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La "General Estoria" como Biblia
La Biblia tuvo una gran influencia en la sociedad medieval y en la creación de obras literarias, era considerada como la fuente de conocimiento más importante y se utilizaba para enseñar a leer y escribir, además de ser la principal guía moral y religiosa. La Iglesia era la principal difusora de la Biblia y los sacerdotes la utilizaban en sus sermones para explicar los pasajes bíblicos a los fieles.
En cuanto a la creación de obras literarias, la Biblia fue una de las principales fuentes de inspiración. Muchas obras literarias de la época utilizaban historias bíblicas y personajes como modelo moral y religioso. La General Estoria de Alfonso X es un ejemplo de ello, ya que contiene una gran cantidad de información bíblica y se presenta como una especie de historia universal que parte desde la creación del mundo hasta la resurrección de Cristo.
La Biblia de la General Estoria de Alfonso X recae en que esta obra es considerada como una especie de Biblia secular, ya que se utilizó como fuente para la composición de textos sagrados y profanos, así como para la formación de valores y moral en la sociedad. 
La Biblia se utilizó como un modelo universal de referencia, de cuyo contenido se tomaron muchos aspectos a adoptar en el ámbito cultural, político, social y religioso. Alfonso X consideraba que la Biblia era una fuente confiable y única para establecer los hechos históricos y las verdades teológicas. También se puede considerar una obra didáctica, ya que a través de ella se intentaba inculcar las enseñanzas bíblicas mediante los relatos históricos.
El estudio del texto subyacente en la General Estoria de Alfonso X es importante por varias razones: en primer lugar, el texto subyacente es la Vulgata, que es la versión latina de la Biblia y que fue muy importante en la Edad Media. Es útil para comprender mejor cómo se trabajó con la Biblia en la época y cómo se interpretaron los textos sagrados en ese contexto, el cual fue modificado y reinterpretado por los alfonsinos, lo que significa que hay variaciones e interpolaciones que son importantes para comprender mejor la configuración del texto central.
En segundo lugar, el estudio del texto subyacente de la GE es importante porque permite establecer criterios discriminatorios entre los diferentes textos bíblicos, se pueden comparar las versiones latinas de la Vulgata con las traducciones de los LXX y ver cómo se mezclaron las diferentes versiones para crear una nueva versión. Existen varias diferencias entre las versiones latinas de la Vulgata y las traducciones de los LXX. 
A saber, la Vulgata fue una traducción al latín de la Biblia en el siglo IV realizada por San Jerónimo, mientras que las traducciones de los LXX fueron hechas en griego en el siglo III a.C. y utilizadas por la comunidad judía de Alejandría. La Vulgata se basa en los textos hebreos y arameos originales, mientras que las traducciones de los LXX se basan en una versión griega de los textos originales, que incluye algunos libros adicionales que no se encuentran en la Biblia hebrea.
La Vulgata fue una traducción más literal, mientras que las traducciones de los LXX utilizaron un estilo más libre y a menudo interpretativo. Esta diferencia en el estilo de traducción puede llevar a variaciones significativas en el significado de los textos. Debido a que la Vulgata fue ampliamente utilizada por la Iglesia Católica durante la Edad Media, tuvo una gran influencia sobre la literatura occidental y la cultura en general. 
Por otro lado, las traducciones de los LXX tuvieron una mayor influencia en la cultura judía y en las versiones de la Biblia utilizadas por las comunidades ortodoxas orientales. En ambos casos se pueden analizar las glosas y ditologías (repetición de una misma palabra en diferentes partes del texto) para establecer cuáles son las fuentes más importantes.
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ReferenciasMorreale, M. (1982). La General Estoria de Alfonso X como Biblia. Pp. 767-773. Recuperado de: https://www.cervantesvirtual.com/obra/la-general-estoria-de-alfonso-x-como-biblia/