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GRILLI, M Riqueza y Solidaridad en la obra de Lucas pdf

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RIQUEZA
Y SOLIDARIDAD
EN LA OBRA
DE LUCAS
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MASSIMO GRILLI estudió en Roma, Franc-
fort y Jerusalén y obtuvo el doctorado en Ciencias
Bíblicas en el Pontificio Instituto Bíblico de
Roma. Actualmente enseña Nuevo Testamento
en la Universidad Gregoriana. Su investigación
se centra sobre todo en el campo de los sinópticos,
con una particular atención a la perspectiva
pragmática aplicada a los textos bíblicos. Entre
sus obras cabe destacar Lectura pragmalingüística
de la Biblia (Estella 1999) e Il pathos della Parola
(Milán 2000).
DANIEL LANDGRAVE GÁNDARA estudió
Ciencias Bíblicas en el Pontificio Instituto Bíblico
de Roma y obtuvo el doctorado en Teología
Bíblica en la Universidad Gregoriana. Actualmen-
te imparte clases en la Universidad Pontificia de
México. Ha publicado numerosos artículos y
libros; el último de éstos es Vidas y amores
pastorales. Introducción y claves de lectura a la
Primera Carta de san Pablo a los tesalonicenses.
CÓRDULA LANGNER estudió Teología y
Germanística en Francfort y obtuvo en 2003 el
doctorado en Teología Bíblica. Después, impartió
clases en la Universidad Iberoamericana (México)
y en la Universidad Pontificia de México. Investiga
sobre la perspectiva pragmática y la función
comunicativa del lenguaje respecto a los textos
bíblicos (sinópticos y Apocalipsis). Ha publicado
varios artículos en la revista bíblica Qol
(UPM/CEPB México) y en la colección Estudios
Bíblicos Mexicanos.
Uno de los temas más importantes en la
obra de Lucas es el de la «pobreza y riqueza».
En este libro, autores de América Latina, Asia y
Europa investigan desde la perspectiva pragma-
lingüística sobre los textos centrales del evangelio
de Lucas y de los Hechos de los Apóstoles. Sus
artículos demuestran que Lucas desarrolló una
perspectiva muy diferenciada de la riqueza y la
pobreza: ni globaliza, ni condena, sino que más
bien propone unos modelos concretos de acción
para que cada uno pueda usar solidariamente
los propios bienes.
No cabe duda de que estos textos pueden
iluminar también la situación de la sociedad
actual, en la que la vida de la mayor parte de los
seres humanos está marcada por una escandalosa
inseguridad existencial. Los modelos de acción
que presenta Lucas ofrecen muchas posibilidades
para ser aplicados y actualizados en nuestras
situaciones de hoy.
COLECCIÓN «EVANGELIO Y CULTURA»
• Comentarios
1. Fritzleo Lentzen-Deis
Comentario al evangelio de Marcos
2. Sjef van Tilborg
Comentario al evangelio de Juan
• Monografías
1. C. Mora Paz - M. Grilli - R. Dillmann
Lectura pragmalingüística de la Biblia.
Teoría y aplicación
2. Massimo Grilli - Detlev Dormeyer
Palabra de Dios en lenguaje humano.
Lectura de Mt 18 y Hch 1-3 a partir
de su instancia comunicativa
3. M. Grilli - D. Landgrave Gándara - C. Langner
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas
editorial verbo divino
RIQUEZA
Y SOLIDARIDAD
EN LA OBRA
DE LUCAS
M. Grilli - D. Landgrave Gándara
C. Langner (eds.)
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RIQUEZA Y SOLIDARIDAD 
EN LA OBRA DE LUCAS
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 1
Massimo Grilli
D. Landgrave Gándara
Córdula Langner
(eds.)
RIQUEZA Y
SOLIDARIDAD EN LA
OBRA DE LUCAS
editorial verbo divino
Avda. Pamplona, 41
31200 Estella (Navarra)
2006
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 3
 
 
 
 
 
 
 
 
Editorial Verbo Divino 
Avenida de Pamplona, 41 
31200 Estella (Navarra), España 
Tfno: 948 55 65 11 
Fax: 948 55 45 06 
www.verbodivino.es 
evd@verbodivino.es 
 
 
 
Cubierta: 
Ignacio Migoya 
 
Córdula Langner 
Daniel Landgrave Gándara 
Massimo Grilli 
(eds.) 
 
© Evangelio y Cultura, 2005 
© Editorial Verbo Divino, 2005 
© De la presente edición: Verbo Divino, 2012 
 
ISBN pdf: 978-84-9945-569-3 
ISBN versión impresa: 978-84-8169-146-7 
 
 
Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o 
transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autorización de 
sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro 
Español de Derechos Reprográficos) si necesita reproducir algún fragmento 
de esta obra (www.conlicencia.com; 91 702 19 70 / 93 272 04 47). 
www.verbodivino.es
mailto: evd@verbodivino.es
www.conlicencia.com
Introducción
Massimo Grilli
En los últimos años ha aumentado el interés de los teólo-
gos por el tema «riqueza y pobreza en la obra de Lucas». De
nuevo, dos cuidadosos estudios, en lengua alemana1, ponen
de relieve un argumento que, según la opinión unánime, está
entre los más importantes de la teología lucana2.
1 PETRACCA, V., Gott oder das Geld. Die Besitzethik des Lukas (TANZ 39;
Tubinga 2003); MINESHIGE, K., Besitzverzicht und Almosen bei Lukas (WUNT
2/163; Tubinga 2003). Cf. también los artículos y libros recién publicados:
PELLEGRINI, S., «Ein “ungegreuer” oivkono,moj (Lk 16,1-9)?», en: BZ 2 (2004)
161-178; BÖTTRICH, CH., «Ideal oder Zeichen? Besitzverzicht bei Lukas am
Beispiel der “Ausrüstungsregel”», en: New Testament Studies 49 (2003) 372-
392; PHILLIPS, TH., E., «Reading recent readings of issues of wealth and po-
verty in Luke and Acts», en: Currents in Biblical Research 1.2 (2003) 231-269;
MÜLLER, M., «“...damit der Mammon Freu[n]de macht.” Eine Annäherung an
die Parabel vom cleveren Verwalter in Lk 16», en: KÜCHLER, M./REINL, P.
(ed.), Randfiguren in der Mitte. FS H.-J. Venetz (Friburgo 2003) 193-204; GAL-
VAO, A. M., «O rico e o pobre. Estudo da parábola do rico insensível e do po-
bre Lázaro (Lc 16,19-31)», en: Revista eclesiástica brasileira 62,245 (2002) 52-
77; REYES, C. C., «The poor and rich in Luke» en: LOCKER, M. E. (ed.), Led by
the spirit. In honor of H. Schneider SJ (Loyola school of Theology 2002) 141-
154; REGALADO, F. O., «The Jewish background of the Parable of the Rich
Man and Lazarus», en: Asia journal of theology 16,2 (2002) 341-348; RINGE, S.
H., «Luke’s Gospel: “Good news to the poor” for the non-poor», en: HOWARD-
BROOK, W./RINGE, S. H. (ed.), The New Testament. Introducing the way of dis-
cipleship (Maryknoll/Nueva York 2002) 62-79; GRIMSHAW, J., «Luke’s market
exchange district: Decentering Luke’s rich urban center», en: Semeia 86
(1999) 33-51; HELD, H. J., Den Reichen wird das Evangelium gepredigt. Die so-
zialen Zumutungen des Glaubens im Lukasevangelium und in der Apostelges-
chichte (Neukirchen-Vluyn 1997); GERARD, J.-P., «Les riches dans la commu-
nauté lucanienne», en: Ephemerides theologicae Lovanienses 71 (1995),
71-106. Véase también la lista de bibliografía al final de este libro.
2 En relación con esto es importante señalar otros investigadores que, en
los años 1960-1970, llamaron a Lucas «el evangelista de los pobres»: DEGEN-
HARDT, H.-J., Lukas, Evangelist der Armen. Besitz und Besitzverzicht in den
lukanischen Schriften. Eine traditions und redaktionsgeschichtliche Untersu-
chung (Stuttgart 1965). Cf. también: KAMPHAUS, F./LENTZEN-DEIS, F./SCHWARZ,
L./ZAUZICH, CH., ...und machten einander reich. Beiträge zur Arm-Reich-Pro-
blematik reflektiert am Lukasevangelium (Annweiler/Essen 1988).
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 5
Nuestro trabajo aparece tras unos años de discusión e
investigación profunda y refleja, en esencia, la estructura de
los dos libros recién publicados, pero se distingue de ellos en
dos puntos importantes. 
En primer lugar, se trata sobre todo de una investigación
«sinfónica», porque une y confronta el fruto de las indaga-
ciones y los diversos enfoques de estudiosos de distintos paí-
ses y de diferentes zonas culturales, políticas y económicas.
La diferencia es, con frecuencia, la fuente de la extrañeza
entre hermanos (cf. Caín y Abel), pero es también una pecu-
liaridad esencial tanto para las relaciones humanas como
para toda investigación hermenéutica3.
En segundo lugar, nuestro estudio se distingue de los
antes mencionados por su característica perspectiva metódi-
ca. En el análisis de los diversos textos bíblicos, todos los co-
laboradoresde este libro parten de la misma base: la pers-
pectiva pragmática, que lee un texto no solamente para
informarse sobre su contenido, sino también para enterarse y
experimentar qué es lo que el texto causa y provoca y cómo lo
hace.
En los últimos años ha aumentado bastante la literatura
sobre la pragmática aplicada a los textos bíblicos4. Esta prag-
mática bíblica quiere mostrar, sobre todo, que la verdad en la
que se basa –también a nivel lingüístico– el texto bíblico no es
solamente una verdad conceptual e intelectual, sino que es
más bien una verdad efectiva, enérgica y eficaz. Con otras pa-
labras: lo que es acertado a nivel humano –es decir, «que no
es posible no-comunicar», sino que más bien comunicamos
siempre, no solamente por la transmisión de informaciones,
sino también por el establecimiento de relaciones de libertad,
«por crear y mantener la solidaridad social», por el placer «de
aprender a conocer la identidad propia y la otra, participan-
do en la vida común»5– es tanto más acertado a nivel de la fe.
En este sentido, la perspectiva pragmática favorece que se
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas6
3 Cf. GRILLI, M., «Evento comunicativo e interpretazione di un testo bi-
blico», en: Greg 83 (2002) 665-678, e íd., «Ciencias de la comunicación e in-
terpretación de un texto bíblico», en: GRILLI, M./DORMEYER, D., Palabra de
Dios en lenguaje humano (Estella 2004) 9-33, esp. 9-10.
4 Los dos volúmenes ya publicados en esta colección son: MORA PAZ,
C./GRILLI, M./DILLMANN, R., Lectura Pragmalingüística de la Biblia. Teoría y
aplicación (Estella 1999) y: GRILLI, M./DORMEYER, D., Palabra de Dios en len-
guaje humano (Estella 2004). Se encuentran más títulos en la página web:
www.unigre.it/pragmatica/homepage.htm.
