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JOSÉ OLIVARES RODRÍGUEZJOSÉ OLIVARES RODRÍGUEZ CATEDRÁTICO DE UNIVERSIDAD. UNIVERSIDAD DE MURCIACATEDRÁTICO DE UNIVERSIDAD. UNIVERSIDAD DE MURCIA EDICIONES PIRÁMIDEEDICIONES PIRÁMIDE IntervenciónIntervención psicológicapsicológica Estrategias, técnicasEstrategias, técnicas y tratamientosy tratamientos DIEGO MACIÀ ANTÓNDIEGO MACIÀ ANTÓN PROFESOR TITULAR DE UNIVERSIDADPROFESOR TITULAR DE UNIVERSIDAD. UNIVERSIDAD MIGUEL HERNÁNDEZ DE . UNIVERSIDAD MIGUEL HERNÁNDEZ DE ELCHEELCHE ANA ISABEL ROSA ALCÁZARANA ISABEL ROSA ALCÁZAR PROFESORA TITULAR DE UNIVERSIDAD. UNIVERSIDAD DE MURCIAPROFESORA TITULAR DE UNIVERSIDAD. UNIVERSIDAD DE MURCIA PABLO J. OLIVARES-OLIVARESPABLO J. OLIVARES-OLIVARES PROFESOR ASOCIADO. UNIVERSIDAD DE MURCIAPROFESOR ASOCIADO. UNIVERSIDAD DE MURCIA COLECCIÓN «PSICOLOGÍA»COLECCIÓN «PSICOLOGÍA» Director:Director: Francisco J. LabradorFrancisco J. Labrador Catedrático de Modificación de ConductaCatedrático de Modificación de Conducta de la Universidad Complutense de Madridde la Universidad Complutense de Madrid Edición en versión digitalEdición en versión digital ©© José Olivares Rodríguez, Diego Macià Antón, Ana José Olivares Rodríguez, Diego Macià Antón, Ana Isabel Rosa Alcázar, Pablo J. Olivares-OlivareIsabel Rosa Alcázar, Pablo J. Olivares-Olivaress , 2014, 2014 © Primera edición electrónica publicada por Ediciones Pirámide (Grupo Anaya, S. A.), 2014© Primera edición electrónica publicada por Ediciones Pirámide (Grupo Anaya, S. A.), 2014 Para cualquier información pueden dirigirse a piramide_legal@anaya.esPara cualquier información pueden dirigirse a piramide_legal@anaya.es Juan Ignacio Luca de Tena, 15. 28027 MadridJuan Ignacio Luca de Tena, 15. 28027 Madrid Teléfono: 91 393 89 89Teléfono: 91 393 89 89 www.edicionespiramide.eswww.edicionespiramide.es ISBN: 978-84-368-3013-2ISBN: 978-84-368-3013-2 Está prohibida la reproducción total o Está prohibida la reproducción total o parcialparcial de este libro electrónico, su transmisión, sude este libro electrónico, su transmisión, su descarga, su descompilación, su tratamientodescarga, su descompilación, su tratamiento informático, su almacenamiento o introduc-informático, su almacenamiento o introduc- ción en cualquier sistema de repositorio yción en cualquier sistema de repositorio y recuperación, en cualquier forma o por cual-recuperación, en cualquier forma o por cual- quier medio, ya sea electrónico, mecánico,quier medio, ya sea electrónico, mecánico, conocido o por inventar, sin el permiso conocido o por inventar, sin el permiso expre-expre- so escrito de los titulares del copyright.so escrito de los titulares del copyright. A Josefa Rodríguez Ruz,A Josefa Rodríguez Ruz, Teresa Antón García,Teresa Antón García, María Alcázar PicazoMaría Alcázar Picazo y Antonia y Antonia OlivarOlivares Alcalá,es Alcalá, y a y a nuestros alumnosnuestros alumnos y compañeros de y compañeros de profprofesión.esión. © © Ediciones Ediciones PirámidePirámide Presentación que se sugiere leerPresentación que se sugiere leer ..................................................................................................................................................... ..... 1717 BLOQUE IBLOQUE I El contexto histórico y metodológico. Las raíces de la psicología científicaEl contexto histórico y metodológico. Las raíces de la psicología científica PARTE PRIMERAPARTE PRIMERA Historia y métodoHistoria y método 1. 1. Perspectiva histórica Perspectiva histórica de de la la evaluación y evaluación y el el tratamiento psicológicotratamiento psicológico ........ ........ 2929 1.1. 1.1. Introducción Introducción .............................................................................................................................................................................................. .... 3131 1.2. 1.2. Gestación, Gestación, inicio inicio y y consolidación consolidación del del modelo modelo conductual-cogniconductual-cognitivo tivo ...................... .. 3333 1.2.1.2.1. Gestación. 1. Gestación. Fuentes Fuentes o o antecedentes antecedentes de de la la terapia/moterapia/modificación dificación dede conducta conducta (1899-1950) (1899-1950) ..................................................................................................................................... ......... 3333 1.2.2. Inicio 1.2.2. Inicio de de la la terapia/moditerapia/modificación ficación de de conducta conducta (1951-1970) (1951-1970) ........................ .... 3535 1.2.2.1. 1.2.2.1. Década Década de de 1950 1950 .............................................................................................................................. 35.... 35 1.2.2.2. 1.2.2.2. Década Década de de 1960 1960 .............................................................................................................................. 36.... 36 1.2.3. Consolidación 1.2.3. Consolidación y y desarrollo desarrollo de de la la terapia/modterapia/modificación ificación de de conductaconducta (a (a partir partir de de 1971) 1971) ...................................................................................................................................................... .... 3737 1.2.3.1. 1.2.3.1. Consolidación, Consolidación, décadas décadas de de 1970 1970 y y 1980 1980 ................................................. ....... 3737 1.2.3.2. 1.2.3.2. Expansión, Expansión, década década de de 1990 1990 hasta hasta la la actualidad actualidad ........................... ..... 4040 1.2.4. 1.2.4. Delimitación Delimitación del del modelo modelo conductuaconductual-cognitivo l-cognitivo y y definición definición de de trata-trata- miento miento psicológico psicológico .................................................................................................................................................... .. 4040 1.3. 1.3. Actividades Actividades ................................................................................................................................................................................................. ..... 4343 1.3.1. 1.3.1. Construcción Construcción del del glosario glosario conceptual conceptual ....................................................................................... ..... 4343 1.3.2. Actividades 1.3.2. Actividades relacionadas relacionadas con con los los conceptos conceptos básicos básicos del del tema tema .......... .......... 4343 1.3.3. 1.3.3. Ejemplos Ejemplos de de la la vida vida cotidiana cotidiana .............................................................................................................. ...... 4343 Cuestionario Cuestionario de de autoevaluaciautoevaluación ón .................................................................................................................................................... .... 4444 Lecturas Lecturas recomendadas recomendadas ............................................................................................................................................................................ ...... 4545 Referencias Referencias bibliográficas bibliográficas .............................. ............................ ............................ ............................ ............................ ............................ . . 4545 2. 2. La La intervenciintervención ón psicológicapsicológica ...................................................................................................................................................... ...... 4747 2.1. 2.1. Introducción Introducción .............................................................................................................................................................................................. .... 4949 2.2. Descripción 2.2. Descripción del del proceso proceso ....................................................................................................................................................... ....... 49492.2.1. 2.2.1. Evaluación Evaluación psicológica psicológica en en la la fase fase descriptiva descriptiva de de la la intervención intervención ...... ...... 4949 2.2.2. 2.2.2. La La comunicacicomunicación ón de de resultados resultados ............................................................................................................ .... 5353 ÍndiceÍndice 10 / Índice © Ediciones Pirámide 2.2.3. La implicación de las partes ............................................................ 56 2.2.4. El entrenamiento/tratamiento .......................................................... 57 2.2.4.1. El análisis funcional .......................................................... 57 2.2.4.2. Las medidas intra y de seguimiento .................................. 58 2.3. Actividades ................................................................................................... 60 2.3.1. Construcción del glosario conceptual .............................................. 60 2.3.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema .......... 60 2.3.3. Ejemplos de la vida cotidiana .......................................................... 61 2.3.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único ....... 61 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 62 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 62 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 63 BLOQUE II La primera generación de los tratamientos. El rigor y el compromiso con el método científico (el modelo conductual) PARTE SEGUNDA Estrategias para la desactivación somática 3. Técnicas de respiración y relajación ............................................................... 