrio fisiológico del cultivo de quinua
Mateu (2005), para condiciones de 
Canaán (2750 msnm), determinó un 
equilibrio fisiológico de 50-16-34 (N-
P O -K O) para la quinua Blanca de 2 5 2
Junín (figura 2); en condiciones de Aco-
cro (3500 msnm), Mejía (2010), repor-
ta un equilibrio fisiológico en el rango 
de 43-44 de N, 12-13% de P O y 44% 2 5
de K O, respectivamente, para la mis-2
ma variedad, considerando sólo el aná-
lisis del grano.
100 0
100
0
0
100
FÓSFORO
N
ITRÓ
G
EN
OP
O
TA
SI
O
34
50
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Figura 2. Equilibrio fisiológico para el 
 cultivo de quinua.
9
Deficiencia de nitrógeno.-
Deficiencia de fósforo.-
Deficiencia de potasio.-
 Plantas de 
crecimiento retrasado, plantas poco 
saludables y pequeñas; Clorosis gene-
ralizada; las hojas más viejas de la plan-
ta son las primeras en presentar los sín-
tomas, puesto que el N se transloca de 
las hojas maduras a las hojas jóvenes.
 Crecimiento 
retrasado; hojas verde oscuras azula-
das, moradas y parduscas (a menudo 
también en los tallos); plantas lentas a 
madurar, permaneciendo verdes; 
desarrollo de raíces muy deficiente; 
los granos pobremente rellenos.
 Crecimiento 
retrasado; hojas que muestran deco-
loración a lo largo de los márgenes 
exteriores; la planta se torna débil, sus-
ceptible al encamado; poca resisten-
cia a condiciones de estrés como las 
heladas y la sequía; los frutos son 
pequeños.
 Decolora-
ción amarillenta entre venas de hojas 
verdes (clorosis típica de franjas; el Mg 
es parte de la clorofila, necesario para 
la fotosíntesis), seguido por manchas y 
necrosis (muerte de los tejidos), 
comenzando en las viejas hojas bajas.
 Toda la planta 
es amarilla (a menudo es confundido 
con deficiencia de N); hojas más altas 
amarillentas, aún las hojas más jóve-
nes; madurez del cultivo retrasado.
 Hojas jóvenes 
de amarillentas a ennegrecidas y cur-
vadas (manchas marrones); las plan-
tas parecen marchitas; las raíces son 
mal formadas.
Deficiencia de magnesio.-
Deficiencia de azufre.-
Deficiencia de calcio.-
La importancia de la fertilización equilibrada
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
El Nitrógeno, «motor del crecimien-
to de la planta», normalmente mos-
trará su eficiencia poco después de 
su aplicación: las plantas desarrolla-
rán un color verde oscuro y crecerán 
más vigorosamente. Sin embargo, el 
nitrógeno excesivo, desequilibrado 
puede resultar en vuelco, mayor 
competencia de malas hierbas y ata-
ques de plagas, con pérdidas sustan-
ciales de producción del cultivo. Ade-
más, el nitrógeno no absorbido por 
el cultivo se pierde en el ambiente.
8
El Potasio (K).- 
El Azufre (S).- 
El Calcio (Ca).-
Suple del 1 al 4 por cien-
to del extracto seco de la planta, es 
+
absorbido del suelo como ion K , tiene 
muchas funciones. Activa más de 60 
enzimas; por ello juega un papel vital 
en la síntesis de carbohidratos y de pro-
teínas. El K mejora el régimen hídrico 
de la planta y aumenta su tolerancia a 
la sequía, heladas y salinidad. Las plan-
tas bien provistas con K sufren menos 
de enfermedades.
Suple del 0,2 al 0,3 % del 
extracto seco de la planta; es un cons-
tituyente esencial de proteínas y tam-
bién está involucrado en la formación 
de la clorofila.
 Es esencial para el cre-
cimiento de las raíces y como un cons-
tituyente del tejido celular de las mem-
branas. La mayoría de los suelos con-
tienen suficiente Ca disponible para 
las plantas; sin embargo la deficiencia 
puede darse en suelos de puna muy 
pobres en Ca. El objetivo de la aplica-
ción de Ca es usualmente el del enca-
lado.
 Es el constituyen-
te central de la clorofila; por ello, del 
15 al 20 % del magnesio contenido en 
la planta se encuentra en las partes ver-
des. El Mg se incluye también en las 
reacciones enzimáticas relacionadas a 
la transferencia de energía de la plan-
ta.
 Hierro, cobre, 
zinc, cloro, boro, molibdeno y manga-
neso, son parte de sustancias claves en 
el crecimiento de la planta; son com-
parables con las vitaminas en la nutri-
ción humana. Son absorbidos en can-
tidades minúsculas, y su disponibili-
dad en las plantas depende principal-
mente de la reacción del suelo.
El Magnesio (Mg).-
Los micronutrientes.-
Los síntomas de carencia 
se muestran en la aparien-
cia general así como en el 
color de la planta. Los sig-
nos de deficiencia general 
para algunos cultivos son 
especificados a continua-
ción.
Síntomas de carencia en las plantas
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
9
Deficiencia de nitrógeno.-
Deficiencia de fósforo.-
Deficiencia de potasio.-
 Plantas de 
crecimiento retrasado, plantas poco 
saludables y pequeñas; Clorosis gene-
ralizada; las hojas más viejas de la plan-
ta son las primeras en presentar los sín-
tomas, puesto que el N se transloca de 
las hojas maduras a las hojas jóvenes.
 Crecimiento 
retrasado; hojas verde oscuras azula-
das, moradas y parduscas (a menudo 
también en los tallos); plantas lentas a 
madurar, permaneciendo verdes; 
desarrollo de raíces muy deficiente; 
los granos pobremente rellenos.
 Crecimiento 
retrasado; hojas que muestran deco-
loración a lo largo de los márgenes 
exteriores; la planta se torna débil, sus-
ceptible al encamado; poca resisten-
cia a condiciones de estrés como las 
heladas y la sequía; los frutos son 
pequeños.
 Decolora-
ción amarillenta entre venas de hojas 
verdes (clorosis típica de franjas; el Mg 
es parte de la clorofila, necesario para 
la fotosíntesis), seguido por manchas y 
necrosis (muerte de los tejidos), 
comenzando en las viejas hojas bajas.
 Toda la planta 
es amarilla (a menudo es confundido 
con deficiencia de N); hojas más altas 
amarillentas, aún las hojas más jóve-
nes; madurez del cultivo retrasado.
