Potencia reactiva, potencia no util

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La potencia reactiva es un concepto importante en los sistemas eléctricos que se refiere a la parte 
de la potencia eléctrica que no realiza trabajo útil, pero que es necesaria para mantener el flujo de 
corriente en un circuito inductivo o capacitivo. En resumen, la potencia reactiva es la potencia 
intercambiada entre las fuentes de energía y los dispositivos en un sistema eléctrico debido a la 
presencia de elementos inductivos y capacitivos. 
 
En un sistema de corriente alterna (CA), la potencia se compone de dos componentes: la potencia 
activa, que es la potencia que realiza trabajo útil y se mide en vatios (W), y la potencia reactiva, 
que se mide en voltamperios reactivos (VAR). 
 
La potencia reactiva se produce debido a la energía almacenada y liberada en los campos 
magnéticos y eléctricos de los elementos inductivos y capacitivos. Estos componentes causan 
defasajes entre la corriente y la tensión, lo que resulta en una transferencia de energía que no 
realiza trabajo útil, sino que se devuelve al sistema. 
 
La potencia reactiva puede tener efectos indeseables en los sistemas eléctricos, como la 
disminución de la eficiencia, la sobrecarga de los equipos y la caída de voltaje. Por lo tanto, es 
importante compensar la potencia reactiva para mejorar la calidad de la energía y garantizar un 
funcionamiento eficiente y estable del sistema. 
 
Para compensar la potencia reactiva, se utilizan dispositivos llamados condensadores y bobinas de 
compensación, que generan una potencia reactiva opuesta para equilibrar el sistema. Esto se 
conoce como compensación de factor de potencia y ayuda a reducir las pérdidas de energía y 
mejorar la eficiencia del sistema eléctrico. 
 
En resumen, la potencia reactiva es la parte de la potencia eléctrica que no realiza trabajo útil en 
un sistema eléctrico debido a la presencia de elementos inductivos y capacitivos. La potencia 
reactiva se compensa mediante dispositivos de compensación de factor de potencia para mejorar 
la eficiencia y la estabilidad del sistema. Entender y controlar la potencia reactiva es fundamental 
para garantizar un suministro de energía eléctrica confiable y eficiente.