69 3.1. Introducción ................................................................................................. 71 3.2. Descripción de la técnica/tratamiento .......................................................... 73 3.2.1. Técnicas de respiración .................................................................... 73 3.2.2. La relajación .................................................................................... 74 3.2.2.1. Relajación muscular progresiva ......................................... 74 3.2.2.2. El entrenamiento autógeno ............................................... 79 3.3. Actividades ................................................................................................... 83 3.3.1. Construcción del glosario conceptual .............................................. 83 3.3.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema .......... 83 3.3.3. Ejemplos de la vida cotidiana .......................................................... 84 3.3.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único ....... 84 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 85 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 85 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 86 PARTE TERCERA Estrategias centradas en la exposición a los estímulos temidos 4. Desensibilización sistemática .......................................................................... 91 4.1. Introducción ................................................................................................. 93 4.2. Procedimiento .............................................................................................. 97 4.2.1. La DS clásica como tratamiento de primera elección ...................... 97 4.2.2. Fase psicoeducativa .......................................................................... 98 4.2.3. Fase práctica en el contexto terapéutico .......................................... 98 4.2.3.1. Entrenamiento en la autoevaluación del grado de ansiedad . 99 4.2.3.2. Selección y entrenamiento de la respuesta incompatible con la ansiedad .................................................................. 99 Índice / 11 © Ediciones Pirámide 4.2.3.3. Construcción de la jerarquía de estímulos desencadenantes de las respuestas de ansiedad ............................................ 99 4.2.3.4. Práctica imaginativa y evaluación del grado de ansiedad .. 101 4.2.3.5. Aplicación de la desensibilización sistemática clásica o es- tandarizada ....................................................................... 103 4.2.4. Fase de aplicación en el ambiente natural (tareas para casa) ........... 105 4.3. Variantes ...................................................................................................... 105 4.4. Actividades ................................................................................................... 105 4.4.1. Construcción del glosario conceptual .............................................. 105 4.4.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema .......... 106 4.4.3. Ejemplos de la vida cotidiana .......................................................... 107 4.4.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único ....... 107 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 108 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 108 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 109 5. La inundación y otras estrategias de aplicación del principio de exposi- ción ....................................................................................................................... 111 5.1. Introducción ................................................................................................. 113 5.2. Procedimiento de la exposición gradual ....................................................... 117 5.2.1. Fase psicoeducativa .......................................................................... 117 5.2.2. Fase de entrenamiento en el contexto terapéutico ........................... 118 5.2.3. Fase de aplicación al ambiente natural (tareas para casa) ............... 121 5.3. Variantes ...................................................................................................... 121 5.4. Actividades ................................................................................................... 125 5.4.1. Construcción del glosario conceptual .............................................. 125 5.4.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema .......... 125 5.4.3. Ejemplos de la vida cotidiana .......................................................... 125 5.4.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único ....... 125 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 126 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 127 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 127 PARTE CUARTA Técnicas y tratamientos cuyo fundamento se encuadra en el condicionamiento instrumental u operante 6. Técnicas y tratamientos operantes (I): desarrollo y mantenimiento .......... 133 6.1. Introducción ................................................................................................. 135 6.2. Reforzamiento positivo ................................................................................ 137 6.2.1. Definición y tipos de reforzadores ................................................... 137 6.2.2. Procedimiento .................................................................................. 139 6.2.3. Técnicas basadas en el reforzamientopositivo ................................. 141 6.2.3.1 Moldeamiento (aproximaciones sucesivas) ........................ 141 6.2.3.2. Encadenamiento ................................................................ 142 6.2.3.3. Desvanecimiento ............................................................... 144 6.3. Reforzamiento negativo ............................................................................... 144 6.3.1. Definición ........................................................................................ 144 12 / Índice © Ediciones Pirámide 6.3.2. Procedimiento .................................................................................. 145 6.4. Actividades ................................................................................................... 146 6.4.1. Construcción del glosario conceptual .............................................. 146 6.4.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema .......... 146 6.4.3. Ejemplos de la vida cotidiana .......................................................... 146 6.4.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único ....... 147 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 147 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 148 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 148 7. Técnicas y tratamientos operantes (II): reducción y eliminación. Econo- mía de fichas y contratos conductuales ........................................................ 151 7.1. Introducción ................................................................................................. 153 7.2. Extinción ...................................................................................................... 153 7.2.1. Definición ........................................................................................ 153 7.2.2. Procedimiento .................................................................................. 154 7.3. Castigo ......................................................................................................... 155 7.3.1. Definición ........................................................................................ 155 7.3.2. Tipos ................................................................................................ 155 7.4. Reforzamiento diferencial ............................................................................ 158 7.4.1. Reforzamiento diferencial de tasas bajas de respuestas (RDTB) ..... 158 7.4.2. Reforzamiento diferencial de respuestas incompatibles (RDI) ......... 159 7.4.3. Reforzamiento diferencial de otras respuestas (RDO) ..................... 159 7.5. Programas de economía de fichas ................................................................ 160 7.5.1. Definición ........................................................................................ 160 7.5.2. Fases de tratamiento ........................................................................ 160 7.6. Contrato conductual .................................................................................... 163 7.6.1. Definición y tipos ............................................................................. 163 7.6.2. Guía para elaborar un contrato conductual .................................... 163 7.7. Actividades ................................................................................................... 166 7.7.1. Construcción del glosario conceptual .............................................. 166 7.7.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema .......... 166 7.7.3. Ejemplos de la vida cotidiana .......................................................... 166 7.7.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único ....... 167 7.7.5. Estudio de un caso único publicado ................................................ 167 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 167 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 168 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 168 BLOQUE III La segunda generación de tratamientos psicológicos: la incorporación de las variables cognitivas (el modelo conductual-cognitivo) PARTE QUINTA Tratamientos adscritos al modelo conductual-cognitivo 8. Procedimientos de modelado .......................................................................... 