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MICHAEL DANTÉS UN VIAJE SIN RETORNO (2021)

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Hola… Soy Michael, tengo 15 años y resido en el planeta 
Tierra. Eso es lo único que sé, quizá y mayormente olvide 
quién soy porque siempre me lo pregunto por las mañanas 
y por las noches antes de dormir. ¿Cómo se supone que 
debo sobrevivir en un pequeño planeta al que no 
pertenezco si el universo es tan colosal? ¡No lo sé! Pero, si 
alguien llega a leer esto… Espero que se abroche el 
cinturón, porque el vuelo a las estrellas está por comenzar. 
 
 
 
Será un viaje sin retorno… 
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Las Pléyades. 
 
Las Pléyades es lo que se conoce como un cúmulo de estrellas abierto, contiene estrellas calientes 
de tipo espectral B, de corta edad, ubicadas en la constelación de Tauro: una agrupación de unas 
miles de estrellas que se formaron juntas y se están separando lentamente con el tiempo, el 
cúmulo está dominado por estrellas extremadamente azules y luminosas que se han formado en 
los últimos 120 millones de años. Está entre los cúmulos estelares más cercanos a la Tierra, y es 
el cúmulo mejor visible a simple vista en el cielo nocturno. Las Pléyades albergan un prominente 
lugar en la mitología antigua, así como una diversidad de significados en diferentes culturas y 
tradiciones. Los astrónomos estiman que el grupo va a sobrevivir aproximadamente durante 
otros 250 millones de años, tiempo después del cual se dispersará debido a las interacciones 
gravitacionales en su entorno galáctico. La distancia específica de las Pléyades a nuestro planeta 
todavía se desconoce, pero actualmente se piensa que la verdadera distancia es de alrededor de 
444 años. 
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Prefacio. 
Este libro resulta de la combinación de mis primeras obras 
literarias, siendo mi primero trabajo como escritor desde 
que tenía 15 años. Este libro refleja mi evolución artística 
en los últimos años, cuando enfrenté batallas contra la 
ansiedad y la depresión hasta caminar en la cuerda floja 
del suicidio. Mi sueño siempre fue ayudar a las personas 
que vivieron lo mismo o similar a lo que viví, en especial a 
los jóvenes que sufren diariamente acoso y maltrato. 
Significa mucho para mí que las personas puedan superar 
sus miedos e inseguridades por más difícil que parezca, 
nada es imposible y sé que parece serlo. Quiero llenar 
vacíos y sanar corazones sangrantes con cada palabra de 
este libro, dibujar estrellas y galaxias en ese espacio frío y 
oscuro que predomina en tu universo interior. Te recuerdo 
que nada es para siempre, ni siquiera las titánicas estrellas 
que brillan desde enormes distancias para enviarte su luz a 
través del tiempo. Todos necesitamos caer para levantarnos 
con el peso de nuestras culpas, es parte de la evolución que 
empieza desde nosotros mismos. 
 
 
¡Larga vida! 
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Índice. 
Capítulo 01. La danza de los átomos. 
Capítulo 02. Las Pléyades: Sueños galácticos. 
Capítulo 03. Un viaje interestelar. 
Capítulo 04. El juramento a las estrellas. 
Capítulo 05. Destrucción masiva: Colisión amorosa. 
Capítulo 06. Gravedad asesina. 
Capítulo 07. La estrella moribunda. 
Capítulo 08. El renacimiento del Sol. 
Capítulo 09. Lluvia de diamantes. 
Capítulo 10. Helio. 
Capítulo 11. Titanio. 
Capítulo 12. Galaxias. 
Capítulo 13. Supernova. 
Capítulo 14. ¡La estrella ha nacido! 
Capítulo 15. La tierra prometida. 
Capítulo 16. Años luz. 
Epílogo. El fin de los tiempos. 
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En honor a la memoria de mi encantadora abuela 
Dalia Peña (1947-2019) y en la de mi amado abuelo 
Germán Mendoza (1949-2020), quienes estuvieron 
conmigo en los últimos años iluminándome como 
deslumbrantes estrellas que me mantuvieron a salvo 
con su gravedad. Podrían pasar millones y trillones 
de años desde sus partidas, pero cada vez que piense 
en ellos y en el amor que me dieron, mis ojos 
continuarán inundándose de lágrimas cada vez que 
los recuerdos rompan a pedazos este latente corazón 
que se desmorona en nostalgias. 
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Parte I. 
Capítulo 01. 
La danza de los átomos. 
 
Cada ser humano es un diminuto átomo fusionado de 
energías intrínsecas y extrínsecas, donde su núcleo atómico 
está perfectamente dividido en cargas positivas y negativas, 
orbitando alrededor de un recóndito núcleo de ensueños y 
utopías eléctricamente vanas. Los protones y los neutrones 
bailan entre combates de fuerzas y descargas repulsivas que 
se mantienen con la potente gravedad del sentimiento, somos 
materia indestructible que no sea crea sino se transforma en 
una versión alterna de lo que anhelamos ser; las pequeñas 
emociones que conectan al cerebro con el corazón danzan 
alrededor de los mismos como iones y electrones, entre cada 
latido cardiaco y por cada bombeo sanguíneo se neutralizan 
los cationes para oxidar las turbadas energías negativas con 
la estabilidad nuclear. La mente se invierte a nuestra propia 
voluntad y se desarrolla en la corteza de los errantes miedos 
y deseos, emitiendo fuerzas cuánticas a velocidades astrales 
e inalcanzables. Y aunque a veces no pueda comprender la 
razón por la cual la antimateria me disocia, las ondas 
electromagnéticas del núcleo irradian la luz que transforma 
la electronegatividad en electropositividad. 
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Capítulo 02. 
Las Pléyades: Sueños galácticos. 
¡Magia, luz y color! Luchemos contra la rebelión oscura y 
desafiemos las fuerzas gravitatorias, somos polvo de estrella 
y lo llevamos disuelto en el aparato circulatorio. Maticemos 
los relámpagos de la tormenta con coloridas nubes estelares 
y cielos azules de arcoíris, cantemos bajos la luz del Sol y 
soñemos bajo la luz de la Luna con los céfiros serenos que 
se llevan nuestras pesadillas, vivamos entre las sombras de 
los amaneceres para perdernos en el brillo de los tornasoles 
que centellan la vida con un aura mística y celestial. Bendita 
sea cada estrella que destella sobre mi perdida mirada de 
vacío y soledad, porque, aunque mi mundo se apague son 
ellas las que seguirán brillando para mí en el paso de los 
siglos; quizá y esté predestinado a una vida corta sin éxitos 
y sin victorias, pero, de lo que sí puedo estar seguro es que 
mis sueños galácticos son los que me llevarán hacia los 
lugares más lejanos y deslumbrantes de la Vía Láctea, hasta 
esas 7 estrellas que fulguran y centellan mis razones de 
vivir, esas 7 hermanas llamadas las Pléyades que pertenecen 
a un cúmulo estelar al que quisiera pertenecer. Porque en 
ellas es donde veo una vida cristalina e invulnerable, como 
un rey seré tratado por cada uno de los pleyadianos y con 
ellos construiré una nación que se haga mi imperio. 
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Será verdaderamente imposible olvidar ese impacto 
cósmico e interestelar que tuve en mi corta vida; lo admiro, 
lo amo, lo exalto, lo honro, lo aclamo y lo encumbro. Con él 
aprendí a que sí estoy solo, nada en el cosmos podrá 
derribarme en escombros ni atomizarme con la energía 
electromagnética de un cuásar, porque soy una poderosa 
estrella hipergigante que arde en fuego como el infierno, soy 
el universo y puedo manifestarlo con el brillo que todos 
quieren robarme. Soy un pulsar a punto de estallar con mi 
potente campo magnético, sólo soy polvo de estrella 
fusionado con partículas atómicas y diamantinas 
extragalácticas. Ese polvo de estrella siempre lo conservaré 
en mi corazón, por cada latido y respiro que ocurra 
mientras viva. Los planetas giran alrededor de mí. 
La vida me ha conectado entrañablemente con la Luna y 
sus efectos, en mi estómago se revuelven un tempestuoso 
mar de emociones cuando la encumbró y la vislumbro, los 
estragos que ocasionan esas emociones marítimas me 
sumergen en el profundo mar que se apodera de mis 
sentidos, me convierto en el náufrago de mi propio mar. 
Quizá y mirando al cielo evite que me pierda en las 
profundidades de mi mente, hace tiempo era un planeta 
errante y vagabundo que caía en el vacío del espacio, la 
negrura del universome perdía en un martirio espacial en el 
que sólo buscaba la energía de una estrella para orbitar a 
su alrededor, me sentía angustiado al ver que simplemente 
era un desolado trozo de roca flotante cuando miraba a los 
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demás planetas, ellos giraban en torno a sus estrellas 
mientras que simultáneamente su galaxia los hacía bailar 
con su gravedad. Después de todo, la luz propia que hay en 
mí ahora brilla tanto como la del planeta Venus, porque con 
cada sonrisa estallo resplandecientes nebulosas con la 
esperanza de conquistar el universo entero. El olvido 
custodia y salvaguarda mi pacto con la soledad, abriendo 
caminos que me lleven hasta las estrellas. 
 
