Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
CAPÍTULO 13 Médula espinal, nervios raquídeos y reflejos somáticos 497 CUADRO 13.4 El plexo braquial (continuación) FIGURA 13.16 Fotografía del plexo braquial. Vista anterior del hombro izquierdo. La mayoría de las demás estructuras que parecen nervios en esta fotografía son vasos sanguíneos. Nervio mediano Cordón medial Nervio axilar Nervio radial Cordón lateral Cordón posterior Nervio musculocutáneo Nervio cubital Nervio torácico largo CONOCIMIENTO MÁS A FONDO 13.4 Aplicación clínica Lesiones nerviosas Los nervios radial y ciático mayor son muy vulnerables a lesiones; por ello, unas muletas mal apoyadas pueden comprimir el nervio radial que pasa por la axila, contra el húmero, y causar parálisis por uso de muletas. Una lesión similar suele ser producto de la práctica ahora desacreditada de corregir la dislocación de un hombro al poner un pie en la axila de una persona y jalar el brazo. Una conse- cuencia de la lesión del nervio radial es la caída de la muñeca: los dedos, la mano y la muñeca están flexionados de manera crónica debido a la parálisis de los músculos extensores inervados por el nervio radial. En virtud de su posición y longitud, el nervio ciático mayor de la cadera y el muslo es el más vulnerable del cuerpo. El traumatismo de este nervio produce ciática, un dolor agudo que viaja de la región glútea a lo largo del lado posterior del muslo y la pierna, hasta el tobillo. Casi 90% de los casos se deben a un disco intervertebral herniado o a osteoartritis de la parte inferior de la espina dorsal, pero la ciática también se puede deber a presión de un útero preñado, dislocación de la cadera, inyecciones en el área incorrecta de los glúteos o la costumbre de sentarse durante mucho tiempo en la orilla de una silla dura. En ocasiones los hombres padecen ciática por el hábito de sentarse sobre una cartera guardada en un bolsillo trasero.
Compartir