Logo Studenta

12

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

ABAL MEDINA, J. M. (2014) Manual de Ciencia Política. Eudeba. Págs. 137-174.
La democracia clásica (de los griegos) se erigía en gobierno del pueblo o autogobierno. Las nuevas formas políticas se basaron en la idea de representación a la hora de diseñar sus instituciones políticas.
Ahora (democracias modernas) aparecen los partidos políticos y las elecciones periódicas.
Participación directa.
El camino hacia la representación política El mundo clásico
Aparece en Grecia, cuando los hombres toman conciencia de que son ellos los que debían responsabilizarse por los resultados de sus acciones de gobierno.
Pequeñas polis: formas de gobierno muy dispares.
Para los clásicos, el hombre era por naturaleza un animal político. La política no era un aspecto de la vida; era un todo y la esencia.
El animal político vivía en comunidad, donde el individuo no existía.
La polis justa era la reproducción de la armonía del cosmos, cada parte era lo que debía ser.
El “todos” de los clásicos excluía a los desiguales por naturaleza.
Sólo se era libre a través de la autonomía.
La ciudadanía se reunía en la asamblea (principal institución de la democracia griega). Existían otras instituciones en las cuales participaba un número reducido de ciudadanos (por sorteo): magistraturas.
El sorteo aseguraba la misma probabilidad a sus ciudadanos de participar. Esto permitía la rotación de los cargos, la desconfianza en la política como profesión y el igual derecho a participar en los asuntos públicos.
El núcleo central de las críticas a este tipo de gobierno es que se consideraba que cualquier hombre era apto para ocupar cualquier puesto, independientemente de sus capacidades. Sócrates y Platón fueron partidarios del gobierno de los mejores o Aristocracia. Los más sabios debían gobernar.
La edad media
Durante la Edad Media, la política casi desaparece.
Según San Agustín: “Es el mismo Señor quien ha resuelto los lugares que ocuparán naturalmente sus siervos en la tierra, pero ellos no podrán modificarlo con acciones positivas que le den su propia impronta, como sí era posible en el mundo clásico”.
Se sigue el plan “divino”.
El cristianismo siempre contuvo un mensaje fuerte igualitario.
Hobbes y la modernidad
Los hombres modernos crearon un ordenamiento siempre provisorio y cambiante que se llamó sociedad, que reemplazó a la comunidad.
Hobbes propuso la representación política individual. La representación política consiste en que alguien puede hacer a otro presente en un lugar (el gobierno) en el que éste no está, alguien lo vuelve a representar en su persona. Alguien (el representante) sustituye y encarna al representado.
Las personas deben aceptar autolimitarse con el fin de buscar la paz. Esto sólo tiene sentido en la medida que exista un soberano, que está por encima de los demás. El acto de constitución de la representación política dio lugar a una entidad, que es una y universal a la vez: el estado. El estado es visto como una entidad arbitraria, no natural, una institución formada a partir de la voluntad de los hombres libres y racionales.
Después de Hobbes, la representación moderna La idea de la representación política
La representación toma varios significados, algunos contradictorios:
1. representación como semejanza: relación de similitud entre el representante y el representado. “Una muestra es representativa del universo en observación”.
1. representación como delegación. Idea de un embajador o abogado que asume la representación de un individuo para defenderlo frente a una corte. Mandato imperativo.
1. representación como responsabilidad. Responsabilidad del representante de “responder” a su representado. Forma de independencia.
El mandato imperativo está relacionado con la forma de representación de intereses corporativa que caracterizó a varios órdenes políticos feudales a partir del siglo XIII en Europa.
La independencia se encuentra relacionada con la representación política moderna, cuyo origen está en la Revolución Francesa.
La democracia representativa
La representación política es el núcleo central de la democracia representativa. Se caracteriza por la elección de representantes encargados de tomar las decisiones que afectan al total de la ciudadanía.
La democracia representativa condujo a una lenta ampliación de la ciudadanía en la que el gobierno del demos sólo fue posible a través de sus representantes elegidos a través del voto.
La diferencia entre la representación democrática y la directa radica en el método. La primera elige a sus representantes por medio del voto; la segunda, por sorteo.
Los modelos de representación política: partidos y elecciones
La idea de representación se materializó en el mundo moderno a través de la existencia de partidos que representaban a los diferentes sectores constitutivos de la sociedad.
El partido político opone un interés particular al interés general.
Al principio eran referidos como facciones, en sentido peyorativo.
Sólo cuando la lógica del pluralismo comenzó a imponerse pudo apreciarse que los partidos representaban partes del todo y no necesariamente partes contra el todo.
A finales del siglo XIX, los partidos comienzan a formar parte inherente de las democracias. El surgimiento de los partidos estuvo muy relacionado con la aparición de gobiernos representativo-electorales.
Las elecciones eran una característica importante de la Aristocracia: se vota al mejor.
Hoy, gobierno representativo y elecciones van de la mano.
El modelo parlamentario (1830-1890)
Europa Noratlántica y América del Norte. Modelo estatal de competencias reducidas y un régimen político fuertemente asociado a las instituciones parlamentarias.
La representación era una relación muy directa, posible gracias al reducido cuerpo electoral, sumado al carácter del sistema electoral uninominal, originaba una relación individual entre el representante y sus electores aún fuertemente marcada por los signos del mundo aristocrático.
Los partidos surgieron espontáneamente, como forma de expresión de los divergentes intereses sociales existentes en cada sociedad.
El modelo de masas (1910-1970)
Regímenes políticos llamados democracias de partidos que se legitimaban bajo la idea de la representación política de intereses sociales.
Aquí se alcanza el sufragio universal.
Cuerpos electorales muy amplios y heterogéneos que aglutinaban una gran diversidad de intereses materiales e ideales.
Los partidos se presentaron a elecciones como representantes de grupos sociales pre-políticos (obreros, católicos, empresarios, etc.) a los que se pretendían expresar e integrar políticamente. Los partidos de masas tenían fuertes vínculos con la sociedad.
Demandaban un fuerte compromiso del individuo con los partidos.
Para mantener este gigantesco aparato partidario se necesitaban grandes recursos monetarios.
El modelo electoral (1980-?)
Organizaciones partidarias más limitadas y menos representativas.
Causas: transformación del estado, creciente diferenciación social, impacto político de los medios masivos de comunicación.
Intereses sociales cada vez más individualizados.
Nuevo modelo de partido: profesional electoral. Se caracteriza por una reducción de su expresión ideológica, una flexibilización de sus programas y una estandarización de su imagen.
La crisis de representación en Argentina Cacerolazos del 2001.
La sociedad pierde la confianza en sus representantes

Continuar navegando