Logo Studenta

Clase_7 - Mario Barreda

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

CONTROL DE PÉRDIDAS 
 
Un poco de historia 
 
Frank Bird Jr., destacadísimo ingeniero norteamericano que estuvo varias veces en Chile 
en la década de los `70 y comienzos de los `80, dictando conferencias y seminarios, 
desarrolló un enfoque de gestión de la seguridad, conocido como Control de Pérdidas, en 
que una de sus particularidades es que relaciona esta disciplina con los desafíos 
gerenciales y, por ende, con el éxito de las empresas. 
 
Antes, en 1957, otro ingeniero norteamericano llamado Alan Kling, había presentado un 
trabajo en el Congreso Anual de Seguridad que se celebra en los Estados Unidos. 
 
El trabajo de Kling, en lo medular, proponía observar el fenómeno de los accidentes, en 
cuanto a sus consecuencias, desde una perspectiva distinta. Hasta esa fecha, la visión 
predominante consistía en asimilar o relacionar los accidentes casi exclusivamente con las 
lesiones. 
 
Kling, dándose cuenta que ésta era una visión sesgada y limitante, decía: “Creo que los 
objetivos de la Seguridad debieran expresarse y medirse mejor, en términos de pérdidas”. 
 
El argumento era bastante simple pero suficientemente iluminador como para gatillar un 
nuevo movimiento en el desarrollo de la Seguridad: Cuando ocurren accidentes que dañan 
a las personas, independiente de la lesión, producen en el trabajador afectado diferentes 
tipos de pérdidas tales como: pérdida de su bienestar físico, pérdida de tranquilidad, pérdida 
de su capacidad de ganancia, pérdida de imagen, de prestigio, de orgullo personal, de 
autoestima y de otros valores personales. 
 
Pero los accidentes también producen pérdidas -decía Kling en relación al activo de la 
empresa, al dañar a equipos, maquinarias, herramientas, materiales, productos elaborados, 
materias primas, etc.; además -continuaba diciendo- los accidentes producen pérdida de la 
capacidad de producción, al alejar a personas de su trabajo y al paralizar maquinarias, 
equipos y procesos; y, finalmente, los accidentes también pueden producir pérdidas de 
participación en el mercado consumidor, al no poder atender oportuna y satisfactoriamente 
a los clientes. 
 
Hoy se puede decir, simplemente, que “pérdida es todo desperdicio evitable de recursos”. 
El Control de Pérdidas es un concepto muy amplio y de gran trascendencia para el éxito de 
una empresa, pues tiene que ver directamente con la optimización en el uso de los recursos, 
de todo tipo 
 
 
 
UNA NUEVA VISIÓN DE LA SEGURIDAD 
 
Antes y ahora 
 
A través de los años, desde el inicio del movimiento organizado de Seguridad en el 
mundo, se han venido lanzando y propagando algunos slogans que, arraigándose en la 
mente de las personas, han influido sobre ellas y condicionado su actitud y desempeño en 
esta materia. 
“Lento, pero seguro”, por ejemplo, es de fácil aceptación por parte del trabajador efecto, el 
lema “lento, pero seguro”, por ejemplo, es de fácil aceptación por parte del trabajador, 
pero a la empresa le interesa que el trabajo sea “seguro, pero rápido” es decir no está en 
armonía con los intereses de la empresa ni con la necesidad cada vez más creciente de 
ser “rápidas, seguras y eficientes”. 
 
“Seguridad ante todo”, ha sido otro planteamiento que invadió el campo laboral en el 
mundo, también con el natural recelo de quienes dirigen las empresas los deseos son 
contradictorios. No hay empresa en el mundo que esté para hacer “seguridad ante todo”, 
por mucho que la protección de sus trabajadores se sitúe en un lugar importante de sus 
preocupaciones. 
 
¿Hasta dónde las propuestas de “lento, pero seguro” y “seguridad ante todo” han frenado 
el desarrollo de la Seguridad? 
¿Hasta dónde tales planteamientos, por no considerar el interés común de empresarios y 
trabajadores, 
Nos vimos exigidos a buscar con mayor urgencia nuevos y más eficaces derroteros 
 
Tal vez, el punto de partida haya estado en el reconocimiento de que los accidentes no 
discriminan en su afán deteriorador y así como dañan a las personas, también deterioran 
las maquinarias, los equipos y las instalaciones que las empresas tienen para producir. 
Así, los accidentes no sólo son “enemigos” de los trabajadores a quienes pueden lesionar, 
sino que, en definitiva, son un gran enemigo de las empresas y de la sociedad en general. 
 
