Trabajo de resumen friaje

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Riesgos y consecuencias del Friaje en el Perú
En la selva se da el fenómeno conocido como el friaje que, según el Senamhi, impacta principalmente a Madre de Dios, Ucayali, Huánuco, San Martín, Loreto y la ceja de selva de Puno.
A veces se presenta con nevadas, afecta significativamente la agricultura y ganadería.
La pérdida de enormes áreas de cultivo, la muerte del ganado y peces, hambre, enfermedades, etc. superando en la mayoría de los casos la capacidad de respuesta de los gobiernos locales y regionales, por otro lado en el caso de la salud (...) En nuestro país los fenómenos friaje causan daños no sólo materiales sino también a la salud de las personas, ya que incrementa el riesgo de Infecciones Respiratorias Agudas (IRAS) en especial en niños (mortalidad infantil e incremento de ausentismo escolar) y adultos mayores (casos de neumonía y muertes por dicha enfermedad). El frío afecta la salud de los animales que crían las familias para su auto sustento (incremento del número de muertes) y se pierden los cultivos locales para su propia alimentación de las zonas alto andinas. Asimismo, incrementa la presentación de irritación de las conjuntivas oculares y daños en el rostro y cuello por el reflejo de luz solar en la nieve. 
Debemos poner énfasis en el impacto económico que implica para las familias el incremento de la morbilidad y el gasto en salud. 
Respecto al escenario de riesgo por friaje, se calcula 28 distritos con riesgo muy alto, distribuidos en Cusco, Huánuco, Junín, Madre de Dios, Pasco y Ucayali, donde se encuentran ubicados alrededor de 372 mil personas y 245 establecimientos de salud. Además, se observa una población de 1.255.580 personas y 777 establecimientos de salud expuestos a riesgo alto.
Un total de 258,881 habitantes se encontrarían en un nivel de riesgo muy alto por friaje, del cual el 15% corresponde a niños y niñas entre 0 a 5 años, y el 6% a adultos mayores. Asimismo, se observa un total 97,645 viviendas que estarían en riesgo muy alto, donde 73,407 viviendas corresponden a viviendas particulares ocupadas con personas presentes.
Niveles de riesgo por friaje para el sector salud por departamentos
Además, Las bajas temperaturas dañan la infraestructura de establecimientos de viviendas y carreteras. Lo que originan daños en los servicios básicos, centros educativos, actividad agrícola, ganadera e infraestructura diversa, entre otros; Asimismo, el material de la vivienda es una variable muy importante en el análisis de vulnerabilidad de la población, que justamente considera el escenario de riesgo más focalizado requiriéndose una atención especial y el apoyo del Gobierno Nacional. 
Ante situaciones de frio intenso, es imperativa la asistencia médica, incluyendo las vacunaciones respectivas. Las enfermedades respiratorias aumentan su frecuencia en épocas de frio, siendo la mayoría de ellas de etiología viral y requieren de cuidados especiales para evitar las complicaciones bacterianas que podrían ocasionar mortalidad, sobre todo en niños menores de 5 años
Lamentablemente, el problema es mucho más complejo que ponerse un abrigo, ya que los afectados pertenecen a las zonas rurales deprimidas y alejadas del país. Ante este tipo de eventos no solo se ve comprometida la salud, sino que también se ve ahondar aún más la pobreza por las pérdidas materiales que sufren.
Es pertinente señalar que son las autoridades políticas y sanitarias las llamadas a enfrentar de manera directa y sostenida este problema, que anualmente cobra muchas víctimas. Y deben ser las instituciones de la sociedad civil que tienen un interés genuino por la salud infantil las llamadas a impulsar y liderar acciones preventivas a favor de las poblaciones afectadas por desastres naturales prevenibles, como el friaje.
El friaje presenta diversos riesgos para las vías de comunicación, como: 
Daños en la infraestructura vial por las lluvias intensas, pueden causar daños, como el deterioro de la capa asfáltica y la erosión de los caminos, lo que requiere reparaciones costosas. Peligro para los puentes. El frío extremo puede debilitar la estructura de los puentes, lo que aumenta el riesgo de colapso. Interrupción del transporte público. También puede afectar la operación de servicios de transporte público, como autobuses y trenes, lo que dificulta la movilización de personas y mercancías. Aislamiento de comunidades rurales. El friaje puede aislar a las comunidades rurales de la Sierra, lo que puede dificultar el acceso a servicios básicos, como atención médica, educación, suministro de alimentos y otros recursos esenciales Para hacer frente a estos riesgos, las autoridades peruanas suelen implementar medidas de prevención y respuesta, como el mantenimiento de las vías de comunicación, la distribución de ayuda humanitaria a las comunidades afectadas y la emisión de alertas tempranas para advertir a la población sobre las condiciones climáticas extremas.
Flora y fauna
Las bajas temperaturas pueden ser mortales para muchas especies de fauna, especialmente aquellas que no están adaptadas para resistir el frío extremo. Esto puede incluir aves, mamíferos y anfibios que no tienen las adaptaciones necesarias para sobrevivir a temperaturas bajo cero. 
Algunos animales pueden verse obligados a desplazarse en busca de zonas más cálidas y refugios para protegerse del frío. Esto puede llevar a la migración temporal de ciertas especies. 
El frio intenso pueden dañar o matar a las plantas más sensibles al frío. Esto puede tener un impacto en la vegetación local y en los ecosistemas, alterando la composición de especies y la estructura de la comunidad vegetal. lo que puede tener un efecto cascada en la cadena alimentaria.
Desastres naturales
La disminución de las temperaturas puede causar la congelación del suelo en las zonas montañosas. Cuando la temperatura aumenta repentinamente, el deshielo puede provocar deslizamientos de tierra, especialmente en áreas con pendientes pronunciadas. Estos deslizamientos pueden causar daños a la infraestructura y poner en riesgo la vida de las personas.
El friaje también puede contribuir a la formación de inundaciones, ya que el deshielo de las montañas puede aumentar el caudal de los ríos y arroyos. Esto puede dar lugar a desbordamientos que afectan a las comunidades cercanas a los cursos de agua.