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Tarea 2 Condrictios Generalidades

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UNIVERSIDAD DE GUAYAQUIL
FACULTAD DE CIENCIAS NATURALES
CARRERA DE BIOLOGÍA
Ensayo #2
Ictiología
Brando Bruno Yánez Abad
Guayaquil-Ecuador
30/05/19
Condrictios
Los condrictios son una clase de peces cuyo esqueleto está formado por cartílago y no por huesos como en el resto de los peces. Se originaron en los océanos hace más de 400 millones de años e incluyen a los tiburones, rayas y quimeras. Se caracterizan por poseer una piel compuesta por queratina y escamas placoideas, carecer de vejiga natatoria, en la reproducción los machos realizan la cópula a través de un órgano conocido como pterigopodio y la fecundación es interna. En contraste con los peces óseos, generan pocas crías de crecimiento lento. Estos peces cartilaginosos pueden ser ovovivíparos, ovíparos y en algunos casos vivíparos placentarios o aplacentarios (Matos, Pérez & Benítez., 2015). 
Es sencillo diferenciar el sexo de los tiburones ya que los machos tienen dos órganos copuladores externos, los pterigopodios, situados entre las dos aletas ventrales, que hacen la función de pene. La fecundación es interna; es decir, que el macho introduce el esperma dentro de la hembra. Pueden presentar uno de estos tres tipos de reproducción: Ovípara. Los huevos son liberados al exterior. Son huevos grandes y bien protegidos. Suelen presentar unos zarcillos que les fijan a las algas o las gorgonias. Es el caso del pintarroja (Scyliorhinus canicula). Ovovivípara. Los huevos son incubados en la cavidad interna del cuerpo de la hembra. Los pequeños salen al exterior cuando están bien desarrollados. Un ejemplo es el tiburón toro (Carcharias taurus). Vivípara. Los embriones se desarrollan completamente dentro del útero. Las crías son alimentadas a través de la placenta. Por ejemplo, la musola (Mustelus mustelus) (Durán & Méndez., 2010).
Durante el cortejo, existe un comportamiento generalizado de persecución de la hembra por uno o más machos. Esta actividad podría ser usada por las hembras como un indicador de la condición física de los machos, ya que estas persecuciones usualmente son prolongadas y requieren un esfuerzo físico importante. Así, solo los machos más resistentes serían los que lograrán copular con la hembra cortejada. Durante la cópula los machos deben sujetar a la hembra firmemente, por lo que existen estructuras especializadas que son empleadas para esta acción, por ejemplo, las espinas alares de las rayas y los dientes en los tiburones y algunas especies de rayas. Una vez que el macho tiene sujeta a la hembra mordiendo una de sus aletas pectorales, introduce uno de sus gonopterigios en la cloaca de la hembra, de esta manera se lleva a cabo el apareamiento y la fertilización de manera interna.
Existe la Gestación que se conoce es la viviparidad aplacentaria, en la cual los embriones son retenidos dentro de la madre durante su desarrollo, sin existir conexión placentaria entre la madre y el embrión; estas especies son comúnmente denominadas ovovivíparas. Por ejemplo, el angelote (Squatina californica), se desarrolla dentro de los úteros de la madre, sin embargo, ésta no le aporta ningún nutriente excepto el que tiene de reserva el propio embrión a manera de vitelo. (Romero-Caicedo, 2013). 
Existe un tipo de desarrollo exclusivo de las rayas conocido como trofonemata, en el que el útero de la hembra, en este caso una raya diamante (Dasyatis longa), está modificado con vellosidades, las cuales secretan una sustancia blanquecina y viscosa conocida como “leche uterina”, que le aporta los nutrientes necesarios a la cría para completar su desarrollo y ser una réplica exacta de un adulto (Wourms 1981). 
Los tiburones rabón (Alopias pelagicus) y tinto (Isurus oxyrinchus), se caracterizan porque la hembra provee a sus crías de alimento a través de huevos no fecundados, los cuales contienen suficientes nutrientes para lograr que las crías alcancen tamaños extraordinarios (un tiburón rabón mide al nacer aproximadamente 1,5 m de largo) (Moreno yMorón 1992, Mollet et al.2000). La variación más asombrosa de este tipo de gestación es la que se denomina “canibalismo intrauterino”, comprobada hasta la fecha sólo para una especie, el tiburón tigre arenero (Carcharias taurus), en este caso, el primer embrión de cada útero que es el más desarrollado, se alimentará de sus hermanos más pequeños y de huevos no fecundados que le ayudarán a alcanzar aproximadamente un metro de largo al nacer (Gilmore 1993).
