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Algunas causas de Divorcio Paranoia Homosexualidad Violencia intrafamiliar Los problemas de la sociedad actual, son los mismos que los de la sociedad antigua, la diferencia es que ahora somos más descarados y nos enteramos de más detalles. Ni antes ni ahora, hemos encontrado el fondo del asunto. ¿Por qué? La verdad es tan dura que no la queremos ver. Este es un libro que busca la verdad y así empezar a resolver problemas de una manera más profunda, dejándonos de banalidades y superficialidades. Afrontar los problemas y no disfrazarlos es la única forma en que pueden solucionarse. El lector se sorprenderá al encontrar en este libro porqué los hombres golpean a las mujeres, porqué los hombres se convierten en homosexuales y las mujeres en lesbianas y porqué se origina la paranoia. Algunas causas de Divorcio Paranoia Homosexualidad Violencia intrafamiliar Dr. Jordi Torres Latorre AÑO 2007 Algunas causas de Divorcio Paranoia Homosexualidad Violencia intrafamiliar Dr. Jordi Torres Latorre Año 2007 ISBN 970-91194-0-0 © Dr. Jordi Torres Latorre Teléfonos: 04455 2427 7977 04455 4134 1459 Correo electrónico: jorditol@hotmail.com Portada: La Adoración del Divino Infante y San Juan Bautista Niño. Pintura de Francesco Mazzola, 1503-1540. Primera edición. Impreso en México, D.F. Diciembre de 2007 Indice Agradecimientos 8 Prólogo 9 La proyección de imágenes 14 La proyección de imágenes como causa de divorcio y violencia intrafamiliar 16 Lupita y Rafael 16 Angélica y Francisco 21 Sofía 33 Joel y Silvia 35 Rosaura y Mario 39 La proyección como causa de paranoia 44 Ramiro 46 Georgina 48 Juan 52 Alma 54 Carlos 56 Susana 57 La proyección en el homosexualismo 60 Raymundo 61 Armando 64 Pedro 73 Luisa 80 Irene 82 Fijación materna 89 Rodolfo 89 María 93 Cristina 100 Bibliografía 116 8 Agradecimientos Dr. José Antonio Flores Oramas. Por haberme ayudado a conocerme a mí mismo y al ser humano. Doctores Waine Holtzman padre y Waine Holtzman hijo. Por el apoyo que me brindaron durante mi estancia en Texas, Estados Unidos, para difundir mis investigaciones hechas en el Hospital Psiquiátrico "Rafael Lavista" en la ciudad de México. Madre Ángela Solórzano. Por su ayuda en el conocimiento de la Biblia y por todo el apoyo que me brindó para difundir algunas de las teorías que se exponen en este libro. A todos aquellos pacientes que contribuyeron con sus historias. 9 Prólogo Practico el psicoanálisis desde hace veintiséis años, tuve como maestro a un sabio que tenía como pasión la lectura y el conocimiento. Fue jefe de Investigaciones Psicológicas y Sociales, durante treinta y cinco años en el Instituto Politécnico Nacional, su nombre, Dr. José Antonio Flores Oramas. Durante su larga carrera hizo muchos descubrimientos pero nunca se publicaron ya que no tenía el interés y lo único que deseaba era investigar, descubrir y aplicar en sus pacientes lo que descubría. Lo conocí cuando yo estudiaba la preparatoria, me sentía muy confundido y necesitaba ayuda. Él a través del psicoanálisis me ayudo a aclarar mi mente. Me sorprendió tanto todo lo que descubrí que decidí estudiar lo mismo. Le pregunté un día aquello que se requería para ser psicoanalista y me indicó que lo más conveniente era estudiar primero la carrera de medicina, así lo hice. Luego tenía dos opciones, estudiar psiquiatría o trabajar como médico en un hospital psiquiátrico, preferí lo segundo y trabajé durante tres años en el Hospital psiquiátrico “Rafael Lavista” (actualmente es una Universidad Pontífice) donde aprendí psiquiatría. Dentro de este hospital tuve a mi cargo varios grupos de pacientes, desde el inicio mi principal preocupación fue ayudarlos. zssssssxLe comentaba los casos que tenía al Dr. Flores Oramas, él me aclaraba lo que sucedía en la mente de cada uno de ellos 10 y así fue como aprendí psicoanálisis. Tuve la asesoría del Dr. Flores durante más de diez años. Desde el principio me sorprendía mucho todo lo que me decía. En una ocasión le hablé del comportamiento de una paciente dentro del hospital y él me describió el trato que ella había recibido de su madre sin conocerla, ¡yo tampoco la conocía! Cité a dicha mamá y en mi presencia trató a su hija tal como me lo había dicho el Dr. Flores. ¿Cómo lo supo? ¡Me sorprendía mucho! A veces pensaba que era una especie de mago. El Dr. Flores me enseñó, entre otras cosas, la gran influencia que tiene la madre en la vida de las personas. Los primeros años de vida son los más importantes para el desarrollo de un niño, “infancia es destino” y esta etapa de la vida normalmente la vivimos al lado de mamá. Una madre que goza de plena salud mental, además de su felicidad personal, tendrá la capacidad de formar hijos igualmente sanos y felices. Por el contrario, una madre afectada mentalmente podrá ocasionar un enorme daño emocional en sus hijos. Con mucha frecuencia el padre maltrata a su esposa y es quien la daña emocionalmente, y aunque él no tiene la misma influencia en los hijos durante los primeros años de vida, sí los va perjudicar indirectamente. Por lo tanto, la salud mental de los hijos depende de la salud mental de ambos padres. Una vez le comenté a otros doctores cómo había logrado curar a una paciente a través de ciertas teorías que el Dr. Flores me enseñó, todos estaban extrañados de las cosas que les decía y entonces me di cuenta que era algo completamente desconocido para ellos. Fui con el Dr. Flores 11 y le pregunté de dónde había sacado esas teorías, él me respondió: -Son cosas de las cuales yo me he dado cuenta. -¿O sea que no están escritas en ningún libro?-Le pregunté. -No, a menos que alguien haya descubierto lo mismo y lo haya publicado. ¡Con razón pusieron esas caras los doctores en el hospital!, pensé yo y le argumenté: -¡Oiga doctor, tiene que escribir un libro sobre todas esas teorías que usted me enseña! -Tal vez algún día. -Me contestó. Nunca escribió el libro, no le interesaba, otras personas también le pedían que lo hiciera. En otra ocasión le pregunté: -¿Por qué no quiere hacer un libro sobre sus teorías? -Mira, si escribo un libro pueden suceder dos cosas: Una, que a nadie le interese, y dos, que a alguien se le ocurra convertirlo en “best seller” y de las dos la primera es la mejor. -¿Por qué? -Le pregunté sorprendido- ¡A cualquiera le gustaría escribir un libro que se hiciera famoso! -A mí no. -¿Por qué no? -Si yo fuera famoso, en este momento no estaría platicando contigo; cuando Eric Fromm se hizo famoso, se rodeó de mucha gente con intereses y las amistades se alejaron de él. Eric Fromm murió de soledad. Muchos años después volví a tocar el tema del libro y me contestó: 12 -He pensado en la posibilidad de escribir uno, pero no un libro teórico, eso sería aburrido, sería mejor un libro sobre la historia de algún paciente y su evolución dentro del psicoanálisis describiendo lo que se dice en cada una de las sesiones, así se darían a conocer las teorías, pero nunca escribo las sesiones con mis pacientes o sea que no tengo de donde extraer la historia. Mi maestro el Dr. Flores murió años más tarde sin haber escrito ninguna de sus teorías, pero yo todavía continúo con mi interés por darlas a conocer, porque siento que es algo muy valioso y que puede ser muy útil para mucha gente. Cuando trabajé en el hospital psiquiátrico y vi la forma como trataban a los pacientes por medio de métodos que en general no curan, como electrochoques, pastillas y lobotomías (extirpación de una parte del lóbulo frontal del cerebro), pensé: “Yo voy a cambiar esto.” Hasta la fecha no he logrado cambiar nada, pero espero que este libro haga su contribución. No será un libro como el que pudo haber escrito el Dr. Flores, él realmente fue un sabio y sus palabras mucho más atinadas que las mías, pero he decido hacer un libro con relatos pequeños sobre algunas historias de pacientes que he tenido, de quienes guardo recuerdo de las cosas más sobresalientes y de sus sueños más significativos. Para proteger la identidad de las personas he cambiado en cada una de las historias los nombres de los personajes. Mi finalidad es dar a conocer algo de lo que maestro me enseñó, ya que con frecuencia sorprende que aún no se 13 sepan cosas muy simples sobre la mente pero que ocasionan se trastornos en nuestras vidas y son causa muchas enfermedades mentales. Espero que este libro logre su fin. 14 La proyección de imágenes Hace aproximadamente 35,000 años, durante la era paleolítica, aparecen las primeras muestras dé la capacidad del hombre para imaginar y proyectar imágenes al realizar dibujos de diferentes animales y personas en el interior de las cavernas, la llamada pintura rupestre. Una pintura rupestre es la imagen de algo real; los animales no hacen dibujos de personas o de ellos mismos, ya que no tienen la capacidad de proyectar imágenes y ésta es una de las grandes diferencias entre ellos y nosotros. En la mente tenemos grabadas muchas imágenes, entre las más importantes las de papá y mamá, estas imágenes representan al hombre y a la mujer. Nos damos cuenta que existen muchas diferencias entre ellos dos, tanto en su apariencia externa como en su interior. Su actitud hacia nosotros, su carácter, su manera de hablar, su forma de amarnos y de educarnos, son algunas