 Hojas jóvenes 
de amarillentas a ennegrecidas y cur-
vadas (manchas marrones); las plan-
tas parecen marchitas; las raíces son 
mal formadas.
Deficiencia de magnesio.-
Deficiencia de azufre.-
Deficiencia de calcio.-
La importancia de la fertilización equilibrada
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
El Nitrógeno, «motor del crecimien-
to de la planta», normalmente mos-
trará su eficiencia poco después de 
su aplicación: las plantas desarrolla-
rán un color verde oscuro y crecerán 
más vigorosamente. Sin embargo, el 
nitrógeno excesivo, desequilibrado 
puede resultar en vuelco, mayor 
competencia de malas hierbas y ata-
ques de plagas, con pérdidas sustan-
ciales de producción del cultivo. Ade-
más, el nitrógeno no absorbido por 
el cultivo se pierde en el ambiente.
8
El Potasio (K).- 
El Azufre (S).- 
El Calcio (Ca).-
Suple del 1 al 4 por cien-
to del extracto seco de la planta, es 
+
absorbido del suelo como ion K , tiene 
muchas funciones. Activa más de 60 
enzimas; por ello juega un papel vital 
en la síntesis de carbohidratos y de pro-
teínas. El K mejora el régimen hídrico 
de la planta y aumenta su tolerancia a 
la sequía, heladas y salinidad. Las plan-
tas bien provistas con K sufren menos 
de enfermedades.
Suple del 0,2 al 0,3 % del 
extracto seco de la planta; es un cons-
tituyente esencial de proteínas y tam-
bién está involucrado en la formación 
de la clorofila.
 Es esencial para el cre-
cimiento de las raíces y como un cons-
tituyente del tejido celular de las mem-
branas. La mayoría de los suelos con-
tienen suficiente Ca disponible para 
las plantas; sin embargo la deficiencia 
puede darse en suelos de puna muy 
pobres en Ca. El objetivo de la aplica-
ción de Ca es usualmente el del enca-
lado.
 Es el constituyen-
te central de la clorofila; por ello, del 
15 al 20 % del magnesiocontenido en 
la planta se encuentra en las partes ver-
des. El Mg se incluye también en las 
reacciones enzimáticas relacionadas a 
la transferencia de energía de la plan-
ta.
 Hierro, cobre, 
zinc, cloro, boro, molibdeno y manga-
neso, son parte de sustancias claves en 
el crecimiento de la planta; son com-
parables con las vitaminas en la nutri-
ción humana. Son absorbidos en can-
tidades minúsculas, y su disponibili-
dad en las plantas depende principal-
mente de la reacción del suelo.
El Magnesio (Mg).-
Los micronutrientes.-
Los síntomas de carencia 
se muestran en la aparien-
cia general así como en el 
color de la planta. Los sig-
nos de deficiencia general 
para algunos cultivos son 
especificados a continua-
ción.
Síntomas de carencia en las plantas
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
11
Contenido de nutrientes en diferentes partes 
de la planta
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Los nutrientes dentro de la planta se distribuyen de forma desigual, siendo las 
panojas más ricas en N P, y las hojas en K. En las plantas jóvenes la composición de 
nutrientes (%) es mayor que en las viejas.
Órgano Muestra N P K S Ca
Raíz
67 dds 2.28 0.26 1.00 0.07 1.04
135 dds 1.58 0.09 1.00 0.05 0.80
Tallos
67 dds 2.98 0.37 1.45 0.21 0.80
135 dds 1.08 0.18 0.83 0.12 0.64
Hojas
67 dds 3.60 0.30 3.45 0.35 2.48
135 dds 2.28 0.26 1.63 0.44 4.08
Panoja
67 dds 4.08 0.51 1.45 0.39 1.60
135 dds 2.33 0.32 0.60 0.22 1.44
Mg
0.06
0.06
0.09
0.03
0.18
0.47
0.06
0.09
10
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Durante el periodo de crecimiento 
de la planta, hay épocas donde los 
nutrientes son absorbidos con 
mayor intensidad; esto ocurre has-
ta el segundo mes, y luego alrede-
dor de los 100 días después de la 
siembra. Estas épocas coinciden 
con las etapas de mayor desarro-
llo y de máxima acumulación de 
materia seca del cultivo.
Ritmo de absorción de macronutrientes
400
350
300
250
200
150
100
50
0
40 60 80 100 120 140 160
N
P
K
S
Ca
Mg
Figura 4. Absorción de nutrientes por la 
 planta de quinua.
En la planta, el movimiento de 
nutrientes desde las hojas y del 
tallo hacia la panoja (órgano de 
reserva), se da con mayor intensi-
dad a partir de alrededor de los 
105 días después de la siembra.
En el caso del N, el movimiento 
hacia la panoja es más intenso a 
partir de los 100 días desde las 
hojas, y a partir de los 112 días des-
de el tallo; estabilizándose este 
movimiento a partir de los 135 
días.
120
100
80
60
40
20
0
120
100
80
60
40
20
0
4040 6060 8080 100100 120120 140140 160160
RAÍCESRAÍCES TALLOSTALLOS HOJASHOJAS PANOJASPANOJAS
Figura 7. Distribución de K en la planta 
 de quinua.
11
Contenido de nutrientes en diferentes partes 
de la planta
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Los nutrientes dentro de la planta se distribuyen de forma desigual, siendo las 
panojas más ricas en N P, y las hojas en K. En las plantas jóvenes la composición de 
nutrientes (%) es mayor que en las viejas.
Órgano Muestra N P K S Ca
Raíz
67 dds 2.28 0.26 1.00 0.07 1.04
135 dds 1.58 0.09 1.00 0.05 0.80
Tallos
67 dds 2.98 0.37 1.45 0.21 0.80
135 dds 1.08 0.18 0.83 0.12 0.64
Hojas
67 dds 3.60 0.30 3.45 0.35 2.48
135 dds 2.28 0.26 1.63 0.44 4.08
Panoja
67 dds 4.08 0.51 1.45 0.39 1.60
135 dds 2.33 0.32 0.60 0.22 1.44
Mg
0.06
0.06
0.09
0.03
0.18
0.47
0.06
0.09
10
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Durante el periodo de crecimiento 
de la planta, hay épocas donde los 
nutrientes son absorbidos con 
mayor intensidad; esto ocurre has-
ta el segundo mes, y luego alrede-
dor de los 100 días después de la 
siembra. Estas épocas coinciden 
con las etapas de mayor desarro-
llo y de máxima acumulación de 
materia seca del cultivo.
Ritmo de absorción de macronutrientes
400
350
300
250
200
150
100
50
0
40 60 80 100 120 140 160
N
P
K
S
Ca
Mg
Figura 4. Absorción de nutrientes por la 
 planta de quinua.