175 8.1. Introducción ................................................................................................. 177 8.2. Descripción de la técnica/tratamiento .......................................................... 179 Índice / 13 © Ediciones Pirámide 8.2.1. Bases teóricas y experimentales ........................................................ 179 8.2.1.1. Procesos básicos del aprendizaje observacional ................ 179 8.2.1.2. Variables que influyen en la eficacia del modelado ........... 180 8.2.2. Procedimiento general de modelado ................................................ 182 8.2.3. Tipos de modelado, procedimientos/técnicas y aplicaciones ............ 182 8.3. Actividades ................................................................................................... 187 8.3.1. Construcción del glosario conceptual .............................................. 187 8.3.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema .......... 187 8.3.3. Ejemplos de la vida cotidiana .......................................................... 187 8.3.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único ....... 187 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 188 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 188 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 189 9. Entrenamiento en habilidades sociales .......................................................... 191 9.1. Introducción ................................................................................................. 193 9.2. Descripción de la técnica/tratamiento .......................................................... 194 9.2.1. Antecedentes del entrenamiento en habilidades sociales: el entrena- miento asertivo ................................................................................. 194 9.2.2. Concepto de habilidades sociales. Un modelo explicativo ............... 194 9.2.3. Modelos explicativos de los comportamientos inadaptados ............ 196 9.2.4. Tipos de habilidades sociales ........................................................... 197 9.2.5. Proceso de entrenamiento en habilidades sociales ........................... 200 9.2.6. Entrenamiento en habilidades sociales en grupo ............................. 203 9.2.7. Programas de entrenamiento en habilidades sociales ....................... 204 9.3. Actividades ................................................................................................... 205 9.3.1. Construcción del glosario conceptual .............................................. 205 9.3.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema .......... 205 9.3.3. Ejemplos de la vida cotidiana .......................................................... 205 9.3.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único ....... 205 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 206 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 207 Referencias bibliográficas ......................................................................................207 10. Estrategias y técnicas para producir reestructuración cognitiva .............. 209 10.1. Introducción ............................................................................................... 211 10.2. Terapia racional emotiva conductual de Ellis ............................................. 213 10.2.1. Procedimiento ............................................................................... 214 10.2.2. Estrategias complementarias ........................................................ 219 10.3. Terapia cognitiva de Beck .......................................................................... 219 10.3.1. Procedimiento ............................................................................... 220 10.3.2. Estrategias complementarias ........................................................ 224 10.4. Actividades ................................................................................................. 224 10.4.1. Construcción del glosario conceptual ........................................... 224 10.4.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema ...... 225 10.4.3. Ejemplos de la vida cotidiana ...................................................... 225 10.4.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único .... 225 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 226 14 / Índice © Ediciones Pirámide Lecturas recomendadas ......................................................................................... 226 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 227 11. Entrenamiento en habilidades de afrontamiento .......................................... 229 11.1. Introducción ............................................................................................... 231 11.2. Descripción de la técnica/tratamiento ........................................................ 232 11.2.1. Entrenamiento en autoinstrucciones ............................................ 232 11.2.1.1. Procedimiento de aplicación ........................................ 232 11.2.2. Entrenamiento en inoculación de estrés ....................................... 235 11.2.2.1. Procedimiento .............................................................. 236 11.2.3. Entrenamiento en manejo de ansiedad ......................................... 240 11.2.3.1. Procedimiento .............................................................. 241 11.3. Actividades ................................................................................................. 244 11.3.1. Construcción del glosario conceptual ........................................... 244 11.3.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema ...... 244 11.3.3. Ejemplos de la vida cotidiana ...................................................... 244 11.3.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único .... 244 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 245 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 246 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 246 12. Estrategias para el entrenamiento en resolución de problemas ............... 249 12.1. Introducción ............................................................................................... 251 12.2. Descripción de la técnica/tratamiento ........................................................ 254 12.2.1. El entrenamiento en la solución de problemas sociales ................ 254 12.2.2. La solución de problemas interpersonales .................................... 259 12.2.3. El programa SCIENCE ................................................................ 260 12.3. Actividades ................................................................................................. 262 12.3.1. Construcción del glosario conceptual ........................................... 262 12.3.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema ...... 262 12.3.3. Ejemplos de la vida cotidiana ...................................................... 263 12.3.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único .... 264 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 264 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 265 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 265 PARTE SEXTA La importancia del medio 13. El autocontrol y la imaginación, el entrenamiento de paraprofesionales y las estrategias derivadas del campo de la física y la informática .......... 269 13.1. Introducción ............................................................................................... 271 13.2. Descripción de los recursos ........................................................................ 273 13.2.1. El autocontrol y la imaginación ................................................... 273 13.2.2. Los paraprofesionales ................................................................... 277 13.2.3. Recursos que generalmente no forman parte consustancial del medio en el que actúa nuestro paciente/cliente ............................. 279 13.3. Actividades ................................................................................................. 283 Índice / 15 © Ediciones Pirámide 13.3.1. Construcción del glosario conceptual ........................................... 283 13.3.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema ...... 283 13.3.3. Ejemplos de la vida cotidiana ...................................................... 285 13.3.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único .... 285 Cuestionario de autoevaluación ............................................................................ 286 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 286 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 287 BLOQUE IV ¿Tercera generación de tratamientos psicológicos? PARTE SÉPTIMA ¿La intensificación del subjetivismo? 14. Nuevas propuestas de tratamiento psicológico ........................................... 293 14.1. Introducción ............................................................................................... 295 14.2. Descripción de las técnicas/tratamientos. Procedimiento ........................... 297 14.2.1. La meditación mindfulness ........................................................... 297 14.2.2. Terapia de conducta dialéctica ..................................................... 299 14.2.3. Terapia de la aceptación y el compromiso ................................... 302 14.2.4. Terapia cognitiva basada en el mindfulness para el tratamiento de la depresión .................................................................................. 