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Unidad I Factores Determinantes de la Productividad ¿Qué es la productividad? La productividad es la relación que existe entre el producto del trabajo y los medios con los que cuentas para realizarlo. Suele medirse en unidades de tiempo y expresa la correspondencia entre el trabajo (horas de trabajo) y el producto finalizado. La productividad está relacionada con la eficiencia y el desempeño. En pocas palabras, es una forma de expresar el rendimiento. Y es muy importante porque nos permite conocer qué factores influyen en el trabajo. En cualquier ciclo productivo intervienen muchos factores. El más importante de todos ellos es el tiempo de quien realiza el trabajo. Así es: el tiempo es uno de los factores más importantes que debemos tener en cuenta cuando hablamos de productividad. También debemos considerar los insumos, materias primas, herramientas, condiciones materiales e inmateriales para realizar un trabajo. Estas últimas, las condiciones inmateriales, son de suma importancia. Puede tratarse del ambiente que predomina en el área de trabajo, la disponibilidad de descansos, la cultura laboral, el salario y las prestaciones, por mencionar algunos ejemplos. Coordinar, administrar y controlar son conceptos muy entrelazados con la productividad. Pues cada uno de los factores que intervienen en los ciclos productivos están sujetos a cambios, modificaciones y arreglos, con el fin de obtener la rentabilidad de cada ciclo productivo. ¿Qué es la productividad agregada? La producción agregada es una macromagnitud económica que revela la cantidad de bienes y servicios finales producidos en una economía durante un periodo de tiempo determinado, que generalmente es un año. Tal producción agregada es un flujo de los bienes y servicios en etapa final. Por tal forma, no debe pensarse que esta variable refleja el stock de bienes de una economía. Recordemos que el producto final es aquel bien que ya está listo para ser consumido por sus demandantes. De manera que, la producción agregada no recoge los bienes intermedios que se han producido en el periodo. Es decir, en la producción agregada no se suma la producción de bienes intermedios. Tengamos presente qué bienes intermedios son aquellos que se emplean en la fabricación de otros productos para consumo final. Productividad de los Sectores Industriales La producción industrial es el conjunto de procesos a través de los cuales se transforman las materias primas. De ese modo, se obtienen productos de mayor valor agregado. Es decir, la producción industrial es el proceso por el cual pasan los recursos extraídos de la naturaleza. Esto, con el objetivo de conseguir la mercancía que llegará al consumidor final. Estos procesos se relacionan mayormente (aunque no exclusivamente) al sector secundario de la economía. Así, se requiere de mano de obra y la combinación de diversos insumos para desarrollar el bien que se llevará al mercado. Algunos de los sectores que llevan a cabo este tipo de producción son el textil, el de alimentos procesados y la industria de productos tecnológicos, por ejemplo. Aunque también es aplicable para el caso de servicios públicos, como la energía, que pasa por un proceso de transformación para llegar a los hogares. Los principales tipos de producción industrial son: ● Bajo pedido: La empresa fabrica la mercancía cada vez que un cliente la solicita, siendo el resultado diferente en cada oportunidad. Implica un uso intensivo de mano de obra y está relacionado principalmente a bienes especializados. Ejemplo: La construcción de un puente por encargo por el Gobierno a una empresa constructora. ● Por lotes: Se producen varios productos idénticos en una cantidad limitada. Requiere utilizar una plantilla o modelo y eso permite reducir el tiempo de fabricación. Ejemplo: Confección de camisetas de forma exclusiva para un solo evento deportivo como las olimpiadas escolares. ● En masa: Se produce en gran cantidad unidades idénticas de un mismo producto. Se busca automatizar las tareas para alcanzar un mayor volumen de producción sin necesidad de aumentar (tanto) el número de trabajadores. Para implementar un sistema de este tipo se necesita una demanda alta y frecuente de la mercancía. De lo contrato, quedaría stock sin vender. Ejemplo: Bienes de consumo que encontramos en el mercado como las