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171 ANESTESIA GENERAL Anestesia general: Se puede definir a la anestesia general como un estado de depresión reversible del S.N.C caracterizado por pérdida de la conciencia y de la sensibilidad, acompañado, en la mayoría de los casos, de sedación motora y estabilidad neurovegetativa. Es ampliamente aceptado en la actualidad, que la anestesia general no es un fenómeno homogéneo, sino más bien constituye un complejo integrado de diversas funciones al que se le describen cuatro componentes principales que son: a) Bloqueo mental. Con pérdida de la conciencia y de los estados perniciosos como el miedo, la ansiedad y la excitación que corresponde a un estado de sedación e inconsciencia o hipnosis b) Bloqueo Sensitivo. Con ausencia de toda sensibilidad en especial hay pérdida de la sensibilidad al dolor, conocido también, como estado de analgesia. c) Bloqueo motor. Con pérdida del tonus muscular lo que da origen a un estado de relajación muscular. d) Bloqueo de los reflejos neurovegetativos desencadenados por la reacción al estrés, conocido como estado de hiporreflexia. En algunos casos, estos cuatro componentes de la anestesia general, es posible lograrlos con el uso de un solo fármaco, pero a dosis tan elevadas que generalmente provocan efectos secundarios nocivos sobre la respiración, la circulación y el metabolismo que la hacen muy riesgosa, sobre todo si la duración del efecto es muy prolongado. Es por ello que generalmente se recurre a la anestesia asociada, la que consiste en la administración de fármacos de efectos complementarios con el fin de lograr una anestesia adecuada y eficaz sin que se interfiera el funcionamiento normal de los diversos sistemas orgánicos. Lo que mirado desde el punto de vista 172 quirúrgico significa "aportar un máximo de anestesia deseada, al precio de un mínimo riesgo para el paciente". Por lo anterior un agente anestésico, será “aquel fármaco capaz de producir una depresión reversible del S.N.C., con pérdida de la conciencia y de la sensibilidad acompañada de relajación muscular y bloqueo neurovegetativo”. Propiedades de un buen anestésico 1. Ser de administración fácil e indolora 2. De efecto reversible 3. Inducir una rápida pérdida de la conciencia sin producir forcejeo. 4. Lograr la adecuada analgesia y relajación muscular con la dosis mínima requerida para producir inconsciencia. 5. No ocasionar alteraciones fisiológicas como descenso de la presión sanguínea, depresión respiratoria, cardíaca o aumento de la secreción salival o del aparato respiratorio. 6. Margen amplio de anestesia quirúrgica. 7. Ser atóxico y que en estado tóxico, primero produzca paro respiratorio y después paro cardíaco. 8. Poder neutralizarse con un antídoto no tóxico, de manera que la duración de la anestesia pueda controlarse a voluntad. 9. Dar un período de recuperación corto y sin excitación y que en este estado la acción sedativa sea más larga que la anestésica para evitar que el paciente trate de pararse una vez que ha terminado el efecto anestésico. 10. Ser compatible con premedicación y otros auxiliares terapéuticos. 11. Debe producir una buena relajación muscular que permita realizar las maniobras quirúrgicas. De acuerdo a estos requisitos, en la actualidad aún no se conoce el anestésico que reúna por sí mismo, las características mencionadas. Es por ello que generalmente se recurre a la asociación de medicamentos de acciones farmacológicas complementarias con el fin de obtener una anestesia balanceada. Preparacion del paciente para la anestesia. En casos de urgencia no hay una preparación previa del paciente para la anestesia. Sin embargo, la mayoría de las intervenciones se plantean con anticipación y los pacientes 173 pueden ser examinados y sometidos a una alimentación adecuada. Es importante considerar el ayuno ya que el estómago distendido puede interferir los movimientos del diafragma y provocar dificultades respiratorias y circulatorias durante la cirugía. Animales de vómito fácil deben estar en ayunas con el fin de evitar la regurgitación del alimento. Sin embargo, el ayuno excesivo desvitaliza los tejidos y se expone al paciente a riesgos innecesarios. De acuerdo a esto, los períodos de ayuno recomendados para las especies mayores fluctúan entre 24-72 horas y entre 12-24 horas en las especies menores. Medicacion preanestesica. La medicación preanestésica o premedicación anestésica consiste en el empleo de uno o varios fármacos, especialmente depresores selectivos del sistema nervioso central, previo a la administración de anestésicos con el objetivo de facilitar la inducción y el mantenimiento de la anestesia general. Fines de la premedicación a) Sedar al paciente, evitando el miedo,el forcejeo y la excitación b) Facilitar la inducción de la anestesia. c) Disminuir, la cantidad de anestésico general necesario para producir anestesia quirúrgica. d) Antagonizar algunos efectos