En la planta, el movimiento de 
nutrientes desde las hojas y del 
tallo hacia la panoja (órgano de 
reserva), se da con mayor intensi-
dad a partir de alrededor de los 
105 días después de la siembra.
En el caso del N, el movimiento 
hacia la panoja es más intenso a 
partir de los 100 días desde las 
hojas, y a partir de los 112 días des-
de el tallo; estabilizándose este 
movimiento a partir de los 135 
días.
120
100
80
60
40
20
0
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100
80
60
40
20
0
4040 6060 8080 100100 120120 140140 160160
RAÍCESRAÍCES TALLOSTALLOS HOJASHOJAS PANOJASPANOJAS
Figura 7. Distribución de K en la planta 
 de quinua.
13
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
4 Las aportaciones masivas de cal 
modifican bruscamente las propie-
dades del suelo, pudiendo provocar 
efectos desfavorables, como la inso-
lubilidad de algunos nutrientes, pro-
vocando carencia en los cultivos, y la 
modificación de la vida microbiana.
4 En suelos arenosos es preferible uti-
lizar dosis pequeñas repetidas fre-
cuentemente, mientras que en sue-
los arcillosos pueden utilizarse dosis 
mayores distanciadas más tiempo.
4Una dosis excesiva en el encalado 
provoca una descomposición muy 
rápida de la materia orgánica, con lo 
cual aumenta el rendimiento de la 
cosecha durante unos cuantos años, 
pero a costa de agotar pronto el sue-
lo.
Una experiencia de León (2004) en la 
localidad de Manallasaq, en un suelo 
ácido (pH: 4,9) demostró su efecto en 
el cultivo de quinua; la aplicación de 
-1
caliza (750 kg CaCO .ha ) permitió ele-3
var el rendimiento de 1087 (sin cal) a 
-11767 kg.ha (con cal), en suelos que 
fueron abonados con 80-80-60 de N-
5
P O -K O sintético.2 2
Algunas consideraciones que se 
deben tener en cuenta cuando se prac-
tica el encalado son las siguientes:
C
A
P
IT
U
L
O
 I
II
ACIDEZ DEL SUELO Y ENCALADO
Los suelos ácidos contienen una cantidad considerable de cationes hidrógeno. La 
acidificación del suelo puede ser por causas naturales (materia original pobre en 
cationes básicos, lavado de calcio en regiones de clima lluvioso, etc.) o provocada 
por el hombre (incorporación de fertilizantes ácidos).
Naturaleza de la acidez del suelo
12
Encalado de suelos para el cultivo de quinua
Los suelos ácidos no son favorables 
para el desarrollo de la mayoría de los 
cultivos, por lo que es preciso corregir 
la acidez, tratando de sustituir los 
cationes hidrógeno por cationes cal-
cio. Esta operación se llama encalado. 
A pesar de que el pH es un excelente 
indicador de la acidez del suelo, éste 
no determina el requerimiento de cal 
(cantidad de cal agrícola necesaria 
para establecer un rango de pH desea-
do en el sistema de cultivo con el que 
se está trabajando).
El requerimiento de cal de un suelo no 
solo se relaciona con el pH del suelo, 
sino también con su capacidad tam-
pón. La cantidad total y el tipo de arci-
lla y el contenido de materia orgánica 
del suelo determinan que tan fuerte 
es la capacidad tampón del suelo; es 
decir con que fuerza el suelo resiste el 
cambio de pH. La capacidad tampón 
se incrementa con el incremento en la 
cantidad de arcilla y materia orgánica. 
Los suelos con alta capacidad tampón 
requieren más cal para incrementar el 
pH. Los suelos arenosos, con bajas can-
tidades de arcilla y materia orgánica, 
tienen bajo poder tampón y por lo tan-
to requieren menor cantidad de cal 
para cambiar el pH.
13
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
4 Las aportaciones masivas de cal 
modifican bruscamente las propie-
dades del suelo, pudiendo provocar 
efectos desfavorables, como la inso-
lubilidad de algunos nutrientes, pro-
vocando carencia en los cultivos, y la 
modificación de la vida microbiana.
4 En suelos arenosos es preferible uti-
lizar dosis pequeñas repetidas fre-
cuentemente, mientras que en sue-
los arcillosos pueden utilizarse dosis 
mayores distanciadas más tiempo.
4Una dosis excesiva en el encalado 
provocauna descomposición muy 
rápida de la materia orgánica, con lo 
cual aumenta el rendimiento de la 
cosecha durante unos cuantos años, 
pero a costa de agotar pronto el sue-
lo.
Una experiencia de León (2004) en la 
localidad de Manallasaq, en un suelo 
ácido (pH: 4,9) demostró su efecto en 
el cultivo de quinua; la aplicación de 
-1
caliza (750 kg CaCO .ha ) permitió ele-3
var el rendimiento de 1087 (sin cal) a 
-11767 kg.ha (con cal), en suelos que 
fueron abonados con 80-80-60 de N-
5
P O -K O sintético.2 2
Algunas consideraciones que se 
deben tener en cuenta cuando se prac-
tica el encalado son las siguientes:
C
A
P
IT
U
L
O
 I
II
ACIDEZ DEL SUELO Y ENCALADO
Los suelos ácidos contienen una cantidad considerable de cationes hidrógeno. La 
acidificación del suelo puede ser por causas naturales (materia original pobre en 
cationes básicos, lavado de calcio en regiones de clima lluvioso, etc.) o provocada 
por el hombre (incorporación de fertilizantes ácidos).
Naturaleza de la acidez del suelo
12
Encalado de suelos para el cultivo de quinua
Los suelos ácidos no son favorables 
para el desarrollo de la mayoría de los 
cultivos, por lo que es preciso corregir 
la acidez, tratando de sustituir los 
cationes hidrógeno por cationes cal-
cio. Esta operación se llama encalado. 
A pesar de que el pH es un excelente 
indicador de la acidez del suelo, éste 
no determina el requerimiento de cal 
(cantidad de cal agrícola necesaria 
para establecer un rango de pH desea-
do en el sistema de cultivo con el que 
se está trabajando).
El requerimiento de cal de un suelo no 
solo se relaciona con el pH del suelo, 
sino también con su capacidad tam-
pón. La cantidad total y el tipo de arci-
lla y el contenido de materia orgánica 
del suelo determinan que tan fuerte 
es la capacidad tampón del suelo; es 
decir con que fuerza el suelo resiste el 
cambio de pH. La capacidad tampón 
se incrementa con el incremento en la 
cantidad de arcilla y materia orgánica. 
