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Impacto en el crecimiento
La llegada de COVID-19 a Haití es otro golpe para una economía ya debilitada. La economía de Haití ha deteriorado desde mediados de 2018 debido a una reducción en el acceso a financiamiento externo, escasez de combustible, malestar social, alta inflación y depreciación, y malas condiciones para la agricultura. Además, el año pasado estuvo marcado por Peyi-Lok (o "Cierre del país" en criollo haitiano), un período de dos meses caracterizado por un malestar social persistente que resultó en la parálisis de las actividades económicas, la suspensión de las clases escolares y la escasez de combustible, agua, alimentos, y medicina. La combinación de estos factores resultó en una contracción estimada del PIB del 1.2% en el año fiscal 2019.6 Además, los meses previos a la llegada del COVID-19 estuvieron marcados por protestas masivas, enfrentamientos armados, y aumento de las preocupaciones por la seguridad. La llegada del COVID-19 y las consiguientes acciones que tuvo que realizar el gobierno Comprometerse enérgicamente a contener su propagación deteriorará aún más la economía haitiana. En términos de consumo,Es probable que los hogares haitianos reduzcan sus gastos debido a una disminución esperada en las remesas del exterior (ver dos párrafos siguientes) y por el efecto que tendrán las restricciones de movilidad en sus ingresos (especialmente considerando que el 8 8% del empleo no agrícola es informal). Además, la suspensión de las actividades textiles y los salarios que se pagan a sus trabajadores) afectarán la producción en el sector manufacturero y el volumen de bienes exportados.7 Debido a este contexto sombrío, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) pronostica una contracción del PIB del 2,7% en el año fiscal 2020, aunque esta cifra podría revisarse a la baja si la crisis se deteriora aún más en Haití y / o en los países con los que Haití mantiene estrechos vínculos. 
El principal factor externo que podría tener un impacto negativo en el crecimiento del PIB de Haití es la probable desaceleración del Economía de Estados Unidos. Estados Unidos es el principal socio comercial de Haití, fuente de remesas e internacionales. Donante. Aproximadamente el 83% de las exportaciones haitianas se envían a este país (la mayoría de ellas consiste en textiles), y el 26% de sus las importaciones se envían desde los EE. UU. Un crecimiento menor al esperado en EE. UU. Afectaría la demanda de bienes haitianos y el empleo de haitiano-estadounidenses. Esto último a su vez afectaría las remesas, considerando que más de dos tercios del total de remesas que recibe Haití provienen de Estados Unidos. En un país donde las remesas son equivalente al 35% del PIB, un choque a este indicador afectará severamente la demanda del consumidor haitiano. 
Una disminución en las remesas enviadas desde Canadá, Chile y República Dominicana también podría afectar negativamente consumo de los hogares. Alrededor del 14% del total de remesas que recibe Haití provienen de estos tres países. 
Un aumento de los niveles de desempleo debido a las medidas de movilidad y la disminución de la economía Las actividades en estos países afectarán la cantidad de remesas enviadas a los hogares haitianos, especialmente considerando que una parte importante de los haitianos en Chile y República Dominicana trabaja en el sector informal.
Además, una posible disminución de la producción en República Dominicana podría afectar la cantidad de bienes que Haití importa de este país (alrededor del 25% del total de bienes que importa Haití).
El comercio con Europa es limitado, pero es probable que las remesas que recibe Haití de Francia también se vean afectadas por la crisis global del COVID-19. Las exportaciones haitianas a Europa equivalen al 5,5% del total, mientras que las importaciones desde Europa equivale a aproximadamente el 7,7% del total. Si bien un crecimiento menor al esperado en Europa puede afectar la demanda para los bienes haitianos y el suministro de algunos bienes europeos, Haití también podría verse afectado si el empleo de los haitianos en Francia se ve afectado negativamente, dado que alrededor del 2% de sus remesas totales provienen de este país.
No se espera que Haití se vea afectado significativamente por una caída en los precios de los productos básicos; preferiría beneficiarse de la dramática caída de los precios del petróleo. Aproximadamente el 3,2% de las exportaciones haitianas son productos básicos (el 1,6% de las exportaciones son productos vegetales, 1,1% son productos metálicos y 0,5% son granos de cacao). Por lo tanto, una caída en los precios de las materias primas debería no resultar en un impacto considerable en la economía haitiana. Una caída de los precios del petróleo, por el contrario, beneficiaría a Haití dado que la participación de esta importación es el 19,2% de la importación total de bienes. Una caída en los precios del petróleo también ayudaría aliviar la carga fiscal de Haití al financiar subsidios generalizados a los combustibles (el costo es casi el 3% del PIB).