5 Cf. VOLLI, U., Manuale di Semiotica (Bari 22003) 202.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 6
tengan en cuenta más adecuada e íntegramente las acciones
y relaciones lingüísticas (los actos comunicativos) de los tex-
tos bíblicos; además, se dedica a desenmascarar tanto el «bla
bla» que se produce solamente por la mera locuacidad (flatus
vocis, buenas palabras), sin comprometerse, como el silencio
en vez de la palabra necesaria y debida.
Aquí, el planteamiento pragmático se encuentra con el
tema de la pobreza y se une con él en una relación que tiene
consecuencias dramáticas: el hecho de que hay pobres y de
que la pobreza significa que la Palabra de Dios no ha tenido
incidencia en la Iglesia y en la sociedad (cf. Dt 15,4).
Este escándalo de las diversas formas –antiguas y nuevas–
de la pobreza es el motivo inicial de nuestro interés en este
tema candente y delicado. En efecto, al ver estas situaciones
de pobreza y sus condiciones, es imposible callarse. Aproxi-
madamente, tres mil millones de personas tienen menos de
dos dólares al día para vivir; como la población del mundo
son seis mil millones de seres humanos, resulta que la mitad
de ellos son pobres. A su vez, mil quinientos millones de per-
sonas no tienen agua potable, y mil millones no saben leer ni
escribir. En los últimos diez años –a pesar de todas las
promesas y esfuerzos–, la cantidad de pobres no ha variado
sustancialmente, y el Banco Mundial ha advertido que es casi
imposible reducir la pobreza ante el creciente desequilibrio
existente entre ricos y pobres. En Bolivia, que es uno de los
países más afectados, «el producto interior bruto (PIB) per
cápita bajó de 938 dólares, en el año 2001, a 883 dólares, en
el 2002, y más de la mitad de la población vive por debajo del
umbral de pobreza»6. Para toda América Latina, los primeros
años de este siglo han sido muy negativos: «La región no
resistió a la desaceleración coyuntural, y su crecimiento, que
ascendió en el año 2000 al 4%, bajó en 2001 al 0,6%, y fue
negativo en 2002 (–0,6%)7». 
No fue mejor en África. En este continente, donde más del
60% de la población es menor de 20 años, «desde los años
ochenta, la economía creaba muy pocos puestos de trabajo y
hacía retroceder a los habitantes más jóvenes, que –si no pue-
den sobrevivir mediante un trabajo ilegal– se reparten entre
los grupos marginales de la sociedad, donde son «captados»
Introducción 7
6 L’état du monde 2004 (París 2003), empleo la edición italiana: Stato del
mondo 2004. Annuario economico e geopolitico mondiale, 407.
7 Stato del mondo 2004, 61.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 7
fácilmente por la violencia, y eso cuando un líder político no
les hace soldados o combatientes»8. Las enfermedades de los
pobres –como la malaria y la tuberculosis– son curables o hay
medidas preventivas frente a ellas, pero sólo menos del 10%
de los gastos de investigación se invierten en las medidas
necesarias para luchar contra esas enfermedades.
El reparto de la riqueza –sobre todo en África y América
Latina– está en poder de los latifundistas y de las asociacio-
nes y compañías extranjeras, y algunas capas de la población
–por ejemplo, los indígenas– «ocupan sistemáticamente los
escalafones más bajos de la escala social»9. Las medidas de
auxilio de los países ricos no sólo son ineficientes, sino que
también están sujetas a la cláusula de que las ayudas «ofreci-
das» deben emplearse para comprar únicamente los produc-
tos del país donador. Más alarmante que la dependencia de
unos países respecto de otros es el hecho de que «las potencias
dominantes no tienen en cuenta a los otros países que depen-
den de los primeros dependientes. Es decir, no cuentan con
aquellos países (dependientes de los primeros dependientes):
no aparecen ni en sus cálculos, ni en sus cuentas, ni en sus
proyectos de futuro, ni en sus programas económicos, políticos
y culturales. Esto es lo que ha sucedido con la mayor parte de
los países africanos»10.
Se podría continuar con esto hasta el infinito, pero las
observaciones hechas sirven para destacar el dramático de-
sastre. ¿Qué misión tenemos, como cristianos, en esta situa-
ción? La inculpación es necesaria, y ofrecer ayuda, mucho
más. Pero más importante aún es conseguir una nueva con-
ciencia cristiana social. Las colaboraciones que publicamos
en el presente libro quieren ser entendidas en este sentido.
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas8
8 Stato del mondo 2004, 90.
9 Stato del mondo 2004, 363.
10 CASTILLO, J. M., Los pobres y la teología. ¿Qué queda de la teología de la
liberación? (Bilbao 1998); empleo la edición italiana: I poveri e la teologia, 334.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 8
El relato lucano de la infancia como
actualización y contextualización de 
la piedad prejudía de los pobres y 
su significado pragmático
Rainer Dillmann
1. Punto de partida y cuestionamiento
1.1. Problemática
«Lucas continúa desarrollando el interés de Q en los pobres y
enfatiza en su Evangelio la preocupación de Jesús por los po-
bres»1.
Esta constatación de la Theologischen Realenzyklopädie
encuentra en la exégesis una amplia aprobación. El Evangelio
de Lucas pasa por ser el Evangelio de los pobres. Este aspec-
to es perceptible en el relato del Evangelio de la infancia. Así
lo señala Lentzen-Deis:
«Ya en su presentación en el templo, el pobre Jesús, hijo de pa-
dres pobres, es reconocido como Mesías por los representantes
de la teología judía de los pobres, y por eso se da gracias a Dios.
Uno puede añadir que en el relato –artísticamente compuesto–
del Evangelio de la infancia de Lucas, no sólo en el Magníficat,
sino también en los demás himnos, resuenan los motivos de la
teología de la pobreza del Antiguo Testamento. Para Lucas, Je-
sús, el Cristo e Hijo de Dios, es claramente desde el principio el
Mesías de los pobres»2.
Las líneas mencionadas pueden alargarse, sobre todo,
porque Lc 1,5-2,52, en su configuración redaccional final,
1 MICHEL, D., «Armut II. Altes Testament», en: TRE IV, 78.
2 LENTZEN-DEIS, F., «Arm und reich aus der Sicht des Evangelisten Lu-
kas», en: KAMPHAUS, F. (y otros ed.), ...und machen einander reich. Beiträge
zur Arm-Reichproblematik reflektiert am Lukasevangelium (Annweiler/Essen
1989) 17-68,aquí: 27-28.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 9
pasa por ser una composición lucana3. En primer lugar hay
que preguntarse si también la estructura sintáctica del relato
de la infancia permite concluir esa opción teológica de Lucas.
Hay que indagar a nivel semántico en la definición de pobre
y captar la dimensión de la teología de los pobres en las na-
rraciones del relato de la infancia. El tercer paso consiste en
comprender los himnos. Éstos descubren, a través de la acción
que transcurre en la tierra, la plenitud de sentido cósmica4. Por
lo tanto, la actualización de la teología de los pobres, fruto de
la composición en las narraciones, debe encontrar su confir-
mación en los himnos.
1.2. Piedad de los pobres prejudía
La pobreza es un problema reiteradamente reflexionado
en el Antiguo Testamento. Mientras que en la literatura sa-
piencial sólo se constata su existencia, los profetas ven la po-
breza como resultado del trastorno social y la achacan a los
ricos, por opresores. Y como la pobreza no es querida por Dios,
hay que eliminarla5. Pero ni en los profetas ni en la literatura
sapiencial se puede hablar de una piedad de los pobres.
El concepto piedad de los pobres es cuestionado en la
investigación. Sus raíces se alargan hasta el primer período
postexílico. Con él se describe una piedad que surgió en ese
tiempo entre las capas inferiores y que encuentra su expre-
sión literaria, sobre todo, en los Salmos6. Esta piedad tuvo
que haber surgido en los estratos bajos de la sociedad, ante la
creciente opresión y con las concomitantes impugnaciones a
la fe. Su principal cometido era 
«restituir la dignidad y la esperanza de vida a las víctimas opri-
midas por la crisis»7.
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas10
3 Cf. RADL, W., Der Ursprung Jesu. Traditionsgeschichtliche Untersuchun-
gen zu Lk 1-2 (HBS 7; Friburgo 1996) 56-65.
4 Cf. LOHFINK, N., «Psalmen im NT. Die Lieder in der Kindheitsgeschich-
te bei Lukas», en: SEYBOLD, K./ZENGER, E. (ed.), Neue Wege der Psalmenfors-
chung (HBS 1; Friburgo 1994) 105-125, esp. 122.
5 Cf. TRE IV, 72ss.
6 Acerca de la historia de la investigación, véase: LOHFINK, N., «Von der
Anawim-Partei zur Kirche der Armen. Die bibelwissenschaftliche Ahnentafel
eines Hauptbegriffes der Theologie der Befreiung», en: Bibl 67 (1986) 153-
175; cf. también ALBERTZ, R., Religionsgeschichte Israels in alttestamentlicher
Zeit, Teil 2: Vom Exil bis zu den Makkabäern (ATD Ergänzungsreihe 8/2; Go-
tinga 1992) 569-576.
7 ALBERTZ, R., Religionsgeschichte, 574.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 10
Sirvieron como
«compensación religiosa de un déficit social»8.
Parece que, en la época helenística, se dieron relaciones
con la espiritualidad de la Torá, como muestran algunos sal-
mos tardíos (cf. Sal 119)9. Esto parece confirmarse tanto en
los Hodayot de Qumrán como en algunos salmos tardíos10.
Pero, en estos casos, esta piedad tuvo formas de expresión
diferentes.
En el ethos de los pobres hay un agudo contraste entre el
reino humano y el divino (Sal 146). En contraste con el domi-
nio existente de los soberanos humanos, que fue sentido pri-
mordialmente como opresor, el señorío de Dios suprime
«toda forma de pobreza y de sufrimiento»11.
Dios es el salvador del Israel pobre, el que cura los corazo-
nes quebrantados (cf. Sal 147). En la comunidad de piadosos
y de humillados se localiza tanto la espiritualidad de la Torá
como la esperanza de Israel; en ella, la alabanza a Dios se con-
vierte en un arma decisiva en la lucha contra el mal (cf. Sal
149). Con su alabanza a Dios, la comunidad de los píos provoca 
«la victoria de Dios sobre el poder del mal»12.