Los suelos con alta capacidad tampón 
requieren más cal para incrementar el 
pH. Los suelos arenosos, con bajas can-
tidades de arcilla y materia orgánica, 
tienen bajo poder tampón y por lo tan-
to requieren menor cantidad de cal 
para cambiar el pH.
15
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Interpretación de los análisis de suelos
Es necesario realizar una interpreta-
ción de los resultados del análisis de 
suelo y mostrar situaciones reales de 
campo.
Las recomendaciones de abonamien-
to resultan de la interpretación medi-
tada de los análisis y de los otros facto-
res que caracterizan a cada suelo en 
particular y se refiere a las dosis de abo-
nos que se deben usar en la práctica 
agrícola.
Cuanto mayor sea el nivel de los 
nutrientes en el análisis de suelo, 
menor es la cantidad necesaria de abo-
nos. Aún a niveles altos probados, algu-
nos nutrientes deberían provenir de 
los abonos a fin de mantener la fertili-
dad del suelo y la productividad. Hay 
diferentes clases de análisis de suelo; 
sin embargo, el principal problema es 
relacionar el método pertinente de 
extracción de nutrientes para un suelo 
determinado con los rendimientos 
correspondientes.
Figura 9. Ley del mínimo, de Justus Von
 Liebig.
La figura sugiere que antes de corregir 
las necesidades de P O , Ca y K O, para 2 5 2
aumentar los rendimientos hay que 
corregir primero la necesidad de N. 
Respuesta de la quinua a la aplicación de fertilizantes
El rendimiento está limitado por el 
nutriente que se encuentra en menor 
proporción con respecto a los requeri-
mientos del cultivo (Ley del mínimo de 
Liebig: figura 9).
CaCa
ClCl
FeFe
MoMo
BB ZnZn MgMg
CuCu
SS
MnMn
K OK O11
P OP O11 11
Los rendimientos tienen relación con 
el nivel de fertilidad del suelo, la época 
de siembra, la variedad empleada, el 
uso de abonos, el control de plagas 
enfermedades y la ocurrencia de hela-
das.
C
A
P
IT
U
L
O
 I
V
FERTILIZACIÓN DE LA QUINUA
El análisis del suelo es una de las mejo-
res herramientas disponibles para 
determinar la cantidad y disponibili-
dad de los nutrientes en el suelo para 
las plantas, así como la cantidad de 
nutrientes que deben aplicarse en for-
ma de abonos para lograr la meta de 
rendimiento.
Análisis químico de la fertilidad de suelos
14
Conocer la condición química del sue-
lo permitirá planificar el manejo de su 
campo (figura 8) y corregir deficien-
cias nutricionales a través del abona-
miento para optimizar los rendimien-
tos.
Figura 8. El análisis del suelo: herramienta para planear el abonamiento.
¿Necesito abonar? ¿Qué debo aplicar? ¿Cuánto debo usar?
Análisis de suelo
Rendimiento esperado
Antecedentes del campo
Análisis foliar
Manejo de abonos
Plan de abonamiento
Diagnóstico
Tipo de abono
Forma de aplicación
Momento de aplicación
15
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Interpretación de los análisis de suelos
Es necesario realizar una interpreta-
ción de los resultados del análisis de 
suelo y mostrar situaciones reales de 
campo.
Las recomendaciones de abonamien-
to resultan de la interpretación medi-
tada de los análisis y de los otros facto-
res que caracterizan a cada suelo en 
particular y se refiere a las dosis de abo-
nos que se deben usar en la práctica 
agrícola.
Cuanto mayor sea el nivel de los 
nutrientes en el análisis de suelo, 
menor es la cantidad necesaria de abo-
nos. Aún a niveles altos probados, algu-
nos nutrientes deberían provenir de 
los abonos a fin de mantener la fertili-
dad del suelo y la productividad. Hay 
diferentes clases de análisis de suelo; 
sin embargo, el principal problema es 
relacionar el método pertinente de 
extracción de nutrientes para un suelo 
determinado con los rendimientos 
correspondientes.
Figura 9. Ley del mínimo, de Justus Von
 Liebig.
La figura sugiere que antes de corregir 
las necesidades de P O , Ca y K O, para 2 5 2
aumentar los rendimientos hay que 
corregir primero la necesidad de N. 
Respuesta de la quinua a la aplicación de fertilizantes
El rendimiento está limitado por el 
nutriente que se encuentra en menor 
proporción con respecto a los requeri-
mientos del cultivo (Ley del mínimo de 
Liebig: figura 9).
CaCa
ClCl
FeFe
MoMo
BB ZnZn MgMg
CuCu
SS
MnMn
K OK O11
P OP O11 11
Los rendimientos tienen relación con 
el nivel de fertilidad del suelo, la época 
de siembra, la variedad empleada, el 
uso de abonos, el control de plagas 
enfermedades y la ocurrencia de hela-
das.
C
A
P
IT
U
L
O
 I
V
FERTILIZACIÓN DE LA QUINUA
El análisis del suelo es una de las mejo-
res herramientas disponibles para 
determinar la cantidad y disponibili-
dad de los nutrientes en el suelo para 
las plantas, así como la cantidad de 
nutrientes que deben aplicarse en for-
ma de abonos para lograr la meta de 
rendimiento.
Análisis químico de la fertilidad de suelos
14
Conocer la condición química del sue-
lo permitirá planificar el manejo de su 
campo (figura 8) y corregir deficien-
cias nutricionales a través del abona-
miento para optimizar los rendimien-
tos.
Figura 8. El análisis del suelo: herramienta para planear el abonamiento.
¿Necesito abonar? ¿Qué debo aplicar? ¿Cuánto debo usar?
Análisis de suelo
Rendimiento esperado
Antecedentes del campo
Análisis foliar
Manejo de abonos
Plan de abonamiento
Diagnóstico
Tipo de abono
Forma de aplicación
Momento de aplicación
17
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
senta la influencia de niveles 
crecientes de abono fosfórico 
acompañado de 75-40 kg(N-
-1K O).ha ; el modelo (3) explica 2
la influencia de niveles crecien-
tes de abono potásico cuando 
va acompañado de 75-50 kg(N-
-1P O ).ha .2 5
-1Es decir, por cada kg(N).ha (has-
ta un nivel de 50 kg/ha), la pro-
ducción de quinua se eleva en 
11 a 15 kg/ha; para el caso del 
-1
Fósforo, por cada kg(P O ).ha 2 5
(hasta un nivel de 50 kg/ha), la 
producción de quinua se eleva 
en 30 a 43 kg/ha. Se ha encon-
trado además que existe una 
buena respuesta a la aplicaciónfraccionada del nitrógeno, la 
mitad a la siembra y la mitad al 
aporque.