de sus características internas, estas características conforman una imagen a partir de la cual vamos a tener un concepto del hombre y otro de la mujer. Ahora bien, si pintamos en una pared una cara sin bigote y sobre ésta hacemos coincidir, mediante un proyector de transparencias, la imagen de alguien con bigote, la cara pintada en la pared se vera como si también tuviera bigote. Lo mismo podemos hacer con las imágenes de papá y mamá. Tomemos como ejemplo la figura de un padre agresivo, su imagen la podemos proyectar inconsciente- 15 mente sobre los demás hombres y como consecuencia los veremos a todos igualmente agresivos. La proyección de las imágenes de papá y de mamá sobre las demás personas es una de las principales causas de violencia intrafamiliar, divorcio, homosexualismo y paranoia. La fijación materna es otra de las principales causas, este tema lo veremos al final del libro. Proyectar las imágenes de papá y mamá sobre los demás es una equivocación de la mente humana. Las imágenes que proyectamos nos impiden ver la realidad tal como es, nos confunden, empañan nuestra visión del mundo y de la gente, y esto puede afectar muy seriamente nuestras vidas. Comencemos por ver de qué manera la proyección de imágenes es causa de violencia intrafamiliar relatando varias historias de la vida real. 16 La proyección de imágenes como causa de divorcio y violencia intrafamiliar Muchas mujeres son como las flores, bellas y atractivas, se arreglan y se pintan. Los hombres nos acercamos atraídos por su hermosura y el resultado es la procreación. Entonces las mujeres tienen hijos y dedican su vida al servicio de ellos y del marido. Sin embargo hay hombres que las maltratan y las golpean, ¿por qué? Veamos algunas de estas historias. Lupita y Rafael Una pareja de jóvenes casados, Rafael y Lupita, tenían un hijo de cinco años de edad llamado Luís. Un día la mamá lo llevó a mi consultorio: -¿En qué le puedo servir? -Le pregunté. -Castigaron a mi hijo en la escuela por problemas de comportamiento. Me dice la directora que si no cambia lo tendrá que expulsar. ¿Qué cosa hizo? -Le pregunté. -Dice la maestra que les exige a sus compañeros que le den cosas y les pega si no le hacen caso. Ayer le rasguñó la cara a uno de ellos porque no le quiso dar un lápiz. -¿Me permite aplicarle una prueba psicológica a su hijo para ver qué es lo que está pasando? 17 -Sí, está bien. -Contestó ella. Le apliqué a Luís una prueba de tipo proyectiva llamada C.A.T. Esta prueba es muy útil para ver cómo es el mundo que rodea al niño y qué actitud está tomando él ante ese mundo. Luís reflejó en esa prueba que sus padres, Rafael y Lupita estaban en constante pleito. Se lo comenté a Lupita y me respondió: -Es cierto doctor, ya no aguanto a mi marido; hace tiempo lo dejé por tres meses, nos volvimos a juntar, luego lo volví a dejar por ocho meses y regresé, pero ésta vez si lo dejo será la definitiva, ¡ya no lo aguanto! -¿Por qué? -¡Siempre está de malas, en lugar de pedirme las cosas amablemente me las exige enojado y en ese momento tengo que dejar de hacer todo lo que estoy haciendo para complacerlo, si no, se pone furioso! ¡Además, todo lo toma a mal y se la pasa reclamándome puras tonterías! -¿Qué es lo que toma a mal? -¡Muchas cosas! -¿Como qué? -Por ejemplo, yo lavo su ropa, la seco, la plancho, la doblo y la guardo en su lugar procurando que todo se encuentre ordenado. Luego, cuando él llega a buscar una prenda, si no la encuentra comienza a reclamarme muy enojado: “¡Me escondes las cosas! ¡Lo haces a propósito! ¡Tú siempre quieres perjudicarme!” ¡Es absurdo, sólo trato de servirle! ¡A veces se pone enojado que hasta me golpea! El otro día mi Luís me exigió: “¡Mamá quiero que me sirvas vaso de leche ahora, de inmediato!” Entonces pensé: “¿Qué se cree este mocoso de cinco años?” Mi vecina, que todo lo 18 escucha, me comentó: “¿ya te diste cuenta? ¡Te reclama igual que tu marido! Es verdad utiliza las mismas palabras y tiene misma actitud. -Ahí tienes una muestrade cómo los hijos imitan a sus padres y así como Luís te trata a ti, que tratar a sus compañeros en la escuela, comenté a Lupita. -¿Qué debo hacer? -Me preguntó ella. -Evidentemente el problema es el papá, gustaría hablar con él para ver por qué te trata ¿Crees que quiera venir a verme? -Sí, no creo que haya problema, le voy a decir. Después de varios días me visitó Rafael y le expliqué: -Su esposa me trajo a su hijo Luís por su comportamiento en la escuela. Le apliqué prueba psicológica y en ella encontré que entre usted y Lupita predomina la agresión y la discordia Si usted está de acuerdo, me gustaría ayudarle entenderse mejor. -Me parece bien. -Respondió Rafael. -¿Podría usted platicarme algo de su infancia favor? -Mis padres se divorciaron cuando yo tenía o años, entonces me pidieron escoger con cual ellos quería vivir y elegí a mi padre. ¡Mi madre nunca me lo perdonó, de allí en adelante se dedicó a tratar de obstruir mi vida perjudicándome en todo lo que fuera posible! -¿De qué manera? -Pregunté. -Yo vivía con mi papá, pero a veces en fin de semana me quedaba con mi mamá. Si yo tenía algún juguete preferido o alguna prenda de vestir que me gustara, ella lo perdía o lo escondía a propósito. En una ocasión necesitaba un acta de 19 nacimiento para la inscripción en un curso, ella guardaba mis actas así que se la pedí. Me hizo esperar varias semanas hasta que me dijo que ya no tenía ninguna y me perdí de la inscripción. ¡Siempre miraba la forma de perjudicarme! -Muy bien, ahora ponga mucha atención en lo que le voy a decir, por haber tenido una madre así, usted va a tener la tendencia a pensar que todas las mujeres le quieren perjudicar. Tuvo una madre que le obstruía su vida y cree que su esposa le quiere hacer lo mismo, por eso tiene problemas con ella. Esto es debido a la proyección de la imagen materna sobre las demás mujeres. Al terminar mi explicación se quedó pensando, me dio las gracias, se despidió y se fue. A las dos semanas me habló por teléfono para decir que quería verme. Me visitó y me dijo: -Me acordé de usted. -¿Por qué? -¡Porque me dijo que yo iba a tener la tendencia a pensar que todas las mujeres me quieren perjudicar y así me sucedió! Verá usted, tengo una pequeña industria y tengo dos secretarias. Un día por la mañana encontré a una de ellas metida en mi oficina moviendo un montón de cajas encima de mi escritorio y por todos lados. Me puse furioso y le reclamé muy enojado: “¿Qué te has creído? ¡¿Crees que vas a venir aquí a perjudicar mi vida obstruyendo mi oficina?! ¡¿Que vas a hacer lo que se te pegue la gana con tal de molestarme?!” Ella se retiró llorando. Luego se me acercó la otra secretaria para comentarme que cuando llegó 20 a la oficina, la vio moviendo esas cajas, le preguntó sobre lo que hacía y recibió como respuesta: “Llegué temprano a trabajar y encontré que el chofer del camión puso todas éstas cajas dentro de la oficina de mi jefe, encima de su escritorio y en el suelo obstruyendo la entrada, así que estoy acomodándolas para que cuando venga el señor Rafael vea su oficina bien ordenada y limpia.” Al terminar de decirme esto, recapacité y se me cayó la cara de la vergüenza por la forma en que yo había tratado a esa secretaria. En ese momento me acordé que usted me dijo que yo tengo ¡a tendencia a pensar que todas las mujeres me quieren perjudicar. -¡Que bueno que ya se dio cuenta! -Le comenté. -¿Y ahora qué debo hacer? -Cada vez que piense mal de su esposa o de alguna otra mujer, debe tratar de darse cuenta que está proyectando la imagen de su madre sobre ellas, y observar que ellas son diferentes a su madre y que sus intenciones no son las mismas. Continué viendo a Rafael durante algunas sesiones más, él afortunadamente puso en práctica lo que le sugerí y desapareció la discordia que existía entre él y Lupita. A su vez, su hijo Luís comenzó a cambiar ante sus compañeros de escuela gracias a que tenía un padre diferente a quien imitar, con lo cual se resolvió este caso y se pudo evitar un inminente divorcio. Durante el relato de todas las historias, voy a hacer énfasis en que el tipo de psicoanálisis que me enseñó el Dr. Flores, busca la verdad y al encontrarla se le comenta al 21 paciente y si éste está dispuesto a verla, como en el caso de Rafael, viene la cura, de lo contrario la gente continua enferma. Cristo decía a los judíos que habían creído en él: “Ustedes serán verdaderos discípulos míos si perseveran en mi palabra; entonces conocerán la verdad, y la verdad los hará libres” (Evangelio según San Juan capítulo 8, versículos 31, 32). Esta historia se resolvió muy fácilmente porque Rafael supo escuchar y recapacitar, pero no siempre es así, ya que algunas veces la gente no está dispuesta a escuchar. La siguiente es una de esas historias. Angélica y Francisco Angélica, una mujer muy trabajadora, sonriente y amable con toda la gente, conoció a un joven ingeniero civil muy amigable y aparentemente caballeroso llamado Francisco, al poco tiempo se enamoraron, se hicieron novios y luego se casaron. Angélica tenía una pequeña casa que había comprado a crédito y allí se fueron a vivir. Francisco ejercía exitosamente su profesión como gerente en una fábrica y Angélica atendía un negocio propio igualmente exitoso. Tuvieron un