Con esto estallan los antiguos conceptos del orden cul-
tual. En éstos, es el miserable el que reclama protección y el
que cuenta con que su lamento será escuchado. Y en cuanto
une su voz a la alabanza, ya no es miserable. Esto cambia en
el contexto de la religiosidad de los pobres. Aquí
«se reclama lo inequívoco de las situaciones, la separación entre
el ámbito de la salvación y el de la desgracia; la alabanza ya no
disuelve el lamento, la escucha no significa liberación de las ne-
cesidades inmediatas, la cercanía de Dios no borra su lejanía. Es
precisamente el miserable el que difunde y sostiene su miseria
ante Dios, el que pertenece a Dios. Ahora, sólo en la comunidad
de los miserables se puede alabar adecuadamente a Dios en voz
alta»13.
El relato lucano de la infancia... 11
8 ALBERTZ, R., Religionsgeschichte, 575.
9 Cf. ALBERTZ, R., Religionsgeschichte, 629.
10 Cf. LOHFINK, N., Lobgesänge der Armen. Studien zum Magnifikat, den
Hodajot von Qumran und einigen späten Psalmen (SBS 143; Stuttgart 1990).
11 LOHFINK, N., Magnifikat, 112.
12 LOHFINK, N., Magnifikat, 125.
13 STOLZ, F., Psalmen im nachkultischen Raum (Ths 129; Zúrich 1983) 38.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 11
Los Hodayot de Qumrán suponen la simultaneidad de la
necesidad sufrida y de la alabanza a Dios14. Es estos cantos, el
concepto pobre sirve como autodesignación tanto del orante
como de toda la comunidad. A diferencia de los Salmos, en
Qumrán se entiende la pobreza no como una carencia de bie-
nes terrenos, sino que más bien es expresión de una margi-
nación. El concepto pobre se refiere no sólo a los miembros
de la comunidad de Qumrán, sino también
«a gentes de Judea que han sido perseguidas por su fidelidad a
la Torá»15.
Por eso Lohfink habla en relación a Qumrán de una
«espiritualización y teorización de la espiritualidad de los pobres»16.
2. Elementos de religiosidad de los pobres en las 
narraciones del relato lucano de la infancia
El siguiente análisis se limita a los fenómenos que son sig-
nificativos en el contexto de una religiosidad de los pobres.
Según Albertz17, marcan la religiosidad prejudía de los pobres
sobre todo los siguientes criterios:
– Peticiones y súplicas a Dios para que aniquile a los opre-
sores.
– La espera escatológica de un juicio en el que los dolientes
ricos sean castigados y se les haga justicia a los pobres
piadosos.
– La conciencia de ser realmente piadoso.
Hay que buscar estos criterios en el relato lucano de la in-
fancia.
2.1. Aspectos de la religiosidad 
de los pobres en la estructura narrativa
El relato lucano de la infancia no sólo ofrece un segmento
temporalmente unido; también presenta una unidad literaria e
indica una clara articulación. Los episodios particulares están
coordinados temporalmente. El templo constituye la grapa li-
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas12
14 Cf. STOLZ, F., Psalmen, 68.
15 LOHFINK, N., Magnifikat, 33.
16 LOHFINK, N., Magnifikat, 100.
17 ALBERTZ, R., Religionsgeschichte, 574ss.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 12
teraria de ellos: el hecho central tanto de la primera como de la
última escena sucede en el templo de Jerusalén.
2.1.1. La estructura sintáctica de Lc 1-2
Los primeros indicios muestran que Lc 1-2 se nos presen-
ta como algo muy pensado, y se plantea la pregunta de si ya
la estructura sintáctica del relato de la infancia contiene as-
pectos de la religiosidad de los pobres. Para captarla, se ana-
lizará el texto según los siguientes criterios: entrada y salida
de personas, cambios de lugar y datos temporales. Además,
hay que fijarse en los paréntesis, palabras guías y enlaces de
palabras. Es notable lo siguiente: 
• Se detecta un claro esquema temporal, que abarca des-
de la aparición del ángel Gabriel hasta la presentación
de Jesús en el templo y consta en total de 490 días. 
• Ligazón temporal de lo narrado en un horizonte políti-
co mundial en Lc 1,5 y en Lc 2,1-2.
• El templo es escenario tanto de la primera como de la
última escena.
• Los cuatro himnos –Magníficat, Benedictus, Gloria y Nunc
dimittis– poseen cierta independencia respecto de la na-
rración18.
• Enlaces verbales entre las narraciones particulares:
– Las apariciones del ángel a Zacarías, a María y a los
pastores.
– Los relatos del crecimiento de los niños.
– Las frases sobre el significadode los niños.
• Las correspondencias verbales entre Lc 1,80 y Lc 2,40;
2,52. 
Bajo la observancia de estos criterios, obtenemos siete u
ocho segmentos, que se deslindan uno de otro por el cambio de
lugar y por la entrada y salida de personas. A nivel de la estruc-
tura superficial se trata de géneros literarios, que también pue-
den llamarse secuencias elementales o secuencias básicas.
La escena 8 –donde queda rezagado en Jerusalén el Jesús
de 12 años– es un duplicado de la escena 7. Esto hay que
aceptarlo a causa de la misma indicación de lugar y de la
idéntica conclusión. Por lo tanto, no hay que contar tranqui-
lamente como escena 8 la estancia del Jesús de 12 años en el
El relato lucano de la infancia... 13
18 Cf. LOHFINK, N., «Psalmen im NT», 118.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 13
templo de Jerusalén. Esta unidad narrativa confirma las afir-
maciones de la escena 7 y tiene como función compendiar y
concluir todo el relato de la infancia.
En vista de la diferente coordinación en el horizonte polí-
tico mundial en 1,5 y en 2,1-2, estas dos escenas deben agre-
garse a dos conjuntos textuales distintos, de tal manera que el
primer conjunto se compone de cuatro escenas y el segundo
de tres. Los cuatro himnos están en las escenas de tal mane-
ra que un himno está en la 3, otro en la 4, otro en la 6 y el úl-
timo en la 7. Así las dos últimas escenas pertenecen a su vez
a ambos conjuntos19. Cada una de estas escenas particulares
se puede subdividir según los criterios ya mencionados. 
Estos criterios permiten presentar el siguiente cuadro es-
tructural:
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas14
Anuncio del nacimiento de Juan el Bautista 1,5-25
Anuncio del nacimiento de Jesús 1,26-38
María en casa de Isabel 1,39-56
Nacimiento y circuncisión de Juan el Bautista 1,57-80
Magníficat 1,46-55
Benedictus 1,68-79
Nacimiento de Jesús 2,1-7
Anuncio del nacimiento de Jesús a los pastores
y circuncisión de Jesús 2,8-21
Presentación de Jesús en el templo 2,22-40
Rezago de Jesús en el templo 2,41-52
Gloria 2,14
Nunc dimittis 2,29-32
19 En cuanto a los problemas de la estructuración, cf. RADL, W., Der Ur-
sprung Jesu. Está muy extendida la noción de que el relato lucano de la infan-
cia es un díptico (cf. LAURENTIN, R., Struktur und Theologie der lukanischen
Kindheitsgeschichte [Stuttgart 1967]). La estructura propuesta aquí da gran 
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 14
El primer bloque narrativo abarca desde el anuncio del
nacimiento de Juan el Bautista hasta su circuncisión. Con-
cluye con la noticia del crecimiento en Lc 1,80. Ambas esce-
nas del anuncio del nacimiento (Lc 1,5-25) y del nacimiento
de Juan el Bautista (Lc 1,57-80) están relacionadas entre sí y
cercan las escenas del anuncio del nacimiento de Jesús (Lc
1,26-38) y la del encuentro de María con Isabel (Lc 1,39-56).
Éstas están entrelazadas por la figura de María, de manera
que se forma una estructura concéntrica. A pesar de que el
primer bloque en extensión trata preponderantemente de
Juan Bautista, para el lector, Jesús ocupa el centro del acon-
tecimiento. Y su notoriedad llama la atención en el segundo
bloque narrativo.
Éste abarca el nacimiento de Jesús (Lc 2,1-7), el anuncio
a los pastores y la circuncisión (Lc 2,8-21), junto con la presen-
tación de Jesús en el templo (Lc 2,22-40). A pesar del número
tres, no se detecta una estructura concéntrica. La narración
más bien se apresura a su final y a su cumbre: la presentación
de Jesús en el templo. Su importancia queda cimentada por
la escena 8: el retraso de Jesús en el templo.
Los cuatro himnos tienen cierta independencia en rela-
ción con la narración. Mientras que la narración introduce al
lector en la realidad terrena –experimentable– de la acción de
Dios, los himnos desarrollan la plenitud del sentido divino,
que no se puede captar en la dimensión terrena20.
2.1.2. La dimensión escatológica
Esta estructura aclara la dimensión escatológica del relato
de la infancia. Desde la aparición del ángel Gabriel a Zacarías
en el templo hasta la presentación de Jesús en el templo, el
relato lucano de la infancia ofrece una cronología continua. Si
se cuentan todos los datos temporales, se obtienen en total 490
días (del anuncio a Zacarías al anuncio a María transcurren
seis meses = 180 días, hasta el nacimiento de Jesús otros nue-
ve meses = 270 días, y hasta la presentación de Jesús en el
templo 40 días). El número 490 corresponde a un Decajubileo
de 70 semanas de años y en círculos judeo-apocalíticos es co-
mún en cesuras de tiempo relevantes para la historia de la
El relato lucano de la infancia... 15
importancia al dato temporal en Lc. 2,1; a un resultado parecido llega tam-
bién LÖNING, K., Das Geschichtswerk des Lukas, vol. I, Israels Hoffnung und
Gottes Geheimnisse (Urban TB 455; Stuttgart 1997) 58ss.
20 Cf. LOHFINK, N., «Psalmen im NT».
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 15
salvación21. Este esquema temporal indica que con la presenta-
ción de Jesús en el templo se cumplió la predicción de Daniel
(cf. Dan 9,24-26). La revelación de Jesús en el templo, seten-
ta semanas después de la primera aparición de Gabriel, es su
consagración como Mesías22 (cf. Lc 1,23-24; 2,6-7).
Este esquema septenario en la estructura se entiende tam-
bién en el contexto del antiguo simbolismo numeral: en la
concepción de Pitágoras, el número pone todas las cosas en
el interior del alma en consonancia con la percepción y, de
este modo, las vuelve accesibles a través del conocimiento. El
poder del número es eficaz en todos los ámbitos23. Según Arís-
tides Quintiano, el cuatro simboliza lo corporal y el tres el
universo, que por el contraste y la mitad mediadora llega a su
perfección. Su suma (4+3=7) representa la totalidad y la per-
fección del cosmos en su dimensión celestial y terrena. Dado
que la narración, desde la primera aparición del ángel Ga-
briel hasta el nacimiento de Juan Bautista, se compone de
cuatro unidades, esto se refiere a la dimensión terreno-cor-
poral y por lo tanto provisional de su obra. En cambio, Jesús,
cuyo nacimiento y presentación en el templo son narrados en
tres secciones, representa el universo en su completa plenitud
y perfección24.