La respuesta al abonamiento orgánico, tam-
bién es muy interesante. En las variedades 
Pasankalla y Blanca de Junín, en la localidad de 
Pucuhuillca, Huamán (2010), encontró res-
puestas significativas.
Requerimiento nutricional para máximo 
rendimiento de quinua
Como ya se mencionó, según 
Tineo (1999), el rendimiento 
máximo de quinua variedad 
-1Blanca de Junín (2143 kg.ha ) 
en la localidad de Manallasaq, 
se alcanzó utilizando 102-72-96 
N-P O -K O.2 5 2
16
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Generalmente se obtiene menos de 
1000 kg/ha de grano en cultivos tradi-
cionales y condiciones de secano. Con 
el empleo de niveles adecuados de 
abonamiento, desinfección de la semi-
lla, siembra en surcos, control de male-
zas, la variedad Sajama ha producido 
hasta 3000 kg/ha, siendo el promedio 
comercial 1500-2500 kg/ha.
En la práctica, los campesinos no ferti-
lizan la quinua, esta aprovecha los 
nutrientes aplicados al cultivo anterior 
que es generalmente la papa. Sin 
embargo, se recomienda aplicar al 
menos 5 t/ha de estiércol de corral, 
con mayor razón cuando se la siembra 
después de un cereal o se repite qui-
nua (Tapia y Fries, 2007).
Estudios sobre la respuesta de la qui-
nua al abonamiento orgánico y mine-
ral (sintético), efectuados en la región, 
indican que se encontró respuestas sig-
nificativas sobre todo al nitrógeno y 
fósforo. La dosis de potasio es hasta 80 
kg/ha en suelos deficientes de este ele-
mento.
Huancahuari (2004), realizó un estu-
dio con la variedad Blanca de Junín, en 
la localidad de Manallasaq (pH: 4.9; P 
disponible: 7 ppm; K disponible: 230 
ppm; M.O.: 5.6%), sin encontrar dife-
rencias entre los niveles de N: con 80 
-1kg(N).ha alcanzó un rendimiento de 
-1 -1
1639 kg.ha , y utilizando 160 kg(N).ha 
-1el rendimiento fue de 1665 kg.ha ; 
este resultado sugiere que no convie-
ne utilizar altos niveles de N (por enci-
-1ma de 120 kg.ha ) porque el exceso 
produce una disminución de los rendi-
-1
mientos. Utilizando 60 kg(P O ).ha se 2 5
-1
obtuvo un rendimiento de 1188 kg.ha , 
-1y con 120 kg(P O ).ha el rendimiento 2 5
-1
fue de 2117 kg.ha .
Tineo (1999) determinó los niveles de 
N-P O -K O que maximizan el rendi-2 5 2
miento de quinua variedad Blanca de 
Junín en la localidad de Manallasaq; 
para alcanzar un rendimiento de 2143 
-1
kg.ha de grano se requiere 102-72-96 
N-P O -K O.2 5 2
La influencia de N-P O -K O en el ren-2 5 2
dimiento de quinua variedad Blanca 
de Junín (en Manallasaq); obedece a 
los modelos siguientes:
2Y = 1145 + 14.6N - 0.0727N
2Y = 378 + 47(P O ) - 0.3596(P O )2 5 2 5
Y = 1626 + 5.0913(K O)2
(1)
(2)
(3)
El modelo (1) corresponde al efecto de 
niveles crecientes de abono nitroge-
nado cuando se acompaña con 50-40 
-1kg(P O -K O).ha ; el modelo (2) repre-2 5 2
17
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
senta la influencia de niveles 
crecientes de abono fosfórico 
acompañado de 75-40 kg(N-
-1K O).ha ; el modelo (3) explica 2
la influencia de niveles crecien-
tes de abono potásico cuando 
va acompañado de 75-50 kg(N-
-1P O ).ha .2 5
-1Es decir, por cada kg(N).ha (has-
ta un nivel de 50 kg/ha), la pro-
ducción de quinua se eleva en 
11 a 15 kg/ha; para el caso del 
-1
Fósforo, por cada kg(P O ).ha 2 5
(hasta un nivel de 50 kg/ha), la 
producción de quinua se eleva 
en 30 a 43 kg/ha. Se ha encon-
trado además que existe una 
buena respuesta a la aplicación 
fraccionada del nitrógeno, la 
mitad a la siembra y la mitad al 
aporque.
La respuesta al abonamiento orgánico, tam-
bién es muy interesante. En las variedades 
Pasankalla y Blanca de Junín, en la localidad de 
Pucuhuillca, Huamán (2010), encontró res-
puestas significativas.
Requerimiento nutricional para máximo 
rendimiento de quinua
Como ya se mencionó, según 
Tineo (1999), el rendimiento 
máximo de quinua variedad 
-1Blanca de Junín (2143 kg.ha ) 
en la localidad de Manallasaq, 
se alcanzó utilizando 102-72-96 
N-P O -K O.2 5 2
16
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Generalmente se obtiene menos de 
1000 kg/ha de grano en cultivos tradi-
cionales y condiciones de secano. Con 
el empleo de niveles adecuados de 
abonamiento, desinfección de la semi-
lla, siembra en surcos, control de male-
zas, la variedad Sajama ha producido 
hasta 3000 kg/ha, siendo el promedio 
comercial 1500-2500 kg/ha.
En la práctica, los campesinos no ferti-
lizan la quinua, esta aprovecha los 
nutrientes aplicados al cultivo anterior 
que es generalmente la papa. Sin 
embargo, se recomienda aplicar al 
menos 5 t/ha de estiércol de corral, 
con mayor razón cuando se la siembra 
después de un cereal o se repite qui-
nua (Tapia y Fries, 2007).
Estudios sobre la respuesta de la qui-
nua al abonamiento orgánico y mine-
ral (sintético), efectuados en la región, 
indican que se encontró respuestas sig-
nificativas sobre todo al nitrógeno y 
fósforo. La dosis de potasio es hasta 80 
kg/ha en suelos deficientes de este ele-
mento.
