Anatomía humana (3)

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circular -uperior y ol posterointerno viene a ser el orificio no ampular, común a los dos 
conducios semicirculares, superior y posterior. (Fig. 433.)
Pared inferior. La pared inferior del vestíbulo es un estrecho surco que comunica 
lumia dolante con el orificio vestibular del caracol y hacia atrás con la ventana redonda. 
De su porción interna, se dirige horizontalmente hacia fuera una delgada lámina ósea que 
por dí-lanto va a continuarse con la Lámina espiral del caracol: en la parte externa se en­
cuentra otra ¡amina saliente, horizontal, más estrecha que la opuesta, y denominada lá­
mina espiral secundaria. Entre el borde libre de la lámina espiral y el de la lámina espi­
ral secundaria se encuentra una estrecha hendidura anteroposterior o h e n d i d u r a vesti- 
/>uloh'mpáni> a, la cual pono en comunicación la cavidad del vestíbulo, situada por arri­
ba en el estrecho surco colocado más abajo de las láminas espirales, y (pie no es sino el 
lugar donde se inicia la ranipa t im pán ica del caracol.
Pared an terior. En su parte más elevada, la pared anterior del vestíbulo está en 
relación con el primer segmento del acueducto de Falopio. Hacia abajo, se encuentra en 
ella el orit'ieio circular por el cual se comunica el vestíbulo con el caracol óseo. Este ori­
ficio se halla parcialmente subdividido en dos partes por la porción inicial de la lámina 
espiral, la cual, como se ha visto, se desprende de la parte más inferior de la pared inter­
na del vestíbulo, y de allí se dirige hacia adelante para ir a recorrer las distintas vueltas 
del tubo óseo coclear.
Pared posterior. Presenta en su parte inferior el orificio correspondiente a la ex­
tremidad ampular del conducto semicircular posterior, en cuya parte interna se encuen­
tra una esric de agujeritos, que eonstituven la llamada mancha cribosa posterior. (Figu­
ra 434.)
C O N D U C T O S S E M I C I R C U L A R E S
Los conductos semicirculares son tres, y se distinguen en: conducto semic i rcu lar e x ­
te rno , conduc to semici rcular supe r ior y conducto semic ircular posterior . Son cavidades 
en forma de tubo y dobladas sobre sí mismas, a la manera de una herradura; nacen y 
terminan en las paredes del vestíbulo después de recorrer un pequeño trayecto en el 
espesor del peñasco. De sus dos extremidades, una conserva el mismo calibre que el resto 
del conducto, y la otra se ensancha para formar una pequeña dilatación, que se conoce con 
el nombre de am po l la de los conductos semicirculares; el orificio de esta extremidad di­
latada os el ori f icio a m p u l a r y el otro es el orificio no ampular de los conductos semi­
circulares. (Fig. 435.)
Los dos conductos, superior y posterior, antes de desembocar en la parte posteroin- 
terna de la pared superior del vestíbulo, unen sus dos extremidades no ampulares, de tal 
manera que tienen un pequeño trayecto común y desembocan por el mismo orificio en el 
techo del vestíbulo; sus extremidades ampula­
res, en cambio, son independientes, así como el 
orificio ampular y el no ampular del conducto 
semicircular externo.
Los conductos semicirculares no son perfec­
tamente cilindricos, sino que están ligeramente 
aplanados en sentido perpendicular a su direc­
ción. Miden por término medio de 1.5 a 2 milí­
metros de diámetro, siendo el más grueso el con­
ducto externo y, el más delgado, el superior. Sus 
dimensiones longitudinales son: para el conducto 
externo, 12 milímetros: el conducto superior mi­
de 15 milímetros, y el más alargado es el conduc­
to semicircular posterior que mide 1S milímetros.
Como medio ncmotécnico se pueden utilizar las 
letras ESP (externo, superior y posterior) co­
rrespondientes a las cifras 12, 15 y 1S.
Ib'ü TEATADO BE ANATOMIA HUMANA
C o n v e x i d a d
E x t r e m i d a d
a m p u la r
Fio. 4^5. U n conducto semicircular. (Es-