cajas de cereales. ● El proceso industrial se mantiene activo durante las 24 horas del día. Los procesos se automatizan completamente. Este tipo de sistema es posible cuando es más costoso detener la producción que activarla cada vez que se requiere abastecer del producto. Para implementar este tipo de proceso, se necesita una demanda continua. Ejemplo: Una central térmica que genera energía para una ciudad. Actualmente, la tecnología juega un rol clave en la producción industrial, permitiendo automatizar procesos que antes no podían ser programados. De ese modo, se consigue un mayor volumen de producción. Igualmente, con la tecnología, es posible monitorear el stock disponible y los requerimientos de los clientes en tiempo real. De esa forma, se optimizan los procesos, reduciendo al mínimo la mercadería que se pueda echar a perder o que deba permanecer guardada en almacén. Relación de Productividad con el Desarrollo Económico En los últimos años el término productividad ha tomado fuerza para el análisis económico entendiendo el concepto como una simple ecuación de “hacer mas con menos recursos”, acepción que encierra un sinfín de variables de cualquier índole. Y es que los economistas le dan más importancia cada vez al estudio de la productividad dado la relación que se ha encontrado entre la misma y el desarrollo económico de los países. Si nos remontamos a la historia, podemos observar claros ejemplos sobre como la productividad ha permitido crear las condiciones para el desarrollo económico en diferentes países y en diferentes contextos, como fue el caso de Inglaterra y la revolución industrial o la innovación que ha permitido a Corea del Sur incrementar su potencial económico en la última década. No obstante, en nuestro país la productividad sigue sin dar el salto que estamos esperando y en esa búsqueda hemos podido constatar que el mexicano promedio no es productivo por una cuestión cultural sino por otros factores que aún son desconocidos para las políticas económicas del país. Esto lo respalda el hecho de que un mexicano promedio trabaja al año alrededor de 2,226 horas mientras que trabajadores de países de la OCDE laboran 1,765 horas anuales de acuerdo al IMCO, mientras que el mexicano obtiene 12,850 dólares al año, en otros países del estudio el ingreso alcanza casi 24 mil dólares al año. Tales hechos son los que apuntan a una mayor ponderación en el análisis de la productividad del país y de las empresas, anteponiendo que más horas de trabajo no implican mayor producción y por lo tanto mayor desarrollo. Si bien el presente artículo no trata de realizar un estudio sobre el concepto de productividad, si considera pertinente identificar o sugerir cuando menos los aspectos básicos para el incremento de la productividad. El incremento en productividad como causa del desarrollo económico El desarrollo económico implica un efecto positivo en el bienestar de la sociedad incrementando su poder adquisitivo y la capacidad de consumo de las familias de forma sustentable y responsable. Desde esta perspectiva el desarrollo económico es un factor importante de la calidad de vida de los individuos y por ende, el énfasis en el análisis de la productividad. El análisis de los últimos 20 años muestra que México ha sido incapaz de crecer en este sentido e inclusive ha tenido un retraso en la productividad del 0.6% de acuerdo a cifras de la SHCP. Cabe recalcar que dicho análisis abarca todos los sectores económicos del país por lo que las cifras conciernen a cada empresa y sus colaboradores. En este contexto, podemos identificar 3 factores esenciales para impulsar la productividad desde dentro de la empresa: ● Talento humano: El primer componentepara el incremento en la productividad está a cargo de la mano de obra. La capacitación y especialización del personal tiene un impacto en la productividad de forma considerable por lo que es importante no escatimar en tales inversiones. Asimismo, la relación de la empresa con las instituciones de educación superior debe ser dinámica y fluida de forma que la academia sea un eslabón fundamental en la cadena de aprendizaje de la empresa. ● La innovación y el valor agregado: La reingeniería constante de los procesos es fundamental para obtener mejores resultados. La productividad se basa en la explotación y maximización de los recursos, por lo que siempre se deben