hijo y una hija. Un día Angélica se acercó a mí con su hija Lorena de seis años de edad para preguntarme: -Me preocupa Lorena, seguido tiene pesadillas horribles. No se por qué sueña esas cosas. ¿Tu podrías ayudarme a 22 saber que le sucede? -Tal vez sí. -Le contesté, y dirigiéndome a su hija le pregunté: -A ver Lorena cuéntame una de tus pesadillas. -Muy seguido sueño que “Choki” quiere destruir a mis papas. -Contestó ella. Deduje porqué soñaba eso y le dije a Angélica: -Ya se quien es “Choki”...tu suegra. -Angélica me escuchaba con interés y le expliqué: -Choki es un personaje ficticio de una película de terror y simboliza al mal. Lorena podía haber soñado con cualquier otro monstruo maligno, eso no tiene importancia. Lo importante de la pesadilla es que nos indica que en la vida real de Lorena debe existir alguien malo, que de alguna forma, quiere destruir la vida de sus padres. La única persona que conozco que quisiera hacer eso es tu suegra. Tú me has dicho que le dicen “la suegra anti-nueras" y que está ocasionando muchos problemas entre ustedes dos. -Si, mi suegra quisiera que ninguno de sus hijos estuviera casado, no quiere a ninguna de sus nueras, desearía que todos se divorciaran y se fueran a vivir con ella. En varias ocasiones me di cuenta que la relación entre Angélica y Francisco no estaba bien, él enfurecía muy fácilmente y trataba mal a Angélica. Dos veces intenté hacerle ver a Francisco que estaba cometiendo una equivocación que debía corregir, de lo contrario podría terminar por perder a su esposa ya que ella no merecía sus agresiones. Muchas amistades y conocidos de él le hicieron la misma observación, pero Francisco no hizo caso a 23 ninguno y finalmente un día Angélica le pidió el divorcio. Ese mismo día él me llamó por teléfono para reclamarme: -¡Angélica dice que le sugeriste que me pidiera el divorcio! -¡Esta es la primera noticia que tengo al respecto! -Le contesté sorprendido. -Pues eso me dijo. -Se me hace muy raro que te haya dicho eso. -Repliqué. -¿Estás seguro que no se lo sugeriste? -Me volvió a preguntar. -¡Claro que no! Ahora piensa, si alguien le sugiriera a tu esposa que se divorciara de ti ¿no crees que ella sería muy tonta en hacerle caso? ¿Por qué no piensas mejor que si Angélica te pidió el divorcio, es porquehay algo de ti que no le parece y que la relación entre ustedes dos anda muy mal? No me escuchó ni me contestó. Para Francisco era muy difícil reconocerse a sí mismo como culpable del rechazo de Angélica. Varios meses después Angélica me contó con más detalle lo que había sucedido entre ellos dos y los motivos que tenía para querer divorciarse: -Le pedí el divorcio porque ya no lo aguanté más. Desde el principio del matrimonio Francisco me empezó a tratar muy mal; la misma noche de la luna de miel me dijo: “Ahora si ya me fregué.” Desde hace varios años quería separarme de él, pero no me atrevía porque tenía miedo de que me hiciera algún daño, me sentía desprotegida en esa casa viviendo sola con él y mis dos pequeños hijos. Un día aproveché un pleito que tuvimos con unos vecinos para 24 decirle que mejor nos fuéramos a vivir a la casa donde vive mi abuelo con tres de mis hermanos, es una casa muy amplia, aceptó y nos mudamos. Allí me sentí más segura porque ya no estaba sola, entonces me atreví a correrlo de la casa y a pedirle el divorcio. -Tal vez todavía se podría hacer algo para salvar tu matrimonio, si logro que él me escuche a lo mejor puede cambiar de actitud. -Le dije a Angélica. -Yo no creo que él quiera cambiar, además ya no lo amo, ya no siento nada por él. Durante años fui víctima de constantes ataques y reclamaciones absurdas, Francisco se enojaba por cualquier cosa, discutíamos y a veces me atacaba a golpes. Yo quería conservar la familia unida, me esforcé por ser comprensiva y muy cariñosa para ver si lo hacía cambiar, pero no logré nada, al contrario, cada día era peor, se ponía furioso por cosas sin ningún sentido. Yo me sentía frustrada, derrotada, atrapada, sentía el fracaso, nada de lo que hacía resultaba, me sentía atrapada porque pensaba: “¿Esto va a ser mi vida?” Un buen día pensé: “Yo voy a terminar con él, siento que me tiene coraje, que no me puede ver contenta.” Como si yo hubiera hecho algo muy malo y no merecía estar contenta; como que estaba castigada y no merecía ser feliz. Ya tenía tiempo pensando en el divorcio. Un día cuando llegó por el dinero que yo había ganado durante el día y se lo llevó para irse a los antros a emborracharse pensé: “Esto no funciona, esto no va a terminar bien, ¿aquí me voy a quedar con este tipo? ¿Este va a ser mi futuro?” Luego empezaron las agresiones físicas. Poco a poco fui perdiendo el amor que sentía por él 25 y me dolía horrible porque yo lo quería, él fue acabando con ese amor. Todavía cuando ya se fue de la casa me dolía mucho porque yo soñaba con tener una familia, disfrutar de los niños y de una relación familiar. Había mucho para ser felices, mi disposición, nuestros hijos, mi negocio, su trabajo, la casa... pero no, él acabó con todo. Empecé a tenerle miedo cuando comenzó a golpearme y fue cuando decidí divorciarme. -¿Por qué se ponía furioso? -Le pregunté a Angélica. -¡Por puras tonterías! -Contestó ella. -¿Cómo qué? -¡No sé... cosas absurdas! -¿Cómo qué cosas absurdas? -Por ejemplo: Un día paseábamos dentro de un centro comercial y los niños me pidieron que les comprara un helado, les compré su helado a cada uno y también le compré uno a Francisco que se había quedado fuera de la tienda esperando, cuando se lo di, se le quedo viendo callado y después de un rato me dijo enojado: “Me lo compraste de fresa porque sabes que no me gusta la fresa, ¿verdad? ¡Lo haces a propósito para molestarme!” ¡Ese helado de fresa fue el motivo de pleito para toda la tarde! ¡Yo qué iba a saber que no le gustaba fresa, tan sólo trataba de darle gusto! -¿Qué otras cosas absurdas te reclamaba? -Me decía muy enojado: “¡Mi tiempo es tuyo!” -¿Cómo que “mi tiempo es tuyo”? -¡No sé, así me decía! -¿Qué más te reclamaba que fuera absurdo? 26 -Me decía furioso: “¡Me quieres engordar!” -¿Qué quería decir con eso? -¡Qué voy a saber! ¡El podía comer lo que quisiera! Yo no lo obligaba. -¿Qué más te decía? -Me reclamaba: “¿Qué te crees, que vas a disponer de mi tiempo a tu antojo?” Yo me quedaba muy desconcertada pensando: “¿¡Qué!?” -¿Qué otras cosas te reclamaba que fueran absurdas? -Me decía: “¡Me quieres tener en casa de tu gato, de tu mandadero!” -¿Eso era cierto? -¡No! ¡El no era mi gato, ni mi mandadero! ¡En una ocasión le pedí algo que necesitaba para la comida y no me lo llevó! Desde entonces no volví a pedirle nada, yo sabía que no contaba con él. ¡Tampoco disponía de su tiempo a mi antojo, él podía hacer lo que quisiera con su tiempo! Con frecuencia salía con sus amigos a ver mujeres encueradas en los centros nocturnos y yo no le decía nada. ¡Ni siquiera era celosa! Lo que si me molestaba era que el poco dinero que teníamos, se lo gastara en esos lugares y que además llegara a casa borracho a las dos de la mañana, para quitarme lo que yo había ganado durante el día en mi pequeño negocio y pagar la cuenta del centro nocturno porque ya se había acabado todo su dinero. Encima de todo eso todavía me reclamaba: “¡Eres una mujer posesiva, no me dejas ser!” Un día hasta mi padre llegó a decirme: “¿No crees que le das demasiadas libertades?” Le contesté: “Yo lo dejo ser.” 27 -¿Qué más? -En una ocasión decidió no ir a trabajar y se quedó en casa. ¡Al poco rato de estar allí comenzó a decirme muy enojado que yo lo quería tener en casa a mi disposición todo el día! ¡Yo no le pedí que se quedara, ni que dejara de ir a trabajar, fue él! ¡Yo no merecía sus reclamaciones! ¡Eran ridículas! -¿Qué otros problemas tenían? -Con frecuencia se emborrachaba con sus amigos y se ponía muy agresivo. Una noche llevó a la casa a un amigo suyo llamado Pepe y se puso a tomar con él. Yo me retiré muy triste y los dejé solos. Después de varias horas, Francisco entró a la cocina borracho a decirme que le iba a vender fruta a su amigo, le contesté al amigo que con mucha pena no le iba a vender nada, ya que esa fruta era para el desayuno de mis hijos. Francisco inmediatamente se puso furioso diciéndome: “¡No te vas a burlar de mis amigos!” ¡Entonces me agarró por el cuello ahorcándome y me tiró al suelo! ¡Su amigo Pepe trató de detenerlo pero no pudo! ¡Mi hija Lorena que apenas tenía cinco años de edad estaba viendo todo y se le echó encima por la espalda para tratar de ayudarme! Entonces me dio mucho coraje y a golpes me libre de él. ¡A mi hija no se le ha olvidado esa escena! A veces le pide a Dios que le quite el miedo que le tiene a su papá. También dice que cuando sea grande, ella no se va a casar y que hubiera preferido nacer como hombre. -¿Por qué dice eso? Porque veía que a su hermano nunca le gritaba ni lo regañaba, al contrario, ¡todo le consentía!, lo 28 cual también me trajo muchos problemas, porque se hizo muy berrinchudo, no me obedecía y hasta me pegaba si no le concedía algún capricho. Desde que el papá no vive con nosotros el niño ha cambiado mucho, me doy cuenta que me trataba mal porque lo imitaba a él. Ahora cuando le pido algo, me obedece y me dice: “Si mamita” También le ha dado por decirme: “Mamita bonita” ó “mamita hermosa.” Además va muy bien en la escuela y tanto maestros como compañeros lo aprecia mucho. -¿Era agresivo sólo cuando estaba tomado? -No, también cuando estaba sobrio. Con frecuencia me despertaba a media noche y me atormentaba culpándome de cosas injustas que yo no le había hecho. Al paso del tiempo, mejor ya no le discutía, porque si lo hacía podía terminar golpeada como ya había sucedido en otras ocasiones, sólo me quedaba callada escuchándolo. Cuando terminaba su sermón, él simplemente se dormía, pero yo me quedaba despierta muy desconcertada y ya no podía volver a conciliar el sueño. ¡Dormía tensa, siempre nerviosa, no sabíaen qué momento me despertaría enojado dispuesto a culparme por algo! -Dime, ¿cómo era la mamá de Francisco con él? -Su madre era una mujer muy posesiva, demandante y llena de achaques. Todo el tiempo quería que Francisco estuviera a su lado. En cuanto él se desocupaba iba inmediatamente a ver a su mamá y allí se la pasaba complaciéndola en todas sus exigencias y haciéndole toda clase de encargos: Que fuera a comprar pan, que la llevara a visitar a sus amigas, que fuera a la farmacia, que fuera por 29 algún mandado, que la llevara al doctor y muchas otras cosas. Al terminar de hacer todo lo que le pedía, su mamá le decía: “Mi hijito, ya es muy tarde para que te vayas a tu casa, mejor quédate a dormir aquí.” ¡Y allí se quedaba! ¡También se la pasaba todo el día hablándole por teléfono! Si él no le contestaba entonces me marcaba a mí muy molesta y me preguntaba: “¡¿Dónde está mi hijo, por qué no me contesta?!” Yo le respondía: “Debe estar ocupado en la fábrica, ya le llamará cuando se desocupe.” Pero ella no quedaba conforme y agregaba: “¡¿Qué le cuesta levantar el teléfono y llamarme?!” Era una mujer muy agresiva, en una ocasión me insultó insinuándome que yo era una prostituta. -Continúa por favor. -En otra ocasión Francisco desayunó en casa bastante bien y al terminar se fue a ver a su mamá. Ella al verlo llegar le sirvió de nuevo el desayuno, Francisco argumentó que ya había desayunado pero ella le contestó: “¡Pues ya te serví y ahora te lo comes!” Otro día, Francisco y yo fuimos a visitarla, ¡y a mí me metió un plátano en la boca por la fuerza! -¿Qué más? -Hace tiempo cuando la mamá tuvo almorranas, le llegó a pedir a Francisco que le pusiera la pomada en el ano ¡y él accedió! Cuando me enteré le dije: “¡¿Por qué tienes tú que ponerle la pomada en el ano a tu madre?! ¡Eso lo puede hacer ella sola!” -¿Su mamá tenía algún impedimento físico como para pedirle eso a su hijo? -¡Claro que no! 30 -Bueno Angélica, el problema esta muy claro, dices que Francisco te culpaba de cosas injustas que tú no le hacías, por ejemplo te decía: “¡Me quieres tener en casa de tu gato, de tu mandadero!” ó “¡Eres una mujer posesiva!” Cuando en realidad era su mamá la que lo traía de su “gato” ó “mandadero” y la que se posesionaba de él. Francisco estaba proyectando sobre ti la imagen de su madre. Te reclamaba a ti: “¿¡Qué te crees, que vas a disponer de mí tiempo a tu antojo!?” ó “¡Eres la dueña de mi tiempo!” Cuando realidad era su mamá la que quería disponer de él a su antojo y la que quería adueñarse de su tiempo. Te decía: “¡Me quieres engordar!” Pero era su madre la que lo hacía comer por la fuerza, no tú. Por eso te parecían reclamaciones absurdas, ridículas y te quedabas tan desconcertada, no eras tú la que le hacía todas esas cosas. Te dabas cuenta que Francisco no te podía ver contenta, como que habías hecho algo muy malo y no merecías ser feliz, te estaba haciendo pagar a ti todo lo que su mamá le hacía a él. Por eso por más que te esforzaras en ser comprensiva y cariñosa no lograbas nada, ¡el problema no eras tú! Francisco estaba proyectando la imagen de su madre sobre ti. Todos esos reclamos no iban dirigidos hacia ti, sino hacia ella. -Me daba cuenta que su mamá era así, pero no me había percatado que me confundía con ella. -Tal vez deberías tratar de hablar con Francisco, tienen dos hijos y valdría la pena componer la relación entre ustedes dos. 31 -Él dejó de estar en mi corazón desde hace muchos años. Ya no me interesa, nos ha hecho mucho daño a mí y a mis hijos. Otro día Angélica me comentó: -Algunos de los hermanos de Francisco siempre le han hablado mal de mí, lo manipulan y lo ponen en mí contra. ¿Por qué lo hacen? ¡Nunca he entendido eso! -Es evidente que están del lado de su mamá y tal vez les conviene que Francisco sea quien esté a su servicio, de lo contrario el encargado de hacerle todos los mandados a la mamá tendría que ser alguno de ellos. Después de esto insistí en dos o tres ocasiones a Angélica que intentara hablar con Francisco, pero ella ya había tomado una decisión. Con esta historia podemos apreciar la gravedad de la proyección, que en este caso además de provocar violencia intrafamiliar, los llevó al divorcio. Todo ese drama familiar era una simple proyección. Francisco agredía una imagen, no a su mujer. Angélica lo soportaba porque tenía la esperanza de hacerlo cambiar y porque tenía la ilusión de tener una familia. Después de la separación Francisco sufrió de depresión, había perdido lo que más amaba, a su mujer. Lo peor del caso es que la había atacado sin tener nada en su contra; había estado peleando contra un fantasma, el fantasma de la proyección. La proyección es más fuerte que la realidad misma, aunque a Francisco se le apareciera la princesa más 32 servicial y cariñosa que haya existido, la proyección de la imagen de su mamá sobre ella haría que Francisco la viera como una amenaza. La agresión de Francisco era contra el sexo femenino, agredía solo a su esposa e hija, a su hijo varón no. La niña decía: “Cuando sea grande no me voy a casar.” El miedo que le tenía a su padre ya lo proyectaba hacia los hombres en general. Tal vez aquí tenemos el inicio de una futura feminista o lesbiana ya que también decía: “Hubiera preferido nacer hombre.” Varias personas intentaron hacerle ver a Francisco que tenía una gran mujer como esposa, pero no los quiso escuchar. La verdad cura, el engaño enferma. Quien no acepta la verdad permanece engañado y por lo tanto enfermo. También es muy importante darse cuenta que Francisco permitía que su mamá abusara de él y que lo utilizara, nunca se reveló. Mamá es un ser demasiado importante para nuestras vidas: Somos parte de su cuerpo, nos formamos dentro de ella, salimos de ella, nos alimentamos de ella, nos da calor y cariño, nos guía al inicio de la vida, ¡ella es quien atiende todas nuestras necesidades! Por estas razones mamá es un ser intocable y preferimos ocultarnos a nosotros mismos que ella nos haya perjudicado, pero lo que no podemos evitar cuando tenemos una madre dañina es que se nos forme una mala imagen de la mujer, la cual después vamos a proyectar sobre todas las demás mujeres y a ellas les vamos a reclamar lo que mamá nos haya hecho. 33 Alrededor del mundo existen miles de mujeres que diariamente son maltratadas por sus maridos debido a que proyectan sobre ellas la imagen de sus madres. A través de la historia quizá son millones de mujeres las que han sido maltratadas por esta razón. A los hombres como Francisco se les llama misóginos y a continuación veremos lo que una mujer hizo inteligentemente con uno de ellos. Sofía Una amiga llamada Sofía, estaba muy interesada en el tema de los hombres misóginos. -¿Qué es un hombre misógino? -Preguntó Sofía. -Así se les dice a los hombres que están en contra de las mujeres. -¿Y por qué son así? -Porque están proyectando la imagen de su madre hacia todas las mujeres. Un hombre misógino tuvo que ser dañado durante su infancia por su mamá, y ya que a través de ella formó una imagen de lo que es una mujer, ahora siente que todas son iguales. Los hombres misóginos pueden ser violadores, golpeadores o hasta asesinos de mujeres. Un ejemplo lo tenemos en la novela “Barba Azul” En ella, el protagonista tiene una colección de esposas disecadas en su sótano. Cada vez que asesinaba a una mujer, en realidad estaba matando a la imagen de su madre. 