Logo Studenta

Serpientes Prehispánicas

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DEL ESTADO DE MORELOS
FACULTAD DE ARTES
“Ensayo sobre las serpientes prehispánicas”
Presenta:
Laurel Mayer
Arte Prehispánico
Quinto Semestre
Profesor Octavio Rocha
ENSAYO SOBRE LAS SERPIENTES PREHISPÁNICAS
Por Laurel Mayer
Facultad de Artes, UAEM
Introducción
Todos conocemos a las serpientes porque nos hemos encontrado algunas o las hemos visto en zoológicos. Los mesoamericanos también las conocían, además las adoraban y las representaban. Incluso tenían varios dioses con motivos de serpientes. 
Este ensayo se basa en los capítulos que escribió Sahagún sobre las serpientes. Principalmente se enfoca en cómo las veían los mesoamericanos y lo que creían sobre ellas.
El tema a desarrollar es “Las serpientes como seres sobrenaturales”, donde especificaré cuáles eran las serpientes de mesoamérica, qué creencias habían sobre ellas, cuáles eran sus supersticiones y datos sobre religiosos. 
Pretendo comparar los nombres de las serpientes con las que conocemos hoy, deducir cuáles de ellas eran ficticias o imaginarias, y comprender por qué tenían ciertos mitos sobre ellas. 
1. Las serpientes como seres sobrenaturales
Una de las diosas más importantes que tenían los mesoamericanos era Cihuacóatl, quien también era llamada Tonantzin.[footnoteRef:1] Sahagún encuentra cierto parecido con Eva, debido a que Eva fue nuestra madre engañada por una serpiente. Se le han encontrado otros parecidos a esta diosa, como por ejemplo a la virgen de Guadalupe. También existen varias leyendas y mitos sobre esta diosa. Sahagún señala que en la noche bramaba en el aire, que durante la conquista la nombraron “la llorona” y decían que se aparecía como fantasma. También dice Sahún que Cihuacóatl dejaba una cuna en el tianguis entre las mujeres, y si miraban en ella encontraban un pedernal. [1: Fray Bernardino de Sahún, Historia General de las cosas de la nueva España, Juan Carlos Temprano, Universidad de Wisconsin-Madison, libro I Capitulo 6.] 
Tenían igualmente una diosa llamada Chicomecóatl, la diosa del maíz. Sahagún dice que debió ser la primera mujer en hacer pan y guisados, pues era la que daba los mantenimientos del cuerpo para conservar la vida humana.[footnoteRef:2] Como otro dios tenían a Quetzalcóatl, quien fue hombre, pero también deidad del viento. Sahagún indica que Quetzalcóatl barría los caminos a los dioses de la lluvia para que vinieran.[footnoteRef:3] [2: Fray Bernardino de Sahún, Historia General de las cosas de la nueva España, Juan Carlos Temprano, Universidad de Wisconsin-Madison, libro I, capítulo 7] [3: Ibid. I, capítulo 5] 
Dentro del capítulo sobre las culebras, Sahagún menciona a quetzalcóatl como una serpiente existente e indica que abundan en Totonacapan, además de lo siguiente:
“Llámase quetzalcóatl porque cría plumas de la misma manera de la pluma rica que se llama quetzalli, y en el pescueço tiene unas plumas que se llaman tzinitzcan […] en la cola y en los eslabones tiene pluma como el ave que se llama xiuhtótotl […] y en el pecho tiene pluma colorada. Raramente parece esta culebra, ni se sabe lo que come. […] Cuando parece es para picar al que ve, […] cuando pica, también ella muere, porque echa de un golpe toda su ponzoña y con ella la vida.” [footnoteRef:4] [4: Ibid. XI, capítulo 5] 
Habría sido una gran experiencia ver a dicha serpiente tan hermosa, y nadie vivía para contarlo, pues morían antes. Por eso nadie sabía casi nada sobre su ellas. Si existiera, habría suficientes razones como para divinizarla y hacer de ella a uno de los dioses principales. Pero esta no es la razón por la cual el dios del viento se llamaba Quetzalcoátl.