buscar mejores formas de hacer las cosas impactando ya sea los beneficios obtenidos, los recursos empleados o cualquiera de los dos. ● Inversiones de capital: La infraestructura juega un papel básico en la producción. Sin embargo las inversiones deben ser estratégicas para que no se conviertan en gastos para la empresa. En muchas ocasiones la adquisición de activos no lleva a cabo un proceso de planificación adecuado. Una inversión debe generar retorno, de lo contrario no es inversión. En este apartado es importante identificar y establecer indicadores de productividad por área de negocio, departamento o incluso por línea de producción, ello con el fin de evaluar el grado de productividad esperado de la inversión a realizar. Es recomendable poner atención a dichos factores con el fin de concientizar a los directivos sobre la utilización de los recursos empresariales recordando la relación entre desarrollo y productividad la cual es aplicable a su ámbito profesional. Variables Macroeconómicas Una variable macroeconómica es una variable económica que refleja el comportamiento de un fenómeno macroeconómico. En ocasiones a las variables macroeconómicas, también se les conoce como variables agregadas. El sentido de esto, es que al final, dado que la macroeconomía estudia la evolución de un conjunto de individuos, una variable macroeconomía es la agregación de muchas variables microeconómicas. Por ejemplo, para calcular el producto interior bruto (PIB) que es una variable macroeconómica, necesitaremos los datos de todos los productores individuales. Si sumamos la producción, medida en unidades monetarias, de todos los individuos de una región o país, el resultado debería ser muy próximo al PIB. Es decir, el conjunto de variables macroeconómicas (producción de cada agente económico) conforman una variable macroeconómica. Una variable macroeconómica se utiliza para analizar una parte del entorno económico. Así, si queremos saber cómo está evolucionando la interacción económica de bienes de un país con el exterior, podríamos analizar la balanza comercial. La idea fundamental de una variable macroeconómica es reflejar, normalmente de forma numérica, parte de la realidad económica agregada. Su estudio es fundamental para saber en qué parte del ciclo económico estamos o para entender qué políticas económicas podrían ser más efectivas. Por ejemplo, aunque algunos países lo han hecho, subir impuestos en una crisis económica no suele ser recomendable. ¿Por qué? Porque los agentes económicos están pasando por un mal momento y necesitan tener más renta disponible para hacer frente a la situación. Medir la actividad económica mediante variables macroeconómicas nos permite medir este tipo de detalles. Las principales variables macroeconómicas son: ● Producto interior bruto (PIB). ● Inflación. ● Desempleo. ● Balanza de pagos. ● Deuda privada. ● Deuda pública. ● Déficit público. Estas tres variables son, sin duda, las más importantes, seguidas y populares. Constituyen las tres variables macroeconómicas de principal interés. Ahora bien, evidentemente existen muchas más como por ejemplo: ● Índice de producción industrial (IPI) ● Costes laborales ● Deuda privada ● Deuda pública ● Tipos de interés ● Posición de inversión internacional (PII) ● Balanza comercial ● Prima de riesgo Los indicadores nombrados anteriormente, hacen referencia a diferentes sectores. Por ejemplo, algunos describen una parte del sector financiero, como los tipos de interés. Mientras que otros, describen una parte del sector fiscal (deuda pública) o del sector exterior (balanza de pagos). Variables que afectan la productividad en las empresas El sector productivo está pasando un mal momento Si hay un efecto por el que los ingresos de una empresa disminuyen progresivamente, quizá se deba a que el sector productivo o el mercado en el que se desenvuelve no están en su mejor momento. Esto no depende de la disposición de los empleados ni de las capacidades de la empresa. Por el contrario, es probable que el mercado haya resentido una depreciación y que las audiencias sean más cautelosas con sus compras, afectando el ritmo de trabajo, ventas y la operatividad de la empresa en general. En ese caso, lo que queda es realizar evaluaciones pertinentes para equilibrar las condiciones. Por ejemplo, crear una estrategia que apueste por un mayor volumen