Logo Studenta

SOCIEDAD BOSQUESINA LA PERSPECTIVA DE LA PRODUCCIÓN Y DEL CONSUMO (TRABAJO FINAL ANTROPOLOGIA RURAL Y AMAZÓNICA)

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

UNIVERSIDAD NACIONAL AGRARIA LA MOLINA
DEPARTAMENTO DE SOCIOLOGÍA RURAL
CURSO: ANTROPOLOGÍA RURAL Y AMAZÓNICA
SOCIEDAD BOSQUESINA: LA PERSPECTIVA DE LA PRODUCCIÓN Y DEL CONSUMO
INTEGRANTES:
CUSTODIO JAIMES, ROSA MARÍA
FLORES ESPINOZA, MÁXIMO ALBINO
ROJAS ESPINOZA, JOSÉ MIGUEL
SILVA GERBI, FERNANDA SOFÍA
SILVA VELA, LUIS SEBASTIÁN
2020 - I
LA MOLINA, LIMA – PERÚ
SOCIEDAD BOSQUESINA
LA PERSPECTIVA DE LA PRODUCCIÓN Y DEL CONSUMO
I. INTRODUCCIÓN
La visión capitalina del mundo bosquesino es, en su mayoría, errada y simplista. Quienes la
tienen, no reconocen la complejidad de los procesos que estas sociedades experimentan; en
lugar de eso optan por opinar sobre su realidad y sugerir soluciones a sus problemas partiendo
de supuestos carentes de análisis. “La producción de la sociedad bosquesina es de
auto-subsistencia” es uno de ellos. Aceptar como verdad tal proposición es equivalente a
ignorar una serie de relaciones de consumo que trascienden más allá del ámbito doméstico.
El presente trabajo pretende abordar el tema desde la premisa en cuestión. ¿Es acaso la
sociedad bosquesina una sociedad de autoconsumo o estamos frente a otra falsa idea de un
mundo con el que convivimos, pero del que sabemos poco?
II. OBJETIVOS
a. Objetivo de los autores
➢ Brindar una perspectiva más certera de la realidad bosquesina.
➢ Visibilizar el sesgo centralista (ajeno) que se tiene en torno a la producción y
el consumo de su sociedad.
b. Objetivo del grupo
➢ Acercarnos al mundo bosquesino a través de autores que han trabajado de la
mano con estas comunidades, y de esa manera, nutrirnos con realidades,
problemáticas, experiencias y argumentos que nos permitirán entender mejor
la perspectiva bosquesina sobre temas que nos competen como futuros
profesionales de campo.
➢ Reconocer los cambios a lo largo de los años del estándar de vida que los
bosquesinos llevan y concluir si éste es positivo o negativo.
III. DESARROLLO
La cosmovisión amazónica hace que el bosquesino entienda la naturaleza e interactúe con ella
de una forma única. No ven a su alrededor meros recursos explotables, sino “fuentes de vida y
sustento”. Esta interpretación que considera la espiritualidad y cultura de la sociedad
bosquesina llega a nosotros a través de investigadores que intentan ilustrar el modo de vida en
las comunidades de nuestro Perú profundo; sin embargo, en numerosas ocasiones resulta en
malentendidos que a la larga se convierten en razones para no valorar la importancia de estas
sociedades.
La producción y el consumo son dos actividades que los bosquesinos realizan a la par
constantemente. Ambas representan los mayores malentendidos que pueden existir a la hora
de hablar sobre ellos y la manera en la que se relacionan entre sí y con el mercado.
Que la cosmovisión amazónica entienda la naturaleza como fuente de vida y sustento no
significa que su producción satisfaga todas sus necesidades de consumo, ni que limiten este
consumo únicamente a lo que pueden producir en sus territorios.
Partiendo de ese entendimiento podemos redondear la idea y abordar el siguiente punto: El
bosquesino tiene gustos de consumo que van más allá de su producción. Podemos dar cuenta
de ello por la vestimenta que ciertas comunidades amazónicas usan, distinta a la de otras
menos globalizadas. También por ciertos alimentos considerados como “básicos” y que es
imposible obtenerlos si no se recurre al mercado. Y el mercado vendría a ser para la sociedad
bosquesina solo una esfera más de consumo entre otras.
¿Qué son las esferas de consumo?