 “Seguridad para todos, en todo momento, en todo lugar”, tenga mucho más sentido que 
los eslóganes anteriores. Esta propuesta tiene la virtud de no excluir a nadie, 
 
 
 
Ideas asociadas a un enfoque actualizado 
 
La seguridad es, antes que nada, un “componente” del trabajo; no es una “parte” del 
trabajo, que pudiera tomarse, sacarse y entregársela a otro para que se haga cargo de 
ella. Es 
 
La seguridad, al igual que los buenos rendimientos cuantitativos, la calidad y los bajos 
costos, es resultado o consecuencia natural de hacer bien las cosas. Dicho de otra 
manera: “La Seguridad es resultado de un trabajo bien hecho”. 
Aquí, la palabra trabajo no sólo se refiere al trabajo manual u operativo, sino que también 
(y de manera especial) al trabajo directivo, al trabajo de diseño, al trabajo de planificación, 
al trabajo de selección y contratación, al trabajo de compras, etc.; 
 
Como corolario de lo anterior, debemos entender que la responsabilidad por la seguridad 
es inherente, irrenunciable e intransferible, de cada persona, en cada trabajo, rol o 
función, en cada nivel; independiente de la colaboración y asesoría que puedan recibir de 
parte de los Comités Paritarios de Higiene y Seguridad o de los especialistas en el tema. 
Y algo más que también debe tenerse presente: el grado de responsabilidad por la 
seguridad en una organización, es proporcional a la autoridad que se tenga para la toma 
de decisiones. 
 
Los macro-objetivos de la seguridad tienen que ver hoy en día no sólo con la protección 
de las personas, sino que también con la protección de los bienes de la empresa, con la 
protección de los procesos productivos, con la protección del medio ambiente laboral y, en 
definitiva, con la protección de la misión empresarial. 
 
Los accidentes producen efectos físicos, psicológicos, sociales, económicos, legales, 
funcionales y ecológicos, entre otros, que afectan la calidad de vida de los trabajadores y 
socavan la capacidad competitiva de la empresa. En definitiva, los accidentes constituyen 
un derroche de recursos 
 
Los accidentes no sólo indican que está fallando la seguridad, son manifestaciones 
inequívocas de fallas, omisiones y/o debilidades en los sistemas y procesos, que las 
causas de los accidentes son, en su gran mayoría, las mismas que originan los problemas 
de producción, de calidad, de costos, e incluso de clima laboral. Por lo tanto, un sistema 
que corrige estas causas en su origen, no sólo mejora el grado de seguridad sino que la 
gestión global de la empresa y los resultados de todo tipo. 
 
El Principio fundamental de la seguridad es la Prevención. 
Y prevenir, en su concepto amplio, significa que las cosas se hagan “bien, a la primera ... 
y siempre”. 
 
 
 
Prever, Predecir y Preactuar. 
 
La seguridad no sólo se define y obtiene en el escenario donde se ejecutan las 
operaciones, sino que debe procurarse en todas las instancias del proceso y mientras 
más al origen, mejor. 
 
Los criterios de seguridad, conjuntamente con los criterios de producción, de calidad y de 
costos, deben tenerse en cuenta cuando se concibe el trabajo, cuando se planifican las 
operaciones, cuando se diseñan las instalaciones y los medios a emplear, cuando se 
adquieren los elementos a usar, cuando se selecciona y contrata a las personas que van 
a operar, etc. 
 
El ideal de seguridad es lo que podríamos denominar “Seguridad Implícita”. Esto es lo que 
se hace y se logra en “forma silenciosa, pero visible” y, más que buscando sólo las formas 
seguras de hacer cada tarea, poniendo un énfasis sistemático y permanente en la forma 
correcta de hacer cada trabajo. 
 
La Seguridad Implícita es posible de lograrmediante un proceso sostenido de desarrollo 
de una Cultura Preventiva, que incorpore el concepto preventivo al pensamiento, a la 
voluntad y a la acción de todos los verdaderos protagonistas de la seguridad que, como 
se ha dicho, son los que definen las políticas y estrategias, los que planifican, los que 
diseñan, los que norman, los que compran, los que contratan, los que supervisan, los que 
ejecutan, los que controlan, etc. 
 
 
 
Proceso Evolutivo de la Seguridad 
 
La Seguridad, como disciplina, se ha venido desarrollando y evolucionando en forma 
notable en los últimos años. 
Actualmente ofrece a las empresas una amplia gama de alternativas para las decisiones 
relevantes que se deben tomar en cuanto a cuatro aspectos asociados a ella, que son de 
la mayor importancia: 
 Cobertura de Control 
 Actores Involucrados 
 Puntos de Intervención 
 Estrategias de Acción 
 
Primera fase 
Cobertura de control 
Tuvo su origen y desarrollo inicial motivada por una preocupación por las personas, en 
donde la prevención de las lesiones y de las enfermedades profesionales era su única 
razón de ser. 
Sigue siendo, no obstante, la cobertura básica y fundamental de cualquier sistema 
preventivo. 
 