Sobre la asociación de Quetzalcóatl con la serpiente, Sahagún menciona en sus libros constantemente que la serpiente estaba relacionada con el camino.[footnoteRef:5] En cuanto a Cihuacóatl, desconozco la razón por la que era relacionada con las serpientes. Muchas divinidades mesoamericanas llevaban el nombre de cóatl debido a que eran dioses terrenales. Laurette Sejourné indica en su artículo “El Lenguaje Simbólico Náhuatl”[footnoteRef:6] que en simbolismo náhuatl la serpiente figura la materia y se encuentra asociada con divinidades terrestres, igualmente menciona que el hombre se arrastra como reptil en el polvo. Es notorio que Chicomecóatl haya sido identificada con las serpientes debido a que en los maizales se encuentran constantemente serpientes. [5: Ibid. IV, capítulo 16] [6: http://www.geocities.com/Athens/Atrium/9449/sejourne_pensamiento/sejourne_pensamiento.htm] 
La serpiente del maíz se llamaba cincóatl. Esta serpiente es llamada comúnmente cincoate, refiriendose a la Pityophis deppy.[footnoteRef:7] Sahagún indica que se trataba de una serpiente que no muerde, pero mata enroscándose en el cuello de su presa.[footnoteRef:8] Curiosamente dice que pica con la lengua, lo cual no puede ser posible ya que las serpientes no pican, sino muerden. Existen muchos mitos, incluso hoy en día sobre esta serpiente. En Jalisco, por ejemplo, se dice que estas serpientes maman a las vacas o las mujeres, y le dan la cola al niño para que no llore.[footnoteRef:9] [7: http://nahuatl.ifrance.com/c/nahuatlCINTO.html] [8: Fray Bernardino de Sahún, Historia General de las cosas de la nueva España, Juan Carlos Temprano, Universidad de Wisconsin-Madison, libro XI, capítulo 5] [9: http://mitos-mexicanos.com/mitos/ejemplos-de-mitos/ejemplos-de-mitos-sobre-reptiles.html] 
Muchas descripciones de Sahagún son maravillosas y algunas son solamente mitos que pudieron ser inspirados en serpientes existentes. Como por ejemplo, acóatl[footnoteRef:10], la serpiente de agua. La descripción de esta serpiente podría tratarse de una anaconda por ciertos puntos. Sahagún dice que es una serpiente muy gruesa y negra con barbas tras la cabeza. Dice que vive en las cuevas debajo del agua y caza humanos astutamente de la siguiente manera: [10: Op. Cit Sahún libro XI, capítulo 4] 
“Hace un hoyo acerca del agua […] toma peces grandes […] y tráyelos en la boca y échalos en el hoyo. […] Y algunos indios atrevidos, entre tanto que sale otra vez, tómale los peces de la lagunilla […] aunque vaya lexos el que lleva los peces, vele […] y echa tras de él tan recio como una saeta […] y como llega al que le lleva los peces, enróscasele al cuerpo y apriétale reciamente.”[footnoteRef:11] [11: Ibid.] 
También dice que la serpiente mata a los hombres escupiéndoles veneno y luego se los come. Tan temida criatura podría ser solamente producto de la imaginación, o tal vez algunas partes de la descripción son verdaderas, tal vez podría existir una serpiente peligrosa que comiera hombres pero no con esas características. 
Había muchas otras serpientes imaginarias como por ejemplo la maquizcóalt[footnoteRef:12], serpiente de dos cabezas, pues tenía cabeza en lugar de cola y andaba hacia ambas partes. Dice Sahagún que a los chismeros le llamaban por el nombre de esta serpiente. Seguramente este mito nació con el motivo de tener una serpiente para dicho apodo. Una serpiente que me pareció muy simpática fue la petlacoátl. Sahagún menciona lo siguiente: [12: Ibid. Libro XI, capítulo 5] 
“Dizque que se juntan muchas culebras y se entetexen como petante y andan de acá y de allá, porque tiene todas las cabeças hazia fuera aquella tela; está cercada de cabeças de culebras.” [footnoteRef:13] [13: Ibid. ] 
El único animal que podría imaginarme con esta descripción sería un ciempiés, el cual posiblemente pudo haber sido la inspiración a esta creencia, ya que cada extremidad podría ser una culebra. 
