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Sindromes compresivos del miembro superior 1033 Posteriormente, el nervio cubital entra en el túnel cubital, anillo óseo-fibroso formado por la epitróclea (anterior y medial) y el olecranon (posterior y late- ral); su techo está compuesto por la aponeurosis, que une los dos tendones proximales del músculo flexor cubital del carpo o ligamento de Osborne. El nervio pasa entre las inserciones cubital y humeral del músculo flexor cubital del carpo, y se ubica entre este y el músculo flexor profundo de los dedos. Fuer- zas dinámicas de tracción y compresión que ocurren durante la flexión del codo pueden afectar al nervio en el túnel cubital. Además de estas fuerzas diná- micas, el nervio puede ser comprimido por lesiones ocupantes de espacio, tales como músculos anóma- los (p. ej., anconeus epitroclearis) o por sinovitis o artrosis que afectan el piso del túnel. En resumen, las zonas de compresión del nervio cubital a nivel del codo son las siguientes: a. La arcada de Struthers, inserción inconstan- te del tríceps, que puede estrechar el orificio osteofibroso de entrada del nervio en el com- partimiento posterior del brazo por detrás del tabique intermuscular. b. El canal cubital, situado entre el epicóndilo me- dial y el olécranon c. Entre las inserciones humeral y cubital del mús- culo cubital anterior, que forman una fascia apo- neurótica. El tratamiento conservador consiste en evitar las actividades y posiciones que causan los síntomas. La flexión extrema del codo sería uno de los factores que provocan la enfermedad, al estrechar el espacio del canal epitrocleo-olecraneano. Las coderas son útiles para evitar que el codo se hiperflexione, así como la inducción al cambio de actividades nocivas. De esta manera, quienes trabajen manejando un vehí- culo durante muchas horas, tendrían que colocar el asiento lejos del volante para evitar la flexión de la articulación, y quienes trabajan muchas horas ante una pantalla de una computadora, deberían alejar el teclado lo más posible por la misma causa. El tra- tamiento quirúrgico estará indicado cuando fracasa todo lo anterior y predominan los síntomas sensitivos, pero en los casos en que hay debilidad manifiesta de la musculatura intrínseca inervada por el cubital, está aceptada la conducta quirúrgica de inicio. Existen diferentes técnicas quirúrgicas para la re- solución de esta patología. La descompresión in situ consiste en liberar los diferentes sitios potenciales de compresión mencionados. La transposición anterior Figura 99.9: Arriba: sitios habituales de compresión del nervio cubital en el codo. Abajo: Nuevos sitios de compresión posibles creados en casos de transposición cubital quirúrgica técnicamente defectuosa Figura 99.8: Garra cubital. a: Vista palmar. Con la mano abierta, hay hiperextensión de las articulaciones metacarpo- falángicas en el 4º y el 5º dedos, con flexión parcial de ambas articulaciones interfalángicas. Esto ocurre por el déficit combinado de la función del tercer y cuarto lumbricales, junto a parálisis de los interóseos y del flexor del dedo V. El extensor común de los dedos, inervado por el nervio radial, no encuentra oposición por lo que los dedos se extienden distalmente. b: Vista dorsal. Atrofia del aductor del pulgar a b
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