306 14.2.5. Terapia de activación conductual ................................................. 307 14.2.6. Psicoterapia analítica funcional .................................................... 308 14.2.7. La terapia integral conductual de pareja ...................................... 309 14.3. Actividades ................................................................................................. 310 14.3.1. Construcción del glosario conceptual ........................................... 310 14.3.2. Actividades relacionadas con los conceptos básicos del tema ...... 310 14.3.3. Ejemplos de la vida cotidiana ...................................................... 311 14.3.4. Reconstrucción de una intervención psicológica de caso único .... 312 Cuestionario deautoevaluación ............................................................................ 312 Lecturas recomendadas ......................................................................................... 312 Referencias bibliográficas ...................................................................................... 314 Anexo I. Guía para la reconstrucción de una intervención psicológica indivi- dual o de caso único ......................................................................................... 317 © Ediciones Pirámide «The American Psychological Association has identified “best research evidence” as a major component of evidence-based practice (APA Presiden- tial Task Force on Evidence-Based Practice, 2006). This website describes the research evidence for psychological treatments, which will necessarily be combined with clinician expertise and patient values and characteristics in determining optimum approaches to treatment» (APA, 2013)1. Presentación que se sugiere leer En un libro previo (Olivares, Macià, Olivares- Olivares y Rosa-Alcázar, 2012) abordábamos el desarrollo que ha experimentado la psicología científica, las funciones que desempeñamos los psicólogos, los requisitos que requiere nuestra formación y el proceso que seguimos hoy en nuestra actuación (la intervención psicológica). Como decíamos allí, el fin de este quehacer no es otro que promover e incrementar el bienestar de las personas, ayudándolas mediante el aprendi- zaje a mejorar la adecuación de sus respuestas en los contextos en los que actúan cotidianamente o en los que se hallan circunstancialmente (clínico, educativo, laboral, jurídico, deportivo, sanitario, militar, circulación vial, etc.). Es decir, nuestro trabajo consiste en promover el cambio y en ayu- dar a cambiar, para que las personas puedan de- sarrollar hasta donde les sea posible sus potencia- lidades y funcionar de un modo autónomo y competente, para poder capitalizar las oportuni- 1 APA Presidential Task Force on Evidence-Based Prac- tice (2006). Evidence-based practice in psychology. American Psychologist, 61, 271-285. APA (2013). Website on Research-Supported Psychologi- cal Treatments. Rescatado de http://www.psychological- treatments.org/. dades que se les presentan en su medio social y ajustarse a éste eficientemente. El conjunto de acciones que realizamos en el curso del ejercicio de nuestra profesión es lo que conocemos como «intervención psicológica»: proceso a lo largo del cual el profesional, allá donde se presentan problemas relativos al com- portamiento humano, evalúa, entrena/trata y cuantifica tanto los efectos del entrenamiento/ tratamiento como su estabilidad o persistencia temporal, la validez social de tales efectos, su ge- neralización a través de situaciones distintas de aquella en la que se realizó el tratamiento/entre- namiento, etc. (véase el capítulo 2 de este libro). El objetivo del trabajo que hoy presentamos es, en primer lugar, poner en manos del lector en ge- neral, y muy especialmente del futuro psicólogo, nuestros actuales estudiantes del grado en psico- logía, una aproximación concreta al proceso de evaluación y tratamiento que se ha desarrollado a la luz de las premisas teóricas de los enfoques que hoy integran el modelo conductual-cognitivo 2. 2 Denominación que frente a la usual («modelo cogniti- vo-conductual») pretende resaltar el curso histórico que ha seguido la construcción de este desarrollo teórico en el seno de la psicología científica. 18 / Presentación que se sugiere leer © Ediciones Pirámide El proceso de construcción de esta parcela de la psicología científica lo hemos desarrollado si- guiendo un criterio temporal que nos ha permiti- do agrupar esta producción científica en tres blo- ques: el primero integra los tramientos llamados de «primera generación», el segundo recoge los etiquetados de «segunda generación» y el tercero, todavía muy controvertido, incluye las principa- les propuestas de esta «nueva ola». Los primeros son hijos del rigor metodológico y del compromi- so con el método científico, propios del enfoque conductual. Los segundos surgieron con la incor- poración de las variables cognitivas al modelo conductual, las cuales forzaron su evolución al marco conductual-cognitivo. Los terceros se ca- racterizan por la heterogeneidad: unos se adscri- ben al modelo conductual-cognitivo pero incor- porando una estrategia de meditación conocida como mindfulness, como es el caso de la terapia de conducta dialéctica o la terapia cognitiva ba- sada en el mindfulness para el tratamiento de la depresión; otros se enmarcan exclusivamente en el modelo conductual, como ocurre con la tera- pia de la activación conductual, y otros, como la terapia de la aceptación y el compromiso, subra- yan sus raíces estrictamente conductuales pero incorporando también la estrategia mindfulness. En la estructura que hemos diseñado para la presentación de los capítulos podemos distinguir cuatro bloques y siete partes. En el primer bloque recogemos una síntesis del curso histórico que ha seguido la construcción de las bases teóricas de esta modalidad de intervención (capítulo 1) y des- cribimos el proceso de la intervención psicológica (capítulo 2). En los restantes (capítulos 3-14) mos- tramos las principales estrategias, recursos, técni- cas y tratamientos que podemos utilizar los psicó- logos en el ejercicio de nuestra profesión para abordar los problemas del comportamiento hu- mano. En este contexto deseamos hacer una mención especial a nuestros capítulos 13 y 14. En el prime- ro, el destinado a los recursos, hemos querido mostrarle al lector y al futuro psicólogo cómo los profesionales formados en el marco de esta disci- plina científica hemos ido (y seguimos) utilizando nuestra creatividad para hacer frente a las dificul- tades que muchas veces conlleva la aplicación de una intervención psicológica. En el segundo, el capítulo 14, hemos querido presentar junto a tra- tamientos bien establecidos, desde la perspectiva empírica, otros que no gozan de este refrendo pero de los que a buen seguro el lector habrá oído hablar y/o leído algo al respecto. Son propuestas atrevidas porque, pese a que todos reconocemos que no hay nada más práctico que una buena teoría, su adscripción teórica, salvo en el caso de la terapia de la activación conductual, plantea serias dudas con lo que ello supone para el pro- greso científico de nuestra disciplina. Además, la casi totalidad vuelven a introducir el subjetivismo en el marco de nuestra disciplina, con los riesgos que ello conlleva. El lector tiene ante sí el reto de tomar posiciones respecto de las distintas pro- puestas de intervención que se incluyen en este capítulo, siempre en el marco del respeto a los planteamientos novedosos y al quehacer ajeno, pero sin olvidar que un psicólogo es un científico que practica una profesión. Nuestra intención no es la exhaustividad, sino mostrar una panorámica que, siguiendo el curso histórico, sin dejar de lado una actitud crítica, dé cuenta de los conocimientos que el quehacer científico ha ido poniendo y proponiendo a/para nuestra disposición. Este recorrido se completa en cada capítulo con un apartado de actividades en el que se abor- dan desde los conceptos básicos del tema hasta la propuesta de un ejercicio aplicado a la recons- trucción de una intervención de caso único, la más frecuente en el ámbito de la intervención psi- cológica, pasando por una mínima autoevalua- ción relativa al dominio de algunas de las cuestio- nes planteadas en el desarrollo del capítulo, y un ejercicio para que el lector relacione los concep- tos adquiridos con la realidad de la que han sido extraídos («Ejemplos de la vida cotidiana»). En relación con los conceptos básicos de cada tema, queremos recordar al lector la importancia del dominio de los conceptos que utilizamos. Es más, por si puede valer como reflexión: ¿qué le ocurri- ría a usted si va a un país en el que puede distin- Presentación que se sugiere leer / 19 © EdicionesPirámide guir perfectamente los fonemas que utilizan en la construcción de su lenguaje oral pero desconoce el significado de las palabras? ¿Podría comuni- carse oralmente con alguien? Recuerde que algo de eso es lo que les ocurre a muchos psicólogos cuando sin darse cuenta, porque lo desconocen, utilizan un vocabulario que nada tiene que ver con el de su profesión para comunicarse. Tal ocu- rre cuando utilizan indistintamente en el ámbito profesional «respuesta», «conducta» y «compor- tamiento»; o hablan de «patología» (ni siquiera psicopatología); o emplean «trauma» como sinó- nimo de distrés muy intenso; o confunden con- ductismo y tratamiento conductual-cognitivo, modificación de conducta y modelo conductual- cognitivo, técnica y tratamiento; o dicen estar adscritos al modelo conductual-cognitivo y mez- clan en sus expresiones el vocabulario propio con conceptos psicoanalíticos; o entrenamiento con tratamiento, etc. Observará el lector que también hemos hecho mucho hincapié en