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Buenos días a todos.
Un poco decepcionado esta mañana al acabar de leer las redes y tratar de recoger las “reacciones” sobre la actividad realizada ayer por el ciudadano presidente de la república Bolivariana de Venezuela, Señor Nicolás Maduro Moros. No por negativas o positivas, si no por inexistentes (al menos en los grupos donde tengo acceso).
Y vean y comparen... Verdad que me refiero a nuestro presidente como si fuera uno de esos expertologos que salen en redes y que una vez identificado el objetivo proceden a destruirlo?
Pues no, es que si en alguna ocasión nuestro presidente Nicolás se merece esta calificación es hoy cuando se evalúa su desempeño en esa actividad.
¿Que como es eso?
Muy sencillo estuvo simplemente: REGIO.
A aquellos que hasta ahora (siendo y que chavistas), todavía se les escucha exclamar con altisonancia: “Es que Nicolás no es Chávez”; le digo, no… no lo es ya que nuestro comandante se multiplicó y ahora somos todos, pero si se le derramó la genética chavista hasta por los poros.
Y es que los años que nuestro ciudadano presidente de la república bolivariana de Venezuela doctor… Perdón. Señor Nicolás maduro Moros ha pasado en la fragua política sindical, en labores parlamentarias y como ministro de relaciones exteriores de nuestro comandante Chávez no pasaron en vano (eso por mencionar elementos de gran relevancia).
El enfoque determinador de la idiosincrasia del venezolano desde lo geoantroposociocritico, resultó sin ningún tipo de perdida; somos lo que somos porque se encuentra grabado a sangre y fuego en nuestros genes.
Somos venezolanos y más nadie en este continente, incluyendo a los gringos, puede decir con tanto orgullo lo que son, relacionado con su gentilicio. Y es que decir venezolano, como bien lo señaló nuestro presidente, es decir afro descendiente, es decir indoamericano, es decir euroasiático, es decir LIBERTADORES.
Entonces como el asunto es FORMACIÓN, de un pueblo llano, de barrio (como yo por ejemplo), de urbanización, de ciudad, de campo, de estero, de playa de pescado, de tepuy, de mina, de empresa, de rio; es decir de verdad verdadera, que camina, respira, aspira, trabaja, ama y construye… Entonces el asunto es complicado y si a este caldo le incluimos la verdura y la sazón del libertario, del zamorano, del maí santa, del colectivo revolucionario MBR 200, entonces es un reto muy superior.
Por lo tanto los formadores de venezolanos que necesitamos; como nosotros los educadores (que lo hemos hecho por mucho tiempo), tienen que ser definitivamente la generación de oro de la formación. Porque formamos principalmente con el ejemplo.
Y la pregunta que seguramente se hará todo el que tiene la gracia de leer es: Aja y como debe ser ese formador, educador o facilitador?
La respuesta… También la señalo en su insuperable clase, nuestro presidente Nicolás, debe ser como deben ser; de ahora en adelante, nuestros gobernantes, resistentes a las críticas de todos todas y suyas propias. Y es que debe y tiene que ser así, lo que más tiene nuestro pueblo ahorita y lo que más ha tenido siempre son críticas: criticamos cuando es malo, criticamos cuando es bueno, cuando es más o menos (por cierto son los que más y eso da menos), cuando son demasiado buenos e imagínense cuando son demasiado malos.
Pero así somos los venezolanos, estamos pendientes de todo, y le agrada que lo escuchen y le resuelvan, si no pues… es triste. Si no pregúntenle a la oposición. Entonces cuando dicen que el alcalde o alcaldesa es tal cosa, o el gobernador o gobernadora es tal cual, o en este caso; ese Profe o Profa. No me convence o si me convence (la mayoría de las veces está dividido), no hay que molestarse, no hay que mirar feo, apartar o atacar, hay que escuchar, gestionar y resolver.
Es que ese cimarrón o cimarrona que llevamos por dentro es irreverente y no le gustan las puestas en escena mal montadas, le gusta que le expliquen y le demuestren con hechos que si está o no equivocado, con cariño, con dedicación, con experticia científica y popular; porque nuestro pueblo es inteligente, tiene lo mejor de lo mejor; eso que llaman venezolanidad ya que Dios fue bueno y nos dio ese no sé qué que tenemos los venezolanos y las venezolanas que nos hace fuertes, decididos y libres.
Por supuesto que esta reflexión se refiere a la formación y lo que hay que tener para hacerla realidad y aquel que no comprenda aún de que se trata lo invito si no lo vio a ver la gran clase magistral que nos obsequió nuestro presidente constitucional Nicolás maduro Moros ayer en horas de la tarde. Culmino señalando que personalmente pienso que el presidente nos socio escaneo, si es válido el término y nos encomendó a todos los que emprenderemos esta batalla en defensa de nuestra verdad, desde este frente; el de la formación sociopolítica, una misión que definirá el futuro de la revolución socialista del siglo XXI.
Desde la frontera de Apure con las armas de la república defendemos nuestro legado patrio, nuestro territorio, y nuestra libertad política, desde los ambientes de formación aseguraremos todo eso y nuestra razón de existir, el ser venezolano, revolucionario, anti imperialista y chavista. Venceremos.
Isidro Mejías
Municipio Caroní del estado Bolívar.

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