 
 
 
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Capítulo 03. 
Un viaje interestelar. 
Sólo tengo 16 años y aunque mi cuerpo esté atado al tronco 
de un árbol, mi alma vuela por el universo brillando como 
las estrellas que salen de mi mente para irradiar mi luz en la 
oscuridad. Porque no hay corazón ni mente como la tuya, y 
en el universo no hay nadie como tú que sienta las estrellas 
del cosmos como tú lo haces, eres único y perfecto con tus 
imperfecciones. Eres un potente lucero en la penumbra y sí 
todavía no lo crees, sigue la luz de la luna y obsérvala hasta 
que te mires en ella como un divino espejo celeste. No hay 
nadie en la humanidad como tú, aunque pretendas fingir ser 
alguien que no eres porque no eres lo que otros quieren, tú 
eres único y ese el precio de la autenticidad. Vuela y navega 
por las galaxias y encuentra tu felicidad en una nébula que 
tenga los colores de tu aura, el universo se oculta en tus ojos 
como los grandes secretos del mar. 
Anoche tuve un sueño que me mantuvo perdido en una risa 
de confusión y regocijo, soñé que era quien quería ser, fue 
una manifestación divina de lo que espero ser en un futuro 
desconocido, siempre he sentido que no viviré mucho, pero, 
lo único que espero hacer es cumplir los sueños que hoy me 
mantienen con vida. En el sueño llevaba mi telescopio y un 
libro que escribí con mi propio es fuerzo, sólo era yo y todas 
las estrellas que centellaban para mí, ese libro que tenía en 
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la mano tenía una portada decorada con diamantina azul y 
verde que escribía “años luz”, quizá y son años luz los que 
he estado viviendo desde que empecé este viaje sin retorno. 
Creo que la gente mayor me hace sentir menos por tener 
16, pero, en el sueño sólo estaba yo en un desierto perdido 
en planetas y ensueños galácticos; podía respirar aire puro 
sin que la gente minimizara mis sentimientos con etiquetas y 
con falsas alarmas que encendieran mi ansiedad. Sólo 
corría en el desierto mientras mis pies descalzos se 
sumergían en esas arenas movedizas que me transmutaban 
en polvo estelar, la brisa desértica y la llovizna planetaria 
inundaban mi cuerpo hasta ahogarme en la alegría. Al 
despertar solté un clamor con la voz ahogada y frustrada, 
porque mi cuerpo anhela ayuda y mi alma libertad. ¿Quién 
puede arruinar tus sueños diciendo que no eres lo 
suficiente? ¿Quién puede juzgarte de algo que no eres? ¿Por 
qué depender del veneno que lanzan las serpientes infames? 
¡Sí somos dragones antiguos! Nadie debería interponerse en 
el camino de un mago aprendiz, la magia de soñar podría 
llevarte a un escenario en donde seas la estrella del 
espectáculo. No tengo la menor idea de cómo se sentiría 
cumplir un sueño, pero de lo que sí estoy más que seguro, es 
que Dios te regalo tu propio mundo para que así construyas 
tu imperio y reines con él. Espero que Dios lo haga conmigo 
y no se olvide de tomar mi mano antes de que me 
desvanezca. 
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Últimamente he dependido emocionalmente del cielo, 
pienso que ha definido mi estado sentimental desde que me 
volví un adicto a las nubes. Cuando está azul y brillante por 
el día es un sueño devino de paz y tranquilidad, y cuando en 
la noche fulgura y resplandece de estrellas, mi corazón late 
de fuerza y poder al sentirme regio y prodigioso; me refugio 
en Orión y escapo a las Pléyades con tan solo pensar en el 
poderío de Andrómeda, es ese momento cuando mi 
imaginación vuelta y galopa los estratos más profundos de 
mis sentimientos. Pero cuando el cielo se torna de rojo y se 
nubla, es ahí cuando mi tranquilidad se desvanece al 
sincronizarse con mis miedos más ocultos, soy un eclipse 
sangriento. 
Somos criaturas presas en nuestra propia libertad, 
residiendo en un mundo que no comprende las estaciones de 
las vísperas que modifican las propiedades de nuestra total 
existencia, probablemente es hora de adaptarnos a cada una 
de esas épocas y plantar un árbol que nos brinde el oxígeno 
que necesitamos por cada estación, porque cada semilla 
será las que quedarán de los sufrimientos que sedimentaron 
todo lo que fuimos en la última estación. 
Y después de tantas tormentas que se llevaron mi fortaleza, 
ahora más que nunca soy capaz de lo que un día fui incapaz. 
Porque cuando levante la mirada hacia el cielo, mis ojos le 
darán espacio a mi alma para que salga y vuele tan alto que, 
cuando los villanos me miren volar se tropezarán en todo su 
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fracaso. Seré la última estrella que vean en su vil e inútil 
existencia, porque como un monstruo me alimentaré de sus 
miedos para hacerme brillar con las inseguridades que me 
dejaron. Viajaré por cielos borrascosos y coloridos como si 
fuese un ave solitaria, me adaptaré a nuevas condiciones de 
vida de las que nunca antes haya vivido, porque sigo siendo 
una célula primitiva que evoluciona desde microorganismos 
hasta titanes históricos que desparecerán para regresar una 
vez más. Mi evolución es un viaje sin retorno. 
Oxígeno puro, limpio y transparente absorben los alvéolos 
a través de los bronquiolos de mis pulmones. Al cantar toda 
la melodía que se revela en mi mente como una fuente de 
color y fulgor, los ventrículos de mi corazón se contraen con 
cada letra musical para bombear paz y serenidad a las 
arterias que se obstruyen de añoranzas y nostalgias. 
Estoy recuperando la órbita que hace mucho tiempo perdí, 
y quizá esta fuerza de gravedad es mucho más poderosa 
como para evitar que vuelva a perderme. Crezco como 
montañas y brillo como mares azules por cada segundo que 
transcurre, soy un purasangre libre y veloz que corre bajo el 
debilitado Sol de los atardeceres, soy mi propio jinete y mi 
armadura es dorada. 
Después de tantas preguntas sin respuestas creo he podido 
comprender el verdadero significado de mi existencia y el 
valor de ella, no como un simple propósito sino como una 
verdad para todas esas esperanzas que me vuelven ciego. 
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Esto es sólo el inicio de un sueño que me mantiene dormido 
en una realidad de mordacidades que confunden el presente. 
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Capítulo 04. 
El juramento a las estrellas. 
El planeta deja de girar cuando me siento a mirar el cielo 
por las noches, es realmente sorprendente y extraordinario, 
porque pensar en las dimensiones más colosales y titánicas 
del universo hace que mis problemas sean insignificantes y 
diminutos. Prefiero aislarme y perderme en el mundo de mis 
pensamientos y sentimientos. 
La mejor decisión que alguien podría tomar en la vida, es 
la de alejarse de las personas que intoxican tu cerebro hasta 
pudrir tu mente en gusanos y larvas, los últimos años me he 
estado rodeando de gente podrida que se ha encargado de 
pulverizar mis alas, han marchitado mi corazón aplastando 
mi autoestima hasta dejar nada de ella. Nunca creí que 
estando en la secundaria haría más enemigos que amigos, 
quizá y ellos piensen que somos amigos, pero en realidad no 
lo somos. Espero algún día demostrarles cómo realmente me 
hacen sentir, afortunadamente me he ido alejando de ellos 
sin que mi esencia se haga agria y ácida para el contorno. 
A veces la mejor decisión que puedes tomar es estar solo, sí 
te tienes a ti mismo nada más te faltará, puedo asegurártelo 
y comprobártelo con la resistencia quehe tenido en esta 
dura supervivencia. No vale la pena sacrificarse por cosas 
tan falsas, retorcidas e impuras; siempre habrá una mentira 
que te vacíe como un globo de helio, aunque tus secretos y 
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evidencias no puedan salvarte del daño que te han hecho. Al 
final de la noche sigo siendo como la Luna menguante, estoy 
hecho de remotos secretos inescrutables que opacan mi lado 
diurno para relucir el nocturno. Siempre querrán ver el lado 
opuesto de lo que realmente soy, pero solo yo miraré mi lado 
brillante, aunque nadie más lo haga. 
Probablemente lo que diré a continuación es algo de lo que 
me hubiese gustado que me dijeran en mis peores momentos, 
pero, igual lo diré porque sé que en algún mañana alguien 
leerá estas letras, aunque yo esté muerto: Pero, ¿Por qué 
sufrir cuando alguien nos deja? ¿Por qué sufrir y llorar por 
un desamor o por una falsa amistad? ¡Eso sería como llorar 
después de botar la basura! Recuerda esto, siempre serás la 
estrella más grande y luminosa de todas, pero, no siempre te 
toparás con gente que desperdiciará tu energía, porque en el 
camino habrá seres que vivirán de tu luz y tu brillo cuando 
se queden a oscuras en su mundo, los mantendrás cálidos y 
no importará qué tan lejos estén de ti porque siempre 
estarán dentro de tu órbita. ¡Ámate y disfruta cada momento 
antes de que el fin se aproxime! Nunca te olvides de que, si 
te toca partir, terminas una vida para empezar otra. Escapa 
con las estrellas y lúcete con ellas porque es tu tiempo para 
hacerlo. 
Siempre habrá alguien que estará acompañándote dentro 
las profundidades más solas y oscuras de tu corazón, no es 
nada importante la distancia que los separe porque tu brillo 
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se hará llegar hasta donde no te lo imaginas. Imaginando 
que la vida es hermosa y para siempre, porque los límites 
nos los ponemos nosotros mismos y nos aferramos a un 
determinado destino al que no queremos llegar. Lo primero 
que podrías hacer para proponerte a cumplir tus metas es 
olvidándote de la realidad, y enfocarte en esos ensueños que 
hoy te tienen a salvo con el calor que te dan; como segundo 
paso, es hacer una desintoxicación en tu vida para liberarte 
de la gente que no quiere ver tu progreso sino tu regreso. 
Las personas siempre querrán atacarte y devorarte como si 
fuesen iracundas bacterias hambrientas, porque la envidia 
es un parásito y podría consumir tus deseos hasta dejarte 
completamente vacío, en el preciso momento cuando vean tu 
transmutación en diamante te harán sangrar hasta que vean 
que tu sangre se convierte en oro. 
Antes de continuar con mi vida, juro en el nombre de todas 
las estrellas que se hacen brillar esta noche antes mis ojos 
que, nunca me daré por vencido y seguiré remando entre las 
nebulosas más hostiles y colosales del universo. Y aunque 
mis inseguridades me mantengan lejos de las montañas a las 
que quiero llegar y escalar, nada ni nadie se interpondrá 
para estar en donde quiero estar. 
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Parte II. 
Capítulo 05. 
 