Actores Involucrados 
La responsabilidad se asignaba normalmente a una persona determinada o a un grupo 
específico: un Encargado o un Comité de Seguridad. 
 
Puntos de Intervención 
En sus inicios la Seguridad estaba orientada a una intervención Post-Evento, es decir a 
una acción tendiente a corregir los problemas más evidentes que originaban los 
accidentes más que a prevenir. 
 
Estrategia de Acción 
Más que estrategia era un Reacción ante los eventos ya ocurridos. 
 
Segunda fase 
Cobertura de control 
La Seguridad amplía su cobertura a una atención centrada en los accidentes que, como 
se entiende hoy en día, además de los daños a las personas, también producen daños y 
deterioros a equipos, herramientas, materiales, maquinarias, instalaciones, etc. 
 
Actores Involucrados 
Con el tiempo, la responsabilidad fue derivando hacia los especialistas en el tema. 
 
Puntos de Intervención 
Se evoluciona a una intervención con propósito preventivo, pero principalmente en las 
fases operativas y a nivel de Causas Inmediatas (actos y condiciones inseguras). 
Estrategia de Acción 
Se avanza a la realización de Acciones Puntuales, específicas, que han sido más o 
menos tradicionales en el campo de la Seguridad, pero que por lo general son soluciones 
de corto plazo. 
 
Tercera fase 
Cobertura de control 
Se introduce el concepto de pérdidas que, a la cobertura ya señalada se le suma la 
preocupación por el control de derroches (de tiempo, de materiales, de energía, de ideas, 
de espacio, etc.). 
 
Actores Involucrados 
Un avance notable experimentado es la tendencia a la aceptación de la idea de que la 
Seguridad es responsabilidad de la Línea de Mando Operativa de las empresas, con la 
asesoría de los especialistas. Se habla, en estos casos, de Seguridad Descentralizada. 
 
Puntos de Intervención 
Comienza a adquirir mayor importancia la intervención a nivel de Causas Básicas o 
problemas reales, las que verdaderamente explican la existencia de las condiciones 
subestándares y la comisión de actos subestándares. 
 
Estrategia de Acción 
Se produce un avance enorme a partir de la Sistematización de la Seguridad, a partir de 
la cual la empresa emite políticas, asigna responsabilidades a la línea de mando y se 
actúa en base a un Programa de Seguridad que tiene objetivos definidos, estándares de 
desempeño y un sistema de control tanto de desempeños como de resultados, que 
promueve su continuo mejoramiento. 
 
Cuarta fase 
Cobertura de control 
Finalmente, la Seguridad ofrece a las empresas la alternativa de ampliar su cobertura a 
todo tipo de efectos no deseados, cuyas causas sean de origen incidental, ya sea que se 
trate de efectos físicos, psicológicos, sociales, económicos, funcionales, legales, 
ecológicos, etc. 
 
Actores Involucrados 
Los enfoques actuales van más allá de comprometer sólo a la línea de mando operativa y 
reconocen que la Seguridad es responsabilidad de Toda la Organización. 
También el autocontrol por parte de cada trabajador de la empresa, se constituye en un 
complemento indispensable a la gestión organizada y sistemática de la Seguridad. 
 
Puntos de Intervención 
Los enfoques avanzados de Seguridad priorizan y enfatizan, definitivamente, el control de 
los riesgos en el Origen; es decir, en los sistemas y procesos de diseño, de planificación, 
de contratación, de compras, de elaboración de procedimientos, etc. 
Estrategia de Acción 
La tendencia actual es la búsqueda de sistemas y mecanismos propios, adecuados a la 
realidad de cada empresa en particular, que le permita la Integración de la Seguridad a la 
gestión estratégica y al quehacer cotidiano de ella. 
Esto, en un proceso tendiente a la concreción del concepto de “Seguridad Implícita”, el 
que se logra como resultado de una cultura preventiva y basándose en la premisa de que 
la Seguridad no es otra cosa que “una consecuencia o resultado de hacer bien lo que se 
hace”. 
 
Obviamente cada empresa se encuentra en distinta etapa de desarrollo en cada uno de 
los cuatro aspectos descritos anteriormente, configurando su propio “Perfil Actual”. 
 
 
Cinco Razones para Ocuparse de la Seguridad 
 Por un Deber Moral 
 Por una Responsabilidad Social 
 Por una Obligación Legal 
 Por una Conveniencia Económica 
 Por una Ventaja Competitiva 
 
En el cuadro siguiente se puede apreciar los motivos percibidos por los distintos 
estamentos de una empresa en la que se hizo una evaluación del Perfil de Seguridad 
Actual y los que ellos mismos quisieran que tuviera que considerar la empresa para hacer 
seguridad

Continuar navegando