Por lo tanto, la solemne inauguración del tiempo final y la
perfección del cosmos son la idea central del relato lucano de
la infancia. Por lo demás, nada habla de la espera de un jui-
cio en el que los delincuentes ricos serán castigados y en el
que a los píos pobres se les hará justicia. Si esto habla contra
una aceptación de la piedad de los pobres o si puede enten-
derse como un elemento de su actualización y de su contex-
tualización, se verá más adelante.
2.1.3. Las personas actuantes como piadosas
Los personajes que actúan en el relato de la infancia po-
seen unos retratos bien configurados. Lucas no muestra nin-
gún interés en presentar tipológicamente a sus personajes.
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas16
21 Cf. MAIER, J., Die Qumran-Essener: Die Texte vom Toten Meer, vol. III:
Einführung, Zeitrechnung, Register und Bibliographie (UTB 1916; Múnich
1996) 131.
22 Cf. LAURENTIN, R., Struktur und Theologie der lukanischen Kindheits-
geschichte.
23 Cf. RÜEGG, W., Antike Geisteswelt, vol. I: Natur und Geist (Hanau 1986)
207.
24 RÜEGG, W., Antike Geisteswelt, 195.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 16
Las referencias a personajes del Antiguo Testamento sólo
sirven para dibujar sus personajes individuales: así, Zacarías
presenta rasgos de Noé y de Abrahán; Isabel, de Sara, Raquel
y Lea; Juan Bautista, de Isaac, Naamán y Sansón25.
Los personajes aparecen constantemente como margina-
dos. Zacarías e Isabel son una pareja estéril. Esto perjudica a
su situación social (cf. Gn 16,4.11; 29,32; 30,1; 1 S 1,5-7; even-
tualmente también Sal 113). Ana es viuda, tuvo que haber
sido muy vieja. En todo caso, Simeón es un anciano. Todas
estas gentes se hallan en una situación lastimosa, aunque esta
necesidad no esté condicionada materialmente.María y José
son jóvenes, pero sin recursos. Esto lo da a entender el hecho
de que en Belén no hallaron lugar en la posada. Por eso Jesús
nació fuera de la ciudad. La ofrenda al presentar a Jesús en el
templo también habla de su pobreza en sentido material; la
ofrenda de las tórtolas está prevista en caso de no tener me-
dios para una oveja (cf. Lv 12,8).
Aunque estas gentes no sean necesariamente pobres en
sentido material y aunque Lucas no los llame pobres, sí se pre-
sentan como marginados. No tienen mucho de qué vivir. En
este mundo no hay futuro para ellos, por eso pueden pasar por
pobres en el sentido de la religiosidad de los pobres. Al mismo
tiempo, son de los que sirven a Dios recta y realmente.
Esta actitud fundamental marca toda su actividad: María y
Zacarías se muestran predispuestos al mensaje divino que les
es comunicado por Gabriel. Juan y Jesús, conforme a la ley, son
circuncidados al octavo día. La purificación se da según la Ley
(Lc 2,22). Sus oraciones son las oraciones de la gente piadosa
del Antiguo Testamento. Ana y Simeón pasan todos los días
en el templo. Simeón es expresamente caracterizado como
justo (di,kaioj) y respetuoso de Dios (euvlabh.j). Esto les abre al
encuentro con el Salvador divino.
Otro aspecto más marca su vida. Están abiertos al en-
cuentro con otras gentes. La interacción entre estos persona-
jes da a la narración un impulso esencial y la hace avanzar.
María va deprisa con Isabel y es recibida con los brazos abier-
tos. Los pastores buscan al niño en la cuna; esto toca honda-
mente a María. Simeón toma a Jesús en sus brazos. Él dirige
El relato lucano de la infancia... 17
25 Cf. O’FEARGHAIL, F., «The use of the OT in Lk 1,5-38», en: BRENDLE, A.
(ed.), Evangelium und Kultur. Beiträge zur interkulturellen Exegese und zur In-
kulturation des Evangeliums (FS Fritzleo Lentzen-Deis, Gratulationsauflage;
Frankfurt 1988) 269-300.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 17
a María unas palabras proféticas (cf. Lc 2,34ss). Ana cuenta a
todos su encuentro con el Salvador divino. Así amplía Lucas
el campo verbal de la religiosidad de los pobres, por medio
del aspecto de la solidaridad y el encuentro interpersonal (cf.
también Lc 12,16-21).
Lucas pone a sus lectores en un medio palestino. Con esto
sigue las técnicas literarias de su tiempo y presenta el mensa-
je de una manera inteligible a sus lectores. A los lectores rea-
les les ofrece en estos personajes funciones temáticas para
que se identifiquen. Éstos son caracterizados preponderada-
mente como activos, ya que ellos tienen en cuenta las posibi-
lidades dadas por Dios y se entregan a ellas confiadamente,
«dan al lector implícito la oportunidad de imaginarse las posi-
bilidades de Dios, examinadas críticamente, confiarse a ellas es-
peranzados y así crear posibilidades y resultados nuevos»26.
2.1.4. Resultado
En la estructura del relato lucano de la infancia se refleja
una perspectiva escatológica. Por lo demás, no se debe equipa-
rar cualquier escatolología con la religiosidad de los pobres.
La sospecha de que ya la estructura hace suyos aspectos de la
religiosidad de los pobres, queda confirmada por el hecho de
que los personajes actuantes –aunque Lucas no los designe
como pobres– son pobres en el sentido de la religiosidad de
los pobres y en ellos se realiza la obra escatológica de Dios.
Por lo tanto, podemos sostener que la estructura narrativa
realiza elementos esenciales de la religiosidad de los pobres.
Esto se ve también en cada una de las narraciones.
2.2. Elementos de la religiosidad de los pobres 
en las narraciones particulares
En cada una de las narraciones se percibe, de varias ma-
neras, la dimensión escatológica. Basta indicar algunos ele-
mentos. 
• La dimensión escatológica queda corroborada por el uso
del profeta Malaquías (Lc 1,16-17 = Mal 2,6; 3,1; Lc 1,76
= Mal 3,23-24). La llegada de Jesús al templo (Lc 2,22-30)
corresponde a la llegada de Yahvé según Mal 3,1.
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas18
26 DORMEYER, D., «Die Rolle der Imagination im Leseprozeß», en: BZ 39
(1996) 161-180, esp. 171.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 18
• Según el Deutero y el Trito-Isaías, los fieles a Yahvé os-
tentan el título de los pobres. A estos pobres de Israel se
les transmite la alegre noticia de que Dios consuela a Sión
y de que ahora comienza la conversión de los paganos27.
• La imagen de la matanza escatológica de los pueblos, en
la que todo mal será aniquilado (cf. Sal 149), desempeña
en el relato lucano de la infancia un papel marginal, ya
que hace mucho que se realizó el juicio en los pasados
hechos salvadores de Yahvé (cf. Magníficat). En cambio,
se retoma la imagen de la peregrinación de los pueblos
a Sión y se actualiza con vistas a la comunidad cristiana
(cf. Nunc dimittis). Lucas ve a la comunidad cristiana co-
mo la sociedad justa, de dimensión universal, guiada por
Dios desde ahora hasta el fin de la historia28.
• La narración del nacimiento de Jesús pone a éste en
contraste con el símbolo personalizado del dominio ro-
mano: César Augusto. Virgilio había celebrado a Augus-
to como retoño divino que restituye la Edad de Oro29.
Según Lucas, en el mayor silencio y en la soledad, fuera
de la ciudad, se produce el nacimiento del salvador. A la pax
romana, basada en la opresión, en la violencia y en la explo-
tación, se contrapone la pax christiana, la de Dios liberador,
la que actualiza la actividad que realiza la salvación. Así,
Lucas ve desde abajo al Imperio romano y le contrapone el
Reinado de Dios, que se basa en la paz que atañe a todas las
gentes y en la justicia.
• Los primeros a quienes se anuncia el maravilloso naci-
miento son los pastores que estaban a la intemperie.
Muchos exégetas ven en los pastores a los representan-
tes de las capas sociales inferiores30. Otros piensan en el
pasado nómada de Israel y, por eso, ven en los pastores
el prototipo de la apertura y de la posibilidad de desen-
volvimiento, un símbolo de la unidad de sentimiento y
El relato lucano de la infancia... 19
27 LOHFINK, N., «Das Jüdische am Christentum. Wider die Entscheidung
der Christen zur Weltlosigkeit», en: íd. (ed.), Das Jüdische am Christentum.
Die verlorene Dimension (Friburgo 1987) 48-70, esp. 66.
28 LOHFINK, N., Das Jüdische am Christentum, 67.
29 Virgilio, Eneas VI, 791-795.
30 En este sentido interpreta, por ejemplo, JEREMIAS, J., Jerusalem zur Zeit
Jesu. Eine kulturgeschichtliche Untersuchung zur neutestamentlichen Zeitge-
schichte (Gotinga 1969) 338; también RENGSTORF, K. H., Das Evangelium
nach Lukas (NTD 3; Gotinga 1975) 41, y ERNST, J., Das Evangelium nach Lukas
(RNT 3; Regensburg 1977) 107.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 19
de razón31. No parece que Lucas conozca esta tipificación.
En todo caso, esta interpretación no tiene fundamento en
el Evangelio. La mención de los pastores se debe sobre
todo a la influencia de Miqueas 532 y recuerda el relato da-
vídico33. También son un motivo preferido de los relatos
helenistas de nacimiento34. Las señales que muestran a
Jesús como salvador, cuna y pañales, no son insignias de
poder, sino de pobreza y desamparo extremos. Contras-
tan con las representaciones romano-helenistas de seño-
río35. En cambio, el lugar en el que está la cuna pasa a
segundo término.
• En Lc 2,34 se menciona el juicio: con Jesús se separarán
los espíritus36. Esto se desarrollará tanto en el Evangelio
como en los Hechos de los Apóstoles (cf. Lc 4,16-30;
21,5-36; Hch 4,8-12 entre otros).
2.3. Resultado
Lo que ya se constató con respecto a la estructura de la
narración se confirma en cada relato: el relato lucano de la
infancia contiene elementos esenciales de la espiritualidad de
los pobres. Es patente la dimensión escatológica. Pero tam-
bién se aprovecha del tema del juicio y de la contraposición
al domino de los poderosos. No hay necesidad de recalcar ex-
presamente que los personajes que actúan son realmente
piadosos. Al poner en un contexto histórico inteligible para
sus lectores loselementos de la espiritualidad de los pobres,
Lucas actualiza la espiritualidad de los pobres; al mismo
tiempo, la coloca en un nuevo contexto, tanto literario como
histórico: literario, por la introducción en el relato del naci-
miento del Salvador divino; histórico, por la conexión con la
persona de Jesús.
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas20
31 Cf. DREWERMANN, E., Dein Name ist wie der Geschmack des Lebens. Tie-
fenpsychologische Deutung der Kindheitsgeschichte nach dem Lukasevange-
lium (Friburgo 1986) 91-92.