de ventas a precios menores. La competencia ha crecido de forma constante Si el personal tiene la mejor actitud, pero hay otras compañías que ganan terreno, es tiempo de poner manos a la obra para colocarte a la vanguardia de la competencia. Trabajar con directivos y empleados para encontrar las mejores soluciones y ofrecer mejores productos, servicios y atención a los clientes. Además, analizar a la competencia para detectar qué hacen ellos que les resulta positivo e intentar crear diferenciadores para que los clientes opten por tu solución. También se podría diversificar productos y renovar el branding para llegar a nuevos públicos y atraer a más consumidores. La región experimenta problemas sociales Algunas causas en la baja de productividad son impredecibles y las empresas no pueden tomar acciones para contrarrestar sus efectos.Tal es el caso de conflictos sociales, políticos o económicos en un territorio. En estos escenarios, de manera general, los consumidores se encuentran en una situación de crisis y el proceso de oferta y demanda se modifica considerablemente. Este escenario fue al que se enfrentaron muchas organizaciones durante la pandemia por covid. Las restricciones de tránsito, los niveles de ausentismo y la falta de solvencia económica se convirtieron en aspectos comunes que afectaron a la economía global y, por ende, a las empresas. En ese caso específico, la digitalización fue un paso obligado para que las empresas continuarán trabajando y para mantener relación con los clientes. Por eso, siempre es necesario estar actualizado en todo sentido, para poder sortear cualquier conflicto de esta índole. Las materias primas escasean o se encarecen Cuando un sector productivo relacionado con una compañía atraviesa una situación de crisis, seguramente tu organización también resentirá algunos efectos negativos. Supongamos que la empresa requiere de tomates como materia prima, pero la región atraviesa por un cambio climático, cuyos efectos, como tormentas o nevadas han mermado la producción de este insumo. Seguramente los precios subirán, o incluso se corre el riesgo de escasez. Sin embargo, no se puede dejar de producir ni se pueden subir los precios de forma dramática. En estos casos, lo mejor es considerar, de acuerdo a estimaciones y análisis, qué tan probable es que un evento de este tipo ocurra y cuándo; para evaluar sus costos y formular una estrategia que te permita continuar con las operaciones a pesar del momento de desequilibrio. Los cambios gubernamentales son constantes Todas las empresas están sometidas a las regulaciones en materia mercantil y laboral del territorio en el que operan; lo que también conlleva algunos beneficios fiscales, apoyos económicos u otras facilidades; pero en otros casos las decisiones políticas también pueden afectar la productividad de las empresas. Por ejemplo, cuando las autoridades elevan las tasas de impuestos, imponen nuevos aranceles o cambian algunas normas de calidad, alteratu ritmo de trabajo habitual. Asimismo, si la ley en materia laboral exige un mayor número de días de descanso es probable que la empresa experimente cambios en su nivel de productividad. Lo mejor que se puede hacer es diseñar planes de contención de eventualidades a largo plazo con el fin de mantener tus niveles de productividad. Alta demanda de profesionales por parte del sector empresarial En primera instancia, la fuga de talentos es un problema interno del que cada empresa es responsable. Si una organización ofrece un salario adecuado a sus empleados, un buen ambiente de trabajo y planes de crecimiento, nadie dejaría su puesto. Sin embargo, la rotación de personal también suele depender de factores externos. Por ejemplo, si una empresa internacional monta una filial en la zona donde opera la empresa y ofrece salarios con los que no se puede competir, tal vez algunos de tus empleados te dejen. Esto afectará notablemente tu productividad, ya que necesitarás tiempo para buscar nuevo personal y capacitarlo, sin perder de vista otras fases operativas y estrategias publicitarias, de ventas y de atención al cliente. Evitar que el personal se vaya es difícil en un mundo tan competitivo, no obstante, si ofreces un plan de carrera y beneficios adecuados, si tomamos en cuenta las opiniones y fomentas la creatividad de los empleados tienen puntos a tu favor. Complicaciones