34 -¿O sea que las madres son las culpables? -No podemos hablar exactamente de culpables, me he dado cuenta que en muchos casos se forma una cadena que se transmite de generaciónen generación. -¿Cómo que una cadena? -Me preguntó Sofía. -Hay muchos hombres que tratan muy mal a sus esposas, las insultan, las humillan o les pegan. Ellas no se pueden defender porque el hombre es más fuerte. El coraje que llegan a sentir hacia su marido se les queda adentro y con mucha frecuencia lo descargan contra sus hijos varones, a ellos les hacen pagar todo lo que su marido les hace. Estos hijos crecen con odio hacia su madre, su imagen la van a proyectar en sus futuras esposas y les harán pagar todo lo que su mamá les haya hecho. De esta manera vuelve a comenzar la historia. ¿A quién vamos a culpar, al hombre que golpea a su mujer o a la madre que golpea a su hijo? ¿Quién fue primero, el huevo o la gallina? Le puse varios ejemplos a Sofía y continuaba haciéndome preguntas. Asimiló muy bien lo que era un hombre misógino, tan bien que un día llegó a platicarme lo que le sucedió: -Iba en mi coche y me quedé atorada en un embotellamiento. De pronto un hombre se me acercó con su auto, bajó el vidrio y ¡comenzó a insultarme! Traté de salir de allí pero no pude y me quedé muy angustiada pensando: “¿¡Qué le hice, me le cerré o qué!?” Él continuaba insultándome muy agresivamente, entonces pensé: “¡Son demasiados insultos! No sé que pude haberle hecho pero sea lo que sea, ¡no merezco tantas groserías!” En ese 35 momento me acordé de los hombres misóginos y cuando acabó con su repertorio volteé a verlo y le dije: “¡Usted me está confundiendo con su madre!” -¿Qué hizo ese hombre? -Le pregunté riendo. -Ahora era él quien estaba preocupado por salirse del embotellamiento. -¡Claro, no fueras a soltarle otra verdad! Sofía supo utilizar lo que sabía sobre la proyección de una manera muy inteligente: Le dijo la verdad al misógino, se libró de él y sin ser grosera le devolvió todos sus insultos. Estudiemos otra historia más proveniente de la vida real. Joel y Silvia Un amigo llamado Joel, deportista, sin vicios, que gozaba de un buen sueldo trabajando como director de una compañía transnacional, se casó con una mujer llamada Silvia y tuvieron dos hijas. Joel se sentía feliz con su esposa y sus dos hijas, pero un día me buscó para decirme: -Jordi, quiero hablar contigo. -Sí, dime. -Le respondí. -Es una consulta. -¡Que te parece si vamos a tomar un café y allí me platicas! Fuimos a un restaurante y empezó a exponerme su situación: -Resulta que mi mujer se quiere divorciar de mí, pero yo la sigo queriendo y además tenemos dos hijas muy pequeñas 36 a las que también amo. No se qué está pasando, ¡¿por qué se quiere divorciar de mí?! -¿Pues que le hiciste? -Le pregunté. -No sé. -¿Te encontró con otra, o qué? -¡No, yo no ando con ninguna otra! -¿Entonces, por qué se quiere divorciar? -¡No lo sé! Por eso vengo a preguntarte a ti, a ver si tú me puedes decir que está pasando. Me imaginé que era un caso de proyección, normalmente nos desconcertamos cuando alguien nos reclama cosas sin sentido y Joel se veía desconcertado. Entonces empecé a formular varias preguntas para tratar de saber si Silvia proyectaba la imagen de alguien sobre Joel. -¿Te has fijado si te reclama cosas que no te pertenecen? -¿Como que no me pertenecen? -Me preguntó él. -Si, que no eres tú, que te lo reclama a ti pero tú no eres el responsable. -Se quedó pensando un momento y luego reaccionó diciendo: -Pues sí, precisamente me reclama que por mi culpa, no se realizó en la vida. -¿Y es cierto eso? -¡Por supuesto que no! ¡Ella puede hacer lo que quiera, no soy celoso, ni posesivo y le doy todo lo que me pide! -De acuerdo. ¿Qué otra cosa te reclama que no te pertenece? -Me dice que por mi culpa ella no estudió una carrera universitaria. -¿Eso es verdad? 37 -¡No! ¡Ya le he dicho que le pago la carrera que guste, en la Universidad que quiera! -Bien. ¿Qué más te reclama que no te pertenezca? -Pues, dice que por mi culpa perdió su libertad. -¿Es cierto eso? -Volví a preguntar. -Mira, para acabar pronto, mi trabajo dentro de la compañía es estar en diferentes países de Centroamérica durante toda la semana. Todos los lunes por la mañana tomo el avión y regreso hasta el viernes. ¿Como le voy a quitar su libertad si no estoy? ¡Puede hacer lo que quiera! Aunque yo me opusiera a algo, ella lo podría hacer. ¡No estoy en toda la semana! Definitivamente Silvia le reclamaba cosas que no le pertenecían a Joel. Ahora busquemos quién era el o la culpable de sus reclamaciones. -De acuerdo, ahora veamos, ¿te has fijado si, por casualidad, tu mujer se la pasa mucho tiempo por teléfono con su mamá? -Le pregunté a Joel. -No, por teléfono no ¡Silvia se la pasa todo el día pegada a su mamá! ¡Siempre está con ella! -¿Ya te diste cuenta por culpa de quién Silvia no se ha realizado en la vida, por culpa de quién no estudió una carrera universitaria y por culpa de quién perdió su libertad? Si todo el día está pegada a su mamá, ¿cómo va a realizar todas esas cosas? ¡Te está reclamando a ti lo que quisiera reclamarle a su madre! La mamá de Silvia la educó para que siempre estuviera pegada a ella. Ponte abusado, porque además se ve que tu suegra es una mujer muy posesiva ¡y te va a querer quitar a tu esposa con todo e hijas! 38 Educar a los hijos para que nunca se vayan del lado de sus mamás, es algo muy frecuente en nuestra cultura y al mismo tiempo muy dañino. Lo que estaba haciendo la mamá de Silvia para mí era muy obvio, ya he visto muchísimas madres que su interés principal es separar a sus hijos de sus esposos o esposas para que regresen a casa con todo y nietos. ¡No hay cosa que las haga más felices! Desafortunadamente no piensan en el enorme daño que les ocasionan a sus hijos, o no les importa. Hace muchos años me di cuenta de que en general, cuando una pareja de casados se encuentra discutiendo o peleando, ninguno de los dos tiene algo real en contra del otro, es muy frecuente que cada cual discuta contra una imagen. ¡Esto me causó un gran impacto! “¡No existe comunicación entre ellos!” Pensé sorprendido. “Se reclaman cosas que deberían reclamar a sus respectivos padres o madres. ¡No tienen nada uno en contra del otro!” Si quitáramos del camino la confusión que hay en ellos, lo único que quedaría sería una inmensa atracción y un enorme gozo al tener cerca a su pareja. ¡No habría discusión! Los animales no tienen la capacidad de proyectar imágenes, tal vez por esta razón nunca hemos visto a un toro golpeando o matando a una vaca. Joel se indignó al darse cuenta que esa era la verdad. Se despidió de mí y se fue de inmediato a poner las cosas en orden con su esposa. Tiempo después pude constatar que Joel había logrado hacer ver a Silvia que ella en realidad no podía tener nada en contra suya. ¡Era su mamá quien la perjudicaba no él! De 39 este modo Joel logró mantener a su lado a su esposa y a sus dos hijas. Con estas últimas historias podemos observar cómo la imagen de mamá puede ser proyectada tanto hacia las mujeres como hacia los hombres. En una de mis pláticas con el Dr. Flores me comentó: “El mundo funciona como una expansión de la madre.” Esto significa que así como haya sido nuestra madre vamos a tener la tendencia de ver al mundo en general. Dentro del vientre materno es donde se concibe la vida, allí se va a desarrollar un nuevo ser y durante nueve meses ese es el mundo del bebé. Al nacer mamá continúa siendo su mundo por un buen tiempo, come de su cuerpo y ella lo atiende en todos sentidos. Tal vez esta es la explicación de porqué se puede confundir al mundo con mamá y con facilidad proyectamos su imagen hacia todas las personas. En, cuanto a la imagen de papá, la he visto proyectada únicamente hacia el sexo masculino. Veamosun caso de proyección de la imagen de papá. Rosaura y Mario Rosaura era una mujer muy guapa, inteligente y ambiciosa, se encontraba casada con un hombre muy tranquilo, estudioso, respetuoso con la gente y sumamente trabajador llamado Mario. Un día Mario me comentó con verdadera amargura: 40 -Mi vida ha sido muy grata en muchos aspectos, tengo mucho éxito profesionalmente, mis hijos ya crecieron, terminaron sus carreras y están trabajando, pero mi matrimonio con Rosaura ha sido un fracaso, han sido veintisiete años tirados a la basura, nuestra vida sexual ya terminó y jamás hubo nada, ni el menor placer sexual. Además la comunicación entre nosotros siempre ha sido muy difícil, no nos entendemos, discutimos mucho. Esto para mí ha sido verdaderamente frustrante. Muchos años antes, cuando Mario y Rosaura apenas tenían pocos años de casados, ella un día me confesó: -Sabes, yo hubiera deseado no tener hijos, nunca les he tenido paciencia, la mayor parte del tiempo tan sólo me dan problemas y yo me la paso regañándolos. Me la pasaba mejor cuando era soltera. Tenía un grupo de amigas con las cuales me divertía bastante, convivíamos mucho tiempo juntas y con frecuencia comentábamos sobre nuestros novios. Un día yo les propuse hacer una competencia entre nosotras, ¡a ver quién lograba sacarle más dinero a su novio en un fin de semana! Ellas aceptaron la competencia y acordamos que el siguiente lunes nos reuniríamos para ver quién había ganado. Pasó el fin de semana y nos reunimos en casa de una de ellas para contarnos lo que habíamos conseguido de nuestros galanes. Una por una empezó a contar lo que le había hecho gastar a su novio en cosas tales como una cena en el mejor restaurante de la ciudad o algún caro espectáculo en un centro nocturno. Al final fue mi turno y les platiqué lo que había hecho: Primero me fui sola a recorrer las mejores joyerías que se encuentran en el 41 centro de la ciudad para buscar algo muy caro, vi en un aparador un precioso collar de joyas finísimas sumamente costoso y pensé que ese debía ser mi trofeo. El sábado siguiente, cuando mi novio fue a visitarme, le propuse ir a pasear por el centro y al pasar caminando por la joyería me detuve, le hice ver el collar y como si yo nunca lo hubiera visto empecé a exclamar: “¡Qué hermoso collar! ¿Ya te diste cuenta mi amor? ¡Es la joya más bonita que he visto en toda mi vida, jamás había visto algo igual, daría lo que fuera por tener algo así!” Me la pasé un buen rato desviviéndome por ese collar y luego nos fuimos. El resultado fue infalible: Al día siguiente llegó a mi casa con una sorpresa... el collar. Obviamente Rosaura ganó el concurso. Continuamos hablando sobre las relaciones entre parejas y