Llamaremos así a los círculos de personas hacia las que está orientada la producción de una
familia, y entre ellas tendríamos las siguientes:
● El ámbito doméstico, conformado por la familia que vive bajo el mismo techo,
parientes cercanos y vecinos.
● El ámbito doméstico ampliado por visitantes, que pueden ser parientes, compadres,
comadres, amigos, comuneros y vecinos de otra comunidad o de la ciudad.
● El ámbito laboral, que son los grupos con los que se trabaja o para quien se trabaja,
donde se resalta la solidaridad.
● El ámbito ceremonial, refiriéndonos a las fiestas donde todos los hogares aportan con
las prestaciones que se ofrecen a los invitados. Se establecen, pues, relaciones
ceremoniales inter-comunales basadas en la reciprocidad inter-comunal.
● El ámbito mercantil, la esfera del intercambio monetario. Situada, por lo general, en
un medio urbano y con lazos casi nulos de solidaridad.
La producción bosquesina está inmersa en esferas de distinta amplitud y alcance social, por
ese motivo, no puede llamársele “producción de autosubsistencia”. Implicaría ignorar todas la
relaciones expuestas y minimizar su importancia. Esta producción es posible porque existe el
gusto de realizar cierta actividad, el gusto al trabajo con el que luego, al recibir dinero, puede
satisfacer sus gustos de consumo. Su producción por sí misma satisface muchos gustos y
necesidades.
Si bien la sociedad bosquesina a lo largo de los años ha podido satisfacer sus necesidades
mediante la mayoría de esferas, no lo hace por medio de la mercantil, no solo debido a que el
ámbito mercantil es solo intercambio monetario, sino también a que actualmente las
necesidades básicas son muy exigentes para los comuneros y el mercado solo puede
satisfacer necesidades efímeras.
El estándar de vida bosquesino
Cualquier forastero que visita una comunidad bosquesina se dará cuenta rápidamente de que
todas las casas y sus interiores tienen más o menos el mismo estándar material, exceptuando
tal vez la vivienda de algún comerciante que eventualmente se haya radicado en el lugar. La
igualdad material entre los comuneros sustenta la igualdad en el trato horizontal de las
relaciones de reciprocidad que manifiestan la solidaridad entre ellos. Estas mismas
características comunes, los mismos gustos y las mismas necesidades que satisfacer, hace que
se cree una estabilidad entre los grupos de bosquesinos llamada “estándar de vida
bosquesino”.
¿Por qué el bosquesino no ahorra progresivamente?
Por otro lado se tiene que los bosquesinos a más lujo que desean, menos los va a satisfacer el
mercado, es aquí donde se menciona “estándar de vida bosquesino” el cual requiere de un
equilibrio que se da entre actividades variadas y consumo, donde si algún extraño a la
comunidad o un no comunero desea intervenir, debe tomar en cuenta que este balance debe
ser constante; aquí es donde podemos notar que el “estándar de vida bosquesino” no permite
que estos mismo se den el lujo de pensar en un ahorro progresivo ya que, como ya se
mencionó, mientras más lujo menos es lo que podrá satisfacer el ámbito mercantil.
Ahora bien, si se mencionó que no existe un ahorro progresivo, existen tipos de trabajos que
son característicos para ya no tener solo una “bolsa de viaje” basada en productos hortícolas
que el bosquesino llega a extraer, estos son trabajos netamente de alta inversión, ya sean de
ámbitos legales o ilegales como la extracción de madera, construcción de nuevas pistas, etc.
Como se mencionó, los bosquesinos prefieren realizar trabajos de gran inversión para poder
satisfacer la necesidad de un bien en específico, existen factores externos al trabajo que crea
supersticiones sobre el progreso de los miembros de las comunidades y la “envidia” que se
genera sobre estos, es por esto mismo que si un miembro de una comunidad opta por un
ahorro a largo plazo y decide salir del “estándar de vida bosquesino”, para poder tener una
vida sobresaliente en el ámbito no sólo mercantil sino también en el doméstico, y le sucede
alguna desgracia, es víctima de “envidia”, “brujería,”maldad” y es así como optan por volver
al “estándar de vida bosquesino”. Es por esto mismo que el bosquesino que hace mucho optó
por trabajos no fijos, que sean efímeros y den buena remuneración, ya que si eligen salir del
estándar, probablemente por la envidia de otros bosquesinos volverán a la misma.