Por último, tenemos a los tiburones estrictamente vivíparos, que al igual que los casos anteriores, se desarrollan dentro de la madre, pero se diferencian debido a que presentan una especie de cordón umbilical a través del cual la madre le transfiere nutrientes, podríamos decir que de una manera muy parecida al desarrollo de los mamíferos, un ejemplo de este modo reproductivo es el tiburón azul (Carrera-Fernández, 2004). 
Cualquiera que sea el método de captura de los tiburones, la presa llega al estómago, donde las enzimas digestivas y los jugos gástricos la deshacen. De aquí, la comida pasa al intestino donde estos restos son absorbidos en forma de nutrientes para el cuerpo del tiburón. 
En el estómago de algunos tiburones que han sido capturados se han encontrado latas, plásticos y otros objetos que otros animales no podrían soportar y les causaría la muerte. El tiburón a pesar de estos objetos digeridos, sobrevive sin mayor problema. La capacidad de los tiburones para digerir alimentos es una gran hazaña, teniendo en cuenta el tamaño de las comidas y la manera de comer. El tiburón come de 3 a 5% del peso total de su cuerpo, de manera que un tiburón de quinientos kilos podría consumir entre 15 a 25 kilos en cada comida (Castillo & Bravo 2016).
Después de tragarse, la comida pasa al esófago, situado en la parte posterior de la boca, y de ahí al estómago. Las enzimas digestivas producidas en la vesícula biliar, páncreas e hígado desmenuzan la comida donde, una vez digerida, se dirige al intestino para ser absorbida. Los tiburones tienen intestinos cortos y compactos, con una válvula espiral. 
La disposición de esta válvula proporciona una superficie máxima de absorción en un pequeño espacio, dejando sitio para un estómago y un hígado y en las hembras de especies vivíparas para el desarrollo de embriones. Después de la absorción, los restos no digeribles se eliminan a través de la cloaca. El tiempo que tarda el alimento en abandonar el estómago de los tiburones tarda, como mínimo 48 horas. El proceso digestivo completo del tiburón, desde la ingestión hasta la excreción, tarda, al menos, 3 o 4 días (Stevens J. 1992). 
Su sistema nervioso el prosencéfalo o cerebro anterior está constituido por lóbulos olfatorios, que se conectan con un par de hemisferios cerebrales situados sobre el diencéfalo; este posee dorsalmente el cuerpo pineal (epífisis cerebral) que actua como glándula de secreción interna, y ventralmente el hipotálamo (regulación de funciones viscerales) y el infundíbulo, al que se inserta la hipófisis (cuerpo pituitario). El mesencéfalo está constituido por dos lóbulos ópticos. El rombencéfalo o cerebro posterior comprende un gran cerebro dorsal, situado encima de la médula oblongata de la que parten diez pares de nervios craneales. 
Como órganos endocrinos cuentan con una glándula pituitaria (hipófisis) que desempeña un papel de centro regulador, produciendo hormonas que actúan sobre otros órganos. También tienen actividad endocrina: el páncreas, el tiroides y los tejidos adrenales (Padilla & Cuesta., 2003).
Ensayo #2: Condrictios
Los condrictios se los puede distinguir por las siguientes características: su esqueleto está formado por cartílago y no por hueso, carecen de vejiga natatoria y además de presentar una piel compuesta de queratina y escamas de tipo placoidea.
La reproducción puede ser de tres tipos: Ovípara cuando los huevos son liberados al exterior, suelen ser grandes y estar protegidos (ocultos) es el caso de Scyliorhinus canicula. Ovovivípara cuando los huevos se incuban en la cavidad interna de la hembra, tal es el caso de Carchariastaurus, donde el primer embrión de cada útero que es el más desarrollado, se alimentará de sus hermanos más pequeños y de huevos no fecundados que le ayudarán a alcanzar aproximadamente un metro de largo al nacer denominado “canibalismo intrauterino”. Y finalmente Vivípara los embriones se desarrollan completamente dentro del útero, presentan una especie de cordón umbilical a través del cual la madre le transfiere nutrientes las crías, por ejemplo Mustelus mustelus. 
