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Estudio Económico de América Latina y el Caribe ▪ 2022 1 ARGENTINA 1. Rasgos generales de la evolución reciente La economía argentina creció un 10,4% en 2021, luego de tres años consecutivos de contracción por la combinación de la crisis cambiaria que comenzó en 2018 y la pandemia de enfermedad por coronavirus (COVID-19) en 2020. La recuperación de 2021 obedeció al avance de la campaña nacional de vacunación, al gradual levantamiento de las restricciones a la circulación, a las políticas oficiales de asistencia a los sectores más afectados por la crisis y a la mejora del comercio internacional, que repercutieron positivamente en la inversión, el consumo privado y las exportaciones. En este marco, y a partir del incremento de los precios internacionales de las materias primas, la inflación promedio del año aumentó del 42% en 2020 al 48,4% en 2021. En los primeros meses de 2022, los indicadores de actividad económica continuaron mejorando. El Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE), indicador que brinda un adelanto de la evolución del PIB, creció un 6,2% interanual en los primeros cinco meses del año y se ubicó un 2,2% por encima de los niveles previos a la pandemia (cinco primeros meses de 2019). No obstante, este dinamismo fue menor que el observado en los meses previos, luego de que perdiera peso el efecto positivo del levantamiento de las restricciones a la circulación por la pandemia. En ese mismo período, el Gobierno argentino alcanzó un importante acuerdo de Servicio Ampliado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para el pago del crédito stand-by solicitado en 2018, en virtud del cual se alivian los vencimientos en moneda extranjera en los próximos años. Un aspecto destacable de este acuerdo es que, si bien contiene compromisos de política macroeconómica que son condición para recibir los desembolsos pactados, no exige reformas estructurales, por ejemplo, en la legislación laboral o en el sistema previsional, como es habitual en este tipo de programas. Desde el segundo trimestre de 2022, el aumento de los precios internacionales de los alimentos, la energía y los fertilizantes, debido al inicio de la guerra en Ucrania, junto con la incertidumbre a nivel general, se tradujeron en un deterioro de un conjunto de variables macroeconómicas. La inflación aumentó al 59,3% en el acumulado de los primeros siete meses del año. El déficit fiscal primario se amplió hasta el 1% del PIB en el primer semestre de 2022 (frente al 0,4% en igual período del año anterior). A su vez, el superávit comercial del primer semestre del año cayó un 54%. Esto contribuyó a que las reservas internacionales se mantuvieran en niveles reducidos y condujo a la aplicación de medidas para reducir los pagos de un conjunto de importaciones, así como a un sesgo más contractivo de la política monetaria. Para 2022 se proyecta que el PIB de la Argentina crecerá un 3,5%, principalmente por el arrastre estadístico positivo del año anterior del consumo público y privado, la inversión y las exportaciones. Esta previsión está sujeta a que no se produzcan disrupciones en el frente externo a raíz de la intensificación del impacto de la guerra en Ucrania y el sesgo contractivo de la política monetaria de los Estados Unidos, así como al reducido margen de maniobra macroeconómica local. 