legales y financieras Otro de los factores externos que afectan la productividad es el nivel de incentivos de crédito y las altas tasas de interés bancario, además de las complicaciones para acceder a préstamos y otros tipos de crédito. Este factor es particularmente importante en el área de ventas de las empresas, pues resulta bastante complicado esperar resultados óptimos y productivos de una fuerza de ventas que se esfuerza por vender y convencer a los prospectos de que adquieran tus productos o servicios, pero que no pueden cerrar tratos porque los interesados no pueden acceder a créditos u otros instrumentos financieros para el pago. Es importante que las empresas trabajen en alianzas estratégicas con entidades financieras locales para facilitar los pagos por parte de sus clientes a la hora de cerrar tratos. Una fuerza de ventas que cumple sus metas es una fuerza de ventas productiva. Economías de Escala Es una situación en la que una empresa reduce sus gastos de producción al expandirse. Se trata de una circunstancia en la que cuanto más se produce, el coste que tiene la empresa por fabricar un producto es menor. Con las economías de escala, se produce un mayor beneficio por cada unidad extra que producimos. Esta reducción del coste de fabricación unitario no se da porque baje el precio de las materias primas, sino por aprovechar un material que tenemos ya comprado y en el que invertimos dinero en el pasado. Por lo tanto, esta situación se da sobre todo cuando la empresa compra activos fijos. Si adquirimos una maquinaria, por ejemplo, la forma de sacarle partido es produciendo lo más posible. Se dice que el coste por unidad producida será menor cuanto más produzcamos porque el cálculo se hace con una media dividiendo el gasto de la maquinaria entre el número de productos que hemos fabricado. Por ello, cuanto más productos se elaboren, más barato resulta fabricar cada unidad. Sin embargo, la reducción del coste de fabricación de las economías de escala tiene un límite. Cuando la empresa alcanza un determinado tamaño, aunque la economía de escala haga que los costes unitarios sean menores, empieza a ser más complicado gestionar una empresa enorme por su necesidad de coordinación y naturaleza burocrática. ● La reducción se produce en el coste unitario, no en el total. Este último puede aumentar según el número de unidades fabricadas. ● Este modelo está pensado para empresas de mayor tamaño, con capacidad para adoptar procedimientos que requieren grandes inversiones. Se piensa en el beneficio a medio/largo plazo. ● Mayor confianza por parte de los inversores, que ayudarán a destacar sobre la competencia al dotar a las empresas de mayor eficacia productiva. ● Acuerdo más económico con los proveedores. Al realizar pedidos de mayor volumen, mejora el precio de la materia. Además, permite obtener contratos a largo plazo que reducen los costes unitarios. Economía de Escala Interna Se promueve desde el interior de la empresa. Normalmente es la dirección quien lidera el proyecto y comunica las medidas adoptadas al resto de departamentos. El objetivo es invertir menos para tener una mayor producción. Economía de Escala Externa Se produce por motivos ajenos a la empresa. Una bajada de impuestos, circunstancias culturales, políticas, geográficas… razones que afectan positivamente a la compañía para que realice la inversión necesaria. Rol de la Gerencia El rol del gerente de una empresa consiste en la utilización eficiente de diversos recursos para obtener beneficios en una organización determinada. El gerente también controlará, planificará y organizará la empresa. Coordinará a las personas para poder lograr el cumplimento de cada uno de sus objetivos. Es importante organizarse para poder administrar los recursos de manera eficiente siguiendo estos pasos: Hacer un organigrama y conocer la capacidad de organizar todos los elementos posibles. Tiene la capacidad de dirigir y liderar equipos de trabajo, ya que el goza de importantes habilidades, tales como: adaptabilidad, conocimiento, inteligencia emocional, liderazgo y capacidad para delegar ciertas tareas. Por otro lado, será el encargado de mantener la rentabilidad de su empresa, gestionar recursos, rendir cuenta a diversos accionistas, buscar oportunidades de mercado para los productos y servicios de la compañía y representar a la organización con