Existe además la viviparidad aplacentaria, donde los embriones se encuentran dentro de la cavidad interna de la madre durante su desarrollo, aquí no existe conexión placentaria entre la madre y el embrión, por ejemplo Squatina califórnica no le aporta ningún nutriente excepto por la reserva del propio embrión en forma de vitelo.
En el cortejo, existe un comportamiento de persecución hacia la hembra por uno o más machos, solo los machos más resistentes serían quienes podrán copular con la hembra cortejada. Durante la cópula los machos usan estructuras especializadas que son empleadas para sujetar fuertemente a la hembra, las rayas poseen espinas alares, y los tiburones sus dientes, los tiburones muerden a la hembra sujetando su aleta pectoral, introduce uno de sus gonopterigios en la cloaca de la hembra y se realiza la fecundación itnerna.
Una vez en el estómago la presa, actúan las enzimas digestivas producidas en la vesícula biliar, y los jugos gástricos quienes la deshacen. Una vez digerida, la comida pasa al intestino donde estos restos son absorbidos en forma de nutrientes para el cuerpo del tiburón. Los tiburones tienen intestinos cortos y compactos, con una válvula espiral. 
La disposición de esta válvula proporciona una superficie máxima de absorción en un pequeño espacio, dejando sitio para un estómago y un hígado y en las hembras de especies vivíparas para el desarrollo de embriones. Después de la absorción, los restos no digeribles se eliminan a través de la cloaca. El tiempo que tarda el alimento en abandonar el estómago de los tiburones tarda, como mínimo 48 horas. El proceso digestivo completo del tiburón, desde la ingestión hasta la excreción, tarda, al menos, 3 o 4 días.
Su sistema nervioso está compuesto por el prosencéfalo el cual está constituido por lóbulos olfatorios, que se conectan con un par de hemisferios cerebrales situados sobre el diencéfalo; este posee dorsalmente el cuerpo pineal (epífisis cerebral) que actúa como glándula de secreción interna, y ventralmente el hipotálamo (regulación de funciones viscerales) y el infundíbulo, al que se inserta la hipófisis (cuerpo pituitario). El mesencéfalo está constituido por dos lóbulos ópticos. El rombencéfalo comprende un gran cerebro dorsal, situado encima de la médula oblongata de la que parten diez pares de nervios craneales. 
Como órganos endocrinos cuentan con una glándula pituitaria (hipófisis) que desempeña un papel de centro regulador, produciendo hormonas que actúan sobre otros órganos. 
Matos J., Pérez M. & Benítez Z. (2015) CONDRICTIOS: Tiburones, Rayas y Quimeras. InfoZOA Boletín de Zoología.
Durán R. y M. Méndez (Eds). 2010. Biodiversidad y Desarrollo Humano en Yucatán. Cicy, PPD-FMAM, CONABIO, SEDUMA. 496 pp.	
Romero Caicedo A. F. 2013. Biología reproductiva del tiburón angelito Squatina califórnica (Ayres, 1859) en el suroeste del Golfo de California, México. Tesis de Maestría. Centro Interdisciplinario de Ciencias Marinas-Instituto Politécnico Nacional. La Paz, B.C.S. México. 54 p.
Wourms, J.P. 1981. Viviparity: maternal-fetal relationships in fishes American Zoologist. 21:473- 5.
Gilmore, R. G. 1993. Reproductive biology of lamnoid sharks. Environmental Biology of Fishes. 38:95–114.
Carrera-Fernández M. 2004. Biología Reproductiva del tiburón azul, Prionace glauca (Linnaeus, 1758) en la costa occidental de Baja California Sur, México. Tesis de Maestría. Centro Interdisciplinario de Ciencias Marinas-Instituto Politécnico Nacional. La Paz, B.C.S. México. 67 p.
Castillo J. Bravo. P. 2016. Tiburones fósiles de Chile y la fauna fósil de Bahía Inglesa 
Stevens J. 1992. TIBURONES. Edición española: Encuentro Editorial, S. A. Enric Granados, 86-88.
Padilla F. & Cuesta A. 2003. Zoología Aplicada. Ediciones Díaz Santos S.A.

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