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Peronismo sin Perón? Senén & Bosoer ¿Qué hacer con la masa votante peronista? Esta masa no se iba a doblegar e iba a mantener su lealtad para con el peronismo. En 1962, las fuerzas armadas se dividen en azules y colorados. Los azules legalistas y apoyan nuevas elecciones. Los colorados advocan por una dictadura para desperonizar el país, porque conciben en el peronismo el causante de todos los males de la sociedad. Los azules son aquellos que ganan esta disputa. Desde que Perón se exilia, el movimiento se divide en dos líneas: la línea dura era dirigida por Framini y se componía de la vieja guardia, aquellos peronistas que habían acompañado a Perón en su gobierno; y por otro lado, la línea blanda dirigida por Vandor, una figura con gran capacidad de pacto y de dialogo, y su composición se basa en peronistas que se habían acercado al movimiento ya con Perón en el exilio y contaba con un fuerte componente sindicalista. Las dos líneas tienen una funcionalidad para Perón. La línea blanda va a ser la fuerza contestataria del peronismo, mientras que la línea blanda va a ser aquella que pacte y se complemente con la línea dura según Perón. Vandor va a tener mucho más poder que Framini y va a controlar las 62 Organizaciones, dado que era el secretario general de la UOM. Su capacidad de generar liderazgo. En 1962, mediante las elecciones legislativas el peronismo vuelve al poder por medio del Frente Nacional y Popular. Este frente se disputaba el poder con el radicalismo, pero se los va a terminar proscribiendo por el hecho de su cercanía con el peronismo. Cuando se lo proscribe, Perón manda la decisión desde Madrid de que se vote en blanco y por esto accede al poder Illia de la UCRP. La lealtad peronista y la crisis política son las razones por las que Perón todavía mantiene su poder a pesar de estar en el exilio en España. La lealtad es un sentimiento de pertenencia, no evocado desde los líderes sindicales sino desde el pueblo. Illia va a ser duramente criticado por Vandor, sostenido que el gobierno no existe y no tiene entidad. Por esta razón, Vandor pone en práctica el Plan de Lucha, que va a implicar 4 millones de trabajadores. Por medio de esto, Vandor va a liderar la UOM y acapara el poder de las 62 Organizaciones. La CGT no es completamente peronista, dado que algunos sindicatos seguían en mano de socialistas. Las 62 Organizaciones van a tomar pacíficamente las fábricas, que con el tiempo se va a ir suavizando y se va a transformar en marchas y actos contra el gobierno. El Plan de Lucha tenia detrás, como idea principal, un recambio de las políticas económicas y sociales. El peronismo va a buscar, por medio de la agitación social, la posibilidad de un cambio de gobierno. Pero este cambio no se sabe por quién va a estar liderado, y en esta época nadie se va a proponer un peronismo sin Perón. Vandor empieza a decir que hay un solo peronismo, sostenido que hay un movimiento unificado, lo cual no era cierto, dado que el mismo Vandor había ganado el control del movimiento en un lucha de poder con Framini. Vandor sostiene que las fuerzas armadas quieren lo que desea el pueblo, pero esta idea era completamente equivocada. Luego de esta entrevista se plantea la Operación Retorno. La prensa va a cobrar un rol muy importante en referencia a la pugna de poder dentro del movimiento peronista. En 1964, Perón decide retornar y forma un comité denominada los Cinco Grandes: Framini, Parodi, Iturbe, Lascano y Vandor. Todos exceptuando Framini eran vandoristas. Perón les da la orden de organizar su retorno al país. ¿Vandor quería que Perón vuelva? Independientemente de su postura, Vandor debía demostrar entusiasmo en la idea del retorno debido a que todavía no se concebía la posibilidad de un peronismo sin Perón. JDP decide volver por las elecciones de 1963 y por el hecho de que Vandor ya comenzaba a tener poder independientemente de su actividad como representante de Perón en el país. JDP empieza a ver que la línea vandorista