alianzas estratégicas oportunas. El gerente planifica objetivos generales, organiza, analiza los problemas de la empresa que está dirigiendo, realiza evaluaciones a distintos departamentos y desarrolla metas en un período determinado. ● Gerente de finanzas: Gestiona la liquidez de una organización, logra financiación de los bancos, analiza las políticas de inversiones, dispone de conocimiento en los mercados generales. ● Gerente de ventas: Las funciones principales del mismo son preparar planes y presupuestos, para aumentar la rentabilidad de la mediana o gran empresa así como pensar las estrategias de venta que puede tener la persona. ● Gerente de contabilidad: Es la persona encargada de contabilizar y cerrar los estados financieros de una compañía a nivel general. ● Gerente de recursos humanos: Es el mayor representante del departamento el cual garantiza una buena comunicación con todo su personal y trata de evaluar y controlar el reclutamiento del personal de manera eficiente. ● Gerente de psicología: Es un líder que apoya en su departamento capaz de emprender y liderar cambios de desarrollo mediante habilidad cognitivas y comunicativas. Esta persona posee liderazgo y una integridad moral y ética. ● Gerente de marketing: Tiene la capacidad de desarrollar una marca y llevarla a un posicionamiento extraordinario. Realiza grandes investigaciones de manera competitiva. Analiza las actividades de publicidad y venta. Hace eventos de relaciones públicas. ● Gerente de producción: Son los encargados de trabajar en todo lo que tiene que ver con la industria manufacturera planificando y supervisando producciones de fábrica mediante el control de gestión de almacenes así cómo también gestión de recursos materiales y búsqueda de estrategias para mejorar el diseño y la innovación. ● Gerente de planta: Es la persona que se encarga básicamente de implantar estrategias, planificar programas de fabricación y liderar un equipo determinado en una época precisa para lograr toda una serie de desempeños en un ámbito general que se está buscando. ● Gerente comercial: Es el encargado de supervisar, escuchar, liderar y clasificar diferentes elementos de una empresa en particular con el objetivo de capacitar y seleccionar personal demanera eficiente y oportuna. Acciones para mejorar la productividad de una empresa Revisar y modernizar los Procesos Sin lugar a dudas, la innovación siempre ha sido un gran estímulo para aumentar la productividad en todo tipo de empresas. Por el contrario, el inmovilismo y la pasividad suelen ser rémoras que acaban pasando factura en el medio o largo plazo. Así, según la célebre cita de Lord Kelvin, «lo que no se mejora, se degrada siempre». Por tanto, una buena gestión empresarial pasa por una continua revisión de los distintos procesos que intervienen en la fabricación de un producto o en la prestación de un servicio para mejorar como empresas digitales y ser más efectivos. De esa revisión podrán extraerse datos que ayuden a detectar los puntos débiles y, consecuentemente, a hacer propuestas de mejora. Adoptar una buena Gestión de RR.HH El factor humano es también una pieza fundamental en el puzzle de la productividad empresarial. En última instancia, y por mucha tecnología que intervenga en los procesos, todo se vincula, de algún modo, con la creatividad y rendimiento de los trabajadores. Por tanto, para contribuir al aumento de la productividad, existe una serie de prácticas que deberían tenerse muy en cuenta: ● Estimular la colaboración y comunicación. Sin duda, la colaboración entre personas y departamentos puede ser una fuente de innovación y crecimiento para cualquier empresa. Así, tarde o temprano, esto suele reflejarse en una mejora de la productividad. ● Establecer relaciones de confianza y responsabilidad. Frente a las estructuras tradicionales, ancladas en la jerarquía, el formalismo y la rigidez, resultan más eficientes aquellas que se articulan sobre la base de relaciones de confianza. De este modo, este tipo de relaciones fomentan un mayor compromiso y responsabilidad de cada trabajador, con una incidencia directa en la productividad. ● Promover la innovación. En todos los ámbitos de la empresa y para cualquier trabajador, la innovación debería ocupar un lugar destacado. Para ello se requiere, sin duda, promover esa cultura desde los puestos directivos y contar con