32 LAURENTIN, R., Struktur, 99-102.
33 SCHNEIDER, G., Das Evangelium nach Lukas. Kapitel 1-10 (ÖTBK 3/1;
Gütersloh/Würzburg 1977) 67.
34 Cf. SCHWEIZER, E., Das Evangelium nach Lukas (NTD 3; Gotinga 1982)
33; y: BOVON, F., Das Evangelium nach Lukas (Lk 1,1-9,50) (EKK III, 1; Zú-
rich/Neukirchen-Vluyn 1989) 123.
35 Cf. KÜGLER, J., «Die Windeln Jesu als Zeichen. Religionsgeschichtliche
Anmerkungen zu Esparganow in Lk 2», en: BN 77, 20-28.
36 BOVON, F., Das Evangelium nach Lukas, 146-147.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 20
3. Elementos de la espiritualidad 
de los pobres en los himnos
Los himnos del relato lucano de la infancia no sirven para
impulsar la acción. No parece que tengan relación inmediata
con ella. Como un drama de la antigüedad, un enredo inex-
tricable, gracias a un Deus ex machina, encuentra salida.
Revelan una dimensión de significado que va más allá de lo
narrado inmediatamente y más allá de lo vivido por los per-
sonajes de la narración. Los cantores y cantoras oran llenos
del Espíritu Santo. Esta connotación semántica se presenta
como inspirada por Dios, y a los personajes como teólogos y
teólogas. No expresan sentimientos humanos, sino una reali-
dad divina37. Pragmáticamente son importantes y tienen una
función metacomunicativa38. Mientras la narración puede en-
tenderla cualquiera, incluso un lector sin instrucción, los
himnos exigen reflexión y meditar sobre ellos. En los himnos
se habla a Teófilo39, el lector ficticio, y se le descubre el acon-
tecimiento de Jesús de Nazaret como un hecho divino.
Por lo tanto, en una reflexión ulterior habrá que pregun-
tarse hasta qué punto las declaraciones hechas a nivel narra-
tivo son confirmadas por los himnos. Para esto se analizará
brevemente cada himno y se tratará desde el punto de vista
de la espiritualidad de los pobres.
3.1. El Magníficat (Lc 1,46-55)
Lohfink ha puesto de relieve las referencias del Magnífi-
cat a la espiritualidad de los pobres40. El Magníficat se divide
en dos partes muy diferentes: la primera (Lc 1,46-50) contiene
una doble motivación a la alabanza; la segunda (Lc 1,51-55)
es una narración hímnica que se desarrolla en siete frases
(Lc 1,51-54a). La última frase del versículo 49 es santo es su
nombre. Esta narración hímnica concluye con una funda-
mentación (Lc 1,54b-55). Ambas partes se entrelazan con pa-
El relato lucano de la infancia... 21
37 Cf. LOHFINK, N., «Psalmen im NT».
38 Acerca de la función comunicativa de tales textos, cf. ONUKI, T., Sam-
melbericht als Kommunikation. Studien zur Erzählkunst der Evangelien
(WMANT 73; Neukirchen-Vluyn 1997).
39 Sobre el lector ficticio del Evangelio de Lucas, cf. DILLMANN, R., «Das
Lukasevangelium als Tendenzschrift. Leserlenkung und Leseintention in Lk
1,1-4», en: BZ NF 38 (1994) 86-93. 
40 Cf. LOHFINK, N., Magnifikat; las siguientes anotaciones se basan sus-
tancialmente en el texto citado.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 21
labras claves: dou,lhj (v. 48), paido.j (v. 54), e;leoj (v. 50), evle,ouj
(v. 54), tapei,nwsin (v. 48), tapeinou,j (v. 52).
Lucas expresa con e;leoj la acción salvadora de Dios41.
Con los conceptos dou,lhj y paido.j se forma el paralelismo en-
tre la autodesignación de María y la característica de Israel.
Tapei,nwsin capta la situación de María y la coloca en el centro
de la narración hímnica.
Para el entendimiento del Magníficat es decisiva la inter-
pretación de los aoristos en los vv. 51-54a42. A menudo, fueron
entendidos como aoristos gnómicos. Dupont ha demostrado
que esta interpretación común no es defendible43. Y que hay
que entender los aoristos como pasados44. Por lo tanto, la na-
rración hímnica se refiere a la acción pasada de Dios en Israel,
que tuvo su inicio con Abrahán y ahora se consuma en María.
Considera de manera unificada las etapas principales de la
historia de Israel (éxodo y recorrido por el desierto) y coloca
la expresión enaltece a los humillados (Lc 1,52b) en el centro
de estas siete frases. Así, la acción de Dios en María queda co-
locada en un contexto más amplio; por lo tanto, el Magníficat
informa de la acción salvadora de Dios en su pueblo, en el fu-
turo (o escatológicamente ya...) definitivo presente en su sierva
María (Lohfink, Lobgesänge, 21)45. Escatológicamente porque
ahora su nombre es santo: una alusión a Ez 36,16-38: Yahvé
santificará su nombre, reuniendo a su pueblo disperso entre
las naciones y enaltenciéndolo. Esto ya se ha producido aho-
ra en lo que Dios ha hecho en María,
«en ella, en cierto modo, reúne toda la historia de Israel, y por
la misericordia de Dios se produce la salvación del mundo»46.
3.2. Benedictus (Lc 1,68-79)
Igualmente, el Benedictus se divide en dos partes diferen-
tes. La primera comienza con una declaración hímnica en
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas22
41 Cf. STAUDINGER, F., «e;leoj», en: BALZ, H./SCHNEIDER, G. (ed.), EWNT I
(Stuttgart 1980) 1049.
42 Cf. BOVON, F., Das Evangelium nach Lukas, 83.
43 BLASS/DEBRUNNER/REHKOPF, Grammatik des neutestamentlichen Grie-
chisch (Gotinga 141975) § 333.
44 Cf. DUPONT, J., «Le Magníficat comme discours sur Dieu», en: NRTh
102 (1980) 321-343.
45 LOHFINK, N., Magnifikat, 21.
46 LOHFINK, N., Magnifikat, 21.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 22
imperativo (v. 68a); a ésta, como es debido, se le agrega la
motivación para esta invitación a la alabanza (vv. 68b-75).
Esta parte coincide con la alabanza descrita y está toda en
aoristo. El sujeto de los verbos es Dios (= 3a pers. sing). La
segunda parte abarca los versículos 76-79. La introduce un
cambio de sujeto (desde el v. 76 = 2ª pers. sing). Los verbos
están en futuro. Todo el himno está unido por la palabra
evpiske,ptomai (vv. 68 y 78), que funciona como una pinza litera-
ria. El tema del Benedictus es el auxilio de Dios a su pueblo.
La primera parte se presta a subdivisiones; a la exhortación
imperativa le sigue la motivación precedida con o[ti. Los tres
verbos, ha visitado, ha realizado, ha suscitado (vv. 68b-69), ha-
blan de hechos pasados de Dios que son significativos para el
presente47. Se refieren al acontecimiento del Éxodo. Esto es pa-
tente con poiei=n lu,trwsin. La expresión significa liberar de los
enemigos48 y tiene su equivalencia en la narración del Éxodo
(cf. 6,6 LXX). Pero también los otros dos conceptos se refieren
al acontecimiento del Éxodo. Con evpiskeptomai se describe en
Ex 3,16; 4,31 y 13,19 la ayuda de Dios al oprimido Israel. El
cuerno es símbolo del poder majestuoso, de la victoria, de la
fuerza49, y aquí caracteriza a la figura del Salvador.
Esta secuencia concluye con la indicación de que esta ac-
ción de Dios había sido anunciada mucho antes por los pro-
fetas (v. 70). Los vv. 71-75 tienen una sintaxis difícil50. Aun así,
muestran una clara estructura: se trata de cinco sintagmas
sin conexión aparente, construidos con acusativo o con infi-
nitivo. Éstos sirven de aclaración de lo que significa en con-
creto la referencia a los profetas y muestran una figura con-
céntrica en forma de quiasmo.
El relato lucano de la infancia... 23
47 En cuanto al significado de los tiempos verbales del griego, cf. WEIN-
RICH, H., Tempus. Besprochene und erzählte Welt (Stuttgart 1977).
48 Cf. BOVON, F., Lukas, 104.
49 RAUSCHENBACH, B., «Horn», en: NBL II (Zúrich 1995) 196.
50 Cf. BOVON, F., Lukas, 97.
Liberarnos de nuestros enemigos y de la mano de todos los que nos odian (v. 71)
Tratando con misericordia a nuestros antepasados (v. 72a) 
Se acordó de susanta alianza, del juramento que hizo a nuestro padre 
Abrahán (vv. 72b-73a) 
Para concedernos que, libres de nuestros enemigos (vv. 73b-74a),
Podamos servirle sin temor, en santidad y justicia, toda nuestra vida (vv. 74b-75).
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 23
Los primeros sintagmas hablan en general de la salvación
de los enemigos y de la misericordia de Dios. Es un obrar vas-
to, que incluye también a los antepasados. Los dos últimos
sintagmas se fijan en la meta del obrar divino y describen la
situación futura del pueblo de Dios: liberado de los enemi-
gos, sirve a Dios en santidad y en justicia. En medio está la
afirmación de que Dios se acuerda de su alianza. Ésta es
aclarada gracias a una oposición cercana como juramento
que Dios hizo a Abrahán51. Por lo tanto, diaqh,kh significa la
alianza con Abrahán. Con mnhsqh/nai (vv. 72b-73a), Lucas re-
toma Ex 2,24 y 6,5 y pone el tema de la alianza en el centro
de la narración sobre la obra de Dios en Israel. Ésta queda
enmarcada con el tema de la salvación de la mano de los ene-
migos. Esto lo vio correctamente Vanhoye, aunque no pode-
mos estar de acuerdo con su análisis estructural52.
La segunda parte del himno precisa la función de Juan
Bautista en el hecho salvador. Esta parte está unida a la pri-
mera por varias palabras claves: profetas (vv. 70-76), Kyrios
(vv. 68-76), salvación (vv. 71-77), su pueblo (vv. 69-77) y mise-
ricordia (vv. 72-78). La pinza literaria de esta parte la forman
los conceptos Altísimo (v. 76), de lo alto (v. 78), así como sus
caminos (v. 76) y camino de la paz (v. 79).
Todas las demás frases, por medio de las preposiciones
causales ga,r (v. 76b) y dia, (v. 78), se subordinan a la oración
principal «y tú niño» (v. 76a). La primera oración causal
caracteriza a Juan Bautista como el que, según Is 40, prepara
el nuevo Éxodo; la segunda oración causal (vv. 78-79) ve en
consonancia con Is 60,1ss y 42,7, en esta obra del Bautista,
la actuación escatológica de Dios. Las afirmaciones están en
futuro y así pertenecen no al mundo narrado, sino al del que
se ha hablado. Sirven a la descripción de una realidad que ya
marca la vida.