nocivos del anestésico, como la producción de arritmias cardíacas, además de la hipersecreción salival y bronquial. e) Por depresión central, permitir el empleo anestésicos débiles como el óxido nitroso, para producir una anestesia conveniente. f) Conseguir efectos post anestésicos útiles, como sueño y analgesia. Por lo general, la medicación preanestésica consiste en el empleo combinado de depresores centrales, ya sea sedantes, hipnóticos, hipnoanalgésicos y tranquilizantes, junto con parasimpaticolíticos para disminuir las secreciones. La medicación preanestésica puede provocar desde la sedación hasta la anestesia de base, aunque rara vez es necesaria esta última en esta etapa. Mecanismos generales de la acción de anestésica. La pérdida de conciencia y la falta de reactividad a estímulos intensos, que caracterizan a la anestesia, suponen la modificación profunda del conjunto de procesos 174 neurológicos que mantienen el estado de vigilia, es decir, la compleja interacción entre las aferencias sensoriales, los sistemas internos de procesamiento y de integración y los sistemas de elaboración de respuestas coordinadas en su múltiple expresión: motora, neural y afectiva. Elemento esencial de todo este mecanismo es el aseguramiento de una fluida transmisión sináptica a lo largo de circuitos polisinápticos múltiples que, con frecuencia, funciona en forma de descargas repetitivas. Ello exige la permanente disponibilidad de los canales iónico que aseguran la correcta conductancia de iones y el engranaje entre las señales que modifican esos canales y los procesos metabólicos intracelulares resultantes. Parece que la perturbación en la transmisión sináptica es un elemento esencial en la acción del anestésico. Con frecuencia, la primera manifestación es un aumento en la polarización de la membrana neuronal o proceso de hiperpolarización, que hace reducir la capacidad de respuesta de la neurona y alterar la transmisión. Dada la multiplicidad de moléculas con poder anestésico y la variedad de sus características fisico-químicas, resulta difícil encontrar aquella propiedad que sea común a todos y explique en términos unitarios la acción anestésica. La hipótesis más aceptada en la actualidad es que los elementos diana fundamentales en la acción de los anestésicos sobre la transmisión sináptica son los canales iónicos. Sin embargo, no está claro cuales son los importantes. En general, los canales dependientes de voltaje no suelen verse afectados con concentraciones quirúrgicas de los anestésicos, con la excepción de los canales de calcio presinápticos relacionados con la liberación de neurotransmisores, los cuales pueden ser diana de algunos agentes. La mayoría de los datos experimentales sugieren un papel fundamental de los canales receptor- dependientes: el canal de calcio ligado al receptor NMDA del glutamato, el canal de cloro ligado al receptor GABAA y el canal de sodio vinculado al receptorcolinérgico nicotínico. Además, se ha demostrado que los anestésicos inhalados causan hiperpolarización de la membrana (una acción inhibitoria) vía activación de canales de potasio. Tales canales están ubicados en el SNC y están ligados a varios neurotransmisores, incluyendo acetilcolina, dopamina, noradrenalina y serotonina. 175 Algunos agentes, como la ketamina, actúan preferentemente sobre receptores excitadores (NMDA) bloqueándolos. En cambio, los barbitúricos, propofol, anestésicos esteroídeos (alfaxalona), alcoholes alifáticos y anestésicos inhalatorios (halotano, enflurano e isoflurano) actúan potenciando en forma alostérica la acción inhibidora del GABA. LA base neurofarmacológica de los efectos que caracterizan las etapas de la anestesia parece ser la sensibilidad diferencial del anestésico de las neuronas específicas o de las vías neuronales. Las células de la sustancia gelatinosa en las astas dorsales de la médula espinal son muy sensibles a concentraciones relativamente bajas de anestésico en el SNC. Una disminución de la actividad de las neuronas en esta región interrumpe la transmisión sensorial en el conducto espinotalámico, lo que incluye la transmisión de estímulos nociceptivos. Este efecto contribuye a la etapa I de la anestesia. Los efectos desinhibidores de los anestésicos generales (etapa II) que se presentan a concentraciones encefálicas más altas, resultan de las complejas acciones neuronales que incluyen el bloqueo de muchas pequeñas neuronas inhibidoras, junto con la facilitación paradójica de los neurotransmisores excitadores. Durante la etapa III se presenta una depresión progresiva de las vías ascendentes en el sistema de activación reticular, o anestesia quirúrgica, junto con la supresión de la actividad refleja espinal que contribuye a la relajación muscular. Las neuronas, en los centros respiratorios y vasomotor de la médula son relativamente insensibles a los efectos de los anestésicos generales, pero a altas concentraciones su actividad se deprime, lo