PREPARACIÓN DE LAS AUTORIDADES
Haití carece de la capacidad para mitigar la propagación de una epidemia y su sistema de salud carece de fondos suficientes. Haití ocupa un lugar pobre (n. ° 100/195 países) en el Índice de seguridad sanitaria mundial, un índice compuesto desarrollado por Johns Hopkins Center for Health Security, la Nuclear Threat Initiative y The Economist Intelligence Unit que evalúa la capacidad de los países para prevenir y mitigar epidemias y pandemias. Haití ocupa un lugar especialmente bajo en el indicadores relacionados con la respuesta rápida y la mitigación de la propagación de una epidemia. Esta valoración es confirmada por La incapacidad de las autoridades haitianas para contener otras epidemias, incluida la epidemia de cólera después de 2010 terremoto. Una de las razones que explica la baja capacidad de respuesta de Haití es el bajo gasto en salud pública (menos del 3% del PIB en el año fiscal 2019, una cifra significativamente menor que el promedio regional). Para los pacientes con COVID-19 que requerirán hospitalización, hay menos de cien ventiladores y 124 camas de cuidados intensivos en Haití. Además, solo 5 de 124 camas cumplen los criterios para un nivel , unidad de cuidados intensivos, mientras que ninguna llega a los niveles 2 y 3, según un estudio de Investigación y Educación consorcio de cuidados intensivos en Haití (REACH). El nivel 1 (la menor intensidad de atención) puede proporcionar una atención que permita estabilización, apoyo y seguimiento más estrecho de los pacientes cuya condición es grave y con riesgo de deterioro. Para pacientes que necesitan una vigilancia estrecha continua y / o apoyo de órganos vitales, es necesario que haya una unidad de cuidados de nivel 2.
No obstante, es importante reconocer los esfuerzos del gobierno para obtener equipos médicos. El gobierno haitiano realizó un pedido de 18,6 millones de dólares para la adquisición de 493 toneladas de equipamiento hospitalario. Los El pedido incluye 2,5 millones de guantes médicos, 300.000 batas esterilizadas, 10 analizadores bioquímicos automáticos, 100 respiradores y accesorios, 1.500 camas de hospital, 500 unidades de bomba de infusión, 200.000 mascarillas n95, 1,5 millones mascarillas quirúrgicas desechables y 250.000 equipos de protección personal (anteojos, viseras y zapatos). además, el El gobierno autorizó la reapertura de algunas fábricas que fabrican equipos médicos y solicitó la donación de 1 millón de máscaras.
ACCIONES QUE ESTÁ EMPRENDIENDO POR EL GOBIERNO
El 19 de marzo, el gobierno de Haití anunció sus primeros casos de coronavirus, declaró estado nacional de emergencia sanitaria, e impuso una serie de medidas para contener su propagación. Desde el viernes 20 de marzo, el han estado en vigor las siguientes medidas: a) Todas las escuelas, centros de formación profesional, universidades y fábricas estar cerrado; b) Todos los puertos de entrada, incluidos los aeropuertos, estarán cerrados hasta nuevo aviso parael transporte de personas; c) Se declaró toque de queda para todo el territorio nacional entre las 20:00 horas. Y a las 5 a. m., todos los días; d) todas las reuniones y se prohibieron los mítines de más de 10 participantes; e) el gobierno impondrá medidas de distanciamiento social y Adoptar una rotación semanal del 50% del personal no esencial de la administración pública. La otra mitad tendrá trabajar desde casa; f) Finalmente, un grupo de trabajo especial analizará y recomendará al gobierno medidas para abordar con los impactos económicos de la pandemia. Una semana después, el gobierno también anunció el establecimiento de un unidad para facilitar el despacho de aduana de equipos médicos y de otro tipo en un día para recibir los equipo médico lo antes posible. Además de los esfuerzos para contener la propagación del virus, el gobierno anunció una serie de acciones sociales y medidas fiscales para mitigar el impacto del COVID-19 en hogares y empresas. Estos incluyen: a) la transferencia de efectivo a 1,5 millones de hogares y la distribución de kits de alimentos a los hogares vulnerables8; b) el aplazamiento de la fecha de pago del impuesto sobre la renta para empresas y particulares por tres meses; c) el cancelación de multas y sanciones por demora en el pago hasta el 30 de junio de 2020; d) la compensación del 50% de la salarios de los trabajadores textiles que fueron suspendidos debido a la crisis; e) subsidios a docentes del sector privado y al sector del transporte; f) la suspensión temporal del desembolso de recursos para inversiones no esenciales y g) el aplazamiento hasta nuevo aviso de la fecha de caducidad de la tarjeta de identificación nacional.
