La inmunidad

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La inmunidad se refiere a la capacidad del cuerpo humano (y de otros organismos) para 
defenderse contra microorganismos patógenos, como bacterias, virus, hongos y 
parásitos, así como contra sustancias nocivas como toxinas. Esta respuesta del sistema 
inmunológico es crucial para mantener la salud y prevenir enfermedades. 
Existen dos Apos principales de inmunidad: innata y adquirida. 
1. Inmunidad Innata: También conocida como inmunidad natural, es la primera 
línea de defensa del cuerpo contra los patógenos. Incluye barreras Hsicas y 
químicas, como la piel, las mucosas y las enzimas en fluidos corporales, que 
actúan para prevenir la entrada y propagación de microorganismos. Además, las 
células del sistema inmunológico innato, como los glóbulos blancos llamados 
fagocitos y las células asesinas naturales, responden rápidamente a la presencia 
de patógenos. 
2. Inmunidad Adquirida: También conocida como inmunidad adaptaAva, se 
desarrolla después de la exposición inicial a un patógeno y se caracteriza por una 
respuesta específica y personalizada contra ese patógeno en parAcular. La 
inmunidad adquirida se subdivide en dos Apos: inmunidad humoral y inmunidad 
celular. 
• Inmunidad Humoral: Implica la producción de anAcuerpos por parte de 
células llamadas linfocitos B. Los anAcuerpos son proteínas que se unen 
a los patógenos y ayudan a neutralizarlos, lo que facilita su eliminación 
por otros componentes del sistema inmunológico. 
• Inmunidad Celular: Implica la acción de células llamadas linfocitos T, que 
son capaces de reconocer y destruir células infectadas por patógenos. 
También ayudan a regular y coordinar la respuesta inmunológica. 
La inmunidad adquirida también Aene una caracterísAca importante llamada memoria 
inmunológica. Después de un primer encuentro con un patógeno, el sistema 
inmunológico puede recordar ese patógeno específico. Esto significa que si el mismo 
patógeno ingresa nuevamente al cuerpo en el futuro, el sistema inmunológico puede 
montar una respuesta más rápida y eficiente, lo que conduce a una protección más 
efecAva contra la infección. 
La inmunidad es un componente esencial de la salud y la supervivencia de los 
organismos y es el fundamento de las vacunas, que aprovechan la memoria 
inmunológica para proporcionar protección contra enfermedades infecciosas sin que la 
persona tenga que enfermarse primero.