2 Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) 2. La política económica En 2021, la política económica tuvo como objetivo readecuar los programas de asistencia a los sectores más afectados por la pandemia durante el año anterior, cuando la situación fue más crítica, favorecer la recuperación de la actividad y aliviar el impacto del aumento de los precios internacionales de los alimentos. En los primeros meses de 2022, la política económica se centró en continuar con el proceso de normalización de la deuda pública y en contener las repercusiones del estallido de la guerra en Ucrania. a) La política fiscal En 2021 el déficit fiscal primario se redujo, fruto de la recuperación económica, del aumento de los precios internacionales de los principales productos de exportación y del mayor grado de focalización de las políticas de asistencia a los sectores más afectados por la pandemia. El déficit primario se ubicó en un 3% del PIB, frente a un déficit del 6,4% en el mismo período del año anterior. Esta evolución obedeció a un incremento del 18% en los ingresos de la administración central y del 1% en el gasto primario, ambos medidos en términos reales. Dada la caída del 15% en términos reales de los intereses de la deuda, por la reestructuración de los pasivos en moneda extranjera realizada en 2020, el déficit financiero se ubicó en el 4,5% del PIB en 2021, por debajo del 8,3% registrado en el mismo período de 2020. En 2021, el Gobierno nacional realizó cambios en las políticas de asistencia a los sectores más afectados por la pandemia para darles un mayor grado de focalización. Las principales políticas fueron el Programa de Recuperación Productiva 2 (REPRO 2), mediante el cual el Estado pagaba parte de su salario al personal de las empresas con una caída en la facturación y a las empresas del sector de la salud, una iniciativa que también incluyó a trabajadores independientes; el Programa Nacional de Inclusión Socioproductiva y Desarrollo Local “Potenciar Trabajo”, una iniciativa destinada a estimular la participación en proyectos productivos en la que el Estado paga a cada persona beneficiaria la mitad del salario mínimo; y el Programa Alimentar, una transferencia monetaria destinada a las familias con hijos en situación vulnerable que complementa al programa Asignación Universal por Hijo (AUH). En 2021 también se otorgaron bonos a las jubilaciones más bajas; se implementó la jubilación anticipada para personas desocupadas que ya contaran con 30 años de aportes; se lanzó el Programa Registradas, con el objetivo de formalizar y fomentar el empleo doméstico en casas particulares; se otorgó un complemento a las asignaciones familiares, y se anunció un conjunto de cambios para aliviar la carga del impuesto a las ganancias de las personas físicas. En el primer semestre de 2022, el déficit fiscal primario aumentó al 1% del PIB, frente al 0,4% en igual período del año anterior (0,8% si se excluyen los ingresos por el Aporte Solidario y Extraordinario). Esta dinámica respondió a un mayor incremento del gasto primario (12%) frente a los ingresos (5%), ambos en términos reales. El aumento del gasto primario obedeció a las prestaciones de seguridad social, que aumentaron un 24% interanual, y a los subsidios a la energía, que se incrementaron un 30%. El incremento del primero estuvo asociado a las actualizaciones automáticas de los beneficios establecidos por ley y a un conjunto de medidas aplicadas por el Gobierno nacional para morigerar el impacto del aumento de la inflación en la población más vulnerable. Entre estas medidas se incluyen un conjunto de bonos para los jubilados y pensionados que reciban prestaciones totales que no superen los dos haberes mínimos; Estudio Económico de América Latina y el Caribe ▪ 2022 3 un complemento para las asignaciones familiares; un refuerzo de ingresos para los desempleados, los trabajadores informales, los trabajadores de casas particulares y los monotributistas de las categorías más bajas, y un aumento del 50% en el monto de la prestación del Programa Alimentar. Por otro lado, el incremento de los subsidios a la energía obedeció al aumento de los precios internacionales tras el inicio de la guerra en Ucrania y a un menor ajustede las tarifas respecto de la inflación. A raíz de esto, el Gobierno nacional implementó un nuevo sistema de tarifas a los servicios públicos, que incluye una segmentación por poder adquisitivo y un tope por nivel de consumo, con el objetivo de reducir el gasto en subsidios y a la vez disminuir