Huancahuari (2004), realizó un estu-
dio con la variedad Blanca de Junín, en 
la localidad de Manallasaq (pH: 4.9; P 
disponible: 7 ppm; K disponible: 230 
ppm; M.O.: 5.6%), sin encontrar dife-
rencias entre los niveles de N: con 80 
-1kg(N).ha alcanzó un rendimiento de 
-1 -1
1639 kg.ha , y utilizando 160 kg(N).ha 
-1el rendimiento fue de 1665 kg.ha ; 
este resultado sugiere que no convie-
ne utilizar altos niveles de N (por enci-
-1ma de 120 kg.ha ) porque el exceso 
produce una disminución de los rendi-
-1
mientos. Utilizando 60 kg(P O ).ha se 2 5
-1
obtuvo un rendimiento de 1188 kg.ha , 
-1y con 120 kg(P O ).ha el rendimiento 2 5
-1
fue de 2117 kg.ha .
Tineo (1999) determinó los niveles de 
N-P O -K O que maximizan el rendi-2 5 2
miento de quinua variedad Blanca de 
Junín en la localidad de Manallasaq; 
para alcanzar un rendimiento de 2143 
-1
kg.ha de grano se requiere 102-72-96 
N-P O -K O.2 5 2
La influencia de N-P O -K O en el ren-2 5 2
dimiento de quinua variedad Blanca 
de Junín (en Manallasaq); obedece a 
los modelos siguientes:
2Y = 1145 + 14.6N - 0.0727N
2Y = 378 + 47(P O ) - 0.3596(P O )2 5 2 5
Y = 1626 + 5.0913(K O)2
(1)
(2)
(3)
El modelo (1) corresponde al efecto de 
niveles crecientes de abono nitroge-
nado cuando se acompaña con 50-40 
-1kg(P O -K O).ha ; el modelo (2) repre-2 5 2
19
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Mejía (2010) evaluó la eficiencia de uso de nutrientes o coeficiente aparente de 
uso (CAU) de fertilizantes sintéticos (figura 9) y del guano de islas (figura 10). 
Figura 10. Eficiencia de uso de N, K, P y Ca, del
 guano de islas.
C
A
U
 (
%
)
Niveles del guano de isla en Tn/Ha
100
90
80
70
60
50
40
30
20
10
0
0
CAU N
CAU K
CAU Ca
CAU P
2 4 6
En el caso del abono sintético la canti-
dad de Ca y K suministrados vía abona-
miento aprovechado por el cultivo pue-
de llegar hasta 70%; mientras que para 
el N hasta 55%, cuando el abonamien-
to es adecuado (hasta 90-75-60 de N-
P O-K O). Con dosis mayores la eficien-2 2
cia de uso de los nutrientes disminuye 
significativamente, debido a que la 
18
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Para un rendimiento óptimo (3598 
kg.ha-1) en la variedad Blanca de 
Junín, Mejía (2010) determinó que 
se requieren: 
-1
Guano de las Islas = 1781 kg.ha
-1
Sintético (mezcla) = 293 kg(N-P O-K O).ha2 2
-1
o N = 117 kg.ha
-1
o P O = 98 kg.ha2 5
-1
o 6 K O = 78 kg.ha2
Eficiencia de uso de fertilizantes sintéticos
Los nutrientes aplicados al 
suelo sufren muchas trans-
formaciones. La cantidad del 
fertilizante suministrado que 
aprovecha el cultivo, depen-
de de factores edáficos, cli-
máticos y del mismo cultivo. 
Los mecanismos de pérdida 
más comunes, de los nutrien-
tes, son: volatilización (NH ), 3
lixiviación (NO -), fijación 3
(H PO -). 2 4
C
A
U
 (
%
)
Niveles de N-P-K en Kg/Ha
80
70
60
50
40
30
20
10
0
0 30 60 90 120 150
CAU N
CAU K
CAU CaCAU P
Figura 9. Eficiencia de uso de N, K, P y Ca, de
 abonos sintéticos.
capacidad metabólica del cultivo tiene 
sus límites. 
Tendencia similar ocurre con los 
nutrientes provenientes del guano de 
islas; sólo en el caso de N el mayor 
aprovechamiento ocurre cuando se 
-1
utiliza entre 2 a 3 t.ha .
19
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Mejía (2010) evaluó la eficiencia de uso de nutrientes o coeficiente aparente de 
uso (CAU) de fertilizantes sintéticos (figura 9) y del guano de islas (figura 10). 
Figura 10. Eficiencia de uso de N, K, P y Ca, del
 guano de islas.
C
A
U
 (
%
)
Niveles del guano de isla en Tn/Ha
100
90
80
70
60
50
40
30
20
10
0
0
CAU N
CAU K
CAU Ca
CAU P
2 4 6
En el caso del abono sintético la canti-
dad de Ca y K suministrados vía abona-
miento aprovechado por el cultivo pue-
de llegar hasta 70%; mientras que para 
el N hasta 55%, cuando el abonamien-
to es adecuado (hasta 90-75-60 de N-
P O-K O). Con dosis mayores la eficien-2 2
cia de uso de los nutrientes disminuye 
significativamente, debido a que la 
18
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Para un rendimiento óptimo (3598 
kg.ha-1) en la variedad Blanca de 
Junín, Mejía (2010) determinó que 
se requieren: 
-1
Guano de las Islas = 1781 kg.ha
-1
Sintético (mezcla) = 293 kg(N-P O-K O).ha2 2
-1
o N = 117 kg.ha
-1
o P O = 98 kg.ha2 5
-1
o 6 K O = 78 kg.ha2
Eficiencia de uso de fertilizantes sintéticos
Los nutrientes aplicados al 
suelo sufren muchas trans-
formaciones. La cantidad del 
fertilizante suministrado que 
aprovecha el cultivo, depen-
de de factores edáficos, cli-
máticos y del mismo cultivo. 
Los mecanismos de pérdida 
más comunes, de los nutrien-
tes, son: volatilización (NH ), 3
lixiviación (NO -), fijación 3
(H PO -). 2 4
C
A
U
 (
%
)
Niveles de N-P-K en Kg/Ha
80
70
60
50
40
30
20
10
0
0 30 60 90 120 150
CAU N
CAU K
CAU Ca
CAU P
Figura 9. Eficiencia de uso de N, K, P y Ca, de
 abonos sintéticos.
capacidad metabólica del cultivo tiene 
sus límites. 
Tendencia similar ocurre con los 
nutrientes provenientes del guano de 
islas; sólo en el caso de N el mayor 
aprovechamiento ocurre cuando se 
-1
utiliza entre 2 a 3 t.ha .
ANEXOS
21
Cuadro a.1. Prueba de Duncan del rendimiento de quinua, variedad Blanca de 
Junín, en Chontaca - Acocro, Ayacucho (Mejía, 2010). 