Destrucción masiva: Colisión amorosa. 
Probablemente ella me odie por ser su debilidad, otros 
dirán que sólo es un amor adolescente, pero, lo que yo diría 
es que ellas es el verdadero amor de mi vida. Quizá su amor 
sea el camuflaje de nuestra verdad, porque prefiero vivir 
engañado que perderla. Caminaría un millón de veces por la 
ciudad en la que nos conocimos, y por cada paso me 
encontraré con los recuerdos que en espejismos querrán 
hacerme volver a sus brazos, sentir sus manos en mi cabello 
y las mías en el suyo. Seguro que ya esto no es amor sino 
obsesión, esto me derrite y me esparce en el viento con las 
palabras que en aquella noche salieron de su boca, su voz 
sigue sonando en mi cabeza y las palabras continúan 
ahorcándome de falsas esperanzas e ilusiones que como un 
tonto me creí. 
Tus ojos brillaban con los míos como un enérgico pulsar, tu 
sonrisa hacía latir mi corazón junto a cada movimiento del 
mar. Tus caricias me llevaban al cielo cuando éramos el uno 
para el otro, fuimos dos galaxias orbitando entre sí, y ahora 
nos estamos desmoronando sin piedad como un moribundo 
cometa sobre la atmosfera. 
Supongo que la amo más de lo que me amo a mí mismo, y 
si pudiera pedir un deseo en este preciso momento, sería el 
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de no llorar cuando me mire al espejo y vea el delicado 
reflejo de su mirada en mis ojos. Quiero regresar al pasado 
y abrazarla con el peso de mis angustias hasta desbloquear 
su corazón, no importa cuántas veces lo ame a él más de lo 
que me amó a mí, sólo quiero vivir con el recuerdo de que 
ella fingió amarme para creer que de verdad le importé 
como me importó a mí, llenarme de mentiras hará que 
sobreviva de esto que estoy sintiendo. 
Cada segundo que corre me aleja más de ti, mi respiración 
se detiene y te recuerdo hasta que tus ojos me regresan a la 
vida. Mi imaginación es un vasto y extenso océano que solo 
me sumerge en el deseo de poder tenerte cerca, tu rostro se 
refleja en la superficie a través de los rayos de luz que salen 
de mis ojos al verte. Nacimos para gobernar mundos con el 
amor que sembramos el primer momento que nos vimos, los 
días pasan y las fechas siguen marcadas en mi calendario, 
cada vez me hago más viejo y nuestras noches se hacen más 
jóvenes. Nuestro destino fue estar juntos para siempre, sin 
que el otoño secase los frutos de los árboles que sembramos 
en la primavera en que nos conocimos, pero cada uno se fue 
con las hojas que se esparcieron en el vacío y se pudrieron 
con el olvido. 
Como la elegida de Dios es su nombre en hebreo, sus 
labios pequeños de color cereza parecían un dulce caramelo 
que mentiras disparaba como veneno, sus suaves y delicadas 
manos de terciopelo hacían magia al acariciar mis mejillas 
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coloradas de amor y pasión. Mis dedos se enrollaban en las 
ondas que abundaban en su cabellera color café, es única y 
radiante como el Sol que ilumina mis mañanas; su piel es la 
razón por la que me mantengo cálido, es la taza de leche que 
apetece la necesidad de amarla y cuidarla como mi galleta 
de jengibre. Ella es mi adicción más remota, cuando la veo 
en mi imaginación los ángeles que nos cuidan relatan todas 
las palabras que se me vienen a la mente, el eco retumba los 
latidos de su corazón por la melodía medieval que vinculan 
nuestros oídos. Ella es la manzana que todos quieren comer, 
y aunque esté envenenada, sigue haciéndome más adicto de 
lo que era ayer. 
El corazón es una secreta catacumba perdida entre tumbas 
de nostalgia y avaricia, solo mi amor propio descansa en los 
ataúdes que ella misma enterró en su pasado. Mi dignidad y 
mi felicidad yacen entre aquellas manos que me ahorcaron 
cuando solo anhelaba su amor, como un torrente negro fluye 
mi autoestima en un riachuelo de sangre pútrida y obscura, 
lancé mis armas al suelo y las luciérnagas temblaron en ese 
momento cuando perdieron sus luces. Probablemente ella es 
tan dulce como la miel, pero es tan ácida como el azufre de 
un volcán; su mirada era el puente que conectaba a nuestro 
inframundo con la realidad. 
Creer en el amor es como caminar por el fuego y jugar con 
meteoros, si te tropiezas con una roca fundida de lava, nadie 
se acercará a ti para levantarte cuando caigas de rodillas 
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por alguien manipulador y soberbio. Te levantarás con el 
tiempo sin que nadie sepa de ti, será tan lento y doloroso 
como los errores más horripilantes que cometiste. Seguro te 
toparás con estafadores que pretendan ser tus amigos para 
aprovechar el momento de traspasarte la espada, y serán los 
villanos más crueles que te hagan resurgir entre la traición y 
el rencor. 
Me escupiste, me aplastaste y me destruiste cuando lo 
único que quería era ser tu fortuna; y no sé si pueda salir de 
esto, pero si algún día llego a hacerlo, espero que te 
prepares de lo que la vida tiene para ti. Eres la tormenta que 
va y viene, siempreque llegas me inundas en tu cobardía y 
me ahogas con tu ignorancia. Pero nada de eso podrá 
detener a la formidable catástrofe que está llegando para 
sacarme a flote, porque con todas mis cicatrices quedarás 
como un barco hundido en el abismo. 
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Capítulo 06. 
Gravedad asesina. 
Érase una vez una pequeña ave que salió de su cascarón 
con un aspecto muy diferente al de su familia, tenía el 
plumaje azul mientras que el de los demás era negro y gris, 
a toda la manada no le agradaba su presencia y se valían de 
ataques y peleas violentas en donde lo hacían sangrar por 
gusto. En los primeros días de bebé permanecía muy bien 
abrigado en el nido, bajo las grandes alas de su querida 
mamá, quien lo cuidaba de su papá para que no se lo 
comiera con el resto de la manada. Sólo era un indefenso 
polluelo que no sabía defenderse de lo que les hacían 
cuando estaba sin su mamá, el castigo diario lo hacía 
sentirse bastante excluido, aislado e invisible, porque sólo 
existía cuando era masacrado. 
Cuando miraba a todos volar sin miedo a caer, se 
escabullía en el temor para no perderse en las alturas. Él 
tenía miedo de volar y le daba pánico caer por primera vez, 
sabía que, si lo hacía, cada uno de sus huesos se rompería a 
pedazos y se reirían suyo desde arriba. Él le temía a la vida 
y odiaba que lo sorprendiera con inesperados eventos que le 
quitaran los ánimos de volar, quizá y solo era un niño con 
miedo de salir por la vida a conocer las experiencias que 
esperaban por él, resentía sus emociones y las desechaba 
con las malas compañías. 
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Él desperdiciaba el tiempo de su grisácea existencia siendo 
alguien que no quería para satisfacer a los demás y siguió 
encerrado en su nido, aunque su madre había muerto y toda 
la manada se había ido lejos de él, prefirió ser un cobarde 
por el resto de su vida. Nunca conoció el mundo que lo ceñía 
y se quedó en su árbol hasta que los humanos lo cortaron, y 
murió congelado por el brusco temor de nunca arriesgarse. 
Su existencia fue creada por los cielos más huracanados y 
borrascosos de la naturaleza, en las nubladas lejanías donde 
los mares se agitaban con truenos y estrellas caídas. Sólo el 
miedo fue capaz de destruir, triturar y demoler algo que sólo 
Dios había formado. El temor es la abominación más sucia 
de las oscuras soledades del alma, del miedo no queda más 
que la sombra de lo que nunca podremos ser. 
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Capítulo 07. 
La estrella moribunda. 
Él nunca pensó que su única escapatoria sería el suicidio, 
y ya una vez que desapareció, todos se preguntaban por qué 
lo hizo en lugar de por qué nunca gritó auxilio. Muchos 
dijeron que su última nota fue una mentira, un fruto 
blasfemo que no se aceptaría por el intelecto humano. Lo 
llamaron mentiroso hasta que sus restos fueron consumidos 
por los insectos que penetraron la tumba de un suicida, el 
pueblo se enfureció y encendieron antorchas para profanar 
el cuerpo sepultado. Entraron al cementerio y corrieron 
hasta su tumba para que fuese exhumada, destaparon el 
ataúd y sacaron los huesos que quedaban del cadáver de un 
vil farsante. Los perros de los protestantes se llevaron los 
huesos y los masticaron para deshacerse de sus restos, los 
hombres encendieron su cuerpo y lo rebosaron de fuego 
hasta que el cementerio empezó a incendiarse como el 
infierno. 
Así yacían los despojos de un chico que murió en las filosas 
garras de la depresión y el sufrimiento, después de muerto la 
mentira continuaba, porque mientras vivo, todo se escondía 
en una falsa sonrisa. Todos lo despreciaron por muchísimos 
años, lo pisotearon y lo mutilaron con humillaciones vanas y 
paganas que lo debilitaron. 
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Un día sólo cerró los ojos para siempre y nunca más volvió 
a ser lo que era, dejó muchas notas incluyendo nombres que 
quedaron marcados sobre su piel como cicatrices que nunca 
pudieron desaparecer. Le arrebataron la paz, la juventud y 
el amor propio. 
Él solía escribir cada noche, su única escapatoria era al 
mirar las estrellas. Era como viajar a otro mundo, un mundo 
en el que no hubiese dolor, problemas, miedos y contras, él 
tenía su propio mundo ficticio en donde era su propio Rey. 
Él era frío como el espacio y radiante como las estrella. 
Nunca pensé que hablar de mí, parecería como si estuviese 
hablando de alguien más. Parece satisfactorio hablar en una 
tercera persona, que no involucre lo que soy con lo que me 
está dañando. 
 
 
 
“Cada respiración destroza aspiración, me azota la 
realidad y me ahorca la sociedad”. 
34 
 
 
 
Parte III. 
Capítulo 08. 
El renacimiento del Sol. 
 
