Logo Studenta

Clase 1 matemática

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

¿Qué son los géneros discursivos?
Introducción de la Clase 1
¿Qué son los géneros discursivos? Son tipos relativamente estables de enunciados. Los podemos pensar como "formatos" o "moldes" y son producto de las actividades desarrolladas en los distintos ámbitos sociales. Por ejemplo, las noticias, las crónicas periodísticas, el reportaje, las notas de opinión o las cartas de lectores son géneros discursivos que han surgido en el ámbito periodístico; en cambio, los artículos de investigación, las entradas de diccionarios especializados, de enciclopedia, las monografías, los informes de lectura, los capítulos de manual y las respuestas de examen son géneros propios del ámbito académico. Luego, la anamnesis y el historial clínico pertenecen al ámbito profesional médico. El cuento, la novela y la poesía se inscriben en el ámbito literario.
Dado que son el producto de muy diversas actividades desarrolladas en una sociedad, los géneros discursivos presentan dos características fundamentales: en primer lugar, son innumerables, ya que existen tantos como las actividades que realizan los individuos en la sociedad; en segundo lugar, están sujetos a transformaciones más o menos constantes, tanto como esas mismas actividades de las que son producto. Por esta razón decimos que los géneros discursivos son históricos, ya que se transforman o dejan de existir de acuerdo con los cambios que se dan en las prácticas sociales: la serenata, muy popular en otra época, o las cartas familiares, raramente se utilizan hoy en día. Y, por el contrario, recientemente han aparecido nuevos géneros tales como el mail, el chat y el tweet.
Características de los géneros discursivos
Tres cuestiones son fundamentales a la hora de pensar los géneros: el tema, la estructura y el estilo.
En cuanto al tema, existe una gama de asuntos posibles que puede abordar un género; por ejemplo, la clase que estamos viendo aborda una gran variedad de temas vinculados con la historia de la escritura.
La estructura, por otra parte, consiste en la organización típica de las partes de un texto; por ejemplo, una crónica periodística suele introducir los contenidos fundamentales en la titulación (título, volanta, copete). Una respuesta de examen se estructura atendiendo al orden en la formulación de la consigna que le dio origen.
Finalmente, el estilo está constituido por la selección de ciertos elementos lingüísticos propios de un género, tales como el vocabulario, las personas de los verbos y pronombres o los recursos retóricos, entre otros elementos. Por ejemplo, en un texto del ámbito académico, como el informe de lectura, el escritor emplea la tercera o la primera persona del plural, o las construcciones pasivas con se (Se han analizado…) y, además, utiliza un lenguaje formal.
El destinador y el destinatario
Todo texto es producido por un sujeto al que suele considerarse como autor, y es recibido por otro sujeto, el lector, en el caso de los textos escritos. Sin embargo, las categorías de destinador y destinatario no coinciden exactamente con las de autor y lector.
Llamamos “destinador” a la imagen de autor que un texto construye, es decir, a la voz que habla en un texto, independientemente de quién sea la persona empírica que lo produjo.
Llamamos “destinatario previsto” al lector ideal, es decir, al receptor previsto por el mismo texto, independientemente de quién sea el lector, empírico, real; por ejemplo, una persona capaz de leer un texto explicativo académico (es decir, de decodificar los signos con los cuales se conforma el texto), pero incapaz de comprender el sentido que el texto construye (por la especificidad de los términos, la complejidad de su estructura, etc.), podrá ser un lector (empírico) del texto, pero no su destinatario previsto.
Cuando en un ámbito social un individuo elige producir un texto perteneciente a un determinado género discursivo, se construye una imagen particular de destinador, de acuerdo con la situación comunicativa; de esta manera, cuando un científico escribe una artículo de divulgación científica, un capítulo de manual o un artículo de investigación científica, expresa situaciones comunicativas diferentes, que implican la construcción de destinadores diferentes y, en consecuencia, de destinatarios diferentes: en el primer caso, el texto estará dirigido a un destinatario no especializado, que busca informarse sobre un acontecimiento reciente; en el segundo, a un destinatario semiespecializado, estudiante de una carrera afín, y en el tercero, a un destinatario especializado, que busca profundizar conocimientos de una disciplina particular. Emplearemos esta clasificación en los textos que iremos leyendo en este curso.

Continuar navegando