Es notable la diferencia entre el testigo 
-1
(934 kg.ha ) y el abonamiento orgáni-
co (guano de islas), el sintético (formu-
lación N-P O-K O), o la combinación de 2 2
ambos. Con el guano de isla sólo, se lle-
Trat.
Código Niveles reales (Kg.ha
-1
)
Rendimiento 
(Kg.ha-1)
Signif
X1 G.I.
N-P-K 
sintético
T(04)
T(11)
T(07)
T(12)
T(08)
T(13)
T(03)
T(10)
T(06)
T(02)
T(05)
T(09)
T(01)
2
0
1
0
2
0
-2
0
-1
2
-2
0
-2
X2
2
1
0
2
0
0
2
-1
0
-2
0
-2
-2
4000
2000
3000
2000
4000
2000
0000
2000
1000
4000
0000
2000
0000
120-100-080
090-075-060
060-050-040
120-100-080
060-050-040
060-050-040
120-100-080
030-025-020
060-050-040
000-000-000
060-050-040
000-000-000
000-000-000
3773.8
3752.6
3655.8
3461.7
3310.9
2979.3
2906.2
2720.6
2677.9
2567.4
2377.5
2328.2
934.4
a
a
a
a b
a b
a b
a b
a b
a b
a b
b
b
c
-1ga a 2567 kg.ha ; con el abono sintéti-
-1
co sólo, se alcanza hasta 2906 kg.ha , y 
con la combinación de ambos, rendi-
-1mientos superiores a los 3500 kg.ha .
20
Uso de abonos orgánicos
Huamán (2010), evaluó la influencia de abonos orgánicos en dos variedades de 
quinua; el uso del guano de islas permitió triplicar los rendimientos con respecto a 
las parcelas sin abonar (cuadro 2).
Trat Variedad Fuente Nivel Rdto Rr(%)
T1 Blanca Junín
Est. Ovino
5 TN 1748,6 160,8
T2 10 TN 2288,1 210,4
T3
Guano Isla
1 TN 3343,2 307,5
T4 2 TN 3931,4 361,6
T5
Gallinaza
2.5 TN 2752,0 253,1
T6 5 TN 3549,5 326,4
T7 Testigo Testigo 1087,4 100,0
T8 Pasankalla
Est. Ovino
5 TN 1417,3 142,1
T9 10 TN 1753,5 175,8
T10
Guano Isla
1 TN 2909,9 291,8
T11 2 TN 3555,6 356,5
T12
Gallinaza
2.5 TN 2613,9 262,1
T13 5 TN 3051,7 306,0
T14 Testigo Testigo 997,3 100,0
Cuadro 2. Abonamiento orgánico en el cultivo de quinua.
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
ANEXOS
21
Cuadro a.1. Prueba de Duncan del rendimiento de quinua, variedad Blanca de 
Junín, en Chontaca - Acocro, Ayacucho (Mejía, 2010). 
Es notable la diferencia entre el testigo 
-1
(934 kg.ha ) y el abonamiento orgáni-
co (guano de islas), el sintético (formu-
lación N-P O-K O), o la combinación de 2 2
ambos. Con el guano de isla sólo, se lle-
Trat.
Código Niveles reales (Kg.ha
-1
)
Rendimiento 
(Kg.ha-1)
Signif
X1 G.I.
N-P-K 
sintético
T(04)
T(11)
T(07)
T(12)
T(08)
T(13)
T(03)
T(10)
T(06)
T(02)
T(05)
T(09)
T(01)
2
0
1
0
2
0
-2
0
-1
2
-2
0
-2
X2
2
1
0
2
0
0
2
-1
0
-2
0
-2
-2
4000
2000
3000
2000
4000
2000
0000
2000
1000
4000
0000
2000
0000
120-100-080
090-075-060
060-050-040
120-100-080
060-050-040
060-050-040
120-100-080
030-025-020
060-050-040
000-000-000
060-050-040
000-000-000
000-000-000
3773.8
3752.6
3655.8
3461.7
3310.9
2979.3
2906.2
2720.6
2677.9
2567.4
2377.5
2328.2
934.4
a
a
a
a b
a b
a b
a b
a b
a b
a b
b
b
c
-1ga a 2567 kg.ha ; con el abono sintéti-
-1
co sólo, se alcanza hasta 2906 kg.ha , y 
con la combinación de ambos, rendi-
-1mientos superiores a los 3500 kg.ha .
20
Uso de abonos orgánicos
Huamán (2010), evaluó la influencia de abonos orgánicos en dos variedades de 
quinua; el uso del guano de islas permitió triplicar los rendimientos con respecto a 
las parcelas sin abonar (cuadro 2).
Trat Variedad Fuente Nivel Rdto Rr(%)
T1 Blanca Junín
Est. Ovino
5 TN 1748,6 160,8
T2 10 TN 2288,1 210,4
T3
Guano Isla
1 TN 3343,2 307,5
T4 2 TN 3931,4 361,6
T5
Gallinaza
2.5 TN 2752,0 253,1
T6 5 TN 3549,5 326,4
T7 Testigo Testigo 1087,4 100,0
T8 Pasankalla
Est. Ovino
5 TN 1417,3 142,1
T9 10 TN 1753,5 175,8
T10
Guano Isla
1 TN 2909,9 291,8
T11 2 TN 3555,6 356,5
T12
Gallinaza
2.5 TN 2613,9 262,1
T13 5 TN 3051,7 306,0
T14 Testigo Testigo 997,3 100,0
Cuadro 2. Abonamiento orgánico en el cultivo de quinua.
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
23
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Cuadro a.3. Rendimiento de quinua, por efecto del abonamiento orgánico, en 
Pukuhuillca – Acocro, Ayacucho (Huamán, 2010).
La variedad Blanca de Junín, sin abo-
namiento orgánico, alcanzó un rendi-
-1 -1
miento de 1087 kg.ha ; el uso 2 t.ha 
de guano de isla, que es un abono com-
pleto rico en NP, permitió incrementar 
-1
el rendimiento hasta 3931 kg.ha . El 
-1estiércol de ovino (5 t.ha ) permitió 
incrementar el rendimiento en 61%, 
con respecto al testigo.
La variedad Pasankalla, sin abona-
miento orgánico, alcanzó un rendi-
-1 -1
miento de 997 kg.ha ; el uso 2 t.ha de 
guano de isla, permitió incrementar el 
-1
rendimiento hasta 3556 kg.ha . El 
-1
estiércol de ovino (5 t.ha ) permitió 
incrementar el rendimiento en 42%, 
con respecto al testigo; mientras que 
-1
la aplicación de 5 t(gallinaza).ha per-
mitió triplicar el rendimiento, al igual 
que la aplicación de 1 t(guano de 
-1isla).ha . 