El Banco Central de Haití (BRH) también anunció una serie de medidas monetarias para mitigar la impacto de la crisis del COVID-19. Las medidas incluyen: a) la reducción de las tasas de interés de las tres centrales bonos bancarios (la tasa del bono a 7 días disminuyó del 5% al ​​4%; el bono a 28 días disminuyó del 7% al 6%; y el bono a la fianza diaria disminuyó del 15% al ​​10%); b) La eliminación de las tarifas relacionadas con las transferencias realizadas a través de la red haitiana. sistema de pago interbancario (SPIH), del 23 de marzo al 30 de junio de 2020; c) La reducción de los coeficientes de reserva de bancos comerciales; d) la reducción de la tasa de refinanciamiento de BRH para disminuir el costo de acceso a la liquidez; y e) la relajación de las condiciones para el pago de préstamos por tres meses (del 1 de abril al 30 de junio). Durante esto tiempo, los bancos solo pueden cobrar intereses y no habrá cargos por pagos atrasados.
El Banco Central de Haití (BRH) también anunció una serie de medidas monetarias para mitigar la impacto de la crisis del COVID-19. Las medidas incluyen: a) la reducción de las tasas de interés de las tres centrales bonos bancarios (la tasa del bono a 7 días disminuyó del 5% al ​​4%; el bono a 28 días disminuyó del 7% al 6%; y el bono a la fianza diaria disminuyó del 15% al ​​10%); b) La eliminación de las tarifas relacionadas con las transferencias realizadas a través de la red haitiana. sistema de pago interbancario (SPIH), del 23 de marzo al 30 de junio de 2020; c) La reducción de los coeficientes de reserva debancos comerciales; d) la reducción de la tasa de refinanciamiento de BRH para disminuir el costo de acceso a la liquidez; y e) la relajación de las condiciones para el pago de préstamos por tres meses (del 1 de abril al 30 de junio). Durante esto tiempo, los bancos solo pueden cobrar intereses y no habrá cargos por pagos atrasados.
El gobierno de Haití está buscando ayuda financiera y orientación de socios internacionales. En el caso de financiamiento multilateral, el gobierno haitiano solicitó la reorientación de hasta US $ 50 millones del actual Cartera del BID en Haití para gastos relacionados con COVID-19. Además, el Fondo Monetario Internacional (FMI) confirmó que las autoridades haitianas solicitaron apoyo financiero a través de la Facilidad de Crédito Rápido (RCF) del Fondo. Esta pronto se considerará el apoyo de la junta ejecutiva del FMI.9 Además, el Grupo del Banco Mundial anunció que está lanzando inmediatamente apoyo de emergencia a través de operaciones en todo el mundo, incluyendo Haití, para ayudar a los sistemas de salud a enfrentar los desafíos inmediatos de COVID-19. En el caso de ayuda bilateral, USAID anunció US $ 2,2 millones en ayuda para Haití durante el fin de semana para gastos relacionados con agua y saneamiento servicios, prevención y control de casos de COVID-19, y fortalecimiento de laboratorios. La Asociación de Development of France (AFD) dijo que sus socios en el campo (EMI / SOE) están trabajando en la entrega de equipos, capacitación, construcción de espacio de clasificación, instalación de paneles solares y transporte de muestras de prueba al país laboratorio. Además, el Ministerio de Salud de Haití está trabajando en estrecha colaboración con Cuba, que envió un equipo de 348 médicos y enfermeras a Haití para ayudar a mitigar la propagación. El Ministerio de Relaciones Exteriores también se pondrá en contacto con el gobiernos de India y Serbia para facilitar el envío de medicamentos y suministros sanitarios. Además, Haití es coordinar acciones con los Ministros de Relaciones Exteriores y Salud de la Asociación de Estados del Caribe para frenarla propagación del coronavirus en la región.
Otras fuentes de vulnerabilidad / riesgos
La economía de Haití ya está deteriorada debido a la actual crisis sociopolítica y el gobierno se encuentra en un posición débil para responder a este nuevo choque. La crisis multidimensional de Haití ya resultó en dos meses de escasez de agua, alimentos y medicinas en 2019. La situación de seguridad también ha empeorado considerablemente durante los últimos meses, lo que resultó en protestas masivas, enfrentamientos armados y un aumento de la actividad de secuestro. Un más El deterioro de esta situación podría disminuir la capacidad del gobierno para reaccionar ante una epidemia y la capacidad de personas para acceder a establecimientos de salud, farmacias y supermercados. Uno de cada tres haitianos padece inseguridad alimentaria: escasez de importaciones de alimentos, junto con medidas de confinamiento ,podría empeorar aún más la crisis alimentaria para quienes ya se encuentran en una situación desesperada. Además, un aumento de los desempleados podría resultar en un aumento en el número de personas en situación de inseguridad alimentaria. Antes de la pandemia de coronavirus, la FAO Ya había pronosticado un aumento de comunas en una emergencia alimentaria, especialmente en el departamento Nord-Ouest. Más Recientemente (marzo de 2020), la organización agregó varias comunas en los departamentos Ouest y Grand’Anse para la lista de áreas que se prevé que se enfrentarán a una emergencia alimentaria.

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