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Ideas Suicidas - Cesar Tovar (1)

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SUICIDIO 
EN LA 
ADOLESCENCIA
SUICIDIO
“Es el acto consciente de autoaniquilación, que se entiende como un malestar pluridimensional en un individuo que percibe este acto como la mejor solución”
Edwin Schneidman.
El suicidio a través de los tiempos…
 Se conoce desde la época de los romanos.
 Los estoicos lo ven como el último acto de una persona libre.
Para los católicos Romanos es un Pecado.
 Para el siglo XIX, Durkheim sugirió que el suicidio era más una cuestión social que moral.
 Actualmente, se considera que el suicidio es un fenómeno complejo que asocia a factores psicológicos, biológicos y sociales.
Diagrama del Suicidio
Ttno. del Edo. 
de ánimo
Intentos de 
suicidios
Del 47-50% de los suicidas
 tienen un Ttno. Del estado 
de ánimo.
En el 19-24% de los 
suicidios hubo un intento
Anterior.
Suicidio
El 15% de las personas con un trastorno del estado de animo se suicidan
El 10% de las personas que intentan suicidarse lo hacen en los 10 años posteriores del intento
SUICIDIO EN LA ADOLESCENCIA
La Adolescencia es un período de alto riesgo de suicidio descubriendo una clara relación entre la insatisfacción por la autoimagen de los adolescentes y la conducta suicida.
Ahora bien …
Que es un adolescente? 
Que pasa con ellos?
La Adolescencia …
Es el periodo de transición entre la niñez y la Madurez (10-19años)
¿CUANTOS ES EL TIEMPO DE TRANSICION DE LA ADOLESCENCIA SEGÚN LA OMS?
Se agrupan en tres pasos o sub. etapas cada una aproximadamente 3 años:
 La adolescencia temprana de 10 a 13 años
 La adolescencia media de 14 a 16 años.
 La adolescencia tardía de 17 a 19años.
DIFERENCIA ENTRE PUBERTAD Y ADOLESCENCIA
Pubertad: 
Determina lo puramente biológico donde el cuerpo adquiere las características adultas.
DIFERENCIA ENTRE PUBERTAD Y ADOLESCENCIA
2. La adolescencia: 
Es fundamentalmente la maduración de la personalidad y la búsqueda de identidad. 
LA MORTALIDAD EN LA ADOLESCENCIA.
La principal causa de muerte son los accidentes de transito siendo el grupo de edades 15 a 19 años.
Otra causa de mortalidad juvenil son la sobredosis por sustancias psicoactivas llegando a representar el 15% de las defunciones.
El sida esta también aumentando la mortalidad juvenil.
EPIDEMIOLOGÍA
 El suicidio en la adolescencia ocupa las tres primeas causas de muerte y la tendencia es a incrementarse según las estimaciones de la OMS.
 Se considera que por cada adolescente que comete suicidio lo intentan cerca de 300.
 La tasa de suicidio incluye el 11,2 % de los adolescentes.
 La tasa de intento suicida esta entre 5,9 y 7,1 %.
 Cerca de 12000 niños y adolescentes son hospitalizados al año por estas causas.
Kaplan-Sadok, 2001
Según el Género:
 El suicidio se da 5 veces más en varones que en hembras.
 Los intentos son 3 veces más frecuentes en hembras que en varones.
 La ideación no es estática puede aparecer y desaparecer en el tiempo.
Métodos Utilizados:
 Las armas de fuego.
 El Ahorcamiento.
 Envenenamiento por Monóxido de Carbono.
 Ingesta de sustancias toxicas.
Más frecuente en
Varones.
Se dan iguales
proporciones.
Más frecuente en
Hembras.
QUE ABARCA EL COMPORTAMIENTO SUICIDA
 El deseo de morir: 
Inconformidad e insatisfacción con el modo de vivir (la vida no merece vivirla), (Lo que se quisiera es morir ).
 La representación suicida: 
Imágenes Mentales del suicidio del Propio individuo se imagina ahorcado.
 Las ideas suicidas: 
Pensamientos de terminar con la propia existencia.
TIPOS DE IDEAS SUICIDAS
 Ideas suicidas sin un método específico.
 Ideas suicidas con un método específico no planificado.
 Ideas suicidas planificadas.
TIPOS IDEAS SUICIDAS
 Amenazas Suicidas : Es la insinuación verbal de la intenciones suicidas.