que origina colapso cardiorespiratorio (etapa IV). Periodos de la anestesia. La respuesta clínica del paciente ha sido dividida arbitrariamente en varios niveles según el grado de profundidad de la anestesia. Para ello se utilizan los reflejos neuromusculares como criterio de clasificación. Las manifestaciones clínicas de los efectos que producen los anestésicos sobre el S.N.C se ejemplifican con la descripción de los períodos de la anestesia descritas por Guedel, cuyos estudios fueron realizados en pacientes humanos anestesiados con éter. Aunque puede observarse una respuesta análoga consecutiva a la inyección de un anestésico no volátil, generalmente la primera parte de la dosis se administra rápidamente con el objetivo de reducir al mínimo las fases iniciales de excitación. 176 Experimentalmente se ha determinado que la parálisis descendente del S.N.C que producen los anestésicos sigue cierto curso filético, en el sentido de que las funciones cerebrales más complejas y más recientemente adquiridas a través de la evolución son las más fácilmente alteradas. Desde el punto de vista evolutivo, los centros que controlan la respiración y los reflejos vegetativos fundamentales son más primitivos que los sistemas que regulan el control de la memoria, la asociación de ideas, los movimientos finos y los reflejos condicionados. Por lo tanto, durante el transcurso de la anestesia primero se deprime la corteza cerebral y progresivamente los centros subcorticales, tronco cerebral y finalmente el bulbo. Período I : de excitación voluntaria o de inducción La excitación y el forcejeo del paciente son las características más sobresalientes de este período. Hay aumento en la presión arterial, frecuencia cardíaca y respiratoria. Se conservan los movimientos voluntarios y comienza a producirse aumento del tonus muscular, dilatación de la pupila a consecuencia de excitación, puede observarse salivación excesiva, además de incontinencia urinaria y fecal. Esta etapa se caracteriza también por un estado de analgesia y de conciencia imperfecta. Período II : de excitación y delirio involuntario En esta etapa los centros corticales están deprimidos y el paciente pierde la conciencia. Hay delirio, excitación y movimientos involuntarios. Las emociones subconscientes y la conexión con el instinto de conservación, dictan las acciones del paciente. Se produce la caída del animal. Hay taquipnea y aumento de la taquicardia mostrada en la fase anterior y la pupila esta ampliamente dilatada. En esta fase es común que se presenten relinchos en el caballo y gemidos o pequeños ladridos en el perro. La movilidad del globo ocular se hace involuntaria nistagmo que es característico en el caballo. Período III : de anestesia quirúrgica Durante esta etapa, la acción depresora del anestésico se extiende desde la corteza y el cerebro medio hacia la médula espinal. Quedan abolidos, la conciencia, la sensación de dolor y los reflejos medulares. Se produce relajación muscular y desaparecen los movimientos coordinados. Casi todas las intervenciones quirúrgicas en los animales se realizan durante este 177 período; el cual según la profundidad de la anestesia se ha dividido en 4 planos: Plano 1. Disminución del tonus muscular, aunque algunas veces aparecen movimientos involuntarios. Respiración lenta e irregular, pulso y presión sistólica normales. Reflejos deprimidos o abolidos. Globo ocular fijo o nistagmo leve, miosis. Plano 2. Se profundiza la relajación muscular, el globo ocular se fija y la pupila permanece contraída. Mucosas normales. Plano 3. Hay gran depresión de tonus muscular. Protusión del tercer párpado. Pulso rápido y presión sistólica aumentada. Las mucosas están pálidas y la respiración deprimida, comienza a dominar la acción de la prensa abdominal. Hay perdida completa de reflejos Plano 4. Se caracteriza por depresión profunda de centros medulares, disminución apreciable de la presión capilar (mucosas pálidas). Respiración abdominal. Pulso rápido y presión sistólica aumentada. Los reflejos están ausentes y la pupila comienza a dilatarse. Un método más simple y probablemente más efectivo de controlar la profundidad de la anestesia, es subdividir este período solamente en 2 planos: a) Plano de anestesia quirúrgica ligera (planos Nº 1 y 2) b) Planos de anestesia quirúrgica profunda (planos Nº 3 y 4) Período IV : de Parálisis Bulbar En esta fase el S.N.C esta peligrosamente deprimido y cesa la respiración. La corteza, subcorteza, el cerebro medio, la protuberancia y la zona alta del bulbo están deprimidos. El corazón late por poco tiempo, la presión sanguínea aumenta, hay dilatación pupilar (midriasis). Los esfínteres anal y vesical se relajan. La muerte ocurre rápidamente a menos que se tomen medidas de ventilación y oxigenación. En este período ocurre primero el paro respiratorio, y el animal está con las pupilas muy dilatadas. A continuación se produce el paro cardíaco porque está