el empleo de «entrenamiento» y «tratamiento». Ello se debe a que el segundo siempre incorpora al primero, por lo que difícil- mente podrían ser sinónimos. El entrenamiento se aplica para ayudar a un atleta a mejorar sus mar- cas, a un chico a mejorar sus técnicas de estudio, a un lesionado medular a caminar siguiendo la retroalimentación que le proporciona un ordena- dor al que está conectado, a un niño que inicia su aprendizaje a controlar el equilibrio en una bici- cleta, etc. El tratamiento se consigue mediante entrenamiento pero hace referencia a la aplicación de éste a un campo específico, el campo clínico. Otro tanto nos ocurre con paciente y cliente. Así, mientras que el primero presenta alteracio- nes de su comportamiento que producen sufri- miento tanto a él como a aquellos con los que convive, interfiriendo en el desarrollo de su acti- vidad cotidiana, el segundo no identifica a una persona que cumple los criterios para el diagnós- tico de un trastorno o alteración psicológica con significación clínica. De este modo, por ejemplo, un atleta puede ser nuestro cliente porque quiere mejorar sus marcas personales, pero alguien que presenta un cuadro de ansiedad que etiquetamos como «ataques de pánico» será nuestro paciente; el empresario que nos contrata para que le ayude- mos a tomar decisiones sobre problemas concre- tos será nuestro cliente, y la persona que cumple los criterios para el diagnóstico de un trastorno obsesivo-compulsivo será nuestro paciente. Esperamos que con todo ello el lector y el es- tudiante del grado de psicología terminen cada capítulo con una idea clara de algunas de las ta- reas que más frecuentemente hacemos los profe- sionales de la psicología, así como de por qué lo hacemos y cómo lo hacemos. Al primero preten- demos satisfacerle su curiosidad; al segundo, mostrarle el campo de la intervención para que pueda tomar decisiones fundamentadas a la hora de decidir cuál será su camino tras terminar el grado. Queremos aprovechar esta presentación para, en el marco de esa saludable actitud crítica que hemos comentado, recordar que son muchas las cuestiones que en el apartado de la intervención psicológica, en general, y en el de los tratamientos psicológicos en particular, siguen pendientes pese a lo muchísimo que se ha avanzado y se sigue avanzando en nuestra disciplina. Por ello quere- mos plantear al lector algunas de las muchas pre- guntas que nos gustaría que se hiciera cuando se enfrente al contenido de este manual. En unos ca- sos hallará las respuestas en el propio libro y en otros tendrá que buscarlas en otros trabajos pu- blicados por nuestros colegas. Así, si nos centramos en la relación del psicó- logo con la intervención, hay un conjunto de pre- guntas que el estudiante de grado de psicología debería estar en condiciones de responderse cuando tenga en la mano su título. Entre estas estarían, por ejemplo, las siguientes: i) Respecto de la intervención en general. Algunas cuestiones previas destinadas a clari- ficar conceptos generales, delimitar campos de actuación y orientar la intervención: — ¿Los conceptos o constructos tienen enti- dad real o son abstracciones de la reali- dad? ¿Tienen entidad real la inteligencia, la 20 / Presentación que se sugiere leer © Ediciones Pirámide mente, la ansiedad, etc.? ¿A qué nos referi- mos realmente cuando decimos que al- guien es inteligente o que muestra ansie- dad? Sinceramente, ¿puede enfermar la mente?, ¿se puede estar enfermo de ansie- dad? ¿La ansiedad o el estrés nos pueden invadir como las bacterias y los virus? ¿De qué estamos hablando cuando empleamos la expresión «enfermedad mental»? ¿Son equivalentes los conceptos de «síntoma» y de «respuesta»? ¿Las alteraciones de nues- tro comportamiento son síntomas de algo interno que no nos funciona bien o el pro- blema psicológico en sí mismo? — ¿Qué unidades y estrategias de medida uti- liza el psicólogo para cuantificar y valorar la adecuación o inadecuación del compor- tamiento humano? ¿Respuesta, conducta y comportamiento son sinónimos? ¿Es im- portante diferenciar estos tres conceptos? ¿En qué casos se debe hablar de respuesta y en cuáles de conducta? ¿Da lo mismo ha- blar de «nivel» que de «intensidad» de una respuesta? ¿Un cliente es siempre un pa- ciente? ¿El psicólogo trabaja con clientes, con pacientes o con ambos? — ¿Un terapeuta es siempre un psicólogo? ¿Terapeuta y psicólogo son sinónimos? ¿Se emplean adecuadamente los conceptos de «terapia» y «tratamiento psicológico» cuando se utilizan como sinónimos? ¿En qué se diferencia la psicología de la psi- quiatría? ¿Los problemas/trastornos del comportamiento generados y mantenidos por alteraciones somáticas —bioquímicas, infecciosas, del funcionamiento de órganos y sistemas orgánicos— se pueden tratar sólo con estrategias de aprendizaje? ¿Los problemas y trastornos del comportamien- to generados por aprendizajes inadecuados se deben tratar con productos químicos y procedimientos físicos? ¿Cuáles son los mecanismos implicados en los procesos de aprendizaje y cuáles en la acción de los medicamentos? En sentido estricto, ¿«en- fermedad mental» puede ser sinónimo de «trastorno psicológico»? ¿Dónde están los límites que separan el campo de acción del psicólogo y del psiquiatra a la hora de tra- tar un problema o trastorno psicológico? ¿Qué son y qué uso hacemos los psicólo- gos de los paraprofesionales? — ¿En qué consiste el diseño de una interven- ción psicológica? ¿Ha de diseñar siempre el psicólogo las intervenciones que realiza? ¿Puede y debe improvisar el psicólogo du- rante el proceso de evaluación y tratamien- to? Cuando se diseña por primera vez una intervención, ¿se han de utilizar estrategias y técnicas que otros profesionales han em- pleado previamente con buenos resulta- dos? ¿En qué casos está justificado el dise- ño de una intervención sin tener en cuenta los hallazgos previos? — ¿Para qué utilizamos los psicólogos las me- didas obtenidas a partir de autoinforme —test de lápiz y papel, autorregistros—, los test situaciones o la observación por parte de terceros? ¿Cuándo, cómo, con qué y para qué se construye una línea de base? ¿Cuándo, cómo, con qué y para qué se rea- liza una evaluación pretest? ¿En qué se di- ferencia una evaluación pretest de la que se realiza para construir una línea de base? ¿De cuántas formas distintas se puede construir una línea de base? ¿Qué determi- na que elijamos una forma u otra para construir la línea o líneas de base? ¿Es aconsejable sustituir la construcción de una línea de base en el tratamiento indivi- dual por una puntuación pretest obtenida mediante autoinforme? ¿Es preciso con- templar en el diseño de la intervención la evaluación de los efectos que está generan- do el entrenamiento/tratamiento mientras se aplica? Referido a esta misma cuestión, ¿tanto el entrenamiento/tratamiento indi- vidual como el grupal? — ¿Cuántas modalidades de hipótesis hay que contemplar y contrastar para concluir si el problema por el que se nos consulta es o no es un trastorno conrelevancia clínica? ¿Qué Presentación que se sugiere leer / 21 © Ediciones Pirámide papel desempeña el análisis topográfico en la consideración de la existencia de un pro- blema o trastorno psicológico? ¿Diagnósti- co psiquiátrico y diagnóstico psicológico son sinónimos; en qué se fundamentan y cómo se realiza cada uno de ellos? — ¿Qué implicaciones se derivan del análisis funcional para i) la formulación de hipóte- sis de intervención y ii) el diseño de la si- tuación para aplicar el tratamiento psico- lógico? ¿Es determinante contemplar la infraestructura humana y material en el di- seño de la aplicación de un tratamiento? ii) Respecto del entrenamiento/tratamiento. — ¿Entrenamiento y tratamiento son sinóni- mos en el campo psicológico? ¿Cómo se eligen, por qué se diseñan y cómo se eva- lúan los tratamientos psicológicos? ¿Cuán- do podemos decir que un entrenamiento o un tratamiento ha sido eficaz? ¿Por qué funcionan los tratamientos psicológicos que se han mostrado eficaces? ¿Todo lo que se hace cuando se aplica un tratamien- to que se ha mostrado eficaz tiene la mis- ma relevancia para el logro de los efectos que se producen? ¿Son todos los trata- mientos eficaces? ¿Puede haber dos o más modalidades de tratamiento que se hayan mostrado eficaces para abordar un mismo problema/trastorno psicológico? ¿Cabe es- perar que ante un mismo trastorno dos o más psicólogos elijan el mismo tratamien- to o tratamientos similares? ¿Cuándo y por qué se presentaría esa coincidencia? ¿En qué casos no se presentaría? — ¿Ser eficaz es sinónimo de ser efectivo y eficiente? ¿Son directamente generalizables los hallazgos de la investigación al ejercicio cotidiano de la profesión? ¿Cuándo se pue- de decir que un tratamiento psicológico está bien establecido? ¿Se puede utilizar para el tratamiento individual un progra- ma de tratamiento manualizado diseñado para tratar grupos? ¿Qué orienta el diseño de los tratamientos para grupos? ¿En qué se basa el diseño de un tratamiento indivi- dual? — ¿Es necesario contemplar el desvaneci- miento del entrenamiento/tratamiento? ¿Qué criterios ha de seguir el profesional para saber cuándo ha de iniciar el desvane- cimiento del entrenamiento/tratamiento? ¿Y para darlo por finalizado? ¿Debe plani- ficarse la prevención de «recaídas»? Du- rante el curso de la intervención, ¿basta con las medidas que se puedan tomar den- tro del ámbito clínico? ¿Qué otras medidas habría que tomar, por quién, cómo, cuán- do, dónde, hasta cuándo? ¿Es necesario seguir controlando el mantenimiento de los logros una vez que ha finalizado la aplicación del entrenamiento/tratamiento? ¿Hasta cuándo sería conveniente seguir ve- rificando la estabilidad de los logros? ¿En qué dimensiones se ha de valorar la estabi- lidad de