Nunca en la vida pensé que sería tan feliz conmigo mismo, 
y aprecio el hecho de vivir flotando como una ligera burbuja 
que se revienta en el aire, esparciéndose en imperceptibles 
partículas que descienden con gracia. A veces preferimos 
vivir entre las nebulosidades negras y grisáceas que ocultan 
las estrellas que podemos salir a explorar, nos perdemos en 
ese furioso remolino sangriento que crece en los estratos de 
nuestra mente, olvidándonos de la memoria que protege a 
eso que en algún día fuimos. Y aunque la nostalgia genere el 
desvanecimiento de mi alma, jamás volveré a recordar mi 
35 
 
vida pasada con el corazón roto sino con orgullo, porque la 
esperanza de volver a nacer se convierte en un sueño hecho 
realidad. ¡Soy libre! 
Si deseas conocer las respuestas de tus preguntas, no las 
busques en tu mente sino en los sentimientos que en tu 
corazón laten con furor, no te perturbes con los 
pensamientos que surgen de miedos y espejismos que llegan 
de improvisto para bajarte de las nubes. Sí has perdido algo 
que te pertenecía, lucha por ello aunque ya no valga la pena 
luchar, es mejor intentarlo a que quedarse con las ganas de 
hacerlo. La vida es mucho más corta de lo que te imaginas, y 
la juventud que tienes ahora nunca más volverás a tenerla. 
La vida se trata de nacer, crecer, morir y renacer, tus días 
están contados desde ahora y tu ausencia está tan cerca que 
cuando te vayas a dormir, imaginarás que nunca más 
volverás a abrir los ojos. Eres el árbol más alto del bosque, 
la flor más bella de la tierra y la criatura más perfecta que 
con sus imperfecciones se hace leyenda. 
Los oscuros sentimientos que vienen en la noche con la 
incertidumbre de la Luna, se irán por la mañana en cuanto 
el Sol aparezca por los horizontes de donde nacen los 
vientos que te empujarán a la cúspide de la fortaleza. 
Tú mismo sabes la razón por la que sigues luchando sin 
esas fuerzas que te trajeron hasta aquí, tu paz desaparece 
como el agua en la tierra y te sientes como un pez fuera del 
agua, te asfixias en la hostilidad del ayer y te conviertes en 
36 
 
el enemigo de tu pasado. Tú tienes el poder de levantarte 
con el peso de los errores que te destruyeron para 
construirte de experiencias. 
Una nueva luz ilumina mi camino, adiós a los límites y 
barreras del olvido que obscurecieron el ayer, porque el 
tiempo se detiene cuando pienso en el futuro que conquistaré 
con corona y espada, donde las estrellas caerán sobre la 
tierra como la lluvia y se fundirán como las raíces de una 
delicada rosa que crece en el invierno. Hay un rincón vacío 
del universo que sólo tú puedes cambiar, y ese pequeño 
rincón es tu vida, tu éxito y tu sabiduría, donde no gane la 
soberbia y el amor brille entre fortunas doradas como el oro 
de una mina; un rincón donde los sueños se resalten de 
colores en la superficie del mar, cómo el deslumbrantes tono 
de los plancton por las noches, los dolores se desaparecen 
como el sol en un perfecto atardecer, donde las cicatrices 
cierren con broche de oro. Tú eres tu propio diamante, que 
brilla y resplandece en un largo camino hacía la gloria y la 
fantasía absoluta, eso a lo que llamaría “eternidad”. 
Esta mañana vi cómo la luz del Sol penetraba mi ventana 
en su encumbrado renacer,desterrando la oscuridad de mi 
umbroso mundo, la luminosidad de sus rayos encandilaba 
mis ojos como un gran lucero. Allí comprendí que todo este 
tiempo se trataba de un sueño, estaba dormido en los brazos 
de mis miedos y desperté de lo que fui ayer. Una agraciada 
reflexión me declara que la vida es una historia que termina 
37 
 
y vuelve a empezar, así como el universo se expande y se 
influencia asimismo con sus enormes galaxias; los mares 
con la rapidez de las nubes que reflejan los cielos azules en 
la superficie que se proyecta como un hermoso espejo que 
irradia la limpieza de mi ser interior. 
Me siento más trasparente que el agua, sano como un árbol 
y mucho más joven de lo que fui ayer, solo he dado 17 
vueltas al Sol y como nunca antes tengo más fuerzas que un 
dragón, puedo derribar torres y construir rascacielos con 
mis propios deseos, me siento como un ave que vuela en los 
altos extremos del cielo que se refleja con el Sol desde la 
biosfera. Ya nada me hará perder mi tesoro oculto, nada me 
desviará de mi rumbo hacia el infinito porque del tiempo y el 
olvido estoy hecho. 
He nacido en la oscuridad para encontrar la luz que perdí 
al nacer, ahora estoy creciendo como un huracán que cobra 
fuerzas en la soledad, las mareas revuelven mi espíritu como 
la lava de un volcán que estalla en erupciones dentro de mi 
mente. 
 
 
“De lo alto seré mientras tenga mis pies sobre la 
tierra para volar y desafiar la ley de la gravedad”. 
38 
 
 
 
Capítulo 09. 
Lluvia de diamantes. 
Diminutas lágrimas de carbono difunden la piel 
polvorienta de mí extenuado rostro, las inconstantes 
temperaturas aceleran la discontinuidad rítmica de un 
desgastado corazón que late sin control, entre 
consternaciones y aprensiones mis neuronas colisionan 
coléricamente como deslumbrantes cúmulos de magnetares, 
mis pensamientos se aceleran con la velocidad de la luz y se 
estrellan con los sentimientos que surgen del colapso 
estrepitoso, atronador y resonante que me atormenta hasta 
la letargia. 
Poderosas tormentas eléctricas retumban los cielos 
dorados de los que llueven diamantes, las nubes descienden 
39 
 
y las mareas ascienden, encumbrando a aquellas montañas 
de carbono que se mineralizan en enormes diamantes rojos y 
negros. El apocalipsis se enfurece con el delicado crujido de 
los huesos que se quiebran en la desgracia de esta vil 
impotencia, las insignificantes lágrimas de carbono siguen 
esparciéndose sobre mis fascias mientras se comprimen con 
los diamantes que me inundan hasta la cabeza. 
El metano de la atmósfera se combina con las exaltadas 
temperaturas de los relámpagos cósmicos, la hostilidad del 
esplendoroso Saturno rompen los enlaces químicos de las 
insignificantes moléculas, separando enérgicamente a todos 
los átomos de hidrógeno con los de carbono. Los minúsculos 
átomos de carbono se unen entre sí formando monstruosas 
moléculas, matizando los borrascosos cielos de Saturno con 
nubes negras cargadas de electrones y protones. En el 
descenso de mis miedos y en el quebranto de mis victorias, 
las moléculas más pesadas de las alturas descienden con la 
atracción de la gravedad hacia las superficies más bajas de 
este solitario planeta, la enérgica presión se sincroniza con 
la temperatura y aumentan paralelamente para calcinarme 
y devastarme entre cenizas de desgasto. 
El centro de Saturno continúa aplastándome con el peso de 
su gravedad, mientras que las moléculas que de lo más alto 
descienden, se convierten en grafito con los fragmentos de 
mi helado cuerpo demolido. La sofocante presión irradia los 
40 
 
extremos de mis restos y continúa carbonizándome hasta que 
paradójicamente, la muerte me convierte en un diamante. 
41 
 
 
 
Capítulo 10. 
Helio. 
Deja de llorar por un pasado que ya pasó, ya deja de sufrir 
por un futuro que aún no existe. Mejor céntrate en luchar y 
no darte por vencido en el presente porque es lo único que 
tienes y que te queda, y aunque las cosas no salgan como lo 
esperabas… Recuerda que siempre habrá un mañana que 
estará esperando por ti para enmendar los errores del ayer, 
vive tu presente y aprovecha cada segundo que el tiempo te 
da para brillar. 
Seamos seres extraordinarios, brillantes y dignos del cielo 
que se reluce ante nosotros, llenemos esta tierra de colores y 
hagamos de ella una noche estrellada con el polvo estelar 
que fluye en nuestro torrente. Todos somos seres perfectos 
de manera inusual, es la imperfección que nos hace únicos y 
42 
 
le da la esencia a nuestra existencia. Nunca olvides que eres 
el resultado de tus lecciones y de tus errores, mereces vivir 
una vida larga en mundo lleno de fantasías de realidades 
rosas, azules y doradas, pero, para volar deberás tener tus 
pies bien puestos sobre la tierra. No importa cuántas veces 
te quedes sin un feligrés, porque las personas que de verdad 
valen la pena, estarán allí contigo antes, durante y después 
de la tormenta sin que nada cambie. 
La vida nunca yo vi tan bella, mágica y hermosa, nunca 
miré la noche con tanto amor por aquellos cuerpos celestes 
que envían su luz en distancias remotas, atravesando la 
córnea de mis ojos y penetrando directamente la retina, mi 
pupila se dilata como la superficie oscura de un agujero 
negro. Pensé que me hundiría en la fosca de aquel furioso 
océano que de mí hizo ruinas, pero sin ni siquiera nadar 
estoy flotando en la gracia del presente, y aunque me asusto 
por lo que aún no puedo comprender, sé que puedo nadar 
aunque mis miedos y atribulaciones se hagan tan pesados 
como la gravedad de Júpiter. 
Llenaré un globo de helio con todos mis sueños y deseos y 
lo lanzaré a ese cielo azul que brillará por mí en la mañana, 
y como olas iracundas arrasarán con la delicada arena de 
las islas que todavía no he conquistado. Soy un gas noble 
que se dispersa en el cielo y en la tierra, con mi peso 
molecular me haré reaccionar con el azufre de mis rivales y 
con ellos haré una nueva reacción a mí favor, me convertiré 
43 
 
en una enorme nube de gases combinados hasta llenarme de 
los colores que me harán lucir como una deslumbrante 
nebulosa. 
44 
 
 
 
Capítulo 11. 
Titanio. 
Soy tan grisáceo y cristalino como el titanio, soy un metal 
imponente en transición que con su gran dureza resiste a la 
corrosión del mar y el azufre de un volcán, fuerte y firme 
como el acero construiría una titánica nave espacial para ir 
a las Pléyades de ida y de regreso. No podría vivir en un 
planeta que con su aire me oxida junto a mis aleaciones, soy 
termodinámicamente reactivo y me ardería antes de llegar a 
mi punto de fusión. Me regenero con el Sol y me destruyo en 
las estrellas más frías para atacar como meteoro, en mis 
peores reacciones podría catalizarme entre electrones y 
protones que componen mi estructura. 
Atrás quedaron los planetas comprimidos por titanio en sus 
magnetizadas cortezas nucleares, atrás permanecerán esas 
45 
 
atmósferas consumidas en vapores tóxicos y radiactivos, en 
cada camino perdido entre laberintos moleculares se irradia 
una luz boreal incandescente, iluminando senderos densos y 
vacíos que se extienden en la incuria de una tumba perdida 
en las praderas del olvido. 
El titanio arde y representa molecularmente el 
renacimiento que he vivido, me convierte en su aleación y 
con su dureza supera mis destrezas con franqueza. 
46 
 
 
 
Capítulo 12. 
Galaxias. 
A veces nos sentimos vacíos, afligidos, perdidos y abatidos, 
buscando líos en los que no nos hemos metido. Como 
planetas errantes seguimos luces y destellos grisáceos que 
nos llevan a espacios perdidos, condenados en la sombra de 
la crueldad nos escondemos detrás de ella para ser la presa 
de nuestra propia mente, y así empezamos a alejarnos de las 
escapatorias que el universo nos ha ofrecido, dando el inicio 
de un fin prometido; y lo que siempre solemos lanzar al 
olvido, esel recuerdo y la memoria de la órbita que siempre 
tuvimos, porque fuimos, somos y seremos la única y 
verdadera galaxia que brilla con luz propia en los lugares 
más taciturnos y sosegados del infinito. Somos una galaxia 
47 
 
que transita en el formidable vacío, flotando y viajando de 
extremo a extremo con gigantescas velocidades que ningún 
ser humano puede comprender, es un viaje sin retorno. 
Nunca envejeceré en el intervalo de los siglos terrestres. 
Mis años de vida son astronómicos e interminables, por lo 
tanto brillaré hasta dónde mi luz no pueda llegar más. 
48 
 
 
 
Parte IV. 
Capítulo 13. Supernova. 
 