 El Gesto Suicida: Es el ademan de realizar un acto suicida.
 El intento Suicida: Es aquel acto sin resultado de muerte en el que el individuo se hace daño deliberadamente. 
 Suicidio Frustrado : Es aquel que de no haber una situación fortuita, no esperada hubiera terminado en la muerte.
 Suicidio Accidental: Realizado con un método del cual de desconocía su verdadero efecto.
 Suicidio Intencional : Es la lesión autoinfrigida deliberadamente por el sujeto y el resultado es la muerte. 
FACTORES DE RIESGO SUICIDA EN LA NIÑEZ QUE CONTRIBUYE A QUE SE DESARROLLE LA CONDUCTA SUICIDA EN LA ADOLESCENCIA.
 El clima emocional en la familia es caótico.
 Progenitores padezcan alguna enfermedad Mental (Alcoholismo paterno, depresión materna).
Presencia suicida en algunos de los padres (imitación).
 Predisposición genética (no para la conducta sino para enfermedades donde el síntoma es frecuente).
 Relaciones entre los progenitores y sus hijos (Maltrato infantil, abuso sexual).
Etiología del Suicidio
 Factores Genéticos: existe alta frecuencia entre riesgo suicida e historia familiar de suicidio.
 Factores Biológicos: existen bajos niveles de Serotonina.
 Factores Sociales: existe vulnerabilidad en ambientes caóticos, agresivos y negligentes.
COMO TRATAR CON UN ADOLESCENTE
 Mantener abierta la comunicación.
 Saber escuchar.
 Evitar descalificar sus opiniones.
 Aprovechar cualquier ocasión para valorar su esfuerzo o una aptitud.
 Discutir los problemas en termino de negociación.
COMO TRATAR CON UN ADOLESCENTE
 No imponerles los propios criterios.
 Respetar su intimidad.
 Ser tolerante con dialecto y vestimenta.
 Encontrar momentos favorables para hablar con el.
PRINCIPIOS QUE SE DEBEN TENER EN CUENTA ANTE UNA CRISIS SUICIDA
 Tratarlo con respeto.
 Tomarlo en serio.
 Creer lo que nos manifiesta.
 Escucharlo con el genuino interés.
 Permítele expresar sus sentimientos (llanto, ira y disgusto).
 Preguntar sobre la idea suicida (si la respuesta es positiva)
PRINCIPIOS QUE SE DEBEN TENER EN CUENTA 
ANTE UNA CRISIS SUICIDA.
Preguntar : 	 Como ha pensado suicidarse?
Importante: No hacer preguntas que puedan ser respondidas en monosílabas “Si” “No”.
Cuando
Donde
Para que
Por que
PRINCIPIOS QUE SE DEBEN TENER EN CUENTA 
ANTE UNA CRISIS SUICIDA.
 Responsabilizar al adolescente por su propia vida, siempre que ellos sea posible.
 Trabajar junto y encontrar soluciones no suicidas.
 Establecer un pacto no suicida siempre que el estado del adolescente lo permita.
 Pedir permiso para involucrar a otros miembros de la familia.
PRINCIPIOS QUE SE DEBEN TENER EN CUENTA 
ANTE UNA CRISIS SUICIDA.
 No juzgarlo y comprometernos a guardar el secreto de todas las confesiones que haga el adolescente.
 Ser directivo con el suficiente tacto para no parecerlo.
“ Mientras mas planificada está la idea suicida el riesgo de cometer el suicidio se incrementa considerablemente” 
FACTORES PROTECTORES DEL SUICIDIO: 
 Poseer habilidades sociales que le permitan integrarse a los grupos de la sociedad.
 Poseer confianza en si mismo, al destacar sus éxitos, no humillarlo ni crearle sentimientos de inseguridad.
 Tener capacidad de autocontrol.
 Aprender a perseverar cuando cuándo la ocasión se requiera y a renunciar cuando sea necesario.
 Tener buena autoestima.
FACTORES PROTECTORES DEL SUICIDIO: 
Desarrollar inteligencia y habilidad para resolver problema.
Saber buscar ayuda en momentos de dificultades, ya sea los padres, otros familiares, o amigos.
Saber pedir consejos ante decisiones relevantes y saber elegir la persona más adecuada para brindarlos. 