los logros? — Por último, ¿todos los psicólogos estamos igualmente capacitados para el ejercicio de la profesión, es decir, un mismo tratamien- to en «distintas manos» puede dar lugar a resultados muy dispares? ¿Dónde querría situarse usted cuando ejerza esta hermosa profesión: en el lado de los que obtienen generalmente buenos resultados teniendo un porqué para entenderlos y explicarlos o en el de aquellos que cuando los obtienen no pueden argumentar teóricamente su éxito ni saben a qué atribuirlo con una ele- vada probabilidad de acierto? ¿Adónde le gustaría que le llevase su deseo? ¿Es lo mis- mo ser ecléctico que tener un modelo teó- rico de referencia? No es fácil adoptar una posición teórica, ads- cribirse a un modelo teórico, teniendo en cuenta que en la actualidad son varios los que existen y ninguno de ellos es capaz, por sí mismo, de dar respuesta a todas las preguntas ni soluciones a todos los problemas que se le plantean a un psi- cólogo. Pero ésa es una tarea que cada uno de 22 / Presentación que se sugiere leer © Ediciones Pirámide nosotros ha de ir realizando durante su período de formación. Lo peor que le puede pasar a un psicólogo es «no tener una identidad teórica» (porque ya hemos comentado que no hay nada más práctico que disponer de una buena teoría), después, claro está, de no tener la formación mí- nima que este trabajo requiere. Este libro, como el ya citado de Olivares, Macià, Olivares-Olivares y Rosa-Alcázar (2012), pretende contribuir a pre- venir ambas situaciones: el desconocimiento y la adscripción teórica. La adscripción teórica también filtra buena parte de las potenciales alternativas que se plan- tean como opciones para el entrenamiento/trata- miento psicológico. Sepa el lector que son más de 400 las opciones de tratamiento que se ofertan en la actualidad para su aplicación en el ejercicio de la psicología. Pero afortunadamente el filtro em- pírico que ha supuesto la estrategia de la psicolo- gía basada en la evidencia ha hecho que sean muchísimas menos las que están refrendadas como tratamientos bien establecidos. Estas rela- ciones se pueden hallar en las bases de datos co- nocidas como guías de tratamientos psicológicos eficaces [así, por ejemplo, la base Cochrane (www.cochrane.org/cochrane/revabstr/mainindex. htm, www.cochrane.es/?q=es/node/272); la base de datos de la División 12 de la Asociación Ame- ricana de Psicología (http://www.psychological- treatments.org/); la Guía de Referencia Rápida de Tratamientos Psicológicos con Apoyo Empírico (www.ucm.es/info/psclinic/guiareftrat/indez.php) de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid; la base datos del Minis- terio de Sanidad de España (www.guiasalud.es/ egpc/), o la del National Institute for Health and Clinical Excellence —NICE— de Reino Unido (www.nice.org.uk)]. La observación detenida de estas guías o bases de datos les confirmará que la mayoría de los tra- tamientos recogidos en estas bases están adscri- tos a los enfoques teóricos que integran el mode- lo conductual-cognitivo. Es decir, ante preguntas como las formuladas por Moriana y Martínez (2011a) respecto de si existe algún control de ca- lidad que nos asegure que, cuando alguien solici- ta la ayuda de un psicólogo público o privado, va a ser atendido siguiendo un modelo cuyas estra- tegias, técnicas y tratamientos hayan mostrado su eficacia desde el punto de vista científico, la res- puesta es sí. Asimismo, ante otra de sus pregun- tas, la relativa a si están los psicólogos en ejerci- cio y los estudiantes de psicología informados y formados de las modalidades de intervención, en general, y los tratamientos más efectivos, en par- ticular, para un determinado problema/trastorno, la respuesta también nos gustaría que fuese sí. Ayúdenos a conseguirlo siendo el mejor estudian- te de psicología, desentrañando y disfrutando del aprendizaje del conocimiento que hoy tenemos sobre el comportamiento humano. Para «ir haciendo boca», les recomendamos la lectura de las referencias bibliográficas que se re- cogen al final de esta presentación. Esperamos, y deseamos, que tanto estas referencias como el li- bro que está en sus manos puedan ayudarle a contestar no sólo las preguntas formuladas en esta presentación sino muchas otras. Recuerde que si algún día usted se siente un(a) buen(a) psicólogo(a), tras terminar su jornada laboral, y nosotros hemos tenido alguna culpa de ello, todo el esfuerzo y sacrificio que supone la preparación de un libro como el que está leyendo habrán valido la pena. LOS AUTORES LECTURAS MUY RECOMENDADAS Echeburúa, E., Del Corral, P. y Salaberría, K. (2010). Efectividad de las terapias psicológicas. Un análisis de la realidad actual. Revista de Psicopatología y Psicología Clínica, 15 (2), 85-99. Presentación que se sugiere leer / 23 © Ediciones Pirámide Frojan, M. X. (2011). ¿Por qué funcionan los trata- mientos psicológicos? Clínica y Salud, 22 (3), 201- 204. Infocop (2008). Los beneficios de los tratamientos psi- cológicos, ¿qué dicen los expertos? Rescatado de http://www.infocop.es/view_article.asp?id=2013. Moriana, J. A. y Martínez, V. A. (2011a). ¿Cómo se eligen, diseñan y evalúan los tratamientos e interven- ciones psicológicas? Rescatado de http://www.info-cop.es/view_article.asp?id=3626&cat=38. Moriana, J. A. y Martínez, V. A. (2011b). La psico- logía basada en la evidencia y el diseño y evalua- ción de tratamientos psicológicos eficaces. Revis- ta de Psicopatología y Psicología Clínica, 16, 81-100. Olivares, J., Macià, D., Olivares-Olivares, P. J. y Rosa- Alcázar, A. I. (2012). El ejercicio de la psicología apli- cada. La profesión de psicólogo. Madrid: Pirámide. Pérez-Álvarez, M., Fernández-Hermida, J. R., Fernán- dez-Rodríguez, C. y Amigo, I. (eds.) (2003a). Guía de tratamientos psicológicos eficaces I. Adultos. Ma- drid: Pirámide. Pérez-Álvarez, M., Fernández-Hermida, J. R., Fernán- dez-Rodríguez, C. y Amigo, I. (eds.) (2003b). Guía de tratamientos psicológicos eficaces II. Psicología de la salud. Madrid: Pirámide. Pérez-Álvarez, M., Fernández-Hermida, J. R., Fernán- dez-Rodríguez, C. y Amigo, I. (eds.) (2003c). Guía de tratamientos psicológicos eficaces III. Infancia y adolescencia. Madrid: Pirámide. BLOQUE I El contexto histórico y metodológico. Las raíces de la psicología científica PARTE PRIMERA Historia y método © Ediciones Pirámide Perspectiva histórica de la evaluación y el tratamiento psicológico 1 OBJETIVOS Objetivo general — Conocer los antecedentes históricos, el inicio, desarrollo y características ac- tuales del modelo conductual-cognitivo, de la evaluación y modificación de conducta. Objetivos específicos — Estudiar los antecedentes del modelo conductual y del inicio de la evaluación y modificación de conducta. — Conocer los autores y las propuestas que desde los distintos enfoques con- forman el nuevo modelo psicológico-científico de intervención y tratamiento psicológico. — Analizar las características del modelo conductual-cognitivo, base de las dis- tintas estrategias y técnicas de intervención que se expondrán en los capítulos posteriores. © Ediciones Pirámide 1.1. INTRODUCCIÓN El surgimiento de la psicología científica se si- túa en 1879, fecha en que Wilhelm Wunt (1832- 1920) pone en marcha el primer laboratorio expe- rimental de psicología en la Universidad de Leipzig. De forma casi simultánea (finales del si- glo XIX y principios del XX) se inicia gradualmen- te la aplicación de los hallazgos que se iban al- canzando en los laboratorios de investigación a los distintos ámbitos de la realidad social. En 1896 Lighther Witmer pone en marcha la pri- mera clínica psicológica, fundando en 1907 la revista The Psychological Clinic. Autores como J. McKeen Cattell o Alfred Binet desarrollan las primeras pruebas de evaluación psicológica. En 1903 Edward L. Thorndike publica Educational Psychology, una primera aplicación de la psicolo- gía a la educación. Podemos definir la psicología como la ciencia que estudia la respuesta a través de las distintas manifestaciones en que ésta pue- da tener lugar (cognitivas, emocionales, motoras y psicofisiológicas) y sus antecedentes y conse- cuentes. También es psicología —aplicada— la utilización práctica y positiva de este conoci- miento en los distintos ámbitos o contextos en que las personas se desenvuelven (Olivares, Ma- cià, Olivares-Olivares y Rosa-Alcázar, 2012). El término psicología aplicada implica dos ele- mentos de interés: por un lado la existencia de una ciencia básica que conlleva la investigación rigurosa de laboratorio, a partir de la cual se de- sarrollan los modelos teóricos y los principios de la conducta humana; por otro, estos principios básicos son aplicados posteriormente a situacio- nes de la vida real, fuera del laboratorio, para conseguir los cambios deseados en el comporta- miento humano. Sin embargo, esto no nos debe conducir a aceptar una clásica e inapropiada di- visión entre una psicología básica y una psicolo- gía aplicada, es decir, a considerar entidades dis- tintas la psicología como ciencia y la psicología como profesión. El psicólogo aplicado debe ser un profesional que, por su formación científica, ha de ser capaz de promover el bienestar humano y de contribuir al desarrollo de los modelos teó- ricos y de las estrategias de intervención. La evolución a lo largo del siglo pasado de las distintas funciones que competían al psicólogo clínico ha sido muy irregular. La implantación de la psicología clínica (y particularmente de sus funciones terapéuticas) ha suscitado notables ri- validades con los profesionales de la medicina dedicados a la psicopatología, y de hecho el grave problema de la relación entre ambos grupos de profesionales constituye un aspecto básico en la consecución del rol propio para el psicólogo clí- nico. Este