Último día de una vida pasada, un último día para 
despedirme de un mundo que nunca favoreció mi existencia. 
Estoy listo para conquistar nuevos mundos, predominar 
nuevos tiempos, vivir el momento y sentir mi brillo en la 
oscuridad para sentirme como una titánica estrella de 
pulsar. Mi ciclo estelar culmina aquí, y sin dejar mis rastros 
en forma de estrellas y nebulosas planetarias, dejaré en este 
espacio numerosas estrellas de neutrones y agujeros negros 
que marquen el icono de mi existencia. 
Nunca quise perder mi órbita con mundos errantes, mi 
única intención era encender la chispa que había en mí y 
hacerla estallar junto a ese núcleo atómico que estaba por 
49 
 
desaparecer, los minúsculos átomos de polvo estelar se 
fusionaron con mis emociones estrellándose unos a los otros 
como electrones magnetizados, y en mi interior, comenzó a 
crearse una poderosa supernova a partir de los restos 
cósmicos y erráticos que flotaban vanamente en un espacio 
perdido en soledad y nostalgia. 
Todo este tiempo estuve corriendo en la jungla entre lobos 
asesinos bajo la Luna para llegar a donde estoy; un lugar 
donde merezco estar, donde la música me transforma y me 
lleva a otras dimensiones en las que puedo ser tan grande y 
potente como la luz y el tiempo. 
Estuve caminando entre el fuego para llegar a mi trono, 
grandes batallas acompañadas de pérdidas, decepciones, 
melancolías, y la cruda realidad que me golpeaba con la 
nostalgia en cada segundo; pude seguir comprendiendo mi 
verdadero significado en este planeta, me sirvió de explotar 
esa luz que se escondía como un niño asustado dentro de mí. 
En cada derrota me luzco como un triunfador donde puedo 
comprender el valor de intentarlo, perder o darme por 
vencido. Estuve en un año muy grande lleno de violencia, 
agresivo, y veloz que finalmente me demostró que pasar por 
la oscuridad me hace más fuerte y potente como una 
hipergigante roja, estuve en un lugar donde a nadie le 
gustaría vivir, donde el malestar no te deja ni pensar. Es ese 
lugar en donde el sufrimiento roba tu luz y te retuerce como 
una anaconda hambrienta, estar en un océano oscuro lleno 
50 
 
de soledad, perdición, tristeza y sentimientos que se 
vaciaban tan desgraciadamente. 
Pero, fue allí donde supe nadar a la superficie, porque sé 
que lo único que me mantenía a flote era la fe y mí fortaleza, 
esto dos componentes importantes favorecieron la aparición 
del oxígeno en mi extraña vida en la que estuve muerto, por 
primera vez podía respirar en aquel momento que salí de ese 
abismo tan sofocante y despiadado lleno de oscuridad. Más 
tarde de tocar islas nuevas, me hice en el fuego y resurgí 
entre las cenizas, me levanté de entre los muertos y sentí la 
reencarnación más divina de todos los tiempos. 
Si hay algo de lo que he aprendido es a no mendigar el 
amor ni la amistad a nadie, no buscar a quien no tiene 
tiempo, nadie merece ser maltratado por su indiferencia o 
sentirse invisible. Cada uno de nosotros merecemos 
sentirnos únicos y especiales como los seres humanos que 
somos; y lo más grandioso que pude aprender, fue de esas 
personas que te hacen sentir presente y te sienten en la más 
grande distancia pero que nunca te buscan cuándo su 
interés lo amerita. 
Te mereces alguien que sin esperar nada a cambio te lleva 
adentro, un sabio dijo algún día: ''No existe la falta de 
tiempo sólo existe la falta de interés'', y como experiencia 
propia comprobé que no debo esperar nada de nadie y 
esperar todo de mí. El tiempo sanó mis heridas sin necesitar 
a alguien que las desinfectase, aprendí las enseñanzas de la 
51 
 
vida y de mis temores. A raíz de ello sé que la persona más 
importante en dedicarle mi mayor tiempo es a mí mismo, y a 
no esperar a quién no me espera, porque mi cariño debe ser 
para quien me quiere y me comprende sin juzgarme. No hay 
nada más que hermoso que ver mi sonrisa frente al espejo. 
Este nuevo año será mío, vendrá acompañado de grandes 
decisiones porque valgo más de lo que puedo imaginar. Este 
año será mi victoria porqué así lo he decidido, cada mal 
recuerdo será expulsado al cielo bajo la deslumbrante y 
radiante luna que brilla como una mina de diamantes. Mi 
alma se extiende al más allá en este viaje sin retorno al que 
le llamo vida, el inicio de un sueño donde volaré en la Vía 
Láctea por millones de lugares en los que nunca he estado. 
He vivido en un sueño toda mi vida, atrapado en una 
burbuja que flota en la oscuridad sin temer a caer, siento 
que he despertado y soy más joven y fuerte que ayer, me 
levanté entre los muertos y deslumbre la civilización de los 
vivos, hoy tengo muchísimo más equilibrio para seguir 
caminando esta cuerda floja que es la vida. Si caigo estoy 
dispuesto a levantarme de nuevo y seguir este gran camino a 
la cima dónde pertenezco 
52 
 
 
 
Capítulo 14. 
¡La estrella ha nacido! 
Sepultadas y estropeadas en el olvido quedó el yo de mi 
pasado, es una sensación nueva y fantástica que me hace 
sentir como si hablara de la vida de alguien más o narrar la 
historia de una vida pasada. Llegar a conocerme a mí 
mismo fue mi primer éxito en la vida, en donde finalmente 
comprendí mi verdadero ser y aprecié cada pasión que se 
abría como puertas en mi camino, reflejándose como la luz 
del amanecer ante mis ojos, quemando mi piel muerta pero 
creándose a sí misma una nueva carne más fuerte y perfecta 
imposible de traspasar ni con un disparo, todo este tiempo 
ha sido como caminar sobre fuego para hacerme sentir más 
agradecido de lo que soy, con una palabra que conocí con 
53 
 
hechos y acciones que cambiaron mi vida, el renacimiento; 
quedará marcada en mi vida para siempre lo que significa 
un renacer, es como volar y flotar sin gravedad, me hace 
sentir tan libre que me hizo olvidar todo tipo de soberbia, 
incertidumbres, lujurias, mentiras, odio y rencor. 
Es un nuevo nacer y un nuevo latido después de una 
profunda respiración, arrodillado ante la Luna de octubre 
que me hace crecer vitalmente haciéndome un sobreviviente 
de tormentos que algún día me hicieron visitar al infierno, y 
después de todo ello finalmente estoy aquí dispuesto a seguir 
luchando; esquivando los obstáculos de este largo camino 
que es la vida aunque mis venas se retuerzan de clamor, y mi 
corazón sea exprimido como una esponja hasta que mis 
pensamientos pierdan la noción del tiempo y del espacio, 
siempre estará una luz en mi interior que me hará llegar 
más lejos que los años luz y más dinámico que la velocidad 
de una partícula. Estoy en mi primer despertar después de 
una eternidad sin respirar, y aunque no tengo idea de quién 
soy ahora, sé a dónde quiero ir y lo que quiero ser. 
No me arrepentiré de lo que fui ayer, esto me ha dejado una 
gran moraleja de que nada se queda igual y los cambios son 
inevitables. Todo este tiempo ha sido una especie de sueño 
irreal sin final, una ilusión permanente que luego me hizo 
abrir los ojos para ver la luz, siempre habrá una verdadera 
razón para sacudir el mundo como un gran terremoto de 
54 
 
emociones y prosperidades que hacen conectar corazón al 
alma. 
He regresado de la muerte y ahora estoy más vivo que 
nunca. Toqué fondo y en suspiro estoy aquí arriba siendo 
más fuerte que mis enemigos, yanada podrá destruirme 
cómo solía ser, mis heridas cerraron y mi sangre se heló con 
mi corazón. Estoy en mí nuevo respiro conquistando mundos 
y descubriendo continentes, es mí triunfo y mí conquista. 
Mi sangre fluye tan pura como una corriente glacial, todo 
este tiempo estuve perdido y deambulando entre los muertos 
de mi pasado, en la oscuridad y en la perdición donde todos 
temen estar. Me levantaré y caeré de nuevo porque es parte 
de la vida, de lo que puedo asegurarme es que mis cicatrices 
nunca volverán a abrirse, porque mis recuerdos nunca más 
me llevarán al pasado perdiéndome en la nostalgia de los 
tiempos fantasmas. Romperé cadenas y me convertiré en mi 
propia salvación, aunque me toque perder la cordura y el 
amor que siento por mí mismo. 
55 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
“Justo ahora muere todo lo que algún día me hizo 
caer y robó la luz que explotaba en mí, en este 
perfecto segundo el dolor acabará y lo lanzaré al 
cielo como un globo aerostático, cada sufrimiento se 
irá de mi corazón para nunca más regresar, una 
nueva era está a punto de comenzar y ya no hay 
marcha atrás. La guerra está por terminar y volveré 
a respirar sin que las cargas del ayer vuelvan a 
asfixiarme, un nuevo camino se abre mágicamente 
con destellos a las Pléyades y ya mi destierro termina 
aquí.” 
56 
 
 
 
Parte V. 
Capítulo 15. 
La tierra prometida. 
 
