DISTRIBUCIÓN NO EQUITATIVA DE LA RIQUEZA

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INTRODUCCIÓN
La distribución no equitativa de la riqueza es un tema de creciente relevancia en el contexto económico y social actual. Esta diferencia en la distribución de los recursos económicos, ingresos y oportunidades entre los individuos y grupos dentro de una sociedad o país ha sido objeto de profundos debates. A medida que la globalización, el avance tecnológico y otros factores moldean nuestras sociedades, resulta crucial examinar cómo estas dinámicas impactan en la distribución de la riqueza y cómo esta desigualdad afecta a la vida de las personas y al funcionamiento de la economía en su conjunto.
En este trabajo investigativo, se explorarán las causas y factores que contribuyen a la desigualdad económica, así como las consecuencias socioeconómicas que resultan de una distribución no equitativa de la riqueza. Igualmente, se hará una breve mención al Coeficiente de Gini, que es una herramienta comúnmente utilizada para medir la desigualdad, y examinaremos comparaciones de la distribución de la riqueza entre países y regiones.
Además, se señalará la importancia de una correcta redistribución de la riqueza y cómo las políticas fiscales, educativas y laborales pueden influir en este proceso. A través de una mirada reflexiva, se buscará entender cómo la equidad y la eficiencia pueden coexistir para lograr una sociedad más inclusiva y próspera para todos. 
Por último, esta investigación pretende exponer un tema crucial para el bienestar social y económico, con el objetivo de generar conciencia y fomentar el debate en busca de soluciones que promuevan una distribución más equitativa de la riqueza y una sociedad más justa para las generaciones presentes y futuras.
DISTRIBUCIÓN NO EQUITATIVA DE LA RIQUEZA
La desigualdad económica se trata de la situación donde existe una diferencia relacionada con la renta, la riqueza o bienestar económico entre los diferentes integrantes de la población de una zona geográfica. Sobre este aspecto, López (2019:1) señala “la desigualdad es contrario a la igualdad e implica que dos personas tienen lo mismo. Por tanto, la desigualdad tendrá lugar siempre que diferentes personas o colectivas disfruten de una renta, riqueza o bienestar diferentes”. Es decir, se habla de desigualdad económica cuando en un determinado espacio, sus miembros poseen una capacidad adquisitiva diferente uno respecto a otro. 
Por su parte, la distribución no equitativa de la riqueza hace referencia a la disparidad en la distribución de los recursos económicos, como ingresos, activos y oportunidades, entre los individuos y grupos dentro de una sociedad o país. Así pues, en una distribución equitativa, la riqueza estaría repartida de manera más igualitaria, mientras que, en una distribución no equitativa, una minoría puede controlar la mayoría de los recursos, dejando a una gran parte de la población con pocos recursos y oportunidades.
Atendiendo a tales consideraciones, es preciso identificar que la medida más comúnmente utilizada para cuantificar la desigualdad económica en diferentes países y regiones es el denominado Coeficiente de Gini, Milanovic (2016) explica que este proporciona un valor entre 0 y 1, donde 0 representa una distribución perfectamente equitativa (todos tienen el mismo ingreso o riqueza) y 1 representa una distribución completamente desigual, lo que representaría que una persona tiene todo el ingreso o riqueza y el resto no tiene nada.
Por su parte, para calcular el coeficiente de Gini, se representan gráficamente los ingresos o riqueza de las personas en un diagrama de Lorenz, y luego se compara con la línea de equidad, que representa una distribución perfectamente equitativa. Cuanto más se desvíe la curva de Lorenz de la línea de equidad, mayor será la desigualdad y más cercano será el valor del Coeficiente de Gini a 1. En este sentido, el gráfico que se muestra a continuación ilustra el comportamiento del tal coeficiente. 
Gráfico N°1. Coeficiente de Gini
Fuente: Rodríguez (2016)
	Esta gráfica se utiliza a través de dos ejes de coordenadas, para identificar de forma sencilla el porcentaje de ingresos que corresponde a un porcentaje de población. Cabe destacar que el coeficiente de Gini se calcula a partir de la información comprendida en dicha curva.