hecho es fácil de entender si aceptamos que si bien la psiquiatría es una especialidad de la medicina, su objeto de estudio tiene muchas co- incidencias con el de la psicología anormal y la psicología clínica. Ciertamente, la psicología clínica no disponía en la primera mitad del siglo XX de alternativa a 32 / Intervención psicológica. Estrategias, técnicas y tratamientos © Ediciones Pirámide los modelos psicopatológicos imperantes (los in- tentos desde la psicología experimental eran to- davía incompletos y muy limitados) ni tampoco de técnicas de tratamiento científicas y de com- probada utilidad que hiciesen posible invertir la proporción de tiempo dedicado al diagnóstico y al tratamiento. Por el contrario, en esta época hay un deslumbramiento por la efectividad de los test psicológicos, encontrando en esta parcela el lugar menos conflictivo para la psicología aplica- da en el ámbito de la psicopatología. Se acrecen- tó la convicción de que el psicólogo, por su pre- paración, podría contribuir de forma importante, dentro de las funciones de investigación y diag- nóstico, a los campos de la personalidad, la psi- copatología y la evaluación, y se aceptó la inclu- sión de este nuevo profesional en el campo de la salud mental, pero con competencias muy limita- das en el ámbito del tratamiento. Fue la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), con sus necesidades de selección y los problemas humanos que desencadenó, la que prácticamente revolucionó el entrenamiento y el ámbito del tra- bajo clínico dentro de la psicología. Tras la con- tienda, el número de personas que reclaman aten- ción especializada por problemas de salud mental crece, y se hace acuciante la necesidad de perso- nal cualificado que las atienda. El personal médi- co disponible era muy limitado, recibiendo en- tonces un gran impulso el papel del psicólogo clínico al ser incluido como profesional sanitario en los hospitales militares. En este momento se reclaman técnicas de tratamiento breves y efica- ces, lo que exige una revisión de las teorías y téc- nicas hasta entonces vigentes y una evaluación contrastada empíricamente de ellas. Muchos psi- cólogos hubieron de dirigir su atención a los nue- vos enfoques que se estaban gestando desde la psicología experimental del aprendizaje, que pro- metían no sólo una mayor eficacia sino, sobre todo, un control riguroso de la misma y de la re- lación entre los resultados de las diferentes técni- cas de la terapia y los principios teóricos que las sustentaban. Los postulados psicoanalíticos (modelo psico- dinámico), que no fueron aceptados por igual entre todos los psicólogos, en este momento son cuestionados de forma generalizada al hacerse patente su escaso valor terapéutico. También emerge de forma enérgica la insatisfacción con la aproximación del psiquiatra ortodoxo, basada en el modelo médico-biológico-tradicional, en parte por la comprensión de lo inapropiado de estos modelos para entender la conducta anormal, en parte por la falta de técnicas terapéuticas adecua- das y por el papel asignado al psicólogo clínico. Muchos de los trabajos de esta época se diri- gieron a poner de manifiesto el descontento con la situación imperante en el área de la denomina- da «salud mental». Se criticó de las prácticas tera- péuticas tradicionales su incapacidad para pro- porcionar una solución significativa a los pacientes con problemas psicopatológicos. Se cuestionó también la utilidad del diagnósticopsiquiátrico tradicional (basado en el sistema de clasificación de la Asociación Americana de Psiquiatría y de la Organización Mundial de la Salud, de contenido fundamentalmente psicodinámico) al carecer de validez y fiabilidad. Igualmente, se pusieron de manifiesto las insuficiencias de los modelos teóri- cos explicativos subyacentes que pretendían con- ceptualizar y dar cuenta de las conductas anor- males. Desde la psicología se empieza a considerar cada vez con más fuerza la búsqueda de una al- ternativa genuinamente psicológica. Así, la tera- pia de conducta surge en la década de los cincuen- ta del siglo pasado, apoyada directamente en conceptos y principios estrictamente psicológicos derivados de modelos e investigaciones experi- mentales, utilizando técnicas que parecían satis- facer, por encima de todo, los requisitos de efica- cia y aplicabilidad ante los diferentes problemas clínicos; de este modo, se vislumbra como una auténtica alternativa desde la psicología cientí- fica, tanto como modelo explicativo (modelo conductual-cognitivo) como en el ámbito de los métodos de intervención terapéutica (terapia/mo- dificación de conducta o terapia conductual-cogni- tiva), desempeñando un papel de primer orden en la clarificación del rol del psicólogo clínico y de la salud . Perspectiva histórica de la evaluación y el tratamiento psicológico / 33 © Ediciones Pirámide En la conformación del modelo conductual- cognitivo se pueden constatar distintas etapas: 1. Un primer período de gestación (antece- dentes) en el que incluimos el desarrollo de distintas formulaciones teóricas prove- nientes de la psicología experimental del aprendizaje y su aplicación a la compren- sión y tratamiento de las anormalidades de comportamiento. Este período com- prendería desde 1899 hasta 1950. 2. Un segundo período de inicio, que se pro- duce tras la Segunda Guerra Mundial con los trabajos de J. Wolpe, B. F. Skinner y H. J. Eysenck, los cuales se enriquecerán en la década de los sesenta con nuevas e importantes aportaciones hasta la confor- mación del nuevo modelo conductual-cog- nitivo de conducta anormal. Este período comprendería desde 1951 hasta 1970. 3. Un tercer período de desarrollo (consoli- dación y expansión) que abarcaría desde 1971 hasta nuestros días. En éste destaca el impulso al modelo que supusieron las técnicas derivadas de una orientación cog- nitiva facilitando una perspectiva más am- plia del comportamiento y la expansión que experimenta. 1.2. GESTACIÓN, INICIO Y CONSOLIDACIÓN DEL MODELO CONDUCTUAL-COGNITIVO 1.2.1. Gestación. Fuentes o antecedentes de la terapia/modificación de conducta (1899-1950) Cuando a finales del siglo XIX la psicología fue capaz de abandonar las especulaciones filosóficas en favor de la metodología científico-experimen- tal, el terreno estaba preparado para que el mo- delo conductual fuese gestándose (1899 es el año en que I. P. Pavlov inicia sus trabajos experimen- tales). Kazdin (1991) afirma que al rastrear los fundamentos de la terapia/modificación de con- ducta contemporánea se identifican dos caracte- rísticas centrales: i) el empleo de métodos empíri- cos (objetivos) de investigación y ii) la confianza en la psicología del aprendizaje como punto de arranque para el tratamiento. El propio Kazdin (1991) establece tres fuentes principales: 1. El condicionamiento y la reflexología en Rusia Las investigaciones sobre los reflejos condicio- nados de fisiólogos rusos como I. M. Sechenov (1829-1905), I. P. Pavlov (1849-1936) y V. M. Bechterev (1857-1927) les llevaron al estudio de temas estrechamente relacionados con el ámbito de la psicología utilizando métodos objetivos de investigación. I. M. Sechenov (1978), en su libro Los refle- jos cerebrales, publicado en 1863, expone que el estudio de los reflejos era el punto de conver- gencia entre la psicología y la fisiología. Planteó la defensa de dicho estudio como una forma de abordar los problemas de la psicología al consi- derar que los reflejos complejos se adquieren por medio del aprendizaje y que su estudio pro- porcionaba las bases para comprender la con- ducta. Consideraba que todos los fenómenos psíquicos eran en último término resultado de estímulos externos y tenían naturaleza refleja. Además defendió la aplicación de los métodos de investigación objetivos de la fisiología a los problemas de la psicología frente a los métodos subjetivos e introspectivos. Por su parte, Pavlov, al igual que Sechenov, defendió el objetivismo en la investigación. En 1899 inició sus experi- mentos sobre los reflejos condicionados en pe- rros tras comprobar casualmente en el marco de sus investigaciones sobre la digestión el fenóme- no que él denominó «secreción psíquica» (la se- creción de los jugos gástricos del perro no sólo se producía cuando empezaba a comer, sino que la presencia de la comida e incluso la sola pre- sencia del investigador provocaban esa secre- ción). Si se consideraba que la respuesta refleja era innata e inmodificable, sus investigaciones demostrarían que se podían emitir ciertas res- 34 / Intervención psicológica. Estrategias, técnicas y tratamientos © Ediciones Pirámide puestas por asociación ante estímulos para los que no estaba programado genéticamente y que anteriormente no la producían; así, por condi- cionamiento, se creaban o aprendían nuevos re- flejos. Sus estudios demostraron la importancia del aprendizaje en la explicación de la conducta animal, proporcionando por medio del condicio- namiento clásico un intento de aproximación ob- jetiva y con base en experimentos controlados a la comprensión de la conducta, a sus anormali- dades y a la posibilidad, como se vería poste- riormente, de sustentar en dicha conceptualiza- ción ciertos tratamientos psicológicos. En la siguiente dirección de internet pueden observar una reproducción del experimento de Pavlov: http://www.youtube.com/results?search_query=c ondicionamiento+clasico+%28experimento+de +pavlov%29&oq=. El trabajo N. R. Shenger-Krestovnikova, dis- cípula de Pavlov, sobre neurosis inducidas experi- mentalmente en animales mostraba la importan- cia del aprendizaje en la adquisición de respuestas emocionales. Pero fue V. M. Bechterev quien en sus estudios sobre «reflejos asociativos» (reflejos condicionados), primero con perros y posterior- mente con humanos, desarrolló la idea de que el condicionamiento podría explicar una gran va- riedad de conductas humanas y que proporcio- naba una base objetiva para la psicología (re- flexología), mostrando un gran interés por la psicología aplicada, especialmente por la conduc- ta anormal. 