el impacto en los hogares de menores ingresos. El Gobierno nacional también implementó otro conjunto de medidas con efectos fiscales para atenuar el impacto del incremento de los precios internacionales de los alimentos, entre las que se incluyen la creación de un Fondo Estabilizador del Trigo Argentino, con el cual se subsidia el precio interno de este cereal, y un incremento del 31% al 33% de los derechos de exportación de la harina y aceite de soja. Al inicio de 2022, el Gobierno argentino alcanzó un importante acuerdo con el FMI para continuar con el proceso de normalización de su deuda pública. El acuerdo es por un programa de Servicio Ampliado de 45.000 millones de dólares y tiene como objetivo financiar el pago de los vencimientos del acuerdo stand-by solicitado en 2018. Los desembolsos de este programa y los compromisos de política abarcan un período de dos años y medio, que coinciden con el período de repago del crédito anterior. Luego, los vencimientos del nuevo programa se extienden desde 2026 hasta 2034, lo que otorga un período de gracia de cuatro años y medio para comenzar a repagar el capital. El acuerdo incluye revisiones trimestrales con compromisos de política fiscal, monetaria y de reservas internacionales que deberán cumplirse para acceder a los desembolsos. En junio, el organismo anunció que el país había cumplido todas las metas cuantitativas del programa para el primer trimestre de 2022, lo que lo habilitaba a recibir el segundo desembolso del nuevo programa. A diferencia de otros programas similares del organismo, el acuerdo firmado por la Argentina no incluye compromisos de reformas estructurales. Por otro lado, en el primer semestre de 2022, el Gobierno argentino llegó a un acuerdo con el Club de París para diferir los pagos de deuda hasta septiembre de 2024. El objetivo es alcanzar un entendimiento durante 2022 que contemple un nuevo mecanismo de repago de los compromisos. b) La política monetaria La política monetaria tuvo un sesgo expansivo en 2021. El banco central mantuvo la tasa de interés de política monetaria en un 38% nominal anual (equivalente a una tasa efectiva anual del 45,5%), por debajo de la inflación promedio del año, del 48,4%. En el mismo período, la autoridad monetaria dio asistencia financiera al tesoro nacional para hacer frente al gasto originado por el paquete de medidas fiscales para apuntalar la recuperación económica. Este financiamiento se realizó mediante el otorgamiento de adelantos transitorios y la transferencia de utilidades de la entidad. En 2021, el Gobierno nacional y el banco central continuaron impulsando un conjunto de medidas y programas para ampliar la oferta de crédito al sector privado en condiciones más favorables que las del mercado. Esta ampliación incluyó un conjunto de programas del Ministerio de Desarrollo Productivo a través de los cuales se otorgaron nuevos préstamos, se bonificaron los costos financieros y se concedieron garantías de crédito, que se financiaron a 4 Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) través del Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP) y del Fondo de Garantías Argentino (FOGAR). Por otra parte, el banco central implementó la Línea de Financiamiento para la Inversión Productiva (LFIP), que establece que los bancos deben mantener un saldo mínimo de financiamiento destinado a las microempresas y pequeñas y medianas empresas (mipymes) para financiar el capital de trabajo y la adquisición de bienes de capital. En 2022, en respuesta al aumento de la inflación, el banco central decidió subir la tasa de interés de política. En agosto, dicha tasa alcanzó el 69,5% anual (equivalente a una tasa efectiva anual del 96,8%), luego de que la inflación interanual de julio alcanzara el 71,0%. Este último incremento llevó a que la tasa mínima para los depósitos a plazo fijo de particulares de hasta 10 millones de pesos —fijada en función de la tasa de política— alcanzara un 