Ha pasado bastante tiempo después de mi destierro y creo 
que puedo respirar aire limpio que llegan a mis pulmones, 
no puedo creer que ahora me levanto desde el vacío que en 
un día me tropecé y terminé una eternidad atascado, puedo 
caminar después de tanto tiempo y correr sin ser capturado 
por las trampas, entonces aquí es donde digo que soy el gran 
superviviente del infierno que viví a sangre fría, siento como 
si viera el agua del mar regresando a su lugar con tanta 
serenidad, puedo sentir en mi piel el calor del sol. 
57 
 
Ya mis ojos pueden ver el gran resplandor del cielo azul 
que Dios ha podido reflejar en mi alma, como una gran ola 
que cae de peso entre las orillas de la playa y puedo ser 
libre y feliz con lo que siempre quise tener, con ese anhelo 
de cada respiración sedienta, ahora más que nunca vuelo 
como una hoja que se desprende de los árboles en la 
primavera, es tan frágil como las de otoño que me liberan 
del peso del verano y el invierno. 
No sé si estoy viviendo un sueño despierto en el paraíso 
donde realmente nunca imaginé estar, un gran huracán de 
emociones se retuerce en mi estómago provocando sonrisas 
expresadas de este gran fenómeno mágico, haciendo efecto 
en mí corazón, causando estragos que me hacen crecer y 
levantarme del suelo. 
Mí ser estalla como un gran volcán dormido, mi vida es tan 
sólida como las rocas y tan radiante como las verdes 
praderas que se llenan de árboles y flores, abrazando mi 
cuerpo con hojas y pétalos hasta no poder respirar de la 
alegría. 
Mi sangre fluye como un río que recorre la tierra 
prometida, mi mente se eleva como un águila por los cielos, 
y mis pies están pisando la tierra de éste gran paraíso donde 
la realidad es soñada entre tumultos de nubes rosas y fuertes 
ventarrones, empujándome al futuro para recorrer este gran 
mundo sin que la gravedad me quite el poder de volar a 
velocidades donde el tiempo atrape el movimiento. 
58 
 
 
 
Capítulo 16. 
Años luz. 
Todo comienza en una mañana soleada con su cielo azul y 
transparente, el Sol brilla más fuerte que nunca y estoy listo 
para partir al viaje de la vida entre montañas altas, 
templadas y oscuras como el otro lado de la luna. Un viaje 
matutino que parece ser perfecto como la simetría de una 
estrella, pensando que he llegado a mi destino correcto, ese 
donde he estado recorriendo todos estos años, mi corazón y 
mi alma se sincronizaron por primera vez para desechar la 
materia oscura que por un tiempo se juntaron, se sentía 
59 
 
como una gran nube turbulenta sobre mi mente y una carga 
de peso potente en la espalda. 
Mi vida comenzaba a fluir como el oxígeno que abunda y 
recorre la atmósfera, mi sangre corría relativamente por las 
venas como una corriente marina. Era como sentir las 
heridas cicatrizar sin el hecho de desinfectarlas, todo era 
tan nuevo que me sentí como un ave pequeña que se juntaba 
con su primera manada para viajar por el mundo, entre 
vientos, praderas, y mareas. 
Mi alma era tan blanca y abundante como la nieve de un 
glaciar, pero… Había algo muy dentro de mí que todavía no 
conocía, lo definiría como a un lugar oscuro y caliente como 
el infierno. Hacía una reacción nuclear con mis emociones y 
a su vez las agotaba y las quemaba en cenizas melancólicas, 
fue allí cuando comencé a vivir entre mis sombras, en un 
mundo tan grande y desconocido en el que me sentí cómo un 
niño perdido en la jungla, siguiendo la luz de la luna y 
sintiendo el fulgor de las estrellas sobre mi espíritu. 
Generalmente, lo que hacía era alejarme del viaje que en 
algún momento fue genuino, donde gozaba de una aventura 
peculiarmente fugaz y de alegrías. Se fue transformando en 
un proyecto suicida en el que todo dependía de mi propia 
salvación, dignidad y elocuencia; y lo que antes brillaba, 
ahora se ensombrecía como un crepúsculo de sonrisa falsas 
y sueños implorados, descendiendo a un océano de lava que 
derretía mi felicidad en gotas de sangre, por cada 
60 
 
respiración entre pensamientos destructivos sólo devastaba 
mis aspiraciones. 
Congelado en vida, todo dentro de mí se mantenía rígido, 
sentía el frío desgarrando ferozmente la piel y helando mi 
corazón en cada latido, mi estómago se comprimía entre la 
angustia y el vacío que se condesaba con la tristeza. Este 
camino en el que me había desviado, hizo perderme en un 
bosque encantado donde perdí la noción del tiempo y el 
espacio; con el hechizo de los árboles intentaba volar, pero 
al caer la gravedad golpeaba fuertemente mi cuerpo contra 
el suelo, fueron días y noches de sufrimiento constante en los 
que me hundía como un barco en mis propios pensamientos, 
eran momentos de agonía en los que mis heridas se abrían 
lentamente. Yo sólo me retorcía en la agonía de la tierra al 
ser desangrado con mis angustias. 
Fueron años de dolores y temores que con el tiempo fui 
superando con todo el peso de mí corazón, en cada tortura 
me preguntaba: ¿Dónde está mi verdadero camino? Eran 
esas decisiones que me obligaban a elegir entre caminos sin 
conocer cuál era el indicado. 
Las catastróficas inseguridades solo me llenaban de malas 
ideas, hasta decisiones absurdas que me empujaban cuando 
yo sólo pensaba por mi felicidad. Por primera vez en la vida 
había llegado a un planeta melancólico y nostálgico donde 
la luz no existía, sintiendo un penetrante dolor como si una 
espada traspasara mi estómago. 
61 
 
La muerte fue lenta y miserable, todo se arruinó cuando 
me convertí en un ser muy recio con emociones tóxicas, 
estaba en un mundo venenoso y penumbroso que con sus 
mares me ahogaba en lágrimas de sangre. Mi llegada a ese 
lugar fue tan despreciable que la maldad y la soberbia de 
mis enemigos me hipnotizaba con el conjuro de la miseria, 
era perseguido por criaturas diabólicas que se alimentaban 
de mi depresión. Seres tan traidores como Judas y farsantes 
como el gran Herodes, se disfrazaban de ángeles coloridos 
que cambiaban con el tiempo. 
Robaron mi luz y presumieron de ella en el funeral de lo 
que fui alguna vez, quedando en una oscuridad masiva y 
silenciosa donde mis castigos me ahorcaban, y entre todas 
esas bestias estuve muy cerca los seres más desgraciados y 
crueles de la historia, los describiría con palabras claves: 
Traición, decepción, mentiras, fraude, hipocresía, falsedad y 
sobre todo el rencor que sembraron en mí, dejando el dulce 
sabor del odio. Quedé en el fracaso y la derrota, perdiendo 
los colores del arcoíris que se formaron después de viejas 
tormentas.La fortaleza que un día tuve se había transformado en una 
gran debilidad, irremediablemente vacío y desahuciado sólo 
imaginaba cómo sería ahogarme en una profunda piscina de 
eutanasia, perdiendo la batalla me perdí a mi mismo en una 
gran derrota en que mi enemigo había ganado. 
62 
 
El monarca mayor se empoderó con mi magia y hechizó a 
mi pueblo con una maldición que los hizo caer ante sus pies, 
mi escuadrón se había esparcido como las cenizas en las que 
intentaba renacer; la traición más grande vino de mi gran 
compañero bélico, quien trabajaba para el reino del mayor 
dictador de todas las doctrinas, siendo ese el último puñal 
que recibí. Días de duelo transcurrían haciendo sentir mi 
vida del tanto bizantino, pero como un soldado caí para ver 
pasar la vida que tuve como un flashback, derramando 
sangre sucia y envenenada por lo que me sentía limpio. 
Antes corría por torrentes que quemaban todo mi interior, 
llenando de toxinas mi organismo, provocando el dolor 
mental y físico. Pasó el tiempo necesario para perdonarme 
a mí mismo, una de las lecciones más grandes fue que tenía 
que aprender a vivir con la marca de mi pasado, logré 
liberar como mariposas al aire todas esas malas energías, 
así como los malos recuerdos que caerán con la lluvia hasta 
desaparecer en la tierra, el suelo succionará la lluvia acida 
que caerá contaminada sobre el pasto. 
Ahora siento que puedo trascender después de todo, lo que 
viví me hizo tan fuerte como el océano y tan vital como el 
oxígeno, gritando al cielo decía con fuerzas: "Volaré muy 
lejos, mientras llueva la sangre qué he derramado por mí 
herida, y mi corazón se vacíe entre sentimientos opacos, 
bajo la turbulencia suicida y huracanes melancólicos", y 
lentamente la tormenta se iba con todas las nubes negras. 
63 
 
Era increíble ver cómo las aves salían a volar libremente 
junto a mí espíritu, reflejándose en aquella perfecta obra de 
arte que se observaba como un cielo azul, comprendido de 
nubes que parecían ser tan blancas como el algodón. Tras la 
apocalíptica batalla entendí que mis derrotas eran futuras 
victorias, ahora mi evolución se mantiene constante como la 
temperatura, que en cada amanecer una parte de mi muere y 
vuelve a nacer, ahora soy mucho más inteligente de lo que 
fui ayer. 
No creo en el destino, pero si algo pude aprender es que la 
vida es todo lo que tú eres y lo que mereces, si ofreces algo 
la vida te lo regresará como un boomerang de bendiciones o 
maldiciones, los verdugos que me torturaron sin piedad hoy 
sufren en el olvido, como serpientes entrelazadas que se 
ahogan en su veneno. Permanecerán gritando eternamente 
con sufrimientos, dolor, agonía, sin perdón, ya no conocerán 
la luz que apagaron en mí y vagarán entre la oscuridad para 
siempre. 
Bajo mis pies ahora serán aplastados como sucios insectos 
nocturnos, después de mi destierro viví entre serpientes y 
alacranes que me ayudaron a ser más fuerte. Caminando 
por el fuego encontré mi verdadero ser y me quemé con su 
poder, como la incandescente luz de Venus que ilumina el 
oscurecer del día. 
Dicha luz genero furia y potencia, tan fuerte como la 
radiación de un pulsar que aceleraba mi nuevo corazón, por 
64 
 
fin estuve recuperando lo que di por perdido. A medida que 
crecía, mis temores se quedaban bastante lejos por lo que se 
me hacía increíble, como bien dicho lo dijo Aristóteles: “El 
sabio no busca placer sólo busca la ausencia del dolor”; mi 
renacimiento fue doloroso y maravilloso dejando esa 
palabra marcada en mi piel, renacimiento y fulgor. 
Ahora puedo sentir la felicidad como el calor que antes me 
quemaba, después de tantas vueltas pude encontrar mi 
camino. Respirando el aroma de la alegría y el cambio, 
he regresado de la muerte sintiéndome más vivo que nunca, 
toqué fondo en donde me perdí en la totalidad de la 
oscuridad, pero en un suspiro me hizo subir hasta lo más 
alto. 
Lo más eminente, es que nada podrá destruirme como solía 
ser, mis heridas han cerrado permanentemente. Estoy en mi 
nuevo respiro, conquistando nuevos mundos y descubriendo 
continentes gozando del triunfo que he ganado, todo este 
tiempo estuve entre los muertos, donde todos temen estar. 
Me levantaré y caeré de nuevo porque es parte de la vida, 
pero si hay algo que nunca pasará es qué las heridas 
vuelvan abrirse, donde mis recuerdos me lleven al pasado y 
perderme en la nostalgia. Adiós a todos esos momentos que 
quedaran en el profundo olvido abismal, con una gran parte 
de mí que será enterrada hoy; la soledad castigará a los 
villanos, haciendo que los lobos regresen a sus cuevas donde 
no logren ver la luz del sol. 
65 
 