2. El conductismo Los trabajos sobre el condicionamiento y la reflexología en Rusia eran parte de un movimien- to más universal que quería ver en la ciencia el instrumento para comprender el mundo. J. B. Watson (1878-1958) fue el responsable de la cristalización del conductismo en Estados Uni- dos. El conductismo pretendía un análisis cientí- fico de la conducta, perseguía hacer de la psico- logía una ciencia positiva. Inicialmente Watson se interesó por el estudio del comportamiento animal, que había demostrado en Rusia que po- dían utilizar los métodos objetivos característicos de la fisiología. Posteriormente consideró que el estudio de la psicología humana podía sacar pro- vecho de la objetividad que se había logrado en los estudios con animales. Mantenía que la psico- logía debía ser puramente objetiva y experimen- tal. Frente a la conciencia y la introspección, con- sideró que el objeto y el método de la psicología científica debían ser la conducta manifiesta y la experimentación, respectivamente. La psicología se definía como la ciencia de la conducta (la con- ducta manifiesta). Su posicionamiento era radi- calmente ambientalista, considerando fundamen- tal la influencia del aprendizaje y del ambiente. Para Watson las personas y los animales apren- dían a responder frente a situaciones nuevas me- diante reflejos elicitados ante estímulos neutrales que adquirían la capacidad de provocar respues-tas (psicología E-R); las conductas complejas (por ejemplo, las reacciones emocionales) estaban integradas por combinaciones de reflejos condi- cionados (aprendidos). 3. La psicología del aprendizaje Los trabajos sobre el condicionamiento en Rusia y América pusieron de relieve la adaptabi- lidad y modificabilidad de la conducta, estable- ciéndose el aprendizaje como un tema central de la psicología. En Estados Unidos, se elaboraron distintas teorías del aprendizaje de las que luego se derivaron importantes técnicas específicas de tratamiento psicológico. E. L. Thorndike (1874-1949) fue pionero en la investigación de laboratorio del comportamiento animal; empleó la «caja problema» para estudiar la forma en que los animales (gatos) aprendían a escapar para conseguir la comida. E. R. Guthrie (1886-1959) interpretaba el aprendizaje en tér- minos de contigüidad, y consideraba que el úni- co requisito para que se produjese aprendizaje era el emparejamiento repetido de un estímulo con una respuesta (condicionamiento por contigüi- dad). O. H. Mowrer (1907-1982) formuló un mo- delo sobre el miedo/ansiedad en términos de estí- mulos, respuestas y refuerzos. Perspectiva histórica de la evaluación y el tratamiento psicológico / 35 © Ediciones Pirámide En 1920 J. B. Watson y R. Rayner demostra- ron la posibilidad de inducir fobias por métodos pavlovianos. La demostración de la adquisición se hizo presentando a un niño de once meses, conocido como Albert, una rata blanca de labo- ratorio con la que dos meses antes el niño había jugado manipulándola sin mostrar reacción al- guna de miedo. En la dirección de internet: http:/ /www.youtube.com/watch?v=IteGZ g2fWuY pueden encontrar un vídeo en el que se presenta el experimento realizado con el peque- ño Albert. El nuevo enfoque psicológico desplazó su ob- jeto de estudio a la conducta observable y a las relaciones de ésta con el medio a través de los distintos procesos de aprendizaje, y su método de estudio fue el científico experimental propio de todas las ciencias naturales. Siguiendo a Pelecha- no (1978), podemos enumerar tres características de este período de gestación: 1. El modelo de aprendizaje utilizado es el pavloviano. 2. Las aplicaciones que se realizan son fun- damentalmente educativas y con niños. 3. Los trabajos realizados no se ocupan de llevar a cabo análisis sistemáticos sobre las relaciones funcionales que existen en- tre variables (puede completarse esta in- formación en Olivares, Macià, Olivares- Olivares y Rosa-Alcázar, 2012). 1.2.2. Inicio de la terapia/modificación de conducta (1951-1970) Situamos el surgimiento del nuevo modelo conductual en la década de los cincuenta del si- glo pasado. Como hemos comentado, una de las desgraciadas secuelas de la Segunda Guerra Mundial fue el incremento del número de perso- nas que requerían atención especializada por pro- blemas psicológicos. Esto supuso la incorpora- ción a la práctica clínica de numerosos psicólogos con una formación y orientación curriculares científicas y experimentales que rechazaban tanto la aproximación psiquiátrica ortodoxa como los postulados psicoanalíticos. Ante la necesidad de disponer de tratamientos psicológicos eficaces y eficientes en términos de tiempo, muchos de estos psicólogos intentaron aplicar en la clínica los pa- radigmas y conocimientos del nuevo modelo. Como señala Labrador (2008), la importante de- manda de ayuda profesional, la incapacidad de los tratamientos tradicionales para cubrirla y dis- poner de procedimientos de intervención alterna- tivos, basados en desarrollos teóricos sólidos y con el adecuado apoyo metodológico, provoca- ron el surgimiento de la modificación o terapia de conducta. 1.2.2.1. Década de 1950 Tres autores, partiendo de opciones teóricas diferentes, aun perteneciendo a un tronco común, el del aprendizaje, imprimirían una notable in- fluencia con sus trabajos y la publicación de sus obras. En 1952 H. J. Eysenck publica el texto de su conferencia: The effects of psychotherapy: An evaluation. En 1953 aparece la obra de B. F. Skin- ner Science and Human Behavior, que daría lugar a la aplicación de técnicas de modificación de conducta basadas en el condicionamiento ope- rante (técnicas operantes). En 1958 aparece el li- bro de J. Wolpe Psychotherapy by reciprocal inhi- bition, en el que, junto a explicaciones teóricas sobre las neurosis humanas, en términos pavlo- vianos y hullianos, se delimitan técnicas específi- cas de tratamiento (desensibilización sistemática y entrenamiento asertivo) encaminadas a ocupar- se de los trastornos de ansiedad. El nuevo modelo psicológico sobre la conduc- ta anormal y su tratamiento no era en sus inicios uniforme, si bien compartía su oposición a los modelos tradicionales, el interés por fundamen- tar sus conceptualizaciones en el aprendizaje, la defensa en la utilización de una metodología científica de investigación y la demostración em- pírica de la eficacia de sus técnicas. Sin embargo, se podían apreciar diferencias en los distintos grupos de investigación (y profesionales) que en 36 / Intervención psicológica. Estrategias, técnicas y tratamientos © Ediciones Pirámide varios países estaban iniciando el trabajo en este campo. En sus inicios se aprecian dos enfoques: a) El análisis aplicado de la conducta (enfo- que operante) en Estados Unidos. b) La orientación mediacional (escuela suda- fricana e inglesa). El enfoque operante o del análisis conductual aplicado se basa en los trabajos desarrollados por Skinner a partir de los años 1930-1940 en los que estableció los «principios básicos del condiciona- miento operante» (refuerzo, castigo, extinción...), principios de los que se derivaron diversas técni- cas de modificación de conducta. El análisis con- ductual aplicado puede definirse como la aplica- ción del análisis experimental de la conducta (enfoque conceptual y metodológico de la inves- tigación operante) a los problemas de importan- cia social. El enfoque neoconductista mediacional tiene su fundamento teórico en los trabajos de I. P. Pa- vlov, E. R. Guthrie, C. L. Hull y O. H. Mowrer. Pone el énfasis en el emparejamiento estímulo- respuesta, adhiriéndose al paradigma del con- dicionamiento clásico, y destaca por la impor- tancia concedida a determinados constructos hipotéticos, particularmente el miedo o la ansie- dad, como variables intervinientes y mediaciona- les entre el estímulo y la respuesta, necesarias para explicar, junto a los demás principios del condicionamiento clásico, la aparición, el mante- nimiento y la eliminación de los trastornos de tipo neurótico. Se supone que dichos trastornos son producto de la ansiedad y que ésta, aunque sea una respuesta encubierta, se ajusta a los mismos principios del aprendizaje que cualquier otra conducta. A diferencia del análisis conductual aplicado, el cual se centra en fenómenos pública- mente observables, el enfoque neoconductista mediacional destaca las variables mediacionales en la explicación y modificación de la conducta humana, pero siempre definidas operacionalmen- te en términos de secuencias de estímulos y res- puestas. Así, es importante señalar que aunque en las intervenciones se utilicen procesos simbó- licos, como pueden ser las imágenes, estas activi- dades internas intentan definirse siempre en tér- minos estrictos de E y R, usualmente una cadena de reacciones E-R, sin introducir formulaciones cognitivas de estos constructos mediacionales. Este énfasis en los procesos de condicionamiento para explicar el comportamiento humano, frente a los procesos cognitivos, ha sido relacionado por algunos autores con el hecho de que los princi- pios del condicionamiento hayan sido elaborados en base a la experimentación animal en el labora- torio. 1.2.2.2. Década de 1960 Son muchas las aportaciones teóricas y aplica- das que en los años sesenta van enriqueciendo y consolidando el nuevo modelo. Homme (1965) y Cautela (1967) introducen el estudio de los pro- cesos encubiertos. Staats y Staats (1963), desde la psicología
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