De este modo, el Benedictus canta el nacimiento de Juan
Bautista como el principio de un nuevo Éxodo que Dios,
acordándose de la alianza con Abrahán y de los hechos
salvadores asociados a ella, ha iniciado. Como antes actuó
con Israel, así actúa ahora Dios, de nuevo, en la obra del
Bautista.
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas24
51 Lk 1,73 es una alusión a la alianza con Abrahán: cf. ANNEN, F., «o[rkoj»,
en: EWNT II (Stuttgart 1981) 1302.
52 Cf. VANHOYE, A., «Structure du Benedictus», en: NTS 12 (1965-66)
382-389.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 24
Las alusiones a la espiritualidad de los pobres son más
bien discretas. La salvación de la mano de los enemigos debe
contarse como liberación del pueblo53. Su significado com-
pleto, en el sentido de una actualización de la espiritualidad
de los pobres, se capta en el contexto literario con el Magní-
ficat. Retoma la última frase del Magníficat y la desarrolla. La
obra de Dios en favor de Israel, que llega a su culmen en la
actuación en María, experimenta su primera concretización
en el trabajo del Bautista. Él es quien prepara el camino al
Mesías davídico que está por llegar. Al mismo tiempo, el Be-
nedictus, en su segunda parte, se refiere al canto de alabanza
de los ángeles en Lc 2,14. Las palabras claves se dan con alto
(Lc 1,76.78-2,14) y paz (Lc, 79-2,14)54.
3.3. Gloria (Lc 2,14)
La alabanza de los ángeles es problemática desde el pun-
to de vista crítico-textual. ¿Termina con evudoki,a o con evudoki,aj?
El genitivo evudoki,aj es la variante más difícil y es atestiguada
en los textos occidentales. Además, pudo caerse fácilmente la
sigma. La siguiente interpretación se apoya en evudoki,aj como
variante original55.
El Gloria consta de dos partes. La división debe estar se-
ñalada por el único kai,.
«En lengua semita debió de tratarse del así llamado séptimo.
De acuerdo con esto, Do,xa y eivrh,nh se equiparan entre sí y están
ordenadas en forma quiástica»56.
Sintácticamente, el genitivo euvdoki,aj puede referirse a
avnqrw,poij; se trataría o de un genitivo subjetivo (= de los hom-
bres) o de un genitivo objetivo (= de Dios). El genitivo tam-
bién puede referirse a eivreh,nh. Habría sido separado de su re-
ferencia por la intercalación de un dativo y estaría en lugar de
un adjetivo (en castellano se traduciría como paz placentera o
agradable). Contra esta estructura sintáctica hablan tanto el
paralelismo de Lc 19,38 como el Sal 118,65 (LXX).
El relato lucano de la infancia... 25
53 Lytron significa el dinero de rescate que se paga por los prisioneros de
guerra; lytrôsis es la liberación a través del dinero del rescate; cf. BÜCHSEL, F.,
«lytron», en: ThWNT IV, 341 y 353.
54 Cf. LOHFINK, N., «Psalmen im NT».
55 Cf. METZGER, B. M., A textual Commentary on the Greek New Testament
(Londres/Nueva York 1975) 133.
56 KLOSTERMANN, E., Das Lukasevangelium (HNT 5; Tubinga 1975) 38.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 25
Según la gramática transformadora generativa, Lc 2,14 se
deja transformar en dos frases paralelas con corresponden-
cias estructurales.
do,xa evn ~uyi,stoij Qew/|
eivrh,nh evpi. gh/j evn avnqrw,poij euvdoki,aj
Con esto mantenemos la contraposición de mundo divino
y realidad terrena, a la que pertenece la acostumbrada pareja
conceptual. 
Ya que evpi. gh/j está lingüísticamente colocado al comien-
zo, conserva un acento especial. ¡En la tierra sucederá algo
especial e importante! Euvdoki,aj es claramente definido como
un genitivo atribuido de evn avnqrw,poij. Pero no queda claro si
los hombres poseen esta euvdoki,a o si ésta se apoderó de los
hombres.
Euvdoki,a se limita casi exclusivamente a la literatura judía
y cristiana57. En el Sirácida designa la complacencia divina. Un
significado parecido tiene euvdoki,a en el resto de la Septuaginta.
El Nuevo Testamento se adhiere a este uso verbal58, que tam-
bién se encuentra en Lucas. En Lc 10,21 euvdoki,a tiene una ine-
quívoca dimensión escatológica. En el llamado grito de júbilo,
como reacción al informe de los discípulos sobre su actuación
en la proclamación del Evangelio, Jesús alaba al Padre porque
los ignorantes –es decir, la gente sencilla– han experimentado
el Reinado de Dios y lo han comprendido de tal manera que
para ellos es la preferencia de Dios. Esto permanece oculto
para los poderosos y entendidos. Así, debe suponerse en Lc
2,14 el mismo significado. La euvdoki,a se la da Dios a los hom-
bres (cf. 2 Tes 1,11; lo mismo Sir 39,18;43,26). Por lo tanto,
hay que entender euvdoki,aj como genitivo objetivo. Eivrh,nh es
para los hombres que han sido afectados por la complacen-
cia divina.
Como se ve en el Evangelio de Lucas, este ser objeto de la
complacencia divina se muestra en la conversión y en el se-
guimiento de Jesús. La paz en la tierra sólo es posible cuan-
do las gentes se confían a Jesús de Nazaret y lo siguen. Con el
nacimiento de Jesús, esto no es sólo una posibilidad teórica,
sino que también lo es práctica.
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas26
57 Cf. SCHRENK, G., «euvdoki,a», en: ThWNT II 736-748.
58 Cf. Sobre todo, las cartas paulinas, la carta a los Efesios y el Evangelio
según Mateo.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 26
¿Para qué gentes es la complacencia de Dios? En Lc 2,10
se anuncia a todo el pueblo (panti. tw/| law/|) la alegría que ha
aparecido en la figura del Salvador y Cristo Kyrios. Según el
uso verbal de Lucas, lao,j designa en primer lugar al pueblo de
Israel59. El cambio de lao,j a a;nqrwpoj abre una perspectiva que
más tarde será desarrollada en el Evangelio y en los Hechos
de los Apóstoles: la obra de Jesús rebasa al Israel captado his-
tóricamente, y el pueblo de Dios se compondrá de judíos y
paganos. En el Evangelio se presenta otra concretización más:
a los pobres, a los rechazados, a los despreciados y a los mar-
ginados se les da parte enla salvación. Así está en el Gloria lo
que en el Nunc dimittis se dirá con toda claridad: la peregri-
nación de todos los pueblos a Sión.
3.4. Nunc dimittis (Lc 2,29-32)
El Nunc dimittis tiene una estructura simple. A la afirma-
ción del cantor de que Dios puede dejarle ir en paz sigue una
fundamentación introducida con o[ti. Los dos verbos están en
aoristo (e+idon h~toi,masaj) y, por lo tanto, pertenecen al mundo
narrado. Hablan de la experiencia del cantor y del actuar de
Dios. Aunque falta una llamada explícita a la alabanza, tam-
bién hay que poner el Nunc dimittis dentro del género ala-
banza informadora, pues la más sencilla y original manera de
alabanza es: Dios ha actuado60.
Simeón primero canta su liberación de la servidumbre;
avpolu,w significa originalmente liberación del prisionero61. En
el Nuevo Testamento se encuentra esta palabra con el signifi-
cado de soltar, dejar en libertad, tanto como liberación del
prisionero como término para el divorcio62. En sentido figura-
do, indica muerte63. En este sentido lo interpretan la mayoría
de los comentarios64. Por consiguiente, el Nunc dimittis es en-
tendido como
«la oración cristiana de la noche»65.
El relato lucano de la infancia... 27
59 Cf. GEORGE, A., «Israel», en: íd. (ed.), Études sur l’oeuvre de Luc (París
1978) 87-125, esp. 88-94.
60 Cf. WESTERMANN, C., Gottes Loben in den Psalmen (Gotinga 1963) 64.
61 Cf. BAUER, W., Wörterbuch zum NT, 191.
62 Cf. SCHNEIDER, G., «avpwlu,w» en: EWNT I, 336ss.
63 Cf. BOVON, F., Lukas, 143; Bovon se refiere a la LXX y a Sófocles.
64 Cf. KLOSTERMANN, E., Lukas, 43; BOVON, F., Lukas, 143.
65 Así lo ve BOVON, F., Lukas, 143 y 145.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 27
Tal interpretación se queda corta. Arranca este canto de
su contexto literario. Con eivrh,nh retoma el Nunc dimittis una
palabra clave del Gloria. Aquí no debe limitarse la paz a la re-
alización de la salvación individual. Su sentido amplio también
se da en el Nunc dimittis. Por la acción de Dios, Simeón expe-
rimenta su participación en la salvación realizada por Dios.
Ésta es para él, al mismo tiempo, liberación de la servidum-
bre y de la esclavitud. Esto es lo que indica la autodesigna-
ción de Simeón como dou/loj, con la que retoma una palabra
gancho del Magníficat. Igualmente, los conceptos swth,rio,n
(2,30–1,47) e vIsrah,l (2,32–1,54) remiten al Magníficat. Por lo
tanto, la liberación de Simeón es participación es el amplio
actuar salvador de Dios, que se inició al principio con la ac-
tuación en María. Así es como concluye el ciclo de cantos que
constituyen una unidad compacta en forma circular y que se
interpretan mutuamente.
El Nunc dimittis abre una perspectiva más amplia, ya vin-
dicada en el Gloria: la peregrinación de los pueblos a Sión. Se
tematiza en los últimos dos versículos (Lc 2,31-32). Ambos
versos describen en qué consiste la salvación realizada por
Dios. El plural law/n en unión con pa,ntwn en el v. 31 permite
concluir que Dios ha realizado la salvación ante todos los
pueblos, incluido Israel. Los conceptos fw/j y do,xa en Lc 2,32
aluden a Is 60. Este texto describe
«el despuntar de la luz con la llegada de Yahvé a Israel»
y, al mismo tiempo,
«la llegada de los pueblos a Israel, es decir, a Sión»66.
Es notorio que, en Lc 2,32, fw/j acompañe al genitivo evqnw/n
y do,xa al genitivo laou/ sou vIsrah,l. Ambos genitivos deben ser
objetivos: luz para los pueblos, gloria para su pueblo Israel.
Aquí resuenan elementos de la teología de Sión. En el Deu-
tero-Isaías se le promete a Sión la salvación, pues Yahvé vol-
verá y ahí restaurará su reinado (cf. Is 40,9; 41,27; 46,13;
51,11.16; 52,7ss). El siervo de Yahvé se convertirá en luz para
los pueblos (Is 49,6) y guiará a la luz a los que están en las ti-
nieblas (Is 49,9). Así la gloria de Sión supera toda experiencia
(Is 51,3)67. Así, en luz para los pueblos se tematiza la peregri-
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas28
66 WESTERMANN, C., Das Buch Jesaja, Kapitel 40-66 (ATD 19; Gotinga
1966) 283. 