69,5% (tasa efectiva anual del 96,6%). Como consecuencia de la aceleración del incremento de precios, las colocaciones de depósitos a plazo fijo indexados por inflación aumentaron significativamente. En los primeros siete meses del año, este segmento creció un 35,5% en términos reales. Por otro lado, entre los créditos en pesos al sector privado se destacó el incremento de las líneas prendarias asociadas a la adquisición de automotores, maquinarias y bienes de capital, en el marco de las medidas de financiamiento implementadas por el Ministerio de Desarrollo Productivo y el banco central. c) La política cambiaria En 2021, la política cambiaria del banco central estuvo enfocada en reducir el ritmo de incremento del tipo de cambio oficial para disminuir las presiones inflacionarias. El tipo de cambio nominal aumentó un 23,3% interanual a diciembre de 2021, por debajo de la inflación de ese mismo período, de un 50,9%. Como consecuencia, el tipo de cambio real multilateral cayó un 17,2%, aun cuando la inflación de los socios comerciales también registró un incremento. El banco central realizó compras netas de moneda extranjera por 5.000 millones de dólares en 2021, y tras el pago de vencimientos de deuda, la acreditación de los derechos especiales de giro (DEG) asignados por el FMI y el cómputo de otros factores contables, las reservas internacionales tuvieron un leve aumento de 300 millones de dólares y llegaron a los 39.700 millones de dólares a fin de año, equivalentes a un 8,1% del PIB. En 2021, el banco central y la Comisión Nacional de Valores (CNV) adoptaron un conjunto de medidas para reducir las presiones sobre los tipos de cambio paralelos (cuya brecha respecto del tipo de cambio oficial llegó a alcanzar el 100%), que incluyeron modificaciones a los plazos de liquidación de las operaciones con bonos en moneda extranjera, entre otras disposiciones. En 2022, el ritmo de aumento del tipo de cambio oficial se aceleró, en línea con el objetivo del banco central de atenuar la apreciación de la moneda local luego del aumento de la inflación. En los primeros siete meses del año, el tipo de cambio nominal aumentó un 26,1%, en tanto que la inflación fue del 46,2%. Esta dinámica, junto con los mayores niveles de inflación de los socios comerciales, llevó a una disminución de un 10,2% del tipo de cambio real multilateral. Las ventas de divisas del banco central en el mercado cambiario, los desembolsos netos del FMI (tras la devolución de los pagos de capital realizados el año anterior en virtud del acuerdo stand-by) y otras operaciones de deuda del sector público se tradujeron en los primeros siete meses del año en una caída de 1.400 millones de dólares en las reservas internacionales, que llegaron a 38.200 millones de dólares, equivalentes al 6,5% del PIB. Estudio Económico de América Latina y el Caribe ▪ 2022 5 Entre las medidas cambiarias implementadas por el Gobierno nacional y el banco central en 2022, se destacan el Régimen de Acceso a Divisas para Producción Incremental de Hidrocarburos, cuyo objetivo es ampliar el acceso al mercado cambiario para las empresas del sector que invierten y aumentan su producción, y un conjunto de disposiciones normativas que eximen a las empresas y a los trabajadores independientes del sector de los servicios de la obligación de liquidar en el mercado cambiario oficial una parte de sus ingresos del exterior, con el objetivo depotenciar la producción y el ingreso de divisas provenientes de estas actividades. A mediados de 2022 también se instrumentó una medida para reducir los pagos al contado de las importaciones y priorizar el acceso al mercado cambiario para los pagos de las importaciones de energía y de insumos para la producción, en un contexto de escasez de reservas internacionales. La medida estableció que las grandes empresas deberán buscar financiamiento para pagar sus importaciones cuando estas superen en más de un 5% las que registraron en 2021 (medidas en dólares), a excepción de las importaciones con licencias no automáticas, que están sujetas a mayores controles y deberán financiarse en su totalidad a un plazo de seis meses. Las pymes quedarán exceptuadas de la exigencia de financiar sus importaciones, siempre y cuando el incremento de valor no supere el 15% con respecto a 2021, con un límite de hasta un millón de dólares. La medida también incluyó restricciones para los pagos de importaciones de bienes suntuarios por un año, entre otras disposiciones adicionales. Además, en el segundo semestre de 2022 se implementó una medida para favorecer el ingreso de divisas por parte de turistas extranjeros, que consistió en permitirles acceder a una cotización del tipo de cambio más elevada, que surge de la operatoria de bonos en el mercado financiero. d) Otras políticas En 2021 se implementó otro conjunto de políticas productivas y sociales. Entre ellas se destacan la capitalización, por parte del Gobierno nacional y del gobierno de la provincia de Mendoza, de la empresa IMPSA, dedicada a la fabricación de equipamiento hidroeléctrico, eólico, nuclear y para la industria de hidrocarburos; la eliminación de los derechos de exportación para los servicios producidos en el país y consumidos en el exterior a partir de 2022; la renovación hasta 2038 del régimen de promoción industrial de la provincia de Tierra del Fuego, y el lanzamiento del programa Previaje, un subsidio dirigido a la compra de servicios turísticos para destinos nacionales a través del cual se busca apuntalar la recuperación del sector, que estuvo entre los más golpeados por la pandemia. En el primer semestre de 2022, se destacó el anuncio del inicio de las obras del primer tramo de un nuevo gasoducto que conectará la zona del yacimiento de hidrocarburos no convencionales Vaca Muerta con la región central del país y que permitirá aumentar el abastecimiento interno de gas natural desde mediados de 2023. Asimismo, en respuesta al aumento de la inflación, el Gobierno nacional alcanzó un conjunto de acuerdos de precios con empresas productoras de bienes de primera necesidad. 3. La evolución de las principales variables a) La evolución del sector externo En 2021, el superávit de la cuenta corriente de la balanza de pagos representó un 1,4% del PIB, frente al 0,9% registrado el año anterior. La mejora del saldo de la cuenta corriente se debió a una reducción del déficit de la balanza de rentas (del 2,6% al 2% del PIB) 6 Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) por el nuevo perfil de vencimientos de la deuda del sector público nacional, luego de la reestructuración de la deuda pública en moneda extranjera en 2020. El leve aumento del déficit por servicios, del 0,6% al 0,7% del PIB, contrarrestó parcialmente esta mejora y obedeció al gradual levantamiento de las restricciones a la movilidad transfronteriza impuestas por la pandemia, que redundó en una recuperación de los flujos por viajes. Por otro lado, el superávit de bienes se mantuvo constante en un 3,8% del PIB, aun cuando en términos absolutos registró un incremento de 4.000 millones de dólares. El valor de las exportaciones de bienes creció un 42% durante 2021, fruto del aumento del 25% en los precios y del 13% en el volumen. La mayoría de los rubros exportadores crecieron en precios y en volumen. La excepción fueron los combustibles y la energía, cuyos volúmenes se contrajeron un 14% con respecto al año anterior. Por su parte, las importaciones de bienes crecieron un 49%, tanto en volumen (30%) como en precio (14%). Si bien todas las importaciones clasificadas por usos económicos aumentaron en términos de valor y de volumen, se destacó el incremento del 121% en los combustibles, impulsado tanto por el volumen (68%) como por los precios (26%). En lo referido a los volúmenes, las importaciones de combustibles también se ubicaron muy por encima de los niveles previos a la pandemia (2019), a saber, un 33% más. La