Qué es la Antropología?

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¿Qué es la Antropología?
	
La confusión entre los términos etnografía, etnología y antropología no es inusual:
· La etnografía, en sus inicios, era la descripción de la costumbres de los pueblos “primitivos”.
· La etnología englobaba los conocimientos enciclopédicos que podían obtenerse de ellos.
· La antropología se dedicaba al estudio de los aspectos somáticos y biológicos del hombre.
En los 50’, Claude Levi-Strauss introdujo en Francia el uso del término antropología como como el estudio de los seres humanos en todos sus aspectos. Esta idea trajo consigo una mayor objetividad, dejando de lado la idea de sociedades primitivas inmovilizadas en una historia estacionaria.
A diferencia de la mayoría de animales, el hombre no está ligado a un entorno específico: Mediante la cultura, se adapta a los distintos medios. No se desarrolla únicamente en su entorno natural, sino que atraviesa un amplio periodo de aprendizaje. 
La antropología ha demostrado la íntima solidaridad existente entre el cuerpo individual y la relación social. Toda reflexión sobre el hombre es social, por lo tanto, toda antropología también es sociología.
El antropólogo estudia las relaciones intersubjetivas entre nuestros contemporáneos, sean quienes sean, provengan de donde provengan.
¿De qué modo, en un lugar determinado, conciben unos y otros sus relaciones? Averiguarlo es el verdadero objetivo de la antropología. Independientemente de las preferencias teóricas de los investigadores, el enfoque del punto de vista antropológico reside en el interés por el estudio de las relaciones con otros tal como se construyen en su contexto social. 
Hoy ya no basta con familiarizarse con aquello que nos parece curioso: En todo el mundo, los hombres se interesan por las diferencias de lengua, de usos, de costumbres y de hábitos. Se muestran más conscientes de la transformación del mundo.
Para un antropólogo, la elección del objeto de investigación y la metodología adoptada implican cierto arraigo al entorno, pero la investigación no puede reducirse a las relaciones personales in situ.
La descripción minuciosa de los comportamientos humanos en su contexto histórico y cultural – por un lado – y la comparación con otras formas – por el otro – fundamentan la capacidad de análisis propia de la antropología.
La antropología reconoce la pluralidad de culturas, pero también sus referencias comunes y las diferencias internas de una misma cultura.
La diversidad de temas que abarcan los antropólogos es tal que se ha producido una creciente ramificación: Especializaciones que se crean por comodidad institucional pero rápidamente se ven consagradas por el uso.
El antropólogo trata de alcanzar una verdad de la que son portadores las personas a las que interroga, a veces incluso sin que ellas mismas lo sepan.
En un principio, los estudios antropológicos de las relaciones entre los hombres y su entorno eran deterministas: Se creía que las diferentes sociedades o culturas debían sus características al ambiente en que se habían desarrollado.
· La antropología, aplicada al campo de lo económico, abarcó en un principio la dudosa viabilidad de aplicar las ciencias económicas estándar en las civilizaciones “primitivas”, donde lo ritual se entremezclaba en casi todos los aspectos de la vida cotidiana, un desafío para numerosas teorías. Luego, se enfocó la posibilidad – o imposibilidad – de aplicar la “racionalidad económica”. 
· La antropología política estudia los tipos de gobierno: Impactos, legados e ideologías a través de la historia (territorialidad, leyes y conflictos). Está estrechamente relacionada con la antropología del parentesco, pues en ese tipo de lazos se extiende hacia las redes políticas (matrimonio).
· La antropología religiosa generalmente engloba el origen y desarrollo de los movimientos religiosos; aunque, por un largo tiempo, se vio marcada por las religiones monoteístas/de un Libro (Católico-Cristiano, Judaísmo, Islam). A menudo, la antropología religiosa enfrenta impases con el vocabulario, ya que debe abstenerse de canonizar definiciones conceptuales.
A finales de la década de 1970, la antropología cambió de enfoque: Pasó de ser una ciencia de hechos, normas y estructuras a una de procesos.
Con frecuencia, los antropólogos han abordado rituales exclusivamente desde el punto de vista de sus efectos sociales, ignorando su dimensión estética. Al inventarse el cine, los científicos quisieron emplear esa nueva herramienta en el estudio y observación de los comportamientos humanos, naciendo así la antropología visual.
La antropología social congrega tres tipos de actividad:
· Investigación etnográfica – Basada en registros audiovisuales.
· Escritura y publicación – Utilizando los registros etnográficos.
· Estudio de la imagen – fotografías, películas y artes gráficas.
Hoy en día, los antropólogos intervienen cada vez más como asesores en “problemas de sociedad”, como la bioética, las implicaciones de las nuevas técnicas médicas, la biotecnología, la educación, la cultura empresarial, la delincuencia, las sectas religiosas, etc…En general, quienes toman decisiones necesitan una “ciencia corta” a fin de ajustar sus elecciones a corto plazo. 
La antropología es una disciplina-encrucijada, pero a menudo los intercambios son mutuos. De todas las ciencias sociales, la Historia es la que más se ha inspirado en la actividad antropológica y acercado a ella, abriendo las puertas a numerosos nuevos temas de estudio.
En antropología, la eficacia de un Trabajo de Campo no reside tanto en la investigación consciente como en el aprendizaje espontaneo. Aunque la metodología sea importante, el “arte del campo” no se aprende en los libros. Al sumergirse en una cultura diferente a la nuestra, esta nos informa mucho más de lo que nuestra memoria consciente/organizada nos deja creer. En un Trabajo de Campo, el talento del antropólogo es mostrarse receptivo.
La antropología pone en crisis el decorado de las verdades establecidas, ya que – durante su estancia en el terreno – el investigador se ve obligado a abandonar la protección que supone el conformismo con respecto a un orden concreto del mundo.
Enfrentado a una diferencia cultural, el antropólogo ilustra también el fundamento de las concepciones específicas de su propia cultura: Una investigación no se reduce al lugar donde se lleva.