impregnado todo el S.N.C hasta el bulbo 178 Clasificación de los anestésicos generales. Tabla 15-1. Clasificación de los anestésicos según vía de administración y características físico-químicas Simples Eter Etílico Eter Dietílico Eteres Fluorados Metoxifluorano Isofluorano Simples Cloroformo Tricloroetileno Líquidos Volátiles Hidrocar- buro Halogena- dos Fluorados Halotano Inorgánicos Oxido Nitroso Anestésicos generales por inhalación Gases Anestésicos Orgánicos Alicíclicos Ciclopropano Barbitúricos Fenobarbital Pentobarbital Secobarbital Tiopental Tiamilal Derivados del acido Fenoxiacético Propanidida Derivados de la Fenilciclohexanona Ketamina Derivados del ácido Tricloroacético Hidrato de Cloral Anestésicos generales por vía intravenosa Derivado alquilfenol Propofol 186otros fármacos de acción a nivel de placa motora como son por Ej: los antibióticos aminoglicósidos. Cerca de un 90% del éter absorbido o inhalado, puede ser recuperado como tal desde el aire expirado y sólo se metaboliza una pequeña proporción a etanol y acetaldehido. Estos metabolitos no son hepatotóxicos. Se utiliza principalmente en perros y gatos, administrándose generalmente con mascarillas o conos de algodón siendo la concentración adecuada para producir anestesia de 10% y para mantención de 4% a 6% por volumen. HALOTANO. Es un líquido de olor agradable que no es inflamable ni explosivo. Es 2 o 3 veces más potente que el cloroformo con una recuperación más suave y de corta duración. Se caracteriza por deprimir la musculatura esquelética y el tono uterino en proporción directa a la concentración administrada. En el aparato respiratorio ejerce una acción broncodilatadora mediada probablemente por estimulación de receptores beta adrenérgicos. Deprime el centro respiratorio en la medida que aumenta la profundidad de la anestesia. A nivel cardiovascular, condiciona depresión del miocardio, con una disminución del débito cardíaco, bradicardia y una elevación de la presión venosa central. Hay caída de la presión arterial, la que se ha atribuido a: 1) Disminución de rendimiento cardíaco. 2) Bloqueo simpático del área esplácnica. 3) Depresión del centro vasomotor. 4) Vasodilatación periférica. Debido a que sensibiliza el miocardio a la acción de las catecolaminas, estos fármacos están contraindicados en la anestesia por halotano debido al riesgo de producir arritmias cardíacas. También está contraindicada la utilización conjunta de fármacos hipotensores, como derivados fenotiazinicos (cloropromacina), compuestos del metonio (hexametonio) o la d-tubocurarina. La motilidad y el tono uterino son inhibidos por el halotano, además de la respuesta a los oxitocicos. Es capaz de atravesar la placenta, por lo que se requiere un nivel de anestesia ligero para no producir depresión del feto. Sin embargo, en condiciones normales de uso la actividad respiratoria del recién nacido no es deprimida. 187 Puede desencadenar el síndrome de hipertermia maligna. Esta es una condición de origen genético que involucra un marcado incremento del tono muscular, pirexia y activación simpático adrenal que puede conducir a la muerte. El halotano puede producir una buena y segura anestesia en todas las especies domésticas. Debe ser administrado mediante el uso de un vaporizador con compensación térmica automática y en concentraciones no superiores a un 2% a 4% teniendo un período de latencia de 2 a 3 minutos. Posteriormente se puede mantener con 0.5% a 2%. ISOFLUORANO. F H F ׀ ׀ ׀ F – C – C – O – C – H ׀ ׀ ׀ F Cl F Es un líquido incoloro con olor semejante al éter, no irritante, potente y de efecto rápido. Es el más estable de los anestésicos volátiles y no es inflamable. No reacciona con la sal sodada ni con los metales. Es el anestésico volátil menos soluble en sangre (coeficiente de solubilidad: 1,4), en tanto que su solublidad en lípidos es de 98:99. Para su administración hay que volatilizarlo con un vaporizador de precisión. Su alta volatibilidad y su baja solubilidad sanguínea hacen del isofluorano el anestésico de más rápida y suave inducción y recuperación. Produce depresión generalizada del SNC. Cuando la anestesia es profunda hay buena relajación muscular, pero si se exceden los niveles de inducción produce tetania y temblores musculares. En los caballos deprime en forma paulatina la actividad cardiovascular de modo que a medida que se incrementa la concentración alveolar disminuyen la presión arterial y el gasto cardíaco. Debido a que tiene un menor efecto depresor directo sobre la contractilidad del miocardio y provoca menor sensibilidad a las catecolaminas endógenas que halotano, se indica su uso en el manejo anestésico de pacientes cardiópatas. Es un depresor respiratorio muy potente igual o más que el halotano. No es hepatotóxico ni nefrotóxico. En el riñón reduce la perfusión renal, la filtración glomerular y el volumen de orina similar al halotano.
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