cuenta financiera (descontada la variación de los activos de reserva) registró un déficit del 1,1% del PIB en 2021, como resultado del déficit equivalente al 2,1% del PIB en el rubro inversiones de cartera y otra inversión, que se vio parcialmente compensado por el superávit del 1,1% en la inversión directa. En particular, la inversión extranjera directa (IED) de 2021, equivalente a un 1,3% del PIB, mejoró respecto del mismo período del año anterior, cuando representó un 1% del producto. Las reservas internacionales no registraron cambios significativos con respecto al cierre del año anterior, dado que el superávit de la cuenta corriente fue similar al déficit por los conceptos de la cuenta financiera mencionados anteriormente y el ajuste por errores y omisiones. En el primer semestre de 2022, el saldo comercial de bienes exhibió un superávit de 3.100 millones de dólares, un 54% inferior al registrado en igual período del año anterior. La disminución del superávit comercial obedeció a que las importaciones crecieron más que las exportaciones (un 44% y un 26% en términos interanuales, respectivamente). Considerando el valor, todas las exportaciones clasificadas por rubros y las importaciones clasificadas por usos económicos crecieron en el primer semestre del año. b) El crecimiento económico El PIB creció un 10,4% en 2021, impulsado por la inversión (33,4% interanual), el consumo privado (10,0%), las exportaciones (9,2%) y el consumo público (7,1%). El aumento de las importaciones, del 22,0% interanual, compensó parcialmente la evolución de los componentes anteriores. Por el lado de la oferta, todos los sectores de actividad registraron variaciones positivas en 2021. Se destacaron los casos de cuatro sectores que superaron los niveles previos a la pandemia (2019): el comercio (crecimiento del 7,5% respecto a 2019), la industria manufacturera (7%), la electricidad, el gas y el agua (4,7%), y las actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler (2,3%). La recuperación de los sectores de los servicios asociados al turismo y a las actividades culturales y recreativas fue más lenta. Si bien en 2021 estos sectores crecieron, se ubicaron por debajo de los niveles previos a la pandemia: Estudio Económico de América Latina y el Caribe ▪ 2022 7 la actividad de los hoteles y restaurantes aún era un 36,9% inferior a la registrada en 2019, y la de los servicios comunitarios, sociales y personales era un 21,1% más baja. En los primeros meses de 2022, la recuperación de la actividad económica continuó, pero a un menor ritmo. El EMAE, como ya se indicó, creció un 6,2% interanual en los primeros cinco meses del año y superó en un 2,2% los niveles anteriores a la pandemia que se observaron en el mismo período de 2019. Se destacó el elevado dinamismo del comercio y de la industria manufacturera, cuyos niveles de actividad en los primeros cinco meses de 2022 se ubicaron un 10,9% y un 9,7%, respectivamente, por encima de los registrados en el mismo período de 2019. c) La inflación, las remuneraciones y el empleo En 2021 el índice de precios al consumidor (IPC) aumentó un 48% en promedio, por encima del 42% del año anterior.El aumento de la inflación obedeció al incremento del precio internacional de las materias primas y a la recuperación económica, y ocurrió en un año de alzas moderadas de los precios regulados y del tipo de cambio oficial. Los rubros cuyos precios registraron un mayor incremento durante 2021 fueron los de prendas de vestir y calzado (65%), transporte (56%), restaurantes y hoteles (53%), salud (51%) y alimentos y bebidas no alcohólicas (50%). En 2022, la inflación aumentó debido al incremento de los precios internacionales de las materias primas desencadenado por la guerra en Ucrania, en un contexto de tensiones cambiarias internas. En los primeros siete meses de 2022 la inflación alcanzó un 59,3% interanual. Los salarios reales cayeron un 3,2% en promedio en 