empieza a ser una amenaza. Perón va a enviar mensajes contradictorios en todos sus actos relacionados con su retorno al país. Va a acusar a los Cincos Grandes del fracaso de su retorno y la detención se vuelo en el Brasil. La prensa internacional veía en Vandor al sucesor y heredero de Perón, el próximo líder del justicialismo. Pero Vandor quiere seguir siendo concebido como peronista de Perón. Vandor sigue apegado al sindicalismo, que era un actor político muy importante. El sindicalismo es comparado con el oficialismo debido a su organización y a su capacidad de movilización. Esto se vislumbra con la llegada de Charle De Gaulle, donde el sindicalismo prepara una recepción mejor que la preparada por el radicalismo en el gobierno. Esto se va a convertir en mensaje para Illia y para Perón. El mensaje para el gobierno era que necesitaba pactar con el sindicalismo, mientras que para Perón se le demostraba el poder que tenía el sindicalismo vandorista. Perón manda un mensaje contradictorio: que se le de importancia a la MRP (peronismo violento). Pero este medida no es acatada. JDP mira con recelo la cantidad de intermediarios que hay en su figura y el pueblo, afectando la estructura vertical impuesta en el primer peronismo. Como resultado de esto se da lo que conocemos como burocracia sindical. Esta erosión de la estructura verticalista afecta la lealtad cultivada por Perón. El 2 de diciembre de 1964 se decide como la fecha para que retorne Perón. El gobierno argentino presiona al brasileño para que no deje seguir recorrido a Perón. Este hecho demuestra la imposibilidad de que vuelva Perón, desprestigia al oficialismo y aumenta el poder de Vandor. Se envía la orden de que se realice un manifestación, pero este comunicado nunca es transmitido a las masas, por lo que dicha manifestación nunca se realiza, socavando la figura y el poder que emanaba del retorno de Perón. El movimiento peronista, luego de esta situación, se separa en tres facciones: la línea dura, el vandorismo y los revolucionarios. Hay una incertidumbre muy grande, hay enojo con el oficialismo, con el gobierno brasileño, con los Cinco Grandes, con Vandor e Iturbe. La conferencia de prensa organizada por Vandor termina con disturbios, pero en dicha conferencia se lee una carta de Perón en la que se llama a la lucha revolucionaria y en la que se culpa del fracaso al oficialismo. A este llamado a la acción de Perón que pone a Vandor como líder se le opone la facción revolucionario del peronismo, dado que estos se oponían a la burocracia sindical. El resto de las organizaciones sindicales, exceptuando la UOM, sufren un problema, sus bases sindicales se oponen a sus líderes. Esto demuestra la erosión en la relación entre Perón y el pueblo. Alonso se pelea con Vandor por el control del sindicalismo. Si bien Alonso era el secretario general del CGT, Vandor comienza a bloquear algunas de sus propuestas, mientras intentaba unificar al sindicalismo peronista entorno a su figura. Es en este momento, en el que Perón ve en Vandor una amenaza personal y manda a Isabel a frenar su poder, pero fracasa. En las legislativas de 1965, el partido Unión Popular, relacionado con Vandor, gana las elecciones sobre la UCRP. De esta manera, empieza a haber líderes sindicales en el congreso. En este contexto, se empieza a ver en Vandor un líder que no solo quiere aglutinar al sindicalismo, sino que quiere formar un movimiento obrero sin la figura de Perón. JDP demuestra su poder en las elecciones de Mendoza, donde su candidato vence al candidato vandorista, Para Vandor, el fracaso se da debido a que se da cuenta que el pueblo sigue prefiriendo a Perón. Pero a JDP también le sale mal esta jugada porque las fuerzas armadas son alertadas por el poder creciente del peronismo. JDP continúa teniendo poder, pero, por otro lado, no puede tener poder físico y estar al mando¿tiene poder efectivamente o no? No se puede dar un peronismo sin Perón, pero la opción contraria no se puede efectuar.
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