67 Cf. JENNI, E./WESTERMANN, C., «Sijon Zion», en: ThHWAT II (Múnich
1979) 550.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 28
nación de los pueblos a Sión68. El verbo correspondiente está
en aoristo (h~toi,masaj) y así describe un hecho del pasado: que
según la convicción del cantor ya empezó la peregrinación de
los pueblos a Sión.
3.5. Resultado
Los cuatro himnos se apoyan y se impulsan uno a otro.
Son complemento de una eclesiología y de una misionología
que tienden a la integridad. Cada uno de estos cantos aclara
un punto; al mismo tiempo, cada canto es elemento parcial
de un sistema de significación más extenso69. El Magníficat
trata las etapas capitales de la historia de Israel, el Benedic-
tus se centra en el acontecimiento del Éxodo, mientras que el
Nunc tematiza la peregrinación de los pueblos a Sión –dos
puntos angulares de la actuación histórica de Dios–. El Glo-
ria pone en primer plano que todo este hecho hay que agra-
decerlo a la pura iniciativa de Dios. No hay que encontrar en
cada himno todos los elementos de la espiritualidad de los
pobres. Lo decisivo es la composición total. Esta composición
está esencialmente saturada de elementos de la espiritualidad
de los pobres. Tanto la espera escatológica como la concien-
cia de los cantores y cantoras de estar al servicio Dios im-
pregnan estos cantos. La realización total de la salvación, que
es expresada sobre todo aludiendo a la peregrinación de los
pueblos a Sión, no deja lugar alguno a los malhechores y a los
demás adversarios de Dios. Ya Dios los ha reducido a la im-
potencia. Por eso sobran las peticiones y súplicas a Dios de
que aniquile a los opresores.
4. Mirada sintetizadora
Después de todo esto, no puede haber duda: dos de los lla-
mados por Albertz criterios de la espiritualidad de los pobres
–tanto la espera escatológica como la conciencia de ser pia-
doso– se encuentran en las narraciones del relato lucano de
la infancia y en los himnos. La triple noticia de crecimiento
(Lc 1,80; 2,40.52) exige al lector crecer con la lectura del
Evangelio, tanto espiritualmente como en sabiduría, y abrir-
se al mensaje de Jesús. Lo que sucede en Jesús de Nazaret
es un hecho divino. A primera vista, faltan las súplicas y las
El relato lucano de la infancia... 29
68 Cf. LOHFINK, N., Das Jüdische am Christentum, 65-66.
69 Cf. LOHFINK, N., «Psalmen im NT», 119-123.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 29
peticiones a Dios de que aniquile a los malhechores. Pero sí
se notan, al menos rudimentariamente, de forma cambiada.
En el Magníficat se canta como un hecho el derrocamiento de
los poderosos, y la peregrinación de los pueblos a Sión, que
según el Nunc dimittis ya ha empezado, supone la victoria de
Dios sobre los malhechores. Lucas actualiza estos elementos
de la espiritualidad de los pobres al conectarlos con un nue-
vo trasfondo histórico temporal (cf. Lc 1,15; 2,1-2. 3,1-2). Así
les da un nuevo contexto: literariamente, en el relato del na-
cimiento del Salvador; históricamente, en el relato de la per-
sona de Jesús de Nazaret. Con esta actualización y contex-
tualización amplía el campo verbal gracias al aspecto de
encuentro personal y de solidaridad.
La constatación de que el relato lucano de la infancia es
una actualización y una contextualización de la espiritua-
lidad prejudía de los pobres tiene un gran significado no
sólo para el lector de la Antigüedad, sino para cada lector
del Evangelio de Lucas. Al retomar este teologúmeno de la
teología prejudía, Lucas hace importantes indicaciones de
lectura. Tanto la salvación de Israel como la peregrinación
de los pueblos a Sión son iniciadas por un salvador que, en
contraste con las figuras de señorío helenista-romanas, está
totalmente del lado de los pobres y desprotegidos y que com-
parte el destino de éstos. Así esboza Lucas una imagen de un
orden mundial, el querido y dado por Dios, que contrasta con
el orden político experimentado en concreto, representado
por el poder de Roma. A este, porlo visto, utópico orden del
mundo, que contradice toda experiencia, une Lucas, en el
sentido de la proclamación de Jesús, la salvación y el futuro
de las gentes.
El concepto espiritualidad de los pobres no debe, en ade-
lante, malentenderse, como si el lector real del Evangelio de
Lucas tuviera que ser pobre materialmente. Todo lector, aun
el poco instruido, puede poner en práctica las narraciones.
En los himnos, que desde el punto de vista comunicativo
hay que subcoordinar con el metanivel, el lector implícito es
interpelado. Éste no necesariamente pertenece a un estrato
proletario. Se le puede buscar en un estrato social superior,
pero por su convicción de fe cristiana permanece en una si-
tuación marginal, algo así como Teófilo, el lector ficticio del
Evangelio.
El lector es desafiado a ajustarse a la realidad del Evan-
gelio, a reflexionar sobre el proyecto de vida ahí presentado y
a confiarse a él en un plan creyente y esperanzador. Para esto
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas30
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 30
también sirven los personajes que actúan en el relato de la in-
fancia. Gentes que viven al margen son puestas en el punto
central. Con confianza en Dios, pueden dar un nuevo senti-
do a su vida. Son figuras de identificación, que permitan al
lector real entrar en una confrontación crítica con la imagi-
nación contenida en la narración, para que finalmente haga
suyas las posibilidades abiertas por Dios y les haga espacio
en su vida propia.
Ya en la historia de la infancia o prehistoria, son visibles
las coordenadas del Evangelio. Como una obertura, entona
tanto la dimensión cristológica como eclesiológica del Evan-
gelio. Así se muestra el relato lucano de la infancia no sólo
como actualización y contextualización de la espiritualidad
prejudía de los pobres, sino también como una destacada in-
troducción a la lectura del encuentro con el mensaje del rei-
nado de Dios en la proclamación de Jesús.
El relato lucano de la infancia... 31
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 31
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 32
Lc 4,16-30: Jesús proclama 
el año de gracia del Señor
Córdula Langner
1. Introducción
Después de las tentaciones en el desierto, Jesús regresó
–por la fuerza del Espíritu– a Galilea, donde enseñaba en las
sinagogas, alabado por todos (4,14-15). También fue a Naza-
ret y anunció allí, en la sinagoga, la era de la salvación, que
comienza con la proclamación del año de gracia del Señor.
Lucas formula aquí las primeras palabras de Jesús en públi-
co: esta «homilía» es un resumen de todo lo que Jesús hará y
enseñará en el Evangelio. Aunque los oyentes de la sinagoga
de Nazaret reaccionan con rechazo, el año jubilar, sin embar-
go, ya está proclamado, y por eso nos anima a nosotros a vivir
y actuar según la voluntad salvífica de Dios para el mundo, es
decir, a restablecer la justicia.
2. El texto: Lc 4,16-30
S 1
16 Vino a Nazará,
donde se había criado
y entró
según su costumbre, en día de sábado, en la sinagoga,
y se levantó para hacer la lectura.
17 Y le entregaron el volumen del profeta Isaías
y desenrollándolo
encontró el pasaje
donde estaba escrito:
18 El Espíritu del Señor está sobre mí,
porque me ha ungido
para anunciar (la Buena Nueva) a los pobres,
me ha enviado
a proclamar la liberación a los cautivos
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 33
y dar vista a los ciegos
a poner a los oprimidos en libertad 
(remisión)
19 a proclamar un año de gracia del Señor.
20 Y enrolló el volumen,
lo entregó al ministro,
y se sentó;
y los ojos de todos en la sinagoga estaban fijos en él.
S 2
21 Pero comenzó a decirles:
Hoy se ha cumplido el pasaje de la Escritura que 
acabáis de escuhar.
22 Y todos daban testimonio de él
y se admiraban de las palabras llenas de gracia
que salían de su boca,
y decían:
¿No es éste el hijo de José?
23 Y les dijo:
Seguramente me recordaréis este refrán:
Médico, cúrate a ti mismo.
Las cosas que hemos oído que has hecho en 
Cafarnaún
¡hazlas también aquí, en tu patria!
S 3
24 Pero él les dijo:
En verdad os digo:
Ningún profeta es aceptado en su patria.
25 En verdad os digo:
Muchas viudas había en los días de Elías 
en Israel,
cuando se cerró el cielo por tres 
años y seis meses,
y hubo gran hambre en todo el país;
26 y a ninguna de ellas fue enviado Elías,
sino, en Sarepta de Sidón, a una 
mujer viuda.
27 Y muchos leprosos había en Israel, en 
tiempos del profeta Eliseo,
y ninguno de ellos fue curado,
sino Naamán, el Sirio.
S 4
28 Y se llenaron todos de ira en la sinagoga, oyendo estas 
cosas,
29 y levantándose, lo arrojaron fuera de la ciudad
y lo llevaron hasta un precipicio del monte
sobre el que se levantaba su ciudad,
para despeñarlo;
S 5
30 pero él, pasando por medio de ellos, se marchó.
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas34
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 34
3. La estrategia sintáctico-narrativa 
de la comunicación (la estructura del texto)
La comunicación entre autor y lector1 que ofrece este tex-
to por medio de su estrategia formal y narrativa se desarrolla
en varios pasos de comunicación y en niveles diferentes. En
este texto hallamos el nivel de narración, que cuenta la ac-
ción, y el nivel de diálogo, que contiene los discursos de las
personas narradas2. El nivel de diálogo forma parte del nivel
de narración: el autor no habla directamente, sino indirec-
tamente por medio de las personas narradas. En este texto
el estilo directo sólo está presente –excepto un comentario
breve en forma de una pregunta de los oyentes de la sinago-
ga– en el discurso de Jesús. Otro elemento importante de la
estrategia comunicativa son las palabras y los campos semán-
ticos. Dentro del texto se desarrollan relaciones por medio de
las repeticiones de palabras (por ejemplo, volumen) o por me-
dio de palabras contrarias (por ejemplo, levantarse-sentarse,
desenrollar-enrollar) y por campos semánticos (por ejemplo,
enviar). Además, el texto relaciona palabras o campos se-
mánticos con otros textos: al leer, el lector asocia lo que ya
había leído antes. Así se desarrollan líneas de interpretación.
En el Evangelio de Lucas se menciona varias veces la palabra
«Espíritu»; en el proceso de lectura, el lector se acordará de es-
tos textos. Con frecuencia los textos neotestamentarios re-
lacionan sus narraciones con textos del Antiguo Testamento o
con otra literatura antigua. En el texto presente encontramos
una relación directa con el Antiguo Testamento en la cita de
Isaías. Por fin, el ámbito religioso y sociocultural forma el
marco de la interpretación de un texto. La relación con otras
asociaciones más –esperanzas, expectativas, deseos, etc.–
abre horizontes nuevos de interpretación, también para los
lectores de hoy.
