La vieja disputa entre la teoría y la práctica - Romi Scuderi

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La vieja disputa entre la teoría y la práctica. Se vislumbra una tercera vía: los saberes de oficio.
· Tres vías: teoría- práctica.
· la formación docente se refleja esta dicotomía entre teoría y práctica que monopoliza el saber y deja afuera el hacer.
· Tercera vía: la experiencia, los saberes de oficio. La fuente de validez de esos saberes descansa en el puesto de trabajo de los educadores, que al hablar de su experiencia cobran protagonismos otros tipos de saberes que ni los formadores, ni los especialistas mencionan y que si lo hacen no les otorgan la importancia que tienen sus protagonistas. 
· Por eso la autora resalta la importancia de recuperarlos y convocarlos en los espacios destinados a la formación docente. 
AHONDAR EN LOS SABERES DE OFICIO (YO)
· Los docentes suelen percibir que no pueden enseñar, porque no saben. Porque la formación aporta conocimientos, destrezas, prácticas, pero no saberes de la experiencia de oficio. Estos saberes son los que asocian teoría – práctica y además constituyen una herramienta para la acción. Es por ello que sería importante dice la autora, que no sea envasado y se pueda compartir entre otros docentes.
· Si bien el saber de la experiencia no es asimilable al conocimiento práctico, cada docente moldea su clase de acuerdo a su grupo áulico o entorno de trabajo, lo que le da sentido a su práctica cotidiana.
· Su práctica se moldea y responde a la necesidad de solucionar problemáticas concretas; que serán fruto de improvisación y adaptación a situaciones nuevas y únicas.
· Hay una diferenciación entre vivencia, (es decir, de acuerdo al modo de ver y pensar lo educativo) y experiencia, es decir, (situaciones cotidianas que revisten carácter extraordinario, como se resuelve algo a partir de una situación extraordinaria).
· Los saberes de oficio constituyen una mezcla de saberes y experiencia. Contienen saberes formalizados, métodos, técnicas, y formas de hacer las cosas; tienden a prevalecer, a menos que surja alguna dificultad. Dichos saberes pueden plasmarse como relatos de experiencias pedagógicas. Aunque la mayoría de las veces estos relatos no llegan a los docentes en proceso de formación.
· El conocimiento pedagógico (tiene que ver con la situación particular de cada uno, con lo que hacemos y somos) no surge como un ensayo y reflexión teórica, sino que se funda en problemas y situaciones prácticas. Afrontados y resueltos por los docentes en escenarios educativos reales (clase)
· El trabajo colectivo de los docentes necesita también, la producción conjunta entre investigadores profesionales y docentes.
· Cadena del saber: saber pedagógico, conocimiento pedagógico generalizable, conocimientos prácticos y saberes de la experiencia. (son la cadena del saber).
EL DESARROLLO DE UNA DESTREZA: PRIMERA APROXIMACIÓN A LAS PRÁCTICAS FORMATIVAS. ¿CÓMO LO HACÍAN LOS GREMIOS Y TALLERES DE Antaño? (YO)
· El texto habla sobre la importancia de aprender habilidades a través de prácticas formativas y cómo los antiguos gremios y talleres abordaban la formación en oficios. Se destaca que cada profesión tiene formas específicas de formar a los individuos y que en el campo educativo también se pueden encontrar pistas útiles al observar cómo se forman en otras especialidades.
· Se resalta que la transmisión del saber hacer implica crear situaciones en las que los aprendices puedan apropiarse de lo que se les transmite, a través de la experimentación, el acompañamiento y la explicitación de los procesos. El aprendizaje de un oficio requiere tiempo y progreso gradual, y se basa en la autoridad y la transferencia de habilidades por parte del maestro.
· Los gremios medievales ejemplifican esta forma de formación, donde el aprendiz debía pasar por etapas de imitación y producción propia, demostrando competencia y liderazgo. La práctica lenta y exploratoria era valorada, ya que permitía la reflexión, la imaginación y la adquisición duradera de habilidades.
· En los talleres y gremios, los maestros transmitían habilidades a través de instrucciones personales y prácticas, compartiendo sus secretos de oficio y ocupándose de los detalles más insignificantes de la producción. La formación técnica requería contacto directo con los instrumentos y explicaciones orales. 
· Se destaca que los formadores en oficios adultos son aquellos que saben de su oficio y continúan formándose mientras enseñan. No solo transmiten competencias técnicas, sino también sociales y capacidades de adaptación. A pesar de las dificultades, mantienen un discurso estable y apacible, convencidos de que tienen algo valioso que transmitir.
· El texto concluye invitando a reflexionar sobre estas ideas para diseñar prácticas formativas que aseguren la transmisión efectiva del saber hacer, saber obrar y saber enseñar en la formación de futuros docentes