Trat Variedad Fuente Nivel Rdto Rr(%)
T1 Blanca Junín
Est. Ovino
5 TN 1748,6 160,8
T2 10 TN 2288,1 210,4
T3
Guano Isla
1 TN 3343,2 307,5
T4 2 TN 3931,4 361,6
T5
Gallinaza
2.5 TN 2752,0 253,1
T6 5 TN 3549,5 326,4
T7 Testigo Testigo 1087,4 100,0
T8 Pasankalla
Est. Ovino
5 TN 1417,3 142,1
T9 10 TN 1753,5 175,8
T10
Guano Isla
1 TN 2909,9 291,8
T11 2 TN 3555,6 356,5
T12
Gallinaza
2.5 TN 2613,9 262,1
T13 5 TN 3051,7 306,0
T14 Testigo Testigo 997,3 100,0
22
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Cuadro a.2. Rendimiento de quinua, variedad Blanca de Junín, para diferentes 
combinaciones de NPK, en Manallasaq - Chiara, Ayacucho (Tineo, 1999). 
Es notable la diferencia cuando se com-
paran tratamientos en lasque se ha 
omitido algún elemento. El suministro 
de N a niveles medios de P y K permite 
incrementar el rendimiento de 1106 
-1 -1
kg.ha (t9) a 2036 kg.ha (t10); el apor-
te de P a niveles medios de N y K per-
mite incrementar el rendimiento de 
-1 -1
237 kg.ha (t11) a 1924 kg.ha (t12); la 
aplicación de K a niveles medios de N y 
P permite incrementar 
-1
el rendimiento de 1712 kg.ha (t13) a 
-12034 kg.ha (t14).
El análisis del suelo indicaba un nivel 
bajo de P disponible (7 ppm), un nivel 
alto de potasio (230 ppm) y de N total 
(0.3%).
El nutriente más crítico en este suelo 
es el P, seguido del N (aún cuando el 
contenido en el suelo es alto; su mine-
ralización es baja. 
Trat.
N
(kg.ha
-1
)
P2O5
(kg.ha
-1
)
K2O
(kg.ha
-1
)
1 30 20 16 840,8
2 120 20 16 1048,3
3 30 80 16 1182,5
4 120 80 16 1265,0
5 30 20 64 990,8
6 120 20 64 1191,7
7 30 80 64 1544,2
8 120 80 64 1722,5
9 0 50 40 1105,8
10 150 50 40 2035,8
11 75 0 40 236,7
12 75 100 40 1924,2
13 75 50 0 1712,5
14 75 50 80 2034,2
15 75 50 40 1820,7
Rendimiento
(kg.ha
-1
)
23
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Cuadro a.3. Rendimiento de quinua, por efecto del abonamiento orgánico, en 
Pukuhuillca – Acocro, Ayacucho (Huamán, 2010).
La variedad Blanca de Junín, sin abo-
namiento orgánico, alcanzó un rendi-
-1 -1
miento de 1087 kg.ha ; el uso 2 t.ha 
de guano de isla, que es un abono com-
pleto rico en NP, permitió incrementar 
-1
el rendimiento hasta 3931 kg.ha . El 
-1estiércol de ovino (5 t.ha ) permitió 
incrementar el rendimiento en 61%, 
con respecto al testigo.
La variedad Pasankalla, sin abona-
miento orgánico, alcanzó un rendi-
-1 -1
miento de 997 kg.ha ; el uso 2 t.ha de 
guano de isla, permitió incrementar el 
-1
rendimiento hasta 3556 kg.ha . El 
-1
estiércol de ovino (5 t.ha ) permitió 
incrementar el rendimiento en 42%, 
con respecto al testigo; mientras que 
-1
la aplicación de 5 t(gallinaza).ha per-
mitió triplicar el rendimiento, al igual 
que la aplicación de 1 t(guano de 
-1isla).ha . 
Trat Variedad Fuente Nivel Rdto Rr(%)
T1 Blanca Junín
Est. Ovino
5 TN 1748,6 160,8
T2 10 TN 2288,1 210,4
T3
Guano Isla
1 TN 3343,2 307,5
T4 2 TN 3931,4 361,6
T5
Gallinaza
2.5 TN 2752,0 253,1
T6 5 TN 3549,5 326,4
T7 Testigo Testigo 1087,4 100,0
T8 Pasankalla
Est. Ovino
5 TN 1417,3 142,1
T9 10 TN 1753,5 175,8
T10
Guano Isla
1 TN 2909,9 291,8
T11 2 TN 3555,6 356,5
T12
Gallinaza
2.5 TN 2613,9 262,1
T13 5 TN 3051,7 306,0
T14 Testigo Testigo 997,3 100,0
22
Manual de nutrición y fertilización de la quinua
Cuadro a.2. Rendimiento de quinua, variedad Blanca de Junín, para diferentes 
combinaciones de NPK, en Manallasaq - Chiara, Ayacucho (Tineo, 1999). 
Es notable la diferencia cuando se com-
paran tratamientos en las que se ha 
omitido algún elemento. El suministro 
de N a niveles medios de P y K permite 
incrementar el rendimiento de 1106 
-1 -1
kg.ha (t9) a 2036 kg.ha (t10); el apor-
te de P a niveles medios de N y K per-
mite incrementar el rendimiento de 
-1 -1
237 kg.ha (t11) a 1924 kg.ha (t12); la 
aplicación de K a niveles medios de N y 
P permite incrementar 
-1
el rendimiento de 1712 kg.ha (t13) a 
-12034 kg.ha (t14).
El análisis del suelo indicaba un nivel 
bajo de P disponible (7 ppm), un nivel 
alto de potasio (230 ppm) y de N total 
(0.3%).
El nutriente más crítico en este suelo 
es el P, seguido del N (aún cuando el 
contenido en el suelo es alto; su mine-
ralización es baja. 
Trat.
N
(kg.ha
-1
)
P2O5
(kg.ha
-1
)
K2O
(kg.ha
-1
)
1 30 20 16 840,8
2 120 20 16 1048,3
3 30 80 16 1182,5
4 120 80 16 1265,0
5 30 20 64 990,8
6 120 20 64 1191,7
7 30 80 64 1544,2
8 120 80 64 1722,5
9 0 50 40 1105,8
10 150 50 40 2035,8
11 75 0 40 236,7
12 75 100 40 1924,2
13 75 50 0 1712,5
14 75 50 80 2034,2
15 75 50 40 1820,7
Rendimiento
(kg.ha
-1
)
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