Los chichimecas llamaban a una serpiente citlalcóatl, la cual creían que era verde pintada de estrellas.[footnoteRef:14] Cuando mordía, creían que una estrella lanzaba un flechazo como intermediario entre la serpiente y el herido, y si este seguía vivo hasta la mañana, entonces se curaría al recibir la luz del día.[footnoteRef:15] Podría tratarse de alguna serpiente con manchas que simulara estrellas, pienso que la relacionaban con la estrella de Venus, porqueaparece en las mañanas. [14: Fray Bernardino de Sahún, Historia General de las cosas de la nueva España, Juan Carlos Temprano, Universidad de Wisconsin-Madison, libro XI, capítulo 5] [15: http://nahuatl.ifrance.com/c/nahuatlCINTO.html] 
Existen muchas otras creencias sobre serpientes, pero en mi opinión me parece que no existieron más que en la imaginación. La serpiente tetzauhóatl[footnoteRef:16], Sahagún dice que creían que al verla uno moría de espanto o quedaba muy enfermo. Creían también en la existencia de una serpiente llamada palancacóatl[footnoteRef:17], olía a carne podrida y se le acercaban las moscas, tenía algo parecido a llagas por el cuerpo y cuando mordía, el herido se podría antes de morir. También se decía de unas culebras que tenían las colas adentro y las cabezas por fuera y que andaban rodando. Si alguien la veía, estas se desbaratan y huían. [footnoteRef:18] Sahagún habla de otra serpiente llamada xicalcóatl[footnoteRef:19], la cual tiene una jícara en la espalda para engañar a los hombres y ahogarlos con una ola. [16: Op. Cit. Sahún, libro XI, capítulo 5] [17: Ibid ] [18: Ibid ] [19: Ibid ] 
Quizás existían más serpientes míticas y monstruosas, pero muchas se perdieron en el tiempo y nadie escribió nada sobre ellas. Hay poca información sobre lo que se creía respecto a las serpientes y pocas representaciones supersticiosas. Casi todas las representaciones son sobre dioses o elementos del calendario. 
Mencionaré algunas otras creencias que se tenían en cuanto a la suerte o el porvenir respecto a las serpientes. Una de estas es sobre una serpiente en específico, llamada chimalcóatl.[footnoteRef:20] Si alguno alcanzaba a ver esta serpiente podría ser de mal agüero pues habrían de morir, pero otros creían que eran de buen agüero, pues tendrían prosperidad en la guerra. No comprendo la procedencia de esta creencia, ya que nada tiene que ver con las serpientes. Los agüeros son un pretexto para culpar a cualquier cosa de la buena o la mala suerte. [20: Ibid ] 
Los comerciantes creían que si se nacía en el noveno signo Ce Cóatl se tendría prosperidad en el oficio. Siempre y cuando no fuera uno negligente o perezoso. También era un signo propicio para partir.[footnoteRef:21] Como ya mencioné anteriormente, la serpiente se encontraba relacionada con los caminos, por lo tanto deduzco que este signo era bueno para quienes viajaban, por ejemplo los comerciantes. [21: Ibid libro IV capítulo 16] 
Conclusión
Los indígenas mesoamericanos eran sumamente supersticiosos. Mientras investigaba me preguntaba realmente cuántos de ellos habrán conocido por vista a las serpientes anteriormente mencionadas. A todo esto, creo que todas estas descripciones pasaban de boca en boca pero jamás eran comprobadas, y se vivía con la idea de que existían. Algunas de las serpientes míticas que tenían estaban estrechamente relacionadas con serpientes conocidas hoy en día, las cuales son reales. No logré comprender muchas de sus creencias, pues no había suficiente información. Las creencias que comprendí me parecieron curiosas y algunas un tanto simpáticas. Hace falta conocer más para poder entender. 
Bibliografía
· Fray Bernardino de Sahún, Historia General de las cosas de la nueva España, Juan Carlos Temprano, Universidad de Wisconsin-Madison
· http://www.geocities.com/Athens/Atrium/9449/sejourne_pensamiento/sejourne_pensamiento.htm
· http://nahuatl.ifrance.com/
· http://mitos-mexicanos.com/mitos/ejemplos-de-mitos/ejemplos-de-mitos-sobre-reptiles.html
· http://www.correodelmaestro.com/anteriores/1999/octubre/sentidos41.htm
· http://www.persee.fr/authorSearch.do;jsessionid=8B8A875DFC3E12121178B8C2AC577F57.vesta?alias=auteur_4999
· Eduard Seler, Las imágenes de animales en los manuscritos mexicanos y mayas, casa Juan Pablos, México 2004
 
1

Continuar navegando