Quemados con mi luminosidad quedarán ciegos como 
murciélagos, estoy en mi trono donde siempre he merecido 
estar y tengo mucho que hacer en el mundo, vendrán peores 
batallas por enfrentar. Ahora tengo mi verdadero equipo 
bélico, libre del olor de la traición y la envidia, estaremos 
unidos por toda la eternidad entre el paso de los años. 
He conseguido la luz que estará conmigo en momentos de 
llanto, tengo los mejores soldados que protegen mi reino y 
juntos venceremos como la gran jerarquía que tenemos, no 
quiero presumir mis grandes virtudes, pero hoy soy un 
asesino en serie, soy el principal factor más letal existencial, 
voy por la vida acompañado de mi generosidad, disciplina, 
educación, respeto, y dignidad algo que muy pocos tienen. 
Mis principales armas potentes que destruyen a cualquier 
ser negativo, como con los que he vivido todo este tiempo y 
los que he matado con mi pureza. 
Atacar con ello te duele más de lo que tú crees que me 
duelen tus mentiras, tu traición y tu soberbia. Ayudas a 
sumar el desprecio que te tengo como ser humano, aunque 
cualquier especie sería grande para ti, has demostrado que 
careces de inteligencia y de amor propio, vivirás en mis 
sombras para siempre con tu hipocresía y con tu alma 
empobrecida. 
Nadie consigue lo que quiere intentando ser la víctima y 
dar lástima cuándo lo que da es tristeza por sí mismo, sí 
quieres que te tengan lástima está bien, fracasas como 
66 
 
persona para toda la humanidad y eres una vergüenza 
mitológica para la historia universal. 
El éxito viene de tu talento y de tu grandeza, pero no de tus 
penas que escasa de honra tu imagen. Siempre estoy por la 
vida buscando lo que quiero y lo consigo con mi sudor, cada 
persona es un átomo constituido por cargas negativas y 
positivas en sus vidas, cuando quieres hacer una reacción 
electromagnética todo va en tu potencia si quieres brillar, 
así como los grandes agujeros negros que son tan solos y 
errantes en el universo, sosteniendo su inmensa gravedad 
donde su punto es tan infinito que la luz no escapa de él. 
Así mismo, cuando en vida era una estrella súper gigante 
que mantenía millones de sistemas con su luz, tú también lo 
puedes hacer porque tú brillo iluminas la vida de quienes 
están en tu órbita. Estas dándoles calor todo el tiempo, ya 
que gracias a ti favoreces la existencia de muchas ideas y 
logros que seguro has tenido. 
Sin embargo, cuando una estrella muere su ausencia se 
siente como un potente reactor, la inspiración resplandece 
la magia de la astronomía con los agujeros negros que 
contribuyen a la formación de galaxias, o cuerpos celestes 
que forman vidas como la tuya. Es porque siempre dejan su 
huella, y su brillo se hace sentir en los distantes años luz. 
Cuando algún día sea tu turno de morir, dejarás tu huella 
del éxito en el mundo donde alguna vez estuvo tu existencia, 
67 
 
esa que jamás será desapercibida ya que por alguna razón 
tu voz seguirá en el mundo haciendo latir el corazón de 
muchos, renaciendo y trascendiendo moverás montañas con 
tu grandiosidad. Eres lo que sientes y cada persona tiene su 
historia, tu eres el fuego, eres agua, eres aire, todo lo que 
alguna vez fue creado para evolucionar y lo seguiráshaciendo, porque un guerrero no se hace de sus victorias 
sino de las derrotas que se convierten victorias. 
 
 
 
 
68 
 
 
 
Epílogo. El fin de los tiempos. 
Estoy reencarnando una vez más entre las serpientes, 
alacranes, escorpiones, escarabajos, que me hacen ceder el 
veneno más fuerte de todos, tan letal como una tarántula y 
asesino como una cobra desértica. Mientras sentía mi 
cuerpo volver a la vida, podía observar una gran tempestad 
que tomaba camino por la aterradora oscuridad, esa donde 
estuve caminando solo todo este tiempo, sudando entre gota 
a gota de sangre que parecía no detenerse. 
Mientras caía de rodillas, pude ver como la maldición se 
apoderaba de mí ser, de mis emociones y mi cordura. Una 
sombra de color azul se extendía por la tierra grisácea, cada 
vez que se aproximaba a mi comenzaba a extraer mis buenas 
vibras e intenciones convirtiéndolas de una copa de vino, a 
un cáliz de sangre. 
69 
 
Esa sangre del cual había salido de las grandes heridas 
que llevaba en mi espalda, destrozada por los gusanos que 
eran generados por la traición y la maldad siniestra, 
llevándome a ser torturado por latigazos sobre el pasto seco 
y frio nocturno. Los verdugos de capucha negra escondían 
uñas largas y rostros pálidos de cadáver, sus ojos eran rojos 
y sus ojeras tan oscuras como la noche, esas que eran tan 
marcadas como las raíces de un roble. 
Mi pueblo sufría tanto por las intervenciones del imperio 
maligno y de la forma de asechar el enemigo, aterrorizados 
del apocalipsis eran asesinados por jinetes de armaduras 
oscuras, sus moradas eran quemadas y destruidas con sus 
familias acorraladas y amenazadas gritando piedad ante el 
catastrófico atentado. Ya todo lo que era mi pueblo estaba 
hundiéndose en el inframundo, sus corazones estaban en 
llamas, sus pieles se quemaban como el hidrogeno, sus 
espíritus estaban en la máxima oscuridad. 
Tras las apocalípticas batallas presentes, me hacían sentir 
una gran ansiedad que me estrangulaba de la impotencia en 
salvar a mis discípulos, veía cómo mis enemigos se llenaban 
de riquezas en mi reino, en el gran Olimpo. Toda mi gran 
familia ya era parte de la esclavitud, así que mis grandes 
bienaventuranzas habían sido incineradas. 
Yo, encerrado en la torre más alta vigilado por las bestias, 
pude sentir el asqueroso olor del azufre que se acercaba a 
mi estadía, era el mismísimo demonio que corría a 
70 
 
buscarme; cada vez que se acercaba a la habitación donde 
estaba encadenado, escuchaba su grandes garras afilarse en 
el suelo, la temperatura descendía al máximo y mi piel se 
congelaba al cero absoluto, pero ya cuando había llegado 
sigilosamente, la temperatura empezó aumentar y mi piel se 
quemaba, sentí tantas emociones como el miedo; perdía mi 
valentía y mi astucia. 
La torre se estaba derrumbando, estaba cayendo y todo 
parecía ser una especie de pesadilla dónde estás cayendo y 
no puedes despertar. Al caer sobre el suelo todo se tornó de 
oscuro, fue como visitar el infierno estaba en las tinieblas, y 
la niebla bloqueaba mi entorno, la respiración se volvía más 
lenta cada vez que miraba al lugar en donde escuchaba sus 
patas de cabra, veía sus cuernos tan filosos y sombríos, ya 
sentía su potestad hacia a mí al sentir el imparable 
murmullo. 
Mientras me levantaba a correr atemorizado con las manos 
encadenadas, fui a esconderme entre las ruinas de la torre 
destruida. Éste ya me había encontrado en la oscuridad, ya 
no podía hacer nada por lo que no tenía algún lugar donde 
huir, mi último pensamiento era enfrentarlo, aunque me 
costase la vida. 
Ya cuando finalmente se acercaba, observaba su silueta 
acercarse que hasta en un suspiro sus frías manos estaban 
sobre mi cuello, así que comenzó apretarlas en mi garganta; 
no tuve fuerzas para gritar, ni siquiera para respirar. 
71 
 
Pero cada vez era más fuerte, me estaba estrangulando en 
medio de la oscuridad y solo miraba sus ojos rojos, sentía 
como lamia mi cara con su lengua de dragón mientras 
agonizaba rasgaba mi cuerpo con sus garras. Estuve 
hipnotizado por el dolor y con su mirada despiadada, 
comencé a vomitar sangre de un color vino tinto, pero 
cuando intentaba toser sentía mis pulmones se desgarrarse. 
No quería morir, sabía que todavía tenía esperanzas para 
luchar en esos últimos segundos después de que toda mi vida 
pasaba como reflejos en mi mente, el tiempo corría más 
lento, perdía la cordura al fijarme en que había dejado 
morir todo de mí. 
Luego pude sentir una gran energía que se producía en mi 
corazón, latía fuertemente, cada vez más rápido; una gran 
potencia salía de mi cuerpo, creo que ya mi fuerza estaba 
manifestándose en aquel momento de agonía, una especie de 
estigmas aparecieron en mis manos con un ardor muy fuerte, 
como si mis manos hubiesen sido perforadas por una bala, 
recuperé el oxígeno y estaba sanándome, el dolor estaba 
desapareciendo. Logré levantarme y destruir al ente maligno 
que me acechaba, ese ángel caído del cual me llevaba 
encarcelado desde el primer momento que llegué a la 
victoria, mientras estaba en mis tierras fortaleciendo mi 
pueblo, protegiéndolo de algo que ya había fracasado. 
En ese momento comenzó la batalla contra el monstruo que 
destruía mi divinidad, pero la bestia enfurecida se defendía 
72 
 