2021, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Los salarios del sector privado registrado disminuyeron un 2,0%, los del sector público un 2,8% y los del sector privado no registrado un 7,4%. El salario mínimo, vital y móvil presentó un aumento interanual de un 1,4% en términos reales, y la jubilación mínima cayó un 7,1% real en igual período. En el primer semestre de 2022, el salario real promedio aumentó un 1,2% interanual, impulsado por el sector público y el sector privado registrado, donde se observaron aumentos del 5,3% y el 1,6%, respectivamente. En agosto de 2022, el salario mínimo era de 47.850 pesos (342 dólares) y el haber jubilatorio mínimo de 37.525 pesos (268 dólares). Por último, la tasa de desempleo cayó del 11% en el cuarto trimestre de 2020 al 7% en el cuarto trimestre de 2021, en un período en que la tasa de actividad aumentó del 45% al 46,9%. Según el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, el empleo registrado aumentó un 2,1% interanual en 2021. En el primer trimestre de 2022, la tasa de desempleo descendió al 7% del 10,2% registrado en el mismo período del año anterior. Este descenso ocurrió en un marco en que la tasa de actividad sigue estando levemente por debajo de la registrada antes del impacto de la pandemia (un 46,5% en el primer trimestre de 2022, frente a un 47% en igual período de 2019). En los primeros cinco meses de 2022, el empleo registrado aumentó un 4,6% interanual, y un 3,4% si se lo compara con el del mismo período de 2019, antes de la irrupción de la pandemia. 8 Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) Cuadro 1 ARGENTINA: PRINCIPALES INDICADORES ECONÓMICOS 2013 2014 2015 2016 2017 2018 2019 2020 2021 a/ Tasas de variación anual b/ Producto interno bruto total 2,4 -2,5 2,7 -2,1 2,8 -2,6 -2,0 -9,9 10,4 Producto interno bruto por habitante 1,3 -3,5 1,7 -3,1 1,8 -3,5 -2,9 -10,8 9,4 Producto interno bruto sectorial Agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca 11,5 3,1 7,5 -4,7 3,4 -14,6 21,4 -7,7 0,7 Explotación de minas y canteras -4,0 1,6 1,6 -5,5 -3,5 0,8 1,4 -10,4 10,2 Industrias manufactureras 1,5 -5,1 0,8 -5,6 2,6 -4,8 -6,2 -7,7 15,9 Electricidad, gas y agua 0,5 2,0 4,4 1,0 -1,0 0,1 -3,1 1,4 3,2 Construcción -0,1 -2,0 3,0 -11,2 9,2 1,1 -4,2 -22,4 26,4 Comercio al por mayor y al por menor, restaurantes y hoteles 2,2 -6,3 3,3 -2,7 3,2 -3,6 -6,8 -10,7 14,4 Transporte, almacenamiento y comunicaciones 2,4 0,8 3,0 3,4 2,3 -3,2 -0,7 -17,0 7,3 Establecimientos financieros, seguros, bienes inmuebles y servicios prestados a las empresas 1,3 -1,1 1,7 -0,9 3,5 2,0 -3,9 -4,5 6,5 Servicios comunales, sociales y personales 1,9 1,7 2,8 1,8 1,2 0,7 0,1 -12,9 7,7 Producto interno bruto por tipo de gasto Gasto de consumo final 3,9 -3,3 4,2 -0,7 3,9 -2,2 -6,2 -11,9 9,5 Consumo del gobierno 5,3 2,9 6,9 -0,5 2,6 -1,9 -6,4 -1,9 7,1 Consumo privado 3,6 -4,4 3,7 -0,8 4,2 -2,2 -6,1 -13,7 10,0 Formación bruta de capital 4,7 -6,2 4,6 -5,1 15,5 -9,8 -20,0 -7,6 33,1 Exportaciones de bienes y servicios -3,5 -7,0 -2,8 5,3 2,6 0,6 9,8 -17,7 9,2 Importaciones de bienes y servicios 3,9 -11,5 4,7 5,8 15,6 -4,5 -18,7 -18,5 22,0 Inversión y ahorro c/ Porcentajes de PIB Formación bruta de capital 17,3 17,3 17,1 17,7 18,2 16,6 14,2 14,1 17,5 Ahorro nacional 15,2 15,6 14,3 15,0 13,4 11,5 13,4 14,9 18,9 Ahorro externo 2,1 1,6 2,7 2,7 4,8 5,2 0,8 -0,8 -1,4 Balanza de pagos Millones de dólares Balanza de cuenta corriente -13 124 -9 179 -17 622 -15 105 -31 151 -27 084 -3 710 3 313 6 800 Balanza de bienes 4 635 5 541 -785 4 416 -5 447 -743 18 228 14 631 18 696 Exportaciones FOB 75 928 68 440 56 809 57 960 58 662 61 801 65 156 54 945 77 987 Importaciones FOB 71 293 62 899 57 594 53 544 64 109 62 544 46 928 40 315 59 291 Balanza de servicios -5 329 -4 641 -5 815 -8 452 -9 695 -8 935 -4 865 -2 240 -3 476 Balanza de renta -13 165 -11 614 -12 105 -12 192 -16 380 -18 650 -17 892 -10 197 -9 927 Balanza de transferencias corrientes 734 1 535 1 083 1 123 371 1 245 