Ser receptivo a las experiencias ajenas y sus soluciones, principalmente aquellas que han tenido exitoso desenvolvimiento.
 Ser receptivo ante las nuevas evidencias y conocimientos para incorporarlos a su repertorio.
 Estar integrado socialmente y tener criterio de pertenencia.
FACTORES PROTECTORES DEL SUICIDIO: 
 Mantener buenas relaciones interpersonales.
 Tener apoyo de los familiares y sentir que se le ama, se le acepta y apoya.
 Poseer habilidades para emplear adecuadamente y sanamente el tiempo libre.
 Evitar el consumo de sustancias aditivas (café, alcohol,drogas, tabaco, fármacos, entre otros).
FACTORES PROTECTORES DEL SUICIDIO: 
 Aprender a posponer las gratificaciones inmediatas por aquellas a largo plazo que arrojen resultados duraderos.
 Desarrollar una variedad de interés extrahogareñas que le permitan equilibrar las dificultades en el hogar.
Saber expresar a personas confiables aquellos pensamientos dolorosos, desagradables y molestos. 
Tratamiento
 Previo al intento, hacer intervención primaria evitando las circunstancias que predisponen al suicidio.
 Luego del intento: Hospitalizarlos, que seria la intervención secundaria.
 Con el alta: crear compromiso Pte-Mx, a través de la intervención terciaria, donde se busca evitar reincidencias.
 Psicoterapia.
 Psicofármacos.
 Terapia Familiar.
Estas orientaciones persiguen proveer a los padres de relaciones afectivas y efectivas que le sirvan de soporte ante estas etapas que sus hijos se plantean. 
APRENDER A CUIDARSE LA UNICA VIDA QUE TENEMOS LOS SERES HUMANOS ES UNA CUALIDAD QUE DEBE SER DESARROLLADA DESDE LAS MAS TEMPRANA INFANCIA, PUES SI NO SE TIENE VIDA NO SE PUEDE LLEVAR A CABO PROYECTO ALGUNO. APRENDER AMARSE RACIONALMENTE INCREMENTARA LA CAPACIDAD DE AMAR A OTROS, APRENDER A RESPETARSE HARA QUE SEAMOS RESPETADOS. ENFRENTAR LA VIDA CON SOLUCIONES NO SUICIDA MEJORARA NUESTRA CALIDAD DE VIDA.
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
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	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
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Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
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Pero en este preciso momento...
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en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...¡cambió el mundo!
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Todopoderoso.
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Henry Ford muere y llega al Cielo.
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Todopoderoso.
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 “¿Qué quieres decir con eso?”
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Todopoderoso.
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	No existe ningún modelo económico.
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Todopoderoso.
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 “¿Qué quieres decir con eso?”
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Todopoderoso.
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 “¿Qué quieres decir con eso?”
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	No existe ningún modelo económico.
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	No existe ningún modelo económico.
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	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega alCielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombresmontados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tengaproblemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
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¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
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	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
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	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
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¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
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Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
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 “¿Qué quieres decir con eso?”
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“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
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	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
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	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
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	El consumo de combustible es asombroso.
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Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
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Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
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¡cambió el mundo!
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Ford piensa por un momento y solicita:
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Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
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 “¿Qué quieres decir con eso?”
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“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
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	Hace mucho ruido cuando se calienta.
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	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
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	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
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“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
Dios va para la Supercomputadora Celestial, hace click en un ícono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
¡hay más hombres montados 
en mi invento que en el tuyo!”
Henry Ford muere y llega al Cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
“Bien, tu fuiste una persona buena y... ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles...
¡cambió el mundo!
Como recompensa, te permitiré pasear a voluntad en el Cielo.”
Ford piensa por un momento y solicita:
 “Yo quiero estar junto a Dios por un rato.”
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del 
Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
 “Señor Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?”
 “¿Qué quieres decir con eso?”
pregunta el Todopoderoso.
 
“Bueno Señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención...”
	No existe ningún modelo económico.
	Hace mucho ruido cuando se calienta.
	El mantenimiento es extremadamente caro.
	Necesita constántemente de pintura.
	Tiene que parar 5 días de cada 28. 
	El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
	Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
	Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
	El consumo de combustible es asombroso.
	Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
 Y éstos son sólo algunos de los problemas...”
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“Puede ser que mi proyecto tenga problemas como tú bien dices.
Pero en este preciso momento...
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