Lc 4,16-30: Jesús proclama el año de gracia del Señor 35
1 Cf. GRILLI, M., «Evento comunicativo e interpretazione di un testo bi-
blico», en: Gr 83,4 (2002) 655-678, e íd., «Ciencias de la comunicación e in-
terpretación de un texto bíblico», en: GRILLI, M./DORMEYER, D., Palabra de
Dios en lenguaje humano (Estella 2004).
2 Además se halla el nivel de comentario (directo y indirecto) del autor
como primer nivel de mayor importancia, en el cual el autor se dirige di-
rectamente al lector. Algunos ejemplos de estos comentarios directos del
autor son: Lc 1,1-4; Hch 1,1; Mc 13,14; Jn 20,30-31; 21,24-25. Algunos
ejemplos de los comentarios indirectos del autor son las citas de las Escri-
turas, «que se ha cumplido la Escritura» (por ejemplo, Mt 26,56; Mc 14,49;
Lc 22,37; Jn 19,24, y más) o que «los discípulos no entendieron» (por ejem-
plo, Jn 12,16; Lc 9,45 y más). En el texto que analizamos no hay comenta-
rios del autor.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 35
La narración de la enseñanza de Jesús en la sinagoga de
su ciudad de origen, con el rechazo de los oyentes, se en-
cuentra también en el Evangelio de Marcos (6,1-6a) y en el
Evangelio de Mateo (13,54-58). En comparación con los de-
más sinópticos,Lucas amplió mucho su versión. Él añadió la
cita de Isaías, un refrán, los ejemplos de la viuda y del lepro-
so y la intención de la gente de matar a Jesús. En cambio, Lu-
cas redujo mucho la pregunta de la gente por la procedencia
familiar de Jesús. Mientras que esta narración se encuentra
en los Evangelios de Mc y Mt intercalada en otras narracio-
nes sobre los hechos y las enseñanzas de Jesús, Lucas la pone
al principio de la actividad pública de Jesús. Por medio de la
cita de Isaías, Lucas presenta y clasifica programáticamente
el Evangelio3. Además, es posible entender la narración de la
visita de Jesús en la sinagoga de Nazaret como anticipación
de la unidad entre el primer libro del Evangelio y el segundo
libro de los Hechos de los Apóstoles4: el Espíritu guía asimis-
mo a los discípulos de Jesús, que anuncian el Evangelio tam-
bién a los paganos.
A nivel formal de la estrategia comunicativa, esta narra-
ción se divide en cinco pasos de comunicación (secuencias de
narración/párrafos/escenas), que marco con una «S» (= se-
cuencia). La comunicación de una narración se desarrolla en
varios pasos/etapas/secuencias. Una secuencia de comunica-
ción (un párrafo o una escena) dentro de una narración es
una etapa propia con una intención de comunicación propia,
es decir, con una información propia en el conjunto de la na-
rración, a lo que llamo «secuencia de narración»5. Un paso
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas36
3 Cf. DILLMANN, R./MORA PAZ, C., Das Lukas-Evangelium. Ein Kommen-
tar für die Praxis (Stuttgart 2000), 81ss y BOVON, F., Das Evangelium nach Lu-
kas (Lk 1,1-9,50) (EKK III/1; Zúrich 1989) 216.
4 Cf. PETRACCA, V., Gott oder das Geld. Die Besitzethik des Lukas (TANZ
39; Tubinga 2003) 47ss y 63; además BAARLINK, H., «Die Bedeutung der Pro-
phetenzitate in Lk 4,18-19 y Apg 2,17-21 für das Doppelwerk des Lukas», en:
VERHEYDEN, J. (ed.), The unity of Luke-Acts (Bibliotheca Ephemeridum theo-
logicarum Lovaniensium 142; Lovaina 1999) 483-491, y KODELL, J., OSB,
«Luke’s Gospel in a Nutshell (Lk 4,16-30)», en: Biblical theology bulletin 13,1
(1983) 16-18, esp. 16 y 18.
5 Por eso define M. Grilli: «Noi intendiamo con sequenza la parte di un
testo che ha una funzione comunicativa propria all’interno della comunica-
zione globale di un testo. La sequenza corrisponde a una tappa del percorso
comunicativo. La comunicazione è un percorso a tappe: le varie sequenze co-
rrispondono alle diverse tappe del percorso di comunicazione.» GRILLI, M., Il
cammino del figlio dell’uomo e la sequela sulla strada. Lettura di Mc 8,27-10,52
a partire dalla sua istanza comunicativa (Roma: PUG 2003) 38, nota 2 y 19,
nota 2.
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 36
nuevo de comunicación, es decir, una secuencia nueva de
narración, está marcada a nivel formal, por ejemplo, por el
«pero» adversativo (de.), o a nivel del contenido, por ejemplo,
por el cambio de los sujetos actuantes, por el cambio de los
temas o de las acciones6. Una secuencia de narración abar-
ca una o varias «secuencias de acción», que están marcadas
por los verbos (también en sus formas diferentes; por ejem-
plo, participios o gerundios) y están estructuradas y relacio-
nadas, por ejemplo, por «y» (kai.). En el texto presente mar-
co las secuencias de acción escribiendo cada verbo en una
línea propia.
La primera secuencia (S 1 = vv. 16-20) narra, como intro-
ducción, la situación de la visita de Jesús a la sinagoga y
contiene como mensaje central la larga lectura del libro de
Isaías. La segunda secuencia (S 2 = vv. 21-23), separada de la
primera por el «pero» adversativo (de.), abarca la interpreta-
ción del texto de Isaías por Jesús, la reacción de los oyen-
tes y la primera reacción de Jesús a la reacción de los oyen-
tes. La tercera secuencia (S 3 = vv. 24-27) comienza también
con «pero» (de.) e interrumpe el discurso de Jesús que había
empezado antes, y lo continúa, pero con un cambio de tono.
La cuarta secuencia (S 4 = vv. 28-29) narra la reacción de los
oyentes a la segunda parte del discurso de Jesús: a la prime-
ra parte de su interpretación reaccionaron de modo positivo,
pero aquí cambian su opinión y se transforma en ira que cris-
taliza en la intención de matar a Jesús. La quinta secuencia
(S 5 = v. 30) está marcada por «pero» (de.) y narra la reacción
de Jesús al propósito homicida.
3.1. La visita de Jesús a la sinagoga de Nazaret
La primera secuencia (vv. 16-20) está marcada a nivel for-
mal por la «y» (kai.) de la parataxis: cada secuencia nueva de
acción empieza con «y» (kai.), lo que la relaciona con la se-
cuencia anterior. F. Bovon y V. Petracca interpretan como
«historiografía biográfica»7 la mención de «nacerá donde se
había criado».
Lc 4,16-30: Jesús proclama el año de gracia del Señor 37
6 Cf. DORMEYER, D., «Hermeneutische und methodische Grundlagen der
handlungsorientierten Exegese» en: DORMEYER, D./GRILLI, M., Gottes Wort in
menschlicher Sprache (Stuttgart 2004) 132ss.
7 Cf. BOVON, F., Das Evangelium nach Lukas, 209 y PETRACCA, V., Gott oder
das Geld, 48, pero yo no hablaría –como V. Petracca– de la «condenación de
Israel».
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 37
Esta secuencia incluye algunas palabras que se repiten;
por ejemplo, «sinagoga» (v. 16 y v. 20) y «libro» (v. 17 y v. 20).
Además, se encuentran palabras relacionadas; por ejemplo, «se
levantó-se sentó» y «desenrollando-enrolló». Mirándolo de cer-
ca, encontramos una estructura concéntrica8:
v. 16a: Jesús entró a la sinagoga
v. 16b: Jesús se levantó
v. 17a: le entregaron el libro del profeta Isaías
v. 17b: Jesús desenrolló el libro
vv. 18-19: cita de Isaías
v. 20a: Jesús enrolló el libro
v. 20b: Jesús devolvió el libro
v. 20c: Jesús se sentó
v. 20d: en la sinagoga, todos los ojos estaban fijos en él
La cita de Isaías se encuentra en el centro de esta estruc-
tura, por eso tiene una importancia especial: pone de relieve
que en el Evangelio –durante las narraciones que siguen– se
realizará todo eso que aquí anunció programáticamente Je-
sús. Así se cumplirán las escrituras: en 6,20 y 7,22 será anun-
ciado a los pobres el Evangelio; en 7,21.22 y 18,35-43 se dará
vista a los ciegos; en 7,21; 8,2; 8,26-39 y 9,37-43 Jesús libera-
rá a muchas personas de los malos espíritus9; y por fin se en-
cuentran muchos ejemplos de las remisiones de pecados rea-
lizadas por Jesús; por ejemplo, 5,20-24; 7,47.48; 24,4710.
La cita de Isaías consiste en una parte de Is 61,1-2 (según
la LXX) en la cual se insertó Is 58,6. En muchos manuscritos
falta la parte de Is 61,1 «a vendar los corazones rotos»; en
cambio, otros manuscritos muy importantes testimonian este
versículo. Además de Is 61,2, falta la parte «día de venganza
de nuestro Dios» y «para consolar a todos los que lloran».
Estas omisiones causaron discusiones entre los especialistas:
¿por qué faltan aquí? La omisión del «día de venganza» en la
cita de Lucas, en mi opinión, es inteligible, porque en el con-
texto del Antiguo Testamento este día de venganza se refiere
Riqueza y solidaridad en la obra de Lucas38
8 A esta estructura concéntrica señalan también PETRACCA, V., Gott oder
das Geld, 44 y SCHWEIZER, E., Das Evangelium nach Lukas (NTD 3; Gotinga
31993) 56.
9 ERNST, J., Das Evangelium nach Lukas (RNT; Regensburg 61993) 131,
entiende «liberación» en el sentido de «curación de los malos espíritus como
señal de la salvación».
10 SCHWEIZER, E., Das Evangelium nach Lukas, 58, entiende «libertad a
los oprimidos» en el sentido de «remisión a los afligidos». Cf. también LEROY,
H., «avfi,hmi/av.fesij», en: EWNT I, 21992, 436-441, esp. 437ss, que confirma el
uso de la palabra «afesis» según la LXX en el sentido de «remisión».
Texto Riqueza y solidaridad 17/1/06 13:36 Página 38
a las naciones, a los pueblos paganos (cf. Is 63-66), mientras
que aquí, en el Evangelio de Lucas, se dirige implícitamente
–y en los Hechos de los Apóstoles explícitamente– a todas las
naciones, a los pueblos paganos. La asociación e inserción del
«día de venganza a los pueblos» sería muy inoportuna

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