finalmente ella me hizo el siguiente comentario: -El sexo a mí me parece que es una agresión hacia la mujer. -¿Una agresión? -Pregunté. -Si, fíjate en la forma que tiene el pene, es como una especie de flecha o lanza que perfora y atraviesa a la mujer. -¡Bueno! -Exclamé yo- ¡También podríamos decir que la vagina de la mujer es como una boca que tiene dientes, mastica y se come al pene! Pero la realidad es que ni el pene es una flecha, ni la vagina una boca. Más bien están hechos para poderse acoplar perfectamente, sin lastimarse, con la finalidad de procrear. -Rosaura se quedó reflexionando unos segundos y luego comentó: -Pues sí, tienes razón. El padre de Rosaura era un hombre autoritario e impositivo que humillaba, devaluaba y destruía emocionalmente a otras personas con tal de 42 obtener un provecho sobre ellas. Dentro de su hogar fue un hombre muy enérgico, autoritario y dominante, sus hijos debían hincarse ante él y agachar la cabeza cada vez que lo saludaban. La madre de Rosaura fue una mujer muy agradable, pero demasiado complaciente, devaluada y muy sumisa, que no tenía voz ni voto dentro del hogar. Rosaura tenía dos hermanos y una hermana. Los hermanos de Rosaura recibieron el ejemplo del papá y lo imitaron, siempre fueron sumamente abusivos con las amistades y sobre todo con las mujeres. En una ocasión uno de ellos cometió una grave falta dentro del hogar y cuando su madre empezó a reclamarle él fue capaz de voltear todo a su favor para finalmente hacer sentir a su madre que ella era la culpable, su madre confundida, miedosa y sumisa se quedó callada aceptando la culpa. Esta era una escena muy común dentro de ese hogar. “El pene tiene la forma como de una flecha o lanza que perfora y atraviesa a la mujer” decía Rosaura. El resultado de esta imagen fue el fracaso de su vida sexual y una larga historia de discusiones con su marido. Rosaura, evidentemente, proyectaba la imagen de su papá sobre Mario y por el temor de ser humillada por esta imagen se mantuvo a la defensiva durante todo su matrimonio y obviamente así no se puede disfrutar del sexo ni de la presencia del esposo. A la hermana de Rosaura esa imagen paterna la llevó a convertirse en feminista y posteriormente lesbiana, ella también proyectaba la imagen del padre sobre los hombres en general. 43 Pasemos a ver la proyección de imágenes en el desarrollo de la paranoia. 44 La proyección como causa de Paranoia Cuando trabajé en el hospital psiquiátrico, una de mis tareas era elaborar las historias clínicas de los pacientes que llegaban a internarse, entre ellos se encontraban alcohólicos, drogadictos, personas con demencia senil y esquizofrénicos de varios tipos. Una de las esquizofrenias más frecuentes es la de tipo paranoide. Estos pacientes presentan delirios de daño y persecución junto con alucinaciones auditivas. Varias personas con esta enfermedad eran internadas semanalmente y yo tenía que hacerles el interrogatorio para su historia clínica. Cuando llegaba a la parte del cuestionario donde se preguntaba sobre papá yo ya sabía, de antemano, que el paciente no lo tenía, nunca lo había tenido o ya había muerto, lo sabía porque siempre era lo mismo. Un día se lo comenté al director del hospital, pero él me dijo que no tenía mucha importancia, yo no lo consideré así y le solicité que me permitiera hacer una investigación, a lo cual amablemente accedió. Realicé una investigación estadística con los expedientes de 187 pacientes con esquizofrenia paranoide. Por un lado puse todas las preguntas que se hacen en una historia clínica en forma de lista y por otro lado puse las respuestas que aparecían en cada una de las historias de los 187 pacientes. Sumé los resultados y confirmé la falta del padre en el 97% de los pacientes, pero además encontré 45 algo más significativo aún: ¡Todos se habían enfermado justamente después de perder al padre, nunca antes! La pérdida del padre había sido por muerte, separación o divorcio, algunos nunca lo habían tenido. Esto me llamó tanto la atención, que yo me preguntaba muy intrigado: “¿Por qué se enferman después de perder al padre? ¡Tengo varios amigos que son huérfanos de padre y sin embargo ellos no son esquizofrénicos!” Continué investigando y cada vez que se internaba un paciente con dicha enfermedad hacía todas las preguntas posibles sobre su padre, tanto al paciente como a los familiares, sin obtener ningún dato de importancia. Hasta que un día, después de varios meses, la tía de una joven paciente que estaba siendo internada en ese momento me dijo después de todas las preguntas que le hice sobre el padre: -Mire doctor, su padre fue un buen hombre, no había ningún problema entre él y su hija, la que sí fue un problema fue la madre. -¿Por qué lo dice? -Le pregunté intrigado. -Cuando ella era apenas un bebé, un día entré a su recámara y encontré que su mamá estabaasfixiándola. ¡Con la mano le tenía tapada la boca al mismo tiempo que le apretaba la nariz con los dedos índice y pulgar, la niña ya tenía la cara morada! Entonces le di un golpe en su brazo y se la quité de encima diciéndole: “¡¿Estás loca o que te pasa?!” Yo vivía con ellos y desde ese momento siempre me la pase vigilando a la niña porque sabía que su madre la quería matar. “¡Vaya!” -Pensé sorprendido e inmediatamente me di cuenta de mi error- “¡Me la he pasado haciendo 46 preguntas sobre el papá cuando en realidad el problema es la mamá, por eso nunca obtenía resultados!” Para mí esto había sido como una cadena a la cual le faltaban varios eslabones que no hallaba y en ese momento acababa de encontrarlos todos: “El mundo funciona como una expansión de la madre” me dijo el doctor Flores, ¡y esta teoría aquí encajaba perfectamente bien! Estos pacientes dicen que la gente los quiere matar o que los vigilan y les quieren hacer algún tipo de daño, se esconden con frecuencia dentro de algún cuarto y no salen de allí durante meses por miedo al mundo. Muchos piensan que los quieren matar, ¡cuando en realidad fue su madre quien los quiso matar! Entonces, el padre está funcionado como una especie de escudo, se sienten protegidos mientras él existe y deben sentirse completamente desamparados cuando papá desaparece de sus vidas, ¡por eso se enferman precisamente después de perderlo y no antes! Voy a relatar algunas de estas historias. Ramiro Un día, mientras hacía guardia nocturna dentro del hospital psiquiátrico, me llamaron porque dos pacientes se estaban peleando en el patio. Cuando llegué, los guardias los tenían separados, le pregunté a uno de ellos qué había sucedido y me contestó: -No sé doctor, yo estaba muy tranquilo y sólo por que me le quedé viendo, ¡él empezó a decir que yo lo 47 quería matar! Volteé a ver al otro y le pregunté: -¿Qué es lo que sucede? -¡Es que se me queda viendo y me quiere hacer daño! -Me contestó tartamudeando muy nervioso y asustado. Entonces le dije: -Ven conmigo, acompáñame a la enfermería para ponerte una inyección que te tranquilice. -Aceptó acompañarme y en el camino le comencé a hacer varias preguntas: -¿Cómo te llamas? -Ramiro. -¿Hay alguien más que te quiera matar? -Le pregunté mientras continuábamos caminando hacia la enfermería. -¡Sí, se esconden por ahí y me vigilan! -Todo lo decía tartamudeando nervioso. -Mira, yo no creo que haya alguien vigilándote para matarte. ¿Para qué? ¿Qué ganarían con eso? Sin embargo, si creo que tu madre te haya querido matar. -Al decirle esto se detuvo de golpe y allí parado, con la cabeza agachada, empezó a recordar diciendo en voz baja: -Mi mamá me quemaba las manos cuando yo tocaba algo prohibido... Muy seguido me castigaba encerrándome en una pequeña bodega debajo de las escaleras, ¡una vez me dejó allí durante dos días!... ¡A veces me sacaba sangre de los golpes que me daba con el palo! -Todo esto lo dijo ya sin tartamudear en absoluto. Entonces le aclaré: -¿Te das cuenta lo que me estás diciendo? ¡Ella es la que te quería matar! ¡Lo malo es que estás confundiendo al mundo con tu madre! Me miró sorprendido, se quedó recapacitando un momento y me dijo: -Oiga doctor, yo creo 48 que ya no necesito la inyección. Realmente ya no la necesitaba, ¡había dejado de tartamudear por completo! -Yo tampoco creo, anda vete a dormir. -Le dije y me retiré. Al día siguiente Ramiro me estaba buscando por todo el hospital, era un lugar muy grande que contaba con muchos jardines y patios, yo estaba en uno de ellos visitando a otros pacientes cuando Ramiro me encontró y se me acercó para decirme: -Oiga doctor, ¡usted es el mejor doctor de todo el hospital! Todo eso que me dijo ayer es verdad. Cuando salga de aquí quiero verlo para platicar con usted. -Claro que sí, con mucho gusto. -Le contesté sorprendido. Ramiro estaba a cargo de otro médico y yo no podía interferir en su tratamiento, él lo sabía y por eso me dijo: “Cuando salga de aquí quiero verlo...” Me sorprendió bastante el cambio tan rápido que tuvo, Ramiro con sólo una plática dejó de decir que lo vigilaban y lo querían matar, ¡se calmó por completo! Después me enteré que no había vuelto a tener alucinaciones ni a decir que lo perseguían para matarlo, por lo cual fue dado de alta. No tuve la misma suerte con otros pacientes, veamos uno de esos casos. Georgina Una paciente mía llamada Lupita un día me dijo solicitándome: -Por favor doctor, quiero que vea a una compañera mía 49 que se llama Georgina, ella y yo nos conocimos cuando estábamos internadas en un hospital psiquiátrico y nos hicimos muy amigas, salió del hospital y está en su casa, pero ella todavía está muy mal, tiene muchos temores y está muy nerviosa. -Con mucho gusto, dile por favor que me llame por teléfono. Georgina me llamó y me pidió que la fuera a ver a su casa: -Sería más fácil para mí si tú vinieras a mi oficina. -Le pedí a Georgina. -No tengo quien me lleve, no se usar bien el transporte público y además no puedo salir. -Me contestó ella. -¿Por qué no puedes salir? -Le pregunté. -Porque me están vigilando todo el tiempo, en este momento está un señor allá afuera, junto a un árbol espiándome. Además, a donde quiera que yo vaya ponen por todo el camino pequeños micrófonos para decirme de cosas. -Me dijo esto muy angustiada y confundiendo bocinas con micrófonos. Georgina padecía de esquizofrenia paranoide, los principales síntomas de esta enfermedad son delirios de persecución junto con alucinaciones auditivas y Georgina tenía ambos. Accedí en ir a visitarla para intentar hacer lo mismo que con Ramiro. Llegué a la casa donde vivía con su mamá, una mujer fría, poco amigable y de carácter bastante fuerte que todo el tiempo mostraba enojo. Hablé muy poco con la mamá, me interesaba más hablar con Georgina. En un salón de su casa, apartados de su mamá, Georgina empezó a hablarme de su vida: La edad 50 que tenía, los estudios que había realizado, las veces que la habían internado y entre otras cosas comenzó a contarme: -Existe una sociedad internacional encargada de matar a las mujeres inteligentes como yo, están por todo el mundo y me están espiando... -Ella continuaba hablando sobre esa sociedad y de pronto la interrumpí para decirle: -Yo no creo que exista esa sociedad de la que me hablas, no tiene sentido, ¿por qué desearían hacer algo así? ¿Qué ganarían con matarte? Pero si creo que sea tu madre la que te haya querido matar. -En ese instante vi como Georgina se quedaba inmóvil, con la mirada perdida, quedando inconsciente por dos o tres segundos, luego volvía en sí e inmediatamente continuaba su plática como si yo no le hubiera dicho nada. Yo me quedé sorprendido pensando: “¡No resultó! ¿Por qué reaccionó así?” Volví a visitar a Georgina en varias ocasiones y cada vez que ella tocaba el tema de que la querían matar, yo le decía que había sido su madre y ella volvía a perder la conciencia por unos segundos y al recuperarla continuaba su plática como si nada, ignorando por completo mi argumento. Yo no entendía por qué sucedía eso, hasta que un día me di cuenta: “¡Le duele demasiado lo que le digo, lo está bloqueando, mis palabras entran por sus oídos pero inmediatamente son bloqueadas, por eso reacciona así!” No pude hacer nada por ella, dejé de consultarla y ella continuó tomando los medicamentos que otro doctor le recetaba con los cuales tampoco logró curarse. Finalmente un día me enteré que Georgina había muerto a causa una intoxicación. Con cierta frecuencia podemos escuchar en 51 los noticieros que alguna madre mató a sus hijos y luego desapareció o se suicidó. En una ocasión meenteré de uno de estos casos, la mamá le disparó a su bebé de apenas unos meses de edad, luego con la misma pistola mató a su otro hijo de tres años y finalmente le disparó a su hija de doce años de edad, que se encontraba aterrada observando la escena, ella se movió y la bala le pegó en el hombro. La mamá desapareció y la niña fue trasladada al hospital para su curación, le extrajeron la bala y luego la trasladaron a un hospital psiquiátrico porque se encontraba con la mirada fija, perdida, como si estuviera inconsciente pero con los ojos abiertos, no respondía a ninguna de las preguntas que le hacían los doctores, ni lograban hacerla volver en sí. Luego varios investigadores de la policía la interrogaron dentro del hospital: -¿Cómo te llamas? -Preguntó uno de los investigadores. La niña no respondió. -¿Quién le disparó a tus hermanos? -Preguntó otro de los policías, pero ella permanecía inmóvil y con la mirada perdida. -¿Quién te disparó a ti? -Volvió a preguntar el mismo sin obtener respuesta. Finalmente uno de ellos le dijo: -Fue tu mamá, ¿verdad? -En ese momento la niña empezó a gritar muy desesperada, moviéndose agitadamente al mismo tiempo que se tapaba los oídos: -¡¡No es cierto, no es cierto, no es cierto!! Evidentemente esa niña estaba haciendo un esfuerzo tremendo para borrar de su mente la terrible escena que había vivido. Este esfuerzo desconecta a la persona de la 52 realidad para lograr quitar de su mente algo demasiado doloroso, ¡que su propia madre la haya querido matar! Me di cuenta con diferentes pacientes que a algunos la verdad les duele demasiado y no la pueden aceptar. Después de muchos años he logrado algunos avances diciéndoles cosas como: “Tu mamá en realidad te quiere mucho, pero desgraciadamente se enfermó y por culpa de esa enfermedad ella te ha querido hacer daño, es como si tu tuvieras un perrito que te adora, pero si de pronto se enfermara de rabia él trataría de morderte, ¿pensarías que tu perrito dejó de quererte? ¡No, más bien sentirías mucha tristeza, él no dejó de quererte! ¡Es por culpa de la rabia que te quiere morder! Lo mismo sucede con tu mamá, ella te quiere pero se enfermó de la mente, tienes que verlo así y comprenderla.” Con estas palabras he logrado tener éxito en algunos casos más recientes. Juan Un día un joven de diecinueve años de edad llamado Juan, fue acompañado por sus hermanos para ser internado en el hospital psiquiátrico. Les pregunté: -¿Qué le sucede a su hermano? -Lo traemos porque siempre anda con mucho miedo y dice cosas sin sentido. -¿Que cosas dice? -Desde hace tiempo dice que lo vigilan y lo quieren matar, 53 se esconde y se encierra en su cuarto. Últimamente es difícil hacerlo comer porque cree que la comida está envenenada. -Y entonces... ¿no come? -Cuando se la sirve alguno de nosotros si logramos convencerlo de que no está envenenada, pero cuando se la sirve mamá, no hay modo de convencerlo y no se la come de ninguna manera. Fui a buscar a Juan para hacerle algunas preguntas. Lo encontré sentado en un rincón en el suelo, aislado de todos los demás pacientes. Me le acerqué amablemente para que me tuviera confianza y después empecé a preguntarle: -¿Con quién vives? -Con mi mamá y mis hermanos. -¿Cuántos hermanos tienes? -Seis. -¿Y tu papá, donde está? -Murió cuando yo tenía diez años de edad. -¿Como murió? -Mis papás siempre estaban discutiendo, se insultaban y a veces peleaban a golpes. Un día decidieron divorciarse y nos juntaron a mis hermanos y a mí para que escogiéramos con quién queríamos vivir, con papá o con mamá. Yo fui el primero en elegir, como era el que más me llevaba con mi papá, lo escogí a él. Luego les tocó su turno a mis hermanos y uno por uno escogieron ir a vivir con mamá. Cuando los vi a todos juntos alejarse con mamá, sentí miedo y corrí para alcanzarlos. Mi papá se quedó solo, ese día fue a la cantina a emborracharse, buscó pleito y lo mataron. 54 -¿Te sentiste culpable por su muerte? -No. -¿Hubieras preferido vivir con él? -Sí. Luego fui con los hermanos de Juan, me confirmaron lo que él me había contado y agregaron: -Mamá siempre le pegaba mucho a Juan. -¿A ustedes no? -Pregunté. -No, sólo a él. -¿Por qué? -Mis papás se peleaban muy fuerte y como Juan era el consentido de papá, pues mi mamá no lo quería. Juan desarrolló una esquizofrenia paranoide debido al mal trato que recibió de parte de su madre por haber sido el consentido de papá. Esta razón la he visto en muchos otros casos. Cuando la relación no es buena entre los papás o cuando papá abusa de mamá, ella se desquita normalmente contra el hijo más apegado a él, contra el que más se le parece o contra el que lleva su nombre, aunque también es muy frecuente que no quiera a ninguno de los hijos de ese señor. Voy a contar uno de esos casos: Alma Un día en una reunión, una amiga llamada Alma me preguntó: -¿Tú sabes interpretar los sueños? 