junto a sus ángeles, eso no le sirvió para nada. Tenía en 
cuenta el apoyo de mis discípulos que me fortalecía, 
llegando a un gran mundo mágico en el que batallaba con 
mis enemigos sin ningún miedo a perder, era fuego, era 
hielo, era vida; Me sentía como una gran potencia, 
protegido y en calma, todo eso me ayudo a liberar esos 
murciélagos que llevaba muy dentro de mí, hasta terminar lo 
que sería el juicio final. 
Después de la batalla sangrienta, podía respirar el aire 
fresco y puro de la victoria cuando observaba morir al 
asesino sobre mis pies, disfrutando la gloria al traspasar mi 
espada por su nauseabundo corazón perdido en la maldad, 
mientras agonizaba se ahogaba en su misma sangre perdido 
en sus propias lágrimas, pidiendo un perdón que nunca 
existiría. Terminé de abandonar el lugar después que el odio 
había desaparecido, fui corriendo en busca de lo que había 
perdido, mi pueblo, mis soldados, mi fuente de vida pulcra; 
al ver mi fraternidad en caos corrí a salvarles del dolor y el 
olvido, estuve allí para ceder de mis honores y mi honor 
hacia ellos, me sentí orgullosos de la majestad al conformar 
un imperio tan noble y celestial. 
Mientras quedábamos en estado de gracia celebrábamos 
nuestra transición, el renacer, y el poder de nuestra máxima 
sabiduría en resplandor, grandes murallas y fortificaciones 
eran construidas para nuestro futuro, ese mismo donde 
quedarían los lejanos siglos por conquistar y gobernar por 
73 
 
la eternidad. Juntos estaremos preparados para cualquier 
bélico, para atacar y destruir con la amabilidad, y nuestra 
grandiosidad fraternal, que es más hiriente que el dolor de 
una tortura lenta, el triunfo no significa vencer siempre, 
porque habrá momentos de derrota; el triunfo se basa en 
nunca darse por vencido, los héroes nunca se rinden. 
Desde muy joven fui torturado y ultrajado por la vida, sentí 
el dolor más grande que cualquier humano puede llegar a 
sentir, es ese dolor que te quita las esperanzas de vivir y 
seguir tu camino. Vivir una sociedad donde si demuestras 
realmente quien eres, puedes llegar a ser asesinado a 
piedras, como vivir un asesinato a sangre fría. 
A pesar del éxito, la melancolía aparece instantáneamente, 
todo en mí se oscurece al recordar momentos del cual 
quedaron sellados y marcados para toda mi vida, lugares, 
fechas, que me llevan a espejismos. No hay nada peor para 
un ser indefenso que haya sido juzgado, en ser obligado a 
realizar algo que preferiblemente no quiere hacer, para 
protegerse o guardar la seguridad de alguien más. 
El maltrato psicológico es aquellaarma letal que acaba 
con la vida de cualquier ser, sea maltrato físico o sexual; es 
este que termina de arrebatarte la última respiración para 
siempre. En el caso de los muchos niños en el mundo que 
han crecido siendo víctima de violación en plural, deja una 
gran huella para siempre en tu camino, una gran cicatriz 
imborrable, que ni siquiera el tiempo lo podrá sanar, el 
74 
 
trauma quedará plasmado por toda su corta vida a estar 
presente a una mirada sádica y perversa, un toque, o al 
escuchar una voz que queda como un ruido estruendoso en 
la mente, o también al estar solo. 
Lo más doloroso que puede llegar a sentir una persona es 
sentirse miserable y sucia, después de un acto de agresión 
sexual y peor aún, sentir el silencio que se hace eterno hasta 
sentirse en un estado moribundo. En que nadie te escuchará, 
o el miedo a que nadie te crea, es algo que te lleva a la 
muerte en vida, en que en cada pesadilla lleguen esos 
recuerdos y sea como mirar a la marca por la oscuridad, 
llena tu memoria en nauseas, en rencor y en odio. 
Muchas veces esto te lleva a caminar por la azotea de un 
edificio, y terminas siendo empujado al vacío buscando la 
manera de eliminar el pasado que te congela la realidad, a 
veces pensamos en que la muerte es la solución. La vida se 
encarga en demostrarte dos opciones, estas en un bosque en 
el que solo tienes dos caminos para seguir, uno de ellos es la 
luz y la prosperidad de la felicidad; pero el otro es el más 
oscuro donde tu compañía será la muerte, y el olvido. 
Tarde o temprano consigues una vela encendida en ese 
laberinto del cual no puedes salir, seguro que te sentirás 
inseguro como si te observaran en medio de la soledad, 
cuando todo se oscurece los únicos ojos que te miran son de 
esas criaturas venenosas que te persiguen, para estar en tu 
75 
 
cuerpo como sanguijuelas y alimentarse de tu sangre, hasta 
arrancar la célula más mínima de ti. 
Cuando comienzas a crecer como persona trasciendes tu 
mala vida a una de reyes, emprende a tener sentido, aunque 
no tengas las riquezas necesarias para conseguir lo que 
quieres. Sin embargo, aunque disfrutes tu vida en el trono, 
siempre llegaran falsos profetas que demostrarán sus falsos 
oráculos, pretendiendo sabotear tu reino hasta engañaran a 
miles de personas que harán conseguir el odio que ellos 
quieren. 
Sentir que te transformas en un hereje para tu propia 
familia, es el destierro más doloroso y decepcionante que 
llegues a sentir de tu misma sangre, porque los mayores 
enemigos son los que están para verte crecer y después 
llevarte a la pena de muerte, mientras por dentro llevas una 
condena que sería un gran peso sobre tu alma, siempre te 
hace tropezar y caer cuando quieres escapar de la realidad. 
Navegué por mares tormentosos hasta ahogarme y 
hundirme por completo, escape de mentiras para enfrentar 
la muerte, venciendo villanos, asesiné verdugos. Corrí por 
túneles y catacumbas en penumbras, retrocediendo el tiempo 
en nostalgias hasta llegar a galería donde me encontré como 
la piedra más valiosa de la mina, más poderosa que el oro y 
más suprema que el uranio. 
76 
 
Encontré el secreto de vivir por la eternidad, dejando esa 
huella en el mundo que nadie podrá borrar con una 
reputación desechable. 
Luché contra grandes jerarquías para liberar esclavitudes, 
dolor, y sufrimiento para crear mi propia civilización, ser el 
Dios de mi propio mundo y el caballero principal de la 
oscuridad en la que nací, donde seguiré renaciendo y 
fluyendo como el agua, ardiendo como el fuego que brota. 
Los restos de lo que algún día llegue a ser, fueron 
momificados dando luz y creación a lo que soy ahora 
resucitando en mundos paralelos. 
Ese sufrimiento humano que sentí en un pasado lejano, ha 
quedado como un manuscrito hecho en pergamino plasmado 
en la tumba del antiguo yo, esa de la que muchos blasfemos 
y sanguinarios querrán profanar. Todo eso actuará como un 
libro de conjuros por el viaje a la otra vida hasta alcanzar el 
proceso de mi inmortalidad suprema y autentica. 
Estaré siempre en la memoria y en el corazón de cada 
integrante de mi legión, antes y después de la muerte; sobre 
todo en el día en el que sus vidas estén cayéndose a pedazos. 
Siempre seré su guía en la tierra, el cielo o en el infierno, 
estaré allí para salvarles de la oscuridad y ayudarles a vivir 
con ella. 
Cada persona merece brillar y triunfar hasta llenarse de 
éxitos con su perseverancia, a no temer al caer sino para 
77 
 
tomar impulso y levantarse con fuerzas a un nuevo intento, 
porque todos llevamos por dentro a un peleador romano que 
nos hace ser centuriones. Ser grande no es cuestión de 
tamaño sino de actitud, con el valor que te hará conquistar 
lo imposible. 
Si hay algo que aprendí en mi vida, como bien escrito lo 
dejó la gran heroína Albert Einstein, es que la vida es como 
andar en una bicicleta, para mantener el equilibrio tienes 
que seguir adelante sin mirar atrás. El tiempo es el obsequio 
más valioso que tienes, no lo malgastes, en ser alguien que 
no quieres ser o simplemente vivir la vida de alguien más. 
Por alguna razón suceden las cosas en este vasto universo; 
sean alegres, tristes o traumáticas, esto se convirtió en algo 
perfecto para mi ¿Por qué? en el viaje de la vida sucederán 
millones de momentos, que harán querer lanzar todo a la 
borda y de no nadar a contra corriente por más difícil que 
parezca, para bien o para mal es cuestión del aprendizaje 
que te hace un maestro, la vida es un viaje sin retorno. 
Los errores seguirán estando en cada día para mejorarlos 
y motivarme a mejorar por más que cueste; esa decepción o 
la depresión que te mantiene atado de manos, la que hace 
quemar tus alegrías y desviarte de tu camino o esconderte de 
la vergüenza. Sé que existirá un futuro en el que sea la gema 
más brillante de todos los cielos, destellara tanto como un 
rubí y serás tú quien se haga más fuerte con los dolores que 
hoy están generando tu infelicidad, porque muy dentro de ti 
78 
 
tienes el corazón más valioso que pueda haber como un gran 
diamante rojo. Tienes la capacidad de convertir espinas en 
rosas, cuando Dios borra algo de tu historia es porque algo 
muy grande será escrito pronto, y sé que marcará tu 
protagonismo en tu historia, en tu vida y en tu propia 
película. 
Cuando te sientas que nada queda por vivir, recuerda que 
a pesar de llorar y sufrir quedarán muchísimos momentos 
hermosos de felicidades y amor para vivir, porque el amor 
es el arquitecto del universo, si das amor es lo que recibirás; 
así mismo te convertirás en alguien tan genuino y amado 
como lo mereces, lo mejor que puedes hacer es sacar el 
veneno de tu vida y echar al vacío todas esas personas 
toxicas que solo sacan lo peor de ti, sin tomar en cuenta el 
auténtico ser que esconde en su actitud o desconocer las 
razones por las que manifieste sus malas acciones. Un sabio 
dijo en algún momento, “Quien te hace daño es quien al 
final más te necesita’’. Lo que hoy te maltrata te hiere, pero 
no te mata sino te hace más fuerte. 
Entrégale todo tú corazón a Dios, porque él conoce más 
cosas de ti del cual nadie ni tú mismo conoce. Dejaré que 
todo lo cure y lo resuelva el tiempo, todo se ha salido de mis 
manos por lo que me resigno a la tranquilidad. 
Cuando el pasado te llame, recuerda que no tiene nada 
nuevo que ofrecerte porque siempre será el mismo episodio 
repetido que se hará molesto, no tiene nada que ofrecerte, es 
79 
 
mejor que lo dejes en donde murió en algún pasado. De 
igual forma, cuando alguien te quiere en su vida dejará el 
espacio más grande para ti, para que ocupes un lugar muy 
importante en sus momentos de felicidad o tristes. 
No debes pelear por un lugar que ya está ocupado o 
simplemente no lo mereces, además los buenos amigos no 
son los que permanecen en un largo tiempo, en buenas 
ocasiones sino los que se

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