819 1 119 1 508 Balanzas de capital y financiera d/ 1 301 10 374 12 716 29 416 45 707 10 031 -33 872 -11 040 -6 906 Inversión extranjera directa neta 8 932 3 145 10 884 1 474 10 361 9 991 5 124 2 725 5 171 Otros movimientos de capital -7 631 7 229 1 832 27 942 35 346 40 -38 996 -13 765 -12 077 Balanza global -11 824 1 195 -4 906 14 311 14 556 -17 052 -37 582 -7 727 -106 Variación en activos de reserva e/ 11 824 -1 195 4 906 -14 311 -14 556 -11 277 21 375 7 727 106 Otro financiamiento 0 0 0 0 0 28 329 16 208 0 0 Otros indicadores del sector externo Relación de precios del intercambio de bienes (índice 2010=100) 102,9 100,9 96,1 102,1 99,1 100,0 99,3 99,9 109,6 Transferencia neta de recursos (millones de dólares) -11 864 -1 240 611 17 224 29 327 19 710 -35 557 -21 237 -16 833 Deuda externa bruta total (millones de dólares) 155 489 158 742 167 412 181 432 234 549 277 932 278 489 271 443 266 740 Empleo f/ g/ Tasas anuales medias Tasa de participación 58,9 58,3 57,7 57,5 57,8 58,5 59,1 54,9 59,1 Tasa de desempleo abierto 7,1 7,3 6,5 8,5 8,4 9,2 9,8 11,5 8,8 Tasa de subempleo visible 9,2 9,6 9,0 11,5 11,4 12,3 14,1 14,1 13,3 Estudio Económico de América Latina y el Caribe ▪ 2022 9 Cuadro 1 (conclusión) Fuente: Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), sobre la base de cifras oficiales. a/ Cifras preliminares. b/ Sobre la base de cifras en moneda nacional a precios constantes de 2004. c/ Sobre la base de los valores calculados en moneda nacional expresados en dólares corrientes. d/ Incluye errores y omisiones. e/ El signo menos (-) indica aumento de los activos de reserva. f/ Áreas urbanas. g/ El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) de la Argentina no reconoce los datos correspondientes al período 2007-2015 y los está sometiendo a un proceso de revisión. Por lo tanto, dichos datos tienen carácter preliminar y serán reemplazados cuando se publiquen los nuevos datos oficiales. h/ Depósitos a plazo fijo, todos los plazos. i/ Préstamos al sector privado no financiero en moneda nacional a tasa fija y repactable, documentos a sola firma hasta 89 días de plazo. j/ Sector público nacional. 2013 2014 2015 2016 2017 2018 2019 2020 2021 a/ Precios Porcentajes anuales Variación de los precios al consumidor (diciembre a diciembre) 10,9 23,9 27,5 38,5 25,0 47,1 52,9 34,1 51,4 Variación de los precios al por mayor (diciembre a diciembre) 14,8 28,3 12,7 33,0 18,2 76,4 58,5 35,4 … Variación del tipo de cambio nominal (promedio anual) 10,2 20,4 48,2 14,0 59,4 12,2 69,8 71,5 … Tasa de interés pasiva nominal h/ 14,8 20,8 21,7 24,4 19,1 32,0 47,3 29,4 33,6 Tasa de interés activa nominal i/ 21,6 29,3 28,2 33,326,8 47,7 66,9 36,8 40,4 Gobierno central Porcentajes de PIB Ingresos totales 19,9 20,6 20,4 20,2 18,3 16,9 17,9 21,8 18,8 Ingresos tributarios 17,5 17,3 17,2 17,1 15,7 14,3 14,4 14,5 14,7 Gastos totales 22,4 24,8 24,0 25,9 24,1 22,4 21,8 25,5 23,1 Gastos corrientes 19,6 20,6 21,4 23,8 22,2 21,1 20,5 24,2 20,5 Intereses 1,2 1,9 1,8 3,6 3,0 3,7 4,3 2,3 1,7 Gastos de capital 2,8 4,2 2,7 2,1 1,9 1,3 1,3 1,3 2,6 Resultado primario -1,3 -2,3 -1,9 -2,1 -2,8 -1,8 0,3 -1,4 -2,6 Resultado global -2,5 -4,2 -3,7 -5,7 -5,8 -5,5 -4,0 -3,7 -4,2 Deuda del gobierno central j/ 43,5 44,7 52,6 53,3 56,5 85,2 89,8 103,8 80,6 Interna 31,7 32,1 38,7 35,5 33,4 43,9 46,5 56,7 48,5 Externa 11,8 12,6 13,9 17,8 23,1 41,3 43,3 47,1 32,1 Moneda y crédito Porcentajes del PIB, saldos a fin de año Crédito interno 26,0 25,0 25,2 23,0 23,4 25,2 21,4 30,7 50,5 Al sector público 21,6 24,7 29,0 26,9 25,6 25,0 29,0 40,2 63,0 Al sector privado 15,7 13,8 14,4 13,7 16,0 15,8 13,1 13,8 19,7 Otros -11,3 -13,6 -15,7 -15,7 -18,1 -15,6 -20,6 -23,3 -32,3 Base monetaria 10,8 9,7 10,5 9,6 9,2 9,1 8,0 8,9 7,3 Dinero (M1) 14,7 13,8 13,4 12,4 11,5 10,1 9,0 12,4 11,6 M2 27,4 25,6 26,3 24,0 23,1 23,0 19,7 28,6 26,7 Depósitos en moneda extranjera 1,6 1,6 2,6 4,7 5,2 8,3 5,9 5,6 4,1
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