	Causas y Factores contribuyentes
	La distribución no equitativa de la riqueza es un fenómeno complejo y multifacético que puede tener diversas causas y factores contribuyentes. A continuación, se presentan algunas de las principales causas y factores que han sido identificados por investigadores y economistas:
-Tecnología y automatización: El avance tecnológico y la automatización en la producción pueden llevar a la reducción de empleos en ciertas industrias, lo que resulta en una mayor concentración de riqueza en manos de quienes poseen y controlan la tecnología y el capital.
-Globalización: La integración económica global puede tener efectos contradictorios sobre la desigualdad. Si bien puede permitir un mayor acceso a mercados internacionales y oportunidades comerciales, también puede provocar la competencia y la desindustrialización en algunos países, afectando negativamente a los trabajadores y aumentando la brecha entre los que se benefician y los que no.
-Políticas fiscales y tributarias: Los sistemas fiscales y tributarios pueden influir en la distribución de la riqueza. Por ejemplo, la reducción de impuestos a las rentas más altas o a grandes corporaciones puede aumentar la desigualdad, mientras que políticas fiscales progresivas que gravan más a los ingresos altos pueden ayudar a reducirla.
-Educación y acceso a oportunidades: La calidad de la educación y el acceso a oportunidades educativas pueden tener un impacto significativo en la movilidad social y en las posibilidades de obtener empleos bien remunerados. 
-Políticas laborales: Las políticas relacionadas con los salarios mínimos, la negociación colectiva, la protección laboral y los derechos de los trabajadores pueden afectar la capacidad de las personas para obtener ingresos justos y mejorar sus condiciones económicas.
-Discriminación y desigualdad de género: La discriminación basada en género, raza, etnia u otros factores puede llevar a desigualdades económicas y perpetuar la exclusión de ciertos grupos de la sociedad.
-Herencia y patrimonio: La transmisión de la riqueza de generación en generación puede dar lugar a la acumulación de activos y ventajas económicas para algunas familias, creando así desigualdades persistentes.
-Desigualdad en el acceso a servicios básicos: Las disparidades en el acceso a servicios esenciales como atención médica, vivienda, transporte y servicios públicos pueden agravar la brecha entre los más ricos y los más pobres.
Atendiendo a los elementos antes descritos puede afirmarse que las causas pueden ser variadas, dependiendo cada una de las particularidades del entorno, no obstante, es fundamental conocerlas para poder ser consiente de los factores que inciden en la distribución no equitativa de la riqueza. 
Impacto socioeconómico de la distribución no equitativa de la riqueza
	La distribución no equitativa de la riqueza tiene un impacto significativo en el ámbito socioeconómico de una sociedad. Cuando una minoría concentra la mayor parte de la riqueza mientras que una gran parte de la población tiene acceso limitado a recursos económicos, se generan diversas consecuencias negativas que afectan a diferentes aspectos de la vida de las personas y a la economía en su conjunto. Respecto a este aspecto, Lischinsky (2016:1) refiere que la desigual distribución del ingreso y la riqueza en un entramado de interconexiones que se potencian en un círculo vicioso lleva a su vez a desigualdades de acceso a la educación y la capacitación, la salud, la vivienda, la tierra, las oportunidades de trabajo, el conocimiento, la cultura, el deporte, el transporte, la tecnología, las instituciones, el financiamiento, el acceso a servicios de agua y cloacas, electricidad, gas u otras energías, y las comunicaciones, entre otros.
Comparaciones dela distribución de la riqueza entre países y regiones
Según datos de Oxfam, de 2016:
• El 1 por ciento más rico de la población del mundo posee más riqueza que el 99 por ciento de los habitantes del planeta.
• La riqueza de las 62 personas más ricas del mundo aumentó de 2010 a 2015 en un 45%. Poseen la misma riqueza que la mitad más pobre de la población mundial, 3.600 millones de personas. En 2010 era la riqueza de 388 personas la que era igual a la de la mitad de la riqueza de la población mundial más pobre, lo que indica el aumento de la concentración.
• Las 62 personas más ricas del mundo aumentaron su riqueza en 542.000 millones de dólares, mientras que la mitad más pobre perdió 1 millón de millones de dólares, casi el doble de lo que ganó el 62 más rico entre 2010 y 2015.