55 -Sí. -Le contesté. -¿Podrías interpretar una pesadilla que tengo y que se me repite desde hace años? ¡No se que quiera decir! -Mira, los sueños tienen que ver con nuestras vidas, sé muy poco de ti y así es más difícil, pero cuéntamela. -Sueño que estoy con mis dos hermanos menores en la playa, muy cerca de la orilla del mar, ellos están atrás de mí, entonces veo de pronto como una ola empieza a levantarse amenazante y se hace inmensa, me pasa por arriba y a mí no me hace nada, ¡pero a mis dos hermanitos que estaban atrás de mí los destruye! -¿Con quién vives? -Le pregunté. -Con ellos dos y con mi mamá. -¿Y tu papá? -Mi mamá se divorció de mi papá hace mucho. Ella se volvió a casar con otro señor y de allí nacieron mis dos hermanitos, pero ese señor la trataba muy mal, la humillaba, le gritaba y hasta le pegaba, entonces mi mamá se volvió a divorciar. -Ya entendí tu sueño, la inmensa ola representa a tu mamá, ella destruye a tus dos hermanitos porque son hijos de ese señor que la trataba tan mal, no los quiere porque son su descendencia, son su imagen. Tú eres hija de otro papá y por eso a ti no te hace nada, la ola te pasa por encima. -¡Tienes razón! ¡Mi mamá no los quiere, siempre los está regañando y les pega muy fuerte, yo siento feo de ver como los trata y los quiero proteger! En cambio a mí siempre me ha tratado muy bien. -Me dijo esto sorprendida porque 56 descifré su sueño. -En tu pesadilla la clave está en la diferencia entre tú y tus hermanos, la ola los destruye a ellos, a ti no te hace nada, entonces hay que encontrar en la vida real esa diferencia. Mamá podía haber sido representada de alguna otra forma, aunque es muy frecuente que esté representada como el mar. Carlos Un niño de cuatro años de edad, hijo de padres separados, llamado Carlos vivía con su mamá y veía a su papá los fines de semana. El papá constantemente buscaba poner al hijo en contra de su madre. Un día le preguntó la mamá al niño: -¿Por qué no recogiste los juguetes? -Yo quiero mamá, pero mi mente no me deja. La mamá se dio cuenta que su hijo estaba en conflicto consigo mismo. El niño quería obedecer las indicaciones de su madre, pero el padre dentro de su mente se interponía a sus deseos y lo ponía en contra de mamá. Nuestro cerebro está formado por dos hemisferios, uno derecho y otro izquierdo. En el antiguo Egipto, hace cinco mil años, se sabía que la mente humana está formada por una parte femenina y otra masculina. Actualmente existe una prueba psicológica para detectar qué hemisferio cerebral se utiliza más, basándose en que un hemisferio 57 cerebral tiene características femeninas y el otro masculinas. Hace doce años, investigando dentro de mi mente, llegué a la conclusión que la imagen de papá se encuentraen un hemisferio y la de mamá en el otro. A la imagen del padre interiorizada en la mente la llamé “Yo” y a la imagen de la madre dentro de la mente la nombré “Mí”. También se sabe que existe una transmisión constante de impulsos eléctricos entre los dos hemisferios, pero no se sabe qué se trasmiten, tal vez sea una conversación entre ambos hemisferios, o sea, entre el “Mí” y el “Yo”. De acuerdo a esto es posible que: 1.- Si un padre está en constante pleito con su esposa, el hijo de ellos podrá estar en constante pleito consigo mismo. 2.- Si una madre engaña a su esposo, el cerebro de ese hijo tendrá la tendencia a engañarse a sí mismo. 3.- Si un hijo odia a alguno de sus padres, odiará a la mitad de sí mismo. 4.- Si un hijo desprecia a ambos padres, se podrá despreciar a sí mismo por completo. Voy a poner un ejemplo de lo anterior: Susana Tuve una paciente joven de diecisiete años de edad llamada Susana que me fue a visitar porque estaba muy angustiada: -Mis padres se están separando, yo me siento muy 58 angustiada, no puedo dormir bien, ellos constantemente discuten y me siento muy mal. -¿Ellos han buscado la ayuda profesional? -No creo que les interese. Le puse algunas pruebas psicológicas para ver de qué manera estaba afectada y cuando terminó me dijo: -Tengo otro problema, a veces se me enroncha la mitad del cuerpo, duro un tiempo así y luego se me quita pero se me enroncha la otra mitad, ya fui a ver a varios doctores y a un dermatólogo pero no me han podido curar. -¿Cuándo tus papás discuten tú intervienes? -Sí, a veces me doy cuenta que mi mamá tiene la razón y me pongo de su lado en contra de mi papá, pero después de un tiempo es mi padre el que tiene la razón y me pongo de su lado en contra de mamá. -Entonces cuando te pones en contra de tu papá se te enroncha la mitad derecha del cuerpo y cuando te pones en contra de tu mamá se te enroncha la otra mitad. Tú no te debes poner en contra de ninguno de los dos, al ponerte en contra de alguno de ellos te pones en contra de la mitad de ti misma y se te enroncha esa mitad del cuerpo. Susana siguió mi consejo, dejó de intervenir en las discusiones entre sus padres y no se volvió a enronchar. Hay algo que es innegable, somos la mitad mamá y la mitad papá. Sabemos que en el momento de la concepción la mujer aporta la mitad de cada uno de los cromosomas a través del óvulo y el hombre hace lo mismo por medio del espermatozoide, de modo que al juntarse forman cromosomas completos. Los cromosomas están formados 59 de genes y los genes traen la información necesaria para cada una de las características que va a tener el nuevo ser. Mitad mamá y mitad papá. Si biológicamente somos ellos dos juntos ¿Por qué no hemos de serlo mentalmente también? Dios dijo: “Dejará el hombre a su padre y a su madre y se irá con su mujer y serán los dos un solo ser.” (Génesis 2, 24). Pasemos a ver cómo influye la proyección en el homosexualismo. 60 La proyección en el Homosexualismo Algunas personas piensan que la homosexualidad en el hombre es ocasionada por la falta de hormonas masculinas o por un exceso de hormonas femeninas. La hormona que da las características masculinas es la testosterona, ésta se produce en los testículos. Cuando falta la testosterona se produce una enfermedad llamada “eunuquismo” esto viene de la palabra eunuco que significa castrado. Si la testosterona falta desde la infancia, no se va a desarrollar el pene, tampoco los testículos, estos niños de grandes serán infértiles ya que no tendrán producción de espermatozoides, tampoco tendrán apetito sexual hacia ningún sexo, no tendrán vello en cara ni bigote y el vello en el pubis no tendrá la distribución masculina ni podrán desarrollar la musculatura característica masculina, tendrán los hombros pequeños y los pechos desarrollados. Por mucho que queramos engañarnos los hombres homosexuales no tienen las características anteriores. En las niñas la falta de hormonas femeninas va a ocasionar que sus genitales permanezcan infantiles, no se van a desarrollar las glándulas mamarias, tampoco los ovarios, nunca llegarán a tener menstruación y también serán infértiles. Tampoco las mujeres homosexuales tienen estas características. La producción de testosterona también puede disminuir en la edad adulta sin que eso conduzca al homosexualismo. Voy a exponer una de estas historias. 61 Raymundo Raymundo trabajaba como obrero en una fábrica. Tenía la fama de andar detrás de las mujeres que allí laboraban y ser de carácter muy fuerte. Sin embargo tenía un problema, la producción de hormonas masculinas en su cuerpo estaba disminuyendo. Sus compañeros de trabajo se empezaron a extrañar al ver que Raymundo no se quitaba la camiseta para bañarse y no sabían la razón. Lo que sucedía era que se avergonzaba debido a que le estaban creciendo los pechos. Un día su jefe jugando le dio un golpe en el pecho y Raymundo se quejó del dolor, su jefe le dijo: -¡No es para tanto, ni siquiera te pegué fuerte! -Es que tengo un problema. -Dijo Raymundo. -¿Qué te sucede? -¿Si le digo, me va a ayudar? -Sí, por supuesto, dime. Raymundo se descubrió la camisa y su jefe se dio cuenta que tenía agrandamiento de los pechos. -No te preocupes Raymundo, tienes seguro médico, ve a ver al doctor, puedes faltar a trabajar el día que tú quieras. Raymundo fue al hospital y allí el doctor detectó por medio de exámenes que tenía disminución en la producción de hormona testosterona. Recibió tratamiento medico a base de hormonas y se le practicó una operación quirúrgica estética para corregir el agrandamiento de los pechos. Raymundo no volvió a usar camiseta para bañarse, se casó y tuvo hijos. 62 A pesar de la disminución de testosterona que sufría Raymundo nunca desarrolló homosexualidad. Se han hecho muchas investigaciones científicas encaminadas a encontrar la diferencia hormonal entre las personas homosexuales y las que no lo son, pero no se ha logrado encontrar ninguna diferencia. Otros dicen que el homosexualismo es un problema genético, pero hasta ahora esta aseveración tampoco se ha podido comprobar. En los cromosomas están los genes. Los cromosomas XX definen el sexo femenino y XY el masculino, cada una de las células de nuestro cuerpo lleva estos cromosomas. Entre las enfermedades más frecuentes ligadas a los cromosomas sexuales se encuentran el Retardo Mental, el Daltonismo, la Hemofilia, la Distrofia muscular, Ictiosis, Agamaglobulinemia, el Síndrome de Turner (caracterizado por talla baja, infantilismo sexual, cuello alado, implantación baja de cabello en la nuca), y el Síndrome de Klinefelter (caracterizado por esterilidad, crecimiento de mama, escaso vello y distribución ginecoide de grasa en el cuerpo). Ninguno de los casos anteriores desarrolla homosexualismo, ni los homosexuales tienen ninguna de esas características. Algunos hombres deciden cambiar de sexo haciéndose una operación quirúrgica para quitarse el pene, los testículos y formar una especie de vagina. ¿Cómo pueden ser mujeres si en cada una de sus células tienen cromosomas masculinos? Me he enterado que algunos de ellos se suicidan después de la operación al darse cuenta de que lo que hicieron fue en contra de ellos mismos. 63 Sabiendo todas estas cosas después de haber estudiado la carrera de medicina y extrañado por la incongruencia de lo que se dice sobre el homosexualismo, un día le pregunté al Dr. Flores: -¿Oiga doctor, a qué se debe el homosexualismo? -En los hombres se debe al miedo y rechazo hacia la figura femenina, que tiene su origen en el miedo y rechazo hacia la madre. En otras ocasiones el hijo se vuelve homosexual porque se siente comprometido con su mamá y tiene miedo a traicionarla
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