¿El estándar de vida establecido es bueno para los bosquesinos?
Cabe resaltar que si bienel bosquesino tiene trabajos extensivos y arduos para ganar más
dinero que vendiendo artesanías, los problemas como la anemia y desnutrición no son ajenas
a estos, si bien la pesca y la ingesta de animales silvestres, en los últimos años se ha visto la
sobre caza por no comuneros la cual afecta salubremente a estas comunidades. Sin embargo,
el gobierno dona ciertas fuentes de alimentos (animales como vacas, cerdos; suplementos
como leche en polvo y demás), este mismo no tiene en cuenta el “estándar de vida
bosquesino” y el balance que este conlleva, ya que este equilibrio no solo se aplica en el
ámbito mercantil, sino también en los ámbitos que influye el mercado, como las necesidades
básicas de comer.
Existen relaciones sociales marcadas en las sociedades bosquesinas, sin embargo la que más
resalta es la de la habilitación que se dieron origen (y son de su preferencia) como medios de
préstamo, donde se les entrega el bien que ellos desean a cambio de algún fruto del trabajo
que desempeñarán con ese bien; además que fortalecen el ámbito laboral y doméstico
ampliados por medio del lazo de confianza que se forma entre el beneficiario y el beneficiado.
“En Santa Rosa, en 2001, un habilitador de Iquitos llegó a la comunidad con 5 obreros y habilitó a 4
comuneros con ropa, zapatos y machetes; el saldo del producto maderero debía pagar en dinero.
Además, se comprometió frente a la comunidad a arreglar la batería del grupo electrógeno, a entregar
un cilindro de petroleo y 10% de la utilidad total en efectivo. El habilitador no saldó la cuenta ni con
los comuneros, ni con la comunidad. La segunda vez que llegó para recuperar las 40 trozas de madera
blanca y roja que habían quedado en la comunidad, ésta se rehusó a entregárselas porque no había
cumplido con su compromiso. La comunidad, por su lado, vendió las 40 trozas a un maderero de
Requena, quien tampoco pagó la suma convenida.”
Aún así, la habilitación no es siempre la mejor vía para el beneficio mutuo, como podemos
ver, en la comunidad Santa Rosa la habilitación externa (la cual no respetó el balance que
tienen los bosquesinos) no tuvo un final beneficioso para los mismos bosquesinos.
En general, las actividades del bosquesino están incentivadas por el gusto, el placer que le da
la satisfacción de realizarlas. Esta satisfacción reside entonces en aquel proceso de la
actividad que debe ser placentera y no solo por el resultado cuantitativo o monetizado como
se piensa comúnmente en la sociedad urbana. Sigmund Freud, fundador del psicoanálisis, ha
reconocido que el principio del placer es relevante en la economía psíquica y motivaciones
ocultas de las personas. Este principio no es censurado socialmente por la comunidad
bosquesina, como ocurre en la sociedad postmoderna, inculcada con valores puritanos y
capitalistas que reprimen y dejan en segundo plano la satisfacción del placer. Se puede notar
todo lo contrario en la sociedad bosquesina, este principio se vuelve evidente y observable en
las conductas e interacciones sociales alegres, relajadas y placenteras cuando los bosquesinos
realizan sus trabajos y quehaceres diarios.
El bosquesino, como cualquiera, requiere el dinero, pero no estará dispuesto a recibirlo bajo
cualquier condición. Si para obtener más dinero se le exige una labor fastidiosa, repetitiva y
solitaria, posiblemente la asuma por unos días pero la abandonará una vez recibido el primer
pago, ya que el dinero en sí, aunque sea necesario no motiva en él nuevas acciones. Por esta
razón se puede afirmar que el bosquesino da preferencia a la satisfacción del gusto en sus
actividades antes que aumentar su riqueza material. Una prueba de esto son los llamados
"proyectos de desarrollo" ya que, incluso con apoyo material, la participación de los
comuneros no es total sino parcial, y cuando concluyen los incentivos materiales al final del
proyecto, las actividades también cesan y la comunidad retorna a su estado anterior a dicho
proyecto. Esta oportunidad fue solo para aprovechar, pero no un compromiso de la
comunidad, y el supuesto "desarrollo" no logra darse. De la anterior preferencia del
bosquesino al gusto a sus actividades antes que a la riqueza material derivan las diferencias
entre promotores urbanos y comuneros bosquesinos. Para la gente perteneciente a la ciudad,
el dinero, el aumento de ingresos y la aspiración a la riqueza constituyen el incentivo humano
fundamental que para ellos debería también impulsar cambios en las actividades y un
desarrollo basado en explotación y consumo de productos industriales. El tomar dicha
motivación al ingreso monetario como un valor universal común para todos es un error, pues,
aunque el bosquesino también requiera de esto, no acepta cualquier trabajo para lograr dicho
objetivo.