procedimientos adecuados para canalizarla. ● Flexibilizar. La experiencia nos confirma una y otra vez que la flexibilización en cuanto a horarios, lugar de trabajo y otros aspectos relativos a la gestión de recursos humanos, suele trasladarse a una mayor satisfacción laboral y, en última instancia, a un aumento de la productividad. Por el contrario, el «presencialismo» y la rigidez acostumbran a ser muy perniciosos para la eficiencia de los trabajadores. Aumentar la Productividad con la Automatización Desde luego, los procesos de automatización han venido transformando la gestión empresarial desde hace ya mucho tiempo. Sin embargo, el gran cambio durante las últimas décadas ha llegado de la mano del desarrollo de aplicaciones de Big Data e Inteligencia Artificial, que están promoviendo un cambio sin precedentes en todo tipo de procedimientos. En este sentido, la inversión en tecnología y formación que se haga en este ámbito, seguramente tendrá una traslación directa (aunque no inmediata) a un aumento de la productividad. Digitalizar documentos y procedimientos Los costes e ineficiencias que supone la gestión documental en soporte papel deberían ser un toque de atención para las empresas que todavía se resistan a la digitalización. En este sentido, además del ahorro de materiales de oficina y de los beneficios medioambientales, es evidente que la gestión digital ahorra tiempo y, por tanto, costes de personal. Por si fuera poco, la implantación de sistemas de firma electrónica permite completar cualquier proceso dentro del ámbito digital, proporcionando: ● Mayor eficiencia en los procedimientos y, por tanto, mayor productividad empresarial. ● Ahorro significativo de tiempo y costes. ● Mayor comodidad y mejor experiencia de uso, tanto para trabajadores como para proveedores y clientes. ● Completa seguridad jurídica en todos los trámites realizados dentro del ámbito digital. Evita los ladrones de tiempo Sin duda, el tiempo es uno de los recursos más preciados en cualquier proceso de producción o de prestación de servicios. Por tanto, es fundamental detectar cualquier ineficiencia que suponga desperdiciar este recurso o utilizarlo de forma inadecuada. En este sentido, es necesaria una constante revisión de los procedimientos para descubrir malas prácticas o, simplemente, oportunidades de mejora. Así, entre otros muchos ámbitos, podemos mencionar los siguientes ejemplos: ● En primer lugar, los procesos de supervisión o autorización previa de cualquier tipo. Sin duda, en la mayoría de empresas, suelen ser mecanismos demasiado rígidos que pueden simplificarse y mejorar radicalmente. De este modo, en coherencia con las relaciones de confianza y corresponsabilidad en la gestión de RR.HH.Deberían utilizarse sólo en aquellos casos en que sean realmente necesarios. ● Desde luego, otro ámbito que suele acumular grandes eficiencias es el de las reuniones de trabajo. Por tanto, es aconsejable establecer unas pautas claras para determinar cuáles son realmente necesarias y cuáles prescindibles, así como un conjunto de buenas prácticas para desarrollar reuniones efectivas. Innovar constantemente La productividad de una empresa es mayor cuanto más invierta en innovación. Hay empresas que no consideran necesario innovar y van quedando en declive. Para evolucionar y mejorar siempre hay que innovar, tanto en procesos y productos como invertir en modernizar equipos y adaptarse a las nuevas necesidades del mercado. Este punto marcará la diferencia entre una empresa puntera y una obsoleta. Construir un buen equipo de trabajo Motivar a tus empleados y hacerles sentir que sus ideas pueden contribuir en el desarrollo de la empresa es uno de los métodos más efectivos. Las personas son la base de una compañía, por tanto, ejercer acciones formativas para fomentar su aprendizaje será una buena palanca de acción, así como estimular la colaboración entre departamentos y equipos e ir dando más responsabilidades harán un equipo más implicado y productivo. En definitiva, la cuestión de cómo aumentar la productividad en una empresa no tiene una respuesta sencilla ni universalmente aplicable. Sin embargo, haciendo un análisis profundo de las cuestiones que hemos mencionado y adoptando las medidas adecuadas en cada caso, los resultados suelen llegar incluso antes de lo esperado.
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