• Del total de la población mundial, la población más pobre ha recibido solo el 1% del aumento de la riqueza en el mundo. La economía mundial está cada vez más orientada a favorecer a los más ricos.
• En paraísos fiscales los más ricos del mundo poseen 7.600.000 millones de dólares, esta cifra es más de 15 veces mayor que el PIB de la Argentina de un año.
	Correcta Redistribución de la riqueza 
	Para una correcta redistribución de riqueza, el gasto público debe proporcionar a toda la sociedad bienes y servicios de calidad. Si los sistemas de recaudación de impuestos son justos, podrán recaudar de manera eficiente y sostenible los fondos necesarios para proporcionar esos bienes y servicios.
	Al respecto, opina Fuentes (2016:1) que “Una distribución más equitativa de los recursos será posible si se mejora la calidad del capital humano, potenciando los servicios públicos de educación y salud”. Asimismo, si se mejora la calidad de la educación y la salud, de manera integral, se podría lograr que toda la población tenga las mismas oportunidades de crecimiento. Sin embargo, la ecuación entre equidad y eficiencia se encuentra en constante tensión. Si se busca mayor equidad en un servicio, suele sacrificarse su eficiencia, y viceversa. Es mejor buscar la equidad una vez que se ha logrado la estabilidad del servicio.
	Así pues, en la medida en que aumenta la riqueza del país, la población de mayores ingresos consume y gasta cada vez menos. Es ahí donde ingresan los mecanismos de distribución, que permiten incorporar al mercado a las personas con menores ingresos e impulsar un mayor consumo de su parte para generar un círculo virtuoso. Si mejoramos la calidad de la educación y la salud, de manera integral, podríamos lograr que toda la población tenga las mismas oportunidades de crecimiento.
CONCLUSIONES
Tal y como se pudo evidenciar, la distribución no equitativa de la riqueza es un fenómeno complejo que tiene profundas implicaciones en el ámbito socioeconómico de una sociedad. Cuando una minoría concentra la mayoría de los recursos económicos mientras que una gran parte de la población tiene un acceso limitado a ellos, se generan desigualdades que afectan negativamente a diversos aspectos de la vida de las personas y a la economía en general.
Se pudo identificar que el coeficiente de Gini es una herramienta que se utiliza para medir la desigualdad económica, proporcionando un valor entre 0 y 1, donde 0 representa una distribución perfectamente equitativa y 1 representa una distribución completamente desigual. 
Por otra parte, entre las causas y factores que contribuyen a la distribución no equitativa de la riqueza se encuentran el avance tecnológico y la automatización, la globalización, las políticas fiscales y tributarias, el acceso desigual a la educación y oportunidades laborales, la discriminación y desigualdad de género, la herencia y el patrimonio, así como la desigualdad en el acceso a servicios básicos.
Para abordar la distribución no equitativa de la riqueza, es esencial implementar políticas que promuevan una redistribución justa y equitativa de los recursos. Esto implica mejorar la calidad de los servicios públicos, como la educación y la salud, para proporcionar oportunidades de crecimiento y desarrollo a toda la población. Además, es crucial establecer sistemas fiscales progresivos que contribuyan a reducir las brechas de desigualdad.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Fuentes, C. (2016). Equidad + eficiencia = Correcta distribución de la riqueza. En línea. Recuperado de: https://www.esan.edu.pe/conexion-esan/equidad-eficiencia-correcta-distribucion-de-la-riqueza-1
Lischinsky, B. (2016). Distribución del ingreso y la riqueza a nivel mundial. En línea. Recuperado de: https://vocesenelfenix.economicas.uba.ar/distribucion-del-ingreso-y-la-riqueza-a-nivel-mundial/ https://vocesenelfenix.economicas.uba.ar/distribucion-del-ingreso-y-la-riqueza-a-nivel-mundial/
López, F. (2019). Desigualdad económica. En línea. Recuperado de: https://economipedia.com/definiciones/desigualdad-economica.html
Milanovic, B. (2016). Global inequality: A new approach for the age of globalization. Editorial Harvard University Press
‌Rodríguez, A. (2016). Coeficiente de Gini, el detector de la desigualdad salarial. En línea. Recuperado de: https://www.bbva.com/es/coeficiente-gini-detector-la-desigualdad-salarial/