IV. CONCLUSIONES
Se concluye efectivamente que desde el punto de vista citadino es erróneo, pues el bosquesino
no tiene fines de producir más de lo necesario, en su sociedad se opta por contar con lo
necesario para subsistir primando el gusto por lo que haga en su día. Así también nos muestra
que su realidad prioriza el disfrute de la vida, la cual contrasta con el capitalino, pues este
último cree que su estilo de vida es la mejor, siendo desde el punto vista del bosquesino como
una vida constreñida, así lo demuestra ante el habilitador y ante el desarrollo de sus hijos para
su superación, que es tomada como un gran sacrificio. En general, las actividades bosquesinas
están motivadas por el gusto, el placer que da la satisfacción de realizarlas. La satisfacción
bosquesina reside entonces en todo el proceso de la actividad que debe ser placentero y no
solo en su resultado cuantitativo (“¿cuánto dinero he ganado?”) como pretende medir la
sociedad urbana.
Es de suma importancia tener clara la visión del bosquesino ante sus proyectos, como lo es el
gusto por sus quehaceres y por ello dejarán en segundo plano todo proyecto de producción,
sin importar el ingreso de dinero pues para ellos esto último es poco relevante. Así también, si
se ven constreñidos optarán por dejar el proyecto.
Además se concluye que el bosquesino como tal no se ve atraído al mercado más que por
obligación a satisfacer sus necesidades, y que el consumo para los bosquesinos no está
relacionado solo a la producción del mercado, sino también a la producción familiar y es aquí
donde el bosquesino opta por una inversión, más no ahorro, para las siguientes generaciones
de su familia sin ser víctima de la “envidia” de parte de lo demás bosquesinos y no dejar atrás
su “estándar de vida bosquesino” al que ya está sintonizado.
V. BIBLIOGRAFÍA
● Gasché, J. & Vela, N. Sociedad Bosquesina. Tomo I. Lima: Tarea Asociación Gráfica
Educativa; 2012. Disponible en:
https://centroderecursos.cultura.pe/sites/default/files/rb/pdf/Sociedad%20Bosquesina%20Tom
o%201.pdf
● Olórtegui, J. La naturaleza en la cosmovisión de los pueblos originarios de la amazonía
peruana. Cátedra Mariátegui [Internet] Lima: Año V, No. 28; 2016. Disponible en:
https://www.catedramariategui.com/anteriores/2016/5_Naturaleza_y_cosmovisi%C3%B3n.pd
f
● Artículo publicado en la revista del IIAP: Folia Amazónica. Iquitos, IIAP. 2007, Vll. 16, No
1-2, 81-88. Disponible en:
http://www.servindi.org/pdf/concepto_de_sociedad_bosquesina_IIAP.pdf
● J. Álvarez; 2017. La verdadera política. Disponible en:
https://www.leerydifundir.com/2017/10/la-verdadera-prioridad/
● Gasché, J. “¿Qué valores sociales bosquesinos enseñan en las escuelas de la Amazonía rural?”
Revista ISEES Nº 10, enero - junio 2012, 17-40. Disponible en:
https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/4420035.pdf
https://centroderecursos.cultura.pe/sites/default/files/rb/pdf/Sociedad%20Bosquesina%20Tomo%201.pdf
https://centroderecursos.cultura.pe/sites/default/files/rb/pdf/Sociedad%20Bosquesina%20Tomo%201.pdf
https://www.catedramariategui.com/anteriores/2016/5_Naturaleza_y_cosmovisi%C3%B3n.pdf
https://www.catedramariategui.com/anteriores/2016/5_Naturaleza_y_cosmovisi%C3%B3n.pdf
http://www.servindi.org/pdf/concepto_de_sociedad_bosquesina_IIAP.pdfhttps://www.leerydifundir.com/2017/10/la-verdadera-prioridad/
https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/4420035.pdf

Continuar navegando